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De modo aproximado, los cambios que vamos a reseñar a continuación
tienen lugar, de una manera gradual e irregular, en el largo período que va
desde el 500 al 1500, aunque algunos ya se habían producido o estaban en
germen en la etapa anterior. En fonética se observa:
• υ y οι (pronunciadas como ϋ hasta entonces) a finales del siglo X pasan
a pronunciarse i. La confusión de ι, η, ει, υι por una parte y de υ, οι por otra se
hace común.
• ι, ε ante vocal se confunden (cumplido en el siglo XIII).
• Los grupos consonánticos con nasal en primer término (νθ, γχ, μβ, μφ)
sufren asimilación regresiva y se simplifican: πενθερός > πεθθερός > πεθερός,
γαμβρός > γαββρός > γαβρός, igual que se habían simplificado las consonantes
dobles: θάλασα, καγγελάριος, φουσάτο.
• La ‐ν final, que había caído, por hipercorrección se añade a palabras
que no la tenían: ἀνάθεμαν, ὄνομαν.
• Los grupos de oclusivas κτ, πτ, φθ tienden cada vez más a
pronunciarse χτ, φτ, φτ, respectivamente: ὀκτώ > ὀχτώ, κοπτός > κοφτός,
φθάνω > φτάνω.
• Aparecen nuevos diptongos: νε‐ράϊ‐δα (trisílabo), λέῃ (monosílabo).
En morfología se completa la simplificación y regularización de las
flexiones y conjugaciones que había comenzado en la koiné helenística:
• Los sustantivos de la tercera que terminaban en –ηρ, ‐ωρ, ‐ων sufren
una remodelación de su flexión: πατήρ, πατέρα > πατέρας, πατέραν…
μητέρα, μητέραν…, e igual ocurre con ῥήτορας, δαίμονας, también con
γέρων, γέροντα > γέρος, γέρον.
• Los sustantivos temáticos en ‐ις se asimilan a los sustantivos en ‐η:
πόλις > πόλη (acus. πόλην, gen. πόλης, etc., como λύπη).
• Muchos sustantivos se remodelan sobre el diminutivo neutro -ion > -i:
cevri (<cevrion), povdi (<povdion), mavti (<ojmmavtion).
• Se crean nuevos sustantivos en -eva: koufoxuleva, petreva, ojxeva.
• Desaparece el dativo (salvo en formas adverbializadas: dovxa/ tw'/ qew'/) y
su función la toma el genitivo: kalh; mevra sou'.
• Se hace general la tendencia a formar sólo dos casos (en la 3ª, nom. y
acus.; en la 1ª, nom. y gen.): oJ/to;n privgkipa", tou' privgkipa.
• En los pronombres personales aparecen nuevos tipos (ejmei'", ejsei'") y
formas perifrásticas (hJ povlh sou, ta; crhvmatav mou). La aparición de ejmei'", ejsei'"
(construidos sobre ejmev, ejsev, y éste último, a su vez, sobre sev, por analogía con
ejmev) se debió, evidentemente, a que hJmei'", uJmei'" habían llegado a ser
homófonos.
• aujtov" se convierte en un demostrativo como ou|to" (>tou'to"), pero
preserva su función como pronombre de 3ª persona en las formas tovn, thvn, tov,
etc. (<aujtovn, aujthvn, aujtov).
• El pronombre relativo o{", h{, o{ fue reemplazado en la lengua escrita por
oJ ojpoi'", etc. (cf. it. il quale), y en la lengua hablada por el indeclinable oJpouv
(proveniente del griego antiguo o{pou y antecedente del moderno pouv).
• El sufijo adverbial -w" es reemplazado por -a (la desinencia del neutro
pl., frecuentemente usado en su función de acusativo adverbial).
• En el verbo, el uso del aumento temporal es vacilante: tiende a
desaparecer, acentuado o no, especialmente en compuestos.
• Se crea la desinencia de 3ª pl. del presente -oun, frente a -ousi, por
analogía con la del imperfecto y aoristo -an: gravfoun(e), e[grafan, ne[grayan.
Inversamente, en algunos dialectos (Peloponeso), ésta fue reemplazada por -asi
sobre la analogía del antiguo -ousi: gravfousi, ejgravfasi, ejgravyasi.
• El sistema se reduce a sólo dos temas temporales (presente y aoristo) y
sólo dos voces (activa y pasiva).
• Se refunden las desinencias de la pasiva.
• El futuro, el perfecto y el pluscuamperfecto se forman
perifrásticamente: qevlw gravyei(n), e[cw katakliqh'(n).
• El optativo se pierde y es reemplazado por expresiones perifrásticas
con qevlw: qevlw na; ei\ca (gr. moderno qa eivca)1 "yo tendría".
• La 3ª persona del imperativo se hace perifrástica, reemplazada por a["
(<a[fe") + subjuntivo: a[" levgh/.
