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Edelberto Torres-Ricas

REVOLUCIONES
SIN CAMBIOS
REVOLUCIONARIOS
ENSAYOS SOBRE LA CRISIS
EN CENTROAMÉRICA
Segunda edición
revisada y corregida .
¡'¡'" "5' Q

-ff,JI!Vo$$taOrU1S sin cambios reoolucionarios


sobre cris'is f811! Centroamérica
Ede1belt'to 'Torres-Rivas

óleo

en Guatemala
Printed lb,
'~G uaternala
_,._ __ ._:>;1-.

Llegdrá un tiem_!.¡oen que el sol ha de brillar sólo sobre


un mttndo de hombres libres que no reconoZcan mas amo
que su razón, cuando los tiranos y los esclavos, los sacerdotes
JI sus instmmentos estúpidoJ e hipócritas ya no existan
mas ase en la historia o en el teatro.
Condorcet

ISB:N:

p ~
Derechos reservados el editor, SU TP""?""'~"

o total por ~c~a..,yU1CT medio, autoriz aClon


. v!, . / por escrito
__

de 2.01..3
CAPÍTULO II
LA SEGUNDA POSGUERRA::
NI DEMOCRATIZACIÓN,
NI MODERNIZACIÓN

INTRODUCCIÓN

La historia del conflicto armado en Centroarnérica


está llena de paradojas, contradicciones sustantivas,
fenómenos salidos del azar, expresiones soberbias de
valor personal, crueldades sin sentido. Fue también
una historia de pasiones y odios animados por una
generosa voluntad de justicia social; para muchos el
bien y el mal juntos, como' en el designio divino. La
traducción del mal en cifras es inevitablemente im-
preciso: 300 mil civiles muertos o desaparecidos a
manos del ejército, un número menor de viudas y
huérfanos, un cálculo aproximado de 20 mil lisiados
o minusválidos, dos millones de desplazados internos
y una cifra superior de refugiados externos (emigrantes
al norte). Los daños materiales causados por la guerra·
han sido peores en relación con los originados por
los desastres naturales, especialmente los terremotos
de 1972 en Managua y 1976, mas sequías y huracanes
anuales.'

1. Tan sólo el Huracán Mitch, que afectó a toda la región,


especialmente a Honduras, Nicaragua y Guatemala, causó
daños valorados en 4,939.50 millones de dólares en los tres

73
Revoj¡.¡dones sin can'Jbioj" revoluciontu"ÍOs La segunda p.osguerra: Ni dem.ocratización ... 75

nes ideológicas 'que al ganar la guerra desataron los


.ochenta del sigl.o xx, que aquí estudiam.os, pareció
más profundos cambios nunca habidos en una dimen-
c.oncretarse en
sión planetaria corno se decía entonces, o gl.obal corno
cal1fica:riam.os ahora. Primero, fue la'implantación
del sistema de "democracias populares", gobieJcn.os
encabezados por partidos comunistas, una poderosa
antifascista que proclamó en aquel momento
su intención democrática. Así, surgió la periferia de
paises satélites de la UltSS como Bulga ria, Albania,
tras
Yugoslavia, Checoslovaquia, Rumania, Polonia, Hun-
dem.ocracia, c.onstituci.onalidad. Fue el
gría, la República Democrática Alemana. I?e may,.or
trascendencia histórico-universal fue el triunfo del
'CAH'L'-'-.L141 11
en China, al derrotar a las
Guatemala (=[944), H.onduras (1948).
apoyadas por el imperialismo occi~ental, y ?ro~lam~.r
armad.o tras el socialismo; movimiento seguido por la victorta
su en Laos, Carnbodia, Vietnam y Corea. ~urg:ió
LUJLL,-"a..l..
política; en Nicaragua río
uno así el calificado campo socialista, con más de la mitad
otro. Somoaa padre resistió las primeras
del espacio terrestre y de la población mundial vivien-
muestras p.i:'Otestas dirigidas D%l.H .¡;.-u
en ~n mundo no capitalista, en abierta competencia
por la juventud especialmente del
en guerras que nunca fueron calientes sino en la
ron y periferia.
- remolino de las revoluciones contra el
la búsqueda de la m.oderni:zación.
europeo agregó nuevas dimensiones a la reconfi-
guración d-el poder mundial, introduciendo en _África
necesidades de la democracia y el capitalismo,
es necesario extender más información sobre este
movimiento de liberación nacional, que no solo fue
militar 11 político, económico y social, sino profunda-
11.-
mente cultural, Nuevos colores de etnia y raza ampnaron
,¡ -

el número de numerosas naciones, una de cuyas moda-


lidades expresivas fue la Conferencia de Bandung,
convocad~ en 1.955 por India, Ceilán, Pakistán y Bir-·
man ia, en nombre de 29 estados saliendo de la tutela
colonial y proclamándose "países no alineados".
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 77

geografía democrática se amplió con nuevas expre- por el sociólogo ítalo-argentino Gino Germani, para
siones de movimientos de masas, de ciudadanías y de referirse a experiencias políticas que colocaban los
conflictos. Al flujo socialista y anticolonial se sumó derechos de las masas en general y de los trabajadores
la América Latina en donde dictaduras militares ca- en particular, como reconocimiento de sus intereses;
yeron en El Salvador, Guatemala, Honduras , Cuba , fueron movimientos sociales de protesta contra el
Haití, Venezuela y Bolivia. Todo lo descrito sucede orden oligárquico que tuvieron como eje ideológico
en el estrecho espacio de la década 1.945-1.955.La la institucionalización de la democracia y el crecimien-
Guerra Fría ya había empezado. to industrial; buscaron redefinir el papel del Estado,
Fue en la segunda posguerra que se plantearon a
que debería pasar ser rector de la economía y tutor
en Centroamérica las aspiraciones comunes en toda de las organizaciones sociales, invocando a la Nación
América Latina de establecer gobiernos democráticos como espacio simbólico e imaginario de unidad. Las
y programas de desarrollo económico. La emergencia veces que estos movimientos triunfaron, iniciaron
de movimientos sociales encabezados por la baja bur- procesos de modernización del Estado y llevaron a
guesía industrial y comercial y los sectores medios cabo estrategias nacionalistas de desarrollo industrial.
eran más que democráticos, desarrollistas. Esta alian- Estos movimientos son el resultado de una relación
za de intereses modernizadores pujó por influir en la asincrónica entre las estructuras económicas.y político-
definición de un Estado capaz de ponerse al' centro ideológicas en la fase de transición a la sociedad mo-
de una matriz económica, haciendo del desarrollo una derna desde la sociedad tradicional. En esta compren-
finalidad política o valiéndose de una estrategia políti- sión los movimientos sociales generados por los .
ca capaz de modernizar la sociedad. Una economía procesos de industrialización y urbanización no encon-
política, una matriz desarrollista estadocéntrica ,tam- trarían canales de representación en los partidos tra-
bién en provecho popular. En casi todos los países dicionales y su acción social seria canalizada en frentes
latinoamericanos se formaron movimientos nacional nacional-populares. Los movimientos, las demandas,
populares, cuyos rasgos básicos describimos aquí. los conflictos y las ideologías que estuvieron presentes
en el despertar político de masas en la segunda pos-
guerra, genéricamente se conoce como lo "nacional
Lo nacional-popular popular". "Despertar" es solo el retruécano que busca
calificar la etapa precedente, la somnolencia de las
Los llamados movimientos "nacional-populares" dictaduras, hi ausencia de masas en el escenario político,
constituyen un fenómeno recurrente en la historia de la parálisis social que es una exclusión prepolítica
América Latina del siglo xx y en esta matriz se han propia de las dictaduras militares.
generado revueltas y movimientos sociales significa- Lo nacional-popular tiene como equivalente la
tivos. Y Centroamérica no es una excepción. El término crisis del Estado liberal, que tuvo más oportunidades
movimientos "nacional-populares" fue introducido de afirmarse en aquellas sociedades latinoamericanas
La sesrunda
o posguerra:
_~-' Ni democratización ...

cuya industrialización/urbanización ya había empeza- beligerante frente a la oligarquía; otro, rasgos ideoló-
gicos conrraclictorios en torno a la modernidad que
se postula, en primer lugar la democracia como parti-
cipación de masas y el desarrollo como política de
distribución más justa del ingreso; son nacionales en
medida una de sus tareas ha sido (o es) revisar
símbolos y mitos del Estado Nacional, cuya natura-
leza oligárquica explica el fracaso liberal para construir
nación. Ella solo puede erigirse a partir de la noción
"1
rnctust • ¡. .,
rranzacron , ur bani .,
aruzacion, etc. E'1 popuusmo
,. es inclusiva del pueblo, para rescatar su historia, los hé-
roes" las tradiciones y los símbolos del pasado.
actores de esta recorist.rucción de lo nacional-estatal
y de su imaginario son las grandes mayorías de
blación que tantas veces quedaron excluidas.
Otra de 10 nacional-popular es reafir-
mación del principio de «soberanía nacional", es decir
derecho inalienable del Estados soberano a decidir
sobre su sistema político y sus recursos naturales y
". lOS minutos que s1guIeron
oe '" 2Lld errurn bee d 1 regl-·
de ros ?
ecológicos frente alas transnacionales globales y tam-
menes a políticas dictadas por las instituciones y
a la carta, libre expresión de ideas y dudas, todo en- gobiernos de los estados hegemónicos del mundo

En Centroamérica fue hasta la segunda posguerra


fue posible la crisis del Estado Liberal, y se
abrieron fisuras por donde se colaron sectores popu-
lares, que aparecen corno masas en movilización,
como "el pueblo" y sus primeras organizaciones.
este capítulo se examinará todo aquello que se aproxi-
ma a nacional-popular. Las formas primarias
en unos paises, y en la de los cuarenta, en otros. De protesta, huelgas generales, violencias que derr ibaron
a Hernández Mart.ínez, Carias, provocaron un
y nuevos, con algunos rasgos que aparecen necesaria- breve conflicto en Costa Rica. La propuesta analírica
mente en es Ilamada revolución del 44 en Guatemala y
el aparecimiento del pueblo como un (potencial) actor la del 48 en Costa Rica, contienen los trazos basales
80 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

de lo nacional-popular; en este país, el Partido Libe- el castigo (detención, fuga, fusilamiento) de la cohorte
ración Nacional, de base extensamente campesina y gobernante. Por métodos violentos se entiende la lu-
la figura carismática de don Pepe, ideológicamente cha armada en la forma de guerrilla, acompañada por
fluido, construyeron un Estado fuerte y una nación otras manifestaciones de fuerza (huelgas, insurrección
visible, hacen de Costa Rica un caso ejemplar de lo urbana, destrucción de activos del enemigo y otras
nacional-popular. Como se verá, la experiencia de expresiones violentas destinadas a romper el viejo
Guatemala se aparta después de los seis años de go- orden). El movimiento revolucionario es la moviliza-
bierno arevalista (:1945-:1951.)
e intenta convertirse en ción de masas con un grado de organización, que
un movimiento popular revolucionario, que se ahoga requiere una dirección político/militar capaz de h~-
tres años después con el derrumbe del arbencismo.2 cerse seguir por amplios sectores populares, suscepti-
El Estado autoritario no impidió la emergencia bles de identificarse y reconocerse más por los agravios
de movimientos revolucionarios, pero los deformó. experimentados y por su elaboración cultural y sim-
Una definición operacional de revolución es la que bólica, que por sus orígenes clasistas. .
remite a la noción de cambio violento de las instituciones En el conocimiento de la historia centroamerrca-
del Estado) acompañado por la sustitución de actores e intereses na se va teniendo la certeza de que los cambios en las
sociales dominantes) por otros grupos o clases) como resultado estructuras de la sociedad ocurren a partir de la manera
de una movilización popular lo suficientemente fuerte para cómo los actores clave reproducen viejas conductas,
lograrlo. El cambio político es sólo el inicio de una de cómo administran las herencias. El rumbo que el .
transformación social. Los elementos importantes de cambio adopta estaría así prefigurado, ocurriría en
esta definición son tres: la noción de movimiento re- un camino cuyas señales básicas vienen dadas por la
volucionario, el objetivo de tomar el poder del Estado historia previa. A este tema nos referimos al intentar
por la vía violenta y los objetivos de cambiar la sociedad. comprender la larga sombra oligárquica sobre el cuer-
Apoderarse del Estado es una expresión efectiva po de la región. . . .
que operacional mente apunta a la derrota de las fuerzas Hay momentos especiales en la historia, que ex-
encargadas de la defensa del orden que se combate, presan decisiones cruciales de actores ~stratégicos,
el ejército, la policía; la bancarrota de las instituciones decisiones cuyos efectos perduran como impulsos de
que lo respaldan, especialmente el poder ejecutivo y cambio que explicarían modalidades de desarrollo en
largos períodos de tiempo.f La forma cómo actúan

2. Estas ideas aparecen en este libro, especialmente en un


excursus. La propuesta de cambio revolucionario también ha 3. La noción de path dependence sugiere que acciones decisivas
sido analizada a la luz de la teoría de la revolución democrático- en aspectos cruciales pueden establecer cierta direcciór: d~l
burguesa, propuesta, en el libro de Díaz Rozzotto; ahí aparece cambio o limitar otras en una dirección de largo plazo histó-
desnudo, con todas las fealdades inherentes al proyecto el rico. Se trata de una metodología que utiliza el análisis his-
modelo marxista ruso-céntrico de revolución. tórico comparativo en una relación -que puede ser creati-
La segunda posguerra: Ni democratización.i.

uria intelectiva entre la realidad y el cono-


cimiento y promueven el cambio en el mundo de
ideas, O de mantera más ortodoxa, los hombres hacen
o en
U.'''-U.'::W\_'.'Y!U historia pero en escenarios estructurales cuyos
cambios políticos pue- mites ellos no determinan, que les son impuestos.
"dealizarruento' Todo esto a propósito de lo ocurrido después de H
WLll'l..Ha.L,cuando se experimentó en Centroamé-
rica algo como una aceleración del tiempo histárico, cuando
el peso de acumulado se precipita y causas y conse-
cuencias se superponen, y el cambio ocurre.
diferencia, En una época de crisis se mutan de manera más
o menos los escenarios previos, se reconstitu-
corno y otros nuevos aparecen, de ahí que a veces se
dificulten las condiciones para esclarecer las significa-
de experiencia política. y ello; porCJiue
precipita también la acción práctica y esta
de perder rumbo. y también porque la crisis, en su
EDA DE POS dimensión de desorden tiende a la ideologización,
LOS S OLORES corno un mensaje o un discurso que
de cabeza realidad.
Hubo fragmentarios intentos de secularización
y una alteración del viejo orden tradicional,
que se analizan de inmediato. Algunos datos son irn-
prescindibles para entender el proceso, tales como
demográfico, metropolización
de los lideres o caudillos o jefes que se "elevan" sobre el iricremento de los niveles de escolaridad, la modero.
rrización en sectores ag:dcolas y introducción
eje industrial-manufacturero, nuevos servicios. Nuevos
cuando, situados estratégicamente, pueden establecer determinantes en la clasificación social donde siguen
factores étnicos. En la emergencia
---- _ .._------- los sectores medios cuenta también la terciarización
'121.-- entre la teoría y la historia. Ver James Mahoney, Tbe
de la economía y la expansión de la burocracia pública
Patb Dependence and Political 1/1
y f.•actores que por as! d ecrr
í ." crean "
more, 200:1.. 11 oportunidades medias. Son importantes los militares,
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

los maestros, los empleados, los técnicos y la que como tal desde su constitución, aunque el Estado Ií-
siempre se olvida, la "pequeña burguesía de pulpería", beral no siempre fue estable. Hubo litigios interestatales
dueños de un capital que no se reproduce sino muy y violencia para asegurar los acomodos en el interior
trabajosamente. ' de la matriz agraria, en los lentos momentos de expan-
La fuerza del cambio fue importante en tanto no sión para posponer el ingreso de Centro arnérica a la
sólo estuvo vinculado a modificaciones en la estratifi- modernidad del siglo xx. Surgieron por primera vez
cación social, particularmente las que fueron nuevas organizaciones de los sectores dominados y partidos
expresiones de intereses clasistas en el medio urbano políticos independientes, los efectos posteriores
y la descomposición parcial en la estructura agraria. provocados a raíz de la II Guerra Mundial empezaron
Hubo modificaciones en las relaciones del poder de a dinamizar la actividad económica nacional e
las élites en el interior delEstado, cuya capacidad de internacional.
cohesión se debilitó y aún más la de representación El recuento sumario que se propone a continua-
de la heterogeneidad de intereses que se dan en la so- ción no es la historia completa, o la crónica de todo
ciedad. Los cambios, sin embargo, reforzaron el control lo ocurrido, sino la puntualización de los hechos más
autoritario, la actividad de las instituciones represivas, importantes que a nuestro juicio fueron constituyen-
el predominio de la institución militar. En otro orden do antecedentes de la gran crisis que derivó en las
de cosas en esta época se produjo el surgimiento del guerras civiles. Son fenómenos que como síntomas
discurso anticomunista que dividió más a las fuerzas anuncian lo que en su gestación ya estaba por llegar.
en pugna y envenenó las diferencias políticas. .Los Su mayor síntoma fue la pérdida de la unanimidad
efectos de lo que se conoce como la primera etapa de del orden oligárquico y el aparecimiento de las luchas
la Guerra Fría introdujo nuevas formas de dependencia por la democracia (y luego, por la tierra) en manos
en las relaciones interestatales con los Estados Unidos. 4 de los sectores medios. Dicho de nuevo, la demanda
El poder oligárquico nunca había sido desafiado por la apertura del sistema político fue asumida por
las clases dominantes como una amenaza al orden
total. Las exigencias de democracia como crítica a la oligarquía;
4. Es el período del enfrentamiento sistémico entre el capitalis- el terrorismo de Estado como respuesta defensiva; la
mo y el socialismo, que no sólo tuvo una dimensión diplomá-
ampliación de las peticiones de la tierra, más represión
tico-política sino también económica y militar. Su expresión
y finalmente la respuesta armada como consecuencia.
ideológica derivó en la periferia latinoamericana con la doc-
trina de la seguridad nacional, de la que habrá ocasiones La tesis de Goodwin cumplida: el Estado al golpear
diversas para referirse. Cuando los dos bloques alcanzan el estimula los movimientos revolucionarios.
control de la bomba de hidrógeno, de los misiles de largo
o alcance y del espionaje satelital, la Guerra Fría entró en una
nueva etapa, la de la "entente" del equilibrio nuclear. Cf: T.
Hopkins, 1. Wallerstein et al., TbeAge or Transition, trqyectory o/
tbe World-~stem 1.945-2025, Australia, 1996, págs. 27-28.
segunda posguerra: dernocratización.c.
---------

la revolncián importante de ese trayecto histórico fue la


proceso que con Arbenz planteó el
estructural, modificación de las relaciones
en el agro y un limitado cambio en
tenencia de tierra. La democracia es el
importante y sin duda antecedente necesario
oligárquica en
_i-UV'-JlU'b planteó reforma ágraria ciue resulta más dificil de explicar,
este por medio de una salida revofuciorrar ia. Con porque constituyó el inicio de una revolución social.
la renuncia del general Ubico en_junio de "1944. y Ésta fue una contingencia histórica en una sociedad
Ponce donde todavía había relaciones precapital istas de tra-
código civil regía las relaciones laborales.
bloqueando el desarrollo.
'--'<.-'-.a~"H'-"

