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2) IMPACTO DE LA DIETA EN LA COLECISTIS Y EL CANCER GASTRICO

COLECISTITIS Y DIETA

Es habitual en la práctica médica cuando se tratan pacientes con cuadro abdominal agudo encontrar
enfermos que sufren de colecistitis aguda1.

Consiste en la inflamación aguda de la pared vesicular que puede ser de carácter leve (edema) e
involucionar de forma espontánea o evolucionar hacia la necrosis y ulterior gangrena vesicular con la
consiguiente perforación del órgano y aparición de una peritonitis biliar1.

En el 90% de los casos se encuentra asociada a colelitiasis aunque puede verse bilis de éxtasis
y bacterias, jugando un rol menor la irritación por jugo pancreático1.

La colecistitis aguda alitiásica habitualmente se asocia a un mal vaciamiento de la vesícula biliar


como suele suceder en la inanición, cirugía mayor, nutrición parenteral y los traumatismos. Puede
aparecer en las enfermedades sistémicas tales como vasculitis, periarteritis nodosa, lupus
eritematoso sistémico, brucelosis sistémica, en el curso de una actinomicosis o en pacientes
inmunodeprimidos1.

Colecistitis aguda litiásica.

Representan el 90-95 % de las colecistitis agudas desencadenándose el cuadro habitualmente por la


obstrucción de la vesícula biliar debido al impacto de un cálculo a nivel del cuello vesicular o del
conducto cístico. Aunque este mecanismo no está totalmente esclarecido1.
Así, al obstruirse el orificio del conducto cístico se produce una contracción intensa de la vesícula
causando dolor (cólico biliar). Al no transitar los cálculos a través del conducto las contracciones
aumentan y se produce edema de la pared vesicular. Si se mantiene el edema se lesiona la mucosa
y se comienzan a liberar enzimas, (fosfolipasas), que descomponen a los fosfolípidos y producen
inflamación severa. La isquemia es de gran importancia para explicar la necrosis de la pared
vesicular. Contribuyen a ella la trombosis de los vasos císticos, por la compresión del bacinete, y la
hipertensión que se produce en el lumen durante la obstrucción, la que también reduce el flujo
sanguíneo a la mucosa1.

El arribo de bacterias a la pared de la vesícula desencadena una serie de complicaciones


importantes y en algunos casos letales como son piocolecisto, gangrena vesicular, absceso
pericolecistico entre otros1.

La litiasis biliar es considerada una patología metabólica multifactorial, siendo la dieta un factor
importante en el desarrollo de esta patología. Al respecto, existen antecedentes que sugieren que
una dieta alta en grasas es un probable factor predisponente para el desarrollo de litiasis biliar. Sin
embargo, aún no se ha dilucidado el impacto que ejercen dietas altas en grasas en los lípidos
biliares, debido a diferencias en el metabolismo lipídico inherentes al huésped, en el momento de la
intervención dietética2.

Inicialmente se postuló, que la adición de grasas en dietas destinadas a reducir el peso corporal,
podrían disminuir la incidencia de colelitiasis, al potenciar la contractibilidad de la vesícula biliar. Sin
embargo, se han reportado resultados contradictorios, indicando que la elevada contractibilidad
vesicular por alta ingesta de grasas, no es suficiente explicación para la colelitiasis generada por una
rápida reducción de peso2.

Se ha logrado establecer, que una dieta excesiva en colesterol, es un factor predisponente a


hiperlipidemia, y puede inducir una sobresaturación de la bilis y formación de cálculos vesiculares.
Sin embargo, el tipo de dieta grasa, y específicamente ciertos ácidos grasos, pueden también
influenciar la colelitiasis. Ensayos realizados en un modelo animal de conejos con
hipercolesterolemia, señalan que la ingesta de una dieta alta en ácidos grasos monoinsaturados,
logran normalizar los porcentajes de lípidos biliares, reduciendo el índice litogénico; por el contrario,
una dieta alta en ácidos grasos ω-3-poliinsaturados incrementaron el índice litogénico. En hámsteres
se ha informado, que la incorporación de ácidos grasos saturados a la dieta incrementan los efectos
litogénicos2.

En consecuencia, los antecedentes bibliográficos parecen indicar que el grado de saturación de


ácidos grasos dietéticos afecta el metabolismo de diferentes lípidos biliares, alterando su secreción y
contenido biliar, pero aún no existe certeza cómo y cuándo ocurren estos cambios2.

La primera etapa en el proceso de formación de cálculos vesiculares de colesterol, es la presencia de


una bilis sobresaturada con colesterol, seguida de la formación de cristales de colesterol, los cuales
posteriormente se agregan y crecen para constituir finalmente el cálculo macroscópico2.

