Sei sulla pagina 1di 368

UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS

AUDI V\

Santiago Tácunan Bonifacio

Lim a - 2000
ARCHIVO
SEMINARIO DE HISTORIA
■SOSái ANDINA - UNMSM.

HISTORIA DEL DISTRITO


DE COMAS
DESDE SUS ANTECEDENTES PREHISPÁNICOS
HASTA LOS PRIMEROS AÑOS DE FUNDACIÓN
HISTORIADEL DISTRITO DE COMAS
Santiago Tácunan Bonifacio ■

LIMA 2000
Seminario de Historia Rural Andina - JN M SM
Andahuaylas 348 -Lima 1

CARÁTULA : Juan Zárate Cuadrado


IMPRESIÓN : Miguel Pinto Huaracha
DIBUJOS : Carlos Rojas Feria .
A sá s padres (Basitia y Aparielo).,
a mis hemiarias (María, Pfelida y
Beateia) y sobrinos (Jessfca,
Patricia. José Carlos y Gracia)
de quienes, a diario redI»A i^ as:
para seguir ^f^elaírte,,..;
ARCHIVO
SEMINARIO. DE HISTORIA
ftUBÁt ANDINA - ÜNMSM.
ÍNDICE

PRÓLOGO

IN m O D U C CÍÓ N

Fág.
CAPÍTULO I
DESCRIPCIÓN DEL ESPACIO FÍSICO Y GEOGRAFICO

i e l c l i m a ................. .................................................................... 2
1. Pisos ecológicos
2. Los valles

R EL BÍQ CH ULÓN ..................................................... ...................... 4


1. Valles del río Chillón
2. Recursos alimenticios ,
3. Economía costeña

CAPÍTULO II C'; "" '.. ‘J'V“V'/


ÉPOCA PREHISPÁNICA

L OCUPACIONES HUMANAS EN EL
VALLE DE CÁRá BAYUX).............................................." .....15
1. Etapa, Lítiea
2 . Etapa Arcaica
3. Horizonte Temprano
4. Mermedio. Tempano
5. Horizonte Medio
6. Intermedio Tardío
7. Horizonte Tardío
CAPÍTULO r a
ÉPOCA COLONIAL

I EL VALLE DE CAILABá YLLG


VISTO POR LOS CRONISTAS........................................................ -42

iL PRIMEROS AÑOS DE CONQUISTA.................................... .,...48


1. Situación demográfica
2, Primeros ordenamientos económicos
3. Los primeros encomenderos
4, Las reducciones indígenas

Iff. LAS HACIENDAS EN EL VALLE


DE CARABAlfLLO ........'
1. Unidades productivas
2. Las haciendas y sus funciones
3. Estructura interna
4. Producios elaborados
5. Funcionamiento

TV. LA IRRIGACIÓN EN EL VALLE


DE CARABAYLLO....................... ......................................................85
1. Antecedentes prehispámeos
2. Época colonial
3. El riego como método de cultivo
4. Castigos y sanciones
5. Reclamos y denuncias

.V. LA HACIENDA C O M A S ¿ v. ó .V u . i ÍD1


1. Origen1
2 . Fanegadas de cultivo
3. Arraidatarios
4. Amoldamiento
5. Caída d élas pensiones \
6. Fuerzas productivas v
7. Producción
8. Vinculación con otras haciendas

H
VI. LA HACIENDA COLLIQUE........................................ .126
1. Origen
2. Fanegadas de cultivo
3. Linderos
4. Cuentas: censos, capellanías, buenas memorias
J. Fuerzas productivas
6. Producción

CAPÍTULO IV
ÉPOCA REPUBLICANA

1 SITUACIÓN DE LAS HACIENDAS


COMAS Y COLUIQUE ................................................ .................1«5
1. Antecedentes socio-económicos
2. Hacienda Comas
3. Hacienda Collique

É CRÉC3MIENTO im íO C íR Á F lC O ........... .................................187


1. Causas: Cifras

EL FUNDACIÓN DEL DISTRITO DE COM AS.......................... 195


1. Antecedentes
2. Invasión,de las haciendas Comas y Collique
3. Creación po líbica
4. Nuevas invasiones

CONCLUSIONES
ANEXOS
FUENTES DOCUMENTALES
BIBLIOGRAFÍA GENERAL

III
PRÓ LO G O

La historiografía peruana más reciente tiene motivaciones y


metodologías que no eran las de ha,ce apenas dos décadas. Quizás
jxsrque entre tanto han ocurrido cambios sociales generalizados que
áféctah- Sacomposicion social de estudiante^ profesares o historiadores
activos; así como e! futuro qué pueden esperar como guapos ó personas.
Los diversos grados dé conciencia de esta- situación empieza» a estar
reflejados en la elección de los temas y ei modo de tratarlos;' En la
investigación de Santiago Tácunan el personaje central es un populoso
distrito limeño con una historia aparente detrás suyo de no más de tres
décadas. Un distrito que es la residencia del propio historiador, su
escenario vital, el sitio de sru familia, un lugar para ser explicado y que
solo puede serlo a través del tiempo.

A. partir de esa. motivación el historiador tiene que hacer histori


y también algo más. Esta investigación por eso insume ciatos
arqueológicos y de antropología junto con la recopilación documental
y las informadones estadísticas más recientes.

Lo que surge de su lectura no es tanto una sucesión de épocas;


porque el efe de !á investigación son los problemas de vivienda, trabajo,
inquietudes, cultos religiosos, etc.

Comas, es un espacio ejemplar. Sus primeras ocupaciones


arqueológicas registradas fueron del tipo coraunal/sefiorial para luego
convertirse en hacienda corante d. váre bato y en propiedad popular
individualizada en el curso de este siglo. Sobre su espacio hm
convergido, como ío dice Tacunan, c o n iste s migratorias signadas
frecuentemente por la violencia: aymaras y quechuas- sobre yungas,
españoles sobre todos ellos y por encima nuevamente la. presencia

V
popular. Así evolucionó un proceso cultural segmentado por aportes
extemos y tendencias seculares propias acordes de algún modo coa
diferentes circuitos geopolítieos.

Nadie puede privilegiar cualquiera, de los cuatro capítulos


diseñados por Santiago Tácunaa. Quizás» ski embargo la Sedación del
distrito de Comas siendo lo último vendría a ser lo primero; ya que sólo
por que. Comas es hoy un. distrito» nos interesa, saber cuando fue
hacienda o. templo pre-inca.

Es probable que la investigación ele Santiago Táeunan sobre


Comas constituya en el futuro un modelo que de ser .generalizado «os
proporcionaría una historia municipal de Lima de larga, duración. De
este modo cada uno de estos distritos populares fortalecería su propia
Identidad y autoestima y estaría en mejores condiciones para, diseñar m
propia acción político-social.

Pablo Macera

VI
INTRODUCCIÓN
I. FIM 3Á M EN TA CIÓN

Hasta hace algunas décadas, los distritos limeños recién


fondados comenzaron a experimentar una serie de cambios que ponían
en peligro el desarrollo y estabilidad de Lima tradicional. Esta situación
obligó a las autoridades municipales y gubernamentales a buscar
soluciones rápidas.

Los primeros esfuerzos obtuvieron resultados negativos, en


vista de no considerar a la población existente en ella, como un
elemento activo de solución. Superado este inconveniente, se dio paso a
la organización de la población para que de forma ordenada y
sistemática, participe de los planes de desarrollo distrital.

Al poco tiempo de iniciada la labor. las autoridades se dieron


cuenta que los pobladores, provenientes de distintos puntos del país, no
encontraban lazos de integración e identificación con su distrito.
Aunque diversos fueron los análisis que se realizaron tetando de
encontrar las causas del problema., el resoltado final apuntaba al
desconocimiento de la historia de! lugar en.clan.de vivía»; así como de su
propia historia colectiva y personal como .fundadores residentes.

Se dieron visos de solución 'estableciendo en los programas


oficiales de enseñanza, un capítulo destinado ai estudio de la historia
local. Establecer su dictado era sólo paite de la solución, pues al no
incentivas- la investigación de las historias distritales, los profesores nada
o casi nada pudieron y pueden hacer para fomentar ei conocimiento
histórico del distrito. El escaso material bibliográfico ha sido y es uno
de los grandes inconvemente que se presenta en casi todos los'distritos
que conforma» la. gran Lima.

Con la reconstrucción histórica del distrito de Cormas (desde sus


antecedentes prehispánieos hasta sus primeros años de fundación)
intentarnos establecer el tipo de ocupación o asentamientos humanos,
los grupos y sus relaciones, y la descripción y análisis del desarrollo de
la ..estructura-económica al. interior de ella. Este estudio es el. punto .de
pattida de un ambicioso .proyecto de investigaciónrmltidisciptinarío
titulado Historias Distritales, cuyos resultados servirán de material
informativo y-formativo- en las escuelas de cada distrito.

: La. historia -como sabemos- es la base fijndamentai de la


conciencia de cualquier colectividad o. grupo social en diversas escalas
(nación república,.-distrito,..).;. Los, pueblos que lian destacado en la
historia son los que más claramente han tenido una noción poderosa de
su propio pasado.. El distrito de Corpas., a pesar de haber:alcanzado un
gran desarrollo en pocos; años, aún, tiene mucho por hacer. La
generación de jóvenes que actualmente habita an e! distrito, es la
llamada, a hacer-realidad las nuevas aspiraciones y necesidades de un
distrito, que avanza.. Conociendo sus antecedentes históricos podrán
dar^e. cuenta del espíritu .'de lucha y progreso que tuvieron ios primeros
pobladores del distrito, para así continuar conservando y .desarrollando
aquel legado histórico.

II, BALANCE BIBLIOGRÁFICO ,

De manera especifica, y general podemos señalar que el presente


tema de/ investigación ha sido estudiado muy ligeramente. El
antecedente más; cercano.se remonta a 10 años atrás (1989). El actual
Alcalde de Comas Armilfo Medina Crac es, que por entonces concluía
su tercer mandato consecutivo, publicó un libro titulado Coraass u»
pueblo eis. ludha,.,. Más que la historia distrital de Comas, es un
recuento de ja s obras' realizadas durante sus dos primeros períodos de
gobierno distrital (1981-1983 y 1984-1986) y el planteamiento de obras
proyectadas para su tercer período (1987-1989). Aiíos atrás (1983), el
médico UHses Reátegui Reátegui, escribe una novela (social, política y
literaria); titulada ...Invasores?, donde registra sus vivencias y anécdotas
af.lad o .d e la primera generación de pobladores que ocuparon, los
terrenos denominados Pampa de Comas,. Hace dos años (1997) el

IX
hisí-oriacíor Raúl Adanaqué Velásquez, publicó en el cuarto número de la
•revista-Nuev® SÉiafesfe, un artículo titulado "Caciques coloniales de San.
Pedro de Carabayilo, La reducción, sais pueblos y el origen del nombre
de Comas", en donde presenta algunas sugerencias referente al origen
del topónimo Comas y anuncia la publicación de un libro referente a k
etnotóstoria de Carabayilo, que espeiannos con gran ansiedad. Por
último, los trabajos de Jacques Polem (1987) San J usb de iAirigandho:
su historia y su gente. Un. distrito popular de Llosa e Hildebrando
Castro Pozo (1983) Historia Antigua del distrito de Carabayilo. Asi
como diversos trabajos referentes a la historia del Callao, han sido
tomados en cuenta como modelos referenciales.

Durante los últimos años, los distritos provinciales del interior


del país, han incentivado la publicación de varios trabajos referentes a
nuestxo tema de investigación, El I Festival del. Libro Hnancanéfio
(1999), organizado por la Municipalidad Provincial de Huaneané
(Puno), tuvo como ganador al maestro de escuela. Juan Luis: Ayala
Loayza con su libro titulado EtooMsitoría de H nancané, ón donde
presenta una visión panorámica de ese distrito, desde la época
prdhíspáníca hasta la participación del poblador Huancanerlo en la gesta'
emancipadora. Por otro lado, el autor no olvida las festividades
populares y religiosas, ni la,s sublevaciones y revueltas aymaras en
épocas republicanas. En 1998, el docente, periodista y poeta Silvio
Huertas Asendos, publicó con el auspicio del Concejo Provincial de
Huari s« libro titulado KiMkshut, PerSÍ ■mltaral de la capítol de
Koncliíifeos, en la que recopila una serie de escritos1 poéticos,
naíTaciones y testimonios de pobladores del callejón de Conduje os. >Io
olvida hacer un recuento y nuevas propuestas de circuitos Cultui'úJes y
turísticos de la zona. Ese mismo año, el Concejo Provincial de Huari
auspició ía publicación en su tercera edición, Is monograma, titulada
H nsri y Condíucos,. escrita originariamente por el Padre Presbítero
Santiago Márquez Zorrilla en 1946,. La monografía describe en forma
-general los orígenes de la provincia de Huari y su desairollo durante la
época, republicana. Por otro lado, no - olvida los bailes populares,
cuentos y costumbres de la zona. -- -
Este breve análisis bibliográfico nos deja u » . panorama
escasamente estudiado en lo que respecta a nuestro tama de
investigación. A pesar de algunos intentos por apoyar la publicación de
historias d ig itales al .'ulterior del país» en los distritos de la capital
limeña la situación se muestra, totalmente diferente, aunque esperamos
que ello cambie en la medida que tomemos conciencia de la impcntancia.
del conocimiento-de nuestro pasado, pasado del cual no sólo somos
Herederos sino también actores en la construcción de un futuro diferente.

'Ninguno de los trabajos que de manera especifica han abordado


el estudio de historias distritales, hace uso o referencia de la
documentación colonial que eriste en diversos archivos. Esto sucede
porque algunos no estudian ia época colonial, otros porque simplemente
Ies resulta una tarea trabajosa (ubicación, clarificación, transcripción- y
análisis hermenéutico) y no se encuentran preparados ni económica ni
académicaníeflte para hacerlo.

La escasa historiografía desarrollada sobre el tena, no nos


sugiere ningún planteamiento concreto al respecto. . E n : este sentido,
consideramos te necesidad de abordarla, desde una perspectiva de Sarga
duración (desde -tiempos'prehíspánicos hasta los primaros afías de su
fondación). Dicha, perspectiva nos permitirá ¡apreciar los diferentes
cambios, que -pasaríais desapercibidos en tiempos medianos y cortos,
tales como los cambios producidos en et orden geográfico y social,
como consecuencia de las constantes migraciones ocurridas durante-: la
década del '40 dei siglo X X

IJX MOTIVACIONES

Nuestro interés por la historia del distrito de Comas nace el año


de 1.994. En aquel entonces cm^sálbamos el-tercer año de historia en la
Universidad Nacional Mayor de San Marcos. A finales .de noviembre
de ese mismo año. túvonos que presentar «na monografía, sobre Lima y
sus monumentos, así como un informe heurístico sobre la
docum ertoión colonial referente a la hacienda Comas ubicada ten el
•'.•alie de Carabayllo. Ambos trabajos nos sirvieron para aprobar el curso
de Fuentes Históricas del P era (Siglos XVI-XVII-XVIII), dictado pel­
el historiador Carlos Lazo, quien ai año siguiente nos encargaría k
ayudantía de cátedra de k asignación en mención. Este encargo nos
permitió pasar más tiempo en el Archivo General de la Nación, lugar en
donde fuimos aprendiendo y perfeccionándonos era eí correcto uso y
¡manejo de las distintas series documentales. Y por otro lado, completar
k información documental no sólo de la hacienda Comas, sino también
k de CaÜique.

Un año después (1995) y ya contando con el recaíd o


documental que la hacienda Comas había pertenecido a la Universidad
de San Marcos, el historiador Alejandro Reyes reunió a un grupo de
entusiastas alumnos e intentó proponer a. k s autoridades de la
Universidad de San Marcos, k necesidad de emprender un estudio
acerca de las propiedades urbanas y rurales pertenecientes a esta casa de
estudios (antecedentes, filiación, estado de ccKisenración y situación
legal actual). '-Esta experiencia nos sirvieron para, ahondar y reafirmarlo
que un año atrás nos propusimos realtear siguiendo las sugerencias;del
historiador Carlos Lazo: la historia del distrito de Comas'.

El estudio de las haciendas Comas y CoIHque responde á un


acto académico y sentimental. Académico, porque el distrito de Comas:
se encuentra fundado en los terrenos de las haciendas Comas y Coilicpie.
Sentimental, porque desde hace 40 años, alberga a muchas familias de
espíritu progresista provenientes de distintos punios del país, incluyendo
a la mía.

La originalidad del estudio consiste en el empleo exhaustivo de


fuentes documentales editas e inéditas, que nos han permitido establecer
por más de tres siglos y medio ios propietarios y arrendatarios de las
haciendas Comas y Collique,. la estructura kterna de testas unidades
productivas, la actividad económica desarrollada al interior de ella y la

xa
importancia de estas en el mercado limeño. Así corno los cambios
producidos en el orden geográfico y social, como consecuencia de las
constantes migraciones del interior del país, ocurridas desde h década
d e l'50 del siglo XX.

Reconstruir la historia cfel distrito de Comas,, responde a la


necesidad de crear, consolidar y/o fortalecer la identidad y conciencia
distrital de los pobladores residentes en Comas. Así como de incentivar
el cuidado del milenario patrimonio cultural existente en el distrito. El
desconocimiento, es quizás una de las excusas más comunes para
disculpar' nuestra irresponsabilidad. En este sentido, esperamos poner al
alcance de t e maestros, pobladores y estudiantes en general, la historia
del distrito de Comas.

IV. H IPÓTESIS D E ESTUDIO

Prim era. Sobre el suelo distrital-de Comas, a lo largo <fei


tiempo histórico transísurrido, se han sucedido tres tipos'prioritarios de
propiedad territorial: la comiraal/señoriai durante el tiempo
prehispánico; !a señorial a lo largo del virreinato y los 130 primero?
años de la república; y ¡a propiedad popular individual desde los años
'50 del presente a la fecha.

Segunda. La actividad económica rectora hasta los años '50 de


la presente centuria fue eminente mente rural, (agraria con los pre-incas e
incas; agropecuaria y agroiníkistria] del siglo XVI a la primera mitad del
siglo XX; y urbano manufacturara y de servicios a partir de los años '50
ai presente).

Tercera. Sobre el suelo-de Gomas han convergido diferentes


comentes migratorias poblacionales que tuvieron un carácter violento
en sus orígenes: migración aymara-quechua que se incuso sobre Sos
residentes originarios costeños; migración hispana qüs se sobrepuso a

XHI
los.; ocupantes quectaa-symtras; y migración andino -mestiza que
desplazó del territorio a Sos propietarios criollos de ascendencia hispana.