Son numerosos los analistas que califican esta


como una revolución, pero pocos son
corno S. Tischler la justifican con razones
la insurrección del 20 de Octubre de
que transcurrió en una noche casi incruenta, al
presentada como una derrota del viejo ejército, le
afirmar que ahí se "ha quebrado la armazón
liberal oligárquico" y que un nuevo Estado,
empieza a surgir07 La crisis y fuga
constitución de un nuevo gobierno
de régimen político le lleva a afirmar que
se trata la bancarrota de una vieja forma estatal
po Iíti - . , a e ducacié
1 leas, atencion 1
rucacion y a "a que paso a un cambio profundo en la sociedad
pública, autonomía municipal y otros logros, se valora guatemalteca.
más la naturaleza del atrasado escenario nadona1.6 Hay aquí un cieno atropello a la sindéresis
que la victoria electoral de la amplia

El voto se pero
secreto para los hombres ese momento Somoza intenta tener un corte populista
analfabetos do en el peronismo. J. Gould, "Amigos peligrosos, enemigos
Por se promulgó en :1943 mortales: análisis del movimiento obrero y Sornoza", Revista
en Costa Rica y en :1949 en considerado éste como de No. n/:i2, Managua, í9860
el más avanzado de América Latina; Gould informa que en 7. S. Tischler, Guatemala 1.9440.0' op. cito pág. 266 Y sigs,
88 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

antidictatorial, en diciembre de 1.944, fue otra forma jurídicas, de las relaciones políticas y culturales, es
de derrota histórica del liberalismo a manos de "una decir, en dimensiones más que simbólico culturales
fuerza nacional nueva de la que brotaba el empuje y de la sociedad. ¿ Qué importa más para calificar un
la legitimidad de la revolución".8 Solo la magnitud proceso de cambio? Las revoluciones se reconocen
del atraso social, cultural, político autoriza, en una más en los cambios que introducen en el Estado y su
comparación hacia adentro, a calificar estos cambio; capacidad de imponer transformaciones sociales y
como revolucionarios. Sin duda lo fueron pero con culturales, que en su prosopopeya oratoria.
muletas, si se ven dos dimensiones, el ejército no se La amplia coalición democrática dirigida por la
democratizó, se fortaleció como eje burgués y pronor- pequeña y mediana burguesía triunfante, se fue erosio-
teamericano; los grupos medios optaron por formas nando paulatina pero irreversiblemente entre 1945 y
conservadoras, reaccionarias de existencia ideológica 1.952; algunos grupos de ella fueron incapaces de en-
y política." . tender el ánimo reformista que significaban las rela-
Lo que ocurrió en Guatemala a partir de 1.944 ciones laborales modernas y el sindicalismo libre, la
alcanzó una enorme significación antioligárquica en organización partidaria, el ejerciciolibre de los derechos
toda la región, porque implementó cambios que la políticos, la tierra arrendada sin aparcería. Importan-
"subjetividad conservadora apreció como radicales tes sectores de la pequeña burguesía y otros grupos
aunque sólo fueron, en rigor, rectificaciones vividas medios se pasaron al campo de la reacción oligárqui-
como la negación del pasado en el plano de las formas ca, estimulados por el clima envenenado de la Guerra
Fría; sin ser antidemocráticos se volvieron antico-
munistas, para terminar siendo contrarrevoluciona-
8. Ibídem, pág. 275. Se trata de unos cambios que contrastan rios. Este recorrido comprobó que las clases medias
con el pasado dictatorial, cerrado y asfixiante de la vida social. en su actuación política se escinden y como en todas
En función del atraso lo que ocurrió en Guatemala no fue partes solo un sector puede protagonizar cambios
un milagro político sino un intento revolucionario que se
revolucionarios.
frustra antes de cobrar vida. Sin duda, el país no volvió al
Ya no sólo para las clases medias, sino para el
ubiquismo liberal, pero la oligarquía y sus formas de dominio
sobrevivieron aún treinta años más.
conjunto de intereses oligárquicos, la prueba conside-
9. De hecho, nadie discute que aquella fue una revolución. rable de la voluntad de cambio fue la cuestión de la
Por ejemplo, los valiosos trabajos de Alfredo Guerra Borges, tierra donde los campesinos son los importantes. La
"Apuntes para una interpretación de la Revolución Guatemalte- ideología modernizadora que animó a los intelectua-
ca y su derrota", en Anuario de Estudios Centroamericanos, vol. les radicales se trasladó a sectores de trabajadores y
1.4, no. 1.-2, San José, 1.988 y los trabajos contenidos en los artesanos urbanos, a diversas capas campesinas y
dos tomos La Revolución de Octubre, I.O años de lucha por la demo-
otros grupos pobres, dominados. El apoyo campesi-
cracia en Guatemala I.944 -54, recopilados por Eduardo Velásquez
no fue cobrando fuerza política cuando el gobierno
Carrera, CEUR-comisión de Conmemoración Revolución
Guatemala, Usac, 1.944. ' arbencista promulgó la reforma agraria y abrió las
90 ReVO!14ciones sin cambios
La segunda posguerra: Ni democratización ...

de católica se pusiera al frente de


1:: •
OH";11_S1va d er atraso. 11

La derrota del proyecto nacional/popular en :1C954


en inicio de la Guerra Fria. Para esas fechas
fuerzas políticas que formaron el amplio frente
antiubiquista se habían dividido frente la estrategia
e:n ex ..· radical un sector minoritario. En :!C944 una
ceso y pagó su valor confon~n_e la declaración
fue amplia conformación rnulticlasista pero sin dirección
10 como una expropia- burguesa; la oligarquía no fue reemplazada sino par-
cialmente y esa fue la mayor debilidad burguesa; se
rehaciendo paulatinamente hasta :!C949cuando
fue asesinado el coronel Arana, venido a ser caudillo
indiscutible de contrarrevolución. :!C952es una fecha
la derecha herida, en que perdió las
elecciones frente a Arbenz pero como frente anricornu-
campesinos-indigenas se crecienternente poderoso. A partir
J.v,u de octubre
V_C'C"-' .. enfrentó una oposición gol-
mente. Expropiar
.
la tierra ,
en
-
rl- 0-01.
- b -:3
pista drrigida sin guantes por Estados Unidos, El
conflicto era ferozmente ideológico sin ocultar un
enfrentamiento de clases o

El frente arbencista lo formaban las organizaciones


sindicales y campesinas, más cuatro partidos políticos
(Renovación Nacional, Partido de la Revolución Gua ..
temalteca, el Partido de Acción Revolucionaria y el.
Partido Guatemalteco del Trabajo (PGT, cornunistaj) ..
Después 1.952, con crisis en ebullición el frente
de izquierda aparecía conformado, menos p01: una

_.~-------
11~.-}En
l~-hist~)ria l~olitica de Centroarnérica, a partir del clima
yde su que estimuló la Guerra Fria, no puede dejar de mencionarse
como un influyente fenómeno el movimiento y la ideología
Unido .•, anticomunista. El anticomunismo se convirtió en Guatemala
deSan en sinónimo de antiarbencismo y contrario a toda medida
democrática.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 93

pequeña elite radical de clase media que organIzo como un desastre político. El 27 de junio de 1954 el
sindicatos y ligas campesinas y más por sectores subal- coronel Arbenz anunció su renuncia abruptamente,
ternos. Fue una dinámica socialmente polarizada, denunciando el complot de la CIA por intermedio del
pues a medida que se pasaban al campo contrarrevolu- embajador Peurifoy; a su renuncia siguieron sucesivos
cionario la mediana y baja burguesía, aumentaba la cambios entre los altos oficiales del ejército que ter-
presencia organizada de las clases subalternas (cam- minaron por nombrar a Castillo Armas como Jefe de
pesinos, obreros y artesanos, gente con y sin oficio y Estado. Los actores del movimiento popular revolucio-
bajas clases medias). Hay que admitir que la proclama nario no pudieron pelear; la renuncia de Arbenz tomó
anticomunista unificó a tirios y troyanos, ricos y po- por sorpresa a todos.14 ,
bres, campesinos y finqueros, que ganaron más voZ Pese a su fracaso que se califica como total, la
que voto y que conformaron un frente contrarrevolucio- ofensiva antioligárquica dejó lecciones, terminando
nario mayoritario.V con las ilusiones acerca de clases y correlación de
La radicalización del proceso se debió en parte a fuerzas populares, con la lecciónde que no es posible
la fuerza ideológica, la influencia desproporcionada ir más allá de los límites que los escenarios estable-
del PGT y la receptividad del presidente Arbenz. Las cen, al margen de la voluntad de .Ios actores; nunca
fuerzas antiarbencistas adquirieron desconocido vigor como en ese momento fue cierto que la historia la
por motivos propios de esta cultura política "finquera", hacen los hombres pero en un escenario que ellos no
ylos reclamos religiosos, que permitieron a la oligarquía señalan. Una porción de tales límites' los establecieron
burguesa parapetarse tras la Iglesia católica, movilizada la estructura económica agraria, la debilidad ideológica
políticamente por la acción de su alta jerarqufa.l ' La de las masas, el retraso de la cultura política y Esta-
política norteamericana multiforme cobró presencia dos Unidos.
mortal utilizando la alta oficialidad del ejército, que La derrota teórica del proyecto democrático-bur-
al traicionar a Arbenz ratificó su inequívoca lealtad gués ocurrió porque no había Industriales con intereses
a la oligarquía. La revolución de Octubre en la etapa
en que iniciaba su definición como una revolución
14. La intervención norteamericana ha merecido numerosos
democrático-burguesa terminó sin poder defenderse, estudios como el de José M. Aviar de Soto, Dependenry and
Intervention: the Case of Guatemala in 1.954, Westview Press,
12. La oposición de centro-derecha triunfó siempre en la ca- Boulder, 1.978; Richard H. Immerman, The Cl.A in Guatemala:
pital donde eligió alcaldes y alcanzó a tener unos 1.2 diputados the Foreign Policy of Tnteruention, University of Texas Press,
en el Congreso, llamados "los doce apóstoles"; obviamente, Austin, 1.982 y Stephen Schlesinger and Stephen Kinzer, Bitter
no fue en el terreno electoral donde jugaron a ganar. Fruit: the Untold Story of the American Coup in Guatemala,
13. Por ejemplo, el traslado de unas monjas que venían pres- Doubleday, New York, 1.983; y especialmente el trabajo de
tandoun servicio público -la Casa del Niño- a otro sitio Piero Gleijeses, La esperanza rota: la revolución guatemalteca y los
de trabajo fue considerado como un acto irreligioso, que "re- Estados Unidos, :1944-:1954,Editoríal Universitaria, Universidad
ventó" los sentimientos católicos en el ámbito político. de San Carlos de Guatemala, 2005.
Revoluciones sin La segunda posguerra: Ni democratización ...

valorado suficientemente el carácter de este


momento calificado como un prr¿yecto de democracia-de-
Muchos exilados arbencistas volvieron,
L.¿'<U_-'.JH organizarse sindicatos y organizaciones
más importante fue la convocatoria a
ereccrories presidenciales, que permitieron, entre otras
derrota la inscripción de candidatura del Dr.
no se produjo una abierta restauración del -pasado Ii- José Arévalo. indiscutible ganador de haberse celebrado
;oerar1/-o~lgarqulco
l" . . "
en S1.1 expreSlOn mas negativa, •
un -las elecciones. La acción militar lo impidió y se
regreso ubiquismo. ·Varios desperdició así la oportunidad de democratizar,
se nuevos signos, al país.
militar de marzo de :1963 constituyó una
incapacidad democrática
de la burguesía y el ejército. Fue una
represión política orquestada por el ejército que como
como en Guatemala, por simple razón que en_ institución decidió sustituir al viejo general Ydígoras,
este país esas irriciativas ocurrieron en el escenario veleidoso en su juego democratizante, por el ministro
contrarrevolucionario del antiarbencismo. Las raíces de Guerra, el coronel Enrique Peralta Azurdia. Este
nueva crisis revolucionaria se encuentran y '_ tuvo efectos profundos
~UL"',""'__ en el destino
guatemalteca. De nuevo unas preguntas
respuesta: ¿ qué hubiese sucedido si en las elecciones
de :1963 hubiese triunfado Arévalo? ¿
Ha.u"_-'-a. evitado la matanza de 36 años? El golpe fue
de partida de un proceso que condujo
nante y extensa agitación social. Ambidiestro, con meses después al inicio del "conflicto armado interno".
mano derecha intentó superar las rivalidades entre

el Progreso, tomó parte activa en la política anticubana de


Estados dio apoyo pleno a los primeros pasos del
orovectc de integración centroamericana. Una relación UUHU'-'"U
de su en la historia de Guatemala aparece en el libro de
Roland H. Ebel, Misunderstood Caudillo; Migue! ydígora's Fsentes
15.La figura y la actuación de ydigoras Fuentes es esencialmente and tbe Pailure of Democracy in Guatemala; University Press of
contradictoria; fue partidario entusiasta de la Alianza para America, Lanharn, 1.998, especialmente págs. 299 y sigs.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 97

El Salrador, las bases de la larga marcha lismo pero aún en el interior del mundo oligárquico
fue esta una nueva prueba de la crisis del sistema.17
La insurrección cívico-militar de abril y mayo (1.944), Abel Cuenca, Dagoberto Marroquín, Pedro
en El Salvador, fue la primera manifestación urbana Geoffroy Rivas y algunos otros intelectuales marxistas
de masas habida en Centroamérica; con diferencia de leyeron estos cambios en clave eurocénrrica y propu-
semanas le llegó el turno a Guatemala y al año siguiente sieron para El Salvador la explicación teórica de la
a Honduras. Elmovimiento popular no tuvo los efec- llamada revolución demo- burguesa. Según ese modelo,
tos políticos esperados, pero puso fin a la era de los los oficiales militares y los intelectuales civiles que
caudillos militares, al forzar la renuncia del general los acompañaban representarían a la burguesía, que
Hernández Martínez y su grupo y abrir el portón por enfrentando a las clases semi-feudales, los cafetaleros,
donde habrían de pasar las movilizaciones y la orga- abrirían el camino de la revolución. La pugna de clases
nización de los sectores populares con su vanguardia, señala la vía por la cual habrían de desfilar aliados,
los estudiantes y profesionales medios. El ejército el proletariado y la burguesía industrial dando paso
perdió momentáneamente su antigua unidad, pero se al desarrollo industrial y la democracia.18 Podría de-
rehizo para continuar su control del Estado; también cirse que tales prescripciones teóricas están divorcia-
se abrió la oportunidad para que nuevas fuerzas socia- das de la historia, pero ello supone que en algún mo-
les, las clases medias, hicieran su aparición polítiea y merito se conocieron mutuamente y ello no fue así.
retaran cada vez más al control oligárquico.l" Siempre se ignoraron.
Hacia 1.948 se produjo el golpe de Estado de la
fracción militar-civil que perdió en 1.944 y que con
EXCURSUS: En el lenguaje esotérico que califica los movimientos
la influencia de Guatemala se propuso algunos cambios
populares en las sociedades atrasadas, es decir no plenamente
a los que la inflación retórica llamó "revolución de capitalistas pero tampoco feudales, las revoluciones de liberación
1.948",porque se presentó con inspiración veladfimen-
te antioligárquica. Su ocurrencia es prueba -al me-
17. Las fuerzas antioligárquicas tuvieron en este país un débil
nos- que el duende se había salido de la lámpara y desempeño. Lo que hizo la Junta cívico-militar (1948-50)
que la paz cafetalera había terminado. Lejos del libera- inspirada por lo que ocurría en Guatemala, fue un pobre es-
fuerzo reformista. Los gobiernos de Osorio y .Lemus, en los
años cincuenta iniciaron un esfuerzo industrializador con el
16. Patricia Parkman relata en su libro los detalles de este Estado como ejecutor, apoyados en los recursos financieros
movimiento, Insurrección no violenta en El Salvador, la caída de del boom cafetalero con el beneplácito de la o.igarquía. Un
Maximiliano' Hernández, traducción aún en borrador, pág . .3. análisis optimista de este proyecto aparece en el ensayo de
Analizan este período A. Cuenca, El Salvador, una democracia Jorge Cáceres "La revolución salvadoreña de :194.3: un estudio
cafetalera, ARR Centro Editorial, México, 1962, cap. 1, y J. sobre transformismo", en EISalz'ador, una historia ... , op. cit.,
Cáceres, R. Guidos Béjar y R. Menjivar, El Salvador, una historia págs. 7:1, 94 Ysigs.
sin lecciones, Flacso, San José, 1988. 18. A. Cuenca, op. cit. varios capítulos, especialmente el 1.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 99

