Los secretos del éxito según la Kabalah

Paso #1 – Ver el todo, la gran imagen

Ver qué deberíamos cambiar en nuestra vida para obtener resultados. Si estamos en posición
de liderazgo es más fácil. También se puede adquirir haciéndole saber al Universo que estoy
dispuesta a crear un nuevo ser humano: generar un cambio en uno mismo (ej. Me cansé de mi
situación laboral y voy a crear una empresa, pero para crear esa empresa requiere de un líder,
y mi trabajo es convertirme en un líder). Ocurre lo mismo si quiero dejar la situación de
soledad (hoy soy un experto en estar solo, pero si quiero ser una buena esposa, pareja o
compañera, tengo que estar dispuesta a querer serlo). Tengo que pedirle ayuda al Universo
para poder ver la imagen completa, porque desde donde estoy viendo hoy es desde un lugar
de carencia. Si quiero cambiar, porque ya no soporto el dolor que estoy atravesando (carencias
económicas, soledad, etc.), desde el lugar donde estoy viendo es desde el egoísmo.

Si yo decido que además de cambiar mi situación laboral, voy a crear una nueva empresa, un
nuevo lugar para que otras personas también puedan tener un mejor lugar donde trabajar así
no les pasa lo que a mí me está pasando ahora. O que voy a crear una nueva situación de
familia para poder brindar amor y se expanda eso que quiero alcanzar en mi vida, y va más allá
de simplemente satisfacer la carencia de no estar más solo, existe la gran probabilidad de que
te muestren la imagen completa.

Una vez que tengo la imagen completa – no lo que voy a recibir yo sino lo que puedo crear –
hace falta una idea: tengo que saber qué voy a hacer.

Los primeros tres pasos son casi automáticos una vez que me concedieron la imagen del todo.
La idea es automática; simplemente es una emanación. Inmediatamente después, a la mayoría
de las personas les sucede que empiezan a soñar despiertos sobre qué tendrían que hacer para
llevar a cabo esa idea. Eso es un proceso de creación.

Paso #1: Deseo de conectar con la gran imagen, poder ver el todo. Pedir acceso a la
“computadora astral”, para tener acceso al conocimiento.

Paso #2: Idea (es la forma en que uno verifica que tuvo acceso al todo).

Paso #3: Entrar en un proceso creativo.

Paso #4: Buscar e identificar si realmente tenemos algo para dar. ¿Hay una clientela que quiera
lo que yo tengo? Tenemos que pensar en los demás. Si uno no piensa en lo que tiene para dar,
seguramente ese es el final del proyecto.

Paso #5: Identificar qué voy a recibir yo. Si no tengo algo para recibir, la idea va a fracasar
porque voy a perder la motivación.

Paso #6: Encontrar un punto medio: embellecer la idea. Cuando uno realmente quiere dar, y
piensa en los demás, y al mismo tiempo quiere recibir lo más posible, debe preocuparse que
aquel producto, aquello que va a hacer, sea atractivo. Lo que es bello para el ser humano,
tiene que ver con la simetría. Para que un emprendimiento o un producto tengan verdadero
éxito, también tiene que tener una simetría entre el deseo de dar y el deseo de recibir. Y
puede ser mucho deseo de recibir, y mucho deseo de dar. Cabalísticamente, tendría que ser
todo lo que se pueda en el deseo de recibir, y todo lo que se pueda en el deseo de dar.

Los primeros cuatro niveles son mentales; los siguientes son niveles emocionales. Cuando
salimos del plano de la idea y empezamos a entrar en el plano físico, nos empezamos a dar
cuenta que hay que trabajar, que hay que hacer algo al respecto, que no es así de simple; es el
paso #7. Inmediatamente sentimos un bajón de energía. Una de las formas de verificar que la
idea y que el proceso es correcto es atravesar el bajón de energía. De hecho, si no hay un
bajón, no está ocurriendo, es momento de empezar a dudar si estamos en un proceso creativo
saludable. Si no sentiste el bajón, todavía estás allá en las nubes, no empezaste a pensar cómo
manifestar eso en el mundo físico.

Después del bajón viene la siguiente etapa, el paso #7, que es la persistencia. Si no
atravesamos esa etapa, la de persistir, de estar dispuestos a ponerle el cuerpo, que no tiene
por qué ser un arduo trabajo de meses y años. Este tema es muy importante, porque son
todos distintos niveles de conciencia. La persistencia tiene mucho más que ver con un estado
mental de no bajar los brazos, que con un esfuerzo físico o que va a llevar mucho trabajo.

