Sei sulla pagina 1di 5

Artículo

Producción y Divulgación Científica


Datos Generales:
Título: Seguridad Social
Autor: García de Concepción, María Carolina. Doctora en Odontología. Docente del Centro
de Formación y Desarrollo Integral Padre Fantino CEFODIPF. Cursante de la Maestría
Gestión Académica de la Universidad Católica Tecnológica del Cibao UCATECI.
dra.carolinagarcia@gmail.com
Fuente: Producción y Divulgación Científica, Maestría Gestión Académica.
Tipo de documento: Articulo.
Descriptores: Seguridad Social; dignidad de las personas; derecho a la vida.
Termino geográfico: República Dominicana.
Palabra Clave: Seguridad social, dignidad humana, los valores.
Lenguaje: Español.

Resumen (español): El presente artículo tiene como objetivo de estudio penetrar el sentir de
las pertinentes voces de nuestra sociedad. Consagrar el ordenamiento jurídico relacionado
con los derechos humanos. En La actualidad la República Dominica está siendo sujeto de
situaciones que permean la saeta del profundo latir que se conecta al pensar sobre la calidad
de vida de la seguridad social de los residentes niños, jóvenes y adulto de la sociedad, esta
trilogía que caracteriza los seres humanos civiles de nuestra nación. Para el logro de dicho
objetivo debemos adentrarnos a conocer la ley orgánica de los derechos humanos, la
prevención y las sanciones que proceden en caso de situaciones no deseadas.

Abstract (English): The present article aims to study the perception of the relevant voices of
our society. It enshrines the legal system related to human rights. In the present day the
Dominican Republic it is in question of situations that is connected to the thought about the
quality of life of the social security of the children reserved, young and adults of the society,
this trilogy that characterizes the human beings of our nation. To achieve this goal, you must
know the organic law of human rights, prevetion and sanctions that come in case of unwanted
situations.

