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El documento discute tres consultas relacionadas con el impuesto a la renta en Perú. La primera consulta trata sobre si la ganancia de la venta de un inmueble puede ser gravada como renta de tercera categoría. La segunda consulta trata sobre cómo calcular el impuesto por la venta de un inmueble adquirido como donación. La tercera consulta trata sobre cuándo y cómo calcular la retención del impuesto por el pago de regalías por el uso temporal de una marca.
El documento discute tres consultas relacionadas con el impuesto a la renta en Perú. La primera consulta trata sobre si la ganancia de la venta de un inmueble puede ser gravada como renta de tercera categoría. La segunda consulta trata sobre cómo calcular el impuesto por la venta de un inmueble adquirido como donación. La tercera consulta trata sobre cuándo y cómo calcular la retención del impuesto por el pago de regalías por el uso temporal de una marca.
El documento discute tres consultas relacionadas con el impuesto a la renta en Perú. La primera consulta trata sobre si la ganancia de la venta de un inmueble puede ser gravada como renta de tercera categoría. La segunda consulta trata sobre cómo calcular el impuesto por la venta de un inmueble adquirido como donación. La tercera consulta trata sobre cuándo y cómo calcular la retención del impuesto por el pago de regalías por el uso temporal de una marca.
1. Enajenación de inmueble-habitualidad Consulta La señora Emilia tenía 3 inmuebles, las que adquirió entre el 2005 al 2008. Emilia, en el 2015, vendió tres de sus inmuebles y pagó por ellas la tasa efectiva del 5 %. Ante ello, Sunat ha emitido una Resolución de Determinación en el 2017, en la cual le repara el pago del impuesto del último inmueble, ya que la tasa que debió aplicar es de 28 %. Ante ello, nos consulta lo siguiente: ¿se puede gravar con el impuesto a la renta de tercera categoría por la enajenación de inmuebles realizados por una persona natural? Respuesta Por regla general, la enajenación de inmuebles realizados por persona natural no está gravada con el impuesto a la renta de tercera categoría, sino con el impuesto de segunda categoría por la enajenación de un bien inmueble, tal como está señalado en el inciso j) del artículo 24 de la Ley del Impuesto a la Renta, siempre y cuando cumpla con lo siguiente: • La enajenación y la adquisición del bien inmueble se produzca a partir del 01-01-04 (de acuerdo con la Trigésimo Quinta Disposición Transitoria y Final). • No sea considerado una casa habitación, a efectos de la Ley del Impuesto a la Renta está definido la casa habitación en el artículo 1-A del Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta, de la siguiente manera: Artículo 1-A. Definición de casa habitación […] se considera casa habitación del enajenante, al inmueble que permanezca en su propiedad por lo menos dos (2) años y que no esté destinado exclusivamente al comercio, industria, oficina, almacén, cochera o similares. En caso el enajenante tuviera en propiedad más de un inmueble que cumpla con las condiciones señaladas en el párrafo anterior, será considerada casa habitación solo aquel que, luego de la enajenación de los demás inmuebles, resulte como el único inmueble de su propiedad. Cuando la enajenación se produzca en un solo contrato o cuando no fuera posible determinar las fechas en las que dichas operaciones se realizaron, se reputará como casa habitación del enajenante al inmueble de menor valor. Si se cumple con los requisitos antes mencionados, estará afecto a la renta de segunda categoría y, por lo tanto, estará gravado con la tasa efectiva del 5 %. Teniendo ello en cuenta, cabe señalar que la ganancia por la enajenación de este inmueble estará gravada con el impuesto de tercera categoría si se presume la habitualidad en la enajenación de inmueble, que está dispuesto en el artículo 4 de la Ley del Impuesto a la Renta, en la cual se menciona lo siguiente: Artículo 4. Se presumirá que existe habitualidad en la enajenación de inmuebles efectuada por una persona natural, sucesión indivisa o sociedad conyugal que optó por tributar como tal, a partir de la tercera enajenación, inclusive, que se produzca en el ejercicio gravable. [El resaltado es nuestro]. De acuerdo con esta norma, se presume que hay habitualidad en la enajenación de inmuebles en la tercera venta dentro de un mismo ejercicio. Ello también se encuentra señalado en el Informe N.