nacional suponen clase dominada que se convierte en es que el carácter de clase depende de! campo poíítico donde ocu-
encabeza el cambio y proclama un propósito: proyectar el paso al rre, de la posición en ia lucha de clases en vista del proyecto de
socieñsmo. Es decir, una aceleración de la historia. la caracterízacíén ciase que plantea y defiende. Aquí, en Centroamérica no hubo
de jos intentos de la revolución centroamericana han sido :>!!.!Ji:lLlOS, proletariado y por ello decimos que fue muítícíasíste y hemos ape-
momentos, el marco de los movimientos nacíonat- lado a la noción de pueblo, de lo popular-nactonal. Como se viene
cuyo sentido clase es ia de sociedad en sociedades atrasadas es inevitable que aparezcan di-
industrial ia democracia ¡¡ber,,~I, es no la destrucción versas clases y demandas, distintos de lo que en una óptica formal
sistema sino sus modernización por la vía de reformas graduales debiera ser la ciase obrera. También cambia la política de alianzas,
pero ciertas. Si pudiera slntetízarse lo que en último término de objetivos y métodos. En una óptica formal, ortodoxa" la torna
los grupos revcluclcnertos bastarían tres o cuatro moder- del por E~! proletartado supone el socialismo; de hecho, las
nizar el capitalismo Industrialización y democracia superar revoluciones de liberación nacional es lo que se proponen, superando
el modelo agrario exportador las reformas son revolución, de forma ¡¡lbresca el argumento de que e! socialismo solo
Los fracasos y dificultades para avanzar se señalan mirando ser viable después de! capitalismo. Esta argumentación es la misma
las décadas de los sesenta y setenta que fueron definiendo una que se ha empíeado en referencia a la revolución democrátíco-bur-
nueva estrategia, en sus métodos y en sus programas. Ya guesa, ya mencionada, que se pudre por el error mortal de caracte-
lo en sus luchas contra rizar mal los obstáculos históricos que el desarrollo capitalista tiene
revolucionarios se encontraron con la en Centroamérlca, y en general su ocurrencia en sociedades atra-
industria, La defensa violenta del burgués para enfrentar sadas, En Centroarnérlca se le utilizó marginalmente en el debate
tos cambios señalados anteriormente, radicalizaron e! pensamien- polñíco. Está pendiente el debate que identifique las causas del
to de los intelectuales marxistas, que en sus conjeturas se aproximaron fracaso de las revoluciones en Centroernérlca, en relación con JOS
lo que se llaman revolucianes de Hn'pr~:;;r.lrm n.:;;,-.,,.,n.::,/ modelos marxistas: se olvida" tal vez, que la teoría política de las
que proponen como movimíentos con demandas para revolucíones no fue objeto de conocimiento, elaboractón y debate.
enfrentar los de la democracia y e! desarrollo. que E! de la revolución cubana llenó de una teoría fofa' lías
prestarle atención a los programas, a los documentos internos, al estrategias de la guerrilla en Centroamérlca. La dtmensión lnter-
debate hacia 1955/60 en que nos movíamos con el modelo de la nacíonat, donde juega Estados Unidos tampoco ha sido objeto de
revolución de Iiberación nacional y su la revolución de .. reflexión suñcíente como para moverse con míntmos realistas:
mccrátíco más cerca de los partidos comunistas. Lo ¿Podía triunfar una revolución antícapttaüsta en sociedades de!
define a estas revoluciones eS que todo ocurre dirección círculo fjeopolftico del Imperiallsme? ¿Era viable ta
del como recuerdan los primeros programas de dos die! socialismo en Centroaménca? En esta coyuntura de la
de los tres grupos guerrilleros guatemaltecos, de las organizaciones en que pudiéramos tener 4 Ó 40 razones para explicar el fracaso,
del fmin (salvo una) y FSLN. Estas fueron las ideas de las diriqendas hay una y ella basta: ningún cambio puede hacerse sin Estados
de las organizaciones de las clases que f¡~a¡men'" mucho menos contra ellos.
ni con las demandas exclu-
sivas de la clase una clase inexistente
como tal y confundida con el artesanado, el agrícola,
los campesinos y las enormes franjas de pobres urbanos. Es de la historia salvadoreña el golpe de Estado de
vital el reconocimiento que ti contrapelo de la or- ciertamente algo más que un relevo de man-
todoxia los sectores la un contradictorio periodo reformista
"-
las luchas de liberación nacional. Se ha refutado.
sobre todo por un proyecto de cambio en
con los argumentos ortodoxos de que proletariado
proponer sus demandas y organizar el proceso revclucíonano según papel del Estado como eje articulador de un nuevo
sus Intereses de clase, que es la toma del poder. Nuestra respuesta arreglo hegemónico de los grupos dominantes Los o
:100 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... :101

militares aspiraban a fusionar los intereses agrarios en el XVIII Brumario para la burguesía imperial que
en un proyecto de modernización con los nuevos sec- para salvar la bolsa tuvo que renunciar a la corona.
tores interesados en la industrialización. Tuvo también En este país fue este un arreglo profundamente autori-
una vacilante propuesta democrática, una apertura tario en que la protección de la espada se vuelve per-
inicial convencidos que es en la política donde el poder manente pero con variaciones en el control de la
puede ser legal y tal vez legítimo. Así crearon el Partido sociedad. En la aplicación de políticas de poder la
Revolucionario de Unificación Democrática (PRUD), sociedad militarizada se valió de modales "bruscos"
y nombraron al coronel Osear Osario (:1950/56) y con las organizaciones populares, especialmente los
luego por el coronel Lemus (1956/60). Fue este un sindicatos y los estudiantes, acerca de lo cual algo se
movimiento de oficiales militares jóvenes junto con dice más adelante como germen de la lucha guerrillera.
un grupo de civiles, abogados y empresarios agrícolas En toda Centro américa los ejércitos -el entrena-
con vinculaciones familiares o políticas con la oligar- miento, el armamento, su misión pretoriana- fueron
quía. No hay coincidencia entre los analistas de esta sometidos a un baño de modernidad en clave antico-
historia, en cuanto a la calificación de la fuerza y los munista por Estados Unidos, con responsabilidades
resultados del reformismo modernizador de este políticas propias que les dieron en el interior del pacto
mornento.l" oligárquico, mqyor independencia. Probablemente esta
En El Salvador, el control del Estado por los mi- "libertad" estimuló ciertos coqueteos reformistas. En
litares no siempre fue una relación feliz con la burguesía el seno de los escenarios politicos se resuelven las
cafetalera-comercial y más bien atravesó momentos contradicciones que en democracia ocurren en el
críticos. Era ese pacto como un matrimonio morganá- parlamento, entre partidos políticos, en los conflictos
tico -entendido como aquel en que las partes perte- deintereses sociales, en lós debates en los medios de
necen a desiguales linajes- pese a lo cual se mantuvo comunicación, en la competencia electoral. Hacia allí
por medio- siglo. Fue esta la expresa renuncia de la se dirigió el ejército. ¿ Constituye un gesto inédito,
burguesía cafetalera a un gobierno propio y por un largo imprevisto en la lógica política militar la fundación
período de tiempo, intento acaso racional para mantener de un partido político, con su propio programa? ¿Por
intacto su poder social aunque quebrantando el poder qué no lo hizo la oligarquía? El ejército necesitaba
político. Esto recuerda la sugerencia hecha por Marx un partido y lo fundó; en otros casos, los copó.
Lo ocurrido en los espacios políticos entre 1948
y 1960 ha sido considerado como una ruptura en
19. Enrique Baloyra habla más bien de fracaso, en su libro El varias direcciones: frente a la misión tradicional de
Salvador en transición, VCA ed., San Salvador, 1987, págs. }6 y
guardianes de los intereses cafetaleros, simples.
sigs. En igual sentido se pronuncia Manuel Montobio, La
metamorfosis de puigarcito. Transición politica y proceso de paz en El
administradores del Estado se proyectan como un
Salvador, Icaria-Antrazyt-Flacso, Barcelona, 1999, págs. 40,
41.
La segunda posguerra: Ni democratización ...

general Molina, en 1.974, propuso


agro, que la hepática reacción
se encargó de parar.
quién finalmente tenia el poder,
se de cosechar hasta la crisis de 1.978,
C0111.0 se verá ya era una crisis estatal.

EXCi'iIRSi/lS" Al intentar una síntesis teórica de las luchas sociales


corno ocurrieron en Costa Rica, El Salvador y es-
en Guatemala, Sle encuentran rasgos comunes como
intento de modernización capitalista, de lo que la intelectualidad
marxista conocía como la revotucián democrático burguesa. La
estrateqla de la revolución democretico burguesa tiene como meta
alcanzar estadio de desarrollo claramente capitalista como 21n-
tésala de la revolución socíalísta. En su propuesta más rn""r''''.,
el éxito de esta marcha ascendente está dirigida por una naciente
una clase que se afirma al conducir '1alcanzarla
capitalista, nacional, independiente. la lucha
de clases que se desata requiere que los gérmenes burgueses
enfrentar con éxito El los terratenientes feudales y sus
aliados '1 puedan construir una alianza con tos
y sin tierra y con el naciente proletariado industrlal urbano
del proceso y del éxito. las luchas antlfeudales solo
alcanzarlo si la burguesía puede encabezar un frente nr,,,.,,,,'·""
'1 construir un Estado democrático. ~n el escenarío de
sociedades corno las latinoamericanas puede darse el C¡;¡SO de la
ausencia de la burquesía o sin capacidades dirigentes, o
que aún intereses con las clases agrarias dominantes, en el
seno de un Estado de corte liberal. En esa circunstancia, la tarea
es fortalece, políticamente al proletariado, sustituyendo a ta bUF-
Rafael Guidos G':El Estado en en cuyo caso SU dirección ya puede ser oríentada hacia la
industrialización salvadoreño", en J. Cáceres y Otl:OS, El sociedad soda lista. El simplismo de la presentación no disimula
una historia sin '141. y los errores de esta visión eurocéntríca que supone dos condiciones
del Estado intervencionista para referirse atadas a realidades inexistentes: a) que en el interior del mundo
rural subsista una ciase de terratenientes de carácter feudal, con
Igran dominio sobre le! conjunto de ta sociedad pero en decadencia

._-.._---_. __ ._-----------------
1.989, pág. :1:15; Rafael G. Béjar, op. cit. y Carlos
pág. 95.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

yen donde el enfrentamiento central es la disputa de la burguesía importantes de las clases dominadas y explotadas. La lucha de
ascendente por constituir un nuevo Estado: la burguesía comercial! clases no se realiza con clases depuradas como tales por sus inte-
industrial con apoyo de la clase trabajadora arrancando a aquellos reses, sino a través de coaliciones interclasistas. Por ejemplo, la
el control del Estado para reorganizar el poder y la sociedad. Y b) poderosa coalición burguesa/terrateniente se apoya en una frac-
que en ausencia de una burguesía interesada en y capaz de vencer ción sustancial de las clases dominadas, incluyendo grupos interme-
a los feudales, el proletariado ocuparía su lugar en alianza con los dios. La revolución democrático-burguesa no pudo realizarse y
sectores subordinados, básicamente del campesinado, cuyo triun- como esquema analítico es improcedente. También se ha propuesto
fo inaugura el éxito del proceso dernocrénco-burcués. La década otra opción, en que la hipótesis de la revolución democrático-bur-
revolucionaria guatemalteca no pasó por tales experiencias, de guesa desarrolla la idea de que en Centroamérica hubo dos crisis
hecho no podía vivirlas. En el primer caso, las relaciones en el alternativas que pueden confundirse; esa discutible propuesta su-
campo guatemalteco no contenían clases feudales, aunque están pone la existencia de una clase semifeudal opuesta a, y en eventual
cargadas de un hondo retraso capitalista, el trabajo forzado por conflicto con una burguesía industrial y un proletariado que no se
deudas, las habilltaclones, la aparcería, no fueron relaciones serviles queda en la banca. Si las "tareas" no las satisface la burguesía,
aunque se le parecen. La dominación de la oligarquía se construyó ahí está la clase obrera para sustituirla. Y se habla de dos crisis,
sobre toda la sociedad, un poder de raíz colonial, que ha reproduci- una frente a la oligarquía con reclamos por la tierra y por menos
do durante siglos su control violento y racista. En Ia década de los desigualdades. Su base social serían los campesinos. Esa sería la
cincuenta hizo crisis el Estado liberal y se inició el declive del do- revolución democrática. y otra, frente a la burguesía que tendría
minio oligárquico. El capitalismo agrario exportador ha sido depen- como reclamo el poder y la toma del Estado, su base social sería
diente del capital extranjero y con bajas tasas de acumulación de el proletariado. Esa sería la revolución socialista. Las fuerzas gue-
capital. Y la fracción industrial era incipiente, marginal, subordinada rrilleras confundieron los momentos y hubo una fusión de objetivos
a la oligarquía agraria y poco influyente en el Estado. En el segundo y metas, una confusión de demandas. Las demandas de la revolución
caso, las relaciones semi serviles pudieron estar en crisis debilitando antioligárquica son viejas y conforman un frente social que podría
el carácter dominante de la oligarquía, pero eso no fortalecía a un incluir a sectores burgueses. Las demandas de la revolución antibur-
eventual sector industrial competitivo, que era social y políticamente guesa son nuevas y definen un frente solo con las clases históricamen-
deleznable, siempre aliado menor de aquella. Junto a la debilidad te dominadas, encabezadas por la clase obrera. Peleando contra
de la burguesía industrial, lo grave fue la presencia no de un prole- el terrateniente se encontraron con el industrial. Esa confusión
tariado con experiencias de luchas políticas independientes sino sería resultado de la mentalidad pequeño burguesa, incierta, de
de grupos obreros sin tradición organizativa y de naturaleza fuer- las clases medias. De hecho parecieran encontrarse aquí dos transi-
temente artesanal; y un campesinado pobre o sin tierra retenido ciones diversas, simultáneas pero desfasadas por su naturaleza y
por formas culturales de un enorme atraso social y político. No por el tiempo en que empiezan y que recuerdan esos puentes del
había tampoco un proletariado agrícola orgánico, de fuerte existencia cuento chino, que corren paralelos por largo trecho sólo para llevar
política, sino un campesinado formado en la sobrevivencia de la al final, a sitios distintos. En el plano político, la transición que se
parcela, con una atroz demora cultural y social, formado en la ma- buscaba desde la dictadura oligárquica a la democracia liberal con-
triz colonial de una dominación racista. La crisis revolucionaria dujo a estos países al terrorismo de Estado, a la militarización del
democrático-burguesa postula que en el filtro de la lucha de clases conflicto social. En el terreno económico, la transición desde la
hay una alianza obrero-campesina a la cabeza de un frente an- etapa primario exportadora, agraria, hacia la economía industrial,
tioligárquico (o antifeudal) junto a la neutralidad o impotencia del llevó a la región a la ratificación de su destino agroexportador. A
sector industrial. En teoría no se menciona el papel de las clases tener una industria de bienes de consumo inmediato, en manos
medias, que en estos países jugaron el papel de actores dirigentes del capital extranjero, con una dependencia suicida del capital y
una élite de la genéricamente llamada pequeña burguesía, de cuyas de insumos extranjeros. En el caso de Guatemala se formó una
filas salieron los intelectuales y cuadros políticamente radicales coalición popular radical (que Arbenz representaba) con el control
que iniciaron la organización de un frente común con fracciones parcial del Estado pues el ejército nacional/policía no fueron nunca
4"0 '. 1 ~ • •

ü8VOfUClOf18S ssn cambzos revolm:ionarios


La segunda posguerra: Ni denlOcratizadón ...

era débil como poder. La etapa de la definición de un


poder estatal en Nicaragua fue postrera y como parte
un textura colonial. Como autoridad
nacional se definió o se moduló bajo los dictados de
un poder extranjero desde 1.91.1..
Esa etapa, al realizarse a la sombra del imperialis-
mo norteamericano, no consolidó en términos hege-
dominación de ninguna fracción comercial-
terrateniente sino de manera pardal y tardía hasta
que aparece Sornoza y sus herederos en 1.937.23 Por
eso, solo citado como ejemplo, cuando llega la Alianza
Progreso (1.963), el Estado se convierte
traumas en un poder desarrollista, tanto porque ello
coincide con expansión de los intereses económicos
del grupo Somoza, como por la obsecuencia de este
frente a los dictados norteamericanos. Así, ciertas
dimensiones modernizadoras del Estado fueron
cionales capitalismo nicaragüense, donde cohabita"
ban intereses de los partidos liberal y conservador.
De hecho ni el Partido Liberal, la Guardia Nacional
pro/epámenos
~ de.
. l,.-¿
t~ crssss• los intereses del dan Sornoza fueron representan--
tes del sector finque ro como ocurrió en
otros países vecinos. Por eso nunca se ha calificado
dela somocismo como oligárquico. De ahí que se crea
que se vienen planteando. La razón es una gmn flexibilidad pam el surgimiento y ajuste de
fue más dúctil porque era 'como los nuevos productos agrarios e industriales, y

23. En :[91.2 se firmaron los llamados Pactos Dawson, que


convirtieron al país en un protectorado norteamericano con.
la concesión canalera vitalicia y el establecimiento, como ta--
reas de las fuerzas de intervención militar, el control total
sobre el sistema tributario y financiero; el Banco Nacional
se "funda" en Estados Unidos, como 10 describe con detalles
el libro dejo Wheelock, op. cit., varias páginas,J. Durikerley,
Power in tbe üthmus.o., op. tito págs. 68 y sigs.
:108
Revoluciones sin cambios revolucionarios
La segunda posguerra: Ni democratización ... I09

que desde el Estado se impulsen nuevas políticas de


que siempre tuvo los niveles más.~ajos en la producción
desarrollo. El choque de intereses con ocasión de la
y exportación de café de la ~eglOn.
promoción de los rníevos fue menor, tal como sucedió
En rigor, plantadores Liberales y conservadores
durante los gobiernos de Luis Somoza Debayle ('1.959-
se beneficiaron sin disgustos pero peleando por el
63) ,Yel sucesor a su muerte, René Schick ('1.963-66).
pode-r. La competencia en el mercado, donde se vive
Es .e,seel momento cuando se inicia con éxito la plan-
la ficción de que todos son libres e iguales, no tuvo
tacl~n algodonera Yen general la diversificación pro-
correspondencia con la competencia política, donde
ductiva, el auge del ganado Yel azúcar Yla implantación
los amigos del régimen fueron más iguales y los ene-
manufacturera en mínima escala. La implantación del
migos menos libres. Pero es en ac:tuel terreno, el del
a!godón es un ejeo:plo paradigmático del papel que
mercado, donde se muestra la furia voraz de los So-
ejecuta el Estado, S1ncuya presencia de carácter múl-
moza, cuyos intereses familiares intentar~n controlar
tiple, no hubiese habido cambios en la economía en
todo negocio rents-ble. La codicia somocista no reco-
la producción para la exportación, pero tambié~ de
noció los límites de lo público.
las ventajas que el grupo empresarial Somoza se ase-
guró siempre. La dictadura soportó siempre a los partidos de la
oposición conservadora, que participaban en las ele~~
En '1.953se creó-el Instituto de Fomento Nacional
dones presidenciales, que nunca ganaron, pero S1
(Infonac) como banca de desarrollo; en I959 se firma,
abundantes asientos legislativos. Los conservador~s
en Managua, el Tratado de Integración Económica
no volvieron a estar en el poder desde I929. Una 11-
~entro~~eri~~na, qu.e estimula y proyecta la etapa de
IndustnahzaclOn sustItutiva. Las políticas de moderni- bertad de prensa igualmente relativa, pero ciert~,.pues
siempre se publicó el diario La Prensa, tradicional
zación económica ocurrieron en estos años con medi-
periódico conservador. Esas liberalidades n~ se les
das como la creación del Instituto Agrario Nicaragüen_
otorgaron a los grupos democráticos nuevos, SIn a los
se, e~ '1.963,p,a~adesarrollar la extensa frontera agrícola
conservadores. Con Somoza 1el Estado parecía una
y aplIcar políticas de colonización y beneficiar así al-
finca privada en el manejo de los asuntos ?úblicos,
gunos grupos de las decenas de millares de campesi-
pero el carácter autoritario fue compa.r~t1vamente
. nos ~xp::lsados por la implantación del algodón, la
menor por sutono paternal de pod~r familiar y rasgos
ampllaclOn de la hacienda ganadera, azucarera y otros
productos agropecuarios.24 La ola desarrollista fue sultanescos. La contradicción radica en que tod.o l~
más visible en sus efectos socioeconómicos en este anterior, esos rasgos, se mantuvieron con postet10~1-
dad, con sus herederos. Algunas instituciones cambia-
país tal vez porque se partía de mínimos, de un sistema
ron y otras surgieron para situar el de~arrollo en el
interior de una débil matriz estadocéntrica: el Estado
24. Por influencias de al Alianza para el Progreso se tomaron tendió al cambio y lo impulsó en la vida eco~ómi~a.
medidas. similares con el INTA en Guatemala y el lTCO en Las luchas contra el clan Somoza fueron eXIgenc1as
Costa Rica.
por el voto libre, la participación de ciudadanías ple-
1.1. o
La segunda posguerra: :i:'Hdemocratización ... 11.1.

