Sei sulla pagina 1di 48

Nuestro Barrio,

Nuestra Historia
La casa, la calle, el vecino, la vecina, los niños, los jóvenes,
el negocio de la esquina, la escuela, la sede vecinal… todos
son protagonistas de la Historia de su Barrio.

Así como Alonso de Ercilla narró las andanzas de los


españoles en la América recién descubierta o Sergio
Villalobos plasmó con lujo de detalles la Historia de Chile,
hoy son nuestros propios vecinos quienes construyen
esta historia de hechos pasados que nos trasladan hasta
el presente, para valorarnos e identificarnos con nuestro
barrio, y así poder proyectarnos positivamente hacia un
futuro que podemos modificar de acuerdo al bien común.

Historia Barrio Pichi Cautín 


Aquí nos encontramos con narraciones directas de quienes
vivieron estos hechos. La esperanza de la nueva casa,
el primer hogar, el miedo frente a los temporales, las
dificultades de las calles sin pavimentar, el comercio, los
vecinos que venían de los más diversos lugares, la lucha
diaria por mejorar nuestra calidad de vida.

Tal vez nuestro barrio no es el más grande ni el más bonito,


pero es nuestro y lo construimos y lo seguimos construyendo
entre todos, es el que nos determina como personas y
como grupo, y es el que recordaremos como hoy lo hacen
los miembros de la tercera edad, esos viejitos que dejaban
de dormir y de comer para conseguir sus terrenos y sus
casas, porque ellos nos repiten una y otra vez que después
de toda una vida de sacrificios: “el esfuerzo valió la pena”.

Esperamos que disfruten la lectura de las siguientes páginas,


aprendan de las penas y de las alegrías, disfruten de las
fotos y de las anécdotas, y que mantengamos siempre esa
preocupación por preservar lo que ocurre en nuestro barrio,
con recortes, con grabaciones, en las conversaciones…
para que el día de mañana nuevas generaciones valoren lo
que ocurre aquí, en mi casa, a la vuelta de la esquina y así
seamos más unidos, más humanos.

 Quiero Mi Barrio
Quiero mi Barrio
El Programa de Recuperación de Barrios del Ministerio
de Vivienda y Urbanismo – “Quiero mi Barrio” - tiene por
objeto contribuir al mejoramiento de la calidad de vida
de los habitantes de barrios que presentan problemas de
deterioro urbano, segregación y vulnerabilidad social, a
través de un proceso participativo de recuperación de los
espacios públicos, recuperación social y de los entornos
urbanos de las familias.

Historia Barrio Pichi Cautín 


Plano de Ubicación

 Quiero Mi Barrio
Nuestra Historia
El Barrio Pichicautín se encuentra inserto en la unidad
vecinal Nº 18 del sector poblacional denominado
“Pichicautín”, quedando delimitado naturalmente por dos
elementos físicos que siempre están presentes; el talud
existente por el norte y el canal Pichicautín por el sur.

Sus inicios se remontan a tomas sucesivas de terreno, por


parte de una población mayoritariamente campesina que
migra a la ciudad de Temuco en busca de empleo, desde
el año 1935 en adelante. Se reconocen cinco etapas de
asentamiento informal en el sector a partir del año 1935
hasta el año 2000 a partir de un accionar colectivo, con un
objetivo común los pobladores fueron apropiándose de los
terrenos paulatinamente.

Paulatinamente los pobladores fueron mejorando


sus condiciones de urbanización, servicios básicos
y regularización de viviendas, a través de diferentes
Programas; Vivienda Social SERVIU, PMU, PMB,
Pavimentos Participativos y Chile Barrio, entre otros.

Historia Barrio Pichi Cautín 


En la época de las “tomas”

Temuco, capital de la Región de La Araucanía, como


urbe principal se ha visto afectada por diversos procesos,
tales como la incorporación del ferrocarril, a fines del siglo
19, lo que permitió una aceleración en el poblamiento e
intercambio de mercancías con otras zonas del país.

Posteriormente, a partir de los años 40, comenzaron las


grandes migraciones de campesinos y habitantes de
poblados menores hacia Temuco, atraídos por la gran
demanda de mano de obra en las nuevas industrias y
construcciones urbanas.

Es así como se saturó y sobrepobló la infraestructura


urbana de la ciudad, surgiendo como opción de vivienda
la “toma” o asentamiento informal en terrenos baldíos o
cercanos a la línea férrea.

El edificio principal de la ECA, ex


INACO, ha dominado siempre el
paisaje del Barrio Pichi Cautín.

 Quiero Mi Barrio
Cabe destacar que la toma no es una simple ocupación de
terreno, sino que se trata de la ocupación comunitaria de
un terreno, procediendo luego a la autoconstrucción del
hábitat, nombramiento de calles, organización de comités,
etc.

En este contexto nació el Barrio Pichi Cautín, un


asentamiento construido por una comunidad, que con los
años trascendió y se consolidó como barrio. Aunque la
motivación inicial fue la urgencia habitacional, con el tiempo
los pobladores se unificaron y planificaron mejoras tales
como la obtención de los títulos de dominio de los predios
tomados, incorporación de servicios básicos (agua potable,
alcantarillado y electricidad) y pavimentación de las calles.

El origen de Pichi Cautín, se remonta a una serie de tomas


sucesivas por parte de población mayormente campesina
que migra hacia Temuco en busca de empleo desde 1935
hacia adelante. Coincidente con la primera toma, se suma
la cesión de terrenos a los trabajadores de INACO (empresa
estatal de comercio agrícola que luego se conocería como
ECA) en este mismo sector.