Cuarta. Sobra el territorio de Comas se d io ,u n proceso


lástóricocultura! segmentado por los aportes externos llegados con los
grupos. nógratorios indicados. En. todos los casos , tuvo lugar un
mestizaje cultural con predonúnto <fe la cwitura tm yante.

: Quinta. Sobre el espacio histórico del distrito de Comas se lian


sucedido dos circuitos geopolíticas: uno iadependi.ei.its y cerrado, y. otro
totalmente dependiente* abierto y supeditado a fuerzas técnicas foráneas.

V, MARCO TEÓRICO

En oposición a la visión postmodema, que en él ..lenguaje de


Foucault es discontinua y fragmentaria y de “saberes ocultos1’, el
presenté estudio se ajusta a «na. visión teórica de historia local continua
y total, :y de perspectivas descriptivas sincrónicas y diaerónicas.

VI, VARIABLES

- Del origen del poblamiento:


- Olas migratorias por lo general de accionar violento.

- Del désenvoMmiento del pobfamiento!


~En los extremos (yuiigas y andino mestizos) se desenvuelve un
pobSamisnto popular con mecanismos de organización y dirección
comunal. En el caso de los Collis, Incas y Españoles, se desenvuelve un
asentamiento de estilo señorial con sujeción del ocupante tradicional y
con tipos de propiedad comunal e individual de magnitudes diversas
según los periodos.

XIV
- Del sentido del poMaimento;
- E« todos los casos la tazón ele ser es k ocupación residencial y
el desarrollo d e :Ja. actividad agraria. Con la sola excepción dei
poblamiento asigno mestizo de mediados del presen*» siglo.

VIL O B JETIV O S....

:VI.L1, Objetivos Prácticos..;

A) Revelar el continuos, rupturas y. discontinuidades'del.


proceso histórico que ha conducido a la configuración del actual distrito
de Comas, a través de la difusión de un material documental histórico, a
la vez informativo y form&tivo. La investigación debe servir para
elaborar un manual histórico de consulta entre los estudiantes y
pobladores dei distrito.

B) Contribuir a formar una. conciencia sobre la, hktoricidad de


los territorios que configuran el actual distrito de Comas (haciendas
Comas y Coilique). Se intenta con el presente estudio -que los comerlos
de nuestros días tomen conciencia que son actores de una historia
milenaria; es decir, participantes activos en la creación de un paisaje
cultural de larga dataeión histórica; que sientan esta creación como una
necesidad insoslayable y como un legado histórico que deben mejoras-.

C) lo g rar una conciencia ^rtspal o corporativa que permita


. superar los distanciamientos que ocasiona 1.a presencia de pobladores
que provienen de un espacio andino piuriculturah Así. se ayudaría a
solucionar el ' tradicional conflicto latente que obstaculiza el
: acercamiento de los pobladores que tienen diferentes orígenes étnicos.
:A todos ellos los debe unir la misión histórica que hemos señalado
anteriormente, y en el cumplimiento de ésta deben aprender a aceptar
los diferentes bagajes culturales.

• XV
¥11.2. Objetivos Teóricos

■A )'" 'Sugerir a la comunidad académica un modelo teórico


sincrónico y diacrónico de historia distrital ele larga duración,, dada la
casi total ausencia de este tipo de trabajos.

B) Proponer una metodología inicial para la investigación y


sistematización '.histórica de la historia de un distrito.

C) Proponer una síntesis iástóricíí accesible tanto al;público en


general (especialmente a Sos pobladoras del distrito de Comas) corno útil
al lector especializado.

VIH. METODOLOGÍA DE TRABAJO

V I L 1. Procedimiento Metodológico

La historia del distrito de Comas .está: sustentada en iaformacióh,


«druida de diversas fuentes bibKográficiss 'y 'documénteles (¿ditas e
-inéditas).
Los principales repositorios consultados son: ■
- Sala ds Investigación de la Biblioteca Nacional (SIBN).
- Biblioteca Central de San Marcos (BCUSM).
- Biblioteca y Archivo del Instituto Riva. Agüero (BAIRA).
- Archivo General de 3a Nación (AGN).
- Archivo de Registro de Propiedad'Inmueble de Lima .(ARPIL).
- Archivo General del Congreso (ACtC). -
- Archivo Histórico de San Marcos Domingo Angulo (AHSM).

En el Archivo General de la ‘Nación consultamos cinco


secciones: Protocolos Notariales, Juzgado de - Aguasj Títulos: de
propiedad, Tribunal de ia Inquisición (contencioso) y P.eal Audiencia

■■XVI
(causas criminales). De estas cinco secciones debo destacar la calidad
de las dos primeras: Protocolos Notariales y Juzgado de Aguas.

Los Protocolos Notariales son documentos generados por las


escribanías coloniales y republicanas a cargo de fondonarios con
atribuciones de dar fe contractual. El tipo de documentación que reúnen
los Protocolos Notariales "es' 'variada:', existen"-ventas,' obligaciones,
donaciones, 'imposiciones,"- cesiones, censos, subrogaciones,
libramientos, testamentos, ' có<ficiHos,; fianzas, dotes, -revocaciones,
inventarios, -remates, información de limpieza de sangre--.'y- nobleza-y
toda gama de actos de derecho de cack siglo.

Siíi dejar de lado la importancia que tienen el resto de


documentos anteriormente mencionados, los'inventarios o tasaciones de
'compraventa representan una fuente documental imprescindible para 'el
estudio de la oigarazacidaintenm -de las fuerzas productivas o capitales
productivos de las haciendas limeñas coloniales. Á. diferencia de otro
tipo de documentación colonial éstas presentas de manera- exacta, y sin
sobre valoraciones la cantidad, calidad, precio, tipo y estado de
conservación délos diversos inslxumentos de.labranza, tierras efe cultivo
y fuerza de trabajo.

De ios 35 Protocolos Notariales revisados, ubicamos para la


hacienda Comas 3 tasaciones efectuadas en 1694, 1763 y 1765.
Mientras qué para la hacienda Coilique tenemos registradas 4 tasaciones
efectuadas ® 1747,1777,1780 y 1805.

ñ Los documentos referentes a i Juzgado de Aguas (1556)


conjuntamente con los documentos de Títulos de propiedad, Derecho
Indígena, Tierras de Comunidades, Títulos de Comunidades, Tierras y
Haciendas, conforman la serie documental denominada campesinado,
■que está organizada de acuerdo a un criterio temático y no institucional.

" - - Los 16 expe dientes5-revisados' del Juzgado de Aguas referentes


al ámbito rural del valle de Carabaylio, nos pennitieroffl-describir las

xvn
distintas drcusistancias y situaciones que provocaron el manejo,
posesión y uso del agua, elemento indispensable en el funcionamiento
de las haciendas conjuntamente con la tierra y k fuerza de trabajo.

S i el Archivo de Registro db Propiedad Inmueble de Lima


seleccionamos 8 tornos y 15 asientos documentales referentes a k
hacienda Comas y Collique. Esta información documental nos peiroite
conocer el destino cpe tuvieron estas haciendas a mediados del siglo
XX, Este repositorio documental guarda una. valiosa información para
quta¡ses quieran estudiar la evolución y conformación--.cíe las propiedades
inmuebles de Lima, Es curioso, pero a la fecha no se ha hecho ningún
estudio al respecto. No sólo porque resulta costosa la revisión de cada
uno de los tomos y asientos documentales, aparte de no existir un índice
o catálogo de las propiedades (como la existente en el Archivo General
de h Nación elaborado por Teran), ni un servicio de fotocopiado, sino
también porque al tema es delicado.y encierra muchos intereses.
Algunos saben y otros-suponen que muchas de las.actuales propiedades
han conformado y ampliado su dominio desconociendo y/c violentando
los derechos legítimos de otros propietarios, ¿Quiénes.. son- :1ps
beneficiados?, ¿Quiénes los perjudicados’?. Son .preguntas que quizás
algunas personas no quisieran que se respondan, otras por el contrario
las esperan cotí gran ansiedad.

En el Archivo General del Congreso logramos ubicar ■los


expedientes originales: de k fundación del. distrito de Comas*.a caben
memorial de los pobladores, proyecto .ds ley original, opiniones y
consideraciones de la Comisión da Demarcación Territorial tanto del
Senado como la de Diputados, copia de la ley dictada por Luis M.
Sánchez Cesto el 11 de -setiembre .de 1930 .y--: vigente según la ley N°
1266:2. redactada por Manuel Prado Ugarteche el 25 de octubre m 1956,
que aparentemente sustenta el nombre, actual del distrito de Comas.;

Ubicada y seleccionada la documeatación manuscrita, y


haciendo uso.de paciencia y tiempo,.desciframos paleogréficamente la
¿^formación y-procedimos al fichaje correspondiente (de acuerdo a los

XVIII
requerimientos da cada uno de los capítulos) ¡Mira posteriormente
sintetizaría y analizarla. Finalmeíite y de acuerdo a i& información
cuantitativa,, se elaboraron cuadros y gráficos que ayudarán a un mejor
entendimiento de, cada una de las hipótesis planteadas en la presente
fcivestigación. .

YIIL 2 . Flan de Investigación

La presente investigación está dividida en una introducción,


cuatro capítulos (descripción del espacio físico y geográfico, época
prekispániea, colonia! y. republicana), anexos documentales y fuentes
documentales y bibliográficas.

■ Capítulo I. Se describe ei espacio físico y geográfico que


sim ó de escenario a los primeros pobladores del valle •bajó de
Carahaylio.

Capítulo II, Se estudia el establecimiento, desarrollo y


decadencia, de las: distintas ocupaciones humanas. El Señorío de CoÜic
-uno de los más representativos- recibe un tratamiento especial. De él
se estudia su ubicación, con-riruceiones y conflictos.

Capítulo III, Se da inicio con una descripción del valle de


CarabayíSo, a través de los testimonios de cronistas y videros de la
época. Prosigue con un rápido recuento de la llegada y establecimiento
de los españoles y los primeros ordenamientos económicos, así como,un
estudio acerca del sistema de irrigación en el valle de Carábayilo.

- . En: vista que la hacienda fte el eje principal de la vida


económica y social durará® la colonia, era necesario conocer la
estructura y funcionamiento de estas unidades productivas. En este
sentido, las haciendas Comas y Collique son tomadas como modelos,
por Jas razones expuestas líneas arriba. De acuerdo a la información
obtenida, hemos establecido el origen^ extensión, propietarios,

XK
arrendatarios, montos de arrendamiento, mano de obra, instrumentos de •
labranza y producción de estas dos haciendas.

Capitulo IV. Es un recuento general de las rupturas, cambios y


permanencias que se observan en la zona rural del valle bajo dé
Carabayilo durante la época republicana. Se complata el capítulo con
un estudio de los antecedentes, íbndaciófi y primeros años de vida
distrital de Comas.

La parte final está, compuesta por las conclusiones, aneKOs


documentales (gráficos, documentos y planos del valle da Carabayilo y
la hacienda Coüique) y !as referencias docurnesítales y bibliográñcas; :

Entre uno y otro capítulo, hemos intentado -y ojalá lo hayamos


conseguido- mostrar que la historia del distrito de Comas tiene una ;
continuidad milenaria que, a pesar de estar ' sometida, a continuos
cambios, ésta se mantiene de generación en generación muchas Veces
sin que nosotros mismos lo advirtamos.

Somos conscientes de las kmsmerabks limitaciones dé esta


investigación, pues un convicto análisis y síntesis es casi isirposíbie,
sobre todo para ana persona que sé inicia eü el- mundo hisíonOgráfico y
por la escasa referencia bibliográfica en cuanto a! tema de investigación.

•IX AGUADECEWHENI'OS

Los problemas actuales pueden y deben ser . rastreados


históricamente, para así obtener un diagnóstico preciso de la realidad y
plantear una solución adecuada a los problemas actuales. La historia en
este sentido, es útil eimprescindible.

No obstante «que los aciertos y errores de la :presénte';


investigación son de'entera responsabilidad nuestra, resulta necesario

.XX
reconocer un afectuoso agradecimiento a las personas que de un modo u
otro ayudaron a elaborar y llevarlo a un feliz término. De esta manera,
vaya nuestra .gratitud y reconocimiento a mis profesores Alejandro
Reyes,, Waldemar Espinoza, Francisco Quiroz y en .espacial a Carlos
Lazo, quienes me inculcaron su saber durante los años que
permanecimos en la universidad. De igual manera nuestra gratitud a
mis compañeros del Seminario da Historia Rural Andina, de quienes
aprendo su infatigable es&erzo por el trabajo y espíritu de
compañerismo. Un singular reconocimiento merecen Flavio Estrada,
Salvador Poma, Carlos Rojas y Javier Pacheco, amigos y compañeros de
estudios, quienes desde un comienzo apoyaron, desinteresadamente, la
realización de la presente investigación.

No podría concluir estas líneas de agradecimientos sin citar a mi


asesor, Pablo Macera, quien en un gesto de suma amistad y generosidad,
me brindó gentilmente su apoyo bibliográfico, documental, comentarios
y una permanente preocupación por la conclusión de la investigación.

Concluida ia investigación no abrigamos grandes pretensiones.


SÍ acaso hemos logrado difundir el conocimiento de ja historia del
distrito de Comas; si los maestros -utilizando la presente investigación-
logran hacer tomar conciencia a sus alumnos de la importancia que
significa el conocimiento de la historia del distrito, sería ampliamente
recompensado por el esfuerzo desplegado y debo confesar que sentiría
una profunda satisfacción sí con estas páginas alentamos el respeto del
pa&imomo culturad y, más aún, si contribuimos a despertar una
conciencia distrital.
II
t*(
DESCRIPCIÓN DEL ESPACIO FÍSICO Y GEOGRÁFICO

Describir las condiciones geo-climáticas y los recursos


naturales existentes en el valle de Carabayllo durante la época
pnehispánica, nos ayudará a ' entender mejor las peripecias y
dificultades que tuvieron que afrontar y vencer los primeros
pobladores pora así establecerse en estas tierras.1

L EL CLIMA

El clima jugó un papel fundamental en ei desarrollo y


evolución de los primeros pobladores peruanos. Este se caracterizó
por ser muy variable a corta dimanéis. La. diversidad fije siendo
conocida paulatinamente y manejada de manera progresiva por
nuestros antepasados, quienes sacaron el mayor provecho de ellas.
Fue así como cada región fue aprovechada con los cultivos
apropiados y se emplearon estrategias adecuadas para alcanzar un
mejor control sobre los diversos pisos ecológicos, de la cual nos
habla el antropólogo John Murra."

Sin catar m la tentación de explicar la conducta humana como


determinada sustasidalmünte per el medio ambiente n.o se puede, ñu embargo, dejar
de considerar su influencia. EL territorio presenta el escenario, el entorno y el
contrato de ia cultura urbana resultante. Influye en si destino del morador ñora y
fauna, amén de recursos naturales, clima y circunstancias especificas. Sin ser
variables determinantes, son elementos que no se pueden eludir en el análisis. '.Las
espadas vivas se aclimatan, se acomodan a las condiciones ambientales. H territorio
y el medio Militaste crean crestas circunstancias insitKsibl.es (ptoriosidad, himnecíad,
fertilidad, ate.). El hombre escoge territorios, los mejora para el desarrollo de ia
especie transfbnnágulofa. Véase Eduardo Arrayo, B Centro de Lima, aso sedal M
espado. lima, 1994 Pg. 2S.

3 Jotea Msara U “Costeo! vertteaT de un aédB».*.itt pisos


ttsKgiow e t 1» « o a m íii de las sociedades andinas. En: F u n a c b a M

2
1. PISOS ECOLOGICOS

H ablar de los climas,, es hablar de pisos ecológicos y hablar


de pisos ecológicos es hablar de Javier Pulgar Vidal.*3 Este estudioso
delimita y denomina a nuestra área de estudio dentro de la región
Chala.4 " ,

1,1, LA REGIÓN CHALA

Comprende paite de la costa central y una pequeña parte de


la. costa, sur. Según el arquitecto Santiago Agüito, la costa de Lima
representa una. cuarta piarte de la costa central y se ubica en la región
Chala, siendo por tanto, su altitud máxima de 500 m.s.n.tn/ El clima

Económicas y Políticas M Mondo Andino. Lima, 1975. Pp. 59-115. Véanse


te n tó n los trabajos de H » C. Tello, ÍMgen y desam&o d® t e cfcrfflzadoucs
f reMstóricss andinas, 1942 [1939]; de Cari Tróll, Los ftmdaroHttos geográficos
de las'dváfaitdones máinsis y á*S iengtoxfo incale». Lima, 1.935; Las ■coltnras
superiores aiuáñs&s y «3 medio ««gráfico. lima, 1935; y la de Lbraí Valles, La
Molona subjetiva como an «femado «stntiál áeM voititaMcIM. Lima, 1971.

3 Javier Pulgar Vidal; Geografía áel Perá,. Las 8 regtoaes


aateales <W Partí lima, 1907. Véase también los 4 primeros yoliknenos de !s
Colección Gran Geografía ¡M P*m (sif) correspoúdiimtas a: NaturakAi y .Ktrnfrra,
Mora y Ecología, Fauna y Recibos NatóriAs.

4 Además de la región. Chala, el valle de Carabaytlo posee dos


reíosles denominadas Yunga o ■Quebrada y Quechua-
l a región Yunga o .Quebrada és conáderada por el .padre Villar Córdoba
conw una. tEgióa subtropical de la costo», an cuyos valles por fa acción del calor y la
fertilidad! dé Sa tierra,.se produjo una'gran variedad de plantas. Fue en esta región
doride.se dieron t e primeros frutos da la coca, maní y 'atrita plantas. Es, además,
2sma de huaycos y derrumbes, cpia se eacnentra ontré los SOQ y 2.000 m .m m Su
característica principal es ei clima cálido templado y de poca humedad.
I.a región Quechua se encuentra ubicada entre los 2.500 y 3.500 m.s.íoB..
Era reconocida por los-antiguos peruanos: por sus bondades para .el desenrollo .de la
agricultura y ganadería. Se Gmctenéa por poseer lluvias regalares, ''atmósfera
templada y escasa humedad..

3 Santiago A p ito Calvo, Luna FíeMsjiásricj lima, 1,984. Pp. 25,

3
ínás filáiy la humedad más...ac.^oíttada que
en lá a¿tóalidad. .vr:' "!' C '

2. EOS V A L í M

En lim a se eiKJtiender» tres valles debido a Sa presencia de los


líos Chillón, Rímac y Lurín. Estas zonas poseían una diversidad de
recursos naturales, que aumentarían en la medida que los 'primeros
pobladores desarrollaran sus facultades físicas y mentales. Estos
primeras pobladores aprovecharían también fos anímales y ;vegetales
de las lomas,6 a donde acudían cuando ésistía escasez. Esta variedad
de recursos 'es'quizás una dé'las' probables cansas del establécimí'éníó
de algunas aldeas en d litoral.

