EL COMUNISMO NO ESTIMULÓ A LAS PERSONAS, PERO TAMPOCO EL
CAPITALISMO SE INTERESA, POR ELLAS.
Como ya casi todos sabemos el comunismo fracasó, por muchas razones, pero fue más que todo, por haberle quitado la libertad a las personas y, porque no estimuló individualmente a nadie a progresar en el aspecto económico, de libre mercado o de libre empresa; por el contrario los desestimuló, para que se conformaran; perdieran sus ambiciones personales de progresar y eso fue lo que causó que se quedaran atrasados, en la miseria y en la pobreza. Por ello los psicólogos alemanes dicen que cada ser humano necesita uno o varios estímulos, para funcionar en la vida, es decir, para alcanzar las metas deseadas individualmente en el trabajo, el estudio, el deporte, la política, el amor, etc., y así triunfar y ser feliz. Tal como lo dice el gran escritor salvadoreño, José René Barón Ferrufino, en su libro “Comunismo y traición”: “Para que la sociedad progrese el individuo no sólo tiene que tener libertad sino que también el estímulo del beneficio propio no colectivo. En la práctica esto fue tan evidente que en el ex Unión Soviética, Europa Oriental, China Roja, Vietnam, Corea del Norte, Cuba y Nicaragua, etc., los altos dirigentes comunistas tuvieron que, por fin reconocer que era necesario darle libertad y estimular a los estudiantes, científicos, obreros, campesinos y a cualquier otra persona, para que sobresalieran, produjeran más y progresaran en cada una de sus áreas. De esa manera a los científicos se les tenía que permitir que inventaran todo lo que ellos quisieran; a los obreros se les tenía que permitir que pusieran su propia empresa, para que así fueran los dueños del beneficio producido, por su propio esfuerzo, es decir, por la hecha y venta de sus productos y a los campesinos se les tenía que entregar tierras, para que las trabajaran en forma privada, cultivaran lo que ellos quisieran, la cosecha que sacaran la vendieran a un buen precio y el dinero que recibieran fuera de ellos, por tanto el científico como el obrero y el campesino se estimularían, para trabajar, pues se darían cuenta que ese esfuerzo si valdría la pena, porque ya no tendrían que entregarle su cosecha o su ganancia al estado comunista que se la robaba. De esa manera todos saldrían adelante, la economía crecería, habría más y mejores empleos, florecería el comercio, habría abundancia de productos, se crearía riqueza, progreso, innovación y bienestar, para todos. Y la experiencia ha demostrado que el capitalismo alemán, estadounidense e inglés, son los que más estimulan a las personas a trabajar y a progresar en la vida. En nuestro país El Salvador, el capitalismo casi nunca ha funcionado ni estimulado como debe de ser a las personas, porque históricamente la riqueza siempre ha estado en manos de unos pocos que son los oligarcas, los burgueses y los ricos y, por eso el capitalismo ha sido siempre injusto, explotador, marginador, empobrecedor y desigual con las personas y eso ha hecho también que los mejores empleos siempre estén en manos de ellos, lo que demuestra claramente que no hay oportunidades iguales de progresar, para todos los salvadoreños, por lo que se tiene que mejorar el capitalismo, para que beneficie a las mayorías y no solo a las minorías acomodadas que tienen poder económico y que se llaman clase alta o burguesía. Por ello creo yo que el modelo ideal, para que las personas progresen y sean felices está cerca de la democracia social moderna.
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