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Amando a Dios, amando a tu prójimo

Jesús estaba en el templo un día enseñándole a la gente que allí se


había reunido. Un grupo de líderes religiosos comenzó a hacerle
preguntas para que Jesús quedara mal frente a los demás. De esa
manera, los que estaban escuchando a Jesús, dejarían de prestarle
atención. Uno de los hombres le preguntó a Jesús: "Maestro, ¿cuál es el
mandamiento más importante?".

Jesús le contestó: "El más importante es este: Ama al Señor tu Dios con
todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus
fuerzas."

¿Cómo crees que podemos demostrar el amor a Dios con todo nuestro
corazón, alma, mente y fuerza?. Adorando a Dios, estudiando la Biblia,
cantando alabanzas, trayendo nuestras ofrendas y agradeciéndole
todas las bendiciones que nos dá.

Pero, ¿sabes lo que Jesús dijo después? "El segundo es éste: "Ama a tu
prójimo como a tí mismo.”
¿Cómo crees que debemos amar a
nuestro vecino? : Podemos tratarlos
como deseamos ser tratados, ser
bondadosos con ellos, perdonarlos
cuando nos dicen cosas que nos duelen,
ayudarlos en momentos de necesidad y
ser sus amigos.

Esos son los mandamientos que Jesús


pensó que eran los más importantes. No
es muy fácil cumplir esos mandamientos,
¿no es así? Necesitamos la ayuda de Dios
diariamente para poderlos cumplir.
Oremos y pidámosle que nos ayude a
amar como el nos ha pedido.
Son muchos los momentos en que podemos demostrar el amor hacia
LA NUEVA ALIANZA: El Amor
el prójimo cuando: ayudamos, obedecemos a nuestros padres,
cumplimos nuestros deberes, respetamos los derechos de los demás,
Los 10 mandamientos que Dios le da a Moisés, con el tiempo se van
no discriminamos, hablamos sin ofender, etc. Cada vez que cumplimos
multiplicando, hubo personas del pueblo que fueron haciendo
el mandamiento de amor, somos más humanos y hacemos que el
"pequeños mandamientos" llegaron a tener más de 600, pero para
mundo sea cada día mejor.
el pueblo era difícil seguirlos y cumplirlos, Jesús quiso ayudar a su
pueblo y los resumió en dos: Mateo 22,24-40

Jesús nos enseña a amar a Dios Padre y al prójimo como a nosotros


mismos y con la misma fuerza.

No basta con no hacer daño al prójimo, hay que quererlo; Jesús con
sus palabras y sus acciones, muestra la forma de relacionarse con
Dios Padre y con el prójimo. Al despedirse de sus amigos les deja el
Mandamiento del Amor, señal de la Nueva Alianza entre Dios y el
nuevo Pueblo de Dios: Juan 13, 30-34

Son muchas las ocasiones en las que podemos dar y repartir amor:
cuando ayudamos en casa, cuando obedecemos a nuestros padres,
cuando cumplimos con nuestros deberes, cuando ayudamos a
nuestros abuelos o amigos, cuando hablamos sin insultarnos...
Cada vez que actuamos dando o repartiendo amor nuestra
capacidad de amar se hace más grande y colaboramos a que el
mundo sea mejor para todos.

Jesús nos habla que amemos a Dios Padre y al prójimo. Nos dice
que no basta solamente, con no hacerle daño al prójimo, sino que
hay que quererlo, y debemos demostrarlo con nuestras palabras y
acciones, como Jesús nos enseñó.

Jesús, al despedirse de sus amigos les deja el Mandamiento del


Amor, señal de la Nueva Alianza entre Dios y el nuevo Pueblo de
Dios.

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