Sei sulla pagina 1di 20

EXP. N.

° 05614-2007-PA/TC
LIMA
ASPILLAGA ANDERSON
HERMANOS S.A.

SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

En Lima, a los 20 días del mes de marzo de 2009, la Sala Segunda del Tribunal
Constitucional, integrada por los magistrados Vergara Gotelli, Mesía Ramírez y Álvarez
Miranda, pronuncia la siguiente sentencia

ASUNTO
Recurso de agravio constitucional interpuesto por doña Carmen Alicia Augusto
Temple, en representación de Aspillaga Anderson Hermanos S.A., contra la sentencia de la
Sexta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, de fojas 400, su fecha 23 de
enero de 2007, que declara improcedente la demanda de autos.

ANTECEDENTES
Con fecha 17 de diciembre de 2004 la recurrente interpone demanda de amparo
contra el Instituto Nacional de Desarrollo (INADE) y el Proyecto Especial Jequetepeque–
Zaña (PEJEZA), solicitando que se declare inaplicable a su caso los efectos del artículo
410.º del Decreto Legislativo N.º 556; y que en consecuencia se ordene la devolución de
sus terrenos eriazos indebidamente confiscados e inscritos a favor del Instituto Nacional de
Desarrollo en el asiento 1, fojas 55-56, Tomo 391, en la Ficha 16943, en el asiento 2, fojas
56, Tomo 391 y en la Ficha 43826 del Registro de la Propiedad Inmueble de Chiclayo.
Refiere que el Instituto Nacional de Desarrollo ha vulnerado su derecho de
propiedad reconocido en los artículos 125.º y 157.º de la Constitución Política de 1979 y en
el artículo 70.º de la Constitución Política de 1993, pues desde el año 1990, amparándose
en el artículo 410.º del Decreto Legislativo N.º 556, le ha venido despojando parte de su
terreno constituido por el fundo “La Otra Banda”, cuyo dominio se encuentra inscrito en el
asiento 40, fojas 25, Tomo 78 del Registro de la Propiedad Inmueble de Chiclayo.
El Procurador Público a cargo de los asuntos judiciales del Ministerio de Vivienda,
Construcción y Saneamiento contesta la demanda señalando que las inscripciones de
terrenos eriazos en el asiento 1, fojas 55-56, Tomo 391 y en la Ficha 16943 del Registro de
la Propiedad Inmueble de Chiclayo, realizadas por el Proyecto Especial Jequetepeque–
Zaña, son válidas y eficaces debido a que fueron hechas en cumplimiento de lo dispuesto
por el artículo 410.º del Decreto Legislativo N.º 556.
El Proyecto Especial Jequetepeque–Zaña propone la excepción de prescripción y
contesta la demanda sosteniendo que las inscripciones de dominio de terrenos eriazos en el
asiento 1, fojas 55-56, Tomo 391 y en la Ficha 16943 del Registro de la Propiedad
Inmueble de Chiclayo realizadas a nombre del Instituto Nacional de Desarrollo, han sido
efectuadas en virtud del artículo 410.º del Decreto Legislativo N.º 556.
El Trigésimo Sexto Juzgado Especializado en lo Civil de Lima, con fecha 14 de
junio de 2006, declara infundada la excepción propuesta y fundada la demanda, por
considerar que la demandante ha sido privada de su propiedad sin que exista alguna causa
de seguridad nacional, necesidad pública o interés social, declarada por ley, y previo pago
en efectivo de indemnización, conforme lo establecía el artículo 125.º de la Constitución
Política de 1979.
Con fecha 24 de noviembre de 2006, el Procurador Público a cargo de los asuntos
judiciales del Ministerio de Agricultura solicita la sucesión procesal del Instituto Nacional
de Desarrollo, en mérito a lo dispuesto por el artículo 1.º del Decreto Supremo N.º 059-
2006-AG; y con fecha 15 de diciembre de 2006 el Ministerio de Agricultura fue declarado
sucesor procesal del Instituto Nacional de Desarrollo.
La Sala Superior competente, revocando la apelada, declaró improcedente la
demanda, por estimar que la controversia debe ventilarse en un proceso que cuente con
etapa probatoria.

FUNDAMENTOS

1.§ Delimitación de la pretensión y de las materias controvertidas


1. La demandante pretende que se deje sin efecto las transferencias de dominio de las
tierras eriazas realizadas al amparo del artículo 410.º del Decreto Legislativo N.º 556 e
inscritas a favor del Instituto Nacional de Desarrollo en el asiento 1, fojas 55-56, Tomo
391, en la Ficha 16943, en el asiento 2, fojas 56, Tomo 391 y en la Ficha 43826 del
Registro de la Propiedad Inmueble de Chiclayo. Alega que se ha vulnerado su derecho
de propiedad por cuanto ha sido despojada de sus terrenos eriazos desde el año 1990 sin
que se le haya seguido el procedimiento de expropiación previsto en el artículo 125.º de
la Constitución Política de 1979 y en el artículo 70.º de la Constitución Política de
1993.
2. Por su parte, el Proyecto Especial Jequetepeque–Zaña señala que las inscripciones de
dominio de los terrenos eriazos a favor del Instituto Nacional de Desarrollo en los
asientos y fichas antes referidas son válidas porque se realizaron en mérito a lo
dispuesto por el artículo 410.º del Decreto Legislativo N.º 556.
3. De acuerdo con los argumentos expuestos, la controversia se centra en determinar si se
ha vulnerado o no el derecho de propiedad de la demandante. Para resolver ello este
Tribunal estima oportuno previamente realizar unas breves consideraciones sobre el
derecho de propiedad.

2.§ Derecho de propiedad


4. El derecho de propiedad es un derecho fundamental que guarda una estrecha relación
con la libertad personal, pues a través de él se expresa la libertad económica que tiene
toda persona en el Estado social y democrático de derecho. El derecho de propiedad
garantiza la existencia e integridad de la propiedad (corporal o incorporal) para el
propietario, así como la participación del propietario en la organización y desarrollo de
un sistema económico-social. De ahí que en el artículo 70.° de la Constitución se
reconozca que el “derecho de propiedad es inviolable” y que el “Estado lo garantiza”.
5. Por ello, el derecho de propiedad faculta a su titular para usar, gozar, explotar y
disponer de ella, siempre y cuando a través de su uso se realice la función social que le
es propia. De ahí que el artículo 70.° de la Constitución precise que el derecho de
propiedad se “ejerce en armonía con el bien común”. Y no sólo esto; además incluye el
derecho de defender la propiedad contra todo acto que tenga efectos de privación en la
integridad de los bienes protegidos.
6. Teniendo presente ello resulta válido afirmar que el constituyente, al haber establecido
la función social del derecho de propiedad, ha querido que la propiedad privada, como
institución jurídica y como derecho subjetivo, no satisfaga únicamente los intereses
privados de sus titulares, sino que al propio tiempo también satisfaga los intereses
sociales o colectivos que resulten involucrados en el uso y disfrute de cada tipo de bien.
7. En este orden de ideas este Tribunal destaca que el derecho de propiedad se caracteriza,
entre otras cosas, por ser. a) un derecho pleno, en el sentido de que le confiere a su
titular un conjunto amplio de atribuciones que puede ejercer autónomamente dentro de
los límites impuestos por el ordenamiento jurídico y los derechos ajenos; y, b) un
derecho irrevocable, en el sentido de reconocer que su extinción o transmisión depende
de la propia voluntad del titular y no de la realización de una causa extraña o del solo
querer de un tercero, salvo las excepciones que prevé expresamente la Constitución
Política.
8. Entonces cabe enfatizar que las restricciones admisibles para el goce y ejercicio del
derecho de propiedad deben: a) estar establecidas por ley; b) ser necesarias; c) ser
proporcionales, y d) hacerse con el fin de lograr un objetivo legítimo en una sociedad
democrática. En conclusión el derecho de propiedad solamente puede ser materia de
restricciones por las causas y finalidades señaladas en la propia Constitución.