ÍL EL RÍO- CEOI.J.,'ÓN?

El valle del río Chillón en ja costa central se constituye éh un*1

s Las Somas son colmas 0 laderas de los cetros en el litoral o entre


la costa y la siena, que asmib» la humedad del medio ambiente convírtíendo estos
tugares ®n zonas de ¿bandantes recursos zoemorfes y biomorfos. Para mayor
referencia véanse las obras de Emilio Homaro, Pera: Una nueva geografía, lima,
Tomo 33. Pp 17-21; y la 4a Pedro G. .AguiSar, Fauna de tas tomas cesteras,
lima, 1985. Pp. 17-28. 'y'"

1 Según María KoStworoswski, en tiempos prefdspánicos los ríos


no tente» ría mismo nombre desde su nacimiento hasta su desembocadura,
iba tomando diversos nombres. S ChilSte se llamaba rio de Carabayüoi de Cofliqué
y también de Qitmi. Etu&'jr Sociedad. Crista Peraana. lima, 1977. Pp. 23. Acerca
del río Chillón, Germán S&glich m anifiesta:“Nombre qra carca de srú
desembocadura toma el lio de Cíirabayllo...”; JHcdoiiario GeigÉBM del P«réu
Tima, 1922. Pp. 376. Por otro lado, el arqueólogo Hugo Ludeña manifiesta que el
nombre del rio: Chillón se debe.a la. geiimlizacáóír que se hite del nombre de ún
fondo del mismo nombre, ubicado arilkpkte baja del valle. Este fundo perteneció d
una familia cuyos títulos nobiliarios fueron marqueses o condes de Chillón, muy
conocidos y de origen francés. Secuencia cronológica y cultera! ¿M vnlite de
Ctólbfa, te a s doctorri,;tIffidSM.: lima, 1975.:

4
tugar e^cepcioMl p®^ e l d e sc o lló !dél proceso histórico peruano. El
rió Chillón tiene como origen los lagos C3»ucbún €ocha, León Cófcfiia
y ;AjáÍÍ''CócRa>'tótuados á 4.850 misiun.*- - Las aguas de estes lagunas,
producto dé lo s constantes deshielos de los nevados tte la Cordillera
de La. Viuda, reco rren 'u » trecho hasta juntarse en una zona:
denominada Jacaybamba de donde nace ei río Chillón. Este río
recorre hacia el'sudoeste 126 kilómetros antes de desembocar en el
Océano Pacífico.

I. "VALLES B E L RÍO C H IL L O N ;

Cónfiene en su extenso recorrido tres zonas bien demarcada?.,


C a s a fe r: ' "v '

L L VALLE BAJO

En términos de población humana, la zona ecológica más


diversa y productiva de recursos, es k planicie desértica -subtropical
del valle inferior y la laja litoral que la flanquea. En esta zona es
frecuente una leve lluvia conocida coa él nombre de garúa, que
aunque crea, humedad en e l aire, no es suficiente para el desarrollo de
la actividad 'agrícola. Contiene la mayor cantidad de ¡ terreno
cultivable y condiciones adecuadas de clima y 'suelo para una:-'doble
cosecha M año. También suministra una amplia. gama de alimentos
básicos, como por ejemplo: fríjoles, pimientos, algodón, calabaza,
maíz, mató y recintos marinos en todo el año.

s ‘ Para José M. Córdoba, el dé Chllón nace en la provincia de


Cania ds fes lagrasas Socaabftmtía y Lorococtó, sitos en. la CordjUera de fe Viuda, el
bjai unido cóii é l de Araguay recrssanten los mayores afluentes. Estadística
liístéiíca, Geográfica, Mtiastriál y Comercial da tos-pueblos «pe mspoiusn tas
pixftóndas^d! dapaiíaiüewíti de1'!)».»; l i m t 1^^11:839}.''^:^-3.’Véese:tant¡iát!
W. Turnar y José J. Bravo, “Momias sobre el río CMlda”. Ea: Boletín det Cursrp*
«le Bsgeráaa'os de Minas del Be-ó, Kf3 48. Ltrna, 1907. Pp. 1-30.
5
: La economíaagrícola ddL valle inferior; depeñde; eii grm
medida del río y ios puquios,, pues eriu^proporeíonap el agua para
las tiernas de cultivo. .'La presencia del río y los.puquios, no garantiza
el desurdió de la actividad agrícola, pues es necesaria «na adecuada
distribución del agua por iMerraedio de canales, . ' ■

1,2. VALLE IN T1K M E M O

Zona de matorrales y desierto subtropical. Esta zona produce


alimentos básicos similares a los del valle inferior, pero posee menos
tierras aptas para la actividad agrícola. ;S h embargo, es posible que
fuese la zona más importante del valle de Carabayilo, puesto que
producá la altamente valorizada hoja de coca, la cual fue utilizada
como medicina y estimulante para aliviar la fiebre, la fatiga, el dolor
y el hambre, así como para rituales y diversos propósitos sociales. La
productividad del valle intermedio también dependía de la afluencia
del caudal del río y su correcta distribución.

2.1. VALLE ALTO

, Valle amiba, en las, laderas, occidentales.de la puna de los


andes, encontramos una variada zona, ecológica. En ella existen
tiernas; productivas estacionales debido a, la aridez y las condiciones
climáticas muy severas.9 Aunque hay un medioárnbiente basíaiíte
diversificado, con un rango amplio- de cultivos producidos en
diferentes zonas ecológicas a distintas altitudes, la diversidad no es
tanta como en las zonas menos: elevadas., debido a Jas resfiicciones.

* 12 vaüe alto es .angosto y en.él asisten factores «pie limitan la


actividad agrícola. Entre estos factores, leñemos: í¡¡ tmguiaríciad del período de
lltnriaí (diciembre-mareo). til s&andoao ¿«.pamelas areolas para barbecho, los
períodos de sequías (mayo «setiembre), ía costumbre de iKoaocultivos, etc. Para
mayor «ferrada véase los trabajos de Ófivwr' rioiiñis, Üt osjiatl© geogyáñco.
Barcelona, W91.% y .TorrStsMdos Í ouUm ^ Reto, y jn-moria.. Lima, .tí?911>- Esta
altor desarrolla 'una ciará, distmeién entre 1fi*;óés|^s.clám eos f las 3smifóei.'>nés
natwalos. Pfi.,:í.07-n5.;

6
Tom Düldjay íJ?&7

VALLES BEL RÍO CHILLÓN: BAJO, MEDIO Y ALTO


climáticas y de suelos. Los grupos humanos residentes en esta zona
complementa» su economía con la crianza de llamas y alpacas.

2, RECURSOS ALIM ENTICIOS '

En d extenso valle de! río Chillón se desarrollaba una-jaran


variedad de recursos tvaterak-s, algunos en forma silvestre, otros por
el contrario, tuvieron que ser domesticados por el hombre.

El siguiente cuadro resume ios productos vegetales, animales


y marinos más utilizados en el valle del río Chillón:10

Hl Para traer una itfea más com^aCa cíe los productos consumidos
en el mundo fflid&io, véaos a Sos trabajos de E. Y&covleflf y F_ Herrera, #,rEl Mundo
Vegetal th los Antiguos Peruanos”, En: Revista stdMus&o NatioaaaL Tomo E l Pp
' 241-322,' Imgt, 1934* y Torno IV. Pp. 31-102"(Gondusióa); lima, 1935; Augusto
■Wefeerhauer, ":Cl¡rns. y vegetación m Eos .Andes del Peni y en su territorio costeño51.
'Esa Revistará* CSesraiaSv 4435. Lima* 19*14*. y..Hans .Horjkhewwr,.Alr<wrla<:i&ra y.
áfrtwadósi «dte«iSnunió; m el Perú P^uspásúco. lima, 19'73í fí960|.

7
vegetales ÁIT1MAL.ES híAEINOS
Pacay- Palomas : Focas ••;/
C&oIoqUB Llama Lobos
Tara; Alpaca Choros
Algarroba 0 HBaxt'ango Huanaco Concha da Abanico
j'llgOCÍÓU Pato- Almejas
MoJIe Vizcacha Peces en general '
Trdw'iSifoistsa Venado
Venei?tósite Perro •
Espadaña , Cuy
:JutfcoN.k>
Cola de Caballo
Grama
AmancaeS' ./
Gisava
Calabaza
Maíz :
Zapallo
Paitar
Fríjol
Maní
Camote
Yuta
Achira
Papa
Oca
Yaco®.
Ciruelo de FiaslB
Lúcuma
Paite
Charapillo
Coca

X'uBitte; tíark N. C0I3&31, La Agricultura y la prestó» tiesROgráScs:


mi paradi-i^sva arqueológico ea la eo¡tó 'Sel Peris. Lima, 19S1; y
Santiago Aottmes, X^iSfairidón en si Perú Awíipío. Lima, 1983,

ECONOMIA COSTEÑA

No vamos a explayamos sobre k orgañizíición de k


economía costeña en tienposr .prel'sispánicosy pu.es ésta ha sido ya
iávéí-rtígádá por varios: estudiaos, en- especial; por Lanning*
Monseley, Füng» ’ R c tó ^ ó r ú ^ d ,;:''Bi!léHáy,' entré otros. 'Nosotros
solamente nos abocaremos a explicar algunas características
generales que estos autores ya- han analizado,

Lamimg, Fi.mg y RogtworoTrafei consideran que k costa no


precisaba de la sierra en el aspecto alimenticio. En este sentido,
afirma Dülehay, los yungas eran autosuficientes. Para poder
entenderlo mejor, es necesario comprender que los llanos,, a pesar de
sus dilatados desiertos» contaban con una gran variedad de recursos
naturales, .en.donde el .mar jugó un papel importante en el desarrollo
de h s distintas culturas costeñas. Más aún, si se tiene en cuenta
que dicha actividad requería de poca labor.

A. medida que pasaba el tiempo, el poblador costeño ida


creando nuevas formas de desarrollo productivo. Así, con los
sistemas de imgación se incrementó la agricultura y se volvió fértiles
los valles.í2 Se desarrolló e intensificó el cultivo de las plantas»
debido quizá a nuevos aportes culturales del interior del país, Pero
no todos Jos pescadores se volvieron agricultores, m todos los
agricultores pescadores. Muchos debieron conservar su misma
actividad; otros por el contrario las compartirían.

31 Al respecto existen dos hipótesis: La puntera denominad»


ríMarítsaa”, en la que se afittna que el mar fue la ñaElite que brindó im penxtó&ente
y abundante alimento; que hizo posible el desarrollo de distintas:. sotáadades
complejas surgidas dumte el Procerámico Tardío y e n épocas posteriores (Lanasng
[l% é], Monsdey [1975-1978], Eeldman (1980] y QuSter [19813). La segunda
denominada. “Térnstr*”, la que aduce qui! los recursos a3im.entkios obtenidos del
finar eran eventuales, escasos e iíisitfkiststeMSñte nutritivos para sustentar a diversas
poblaciones costeras (Parrón [1970], Osbora [1977], V/ilson [19$?.] y Kayxnond
11982}). Vbí Quiker/Je¡ffrey/Stcc:ker/Terry, “La& economías da subsistencia y los
orígenes de las sociedades andinas complejas”. En : .Botatóa do Lima, ND4i5, año 8,
julio. Lima, 198o, 1% su parte, Directo Bonavia propone un usa complementario de
Sos productos marinos y teiiestíes, situación que ha caracterizado la economía de las
sociedades costeras a lo largo de los tiempos prehisp&oícos.. Pean», HomSir* o
Historia. Lima, 1991.

u El desarrollo progresivo do los sistemas do irrigación individual


(en un sólo vaífe) y los sistemas de irrigación múltiplos (entre varios valles),
posibilitó el desarrollo de extensos,sistemas ds árígacióa, lo que pemátió. finalmente
crear una diversidad de zonas ecológicas en los valles a distancias muy ceresinas.

9
A diferencia de oíros trabajadores, ios pescadores yungas
contaban con un tiempo libre para dedicarse a diversas tareas, tales
como ia extracción de/ sal, preparación de chicha y comida,
elaboración de telas y tejidos, etc. Asimismo, se dedicaron a la
elaboración de artículos suntuarios destinados a aumentar el boato y
magnificencia de los sacerdotes y dioses.

Una de las cmisecuencias de este tipo de economía fue la-


necesidad -de trocar la producción. No se tienen datos exactos que.
precisen el volumen, frecuencia y condiciones m que; se
desarrolló esta actividad comercial. Sólo se conocen datos que
corresponden a los mercaderes chinchanos1'* ocupados del trueque a
larga distancia.14

1'! Al respecto ver los trabajos cís Mam Rotworeéwslá,


"Mercaderes: M vslle de Cítauba « fe época preiñspánica: Un documento y unos
comentarios”. En: Revísta «pagóla-de Aafcropolepa A a o t e a , Vol .5. Madrid,
1970. pp. 135-17S; y “Pescadores, .artesanos y mercaderes costeños en el Peré
preíiispánico”. E á Revísta del'Museo Katíonai Tomo'XLÍ Lima, 1975/
Algunas refiexiones acerca del t érmino "Meratdei” seta esbozados, por-
Susan E Ramírez, “ün mercader-, es no pescador: reflexiones sobre las refeciones
económicas y los múltiples rolas de los indios americanos en «i Peri» dél siglo XVF.
En: ArgneeiogM, ArobropelogiaeHisteria ríelos Andes.lima, 1991. Pp. 729-735.
Por su parte, la arqueóloga Ruth Shady (19SS).régBtrá en *i Lssicoa cls Doiiiijigo de
Santo Tomás, algunas palabras del quechua costmo referidos a fepráctica comercial:
Cata o Catneona: “Mercado o feria"
Cata Caiuayoc: “Mercader"
RanéStd o Catemm; “Morcar”
K a titc x “Mercado, cosa patíí. vender"
Rancflc o Ranac “H que compran vende” ■■

” 'Desde el puntó de vista arqueológico, la presencia en isa cosías


pananas da un molusco bivalvo como os el-Sp«ndy'tas Mneaps cuyo- hábitat
«armo es de aguas cálidas y a uaa profundidad de 35 meteos (zona comprendida
entre .Baja C-afifomia y á Ecuador)'apoya el planteamiento del comercio entro
rejones distantes.
Entre las evidencias arqueológicas halladas en fe isla La Plata (Ecuador)
tenemos ia presencia de cerámica procedente de LambayBí|ue, Chimó y Cuzco,
mezclado con los estilos manteóos y fmanczveiicanos. Debido a las innumerables
evidencias ubsea-das-ea la. isla -Ea<SbUai;-h»xét-ta^Mía:-:«pie' la «la lúe \m centro de
procesamiento y;r¿dfetritoición.r-Cltia.evidenm seria atino-4* las llamadasfcacte
monedas que-sellan reportado-tanto en fe costa ecuatoriana como peruana
10
Por otro lado, Alfredo Tem o (1984) plantea que si quechua se había ya
difundido antes de la llegada da la cultora inca; esta difiisión se babíía realizado por
el intercambio comercial entre los mercaderes chínchanos; de allí que su lengua el
(juectaa dritactoy s® extendiera por «1 mundo m dho como «boma de relación
desde los primeros agios ás ese snifomo.
S eminario os historia
m n & i Á n m m - .u n m sm .-

C A P IT U L O I I
El valle' de CahtbaySlo presetó» importantes vestigios
mpiealdgicos de distintas;' cutaras'pnshispánicas, que van desde Jos
14.0'Ofí años a.Cy-iwsi». fa llej^d.» efe!. Tshuantinsuyo en las décadas
deírtiglo XV,r Lá coiisérvaciótt de los restos astpieológicos «ubicados
deíítro del'^dislrito <fe Comas- es de vital importancia, pwés éstos
constituyen'un rico;patrimonio cultural y un elemento esencial de la
memoria histórica. Es alrededor de ellos que podemos fundar el
recuerdo y arraigar k conciencia colectiva de los actuales pobladores
del distrito.

El esquema cronológico irtiEzado en el presente capitulo está


basado en las propuestas arquadógiess de liowe y Laniiing:
Colonia.............................. 1.534 d.C.
Horiaonte Tandio............... 1,440 d. C.
Mersacdio Tardió............. . 900 d. C.
Horrante Medio.................. SCOá. C.
Intermedio Temprano.......... 2Q0 a C.
Horizonte Temprano........... 900 a. C.
Inicial / Precaráimca (VI).... 1400 a. C.
(V ).-................ « 0 0 a. C.
( 5 ) ......... <5.000 a C.
0 3 5 —.................... ..... ....... S.000 a. C.
01) ............................_ 9.200 a a
© ........................ - ............11.000 a. C.

Un resumen da las cronologías -tanto de autores narionafes como


átaacio aak s- ía encontramos en el capitulo 1 tí® ía parte I de la tesis do
licenciatura titulada Lima BrAfefánic® de la autropóloga Gabriela González
Carbajat, presentada en 3a Universidad'de San Marcos «x 1997 y publicada pos- d
Seminario de Historia Rural Andina en 1998,

rt'V'- fe'' '■ 14


I. O CU PA C IO N ES. HUMANAS EN EL VALLE DI
CARABAYLLO ' ‘

El valle"dé Carabaylio reunió todas las condiciones -para eí


■desarrollo de distintas ocupaciones huüianast que; van desde
Chivateros en la época Lítics, hasta la llegada dd Taksantinsuyo en
el Horizonte Tardío.2

I. LA ETAPA LÍTfCA '(11.«0B-- 2.400 a .Q A

1.1. HOM BRE DE CHIVATEEOS I - II

Los iostrumentos lítíóos más antiguos de la costa han sido


hallados al norte de Lima, en el pequeño valle de Carabaylio, cerca
de la desembocadura del río ChsHón. Se irata de un taller líiico en las
faldas fiel cetro “Cucaracha’5, en donde ss encueatthan-miles de piezas
elaboradas en piedra cuarcita de grano fejovv La arqueóloga Rosa
Fürig denomina a estos vestigios con» ^proformus" o formas no
acabadas.3 Miles de estas piezas han sido abandonadas" por
distintas razones: se quebraron durante el-proceso de elaboración, no
alcanzaran su forma ideal y quizás otros, porque no pudieron ser
llevados a otro sitio para s« cojnpfeto acaba.do.

* - Las principales condiciones pasa el desarrollo de distintas


ocupaciones humanas en diversas épocas son: «5 agua proporcionada por los ríos), la
variedad de alimentos (incluyendo los productos obtenidos da las lomas), la cercanía
díi distintos pisos ecológicos y el acceso a la red de intercambio comercial, éntre
otras.

Sosa Fuág, “B! Taller .Utico de Chávatelos, Valí® del Ctíllón”.


