Privilegio de pobreza

El profesor Héctor Oberg realiza una crítica a esta denominación basándose en el art. 19
n°2 de la CPE, el cual dispone que “en Chile no hay persona ni grupo privilegiados”, disposición en
virtud de la cual podría alegarse la inconstitucionalidad de esta institución y por ello recomienda
que es más adecuada la terminología “Beneficio de pobreza”.

Definición
Se define como el beneficio que concede la ley o la autoridad judicial en subsidio a las
personas menesterosas o de escasos recursos para que sean atendidas gratuitamente en sus
asuntos judiciales por los abogados, procuradores y receptores de turno y gocen de las demás
franquicias señaladas en la ley.
De la definición se obtiene una clasificación de este beneficio atendiendo a su origen,
pudiendo ser legal o judicial. Será judicial si se obtiene previa resolución judicial y después de
observada la tramitación que la ley señala para este caso. Será legal cuando texto legal expreso lo
conceda, como el artículo 600 del COT respecto de las personas patrocinadas por las
corporaciones de asistencia judicial o por alguna entidad destinada a prestar servicios judiciales y
jurídicos en forma gratuita. Conviene destacar que tanto el beneficio legal como el judicial
conceden los mismos derechos, que son principalmente los siguientes:
a) Derecho a ser servido gratuitamente por los funcionarios del orden judicial, y los
abogados, procuradores y oficiales subalternos designados para prestar servicios a
litigantes pobres (art. 591 inc.2° COT)
b) El beneficiario queda exento del pago de las multas establecidas para los litigantes, salvo
que la ley expresamente disponga otra cosa o actúe con notoria malicia, en cuyo caso el
tribunal podrá imponer la multa correspondiente, conmutable en arresto de un día por
cada un vigésimo de sueldo vital (591 inc 3° COT)
c) Están exentos del pago de las diligencias a que diere lugar una subinscripción en alguno de
los libros del registro civil (592 COT)
d) No puede el beneficiario ser condenado al pago de las costas , a menos que el tribunal
respectivo en resolución fundada, declare que ha obrado como litigante temerario o
malicioso (600 inc 3° COT)

Incidente especial de privilegio de pobreza (artículos 129-137 CPC)

El tribunal competente para conocer de este incidente es a quien corresponda conocer en
única o en primera instancia el asunto en que haya de tener efecto (130 inc 1° CPC).
Podrá tramitarse en una gestión para varias causas determinadas1 y entre las mismas
partes, si el conocimiento de todas corresponde al mismo tribunal en primera instancia (130 inc 2°
CPC).
Oportunidad para promoverlo: Como señala el artículo 130 del CPC se puede solicitar este
beneficio en cualquier estado del juicio2 y aún antes de su iniciación. En otras palabras puede

1
Si a futuro se suscita una nueva causa entre las mismas partes y en el mismo tribunal, debe tramitarse
nuevamente, ya que exige como requisito que se trate de causas determinadas, vale decir, al tramitarse se
señalará las causas en que tendrá efecto, las que deben ser actuales, porque como resulta lógico no se
pueden determinar causas futuras. Relacionado con el carácter transitorio que tiene el beneficio.
solicitarse durante la tramitación de la causa principal o antes de entablarse la acción, atendiendo
a las verdaderas y reales necesidades económicas del solicitante.
En cuanto a su tramitación, el artículo 129 dispone que en las gestiones para obtener este
privilegio de pobreza se usará el papel que corresponda3; pero los derechos que se causen solo
podrán reclamarse en caso de que no se dé lugar a la solicitud.
La solicitud respectiva se presentará al tribunal competente y en ella se expresarán los
motivos en que se funde (art 131)
El tribunal proveerá la solicitud ordenando que se rinda información para acreditarlos (los
motivos), con sólo la citación de la parte contra quien litigue o haya de litigar el que solicite el
privilegio y además, ordenará la formación de cuaderno separado4 (131).
Sobre este particular son dos las actitudes que puede adoptar la parte contraria una vez
notificada y dentro del término de citación: que se oponga dentro del término legal o que no se
oponga.
Dispone el artículo 132 inc 1° que “si la parte citada no se opone dentro de 3° día a la
concesión del privilegio se rendirá la información y se resolverá con el mérito de ella y de los
demás antecedentes acompañados o que el tribunal mande agregar”.
La información a que hace referencia será sumaria, o sea, una prueba de cualquiera
especie, rendida sin notificación ni intervención de contradictor5 y sin previo señalamiento de
término probatorio. (818 inc 3° CPC).
Por otro lado si hay oposición el artículo 132 inc 2° nos versa que esta oposición se
tramitará en forma incidental de acuerdo a las normas generales. En este caso estaríamos en
presencia de 2 incidentes: el incidente ordinario que se origina al oponerse y el incidente especial
que solicita el beneficio.
El artículo 134 nos indica que serán materia de la información o de la prueba (según haya
habido oposición o no) las circunstancias invocadas por el que pide el privilegio, y además la
fortuna del solicitante, su profesión o industria, sus rentas, sus deudas, las cargas personales o de
familia que le graven, sus aptitudes intelectuales y físicas para ganar la subsistencia, sus gastos
necesarios o de lujo, las comodidades de que goce, y cualesquiera otras que el tribunal juzgue
conveniente averiguar para formar juicio sobre los fundamentes del privilegio.
Lo anterior demuestra que para gozar de este beneficio de pobreza no se requiere ser
pobre de solemnidad, sino que basta que la situación económica del solicitante no sea suficiente
para soportar los gastos que un determinado y concreto negocio judicial le demande.
El artículo 135 a modo de facilitar la prueba en un caso particular agrega que “se estimará
como presunción legal de pobreza la circunstancia de encontrarse preso el que solicita el
privilegio, sea por sentencia condenatoria, sea durante la sustanciación del juicio criminal”.
También puede acontecer que en la gestión del privilegio de pobreza se presenten,
oponiéndose, los funcionarios judiciales a quienes pueda afectar su concesión. Estos funcionarios
serán oídos si se presentan antes que se resuelva el correspondiente incidente, y si son varios,