• El participio activo queda fosilizado sin declinación: gunai'ke" ojmnuv-
onta", ajkouvswn oiJ parovnte", gravfonta", convirtiendose prácticamente en un
gerundio.
• El infinitivo se limita a la formación de compuestos, y se confunden las
desinencias propias -ei y -ai: qevlw gravyei(n). Sobreviven sólo las formas gravyein,
activo, y grafh'n (<grafh'nai), pasivo, que se construirán con e[cw para
reemplazar el perfecto perdido.
• El imperfecto de los verbos contractos se forma en -ou'sa (de filw',
ejfilou'sa), sobre la analogía del fenómeno similar que se daba ya en el griego
helenístico con la 3ª pl. ejfilou'san por ejfivloun.
• Desaparece el aoristo medio, y el pasivo se reconstruye sobre la base
del antiguo perfecto activo: ejluvqhka < ejluvqhn, cf. levluka.
1
La partícula qa (< qevlei i{na) aparece ya en los ∆Erotopaivgnia o Juegos amorosos, una colección
de poemas del siglo XV cuya lengua, en general, es casi idéntica a la actual.
• Se crea una nueva conjugación del verbo ser, reconstruido parcialmente
como medio-pasivo: pres. eijmiv/ei\mai, ei\/ei\sai, ejstiv/e[ni/ei\nai,
ejsmevn/ei[meqa/ei[maste, ejstev/ei\sqe/ei\ste, eijsiv/e[ni/ei\nai; imperf.
h\(n)/h[mhn/h[moun(a), h\"/h\so/h[soun(a), h\n/h\to(n)/h\tan(e), h\men/h[meqa/h[maste,
h\te/h[sasqe/h[saste, h\n/h\san/h\tan(e); etc. [gr. clásico/helenístico (pueden ser
iguales)/bizantino (puede ser igual al helenístico) y moderno]. Como se ve, las
formas bizantinas y modernas han sufrido tales cambios analógicos que, si no
existieran testimonios escritos de las formas antiguas, sería casi imposible
reconstruirlas.
• Desaparecen los presentes en -mi, y surgen muchos presentes en -ovnw en
sustitución de los antiguos en -w': dhlwvnw < dhlw'.
• Se desarrolla el infijo -n- de presente: pres. fevrnw, imperf. e[ferna, aor.
e[fera (< fevrw).
En cuanto a la sintaxis:
• Se generaliza el uso de las preposiciones, reducidas en número, con
acusativo. Aparece la preposición me.
• Aumenta la coordinación en detrimento de las subordinadas; en
general la sintaxis, más analítica, se asemeja bastante al griego moderno.
• Aparecen nuevas partículas: a[" (primera aparición en el Strathghkovn
de Teófilo Kekaumenos, del siglo XI), nav (Constantino VII Porfirogéneto, del
siglo X).
El léxico, además de mantener un alto número de palabras de la koiné
helenística que permanecen igual (gravfw, xuvlo) o que han sufrido una adap-
tación fonética o morfológica (patevra" < acus. patevra(n), paidiv < dim. paidivon,
ajkovmh < ajkmhvn, grhvgoro" < ejgrhgorwv", ejdw' < w|de, e[tsi < ouJtwsiv, kavqe < kaqevna" <
kaqeiv", basado en la expresión antigua ei|" kaq∆ e{na, mporw' < eujporw', xevrw, h[xera
basados en el antiguo compuesto ejxhu'ron, nerov < nearovn (sc. u{dwr), pavw, ph'ga <
uJpavgw, uJph'gon, piav, piov < plevon, tevtoio" < ti toi'on, twvra < th'/ w{ra/ [cf. it. allora]),
se renueva con las nuevas significaciones (a[logo), las nuevas palabras (korravzw),
los préstamos (latín, hebreo, italiano, francés, turco, y algunos eslavos, valacos y
albaneses) y surgen sufijos para la creación de derivados, la gran mayoría de
"producción propia", digamos, (en -a": uJpnarav", Zwnarav"; -ivki(on): scolarivki,
spaqarivkion; -imon: metastavsimon; -issa: prigkivpissa, aujtokratovrissa) o
procedentes del latín (-avto" < lat. -atus: magistravto", rhgavto, prigkipavto,
pwgwnavto"; -avrio" < lat. -arius: sakellavrio", flamouravrio"; -ianov" < lat. -ianus:
kastrisianov"; -evli > lat. -ellus: krikevli; -ouvra > lat. -ura: klisouvra, ligatouvra; -ivsio"
> lat. -ensis: bounivsio"), aunque es probable que algunos, como -ivtsin, -ivtzh", -
ivtza (bounivtsi, Qeofilivtzh", Triadivtza) sean de origen eslavo. Por otra parte, los
apodos medievales y los nombres propios de los últimos siglos recuerdan de
cerca los del griego moderno: Crusolarav", Skaramangav", Damaskhnov",
Sunadhnov", Komnhnov", Sgourov", Koutrouvlh", Mouvrtzouflo", Kontostevfano",
Triakontafuvllh", etc.