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SIXTEDAVID

ABADÍA
JESÚS
NAUDÍ
MOSCOSO
- XAVIERSÁNCHEZ,
PUJADAS VÍCTOR
MARTÍ -ALONSO
DEPORTEDELGADO
Y DEMOCRATIZACIÓN
- GLOBALIZACIÓN
EN BARCELONA
Y DEPORTE

CCD • AÑO 2 - Nº 3 - VOL. 1 • MURCIA 2005 • PÁGINAS 125 A 130 • ISSN: 1696-5043
GLOBALIZACIÓN Y DEPORTE. UNA PROPUESTA DE
INVESTIGACIÓN A TRAVÉS DEL FÚTBOL EN CANARIAS
Globalization and sports. An investigation proposal considering
football in the Canary Islands
David Jesús Moscoso Sánchez
Instituto de Estudios Sociales Avanzados de Andalucía (IESA-A).
Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC)

Víctor Alonso Delgado


Universidad de La Laguna. Departamento de Sociología

DIRECCIÓN PARA CORRESPONDENCIA:

David Jesús Moscoso Sánchez


IESA-CSIC - C/ Campo Santo de los Mártires, 7, 14004 Córdoba.
dmoscoso@iesaa.csic.es

Fecha de recepción: Julio 2005 • Fecha de aceptación: Septiembre 2005

RESUMEN ABSTRACT
El presente artículo analiza una cuestión poco estudiada hasta The aim of this article is to analyse a topic that has been un-
ahora en el ámbito de la investigación social aplicada al deporte, derstudied in the realm of the Social Sciences of sport, namely:
a saber: el fenómeno de la globalización. En él se reflexiona sobre the globalisation process. Specifically, we present a sociological
el proceso de difusión del deporte –como un fenómeno social nor- reflection about the spread of sport along the world. The start-
malizado–, centrándonos en la influencia ejercida por Inglaterra a ing point is the influence of the British Empire in the spreading
este respecto en el pasado. Asimismo, también trata de justificar of the sport culture. In addition, this article could provide some
el interés de este objeto de investigación (globalización y depor- clues for future research. To this end, we study the origin and
te), abordando algunas claves significativas de cara a futuros tra- development of football in the Canary Islands, both sociologi-
bajos. Con este fin, nos apoyamos en la experiencia sobre el ori- cally and historically.
gen y desarrollo de la práctica del fútbol en las islas Canarias,
abordándolo desde una perspectiva sociológica e histórica. Key words: Globalisation, sport, football, Canary Islands.

Palabras clave: Globalización, deporte, fútbol, Islas Canarias.

Introducción dico que se desarrolla en la ciudad donde dios de comunicación de masas, han sido,
residimos. en conjunto, algunos de los factores sin
El deporte es un fenómeno social de in- Desde sus orígenes hasta su definitiva los cuales hoy este fenómeno social no
dudable calado en las sociedades moder- normalización como práctica social, el despertaría tan enorme interés.
nas avanzadas. Ya lo decía Cagigal hace deporte ha vivido un proceso de desarro- Precisamente, el presente trabajo trata
varias décadas: “el deporte lo inunda to- llo muy similar al de otros fenómenos so- de indagar en este proceso de creciente
do”. Sin embargo, no siempre ha sido así: ciales, como resultado de numerosos fac- desarrollo del deporte, como fenómeno
el deporte ha pasado de ser una actividad tores culturales, políticos, económicos y social de largo alcance histórico. Dicha
minoritaria y clasista en la antigüedad a tecnológicos. A este respecto, la revolu- labor intentamos realizarla no tanto des-
convertirse en un fenómeno de masas en ción industrial, la emergencia de la socie- de una perspectiva histórica, que en todo
nuestros días. Tanto es así que nos resul- dad civil, la expansión de la enseñanza caso es inevitable por cuanto nos enfren-
ta difícil pensar en nuestras vidas sin que, pública, el auge de las ideologías nacio- tamos a hechos transcurridos en otras
de una forma u otra, éste forme parte nalistas y, por último, la llegada de la de- épocas, sino más bien desde una perspec-
de ellas; aunque sea con las noticias del mocracia a nuestros sistemas políticos, tiva sociológica, dilucidando pues las
telediario, o como un acontecimiento lú- junto a la expansión reciente de los me- condiciones en que tuvieron lugar los he-