nuevo demanda externa, con los colorantes


y como fue con el café en diversos momentos, lo
explica el boor» modernizador. La decaída esfera econó-
- a comienzos de los años cincuenta empezó a
numerosas veces haciéndolo tener leves excitaciones comerciales. Era la economía
mon'1entos dando rasgos de legitimidad a la dkta"dunL internacional que al recomponerse con el final de la
aumenta guej:ra, se - en la periferia como demanda
sandinismo aparece bienes primarios y oferta de productos Industziales.
como alternativa radical. Los pormenores este Pronto fue evidente que estaba. conformándose
una nueva etapa de desarrollo a finales de los cincuen-
terremoto ta, que coincidió o se manifestó como una crisis
ciudad de Managua se puso a prueba directa el modelo económico tradicional cafetal/bananero. Pero
A no siempre se advirtió que la renovación comercio
ganó organicidad y mundial, que llegó como demanda de productos agrí-
conciencia y fue en aumento, en fuerza y en amplitud.25 colas, fue parte importante de un reacomodo, una
el se
nueva manifestación cíclica que empezaba. La diversi-
la dictadura. ficación agrario exportadora demostró en algo más
de una década, la fragilidad inherente a ese patrón de
desarrollo. se tuvo la percepción, por la forma
2. irnperuosa en que surgieron las nuevas oportunidades
LA MODERNIZACIÓN EC
productivas, que era un boom que terminada en otra
O S CRISIS décadas después. Con ocasión de ello,
y nuevos empresarios agrícolas en la región reorientaron
sus intereses y los favores del Estado, sin abandonar
el cafetalero.
El PIB creció en toda la región a un ritmo superior
de los sesenta al promedio latinoamericano que fue de 5.0% y 5
26 '-. . 27
décadas de los sesenta y setenta respectrvamente,

5U y J. sociales para combatir el hambre y la mortalidad


2:18 Y sigs.
infantil y quitar así espacios políticos a la insurgencia. No
26. La ofensiva anticastrista de Ken nedv, que reunió a los
hay que perder de vista que Kenriedy también patrocinó el
centroarnericanos en San José en marzo de
armamentismo y la contrainsurgencia.
fue capaz de convencer a los de
27. Los datos 'que se dan a continuación aparecen en Robert
1.:12 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 1.:1)

En El Salvador su promedio anual se incrementó de benefició de los efectos del crecimiento sino por el
5.7% al 6.5% en ambos decenios; en Guatemala, de contrario, el reparto fue inequitativo como suele ocu-
5.6% al 5.8% y en Nicaragua del 6.9% al 5.6%. El rrir en sociedades subdesarrolladas, se produjeron
promedio en Centroamérica fue del 6.0% y del 5.6% resultados de bienestar y progreso para unos pocos,
respectivamente. 28 A partir de 1.980, cuando las accio- con aumentos de pobreza para los que ya lo eran.
nes revolucionarias ya estaban desarrollándose el Efectos perversos que forman parte de la crisis políti-
crecimiento económico se estancó y luego cayó brutal- ca de los setenta.
mente con tasas negativas. Al contrario de lo que muchos creyeron, no hubo
Los cambios en la economía regional en las déca- un quiebre entre el largo período tradicional mono
das bajo análisis ocurrieron de manera paralela con agro exportador y este trecho en que se habla de nuevos
las ya mencionadas modificaciones funcionales del productos agrícolas. ¡El grano de oro, el café, no pue-
Estado. O sea el Estado desarrollista es resultado y de ser sustituido! Algunos de los nuevos artículos ya
condición del nuevo momento de desarrollo; ya no estaban in nuce en las economías de la región, tales
sólo fue el guardián del orden público sino un factor como el azúcar de caña y la carne de res cuya produc-
que recogió a través de sus instituciones los estirnulos ción viene del período colonial. Fue necesario sin
económicos del exterior y actuó como garantía y apoyo duda otro clima originado por la demanda internacio-
de los nuevos intereses empresariales. Como ocurre nal, básicamente Estados Unidos, para que tales rubros
en sociedades duales, con una estratificación profun- encontraran condiciones poderosas e inmediatas de
damente desigual, el crecimiento del PIB que durante expansión. Primero, fue la urgencia de la demanda
1.8 años (1.959-:1977) se mantuvo en un promedio del algodón, resultado de la crisis egipcia de los cin-
anual regional del 5 -3 %, produjo resultados desiguales. 29 cuenta, la que encabezó el ciclo modernizador y luego
N o fue la sociedad centroamericana in toto la que se siguieron en tropel la producción de carne de res,
azúcar, cardamomo y otros productos como el ajonjolí.
Algunos datos cuantitativos revelan la magnitud
G. Williams, ExportAgriculture and the Crisis in Centra/A merita,
de los procesos de modernización agraria. En Guatema-
The University of North Carolina Press, Chapel Hi1l, 1986,
Victor Bulmer-Thomas, La Economía Política de Centroa/sérica la la superficie con cultivos de algodón se decuplicó
desde1_92o, Banco Centroamericano de Integración Económica, entre 1.950 y 1.963, creciendo la producción en diez
San José, 1.989; Carlos Vílas, Mercado, Estadoy Revoluciones ... , años de 5 mil pacas anuales a más de 250 mil, para
op. cit., y Charles D. Brockett, Land, Power and Pouerty..., oJi. alcanzar en :1979, 745 mil pacas producidas en :186
cit. plantaciones. Nicaragua fue el país de más vertiginoso
28. Sieca, Series Estadísticas S~¡eccionadas de Centroamérica)' crecimiento algodonero al aumentar la tierra dedicada
Panamá, Sieca, Guatemala 1.973. Se trata de un promedio
a este cultivo de menos de 24 mil manzanas en 1.950
simple a precios constantes.
a 259 mil en 1.973 y saltar la producción de 20 mil
29. Cepal, Boletín cincuenta años de estadísticas 1950-2000,
Santiago, 20°3. pacas a comienzos de los cincuenta a 565 mil a fines
1. segunda posguerra: Ni democratización ...

C1IJladLro años setenta, produciendo primero 30 mil pacas


CENTROAMÉ1!UCA: AGRICUlL TUnA 'rRADICIONAL y luego 332 mil anuales en las fechas señaladas.30
DE EXPORTACIÓN. 1948-:1978
La producción de algodón fue importante pero
Banano
10 fue más productividad por hectárea que
¡- 1948-52 1974
canzó comienzo de los setenta en Guatemala el
segundo promedio más alto dd mundo, El Salvador
cuarto y Nicaragua el sexto.31 Sin duda en este re-
sultado están presentes factores naturales (tierra,
humedad, temperatura) propios de la costa del pacifico
centroamericano pero también el resultado de una
con'1.binaciónde uso de maquinaria compleja, fertili-
zantes" créditos, infraestructura vial y eléctrica, una
Café LUU utilización de mano de obra barata en la
..Hw,a¡

I 194fB-52 1978 del corte. El uso de fertilizantes nos dio la transitoria


País I Región l' Área" I Produc- 11, Rendí- Área Produc- alegría del primer lugar productivo, que apresuró la
¡___
• i 1I
,ción I miento CI01'1 miento U'I..A.J.'UH del suelo. Y no menos importante y como
I Costa Rica
~I ------~
I 51 l' -231
454 SS i 95 i
'IL---~~-----~~·---------~----,------4-------'
i 119 I síntesis, el estimulo desmesurado dado por el Estado
Ei Salvador 11Z I 75 ! 565 147 \ 132 ! 8941
ya través suyo, por el Banco Mundial y varias agencias
I Guatemala I 162 I 58 I 355 248 i 1391-- 59~
tecnológicas que forzaron las aptitudes mínimas
I Honduras I 63 ! 13 I 2071 125!-s;s-i- 475,
1¡-N-í-Ca-r-ag-u:.:::a----I·f---:.:56:..·r---·-2-0-l---~-4:...:.8-+i 90 I 501==_ 661 I Estado promotor. Sin el poder de algunas instituciones
¡ Centroemérica : 4441 188 405 1 695 I 48~i 748 I Estado generando iniciativas, garantizando crédi-
Área en mííes de hectáreas; en mues de toneladas métncas: tos y cumpliendo funciones de asesoría no
rendimiento banano, cientos de kilos por hectárea; rendimiento café, k¡¡o~ sido posible, sobre todo, la explosión algodonera de
por hectárea. Para efectos téngase presente el rendimiento
comparativos,
del banano en Ecuador (1948-52: 1.19; 1974: 175) y café en Brasil (1948-
52: 407; 4(0). Elaboración del autor basándose en la infcrmación del 30., WilHams, op. cit., pág. :1:97. La concentración de la
StatisticaJ Abstrae! ot' Latín Americe, 1980 y 1982, diversos cuadros. hacienda algodonera en Guatemala contrasta con la "democra-
de la producción en El Salvador y Nicaragua donde
también hubo parcelas algodoneras. El promedio de la hacien-
1.970< extraordinario
da algodonera en Guatemala fue de 439 hectáreas, en El Sal-
algodón sin limpiar era producido en 5,928 unidades
vador JO y en Nicaragua de 36 hectáreas.
En las tam- 31. La Costa del pacifico centroamericano no necesitó
en tamaño y cantidad, ción y se convirtió por la fuerza de las leyes del mercado y la
queñas plantaciones, voluntad del Banco Mundial en una importante zona de co-
y a3 momento a mercio. Cf: Economi« Researcb Seroice, Statistics or
1.2 citado por WiHiams, O/J. cit. pág. 200.
1.1.6 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

Cuadro 2 someterse a estrictas medidas de producción que una


CENTROAMÉRICA: AGRICULTURA NO TRADICIONAL vez satisfechas posibilitaron que sólo en la década de
DE EXPORTACIÓN, 1948-1979
los sesenta en Guatemala las exportaciones se mul-
Caña de azúcar
1948-52/53 1978
tiplicaran por ocho y pasaran de :1.9millones de libras
País / Región Área Produc- Rendi- Área Produc- Rendi-
en 1.961.,a 35.3 millones en 1.979·
ción miento ción miento* En El Salvador no fue importante este rubro, al
Costa Rica 21 827 391 44 2437 558 contrario de Nicaragua donde la hacienda ganadera
El Salvador 13 763 587 41 3200 775 se renovó en cantidad y calidad y triplicó la superficie
Guatemala 16 358 376 77 5436 705 entre 1.960 y 1.975.Ya en 1.961.producía 1.4.5millones
Honduras 22 560 250 73 2300 325
de libras que llevó a 76.6 millones en 1.979.En 1.970
Nicaragua 16 627 401 45 2706 608
este país exportaba casi e140% del total centroamerica-
Centroamérica 88 3135 402 280 16079 594
no. Dos anotaciones aclaratorias completan esta su-
Algodón
maria visión del proceso. Terminamos hacia 1.979
1948-52 Producción porque es el año que precede a la tormenta de la crisis
País / Región Área Produc- Rendi- 1970 1975 1977 1979 económica internacional (o de la deuda externa) y
ción miento cuando algunos de los efectos vinculados al shock pe-
Costa Rica - - - 1 1 7 4 trolero ya se manifestaban plenamente. Y porque este
El Salvador 21 8 3.6 46 78 66 72
es el año clave en el desencadenamiento o expansión
Guatemala 5 2 3.2 57 105 137 146
de la crisis política.32
Honduras - - - 3 5 6 8
Nicaragua .. ?1 ..
8 3.8 67 123 ...118 109
El tercer producto renovador fue la caña de azúcar
Centroamérica 47 18 3,5 174 312 334 339 que estos países producían perezosamente para su
(*) Área en miles de hectáreas; producción en miles de toneladas métricas; consumo interno desde siempre, lo que facilitó partici-
Rendimiento en kilos por hectárea. Para efectos comparativos, téngase pre- par en el boom que produjo la repartición por parte de
sente el rendimiento de la caña de azúcar en Cuba (1948-52/53: 419); y del Estados Unidos de la enorme cuota cubana, a comienzos
algodón en Argentina (1948-52: 2A). Cálculo de la producción de caña de
de los años sesenta. La producción de azúcar fue par-
azúcar del período 1948-52/53, elaboración del autor basándose en la infor-
mación del Statistical Abstrect of Latin Americe, 1980 y 1982, diversos te explícita de la política kennediana de estimular
cuadros. cambios en el agro regional. 33 La superficie cañera

la que ya se dijo era un cultivo estimulado por fertili-


zantes, por políticos y por el Banco Mundial. 32, Recuérdese que la crisis del conflicto y la guerra empezaron
La exportación de carne de vacuno, no fue sólo antes de 1:979en Guatemala, que ese año triunfan los sandinistas
y el Farabundo Martí recién lanza su ofensiva en 1980. Pese
directamente estimulada por la ampliación dela cade-
a esas escasas diferencias el año 1:979 es clave en el análisis
na de restaurantes californianos de "comidas rápidas" económico y político.
como es usual admitir. De hecho la exportación debió 33. La modernización agrícola estuvo ligada a la voluntad del
La segunda posguerra: Ni democratización ...

en !..a.'ví~.YH cañera se constituyó en el inicio con


ces y ]9 misma tierra que ya tenía" pero modernizando técnica-
toneladas en 1.950 y Juego 6] mil hacia :196].34 mente la vieja finca azucarera al convertir el trapiche
en urr ingenio eléctrico. Solo después se amplió con
tre 1.961./65 Y Salvador pasó 1..062 a] otras tierras. La actividad ganadera, a su vez, tuvo
de toneladas de caña de azúcar para fechas S1-' desde el comienzo una orientación expansiva y como
el ganado donde hay pasto yagua, se Iocalizó en
los diversos sitios, propios o ajenos, devorando
importantes zonas de economías campesinas o destro-
<.u.'.,-.n,," extensiones boscosas en Nicaragua y
y Guatemala. Antes del boom, a fines de los cincuenta,
respectivamente. Fueron importantes los niveles de había en Centroarnérica 4.7 millones de cabezas apro-
en tres tanto en xirnadamente, en ].434 miles de hectáreas.
V'~'t.c..Hl.'ua por hectárea como en el vo- de años setenta había casi 1.1.millones cabezas
variedad de caña.35 de ganado bovino pastando en 8.080 mi! hectáreas.·36
Pero algodón el que frente a una demanda
urgente necesitó arrebatar la tierra fértil y húmeda
del Pacífico. Pronto encontró esa tierra y ahí se
plantación algodonera, en la modalidad.
gran.des extensiones en Guatemala, según la mejor
consumidor norteamericano. El destino de nuestra carne tradición terrateniente de esta sociedad y en fincas
nunca a la de un cardan Mue en restaurantes grandes" medianas o pequeñas en El Salvador y
de.5 tenedores, sino que fue apenas carne molida, caragua. Fue en este último donde las mejores tierras
'j ras .o.amourguesas
ce '- 1 para consumo de gente de a
con cultivos campesinos de productos de consumo
dos modos fue una est'Os cuym;
se convinieron a través de métodos violentos,
se modernizaron bajo las exigencias de estrictas
medidas higiénicas a satisfacer. No resulta casual que la C'O·· 'con la ley y o sin eHa, en plantaciones algodoneras.
misión haya recomendado aumentar la cuota, que La producción de maíz de León y Chirrandega se
en ya se le había a Nicaragua. transformó en algodón con menos violencia
34. ? Bmwning, pág. 225 citado por Vilas, 0,1). cit., pág .. p" iguales resultados. La obsecuencia del Estado fue de-
cuadro B.l.. cisiva en la construcción de carreteras, habilitación
The Central de puertos, electrificación, créditos, policías y
W/orking Paper No. :LP, Larin American Program,
\)(711s'On Cerrter, Washington, 1.984, pág. 1.80En Centro amé-
rica se 'Obtiene alrededor de cien kilos de azúcar p'Or una cis., pág. 1.17 YSieca, VII C omj,endio estadistico,
t'Ondada de caña. cuadro 8B ..
1.20 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 1.21.