2
Podría incluso solicitarse después de la citación a las partes para oír sentencia en primera instancia.
3
Se entiende que esta expresión hace referencia al papel simple o papel proceso.
4
De esta manera se puede afirmar que este incidente especial no es de previo y especial pronunciamiento,
por lo que no produce el efecto de suspender el curso del asunto principal.
5
Sin intervención porque el contradictor está llamado a oponerse al ordenarse que se rinda la información,
dentro de 3° día, si no se opone precluye su derecho a hacerlo y lo que ocurre es que efectivamente se
rendirá esta información sin que sea notificado y sin que pueda intervenir en ella.
litigarán por una sola cuerda en los trámites posteriores a su presentación (133 CPC). Esta última
medida tiende a no entorpecer la marcha regular del incidente de privilegio de pobreza.

Naturaleza jurídica y efectos de las sentencias que recaen en el incidente de privilegio

de pobreza.
Esta resolución no establece derechos permanentes a favor de las partes ni sirve de base
para el pronunciamiento de una sentencia definitiva o interlocutoria, por lo tanto, se trata de un
auto. En efecto, estas resoluciones no producen desasimiento por lo que “podrá dejarse sin efecto
el privilegio después de otorgado, siempre que se justifiquen circunstancias que habrían bastado
para denegarlo. Podrá también otorgarse el privilegio después de rechazado, si se prueba un
cambio de fortuna o de circunstancias que autoricen esta concesión” (136 CPC).

Dicho de otro modo, estas sentencias producen acción de cosa juzgada, esto es, una vez
firmes se puede exigir su cumplimiento pero no producen ni siquiera excepción de cosa juzgada
formal, porque si cambian las circunstancias en atención a las cuales fue concedido el beneficio
podrá pronunciarse una nueva sentencia totalmente contradictoria a la anterior, aun dentro del
mismo proceso en que ésta fue pronunciada.

Como sabemos, los autos son susceptibles de recurso de reposición y de apelación en

subsidio de éste; pero tratándose de la resolución que concede este beneficio y en forma
excepcional a la regla general, se apelará derechamente por la parte contraria y no de manera
subsidiaria a un recurso de reposición. Tal apelación se concederá en el solo efecto devolutivo
(132 inc. 3° CPC); vale decir, mientras penda la apelación el solicitante entrará a gozar del
privilegio solicitado, sin perjuicio de lo que en definitiva se resuelva en dicho recurso.

También, es interesante señalar como efecto de las sentencias que acogen el privilegio,
que, cuando el litigante declarado pobre no gestione personalmente ni tenga en el proceso
mandatario constituido en forma legal, entrará a representarlo el procurador de pobres6, sin que
sea necesario mandato expreso (137 CPC).
Por último, no está demás tener en cuenta lo dispuesto en el artículo 594 del COT el cual
dispone que “Si el litigante pobre obtuviere en el juicio, será obligado a destinar una décima parte
del valor líquido que resultare a su favor para el pago de los honorarios y derechos causados,
distribuyéndose esta suma a prorrata entre todos los interesados, si no alcanzaren a ser
íntegramente cubiertos de lo que se les adeudare”.

Fuente: Manual de derecho procesal del profesor Casarino, TOMOS II y III.

6
El profesor dijo que la expresión procurador de pobres en este caso hace referencia al abogado de turno.