° 033-2014-SUNAT/5D0000: En el caso que una persona natural, propietaria de un terreno, venda en diferentes oportunidades parte de su derecho de propiedad sobre este a diversos compradores dentro del mismo ejercicio gravable, se presume habitualidad a partir de la tercera enajenación, inclusive, de conformidad con lo establecido por los artículos 2 y 4 de la Ley del Impuesto a la Renta. En consecuencia, la renta que se origina a partir de la tercera enajenación de parte del derecho de propiedad sobre inmuebles constituye renta de tercera categoría. En conclusión, sí es posible gravar a una persona natural con el impuesto a la renta de tercera categoría por la ganancia de una enajenación de un bien inmueble, siempre y cuando se configure una habitualidad en la venta de inmueble. Para el presente caso, sí es correcto que Sunat haya emitido una Resolución de determinación, en la cual se le reparó por no haber pagado el impuesto de tercera categoría por la ganancia que obtuvo en la enajenación del tercer inmueble. 2. Enajenación de inmueble-Adquisición de inmueble a título gratuito Consulta Erik Francis Cabrera, en el 2013, adquirió un inmueble a través de una donación. Cabe señalar que el donante adquirió el inmueble por el valor de 100.000 (tiene todos los documentos que acredita que lo adquirió por ese valor). Erik, en el 2014, decide venderlo por el valor de 200,000. Ante ello, nos consulta lo siguiente: ¿cuál es el monto del impuesto que debo pagar por la enajenación de ese bien inmueble? (supuesto: el índice de corrección monetaria era 1). Respuesta Para responder a la pregunta formulada, es necesario tener en cuenta que en este caso Erik sí va estar gravado por la ganancia que obtenga por la venta de este inmueble (segunda categoría), ya que lo adquirió después del 2004, y no es una casa habitación, ya que de acuerdo con el artículo 1-A del Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta, para considerarlo como casa habitación, tiene que haber permanecido en su propiedad durante dos años; en este caso, solo ha sido propietario de ese inmueble durante 1 año. Considerando que esta venta del bien inmueble sí está afecta al impuesto a la renta de segunda categoría, podemos determinar cuál es el monto del impuesto. En este caso, el valor de venta es de 200,000, y el valor del costo es 100,000, ya que según el acápite a.2) del inciso a) del numeral 21.1 del artículo 21 de la Ley del Impuesto a la Renta (vigente el 01-08-12), se señala lo siguiente: Artículo 21. Tratándose de la enajenación, redención o rescate cuando corresponda, el costo computable se determinará en la forma establecida a continuación: […] a.2) Si la adquisición es a título gratuito, el costo computable será igual a cero. Alternativamente, se podrá considerar como costo computable el que correspondía al transferente antes de la transferencia, siempre que este se acredite de manera fehaciente. [El resaltado es nuestro]. Por lo tanto, de acuerdo con este dispositivo, en el caso de una adquisición a título gratuito, el costo computable será cero o el costo que correspondía al transferente antes de haberlo transferido, siempre que esté acreditado. Entonces, debido a que es una adquisición a título gratuito (donación), es recomendable utilizar el costo de adquisición que le correspondía al donante para que el impuesto a pagar sea menor; asimismo, se debe tener en cuenta que el costo de adquisición del donante se debe acreditar para que sea reconocido. Asimismo, se debe tener en cuenta que si la adquisición de un bien inmueble es a título oneroso, debe utilizarse los respectivos medios de pago para que sea ese costo reconocido ante una posterior venta de ese inmueble, tal como se concluye en el Informe N.° 006-2012- SUNAT/2B0000: Para la determinación del impuesto a la renta de segunda categoría, en la venta de un inmueble efectuada por una persona natural domiciliada, no se puede considerar como costo computable el costo de adquisición de dicho bien cancelado sin utilizar medios de pago, cuando existía la obligación de usar los mismos. [El resaltado es nuestro]. Para este caso, el costo de adquisición será 100,000 por 1, ya que es el índice de corrección monetaria. Asimismo, para determinar el impuesto en este caso, se debe tener en cuenta el artículo 84-A de la Ley del Impuesto a la Renta, en la que se menciona cómo determinar el impuesto en el caso de enajenación de inmuebles; además, cabe señalar que también se puede determinar el impuesto aplicando la tasa efectiva de 5 % a la renta bruta. Valor de venta de inmueble = 200,000 Costo computable actualizado por el I. C. M. 100,000 x 1 = (100,000) Ganancia de capital (renta bruta) = 100,000 Impuesto a la renta 100,000 x 5 % = 5000 3. Regalía Consulta La empresa Sol Perú SAC decide adquirir una marca a través de una cesión temporal (2 años) a una persona natural, y por la cual realizará el pago de 150,000 en el 2017. Ante ello, nos consultan lo siguiente: ¿cuándo debo efectuar la retención?, ¿cuánto es el monto que debo retener? Respuesta De acuerdo con el inciso c) del artículo 24 de la Ley del Impuesto a la Renta, las regalías están afectas a renta de segunda categoría, y dentro de ellas se encuentra a la