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chos y factores históricos que determina- mente), y que además ayudaba a forjar el la entrada del Renacimiento, se dan las
ron el proceso de difusión experimentado carácter de las personas. Algunos erudi- condiciones necesarias para que el de-
por el deporte con el carácter global que tos y pensadores de la época, tales como porte adquiriera nuevamente su carácter
hoy conocemos. Aristóteles y Platón, fueron grandes gim- popular: “Con el renacer de las ciencias
Este ejercicio lo desarrollamos a través nastas, e incluso compartieron la tesis de y de las artes, de la niebla del pasado re-
de una estructura bastante lógica. En pri- que para llegar a ser un gran filósofo ha- surgió también un nuevo concepto de
mer lugar, tratamos de analizar las bases bía que ser antes un buen guardián de la hombre” (Maristany, 1967); y en ese re-
fundamentales de la actividad deportiva polis (Mandell, 1986; Moscoso, 2005). nacer el ejercicio físico adquiría una di-
desde una perspectiva histórica y socioló- Tan importante era el deporte para los mensión central, descubrimiento que se
gica. En segundo lugar, indagamos sobre la griegos que incluso imaginaron a sus dio- propagó a través del ruido rompedor de
influencia que ha ejercido Inglaterra en el ses como “jóvenes atletas pletóricos de la educación.
proceso de difusión del deporte moderno, fuerza. […] Los dioses –griegos– juegan y
por ser la más significativa, que no la úni- toman parte en competiciones deporti- La influencia inglesa
ca1, en esta labor de comprensión. En ter- vas: Apolo lanza el disco en compañía de en la universalización
cer lugar, en la última parte de este artí- su amigo Hyakinthos y Hermes vence a del deporte moderno1
culo se toma como ejemplo de concreción Eros en la lucha trabándole los pies” (Ma-
de este proceso de difusión del deporte a ristany, 1967). Por todo ello, los griegos Uno de los primeros personajes cono-
escala global, en el contexto de la moder- emplearon la Educación Física para la cidos que difundió con mayor empuje es-
nidad, al caso del fútbol en Canarias. formación completa de los ciudadanos te nuevo concepto de hombre será Tho-
Con todo, la intención de conjunto de de la polis, ejercicio que siguió practican- mas Elyot, quien publicó The Governor,
este trabajo es arrojar luz sobre un fenó- do el pueblo romano, no antes de un lar- un ensayo sobre la educación dedicado a
meno que, dentro del desconocimiento en go periodo de prevención y con una ma- Enrique VIII de Inglaterra en el que se de-
que tradicionalmente ha tenido lugar su yor motivación militar: la formación del fendía el empleo de duros ejercicios cor-
práctica, se nos presenta cada día más carácter y de las artes bélicas entre los porales para la formación de los estu-
complejo, porque, a pesar de que su prác- soldados romanos (el empleo de la espa- diantes. A él le seguirán otros muchos
tica es cada vez más homogénea en nues- da y la jabalina, la estrategia en la arena contemporáneos ingleses –entre ellos,
tro mundo, también las motivaciones se de la batalla,…). Esto, junto al definitivo Roger Asham (1516-1565)– que propug-
vuelven más personales. convencimiento de las bondades del de- narán también un sistema pedagógico de
porte, llevó al pueblo romano a difundir tipo espartano, en coherencia con el
Los orígenes del deporte como su práctica a través de la educación físi- nuevo ideal de hombre que predominaba,
construcción social y cultural ca y la cultura –diría Juvenal “mens sana ante el que merecía mayor atención la
in corpore sano”–, lo cual ha quedado formación del carácter que el desarrollo
Los primeros en iniciar el proceso de perpetuado con el paso del tiempo en las de la inteligencia. De este modo, esta
universalización del deporte fueron los ruinosas edificaciones que se resisten a concepción del hombre se va materiali-
griegos. La cultura griega clásica es el re- convertirse en polvo por toda Europa, el zando en la práctica a través de discipli-
sultado de la convergencia de numerosas norte de África y el próximo Oriente (los nas como los juegos de pelota, la carre-
culturas provenientes de Oriente y Occi- anfiteatros y los circos romanos), como ra, la lucha, la esgrima, el salto u otras
dente, surgiendo a partir de esta confron- en las propias actividades deportivas de actividades al aire libre, impartidas en
tación una sociedad ecléctica. Se puede las que hoy podemos disfrutar, siendo la las conocidas public schools, idea ésta
decir que el principal rasgo que caracte- más practicada el fútbol, de la cual fue- que fue tomada más tarde por los inte-
rizó a este proceso de construcción socio- ron artífices estos mismos. lectuales y pedagogos europeos (Rousse-
cultural en la Grecia clásica fue el desa- Sin embargo, con la caída del Imperio au, Voltaire, Goethe, Schiller, Kant, etc.),
rrollo de la creatividad, que se produjo Romano y el caos que afectó a toda Eu- que difundieron así una concepción es-
con una visión optimista e idealizada de ropa, sumida en invasiones germánicas partana de la educación como método
la vida –y, más concretamente, del hom- y musulmanas, junto a la expansión del eficaz para la formación del carácter de
bre–, lo que favoreció el origen de nume- Cristianismo más tarde, que manifestaba los jóvenes.
rosas manifestaciones artísticas y cultu- una actitud de hostilidad y rechazo ha- En las denominadas public schools, los
rales, políticas y económicas. Los griegos cia el culto del cuerpo y los festivales pa- estudiantes fueron creando normas con
profesaron una filosofía de la vida sensi- ganos, el deporte se encontró alejado de las que ordenaban el desarrollo de los
ble a cada faceta de sus vidas, por simple la vida social durante siglos, limitándose juegos practicados tradicionalmente, in-
que fuera ésta. En este contexto surgió el su práctica de manera exclusiva a los tentando mantener una homogeneidad
deporte que hoy conocemos. juegos de palacio. Sólo al final de la Ba- a lo largo de la isla, con el fin de orga-
Para los griegos, el deporte era un me- ja Edad Media y, de forma más clara, con nizar competiciones entre los equipos
dio de expresión que permitía resaltar la
belleza del ser humano, en un sentido
amplio del término (física e intelectual- 1 También reconocemos la influencia de Alemania, Escocia, Finlandia,…