E n : t e í s t a ásl Mase» NadomOl Tomo XKXVEL Lima, 1972. Fp. tfl-72. Véanse
trnibiéít lós' trabajos de ÍJitccib Bonavia, *Cdi¡áicferac.iosies sobre el Complejo
CMvaieros”. En: A¿que«lopá7kainMÍ,lima, 'WÍ9.Pp. óS-74; José A. Del Busto,
Fenlllíeiacaico. Lima, 19tS9.
El hombre de GúvaJteros recorrió estas zonas a Enes del.
? tesistoe eno, en donde se estaba dando la última glaciación y las
condiciones climáticas eran muy diferentes a las que actualmente
conocemos. El clima se fue haciendo considerablemente menos frió
y por lo tente en la costa comenzó a existir una fauna y flora
abundante y diferente.

La economía nómade del hombre de Chivateaos se basó en k


caza de animales y se complementó con la recolección de productos
vegetales,. En su desarrollo encontró una serie de dificultades que lo
impulsarían a la fabricación de medios (fe producción o instrumentes
Uticos de vanadas formas y funciones, para así tener un mejor acceso
a los recursos naturales del valle.

El arqueólogo E. Lamiing, descubre y clasifica ía zona en dos


grandes yacimientos o complejos: Chiveteros I y Chiveteros H.

Entre Chiveteros I y II, encontramos una posible daiación de


11.000 a 9,000 a. C , para, ti estrato m.ás antiguo. Algunos
arqueólogos discrepan con dicha antigüedad. Pero en lo que
c:encuerdan es en la diferencia que existen entre estos dos grandes
talleres. En el primer yacimiento se encuentran herramientas
bifacáaJes hechas siempre por percusión, Son instrumentes gruesos y
pesados, puntiagudos y cortantes, con rasgos lenticulares, El
segundo taller presenta rasgos similares al primero, pero se esmeran
por presentar proyectiles puntiagudos, con retoques, más efectivos
para la caza.

2. LA ETAPA:ARCAICA4 (8,000 -1.800 a. C.J;

Eí tránsito de la época Lítica a la época Arcaica, no fue un

4 Xa «taya Arcaica «s ri ecikvalenta al Neülític<> tfel viejo mrmdo


q«&- se caratíeóza por te éo-masiicación de plantas y amihalsB, ajísridóE ds¡ la
cHrátmca y icoitói'os poblados,
16
De! Busto 1966

ARTEFACTOS LÍTÍCOS DEL ESTILO CHIVATEROSX--ÍÍ


evento repentino sino un proceso gradual. No se produjo en forma
simultánea en todos los lugares, ni tuvo las mismas manifestaciones
culturales. Abarcó un largo período de por lo menos seis milenios a
iravés de los cuales los grupo humanos se distiíbisyeron por las
diferentes regiones y zonas ecológicas e imciaron una relación
simultánea culturaWnbiental que se expresó en diversos procesos
adaptatívos. Estos procesos se desenvolvieron-con cierto aislamiento
duraste el Arcaico Temprano (8,000 - 6,000 a. C.); y en menor grado
en. el Arcaico Medio (6.000 - 3.000 a. C.) ya sea en los valles de ía
costa, separados por extensos desiertos, como en la sierra,
caracterizada por su aocidísntada topograña, ríos torrentosos, o en la
más distante montaña y la llanura amazónica. El Arcaico Tardío
(3,000 - 1.800 a. €,) se caracterizó porque el ceremonialismo
formaba parte importante de las acciones colectivas, sustentado en el
mayor nivel alcanzado en la productividad económica y en la
organización social. Una de fas características de esta época, son las.
construcciones específicas para esta acti^ddad.

Producto de! desarrollo alcanzado, un conjunto de plantas y


bienes manufacturados circularon a través del área de la costa a la
selva, enlazando a sociedades que habían seguido hasta entonces un
proceso de neolitizacíón casi en aislamderuto. Este contacto e
intercambio de experiencias adaptatrvas permitió dinamitar el
proceso civilizatorio en su conjunto.

Para las zonas serranas (como por ejemplo; Juuln) los


cazadores se especializaron en la caza de cieitos animales, lo que les
penxútió desarrollas- una economía pastoril,5*

*■ 5 _Los tnvasíágadores han propuesto dos modelos da adaptación a


esta dase de ambiente: a) Uno de scrkistaiisaio, alrededor dal lago de Tucán a
4J300 trts.ü.m. Los camélidos como 'recurso natural, abunáaiste y estable, habrían
pcrmiíido la vida en campamentos base y el desplazamiento a corta distancia (Rick
3.980). Las evidencias qus sustentan este postulado fueron halladas en la coeva de
Pachamaehay. b) Oh;© de ¿m.por@Hdad» consistente en el desplazamiento
estacional en procura da los animales 4s casa, disponibles en la puna paro también
m las cuencas adyacentes (Lavaíle 1985), Las evidencias fueron halladas en la
cueva de Tebimacfeay,

rT
Las excavaciones arqueológicas realizadas ¡en la cosía, no
registran una considerable cantidad de restos óseos que prueben una
larga permanencia en h zona. .JBstos resultados nos sugieren
considerar el establecimiento de grupos humanos con una economía
senii-sedentaria o temporal

El inicio de la sedenttóa-ción costeña se deberá más bien a


la abundancia de recursos extractivos y al aporte cultural de. cliversos
grupos humanos, Es así como la economía de estos pobladores
nómades sufre ur! lento y progresivo cambio. La recolección de
frutos cede a la extracción de-mariscos y la caita es casi sustituida por
la pesca, abriéndose paso a ja horticultura. En síntesis,; el salvaje «en
opinión de Lumbreras» asciende.a la categoría de bárbaro.

.Este lento cambio da la economía significó una,


transformación en la. vida de estos primeros pobladores.. No
solamente cambiaron sus técnicas en la obtención de alimentos, sino
que también los impulsó a reorganizar su vida y sus relaciones
sociales,

lo s excedentes de producción, y los inicios de la agricultura


darán origen a una diferenciación social, , trayendo como
consecuencia el surgimiento de una edite de tipo religioso, que
regulará, las actividades de la población. Esta diferenciación se dará a
todo nivel y los vestigios arqueológicos encontrados en la zona,
darán cuenta de d!a:é
-Arquitectura ceremonial vs. arquitectura doméstica
- Funerales suntuosos vs. funerales simples
- Cerámica de ofrenda vs. cerámica doméstica

6 Algunas muestras de la arqmfcsctura ceremonia! las ubicamos en


Tantea (le los Perros". Estéis centros ceremoniáes se encuentra» construidos con
piedras rústicas y cascajo, que parecen haber .formado varias terrajas escalonadas.
Otro vestigio lo constituye el templo conocido como "Media Lima", ubicado en las
B5tiibacion.es de los cerros frente a k$ instalaciones de la P&rapijia y conformada por
tres grandes plataformas ele relleno, soportadas por "pircas" de piedra rústica.
Ambas se ubican m ta margo» derecha del río Chillón.
Del Busto 1985
d
■V
w
f

e ¿
u

Paraíso tía ál valle ¿al Chillón-, habitarlo hace más de 3.500 años; nuevos aspectos

, v .
la ciwlización de les agricultores. 4al paltas?. JEn:. Amales.. <d^ttSieo«- -d*.

.j S á á
2.2. LOS TEMPLOS EN n j "

I,os primeros en sostener que "El Paraíso" tiene forma de "U"


ib eren Laimtig (1967-1970), Willey (1971) y Williams (1980). Su
contraparte que la niega, está conformada por Scheele (1970),
Moseiey (1975) y últimamente Jorge Silva (1996 T. í-fl). Según
Silva, "B1 Paraíso" nada tiene que ver con este patrón. El edificio
excavado porEngel denominado Unidad I -que se supone es el de ios
llamados brazos II y VI- no se asocian a un cuerpo centra!, Agrega
ademas, que el cuerpo central de la ,rU1*' está fuera, de lugar y formado
por compartimientos aglutinados conectados por corredores. Estos
corredores tienen cinco a seis fases de construcción con rellenos de
los: recintos abandonados. En el centro de este conjunto aglutinado
hay un recinto cuadramgular con cuatro hoyos circulares y un área
central serni-hundida que recuerda al templo de Kotosh» diferente a la
tradición costeña. Finalmente Silva menciona, que hasta que.no se
realicen excavaciones: no se puede asegurar que las unidades II y VI
(brazos de la "U") fueron construidas al mismo tiempo, pues
ios datos son insuficientes.

Nuestra intención no es entrar en, este debate.8 Solamente


nos limitaremos a describir de forma general estos templos,
esperando que las futura,? investigaciones se encarguen de afumar o
negar el modelo y/o estilo de construcción.

V ^ o zú éM Agsaala, Yol. 5, IT» 3-4. Pp. 241-280. Lima, 19fi7; y Jorge Silva, * 0
Paraíso y los centros ceremoniales Tempranos ás ía cogía central”. En: .Arqueología
y Scdádad, revista del Museo tic Arqueología y Etnología de h Universidad da San
Marcos. EP10. lima, 1994. Pp. 1-X4.

De acuerdo a las últimas investigaciones arqueológicas, estos


templos religiosos m forma de '*UWeran en realidad educaciones que conformaban
una. red de mtercaiábiosre gioaales que se desenvolvían longitudinal y vertícálmente,
dmamísarndo ía economía de la época. Por m ¡ado, llevaban al valle medio *
mmedkcioiies del valle afeo, una enorme variedad de recursos del «dk y objetos
mntuanos. Y por otro laclo, traían diversas variedades ds maíz, papa, carne, etc.

20
Del Busto )PSó
2,3. CARACTERISTICAS GENERALES

Loa templos en nW son conjuntos arquitectónicos


monumentales orientados generalmente hacia el noreste,, dirección de
donde proviene el agua de los ríos.. Están conformados en la mayoría
de los; casos, .por totes.grupos de plalafoimas escalonadas alrededor de
un gran patio. La piatafonna central más. elevada y. dos brazos no
simétricos, más abajo, comprenden a me mi do una o varias
construcciones. El .última lado del conjunto ceremonial queda
abierto. La. plataforma central comp rende dos alas laterales .de- menor
altura que el núcleo central; en éste se encuentra el elemento
arquitectónico más importante: el atrio, cp.se a veces presenta
decoraciones de Risos polícromos en alto relieve.

Las construcciones son grandes amontonamientos de piedras


de carttó rodado, enlucidas y pintadas con colores Inertes, Los
arqueólogos que han estudiado estos templos, como por ejemplo:
Ravines, deducen que las: ceremomss religiosas llevadas a cabo,
cootespond&n a cultos relacionados con k agricultura.

'Para el valle de Lima en general, podemos encontrar diversas


constnmctones que corresponden a este período;.

VALLE BE VÁ13J& BE .'v M M ' sw l ,... •


Lin&UGÁNCííü s fe tó c "■
Chuqmtsnta Pedreros Garagay
Hmacoy £1 Sauce
Chocas Carapoy .
Huatíchipa
Bacante:IjtfC/MunieipaíBsd dn Lür,s. Catastro de Momuaftatos
Artjweolitgteas.. Lima, 1.58:5

21
3, HOm OW TE TEMPRANO9'(900 a.C. - 200 a C,)

S;- denomina como -'tal, porque se hómogeinizó cultural,


política., económica y religiosamente» un vasto territorio del antiguo
Pera,. Esta primera 'homogpneidadl -es-lograd» por la cultera Charrín
(ÁincasJa) quieaofts -supieron 'consolidar una nueva forma de sociedad
ámarétizando modelos de centros ceremoniales, estilos alfareros e
iconografía religiosa,, semejante a- sus antecedentes multiregicmales
pero qiie: en k última fase de su desarrollo se convirtieron1en las
características; Pan-andinas qué tipificaron e!-fenómeno Gliavín
' como síntesis de un pi’oceso anterior.’13

9 Las principsfes ^adiciones culturales de les Cliavín correspondí;!®


,.:a b. época del Arcaico J aráo:- .
.* Jan » p ij« c in a , k.s principales características t e ..eac«nteawios en los
relimpios Nuevo y Viejo, El T a n ^ t Nuevo, con cofcunnas'y plaza cuadrángulas-
ijnadiila, provionm de Bacogampa, Buacá da los Royas y Hrac-a Lacia El Tápate
Viejo, con su forma en “C” y j t o - «radar hundida, provienen- ¡te LasHaldas,
Sacliátt Alto, Garagay, Lsi Hfflida y Ca-rttel
* En Iconografía, las características son sumamente complejas (seres
anttopwuwrfizados, felimzados y cnKtomorfis&dos). la s aves, ¿aren sinúlferd a las
existentes en Ruaca Pítela; tes sapientes a las ¡te La Gálgáfca; las serpientes
bicéfalas a las de Asia; y él fámo aofrépémorri©•con» en Huiícá áe los Reyes e
iconografía de cerámica, de Pacopampa
* En cerámica, existen 4 grandes ocupaciones; Urabamu, Ofrendas,
Chalsimni y Rocas o Janabarau, deas» de las cuates podamos dísíiagu-ir ¡ios grandes
flsálos.. £ s i» s te c a li / ' «standes O tario:, Ofrendas, Dragoniano, Boral y
Qoíopuquio. Estilos pro-rátitelss; i « i s p e a i » C t a t a Racu. Wacheqsa, Mosna,
Puslika yF m aorq á.' -j : ,
Por su pasta, Richard' •BiaRoar' '(1993) 'San» a la época más antigua do.
Chavin como Brábaráu, la cual debió extenderse .«ñirelos a&ó's.ijiS.O. 'a. C. y 400 a. C.,,
qus corresponde a b época *a que comenzó a construirse d templo Viejo. Durante
la época Janabarrin (390 a C. y 259. a. C.) se construyó el templo Nuevo, o por lo
menos se hicieron las mayores raodificacioaas; en te estructura, originando con ello
una gran cantidad., de estructuras. .

1£> Cuando Ubfe comenzó a investigar en fesritorio peruano se


empaste a comprender que no Soda Sa cultos j«-ektepamencia incaica y que de hecho,
existían cutaras atteriores. A él te debemos las primeras definiciones de Moche y
.Masca Cifre trató . de entender. Sos. antecedentes de estes.desatoHos- y- como
¿ttciataiente no pudo M arios, planteóla hipótesis cte cjne elfos estaban vinculados
22
La p resencia de la cultura Chavín varia da acuerdo a la
distancia en c¡«e se encontraban los diversos territorios conquistados
del núcleo central:

MENOS ESCASA 0 PROLOÑGACIÓNT ,


INTENSA INTENSA OTEA 'RELACIONES
Norte y centro Costa sur del Esfeemo sur Sur de Ecuador y
del Pero Perú, hasta del P erú Colombia
lea
...... •
Fuenie: PabloMacera Historia dal Pero. Lima, 1990

coa las cutaras mexicanas. Cuando se descubrió diaria como fenómeno cutaná,
so posición quedó nidada. Sin embargo, entre las décadas del '50 y SO, Noé Pqrteí :
y Midias! Coa revivieron la posibilidad da los nexos masoámsricaños de' la ¿uKurá
pearustaa, ál tratar de demostrarte «óstencñ de contactes entre las a t e a s CÉoéca y
Chatón
Si bim&fiddeodoif liada fines de 1800. áie probablemente el primero-que
comdbió a te cultura Chanda como un extenso imperio preincaico, Mío C. Telo fiw
el primero que propuso la teoría de Chavits como una. ‘'cultora hmíjís" de te
dviliaición andina. En contra de este posición. 'Safad Larco Hoyie defendió ni 3
origen costeño dé Chatón y señalo su centró en el valle de Nspí&a: 'Wcndk® Benaett
se negaba imrialmeaÉe a acatar que el Chatón defendido por Telio y Jareo como; }
temprano fuera tal, pero posteriormente frente a las evidencias, cambio sus ideas y j
estableció que aquel formaba na hoikoute temprano pan-peraaiM. En 1967 Lanaiag
analizó el .problema y si bien no le dice claramente, se mostró partidario de! origen ¡
costeño de Chatón, sentando que éste ctótia estar era algún logar, del Perú nor-
centra! Rosa Bing también se mostró partidaria de te difusión de Chatón a partir de
la costa a base de un sistema religioso que creó en Chavin.de Huantar, e! centro de su
Uíñverso poEííco. En 1977 Liaribreras señaló claramente que Chavin debió de. nacer
«riña territorio comprendido entes la coste ;il norte <fe jUitna y la coste y sierra de
Ancash con Irrolongacionés hipotéticas en la telva central Sin embargo
posteriomtente, an 1981, su posición ya no es tan dara.' Motivado ¿dudablemente
por lás ideas sla Boaaltl LatSn:3p, qtóers propone influencias ecuatorianas. En los j
últimos años Bichar Bwgusr se ha dadsesdo e estudiar el fenómeno Chatón y ha
-hecho aportes novedosos que aclaran el panorama. Sus investigaciones tienden a j
demostrar que sí estimulo se origina en la costa y adquiere su-madures en las tierras S
alias. El recuento acerca rk los avances de investigación arqueológica respecto a la . ¡
cultura Chatón ha sido toimdo de BucdoBoaavís^Eerá, Honabiró « iSstoaia. lima, 1
1991 Pp. 189-19?. {
4. INTERMEDIO TEMPRANO <260 a.-,C. - SCO d C )

Muchos consideran que el inicio del período del -Intermedio


Temprano comienza con la, desaparición de Sa influencia Chavím.
Pero Chavín no desaparece del todo ni de repente. Un número
considerable de sus elementos permanece en algunas culturas. Otras,
las complementan o adaptan a í e s exigencias de una nueva sociedad.
El desarrollo regional de las culturas lócales, se. debió sobre todo, a
que la estructura de gobierno sacerdotal no era ya suficiente para
administrar a sociedades cada vez más grandes y complejas. De esta
manera, las culturas regionales van a desarrollarse autónomamente, al
no existir una gran cultura o sociedad que controlé ó limite su
progreso.

Aunque no se saben exactamente los motivos de la caída de


la editora C&avih, si es evidente el surgimiento dé nuevos pueblos
con sus respectivos jefes capaces de independizarse y/OTgámzarse
individualmente para dkiemñnar su propia cultura, costumbre,
política, economía, etc,, sin dejar por ello de interreíacionarse con los
otros pueblos igualmente independientes. Entre estas culturas
regionales tenemos: Nazca, Mochíca, Recuay, Lima, Cajamarca,
Viré, Líi.mba.yeque, Huarpa, etc. En nuestro caso, nos interesa revisar
la cultura Lima, por ser la cultura que abarcó nuestra área de estudio.

