Sei sulla pagina 1di 5

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN CRISTÓBAL DE HUAMANGA

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN ESCUELA PROFESIONAL


DE INGENIERÍA CIVIL

DEPARTAMENTO ACADÉMICO LENGUA Y LITERATURA

“CUENTO”

ASIGNATURA : ESPAÑOL
CODIGO : LE-141
PROFESORA :
ALUMNO :

 QUISPE OCHOA, ADAN 16172111

SEMESTRE ACADÉMICO: 2018-Impar

GRUPO : III

AYACUCHO-PERÚ
EL LADRON DE LOS EXAMENES

Había una vez un alumno que no le gustaba nada de estudiar ni leer solo le gustaba cosas
fácil, y mucho menos hacer exámenes. Por eso había planteado un perfecto sistema para
copiar de compañeros. Pronto estos se dieron cuenta del abuso que estaba haciendo. Time
tomo un plan que explicó así a los demás sus compañeros y acordaron que en examen
tenemos que escribir las respuesta malas.

Las respuestas mal, lo más ridículas posible, y dejar que las copie, sin que se note mucho.
Luego, borrar las respuestas falsas y escribidlas de nuevo las respuestas buenas.

Y así lo hicieron como planearon. Cuando José se dio cuenta del engaño decidió cambiar
de estrategia, llevando un montón de apuntes escondidos discretamente que consultaba a la
hora de responder las preguntas de los exámenes. Pero este plan daba muchísimo trabajo,
casi tanto como estudiar. José tenía que buscar una solución mejor.
Una tarde, mientras pensaba en cómo esconder los apuntes para el examen de matemáticas
que tenía en unos días, José tuvo una idea: robar el examen. Así solo tendría que esconder
las respuestas a las preguntas fijas, y no todo el temario del examen, junto con los
problemas.
No tendré ni que esforzarme por hacer las cuentas, exclamó.

Al día siguiente José se coló en el despacho del profesor de matemático, Martin, y robó una
copia del examen que iban dar al día siguiente.
Donde José se dedicó esa tarde entera a resolver los problemas, hacer las cuentas y
responder a las preguntas que planteaba el examen de día siguiente.

Llegó el día del examen. José estaba muy emocionado feliz con un mente positivo. Estaba
seguro de que sacaría un 16 a 20. Y así fue termino el examen se fe a su casa feliz.

Donde José decidió seguir robando los exámenes del resto de asignaturas. Era increíble lo
bien que le estaba yendo el nuevo sistema trabajo que se planteó. Y nadie sospechaba nada.

Pero un día, cuando José fue al despacho de Martin, el profesor de inglés, a robar el
examen, el muchacho vio que solo había una copia de examen.

Seguro que tiene las demás ya preparadas pensó José. Y se la llevó el examen de inglés.

Llegó el día del examen. José estaba tranquilo. Le había costado mucho, pero sus
respuestas al examen eran perfectas para un 20.

Cuando al día siguiente Martin, el profesor de inglés, entregó las notas, José se llevó el
susto de su vida pensó que paso aquí si ice bien todas. Le había puesto un cero. Al finalizar
la clase, el profesor Martin lo dijo.

José, ven conmigo al despacho del director. Vas a explicarnos qué ha pasado con tu examen
hijo mío. Unas respuesta perfectas para el examen que tenía preparado y que, curiosamente,
desapareció de mi maletín el otro día de clases.
José se puso muy impactado, el director, se interesó por la historia de José.
Si hubieras leído las preguntas las hubieras respondido perfectamente, José le dijo el
director Fernández. Ahora todos los profesores entienden por qué siempre faltaba alguna
copia de sus exámenes cuando los repartían. Te has delatado tú solito, chaval. Ahora
tendrás que repetir todos los exámenes que distes así veré el rendimiento.

Curiosamente, José aprobó todos los exámenes con buena nota porque, sin darse cuenta, al
tener que resolver él solo las respuestas de los exámenes, había aprendido mucho. Al final
pasó de curso, aunque con un aprobado raso, mucho menos de lo que podría haber sacado
estudiando honestamente. Una lección que le quedó más que aprendida.

Donde ahí decidió José estudiar para los exámenes pensó en su persona que las cosas que
hace estaba muy mal.

Potrebbero piacerti anche