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rivales de las distintas escuelas. Esta pri- trial y el origen de la sociedad civil, lo que incluso centroeuropeas, era común apos-
mera intención de poner orden a los jue- favoreció la creciente importancia adqui- tar en ciertas pruebas deportivas. Sin
gos deportivos se constituía sobre la ba- rida por el deporte. embargo, en estos momentos la apuesta
se de una serie de reglas, a la cual tras- La Revolución Industrial, por su parte, adquiere una dimensión inexistente has-
cendía en última instancia un conjunto fue generando un proceso de automati- ta entonces: “La apuesta inglesa podría
de valores que iba adquiriendo peso en zación que relegaba al hombre de sus la- evidenciar una visión del mundo que
una sociedad que vivía profundas trans- bores tradicionales en el trabajo, lo que allanaba el camino a otras innovaciones
formaciones. lo introducía en un proceso de fetichis- inglesas […] Muchos especuladores eran
Entre las circunstancias que caracteri- mo –en términos de Marx– ante el que gente cuya teología, aunque paradójica-
zaron a este proceso de institucionaliza- éste iba limitando sus oportunidades de mente determinista, favorecía el indivi-
ción del deporte en Inglaterra, a través expresión corporal y comunicación hu- dualismo y el análisis racional del tiem-
del sistema pedagógico, están las si- mana en el sentido en que tradicional- po, la energía y el dinero […] Cabe des-
guientes. En primer lugar, el propio aisla- mente se practicaban. Entonces, en lo tacar el hecho de que los sectores
miento de Inglaterra del continente cons- que atañe a este aspecto, podemos decir comerciales y financieros ingleses esta-
tituía un elemento crucial en todo ello. En que el deporte surge en cierta medida co- ban por aquel entonces apostando fuer-
Inglaterra se experimentaba un mayor mo reacción a este proceso de fetichis- te por unas posibilidades muy especula-
proceso de movilidad social en contraste mo, que intentaría compensar así la ne- tivas, como eran las pólizas de seguro del
con lo que ocurría en el resto de Europa, cesidad de expresión corporal y actividad comercio intercontinental, la financia-
ya que aquí el poder de la clase aristocrá- física que es propia de todo ser humano. ción de las cosechas coloniales, la com-
tica era menor, por lo que los comercian- Además, hemos de tener en cuenta que el pra y venta a plazo de materias primas y
tes adinerados, que recibían el favor de la proceso de Revolución Industrial iba el acaparamiento de mercancías en espe-
Corona, podían enviar a sus hijos a las es- acompañado de forma paralela de un ra de subidas de precios. Los primeros ca-
cuelas, donde se mezclaban a su vez con proceso de secularización, por lo que el pitalistas fueron, por lo tanto, unos ver-
la clase aristocrática. Esto significa que la deporte se convirtió también en una es- daderos jugadores” (Mandell, 1986:154).
educación física estaba al alcance de un pecie de religión civil: “En este sentido, el Por ello, el cálculo de probabilidades y el
mayor número de personas. En segundo deporte inglés reflejaba y reforzaba los análisis racional se aplicaron también a
lugar, hay que añadir a lo anterior que el conceptos fundamentales del mundo in- las diversiones deportivas, cuyos logros y
mayor grado de riqueza existente en In- dustrial necesarios para mantener un mí- consiguiente verificación tenían lugar en
glaterra en estos momentos –en todas las nimo de cohesión social, en un momen- el éxito.
clases sociales en relación con sus homó- to en que la cultura local y tradicional El éxito es otro elemento consustancial
logas continentales–, pudo incidir favora- ofrecían su mayor índice de desarraigo” al tipo de valores que predominaban en
blemente en un disfrute más generaliza- (Mandell, 1986:159). este momento. El éxito era percibido se-
do también de las diversiones deportivas, El cambio que acontece en los mo- gún dos posiciones distintas. Del lado de
así como otra serie de bienes y activida- mentos previos a la Revolución Industrial los deportistas, el éxito generaba pre-
des. En tercer lugar, no debemos olvidar es tan fundamental para el comienzo de mios, que se traducían en prestigio social
que el clima de mayor estabilidad políti- este proceso cuanto para la expansión de y riqueza económica. En aquellos prime-
ca que caracterizó a Inglaterra en ese pe- otras actividades sociales y culturales, tal ros momentos el prestigio era casi tan
riodo, sobre todo por su carácter pro-de- como son los juegos deportivos. ¿Por importante como el lucro económico:
mocrático, en contraste nuevamente con qué? La razón la encontramos en el he- permitía relacionarse con clases distin-
el clima de agitación vivido en los siste- cho de que si bien durante el siglo XVI y guidas y, por tanto, entrar en los círculos
mas políticos de las naciones del conti- los inicios del siglo XVII la práctica de de las clases aristocráticas inglesas. Del
nente europeo, ofrecía mayores ventajas ciertos juegos deportivos se concentraba lado de los apostantes, patrocinadores y
para experimentar otro tipo de innovacio- en las clases sociales más pudientes, se- empresarios, el éxito era percibido como
nes culturales, tales como las actividades gún cánones de placer y ocio más altruis- el único registro verificable para jugar a
deportivas. tas, un cambio en los valores con que las apuestas. Y, por todo ello, con el éxi-
Estas circunstancias, junto a otras, fue- eran percibidas estas actividades en la to se generalizó también el concepto de
ron determinantes porque permitieron segunda mitad del siglo XVII, que adqui- récord y, junto a éste, el de hándicap. Los
abrir un nuevo capítulo en la historia de rieron una notable espectacularidad, mo- récords (o registros deportivos) medían la
Inglaterra que motivó en buena medida la tivó un carácter más lucrativo en la prác- velocidad, la fuerza y la dificultad, y los
definitiva normalización del deporte. Pe- tica de las mismas. hándicaps (o ventajas) ayudaban a au-
ro, en el trasfondo de todo, fue el clima Así, en el siglo XVII se generalizó la mentar la emoción o, lo que es igual, el
de austeridad e innovación cultural que práctica de la apuesta en torno al desa- grado de incertidumbre ante el resultado
se desarrolló en Inglaterra en aquella rrollo de los juegos deportivos. La apues- final de los deportistas que vencerían.
época (favorecido por los nuevos descu- ta, desde luego, no era algo nuevo, pues La expansión de los juegos deportivos
brimientos), y que se materializaba a tra- ya en tiempos de Grecia y Roma, y en de- (el boxeo, las carreras de caballos y pe-
vés del proceso de la Revolución Indus- terminadas culturas norteamericanas e rros, las carreras populares, etc.) movía

