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La degradación ambiental y el cambio climático planetario.

Degradación ambiental.
La degradación ambiental es todo proceso a través del cual el entorno natural se ve
comprometido de alguna forma, se reduce la diversidad biológica o la salud general
del medio se ve afectada. Los procesos de degradación ambiental pueden ser
naturales en su origen o pueden ser causados por la actividad humana, que también
puede acelerar procesos naturales de degradación.
La degradación ambiental gana cada vez mayor importancia como causa de las
migraciones humanas. Las cifras indican que se trata de un fenómeno de grandes
magnitudes (predominantemente en las naciones pertenecientes al Sur global). Los
impactos del cambio climático son cada vez más importantes y constituyen una
causa más de las migraciones actuales que interactúa con el resto e incluso las
potencia. Uno de los problemas más graves a los que se enfrentan quienes migran
por motivos ambientales es el escaso reconocimiento de su situación en tratados
internacionales y a nivel interno.
Por lo tanto, resulta imprescindible entender la complejidad de las migraciones
ambientales, para el que no existen soluciones sencillas. La enmienda o adaptación
de los tratados y otras normativas son opciones viables que deben continuarse
explorando.

Causas.
En la actualidad miles de personas abandonan sus hogares rompiendo con el
arraigo que les ataba a sus tierras, a su cultura y probablemente a su familia. Los
motivos son múltiples y se relacionan entre sí: guerras, hambre, pobreza y
condiciones ambientales degradadas, entre otros. A pesar de que no ha sido tan
reconocida como otras causas de las migraciones, la degradación ambiental está
relacionada de manera directa o indirecta con muchas de ellas. Dicha degradación
ambiental toma diversas formas: terremotos, tsunamis, ciclones, construcciones de
represas hidroeléctricas, accidentes industriales, como Chernóbil, sequías, los
impactos del cambio climático, etc.
Lo cierto es que, como se analiza a continuación, la mayoría de estas causas
ambientales relacionadas con las migraciones tienen poco de naturales. En otras
palabras, son las actividades humanas las que causan la degradación que, a su
vez, y de diferentes formas, empuja a las personas a migrar. En palabras de la
profesora Borràs “Los refugiados ambientales no sólo son víctimas de los desastres
naturales. Muchas veces es la mano del hombre la culpable de los éxodos
ambientales, cuyos damnificados no suelen recibir ayudas y mucho menos
indemnizaciones” o, como comenta Castillo “Gran parte de los impactos
ambientales que sufren los países empobrecidos derivan del modo de producción
de los países del Norte, controlado fundamentalmente a nivel internacional por
empresas transnacionales”, a lo que añade “la crueldad llega hasta tal extremo en
este sistema capitalista que a los que huyen por la degradación ambiental
provocada por los grandes capitales, con el apoyo inestimable de los Gobiernos,
esos mismos Gobiernos les cierran la puerta, los acusan de querer una vida mejor
y los explotan como mano de obra barata”.

Cambio climático.
Se llama cambio climático a la modificación del clima con respecto al historial
climático a una escala global o regional. Tales cambios se producen a muy diversas
escalas de tiempo y sobre todos los parámetros climáticos: temperatura,
precipitaciones, nubosidad, etcétera. Son debidos a causas naturales y la acción de
la humanidad.
El término suele usarse, de forma poco apropiada, para hacer referencia tan sólo a
los cambios climáticos que suceden en el presente, utilizándolo como sinónimo de
calentamiento global. La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el
Cambio Climático usa el término cambio climático sólo para referirse al cambio por
causas humanas.
Por "cambio climático" se entiende un cambio de clima atribuido directa o
indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera
mundial y que se suma a la variabilidad natural del clima observada durante
períodos de tiempo comparables
Además del calentamiento global, el cambio climático implica cambios en otras
variables como las lluvias globales y sus patrones, la cobertura de nubes y todos
los demás elementos del sistema atmosférico. La complejidad del problema y sus
múltiples interacciones hacen que la única manera de evaluar estos cambios sea
mediante el uso de modelos computacionales que intentan simular la física de la
atmósfera y de los océanos y que tienen una precisión muy limitada debido al
desconocimiento actual del funcionamiento de la atmósfera.

Causas de los cambios climáticos


El clima es un promedio, a una escala de tiempo dada, del tiempo atmosférico.
Sobre el clima influyen muchos fenómenos; consecuentemente, cambios en estos
fenómenos provocan cambios climáticos. Un cambio en la emisión del Sol, en la
composición de la atmósfera, en la disposición de los continentes, en las corrientes
marinas o en la órbita de la Tierra puede modificar la distribución de energía y el
balance radiactivo terrestre, alterando así profundamente el clima planetario. Estas
influencias se pueden clasificar en externas e internas a la Tierra.
Las externas también reciben el nombre de forzamientos dado que normalmente
actúan de forma sistemática sobre el clima, aunque también los hay aleatorios como
es el caso de los impactos de meteoritos. La influencia humana sobre el clima en
muchos casos se considera forzamiento externo ya que su influencia es más
sistemática que caótica pero también es cierto que el Homo sapiens pertenece a la
propia biosfera terrestre pudiéndose considerar también como forzamientos
internos según el criterio que se use. En las causas internas se encuentran una
mayoría de factores no sistemáticos o caóticos.

Conclusión
Lo cierto es que en la actualidad nos encontramos ante una crisis ambiental de
origen antropogénico sin precedentes, dominada por el cambio climático. Ninguna
región del planeta se libra de la misma, pero, así como unas han sido más
responsables que otras, la sufren en diferente medida. Las migraciones
ambientales, incluyendo las climáticas, son un claro ejemplo de las nefastas
consecuencias de dicha crisis. Las predicciones en cuanto al número de personas
que migran por motivos ambientales no son claras en cuanto a las cifras concretas,
pero sí lo son en relación con que se trata de un fenómeno que continuará en
aumento. Si los líderes gubernamentales continúan en la línea actual, el futuro de
los migrantes, tanto ambientales como por otros motivos, es desesperanzador.
Los esfuerzos se han de centrar en dos frentes: por un lado, poner freno a la
degradación ambiental y al cambio climático, y, por otro, proteger de manera
efectiva los derechos de los migrantes climáticos. Resulta imprescindible entender
que se trata de un fenómeno complejo para el que no existen soluciones sencillas.
La enmienda o adaptación de las convenciones y otras normativas existentes a nivel
internacional y los acuerdos bilaterales, junto con la creación de un nuevo tratado
multilateral ad hoc de carácter global son opciones relativamente viables que deben
continuarse explorando.

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