1949/50: Primera toma de terrenos, se inicia la conformación


del barrio junto a la línea férrea que va hacia
Carahue.

Historia Barrio Pichi Cautín 


1945: Segunda toma y establecimiento de trabajadores
de la ECA, desde la línea férrea y avance hacia el
Pichicautín, brazo del río Cautín.
1950: Tercera toma, avanza hacia la ribera del
Pichicautín por Carrera y se incorpora la cancha
de fútbol.
1981: Un grupo de ferroviarios, reunidos en la
cooperativa COVIFER, compraron los terrenos
pertenecientes a Berta Vergara. Tres años más
tarde se entregaron las únicas 22 casas del barrio
con la modalidad de subsidio del Estado.
1986: Cuarta toma, comienza la conformación del borde
de la ribera del Pichicautín.
2000: Quinta toma y establecimiento en el borde de la
ribera del Pichicautín.

Finalmente el barrio de consolidó entre las calles Prat


(oriente), Carrera (poniente), línea ferroviaria (norte) y
estero Pichi Cautín (sur).

Villa San Francisco

El 4 de octubre de 1986 se reunió un grupo de jóvenes


matrimonios del sector Pichi Cautín, quienes decidieron
adueñarse de un terreno baldío, lleno de matorrales, zarza
y basura. Entre todos limpiaron el terreno y lo adaptaron
para instalar sus improvisadas viviendas.

10 Quiero Mi Barrio
Una noche un grupo de dirigentas fue detenida e interrogada
acerca de posesión de armas. Dicha acusación no fue
probada y las dirigentas fueron liberadas al día siguiente
gracias a las gestiones de Sor Oliva Echeverría y la jueza
Ester Valencia. Las dirigentas atribuyen este hecho a
vecinos del sector que se oponían a la toma.

Las primeras viviendas estaban hechas con paredes de


papelillo, techo de fonolita y ventanas de nylon. La luz
provenía de velas y el agua de una vertiente.

Desde 1986 las casas estaban orientadas hacia el norte,


pero en 1991 se volvieron hacia el sur, con el objeto de
construir una calle de acceso a las viviendas.

Historia Barrio Pichi Cautín 11


Andrés Garrido,
presidente de la Junta
de Vecinos entre 1955
y 1973.

Dirigente destacado

En una entrevista concedida a El Diario Austral de Temuco


(martes 24 de mayo de 1994), el ya fallecido dirigente
Andrés Garrido, quien presidió la Junta de Vecinos Pichi
Cautín entre 1955 y 1973, recordaba que la población
había nacido en 1950, fruto de una toma de 40 personas
encabezadas por Clorinda Cid y por él mismo, quienes
ocuparon las manzanas 44 y 45, entre Carrera, Las Heras e
Imperial, terrenos que eran fiscales. Posteriormente, según
Garrido, en virtud de la Ley N° 16.880 de 1969 sobre Juntas
de Vecinos, se unió a la superficie anterior la manzana 47
y la población de los trabajadores de ECA (Empresa de
Comercio Agrícola), ubicada entre Lynch y Lagos.

La primera fase de la lucha vecinal, inmediatamente


después de la toma de 1950, fue el reconocimiento
municipal, condición indispensable para acceder al arreglo

12 Quiero Mi Barrio
de calles e implementación de servicios básicos. Después
vino la demanda por agua potable y alcantarillado. “Hasta
1969 sacábamos agua de una vertiente ubicada entre
Carrera y la línea férrea”, recordaba Andrés Garrido. Ese
año se logró la instalación de un pilón público en la esquina
de Las Heras con León Gallo. Luego se ubicó otro en la
esquina de calle Carrera con Eduardo Rodríguez.

Sólo en 1971 se obtuvo la red de agua potable y


alcantarillado, gracias a un tendido de 1.700 metros entre
Lynch y la población Las Quilas.

Historia Barrio Pichi Cautín 13


“He dado toda mi vida
por esta población”
Maestro de la construcción, Enrique Caifal fue uno de los
protagonistas de las primeras tomas que dieron origen al
Barrio Pichi Cautín. Sorteando detenciones y hasta balazos,
logró su objetivo y dice que ya no se va del lugar por el que
ha dado toda su vida.

14 Quiero Mi Barrio
Llegamos aquí el año 49 y tuvimos que luchar por nuestros
terrenos porque decían que esto pertenecía a INACO. Pero
no era así, nosotros sabíamos que eran terrenos fiscales,
desde la calle Rosario Muñoz hacia la cancha.

Antes arrendábamos en el centro, éramos 60 familias y


empezamos a solicitar la ayuda de los políticos. Mientras
tratábamos de tomarnos los terrenos nos llevaron presos;
veníamos en las noches a poner estacas para marcar los
terrenos, pero el sereno de INACO avisaba a los carabineros
para que nos vengan a sacar. Decían que el objetivo de
INACO era quedarse con los terrenos para ampliarse hacia
abajo.

Cuando en INACO se dieron cuenta que nosotros


estábamos tratando de ocupar los terrenos, en 1950,
enviaron enseguida a colocar mediaguas para que vivieran
sus trabajadores y a nosotros nos correteaban, porque
además querían ocupar estos terrenos para bodegas y
otras construcciones de la empresa.