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progresivamente a un mayor número de cualquier parte” (Mandell, 1986:161). diados del siglo XX, a lo que se unió el
espectadores, que pagaban su derecho de No cabe duda que el proceso de ins- importante desarrollo experimentado
admisión por asistir a los lugares en que titucionalización del deporte a través por los medios de comunicación de ma-
se desarrollaban estos juegos y que a la de los clubes y las federaciones depor- sas, que llevaron la práctica de esos jue-
vez apostaban por sus jugadores preferi- tivas adquiere así un papel eminente- gos deportivos institucionalizados siglos
dos. A su vez, los periodistas se interesa- mente difusor a nivel internacional. Lo antes en Inglaterra a lo largo de todos
ban cada vez más por estos juegos, e in- que permite el carácter competitivo y los rincones del planeta.
crementaban así la emoción por las profesional de la práctica deportiva rea-
apuestas. Todo esto motivó grandes inte- lizada a través de estos clubes y federa- El deporte ante el proceso
reses, lo que contribuyó a su definitiva di- ciones deportivas es crear una organi- de la modernidad
fusión a lo largo de toda Inglaterra, en un zación cada vez más global, que une
primer momento, y a lo largo de todo el poco a poco a todos los deportistas y los Tal como hemos apuntado, el origen
continente y América, posteriormente. De consiguientes seguidores a lo largo de del deporte moderno tiene lugar en un
las apuestas y de los récords también sur- todo el mundo, que hoy podría concre- contexto caracterizado por la emergencia
gió la idea del entrenamiento y la prepa- tarse de manera exacta en lo que se del capitalismo liberal, la democracia y la
ración técnica de los deportistas. A partir conoce como Comité Olímpico Interna- sociedad civil. El contexto en que se de-
de este momento tuvo lugar la distinción cional (COI) –que integra todas las fe- sarrolla el deporte permite entender sus
entre el deportista amateur y el deportis- deraciones deportivas nacionales e in- numerosas fases, momentos y rupturas,
ta profesional, que conllevaban plantea- ternacionales–. Por lo tanto, se puede así como los diferentes procesos de idea-
mientos distintos de su práctica. decir que esa concepción global de las ción y re-codificación de sus actores; en
El nacimiento de la sociedad civil, por relaciones humanas adquiere en el de- ese sentido, el fútbol podría tomarse co-
su parte, permitió una mayor indepen- porte una organización estable desde mo uno de los ejemplos más significati-
dencia del individuo respecto de la mo- mediados del siglo XIX, tras la creación vos. Lejos han de quedar los intentos por
narquía, por cuanto poco a poco, en de la Rugby Unión (Inglaterra), el Asso- encontrar “parientes lejanos”2 del actual
tanto el sistema político de Inglaterra ciation Football (EEUU), el Polo Club (In- fútbol, los cuales han sido criticados y
iba adquiriendo forma de Estado, el po- glaterra), u otras por el estilo, constitu- analizados con cierta sorna por A. Wahl,
der también se descentralizaba y el in- yendo un hito histórico en el deporte quien muestra las disputas francobritáni-
dividuo adquiría mayor autonomía, lo moderno, como resultado de este pro- cas en torno al origen de la soule3.
que conlleva a su vez una mayor de- ceso, la reanudación de los Juegos Hemos de subrayar el hecho de que, si