Desarrollo
En la actualidad el sistema de seguridad social dominicano se encuentra embadurnado de
grandes retos y uno de ellos es mejorar la confianza de la calidad de vida de los ciudadanos
civiles que habitan esta nación. Haciendo una observación del acontecer y evaluación
pertinente de las olas de noticias actuales de distintos casos de homicidio enfocados a
menores, en un momento donde se habla de cambios y transformación educativa, situación
que permea incertidumbre. A veces se confía en seres humanos por su calidad de renombre
intelectual y clase social sin tener la certeza de brindarnos la seguridad deseada.
Si bien es cierto que algunas causas que tienden a desarrollar ese mal son las diferencias
individuales tales como la edad, los antecedentes étnicos, los atributos físicos, clase social,
motivaciones, necesidades e intereses. No es menos cierto que estas situaciones tienden a ser
dadas por el rechazo a un elemento social, racial, socio económico de burocracia e incluso
por un valor sentimental.
Toda acción reproduce una reacción, la violencia para algunas personas es vista como una
acción fascinante, se presenta como un virus que prolifera en el medio ambiente familiar,
laborar y político.
El autoritarismo de querer tener y ser rey a costos de destrucción de los demás seres para
sentir valer su poder y satisfacción plena del control. La producción interna del miedo por
parte de persona afectada, son puertas que permiten que se desarrollen estos casos. Según
cifras del Fondo de las Naciones Unidas Para la Infancia UNICEF. Se estima que en América
Latina y el Caribe son asesinadas de 100 mil a 200 mil personas por año el 28% de víctimas
rondan entre 10 a 19 años (UNICEF, 2016).
Según datos del Observatorio de Seguridad Ciudadana República Dominicana (2016), desde
enero hasta junio de este año se han registrado en el territorio nacional 74 homicidios de
menores de edad, 64 de estos fueron a hombres.
Según la Organización Internacional del Trabajo OIT (2000): “La seguridad social como la
protección que proporciona la sociedad a sus miembros, a través de una serie de medidas
públicas”. (p.45)
Según la Constitución Dominicana (2010), Capítulo II, Artículo 7:
Estado social y democrático de derecho. La Republica Dominicana es un estado
social y democrático de derecho, organizado en forma de Republica unitaria, fundado
en el respeto a la dignidad humana, los derechos fundamentales, el trabajo, la
soberanía popular y la separación e independencia de los poderes públicos. (p. 2)
Resulta interesante hacer una pausa reconocer a que se refiere cuando se dice dignidad
humana. La Ley No. 76-02 (2002) del Código Procesal Penal establece en su Artículo 10, lo
siguiente: “Dignidad de la Persona. Toda persona tiene derecho a que se respete su dignidad
personal y su integridad física, psíquica y moral. Nadie puede ser sometido a torturas ni a
tratos crueles, inhumanos o degradantes” (Artículo 10, Ley 76-02, 2002).
Según Rokeach (2007): “Los valores son considerados como estructuras cognitivas por
medio de la cual, la persona elige y actúa de determinadas maneras relacionadas con sus
creencias en su condición humana acerca de su comportamiento” (p. 2). De acuerdo a lo
expresado por Ramos (2008), los valores en la conducta humana están relacionados con las
actitudes y actúan como marcos preferenciales de conducta de las personas, en el mundo
donde transcurre su existencia. Los valores en conjunto se corresponden con los ámbitos
moral, ético, religioso, económico, político, jurídico, legal, científico, instrumental y
pedagógico. Uno de los valores fundamentales de la conducta humana, es el referente a la
dignidad humana. El valor de la dignidad humana está constituido por la convergencia de tres
principios que son: El principio de la autonomía de la persona, el principio de beneficencia y
el principio de privacidad.
En este sentido cabe destacar que el ser humano se construye desde la educación en valores,
los primeros años de vida son fundamentales en el crecimiento y desarrollo de las actitudes,
la buena práctica y los modales desde la educación informal que se articula luego con la
educación formal en la creación de un individuo innato, que al transcurrir se nutre del medio
ambiente que le rodea. El bueno ejemplo edifica al propio accionar del ser en lo cognoscitivo,
social y actitudinal.
A veces los autores de los hechos tienden a buscar un sinnúmero de excusa para explicar su
acto delictivo. Es evidente que toda acción provoca una reacción, no hay acción sin
planificación. En el Código Penal de la República Dominicana se da luz definiendo estos
tipos de acciones.
1. El que voluntariamente mata a otro, se hace reo de homicidio. (Artículo 295, Código
Penal Dominicano).
2. El homicidio cometido con premeditación o acechanza, se califica asesinato (Artículo
296, Código Penal Dominicano).
3. La premeditación consiste en el designio formado antes de la acción, de atentar contra la
persona de un individuo determinado, o contra la de aquél a quien se halle o encuentre,
aun cuando ese designio dependa de alguna circunstancia o condición (Artículo 297,
Código Penal Dominicano).
4. La acechanza consiste en esperar, más o menos tiempo, en uno o varios lugares, a un
individuo cualquiera, con el fin de darle muerte, o de ejercer contra él actos de violencia.
(Artículo 298, Código Penal Dominicano).
Meditando esta alteración social de la propia dignidad humana, preocupa en el ámbito
educativo la construcción en la formación de seres integrales que sean capaz de ser consiente
del valor humano, del privilegio mágico de la vida que es un derecho natural y a la vez
fundamental. La Constitución Dominicana (2010) habla en el Título II, sobre los derechos,
garantías y deberes fundamentales y es específicamente en el Artículo 37, donde habla del
derecho a la vida. El derecho a la vida es inviolable desde la concepción hasta la muerte. No
podrá establecerse, pronunciarse ni aplicarse en ningún caso, la pena de muerte (Artículo 37,
Constitución Dominicana, 2010).
En este sentido propio de la vida. ¿Cómo se pueden prevenir estos casos de homicidios? Todo
ser humano necesitaría de orientación psicológica dentro de la cuna de educación para
propiciar el sano control de sus sentimientos y emociones mentales, o más bien se deberían
crear hábitos de meditar en la propia soledad edificante del individuo y de esta forma auto
