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La Escuela Holandesa del Siglo XVII

INTRODUCCIÓN
En la antigüedad se daban casos iusprivatista con elementos en
conflictos entre extranjeros, es por ello, que a lo largo de la concepción
en el tiempo del estudio y aplicación del derecho internacional privado,
y su evolución en el contexto histórico por las distintas escuelas de todo
el mundo, que se tomaron la imperiosa tarea de recoger sus criterios y
aportes doctrinarios, que subyacen en la aplicación actual de este
derecho, entendido y reflejado como una rama del derecho privado que
tiene por objeto el estudio y regulación de las relaciones jurídicas en las
que participan uno o más elementos ajenos a la soberanía legislativa
local.

Siguiendo el orden cronológico de los aportes de los glosadores y pos


glosadores de la escuelas italiana de Bártolo de Sassoferrato del siglo
XIV, Escuela francesa de Bertrand D´ Argentré del siglo XVI, ahora bien
continuando con la historia se consagro la llamada escuela flamenco
holandesa, a pesar de haber sido influenciada por la escuela francesa
de Argentre, fueron Pablo Voet, Juan Voet y Ulrich Huber a quien se
les atribuye como los representantes más destacados de la institución
holandesa del siglo XVII, teniendo como partida el estudió y
aplicabilidad del comitas gentium, que para el derecho internacional
privado se significó una normativa jurídica que mantiene relaciones con
otras normatividades no jurídicas, como la moral y los usos sociales, en
forma tan estrecha a veces que resulta difícil su delimitación.

La denominada Escuela Holandesa se desarrolla en el siglo XVII, a


causa de circunstancias históricas y políticas que surgieron en las
provincias flamencas en ese mismo siglo, y devota seguidora de las
enseñanzas de D´Argentre. La Doctrina Holandesa toma de la Escuela
Francesa la clasificación de los estatutos reales y personales, y le
asigna a los estatutos una aplicación estrictamente territorialista,
Limitando la aplicación de la norma jurídica extranjera.

Los Estatutarios Holandeses sostenían una arraigadísima propensión


a la territorialidad de la ley, hasta el punto de sostener este concepto a
ultranza, con base a la noción de Soberanía, que se extendería a todos
cuanto se encuentren dentro del territorio Estado, cualquiera fuera su
nacionalidad o su domicilio. Para el Estado no existía obligación alguna
de emplear y aplicar leyes extranjeras, cuya casual eficacia dependería
exclusivamente del consentimiento expreso o tácito que le dispense el
Estado receptor. Así que a pesar de las influencias obtenidas del
sistema estatutario de la Escuela Francesa, en la holandesa quedan
exceptuados, pues la aplicación de un derecho extranjero era cuestión
puramente excepcional, impuesta por necesidades mayormente de
comercio internacional que los Estados convenían en admitir.

En esta institución se creó la figura de las “Comitas Gentium” o


sistema de la cortesía recíproca; como base para dar aplicación
extraterritorial al derecho extranjero, la cual no debía surgir de una
“necessitas iuris” sino de una “necessitas facti”. La aplicación de las
leyes de un Estado en el territorio de otro no responden a una obligación
jurídica, ni otro imperativo jurídico. Lo que en realidad ocurre es que en
cada Estado, por intereses propios, aplicaría el Derecho extranjero en
virtud de un pacto tácito entre estados, era una elección libre del Estado;
como también se le consideraba cuando un pueblo quería observar, por
cortesía, algunas de la costumbres de una legislación extranjera, los
estatutos podían sobrepasar el territorio del legislador y esta aplicación
extraterritorial se fundamentaba en la comitas gentium.
En lo que se refiere al estatuto personal, este consiste en aquellos
derechos inherentes que le pertenecen a la persona por el simple hecho
de ser nacional de determinado Estado. Mientras que el estatuto real se
encarga de regir todos aquellos actos o negocios que versan sobre
objetos, ya sea bienes muebles o inmuebles entre nacional o
extranjeros.

Dentro de los aspectos más relevantes del sistema de la escuela


holandesa de la cortesía, es imperante mencionar que: “tenían como
característica común y básica que la leyes son, en derecho,
rigurosamente territoriales. Esta territorialidad absoluta de la ley parte,
sin duda, de los conceptos clásicos de soberanía o independencia de
los Estados.”

Esta es una práctica iniciada por la Escuela Holandesa, en donde las


leyes extranjeras eran aplicadas facultativamente por un determinado
Estado. Lastimosamente su práctica existía atendiendo a criterios
personales y beneficiosos, lo cual quebranta el principio de objetividad
procesal.

La aplicación de normas de reciprocidad consiste en conceder a la


norma jurídica, que emano de otro Estado, el trato de una ley nacional.
Esto le otorga todos los ámbitos de validez para su eficacia completa
dentro del territorio nacional. Es claro que para que se de este supuesto,
debe existir un punto de conexión entre la ley nacional y la ley
extranjera.

La doctrina establece casos en donde se aplica las normas de


reciprocidad siendo los más frecuentes: “para la interpretación de
cláusulas de un tratado o convenio; en la extensión de privilegios
diplomáticos o consulares, concedidos por los Estados en convenios
consulares o tratados de establecimiento; en casos particulares del
orden procesal internacional o régimen de extranjería”.

