CARTAS CATÓLICAS Julián Andrés Agudelo Sierra Pbro.

Carlos Andrés Escarria

Morales Profesor Seminario Mayor de Cartago Nuestra Señora de la Anunciación Abril
de 2018
 Carta Autor, destinatario y fecha
Santiago  El autor se presenta a sí mismo en el primer
versículo como Santiago, se puede dar un
fenómeno llamado pseudonimia. Hay un
destinatario explícito en el texto, en el
versículo 1 donde se menciona un saludo a las
Doce Tribus de la diáspora. La fecha, si se
insiste en la autoría de Santiago, el apóstol
hermano del Señor, la redacción del libro debe
remontarse hacia antes del año 62, fecha en
que –según se sabe- ocurre su martirio.
Judas  El aparente autor, que se auto-presenta en el
primer versículo del texto, se autodenomina
Judas, hermano de Santiago (o Jacobo). La
fecha se calcula en al siglo I, entre los años 62
y 67. Otro autor encontrado propone entre 60
y 70.
1 Pedro  Dos de las siete cartas católicas señalan a su
autor en el primer versículo refiriéndose a
Pedro apóstol de Jesucristo –la primera- y
Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo –
la segunda. El destinatario en la primera
carta de Pedro es similar al de la carta de
Santiago, aunque aquí expresa: a los elegidos
que viven en el extranjero, que no
necesariamente podría referirse de forma
exclusiva a los judíos de la diáspora, ya que
recordemos que al referirse a los primeros
Mensaje
El contexto del mensaje central va en
contra de la discriminación que –
según se aprecia- parecía estar
ocurriendo en algunas determinadas
comunidades creyentes marcando
distinciones entre ricos y pobres.
Quiere fortalecer la fe de los
cristianos contra las enseñanzas de
los falsos doctores y la exhortación
para que sigan las enseñanzas de los
apóstoles. Es una amonestación para
prevenir a los creyentes a no dejarse
engañar por aquellos falsos doctores
que hacían desviar a quienes los
escuchaban de lo más esencial de la
fe cristiana.
Es una carta que pretende infundir
ánimo ante las persecuciones; de ahí
que hable sobre sobre ser felices en
las tribulaciones, si estas vienen por
la fe 2,21-25. Consta de 5 capítulos,
más larga que la segunda que
contiene sólo 3.
Esquema y temas centrales
1. Paciencia en las tribulaciones 1, 1-12;
5,7-11 2. El origen de la prueba 1, 13-18
3. Necesidad del dominio de la lengua
1,26; 3,1-12 4. Importancia de la
armonía y misericordia 2,8.13; 3,13-4,2;
4,11ss 5. Eficacia de la oración 1,5-8;
4,2ss 5,13-18 6. Unción de los enfermos
5,14ss
1º. Exordio. Saludo y buenos deseos
(versos 1-2), ocasión y propósito de la
carta (3-4). 2º. Primera Parte. Ataca
furiosamente a los falsos maestros (5-
16). 3º. Segunda Parte. Exhorta a los
fieles (17-23). Deben recordar las
enseñanzas de los Apóstoles, quienes
les habían advertido la llegada de
dichos herejes (17-19). 4º. Epílogo.
Una hermosa doxología (24-25).
• Saludos y presentación del
autor (1,1-2) • Introducción con
referencias a Herencia de la fe por
parte del Padre (1, 3-5), el Amor y
fidelidad a Cristo (1, 6-9), revelación
profética del Espíritu (1, 10-12) •
Esencia del cristiano (1,13-2,10)
-Ser santos consecuencia de una
regeneración por la Palabra (1,13-2,3) -
Ser sacerdotes (2,4-10) • Parte
moral Exigencias de una nueva vida: -
 cristianos la gran mayoría era de
procedencia judía.
2 de  La epístola puede datar de mediados del
Pedro siglo II.
1 Juan  El autor -a diferencia de la carta de Santiago,
las cartas de Pedro y de Judas- no se presenta
a sí mismo en ninguna de las 3 cartas. Al
parecer, la semejanza de la forma de
comenzar la primera carta con la del 4º.
Evangelio es la presentación del autor. Su
composición se puede situar en los últimos
años del siglo I, a partir del año 85, según
algunos autores o por los 90’s según otros.
2 Juan  El autor se presenta como el presbítero, es
decir, el anciano. Es posible que haya sido un
En esta carta se hace expreso un
reconocimiento de la carta anterior