Después de la persistencia, viene otro nivel, el paso #8, que es la humildad, cuando estás
dispuesto a hacer lo que sea para que eso se manifieste físicamente en este mundo. Tienes
que tener la humildad de retirarte, de ir hacia atrás y decir: ¿hay audiencia para lo que yo
quiero? ¿Existe realmente el hombre que digo que estoy buscando? Con lo que yo soy o lo que
tengo para dar, ¿eso que busco va a venir a comprar? Ese momento es crucial, porque en ese
momento se acaba la idea. Uno tiene que poder retirarse, irse de eso que está creando,
mirarlo desde afuera y decir con humildad: “¿realmente hay alguien que quiere esto que yo
tengo, o es mi ego que, como tuve la idea y soy tan genial, creo que a costa de cualquier cosa
se tiene que manifestar?
El siguiente plano es la conexión, el paso #9: tenemos que lograr conectar esa idea y ese
ímpetu que tenemos de crear algo nuevo, lo tenemos que conectar al mundo real. En una
empresa será la publicidad, las relaciones públicas o algún medio para hacer que ese producto
llegue al público. En una relación de pareja será salir a buscar a alguien.

El #10 nivel es la acción: las acciones que tomas tienen que ser coherentes con todo el proceso
de formación emocional que acabas de atravesar, y coherentes con la idea original. En el
momento en el que en algún lugar me desconecto de la idea original, el “árbol” muere.

Uno de los errores más grandes que el ser humano comete a la hora de generar continuidad
en su éxito, es comerse los frutos. El fruto es una consecuencia; no deberíamos prestarle
ninguna atención a los frutos excepto saber que el fruto es un montón de nuevas semillas.

Nuestro trabajo en este mundo no es concentrarnos en los frutos. Los frutos está bien
tenerlos, porque es parte de lo que yo decidí que quería recibir a cambio de eso que tengo
para dar. Nuestro trabajo es sacar ideas, “robarle” al mundo desde lo metafísico nuevas cosas,
nuevas semillas, y manifestarlas en este mundo. Y si nos vamos a concentrar en el fruto, no
tiene que ser solo para comerlo, sino para entender que cada fruto es, o debería ser un
montón de nuevas semillas. Esta es la clave del verdadero éxito.

Ésta es la forma en que lo metafísico, el todo, ese mundo infinito, termina manifestándose en
este mundo, y consiste de 10 sefirot, 10 paquetes de energía: 3 niveles de intelectualidades o
conciencia, 6 paquetes de emoción (nuestras emociones también tienen que ser coherentes;
lo que sentimos en el cuerpo tiene que ser coherente con aquello que queremos para nuestra
vida).

La coherencia en el uso de este sistema hace al éxito, y deshace la necesidad de la suerte.

Paso #1: Deseo de conectar con la gran imagen, poder ver el todo. Pedir acceso a la
“computadora astral”, para tener acceso al conocimiento. Pedirle ayuda al Universo para
poder ver la imagen completa.

Paso #2: Idea (es la forma en que uno verifica que tuvo acceso al todo).

Paso #3: Entrar en un proceso creativo.

Paso #4: Buscar e identificar si realmente tenemos algo para dar. ¿Hay una clientela que quiera
lo que yo tengo? Tenemos que pensar en los demás. Si uno no piensa en lo que tiene para dar,
seguramente ese es el final del proyecto.

Paso #5: Identificar qué voy a recibir yo. Si no tengo algo para recibir, la idea va a fracasar
porque voy a perder la motivación.

Paso #6: Encontrar un punto medio: embellecer la idea. Cuando uno realmente quiere dar, y
piensa en los demás, y al mismo tiempo quiere recibir lo más posible, debe preocuparse que
aquel producto, aquello que va a hacer, sea atractivo.

Paso #7: persistencia. Si no atravesamos esa etapa, la de persistir, de estar dispuestos a

ponerle el cuerpo, que no tiene por qué ser un arduo trabajo de meses y años. Este tema es
muy importante, porque son todos distintos niveles de conciencia. La persistencia tiene mucho
más que ver con un estado mental de no bajar los brazos, que con un esfuerzo físico o que va a
llevar mucho trabajo.

Paso #8: humildad, cuando estás dispuesto a hacer lo que sea para que eso se manifieste
físicamente en este mundo.

Paso #9: tenemos que lograr conectar esa idea y ese ímpetu que tenemos de crear algo nuevo,
conectarlo al mundo real. En una empresa será la publicidad, las relaciones públicas o algún
medio para hacer que ese producto llegue al público. En una relación de pareja será salir a
buscar a alguien.

Paso #10: la acción. Las acciones que tomas tienen que ser coherentes con todo el proceso de
formación emocional que acabas de atravesar, y coherentes con la idea original.