las normas y principios básicos por los que se rige la vida cristiana se conocen como los

10 mandamientos.

La biblia nos cuenta como el propio Dios escribió y entregó este decálogo en dos tablas de
piedra en el Monte Sinaí a Moíses. En el libro del Éxodo (Cápitulo 20: 3-17), en el Antiguo
testamento, encontramos el relato de cómo el pueblo de Moisés hizo el pacto de cumplirlos.

Estos mandamientos de la ley de Dios nos indican lo mínimo que un creyente debe cumplir,
cómo debe enfocar su vida para que esta siga el camino de las enseñanzas. De hecho, los
diez mandamientos se pueden dividir en dos partes:

o Los tres primeros hablan de las obligaciones que los creyentes tenemos con Dios
o Los siete restantes hablan de los deberes y obligaciones que cualquier buen cristiano debe
cumplir para con el prójimo.

Además, los creyentes católicos deben cumplir también los cinco mandamientos de la iglesia
católica.

¿Cuáles son los 10 mandamientos?

La ley de los 10 mandamiento para los cristianos son los siguientes tal y como se recogen
en el Catecismo de la Iglesia, donde también se explican las razones por las que se eliminó el
segundo mandamiento original y se dividió el último con el fin de volver a tener 10.

o Amarás a Dios sobre todas las cosas.

o No tomarás el Nombre de Dios en vano.

o Santificarás las fiestas.
o Honrarás a tu padre y a tu madre.
o No matarás.
o No cometerás actos impuros.
o No robarás.
o No dirás falso testimonio ni mentirás.
o No consentirás pensamientos ni deseos impuros.
o No codiciarás los bienes ajenos.

El evangelio de Mateo nos recuerda también que estos 10 mandamientos se resumen en dos:
"Amarás a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo".