As� habl� Satan�s, en la apariencia Intr�pido, mas dentro acongojado, Maldiciendo
su m�sera existencia, De su debilidad desesperado:
A lo que en tono ronco y lastimero, As� le respondi� su compa�ero: ��Oh Pr�ncipe! �Oh caudillo generoso �De tantos Tronos, tantas Potestades! ��Que de los Serafinea ordenados �Condujiste los fieros batallones �Al combate m�s justo y peligroso �Que ocurrir puede en todas las edades! ��T�, que con tus heroicas acciones, �Incapaz de temor, dudar hiciste �Si debe el Criador Omnipotente �Su autoridad suprema al contingente �Azar, o si en su mismo ser consiste!