evaluarse, con la misión de crear día a día una mejor versión de sí mismo, donde se articulen
los conocimientos, acción y bondad para dar luz a un ser integral, el verdadero hombre o
mujer de valor.
Se debería en caso de sentir que su propia vida peligra, hacer una denuncia preventiva, al
sentirse acosado o amenazados por un individuo y de esta manera evitar ser el encabezado de
una noticia. Podría decirse que existe una disociación en la mente entre la cognición y la
conciencia de un reo lo que impide tener una mente organizada. La Teoría de la Mente (TdM)
permite representarse, inferir e interpretar los estados mentales (creencias, deseos,
intenciones) y emocionales de los demás (Gallese & Goldman, 1998).
Existen dos tipos de emociones que determinan la conducta de un individuo.
Las emociones básicas están biológica- mente determinadas y ligadas a conductas
fundamentales para la supervivencia; su comienzo es abrupto y su duración limitada. La
expresión de cada emoción básica requiere activar ciertos músculos faciales que son los
mismos en distintas culturas, de ahí su universalidad. Alegría, tristeza, enojo, asco y miedo
son los estados emocionales que han recibido mayor acuerdo (Damasio, 1994; Ekman, 1999;
LeDoux, 1999).
Las emociones secundarias son aquellas que para su reconocimiento, requieren la elaboración
cognitiva de un contexto social. Surgen de variaciones sutiles y combinaciones de emociones
básicas y son consideradas estados mentales (Barón-Cohen; Ekman, 1999; Le Doux, 1999).
Indagando en fuentes fehaciente que han estudiado las disociaciones de la teoría de la mente
TdM emocional y cognitiva, con el objetivo de conocer cuál de esos dos tipos de muestra
mayor afectación en la población.
Encontrándose más afectado en esta población el componente emocional, con una tasa más
alta de rendimiento patológico para el test LMO resultando entre 80 - 76%. (Barón-Cohen,
2001). Dadas las limitaciones de la población estudiada, estos hallazgos no son
generalizables, por lo tanto resultaría de interés ampliar esta muestra, llevar a cabo estudios
similares que corroboren los resultados encontrados y estudiar estas correlaciones en otras
patologías como la enfermedad de Parkinson, Asperger, trastorno bipolar, etc.
Según este dato aún no se ha confirmado 100% un estudio que garantice evaluar las
disociaciones de la mente para poder identificar a través de test psicológico según el tipo de
las emociones si una mente está en su sano juicio mental o presenta una alteración mental. La
nación dominicana necesita una eficiencia global del ser que abarque la panorámica de
cobertura de la seguridad social a todo ciudadano por igual. Es pues la seguridad social parte
activa de la educación donde se engrana la educación informal con la formal.
Enfocándome en la educación formal, aconsejaría que sería conveniente que en cada escuela
y colegio inviertan en psicólogos clínicos que implementes y realicen estudios con test
psicológico a todos los actores educativos, estudiantes, docentes y directivo con la finalidad
de trabajar de forma personalidad cada individuo en especial aquellos que presenten
alteraciones significativa en los resultados de las pruebas. La finalidad de la educación es la
enseñanza y el aprendizaje de los estudiantes, pero a la ves seria edificante lograr que se
desarrolle los pilares de saber ser, hacer y convivir, para de esta forma obtener hombre
eficiente en todos los aspectos de la vida. La seguridad social nace al educar seres humanos
íntegros que desarrollen todas las competencias fundamentales donde se engrane la
inteligencia múltiple y se inyecte en todo el accionar humanos los valores. Definitivamente
los valores trascienden sellando nuestro propio legado.
Referencias:
Barón-Cohen, N. (2001). Indicadores de la Mortalidad por Criminalidad en América Latina.
(Tercera Edición). México, Distrito Federal: Ediciones McGraw Hill Interamericana
Barón-Cohen, N.; Wheelwright, E. & Jolliffe, W. (1997). Factores Socioeconómicos y
Políticos de Incidencia en los Indicadores de la Mortalidad por Criminalidad en
América Latina. (Cuarta Edición). México, Distrito Federal: Ediciones McGraw Hill
Interamericana
Código Penal Dominicano. Santo Domingo, República Dominicana: Congreso Nacional,
Coordinación de la Comisión Nacional de Justicia del Poder Ejecutivo.
Constitución Dominicana (2010). Santo Domingo, República Dominicana: Congreso
Nacional, Coordinación de la Comisión Nacional de Justicia del Poder Ejecutivo.
Damasio, S. (1994). Seguridad Social y Factores Endoexógenos del Comportamiento Juvenil
como Factor Predictor de la Delincuencia. (Segunda Edición). Buenos Aires,
Argentina: Ediciones de la Plata.
Ekman, K. (1999). Manual de Seguridad Social, Gestión Terapérutica y Psicológica de la
Adecuación Conductual de los Adolescentes en la Educación. (Tercera Edición, Tomo
II). Santiago, Chile: Fundación del Desarrollo Integral de la Adolescencia &
Aprocolor Editores.
Fondo de las Naciones Unidas Para la Infancia UNICEF (2016). Informe General de la
Delincuencia Juvenil en América Latina. San José, Costa Rica: Comisión
Interamericana de Control y Prevención de la Delincuencia Juvenil.
Gallese, O. & Goldman, R. (1998). Factores Predisponentes de la Delincuencia Juvenil.
(Segunda Edición). Buenos Aires, Argentina: Editorial Magallanes.
Le Doux, B. (1999). Estrategias Para la Adaptación Educativa y Conductual de los
Adolescentes en las Aulas. (Segunda edición traducida al español). México, Distrito
Federal: McGraw Hill Editores.
Ley No. 76-02 (2002). Código Procesal Penal Dominicano. Santo Domingo, República
Dominicana: Congreso Nacional, Coordinación de la Comisión Nacional de Justicia
del Poder Ejecutivo.
Observatorio de Seguridad Ciudadana República Dominicana (2016). Santo Domingo,
República Dominicana: Fundación Global y Desarrollo FUNGLODE.
Organización Internacional del Trabajo OIT (2000). Informe Situacional de los Indicadores
de Trabajo en Centroamérica y el Caribe. México, Distrito Federal, McGraw Hill
Interamericana.
Ramos D. (2008). Retos de la Seguridad Social en Países en Desarrollo. (Segunda Edición).
Santo Domingo, República Dominicana: Editora Corripio.
Rokeach, W. (2007). Prevención de la Delincuencia Juvenil y Estrategias Integrales del
Manejo y Control de la Conducta Criminal Juvenil. (Segunda Edición). México,
Distrito Federal: McGraw Hill Editores.

Potrebbero piacerti anche