rarr2017 Religiones: Cuando todo as blasfemia | Opinién | EL PAIS OPINION Cuando todo es blasfemia Se ha impuesto proteger a las religiones de las provocaciones o, incluso, de las eriticas, lo que es contrario al debate democratico, Mientras aquellas tercien sobre aspectos de la vida publica han de someterse al mismo trato que las otras ideas rtuxovesero ‘wayazquer Para laizquierda la religion era una supersticién. Quiza algo més, pero fundamentalmente, supersticién. No una ‘cualquiera, como un espejo roto, sino de la peor naturaleza, retorcida, al servicio dela inusticia. La religién no solo impedia la mirada limpia de los males sociales sino que, ademds, los disculpaba y hasta condenaba la rebelién. El otro mundo compensarla los padecimientos terrenales. Peor, los padecimientos eran parte del guion. ‘Sutrimientos e inusticias encajaban dentro de un orden moral arménico alos ojos de Dios, aunque ininteligible ppara nosotros. La religién era la sinrazén que cosia un mundo de sinrazones. La antitesis de la aspiracién ‘lustrada, Frente a a autonomia y el sometimiento alla ley que uno mismo se da, la heteronomia, a moral establecida por Dios, OTROS ARTICULOS DEL AUTOR No més ocurencias, gr favar Detensa delactwsta Democracia,dpara qué? hitps:i/etpais.com/elpais/2017/07113/opinion!1499082288_209530 hil wsrarr2017 Religiones: Cuando todo as blasfemia | Opinién | EL PAIS Eso era lo que habia, Otra cosa, lo que hay. No es raro ver acierta izquiorda criticar no ya 2 quienes dibyjan caricaturas de Mahoma sino incluso a quienes defienden el derecho a dibujarlas. Para ello no cudan en acudir a argumentos invocados por los reaccionarios de siempre, por ejemplo, cuando intentaron impedir la proyeccién de La vida de Brian. Cuesta entenderlo. Sobre todo porque esa misma izquierda parece dispuesta a presentarse en una iglesia para burlarse de los simbolos cristianos, en lo que, ala postre, a sus ojos no pasaria de ser una fiesta privada de unos cuantos entregados a recrear majaderlas. Por la manana se reclama el cierre de una exposicién por islamofébica y por la tarde se defience el derecho ala blasfemia. En un caso, se descalifica incluso elderecho a criticar clertas ideas y, en el otro, se invoca y se practica hasta impedir la posibilidad de expresarlas © elaborarlas. Un desorden intelectual. O peor. Porque solo veo un modo de compatibilizar las dos practicas: asumiendo que hay una religién verdadera,elisiam. Verdadera 0, en alin sentido, superior. Algo que, francamente, me cuesta digerir porque, incluso sin entrar en honduras teolégicas, les confieso que, en lo que a mi respecta, siompre sera proferible una religién que amenaza con el chantaje del inflorno (Borges) que otra que, on alguna de sus variantes, todo lo excepcional que se quiera, contemple la posibilidad de acelerar el tramite. Poder orinar sobre una imagen de Lenin, pero no del Profeta, reintroduce la sinrazén Mas alla de estas paradojas, al final, parece haberse impuesto una suerte de reclamacién de blindaje especial, de proteccién trent religiones. No tanto sise defiende el debate democrstico. Salvar las dos cosas ala vez no resulta sencilla, al ‘las provocaciones o, incluso, frente alas erticas. Algo muy normal... sise trata de salvar las menos para quienes entienden la democracia como una practica —una aspiracién—de publica racionalidad Ladificultad deriva de la presencia en las religiones —al menos, en las més préximas— de tres componentes que, juntos, resultan incompatibles con la publica argumentacién: ideas (sustantivas) acerca de cémo vivir todos (no me parece mal mi aborto, sino cualquier aborto); ideas (ontolégicas) sobre la naturaleza de la religi6n, como una doctrina referiéa a verdades morales; ideas (epistémicas) sobre cémo fundamentar la dectrina: la autoridad divin destilada en escritura sagrada. En breve: tales religiones pretenderian regular émbitos de la vida colectiva sobre una base doctrinal que solo vale para los creyentes y sostenida en una “racionalidad especial”. Una religion ‘con esas caracteristicas resulta un cuerpo extrano para una sociedad (democritica) que aspira a regirse mediante decisiones basadas en arguments que los otros puedan aceptar. Durante mucho tiempo la tensién