En general, al aplicar las reglas de cortesía, la visita se anuncia con


antelación y se cubre en los medios noticiosos para dar realce e
importancia al visitante, allí se debe atender al dignatario como
corresponde por su dignidad y por la nación que representa, en ese
caso deben aplicarse los formalismos y la etiqueta en las ceremonias
dentro de un marco de respeto recíproco y al final de la visita debe darse
una declaración a manera de gracias saludando de buenas maneras las
dos naciones comprometidas. La aplicación de la cortesía en las
relaciones internacionales es la imagen externa de una Nación y la
impresión que queda en los medios internacionales.

CONCLUSIONES
Las escuelas e instituciones que estudiamos significaron el origen
del derecho internacional privado, en donde se contemplan doctrinas y
glosas sobre la resolución de conflictos entre los estado, es allí donde
se divide el principio de extraterritorialidad, que para el derecho a
servido mucho para la correcta aplicación de la normas, en el caso
concreto. Es por eso que cada escuela, tuvo una importante aportación
para esta rama del derecho, por cuanto se fue unificando y mejorando
en un conjunto de principios internacionales que valen de marco para el
Derecho Internacional Privado. En ese mismo orden de ideas, se
concluye que existió la Escuela holandesa como una consecuencia de
la Independencia y soberanía de los Estados, concibiendo una
territorialidad absoluta de los estatutos, para amparar los
inconvenientes que su aplicación rígida, podría producir en lo referente
al Estado y capacidad de las personas, en donde se ha admitido la
denominada “comitas gentium” o cortesía internacional, como un
sistema de normas de convivencia, no jurídicas, defensoras
de valores menores, pero situados en la misma línea que los demás.
Ahora bien, al referirnos a la Escuela Estatutaria Francesa se instituyo
que ninguna doctrina se exceptuaba de críticas y es así que a lo largo
del orden cronológico de las escuelas estatutarias, se fueron rellenando
los vacios legales, en el caso de la institución Holandesa es criticada,
por haber ignorado o por haberse percatado, de que existe la posibilidad
de conciliar la aplicación de leyes extranjeras con el respecto debido a
la soberanía territorial de cada Estado. Se le señala, además, que el
principio de la cortesía internacional constituye un concepto carente de
toda juridicidad, vago e incierto. Sin embargo, hay que admitir que esta
doctrina ofrece una significación real, que consiste en haber destacado
el carácter nacional de las reglas de conflictos de leyes. Ella pone de
manifiesto la independencia absoluta del soberano territorial,
considerando bajo este vocablo los intereses generales de la
colectividad y motivaciones de humanidad.
REFERENCIAS
Balestra, Ricardo. Manual de Derecho Internacional Privado.
Buenos Aires, Argentina. Editorial Abeledo-Perrot. Año 1994.
Segunda Edición.
P. Niboyet. Principios de derecho internacional privado. México,
Editora Nacional. Año 1960.

Parra Aranguren, Gonzalo. La Codificación del Derecho


Internacional Privado. Caracas, Venezuela. Volumen II. Editorial
Universidad Central de Venezuela. Año 1982. Segunda Edición.

TRUYOL, A.: Fundamentos de Derecho Internacional público.


Madrid, 1977.

https://apunteslegalesblog.wordpress.com/2017/04/24/escuela-
flamenco-holandesa-d-i-p/

Es fundamentada también en el principio de la absoluta territorialidad de la ley, pero


admitiendo la extraterritorialidad no a través de la idea de la justicia, sino por medio de la
cortesía internacional asociada a la conveniencia por utilidad recíproca.

Esta escuela es la creadora del llamado “estatuto mixto” que se refiere a la forma de los actos,
admite la regla locus regit actum o que la forma de los actos se regula por la ley del lugar de
celebración.

1.5.1. Características de la escuela holandesa

Entre sus características se cuentan:

- Sostienen el principio de la Territorialidad del derecho como la regla, con base al concepto de
soberanía, se extiende a todos cuantos se encuentran en el territorio de un Estado
independientemente de su nacionalidad o domicilio.

- La idea de la comitas Gentium como fundamento de la aplicación extraterritorial del

Derecho, para el Estado no hay obligación alguna de aplicar leyes extranjeras cuya eficacia
dependerá exclusivamente del consentimiento bien sea expreso o tacita del Estado receptor.

1.5.2. Máximos representantes de la escuela holandesa


Sus precursores fueron Pablo Voet (1619-1677) y su hijo Juan (1647–1714).

• Pablo Voet: acudió a la idea de la comitas gentium como base para la aplicación del derecho
extranjero. Admite la clasificación de D´Agentre, pero difiere del estatuto mixto que lo asocia a
la manera y solemnidades que deben observarse en los negocios judiciales y extrajudiciales.

• Juan Voet: estudia la materia desde tres (3) puntos de vista:

a) El concepto y extensión del summun ius (derecho general).

b) Extraterritorialidad ex comitate.

c) Alcance de la voluntad individual en las convenciones.

Juan Voet divide las leyes en: reales, personales y mixtas; las cuales se describen en el
siguiente cuadro.

División Descripción
Reales Las que se refieren a las cosas como el artículo 27 LDIP.

Personales Se refiere a las personas de manera principal como el artículo 16 LDIP.

Mixtas Relativas a las formas y solemnidades de los actos ejemplos el artículo 37


LDIP

Nota: En Venezuela se sigue la escuela holandesa, ya que tiene un sistema territorial con
tendencia estatutaria.

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