1.
Un chico listo
Los años de la infancia a Año Nuevo 2000
-¿Por qué la gente monta a caballo?
Pregunta de Magnus antes de cumplir cinco años, en una pausa
después de conseguir montar en un caballo.
Magnus aprendió ajedrez relativamente
tarde para poder convertirse en un Gran
Maestro a los 13 años. Aprendió a mover
las piezas a las cinco, lo cual es lo
suficientemente temprano. Su padre
Henrik, que es un buen jugador de club,
trató de transmitir su amada afición a sus
hijos, y comenzó por colocar todas sus
piezas como en este diagrama:
Magnus jugó con Blancas pero, ¡ay !, las
cosas fueron tan lentamente! Magnus no
pareció entender mucho así que su padre
dejó caer el proyecto. No iba a haber
ninguna hazaña de Polgar aquí. Una
comparación con la familia húngara Polgar
es relevante. También lograron producir
un niño prodigio (o más bien tres!), Pero su
método era muy diferente. Ya a la edad de
cuatro años, Zsuzsa, la mayor de tres
hermanas, tuvo la opción de ser
matemática o ajedrecista. Ella escogió, lo
suficientemente comprensible, ser una
jugadora de ajedrez - mucho más
divertido! - y después de eso se centró
completamente en ajedrez y entrenadores
privados todo el camino. Incluso la escuela
fue abandonada, con los niños,
obteniendo permiso para estudiar en casa
y tomar exámenes por su cuenta.
El padre Polgar consideraba esto
un experimento social. Quería ver si uno
podía formar a un genio. Y, de hecho, lo
consiguió. Zsuzsa se convirtió en un Gran
Maestro y finalmente Campeón Mundial
Femenino, mientras que la hermana
media Sofía se convirtió en un Maestro
Internacional. Pero la más joven, del trío,
Judit, realmente se convertiría en una
superestrella. Era tan buena como
Magnus ahora a una edad comparable,
pero como tenía menos torneos para jugar
necesitaba un poco de tiempo para
convertirse en un Gran Maestro. Cuando
tenía 15 años, cuatro meses y 28 días
consiguió este ansiado título. El título de
ajedrez más alto del mundo. Esto todavía
le dio tiempo suficiente para convertirse en
una de la elite absoluta ajedrecística del
mundo. Hoy es una de las estrellas de
ajedrez más grandes y el 1 de enero de
este año ocupó el octavo lugar en el
ranking mundial.
La familia Polgar también comenzó con
una forma simplificada de ajedrez. Pero en
lugar de un lado jugando sin piezas, los
talentosos maestros de ajedrez se llevaron
todas las piezas de ambos lados, reyes
incluidos, dejando sólo los peones detrás:
El Blanco mueve primero y el primer
jugador que consiga un peón atravesar
hasta la octava fila, gana. Es un juego muy
divertido, inténtalo!
Mientras que las chicas de Polgar se
concentraron duro en el ajedrez desde la
edad de cuatro años, las cosas fueron un
poco más lentamente para Magnus. El
padre Carlsen no vio ningún interés
particular en su hijo y no trató de
presionarlo. Henrik volvió a intentarlo un
poco después cuando Magnus tenía 6-7
años de edad, pero extrañamente las
semillas del ajedrez del chico siguieron
estando bien ocultadas.
Pero un cerebro puede ser utilizado
de otras maneras. La familia Carlsen había
sido persistente en dar a sus hijos desafíos
intelectuales, y rápidamente se hizo
evidente que Magnus tenía cualidades
extremas en el frente analítico. Antes de
los dos años, Magnus podía resolver
rompecabezas con más de 50 piezas, y
cuando tenía cuatro años podía sentarse
todo el día y construir modelos Lego
avanzados con largas instrucciones
destinadas al grupo de 10-14 años.
Después de esos "días de Lego",
donde Magnus estaba completamente
absorto durante horas, podía estar
despierto por la noche, con los ojos muy
abiertos e incapaz de dormir porque
seguía pensando en Lego. Este
sentimiento es bien conocido por los
jugadores de ajedrez, pero entonces todos
los pensamientos vuelan alrededor de las
64 casillas en blanco y negro.