2.1.§ Derecho de propiedad y expropiación


9. No obstante la protección constitucional del derecho de propiedad, el mismo artículo
70.° de la Constitución, con fundamento en la prevalencia del bien común, contempla la
figura de la expropiación como potestad del Estado, esto es, la privación de la
titularidad de ese derecho contra la voluntad de su titular. Por ello, puede considerarse
que la propiedad es un derecho que puede ser sacrificado en cualquier momento si así lo
exige la seguridad nacional o la necesidad pública, según señala el artículo 70.° de la
Constitución.
10. Pues bien para que la expropiación como acto sea legítima debe observarse, en primer
término, el principio de legalidad, en virtud del cual la actividad de todas las personas y
la Administración Pública está sometida, primero, a la Constitución Política, y segundo,
al ordenamiento jurídico positivo. En segundo término, para que la expropiación como
procedimiento sea legítima, tiene que respetarse el derecho al debido proceso del titular
del derecho de propiedad.
11. Según el artículo 70.° de la Constitución vigente, el acto de expropiación para que sea
constitucionalmente válido requiere:
a. Que existan motivos de seguridad nacional o de necesidad pública definidos por el
Congreso de la República mediante una ley especial porque la naturaleza de las cosas así
lo exige. Los motivos expropiatorios de la Constitución de 1979, en cambio tenían que
fundamentarse en la necesidad y utilidad públicas o en el interés social.
b. Que el Estado pague previamente, en efectivo, una indemnización justipreciada que
incluya el precio del bien expropiado y la compensación por el eventual perjuicio, que, a
su vez, debe ser establecida en el procedimiento expropiatorio. Es decir, que el Estado
tiene el deber de indemnizar en forma plena y completa al titular del derecho de
propiedad privada, por el daño que no tenía el deber de soportar.
12. Así pues, las entidades de la Administración Pública tienen el deber constitucional de
respetar el derecho de propiedad. Por consiguiente, cuando requieran bienes inmuebles
deben obrar con sujeción al principio de legalidad y al derecho al debido proceso, es
decir, para que el derecho de propiedad puede ser adquirido válidamente mediante el
acto de expropiación se requiere que exista una ley del Congreso de la República que
exprese alguno de los motivos contemplados en la Constitución para que proceda la
expropiación. Por ello, los actos de expropiación de hecho resultan inconstitucionales.
13. De este modo, se estará ante supuestos inconstitucionales de privación del derecho de
propiedad, cuando:
a. No exista la ley del Congreso de la República que declare la expropiación sino otra
norma con rango de ley.
b. Exista la ley del Congreso de la República que declare la expropiación, pero no exprese
o señale alguno de los motivos contemplados en la Constitución para que proceda la
expropiación, o se fundamente en motivos distintos.
c. Exista la ley del Congreso de la República que señale alguno de los motivos de
expropiación contemplados en la Constitución, pero ésta se produce sin indemnización.
En estos supuestos el Estado confisca el derecho de propiedad por cuanto se apodera de
la totalidad o de una parte considerable de los bienes de una persona sin que exista ley
del Congreso de la República o sin que se presenten algunos de motivos contemplados
en la Constitución para que proceda la expropiación, o sin indemnización.

3.§ Análisis de la controversia


14. De la valoración conjunta de los medios probatorios, obrantes de fojas 13 a 148, puede
advertirse que desde el año 1990 el Instituto Nacional de Desarrollo ha venido
solicitando al Registro de Propiedad Inmueble de Chiclayo que, en virtud del artículo
410.° del Decreto Legislativo N.° 556, le transfiera el dominio de las tierras eriazas,
transferencias que fueron inscritas en el asiento 1, fojas 55-56, Tomo 391, en la Ficha
16943, en el asiento 2, fojas 56, Tomo 391 y en la Ficha 43826 del Registro de la
Propiedad Inmueble de Chiclayo.
15. El artículo 410.° del Decreto Legislativo N.° 556 dispone “Transfiérase al dominio de
las autoridades Autónomas y proyectos especiales del Instituto Nacional de Desarrollo
ubicadas en la zona de costa, todas la tierras eriazas comprendidas en su ámbito
debiendo inscribirse la propiedad de las mismas en los Registros Públicos por el sólo
mérito de la presente Ley”.
16. Sobre el particular este Tribunal considera que el contenido normativo del artículo
410.° del Decreto Legislativo N.° 556 infringe por la forma no sólo el artículo 70.° de la
Constitución de 1993, sino también, en su momento, el artículo 125.° de la Constitución
de 1979, vigente al momento en que se produjo la primera transferencia de dominio,
pues constituye una norma de expropiación que, en primer término, no fue emitida por
el Congreso de la República sino por el Poder Ejecutivo, a pesar de que las
Constituciones referidas disponen expresamente que el acto de expropiación debe
realizarse mediante una ley y no por un decreto legislativo, así como que el órgano
competente para ello es el Congreso de la República y no el Poder Ejecutivo.
17. De otra parte, este Tribunal también considera que el artículo 410.° del Decreto
Legislativo N.° 556 en la práctica constituye una norma de confiscación pues tiene
como finalidad el apoderamiento de la totalidad o de parte considerable de los bienes de
una persona, por parte del Estado, sin que exista ley del Congreso de la República, sin
que se presenten algunos de motivos contemplados en la Constitución para que proceda
la expropiación, y sin indemnización.
Teniendo presente ello, este Tribunal considera que las transferencias de dominio que
fueron inscritas a favor del Instituyo Nacional de Desarrollo en el asiento 1, fojas 55-56,
Tomo 391, en la Ficha 16943, en el asiento 2, fojas 56, Tomo 391 y en la Ficha 43826 del
Registro de la Propiedad Inmueble de Chiclayo, resultan inconstitucionales al haberse
sustentado en una norma formalmente inconstitucional. Consecuentemente, ha quedado
demostrado la vulneración del derecho de propiedad de la demandante, pues su terreno
constituido por el fundo “La Otra Banda” fue objeto de actos de expropiación
inconstitucionales realizados en contravención del artículo 125.º de la Constitución de 1979
y del artículo 70.º de la Constitución de 1993.
18. Finalmente este Tribunal considera que el artículo 410.º del Decreto Legislativo N.°
556 también resulta inconstitucional por el fondo, pues formaba parte de la Ley de
Presupuesto del Sector Público para el año 1990, que como tal sólo se encontraba
destinada a regular la función administrativa y financiera del Estado, así como los
ingresos y gastos fiscales.
Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la
Constitución Política del Perú,con el fundamento de voto del magistrado Vergara Gotelli,
que se agrega

HA RESUELTO
1. Declarar FUNDADA la demanda.