contraprestación por el uso de las marcas, tal como está señalado en el primer párrafo del artículo 27 de la Ley del Impuesto a la Renta: Artículo 27. Cualquiera sea la denominación que le acuerden las partes, se considera regalía a toda contraprestación en efectivo o en especie originada por el uso o por el privilegio de usar patentes, marcas, diseños o modelos, planos, procesos o fórmulas secretas y derechos de autor de trabajos literarios, artísticos o científicos, así como toda contraprestación por la cesión en uso de los programas de instrucciones para computadoras (software) y por la información relativa a la experiencia industrial, comercial o científica. Por lo tanto, la persona que cedió la marca está gravada con el impuesto a la renta de segunda categoría, por consiguiente, la persona jurídica debe efectuar la retención cuando realice el pago, para este caso es en el 2017 (artículo 71 de la Ley del Impuesto a la Renta). Asimismo, deberá la empresa Sol Perú SAC declarar la retención de segunda categoría en el PDT 617. En este caso, para determinar el monto a retener hay que aplicar a la renta bruta la tasa efectiva del 5 %. Renta bruta 150,000 Impuesto a la renta 5 % 7,500 Total a retener 7,500 Por lo tanto, la empresa Sol Perú SAC debe retener el monto de 7,500. 4. Dividendos presuntos Consulta La empresa Aventura SAA, en el 2017, obtuvo 36,000 de utilidades; ante ello, la junta de accionistas ha decidido efectuar un préstamo a uno de los accionistas. Ante ello, el gerente general de la empresa nos consulta lo siguiente: ¿cuál es la implicancia tributaria por el préstamo efectuado a un accionista? Respuesta Para la presente consulta, es necesario remitirnos al inciso i) del artículo 24 de la Ley del Impuesto a la Renta: Artículo 24. Son rentas de segunda categoría: […] i) Los dividendos y cualquier otra forma de distribución de utilidades, con excepción de las sumas a que se refiere el inciso g) del artículo 24-A de la ley. Asimismo, cabe señalar que se entiende por dividendo y otra forma de distribución de utilidades al crédito que entregan las empresas a favor de sus socios, de acuerdo con lo señalado en el inciso f) del artículo 24-A de la Ley del Impuesto a la Renta: Artículo 24-A. Para los efectos del impuesto se entiende por dividendos y cualquier otra forma de distribución de utilidades: […] f) Todo crédito hasta el límite de las utilidades y reservas de libre disposición, que las personas jurídicas que no sean empresas de operaciones múltiples o empresas de arrendamiento financiero, otorguen en favor de sus socios, asociados, titulares o personas que las integran, según sea el caso, en efectivo o en especie, con carácter general o particular, cualquiera sea la forma dada a la operación. No es de aplicación la presunción contenida en el párrafo anterior a las operaciones de crédito en favor de trabajadores de la empresa que sean propietarios únicamente de acciones de inversión. De lo señalado anteriormente, se puede concluir que el crédito que concede la empresa a sus accionistas se considera como distribución de dividendos para efectos de la Ley del Impuesto a la Renta, siempre y cuando en ese mismo ejercicio se haya obtenido utilidades, ello también se puede desprender del Informe N.° 078-2016-SUNAT, en la cual una de sus conclusiones es la siguiente: Los préstamos otorgados a los accionistas durante el ejercicio 2015 no califican como dividendos presuntos si al momento de ser otorgados la persona jurídica que los concede no tenía utilidades o reservas de libre disposición susceptibles de generar dividendos gravados. Por lo tanto, el préstamo que dio la empresa Aventura SAA a su accionista estará gravado con el impuesto a la renta de segunda categoría, ya que se considera como distribución de dividendos. En consecuencia, la empresa va tener que retener el 5 % al accionista por el préstamo que le efectuó. Ello está conforme con el artículo 52-A del TUO de la Ley del Impuesto a la Renta: Artículo 52-A. El impuesto a cargo de personas naturales, sucesiones indivisas y sociedades conyugales que optaron por tributar como tales, domiciliadas en el país, se determina aplicando la tasa de seis coma veinticinco por ciento (6,25 %) sobre sus rentas netas del capital. Tratándose de la renta neta del capital originada por la enajenación de los bienes a que se refiere el inciso a) del artículo 2 de esta ley, la tasa a que se refiere el párrafo anterior se aplicará a la suma de dicha renta neta y la renta de fuente extranjera a que se refiere el segundo párrafo del artículo 51 de esta ley. Lo previsto en los párrafos precedentes no se aplica a los dividendos y cualquier otra forma de distribución de utilidades a que se refiere el inciso i) del artículo 24 de esta ley, los cuales están gravados con la tasa de cinco por ciento (5 %). [El resaltado es nuestro].