MONICION DEL SEÑOR DE LOS MILAGROS.

Paz y bien querida familia franciscana mariana, al recordar la pasión, muerte y resurrección de cristo nuestro señor
en esta etapa de la novena que conmemoramos al señor de los Milagros nos ponemos en presencia del señor
diciendo en el nombre del padre del hijo y del espíritu santo amén.

CANTAMOS.- Alabare al señor alzando las manos como una abandera

LECTURA. Relata la vida de Jesús de Nazaret, centrándose especialmente en su nacimiento, muerte y resurrección.
Escuchamos atentamente la Palabra del Señor tomada de San Lucas 10, 25- 37

REFLEXION.-

Esta lectura nos habla de la parábola el BUEN SAMARITANO que debemos tener compasión hacia el necesitado y
nosotros tenemos la responsabilidad de ayudar a nuestro prójimo a si sea pobre o rico todos somos iguales ante los
ojos de Dios. Así como dijo Dios amaras a tu prójimo como a ti mismo.

PETICIONES.-Señor te entregamos nuestras plegarias:

1° Señor de los milagros te pido por todos los enfermos y los que se encuentran en las cárceles para los fortalezcas
les des la fe necesario para superarlo. ROGUEMOS AL SEÑOR: Te lo pedimos Señor.

2° Señor de los milagros te pido por el sacerdote Juan Pita Carranza para que nos sepa guiar por el camino del bien.
ROGUEMOS AL SEÑOR: Te lo pedimos Señor.

3° Señor de los milagros te pido por todo el país para que las autoridades no sean corruptas y saquen adelante al
Perú para que así vivamos en paz. ROGUEMOS AL SEÑOR: Te lo pedimos Señor.

4° Por todos nosotros para que seamos fieles a Dios y acrecentemos nuestra Fé. ROGUEMOS AL SEÑOR: Te lo
pedimos Señor

OFRENDAS.-

Señor te ofrecemos estas velas blancas y moradas como símbolo de la luz que irradias hacia nosotros y la
Penitencia. También te ofrecemos este ramo de flores blancas símbolo de la pureza y paz

ORACION FINAL.- Señor de los Milagros, llévanos a contemplar tu rostro en compañía de Santa María.
Concédenos una conversión profunda y sincera, que es reconciliación de vida nueva, y ayúdanos a ser santos,
porque no hay mayor tristeza e irresponsabilidad para los tiempos que nos ha tocado vivir, que la de no trabajar
ardorosamente para nuestra santidad. Renueva en tu amor nuestras parroquias, nuestras comunidades religiosas,
para que sean casas y escuelas de oración y de comunión.

Que sepamos escuchar y anunciar así la palabra de vida, con un corazón generoso, como la Virgen María. Señor de
los Milagros, ayúdanos a descubrir la acción misericordiosa en nuestras vidas, sobre todo en el sacramento de la
reconciliación. Suscita en nuestras vidas el asombro eucarístico, porque en la eucaristía tú estás realmente
presente.