LA SEGURIDAD JURIDICA EN LA TRANSFERENCIA DE TITULOS-
VALORES A LA ORDEN
En este texto se establece el aporte que ha brindado el derecho
a la economía, ciencias que a primera vista parecen distanciadas, pero que no lo están pues explica desde el comienzo que la concepción misma de los títulos valores son una invención del derecho mercantil que antes no existía, pues los juristas desde la edad media vienen desarrollando su regulación jurídica a prácticas económicas pensando en la necesidad de la actividad empresarial. Tullio Ascarelli resalta que la contribución del derecho comercial en la formación de la economía moderna es la institución de los títulos de crédito. Gracias a los títulos de crédito, el mundo moderno puede movilizar sus propias riquezas, gracias a ellos el derecho puede vencer el tiempo y el espacio transportando con mayor facilidad, representados en esos títulos, bienes distintos y materializando en el presente riquezas futuras.
Entonces el aporte más resaltante del derecho en cuanto a la
vida económica sería la idoneidad del título-valor para movilizar riquezas sin que los bienes o derechos que las constituyen se desplacen físicamente esto para evitar el deterioro o destrucción del bien físico. En un principio se utilizaron los títulos valores para reemplazar a bienes físicos como mercadería o documentos, sin embargo actualmente los títulos valores han ampliado su rango de acción pues también pueden representar no solo objetos físicos si no también derechos, tales como derechos de garantía o de crédito, lo cual implica además que la materialización de esos derechos puede ser futura, es decir, vencido el plazo que el propio título valor establezca. Se ha mantenido, además, el llamado «destino circulatorio» del título valor que determina como característica esencial de estos documentos la posibilidad de ser transferidos acarreando con ellos los derechos que representan. La seguridad jurídica para el adquirente de buena fe del título-valor es de especial importancia porque representa la confianza de los agentes económicos de que recibirán dicho títulos valores.
Esta seguridad jurídica resalta más cuando se trata de títulos
valores a la “orden” es decir aquellos títulos que se encuentran endosados, los cuales son la mayor parte que se encuentra actualmente en circulación y al no encontrarse respaldados por personas jurídicas se necesita esta seguridad que nos puede brindar el derecho.
MECANISMOS DE SEGURIDAD JURÍDICA:
1. Inoponibilidad de excepciones no derivadas de vicio
formal del título-valor:
Cuando se produce la transferencia del título-valor a la orden,
se considera que, en relación al nuevo adquirente del título, las relaciones previas existentes entre el deudor y los acreedores anteriores pierden relevancia y no pueden oponerse como excepciones o medios de defensa para evitar el pago. Tomemos el ejemplo de que el deudor le paga una parte de la obligación al acreedor, y este le entrega un recibo; tiempo después el acreedor transmite el título valor a un tercero el cual es el nuevo acreedor, de esta nueva relación el deudor no puede hacer valer el recibo pagado anteriormente al primer acreedor porque no es parte de la obligación que establece el título valor, el último adquiriente podrá exigir la totalidad del pago, sin embargo el deudor podrá pedir al primer acreedor que le devuelva lo pagado puesto que no lo puede poner como excepción ya que no es parte de la relación cambiaria. Esto sucede porque en la transferencia de derechos, este ha sido transmitido mediante endoso y el principio de autonomía del título-valor dispone que en el caso del endoso cada transferencia da lugar a un derecho nuevo y diferente del anterior. Por lo tanto podemos argumentar que lo que nace es un nuevo derecho que antes era inexistente en favor del adquiriente. Como no se transfiere el derecho, tampoco se transfiere las limitaciones de la relación cambiaria anterior. La defensa que existe para el deudor es el valor que otorga la ley a la existencia de vicios formales en el título valor pues tampoco se crean nuevas obligaciones, si no las mismas que ya existían en el título valor además el documento es indispensable para que exista esa relación esto por el principio de incorporación.
2. La legitimación del acreedor y el “principio de la
apariencia”
La seguridad que obtiene el que recibe el documento de que
puede por sus propios medios asegurar su derecho si actúa con la diligencia que la ley dispone. Este proceso se denomina legitimación activa. Para legitimarse activamente, el adquirente de un título-valor a la orden debe identificar a quien se lo transfiere, debe verificar la regularidad de los endosos y debe adquirir el documento según la ley de circulación. Sin embargo esta verificación se basa entonces, en la constatación de un «aparente» orden en el título-valor y no en la veracidad del contenido. No afectará al acreedor el hecho de que existan irregularidades si éstas no son perceptibles. La ley permite la existencia de los títulos valores mientras no se advierta la falsedad de estos todo en favor de la circulación de la economía pues puede seguir circulando pese a que existan firmas falsas en los endosos pues el nuevo legitimario no conoce el pasado del título y se busca favorecer al adquiriente del título valor. Este es uno de los pocos casos en los que el ordenamiento jurídico convalida la adquisición a non domino, es decir, la adquisición hecha a alguien que no es el propietario, con la finalidad de defender un interés superior; pero para esto el acreedor debe reunir los requisitos exigidos por ley y obrar de buena fe. 3. La solidaridad cambiaria
Su finalidad es reunir la mayor cantidad de deudores a fin de
evitar la insolvencia del deudor procesal y dejar el título valor sin pago. Este mecanismo no es propio de la economía si no un aporte del derecho civil, su diferencia radica en que la solidad cambiaria es más rígida, presumiendo desde un comienzo que todos los que firmen el título valor conoce esta relación es solidaria, sin embargo se ha perdido validez este hecho como justificación por la masificación de los títulos valores a punto que no comerciantes pueden ser parte de ellos. Sin embargo la ley faculta al endose a liberarse de la solidaridad indicando en el endoso “sin responsabilidad” de este modo se evidencia que siempre se encuentra como límite a garantizar el pago, la autonomía de la voluntad
4. El proceso ejecutivo
El proceso ejecutivo como un mecanismo que facilita la
circulación del título-valor al otorgar facilidades al acreedor para llevar adelante la cobranza. Este proceso judicial se caracteriza porque en él se omite la etapa probatoria en base a la presuposición de que el derecho del demandante está fehacientemente acreditado mediante un título ejecutivo, el cual aparece como prueba plena e inatacable.