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Sheila McNamee
Malena:
Querida Sheila:
Como te dije, fui a la reunión sin saber mucho sobre prácticas colaborativas (y aún vivo con mi
ignorancia sobre ello). Conocí a Harlene en China en el 2014. Yo estaba llevando a cabo una
investigación cualitativa sobre antiguos clientes y ella pensó que sería interesante que
Espero que mis preguntas sean comprendidas, teniendo en cuenta que soy “una forastera
ignorante”. Y, como forastera, una de las cosas que más llamó mi atención fue cuán unificados y
convergentes eran los puntos de vista de los participantes de la reunión en Tucumán. Esto pasa
primera pregunta: ¿Cómo difundir éste enfoque sin dejar fuera las voces en desacuerdo?
Sheila:
Planteas un excelente punto. Una característica central del diálogo y las prácticas colaborativas
es la noción de multivocalidad. Hay dos formar de entender éste concepto. Primero, podemos
decir que cada persona es multivocal. Tenemos muchas voces disponibles: la voz de la
múltiples verdades/órdenes sociales en el mundo. Esto quiere decir que las creencias y los
valores de una comunidad no son los mismos que los de otra. Por lo tanto, la noción
de LAverdad es remplazada con la idea de verdades locales. El desafío de los practicantes
colaborativos es el de coordinar esa multiplicidad (en ambos sentidos). Dado esto, puede verse
que la visión de las voces múltiples en realidad abarca y, en ciertos aspectos, celebra que
existan “voces en desacuerdo”. Nosotros reconocemos que nunca podemos crear las condiciones
para “LA verdad” y por tanto debemos trabajar para crear condiciones en donde las voces
diferentes, las verdades diferentes, los sistemas de valores diferentes puedan de alguna manera
Malena:
¿Sería algo bueno y por lo cual valdría la pena esforzase, el difundir esta visión posmoderna del
Sheila:
Hay una importante distinción para hacer aquí. Dentro de la visión mundial moderna, las teorías
compiten por “LA verdad”. Cuando una persona acepta una forma particular de ver el mundo
(por ejemplo, la orientación cognitiva), ello se convierte en el lente a través del cual la misma
entiende al mundo. Y muchos debates sobrevienen entre las diferentes teorías del mundo social,
que compiten entre si. Sin embargo, desde una visión postmoderna, como no existe una verdad
última o universal, todas las teorías (perspectivas) son vistas como vías de conversación y
es útil hablar el lenguaje de la psicología cognitiva y cuándo utilizar el lenguaje de, por ejemplo,
el psicoanálisis? El punto es que no hay pretensión de “LA verdad” desde una visión del mundo
forma paradójica, una orientación posmoderna hacia el mundo no requiere que todos adopten el
posmodernismo como “LA verdad”. Para dar un paso dentro de ésto el marco teórico nos
permite usar cualquier teoría, modelo o método que impulse nuestra habilidad para colaborar y
estar en dialogo con el otro. Por ejemplo, en una sesión de terapia, si los comentarios del cliente
sugieren que él o ella privilegian entendimientos cognitivo-conductuales del mundo social, que
Malena:
¿Cómo evitar que las voces dominantes predominen e impongan una única forma de ver el
mundo?
Sheila:
Siempre existe algún desafío y, dado nuestro enfoque en la multiplicidad, nunca deberíamos
desear el silencio de cualquiera de las voces – incluso de las dominantes. Más bien, podría ser
útil el pensar sobre “suavizar” las voces dominantes y abrir espacio para las voces alternativas
Malena:
desarrollado una escala para la depresión. Luego, en la charla que tuvimos con el pequeño grupo
después de ver ese video observé que había consenso unificado acerca de la idea de que las
escalas son algo malo porque objetivan algo tan subjetivo como la enfermedad mental.
Personalmente, no pienso que las escalas para depresión sean buenas o malas en sí, pero de
alguna manera sentí que en aquel contexto uno tenía que adherir que eran poco deseables y
“malas”. Y entonces otra pregunta me viene a la mente: ¿Qué está proscripto y por qué, en las
prácticas colaborativas?