Magnus también desarrolló sus
poderes analíticos temprano con
problemas matemáticos. Este interés
apareció por primera vez cuando comenzó
el primer grado. Uno no encuentra
problemas muy avanzados a esa edad,
pero Magnus pronto fue consumido con
cálculos cada vez más complejos. Podía
resolver problemas en su cabeza más
rápido que cuando salió de la escuela
primaria siete años después - algo se
había perdido en el camino.
Una buena memoria es otra aptitud
importante para aquellos que quieren ser
buenos en el ajedrez - al menos es una
habilidad muy útil. La memoria de Magnus
es formidable. En mis intentos de explicar
a los periodistas ya otros cómo son
impresionantes las actuaciones de
Magnus en el tablero de ajedrez, solía
señalar que a la edad de cinco años
conocía el área y la población de todos los
430 municipios de Noruega. “Entonces
engancha este cerebro al ajedrez, agrega
ocho años de desarrollo y puedes imaginar
de lo que estamos hablando”.
Resulta que no he sido
completamente preciso. Lo que Magnus
sabía de memoria a los cinco años era la
población del área, bandera y capital de
todos los países del mundo. Después de
esto él comenzó un proyecto similar con
todos los municipios de Noruega, una
tarea de aproximadamente dos veces el
tamaño. Aquí podía cometer errores
ocasionales, pero aprendió
"prácticamente todo", incluyendo los
escudos de armas de los escudos
municipales, así como áreas, poblaciones
y capitales.
En nuestras sesiones de ajedrez muchos
años más tarde tuve el placer de
presenciar varios episodios de similar
carácter. Después de que Magnus terminó
segundo en el Campeonato del Mundo
Sub-12 (para jugadores menores de 12
años de edad) en 2002 tuvimos la visita de
un reportero de televisión de Norwegian
Broadcasting. Elogié la memoria de
Magnus y saque uno de los
aproximadamente 500 libros de ajedrez en
mis estantes y dije que Magnus
seguramente recordaba todos estos
juegos.
Mi elección recayó en una colección de los
mejores partidas de Vladimir Kramnik que
yo sabía que Magnus tenía en casa.
Señalé el siguiente diagrama, cubrí el
resto de la página, y pregunté quién
jugaba blanco y negro aquí:
Con un hombre de cámara alerta filmando
todo, Magnus respondió inmediatamente y
correctamente: Kramnik-Ehlvest. Y luego:
"Por cierto, se jugó en Viena 1996”. Eso
también estaba bien.
Esta capacidad de recordar juegos y
posiciones es obviamente muy útil en un
deporte como el ajedrez. En la base de
datos de mi computadora tengo 2.607.014
juegos y eso es sin actualizarlo con los
últimos 50.000 juegos que se han jugado
en acontecimientos importantes en los
últimos seis meses. Los primeros juegos
en la base, que se derivan de los años
1500. Quizá no sean tan interesantes.
Pero, por otro lado, lo que ha sucedido en
los últimos 150 años se desarrolla como la
evolución darwinista, donde los jugadores
emergentes aprenden constantemente de
sus antepasados.
Uno puede leer libros sobre la
teoría del ajedrez donde uno, de alguna
manera, lee el resultado de este largo
desarrollo. Pero si uno es verdaderamente
fiel al ajedrez, debe volver a través de la
historia y estudiar las partidas de los viejos
maestros y seguir las partidas de los
Grandes Maestros modernos, donde la
teoría del ajedrez se está desarrollando a
un ritmo frenético. Lo que se evaluó como
bueno para el Blanco el año pasado puede
ser bueno para el Negro ahora, gracias a
una nueva idea sorprendente de un
jugador conocido. Así que simplemente no
puede memorizar el ajedrez - el material
es demasiado dinámico. El ajedrez debe
ser entendido. Pero la comprensión debe
fundarse en algo, y la memoria viene como
una herramienta importante.
El enorme flujo de información
informática también ha planteado
desafíos. Con algunas pulsaciones de
teclas simples se puede categorizar todos
las partidas en una base de datos de
diferentes maneras. Sólo tarda unos
segundos en conseguir todas las partidas
de cualquier posible oponente. Por
ejemplo, me tomó ocho segundos
encontrar todos los aproximadamente 300
partidas que Magnus ha logrado jugar
hasta ahora en torneos internacionales.
Las partidas de los eventos menores no
aparecen, pero todos los juegos de
Grandes Maestros y todo lo importante se
agrega constantemente encima de un
archivo ya extenso de material.
