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Componentes principales
La base: Es la base que sirve de apoyo a la máquina.
Ranurado:
Se realiza con fresas de 3 cortes. (Recto, de forma y chaveteros)
Corte:
En este sentido, pueden clasificarse las fresadoras, según el número de ejes, en tres tipos:
De tres ejes.
Se trata de fresadoras con posibilidad de movimiento horizontal, vertical y oblicuo, este último,
como resultado de la combinación de movimientos entre mesa, ménsula y husillo. Permiten un
control sobre el movimiento relativo existente entre la máquina herramienta y la pieza, en cada
uno de los tres ejes del sistema cartesiano.
De cuatro ejes.
Las fresadoras tipo cuatro ejes, cumplen todas las funciones descritas en el tipo anterior:
movimiento relativo entre pieza y herramienta, en los tres ejes.
Añade la posibilidad de control de giro de la pieza, sobre uno de los ejes, gracias a un plato
giratorio o mecanismo divisor. De esta forma, este tipo de fresadoras está especialmente
indicado a la hora de generar superficies labrando sobre patrones cilíndricos. Tal es el caso del
labrado de ejes estriados o engranajes, por ejemplo.
De cinco ejes.
Además de cumplir con todas las posibilidades de las descritas anteriormente; las fresadoras de
cinco ejes cuentan con dos particularidades.
De una parte, permitir el control de giro de la pieza sobre dos de sus ejes. Uno de ellos
perpendicular al husillo y el otro, paralelo (como en el caso de las de cuatro ejes, que se
consigue por medio de un plato giratorio o mecanismo divisor).
De otra, permitir el giro de la pieza sobre un eje horizontal y que la herramienta pueda
inclinarse alrededor de un eje, perpendicular al anterior.
Las fresadoras de este tipo son las utilizadas para trabajos que requieren, como resultado,
formas de elevada complejidad.
Por la orientacion del eje de giro
Fresadora Manual.
La máquina Fresadora más sencilla es la operada manualmente.
Puede ser del tipo de columna y ménsula (también conocida como “de superficie”) o del de
mesa montada en bancada fija (también conocida como “vertical de banco”).
Estas máquinas tienen un eje o husillo horizontal donde se monta la fresa. La mesa de trabajo
permite los tres movimientos sobre el eje cartesiano. El avance de la pieza hacia la fresa se
realiza manualmente, por medio de un tornillo vertical accionado por un volante o por medio de
una leva o palanca. En algunos modelos, el tornillo viene provisto de un rodamiento de
precisión, para que el traslado del cabezal sea más suave y compensado.
Las máquinas operadas a mano son usadas principalmente en trabajos de producción con
operaciones simples, como corte de ranuras, pequeños cuñeros y acanalados.
Sin embargo, en algunos modelos de la fresadora vertical manual de banco, pueden utilizarse
adaptadores para convertirla en alesadora horizontal de banco; con lo que las posibilidades de
trabajo que puede ofrecer esta máquina herramienta, se amplían considerablemente.
Fresadora Simple.
Se trata de la más elemental, de la familia de las fresadoras, con movimiento automatizado. El
husillo o eje portafresa va en horizontal. La mesa tiene un desplazamiento vertical que es
accionado manualmente, mediante un tornillo. Sobre ésta, el carro describe un movimiento
automatizado, paralelo al husillo.
Aunque la fresadora simple es una máquina destinada a propósitos muy generales; es posible
utilizarla para trabajos de producción.
De construcción y manejo sencillos, es muy similar a la de tipo universal; aunque presenta una
mayor robustez y se diferencia, principalmente, en el hecho de que el eje portafresa describe el
giro horizontalmente.
Su uso es más ventajoso que el de las de tipo universal, cuando se trata de trabajos pesados.
Además, en las fresadoras simples, el carro tiene una mayor longitud de guías, lo que les
proporciona una mayor estabilidad (evitando además, el rápido desgaste de las guías, más
común en los casos de guías cortas).
El control de los desplazamientos de la mesa se realiza mediante topes; aunque también las hay
que permiten un control automático, mediante ciclos, por medio de volantes que controlan el
movimiento longitudinal de la mesa.
Las fresadoras simples tienen tres movimientos: longitudinal, vertical y oblicuo.
Obtienen las distintas velocidades a través de una caja de velocidades situada en el cabezal de
la máquina (antiguamente, esta necesidad era satisfecha mediante un cono con poleas).
Fresadora Universal.
En apariencia, muy similares a las fresadoras simples; las fresadoras universales se diferencian
de aquellas en el hecho de que el carro gira alrededor de un eje vertical.