Sheila:
Estoy de acuerdo con vos en que las escalas y la medición, en y sobre sí mismas, no son buenas
porque es una marca de la ciencia moderna. Aun así, mientras nos movemos hacía un
entendimiento enfocado en ideas posmodernas, podemos ver que una vez la postura
posmoderna es adoptada, nos alejamos de la visión dicotómica de ver las cosas. Esto incluye
cuestiones de medición (y además de uso de teorías que emergieron dentro de una postura
modernista filosófica como dije más arriba). La medición es otro juego de lenguaje. La discusión
no debería ser orientada a si la medición es buena o mala per se, sino hacia cómo hacemos uso
de la misma. ¿La tratamos como “LA verdad” (lo cual supongo constituiría una práctica
proscripta para practicantes posmodernos)? ¿O la vemos como una manera entre tantas de dar
sentido a una fenomenología particular (una práctica prescripta para practicantes
estudiante durante el diseño de la escala para depresión y para qué utilizó los resultados? Si la
escala fue diseñada y usada para “probar” y documentar la existencia de depresión (una práctica
proscripta), sería una vergüenza, porque ello sería silenciar cualquier otra voz/entendimiento de
qué podría pasar en la vida de la persona (otra práctica proscripta). Si, por el otro lado, el
diseño y uso de la escala estuvieron orientados a examinar cómo los clientes navegan entre
discursos culturales dominantes sobre la depresión y su más amplia red de relaciones, sería una
Parece ser que identificar prácticas que están proscriptas por una postura posmoderna nos ubica
ende, dejame decirlo de ésta manera: Hay ciertas formas de acción que el practicante
descontextualizados o actuar con certeza en relación a una única mirada acerca de la situación
del cliente). De todos modos, ninguna forma de acción está prohibida de manera uniforme. Toda
acción toma lugar en un contexto y en relación con el cliente. A ese fin, si el cliente está
pidiendo por la voz de la certeza del practicante, podría ser útil emplear esa voz (pero ello no
Malena:
¿Qué es lo que otros terapeutas hacen pero que un terapeuta colaborativo no debería hacer?
Sheila:
Actuar con certeza, imponiendo la verdad personal sobre el cliente. De todos modos, dicho eso,
debemos dar cuenta de que hay veces en que contextos socio-culturales más amplios requieren
que actuemos con certeza (Por ejemplo, en casos de violencia). En tales casos la postura
culturales y simultáneamente abrir espacio para la reflexión conjunta en aspectos específicos del
caso del cliente, orientadas a coordinar las diversas visiones del mundo.
Malena:
También me preguntaba acerca de que esta visión, el cliente sabiendo y el terapeuta estando allí
para escuchar los deseos del cliente, y de generar nuevos significados a través del lenguaje, sin
recetas, es lo que muchas escuelas de psicoterapia dicen hacer. Pero, al mismo tiempo
desacreditan todas las demás formas de terapia, generado una práctica rígida con muchas
reglas. Se ha vuelto una especie de religión, donde los seguidores son más estrictos que los
maestros, y pienso sobre el riesgo de ello en terapias posmodernas. ¿Cuáles piensas que son las
Sheila:
Estoy de acuerdo contigo. Los tan llamados “maestros” están abiertos a diferentes formas de ser
y aún así, una vez que empezamos a escribir acerca de una forma particular de práctica o de un
es la razón de que sea tan importante empezar sobre una base firme en lo que significa dar un
hablar y actuar en el mundo. Todas las teorías se vuelven recursos de posible uso. Si los
Malena:
Me gustó mucho lo que dijiste sobre la investigación en tu discurso. ¿Qué tipos de investigación
piensas que son los más apropiados para investigar sobre terapias posmodernas?
Sheila:
vuelve tan “extraña” y desanclada de los participantes y el contexto. Si las entrevistas parecen
apropiadas entonces ello podría ser una forma de proceder. Si los cuestionarios están más
alineados con lo que los participantes esperan y encuentran útil, entonces no hay razón para no
usarlos. Investigación, como cualquier otro tipo de conversación, es una actividad que se va
desarrollando.
Malena:
Me gustaría volver a China, a una conversación que tuve con una participante, en la cual me
contó cómo, en su cultura, cuando van a ver a un doctor, o a un psicoterapeuta, esperan que
esa autoridad les diga qué hacer y cómo hacerlo. Y por eso,muchas veces cuando los terapeutas
no les dan respuestas precisas y direcciones, los pacientes se van decepcionados, y a veces
darías a los terapeutas posmodernos que trabajan con clientes con ese trasfondo cultural?
Sheila:
Otro excelente y muy importante punto. Si un practicante siempre evita ofrecer consejo o
otro lado, si el practicante es responsivo hacía el cliente, entonces puede ofrecer consejo,
sugerencias, y aún directivas, siempre que se mantenga en una estancia de “no saber”, en
términos de creer que su consejo, sugerencias y directivas son lo correcto. El punto no es asumir
como practicantes que “no sabemos nada”, pero si asumir que “sabemos diferente”.
Malena:
Otro pensamiento me llama la atención, que no tiene nada que ver con la temática, aunque
quizá sí: en el taxi, me hablaste sobre “Big” (personaje de la serie de televisión Sex and the
City). Conozco quién fue, y también conozco a Walter White de Breaking Bad, y también he visto
cada capítulo de How i met your Mother. Las series de televisión estadounidense son muy
populares en Buenos Aires. Es poco probable que conozcas quien es Floricienta (una seria de TV
argentina) o el Chavo del 8 (una serie de TV mexicana) , y eso me hizo pensar en cómo las
culturas dominantes, o el conocimiento fluyendo generalmente en una dirección, deja de lado las
voces más débiles. Por lo que sé la idea de las prácticas colaborativas es rescatar todas las
Sheila:
Quién sabe si todas las voces serán (o podrán ser) alguna vez rescatadas; ¡pero vale la pena
intentarlo!