41. LA CULTORA LIMA ,

La cultura Lima, floreció en el valle del Rímac entre los


siglos IH y IX de nuestra era, llegando a extenderse hasta Chancsy
por el norte y Lurín por el sur.13*15 Fue eminentemente religiosa y muy
ligadaalm ar.
La característica principal de esta cultura es la arquitectura

13 Para el arqueólogo Alberto Bueno, la cutara Lima se originó ea


el valle del do Jjatn. Las prunas detal aseveradla radie' r a f a mayor antigüedad
de los adobas halados en esta regida, en comparación a sus similares encontrados en
el valle é?l río Kimac,

24
monumental que ofrecían sus pirámides irregulares,, escalonadas y
tancas, desde cuya cima se divisaba el litoral marino, la
construcción más representativa, actualmente en mal estado de
conservación, es-el camplejo"Maránga-Limá",12 ubicado entre los
distritos del Callao,, Breña, San Miguel y el Cercado ele Lima.

liste santuario fue construido con. pequeños adobes


hechos a mano. Se cree que los adobes fueron elaborados por
menores de edad. La prueba principal presentada para tal
aseveración, son las innumerables huellas encontradas en los
pequeños adobes.

Durante asta época-en d. valle d e ' Carabayllo sobresale k


construcción del cerro "Culebra", situada en las faldas del coito del
mismo nombre, en la margen derecha del río Chillón. Se trata de un
edificio da planta trapezoidal compuesta, de grandes paredes o
tapiales. Se puede dividir el sitio en recintos mayores o canchones y
recintos menores que conforman la paite central del edificio.. Ls
ascensión se logra por .medio de una escalera central.13

Para el arquitecto Santiago Agurto, en este templo se


.realizaban ceremonias rituales de adoración al pe?: y por intermedio
de él se rindió culto al -mar. Recuerda, además, que hace algunos
años en dicha coostroccaótt existía un mural de «{taimadamente ¿5
metros de largo que representaba un conjunto de peces y serpientes
entrelazadas, pintadas, de color amarillo, negro, blanco, marrón,
púrpura, naranja y dos tonos de rojo; en un estilo similar al templo de3

3“ Esté complejo' arqraológico & sido objeto de mía sistemática


desrtracáón por parís de Sos diferentes gobiernos dé tamo (construcción de fe Av.
Venezuela, el Hospital Naval, Estadio de la Universidad de San Marcos y
autorizaciones para sd estafclachnieato de diversas urbanizaciones y pueblos jóvenes)
y-do los; pobladores ubicados a los ¡alrededores (arrojo y (trama de basara y
constatación de paredes do-adobes cok ios misinos adobes dei complejo Maranga-
Lima).
Rácelo Bonávia, ob. «t. Pp. 281.

25
"Playa Grande".í4

También destaca durante esta época los restos arqueológicos


ubicados en cerro Pro, en la margen izquierda del río Chillón, en
cuya cúspide existe un recinto encerrado por un muro de piedra, que
en su centro existe «na plataforma circular de casi 20 metros de
diámetro. El conjunto constituyó, por lo visto, un asentamiento
defensivo.15

5. HORIZONTE MEDIO (508 & C - 900 d. C.) . . .

Wari, al igual que la cultura Chavín. es una síntesis, de!


conocimiento de diversas cultoras andinas.1S En su clesasTollq fue

"M Para mayor raforaiación respecto si templo.‘Tíayá.-Grande”.


Véanse los trabajos de lijo s Stumer y Ernesto Tabio, "Playa Grande”; Prinutive
Megaoce ín Pr«-Tiahuana.co Perft*. En: Artisaeology, N®6. lima, 195:1 Pp. 42-48;
y *1Kscavac¿oaes en Haya Grande, costa central utó Pe»*”. Ere Á?^eol.ójpcas.. Vol
I, N® 1, revista dct Museo Nadcoal de Antropología y .Arqueología. lana, 19S7,
respeclivameate.' •

u Alpaios teneos con la mñaencía'de la adiara'Lana, son:


- Gm.pirámkSe ceremonialde Maranga
- Estaca de los Tres Palos.
- Estaca de Mateo Safad»-
Hosca de la Luz
-Estaca de'Vista Alegre
- HnaeaPndíana o Miaña
- Hoaflanítsarca o San Isidro
-Huacadelinee o Sarco, (desparecida)
- Amiatsmbu o Amiaíarabo
- Santuario de C&ancay.

',Ci Cuando Ülile excavó en Pachacámac, se dio cuenta que los


materiales que estaba encontrando tensa alguna vinculación con Tiabuasoaco, pero no
ík gó Sí entender los recádanos de esta relación. Fue percibid® más claramente m
k década «te! '20 por Krceber, Strong y O'Neale, que forzaron. el concepto tSe
horizonte Tiahaaaaco,. poro entenditlo más ea tórnotnos estilísticos que cronológicos.
En a! año 1530 TeBo, con la colaboración ds O'Nerfe trabajó en Htssri en. la$
cercanías tic Áyacueho. Se dio cuenta de la importancia del conjunto snonumental y

26
adquiriendo elementos que le eran útiles y afines, Por ejemplo de la
cultora Pachacamac-Lima respetó y adquiere un nuevo Dios:
Paehacámac.

En el estudio de la cultera Wari, se lian presentado una serie


de irterogantes que han tenido respuestas diferentes:
- ¿Fue o no un imperio?
- ¿Cuáles son sus orígenes?
- ¿Cuáles los estilos de su cerámica?'
- ¿Cuáles son sus fases de desarrollo?
- ¿Cuáles son sus fronteras de dominio?
- ¿Cuál es is razón o razones de su desaparición?

Nuestra intención y tema de ÉEvestigación, no nos permiten


explayamos ai respecto: A su tiempo ya lo hicieron arqueólogos
como Rafael Lsrco Hoyle (descubridor de Wari), Guillermo
fjuuhrents, Doroty Menael, Federico Kaijffmaun, A. Enrique
González Catre, Jorge Silva, Ruth Sh&dy, entra (Jiros. En. este
sentido describiremos tan solo las estrategias y acciones realizadas
■por las to p a s guerreras Wari, en su avance bacía las zonas costeñas.

Paira conquistar pueblos o comunidades, los guerreros Wari


planificaban una serie de expediciones a distintas latitudes. Para

estaba xorweaáílo de que'halda sido un centro de difusión ■cultural. Ea 194$ fas


observaciones de Rowe,. Gofiier y Wiíiey jfavaroa z dar mayor importancia a Huari,
pero sobre todo se estableció que, si biso e n «farto que existía «na influencia de
'Tiabuanaeo es el área ayacudiaaa, ai srásmo -iíeoi|>óvla8irela£á>nes con Nasca eran
muy inertes. Par* es en realidad Larco Hoyie quien a fines de-la década de! ’40
indicó que la adtura' que se difundió a ravefpan-an&LO no « a T-aboanaco sino e!
Eaari ayaciídiaxio.
Sobre esta base, en. fat década del '50 fiambreras y Manad iniciaros
estudios separados para aclarar la «taacióG: -Lumbreras-- centré su áiíarés sa el
n au n a de ios materiales recogidos pra T d o en ífeari e f e o isa análisis de ia
secuencia regional de Ayacocho. -Mientras que Menzeb ea m estudio más amplio,
no solo definió a H skei y a'los estiba contemporáneos, sino que- estableció una
M O fa á cronológica del'áesardtto de esta adtura y analizólas relaciones que ésta
pudo haber tenido con Ifefauanaco. Dueño Boaaria, ob.' efe. Pp, 330,

27
nuestro caso, urna expedición 'hacia eü.sur. derrotó a los -hombres de la
vieja cuitara Nascs, Triunfadores proseguirán remontando k casta a
través de lea, Chincha y Cañete, alcanzando al santuario de
Pachacámac, al cual respetarán. Llegan al valle de Lima e invaden
Ancón, Chancay, Supe, Casma, llegando hasta la sierra de
Cajamwca.,/ En cada uno de estos jugares .construyeron centros
urbanos,18 fortificaciones, caminos/* puentes, etc., elementos
indispensables para un adecuado. control de los territorios
conquistados. Una vez establecidos, obligaban a los hombres
sojuzgados a rendir cuito ai Dios de !a Portada del Sol. Este ser
mitológico es relacionado con Ja producción, cosecha, lluvias, etc.
Quizás por ello, llego, a tener una buena aceptación en el antiguo.
Paró, La construcción más representativa de los Wari en el valle de
Lima es "Cajamarquilla''. Esta cindadela se encuentra ubicada a la
altura del kilómetro 15 de la Carretera Central, sobre la margen
derecha de! río Rimac. Su tfesímceión -según V ilkr Córdoba- fue
producto de los constantes huaycos que caían en la zona.

El patrón de constracción Wari, constaba de recintos


cuadrangulares o habitaciones organizadas alrededor de un patio
central, cancha, o corral; qpje es característica del modelo , de
construcción de ios Andes. Los restos, arqueológicos más
importantes del valle de Carabaylio, durante esta época, son;
Huarabí, Macas y Socos/1,1

1! GtBÜBmio lairfawas, VuJín ar^M léjjte» dd P « 5 m amarte.


Lima, lS90.Pp.20S.

18 .La arqustóiéga Ruáx Shady. plantea qus estes c«*tros. rateaos-


eran..centres de jH-odumón,'altnaceaaaBeat» y .cianarciaíizactóa' de preífactos
majrfartnrados. Además d# una posible prestacióa de servicios.

1S’ Cabe señalar que varias da k s redes viales construidas duraste la


época Wari feeroot reutüizadas durante la época toca.

^ Para mayor iaformacióst véanse los trabajos de Jorge Silva,


H nhbánic S tt t e w r i M e n s lo Uto ( M m B iw r VáBty, í « 4 üriversity' of.
Michigan, 1.996; Hermana Tritaboxi», “Las ruinas ds Macas en ai valle de CMIÍon,
Lima”. Ea: Resista i d Mosto de la Naden, Tome XXXVI Lima 1969-70; y
Elizabsth Isla y Daniel Ckissrero, “Socos: «r sitio Wari sn el valle riel Cliilife”, Esc
28
6. IN T E R M E D IO T ARDÍO (900 d. C. - 1.420 d. C ,) -

Luego de mudaos siglos de esplendor los Wari decaen. Los


arqueólogos no hast logrado ponerse da acuerdo para establecer las
causas de esta. caída.23 Algunos plantean:
- La invasión de los Yaros
- Crisis económicas producto de cambios climáticos
- Movimientos de resistencia de las sociedades sometidas
- División de la clase dirigente Watt, ele.

Sea cual fuere Sa causa de k caída de los Wari, las


naciones serranas y costeñas sojuzgadas, encontraron un camino'piara
lograr su emancipación e iniciar un renacimiento regional. La
influencia de ios Wari, &1 igual que la de Ch&vínu permanecerá largo
tiempo -en la sociedad de! antiguo Perú.
El Intermedio Tardío se caracterizará al principio poe" un

se encuRtítraa abandonadosy m oalento y penoso procese fe deterioro aateral- que


es ve acelerado por la desteaccióR del mismo hembra. Este descuido, sí es lo quiere
llenar de algaaa mane», tíme como responsables no sólo a las diversas autoridades
e instituciones encargadas de velar por el Paterna®»» Histórico- de la Nación, sino
- tambiénpor la irmspoussdúlidad de los mismos vednos de los alrededores y ¡algunos
otros que - en el colmo de- la desidia habitan eq.ias mismas .ruinas,--Estos
.desantendidos pobladoras, actuando como "extranjeros". en su jH'opis: tierra,
d esta p a estos impoxtaHtes y órneos restes arqueológicos.
En coinTsrsaciojsss sostuvimos con algunos profesoras y pobladores
aledaños alar; zonas arqueológicas, escuchamos la siguiente inquietud: "Quizás Sos
restos arqueológicos da la sosia ai no poseer las suntuosidades del señor de Sipón,
Nascas o Cbindts, no son objeto fe xsaa tarea fe conservación*. Pueda que 'tengan
razón o no, pero lo cierto es que hasta la fecha, nadie hace nada pata conservados.
Coa su fesaparioóano sólo se perdona parte dela identidad deí poblador "coineño",
Kilo también Síi posibilidad de reálfear estofes:'orientados a reconstruir b historia de!
distrito.

Diversos investigadores han estudiado diferentes tópicos


referentes a la cultura Wari,-paro baa dascattlado #1 tipo fe organización que ios
Wari desarrollarán. Ello quizás sea uno de los principales impédiroeníos para poder
eaplkarlas causas de su caída.

29
desorden en el mundo andino a. causa de la caída de la cultura Wari y
la recomposición de todos los. grupos locales. Los valles de Chillón,
Rírnac y Xairín tío,.estarán ajenos a estos cambios. 'Estas zonas
soportarán una-serie de invasiones de grupos que. se yen. restablecer
en su mayoría en las paites altas de la.sierra de.Lima.- Giros, por el
contrario, bajarían siguiendo el- curso.-: d©:, los. ríos hasta la costa.
Estos grupos,. -seguidores-, dé' los-, míticos - personajes Pariacaca. y
Tutayquire, van a poblar casi todo el valle, de Lima, desde Cañete por
el sur, Yauyos yHuarochirí por el- centro,; hasta- Canta por el norte.

Bajo este período el valle de Lima se dividió en dos grandes


señoríos que a su vea incluían a-diversos curacazgos. La pacte norte
se encontrará dominada: por -el Señorío,de Collic o Coilíque, que
.abarcará gran parte-del. valle de Carabayllo.. La zona-centro'-y; sur,
estaba.' gobernado- por; el Señorío i de Ichma, con .su-..- capital
Pacbacámac, templo -famoso en el Antiguo. Pero ppríéncottts'arse allí
el santuario del poderoso Dios-Pacfaacáinac, Señor de los temblores y
hacedor de! universo/''1

6.1. ' EL' SEÑORÍO DE CO LLIC 25'

E l; Señorío .de CoIl.ic:■o ColHque fue uno de los más


importantes de -la zona norte de Lima, Su extensión abarcaba parte
de los actuales distritos de Comas y Carabayllo, de allí "'nuestro
interés por estudiarla. '*

K Según ; <3aialazo, Padhacamac ss na sombre compuesto:


“P ítto ’ qu« sigoifica, mundo y “Caaac* que sígaifics animar., Per., otro lado,
según el. dkrionarw quecima da GoasMes Holguír», la -palabra “Pacto” áeae ana
toimotadós cía tiempo y lugar (limeaaz B«ja 1SS5).

** Les- áicekinarios quechuay aymara de González HoJgoín, Cenié»


PaSomiao, Tonos,Kubio y. Santo Tomas, señalan qjie la palabra *$¡nlñ to a r * , es da
origen aymara y significa gañía í!e¡ misdio brío y ,í.sf»«rzo en el trabajo; áligs ate e
incmsabi-e; gante ágil, viré y eficaz; gsrBtB trabajadora, indomable y rebelde.

3e
A. UBICACIÓN

El centro político -religioso de Collíe o Collique se hallaba en


la parte baja del valle de CarabayHo, habiéndose conservado hasta
nuestros días solamente el complejo amurallado ubicado sobre un
cerro que se levanta justo al norte del Hospital Sergio Heñíales de
Collique., Sin embargo, gracias a la mformadón obtenida por la
historiadora María Rostworo'wski, sabemos que este asentamiento se
extendió unos 1.000 metros aproximadamente al oeste desde la base
de la Fortaleza'de Collique. Por otra parte, se han identificado restos
de paredones que sirvieron para, circundar la zona de dominio.

Sus límites por el oeste y sudoeste seriar} fas huacas Zancudo


(hoy destosidas) y Sos promontorios de Álpacofo y Comicay en la
antigua hacienda de Chacra. Cerro. Otro punto que sirvió para
delimitar su parte sur fue un grupo de huacas' en lo que antes fue la
hacienda de Collique Alto. Áctualmentja la zxm.á está destruida por
las urbanizaciones situadas ai frente de la fortaleza, quedando
solamente algunas 'construcciones fragmentadas, sobre todo al
costado de la avenida- Túpae Amaro y frente ai Iiospréa! Sergio
Bernales de Collique.

• Este asentamiento contaba con dos puquios -y acequias que.


pennitieron a los Coiiic o Collique, irrigar sus campos agrícola.!; y a
su vez soportar ataques prolongados por parte- de ios Cantas y
Chachas, sus eternos enemigos. '

B. D ESCRIPCIÓ N D E LA • FORTALEZA DE LOS


C p L L IC .

Los arqueólogos Dame! Morales, Gladys Ramos, Hugo


Ludeña, Inés. Correa e Isaac: Pérez, han realizado una serie de
proyectos y estudios para tratar de recuperar la fortaleza de Coilique.
En un inicio tuvieron. el -apoyo de la Municipalidad de. Comas, pero
posteriormente tuvieron que proseguir sus investigaciones con dinero
propio. Estas y otras causas- han conllevado a que la fortaleza de
Collique se encuentre en un estado deplorable, a pesar de ser
considerada como una de las construcciones más representativas de la
zona norte de lima..

ro
cv
Posteriormente Hoddhsimer combinará el avance de las
urbanizaciones populares que destruyen poco a. poco la fortificad óri
de Collíque:
'■IteeMeaa sobro u» p « a fe üait sessto íspM « a
base de ¡plasteas bo labradas rafee
«ÍS S TÍSiftlte. A SU IK-tfe V®rÍtffS áopési&M á<6 :
pe^ieSas piezas jaam las ta lla s - Ba Ha «tmbys
paveifeiinss,, !E:ia'3a ^láurada al ras-del se
<o&s«rtm píaa*latas' similares a las «pae fkas&MSt
grt»t» «a et'cQíiagÉfc&jo’ á te te rasar® áe Hasca.
Oteas itabo m quebradas vecinas, paro Su^am
tSesfesMas por asbauMatímes y ©tras
««badenes Htedenaas. Breate a CoIS^áe, al otero',
lado '«Je Ba «nrreícara, smwatórales « M e s o »
restos de o»ras4rjoctíi.oit*s prdfeáffn^ilicíKs”.26

Una. de las descripciones más detalladas de la fortaleza de


edifique ba sido realizada por el arqueólogo sanmarquín» Daniel
Morales, quien "después de realizar ub exhaustivo Irabajo ele
excavación" ha identificado las zonas defensivas, de
almacenamente), de producción^ de ceremonias,- de viviendas, etc.
Creemos que está descripción debe ser reproducida textualmente para
mía mayor comprensión:
".JEa gram i s* feraía. dte mtá'cterfíañ' foiiÉscsiá»
í a s W e w to a d a y ¡¡SMákta >2» úá I®
¡dgjalimfe maraca:
síl SECTOR KEFENSXVO:

Cosopreade m ¡para. rarariSa át?; cteamrédeááte


¿ius sor ra lado sur qué; es mis .yutau^k, se*3

extessos k interesantes dssaipciones del Perú, Míkteaáoíf señala sigums


pseds iones de todo lo que se requería para empreiulat as viaje a k> largo de la. costa
(finias vigorosas, m acompañante experimentado, arcas, catees"de caiapaña, etc.).