Tres intentos de toma

Tratamos de tomarnos los terrenos tres veces. La


primera vez nos llevaron presos en seguida, en 1949, y
nos llevaron a la comisaría para evitar que tomemos el
terreno. La segunda vez, en 1950, también nos sacaron
de aquí. Finalmente, en 1952, llegaron las elecciones de
los diputados y senadores, entonces nos hicimos todos
socialistas, para que ese partido nos apoye en conseguir el
terreno. Entonces nos apoyaron los candidatos Galvarino
Palacios y uno de apellido Sepúlveda, quienes salieron
elegidos y cumplieron sus promesas.

Historia Barrio Pichi Cautín 15


Enrique Caifal
-al centro- en plena
faena de construcción.

De todas maneras, al principio las autoridades se


opusieron a que nos vengamos a vivir acá porque decían
que era un terreno muy aislado, que nunca íbamos a tener
agua ni electricidad. Eso nos desmoralizaba, pero igual
los políticos nos decían que ellos iban a luchar para que
nos quedemos aquí, así es que empezamos a conseguir
madera para hacer nuestras construcciones. También se
oponía a que nos quedemos a vivir aquí una Sra. Berta,
que tenía animales en este sector, y cuando tratábamos de
tomar el terreno ella nos disparaba en la noche y llamaba
a los carabineros.

Con huinchas y estacas

Nos vinimos del centro en la noche, los del primer grupo


traíamos huinchas para medir los terrenos y los empezamos
a marcar con estacas. Más atrás venía otro grupo con
carretillas y más estacas. Cuando llegamos estos eran
potreros, estaba lleno de zarzas, animales, por el centro
pasaba un canal de riego.

Por eso nos decían que este no era un terreno apto para
vivir y que era casi imposible instalar los servicios básicos.
Para conseguir el agua, el alcantarillado y la electricidad.
Formamos comités y empezamos a reunirnos con las
autoridades. Para sacar agua teníamos un pilón y toda la
gente tenía que ir ahí a buscar agua.

16 Quiero Mi Barrio
Quien fuera uno de los
líderes de la toma que
originó el Barrio Pichi
Cautín, hoy se traslada
apaciblemente por los
pasajes acompañado de
su nieto.

Los primeros días nos dedicamos a limpiar los terrenos


y a construir nosotros mismos, porque nadie nos ayudó
a construir las mediaguas, así es que lo hicimos como
pudimos, ayudándonos entre todos.

Yo trabajaba en la construcción, igual que la mayoría de


los que vivimos aquí, que somos albañiles, electricistas y
carpinteros. Así es que me hice una buena casa de dos pisos,
con paredes de material, con fachada. Lamentablemente,
el 4 de enero de este año (2007) se quemó mi casa, así es
que ahora vivo de allegado con mi hijo.

Estoy contento de vivir aquí porque he dado toda mi vida


por esta población al igual que todos los viejos que han
muerto y que lucharon para que tengamos lo que tenemos
hoy, para nosotros y para nuestros hijos.

Historia Barrio Pichi Cautín 17


“En los años 40
la gente debía recurrir
a las tomas”
José Rubilar se crió en el campo, de Cunco hacia la
cordillera. Llegó a Temuco en 1943 y comenzó trabajando
en la Ford, primero haciendo aseo y luego como mecánico.
En una sastrería conoció a su esposa, Mariela Quilodrán
Arias, quien con su negocio ayudó a fortalecer el proyecto
familiar.

18 Quiero Mi Barrio
La gente tenía que recurrir a tomarse estos terrenos porque
los alrededores de Temuco era propiedad de latifundistas.
Por ejemplo de Las Quilas hacia el oeste se encontraba el
fundo Mora, más al norte el fundo Sanger.

Llegada a Pichi Cautín

Después de casados arrendamos un lugar y al tiempo nos


enteramos de la disponibilidad de terrenos en Pichi Cautín.
Cuando llegamos a este sitio era como una isla, había
hoyos, zarzamoras, corría agua por todas partes, tuvimos
que rellenar varias veces para poder construir las casas.

A nosotros nos tocó un terreno de siete metros de frente


por 36 metros de fondo, donde construimos una pequeña
ranchita. Después del trabajo llegábamos a trabajar
construyendo la casa, con los materiales que podíamos
comprar de acuerdo a lo que juntábamos de dinero. Ese
era el método que se utilizaba en ese tiempo: primero se
construía la ranchita en el fondo, mientras de a poco se iba
construyendo la casa definitiva en el frente.

Para apurar la construcción de la casa solicité un préstamo


en mi trabajo, al señor Bascur, y me facilitaron unos 7 mil
pesos, con lo que pudimos completar el armazón principal
de la casa con maderas de buena calidad y el techo de
zinc. Hicimos una casa de piso y medio y demoramos casi
dos años en terminarla.

Para lavar la ropa no había mucho problema, gracias


al brazo Pichi Cautín que traía bastante agua, y para el
consumo humano contábamos con una vertiente que
todavía existe y se ha vuelto a utilizar cuando ha habido
cortes de agua.

Historia Barrio Pichi Cautín 19


La gente tenía que
recurrir a tomarse estos
terrenos porque los
alrededores de Temuco
era propiedad de
latifundistas.

Tuvimos buenos dirigentes como Enrique Caifal y Andrés


Garrido, también la señora Clorinda Cid… Gracias a
esa gente pudimos conseguir muchas cosas. En 1966
aproximadamente construimos entre todos una sede social,
donde hacíamos bailes y “malones”, como se les llamaba
en ese tiempo a las fiestas en que todos colaboraban con
trabajo, alimentos y bebidas. El objetivo era reunir fondos
para conseguir electricidad, agua y alcantarillado.

Primero conseguimos los pilones de agua que instaló


la municipalidad, mientras que nosotros mismos nos
preocupábamos de mejorar las calles, trabajando con
palas, picotas, carretillas, acarreando piedras y materiales
para la población.