pendencia ante los demás miembros de Olímpicos en Atenas en el año 1896. bien el deporte moderno no es un pro-
la comunidad. Pero en este proceso existen otros ducto exclusivamente británico (Mandell,
Este marco en que tuvo lugar el ori- factores fundamentales que explican la 1986; Heinemann, 1997), el nacimiento
gen de la sociedad civil también favo- importante expansión que experimenta del fútbol muestra peculiaridades entre
reció la idea del nacionalismo, que, co- la práctica deportiva a nivel global, a las que podríamos destacar el hecho de
mo cabe esperar, caló de manera muy saber: el desarrollo de los medios y las que su nacimiento (como práctica orga-
especial en la práctica deportiva. La vías de comunicación, siendo en un pri- nizada) se produjo en el seno de las ins-
idea de la identidad territorial ya exis- mer momento el desarrollo del ferroca- tituciones educativas de elite británicas,
tía en la práctica del deporte en Ingla- rril y el incremento de viajes comercia- las public- schools. Como botón de
terra cuando se enfrentaban equipos de les en barco lo que permite tanto a equi- muestra, Coubertain arengaba de la si-
fútbol formados por los estudiantes de pos como espectadores desplazarse a los guiente manera a los alumnos de una
distintas Universidades (Oxford, Cam- encuentros deportivos; más importantes prestigiosa escuela francesa: “[La inicia-
bridge, Eton, Harrow, Westminster, aún serán las numerosas emigraciones y tiva ante la vida], el fútbol os lo dará, es-
Charterhouse,…), pero no es hasta el los desplazamientos entre los habitantes toy seguro. Cuento con él para impedir
momento en que se generaliza la apa- del Viejo Continente y América, que, co- que vuestras ambiciones se vean ence-
rición de los primeros grandes clubes y mo bien dice Mandell (1986:165), “lle- rradas en un portafolio; para impedir que
federaciones deportivas de carácter in- varon su juego con ellos”. Estos factores las etapas de vuestra vida sean las eta-
ternacional, en el siglo XIX, que esta cobraron especial relevancia desde me- pas de unos simples oficinistas. Mirad
idea adquiere una connotación más
amplia (global), pasando de competir
2 Sirva como ejemplo lo que advierte E. Galeano en su obra Fútbol a sol y sombra: “En el fútbol, como en ca-
entre rivales universitarios ingleses a
si todo lo demás, los primeros fueron los chinos […] Se sabe que en tiempos antiguos los egipcios y los ja-
hacerlo ahora contra deportistas de poneses se divertían pateando la pelota. […] En los pies de los legionarios romanos, llegó la novedad a las
otras nacionalidades. Así, “una vez las islas británicas” (Galeano, 1995:25).
3 Señala Wahl que en torno a 1890 se estableció una disputa, que alcanzó tintes de anglófoba, en torno al
condiciones competitivas fueron de origen nacional de la soule, “precursora” del fútbol moderno. El debate abordaba una práctica que, desarro-
aplicación universal, éxitos destacados llada por los normandos, alcanzó ambas orillas del Canal. Creo que, más allá de la disquisición, lo interesan-
te es el posicionamiento en torno a los orígenes nacionales, el posicionamiento de lo nacional como seña
en el tiempo, peso o distancia eran ve- diferenciadora (no ha de perderse de vista el momento histórico en que surge la disputa), así como las dife-
rificables de forma precisa y objetiva en rentes configuraciones que manifiestan tanto la soule como el fútbol moderno.

