Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
SALUD
Medio ambiente como proveedor de alimentos
ALIMENTOS VEGETALES
Maíz
Trigo
Frijol
Calabaza
Cafetales
PESCADO Y MARISCOS
El pescado y los mariscos, como la carne, son valiosos en la
alimentación debido a que suministran una buena cantidad (en
general 17 por ciento o más) de proteína de alto valor biológico, sobre todo
aminoácidos que contienen azufre.
HUEVOS
El huevo es uno de los pocos alimentos que no contiene carbohidratos.
Se debe estimular la producción de huevos para uso familiar siempre que sea
posible, hasta en el pequeño jardín o patio de una vivienda urbana
SANGRE
La sangre del ganado, que regularmente se consume cruda en muchas tribus
pastoriles, sobre todo en África, es muy nutritiva.
LA LEÑA
La leña fue la primera fuente de energía para el ser humano, y la más
importante durante la mayor parte de su historia. Era muy asequible
porque en muchas partes del mundo crecían grandes bosques. En los tiempos
antiguos también se usaban algunas otras fuentes de energía que sólo se
encontraban en zonas puntuales: asfalto, carbón y turba de depósitos
superficiales, y petróleo procedente de filtraciones de yacimientos subterráneos.
LA ENERGÍA NUCLEAR
La energía nuclear se genera mediante la fisión de
átomos de uranio. El calor de este proceso de fisión
se emplea para impulsar una turbina que genera
electricidad. El reactor nuclear y el equipo de
generación eléctrica son sólo parte de un conjunto
de actividades interrelacionadas. La producción de
un suministro fiable de electricidad a partir de la
fisión nuclear exige extraer, procesar y transportar
el uranio; enriquecerlo y empaquetarlo en la forma adecuada; construir y
conservar el reactor y el equipo generador, y procesar y retirar el combustible
gastado. Estas actividades requieren unos procesos industriales muy complejos e
interactivos y conocimientos especializados.
Impacto en la agricultura
La agricultura siempre ha supuesto un impacto
ambiental fuerte. Hay que talar bosques para
tener suelo apto para el cultivo, hacer
embalses de agua para regar, canalizar ríos,
etc. La agricultura moderna ha multiplicado los
impactos negativos sobre el ambiente. La destrucción y salinización del suelo, la
contaminación por plaguicidas y fertilizantes, la deforestación o la pérdida de
biodiversidad genética, son problemas muy importantes a los que hay que hacer
frente para poder seguir disfrutando de las ventajas que la revolución verde nos ha
traído.
Impacto de la industrialización
El rápido avance tecnológico producido tras la edad
media culminó en la Revolución Industrial, que trajo
consigo el descubrimiento, uso y explotación de los
combustibles fósiles, así como la explotación intensiva de los recursos
minerales de la Tierra. Fue con la Revolución Industrial cuando los seres
humanos empezaron realmente a cambiar la faz del planeta, la naturaleza
de su atmósfera y la calidad de su agua.
Uno de los impactos que el uso de combustibles fósiles ha producido sobre
el medio ambiente terrestre ha sido el aumento de la concentración de
dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera.
Asociada también al uso de combustibles fósiles, la acidificación se debe a
la emisión de dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno por las centrales
térmicas y por los escapes de los vehículos a motor.
Destrucción del ozono.
El uso extensivo de pesticidas sintéticos derivados de los hidrocarburos
clorados en el control de plagas ha tenido efectos colaterales desastrosos
para el medio ambiente.
La población humana
La población es un término definido desde la
Demografía y señala la cantidad de personas que
viven en un determinado lugar en un momento en
particular.
La población humana comenzó a instalarse en
poblados hace unos 10 000 años. Sumarían en
ese momento entre cinco y diez millones de
personas, un número que no afectaba de forma importante al ecosistema. A partir
de entonces el crecimiento de la población fue gradual, pero relativamente lento
hasta llegar al siglo XX en el que este crecimiento se ha acelerado.
Al crecimiento en población se ha unido el progreso técnico que nos ha dotado de
una capacidad de modificar el ambiente desconocida hasta hace unos cien años.
Selvas que tardaron miles de años en formarse o depósitos de petróleo que se
acumularon a lo largo de millones de años están siendo consumidos en el
transcurso de una sola generación.
Impacto de la urbanización
Podemos entender como por urbanización
como la construcción de obras en las
poblaciones, comunidades y ciudades tales
como viviendas, vías de comunicación como las
carreteras, introducción de agua potable,
drenaje, energía eléctrica, escuelas, etc. todo
ello para el beneficio del ser humano.
A medida que crecen, las ciudades imponen un
nuevo medio, edificado sobre paisajes y
ecosistemas naturales. Se desbroza el terreno y con frecuencia se hacen cortes o
se altera con maquinaria la forma de las colinas; los valles y marismas se llenan
de rocas y materiales de desecho, y, por lo general, se extrae agua del subsuelo.
Su desarrollo no sólo transforma las zonas que urbaniza, sino también otras
mucho mayores, tal y como puede observarse en los cambios que sufre la
ecología rural para responder a las necesidades metropolitanas de agua y
materias primas, bienes y servicios. Las regiones que las rodean deben satisfacer
sus muchas exigencias de materiales de construcción y acumulación de residuos,
resultado de la edificación, creación de carreteras, aparcamientos, industrias y
otros componentes de la estructura urbana. Gran parte del impacto
medioambiental del desarrollo urbano se percibe lejos de allí, al final del valle que
ocupa la ciudad, aguas abajo del río que la cruza o en el lugar donde el viento
arrastra los humos. Es el resultado del transporte de residuos sólidos, la
contaminación de las aguas o la lluvia ácida.
Otras de las obras de urbanización son la instalación de grandes centros
comerciales en las ciudades, gasolineras, industrias, hospitales y ductos en los
que se transportan combustibles como el gas natural, gasolina etc.
El crecimiento económico
Es el aumento de la cantidad de trabajos que hay por metro cuadrado, la renta o el
valor de bienes y servicios producidos por una economía. Habitualmente se mide
en porcentaje de aumento del Producto Interno Bruto real, o PIB. El crecimiento
económico así definido se ha considerado (históricamente) deseable, porque
guarda una cierta relación con la cantidad de bienes materiales disponibles y por
ende una cierta mejora del nivel de vida de las personas. Sin embargo, no son
pocos los que comienzan a opinar que el crecimiento económico es una peligrosa
arma de doble filo, ya que dado que mide el aumento en los bienes que produce
una economía, por tanto también está relacionado con lo que se consume o, en
otras palabras, gasta. La causa por la que según este razonamiento el crecimiento
económico puede no ser realmente deseable, es que no todo lo que se gasta es
renovable, como muchas materias primas o muchas reservas geológicas (carbón,
petróleo, gas, etc.).El crecimiento económico de un país se considera importante,
porque está relacionado con el PIB per cápita de los individuos de un país. Puesto
que uno de los factores estadísticamente correlacionados con el bienestar socio-
económico de un país es la relativa abundancia de bienes económicos materiales
y de otro tipo disponibles para los ciudadanos de un país, el crecimiento
económico ha sido usado como una medida de la mejora de las condiciones socio-
económicas de un país.