“Mover” la casa

Con la construcción de las calles nos ocurrió una anécdota,


ya que las originales las habíamos hecho sin considerar
ningún aspecto técnico. Entonces, cuando vinieron a
construir calle definitiva tuve que correr mi casa de piso
y medio más de tres metros… La corrimos solos con mi
señora: como trabajaba en un taller mecánico grande me
conseguí los “tecles” con que levantábamos los autos y
unos palos de 6 x 6. Prácticamente la movimos entre los
dos.

20 Quiero Mi Barrio
Una vez vino un dirigente socialista para ofrecernos un
departamento en la remodelación Caupolicán, más o
menos en 1971, pero nosotros ya teníamos nuestra casita
aquí en Pichi Cautín y nos conformamos con esto, así es
que recomendamos que le den la oportunidad a otro.

Uno de los grandes problemas de este sector eran las


inundaciones. Me acuerdo que una inundación grande
ocurrió el 1º de mayo de 1957, cuando todavía estábamos
construyendo nuestra casa. Algo distinto que ocurría en
esa época era que todos los problemas los resolvíamos
entre nosotros, no se recurría tanto a las autoridades como
lo hacen ahora, además que antes era más difícil acceder
a las autoridades, que eran más lejanos.

En el aspecto político, los pobladores de este sector se


dividían entre socialistas y democratacristianos, así es que
cuando asumió Allende aquí hicimos grandes celebraciones.
Asimismo, tuvimos mucha pena cuando terminó su gobierno
y la forma en que ocurrió. Él se preocupaba mucho por las
personas, que tuvieran respeto y libertad, porque antes
éramos verdaderos esclavos. Yo trabajaba en el campo y
para hablar con el patrón tenía que pararme a unos diez
metros de distancia y con el sombrero en la mano.

Por su parte, Mariela, esposa de José, recuerad que


luego de trabajar como sastre trabajó en una empresa de
la familia Tuma: Cuando esa empresa terminó instalé mi
propio negocio, que con la ayuda de mi esposo nos dio
mucho dinero lo que nos permitió construir una buena casa,
la que habitamos actualmente y en la que vivimos bien.

Historia Barrio Pichi Cautín 21


Los partidos de fútbol

Teníamos un puesto de cerveza en la calle Rosario Muñoz,


junto a la cancha, y nuestros clientes eran los jugadores,
sus familiares y amigos que asistían numerosamente
a disfrutar de los partidos de fútbol. Esa época fue muy
bonita, la gente era muy respetuosa y de cada grupo se
hacía responsable un dirigente, quien mantenía el orden y
el respeto mutuo.

En la época de los partidos – a mediados de los años 80


- venían equipos de todos los sectores de Temuco, todos
los vecinos participaban jugando o como espectadores.
También se hacían ramadas para el 18 de septiembre y
todo era en un ambiente familiar y de sana entretención.

Futuro del barrio

Creemos que en nuestro barrio todavía faltan aspectos que


mejorar. Cuando se pavimentó la calle Rosario Muñoz se
le quitó una parte a la cancha, por lo que sería necesario
construir una multicancha para que los jóvenes practiquen
deporte.

Entre otras necesidades, nos falta una sede nueva para


actividades y reuniones, más áreas verdes para los niños
y jóvenes, nuevas luminarias porque estas ya son muy

22 Quiero Mi Barrio
antiguas. También existe, por parte de la municipalidad,
la idea de construir una ciclovía por donde antes pasaba
la línea férrea hacia la costa, lo que también serviría para
mejorar el barrio.

Aunque sabemos que no va a ocurrir mañana ni pasado,


creemos que el proyecto urbanístico que se va a realizar en
la Isla Cautín también va significar un importante desarrollo
para nuestro barrio.

Historia Barrio Pichi Cautín 23


“Llevo una vida
tranquila aquí, con
mis familiares y vecinos”
Blanca Asenjo nació en Antilhue y se crió en Valdivia, hija
de un ferroviario. A Temuco llegó a los dieciséis años y vivió
en el sector Santa Rosa, calle Quidel, hasta los dieciocho
años de edad. Recuerda que el Temuco de esa época, en
los años cuarenta, era muy bonito, y la estación ferroviaria
era uno de los lugares de mayor movimiento de una ciudad
en que se veían muchos carretones y caballos, pero muy
pocos autos.

24 Quiero Mi Barrio
En los años 60 llegué a Pichi Cautín, a vivir a la casa de
mi cuñada, a la altura de calle Lynch. Cuando llegamos no
había casas en la calle Imperial, sólo se veía un cerco de
un señor de apellido Becerra que plantaba papas. Después,
cuando la ECA cedió los terrenos se empezaron a hacer
casas.

Por aquí pasaba una especie de canal de riego, que en este


sector tenía una compuerta para controlar el agua. En este
sector había una especie de defensa construida con piedras
y la gente venía a botar basura que se iba acumulando.
Entonces, cuando decidimos venir a tomarnos este terreno
con esas mismas piedras rellenamos y aplanamos el sector.
En el invierno todo se llenaba de agua… la cancha… varias
veces tuvieron que venir a rescatarnos.

En esa toma participamos unas doce familias y yo fui una de


las primeras que se quedó en este sitio. Hice una ranchita y
me quedé para cuidar, porque en ese tiempo había mucha
gente tratando de tomar terrenos. Después empezaron a
construir más casitas alrededor y siempre hemos estado
aquí. Ya están todos los terrenos saneados y tenemos
nuestro título de dominio otorgado por Bienes Nacionales,
así es que somos dueños.