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este vasto mundo que se abre a vuestras terior, se evidencia una cuestionable línea clubes deportivos en el archipiélago. En-
energías. Si llegáis a ser grandes comer- discursiva en torno a la difusión y alcan- tre estas realidades, cabe señalar que la
ciantes, periodistas distinguidos, explo- ce del deporte, entendida de modo unili- creación del primer club de golf se re-
radores osados, empresarios sagaces […] neal. Como ejemplo, podríamos revisar el monta a finales del XIX, concretamente a
para estos resultados hay que ser un discurso en torno a la globalización. diciembre de 1891, del que todos sus so-
hombre de iniciativa, un buen jugador de Concretando, podemos aventurar que cios eran miembros de la colonia británi-
fútbol, que no teme los golpes, siempre el deporte se introduce y expande gracias ca residente en Gran Canaria.
ágil, de decisiones rápidas, conservando a diversos actores: a) los provenientes de Sin embargo, el caso del fútbol resulta
su sangre fría. Es necesario, traduciendo diferentes países (Gran Bretaña, Francia, cuanto menos controvertido, pues, pese a
esta expresión yanqui tan hermosa, ser Alemania, Italia, España,…) que se asien- que el objeto de estudio se halla meridia-
self-governed, es decir, ejercer el gobier- tan en las islas a lo largo de los siglos XIX namente definido y delimitado por un pe-
no de sí mismo […]. Me gustaría que y principios del XX; b) comerciantes, mi- riodo histórico concreto4, la cuestión no
vuestra atención escolar se fijase sobre litares, marineros de paso por estas tie- termina de aclararse definitivamente.
todo en las cosas lejanas, en las iniciati- rras; c) industriales, comerciantes, pro- Buena culpa de ello se debe al baile de da-
vas, en los hombres de acción. Quisiera hombres o estudiantes locales que han tos acerca de su surgimiento en las islas,
que tuvieseis la ambición de descubrir residido en Europa; d) elites locales con pues, si bien parece existir cierto consen-
una América, de colonizar un Tonkin y de fuerte contacto con los europeos residen- so en torno a la fecha y el club en que sur-
ocupar un Tombuctú. El fútbol es prólo- tes en el Archipiélago; e) emigrantes re- ge el fútbol en la España peninsular, lo
go de todas estas cosas. Todo esto hay tornados de América…, en definitiva, un cierto es que la situación canaria nos pa-
que ponerlo en el mismo saco, forma despliegue de realidades diversas que han rece, al menos, sugerente. En la última
parte del mismo programa. Es la educa- de ser entendidas en el contexto de la obra publicada en el archipiélago, Etno-
ción del vete hacia delante” (P. De Cou- modernidad y su alcance. grafía del fútbol canario, encontramos la
bertain, citado en Wahl, 1996:32). siguiente reflexión: “Podemos afirmar que
De aquí podríamos derivar una tenta- Modernidad y deporte en desde, aproximadamente, el año de 1890,
ción causal acerca del difusionismo cultu- Canarias. El caso del fútbol marinos ingleses de los barcos que pasa-
ral y del fútbol como realidad manifiesta ban por los puertos insulares, así como
que se perpetúa en una doble lógica: a) Si bien el interés por el deporte desde miembros de la numerosa colonia británi-
una lógica centro-periferia (presente en la las ciencias sociales en España arroja una ca establecida en las islas, celebraban en