Así que cuando Magnus se
prepara antes de una partida toma poco
tiempo para comprobar las partidas del
oponente y averiguar qué aperturas él o
ella juega y luego encontrar algo que hacer
en contra de eso. Pero también exige una
capacidad para absorber grandes
cantidades de información. Después de un
tiempo hay tanto que digerir que
rápidamente puede convertirse en caos.
Magnus también tiene una fantástica
habilidad para leer libros de ajedrez. A la
edad de nueve años podía sentarse
durante horas con libros de ajedrez
avanzados en inglés y jugar a través de los
juegos en su cabeza, sin un tablero y
piezas.
Los verdaderos jugadores de ajedrez leían
libros de ajedrez de la manera que otros
leían las revistas de variedades y esto era
algo que Magnus aprendió temprano.
Justo antes de que Magnus hiciera
su primera norma de Gran Maestro en Wijk
aan Zee en los Países Bajos en enero de
2004 hubo otro episodio impresionante en
el que tuvimos un pequeño vistazo de lo
que está en el cerebro de este niño
pequeño. Nos sentamos con todos los
estudiantes de ajedrez de NTG
(Norwegian College for Top Athletes) y
analizamos el juego de un alumno.
Después de una variante inusual en la
defensa de Petroff y los movimientos: 1 e4
e5 2.Cf3 Cf6 3 Cc3 Ab4 4 Cxe5 0-0 5 Ae2
Te8 6 Cd3 Axc3 7.dxc3 Cxe4 8 0-0 d5 9
Cf4 c6 10 c4 d4, teníamos la siguiente
posición en el tablero
Yo no sabía esto y pensé que la posición
parecía un poco extraño. Para Magnus,
por otra parte, esta posición movía algo
profundo en su subconsciente, porque
repentinamente dijo: "¡Esto es Adams-
Hubner!", en otras palabras, una partida
jugada entre estos dos grandes maestros.
Los que estaban reunidos estaban
bastante impresionados. Por diversión, le
pregunté si también recordaba dónde y
cuándo se había jugado la partida.
“Dortmund 1997” fue la respuesta
inmediata. Se revisó en la base de datos
para comprobar rápidamente si esto era
correcto. Fue, excepto que la partida se
jugó en 1996, no en 1997 – esta noticia fue
recibida con abucheos irónicos y gritos
sarcásticos de decepción y burla de los
demás. Y eso que estaba en una posición
de una apertura extremadamente inusual
que Magnus nunca había jugado con
blancas o negras.
El día anterior Magnus había dado una
simultánea de ajedrez con los ojos
vendados, contra cinco de los estudiantes,
que estaban entre los mejores jugadores
juveniles de Noruega. Ninguno de los
jugadores tenía un tablero o piezas, pero
para hacer que sea poco más fácil para los
estudiantes les dejó anotar los
movimientos. Magnus acabó de dar la
vuelta sin ningún tipo de ayuda, sólo
viendo los juegos en su cabeza, y ganó
fácilmente 4 1/2, 1/2, es decir ganó cuatro
partidas y una fue empate. Los juegos
eran largos y complejos, pero Magnus no
tenía problemas para mantener un registro
de todo en su cabeza y además superar a
la élite junior del país. El gran maestro
Rune Djurhuus tiene el récord noruego
para el juego de ajedrez simultáneo con 14
juegos, que también es muy
impresionante. Traté de hacer lo que
Magnus hizo contra los mismos cinco
estudiantes, pero tuve que admitir que no
tenía ninguna posibilidad de tener éxito.
Después de sólo unos pocos movimientos
todo se convirtió en una mezcla y ya no
podía recordar nada.
Si realmente va a convertirse en un
jugador de ajedrez superior sin embargo,
no es sólo lo suficiente con una cabeza
bien entrenada - uno también tiene que
estar físicamente en forma. Una partida de
ajedrez de torneo a menudo puede durar
de cuatro a cinco horas y es como un
examen exigente. Y en un torneo a
menudo se juegan nueve partidas en total.
En los últimos años Magnus ha jugado
100-150 partidas de torneo al año y esto
es sin duda físicamente exigente.
