ESTUDIO BIOGRÁFICO DE ISAÍAS

Carmen Fernandez
Instituto Bíblico Rio de la Plata
 Instituto Bíblico Rio de la Plata
Materia: Isaías
Profesor: Ángel Ortiz
Alumna: Carmen Fernandez

Nacimiento y temprana edad

Isaías nació alrededor del 760 a.C. en Jerusalén. En Is 1:1 se menciona el nombre de su padre
Amoz, Según la tradición rabínica el nombre de el padre de un profeta solo puede ser retenido
por la tradición si ha sido también profeta. De modo que Isas pertenecía a una familia de
profetas. También sabemos que la tradición considera a Amoz como el hermano del rey Amasías
(796-781) a.C., padre de Uzías y de este modo, a Isaías como un primo del rey judío en el año de
cuya muerte recibió su llamado (Is 6:1).

Esto se demuestra en el hecho de que él tenía acceso inmediato al rey, a la corte (Is 7:3) y
también a los ámbitos más internos del templo (Is 6:1). Estaba bien familiarizado con la ciudad
y utiliza metáforas urbanas como Amos utiliza metáforas pastoriles. También conocía muy bien
el templo y sus rituales.

Experiencia de conversión
La mayor influencia espiritual en su vida fue la crisis que experimentó en el templo en el año
que murió el rey Uzías, cuando tenía aproximadamente 20 años. Los eruditos no concuerdan en
si esta fue su visión inaugural o si ocurrió cuando Isaías ya tenia algunos años de experiencia en
la predicación. Como sea, sirvió para profundizar su espiritualidad y clarificar sus percepciones
del carácter de Dios y la naturaleza de su propia vocación.

Podemos señalar que la experiencia fue súbita, visual y auditiva. En ella el Dios trascendente
se reveló en majestad y gloria a su criatura en adoración. Isaías vio la visión y oyó el cántico de
los santos y la voz del Dios eterno. En contraste con el Dios santo vio su propia impureza, y
debido a esta fuerte convicción de pecado, confiesa ser de labios impuros Is 6:5. El resultado fue
una limpieza de sus labios y vida que lo hicieron capaz de llevar adelante la comisión divina.

Habiendo oído del Eterno la búsqueda de un embajador, Isaías respondió inmediatamente.

Con una vida transformada ahora estaba dispuesto para recibir las órdenes. Debía ser vocero de
Dios consejero político y religioso en Jerusalén, hasta que las ciudades quedaran desoladas y sin
habitantes. Tenía que llevar adelante este ministerio sabiendo de antemano que muchos no le
escucharían y que sólo se salvaría un remanente que llegaría a ser el núcleo de una nueva Sion
y la sustancia de una simiente santa.

Ministerio
Isaías profetizó en Jerusalén durante los reinados de Uzías, Jotam, Acaz y Ezequias. Hasta su
muerte a manos de Manases, según la tradición. En su juventud presencio el rápido desarrollo
de Judá en un fuerte estado militar y comercial. Bajo Uzías, Judá alcanzo u grado de prosperidad
y fuerza del cual no habían disfrutado desde los días de Salomón. Pero con los subsiguientes
reinados y las constantes amenazas exteriores el reino entro en decadencia nuevamente. En 734
se sucedió la guerra sirio-efraimita. Entonces por orden divina el profeta se presento ante el rey
Acaz. Procuro que este no recurriera a la ayuda de Asiria estimulándolo a la fe y a la confianza
en Dios. El monarca no accede y el responde con el vaticinio del Emanuel. En vista de que no
puede influir sobre el rey ni en la corte, el profeta recurre a sus discípulos y al pueblo.

Luego el profeta aparece ante Ezequias para reprocharle su alianza con el babilonio Merodac
Bladam para enfrentar a los asirios. También lo sana de una enfermedad y permanece junto a el
durante todo el sitio de Senaquerib.
 Instituto Bíblico Rio de la Plata
Materia: Isaías
Profesor: Ángel Ortiz
Alumna: Carmen Fernandez
Desde el principio él tenía como inquietud el futuro de Jerusalén como centro de la vida
política y religiosa de Judá, que él veía amenazada por las irregularidades sociales y culturales.
Critica a la dirigencia social como “gobernantes de Sodoma” (Is 1:9) y “Pobladores de Gomorra”
(Is 1:10). En los primero años Isaías parece haberse ocupado mas bien de la política interior,
abriendo la perspectiva de la salvación, pero solo bajo la condición de una verdadera
modificación del comportamiento Is. 1:19. El condicionamiento de su ofrecimiento de salvación
no significa pactismo, sino el tomar en serio la responsabilidad social que resulta de la relación
de Dios con su pueblo. Solo como ciudad de la justicia y la fidelidad Is. 1.26 es posible para
Jerusalén un futuro de parte de Dios.