2. Ordenar a la Oficina Registral del Registro de la Propiedad Inmueble de Chiclayo que


deje sin efecto las inscripciones de dominio de los terrenos eriazos realizadas en mérito
del artículo 410.º del Decreto Legislativo N.º 556 a favor del Instituto Nacional de
Desarrollo en el asiento 1, fojas 55-56, Tomo 391, en la Ficha 16943, en el asiento 2,
fojas 56, Tomo 391 y en la Ficha 43826 del Registro de la Propiedad Inmueble de
Chiclayo.

Publíquese y notifíquese.

SS.
VERGARA GOTELLI
MESÍA RAMÍREZ
ÁLVAREZ MIRANDA

EXP. N.º 05614-2007-PA/TC


LIMA
ASPILLAGA ANDERSON
HERMANOS S.A.

FUDAMENTO DE VOTO DEL MAGISTRADO VERGARA GOTELLI

Emito el presente fundamento de voto por los fundamentos siguientes:

Petitorio de la demanda

1. Que con fecha 17 de diciembre de 2004 la empresa recurrente interpone demanda de


amparo contra el Instituto Nacional de Desarrollo (INADE) y el Proyecto Especial
Jequetepeque-Zaña (PEJEZA), solicitando que se declare la inaplicabilidad del artículo
410° del Decreto Legislativo N.° 556 y como consecuencia de ello se ordene la
devolución de sus terrenos eriazos indebidamente confiscados e inscritos a favor del
Instituto Nacional de Desarrollo en el asiento 1, fojas 55-56, Tomo 391, en la Ficha
16943, en el asiento 2, fojas 56, Tomo 391 y en la Ficha 43826 del Registro de la
Propiedad Inmueble de Chiclayo.
Señala el recurrente que el instituto emplazado ha vulnerado su derecho de propiedad
reconocido en los artículo 125° y 157° de la Constitución Política de 1979 y en el
artículo 70° de la Constitución Política de 1993, puesto que en amparo del artículo
410° del Decreto Legislativo N.° 556, desde 1990 se le está despojando parte de su
terreno constituido por el fundo “La Otra Banda”, cuyo dominio se encuentra inscrito
en el asiento 40, fojas 25, Tomo 78 del Registro de la Propiedad Inmueble de Chiclayo.

Contestación de la demanda
2. El Procurador Público a cargo de los asuntos judiciales del Ministerio de Vivienda,
Construcción y Saneamiento contesta la demanda considerando que la entidad
emplazada actuó conforme el artículo 410° del Decreto Legislativo 556, por lo que
realizó las inscripciones de terrenos eriazos en el asiento 1, fojas 55-56, Tomo 391 y en
la Ficha 16943 del Registro de la Propiedad Inmueble de Chiclayo, realizadas por el
Proyecto Especial Jequetepeque-Zaña.
3. El Proyecto Especial Jequetepeque deduce la excepción de prescripción y contesta la
demanda señalando que las inscripciones de dominio de terrenos eriazos en el asiento 1,
fojas 55-56, Tomo 391 y en la Ficha 16943 del Registro de la Propiedad Inmueble de
Chiclayo realizadas a nombre del Instituto Nacional de Desarrollo, han sido efectuadas
en virtud del artículo 410° del Decreto Legislativo 556.

Pronunciamiento de las instancias precedentes


4. El Trigésimo Sexto Juzgado Especializado en lo Civil de Lima declaró infundada la
excepción deducida y fundada la demanda en atención a que se le ha privado de su
derecho de propiedad a la empresa demandante sin que exista alguna causa de
seguridad nacional, necesidad pública o interés social declarada por ley, previo pago en
efectivo de la indemnización, conforme lo estableció el artículo 125° de la Constitución
Política de 1979, aplicable al caso.
La sala superior revisora revocando la recurrida declaró la improcedencia la demanda
por estimar que la controversia debe ventilarse en un proceso que cuente con etapa
probatoria.

Titularidad de los derechos fundamentales


5. La Constitución Política del Perú de 1993 ha señalado en su artículo 1º-parte de
derechos fundamentales- que “La defensa de la persona humana y el respeto de su
dignidad son el fin supremo de la sociedad y del Estado.” agregando en su artículo 2º
que “toda persona tiene derecho ….”, refiriendo en la aludida nomina derechos
atribuidos evidentemente a la persona humana, a la que sin duda alguna hace referencia
el citado dispositivo constitucional.
El Código Procesal Constitucional estatuye en su artículo V del Título Preliminar al
referirse a la interpretación de los Derechos Constitucionales, que “El contenido y
alcances de los derechos constitucionales protegidos por los procesos regulados en el
presente Código deben interpretarse de conformidad con la Declaración Universal de
Derechos Humanos, los tratados sobre derechos humanos así como las decisiones
adoptadas por los tribunales internacionales sobre derechos humanos, constituidos por
tratados de los que el Perú es parte.”
De lo expuesto en el fundamento precedente se colige que los derechos
constitucionales tienen que ser interpretados en concordancia con los tratados
internacionales en los que el Perú es parte con la finalidad de evitar incompatibilidades
entre éstos.
Entonces debemos remitirnos al contenido de los Tratados Internacionales para
interpretar los derechos constitucionales protegidos por el Código Procesal
Constitucional. La Declaración Universal de Derechos Humanos, como su misma
denominación señala, declara derechos directamente referidos a la persona humana,
precisando así en su articulo 1º que: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales
en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben
comportarse fraternalmente los unos con los otros.”, nominado en el articulo 2º la
enumeración de los derechos que se les reconoce.
También es importante señalar que la Convención Americana sobre Derechos
Humanos - “Pacto de San José de Costa Rica”- expresa en el artículo primero,
inciso dos, que debe entenderse que persona es todo ser humano”, haciendo referencia
marcada al precisar que los derechos reconocidos en la señalada disposición
internacional están referidos sólo a la persona humana.
En conclusión, extraemos de lo expuesto que las disposiciones internacionales al
proteger los derechos referidos a la persona humana están limitando al campo de las
denominadas acciones de garantías constitucionales a los procesos contemplados por
nuestro Código Procesal Constitucional.
Por ello es que expresamente el artículo 37º del Código Procesal Constitucional señala
que los derechos protegidos por el proceso de amparo son los que enumera el articulo
2º de la Constitución Política del Perú, referida obviamente a los derechos de la
persona humana, exceptuando el derecho a la libertad individual porque singularmente
dicho derecho está protegido por el proceso de habeas corpus y los destinados a los
procesos de cumplimiento y habeas data que la ley les tiene reservados tratamientos
especiales por cuanto traen conflictos de diversa naturaleza. Esto significa entonces
que el proceso de amparo está destinado exclusiva y excluyentemente a la defensa de
los derechos fundamentales directamente relacionados a la persona humana.
6. De lo expuesto queda claro que cuando la Constitución habla de los derechos
fundamentales, lo hace con las particularidades anotadas pensando en la persona
humana, esto es en el ser humano física y moralmente individualizado. Hacia él es que
se encuentran canalizados los diversos atributos, facultades y libertades, siendo solo él
quien puede invocar su respeto y protección a título subjetivo y en sede constitucional.

