UNIDAD TEMÁTICA 3.

EDUCACIÓN Y DIVERSIDAD CULTURAL

Uno de los mayores problemas para la eliminación de la discriminación es la di

ficultad que las personas tienen para reconocerla a un nivel personal. Para combatir la
discriminación, es necesario tomar medidas como: ser consciente del pensamiento
estereotípico que se utiliza para comprender el mundo circundante e Identificar los est
ereotipos que se utilizan comúnmente y explicar el origen de los mismos. La discrimi
nación también está presente en la escuela. Algunas de las actividades que se propon
en revertir la discriminación son:

1) Hacer el ejercicio de descubrir y reconocer los estereotipos y prejuicios pro

pios. Identificar algunos estereotipos que usemos cotidianamente y prejui
cios que se puedan tener.
2) Preguntarse si ha sido discriminado alguna vez.
3) Sentirse bien con uno mismo. Esto es importante en el momento de acept
ar a los que son diferentes, pues no tendrá que utilizar prejuicios para au
mentar su autoestima. Si aceptamos que somos diferentes aceptaremos
más fácilmente las diferencias de los demás.

En el derecho internacional, una de las áreas que ha merecido especial atenció

n ha sido la discriminación que se ejerce en el plano de la educación. La Declaración
Universal consagra a la educación como un derecho, estipula que ésta debe ser gratui
ta al menos en lo concerniente a la educación elemental y fundamental (art. 26). Por o
tro lado, la Convención relativa a la lucha contra las Discriminaciones en la esfera de l
a Enseñanza (1960) es uno de los primeros instrumentos internacionales aprobados p
or Naciones Unidas referidos a erradicación de la discriminación.

Son variados los espacios y modalidades en que la discriminación se manifiest

a:

● Segregación escolar

●Currículum

●Docentes

● Infraestructura física y material.

La educación, en sus orígenes tendió a la

homogeneidad, se hace prevalecer lo parecido o similar entre individuos, a veces en
desmedro de las diferencias. Se adopta una postura en la que se pretende que los alu
mnos actúen y piensen lo mismo y si no lo hacen sufren las consecuencias de ser co
nsiderados desadaptados. En cambio, la diversidad plantea el reconocimiento de las
diferencias individuales, y la formulación de estrategias para su abordaje para la s
uperación del pensamiento estereotipado.

La educación es un acontecimiento político, las políticas educativas son política

s públicas. La forma de educar a los ciudadanos es un asunto del Estado y se relacion
a con el tipo de sociedad que se desea lograr. Algunos de los interrogantes que se pl
antean son: Cuál es el tipo de educación que se quiere implementar y para qué socie
dad esos interrogantes, subyacen las políticas educativas.
 Es muy importante reconocer la dimensión política que posee la educación, m
uchas veces oculta tras la supuesta neutralidad de una pedagogía que aparenta ser n
eutra. La educación está siempre ligada a un proyecto político y el “qué aprender” y
“quién ha de enseñar” son los puntos principales en la agenda educativa de las institu
ciones. Por supuesto, el contenido del plan de estudios, la manera de formar y de sele
ccionar a los profesores, son factores importantes para el desarrollo de los procesos e
ducativos, pero la educación no es una cuestión meramente técnica, ni un asunto de e
xpertos.

Existen tres enfoques educativos que consideran la Diversidad Cultural:

a) El enfoque “asimilacionista”

b) El enfoque multicultural

c) El enfoque intercultural

Se pueden distinguir tres tensiones fundamentales que las políticas educativas

deben enfrentar para definir si se sitúan más cerca de la discriminación o del pluralism
o. Estas tensiones se pueden resumir en tres:

●La pertinencia
se refiere a la tensión que debe resolver la escuela en torno a la identidad cultural.

●La
convivencia se refiere a la tensión que la educación debe hacer frente en relación a la
convivencia pacífica.

●La pertenencia
se refiere a la tensión que debe enfrentar la escuela en torno al eje de la equidad.

En síntesis, las políticas educativas y la escuela deben enfrentar el hecho de la

diversidad cultural, resolviendo tres problemas:

1.Cómo hacer que los aprendizajes sean culturalmente pertinentes y cómo edu
car en la interculturalidad, es decir, por un lado se incremente la autovaloración y la id
entidad propia y por otro lado, se valoren las diferencias culturales y se las utilice com
o recurso pedagógico.

2.Cómo educar a personas de distinta procedencia, de diferentes etnias y con

distintas capacidades en los valores de la convivencia pacífica y del trabajo solidario.

3.Cómo el sistema educativo puede propiciar una educación inclusiva y atender

a sus alumnos y alumnas con el fin de disminuir al máximo la desigualdad de oport
unidades con que ingresan, cualquiera sea su condición cultural o social.

Finalmente, si se agruparan, por un lado los extremos positivos de estas tres t

ensiones y, por el otro los extremos negativos, se conformarían dos paradigmas en tor
no al tratamiento que la escuela realiza de la diversidad cultural:
 ●El paradigma del
pluralismo cultural en torno a los extremos positivos de dichas tensiones: aceptación d
el otro, tolerancia e inclusión.

●El paradigma de la discriminación cultural

en torno a los extremos negativos: homogeneización, intolerancia y exclusión.