Evaluación de carácter
La forma en la que el profeta se dirige a la clase gobernante como “gobernantes de Sodoma”
(Is 1:9) y “Pobladores de Gomorra” (Is 1:10), era para algunos interpretes rabínicos un indicio de
su modo de ser duro y antipático. A pesar de provenir de un linaje encumbrado, Todo tipo de
soberbia es un escandalo contra el cual él acomete con toda energía Is. 2:11-12. Esta temática
atraviesa los capítulos 1-39 como un hilo conductor. Y aunque no escatima duras criticas contra
el estrato dirigente de Jerusalén (Is 10:1-4; 28:7-22; 29:9-16; 30:8-17) no sufre represalias por
parte de los guardianes del orden debido a su origen.

Fue poeta y orador, además tenia la vista puesta siempre en el futuro. Sus posiciones siempre
fueron claras, consecuentes y sólidas. Tenía gran preocupación por la justicia social y la rectitud
nacional. Su prédica también tenía proyección mundial, a través de la visión misionera. Si era un
aristócrata de nacimiento también lo era en carácter y en espíritu. Es terriblemente duro e
irónico con las mujeres de la clase alta de Jerusalén (Is. 3:16-24; 32:9-14). Y cuando defiende a
alguien no es a los aristócratas, sino a los oprimidos, huérfanos y viudas (Is 1:17), al pueblo
explotado y extraviado por los gobernantes.

Su relación con otros

Se caso en el 735 a. C. de este matrimonio nacieron dos hijos cada uno de los cuales recibió
un nombre profético. El mayor Sear-jasub “Un remanente volverá” que nació 734 a.C. Y el menor
Maher-salal-hasbaz “El despojo se apresura”. Su esposa es mencionada como “La profetiza” sin
embargo eso no significa que ejerciera ese ministerio más bien parece habérsele dado ese título
debido a la función de su esposo.

Su muerte
No se conoce con precisión la fecha de su muerte, que debió ocurrir después del 701 a.C. La
tradición judía recogida en el Talmud dice que fue asesinado por el rey Manasés quien mando a
acerrarlo por la mitad. Aunque esta tradición fue recogida por carece de fundamento.

La muerte del profeta Isaías no es mencionada en el Antiguo Testamento, sin embargo, es

narrada en un texto de la literatura del periodo del segundo templo. Dentro de esa literatura se
encuentra el texto conocido como La ascensión de Isaías, en este texto se narra la muerte del
profeta Isaías, narrando como fue aserrado por la mitad, esos detalles son mencionados en
varias partes de dicho texto. Por lo tanto es posible que el autor de la Epístola a los Hebreos,
tenía en mente ese texto que menciona al profeta Isaías siendo aserrado por la mitad, y por eso
el autor habla de profetas que han sido aserrados en Hebreos 11: 32 y 36

Algunos de los llamados padres de la iglesia como, Justino, Tertuliano y Jerónimo, también
mencionaron la muerte de Isaías aserrado.
 Instituto Bíblico Rio de la Plata
Materia: Isaías
Profesor: Ángel Ortiz
Alumna: Carmen Fernandez
“..a….acerca de la muerte de Isaías, ha quienes ustedes aserraron a la mitad con una sierra de
madera…” Justino, Diálogo con Tryfo 120

“Con esta fuerza de paciencia, Isaías es aserrado a la mitad y no cesa de hablar acerca del Señor,
Esteban es apedreado y ora por perdón para sus enemigos…” Tertuliano – De la Paciencia 14

Razones para ser incluido en el canon bíblico

Hasta los tiempos modernos el libro de Isaías era universalmente considerado como una
unidad, producto del profeta de su nombre del siglo VIII a.C.. Un solo manuscrito contenía la
totalidad de la obra, hecho que conocemos no sólo por los descubrimientos de Qumrán sino
también por Luc. 4:17 (donde la lectura escogida fue de uno de los últimos capítulos).

La idea de una paternidad literaria múltiple de Isaías vio la luz solamente en los dos últimos
siglos. Su forma más simple y persuasiva es adjudicarle a Isaías los capítulos 1–39, y los capítulos
40–66 a un profeta anónimo que vivió entre los exiliados de Babilonia en el siglo VI a.C. Se sugirió
que, como una secuencia apropiada de Isaías, esa obra fue agregada como un apéndice del libro
y, siendo anónima, finalmente perdió su identidad separada.

Por cierto, puede argüirse que el NT no se pronuncia sobre estos problemas, sino que se reduce
a citar sin digresiones; esta es la opinión de muchos que aceptan su autoridad sin reservas. No
obstante, es una exégesis más directa, a menos que las objeciones sean aplastantes, considerar
que "Isaías" ahí significa "Isaías"; y en todo sentido esta hipótesis pareciera ofrecer una
simplicidad similar. Las alternativas (de las cuales hay más que las que hemos mencionado)
tienden a hacerse más elaboradas mientras más se las estudia.

Bibliografía
1960, R. (1996). Biblia del diario Vivir. China: Tyndale House Publishers.

Berges, U. (2011). Isaías Elprofeta y su libro. Nabarra: Verbo Divino.

Enciclopedia de la biblia. (1964). Barcelona: Garriga impresores.

Pagán, S. (2012). Introduccion a la Biblia Hebrea. Barcelona: Clie.