La fresa va en sentido horizontal, en el husillo.
Están diseñadas para obtener un alto grado de versatilidad y control, dando como resultado una
buena productividad. Sin embargo, no son adecuadas para trabajos pesados porque sus guías
son cortas. (Esto hace que el carro sea más inestable, en trabajos pesados, además de acelerar el
desgaste, de forma convexa, de las guías).
La razón de que las guías sean cortas no es otra que permitir el giro de la máquina, al trabajar,
sin rozar el cuerpo del operario.
Pueden equiparse con una serie de añadiduras, un cabezal acoplado al husillo, que permiten el
fresado vertical. Así pues, la fresadora universal puede trabajar tanto horizontal como
verticalmente. Esto unido al dispositivo de mesa giratoria así como al resto de accesorios,
provee a este tipo de fresadoras con la capacidad de convertirse en máquina para hacer otras
herramientas.
En éstas y en las horizontales, el puente se desliza de atrás a delante y al revés, sobre guías.
Este tipo de puente es conocido, entre los trabajadores del sector, como carnero.
Fresadora Horizontal.
Este tipo también tiene el eje porta fresa en horizontal, en el que se montan fresas cilíndricas.
Dicho eje cuenta con un soporte exterior, para graduarse, junto al cabezal. Este soporte se
apoya en dos lugares. Por un lado, sobre el mismo cabezal. (El cabezal es pues el encargado del
desplazamiento vertical). Y por el otro, sobre el carnero (un rodamiento ubicado en el puente
deslizante).
La mesa es una bancada fija, sobre la que se desliza un carro de gran longitud (muy similar a
los de las máquinas de cepillado), en dos movimientos automáticos: transversal y longitudinal.
Para trabajos específicos, por ejemplo el labrado de ranuras paralelas, el husillo permite que se
monte un tren de fresado, que no es otra cosa que una pieza que contiene varias fresas que
trabajan en conjunción.
La fresadora horizontal está especialmente indicada para el labrado de ranuras o hendiduras, de
muy distintas formas. La profundidad máxima de estas ranuras se calcula por la diferencia entre
el radio exterior de los casquillos de separación, que sujetan el husillo, y el radio exterior de la
fresa. Esto permite conocer, de antemano, si la máquina con la que queremos trabajar soporta
las fresas que necesitamos para realizar las hendiduras, a las profundidas requeridas.
Fresadora Vertical.
En este tipo de fresadoras, el eje está orientado verticalmente, perpendicular a la mesa. Cuenta
con la posibilidad de realizar un pequeño desplazamiento tipo axial, ideal para facilitar el
labrado escalonado o en escalada.
Algunos tipos de fresadoras verticales cuentan con la posibilidad de adaptarles piezas giratorias
o mesas de trabajo giratorias. Con estos añadidos, es posible el fresado continuo de piezas, en
trabajos de baja producción, y el labrado de ranuras o hendiduras circulares.
Las fresas montadas en el husillo, giran sobre su eje. Son del tipo cilíndrico frontal.
Su cabezal es semejante al de las máquinas taladradoras.
En la forma de operar, las fresadoras verticales son similares a las máquinas perfiladoras o
vaciadoras.
Tanto la mesa como el husillo pueden realizar un desplazamiento vertical; hecho que permite
una mayor profundidad a la hora del corte.
Fresadora Circular.
Las fresadoras circulares admiten la posibilidad de trabajar con uno o varios cabezales
verticales, de forma que cada uno pueda ejercer una función distinta, durante el proceso de
fabricación.
Disponen de una gran mesa circular, giratoria, sobra la cual sucede el desplazamiento del carro
portaherramientas.
Con este tipo especial de fresadoras, puede mecanizarse una pieza en un lado y montar y
desmontar piezas, en el otro; al mismo tiempo.
Fresadora Copiadora.
Tal cual indica su nombre, este tipo especial de fresadoras está ideado para reproducir copias de
un modelo, en las piezas a mecanizar. Con tal fin, disponen de dos mesas: una de trabajo, donde
está sujeta la pieza a fresar, y la otra, auxiliar, sobre la que se sitúa el modelo a copiar.
El movimiento del eje, en las fresadoras copiadoras, ocurre en sentido horizontal, únicamente.
El eje está situado perpendicular a la mesa, en un mecanismo similar al de un pantógrafo. Se le
anexiona una pieza llamada palpador, que es la encargada de, precisamente, palpar el modelo a
copiar. El palpador sigue el contorno del modelo a copiar y la herramienta portafresa copia el
movimiento descrito por él, y va labrando la nueva pieza.