**. fíaos Horídisimer, ^Identificación'y bMiógráfia íh «apartantes


bríos prel)Í3páaicos dd Pera”. En: Arqiteteló^cas, W 8. Museo Nacional de
Antropología y Arqueología. Lana, 1955. Pp.51.

33
biftaca Comando tees m úralas m iz fempiEleu m
acceso; M> m uyala t í a » yantas puestos
esteatAgiUcas de centeoi, donde se puede
«sucojuírair wjmuladosses de -cantos rucados {joe
tetero:» proyectiles que s* lo c a b a n <oom hondas;
te mayor acaxra&fedén se eacotónba m la
corahre áe! cerro,. al costado de Ja prm dpaí
resláendta. ád Cells-cajia . La kmgítüá ie te
muraSte pttü'édca. .«s de iS S ü meteos c m
«safe© ' tu e c a s m . cada. too.; dé-..los. pantos'
císjrdmsS.üs, la s&$mdis. mw&lM adosada'a te
pdm&ra m íñe 715 radios..y ffeníi ixm accesos..y
feafeaetóe, te torcera rampsEa separa e|. sector,
residencial y Ja , pfeM m m a ■.p m d j M ...de. te
amújs'm íM w ® -M sector ¡bajo que agteitea J-ta.
mayos- poblad f o t .

te SECTOR BE
AI*MA.C3ENAaGENTO:
Comprendo a » o&njaato s«aoii»may aislado coa
maros áe ji« & a m M , ©aspando un área de
25® meteos cuadrados, m te o n i hay seis
granáffi coicas de forma 'd n x h r -de piedra.
caateidiL E s te JSinapteff». de uste' de efeta so.has.
recuperarte- semOfes ae Iñauaa» paO»*.,
ñutid* calabaxa, aSgadé» y pas^y;, hay asís
sopando ©esapl^l© de almfS^>.Kiad«adta>' «wii&iró
de mate eti te paste alte, lado asroasf» deB’rehró;
son «stracteuras '. po^iéñas ’ ■de :' '-• fesms;
c m d r a f d a r adosadas "al berro. ; Otro'' pés8»&
c o o q il^ «o» estes fumie®í:$ '«$ •' trií'r.':¿ate
gectangiflar form ada por ^ « d s & i s á M a ;
cu ad m ig u lm s dispuestas m ñm 95a¿ páráisSás
do oda© re datos caite, siria.

c 'SOECTOSt PÚBLICO- - '' ‘ c


C£XU¡MOKXAL:

Lomad® ;p<ur ram gran pteá''c«adral t?m JL573


metros cuadrados,uM caáíi ¡áB:'ráiá ÍMotíodada '
ñateara!, d scondádá' d « ' rararos 'p 'é to ító w s ' y
graderías, fe m a n d o »»» -esped© ás¡ axtffiteate©
atósücb; « .f e p a r te stspedor «le lap laza íwty nn
« w p iá » de recintos recteaguteres -de b t ó .
acabad© q m forana» d sector ateifeistratfee;
34
■ VV

U7
.

nI I¡g

O
n a.

O rja
O*

& | I

8.

tn ¿4
° fh O

w-1

Z-+
O

*<mxm yp ssfeúp»» *piip9 t^nuS ‘sofrexpina


so^ íí 0C£ &í> i& c^a^d 'w$?,m:ní isuh! wm
*«©» £3f IKJjjTB¡ESTO 9$mé B]¡ m «9«3fiyx
^ a $ i3 V 3 nm . tto x o x s
tributarios del Collieapae, Señor de los Collic o Collique.

Por las ádbrmaciones que presenta el'padre Avila podamos


suponer que los Coílic o Collique dominaban las vertientes
occidentales de la cordillera marítima, aunque por un tiempo
relativamente corto. Arinrismo» parece que los Collic o Collique
ocuparon la sierra de Húarochirí en donde tenían varios pueblos. La
certeza de estas afirmaciones las proporcionarán los resultados de los
estudios arqueológicos que se realicen en la zana. Por otra parte, los
datos obtenidos por ía Arqueología, ..Etnología, Etnohistoria y
Antropología, requieren una debida ecdfrüntaciór,. Esta necesidad es
compartida por diversos ínvestigíidores.

D. LUCHAS Y CONFLICTOS - '

El Señorío de Collic o Collique sostenía frecuentes guerras


con sus vecinos los Canta y CSmcIlas, ya sea -por rapiña o con afán de
conquista. Mientras se trató de enemigos, comarcanos, los Collic o
Coliiqfue lograron rechazarlos ataques, pues:
"e sta ta l prstjh&gisSos p®r n » fortatem y patr
eteraáas' ®ran®as. En ssi -mtato:o>sdai!mi •ero
carapos áe 'chÉStos y el agorará* áos
msBmáíalas, & sj&él¡® p a r ó l a r o s t i r w . «arce
praiMígaSo y i® t e a s » la -áesvladé»; á«l rio,
isáétoá® etapieafié jior los tebifernt® d&
'altera.',3S

Los conflictos bélicos no sólo eran por las tierras, y fuerza de


trabajo, sino también por las aguas del río Chillón; aguas que eran
vitales para sus tierras y sembríos. Los Collic o Collique no podían
permitir el libre albedrío .dé otras comarcas en el uso de las aguas.
Con mayor razón si en tiempos pasados habían dominado las alturas
y las nacientes'del río, sintiéndose por tanto con derecho ancestral

® María .Rostworowslá, Coria F a t a a . ftehlspánica.. Lima,


i98S.Pp.26.
36
sobre dicho recurso natural, Claro que no lodo era guerra;, serranos.y
costefios.se reunían para realizar trabajos en común como la limpieza
de acequias, apertura efe caminos, búsqueda efe nuevos pozos de agua,
etc.

El siguiente cuadro nos ayudará a reconocer a los principales


grupos étnicos serranos y costeños, rivales ele ios Coüic o Golliqúé:

SES35ANOS COSTEÑOS

VALUE MEDIO VALLE BAJO OTROS :


Casita Qum Chuqpi&aita Chaacay
CbacSa Guancayo Caravas!!® Simas
Áfemlles Huancí¿¡ntfiiic
Yauyw (Sta.Eulalja) Sapaa
tecas
Chrasavi

Frante : kferia'itosbs'os'osvíski. CosíaPsmtanaPrs'riispánica. Lima, 1989

E. ESTRATEGIAS D E CONQUISTA

'.Las investigaciones realizadas por el arqueólogo DiSléhay


(1973-1873) en el valle de Carabayllo. pmniten establecer las
estrategias políticas y económicas más utilizadas por las -ebrias
locales, para controlar ios diferentes recursos naturales y humanos de
Sa región. Según Dillshay, dos son las estrategias mayormente
usadas, aunque totalmente contradictorias: cooperativas y coercitivas.

El siguiente cuadro nos resume los ■diferentes tipos de


estrategias:
ESIBATEG2AS ESIRATEÓIAS COERCIUVAS
co o m t& g Y A s_____________ ;_______________ _
Colonización Dívisióa de k tanra f átimzss políticas
Comercie e intercambio Guerras'
Grupos migratorios tte trabajo Coutrol.de fijantes .*
3

Farnte: T. SUiehay “EstraiegSas potítiras y ecojsánsicss 3b ias efeüas locales


áel vaSe (fe «halón íi&s'ajs.te el periodo preilspinico”. Ea: Revista Aíiáiaa, aSo
5, H1' 2. Cusco, 1937.

37
7, HORIZONTE TARDÍO (1420 á. C - 1532 .d, C )

El valle de Lima y los señoríos organizados en ella, no


pudieron mantener su independencia debido a que ios incas
conquistaron la zona. En la década de 1460-70, bajo el remado de
■Pachacutec Inca Yupanqui, el valle fue integrado a Sos dominios del
Tabuantinsuyo.

Eí Señorío de Ichma fue conquistado pacificamente mediante


un acuerdo: los incas respetarían al Dios Pachaeámac, en tanto ellos
se sometían, a los nuevos sacerdotes impuestos en los templos. Todo
b contrario sucedió con el Señorío de Collic o Colliqae, que foe
conquistado y reprimido sangrientamente, razón por la. que en la
actualidad no existen mayores vestigios sobre este señorío.

El Collicapac a la llegada de Sas tropas incaicas, reunid a


todos sus súbditos para hacer frente a las 'tropas 'euzquefi&s, Los
súbditos llegaron de distintos puntos de la parte a te del valle de
Carabayiio, especialmente de Canta y Chaelk. En la medida que las
tropas imperiales fueron ganando terreno, los subditos temerosos y
hartos del dominio Collic o Cojlique, fueron desertando y ,
alineándose en las filas vencedoras. El Collicapac fue abandonado a
su sueste y muerto en pleno campo de batalla. Poco tiempo después,
aún dorante si reinado de Tupac Yupanqui, el curaca de Quivi: fue
acusado de conspirar contra la'salud del Inca por mtermédió. de un
hechizo. Enterado el Inca de los sucesos, envió a Quívi a uta orejón
llamado Apo Yupaaqui para realizar pesquisas y enviarle la.
información de lo que averiguase. Como resultado, .el curaca.
Ctiaume Caxa fue encontrado sospechoso y conducido preso-..ai
Cuzco, al igual que varías personas, donde fita condenado y
ejecutado por traición.351

® María Rostwroswski, oh aL í’p. 3 0 . La ¿ifoonacíóji otónida


por ¡a autora corresponde a da largo y prolongado juicio- seguido por dos grupos
símicos distintos, los Canta y los Citadla, pues ambos reclamaban d derecho a. unas,
tierras aptas para e! cultivo de cocales. Este juicio, iniciado «a la Real Audiencia dé
ios Reyes an¡ 155®, pasó en grado de apelación af Consejo' 'dé Indias «h; Esparte y d '
cual daré varios saos. Asimismo !a autora ba revisado ¿versos documentos
38
La represión en Quivs fes sangrienta; todos los hombres
finaron asesinados, quedando sólo mujeres y niños como testigos del
terror que transmitirían a las futuras generaciones, con el propósito de
evitar futuras rebeliones o conspiradores contra el Inca.

Una vez dominado el territorio, los incas procedieron a


reorganiza" la estructura admimstotiva de los valles. En este sentido,
so dividió el iemtorio en 10 pachacas, caifa una. bajo el mando de un
curaca llamado pachacamayoc, qoien.es debían obediencia y fidelidad
a! Inca. Pocas son las & entes disponibles para el estudio de la
organización económica y social que los incas impusieron a los
pueblos dominados de la costa. Pero se conoce que la posesión y la
repartición de las tierras &eron elementos centrales en la vida de
aquel tiempo. En. este sentido, las tierras eran destinadas a la
agricultura y la producción era. administrada y redistribuida por los
señores meas.20*30

complementarios íjjrofearEas, infoirnadones de oficio, ate.) encontrados en el


.Archive, de Indias de Sevilla.

30 Respecto al dommio inca, en el valla del Chillón, tanto Joyce


ItSarcus como Jorge S3va manifiestan rpie fes estrategias de dominio inca, estafe® m
«Jactón f e c t a con fes imptibaacía y distancia del núcleo central, de dominio:
indirecta para los valfes bajo y medio, y directa para el valle dio y la sierra. Véase
Joyce Marcas y Jorge Silva, “Los cocales del valle del Chillón: evidencia
arqueológica y contexto ecológico”. B x SfruEtes ibaLafín American Stlmoiñstnxy
A Ardtaeolngy SMos. Voi IV. Llmvorsfey of Michigan, I98S.
39
i
b

i
c á M ím o in
ÉPOCA COLONIAL

El Tidnuantisuyo fue la última cultura pan-peruana que


dominaría esta parte del valle de Carábayllo. La conquista española
del Tahuarititmíyo destruiría los mareos socio-políticos y culturales
establecidos en la m Quizás los pobladores del valle de Urna
sufrieron más que otros poblados indígenas» pues en ella se desarrolló
el núcleo del poder de los nuevos dueños de i Perú.

La llegada de los españoles significó un cambio en la


estructura de dominio: nuevo marco de poder, nuevo sistema
económico, nuevo culto religioso, nuevo cuerpo ideológico y
novedosas fórmulas de sincretismo cultural. Estos nuevos señores
impondrán a la población andina el desarraigo de sus tierras, las
reducciones indígenas, el patronato de los encomenderos, la
autoridad de los corregidores, el señorío dominical de los hacendados
y diversas líneas de prestaciones serviles. Asimismo, la destrucción,
desnaturalización y persecución de las creencias costeñas y serranas,
como por ajenólo la del dios Parí acaca, hacia cuyos nevados llegaron
las misiones religiosas para destruir las huacas y adoratorios.

i EL VALLE BE CARABAYLLO VISTO POR LOS


CRONISTAS

El valle de C&rabayllo se encuentra ubicado a 4 leguas al


noroeste de k ciudad de Lima. Si bien no poseía un puerto como el
Callao, su valor económico radicaba eti ser una de las zonas
productoras de alimentos más importantes de la ciudad de Lima y
alrededores.

Por estas tierras pasaba el Camino Real, punto de tránsito


obligatorio de aquellos viajeros, comerciantes y residentes, que
deseaban trasladarse a Trujíllo, Piura, Cajamanoa y Quito, En
témanos generales el gobierno se esforzó por mantener el camino en
buen estado, pero fue eí Virrey Amat (17ÓX - 1776) quien dispuso se

42
le hicieran todas Sas mejoras del caso, dada su condición dé ser una
de las principales vías de acceso a la capital.1 Su clima era
moderado, siendo ,por ello deseado por muchos enfermos de Lima,
quienes iban a convalecer de sus males, ' .

El valle de Carabayllo, contaba con la presencia de un río


llamado Chillón e innumerables puquios, que con sus aguas
fertilizaban las extensas y productivas tierras. En general el valle era
considerado como un lugar propicio para la vida.

Algunos viajeros que recorrieron e! valle dejaron plasmados


sus impresiones, de acuerdo a las dificultades y peripecias que
tuvieron que afrontar. • Sus relatos componen hoy en día,
voluminosos tomos que ubican al lector en la época en que hicieron
sus recorridos.2 :

Entre los viajeros que cruzaron el vallé norte de Lima,


podemos mencionar a Fray Buenaventura de Salinas y Córdoba,
quien llega a recorrer la capital en el siglo XVII, encontrando a su
paso un panorama agrícola muy favorable, no sólo por la fertilidad
extraordinaria de la tierra y la existencia de una serie de haciendas,
arto también por contar con u« elemento indispensable para el
desarrollo de la agricultura: el agua en abundancia?*3

3 losé Morales de Aramtnrrfi, Cnadano duplicado m que se da


ñutida del ventajo s» « d ais pollito ¡fe! E r ó bajo Es gobernación dd
Excelentísimo Sr. B. Maiuid. do Araat. lin a , 1770.
' 1 í •- ' ,
~ El libro del historiador EEancisco Quiroz titulado Imágenes dé!
Callao, nos da un ejemplo de corno reconstruir el perfil geográfico de un pueblo a
través ¿el relato da los viajeros. Nosotros tomaremos el modelo utilizado para
onecer la. imagen del valle de Catakiyüo durante la. época colonial

3 Bichos cofiMntmios son muy parecidos a los que por su parte


trasmitieron los viajeros Juan López de Veiasco (1571 -74) en su Geografía y
Desaipritáa Universal de las Indias. Madrid, 1344.. Pp. 4© y sgts.; BaMussr
Ramírez (159?) ea su íiescrjpdfe. del fteyjio dd Perú: é d sitia, tangía,
jnovmdas y ciudades; de los natarsles, de sus 3«siguas y érales. Barcelona, 1901.
Pp, 709 y sgts.-, y Antonio Vázquez de Espinosa (ld29) autor de! CompeSMBnMí w é
Besahption.'Oflíio West Bulles, WasEiigtto, 1942. Pp. 431 y sgtá.

43
Salinas y Córdoba, Memorial de las Historias del Nuevo
Mundo Perú (1<S30). Lima, 1957. Pp. 109-110.
fililí
isa* t e haced, y ©tros ponga* sém. lamtewtós y.
Mlac©s..J>s; la Htoccmsidá de Late soa sais
lefias a CarabaiS©, twSos deliml&s carópiHii,
• regados '«»» b i U i s a o ^ d á i,’ f i e .'s a ó n .h ...
agina deltas de tos si©s. Todas..«tas.íM fÉ te './.
están Isaas &« yerbate®»®, de «Eme hay esracfaa
por todos .estos campos,, gas-. s h n p t^ está»
vardes. Hay m u t e casas, huertas, jsandiaes y .
ísiil lásdeEos (StoSsofes y {rafas, y mochas m ts y .
coassfas y o-fros garnad©» q_ae .por aquí se
crían," S

No es extraño que para, ios primeros atíos de vicia colonial, el


agua representase unaíuente de vida, no. sólo para el bienestar de la
población, sino también para la productividad de 8as tiestas agrícolas.
Enreste sentido, el padre Bernabé Cobo deja entrever un interés
especia) por ella en siis relatos:
"El tío do Lii¡»a es el mayor; tí «tro se dice do
Caraguay!©. i>?¿« m m in o rarás da Canto, ea
la ew ffitea gañera!, t s n s vélate liguas de Ja
mar, m la rasd entoa a do* .legnas de Ja boca
de! río de U s h ; las aosqoks «r;>s á© estos Sos
'■ ríos se saCaa'’' sor" fe»^«aí>Bis, '-«pro’' «a-.'
«partea íl ysíie, aiga&ss *i¡ tan '
grandes ••• m sus •lOTMeqpios •..$».:•parece» >,.'
ca«lM«sosríes" ’ :

El doctor ívart Francisco' VálládoKcí -quien viaja por lim a


antes del terremoto de. .1687- deja, tnanifiesta la abundante producción
de trigo: alimento incHspensáblo en la, dieta- de la población limeña.
Los cálculos presentados, creemos, -deben, de ser compulsadas con6

6 Pedro León Poitocairero üeí VisTeúiat# dtí Peed.


Crónica Inédito de <»itóaj»í Msíglto JtVJJ"(IfiiS-lSÍS). Hosáris, 1958, Pp. 31,
.,. ..,: Bernabé, C*íto<.I* de (M30). Madrid. 1.954.
Tomo I, Cap. YH Esta nía» f«ma.;pator.^ dte;A»h»«s
Espinóte. Tomos91-92.. . .. . . . . ' v,

46
oirás fuentes para-una mayor certidumbre:
”Xte '«site ate y d«i otro qué' se1Kan» d®
C atw a jl# se ssitigíKsi TOiias k eq d M con gne
s* t a t ú e n jfé rB tia m )h campos, dajató s«
« llM lO ÜÉBM» Wífe'tfct'flMM, Sitió» 3 ib$
¡Tratos'y sesteada ¡a las rateses_,eS vaSe 'de
Ufe» ss' CKSémte' saás'' á¿ 10 teguas deste
3fctíbacantac Insta mtes aádante de
Cirálsg®*, y desde las i f t e t s ddi Caüa»
¡basta las faldas de la starra, m raspo distóte
son sferoimsesnis las granjas, teadendas y
Itérate»*, Sai cada amase recogen, teas de
100,000 anegas de $«ráí)ia y grano ds toá»
ge»,aro, pasasido de S0.03Ü las '«sqñ^taóau: de
s
bogo; cok la que se abastece a lim a».1'

El cosmógrafo Cosme Bueno (1764) resalta en 'sus relatos los


fenómenos sísmicos ocurridos a i décadas pasadas; sobre todo el del
año lóS?. terremoto que va a alterar el panorama urbano y rural de la
ciudad de Lima. Una de las tantas consecuencias del terremoto fue la
esterilidad de la tierra para la producción de trigo. Para cubrir esta
deficiencia que afectaba la dieta cotidiana, de los límenos, se hizo
necesaria la importación de trigo desde CSiile:1’
"Aqrri km* se e&perímiHrtasa tanpesteutev
¥16101403ta rta s , pero site peosiési de freeurate?
terrsnotos y algasias de ellos fomiirtóítes. Solo
O}»® en & tatem o , p e » este { ta m n te s stós
qt>« turna Etwiena que llaman garda; por te c®:3
¡so tiraa i tejados las casas y « ¡ i lugar sólo
•; '/ «estetas óaiertás con argamasa de %arro-.i Todo
‘ 3® imátórió «s HMiy Járfü, alraffldaMe «rs

* t o n Francisco VatMí>Ká¿ El Sol d«3. Noer» Mund®, ideado y


compaesto « í las «tferodtlas ■operad®»®!? <M Bimaireatto-aslo TuriMo,
ÁfflaMspé tíé3Ltea.R<s«a,MS3.L)¡b. X. Cap; IV.Pp.:2ti.

