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LA ITNERCEPCION DE TELEFONOS

La interceptación telefónica se ha convertido en una práctica común en la


República Dominicana y si se practica de forma ilegal puede ser sancionada hasta
con dos años de prisión.

Esta situación refleja la falta de control se registra en República Dominicana con


las intervenciones telefónicas, según la opinión de abogados penalistas como
Cándido Simó y Carlos Olivares.

Las intervenciones telefónicas son más comunes en celulares e incluso personas


importan equipos de hasta un millón de dólares para realizar este tipo de
operaciones.

Intervenir teléfonos sin autorización de un juez es penado por varias legislaciones


y por la Constitución de la República.

Las intercepciones telefónicas y electrónicas ilegales se denuncian en el Instituto


Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel), la Fiscalía y la Dirección de
Inteligencia Delictiva de la Policía Nacional.

LA CLAUSURA DE LOCALES

Artículo 257 del Código Tributario de la República Dominicana con multas y/o
suspensión de actividades o clausura de locales; sin perjuicio de que,
cuando el incumplimiento configure cualquier otra infracción tipificada y
sancionada por el referido Código, por leyes tributarias especiales, o por otros
reglamentos, se le aplique, además, la sanción consignada en la respectiva
disposición legal que resulte aplicable.

OBLIGACIONES DE TESTIFICAR

La declaración de testigos es una diligencia de investigación sobre unos hechos


delictivos cometidos cuyo fin es contribuir en el esclarecimiento de los hechos así
como la comprobación e identificación del presunto autor. Esta diligencia está
recogida en la Ley de Enjuiciamiento Criminal en los artículos 410 a 450.
La regla general establece que podrá ser llamado como testigo cualquier persona
física residente en el territorio español con independencia de su nacionalidad que
pueda aportar algún dato de interés con respecto a la investigación de los hechos.
Esto crea un deber de comparecer y de declarar acerca de los hechos sobre los
que sean interrogados siendo sancionados en caso de no colaborar.

QUIENES NO TIENEN OBLIGACION DE COMPARACER

Un derecho de carácter general es que, el imputado tiene que estar presente en la


actuación procesal, y por tanto puede erigirse en ocasiones en una carga, con las
importantes consecuencias de poder ser ejercitado facultativamente en la práctica.
La doctrina entiende que dicha presencia se configura como un deber, de forma
que, en caso de ausencia o incomparecencia del mismo resulte efectiva.

Hoy en día existe mayor viabilidad, pues la regla es la libertad del imputado,
contraria a la anterior legislación cuya regla era la prisión, favoreciendo así en la
actualidad de esa manera su sometimiento garantista.

El pretendido deber, del imputado arranca desde los términos antiguos es que la
ausencia era considerada como una conducta ilícita.

Con relación a la naturaleza obligatoria y su justificación, se parte de una triple


consideración del imputado:

1- Como parte procesal


2- Como sujeto de un medio de prueba; y
3- Como objeto de la eventual sanción que podría dictarse en el proceso.

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