dos. Gradas a su poder servicial se facilitó la apertura de El Salvador se estimó en un 43% y en 1.976 en 47%
de nuevas tierras, la obediencia de los campesinos y el sub empleo, para entonces el más alto de América
las necesidades técnicas que el algodón demandaba. Latina según la OlT. En Nicaragua, en tiempos similares,
Una vez más los finqueros y sus expertos -por el empleo pleno sólo alcanzaba cuatro meses. al año
su euforia o por su impericia- no advirtieron que la y las tasas de desempleo para el resto del año variaban
demanda de los productos locales en volumen y precios entre un 1.3% a un 42%.38 La oportunidad de un sa-
llegaban imperativamente desde el exterior y que la lario frente a una creciente oferta sólo aparecía en las
ganancia local giraba en torno. a la disminución de los épocas de zafra de los productos de exportación, que
costos de producción, donde el salario es un componente llegó a necesitar más de un millón de trabajadores
esencial, y no necesariamente de aumentos en la pro- estrictamente estacionales. La crisis del modelo empe-
ductividad. Según algunos no hubo suficientes esfuer- zó con el infarto en la producción del algodón. Los
zos en la incorporación del progreso técnico para daños al medio ambiente, irrecuperables, implicaron
mejorar los rendimientos, una vez más fueron los bafos una catástrofe humana también.
salarios) elfactor trabajo, lo que operó como responsable de la Júzguese que el número de trabajadores transito-
alta ganancia empresarial. rios en el algodón pasó de los primeros momentos de
N o se aplicó la estrategia de agregar valor al pro- :15mil a 350 mil a la mitad de los sesenta y luego subió
ducto exportable, es decir, hacerlo pasar por procesos a los 400 mil a finales de la década. Sin embargo, este
que lo convirtieran en algo más que pura materia pri- fue un empleo estacional que en su mejor momento
ma; con el café, por ejemplo, se pudo vender una parte solo llegó a dar trabajo estable al 0.6 % de la PEA re-
como café soluble; con el algodón un buen porcentaje gional rural por el nivel de mecanización que alean-
en fibra o hilo manufacturero, el azúcar, refinado; en zó.39 Comparativamente la ganadería era el sector que
general practicar lo que se conoce como los forward menos empleo exigió; el algodón demandó seis veces
linkages, un movimiento hacia delante para hacer pasar más mano de obra por área. El azúcar siete veces y el
a los comodities por una fase industrial. Ese valor agre- café, trece, todo ello en épocas de zafra.4o No hay
gado hubiese quedado en el mercado nacional. información suficiente y comparable con respecto a
En los inicios de los años setenta, el Banco Mundial los niveles de salario pagados en esa época pero que
estimó para Guatemala, el desempleo rural en 42 % nunca dejaron de hacerse conforme la tradición oligár-
Ya comienzos de los ochenta señaló que tres cuartas
partes de los campesinos sin tierra no tenían un empleo
permanente. 37 Alrededor de la misma época el potencial 38. Diversas fuentes citadas por Ch. Brocket, op. cit., pág.
de empleo a tiempo completo para la población rural 87-88.
39. R. Williams, op. cit. pág. 61
40. J efrey Ashe, Rural Development in Costa Rica, ACCION Inter-
37. Citado por Ch. Brockett, Land, Power and Poverty, op. cit., national, New York, 1978, pág. 15 Y R. Williams, op. cit., pág.
p.87· 117·
1.22
stn La segunda posguerra: Ni democratización ... 1.2.3

Cuadro S
Tn;RRA DEDICADA A PRODUCIR AUMENTOS Y
PARA EXPORTACIÓN, DIVERSOS ANOS
(Miles de hectáreas)
[------¡
Alimentos E)(portaciól
costa041 t--------4
Ir--------t-
País ¡ !..948-52@ti3!1981-83 1948-5211971-731
rápido crecimiento las
acompañó de una baja relativa en
I El Sal\lado__:: l 233 I 258 I 328 242 L 386 II
I Guatemala_l' 644 I 881 i 912 219 I 515 !

alimenticios de consumo interno de granos I Nicaragua I 166 I 323 I 315 128 I 326
¡

arroz. Numerosos datos Los alimenticios son frijol, arroz maíz, '1 para Guatemi¡!a incluye
C4~~"",Wa. a tdgo; los cultivos de exportecíén son banano, café, algodón, sorgo y azúcar.
Fuente: FAO y Brockett [1988: 55].

das con tierra ociosa en áreas productivas; la incor-


aumentó potación de las zonas tradicionales de aparcería y
tendencia en tercero, la directa expropiación de mirrifundistas,
Sa~v~dor"La producción per cápita propietarios en precario o con el titulo "perjudicado",
'op auio
se
-"-~U 'J
8 en 24/0O/ en 4.2'LnJat?mal~
r< o
.r>

---- _a, :Ij0J'/0 ~en- -N"lcaragua y


-
o con dificultades para probar la propiedad.
Salvador." Los efectos fueron devastadores siempre rasgos propios de la violencia
de población pobre, ra miedo con hambre, como OCULte
para la balanza - . desconocer viejas prácticas tradicionales de arrenda-
miento que vinculaban patrirnonialmente al campe-
sino con el terrateniente.
La existencia de la frontera agrícola, lejana y no
integrable fácilmente, jugó un papel importante en
'Nicaragua, menos en Guatemala y ninguno en El
Salvador. Los campesinos expulsados por diversos
,..,.,.nr,,",,,, encontraron refugio transitorio en las malas
esa frontera, hasta que apareció la ganade-·
casi 600 mil -personas. ;>.{lo ciue signi
1._
el' _~. ¡
. .1.
.
Ld.:-amas
o
na
P

tam bilen
, esas tierras
. . 1es.',13 nn
margina re

mundial como porcentaje del total constitución de la plantación algodonera y/o la ha-
cienda ganadera y azucarera hubo dolor campesino,

43 ..El tema se encuentra documentado en R. WiHiams, Bx_port


A,gp'iculture and tbe Crisis ... s op. cit., cap. 6 y 7.
1.24 Revoluciones sin cambios reuolaoionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 1.25

masivo, sin apelación. Las zonas del pacífico por su 28%.46 En Guatemala las microfincas, parcelas me-
ubicación y clima fueron favorables para los tres pro- nores de una hectárea en :1979, aumentaron 46% en
ductos, aunque los ranchos ganaderos ocuparon tam-
relación con 1.950, lo que muestra un deterioro
bién otros espacios. La violencia también fue cultural, contrastante pues ocurrió sobre todo después del au-
porque para decenas de miles de medieros y aparce- ge de las plantaciones de la costa.
ros fue terminando así una vieja relación social que No pueden dejar de recordarse los daños que la
los explotaba pero les daba seguridad.
agricultura de exportación provocó en el medio am-
La concentración de la tierra es un dato conocido. biente. Por ejemplo, solamente entre :1948 y :1978 el
En los años de 1.970 en El Salvador el 1..5%del total bosque tropical se redujo en un 50% enlos tres países;
de fincas más grandes acaparaban el 45.5% del total la tierra y los trabajadores fueron afectados por un
de tierra en finca; en Guatemala la relación era de neurótico uso de agroquímicos (piaguicidas, fertili-
2.6% de fincas con el 65.5% de tierra y en Nicaragua, zantes) que también ocasionaron otros graves daños
de 1..8% con 46.8%. En el extremo opuesto, en El .
ecológicos y secuelas letales en 1a po blaci , 47.
acion.
Salvador, e192.2% de parcelas menores a una hectárea Los cafetaleros no dejaron de ser nunca los actores
apenas tenían el 21...3% de tierra en finca; en Guatema- centrales del proceso como tampoco fueron ajenos
la el 88.:1% ocupaba el :16.2% del total y en Nicaragua. al proyecto de desarrollo industrial, parte de su extenso
la relación era de 4.3.8% a 2.2%.44 La reducción de la marC(~dominante y a partir del proyecto de integración
propiedad campesina fue más intensa después de 1.965, económica regional. El reiterado sueño político de la
cuando el crecimiento de los nuevos productos expor- unidad centroamericana parecía ahora concretarse
tables fue mayor.45 En Nicaragua, las fincas subfami- por una vía más pragmática. Ya en los cirrcuenta apa-
liares crecieron de .35% al 50% del total de fincas, . recieron oportunidades y estrategias locales de fomen-
mientras que las familiares disminuyeron del .37 al to industrial; también se firmaron numerosos acuer-
dos bilaterales de naturaleza comercial entre estos
países. LQdecisivo fue el clima de cooperación regional
con un programa de integración económica de base
44. Este dato de Nicaragua es incompleto. La información industrial.
censal no permite comparaciones exactas, pues la gran propie- Sólo se hacen breves referencias al tema de la in-
dad en El Salvador, por ejemplo, se calcula con base en fincas
mayores de 50 hectáreas, en G{¡atemala a partir de 45 yen
Nicaragua de 350 hectáreas. Igual ocurre con la pequeña 46. Diversos autores citados por Vilas, Mercado, Estados y
propiedad. Los datos tienen un valor comparativo intrana-
Revoluciones, op. cit., pág. 56.
cional. Charles D.Brockett, Eand, Power. .. , op. cit., cuadro 4.1. 47. Una fuente de datos útiles se encuentran en Flacso-IICA,
45. A. Hintermeister, Modernitflción de la agricultura y la pobreza Centroamérica en cifras, San José, 1991, págs. 39-41 y Santiago
rural en Guatemala, Santiago, OIT/PREALC, 1982, pág. 24 Y Ruiz Granadino, Crecimiento de laproducción agropecuaria y cambios
sigs.
en la estructura rural de Centroamérica, ICADIS, San José, 1986.
La segunda posguerra: Ni democratización... 1

aumento del ingreso popular y abaratando


productos ahora fabricados internamente.
no procederse así un periodista lleno de humor
proceso como la integración de "mercados

producción agrícola cuadruplicó su


millones de dólares en 1964 a 2,384 en
la producción industrial lo hizo nueve
de 169 millones a 1(,40? en los años
consecuencia el valor de la producción
en 1964 equivalía al 26% del valor
agrícola se incremento 21.159% diez años
nuevos impulsos ocurrieron con
urbana, y en el área de servicios,
e infraestructura. La diversificación
formarse un pequeño sector de trabajadores
descomposición de una parte del artesana-
estableció los orígenes de un pequeño
urbano, así como la ampliación de mtere-
ses de un sector de la burguesía en el interior de
tradicionales.
el empleo no creció a la tasa en que
productividad, una fuente de crecimiento se
~ contribución del sector manufacturero
visiblemente de 66 millones de dólares
en en El Salvador, a 326 millones en 1(975;
98 a 403 millones en Guatemala y de 26 a 1.98U.ULu.'-n.,,-,.
en para ese periodo. 50 Entre 1.960 y

49. Información para toda Centroamérica, Cepal, Series His-


Ha sido calificado como un proyecto de toricas del (~~rec.imie~lode.Arsérica Latina, Santiago, 1.978, cuadros
mercado común cuando realidad solo fue una zona de libre
7 y 8.
para alcanzar cuadro 14 y Flacso/nCA, Centroamérica en cifras San
1.99:1. págs. 72 y 73. Datos en dólares de 1.970,
1.28 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 1.29

el crecimiento promedio de la agricultura de exporta- temala y El Salvador y posteriormente de Costa Rica. 53


ción como porcentaje del PIB fue de 6.0 para El N ótese que la guerra entre Honduras y El Salvador
Salvador, 5.6 para Guatemala y 7.1.para Nicaragua.51 apartó la economía de aquel país por varios años, di-
En la región el peso del sector secundario en el ficultó igualmente el comercio intrazonal en su con-
PIB fue en 1.950,de 1.7%ypara 1.970ascendió a 23.3%, junto y exhibió quienes eran los países ganadores y
vale decir, ocupando un segundo lugar en el ingreso perdedores. En el interior de ellos, eran inversores
nacional. Con ánimo ligero muchos hablan ya de so- extranjeros los dominantes.
ciedades en pleno proceso de industrialización, ol- Hoy día se sabe, sotto uoce, que la estrategia de la
vidando que ese valor relativo se ha prolongado hasta implantación industrial tenía el propósito de sustituir
2005, arrastrando poca inversión de capital nacional, los viejos impulsos del sector agrario tradicional, ba-
siempre produciendo bienes ligeros, con componen- sado en las exportaciones de café. Las propuestas de
tes importados, alta capacidad ociosa, baja generación Cepal que inspiraron en América Latina este modelo
de empleo. El mayor problema fue la limitadisima de desarrollo hacían énfasis en la superación de la
demanda interna local resultado de dos efectos perni- etapa basada en la agricultura por una apoyada en la
ciosos: una oferta de precios más alta que los productos industria. 54 Ésta, además produciría diversos efectos,
importados por la protección arancelaria y una de- dos de los cuales se hacían explícitos: absorber la ma-
manda débil resultado de la extendida pobreza, en no de obra redundante en el mundo rural y mejorar
cuyo interior siempre agonizan grandes sectores no la relación de los términos de intercambio gracias a
remunerados. . la redistribución de los frutos del progreso técnico,
Otra fuente dinámica fue la creación o renovación adversos con la exportación de bienes primarios. Y
de los servicios vinculados al comercio intrarregional
y su crecimiento, que pasó de 25 millones de dólares
en 1.955a 56 millones en 1.960. En 1.970 el total era 53. Abundante información sobre estos temas aparece en la
de 287 millones; en 1.975,de 543 millones yen 1.980 numerosa bibliografía producida por la Cepal, tanto en San-
había alcanzado la cifra de $1.,1.73millones. 52 El creci- tiago de Chile como en México; en diversas fechas; importan-
tes análisis se encuentran en los trabajos de V. Bulmer-Tho-
miento manufacturero y el intercambio comercial
mas, La Economía Política de Centroamérica ... , op. cit., págs.
beneficiaron especialmente a los inversores de Gua- 224-260; C. Vilas, Mercado, Estadoy Revoluciones ... , op. cit., págs.
69-77; J. Dunkerley, Power in the Isthmus ... , op. cit., pág. 171-
211;]. Weeks, The Economies ifCentraIAmerica ... , op. cit., págs.
51.]. Weeks, The Economies if Central America ... , op. cit., págs. 1.3°-15°·
62-67. . 54. La bibliografía sobre la estrategia industrial aparece en la
52. FlacsojnCA, Centroamérica en Cifras, op. cit., pág. 75. Obvia- nota anterior, pero vale la pena referirnos a las ideas primige-
mente las cifras del comercio intrazonal empezaron a caer. nias de Prebisch, tal como "Commercial Politics in Underdeve-
En 1986, el peor momento de la crisis, el comercio sólo fue loped Countries" en American Economic Review, Vol. 49, págs.
de 343.8 millones,inferior al de diez años atrás. 251.-73·
La segunda posguerra: democratización ...
-----------------------------

que también se importaba.


ocurrió
crecirniento del que se viene hablando se
en un tercer factor que suplió la ceguera del
centroamericano, la prudente inversión externa.
3 millones de dólares en :1959 a
en :197°, pero con los efectos de
hacia :1985 bajó a 298 millones de dólares.56
mediados de los setenta se dispuso de recursos
provenientes de la abundante oferta de
en condiciones relativamente favorables.
oferta de recursos financieros externos
tanto como apoyo a la
corno estimulante del sector manufacturero.
alcanzó niveles de endeudamiento externo
pero qu~: solo fueron perturbadores
segundo aumento en el precio del petróleo
se apreció con toda su gravedad
de auge exportador hubo que
a pagar no había dinero. Es esta la llamada crisis

dramático que el endeudamiento externo


aumentara a mayor velocidad que el crecimiento. Ld ..l.L1l..'-

la deuda nicaragüense se
veces, en El Salvador nueve y en Guatemala
cuatro. ambos años y en el orden de los paises

55. V. op. cit., págs. 244-245.


56. Datos tomados de Flacso-nCA, Centroaseérica en San
1.99:', pág. 87·
57. Bulrner T'homas, La Economía Política..., op. cit., págs.):17
y sigs. Y los trabajos de X. Gorosriaga, P. Marchetri y E. To-
rres-Rivas en Nora Hamilton et al., Crisis in CentralAtl'lerica)
"""a·""~'" and us Policy in tbe 80S, Westvie'N
págs. 11.9 y 137 respectivamente.
132 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 1.33

mencionados, la relación porcentual entre deuda 3·


pública externa y ganancia por exportaciones fueron NOTAS SOBRE ALGUNOS CAMBIOS
de 73 a 1.,084; de 28 a 239 y 44 a 176.58 Sólo en los EN LA ESTRATIFICACIÓN SOCIAL
últimos seis años la deuda creció 160% en Guatemala
y El Salvador y 258 % enNicaragua.V Al inicio de los Durante estas dos décadas la economía centroameri-
años ochenta la crisis de la deuda trastornó rápido el cana creció de forma sostenida, dejó de ser una sociedad
.status quo agroexportador y lo hizo entrar en picada. cafetalera, alcanzó a construir una manufactura de
El otro factor fue coetáneo, cuando se fueron bienes de consumo inmediato, se amplió el sector
venciendo los plazos de la deuda externa y el sistema comercial y de servicios y sobre todo el sistema banca-
internacional exigió su pago en medio de la crisis. rio y financiero; el mercado se monetizó más; creció
Ella llegó al corazón del sistema financiero yexporta- el comercio internacional y la región se convirtió a sí
dor local, interrumpió el ciclo de crecimiento al abatir misma en el segundo destino de sus exportaciones y
la demanda y los precios. No hubo tiempo para que el intercambio creó fuertes lazos de interdependencia.
algunos efectos positivos dejaran su huella más allá Aumentó la inversión extranjera. Hubo creación de
de la piel de la sociedad. La crisis económica internacional riqueza y extrema insensibilidad para compartirla con
o de la deuda externa llegó del centro del sistema; inte- los pobres; el modelo finalmente se definió por su
rrumpió el proceso de modernización de la sociedad éxito relativo en la producción material y por crear
centroamericana, especialmente en la agricultura de más desigualdades. En esos años los fermentos de la
exportación, impidiendo la consolidación de las nuevas crisis revolucionaria se manifestaron como incremen-
formas productivas. La conclusión de todo cuanto se tos en las luchas sociales y con respuestas de resisten-
viene diciendo es que el ciclo crítico se fortaleció con cia violenta; fueron aciagos tiempos de huelgas obreras,
el crecimiento económico y no con su crisis. conflictos campesinos, diversa expresiones de movili-
zación y represión política. Estos movimientos repro-
ducen los cambios habidos en la estratificación social.
La modernización económica entendida como
desarrollo de las fuerzas productivas genera diversifica-
ción en las relaciones clasistas, a tono con los cambios
en la división social del trabajo; y aparece una multipli-
cación de intereses adquisibles, universales, más defi-
58. Para el caso de Nicaragua este endeudamiento es uno de nidos en el mercado. Recuérdese que las clases solo
los múltiples resultados de la crisis que el gobierno sandiriis- se reconocen en la política, que en estas décadas se
ta experimentó consecuencia de las políticas norteamericanas
practicó en expresiones violentas, como crítica al sis-
bajo la administración de Ronald Reagan.
tema; las luchas sociales del período se acompañaron
59. Charles Brockett, Land, Power and Poverty, op. cit. pág. 64,
Cuadro 3.8. , de nuevas formas de asociación, participación y con-
Reuoiuciones sin cambios reoolacionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...
_--------- -------,----_._-----------

osurgieron y social basado sobre sus propios principios específicos


les drversas, expresiones encontradas de valores y de desigualdad social. 61
es un producto población total de Centroamérica era de
U-,--uL',-_n"-.-.,, en 1.950 y 30 años después era de
' .•!..!__
UL'U~J''-'' con un 1.6% urbana para aquel año y de
bios sociales supone que esos resultados no existen; en 1.980. Este salto fue muy importante porque los
historia niveles culturales de la región en el ambiente
62 .
son mayor atraso y mayor pobreza. Nicaragua
con rnayor proporoon de población urbana con
objetrviza los en los actores y en 54 CYó, del total y Guatemala con la menor con 38% a
las masas, perfila los intereses clasistas; y la ideología finales de los años setenta. Hacia 1.970, 20% de la
y U~."''-LU.'-'. más pobre sólo recibía 4_9°/() del ingreso
U_",,",J.V'-.aa.~ en Guatemala y el 3 .7% en El Salvador.
la PEA urbana pasó de 575 personas a
Numerosa bibliografía se refiere al tema. Reciente- 131.5mil en Guatemala en la década mencionada (1.970)
Engerman y Sokolof señalan q_ue es el trecho en que crisis revolucionaria se
los tales arios, el número creció de 506
a mil en El Salvador y de 2-7"2 437 en
63
J\licaragua. La población alfabeta en 1.950 era 29%
para Guatemala y 38% para Nicaragua y El Salvador;
en 1.975 tres países se había aumenta:io este
1.HU.L'~'- a ,57% y 62% respectivamente. 6

61. Moore, La it:iusticia: bases sociales de la obediencia


la
)1 ISUNAM, México, :1989, pág. 92-
62. Los documentos de Cepal de la época insisten en este
punto, pues las economías campesinas son de muy baja pro-
sin acceso al crédito, a la tecnología y al mercado,
econémico y social de América Latina, Santiago, 1.6-

Cambridge, MA, 2002. Este tema aparece: también en los 63. Flacso-HCA, Centroamérica, la crisis en cifras, ed. HCA,.San
trabajos de Durrkerley, \JV'illiams,Paige, Vllas, Bree- José, 1.986, págs. )6 y 174.
kett otros, citados en diversas de este Iibro. 64. Banco World Deeelopmen: Report :1.980.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 137

Las ({clases" medias ción sociales, cuya simplificación Charles Tilly calificó
como "postulados perniciosos"; sugiere examinar los
Frecuentemente se dice que el cambio se manifiesta fenómenos partiendo de la noción de que sólo aquel
como diferenciación social, como la expresión de la cambio que aumenta la diversidad de formas sociales,
división social del trabajo. Sin duda que a mayor creci- que presenten conexiones duraderas entre sí pueden
miento económico aumentan en el interior del sistema ser considerados positivamente como diferenciacio-
los papeles profesionales nuevos, técnicos especializa- nes reales.65
dos funcionalmente. Los cambios en la estructura de Los cambios en la estructura social se suceden
clases solo en el largo plazo pueden explicarse como con ritmos apresurados, dependiendo de los vaivenes
resultado de modificaciones económico-sociales, con de los procesos de diferenciación eintegración económi-
la diversificación de las fuerzas productivas. En la co-social. Se reconocen mejor en momentos de crisis,
perspectiva que estamos manejando todo lo anterior que pone a prueba la calidad del ascenso vertical y de
puede ser cierto, pero es a través de los mecanismos la cohesión social alcanzada. No todo, ni siempre, se
de la movilidad social ascendente donde se encuentra explica por cambios económicos o políticos; las expe-
más fácilmente la explicación de las modificaciones riencias culturales alteran las percepciones de las re-
de la estructura social, relativa a las clases medias. La laciones de producción y del sentido de la vida; los
movilidad es cambio de status, vacilante por lo general, conflictos sociales yla intersubjetividad de los grupos
permanente en el largo plazo. más independientes producen cambios que la ecorio-
La movilidad social que interesa no es la individual mía no explica. Por ejemplo ¿por qué son los profesores
~inola estructural, la que experimentan grupos sociales y estudiantes, sectores medios ayer conformistas y
Importantes de manera más o menos definitiva para ahora radicales, los que han actuado como vehículos
que se transmitan de una a otra generación; el hijo de la protesta? No es porque mejoraron su ingreso o
?eI o?rero bien pagado va a la universidad y así en el perdieron su salario, sino por que ganaron autonomía
interror de una generación se produce el "salto", el cultural y política. Ello significa tener iniciativas,
ascenso, la distancia social que se recorre, que se reco- atreverse a desafiar el orden, manejar información,
noce como la multiplicación de intereses políticos, que son cualidades que un subordinado no tiene.
en las apetencias culturales, la obtención de la ciudada- El tumulto y no la marcha ordenada que ofrece
nía política. Es por esas razones políticas y culturales el surgir de los segmentos medios como estilo de par-
que son importantes las "clases" medias, que no son ticipación para ganar espacios en la sociedad, se expli-
clases y solo son agrupamientos humanos que tienen ca por el volumen de sus ingresos,los nuevos ámbitos
condiciones parecidas de vida social, el trabajo no
manual, el consumo, los grados de cultura.
65. Charles Ti1ly, Grandes Estructuras, ProcesosAmplios, Compara-
Pareciera que el eje explicativo, en último té;mino,
ciones Enormes, Alianza Universidad, Madrid, 1:991, págs. 18,
recae en la dialéctica de la diferenciación e integra-
69 y 70.
8
La segunda posguerra: Ni democrat1zadórL .. 1..39

la industriahzación, en el crecimiento de la burocracia


nuevas ocupaciones liberales, en los cambios
. su
de posición, en los accesos fáciles a la propiedad
sobre otras
, expansión de mercados, extensión
fundon.arios
de la educación, en las ofertas que llegan del exterior. 66
Recordamos que en las sociedades de reglon,
cambios y los tiempos no son los mismos.
Aquí que mencionar a los profesores y estu-
diantes, burócratas y empleados medios cuya acrua-
ción corresponde a un patrón reconocido, de ser
en algunos periodos los vehículos del descontento"
los sujetos deIa epifanía revolucionaria, lo cual signifi-
ca que en el inicio un impulso abrumador, una
conciencia anti status qua que los lleva a defender posi-
dones rupturistas. Su número no importa ya que son
.i!. .!._

mayoría poHtica.67 Los estudiantes del medio urbano


especialmente de la universidad fueron rebeldes de
forma numerosa y muchos desembocaron en las filas
guerrrlleras. Los estudiantes universitarios inscritos
en 1.970 eran 35,028 y en 1.979, 89,623, en tres
paises.68
Hubo, a partir de los años cincuenta, reformas JI
ampliaciones en el sector público (y de los entes des-

66. No existen datos numéricos sobre los estratos intermedios;


en Guatemala se ha hecho una aproximación estadística de
la agrupada en ese nivel para í989, 2000 Y 200í,
a los que corresponde el 8'7%, el :1:1.7%y el í5.5°/iJ del total
respectivamente. En cifras absolutas para esos años, 749.7
í.J23-3 Y 1.,847·í mil. lNDH, PNUD, Guatemala, 20°5, pág.

décadas del crecim---~ ienro =c " ' . . 9.5·


- .s e onomH::O,
67. Véanse los cuadros que acompañan la sección relativa al
Estado desarrollista más adelante.
68. Flacso-trc.A, Cestroamérica en cifras, op. cit., cuadro 12), p.
2:12.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

centralizados) como resultado de la paulatina cons- los tres países y en 1.979, 51.,71.5; y del nivel medio
titución del modelo estado-céntrico de desarrollo, para iguales años pasó de 1.0,)01. a 15,360. Lo anti-
que adelante denominamos Estado Desarrollista; hu- institucional de su militancia se origina en su relativo
bo también una notable expansión del comercio y de alto nivel de información y conciencia, con funciones
los servicios privados, que reclutó mano de obra rela- mal pagadas y con un status ambiguo de clase, como
tivamente calificada, formando 10 que llamaremos burocracia de poder al que se oponen. Su radicalismo
obreros de "cuello blanco", resultado de una oscilante derivó tanto de experiencias frustradas del economicis-
movilidad ascendente muy retaceada. Los aumentos mo gremial como de las que se dieron en su participa-
aparecen aquí sobre todo en el nivel de los sectores ción política.j '
intermedios bajos, constituyendo parte de la base an-
cha de la pirámide, el sector pobre de la burocracia,
los empleados sin calificación, mal pagados. En 1960 Los trabajadores
en Nicaragua había 6,100 funcionarios públicos y
quince años después 44,288; en 1955, en El Salvador, . Por la función que se les atribuye en las luchas sociales,
eran 28,656 y en 1975 ascendieron a 64,019; y en son importantes los trabajadores como denominación
Guatemala saltó de 1.6,41.1.en 1960 a 78,238 hacia genérica del sector subalterno de los asalariados y, en
1975.69 Hacia 1.970 el porcentaje de empleados de su interior, el proletariado industrial. Es dificil iden-
servicios era un 23% en Guatemala, 27.6% en El tificar lo que doctrinariamente se califica como el
Salvador y :16.5% en Nicaragua.Í'' proletariado, que se constituye frente a la burguesía
Un "batallón" sin paralelo lo han formado ·los como una relación, en tanto estos son propietarios
sindicatos de maestros de escuelas que constituyen de los medios de producción que se mueven en el
un núcleo importante de la burocracia; han sido en sector industrial moderno del sistema. En el mercado
diversos momentos estratégicos, un segmento de una de trabajo centroamericano la clase obrera que apare-
.belicosidad cuyos conflictos gremiales desbordaron ce vinculada a la fábrica, constituye un porcentaje
los límites de lo que sería su estricto interés sindical, menor de las distinciones existentes.
alcanzando el nivel de la organización político-militar. En 1.950, los asalariados en Guatemala eran el
En 1.970 había 36,324 maestros de nivel primario en 55.6%, en El Salvador y en Nicaragua el 53.6%, y el
resto eran trabajadores por cuenta propia que ya desde
hace tiempo era el escondrijo de los desocupados y
69.El primer dato de Nicaragua no incluye al personal docente
del Ministerio de Educación Pública. El personal militar no
está incluido, tomado de ICAP, Evolución del sector público en 71. C. Vilas, "Participation, Inequality and the Whereabouts
Centroaméricay Panamá, San José, 1984, pág. 7. of Democracy", en D. Chalrners et al., The New Politics of Ine-
70. Estructura de la PEA por ocupaciones principales, cuadro quality in Latin.America, Rethinking Participation and Representation,
NO.3.25, de Flacso, Centroamérica: la crisis ... , op. cit., p. 185. Oxford University Press, Oxford, 1997, pág, 5·
La segunda posguerra: Ni democratización".

s
lOS ¡. informa
que se mueven en ia ~ ¡'d
roa d del.' emp~eo.·
.. 1 72 critica, para la formación de ciudadanía, son gj:aves
cuando casi un 60% de gente vive bajo el
., . . b
jaoores urbanos, aunque poco numerosos; Sin ern ar- de la pobreza.' 75
Sin embargo, el número de obreros iridustziales
se triplicó entre 1.950 y 1.975 en Guatemala y entre
y en El SalvadorJ6 En una perspectiva
analítica entre ambos periodos de tiempo ocurren
cambios en la definición de la clase obrera a partir
del empleo. Dicho sumariamente: en el mercado labo-
estructuralmente" en sus limites, con otros grupos ral se produce una modernización evidente, y en el
se mueven entre interior clase hay aumentos en las tasas de educa-
tencia en la producción, o la ganancia mínima en el ción y profesionalización relativas, hay más urbaniza-
con aumento de la asalarización, es decir,
explotación d irecta del trabajo; y también incremen-
tos en feminización y la terciarización del 'uJl.''''Jl.,HU'

todo lo cual tiene consecuencias sociales y polft icas


no es posible analizar aquí. 77 Los trabajadores se
incorporaron a las movilizaciones sociales en las tantas
estratos correspondientes mencionadas décadas (Jl97o-80), se organizaron
han lH'.UU~.Jl
"H.a.uu.a,,-,-, dicalrnente y algunos se unieron a la lucha gueniHenL
formas de existencia social de la pobreza. El precario Hay antecedentes de organización sindical en los
tres paises en la inmediata posguerra, la Confederación
General de Trabajadores de Guatemala (1.952), varias
en Nicaragua, entre ellas la Confederación de
[adores (:[949) . A partir de 1.960 el número de sindicatos
erecto a de las condiciones adversas existentes.
En Guatemala, entre 1.966 y 1.975 se registraron 26}
po
72. s,erez~ De
San José, pág. 34.
73. El salario de los tres paises era similar y bajó en ,....,."~"ny·r
nes Se utilizó :1970 corno año base. 75. Datos hada :1980, en La crisis en cifras, op. cit., pág. 159.
74. En este porcentaje aparece la microempresa, en la que se 76. Datos citados por A. Rouquié, Guerray paz ..., op, cit., pág.
ha pero ahí solo 94. Los otros datos estadísticos mencionados en este
son tomados de Centroamérica, la crisis en cifras, op. cit.
próximas a la miseria. 77 .. P. Pérez Sáinz, op. cit. pág. 73 y sigs.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

organizaciones obreras.78 En El Salvador el número La burguesía


de sindicalizados en la industria aumentó de 26 mil
en 1:962a 65 mil en 1:976.19Lashuelgas, acciones de El simplismo tiende a confundir la burguesía con la
protesta y movilizaciones violentas llenan toda la dé- clase dominante. Los cambios en el interior de ésta,
cada de los setenta en ambos países; el registro oficial con los peligros de una denominación tan genérica,
de sindicalizados sólo es un dato superficial; con sin- han sido varios e importantes yen esa medida, confun-
dicatos legales o no, la agitación y rebeldía urbana didos. Así como a la clase obrera le interesa autodefinir-
expresó una protesta popular de carácter revoluciona- se por sus intereses, a la burguesía no y es siempre
rio que tuvo un cierto protagonismo proletario. desde el exterior que se le califica. Ya la oligarquía
Con intención descriptiva, digamos que se vive quedó reconocida anteriormente tanto por su condi-
un recorrido que iría de la demanda gremial (aumento ción terrateniente como por la relación semicolonial
de salarios en la fábrica) a la demanda social general que estableció con el campesino y característicamente
(huelgas de solidaridad); de ahí desembocaría en el por los rasgos primarios, precapitalistas, de su domina-
. malestar político y se transformaría en organización ción violenta, racista y excluyente. En sociedades co-
partidaria (movimiento/partido político); el clima mo las de Centroarnérica, por las desigualdades tan
represivo impulsó el salto hacia el compromiso violento, extensas y persistentes, tales rasgos sobrevivieron
guerrillero. De lo legal, público y pacífico la militancia como cultura objetivizada aún cuando se perdiera el
se convierte en un compromiso total con sus antónimos, carácter finquero. Por ello se habla de la larga existen-
ilegal, clandestino, violento, en el que ya no se enfrenta cia oligárquica.
al patrono sino al Estado, cuya destrucción se busca. Su carácter capitalista más depurado se abre paso
Este caminar no es necesariamente inevitable como pausadamente sobre todo en la posguerra cuando se
tampoco es un problema de tiempo. Cuando la crisis experimentaron pulsiones modernizadoras en lo polí-
política y la represión se agudizan, el tránsito hacia tico. Son tensiones contradictorias cuando para satisfa-
la protesta total puede ser inmediato. El diseño anterior cer jugosas demandas del mercado internacional los
no solo comprende alos trabajadores; cualquier sector intereses cafetaleros promovieron la modernización
social, o individualmente, puede empezar en las de- de la agricultura (algodón, azúcar, carne). No puede
mandas cívicas y luego afiliarse a la protesta armada desconocerse que fue la oligarquía quien dirigió ese
acompañados sólo de emoción, o también de alguna proceso utilizando al Estado, corporativizándolo aún
forma de conciencia y de ideología. más y convirtiéndose en una suerte de burguesía-de-
Estado. Es el momento del Estado desarroll ista cuan-
do surgen los rasgos burgueses de la clase.
78. CITGUA, El movimiento sindical en Guatemala, :1986-88,
Con la dinámica del mercado internacional las
Guatemala, 1.990, pág. 59. La década de los setenta vio crecer
y destruir por la represión un número mayor de sindicatos. oportunidades de inversión productiva surgieron y
79. Sara Gordon, op. cit. fueron creando intereses más definidos por sectores
segunda posguerra: Ni democraúzaciórL ..