El proceso de cristalización se genera cuando se excede la capacidad de los transportadores


micelares de solubilizar el colesterol biliar, formándose transportadores vesiculares, que son
termodinámicamente inestables, derivando en la producción de cristales de colesterol2.

El efecto de una dieta rica en grasas sobre los niveles de lipoproteínas varía considerablemente,
conforme al tipo de grasa consumida. En general, se ha informado que los ácidos grasos saturados
incrementan tanto el colesterol plasmático total como el LDL-colesterol. En contraste, los ácidos
grasos poliinsaturados, y en menor grado los monoinsaturados, disminuyen el colesterol total y LDL-
colesterol2.
Se sugiere, que el incremento en el colesterol plasmático en los individuos sometidos a alta ingesta
de grasas, ocurre principalmente en aquellos que presentan resistencia a la insulina, ya que
presentan menor absorción intestinal de colesterol2.

Por otro lado, se ha reportado que los niveles de HDL-colesterol se ven incrementados en dietas a
largo plazo altas en grasas saturadas o insaturadas, mientras que dietas bajas en grasas, decrecen
significativamente los niveles de HDL-colesterol2.

En respuesta a una dieta alta en grasas, se genera una probable disminución en la captación
hepática de HDL por una regulación negativa del receptor de HDL (Scavenger Receptor B1 -SRB1),
dificultando el transporte reverso de colesterol2.

Adicionalmente, dietas bajas en grasas a largo plazo han mostrado un incremento en los niveles
plasmáticos de triglicéridos. Los triglicéridos circulantes pueden provenir de la absorción intestinal de
grasas en forma de quilomicrones y remanentes de quilomicrones, que pueden ser altamente
aterogénicos2.

Los 3 principales factores en la patogénesis de la colelitiasis son la hipomotilidad de la vesicula biliar,


la sobresaturación biliar de colesterol y la cristalización de colesterol. En esencia, la sobresaturación
biliar con colesterol resulta principalmente de un incremento en la secreción biliar de colesterol, y/o
de una disminución en la secreción de ácidos biliares, y en menor extensión de la disminución en la
secreción de fosfolípidos. Además de estos cambios relativos en los lípidos biliares, es relevante la
etapa siguiente en el proceso de formación de cálculos de colesterol, denominada cristalización, ya
que no siempre una bilis sobresaturada con colesterol forma cristales y posteriormente cálculos
macroscópicos. El proceso de cristalización de colesterol está gatillado por la presencia de vesículas,
que transportan colesterol biliar, pero que son termodinámicamente inestables. Uno de los principales
factores de riesgo de la colelitiasis lo constituye un consumo excesivo de calorías en la dieta, donde
el colesterol lipoproteico resultante, que eventualmente retorna al hígado, es secretado a la bilis
como ácidos biliares o como colesterol libre2.

Concluimos, que una dieta alta en ácidos grasos, preferentemente saturados, resulta en un
incremento en los niveles plasmáticos de colesterol total y LDL-colesterol, junto con un aumento en
las concentraciones de HDL-colesterol. El aumento concomitante observado en la concentración de
colesterol biliar, y particularmente el incremento en la formación de transportadores vesiculares ricos
en colesterol, nos indica que la ingesta de una dieta alta en grasas, preferentemente saturadas,
podría contribuir a la formación de cálculos vesiculares de colesterol en una etapa temprana2.
Dieta para piedras en la vesícula

La dieta para colelitiasis te puede ayudar a prevenir los síntomas agudos del cólico biliar y aliviar las
molestias digestivas como gases y dispepsia. En caso de inflamación (colecistitis) es conveniente el
ayuno3.

Evita los estimulantes biliares

Para reducir la incidencia y la intensidad de los cólicos es importante evitar todos los alimentos
y factores que estimulan la contracción de la vesícula porque con frecuencia ante la presencia de
cálculos su ingesta produce dolor:

 Fibra dietética insoluble: evitar los cereales integrales, el salvado de trigo, las legumbres y las
semillas. Te sentarán mejor los alimentos de origen vegetal cocidos.

 Azúcares: estimulan la secreción de bilis, por lo tanto, reduce al máximo el azúcar oculto de tu
alimentación.

 Xantinas: los alimentos ricos en cafeína y teobromina como el café, la yerba mate, el té o las
bebidas cola, estimulantes la vesícula biliar.
 Temperaturas extremas: las comidas y bebidas muy frías o muy calientes son fuertes estímulos
de la vesícula.

 Purinas: carnes rojas, hígado, vísceras, pescados azules -anchoas, caballa-, cerveza y vino

 Grasas saturadas: dificultan la función de la vesícula.

 Grandes raciones: mejor comer varias veces al día y en pequeñas cantidades3.

 Bebidas carbonatadas.

