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La división social del trabajo y el nivel desarrollado logrado por las fuerzas
productivas, es muy importante, puesto que se correlaciona con el carácter del
régimen social e indica las relaciones sociales en cuyo ámbito se hace el trabajo.
Al cambiar la forma división se crean condiciones para el total desarrollo del
hombre.
De acuerdo a una frase celebre “nadie debe hacer a otro lo que no quiere que le
hagan a él”, debería regir para que no se causara nada de daño.
Finalmente podemos afirmar que nuestra sociedad de hoy en día es una mezcla
de cultura: vestimentas, gustos, música, colores y sabores; la diversidad es
gigantesca. Sin embargo, existe la discriminación de algunas culturas y violencia
provocada por personas poco tolerantes y respetuosas.
La sociedad ideal solo es un deseo, es tan buena hipotéticamente que nos hacer
imaginar como sería. Se tendría que concientizar a los millones de personas que
habitan el planeta, y con esto lograr ese tan añorado objetivo y que sea definitivo.
Realmente cada sociedad es el reflejo de la participación de sus miembros, por lo
tanto definitivamente todos tendrían que estar de acuerdo y de no ser así, en caso
de que se lograra tal sociedad, tendría una sombra detrás.
CONCLUSIÓN
Debido a la autodestrucción social provocada por la violencia, inseguridad e
injusticia, las personas han despertado del sueño de aceptación de hechos
dañinos que consideraban ya por naturales para las relaciones sociales.
La sociedad ideal es hipotética, será muy difícil formarla, pero no imposible. Todos
los individuos deben participar, se debe educar a las generaciones presentes y
futuras y trabajar por un fin en común, el bienestar de todos.
El pilar más importante para la construcción de una sociedad ideal son los
individuos. Deben tener la iniciativa de cambiar. Con esto, cambiarán su forma de
pensar, cambiarán su forma de gobierno a la que más convenga, serán educados
y educarán a sus hijos y trabajarán por el bien común.
Se debe iniciar con continuidad y constancia y se debe ser paciente, este cambio
sería histórico, pero llevaría mucho tiempo para llevarlo a cabo y completarlo. Se
resalta que el futuro de la sociedad está en manos de la misma sociedad, es decir,
de sus miembros.