La Persona Jurídica.
7. El Código Civil en su Libro I desarrolla el tema de “personas” colocando en la Sección
Primera a las Personas Naturales (personas humanas), y en la Sección Segunda a las
Personas Jurídicas.
Esto quiere decir que nuestra legislación civil ordinaria ha contemplado tal separación
precisando los derechos y obligaciones de una y otras. En lo que respecta a las
personas morales que denomina jurídicas, hace la distinción al señalar la decisión libre
de varias personas naturales de formar un conglomerado con objetivo igual pero con
identidad propia, distinta a la de cada una de las personas naturales que crearon dicha
“persona” ideal. Dotada así de derechos y obligaciones la “persona jurídica” tiene
atribuciones que no corresponden a los derechos de las personas naturales que la
crearon con entera libertad. Cabe por ello recalcar que los fines de la persona jurídica
son distintos a los fines de las personas naturales que la formaron puesto que la reunión
de éstas se da por intereses comunes, conformando un interés propio y distinto a los
intereses personales de cada uno de sus integrantes, pudiendo tener fines de lucro el
aludido conglomerado venido a conocerse con la denominación legal de persona
jurídica.
Las personas jurídicas que tienen intereses de lucro destinan sus actividades en función
de los capitales que aportan sus integrantes con la expectativa de obtener utilidades que
se destinaran al fin de cuentas a estas personas naturales y en proporción de sus
aportes. Por esto se afirma en el lenguaje mercantil que la persona jurídica más que una
sociedad de personas es una sociedad de capitales. Entonces cuando estas personas
jurídicas denominadas empresas consideran que se les ha vulnerado un derecho
fundamental directamente vinculado a sus intereses patrimoniales, deben de buscar un
mecanismo idóneo para la solución del conflicto, teniendo en cuenta prima facie que
los jueces ordinarios son los encargados de velar por la defensa y protección de estos
derechos, también protegidos por el amplio manto de la Constitución Política del
Estado. Sin embargo estas empresas cada vez que ven afectados sus intereses
económicos, teniendo a su alcance el proceso ordinario correspondiente igualmente
satisfactorio, suelen recurrir, interesadamente, al proceso constitucional que, como
queda dicho, es exclusivo y excluyente de la persona humana. Esta determinación
arbitraria, además de ser anormal y caótica, coadyuva a la carga procesal que tiende a
rebasar la capacidad manejable del Tribunal Constitucional y a sembrar en algunos
sectores de la sociedad la idea de un afán invasorio que por cierto no tiene este
colegiado. Aquí podemos agregar que el proceso constitucional es gratuito en razón de
fundamentos que no alcanzan a las empresas de capitales, especialmente sociedades
mercantiles.
En el caso de las personas jurídicas que no tienen fines de lucro la propia ley civil
establece la vía específica para solicitar la restitución de los derechos particulares de
sus integrantes, como el caso de las asociaciones para las que la ley destina un proceso
determinado en sede ordinaria al presentarse conflictos entre las personas naturales que
las conforman y éstas
Por lo precedentemente expuesto aceptamos que las personas jurídicas pueden tener
derechos considerados fundamentales por la Constitución, sin que con esta etiqueta
cada vez que ven afectados sus intereses patrimoniales, quieran servirse gratuitamente
de la sede constitucional para traer sus conflictos a este canal de excepción sin
importarles la ruptura del orden que preserva el proceso, el que señala la tutela urgente
en sede constitucional exclusivamente para la solución de conflictos en temas de solo
interés de la persona humana.
8. De lo expuesto concluyo afirmando que si bien este Tribunal ha estado admitiendo
demandas de amparo presentadas por personas jurídicas, esta decisión debe ser
corregida ya que ello ha traído como consecuencia la “amparización” fabricada por
empresas para la defensa de sus intereses patrimoniales, utilizando los procesos de la
sede constitucional destinados exclusivamente a la solución de los conflictos sobre
derechos de la persona humana. Por ello es que a través de votos singulares uniformes
insisto en precisar la necesidad de limitar nuestra labor a solo lo que nos es propio,
dejando por excepción eventuales casos en los que la persona jurídica no tenga a donde
recurrir, encontrándose en una situación de indefensión total para defenderse de la
vulneración de derechos constitucionales que pongan en peligro su existencia.

Situaciones excepcionales
9. Creo oportuno establecer qué casos podrían ser considerados como excepcionales de
manera que este colegiado logre realizar un pronunciamiento real ante un caso de
emergencia. Si bien he señalado en reiteradas oportunidades que los procesos
constitucionales están destinados a la defensa de los derechos fundamentales de la
persona humana, también he manifestado que sólo por excepción se podría ingresar al
fondo en un proceso iniciado por persona jurídica. Estas situaciones excepcionales
podrían ser las siguientes:
a) Cuando la persona jurídica no tenga vía alguna –ya sea administrativa o judicial-
para requerir la solución de un conflicto que ponga en peligro algún derecho
fundamental, haciendo inevitable la intervención de este tribunal en razón de grave
necesidad.
b) Cuando sea evidente la vulneración de derechos constitucionales sin acceso a la
jurisdicción, es decir con riesgo de afectación real que pudiere hacer presumir un
estado patológico irremediable, tal como ejemplo la Ejecución de actos
administrativos o judiciales en aplicación de normas derogadas o declaradas
inconstitucionales por este Tribunal, o que sin haberse declarado su
inconstitucionalidad vulneran derechos amparados constitucionalmente, lo que las
hace inconstitucionales. En este supuesto debe tenerse presente que la intervención
del Tribunal Constitucional será admitida siempre que del sólo texto del escrito de
demanda y de sus anexos y prueba documental aneja sea evidente la vulneración de
dichos derechos constitucionales.
c) Cuando en contravención de un precedente vinculante emitido por este Tribunal un
órgano administrativo o judicial vulnera derechos constitucionales de una persona
jurídica, evidenciándose ello sólo del texto de la demanda, de los documentos y
anexos presentados.
d) Cuando por actos arbitrarios de un órgano administrativo o judicial se vulnere
derechos constitucionales que pongan en peligro la existencia de la persona jurídica.
En este supuesto la vulneración debe acreditarse con documental acompañada a la
demanda, lo que significa que la vulneración debe ser manifiesta.

