VIGILIA INTRODUCCION

Después de la cena se les reúne a los matrimonios en el pasillo antes de bajar al Santuario,

una vez todos reunidos empieza la peregrinación Rezando para mantener el clima de oración

Terminando la peregrinación en la cruz de la Unidad

(caminero iluminado con antorchas, en la cruz de la unidad)

Una vez todos FRENTE a la cruz de la unidad PARADOS

MUSICA CANTADA

SIN MUSICA

Voz Femenina

Estamos aquí reunidos frente a tu imagen junto a tu hijo Jesús.

Madre, Tú nos convocas,

Queremos hacer tu voluntad para cumplir los designios que el Padre Dios tiene pensado para

cada uno de nosotros.

Te pedimos que nos tomes de tu mano

MUSICA INSTRUMENTAL

Te alabo y te doy gracias porque por amor nos regalaste a Jesús. Hoy Madre, quiero

presentarme delante de ti como tu hijo.

Como el discípulo amado junto a la cruz, nos reunimos para prepararnos a respirar tu

libertad y sentir que me llamas por mi nombre a esta comunidad de Schoenstatt.

Derrama todo tu amor, un amor que actúa y se revela como inspiración, impulso, fuerza y

aliento de vida.

MUSICA INSTRUMENTAL

Ser capaces de llegar al pie de la Cruz y asumirla libre y alegremente, al igual que Jesus, abandonar

nuestra vida en las manos de Maria.

“Estamos seguros que es un paso que debemos dar, y que si nos abandonamos en Ella nuestros

anhelos se harán realidad.”

“Bajo la protección de María, queremos aprender a educarnos a nosotros mismos como

personalidades firmes, libres y apostólicas”.

Imploramos la gracia de captar con el corazón lo que la persona de nuestro Padre Fundador

nos va a hablar hoy, lo que su vida de amor y de misión nos propone, para conformar lo que

hacemos y evitamos.

MUSICA CANTADA –

Voz Femenina

Ahora caminamos juntos a la casa del Padre, EL SANTUARIO

Querida Madre y Reina, ayúdanos a abrir las puertas de nuestra alma.

Que TU luz clara penetre nuestro interior, iluminándonos por el cálido brillo de la fe.

En silencio peregrinamos en oración hacia el Santuaio

MUSICA CANTADA HASTA QUE LLEGUEN A LA ESPLANADA DEL SANTUARIO

Al llegar todos frente al Santuario con sillas preparadas se espera a que se sienten

MUSICA INSTRUMENTAL

Voz Femenina

Espíritu Santo, fuerza divina de amor, nos unimos al Padre Kentenich, que estuvo tan abierto

a tu acción y por ello, pudiste utilizarlo como instrumento de amor para este mundo. Te

pedimos que enciendas en nosotros, el fuego del amor divino, para que así podamos regalar a

otros, lo que tanto deseamos para nosotros.

Enséñanos a hablar el lenguaje del amor, de la donación de uno mismo. Te entregamos toda

nuestra incapacidad para amar. ¡Ven Espíritu Santo, ven! En tu fuerza de amor, haznos ser

un cálido sol para el mundo, como lo fue el Padre Kentenich

Voz masculina

(el padre va saliendo del santuario queda enfrente se ilumina )

El primer paso es el decisivo. Pero este paso no debe ser vacilante, indeciso, sino un SI que

deje atrás toda excusa

Me pongo en camino hacia Dios y la Sma. Virgen con todo lo que soy y tengo, precisamente

porque se que Dios y la Sma. Virgen me han fijado una meta y quiero y debo alcanzarla.
Mi querida familia de Schoenstatt puedo ciertamente decirles que todos ustedes están

integrados en esta misión mía. Porque ella no a sido colocada solamente sobre mis hombros,

sino sobre los de todos los hijos de Schoenstatt

Debo predisponerme a decir a Maria Santísima:

MADRE, YO ME ABANDONO A TI (dos veces)

Entra el padre al santuario, colocar lo mas cerca posible del altar, santuario libre de asientos

En este momento queremos abandonarnos el uno en el otro, como el padre fundador lo hizo

con su obra de Schoenstatt

Por eso comprometidos en esta tarea, hagamos el intercambio de cartas que trabajamos el

día de hoy y tengamos presente que no estamos solos, es Maria nuestra aliada.

SE PRENDEN LAS LUCES PARA QUE SE PUEDA LEER

MUSICA CANTADA

Una vez que mas o menos todos hayan leído sus cartas

SE ATENUA LA LUZ

SIN MUSICA

Padre Kentenich:
Hoy te conocemos un poco más. Sabemos que todo en tu vida, lo hiciste en unión a

María, consagrándole a su corazón de Madre, cada momento. En unión a ti, que fuiste un hijo

predilecto suyo, nos regalamos nuevamente a Ella diciendo:

¡Oh Señora mía, oh Madre mía!

Yo me ofrezco todo a ti,

y en prueba de mi filial afecto

te consagro en este día

mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón:

en una palabra, todo mi ser.

Ya que soy todo tuyo, oh Madre de bondad,

guárdame, defiéndeme y utilízame

como instrumento y posesión tuya

Amén.

BUENAS NOCHES!!!!!!!!

MUSICA CANTADA