 Alcohol3.
DIETA Y CANCER GÁSTRICO

El cáncer gástrico es la quinta neoplasia más común a nivel mundial y es la tercera causa de
mortalidad a nivel mundial para ambos sexos. Es un problema especialmente en países en vías de
desarrollo, donde se presentan el 70% de los casos con la mitad ocurriendo en Asia oriental. La
incidencia es casi del doble para hombres corregido por edad4.

La sal y las comidas preservadas con sal son un factor de riesgo para cáncer gástrico desde 1952.
Los posibles mecanismos para este fenómeno son5:

a) potencia la colonización y virulencia del H. pylori;

b) cambia la capa mucosa protectora, lo que lleva a una mayor exposición de componentes nitrosos,

c) causa una respuesta inflamatoria del epitelio gástrico, que aumenta la proliferación celular y la
probabilidad de una mutación endógena.

Estudios epidemiológicos en 24 países han mostrado una correlación significativa entre la mortalidad
por cáncer y la ingesta de sodio. Por el contrario, nuevos estudios prospectivos han demostrado una
reducción significativa del riesgo del cáncer gástrico (tanto cardial como no cardial) por el consumo
de frutas y vegetales frescos y si el seguimiento es mayor de 10 años, el riesgo es menor aún5.

Por lo tanto, aunque hay claras asociaciones epidemiológicas entre dieta y cáncer gástrico, el rol de
una intervención dietética aún permanece no probado y conflictivo.

En el año 2015 la agencia internacional para la investigación del cáncer gástrico evaluó la
carcinogenicidad de carnes rojas y de carnes procesadas (son las que se han modificado para
cambiar su gusto mediante el sistema de ahumado, agregado de sal o preservantes). Estas carnes
procesadas incluyen hotdog, salame, embutidos, jamones, etc. Analizaron más de 800 estudios
epidemiológicos referentes a cáncer colorrectal, gástrico, de páncreas y de próstata. Clasificaron las
comidas procesadas como carcinógenas para el cáncer colorrectal y una posible asociación con el
cáncer gástrico. En cambio, las carnes rojas se clasificaron como probables carcinógenos para el
cáncer colorrectal y sin asociación con el cáncer gástrico5.
Prevención

La prevención del cáncer gástrico se puede enfocar en 3 niveles:

a) Prevención primaria: que se refiere a disminuir la exposición de factores de riesgo o aumentar la


resistencia dela mucosa ante factores de riesgo.

En este punto hay por lo menos 3 intervenciones:

1. Erradicación de la infección por H. pylori.

2. Eliminar el cigarrillo, que favorece el desarrollo de un cáncer gástrico.

3. Cambiar el hábito en la comida, con la eliminación de las comidas saladas o preservadas, y


el aumento de la ingesta de frutas y verduras.

b) Prevención secundaria: se refiere a la detección precoz y tratamiento de la enfermedad.

c) Prevención terciaria: se refiere al tratamiento, rehabilitación y paliación para mejorar el


pronóstico de los pacientes con cáncer gástrico5.

LA DIETA Y EL CÁNCER GÁSTRICO O ESOFÁGICO

La Sociedad Americana de Cáncer recomienda las siguientes opciones de estilo de vida para reducir
el riesgo de cáncer de estómago y de esófago6:

 Consumir una dieta rica en frutas, verduras, y granos enteros. Comer al menos 2 ½ tazas
(300 gramos) de frutas y verduras al día.

 Reducir el consumo de carnes procesadas, ahumadas, curadas con nitrito y alimentos


preservados con sal; dar preferencia a las proteínas vegetales.

 Realizar actividad física de manera regular durante al menos 30 minutos al día, 5 veces por
semana.
 Mantener un peso saludable durante la vida6.

Alimentos que previenen la aparición del cáncer gástrico

El consumo de zanahoria, carnes blancas, verduras y frutas verdes, disminuyen el riesgo de padecer
cáncer gástrico, que en Colombia es considerado la primera causa de muerte por cáncer. Consumir
alimentos salados, ahumados o con grasas fritas más de una vez y con alto contenido de nitratos en
los alimentos o de agua se asocia a un mayor riesgo de cáncer gástrico 7.

Está comprobado científicamente que el consumo regular de betacarotenos (la zanahoria), el Selenio
(carnes blancas) y la Vitamina C (frutas y verduras verdes), previenen el cáncer gástrico al disminuir
la adhesión de la bacteria Helicobacter pilory a las paredes del estómago7.

Según la Organización Mundial de la Salud OMS, el cáncer gástrico en Colombia es la primera causa
de muerte por cáncer. El cáncer gástrico, es un tipo de crecimiento tisular maligno producido por la
proliferación contigua de células anormales con capacidad de invasión y destrucción de otros tejidos
y órganos en particular el esófago y el intestino delgado, causando cerca de un millón de muertes en
el mundo anualmente7.

De acuerdo a investigaciones, los alimentos antioxidantes son los llamados a contrarrestar la acción
de los radicales libres, causantes de la aparición de células malignas que al proliferar en el
organismo ocasionan el cáncer. Los ejemplos de antioxidantes mas conocidos incluyen el
betacaroteno, las vitaminas C, E y A, y otras sustancias7.

Los Betacarotenos
El betacaroteno es un pigmento que está presente en las frutas y verduras de color rojo y naranja. Se
ha demostrado que este pigmento se convierte en vitamina A y además es un poderoso antioxidante
de las células y por lo tanto, retrasa el envejecimiento de las mismas. Hay que empezar a tomar y
comer los alimentos que tienen betacaroteno con mayor asiduidad. Puedes ingerirlo en forma de
jugos naturales, batidos de frutas o como acompañamiento en tus comidas 7.

El Selenio

El Selenio es un mineral con muchas propiedades beneficiosas, pero es muy conocido como
antioxidante ya que protege las células de los radicales libres. Forma parte del grupo denominado
Oligoelementos que son los minerales que aunque están en nuestro cuerpo en pequeñas cantidades
son esenciales en muchas funciones. Es un gran antioxidante que, al proteger las células de los
"radicales libres", interviene manteniendo la salud celular y evitando su degeneración 7.

Tomar alimentos ricos en Selenio como el brécol, repollo, apio, ajo, cereales integrales, levadura de
cerveza, champiñones, cebollas, frutos secos, etc. y tomar como postre frutas ricas en vitamina C
como la fresa, kiwis, naranjas, etc. La vitamina C ayuda a fijar el selenio en el organismo. Un efecto
positivo sobre el sistema inmune y el hecho de que mejore, en algunos pacientes, los efectos
colaterales de la quimioterapia hacen que muchos profesionales la recomienden en casos de
Cáncer7.

La Vitamina C

Actúa como un potente agente reductor o antioxidante, bloqueando la formación de nitrosaminas


-compuestos con capacidad carcinogénica-. También ayuda a conservar las reservas de las
vitaminas A y E. Se encuentra de forma natural en frutas cítricas (limón, naranja, mandarina, pomelo),
kiwi, vegetales de hoja verde, tomates, coliflor, pimiento rojo y perejil. Para aumentar su eficacia la
vitamina C necesita del calcio (leche y derivados, frutos secos vegetales verdes) y del magnesio
(higos, limones, pomelos, almendras, vegetales verdes, manzanas)7.

Los alimentos enemigos de la vitamina C son: el agua, la cocción, el calor, la luz, el oxígeno y el
fumar hacen que se pierda o disminuya esta vitamina, así como algunos fármacos como
anticonceptivos orales, antihistamínicos, barbitúricos y algunos expectorantes.7

Aunque la ingesta se betacarotenos, selenio y vitamina C contribuyan a la disminución del cáncer


gástrico, es preciso evitar consumir alimentos salados, alimentos ahumados o con grasas fritas más
de una vez y el contenido en nitratos de los alimentos o del agua se asocian a tener un mayor riesgo
de cáncer gástrico7.

El cáncer gástrico en el mundo es la segunda causa más frecuente de muerte relacionada con
cáncer después del cáncer de pulmón7.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. Leiva R. Colecistitis aguda. 2007 [Internet] [Citado el 02 de agosto de 018] Disponible en:
http://www.bvs.sld.cu/revistas/gme/pub/vol.9.(2)_17/p17.html
2. Del Pozo. R, et al. Efecto de una dieta alta en grasas en el proceso de formación de cálculos
biliares de colesterol. Chile, 2017 [Internet] [Citado el 02 de agosto de 018] Disponible en:
https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-98872017000901099

3. Revista Dieta coherente. Dieta para piedras en la vesícula. 2013 [Internet] [Citado el 02 de
agosto de 018] Disponible en: https://www.dietacoherente.com/dieta-para-piedras-en-la-
vesicula-colelitiasis/

4. Solano H. Cáncer Gástrico, actualidades y perspectivas del futuro. Costa Rica, 2016.
[Internet] [Citado el 02 de agosto de 018] Disponible en:
https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/clinica/article/download/26138/26408

5. Revista Chilena de Cirugía. Situación del Cáncer Gástrico en el mundo. Chile, 2017. [Internet]
[Citado el 02 de agosto de 018] Disponible en:
https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0379389316301533

6. MedlinePlus. Dieta y cáncer. 2018 [Internet] [Citado el 02 de agosto de 018] Disponible en:
https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/002096.htm
7. Revista Fucsia. Alimentos que previenen la aparición del cáncer gástrico. 2017 [Internet]
[Citado el 02 de agosto de 018] Disponible en: https://www.fucsia.co/salud-nutricion-
dietas/articulo/alimentos-previenen-aparicion-del-cancer-gastrico/7651

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