En el presente caso
10. De autos se observa que la empresa demandante es una persona jurídica que reclama la
inaplicación del artículo 410° del Decreto Legislativo N.° 556 y en consecuencia se
deje sin efecto las transferencias de dominio de tierras a favor del instituto emplazado,
consignadas en el asiento 1, fojas 55-56, del Tomo 391, la Ficha 16943, en el asiento 2,
fojas 56, Tomo 391 y en la Ficha 43826 del Registro de la Propiedad Inmueble de
Chiclayo, puesto que considera que con ello se le está vulnerando su derecho a la
propiedad.
Es decir, encontramos en este caso presunta vulneración del derecho de propiedad de la
recurrente por haberse aplicado indebidamente el artículo 410° del referido dispositivo
legal a su caso en concreto. Considero por tanto que en el presente caso se presenta una
situación excepcional que nos dice que la empresa recurrente se encuentra
imposibilitada de recurrir a cualquier órgano jurisdiccional, para la solución de este
conflicto, ya que al parecer el acto lesivo estaría legitimado por ley, lo que significa que
cualquier reclamación realizada contra las transferencias de dominio de propiedad del
demandante, ya consumadas, sería desestimada en atención a que dicho acto
presuntamente lesivo estaría legitimado por aplicación del artículo 410° del Decreto
Legislativo N.° 556.
11. En ese sentido lo que observamos que la reclamación del recurrente presenta especial
dificultad puesto que no tiene a dónde recurrir para reclamar la vulneración de su
derecho de propiedad, ya que se le habría despojado de su propiedad de manera
arbitraria, bajo el amparo de un dispositivo inconstitucional. Es decir en el caso del
recurrente encontramos el supuesto a) y b) del fundamento 9 del presente voto.
12. Siendo así le corresponde a este colegiado ingresar al fondo del conflicto traído a esta
sede para verificar si la norma aplicada resulta o no inconstitucional, debiendo emitir
pronunciamiento que no sólo tendrá repercusión en la empresa demandante sino en
otros casos en los que se pueda presentar la misma situación anormal.
13. En el presente caso tenemos que por un dispositivo legal se permite la expropiación. El
artículo 70° de la Constitución vigente establece que “El derecho de propiedad es
inviolable. El Estado lo garantiza. Se ejerce en armonía con el bien común y dentro de
los límites de ley. A nadie puede privarse de su propiedad sino, exclusivamente, por
causa de seguridad nacional o necesidad pública, declarada por ley, y previo pago en
efectivo de indemnización justipreciada que incluya compensación por el eventual
perjuicio. Hay acción ante el Poder Judicial para contestar el valor de la propiedad
que el Estado haya señalado en el procedimiento expropiatorio”. Significa lo expuesto
que el referido artículo garantiza el derecho de propiedad estableciendo su
inviolabilidad, pero a la vez señala cuándo excepcionalmente se puede limitar este
derecho:
a) Existan motivos de seguridad nacional o necesidad publica.
b) Se haya pagado previamente en efectivo la indemnización justipreciada, la que
incluirá la compensación por el eventual perjuicio.
Uno de los requisitos exigidos para que se pueda dar la figura de la expropiación es
que las causas de seguridad nacional o necesidad pública haya sido declarada por
ley y el otro es que es que se haya llevado un procedimiento expropiatorio.
14. Por lo expuesto consideramos que en el presente caso el Decreto Legislativo N.° 556 no
cumple con lo establecido en el referido artículo constitucional, puesto que no existen
razones de seguridad nacional o necesidad pública ni se ha pagado la indemnización
justipreciada. En tal sentido al no haberse cumplido con lo estipulado en el referido
artículo se ha afectado el derecho a la propiedad de la empresa recurrente, ya que el
Estado en un acto arbitrario ha confiscado su propiedad. Por ello concuerdo con la
ponencia en mayoría en el extremo en que señala que el artículo 410° del Decreto
Legislativo N.° 556 es inconstitucional puesto que siendo otra la naturaleza de la
norma, se incluye un artículo que afecta directamente el derecho de propiedad, sin que
medie justificación alguna, siendo evidentemente un acto arbitrario por parte del
Estado.
15. Por tanto se debe invalidar y dejar sin efecto las inscripciones de dominio del terreno
realizados por la Oficina Registral del Registro de la Propiedad Inmueble de Chiclayo,
puesto que se realizó en merito al artículo 410° del Decreto Legislativo 556°, Ley de
Presupuesto del Sector Público para el año 1990, el que resulta violatorio del derecho
de propiedad y por tanto inconstitucional.

En consecuencia es por estas razones que considero que la demanda de amparo debe ser
declarada FUNDADA.

SS.

VERGARA GOTELLI
APELACION CONTRA RESOLUCIÓN QUE DECLARABA IMPROCEDENTE DEMANDA.
EXP. N.° 01342-2012-PA/TC
AREQUIPA
ROBERT MICHAEL
HUACO MENÉNDEZ

SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL


En Lima, a los 5 días del mes de noviembre de 2012 la Sala Primera del Tribunal Constitucional,
integrada por los señores magistrados Urviola Hani, Vergara Gotelli y Calle Hayen, pronuncia la
siguiente sentencia

ASUNTO
El recurso de agravio constitucional interpuesto por don Carlos Bustamente Barrios en
representación de Robert Michael Huaco Menéndez contra la resolución expedida por la Tercera
Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Arequipa, de fojas 82, su fecha 6 de enero de 2012,
que declaró improcedente la demanda de autos.

ANTECEDENTES
Don Giancarlo Torreblanca Gonzales, en representación de don Robert Michael Huaco Menéndez,
con fecha 10 de febrero de 2009 interpone demanda de amparo contra don Ronald Fernández
Bravo en su condición de gerente general del Proyecto Especial Majes-Siguas, Autoridad
Autónoma de Majes (AUTODEMA); contra don Jesús Vilca Iquiapaza en su calidad de procurador
público del Gobierno Regional de Arequipa y contra la Autoridad Autónoma de Majes
(AUTODEMA), solicitando que los emplazados se abstengan de amenazar su derecho
constitucional de propiedad, ya que AUTODEMA pretende solicitar el cierre y la cancelación de la
ficha registral correspondiente a su predio-finca rústica denominado Pájaro bobo.
Sostiene el demandante que con fecha 21 de septiembre de 1956 adquirió el predio-finca rústica,
denominado Pájaro bobo, ubicado en el distrito de Quilca, provincia de Camaná, departamento de
Arequipa; que sin embargo con fecha 4 de noviembre de 2008 AUTODEMA publicó en el diario La
República un comunicado informando que realizará el saneamiento físico legal de tierras,
cerrando y cancelando la ficha registral Nº 76214, correspondiente a la finca denominada Pájaro
bobo, en aplicación de la Ley Nº 26512 y Ley 27493.
Refiere adicionalmente que ante dicha situación con fecha 18 de diciembre de 2008 formuló
oposición administrativa ante AUTODEMA a fin de que ésta acredite su derecho de propiedad
sobre la finca Pájaro bobo; que la citada autoridad, mediante Oficio Nº 052-2009-GRA-PEMS/GG-
OAJ, le responde que conforme a lo dispuesto por los artículos 8º y 11º del Decreto Supremo Nº
130-2001-EF no puede emitir pronunciamiento y que la oposición en comentario debe realizarse
judicialmente. Finalmente sostiene que AUTODEMA no inscribe su supuesto derecho, por lo que
no puede accionar judicialmente, teniendo como única vía la constitucional.
El procurador público del Gobierno Regional de Arequipa, con fecha 9 de marzo de 2009, deduce
las excepciones de falta de legitimidad para obrar del demandado, falta de legitimidad para obrar
del demandante, representación defectuosa o insuficiente del demandante, de oscuridad o
ambigüedad en el modo de proponer la demanda y falta de agotamiento de la vía administrativa, y
contesta la demanda señalando que las áreas registradas en la Ficha Nº 76214 fueron transferidas
a la AUTODEMA, en virtud de la Ley Nº 11061, la Ley Nº 14197, la Ley Nº 17716 y la Ley N.° 19995
(sic), y que en consecuencia no se advierte lesión a derecho constitucional alguno.
Con fecha 9 de marzo de 2009, don Ronald Fernández Bravo en su condición de gerente general
del Proyecto Especial Majes Siguas Autoridad Autónoma de Majes –AUTODEMA deduce las
excepciones de falta de legitimidad para obrar del demandado, falta de legitimidad para obrar del
demandante, representación defectuosa o insuficiente del demandante, de oscuridad o
ambigüedad en el modo de proponer la demanda y falta de agotamiento de la vía administrativa, y
contesta la demanda en términos similares a los del procurador público del Gobierno Regional de
Arequipa.
A fojas 302 de autos corre un escrito de fecha 5 de junio de 2009, presentado por don Luis
Mauricio Antonio Huaco Zúñiga, mediante el cual solicita su incorporación al proceso en calidad de
litisconsorte facultativo de la parte demandante. En el precitado escrito don Mauricio Antonio
Huaco Zúñiga afirma que la sucesión intestada Huaco Zavalaga es actual propietaria del predio
denominado Lomas Grandes de Camaná y solicita que se declare que el inicio del
saneamientofisicolegal de los predios Pájaro bobo y Lomas grandes de Camaná; realizado por
AUTODEMA lesiona su derecho a la propiedad. Mediante Resolución de fecha 15 de junio de 2009,
el juzgado civil de Arequipa resolvió tener por apersonado a Mauricio Antonio Huaco Zúñiga en
calidad de litisconsorte facultativo (véase fojas 308 del expediente).
El Octavo Juzgado Civil de Arequipa mediante Resolución de fecha 20 de abril de 2011, declaró
infundadas las excepciones deducidas por los emplazados y saneado el proceso. Con fecha 20 de
junio de 2011 declaró fundada la demanda por considerar que los emplazados han confiscado la
propiedad del demandante. A su turno la Tercera Sala Civil de Arequipa, revocando la apelada,
declaró improcedente la demanda considerando que la vía constitucional no resulta idónea para la
dilucidación del presente caso, siendo aplicable lo dispuesto por el artículo 5º, inciso 2), del Código
Procesal Constitucional.
Este Tribunal, mediante Resolución de fecha 1 de agosto de 2012, de acuerdo a lo dispuesto por el
artículo 119º del Código Procesal Constitucional solicitó a la Superintendencia Nacional de los
Registros Públicos – SUNARP información para mejor resolver el presente caso, información que
fue remitida a este Colegiado mediante Oficio Nº 3608-2012-ZR Nº XII-GR-PUBL enviado con fecha
16 de septiembre de 2012.