(3,1). Sus ideas principales son: •
Advertencia contra los falsos
maestros. • Palabras de
esperanza por la tardanza de la
segunda venida de Cristo (Parusía).
Comparada con las demás seis cartas,
ésta es completamente diferente. No
tiene aspecto de carta: No tiene autor
explícito, ni destinatario, ni saludo, ni
despedida o algún tipo de doxología
final. Es más bien como un tratadito
de teología muy sucinto, pero no por
ello profundo y hermoso al estilo de
Juan.
Pareciera contradecir la idea de
cartas católicas en tanto que expresa
Actitudes ante los gentiles (2,11-12) -
Ante las autoridades (2, 13-17) -Ante
los amos (2, 18-25) -En el matrimonio
(3, 1-7) -Entre hermanos (3, 8-12) -En la
persecución (3, 13-17) •Parte teológica:
rompimiento con el pecado por la
resurrección y descenso a los infiernos
de Cristo (3, 18-4 ,6) • Exhortaciones
finales de cara al futuro y a los últimos
tiempos -El amor mutuo (4, 7-11) -
Dichosos si les toca sufrir (4,12-19) -
Consejos a los ancianos (5, 1-4) -
Exhortaciones a los fieles (5, 5-11) •
Despedida (5,12-14)
1.° El estatuto de los cristianos (2Pe
1,3-11). 2.° El criterio de la verdad
(2Pe 1,12-21). 3.° Los falsos maestros
(2Pe 2,1-22). 4.° Refutación de los
adversarios y advertencias a los fieles
(2Pe 3,1-16).
• Prólogo 1, 1-4 • 1a. parte LA
LUZ - Dios es luz 1,5-2,28 • 2ª.
Parte FILIACIÓN DIVINA - Vivir como
Hijos de Dios 2,29-4,6 • 3ª. Parte EL
AMOR Vivir en el amor de Dios 4,7-5,13
• Adiciones finales 5,14-21
Pone de relieve el término verdad (vers.
1, 2, 3 y 4) y el mandamiento del amor
 título asignado al apóstol Juan, aunque otros
piensan que puede tratarse de que quien
escribe lo hace con la autoridad emanada en
relación con el discípulo amado.
Destinatario: El texto nos dice que la carta va
dirigida a la Señora Elegida, que desencadena
la discusión de si se trata una comunidad
distinguida dentro de las de carácter joánico,
o bien se trata de la Iglesia. Fecha: Hay
quienes llegan a creer que esta carta pudo
haber sido anterior a la primera.
3 Juan  Está dirigida a un tal Gayo, contra el
comportamiento de un cristiano influyente
llamado Diotrefes.
Hebreos  No es un texto fácil de entender (Hb 5, 11), temas que para los Hebreos, eran
la idea de estar dirigida a una sola (versículos 3, 4, 5 y 6). Insiste en la
persona, pero es muy posible que unidad del padre y el Hijo (vers. 3 y 9).
esté dirigida –en todo caso- a una La expresión: …para que nuestro gozo
Iglesia más probablemente que a una sea completo (v12) coincide con la 1ª.
sola persona. Su idea central es poner Carta (1,4) y con el evangelio. Como
en guardia contra los falsos maestros. vemos, hay frases acuñadas que
remiten una tradición específica: la
joánica.
También insiste en el concepto Verdad, (vers. 1, 3, 4 y 8) y en la expresión
nuestro testimonio es verdadero. La frase en v.11 El que obra el mal no ha visto
a Dios común nos recuerda a 1 Jn 3,6.
difícil de entender en la situación actual.
Importancia de Jesús sumo y eterno sacerdote de la nueva alianza a través de la
cual nos llega la salvación.
Abre a los creyentes al encuentro y comunión de la carta
Relación con Dios como Padre necesidad de mediadores, ahora es una
relación cercana.
No es una carta, sino un sermón elaborado en forma de exhortación tiene como
base las escrituras, sobre el sacerdocio de Cristo para una asamblea redimida en
una celebración litúrgica.
Destinatarios: cristianos que viven en Roma o cristianos que viven en Jerusalén,
judeocristianos de una buena formación helenística.
Características de la comunidad: se trata de discípulos que viven tiempos difíciles
en su fe, se trata de discípulos de la segunda generación, han recibido el
bautismo y una formación básica en temas de la vida cristiana, se les pide que
recuerden el inicio en su fe, que crezcan en la fe y la acompañen en una vida
coherente.
Teología
1. Jesucristo sumo sacerdote para siempre. (5, 1-10).