rnarmfactureros urbanos, unos, y otros altamente sensibles frente a iniciativas fiscales, sociales,
azú- laborales les atañen. La burguesía completa su
del algodón y de los servidos qu,;;: identidad cuando se defiende como clase y no sólo
U~AA_"'ILdH en como desarrollada con ocasión de las
revolucionarias que debieron enfrentar.
es necesario argumentar 10 obvio. La categoría
conceptual "burguesía" es imposible teóricamente
presentada con alguna cifra estadística, objetivada
en un número; es como ponerle grilletes a la historia.
Algunas referencias indirectas permiten hacer aproxi-
maciones significado de sentido común que encierra,
te en el mercado adoptando el rostro bifronre del dios por ejemplo, estar en el sector alto de la estratificación.
Salvador, en el sector agrícola, en 1.950 se :re--
gistró 2..9%) de personas propietarias y un 77.4%
asalariados trabajadores por cuenta propia; en
poderosa misma fecha, en Nicaragua, un 1.6.6% y 77.4"% res-
<:tu.nAB." 80 Hacia 1.970 el estrato alto de la socie-

dad guatemalteca, el 2.0<10, se apropió del 58.8% del


ingreso . a ese mismo quirrril correspondió
50.8% el salvadoreño y 60% el nicaragüense.
mejor su existencia cuando se organiza grernialmen. ingreso per cápita mensual del estrato
te corno es hacia :1980, era de J[,1.35.6 dólares en Guatemala,
corporaüviza sus intereses frente a los poderes públicos frente a 1.:[.:1 dólares del estrato pobre. En El Salvador
y a de 1.,535.5 a 46.5 y en Nicaragua de
"1,1.99.8 a 6:L9. La "burguesía" estaría en el sector
yen los estratos altos (último quintil),
duda. Con una metodología difícil e imprecisa como
resultan estos ejercicios, A. Portes presenta una estruc-
tura clases a partir de porcentajes de la PEA (:[970),
así: un :L1.%) sería la clase dominante, un 4.;;,%
esta clase técnico-burocrática, un 1.5% de proletariado
son Fundes en el Salvador, Cocep de Nicaragua y el formal (66.4% de informal) y un 1.2.3% de pequeña

intereses empresariales reunidos políticamente y


80. J. P. Pérez Sáinz, op. cit., pág. 34.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

burguesía informal. 81 Es suficiente, otras aproxima- y cuándo y quiénes se mantuvieron como aliados de
ciones no son necesarias, la burguesía se reconoce en los terratenientes. ¿Tal vez el campesino que no tiene
el ringo tierra o muy poca, que no tiene empleo salvo temporal,
El proceso económico requiere la tutela política, que está más accesible a los centros urbanos, que tiene
y los grupos sociales dominantes en Centroarnérica . tradición de rebeldía?82
sólo actúan mediante la mediación estatal, son parti- Hay varias situaciones apodícticas que sumaria-
cularmente dependientes. Se argumenta que si la de- mente se presentan así: la mayor parte de la población
pendencia del mercado mundial muestra un Estado de los tres países bajo consideración vive en el campo,
débil, la heterogeneidad estructural sugiere uno fuerte, más en Guatemala y mucho menos en Nicaragua; los
y la paradoja sería tener un Estado autoritario en polí- cambios que introdujo la implantación de los nuevos
tica pero liberal en la economía, acompañada de otra, cultivos de exportación fueron menos drásticos en
un Estado fuerte en relación con los sectores subordi- Nicaragua, donde la frontera agrícola era aún extensa
nados, y débiles con los intereses del exterior, particu- y que afectó más a los otros dos países; los campesinos
larmente del imperialismo norteamericano. La burgue- de Guatemala son indígenas en su inmensa mayoría
sía también se define en relación con los intereses del y la concentración demográfica ha sido mayor en El
imperio. Salvador, aumentada por la expulsión de unas :100
mil personas desde Honduras en :1969. El control!
represión del Estado fue significativamente más
Los campesinos y las raíces de la revolución extenso en El Salvador y menos visible en Nicaragua.
De hecho, los campesinos han sido castigados siempre,
Se dice que los campesinos jugaron un papel decisorio en Guatemala esto aumentó desde :1954por la revancha
en las fases críticas de constitución de la situación anticampesina que siguió a la caída de Arbenz. Y solo
revolucionaria en Centroamérica. Su sola movilización aquí hubo rasgos genocidas.
informal fue suficiente para atraer la represión del El capitalismo liberal hace más de un siglo produ-
Estado, prejuicioso de que ciertas manifestaciones de jo al parcelario, desenterró el trabajo gratuito y forzado;
malestar son una alteración del orden oligárquico, el capitalismo desarrollista ahora expropia al campesi-
basado en siglos de la obediencia con miedo, que ca- no y lo empuja al trabajo asalariado temporal. El efecto
racterizan la pasividad campesina. No es confiable social más importante de la modernidad rural es la
un análisis que hable del campesinado in toto; son va- emergencia masiva de un campesino asalariado, que
rias las capas que lo forman y no ha sido bien analizado
qué parte del campesinado se sumó a la rebeldía, cómo
82. Ellos constituyen el mejor aliado de la revolución; Mao
afirmó que sin los campesinos pobres no habrían triunfado,
81. Flacso, Centroamérica, la crisis en cifras, op. cit., cuadro 3.99, rechazarlos es rechazar la revolución, atacarlos es atacar a la
pág. 1.88. revolución.
o
La segunda posguerra: Ni democratización ...

eran de pobres rurales en Guatemala,


Salvador y un millón en Nicaragua
a 83.7%, 76,4% y 89% de población
rcspcct ivamente. pobreza en Centroamérica
un rostro campesino . y en r,;. J' rncugena.
>..Juatema.a, l'

rnoder nizador dejó sin tierra, en un


a más del 20% de campesinos de
pacifico en Guatemala, El Salvador y
-85

condiciones materiales de vida empeoraj~on


para un sector campesino; que no necesariamente
en sector favorable a la revolución. JLJn_,llV

despertar de una nueva conciencia


con el fatalismo del pobre dominado apa-
, l' ,
entre sectores que estaban reracronaoos con
participaron en alguna prédica organizati-
en los tres paises a comienzos
aparecieron cuadros políticos, sindicales
pero sobre todo sacerdotes y/o gente
Iglesia católica y a la ideología
otra sección se analiza el notable desem-
Teología de la Liberación en su ayuda a
situación revolucionaria, papel sin
demorado sine die, o no ocu-
de
U'-LUUU recibe un. salario, a continuación algunas particu-
de Vilas es sólida cuando recuerda que el
se refiere modo en q'c:teelepro-
con los medios de

mensual. En esa fecha había paridad del dólar en Guatemala,


El autor Se
7.6 córdobas por dólar en Nicaragua y 3.6 para El Salvador.
85. Cálculos aproximados con base en el anexo estadístico,
Desarrollo y Política Social en Centroamérica,
agosto 1.976 y cuadro 1.1..pág. 40 de HCA-Flacso,
áf,
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... :153

a) En El Salvador, y sin que ello constituyera una ampliaron a siete departamentos del país, fortalecien-
paradoja, junto a la labor de activistas de izquierda do a la FECCAS/UTC. La violencia política, si bien fue
aparece la labor desarrollada por el American Institute sanguinaria en las ciudades, fue peor en el campo.P''
for Free Labor Development, de la AFL-CIO con un La UCS mantuvo una posición ambigua, próxima
programa de entrenamiento para líderes campesinos a la organización paramilitar Orden, de campesinos
al amparo de la Alianza para el Progreso; a esto se medios con funciones de espionaje y denuncia, que
sumó la Democracia Cristiana creando filiales parti- ayudó a reprimir campesinos sobre todo en el inicio
darias y cooperativas rurales. El sentido de este es- de la guerra civil. En marzo de 1.977el ejército asesinó
fuerzo fue el de formar cuadros políticos ajenos a las al padre Rutílio Grande, estimulando un activo des-
luchas violentas, para neutralizar el despertar de con- contento; otros ocho sacerdotes habían sido o fueron
ciencias criticas que iban más allá del reformismo muertos por fuerzas represivas. Aumentaron las de-
gubernámental. Surgieron varias organizaciones, im- mandas por salarios, garantías y tierra. Una prueba
portantes como la Unión Comunal Salvadoreña (ucs) , del cambio producido fue, por ejemplo, la ocupación
y la Federación Cristiana de Campesinos Salvadoreños del Ministerio de Trabajo por fuerzas campesinas en
(Feccas), ésta por iniciativa del PDC y posteriormente plena ciudad.
aliados de las organizaciones revolucionarias. El movimiento campesino en este país no podría
Sin embargo lo decisivo fueron las acciones de entenderse sin hacer referencia a la reforma agraria
prédica cristiana de sacerdotes rurales que condujeron que Estados Unidos financió/dirigió e impuso a la
a la creación de Comunidades de Base, movilizados Junta de Gobierno encabezada por Duarte (marzo,
por la Teología de la Liberación. Difundían la Biblia 1980); fue ésta una política reformista objetivamente
en una óptica y con un lenguaje de lucha por la justicia avanzada que incluyó la nacionalización de la banca,
social. Pronto derivó este mecanismo de conciencia- las instituciones encargadas del comercio exterior y
ción social al tema de las luchas sociales y no solo de el reparto de más del 15% de la tierra, y que provocó
salarios, de la tierra, del trabajo. Cuando llegaron los el odio activo de la derecha oligárquica. Hacia :1983
activistas de las organizaciones revolucionarias, del se pueden identificar tres grupos víctimas de esa po-
Frente de Acción Popular Unificada (FAPU), y del lítica: los empleados de la reforma agraria, los dirigentes
Bloque Popular Revolucionario (BPR) , especialmente, campesinos y los campesinos que recibieron parcelas
se formaron organizaciones que atrajeron acciones y por ello parecieron sospechosos de simpatizar con
represivas de gran violencia. Lo más importante en la guerrilla.
este aspecto fueron los vínculos mutuos entre las ac-
ciones de masas que surgían del mundo urbano y rural
86. Son numerosos los autores que contienen información
y el apoyo a las luchas que desarrollaban trabajadores
sobre el movimiento campesino centroamericano, en esta
y campesinos; por ejemplo, en Suchitoto. En los años
época, J. Dunkerley, op. cit., págs. 96-99; Ch. Brockett, op.
de la segunda parte de los setenta, esos contactos se cit., págs. 149-1.51.; Baloyra, op. cit., pág. 1.90.
-4
La segunda posguerra: Ni democratización ...

"inicio" movimiento campesino sino de una


lorosa continuidad por la existencia de restos del
agrarismo popular arbencista, lo que quedó de la
zalizada Confederación
e Nacional Campesina.
_ Estos
retazos de organización fueron estimulados por el
y breve intento guerrillero de 1.964-68.
p.ropósitos de intimidación v cont.rainsun:;-,c'111-i~
-o
.J 'W~, .r ea-,
..... en esta oportunidad que se produjo un nuevo momento
en represión contra los campesinos, que ya no eran
ar bericrstas y no alcanzaron a ser colaboradores de la
87
guerrilla.
~ En este punto hay q'ue recordar que desde los años
cincuenta laIglesia católica realizó una gestión moder-
asesinatos. entre los campesinos indígenas, que buscaba
restablecer la ortodoxia religiosa alterada por la "'su-
oerstición" de las costumbres tradicionales de la
~ura maya. Iglesia formó lo que denominó la Acción
Católica (AC), para reordenar el control de la autor i-
eclesial en el interior de la Cofradía y de las cornu-
e inéd.itas rnan
- ---
if taci
2LLIesüaoones -, d escontento,
oe nidades tradicionales; todo esto en Ías zonas más
indígenas del noroeste del país, donde después surgie-
rjercicio como si fuera un entrenamiento ron los movimientos rebeldes.
una
1:980, cuando pareció
L os nuevos " conversos "J proaucl ·d os por_ AC
fueron generalmente jóvenes cuya conciencia libera-
La
que articulaba las da enfrentó a los ancianos tradicionalistas de sus co-
pero también a las jerarquías ladinas de
en en una los poblados, estableciendo así los prolegómenos de

revolúcionarias urbanas se apoyaron en masas cam.


ese
87. El temor al alzamiento campesino después de 1.954, com-
proyecto revolucionar.io no habría podido ,r""-"'C''''',..h
prometió directamente a los intereses norteamericano", que
en una al11.enaza -
~nt:re 1.954 y :[979 proporcionó a Guatemala $60 millones en
asistenta militar y entrenamiento a más de },)OO oficiales en
parcialmente ocurrió 3.19"0 si- Es tados Mich~el McClintock, Tbe.American
o ~
State Terror and Popular Resistance in Guatemala, Zed Books,
Lorrdori, 1.985, pág. 1.22.
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 1.57

las luchas políticas, como otra línea de conflicto. Esto


campesino que se buscaría para así marchar sobre las
facilitó los contactos con los activistas urbanos ,estu-
ciudades cuando se hubiese considerado maduro el
diantes revolucionarios que coincidían en enfrentar
movimiento.
elpoder terrateniente. En Nicaragua el ánimo anticomu-
A mediados de 1976, con los efectos movilizadores
nista de AC propició el trabajo incluso en fábricas con
del terremoto y por el peligro que presentaron el apa-
jóvenes obreros que se incorporaron posteriormente
recimiento de actividades guerrilleras en la zona del
al trabajo sindical. 88 La AC provocó este cambio, indi-
Ixcán, se amplió en calidad y extensión la acción
recto pero efectivo por sus consecuencias políticas.
contrainsurgente. Ya el ejército había destruido
También empezaron su activismo algunos grupos
cooperativas, escuelas, hospitales, centros culturales
religiosos como los Maryknolls. Ésta fue laépoca en
y otros apoyos para el desarrollo rural en departamen-
que la Teología de la Liberación y las Comunidades
tos como Quiché, Alta Verapaz y Huehuetenango.
de Base organizaban a grupos campesinos, como ya
En este país las políticas antisubversivas del ejército
quedó dicho. Al igual que en El Salvador y hacia las
fueron altamente destructivas, sin comparación algu-
mismas fechas el Partido Social Cristiano y la AID,
na. Por ejemplo, basta citar la acción genocida de
cumpliendo mandatos de la Alpro, de impulsar el de- Panzós en 1978, donde el ejército mató más de 80
sarrollo rural organizaron filiales políticas, ligas
campesinos, de una comunidad que pedía atención a
campesinas, cooperativas, escuelas. También organiza- sus problemas de tierra. En el inicio de los setenta
ron grupos religiosos al amparo de la Teología de la
fue creándose el Comité de Unidad Campesina CCUC),
Liberación.
donde concurrieron comunidades cristianas de base,
Las conexiones entre el campesinado y las organi- ligas y sindicatos campesinos y centros culturales
.zaciories guerrilleras no fueron en nada parecidas a
mayas; su definición política se vio influenciada por
lo que sucedió en El Salvador. Casi, fue lo opuesto.
la fundación del Consejo Nacional de Unidad Sindi- .,
La guerrilla se implantó desde sus orígenes en el medio
cal CCNUS), y el activismo generado a partir del terre-
rural: Orpa en 1.971, el EGP en 1.972, las FAR, en moto de 1.976.90El CUC desarrolló una activa organiza-
1.974·89 E sa d ecision
'." f ue e1 resultado de la primera
ción de demandas en el campo hasta su afiliación al .
experiencia foquista derrotada que trajo una rectifi-
movimiento 31.de enero, de naturaleza guerrillera.
cación estratégica; el movimiento previsto fue crecer
desde el inicio en el medio rural y con el apoyo
90. Información obtenida de Rache! May, Terrorin the Countryside}
campesino responses to politieal violen ce in Guatemala (1.954-85)}
Ohio University Center for Internacional Studies, Ohio, 2001.
~8. Ver~l trabajo de Wi11iams, Philip J. "The Catholic Hierarchy
esp. caps. 7-8. La cooperación no significa representación o
m the Nicaraguan Revolution".Journal q/LatinAmerican Studies,
alianza entre ladinos e indígenas, tal como lo señala Le Bot,
1.7.2 (1.985): 341.-369.
pues el CUC no logró ubicarse en zonas de colonizaci~n ladina
89. Orpa fue una escisión del Regional de Occidente de las
ni en el oriente del país. Yvon Le Bot, La Guerra en tierra mqyaa
FAR, estas se reactivaron en el año que se apunta.
FCE, México, 1995.
Ret'oluciones sin cambios revoJuúonarios La segunda posguerra: Ni democratización. o<

del CUC se manifestó con oca- conocirniento de su cultura. Los campesinos no son
sión de la protesta que se agravó con el incendio de solo clase, son también etnia.
la de en enero de 1980, en Es importante recordar el equilibrio entre
reivindica(;iones económico sociales que condujeron
mil cañeros y .. a los indígenas a lucha por tierra y re--
en la costa sur (febrero de 1.980), exitosa en sus reivin- ciente identidad movilrzadora de las demandas étni-
dicaciones salariales; en su desafiante del I 1r .' , ,.. c- ri
ce-nacionales. La aproXlmaclon mas slgn1I1Ca rva en
esta dirección la buscó el Ejército Guerrillero de
Pobres" Orpa tenía un 90% de campesinos indígenas
,, en sus filas pero ninguno en la comandancia; su
frente a las acciones su Hnea dir igencia elaboró propuestas en torno a la discrirni-
racial. Los grupos indígenas empezaJC'on a
y con ánimo de revuelta con intereses
a ofensiva popular en ascenso cual tiene que señalarse corno un dato revelador
F stado no cedió nunca, aspecto que-plantea la teoría
de la potencialidad de cambio que ellos tienen, sin
de ctialéctica victoria- llegaran a incorporarse a lo que en ese momento
la lógica del proceso: la lucha armada.
tener una '-'-"-~'lfJ~ '--~'''H'UH otra patte este trabajo se hace alusión a la ofensi-
SIn consecuencias va victoriosa del ejército contra el frente guerrillero
la composición étnica del campesinado guatemalteco.
entre J[980 y 1982, Y al genocidio indígena provocado
Se trata étnico-racia!
estrategia inequívocamente racista
provocó.
poder y sus cul-
turales. Lo étnico-racial clasifica a los indígenas y los
e) Los limites con que se encontró el movimiento
sitúa en una posición social Como
campesino nicaragüense los estableció la dinámica
ello, una
expansión la hacienda ganadera y
la plantación
lugar son una algodón en tierras campesinas y la represión
no es cultura nacional do- Guardia Nacional. La consecuencia directa fue Ia rni-
mi nante, en tanto los indigenas son herederos de una
gJcación rural hacia la capital y ciudades intermedias,
lo
vida urbana. Esto hizo que un
realidad centroamericana.j effrey Paige,
señalara que en Nicaragua el proletariado agrtcola era

:re-
1.60 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

urbano.i" En efecto, éste ha sido el país más urbano la Guardia Nacional; hacia los años de 1960 fueron
de Centroamérica, y fue cierto que parte de la mano eliminados 300 campesinos y trabajadores del campo
de obra estacional para el algodón y el azúcar llegaba cuando intentaron formar un sindicato en la región
de las ciudades. Esta textura estructural tuvo efectos algodonera de Chinandega. La incorporación campe-
que contradicen lo predictible del cambio revoluciona- sina al proceso revolucionario fue filtrada por la re-
rio en sociedades subdesarrolladas. presión. A finales de esta década grupos religiosos
La naturaleza central del conflicto fue la insurrec- organizaron Comunidades Cristianas de Base con su
ción urbana y no campesina, el campo fue la retaguardia, prédica de la que se habló para los dos países anteriores,
el desenlace fue urbano. ¿ Por qué la ciudad? Suelen dando una sólida contribución a la concienciación de
mencionarse dos razones: una, porque la represión la población campesina.
era mayor en la sierra, ahí la Guardia Nacional mantu- Fue importante el centro jesuita Comité Evangélico
vo el terror permanentemente; otra por el desarrollo para la Promoción Agraria (CEPA), a principios de los
conflictivo de la urbanización que generó una política años de 1.970,que formó varias generaciones de líde-
contestataria tan radical que puso en la agenda urbana res campesinos con conocidos efectos religiosos y
la crisis del poder.92 políticos; entrenó cerca de 900 Delegados de la Palabra
Hay que recordar que las luchas de Sandino se en las zonas de lo que hoy son las Regiones Autónomas
dieron en las zonas del centro-norte rural; que en del Atlántico. No fue sino hasta 1.977 que el Frente
cierta forma fueron de nuevo escenarios de las incur- Sandinista organizó la Asociación de Trabajadores
siones guerrilleras. En esa época el campo se conside- del Campo que un año más tarde formarían parte del
ró como el escenario natural de la revolución y a las Movimiento Pueblo Unido, organización de masas a
ciudades solo como "cantera" de cuadros y fuente las que se incorporaron más de veinte organizaciones
financiera. Fue esa región donde hubo más de una d e estu diiantes, tra b aja
. d ores, crvicas
' . y d e mUJeres.
. 93