FUNDAMENTOS
Delimitación del petitorio
1. De la lectura de la demanda y los recursos de apelación y agravio constitucional, se
desprende lo siguiente:
· Que el demandante pretende que los emplazados se abstengan de amenazar su derecho de
propiedad, con la cancelación de la ficha registral correspondiente a su inmueble (predio-finca
rústica denominado Pájaro bobo), cuya extensión es de 49,735.00 ha, y a pesar de no cumplir los
requisitos legales y no pagar un justiprecio e indemnización.
· Que el demandante cuestiona las razones por las cuales los emplazados consideran que su
derecho de propiedad sobre la finca rústica denominada Pájaro bobo se ha extinguido.
En consecuencia, el demandante pretende que:
a) Se declare la inaplicabilidad de la comunicación publicada en el diario La República con
fecha 4 de diciembre de 2008, sobre cancelación de fichas registrales específicamente la ficha Nº
76214, correspondiente al predio finca Pájaro bobo.
b) Se declare sin eficacia la Subasta Pública de Predios Proceso INV-02 en lo relacionado a la
oferta de unidades de terrenos que se encuentran dentro del área de la finca rústica Pájaro bobo.

Consideraciones previas
2. A criterio de este Tribunal, la procedencia del amparo para casos de amenazas de vulneración
de derechos constitucionales está supeditada a que tal amenaza seacierta e inminente. Así, en la
STC 00091-2004-PA/TC, específicamente en el fundamento 8, se afirmó que para ser objeto de
protección frente a una amenaza a través de los procesos constitucionales, esta debe ser cierta y
de inminente realización; es decir, el perjuicio debe ser real, efectivo, tangible, concreto e
ineludible, excluyendo del amparo los perjuicios imaginarios o aquellos que escapan a una
captación objetiva.
En consecuencia, para que sea considerada cierta, la amenaza debe estar fundada en hechos
reales, y no imaginarios, y ser de inminente realización, esto es, que el perjuicio ocurra en un
futuro inmediato, y no en uno remoto. A su vez, el perjuicio que se ocasione en el futuro debe ser
real, pues tiene que estar basado en hechos verdaderos; efectivo, lo cual implica que
inequívocamente menoscabará alguno de los derechos tutelados
3. Este Colegiado estima que el derecho de propiedad es un derecho fundamental que guarda
una estrecha relación con la libertad personal, pues a través de él se expresa la libertad económica
que tiene toda persona en el Estado social y democrático de derecho. El derecho de propiedad
garantiza la existencia e integridad de la propiedad (corporal o incorporal) para el propietario, así
como la participación del propietario en la organización y desarrollo de un sistema económico-
social. De ahí que en el artículo 70° de la Constitución se reconozca que el “derecho de propiedad
es inviolable” y que el “Estado lo garantiza”.
4. El derecho de propiedad se caracteriza, entre otras cosas, por ser: a) un derecho pleno, en el
sentido de que le confiere a su titular un conjunto amplio de atribuciones que puede ejercer
autónomamente dentro de los límites impuestos por el ordenamiento jurídico y los derechos
ajenos; y, b) un derecho irrevocable, en el sentido de reconocer que su extinción o transmisión
depende de la propia voluntad del titular y no de la realización de una causa extraña o del solo
querer de un tercero, salvo las excepciones que prevé expresamente la Constitución Política.
5. Entonces cabe enfatizar que las restricciones admisibles para el goce y ejercicio del derecho
de propiedad deben: a) estar establecidas por ley; b) ser necesarias; c)ser proporcionales,
y d) hacerse con el fin de lograr un objetivo legítimo en una sociedad democrática. En conclusión
el derecho de propiedad solamente puede ser materia de restricciones por las causas y finalidades
señaladas en la propia Constitución (Cfr. 05614-2007-AA, fundamento 8).
6. No obstante la protección constitucional del derecho de propiedad, el mismo artículo 70° de
la Constitución, con fundamento en la prevalencia del bien común, contempla la figura de
la expropiación como potestad del Estado, esto es, la privación de la titularidad de ese derecho
contra la voluntad de su titular. Por ello, puede considerarse que la propiedad es un derecho que
puede ser sacrificado en cualquier momento si así lo exige la seguridad nacional o la necesidad
pública, según lo señala el artículo 70° de la Constitución.
7. Pues bien, para que la expropiación como acto sea legítima debe observarse: a) el principio
de legalidad, en virtud del cual la actividad de todas las personas y la Administración Pública están
sometidas, primero, a la Constitución Política, y segundo, al ordenamiento jurídico positivo, b) el
derecho al debido proceso del titular del derecho de propiedad en el procedimiento de
expropiación.
8. Según el artículo 70.° de la Constitución vigente, el acto de expropiación para que sea
constitucionalmente válido requiere:
a. Que existan motivos de seguridad nacional o de necesidad pública definidos por el Congreso
de la República mediante una ley especial porque la naturaleza de las cosas así lo exige. Los
motivos expropiatorios de la Constitución de 1979, en cambio, tenían que fundamentarse en
la necesidad y utilidad públicas o en el interés social.
b. Que el Estado pague previamente, en efectivo, una indemnización justipreciada que incluya el
precio del bien expropiado y la compensación por el eventual perjuicio, que, a su vez, debe ser
establecida en el procedimiento expropiatorio. Es decir, que el Estado tiene el deber de
indemnizar en forma plena y completa al titular del derecho de propiedad privada, por el daño
que no debía soportar.
9. Así pues, las entidades de la Administración Pública tienen el deber constitucional de
respetar el derecho de propiedad. Por consiguiente, cuando requieran expropiar bienes inmuebles
deben obrar con sujeción al principio de legalidad y al derecho al debido proceso, es decir, para
que el derecho de propiedad puede ser adquirido válidamente mediante el acto de expropiación
se requiere que exista una ley del Congreso de la República que exprese alguno de los motivos
contemplados en la Constitución para que proceda la expropiación.
10. De lo expresado en el fundamento anterior, este Colegiado considera que se estará ante
supuestos inconstitucionales de privación del derecho de propiedad, cuando: a) no exista una ley
del Congreso de la República que declare la expropiación sino otra norma con rango de ley; b)
exista una ley del Congreso de la República que declare la expropiación, pero no exprese o señale
alguno de los motivos contemplados en la Constitución para que proceda la expropiación, o se
fundamente en motivos distintos; c) exista una ley del Congreso de la República que señale alguno
de los motivos de expropiación contemplados en la Constitución, pero ésta se produzca sin
indemnización.
En estos supuestos, el Estado confisca el derecho de propiedad por cuanto se apodera de la
totalidad o de una parte considerable de los bienes de una persona sin que exista ley del Congreso
de la República o sin que se presenten algunos de los motivos contemplados en la Constitución
para que proceda la expropiación, o sin indemnización.