expansión de los gustos y las prácticas escasa y reciente producción (Puig, 1996; las explanadas y arenales entre la ciudad
“modernas”, “anglosajonas” o “esporti- Barbero, 1994), esta realidad se reduce de Las Palmas y el Puerto de La Luz, parti-
vas”), y, b) una lógica democratizante (en- extremadamente al tratar el caso canario. das de «football» […]. Las fuentes docu-
tendida como doble logro político: el de En ese sentido, es necesario apuntar que mentales sobre estos principios del fútbol
las incipientes clases medias urbanas en la producción teórica y empírica alcanza son bastante escasas y, en lo referente a
su consecución de derechos y posibilida- pocos títulos y que este hecho nos empu- nuestro entorno insular, mucho más […].
des civiles, y por parte de las clases popu- ja a un ejercicio de rastreo minucioso, Pensamos que posiblemente desde 1885
lares, con la consecución –“conquista”– de fundamentalmente de obras realizadas al ya se celebraban encuentros en Canarias
tales prácticas). No obstante, cabe mati- albur de las islas capitalinas. El historia- promovidos por ciudadanos británicos es-
zar y reclamar una serie de cuestiones: dor A. Cioranescu señala el nacimiento tablecidos en las islas de Gran Canaria y
• En primer lugar, en su dinámica ex- del deporte en la isla de Tenerife en 1861, Tenerife, aunque precisar con exactitud
pansiva, que llega a obviar las relaciones cuando es fundado un gimnasio en la ca- una fecha es tarea bastante complicada de
y procesos internos originados a raíz del pital de la isla, Santa Cruz de Tenerife, demostrar documentalmente” (Domínguez
campo social que supone el fútbol. En ese donde instruir a los caballeros en la prác- Cabrera, 2001:10-11).
sentido, el propio fútbol se presenta co- tica de la esgrima, la hípica y la gimnasia Por citar otras fuentes documentales,
mo si de una continua evangelización, (Cioranescu, 1991). El propio Cioranescu González Cruz (1996), indagando en los
moderna e imparable, se tratase. refiere la existencia de diferentes prácti- archivos de la comunidad británica en Las
• En segundo lugar, en su alcance, al cas que pudiéramos encuadrar en lo de- Palmas de Gran Canaria, menciona la
ponerse en entredicho que no todas las portivo: excursiones a pueblos de la cos- fundación de Las Palmas Football Club en
prácticas deportivas se desarrollan de ta, ciclismo, lucha canaria… Así, tal y co- 1903. Por su parte, Eliseo Ojeda (1931)
igual modo en todos sus sentidos: el ca- mo recoge González Cruz (1995), a data la creación del primer club de fútbol
so del fútbol es un ejemplo evidente. principios del siglo XX puede hablarse de en Las Palmas –el denominado Club Gim-
• Y, en tercer lugar, derivado de lo an- prácticas deportivas y la existencia de nástico– a fines de 1905; club que, según
González Cruz, nace dos años después,
4 Periodo comprendido entre la llamada “etapa de expansión del fútbol” (Álvarez, 2001), a finales del siglo XIX, hacia 1907, como uno más entre otros
y la señalada por Pujadas y Santacana como “etapa de mercantilización del ocio deportivo en España” (Pu- clubes nacidos de la mano de la burgue-
jadas y Santacana, 2002), datada entre las décadas de 1880 y 1920.
5 Cito el Club Gimnástico, el Club Canario, la Asociación Football Las Palmas, el Sporting Club, el Athletic Club sía urbana y, por tanto, rezumando cierta
Las Palmas, el Club Buenos Aires, el Unión Club del Puerto, etc. (Glez. Cruz, 1995:508). british gentry5.