.docena de intentos foquistas en los sesenta, un largo El FSLN buscó implantarse en la sierra y buscar
sacrificio de combatientes antisomocistas que no lo- apoyo campesino, que siempre se consideró sería una
graron suscitar el apoyo campesino. decisión espontánea, natural. No fue así, en parte
Por esta fecha (1963) y cumpliendo con los dictados porque los campesinos ya sabían que la Guardia N acio-
de la Alpro el régimen promulgó una flácida reforma nal Ilegaba a los sitios donde estaba la guerrilla. La
agraria. Al mismo tiempo que esto sucedía la organi- fracción guerrillera llamada Guerra Popular Prolon-
zación campesina era reprimida constantemente por gada (GPp) nunca dejó el monte, pero solo consiguió
débiles éxitos políticos. De hecho, esta estrategia se

91. Citado por Ch. D. Brockett, Land, Pon/er and Pouerty, op.
cit., pág. :169. 93. G. Ruchwarger, "Las organizaciones de masas sandinistas
92. Orlando Núñez y otros, Laguerray el campesinado en Ni- y el proceso revoluciona río", en La revoluciónen Nicaragua, de
caragua, 2a• Ed., Ciprés, Managua, :1995, pág. 63. Richard Harris y Carlos Vilas. Ed. Era 1.985, México.
segunda posguerra: Ni democ:ratización ....

coriorrua y estimulara fuerzas capaces de


industrialización, modernización agrfcola,
pospuesta secularización social ypor supuesto,
polttica. proyecto desarrolfista cepa--
democrático.
desarrollista impulsada el modelo
sustitución de importaciones, también cono--
COlmo "desarrollo hacia adentro" en contraste;
desarrollo hacia afuera que
"'-'->.J.'-'''V'.HU

mercado internacional corno su


estrategia de desarrollo descansaba en .
de Instrurnentos y políticas específicas
arancelario, tributario, cambiado"
y dieincentivos fiscales, y también y necesariamen-
te en a las creciente demandas sociales.
protagónico del Estado se tradujo en
especializadas como las de
y tecnología, en modernización
en instituciones financieras capaces
comprometerse en el largo plazo.
El desarrollista, así titulado a falta
no fue siempre reconocido como
en América Latina en distintos momentos
segunda Posguerra. Contrariando el pensamiento
a ganar cuerpo la idea de que desa-
modernización de la

---------- atribuye como actor una función de


de decisiones racionales, estrategias
v satisfechas mediante decisiones
y política se juntan en un medio
surgiendo nuevos intereses y aspiracio-
Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización: ..

nes sociales. Estado y desarrollo significaron que el agro exportador sino uno propio; apoyándose en Pé-
cambio era un problema político. caut señala que el Estado deviene el sitio de una doble
El Estado en Centroamérica empezó a dejar de articulación, por una parte los intereses inmediatos
ser liberal con formas traumáticas y fue desarrollista de las clases dominantes que coordina y por la otra
con dificultades, a medias. Hubo un distinto curso el lugar donde se reunifica lo social fragmentado.Y
del desarrollo de la sociedad a partir de la forma cómo Le llama un Estado "de compromiso" que traduce al
las clases y grupos sociales (tradicionales o nuevos) mismo tiempo la fragmentación y las tentativas de
lograron dinamizar su fuerza. tanto en las organiza- cohesión social, donde sus diversas esferas promueven
dones de clase como por las alianzas políticas que se la modernización y los conflictos que ella produce.
propusieron, de las orientaciones políticas que asu- Argumenta que el crecimiento económico y la
mieron como propias para imponer un sistema de modernización acentúan la desarticulación ya existen-
dominación viable.95 Las crisis de la demanda externa te; por lotanto, ellas no conducen en ningún caso a
volvieron más rígidos los intereses clasistas de los rearticulaciones que hagan de los sectores socialmen-
grupos exportadores y por ello menos abiertos a los te dominantes (los agro exportadores) los grupos
pactos antioligárquicos, menos espacio para los gru- preeminentes en la esfera política o en el seno del
pos medios y aún menos para las clases populares.l''' Estado. Se silencia el papel desempeñado por el Esta-
Sobre este punto, la argumentación de Bataillón do a partir de los años de 1960, pues deja de ser un
es otra en el sentido que los fenómenos del crecimien- "instrumento"; adquiere un lugar propio, propicia el
to económico y la modernización no producen una crecimiento en el seno de una matriz estado-céntrica,
rearticulación de los sectores dominantes en el seno una modernización por arriba que enfrenta una oscila-
del Estado.97 El papel que este desempeña a partir ción entre la nostalgia para mantener el status quo y el
de los años sesenta ya no es al servicio del sector appeal por la modernización.99
En este trabajo sostenemos que dos tipos de Es-
tado llenan la historia reciente de Centroarnérica, el
95. En este modelo el Estado aparece en el centro de la promo-
liberal y luego el desarrollista. El papel del Estado
ción económica en provecho de la burguesía industrial aún
en minoría de edad; cuando se implanta en Centroamérica
empieza a cambiar visiblemente después de los años
estimulada por la integración regional, años sesenta, la poten- cincuenta, colocando al desarrollo económico en el
cialidad desarrollista ya estaba en decadencia en otras partes,
pero aquí alcanza a promover los primeros pasos de la indus-
trialización, apoyada por el Estado. Central (1.960-83)-Les Belles Lettres, Paris, 200), pág. 80 y
96. F. H. Cardoso y E. Faletto, Dependencia y desarrollo en.América sigs.
Latina, FCE, México, 1.969, pág. 81.. '! E. Torres-Rivas, El desa- 98. Daniel Pécaut, LiOrdre et la uiolence: évolution socio-politiqee
rrollo social centroamericano, Educa, San José, 1.978, diversos de la Colombie entre 1.930 et 1.953, Ed. EHESS, Paris, págs. 81.-
capítulos. 92•
97. Gilles Bataillon, Genése des Guerres Internes en .Amerique 99. G. Batail.lon, op. cit., págs. 87-98.
1.66 La segunda posguerra: J>Ji democratización ...

centro sus C1J!adl:'0 4


funcionamiento de BUROCRACIA PÚBLICA EN CENTROAMÉRICA.

cho del empresario (Cifras absolutas, po!' quinquenio)


nuevos
[PaTs-----f 1955
I 1960 _j 1965 1970 19/'5 1
I Nicaragua 1 6 100b I 25326 44 :288c I
significa las instituciones del Estado v iE~Salvador 1z8 656 al ! 31653 64 G19c I
sus politicas se articulaban con los nuevos J
t Guatemala ,-
I 16 411a I 38637c 49262c 78 :238c I
Las cifras incluyen al gobierno central y a empresas autónomas. (a} Solo
1 ~" '1
que nunca oejo oe moverse incluye a! gobierno central, (b) Excluye a! persona! militar y poncía y personal
objetivos cafetaleros a los docente del HE". (e) Cifras estimadas, excluye al persona! del !vliniste,io de
Defensa y/o policía.
Fuente: 'forres-Rivas, 1980.
embargo,
p "la diferencia es fundamental -'.l ouese
1 _.'>._-,-.

es el -,-,stado como agente


enoogenos de
, ' -a
se hubiese podido lograr. Se intentó con
progreso técnico; 1
rnoctero rrnpu isa "
el desarrollo
l' o el apoyo y mov ilrzación (alianzas) de sindicatos,
~¡;;h· t "l~
__ac~a aueurro , v n~,"'_"<-,
uniones estudiantiles, ligas campesinas o partidos
la
políticos, nmy poco se obtuvo. Las clases medias
irrgresaron en el momento de la crisis del Estado
ral y con diversas expresiones partidarias, se ampliaron
como otra co:n el Estado desarrollrsta.
rF ferenHCJ.a
U.l.
; con .z,
F
eil'VIeJO.2.sta
o d o Ll
T ib
eral es que el Es- papel del Estado se vuelve ambiguo: pOJeun
tado es un agente ~ lado, como Estado desarrollrsta renuncia a su exigible
ganancia, un sector democrática a tono con el clima del conflic-
,_,-,,~~,.U'-4'U'.'.i

estatal
~ "a. di,
c.ecO'~p orla en'i e¿merca
'"
_,
.t.Ll_
d o como un elY!preSano
-t_ o to internacional; se pierde la oportunidad de renova-
más no compite con el sector . ClO1CJ. que las nuevas fuerzas sociales hubieran hecho
Por otro, el Estado desarrollista fue compa-
ahora intenta controlarlas. tible con la dictadura institucional de las fuerzas ar-
madas en nombre de la burguesía; los militares fueron
a a su manera estatistas en el sentido de fortalecer
fl"1l,O"'''';-',n
~uerz as sociares emergentes
"'_ • J .
por el lado de los sectores Estado. Nótese que en los tres paises los militares
desarrollaron políticas que fortalecieron al Estado
(hidroeléctricas" carreteras, instituciones de fomento,
el poder. En estas condiciones la~ mcorporación
. . ,. de instituciones descentralizadas de comercio) En allgún
lado decimos que fueron keynesianos sin saberlo.
Estado no pudo ser democrático, pero algunos
168 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ...

Cuadro 5 Cuadro 6
CENTROAMÉRICA: ENTIDADES CENTROAMÉRICA: PRESUPUESTOS NACIONALES'"
DESCENTRALIZADAS O AUTÓNOMAS (En millones de dólares a precios corrientes)
País 1950 1955 1960 1965 1970 1975 País 1950 1955 1960 1965 1970 1975
Guatemala 3 7 9 18 28 39 Guatemala 42.2 102.6 114.4 177.2 203.4 419.8
El Salvador 3 8 10 19 24 32 El Salvador 31.8 66.0 68.3 96.8 125.5 304.8
Nicaragua· 2 4 8 12 15 18 Nicaragua 12.2 40.3 35.7 65.3 98.5 281.0
Total 8 19 27 49 67 89 (*) Comprenden el presupuesto ordinario del gobierno central y de empresas
Fuente: Torres-Rívas, 1980. autónomas.
Fuente: Torres-Rivas, 1980.

aires sociales lo empujaron; por ejemplo con ocasión


del cumplimiento de las "recomendaciones" de la mucho más que prevenir la protesta social, dice Vilas,
Alianza para el Progreso, cargadas de una inspiración contribuyó a alimentarla.101
social "progresista", porque fue trazada como una ¿ Puede ser entendido el Estado desarrollista co-
política de talante anticubano no fueron cumplidas. mo un proyecto fragmentado de modernización del
Las recomendaciones de la Alpro en cuanto a la distri- poder de la burguesía conciliadora sin renovación del
bución de la tierra por medio de la colonización fueron viejo poder oligárquico? El Estado, estimulado por
acatadas con miedo por 10s·'miÜtaresguatemaltecos eldesempeño de nuevas funciones públicas, experimen-
y con desenfado por Somoza.lOO Las p~opuestas de tó un crecimiento de su burocracia, su presupuesto y
modernización preventiva de la política norteamericana su tamaño institucional, una diversificación adminis-
fueron fuente de contradicciones yllegaron a destiempo trativa y técnica, dinámica que fue tanto un acomodo
a Centroamérica. Es ese el esperado momento del funcional como una renovación frente a nuevas tareas
reformismo estatal el que llegó poco, tarde y mal; y de promoción de intereses empresariales. Esa relativa
renovación técnico-burocrática no significó una aper-
tura política, la tantas veces anhelada vida democrá-
tica. No se olvide que el Estado desarrollista corres-
100. La noción de "Estado Conciliador" ha sido frecuentemente
pondió, durante largo tiempo, con la etapa de las
utilizada en el análisis de esta época. El calificativo alude, a
veces d.e.forma simbólica, a la transacción de intereses que
funciones contrainsurgentes que al mismo tiempo
se manifiestan en la política de estos países y originadas en desempeñaba. No hubo en consecuencia, una crea-
la fuerza que la diferenciación social y el cambio venían ope- ción de oportunidades para la incorporación de una
rando. El poder era más moderador que intermediario, es ciudadanía ampliada, una ciudadanía con todos los
decir, con aspectos más negativos. Véase Bataillon (2002);].
Cáceres, R. Guidos Béjar y R. Menjívar, El Salvador. Una his-
toria sin lecciones, Flacso, San José, 1988 donde hay un sugestivo
trabajo de Béjar sobre el Estado conciliador; Dunkerley, Vilas 101. Carlos Vilas, Mercado, Estadosy revoluciones, op. cit., pág.
y otros. 94·
segunda posguerra: Ni democratización ...

presentativas de la diada pueblo/clases medias" par ti-


dos políticos de oposición y manejar sin la policía o
movilización social. En breve, reducir su
papel de guardián pretoriano del orden" debilitando
ca~las ir~?lementó Somoza en :1968y nf''''''p,''',,.-, - ..t'asgos autoritarios, facilitando la implantación de
te Jos gobIernos militares de Guatemala y
la derrrocracia representativa. Es esta la síntesis ideal
en años de -'9-7nu. 102 ~a
u..
I ¡
VO_untaude
,•. /
_l"
no
-- r-» -:

SU4-1C1°n~= s-s r
cuyo alcance no fue posible que el Estado cumplrera
L_ t'0rque no rue acompañada de democra-
-C __Lc
po:rque ejército y las clases reaccionarias lo con-
con transformaciones sustantivas en panicipación
tinuaban influenciando.
neo oligárquico con .. La misión estratégica del Estado no se movió en
dirección que lasposibilidades planteaban, pudiendo-
• ~ '!
se convertir en el pivote de un transformismo sostenl~tO
argmnentó, se con recursos po Iílt1COS,
. con vo1unta
• d ·moder ruzaoor
izadora'. 103
rigor, no fue un problema de tiempo histórico
creCimIento económico basado en
J ~(1-;~. 1 -- 1 no del tiempo social, de la coyuntura, dada la calidad
ra agü_c,t1~..tura e e me-rcadoexterno y una
de los inte¡'eses clasistas que dirigieron el procesoo
prox1rna modelo de sustitución de
Fue la misma élite oligárquica atada por lazos consanguí-
Estado como fuente de didgismo social solo neos con los industrial/comerciales, a los que unificó
a actuar con
finalmente revuelta popular en El Salvador y Guate-
mala. Falló Estado promotor porqueno aparecieron
los empresarios modernizadores; no se desarrolló una
ideología del desarrollo, una conciencia de la impor-
de democracia acompañando el crecimiento

esta búsqueda de actores ideológicamente


102, Las
lúcidos, Ilama la atención que la asistencia norteame-
ricana no hubiese sido aliada de las fuerzas modernizan-
tes y más bien actuaron como cómplices poderosos
En

Se encargan de torcerle el 103. Ver Howard H. Lentner, State Formation in Ceniral.Arseri-


corno ca, sbe Stntgg/efor Autonomy, Developmenr and Democracy, Green-
wood Press, 'Xi'estport, 1.993. Consideraciones diversas sobre
este tema ap;;trecen en varios capírulos, especialmente el 4°,
págs. 61. y sigs.
1.72 Revoluciones sin cambios revolucionarios La segunda posguerra: Ni democratización ... 1.73

de los terratenientes y de los políticos conservadores por parte de los nuevos segmentos de los grupos em-
y, sobre todo, de los militares. Los intereses norteameri- presarla. 1es fue tenue y d e poca e fireacia ,,105
. L os actores
'
canos pudieron valerse del Estado, como lo hicieron populares desde la oposición no tuvieron opción al-
en el Lejano Oriente, para forzar una reforma en las guna. Lo ocurrido fue, en resumen, un Estado desa-
viejas relaciones agrarias, todavía semifeudales.104 Y rrol lista que no logró articular su modernización. En
hacer la doble modernización política y económica, las páginas que siguen se examinará el profundo des-
com,o lo impusieron en el sudeste asiático en beneficio contento de diversos grupos sociales que arribaron a
de una burguesía naciente (Corea, Taiwán). la lucha revolucionaria.
En Centroarnérica se produjo lo que se conoce En efecto, el incompleto Estado desarrol lista en
como la diferenciación funcional en el interior de la su condición contrarrevolucionaria enfrentó los efec-
misma clase y no la diferenciación contradictoria entre tos del malestar y las embestidas de la revolución; fue
clases. Y apareció el burgués "trípode", con un pie así justamente porque su configuración era ambigua, '
en la agricultura de exportación, otro en el sector in- fue un Estado de compromiso conservador. Un Estado
dustrial y el tercero en el comercial-financiero. Esta desarrollista como lo planteaba la Cepal no hubiese
criatura deforme no podía ser democrática pues retu- estimulado esas formas de protesta; fue la estructura
vo el alma oligárquica y los modales autoritarios, el de este Estado ambiguo, a la postre oligárquico el que
rostro burgués pero el corazón en la hacienda, amor ayudó a incrementarla. La pobreza tal vez creó el ma-
por lo extranjero, miedos a la movilización popular. lestar pero fue el impreciso desarrol lismo estatal,
Analizando este movimiento de cambio para que indeterminado en sus funciones lo que favoreció más
nada cambie, Carlos Vilas indica con razón que particu- la condición revolucionaria.
larmente en estos países, la modernización capitalista
no necesitó transformaciones significativas en las re-
laciones de poder entre las clases sociales; y "el cues-
tionamiento de la dominación tradicional oligárquica

104. La historia es otra en el Extremo Oriente y para el mismo


período. McArthur, en Japón y sus correspondientes líderes
de las fuerzas invasoras en Corea, por ejemplo, ejecutaron
radicales reformas agrarias como presupuesto de la supera-
ción del atraso, de la industrialización y posteriormente de
la democracia. Estados Unidos ha apoyado reformas rurales
en otros países del Extremo Oriente, En Centroarnérica, la
obsesión anticomunista los hizo aliados de las fuerzas más
reaccionarias a la modernización, Aquí ya no es el destino
trágico de la región, sino la geopolítica lo que jugó en contra, 105. Carlos Vilas, Mercado, estados ... , op. cit., pág. 87·

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