Análisis de la controversia
Sobre la afectación del derecho a la propiedad regulado en los artículos 2º inciso 16) y 70º de la
Constitución

Argumentos del demandante


11. El demandante sostiene que los emplazados amenazan su derecho constitucional a la
propiedad, ya que AUTODEMA pretende solicitar el cierre y la cancelación de la ficha registral
correspondiente a su predio-finca rústica denominado Pájaro bobo. Manifiesta también que
mediante la comunicación de fecha 4 de diciembre de 2008, difundida en el diario La
República, emitida por el Gobierno Regional de Arequipa Autoridad Autonoma de Majes Proyecto
Especial Majes – Siguas, se evidencia la amenaza a su derecho de propiedad.

Argumentos de los demandados


12. El procurador público del Gobierno Regional de Arequipa con fecha 9 de marzo de 2009 señala
que las áreas registradas en la Ficha Nº 76214 fueron transferidas a la AUTODEMA, con base en la
Ley Nº 11061, la Ley Nº 14197 y la Ley Nº 17716, extinguiendo el derecho de propiedad del
demandante, y que en consecuencia no se advierte lesión a derecho constitucional alguno.
13. Don Ronald Fernández Bravo en su condición de gerente general del Proyecto Especial Majes-
Siguas, Autoridad Autónoma de Majes –AUTODEMA contestó la demanda en términos similares a
los expuestos por el procurador público del Gobierno Regional de Arequipa.