 Entre todo el juego y el estudio de
Magnus es un muchacho joven activo -
como cualquier joven promedio de 13 años
de edad. Muchas veces no ha tenido
tiempo de estudiar ajedrez conmigo
porque tenía que ir a esquiar o jugar en un
partido de fútbol. El fútbol tiene un
atractivo especial para Magnus. Juega
como un pequeño terrier y se deleita
claramente en todo lo que se mueve
alrededor. Incluso ha competido en el salto
de esquí, pero optó por retirarse a la edad
de diez años. Su récord personal es de 21
metros.
Los Carlsens caminan a menudo por las
montañas y Magnus ama escalar picos,
pero él es incluso más ocupado que con
las actividades intelectuales. Una vez,
cuando Magnus tenía cinco años, el padre
Henrik llevó a los niños - Magnus y las
hermanas Ellen e Ingrid - en un viaje de
dos días hacia el noroeste en Jotunheimen
desde su cabaña en Tyinkrysset. Se
dirigieron a Juvasshytta y esperaban
formar parte de un grupo que ascendiera
hasta Galdhøpiggen, a 2.469 metros de la
montaña más alta de Noruega. Pero
Magnus era demasiado pequeño y no se
les permitía unirse. Magnus sin embargo
quería llegar a la cima. Así, partieron en
otro camino más largo y así lograron
escalar el pico más alto del país.
Después, su padre, en broma,
preguntó cuál había sido el punto
culminante del viaje: escalar a
Galdhøpiggen, esquiar slalom en
Juvasshyua o ver el escudo municipal del
pequeño Luster, que Magnus reconoció de
su libro de anotaciones. Magnus tomó la
pregunta en serio y después de un largo
pensamiento respondió: "¡Eso habría sido
el escudo municipal!"
Magnus es también un ferviente
entusiasta de los deportes. A la edad de
seis o siete años comenzó a leer los
volúmenes deportivos gruesos que
registran todas las mejores actuaciones
del año. Él los leyó de la misma manera
que se lee sobre países y municipios, no
tratando de aprenderlo todo de memoria,
sino solo recordando lo que se lee. Las
páginas de deportes en los periódicos
también se examinan con diligencia.
También le gusta ver programas de debate
en la televisión y escucha con entusiasmo
las crónicas históricas y las sagas
vikingas.
Montar, por otra parte, es un
pasatiempo que es más popular entre sus
hermanas. Cuando tenía cuatro años y
medio, de nuevo en la cabaña de
Tyinkrysset, Magnus tuvo la oportunidad
de montar a caballo cuatro días seguidos.
Todo el mundo pensó que esto era
fantástico, pero de repente Magnus, que
estaba sentado con las piernas colgando a
caballo, preguntó: "¿Por qué la gente
monta a caballo?" Pasarían otros cinco
años antes de volver a subir a caballo.
Magnus aprendió las reglas del ajedrez
cuando tenía cinco años, pero eso no le
impidió seguir cayendo en un Mate Escolar
como un niño de ocho años, algo que
tiende a ser lo primero que un principiante
aprende. Va como esto: 1. e4 e5 2. Ac4
Cc6 3. Dh5 Cf6 4. Dxf7 mate.
Pero entonces las cosas finalmente
comenzaron a suceder. Magnus comenzó
a sentarse a solas y mover las piezas.
Podía sentarse durante horas moviendo
las piezas, en patrones conocidos y
desconocidos, encontrando
combinaciones y repitiendo partidas o
posiciones que su padre le había
mostrado. De esta manera, desarrolló un
buen sentimiento para los patrones de
movimiento de las piezas individuales.
A menudo jugaba consigo mismo y
generalmente miraba, las combinaciones
para ambos lados. Si, por ejemplo, el
Blanco tenía presión, fácilmente dejaría
que el Negro hiciera un movimiento
descuidado que le permitiera una buena
combinación, lo que le daría mucho placer.
De esta manera construyó un ojo táctico y
un interés por los secretos de las
combinaciones de ajedrez.

Ocho años y siete meses de edad participó

en su primer torneo. En el Campeonato de
Noruega en Gausdal en julio de 1999
Magnus anotó 61/2 de 11 en la clase más
joven. Él no estaba por encima de dejar
peones colgando, pero el disparo inicial de
su carrera había sonado. En otoño
Magnus jugó en muchos torneos infantiles
en su área y su progreso fue
inmediatamente explosivo. En el momento
en que conocí a Magnus en enero de
2000, de nuevo en un torneo de Gausdal,
era fácil ver que era excepcionalmente
talentoso.