Experiencia personal en el servicio social

A lo largo de este semestre trabajé en el archivo histórico “Hugo Blanco Miranda”, del

Seminario Conciliar de Ciudad Juárez. Ayudé a clasificar los diversos archivos de Manuel

Talamás Camandari: libros, periódicos y documentos producidos por él. También clasifiqué

documentos de otros seminaristas y la recuperación de libros antiguos. Mi experiencia fue

gratificante, mis conocimientos se ampliaron en Archivística, reforzando algunos

conocimientos ya adquiridos en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, mostrándome

en varias ocasiones, una perspectiva diferente e interesante para acercarme al mundo

religioso. La experiencia personal, es aún mejor ya que siento que me ha ayudado a

madurar, a ser más responsable. Recomiendo la experiencia porque es necesario rescatar el

pasado y abrir las perspectivas para enriquecerse en muchos ámbitos. Sobretodo para

aprender más allá de todo lo que los libros, el cine, el arte, la ciencia, las historias prestadas

o ajenas nos pueden dar.

La necesidad de escribir sobre mi experiencia de servicio social surge por diversas

razones, la más significativa surge de la circunstancia de integrarme a un proyecto que

promueve la promoción del rescate histórico, su quehacer profesional de la misma forma en

que la he ido construyendo a lo largo de mis estudios y las pocas experiencias vividas en el

trabajo práctico. Una razón más que me motivó a escribir mi experiencia fue la imposición

de saberes en donde el que tiene un mayor nivel de conocimientos y experiencia en el

ámbito profesional es quien está en condiciones de imponer su verdad, para decir qué está

bien, mal y la forma en cómo futuros profesionales debemos saber actuar y comportarnos.

Javier Iván García Vázquez