Mujeres esforzadas

Aquí, en los terrenos y en las casas las que más trabajaron


fueron las mujeres, porque los hombres trabajaban fuera
de las casas y no estaban en el día. Trabajamos con
carretillas, acarreábamos tierra y piedras para rellenar, y
en las noches nos turnábamos para salir a cuidar, porque
siempre andaba gente tratando de quitarnos los terrenos o

Historia Barrio Pichi Cautín 25


“Yo me conseguía agua
con una vecina, a quien
le compraba el agua y la
iba a buscar con baldes
plásticos”.

de robar cosas.

Al principio no había agua ni electricidad y lo fuimos


consiguiendo de a poco con el apoyo del diputado Del
Canto. Primero tuvimos pilones con llaves y después
fuimos sacando cañerías hacia las casas. Yo me conseguía
agua con una vecina, a quien le compraba el agua y la iba
a buscar con baldes plásticos. Cuando todavía no teníamos
electricidad usábamos velas y después le comprábamos
electricidad a un vecino a 500 pesos.

Antes aquí se hacían muchas fiestas, bailes, se hacían


actividades para juntar plata para arreglar las calles, las
casas. A eso se sumaba la plata que ponían los propios
vecinos… así se hizo la calle Rosario Muñoz por ejemplo.

Una de las tradiciones de nuestro barrio es hacer un pesebre


vivo para la Navidad, con personas y niños; también se
hacen procesiones, vía crucis, muchas actividades en
la iglesia “Nuestra Señora de Fátima”. Varias veces nos
acompañó el Obispo Sergio Contreras y le gustaron mucho
nuestras actividades.

Con el tiempo se ha ido dejando de lado la cancha. Antes


se hacían partidos todos los sábados y domingos. Venían
clubes de afuera en micros y todo era una gran fiesta, todos

26 Quiero Mi Barrio
los vecinos iban a ver los partidos, los torneos, los jugadores
venían con sus familias, traían cosas para comer. Lo único
que queda de esa época son algunos clubes de rayuela.

Una de la actividades en que más me gusta participar es


el Centro de Madres. Ahí compartimos con otras señoras,
tomamos once, café y a veces mate. Llevo una vida
tranquila aquí, con mis familiares y vecinos, sin peleas. He
vivido siempre aquí y aquí me moriré.

Me ha gustado pasar mi vida aquí, es una población


tranquila y debe ser una de las que queda más cerca del
centro, la mayoría de la gente se va caminando, claro que
todavía hay cosas que faltan. Por ejempo, un jardín infantil,
porque hay muchas mamás jóvenes que trabajan y no
tienen con quién dejar los niños.

“Llevo una vida tranquila aquí,


con mis familiares y vecinos,
sin peleas. He vivido siempre
aquí y aquí me moriré”.

Historia Barrio Pichi Cautín 27


“Esto es mío porque
me costó lágrimas”
Nacida y criada en este barrio, Alicia es hija de Eleuterio
Vega Matus, quien trabajó en la Empresa de Comercio
Agrícola (ECA), lo que antes era INACO. A su padre la
empresa le vendió la casa y el terreno, mientras que ella
tuvo que luchar en una toma a mediados de los ochenta.

28 Quiero Mi Barrio
A principios de los años 50, la empresa (INACO) les
cedió unos terrenos a sus trabajadores y mi papá compró,
pagando a largo plazo. El trabajaba descargando trigo.

Nuestra niñez fue muy bonita, no teníamos luz ni agua,


pero había una vertiente debajo de la empresa desde
donde sacábamos agua y en la noche nos alumbrábamos
con velas. Después, la misma empresa instaló unos postes
y ellos nos entregaban electricidad.

Cuando yo nací aquí había como 12 casas de los


trabajadores de la empresa, pero antes ya había dos
casas de una familia Poblete, quienes lavaban ropa para
el regimiento; esas eran las casas más antiguas de este
sector. Esto era todo campo, aquí mismo donde estamos
parados pasaba el Pichi Cautín, un brazo del río Cautín que
con los años se ha ido secando.

El padre de Alicia, Eleuterio


Vega Matus –primero a la
derecha- en los tiempos en
que trabajaba para la ECA.

Historia Barrio Pichi Cautín 29


Una toma difícil

Viví en la casa de mis papás hasta el año 86. Ahí fue cuando
decidimos tomarnos este sector; al principio éramos 22
familias, pero después quedamos 19, las otras tres familias
no soportaron los primeros meses de la toma que fueron
muy sufridos, no teníamos el apoyo de nadie.

Por tomarnos este terreno nos acusaron con los militares,


inventaron que teníamos armas para que nos llevaran
detenidas, también llevaron a algunos hombres y los
maltrataron mucho, a mi me llevaron por ser la presidenta
del Comité de Adelanto de la Villa San Francisco.

En primer lugar cada familia hizo su casa en forma


independiente, todos construíamos con papelillo, teníamos
techo de cartón, ventanas de nylon, muchos tenían piso de
tierra, pero de a poco nos fuimos arreglando y organizando
hasta conseguir todo lo que tenemos en la actualidad.

Lo mejor que tenemos como barrio es que todos somos


muy unidos. Cuando alguien tiene un problema entre todos
lo ayudamos; además casi todos somos católicos y muy
devotos de San Francisco, quien también nos ha ayudado
en todos nuestros logros. Él es nuestro patrono porque
llegamos a este sector un día 4 de octubre.