Consideraciones del Tribunal Constitucional


14. De la valoración de los medios probatorios, obrantes en el expediente, puede advertirse que:
a) Se encuentra fehacientemente acreditado el derecho de propiedad del demandante sobre el
predio-finca rústica denominado Pájaro bobo, ubicado en el distrito deQuilca, provincia
de Camaná, departamento de Arequipa, con una extensión de 49,735.00 ha, conforme consta de
las anotaciones que aparecen en el Registro de Propiedad Inmueble de Arequipa. En efecto, a
partir del asiento 9, de fojas 267, tomo 140 del Registro de Propiedad Inmueble de Arequipa (Zona
Registral Nº XIICamaná) de la Partida Registral Nº 04002550, Ficha Nº 00076214, aparece inscrita
la propiedad del demandante (Cfr. folios 6 a 8 del tomo 1 del principal).
b) Mediante la Resolución Nº 0183-80-AA.DGRA/AR, del 8 de julio de 1990 que corre a fojas 9
del expediente, se reservan tierras eriazas existentes en un total de 471,576.00 ha, (cuatrocientas
setenta y un mil quinientos setenta y seis hectáreas) a favor del Organismo de Desarrollo de
Arequipa para ser destinadas al Proyecto Integral de Desarrollo Majes.
c) A través del artículo 174º de la Ley Nº 23740 se adjudica la propiedad a favor de la Autoridad
Autónoma de Majes de las tierras eriazas a que se refiere la Resolución Nº 0183-80-AA.DGRA/AR
en un área de 471,576.00 ha, Las que se encuentran inscritas en los Registros de Arequipa, Ficha
Nº 22010, véase fojas 73 a 109.
d) Los terrenos de la finca Pájaro bobo se encuentran comprendidos dentro de la extensión
inscrita por AUTODEMA, y dicha autoridad afirma que la propiedad invocada por el demandante
se ha extinguido (léase la contestación de la demanda a fojas 119 de los actuados).
e) La comunicación publicada en el diario La República con fecha 4 de diciembre de 2008, sobre
cancelación de fichas registrales específicamente la ficha Nº 76214, correspondiente al predio
finca Pájaro bobo, con base en lo prescrito por la Ley Nº 26512, la Ley Nº 27493 y el Anexo 4 del
D.U. Nº 071-2001, artículo 7º del Decreto Supremo Nº 130-2001-EF (fojas 11 del expediente),
amenaza el derecho reclamado por el accionante.
f) El demandante ante la publicación mencionada en el párrafo anterior presentó oposición
administrativa con fecha 18 de diciembre de 2008, obteniendo como respuesta el Oficio Nº 052 -
2009GRA-PEMS/GG-OAJ, en el cual la demandada afirma no estar facultada para emitir
pronunciamiento sobre la oposición administrativa.
g) La Autoridad Autónoma de Majes (AUTODEMA) es una entidad pública, propietaria y
posesionaria de un área de 471,576.00 hectáreas, ubicadas en los distritos de Santa Rita de Siguas,
Santa Isabel de Siguas y San Juan de Siguas de la Provincia de Arequipa; en el distrito de Lluta en la
Provincia de Caylloma; en el distrito de Huancarqui de la Provincia de Castilla, y en los distritos
de Quilca, Samuel Pastor y Nicolás de Piérola de la Provincia de Camaná, debidamente inscrita en
la ficha Nº 22010 del Registro de Propiedad Inmueble de la Zona Registral Nº XII Sede Arequipa
(véase fojas 73 de autos).
h) Dentro de las 471,576.00 hectáreas inscritas a favor de la entidad emplazada se encuentran
las 49,735.00 hectáreas correspondientes al predio rustico Pájaro bobo ubicado en el distrito
de Quilca, provincia de Camaná, departamento de Arequipa, cuya titularidad corresponde al
demandante, de acuerdo a lo señalado en el fundamento 14. a) de la presente.
15. Conforme a lo señalado en el considerando 10 de la presente estaremos ante un supuesto
inconstitucional de privación del derecho de propiedad cuando no exista ley del congreso que
ordene la expropiación o sin que se presenten algunos motivos regulados en la Constitución o no
se cancele la indemnización, situación que se presenta en el caso de autos, toda vez que
AUTODEMA reconoce el derecho de propiedad invocado por el demandante, sin embargo
considera que éste se ha extinguido por mandato de la normativa siguiente: a) la Ley Nº 11061,
por la cual el Estado entraba en posesión de todos los terrenos eriazos del territorio nacional; b) la
ley Nº 14197, la que detalla que son de propiedad del Estado todos los terrenos eriazos del
territorio nacional, cualquiera que fuese el título anterior de adquisición; c) la ley Nº 17716
estableció que todos los terrenos eriazos pasaban a ser de dominio del Estado; y, d) la ley Nº
19995, que dispuso que se revertían al dominio del Estado los terrenos eriazos.
16. Este Tribunal estima inaceptable el argumento de la entidad emplazada en lo referido a la
extinción del derecho de propiedad que tiene el demandante sobre el bien en cuestión, debiendo
reiterar que no basta invocar la naturaleza eriaza de un terreno para revertirlo a favor del Estado
sin mediar un proceso de expropiación (Cfr. STC 07130-2006-AA fundamento 7). Adicionalmente
se debe apreciar que la Constitución Política de 1933 (vigente a la fecha de inscripción de la
primera de dominio del bien inmueble materia de litis) reconocía en su artículo 29º la
inviolabilidad de la propiedad, siendo reiterada dicha tutela en la Constitución de 1979, artículo
125º, y por nuestra ley fundamental actual en su artículo 70º.
En dicho contexto, sostener la legalidad de la reversión de terrenos eriazos a favor del Estado sin
cumplir con un proceso de expropiación, porque así lo disponen las leyes números 11061, 14197,
17716, 19995 (debiendo ser 19955), colisiona con lo dispuesto por nuestra norma constitucional
en su artículo 70º y con lo prescrito por su artículo 51º, toda vez que los emplazados pretenden
que las normas infraconstitucionales primen sobre nuestra Carta fundamental, requerimiento que
no puede ser amparado, obviando adicionalmente que desde la promulgación de la Constitución
de 1993, todas las normas preexistentes en el ordenamiento jurídico deben interpretarse con
arreglo a ella.
17. Al haber demostrado el demandante: a) ostentar la propiedad del predio en cuestión; y, b)
que no media proceso de expropiación alguno sobre el predio materia delitis; cabe concluir que el
comunicado emitido por AUTODEMA, y difundido con fecha 4 de diciembre de 2008 en el diario La
República lesiona su derecho a la propiedad, debido a que se establece un supuesto de reversión
del terreno a favor del Estado, al amparo de normas que contravienen el mandato constitucional.
18. En el presente caso estamos ante una confiscación de la propiedad por parte del Estado sobre
el predio denominado Pájaro bobo. Este Colegiado en la STC 03569-2010-AA, ha establecido que
ante la confiscación pueden existir dos opciones de protección que son las siguientes:
a) Si el acto de confiscación del derecho a la propiedad privada tiene su origen en una norma con
rango de ley, la sentencia estimatoria, además de disponer lainaplicación de la
norma autoaplicativa al caso concreto, debe ordenar la nulidad de cualquier inscripción registral a
favor del Estado y que se restituya la propiedad a la persona que se le confiscó, siempre y cuando
el bien inmueble confiscado siga siendo propiedad del Estado; b) Si la propiedad confiscada
por una norma con rango de ley ha sido transferida por el Estado a un tercero de buena fe y a
título oneroso, la sentencia estimativa le ordenará al Estado que inicie el procedimiento de
expropiación para que le abone al propietario que sufrió la confiscación una indemnización
justipreciada por la propiedad confiscada, pues ordenar la restitución de la propiedad conllevaría
que se le prive al tercero de buena fe y a título oneroso su derecho legitimo al uso y goce de la
propiedad privada, lo cual afectaría también el principio de seguridad jurídica (Cfr. STC 03569-
2010-AA fundamento 4).
En atención al considerando anterior, en el presente caso, se advierte que el titular del predio-
finca rústica denominado Pájaro bobo, ubicado en el distrito de Quilca, provincia de Camaná,
departamento de Arequipa, con una extensión de 49,735.00 ha, con linderos por el norte, la
pampa y camino que cruza para la ciudad de Arequipa; sur, la barranca que linda con el mar,
excluyéndose en este lindero el terreno que ocupa la caleta de Quilca hasta el punto en que se
cruzan los caminos de Majes y Camaná; oriente, la ceja del Valle Quilca; poniente, la medianía del
cerro conocido como Alto de Ramón y la mayor parte del sitio llamado tetillas, es don Robert
Michael Huaco Menéndez; en consecuencia, la Oficina Registral del Registro de la Propiedad
Inmueble de Arequipa debe mantener las inscripciones de dominio de los terrenos eriazos a favor
de don Robert Michael Huaco Menéndez, registrado en el asiento 9, de fojas 267, tomo 140 del
Registro de Propiedad Inmueble de Arequipa (Zona Registral Nº XII Camaná) de la Partida Registral
Nº 04002550, Ficha Nº 00076214.
Estando a lo expresado, se debe invalidar y dejar sin efecto la inscripción de dominio anotada en la
Partida Nº 22010 de lo los Registros de Propiedad Inmueble de Arequipa a favor de AUTODEMA,
en lo que se superponga a la propiedad del demandante sobre el predio-finca rústica
denominado Pájaro bobo, toda vez que se realizó en mérito a las leyes números 11061, 14197,
17716, 19995 (debiendo ser 19955), que resultan violatorias al derecho de propiedad del
recurrente y, por tanto, deben ser inaplicadas.

Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la Constitución
Política del Perú

HA RESUELTO

1. Declarar FUNDADA la demanda al haberse acreditado la afectación del derecho a la


propiedad, con el abono de costos.
2. ORDENAR a la Oficina Registral del Registro de la Propiedad Inmueble (SUNARP), Zona
Registral Nº XII – Sede de Arequipa, que mantenga las inscripciones de dominio de los terrenos
eriazos a favor de don Robert Michael Huaco Menéndez, registrado en el asiento 9, de fojas 267,
tomo 140 del Registro de Propiedad Inmueble de Arequipa (Zona Registral Nº XII Camaná) de la
Partida Registral Nº 04002550, Ficha Nº 00076214.

3. ORDENAR a la Oficina Registral del Registro de la Propiedad Inmueble (SUNARP), Zona


Registral Nº XII – Sede de Arequipa, invalidar y dejar sin efecto la inscripción registral
de AUTODEMA, anotada en la ficha registral Nº 22010 sobre un área total de 471,576.00
ha, respecto de las áreas inscritas bajo la propiedad del demandante y que está constituida en el
terreno denominados finca rústica Pájaro bobo (Partida Registral Nº 04002550).

4. EXHORTAR a la AUTODEMA a obrar con diligencia al momento de iniciar procesos de


saneamiento fisicolegal, toda vez que ello debe realizarse sin contravenir lo dispuesto por nuestra
Constitución, en el presente caso nos referimos específicamente a sus artículos 2º, inciso 16), y
70º.

Publíquese y notifíquese.

SS.

URVIOLA HANI
VERGARA GOTELLI
CALLE HAYEN

Potrebbero piacerti anche