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Escuela Politécnica Nacional

Realidad socioeconómica y política del Ecuador

Nombre: Geoconda Molina

Sabemos que a los países que forman Latinoamérica son llamados “países de tercer
mundo” por su poco desarrollo industrial, académico, etc. El Ecuador forma parte de este
conjunto como ya sabemos, pero el presente escrito no se enfocará en la industria o la
educación, sino que se tratará el tema de la realidad política y social de nuestro país, de
una manera interpretativa, desde el punto de vista de la autora de este texto, citando
claramente a dos diferentes autores (Agustín Cueva y Pablo Andrade) que han realizado
ensayos de aquellos temas que se intenta interpretar.

Para empezar Agustín Cueva escribe en su ensayo MITO Y VERDAD DE LA


CULTURA ”MEZTIZA” que en el Ecuador desde la colonia los indígenas nunca fueron
sujetos a los cuales se les deje participar en la vida cotidiana, sino que más bien fueron
objetos de explotación constante, a los cuales se los marginaba, con esta aclaración
histórica nosotros podemos vislumbrar que este acto de omisión a los indígenas sigue
pasando hasta nuestros días, es por esta razón que los ecuatorianos no poseemos una
propia identidad, sino que vivimos copiando la de países extranjeros, antiguamente
imitado a Europa y actualmente a Estados Unidos. Este rechazo por lo indígena nos hace
tener una repulsión y hasta ciertos pensamientos discriminatorios solo por el simple hecho
de llevar ropa de nuestros indígenas. Cueva nos afirma que en el Ecuador no existe un
mestizaje y escribe: “cultura sin originalidad u originalidad sin cultura”, es decir que en
el Ecuador nunca se ha pensado en hacer alguna cosa para poner un firme cimiento a
nuestra identidad cultural mestiza, ya que toda la población desea firmemente dejar todo
lo indígena atrás para convertirse en un “blanco” que es lo que socialmente es correcto
desde hace ya muchos años.

Yves Lacoste citado por Cueva dice sobre los habitantes del tercer mundo que: “Ningún
valor les parece más auténtico: ni los del antiguo mundo de cuya insuficiente y
desmoronamiento son conscientes, ni los del mundo nuevo que sigue cerrado para ellos“,
Esta es una afirmación muy severa ya que afirma que los latinoamericanos estamos a la
deriva en un limbo en donde ese rechazo a lo indígena y no poder alcanzar las riquezas
del nuevo mundo nos deja frustrados y sin salida alguna, lo cual es cierto hasta nuestros
días, tratamos de acercarnos lo más que podamos a la forma de vida del nuevo mundo y
dejamos de lado a nuestras tradiciones indígenas, que en la actualidad se han
transformado en una mezcla de tradiciones extrajeras con las nuestras.

Es así que en este análisis cultural el Ecuador está perdido a la deriva, sin darse cuenta
que lo está ya que a nadie le importa y nadie hace algo al respecto, ya que en las clases
sociales más bajas no poseen lo recursos para poder tomar el problema en sus manos, la
clase social alta está concentrada en acercarse lo más que se pueda a la alta sociedad
extranjera y los de clase media intentan olvidar su pasado indígena, es así que estamos
viviendo en un país de olvido cultural.

Ahora bien, lo anteriormente mencionado es lo que Cuevas escribe sobre nuestra cultura,
pasemos a analizar lo que Andrade redacta en su ensayo EL IMAGINARIO
DEMOCRÁTICO EN EL ECUADOR, en el cual se manifiesta algunas costumbres
políticas en nuestro país. En el texto ya mencionado es ilustra que en el Ecuador la
democracia no ha sido entendida de una forma para la cual haga que el país avance sino
que más bien se la ha entendido como una forma de cohesión de la sociedad y modernizar
la misma pero solo de una forma instrumental, esto no ha cambiado con los años ya que
los discursos que se han suscitado en la política a lo largo de varias décadas han sido
exactamente las mismas, es decir nadie propone una ideología propia de una línea política
que se puedan seguir con argumentos, sino que se enfoca más bien en llegar al poder a
toda costa con el denominado caudillismos político, lo cual por cierto lo introdujo
Velazco Ibarra con sus varios años al frente del poder.

Andrade escribe que en el Ecuador “los discursos ecuatorianos sobre la democracia (…)
aspiran a inmovilizar el conflicto social (…) descuidan el tratamiento critico de las
problemáticas de los derechos individuales y la autonomía individual, sin las cuales la
democracia es inconcebible”, es decir que en nuestro país las democracia no está llevando
al país por un sedero correcto, gracias a las malas interpretaciones de aquellos que dirigen
el país, lo cual también menciona el autor que desencadena una serie de errores
incluyendo la corrupción que sin duda en este país se ve constantemente en cada uno de
los gobiernos de turno.
Para concluir el Ecuador es uno de los países que se equivoca constantemente en varios
temas clave que ayudaría a este a progresar, probablemente sea por esta herencia colonial
que los conquistadores nos dejaron implantada en nuestras mentes, las cuales no hemos
podido superar a lo algo de los años, pero sin duda hay pequeños grupos de personas que
intentan mejorara esta situación, tal vez no logren sus objetivos pero al menos ponen ese
granito de arena que hace que las masas se ponga a pensar sobre aquello y acaben
siguiéndolos. Así que al parecer de la autora de este texto el Ecuador no está perdido,
todavía tiene esperanza, ya que aún existe esta llama de rebelión y pensamiento
revolucionario que podría sacar al país de donde esta y llevarlo a nuevos días de gloria.

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