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Avispa de mar
Los cubozoos, o más comúnmente llamados "avispas de
mar" o "avispas marinas", son un tipo de medusas
cnidarias cuya picadura es mortal si su veneno entra en
contacto directo con nuestra piel. Se llaman así porque
tienen forma cúbica (del griego kybos: cubo y zoon:
animal). No llegan a 40 especies y se clasifican en 2
familias: las chirodropidae y las carybdeidae. Viven en las
aguas de Australia, Filipinas y otras áreas tropicales del
Sudeste asiático, y se alimentan de peces y crustáceos
diminutos. Cada año, la avispa de mar mata a más
personas que la suma de todas las muertes que provocan
todos los animales marinos juntos.
Aunque no son animales agresivos, tienen el veneno más
letal del planeta, ya que con sólo 1,4 mg del veneno de
sus tentáculos, pueden provocar la muerte de un ser
humano. El mínimo roce con nuestra piel hace que su
veneno actúe rápidamente en nuestro sistema nervioso, y
después de una reacción inicial con ulceración y necrosis
de la piel, acompañados de un terrible dolor semejante al
que se produce por un ácido corrosivo, se produce un
paro cardíaco en la persona afectada, y todo esto pasa
solo en 3 minutos. Por eso se recomienda a lo buceadores
que vayan a nadar por cualquiera de las aguas donde
están estos animales, llevar un traje de neopreno completo
por todo el cuerpo para evitar el contacto directo con estas
medusas, que no solo son mortales, sino que también son
muy rápidas, ya que llegan a recorrer 2 metros en un
segundo gracias a sus largos tentáculos.
Serpiente de mar
Las serpientes de mar o "cobras marinas" (hydrophiinae),
son las serpientes que poseen el veneno más potente del
mundo animal, incluso más que las serpientes taipán, sus
homónimas terrestres. Aunque son una evolución de sus
antepasados terrestres, estos reptiles están adaptados
totalmente al medio acuático, pero aún conservan algunas
características físicas. Todas tienen comprimidos los
órganos de forma lateral, por eso tienen una apariencia
similar a la de las anguilas, y además, también tienen la
cola en forma de remo, cosa que les ayuda a ir en la
dirección deseada a la hora de nadar. Viven en las aguas
de los océanos Índico y Pacífico, y se alimentan
básicamente de peces, moluscos y crustáceos.
A pesar de no ser animales agresivos, ya que sólo atacan
cuando se las provoca o se sienten amenazadas, estas
serpientes poseen un veneno de 2 a 10 veces más
potente que el de una cobra terrestre. Su picadura
produce dolor muscular, espasmos en la mandíbula,
somnolencia, visión borrosa o incluso parálisis respiratoria.
La buena noticia es que como sus dientes son tan
pequeños, con un traje de neopreno un poco grueso, sus
neurotoxinas no serían capaces de atravesarlo y llegar a
nuestra piel.
Pez piedra
El pez piedra (synanceia horrida), junto con los peces
globo, son uno de los peces más venenosos del mundo
marino. Pertenece a la especie de peces actinopterigios
escorpeniformes, ya que posee unas prolongaciones
espinosas parecidas a la de los escorpiones. Estos
animales se mimetizan perfectamente con el entorno,
sobre todo con las zonas rocosas del medio acuático (de
ahí su nombre), por eso es muy fácil pisarlos si se está
haciendo submarinismo. Viven en las aguas de los océanos
Índico y Pacífico, y se alimentan de pequeños peces y
crustáceos.
El veneno de estos animales está localizado en las púas de
las aletas dorsales, anales y pélvicas, y contiene
neurotoxinas y citotoxinas, más letales que el veneno de
una cobra. Su pinchazo produce hinchazón, dolores de
cabeza, espasmos intestinales, vómitos e hipertensión
arterial, y si no se trata a tiempo, parálisis muscular,
convulsiones, arritmias cardíacas o incluso paradas
cardiorespiratorias, causadas por el fuerte dolor que
produce su veneno en nuestro cuerpo. Si nos pinchamos
con unas de sus púas, nos espera una curación lenta y
dolorosa de las heridas...
Tiburón blanco
El tiburón blanco (carcharodon carcharias) es uno de los
peces de mar más grandes del mundo y el pez depredador
más grande del planeta. Pertenece a la especie de los
peces cartilaginosos lamniformes, puede llegar a pesar
más de 2000 kilos y medir entre 4,5 y 6 metros de longitud.
Estos tiburones tienen unos 300 dientes grandes y afilados,
y una poderosa mandíbula capaz de desgarrar las
extremidades humanas. Viven en las aguas templadas y
cálidas de casi todos los océanos y, básicamente, se
alimentan de mamíferos marinos.
A pesar de la mala fama que tienen, no son animales que
suelan atacar a los humanos. De hecho, mueren más
personas por picaduras de insectos que por tiburones, y
además, el 75% de estos ataques no son mortales pero
sí que causan graves consecuencias en los heridos. Sí que
es verdad que puede ser que la víctima muera por
desangrado, pero es muy poco probable actualmente. Los
tiburones no atacan a las personas por hambre, sino por
considerarlas como una amenaza, porque se sienten
confusos o por accidente.
1. Mosca Tse-Tse
Esa mosca vive en África y es la causante de la enfermedad del sueño en África, una
infección parasitaria que afecta tanto a hombres como animales. La OMS estima en unos
300 000 el número de nuevos casos presentados en el hombre cada año. Afecta al
sistema nervioso de la víctima, con síntomas como fiebre o hemorragias y que pueden
derivar en un coma.
2. Bot fly
Este insecto destaca por picar a mamíferos y dejar larvas junto a su picadura. Estas
larvas viven en el interior del cuerpo de las víctimas, causando hemorragias y una
enfermedad que afecta los tejidos y órganos.
3. Avispón gigante japonés
Su veneno es muy fuerte y puede provocar la disolución del tejido humano. Es muy
agresiva y no tolera la cautividad. Tiene una longitud de 5 centímetros y una
envergadura alar de 7,5 cm, pudiendo causar la muerte de las víctimas a las que ataca.
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4. Gusano de la muerte
Normalmente un mosquito tan solo te deja la piel inflamada e hinchada con un ligero dolor,
sin embargo, algunas pueden transmitir enfermedades mortales, como la malaria o el
dengue. Se estima que cada año, más de 2 millones de personas mueren en el mundo por
una picadura de estos insectos.
7. Hormigas Siafu
Son las especies de hormigas más grandes en el mundo. Tienen una gran capacidad
para trabajar en grupo y poseen unas afiladas mandíbulas con las que llegan a asfixiar a
la víctima. Su mordisco es tan fuerte que a veces son usadas para suturar heridas.
8. Pulgas de rata negra
¿Cómo un insecto tan pequeño puede ser mortal? Estas pulgas transmiten una bacteria
llamada Yersinia Pestis, más conocida como “peste“. Más de diez millones de personas
murieron en la primera mitad del siglo XX y actualmente hay más de 1000 casos en el
mundo al año.
9. Chinche Besucona
Este insecto vive en zonas cálidas de Sudamérica, como Perú, Bolivia, Argentina o
Brasil. Cuando pica a una víctima, su intestino se hincha y la obliga a defecar, dejando
numerosos parásitos en la piel. Actualmente mueren unas 50.000 personas al año en
todo el mundo por la picadura de este insecto.
10. Escarabajo afrodisiaco
El polvo de este escarabajo, llamado también mosca española, se utiliza como viagra
natural. El problema es que en algunos casos también puede llegar a ser mortal.
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