Cuando necesitábamos agua íbamos a una vertiente que


quedaba entre medio de los árboles, para lavar traíamos el
agua en tarros y en el verano nos bañábamos en la misma
vertiente. Para tener electricidad conseguíamos un cable
y nos colgábamos a la altura de calle blanco, eso era muy
peligroso porque el papelillo ardía con facilidad y con un
cortocircuito podíamos quemar nuestras casas.

30 Quiero Mi Barrio
Las mujeres de “San
Francisco” en plena
construcción de su calle.

Una calle hecha entre todos

Para conseguir más adelantos empezamos a hacer


beneficios. Se hacían fiestas los fines de semana, se
vendían empanadas, completos... Uno de nuestros
objetivos en ese tiempo era tener una calle. Antes nuestras
casas estaban con la fachada hacia el norte, hasta que a la
vecina Eugenia se le ocurrió en una reunión la idea de dar
vuelta las casas y poner la fachada hacia el sur, mirando
hacia la Isla Cautín… y gracias a esa idea ahora tenemos
vista hacia la Avenida Los Poetas.

El problema era que nos inundamos tres veces… Cuando


se subía el río Cautín volvía por el canal Pichi Cautín y nos
inundaba las casas, que estaban a ras de suelo, a la misma
altura del río, y el agua llegaba hasta más de un metro de
altura dentro de las casas. Una vez nos tuvimos que ir de
allegados a la iglesia y estamos muy agradecidos de la
ayuda que nos dio el padre y las monjitas Dolores y Oliva.

Entonces, una solución que se nos ocurrió para tener


acceso a las casas y evitar las inundaciones del río fue
construir una calle de acceso por este lado, una especie de
continuación de la calle Eduardo Rodríguez.

Historia Barrio Pichi Cautín 31


Los restos de calle
Carrera sirvieron para
construir una nueva calle
al borde del Pichi Cautín.

Justo en esa época, en 1990, se produjo una gran explosión


en la calle Carrera, que destruyó el cemento y nosotros
compramos los restos por camionadas para construir
nuestra calle. En ese proyecto todos trabajamos con palas,
picotas; las mujeres trabajábamos en la mañana y los
hombres trabajaban en la noche, después que llegaban de
sus labores diarias, a veces se quedaban trabajando hasta
las cuatro o cinco de la mañana.

En total demoramos unos cinco meses en rellenar la


calle, porque a veces teníamos que parar cuando se nos
acababa la plata para pagarle a los camiones que traían
el material. Entonces teníamos que juntar plata y después
volver a contratarlos para que nos traigan el cemento.
Habíamos pedido ayuda a la municipalidad para que nos
prestaran máquinas, pero nos dijeron que no porque con
esta construcción íbamos a tapar el canal.

Pero igual conseguimos construir esta continunación de


la calle Eduardo Rodríguez, que es sólo nuestra, porque
nadie nos ayudó, y debe ser la única calle en Temuco que
fue construida en un cien por ciento por los propios vecinos,
sin arquitectos ni ingenieros, la hicimos al ojo y nos quedó
bastante buena.

Llega la pavimentación

La vereda la conseguimos hace poco, a fines de 2005,


porque tenemos muchos adultos mayores que les costaba

32 Quiero Mi Barrio
trasladarse en el invierno por el barro, así es que en eso
nos ayudó la municipalidad. Y ahora, estoy muy contenta
como presidenta del Comité de Pavimentación Participativa,
porque ya están a punto de empezar a pavimentarnos
nuestra calle, lo que constituye un logro muy grande
para mí. Yo digo que viendo la pavimentación voy a decir
tarea cumplida y voy a descansar, porque ya he trabajado
mucho.

Para conseguir la pavimentación también tuvimos que


trabajar entre todos, porque cada vecino tenía que pagar 108
mil pesos, y como no los teníamos, tuvimos que empezar
a hacer beneficios, vender completos, empanadas, rifas y
bingos.

Inundaciones y anécdotas

Tuvimos momentos tristes que con el tiempo se han


convertido en anécdotas. Por ejemplo para la primera
inundación, la vecina Elena quiso ir a avisarle a la vecina
María, era de noche, golpeó a su puerta y le dijo que
estaba entrando el agua. Entonces la vecina María, desde
el segundo piso le dijo que espere, que iba a ir a ver si tenía
agua en la tetera, y al llegar al primer piso se dio cuenta que
el agua de la que le hablaban era de una inundación.

En esa misma inundación, en mayo del 89, yo estaba recién


operada cuando nos inundamos. Tuve que sacar a mi hijo
e ir a dejarlo a la casa de mis papás en calle Imperial y
después volver a ayudar a sacar mis cosas. Después me
acordé que tenía patos y pollos. Con los patos no había
problema porque les gusta el agua y cuando estaba
sacando los pollos me acordé de mi perrito… Ya iba por el
río amarrado a su casa y unas personas que estaban ahí
me ayudaron a rescatarlo.

Historia Barrio Pichi Cautín 33


Así se ponía el Pichi
Cautín cuando todo
empezaba a inundarse.

Ahora nos reímos de esas cosas. Pero en ese momento no


era para la risa, nos daba rabia e impotencia, sobre todo
por nuestros niños que en ese tiempo eran chicos. Llovía y
llovía y a veces teníamos que sacarlos en la noche de las
casas. Pero ahora vemos nuestras casas y aquí estamos,
el agua ya no nos hace nada.