Las (tpredacioaes del cosmógrafo Cosme Bueno coincidían


pfeáaaaeiite con los resiésdos del análisis pormenorizados que sobre el fama, escribió
at Oiéjr Pedro Joijtf Bravo efe Lagunas, en su Voto Consultivo que elevó át Virrey
Condfe de Sit33enadaenT7S5, -

47 .
finetas, y varias s ís h ií U s s ; . .se
« i l l r a álfaüía, qtiUH ú oorsniniua m L isia,
las 'bestias telé, sswidos. TaroMáa % -H É ié a s
bad«¿íte de cafias, de fe mal $e S aw írttw ,
ii3.íál y 'ona -aijada d* rara#, que Saman
guarapo; asi con» ¡d. qn' hsicéa .4» «safe y
# « » « • dmka, ane es bebida
ifi c o k s ® » ' erire los

buhos «a todo «1rá ao ." ‘

El terremoto afectó "pailiculaniiéñté el rubro productivo


a la rio de las tierras ".de' Colíique y Comas. que en su conjuntó
producían e i4 0 .8 % del trigo de.la.zona noxte.de Lima, De este total,
Comas aportaba el 32..?) %, aunque .en .relación.-, a toda la producción
limefta su participación era por demás importante, pues contribuía
con la cpiinta parte de la misma. El cultivo de trigo se sustituyó por
la .siembra de caña de azúcar y alfalfa. Su ausencia encareció el costo
de vida, sobre todo en Sos momentos de calamidad pública, como
habría, de ocurrir en 1745 a rafe del terremoto que destruyó la ciudad
de Lima y el puerto del Callao.1¿

IL PM 'M BROS AÑOS D E CONQUISTA ■. —

fuego de la invasión y c<M*qujstá':dél' Tabüántínsnyo por parte

Jü Cosme Bueno» Itoa%eió& de las pw trádas |a¡¡Hteemwte al


Arzobispado ésLIma (1764). lima, 1764. El .fragmento tornado corresponde a ¡a
ífessripdón dsl Corre gbiiajtó 4 b Lias».

n . En Manuel Aíanasio Huestes, EdarióR áe>Gobierno M Virrey


-José A- Manso de Vétese® G rate de Suaperunda. 1M9 de julú» de 1745 basta fita
M mes dejull® de 1754. lima, 185$t- La ícKpotíacióíi del. Usgo cMen®, sus caisas
y la serie da consecuencias a que dio lugar este hecho (entro las sps no poca
¿rjpttrtaacia tuvo fe pugna entre b&crcndados da lima y comerciantes exportadores (fe
trigo chileno) ha sido estudiada por Demetrio -Samas, en su Sbtro.J ^ . . . d b t o o ,
navieros del C alte» y Hacendados. Husmos. Éttóro la crisis. agrácete, ¿ á siglo
O T y fe comercial de la p i u e n mitad del si^o.XVlIL Madrid, 1967,

48
da los españoles, se dio mido a una política de fundación de
ciudades, en «especial la capital del virreinato peruano.

Lima se funda, -como sabemos- al 18 de enero de 1535, y


'¡liara- ello se fcvo en cuenta los aspectos geográficos: calidad de los
'¡¡áfcfeoos,,13 condiciones dimáticíts y cercada al río y mar. Una. vez
fentláda se dispuso la ubicación tfe los solares, casa-huerta, la
cantidad de residentes, al aprovisiooamiefito de agua, la ubicación y
d reparto de las tiernas «de'cultivos. Estos repartos éran mercedes o
regalos qué los primeros conquistadores recibíais de Francisco
Pizarra a nombre del Rey de España, "dueño legal" de todas'las
tierras conquistadas. Todos elfos aludían a “tierras de alimentación y
mantenimiento”, pues debían servir para que los titulares ■obtengan
los frutos para su subsistencia cotidiana. En su conjuntó constituían
un espacio concebido como una res publica aristocrática.

La fundación de ciudades españolas estaba orientada a


conformar centros administrativos encargados de manejar los
intereses de la corona española. Para tal efecto, era necesario
constituir «na ciudad acorde a las exigencias de una población con
caracteres efe convivencia cortesana.,, propias de una mentalidad de
tipo feudal.3*

)2, , El con©dáñente técnico agrario de tos conquistadores y colonos


españoles es posible de ser, apreciados m, ©1 Tratado A® Agrksdtó'a Csaerai
trata «fe la tateanea d d «ampo y sos g>stóad;®iAaaes, m ansa fe «aácsalos,
IsroplftAate fe las jitesías y vtrtndes pravedsoisas a 3a salad hinaáaa... y demás
aa to m que hasta ahora ha» escrito de esta materia... de Gabriel de Alonso de
Herrera Madrid, 1777. Este texto es mendeñado por Irvrág Laonard «entre los que
llegaron con los cenqtaBtadwes. Irraag Leonard, I,®s limos «M «nípsisíadw.
México, 1953. La obra de Herrera consta de seis libros, siendo particularmente
importante el primes©, que ofrece reglas para identificar las tiernas buenas y malas y
para conocer el tipo «ds cultivo que mejor las convenía. S conocimiento agrario de
los 'conquistadores, sin duda, sarrio para que se dfeddtara la fimdgcióa ds Lima,
cuyos lía te (incluido Chancay y Cañete) amrtajaba» a los demás en renááaiserit©.,
pues sus frenas alcanzaban «na producción ds 350 frutos por amiente da trigo.
Rendición ture íarribiéu era propia ¡fe las tfeinras de Saña y Santa.

53 Torres Saldamando, Lite® de Cabildo do I.taa. Lima, 1SSB.


Tomo DX 51. Tanto fes Ordenanzas «nítidas por Carlos V (1551) corno ia de

49
La población española residente en la dudad, estaba
conformada principalmente por hombres hidalgos o plebeyos; en
busca de tiaras y oaro y plata, con los cuales obtener un status
señorial*1*'1en estes tierras o al retomar a Europa, cosa que no hubieran
obtenido de quedarse en España. Estos hombres: 'aventureros
.respondían tanto a una mentalidad militar producto de- lás guerras" de
reconquista acaecidas « i la penináila Ibérica, como al deseo náíurá!
de ser libres de todo tipo de oprobiosa servidumbre (sn. el caso 'dé los
plebeyos) o' dejar atrás k condición de hidalgos segundones y
labradores en las, comunidades realeiigas. Ivos iíistmidos, qué eran
pocos, eran sacerdotes, funcionarios, públicos o miembros del.
gobierno. - Otro-grupo minoritario lo corifonriaban: comerciantes,
artesanos, marineros, estancieros .y .agricultores. Estos últimos se
desarrollarían'recién a partir de mediados del siglo XVL

Con la fundación y poblamiento de las ciudades se daba por


conchuda la primera etapa efe la conquista. La segunda se daría
inicio con la llegada de las primeras órdenes religiosas encargadas ele
la cristianización de las poblaciones indígenas, consideradas salvajes
y menores de edad.ÍJ

Francisco Toledo (1577) referentes al cuidado y consejvatión de la ciudad ífe lima,


dan fe da 2* expuesto Eneas arriba.

1,1 It a¡ América a “ganar honra y valer más" era el fin prioritario de


los «úgratites.hispanos de entonces) Para mayor 'rifeísneia véase .el trabajo de losé
Buread,. La Írsaífíspriad.tkt ¡social áeí con^rástaitor. Litaá, 1958., Cap ÍE -- V y
VL Enestenásmo Marido, saffea. el ibKstói.Éá¿or‘.íam.8s Lodáiari; a'I;a ouloirí (feí día
era prepararse para h vida se&emf, Los.'á* CñjsiTOi'cíi. tln ís1í!.(E& ‘sotósl y
M odifico de los greintóS’©.» eorajslsia&m . Ton», I ’Pp. 70; :7 ',' ’

1"' . Para, mayor infamación 'véanse'' Femando Óxerás Medina,


Cmti®árad®i d d P«eá- (.L'iS-í-íá'líí/;., Sc-viUa, 1953; Fray Pablo José Aüriága,
Extirpaciónd® Ja láolntrin m tí Peni. Madrid, 1%B fió?.! 1; .ÁnfeM¿o-Acosté; ‘‘Los
clérigos íSí’Ctrksros y la .economía colonial (Lina, lóC¡ü~ló3CX’. Éa: Ailptmkís.,
Yol. XVI, .N9 19. Cusco, 1982; Pedro Borges, Mátelos 'nldráiiies''' i s I»
arlstiaateaddn £e América, siglo XVI. Madrid,'1900; Cfeistiab.■■Búvérgesv La
« B fa tá ín dte ios in A u de N n r a iS ^ s is , « b el feché dé tos Coloquios dé-Jé*
Bet* d®Bentaritin® de Sata-gán (15<14). México, 1993 $.987)¡; Alejandro Málaga
Medina, La cmffigelkffldáa ¡tó Perá,, s%J« XVI. Lima, 1992; Armando Nieto
Yekz, La juirnaa m n g d ln d é ii w d 'P e r i Hcdws y personEi’jw . Lima, 1992;

50
Con Ib. cristianización se buscaba introducir al indígena al
mundo de la civilización europea, comprometiéndolo a fatigosos
trabajos destinados a solventar Ja estructura económica, impuesta por
la corona española.. Las leyes de población eran muy claras a este
respecto: sólo después de tomarse cristiano podía Hcitíunente
exigírsele a l 'indio tributo y servicios en trabajo.1*

u s it M c i ó n d é m o g r í f i c a ;^ ;

Sida llegada de los incas, significó para la. población de los


Collic o Collíque una reducción demográfica drástica, serífe los
espacióles quienes provocaron su desaparición:
"Uii paquea# grupo «ísáco písrsisí&á' fiarant®
Ias hjíhs®-»? asías dd vinreSiraio gara Indago
á(ssfígas’« «i' prácücamaafe a fines á d siglo
XVL" 17

Escasas son las cifras sobre la población- indígena del valle


de CarabayUa A la llegada de los españoles existía una guaranga, o
sea LOGO tributarios. Algunos cronistas contó el padre Bernabé
Cobo, sugieren la cantidad de unJwjm o 10,000 tributarios, cifra que
nos' parece 'exagerad?! y que lamentablerneiáe no podernos corroborar..

En la visita' de '1571, ordenada por el Virrey Toledo, se


registra para Collic o Collique una población compuesta de sólo 15
tributarios: 7 muchachos y 2 nales, esto sin contar con las mujeres
casadas-y una; que otra anciana. La ausencia de población infantil, se

fatw SilverMaft. “D k'Sbs y diablo: Idolatrías v évaflgalizacióa” En: AJUpandiís,.


m XVljN519.. On o , K 2 . " : , i; "

3Í Enanas, C*¡Súlázíe Snffiah® (15^6). Ssál Céáwis de -1S73. 4


Temos,Ed ■Cultto ]ptehisp't^ái'Ma<Ítid, 1946.

J' M ída Eu:,tworOYJskí, Cosía F o t »® VtMsffáiáe». Lima.


14ti9.Pi?. 32.
51
debe a la alte, mortandad causada por la invasión, española, cosa que
se demuestra ' década y medía 'después,'' cuando Jas dmcras que
pertenecían al Cacicazgo da Coílie' o Coilique sé eRcontrabañ
abandonadas y sin cultivar por erf&fleciráiéntó' efe Jos indígenas. De
5í «!os quedaban sólo el 'atraca Hernando Nacar, dos; mpáfts llamados
Francisco Nacar y Roéígo Jlsmat y un".viejo dispensado de todo
trabajo por su avanzada é'dadi'

De las averiguaciones documentales hechas por Waldemar


Espínoza (1963) y María Rostworowski (1972-S9) se deduce el
siguiente cuadro estadístico, que ños ayudarás, tener una idea general
cíe la situación demográfica en: el valle de Carabaylb, .después de la
llegada de los españoles: "

ÍTOMIÍSK COTQÜITANXÍV: € ARABAYLiO, ©VAMCaVO COKLXQttE


.ISQMAÍU
Qaa pagan 69 : 36. ; .68 8

Personas y seg. 1 k 1
CaciftMis
Mndbachos 13 2 13 4
iíüsorvados 53 1S Sé 2
Total de bombé 136 S7 16S 14
Total de ¡wujBíes , 144 SO 213 12
T<nM 380 137 M 26

itiente: %. Bspinciffl,-”La ©usara«gjs y la{educción ¡fe Huancayo". En: SUN*t*A¿Mns»®


.Nadenal, Tama PC'Oül Lima, 1963; y Mari» Rflutworowstó,-. *t». eSuías Sal «al!® doi
íiáüáo”. Efl^RerrijíaiditíiMxtmWadoaaS, Tome XSEXVIIL Lima, 1972; Casta BsriiaM
PrüMspáaíca. Lias, 1989.

Así, para finales del siglo XVI, el v allé' de CVabáylío


contaba con sólo 82-4 indígenas, de los cuales 375 eran hombres y
449 mujeres. Este baja demográfica fija general en la costa y sitó
motivos fueron múltiples, entre ellos podemos mencionar: las
represiones violentas de conquista, el trabajo extremo* a! que eran
sometidos, las condiciones inhumanas de trabajo, pérdida de sus
tierras; desplazamientos de población, elevados tributos, epidemias,

52
ente otros.1®

2, PRIM ERO S .ORDENAMIENTOS ECONÓMICOS

La corona española desde un inicio intentó establecer un


claro dominio de los territorios conquistados, no sólo porque éstos se
hallaban alejados del reino, sino ¡también por temor a crear un centro
de poder paralelo al & la metrópoli. Para establecer esta estructura
de dominio, la corona administraría directamente los territorios y
habitantes conquistados, y subordinaría a ios colonos a su soberanía
señorial y - patrimonial, estableciendo para ello derechos y
obligaciones da acuerdo al orden jerárquico establecido.. En este
orden, los indígenas en su condición de vasallos rústicos realizarían
los trabajos físicos agropecuarios y romeros,.y a los españoles.en su
calidad de hombres de razón y entendimiento «ventajado Ies
correspondería contribuir en la adminisímáón y defensa de la
colonia; así corno cuidar e instruir a los indígenas/*4

La corona española consideraba que Ja única manera «fe


controlar el ímpetu de los conquistadores y conquistados, era
estableciendo -una administración encomendera, insolación que se
adecuaba a esta realidad, al menos durante los primeros'años/0 "18

18 Recientemente Javier Tantateán-J» pobücadío bajo aLausjMcin del


Seminario de Historia Banal Andina, un ensayo iuátulado C a t a d ! » ea *1 JjtBjitsáo
Inca. 13 smpacto hispano; ¿Sdtp se daiMgráfieo «mlos Ansies, oía.1» «snla ©D-srte:
'(Siglo XVI). En dicho estudio el autor hace un recuento dalos ácvercos métodos «pie
la iústoúogr&Ea a stüsaaáo para la estimación, de b . pobiiación. de la época
jaefcispáaica. Además «numéralas causas da h despoblación y que ssj fin id a da'
autor ‘'"La sfeclmacst® de poblaciones ¡sil ia coste habría alcanzado na verdadero
ocaso, mucho mayor que si de la región propiamente andina".- Javier Tasitateás *!>„
rit Pp. $8-82-101.
39
Joan de MataBiizo (ISO,1) Gobierne d d Perú. Parte I, cap. IV y
Y.

Respecto 2 la institución encomendera véanse Manuel Guisaseis


La 'Enceadeade «n ¿ Paró, Lana, 1945; Marvin Goldwert, “La fecha por ia

53
3, LOS PRIMEROS SNCXXMENDERDS

Los hispanos que participaron en la conquista, del


Tahusmíánsuyo, solicitaron, a la, corona española el pago por ios
servicios prestados. Para recompensarlos se tuvo que recurrir ai oro
obtenido por medio del pillaje, la entrega de encomiendas y cargos
públicos, y posteriormente el reparto de tierras.21 Las “entradas a
'saco abierto1' y los “rescates” forzados fueron los caminos más
frecuentes del pillaje.