Este tipo de fresadoras está especialmente indicado para reproducir figuras, grabados o planos.
Algunos modelos de fresadoras copiadoras no disponen de mecanismos palpadores o de
seguimiento, sino de una serie de sistemas electrónicos, electro-hidráulicos o hidráulicos.
Dentro del subgrupo de copiadoras puede encontrarse también, otro tipo de máquinas de gran
tamaño, destinadas a la copia de piezas tridimensionales. Su uso está destinado a la elaboración
de coquillas para fundiciones, matrices, etc.
Fresadora de Pórtico.
Las fresadoras especiales de pórtico, (también conocidas como de puente), tienen dos
movimientos: vertical y transversal. La pieza a labrar posee, a su vez, movimiento longitudinal.
El eje o cabezal portaherramientas está situado, verticalmente, sobre una estructura formada por
dos columnas, ubicadas a ambos lados de la mesa.
Su uso principal es la elaboración de piezas de grandes dimensiones, por ejemplo, coronas y
tornillos sinfín, engranajes cilíndricos o helicoidales, o platos de transmisión a cadena.
Las herramientas de corte utilizadas en este tipo de fresadoras son fresas especialmente
diseñadas para madera: con dientes mayores y más espaciados que los que tienen las fresas
destinadas al mecanizado del metal.
Fresadoras CNC
Las fresadoras con control numérico por computadora (CNC) son un ejemplo de
automatización programable. Se diseñaron para adaptar las variaciones en la configuración de
productos. Su principal aplicación se centra en volúmenes de producción medios de piezas
sencillas y en volúmenes de producción medios y bajos de piezas complejas, permitiendo
realizar mecanizados de precisión con la facilidad que representa cambiar de un modelo de
pieza a otra mediante la inserción del programa correspondiente y de las nuevas herramientas
que se tengan que utilizar así como el sistema de sujeción de las piezas. Utilizando el control
numérico, el equipo de procesado se controla a través de un programa que utiliza números,
letras y otros símbolos, (por ejemplo los llamados códigos GM). Estos números, letras y
símbolos, los cuales llegan a incluir &, %, $ y ” (comillas), están codificados en un formato
apropiado para definir un programa de instrucciones para desarrollar una tarea concreta.
Cuando la tarea en cuestión varía se cambia el programa de instrucciones.
Herramientas de corte
Publicado en septiembre 8, 2011 por pyrosis13
La elección de la fresa dependerá del trabajo que tengamos que realizar. Las fresas pueden ser
de un solo filo de acanaladura o de doble filo. Las de filo único son más rápidas rebajando la
madera y con las de doble filo conseguimos unos acabados más finos y de más calidad. Existen
fresas HSS o de carburo de tungsteno. Las fresas tratadas con carburo duran mucho más pero
sólo se deben emplear para paneles derivados de la madera. Las HSS se destinan para el trabajo
sobre maderas macizas (duras). Deben guardarse independientemente y sin golpearse entre sí
para no estropear el filo.
Las fresas de punta recta (1) las utilizaremos para hacer ranuras anchas y profundas, según
convenga. Nos vendrá muy bien para realizar guías de puertas correderas o como primer
fresado si después hemos de realizar alguno más profundo u ancho. La de cola de milano (2)
nos recortará la madera para hacer dichos ensamblajes. La que tiene forma de V (3) es ideal
para rotular y tallar letras.
La denominada de media caña (4) es para ornamentos y conseguir un perfilado, por ejemplo: en
marcos o puertas de ventanas. Con la fresa para encajes (5) rebajaremos la madera
consiguiendo ensambladuras en ángulos y marcos de puertas. La utilizada para enrasar (6),
como ya indica su nombre, es para enrasar madera contrachapada o recubierta de cualquier
material. Así obtendremos una continuidad perfecta entre la madera y el material de
recubrimiento.
La dedicada a biselar (7) se utiliza para conseguir un acabado decorativo de bordes (cantos a
45º). Con la fresa de cuarto bocel (8) conseguimos un resultado similar a la fresa de redondear,
pero con un rebaje adicional en el borde. La emplearemos cuando queramos bordes
decorativos. La de ranura o disco (9) es ideal para los cantos de tableros y para hacer uniones
entre macho y hembra. Para conseguir acabados muy decorativos una buena opción es la fresa
perfiladora (10), con ella conseguiremos una bonita moldura.
Existen muchísimos tipos de fresas según su forma y su tamaño. Para hacerse una idea de lo se
puede hacer con ellas, le presentamos a continuación el programa completo de BOSCH de
fresas profesionales: