“PROTOCOLO DE EXPOSICIÓN OCUPACIONAL A RUIDO: PREXOR”

El propósito asignado a éste protocolo vigente desde el 26 de Noviembre del año 2011, y actualizado
posteriormente el 14 de Octubre del 2013, desarrollado por diversos profesionales participantes del Instituto
de Salud Pública de nuestro país, el propósito es contribuir a disminuir la incidencia y prevalencia de hipoacusia
de origen ocupacional, a través del establecimiento de criterios comunes, líneas de acción y recomendaciones
para el manejo integral del trabajador expuesto ocupacionalmente a ruido, con la finalidad de preservar la salud
auditiva, prevenir y detectar precozmente daño auditivo, definiéndose las etapas y acciones complementarias
de vigilancia ambiental y a la salud correspondientes que eviten la progresión del daño.
Dentro de las enfermedades profesionales, la hipoacusia por exposición a ruido laboral presenta desde tiempos
remotos una alta prevalencia, principalmente en áreas industrializadas, consiguiendo que esta pérdida auditiva
afecte al individuo al interactuar tanto en el ambiente social como laboral.

Al interior de algunas empresas, se encuentra un marco de Vigilancia Ambiental establecida en el enfoque de

gestión del riesgo en dichas empresas con presencia del agente ruidoso con niveles sobre el criterio de acción,
que es básicamente un sistema de seguimiento a los trabajadores expuestos ocupacionalmente a ruido, en el
que además está incluida la Vigilancia de Salud. Ambos tipos de vigilancia tienen ciertas medidas que deben ser
cubiertas para poder ejecutar el programa PREXOR.

El objetivo de la Vigilancia Ambiental es evaluar la exposición a ruido a la que se encuentra vulnerable el

personal en sus lugares de trabajo, para adoptar de manera oportuna y eficaz las diversas medidas preventivas
o protectoras según corresponda.
La Vigilancia de Salud en cambio, entrega las recomendaciones mínimas para detectar y prevenir el inicio y/o
avance de la Hipoacusia Sensorioneural Laboral (HSNL) en trabajadores con exposición ocupacional a ruido a
niveles iguales o superiores al Criterio de Acción.

El llamado “Criterio de Acción”, corresponde a una dosis igual al 50% del límite permisible (82 dB), si dicho límite
es excedido dará lugar a la ejecución de medidas de control técnicas y/o administrativas, destinadas a disminuir
la exposición ocupacional a ruido, junto con la incorporación del trabajador al programa de Vigilancia de la Salud
Auditiva.

Además, contempla algunos indicadores como:

 Dosis de ruido: corresponde al porcentaje de ruido percibido por un individuo en una jornada laboral
diaria.
 Dosis de acción: corresponde al 0.5 o 50% de la dosis de ruido permitida por la normativa legal vigente.
 Nivel de acción: el valor de 82 dB, es equivalente a una Dosis de Ruido de 0,5 o 50%, para un tiempo
efectivo de exposición de 8 horas diarias.

El programa de Vigilancia de la Salud Auditiva propuesto por el PREXOR, incluye a todo trabajador definido como
expuesto y el tiempo que este deberá permanecer en el programa de vigilancia corresponderá al tiempo que
dure la exposición a ruido a niveles iguales o superiores del Criterio de acción definido.
El trabajador deberá permanecer en vigilancia auditiva durante el periodo que dure su exposición al ruido en su
lugar de trabajo, donde se realizarán las siguientes evaluaciones auditivas:
-Audiometría de base: dentro de los 60 primeros días de exposición ocupacional a ruido, a niveles iguales o
superiores al Criterio de Acción, considera si se debe a una HSNL.
-Audiometría de seguimiento: es el examen de vigilancia y se realiza de forma periódica, siendo comparada con
la audiometría inicial para ver si existen variaciones en las respuestas, pudiendo ser realizada en terreno o
cámara audiométrica.
-Audiometría de confirmación: confirma la variación de los resultados obtenidos en la audiometría de
seguimiento, debe ser realizada dentro de 30 días si existe una diferencia > ó =15 dB en la audiometría de
seguimiento. Se realiza sólo en cámara audiométrica.
-Audiometría de egreso: determina la presencia o no de hipoacusia, se realiza en un plazo de 1 año de realizada
la audiometría de seguimiento y haber dejado la exposición.
Si el resultado de la audiometría de confirmación resulta positivo a HSNL, con porcentaje de incapacidad de
ganancia ≥ a 15%, se derivará al trabajador a una Evaluación Auditiva Médico Legal, por el contrario, el
trabajador continuará en el programa de vigilancia.
Si existen dudas en la interpretación de la audiometría, estos casos deben ser evaluados por el médico OTL,
quien podrá solicitar exámenes complementarios.

En el caso de detectarse una Hipoacusia Sensorioneural, es necesario determinar, implementar y/o reevaluar
las medidas de eliminación o control del riesgo de dicho puesto de trabajo con la finalidad de proteger la salud
del resto de los trabajadores.

La Evaluación auditiva debe ser complementada con la capacitación individual o grupal de los trabajadores;
considerando:
-Factores que pueden incrementar los efectos del ruido.
-Efectos de la exposición al ruido, sus consecuencias y síntomas.
-Aspectos para que el mismo trabajador detecte posibles grados de hipoacusia.

Según los resultados de Dosis de ruido diarias obtenidas en las evaluaciones cuantitativas realizadas a los
trabajadores, se establecen algunos plazos para implementar soluciones de control de ruido en las empresas,
los cuales serán cada 3 años para aquellas exposiciones ocupacionales, donde las dosis de ruido diarias sean
menores a la Dosis de acción. También, se establecerá un plazo máximo de 1 año para ejecutar medidas de
control, si la Dosis de ruido diaria se encuentra entre 0,5 y 10 (10 veces la DMP =1); y se establecerá un plazo
máximo de 6 meses para implementar medidas, si la dosis de ruido diaria está sobre el valor de 10 ó si se
constata la presencia de ruido impulsivo de magnitud mayor a 135 dB peak.

Es por esto que la conservación de la salud auditiva en ambientes muy contaminados acústicamente es
primordial para proteger a los trabajadores expuestos ocupacionalmente a grandes ruidos de manera diaria y
constante, para que, si existe algún tipo de pérdida auditiva, esta no progrese significativamente en un corto
período de tiempo.