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Conclusiones - En tercer lugar, que el proceso de ex- des: de una parte, la señalada expansión
pansión del fútbol en Canarias no respon- mundial del fútbol y, de la otra, el llama-
Para concluir, en esta tarea de conocer de a una historia lineal y acumulativa; ni do proceso de mercantilización del ocio
adecuadamente el proceso de institucio- todo es fútbol ni el fútbol se expande co- deportivo. Estos dos espacios habrían de
nalización del fútbol en la sociedad cana- mo resultado de un proceso evolutivo sin servir como ejes transversales.
ria, desde la perspectiva global que hemos más, sino que en cada lugar su práctica En sexto lugar, este ejercicio de contex-
tratado, es necesario considerar las si- adquiere ciertos rasgos que lo caracteri- tualización nos llevaría a afirmar el en-
guientes observaciones: zan y a la vez lo distinguen del mismo de- cuadre urbano del mismo. Resulta impo-
- En primer lugar, que la expansión porte que se practica en otros lugares. sible analizar la expansión del fútbol, el
mundial del fútbol, eminentemente britá- - En cuarto lugar, hablar de fútbol re- uso de los espacios de juego y de las can-
nica, alcanza a las islas Canarias a prin- quiere necesariamente un encuadre teó- chas, sin considerar la expansión de las
cipios del siglo XX. En todo caso, es pro- rico, que atienda a este fenómeno como dos capitales canarias, así como la reorde-
bable que en las últimas décadas del XIX una realidad sujeta y, al mismo tiempo, al nación de los espacios urbanos (Fryden-
se celebrasen ya encuentros de fútbol y se margen de las otras prácticas deportivas; berg, 1999).
diese la existencia de un amago de clu- dependiente del contexto social donde - En séptimo lugar, la realidad insular
bes, o su práctica regular con motivo de se desarrolla o de las influencias que lle- lleva a plantear un análisis del fútbol más
fiestas, celebraciones, etc. gan a las islas desde otros lugares, y ca- allá de la difusión y vislumbrar su crista-
- En segundo lugar, que el proceso de paz de auto-generar una historia propia. lización a lo largo de las islas.
expansión no supone la asunción del Por consiguiente, hay que comprender - En octavo, y último lugar, enlazando
fútbol sin más. La carga ideológica ini- este fenómeno desde una perspectiva con el punto anterior, la proximidad a
cial aparejada a la creación de clubes de necesariamente socio-histórica y relacio- otras islas de clara influencia británica
fútbol en las islas (elitismo, anglofilia, nal: las tesis de Bourdieu (2000) acerca (el caso de la isla de Madeira) señalan
modernidad…) se ve acompañada por de los campos sociales, o bien las pro- tal cristalización más allá del territo-
otras realidades no siempre distintas. En puestas de Elias y Dunning (1992), o el rio canario.
este caso, hay que rehusar de cierta ten- propio Dunning (2003) son, como poco, El análisis de esta relación es intere-
tación difusionista cargada de sentido sugerentes. sante, no sólo por el intercambio depor-
común, pues la complejidad del fenóme- - En quinto lugar, en el supuesto de que tivo en sí que pueda desprenderse de ello,
no requiere un tratamiento y análisis estableciésemos una imaginaria línea his- sino por la utilidad de establecer estudios
pormenorizado. tórica, el proceso atravesaría dos realida- comparados entre ambos casos.

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