Espíritu de lucha

Yo creo que los jóvenes de ahora no son luchadores como


nosotros. Ahora tienen muchas posibilidades, tienen todo
a su alcance y no creo que sean capaces de luchar tanto
como nosotros para conseguir algo. Incluso aquí, cuando
los hombres ya querían tirar la esponja nosotras las mujeres
teníamos que impulsar nuestro movimiento para conseguir
todo lo que queríamos.

No me cambiaría nunca de población, me lo han ofrecido,


pero no. Porque esto es mío, me costó lágrimas, de todo,
así es que no lo dejaría.

34 Quiero Mi Barrio
“Un problema de
ocho años que se
resolvió en tres meses”
María Eugenia Caro Rodríguez es la actual presidenta
del Comité de Adelanto de la Villa San Francisco,
Barrio Pichicautín. Ella narra con detalle el problema de
alcantarillado por el que debieron recurrir a los medios de
comunicación.

Historia Barrio Pichi Cautín 35


Vivo aquí hace 21 años y llegué junto a las 22 familias
que se tomaron este sector, donde ahora está la Villa San
Francisco. Nosotras participamos siempre de la capilla
católica, que pertenece a la Parroquia San Francisco, por
eso teníamos una muy buena relación con las monjitas y
ellas siempre nos ayudaban.

El terreno donde está nuestra villa pertenecía a la Fundación


Mi Casa. En ese tiempo el director de la fundación era el
señor Nibaldo y él estaba de acuerdo con que nos quedemos
aquí, porque nosotras íbamos a ser una especie de apoyo
para proteger su sitio y para ayudar con los niños. Porque
en este sector siempre venía gente mala, alcohólicos, que
eran un peligro para los niños.

Nosotras vivimos desde el 86 hasta el 2000 en las casas


antiguas, las que cada uno hizo después de la toma. Una
vecina nuestra, la señora Gladys, fue invitada a una reunión
en Santiago y se contactó con la señora Marta Larraechea
de Frei, quien gestionó el ingreso de nuestras 19 familias
al programa Chile Barrio. Entonces, el compromiso era que
para que nos hicieran las casas nuevas –todas gratis- cada
familia debía desarmar su casa antigua y echarla para atrás.
Entonces, para el año 2002 ya teníamos alcantarillado y
casas nuevas.

La historia del alcantarillado

Antes ya habíamos estado luchando durante ocho años


para conseguir el alcantarillado, donde el problema era
que decían que por las características de nuestro sector
era muy caro construir un alcantarillado, ya que tenía que
incluir una planta de elevación, y además tenía que pasar
por los terrenos de la Fundación Mi Casa.

36 Quiero Mi Barrio
Entonces hicimos un convenio con la fundación y nosotros
íbamos a colocar cerco a cambio de que ellos nos dejen
pasar el alcantarillado. Ese cerco nos costó más de un
millón de pesos y tuvimos que hacer diversos beneficios
para financiarlo. Lamentablemente el cerco fue destruido
por malas personas que venían para acá a consumir
alcohol y hacer desórdenes. Así es que tuvimos que
construir un nuevo cerco de panderetas, donde nos ayudó
la Municipalidad de Temuco.

Cuando estábamos con el problema del alcantarillado


tuve que hacer un avalúo de la casa de mi mamá, por otro
trámite, entonces el abogado encontró que el avalúo era
muy bajo y yo le dije que era por la falta de alcantarillado,
entonces él se ofreció a ayudarnos: primero vino un día
sábado a mirar, conoció en lugar y después volvió el lunes
con la prensa, representantes de la radio y de la televisión,
y así hicimos pública nuestra denuncia.

Como a los dos días después llegó la intendenta Berta


Belmar y se comprometió a darnos una solución. Y
cumplió con su promesa, porque nosotros hicimos ruido los
primeros días de noviembre del 2000, cuando vinieron los
medios de comunicación, y el alcantarillado lo inauguramos
a mediados de marzo del 2001. En resumen, nuestro
problema de más de ocho años se resolvió en sólo tres
meses, fue una cuestión de voluntad

Nuestra última lucha ha sido por conseguir la pavimentación


de la calle Eduardo Rodríguez, lo que está a punto de
cumplirse. Estoy tan contenta en este sector que a mis
vecinas les he dicho que cuando me muera me tienen que
enterrar aquí, a la orilla del canal, porque no me quiero ir.

Historia Barrio Pichi Cautín 37


“La primera en
llegar a la orilla
del Pichi Cautín”
María Angélica Navarrete llegó hasta aquí simplemente
porque no tenía dónde vivir, y terminó liderando una toma
con 22 familias, en lo que hoy es la Villa San Francisco.

38 Quiero Mi Barrio
Yo no tenía dónde vivir así es que me vine a tomar este
sector junto a las 22 familias que llegaron aquí hace 21
años. Fui la primera en llegar aquí, empecé a limpiar el
terreno y vinieron los carabineros a preguntarme qué
estaba haciendo. Les dije que estaba limpiando para una
actividad que íbamos a hacer con mis hijos que a esa hora
estaban en el colegio.

Después vino una visitadora y también me preguntó qué


estaba haciendo. Entonces a ella le dije la verdad, que no
tenía casa y estaba preparando el terreno para quedarme
a vivir. Ella me dijo: “si es buena persona se queda, si no,
se va”.

Niños prestados

Los primeros días que estábamos aquí nos alumbrábamos


con velas y hacíamos fuego con palitos que recogíamos
en los alrededores. En cuanto a los hijos, ocurría algo
bien cómico, porque cuando me venían a visitar de las
instituciones me conseguía niños de la Fundación Mi Casa
y reunía ocho hijos en total, yo creo que eso ayudó a que
me dejaran vivir aquí.