2. Culto nuevo y ética cristiana

- Teologia de la ascensión
- Las ofrendas y los sacrificios se unen al sacrificio de Cristo que son
para alcanzar la salvación.
- Crisis a partir del siglo I

3. La organización literaria: fecha de composición y actualidad de la carta.

- Teólogo más elegante NT
- Occidente atribución a Pablo (s. IV).
- Judío culto de cultura helénica, probablemente conocía la obra de
Pablo, que le permitió argumentar el sacerdocio de Cristo.
- Característica: caridad pastoral en su comunidad, lo que le permite
escribir de esta manera.
- Objetivo carta: animar la fe de una comunidad.
- Heb 13,24: no se sabe cuándo se compuso, (54 d.C.- 68 d.C. – 81-96
d.C.--> anterior al 70 d.C. Se supone que fue antes de la destrucción
del templo de Jerusalén.
- El desarrollo de la cristología una fecha de redacción anterior es
problemática (67 d.C.)
- El estilo literario, de los mejores del AT responde a una homilía de
fina retórica. (diferencia en los discursos).
- Equilibra la exposición doctrinal con la disposición práctica
- Cinco secciones foto.

Actualidad
- Vivir nuestra fe con empeño generoso
- Mediocridad vamos perdiendo el amor primero (sacerdotes de la
nueva alianza derramado para el servicio a los hermanos).
Desarrollo de temas principales

Carta de Santiago Fe y obras.

Hay, efectivamente, una clara relación entre Santiago y Pablo: la oposición entre «hacedores»
y «escuchadores» aparece en ambos autores (Sant 1,22-25; Rom 2,13); la «guerra» que hay
en el corazón mismo del cristiano es común (Sant 4,1; Rom 7,23), y podríamos señalar otras
notables semejanzas. Pero Pablo y Santiago no tienen tan sólo semejanzas. Haga usted un
sencillo ejercicio: tome una hoja en blanco y divídala en dos partes con una línea vertical. En
la parte izquierda escriba el texto de Rom 3,28 y en la parte derecha el texto de Sant 2,24.
Subraye las palabras semejantes que los dos autores usan, pero fíjese en la diferente
conclusión a la que llegan. Lo mismo puede hacer con los textos de Rom 4,2 y Sant 2,21.
espués de hacer esto nos será fácil entender por qué muchos autores hablan de una oposición
entre Pablo y Santiago. Esta aparente oposición que hemos constatado ¿supone que cada uno
de los dos autores conocía lo que pensaba el otro o, más aún, conocía el texto del otro? Ésa
es una pregunta de difícil respuesta.
Baste decir que no es imposible que Santiago estuviera respondiendo indirectamente, si no a
Pablo, sí al menos a una falsa interpretación de su doctrina. Las opiniones de los estudiosos
que aceptan que hay cierta polémica entre los dos autores se dividen a la hora de decidir quién
responde a quién, según la opción de datación de la carta que hayan escogido.
Independientemente de una posible relación polémica entre Pablo y Santiago, trataremos
ahora de fijarnos en aquello que estos dos autores tienen en común y aquello en lo que
difieren. Efectivamente, ambos escritores usan un trinomio de palabras: fe, obras,
justificación. La manera como las usan y las conclusiones a las que llegan parecen, sin
embargo, opuestas: Santiago exige las obras mientras que Pablo las excluye. Sin embargo,
un estudio atento y detallado mostrará que, a pesar de usar las mismas palabras, los autores
sagrados están hablando de cosas diferentes.
Comencemos por el término las obras.
Los textos paulinos se sitúan en el contexto de la polémica judaizante. San Pablo está
combatiendo a aquellos a quienes llama «falsos hermanos» y que llegaban a los lugares en
donde él había evangelizado para atacar su trabajo. Sostenían estos judaizantes que para ser
cristiano había que hacerse primero, y por fuerza, judío. Así, los paganos serían admitidos en
el seno de la comunidad cristiana solamente si aceptaban la Ley de Moisés y estaban
dispuestos a cumplir con sus prescripciones. Las obras a las que hace alusión Pablo son, pues,
las obras de la Ley, es decir, la circuncisión, las costumbres alimentarias, el culto sacrificial
en el Templo, etc. (Ef 2,8-9.11).
El punto máximo de la demostración paulina es, precisamente, hacer ver que las obras de la
Ley (la circuncisión, especialmente) no pueden producir la justificación, ya que Abrahán fue
justificado antes de que hubiera Ley. Santiago, en cambio, cuando habla de las obras se
refiere a los actos de bien o de misericordia, que son frutos de la caridad (cf. Gal 5,6), como
la asistencia a los necesitados (Sant 2,19-20), por eso los considera indispensables. Lo mismo
encontramos si analizamos el término fe en ambos autores.
Para Pablo la fe incluye las obras de caridad, porque es la adhesión de toda la vida al Salvador
(Gal 5,6; 1 Cor 3,13; Rom 2,6-10). Para Santiago, en cambio, la fe es una pura proclamación
verbal o intelectual de verdades abstractas. Por eso el autor de la Carta de Santiago tiene la
audacia de afirmar que este tipo de fe también la poseen los demonios (2,19). Como puede
verse, también en lo que toca a este término los dos autores hablan de cosas diferentes. Pablo
insiste a cada momento en la necesidad de las obras, en el sentido que Santiago da a este
término (1 Cor 3,13; 2 Cor 5,10). Desde este punto de vista, ambos estarían de acuerdo en
firmar de su propio puño y letra la descripción del juicio final dado por Jesús en Mt 25,31-
46. Pablo rechaza las obras de la Ley, pero no deja nunca de recomendar los actos de amor
cristiano. Una última nota sobre el tercer término, la justificación, pone de manifiesto el
acuerdo de fondo de nuestros dos autores: el contexto escatológico. Que el ser humano sea
justificado sin las obras (Pablo) quiere decir que no es la Ley de Moisés, sino la gracia la que
pone en una buena relación al ser humano con Dios. Ser justificado quiere decir, entonces,
acceder a unas nuevas relaciones con Dios por el bautismo y la conversión. Para Santiago,
en cambio, las obras de la caridad son necesarias para la salvación, es decir, la justificación
entendida como último juicio.