parecia decantarse del lado ilustrado. Lareligién, para sobrevivir, habia ido debiltando alguno de sus componentes: su vocacién publica, al cefir el alcance de sus principios a sus miembros (como una secta o los trekkies); la naturaleza de cuerpo doctrinal, para mudarlo en una apafiada técnica de autoayuda; la fundamentacién, invocando razones terrenales (sin apelar a Dios oa sus portavoces), como una ideologia mas, Eso 0 una solucién intermedia que no queda mal resumida en la rmula “la religion otorga sentido ala vida de sus fieles”, lo que equivalia, de facto, a prescincir de toda vocacién de verdad para todos. La religién dejaba de ser religion. El cristianismo ha recorrido esos caminos. Y al aguarse admit su derrota como religion. Que al producto acabado se le siguiera lamando religion es otro asunto que, si caso, preocuparia alos creyentes, La izquierda abandona su voeacién racionalista. Se ha contaminado del virus que combatié Por supuesto, cabia otra solucién: mantener intacta la religion y degradar la democracia, desproveerla de su compromiso racionalsta, universalista y emancipador. Las religiones, sin abandonar su dimensién antirrelativista y su vocacién piiblica ni, por tanto, su afan de proselitismo —que no requiere la conversién—, convivirian en sus respectivos parques temsticos, a la espera de conquistar el monopolio del espacio piiblico. Eso sf. con salvaguardas especiales. Se asume que cada una tiene su particular “racionalidad” que deberia protegerse ante las ofensas. De ahi el especial respeto que reclaman y que no alcanza alas ideologias: podemos orinar sobre una hitps:i/etpais.com/elpais/2017/07113/opinion!1499082288_209530 hil 218rarr2017 Religiones: Cuando todo as blasfemia | Opinién | EL PAIS imagen de Lenin, pero no sobre una del Profeta. Un mal negocio para los ideales democraticos que reintroducen porla ventana de la pluralidad la sinrazén expulsada por la puerta lustrada. £l resultado: una trama de iprotecciones especiales” que complica lalivertad de pensamiento, Ala minima presencia de ideas que se juzgan provocadoras”, en una publicidad, en un periédico o en una obra artistica, aparece la (des)calificacién Cislamofobia") que evita argumentar e, inmediatamente, se pide su desaparicién del espacio puilico. Porque, se dice, “se ofenden sentimientos religiosos": un argumento cochamibroso porque, ademas de imposible de probar, cen la medida en que “el testimonio" es un estado mental incontrastable (“ris sentimientos"), desmerece al dios de turno, susttuido come objeto de la ofensa por el creyente. Mal asunto. Mientras las religiones tercien sobre aspectos de la vida puiblica han de estar expuestas al mismo trato que las otras ideas. Con todo, no es eso lo peor. Lo grave es que ese proceder se ha generalizado y no hay causa colectiva —justa o no— que, ala menor critica, no apele al agravio ono descalifique invocando alguna "fobia". Como razonar resulta fatigoso, mejor acudir al expediente de la ofensa a los sentimientos. Hasta los panaderos piden la supresién de refranes. EI dafio mayor es para una democracia que, poco a poco, se va desprendiendo de sus endebles vinculos con el debate racional. Las mejores causas se degradan cuando se defienden con prejuicios y prohibiciones. Con supersticiones. La izquierda, por ese camino, abandona su genuina vocacién emancipadora, racionalsta, Se contamina del virus que combat. Y Lepe pendiente de homenaje. Aguantando, Félix Ovejro es profesor dela Universicnt ce Barcelona Puedes seguir EL PAIS Opinién en Facebook, Twitter o suseribirte aqui ala Newsletter Copiién -Democraci slamofoble -xenofobla -Musulmanes - lam -Disriminaclén - Grupos socisles Regn -Prejulcles -Poics Problems sociales Sociad CCONTENIOD PATROCINADO Letii ort SCosasquesuBanquerono BBVA. Calabanky Rankine Impresionante mur de rojo desea que sted sepa ‘rele de deribo en boss. nLandres americana, bseandorefago, HARPERSBAZ (eACNUR ORG) rOREN (esTRATEGIS DE vy AbEMAs.. banki: mut ee, Vilar, cardenaly Méndez de ELD dela boda de Mest ‘Sean Penn: gran bron al lregalo que pide vieo reveld mgesiodeStairaal —_noviedesuhijayligrimasde matron Mess als eularafesta suet Invitados hitps:i/etpais.com/elpais/2017/07113/opinion!1499082288_209530 hil aia