Antes arrendaba en calle Carrera y de ahí me vine para


acá. Tuve que retirarme porque me pidieron el lugar, ya que
mis niños hacían mucho ruido, y no sabía a dónde ir hasta
que encontré este lugar que estaba lleno de zarzas, hoyos,
basura y el director de la Fundación Mi Casa también ayudó
para que me quedara, porque este terreno era de ellos. A
los dos días llegó el resto de mis vecinas y ahí completamos
las 22 familias. Al principio era triste porque había que estar
cuidando los terrenos, dormir debajo de los árboles con
lluvia, con viento, con frío… Había que aguantar, había que
ser cuero duro para obtener algo.

Historia Barrio Pichi Cautín 39


Detenidas como “terroristas”

La presidenta de una junta de vecinos de Pichi Cautín nos


trató de sacar de aquí, dijo que éramos terroristas. Yo le
dije que no le hacíamos mal a nadie y que nos ganábamos
el pan con el sudor de nuestra frente. Entonces ella hizo
una denuncia en Investigaciones y nos vinieron a buscar
como a las ocho de la mañana, los niños quedaron solos,
llorando, nos llevaron a todas las señoras presas e incluso
incomunicadas, una por aquí y otra por allá, no podíamos
conversar ni mirarnos.

Así es que contamos la verdad, que hicimos la toma porque


no teníamos dónde vivir y que no teníamos nada que ver
con terrorismo ni con armas, sino que la señora que hizo la
denuncia la hizo por envidia, porque ella quería que unos
familiares suyos se vinieran a vivir acá. Así es que después
de eso nos soltaron, para lo cual también nos ayudaron
otras vecinas y las monjitas franciscanas.

Siempre unidas

Yo quiero mucho a mis vecinas porque siempre nos


ayudamos en todo. Por ejemplo, hace poco cuando falleció
mi hijo, estuvieron todas mis vecinas conmigo. Todo lo
hemos hecho con harto sacrificio y en base a la unidad;
para hacer esta calle compramos cada camionada de
material, arrendábamos los camiones para traerlo.

Ahora tenemos lavadora para la ropa, pero pasamos años


caminando hasta la vertiente para ir a o buscar el agua
cuando teníamos que lavar.

40 Quiero Mi Barrio
Con el paso del tiempo hemos visto que nuestro barrio ha
ido mejorando. Primero tuvimos luz, después agua, hicimos
esta calle, conseguimos el alcantarillado. Sufrimos harto
para conseguir todo, pero por lo mismo ahora estamos muy
orgullosas.

Historia Barrio Pichi Cautín 41


Una constante lucha
que ha rendido frutos
El Barrio Pichicautín nació en el marco de una lucha a fines
de los años 40 y se consolidó con otra lucha, a fines de los
años 80, al habitar el borde del brazo del río Cautín que le da
su nombre, con la extensión del pasaje Eduardo Rodríguez.
Tal es así que sólo 22 casas del barrio “no” fueron producto
de un proceso de toma, ya que fueron entregadas por la
Cooperativa de los Ferroviarios (COVIFER).

Un ejemplo importante de trabajo mancomunado entre


los vecinos se dio en la extensión del pasaje Eduardo
Rodríguez. Resulta difícil concebir que en plenos años 90
un grupo de vecinos se preocupara de reunir el material
y construir con sus propias manos una calle de unos 200
metros de largo, trabajando día y noche, hombres, mujeres
y niños.

Porque en este barrio nada se dio fácil, todos los logros


significaron golpear puertas y exigir derechos para mejorar
las condiciones de vida. A su vez, hasta bien entrados los
años 90, los vecinos veían las inundaciones casi como
algo natural. Los inviernos eran sinónimo de subidas del
río y todos estaban preparados para salir y ayudarse
mutuamente.

También se dieron luchas por el agua potable, la


electricidad y el alcantarillado. Este último –aprovechando
la modernidad- contó con un importante apoyo de los
medios de comunicación locales, que sensibilizaron a la
opinión pública y las autoridades.

42 Quiero Mi Barrio
Hoy viven más de 500 familias en el Barrio Pichicautín,
donde las generaciones se han formado gracias al esfuerzo
y al trabajo de quienes lucharon por cambiar las condiciones
de vida de un sector que forma parte de nuestra historia.

Historia Barrio Pichi Cautín 43


NUESTROS RECUERDOS

1980. Cuando el Pichi Cautín


era “navegable”.

Un grupo de vecinos posa para


un reportaje de El Diario Austral
de Temuco. Allí se señalaba que
la población se había construido
en terrenos fiscales y de la ECA,
contando para esa fecha
-principios de los 80- con unos
2.500 habitantes.

Octubre de 1987. En plena


construcción de la escalera
peatonal que baja a Pichi Cautín
desde la calle Lynch.
Los vecinos le habían planteado
esta necesidad al alcalde José
García Ruminot y requirió una
inversión de 350 mil pesos.

44 Quiero Mi Barrio
1990. Sin quererlo, la explosión
de calle Carrera benefició a los
vecinos del sector San Francisco.
Con sus restos construyeron la
calle de acceso a sus casas y que
además los protegía del río.

4 de octubre de 1990. Los vecinos


y niños de la Villa San Francisco
celebran su aniversario Nº 4, con
calle nueva.

Las hermanas franciscanas,


Dolores y Oliva, apoyaron a las
vecinas de la Villa San Francisco.

Historia Barrio Pichi Cautín 45


Vista área actual del Barrio Pichi Cautín (Diciembre 2007).

46 Quiero Mi Barrio

Potrebbero piacerti anche