La encomienda, en lo legal, debía entenderse corno ”un


derecho concedido a los conquistadores- para-percibir y cobrar un
tributo a - los indios encomendados, con cargo de cuidarlos ®
instruirlos en la religión católica" y en los usos ele la -nueva policía”.
De esta manera, los indígenas estaban obligados a pagar un monto de
productos-tributos, Las normas dictadas por la corona, espartóla, sin
embargo, fueron desconocidas por Francisco Pizarro, quien por vía
de Sri.but.os permitió el servido personal de -los indígenas en. las
propiedades de los conquistadores, así como de un pago en dinero.
Por lo demás, Pizarro desoyó las ordenes reales de tasar prestaciones
tributarias, las que años más tarde (1543-4550) habría de poner en

paipetaidíd <fe Jas eactwaienáas b» el Perl» •virreinal (UóD-íéOO), Prstnara paite” y


“Conriusióri”. En: Stwrfst» Histórica. l i t ó , 19S5-'Sfi' y 15S7-SS; :'GuSten»
Loterana VÍHena, “La restitución per cmqimtfiá^res y encomenderos: 'Un aspecto
de la ittdáeacia kscasiana ca á Perri”. Etc'¿uaneafo' de.Ertaák* b a d a n e s ,
Tome 3DQQ0L Sevilla, 1966: Eftain TreHeá Arésíegui, ‘5«©é8s Mssrtínfig Vegaxo:
F m á o n a M e d * u m «ncotxUeeuSa. peró^^-McfeiL-- lima, 1991;. sihóo Zavala.
La B to M iM a M N an . M bkíso; 1973- y José déla Puente Bnn&e Encomienda y
encomenderos m «I Petó. EstaS© social y jid ite.'& i mata im&fedósí colonial.
Sevüte, 1992. Ver íambin» Antonio de Leó» Pínelo, Tratado'- de' O n M á c t e s u •-
Reates de E i k a t o é » , «fid*E rasos m cae se- rojtéerec- par»; las Indias
Occidentales. Madrid, ISO. Este edito colonial trata desde el '.origen''basta a!
desarrollo de las ¿fivsrsw modalidades por las cuales pasó k encomienda y las
personas y/o iostSudooss encargadas ele encomendarlas. Asimismo- trata acerca de
los requisitos saces arios para recibirlos y los diversos problemas relacionados coa
slía. !üb. 1, Cap. LXX. ' •'

‘i Msmtiíl Burga, .De ia eneexuteuda a la Meterás «prítelMa. ES
valí® da Jeqnetepe^oe. Dd. siglo XVI tñ XX. Lima, 197tí. Pp. 69-70. :

54
ejecución el Gobernador Pedro de la Gasea* "

Le exclusividad concedida, a! encomendero para utilizar el


trabajo indígena, fue sin duda h&íl» los añas 15.50 la causa principal
de Jo preponderante de su papel en la economía, colonial. Esta
hipótesis es confirmada por Susan Ramírez:
’lia, p m fecd«s fes.digísH'i $« cdi»ÍTÜ6 <eart 1»
principa! ftaewte d* tSqtMaa y poder m la
sodetoá á* «afuista."

Su poder económico y social le coníwió las cualidades


necesarias para ejercer um- fundón política, ocupando con
exclusividad los cargos públicos raki importantes.

El primer poseedor de ja encomienda de Coftique fue


Domingo de k Presa, beneficiado cor FraiKÜvo Fiza uro. A. su pronta
muerte, esta ía-a-amiemla er enF’í:gad¡; & ki: feenrmnís Francisco
Manuel de Alcántara o5 8 <h octubre ote i;FF>, «^nes tamblón era
encomendero en Luo'n ( 1535 ) y Lad? í ¡ 5 :')). Los años en que se
otorgó y cambió da im poseedor a otro, eva^j.mmdn a ios primeros
momentos de vida, colonial, que ?,<: cars-cterizaria por un periodo de
inestabilidad política y social, motivada;? por de '‘guerras civiles"
entre los conquistadores.

Los indígenas fueron, frecuentemente, víctimas ríe abusos y


vejaciones, ante lo cual, algunos juiciosos españoles corqo Bartolomé
de Las Casas (1477-1566) protestaron.^ .Esta situacióri conflictiva

Aí Carlos la s o Gama, Economía C M d y Régé&en M m M o,


Peré, slgbs>s XVI-3kIX. lim a, 199?,. Torno I, Cap, É ■

■ Susan E-. Kauárez II, PaMams Provinciales. La teeamtí» si*


I» tt«wa y la economía tS«l podar en. di Peni c M d lisas, 1988.'Pp. "i1.
;¡¡>asd* el territorio peruano elevaron su vea áe protesa diversos
relíase sos;, cwcw<rid«s por ios '■'excesos’' que dañaban fe vida y fes jrropfedaásr de
los nataraÍBS. Entre oíros podemos mencionar si Provisorio Lias de Morales (i 541),'
el licenciado M otel de Saatoyo (1542) y *4 Obispo cuzqueño Brav 'Exenta
55
■a'<<iíoormea
suelos reservados para las autoridades eran producto de serías
disputas por parte de los mismos conquiste!dores.

i-as tierras de labor recibidas en m mayoría eran utilizadas


para el recojo de leña y para cgae los caballos buscasen en d ias sus
alimentos, cuando no, parada crianza de alguna, especie. Años más
adelante, la situación respecto ai uso de estos predios hubo de
cambiar, al dárseles el destino para d cual fueron concedidos, pero
entonces Ja finalidad era extraer sólo los artículos alimenticios que
los indios no producían, o logra*' mediante su'alquiler una reñís, m
dinero y/o productos, o simplemente contar con un espacio agrícola
que pusiese en evidencia el ejercicio de un señorío territorial. Puede
¡asegurarse, menciona el-historiador Carlos Lazo:
fes ow quistaáom j»cv psirídfe&iii m
'Corj’SreaT?3íi- e ste íkm ts m sá «agaíro d* s¡us negó dos,
sal «a kscom- coa ellas ía gessadí®. áe
2\’t
«ugíma gran míprasa a p m a ,i. '

Al pedirlas -manifiesta el autor- parece que tuvieron ía idea


de beneficiarse con los efoneatos ptoóta<¿i.vo>: que la rodeaban y ser
el complemento de alguna otra actividad más lucrativa.

4. LAS REDUCCIONES INDÍGENAS

Más importante « la encomienda, -que en la práctica duró


poco- fue ía creación de reducciones, indígenas. Aunque el Estado
puso en práctica una política de reducciones desde los años
cincuenta, no sería sino con el Virrey Francisco de Toledo hacia*57

J® Carlos Laxo ob. ctt. Tom o! Pp. 83.

Ext 1S57. se iimdó Juliana la reducción o pueblo <k indios de


Santa María Magdalena (hoy Pueblo libre), y m l$6$ la redacción ríe Santiago del
Cercado (actual Itamos Altes),-cuya fundación oficial se cumplió en 3,575, y raya
importancia creció apartar de 1591 con h creación del. Corregániento de Incisos del
Cercado, cuya jrttisdiccritt abarcaba bes otras tres ¡reducciones indígenas instaladas
57
1570, que dichas prácticas tendrían un-resultado efectivo.

El Virrey comisionaría a Alv arado Ronce de León, Juan


Maldonado de Buendía, Juan Martínez de Reagiiü y Rodrigo Cantos
de Audrada, para que se encargasen de Sa visita y reducción de- los
indígenas de la provincia de Lima.. De acuerdo con esta visita, se
crearon las siguientes reducciones:*51
- San Pedro de Cantbayllo
- Santísima Cruz de Ate
- Santiago del Cercado
- Santiago Apóstol de Surco
- S®r» Salvador de-Pachacámac
i San Juan Bautista de Lurigancho

Los indígenas vivían generalmente 'dispersos..y de acuerdo a


m propia organización. Con las reducciones se impuso la estructura
de los pueblos europeos, que contaban con hospital, iglesia,
cementerio, plaza, etc. Dentro de estos pueblos, existían personas
que conformaban grupos que representaban a ciertos círculos, «fe
poder. Entre ellos podemos distinguir ai curaca o cacique, el alcaide,
el cura, los principales o enriquecidos, etc/* Los indígenas, a pesar
que conformaban í%mayoría de la población, estaban sujetos a una
serie de obligaciones, unas más difíciles' que otras, que hacían de
ésta, una clase totalmente subordinada.

m Urna. Estos dos pueblos de ¡odios (barón tós primeros coastitoase. Véase
tamláé» é éa'bajo de Mario Cárdenas- Ayaipoma, La p>Mad&i i M § a d d u f ie
á«- t i n a m el XVX linca, 1989. Cap. BOL

Ver Alejandro Málaga, “Las reducciones en al Perú (1532-


i m y ’.m r M süntokj Culto*. N° 8. lima, 1974. Pp. 141-172.

”y Es cfesií, árpelos judíos que con ¡rápidas compreasfiísron las


nuevas re^as económicas, y supieron sacar provecho de esta conocimiento creando
y conduciendo pequeras empresas (sflimanítos, taíieres artesanales,-' amaraje coa
recuas propias, etc.). A estos naturales h historiografía los conoce bajo-ai-nombra'de
■'•««tóaáMVí so dalas” o “tw ^ a iw ís sodates", pwqjue-tán duda m porició»
económica los llevó a diferenciarse dd combo. •
58
4x1', INTEGRANTES

A» EL CURACA

El curaca, se remonta a. tiempos preincaicos. Durante aquella


época eran los encargados de administrar los bienes y otaras
comunales,, mediar entre los miembros del grupo en caso de
conflicto, organizar y ejecutar los trabajos de -mita y recolectar los
tributos. Con la dominación del Tahuaatisuyo., los curacas pasarían a
formar parte del grueso ote empleados, encargados de la buena
administración de los distintos pueblos conquistados. Su papel era
importante en la medida que era el encargado de negociar las pautas
ele redistribución ante los máximos repiesenfcantes delinca.

La conquista de! Tahuaatisuyo. por paite de los -españoles,,


significaría varios cambios para' el curaca Por ejemplo: perdió su
nombre, pues los españoles lo llamarían "cacique", apelativo de-
origen caribeño. Sus funciones seguirían siendo subordinadas, pero
cada día con menos importancia. Esto último sobretodo en la costa
central, en donde la población indígena disminuyó y fue remplazada,
por ios negros esclavos.

Entre estos curacas o "caciques” distinguimos una cierto


jerarqíázación. 'Existían "caciques" poderosos-, que se enfrentaban
abierta y directamente contra las diferentes fracciones de la clase
dominante en defensa -de sus bienes y k de sus pueblos. Ellos se
encontraban sobre todo en el valle del Mantarc, Ocres y Huánuco,
Airante- el siglo-XVI y XVBL La. documentación dejada por los
Guacrapáucar, los' Flores Oaxamalllri y los Gómez Pomacliagua,
"caciques” de los pueblos anteriormente mencionados, son ejemplo:;
de la existencia de caciques con- un considerable poder económico.30-
-Algunos '-'caciques” y sus familias, por ser'descendientes de-curacas
prehispánicos, reclamaban una.' mejor posición de privilegios y
- holguras con respecto a otros "caciques" e indígenas del "común".

•,Alejandro Rayas, C o n i n S c d m e en «J. P w ü cokaifel {regiéa


««feral WSO.ÍS;Urj. ljma, 15>&3;Pp. 20-2.3.

5.9
Esta posición se materializaba en ia exoneración de las antas y
algunos tributos.

Otra fracción de "caciques" aprovechando su cercanía y bato


con los españoles, iniciaron un proceso de enriquecimiento
económico o lograr -aunque sea- una diferencia cultural da sus
congéneres. A,.este último grupo pertenecían aquellos que buscando
favorecerse terminaban convirtiéndose en paniaguados de los
encomenderos y otros personajes de poder español,' quienes por lo
común los utilizaban para obtener tierras c o m u n a l e s . L a
contrapartida de esta colaboración era la conducta .abusiva que
'asumíanfrente a los naturales que se encontraban bajo.su mando. -Su
conducta por ello, en 1598. habría'de.llamar la atención -del fraile
Miguel Monsaive, autor de una crónica de denuncia titulada
Reducción Universal de todo el P erú y dem ás Indias, con.©iros
muchos autos para él bien de. ios naturales dalias, j en.aum ento
de las reales rentas. Entre otras revelaciones el cronista acotaba que
“estos caciques obligaban a i*;::, indios a trabajar gratuitamente en
todos ios negocios privados que regentaban, (cultivo de- chacras,
comercia! izad ón a distancia, guarda de ganad», etc,}. Asimismo -se
apropiaban de los bienes de intestado:- y que aumentaban los montos
tasados de ios tributos con el fin de apoderarse de la diferencia”.31

fin pocas palabras, los curacas formaban parte de.-una


"nobleza local" cuyo poder, poco a poco fue desapareciendo, « i la
medida que los españoles incrementaron el suyo. Para fines del siglo
XVIII, no existen "caciques" que puedan ser comparados con los
.anteriormente mencionados, lo que nos hace suponer que han sufrido
aína sistamé£tc8 expropiación de sus bienes y mandos.3* >.


J‘ Migue! Mimaste? (1598) Reducción IJsSversál de to * «t 'F«rñ
y á.íBaás ludios, om otros muchos juera «L Mea de tos t o t a ) » y en
«nsBM&to de te Reei.es Rente.' Microfümed by fhe library of Congreso
Wasiáníoag, Pp. 13- 1<S.
Cuando esto «ajerió, ios casacas metamérfosear'on su poder
•sc!'Siíic--j >okl, reforzando y acrecentando su papel de autoridad de «tigra
•preliisjjéínc*. Para eüo recomeron a fe intenriffcaciója de prácticas rituales
proto¡ipfc-flis del ornado anda» pre-español, encubiertas bajo formes reügjosa-
ÓO
ARCHIVO
B. LOS ALCALDES SEMINARIO DE ..HISTORIA
RURAL-ANDINA - UNMSM.
Durante la década de 1560-70 y en la medida ■'que se iban
creando los pueblos de indios,, el Estado y la clase dominante
española necesitaban de .nuevos miembros dentro de estas
comunidades indígenas para, ejercer con mayor eficacia y facilidad e,l
control político e ideológico del campesinado y así facilitar su
explotación y dominio, En vista de esta necesidad, la institución del
alcaide de indios toma importancia, al punto de ser llamada la “llave
y puerta del gobierno11P

El Gobierno Español, para, no levantar sospechas, permite


que los mismos indígenas elijan a sus autoridades. En la práctica, los
cargos de alcalde, alguacil y regidor -encargados de defender los
intereses de los campesinos- se convierten en oficios subordinados a
los caprichos y abusos efe laclase dominante.

El alcalde- en su calidad de juez debía canalizar los redimios


civiles de menor cuantía y las denuncias penales de los .campesinos
que no amentasen pena' de'muerte o de mutilación. En genera! su
accionar legal quedaba subordinada a la.autoridad del corregidor.
Las fijaciones más importantes del alcalde de indios estaban
orientadas a conformar un -sustento político 'económico, social y
represivo, que permitiera una buena administración ele los territorios
conquistados, por los españoles. Entre estas' funciones tenemos! k
vigilancia de la iutemalización y el ejercido de los usos de £a'nueva
política y religión, vigilar que los tambos, caminos y puentes estén, en
buen estado, facilitar el trabajo evangelizados' de los sacerdotes,
ayudar a rechitar los mitayos dé sus pueblos, tenar la llave dé la
cárcel y de la caja de Comunidad y tomar cuenta ele los bienes
existentes en ésta, etc.

á vterdnato dsl Perú y tornadas por Manuel Burga ea su estuák> Cuzco (1680 -
1780). Memora e Identidad' de w Aristocracia fo'dtgena. '

s Migue! MonsalvB ob. d t Pp. 43.

61
Para ser elegido alcalde no era necesario ser un campesino
principal, m residente del lugar, aunque estos' requisitos' 'eran casi,
siempre exigidos, tanto como el ser cristiano. Es por ello que los
alcaides eran campesinos acomodados, que tenían relaciones con los
grandes; teiratementes y comerciantes del lugar. La ley disponía que
aS concluir su mandato fueran sometidos a un juicio de residencia.34

C, E L C IJS A B O C IR IN 'S R O ' ;

Otra figura importante dentro de los pueblos indígenas, ara el


cura, doctrinero, responsable de la evangelízación de los indígenas a
■su cargo, así como de rccepdonar los pagos a la’iglesia católica35 El
cura, doctrinero postulaba a un concurso que el ■an®bispád<>
convocaba cuando se declaraba la. vacancia de una doctrina. Él
aspirante debía ser presentado y avalado por ut¡¡ representante*S i

** S. Levaiier, Cotoneaste ás£ Peni, cartas y papdos,. Siglo


X¥i. Madrid, 1925. V e Ordenanzas de D. Francisco de Toteé* virrey del Perú
(Ordenanzas parales indios de k ¡provincia da Charcas, Arequipa é da m viériiferé do
1575).
Si juicio de ressdejacsa o smdieate -aosafars con que también se le conótía-
era un. procedániMito de resKSeün da c&e&te y funcionas , que todo, fuamnarie
publico al tenninar ai desesopeiG & su cargo debía realizar, a-pedirlo de oficio 'o. por
acción popular. El nombre proviene de! tiempo tjae d :fimeronarie debía <1®
permanecer ,o residir engatadamente, en 'el lugar donde ejérese su oficio, para
facilitar la investigación de los jueces residentes.-' Váaise'-José Masía Mariluz
TJrquijo, Ensayo sotos tos jpaidss do yesiámriss. indianés, Sevilla, 1952; T. M, Oti¡
Capdcqsá, H Esisd® Fs^aSci m. Indias. México, 1946; España, m. Arassiea:
■ 'InsttndN H i . « M t e . Bogotá, 1952; luán de Solorsano y P.ereinu Poísitoa
radSaaa. Madrid, 194S; Grallemo Lo&mapn Villana, 0 C o n c ita r á« isidws ®s d
Pené Trajo los Alistólas. Madrid, 1957; y Alfreda' Moreno Cabrias;'H'Coo-egldw
de ludios y la ecoawsnia p«rusú& fel sigto XVÍBL Madrid, 1977.

K Para dignaos datos referentes a la organización do fes doctrinas


cotaaiateg véase-fe. tesis. & licenciatura de Carlos Carcelén, La* BedriBai 3®
OtacSa-Heaj-íMáiM, siglos XVT-XVIL OrgasdEadósi y .desanrolío de las
t e o q t i s s rundes en á P a á Cetonia! . lima, 199& Cap. IV, VI, VH (La
osrgiaiizacióffl. db las doctrinas, las doctrinas jesuítas, la moral del doctrinero en el
siglo XVIC).

.62
superior ele la ondeo a la cual pertenecía o por el Obispo en e! caso de
ser sacerdote diocesano. El Virrey como representante del Patronato
Real, debía estar informado de .todos estos trámites, pues él daba su
-aprobación o desaprobación para ocupar el mencionado cargo, el cual
duraba, de «no a seis años, pasando en algunos casos de ser un cura
exclusivamente de indígenas, a convertirse ers un párroco de pueblo
cuando éste congregó también a. españoles, mestizos y esclavos.

Los curas doctrineros intentaron mejorar su situación


económica con cobros excesivos por los servicios. parroquiales,
utilización gratuita, o sem i. gratuita de la fuerza, de trabajo,
repartimiento exclusivo de productos, entre otras modalidades. Su
poder se incrementaría en la medida, que obtienen tierras por compra,
herencia o usurpación.3* Esto última modalidad va ocasionar una
serie de en friam ien to s entre campesinos y religiosos.'^

B . LOS INDÍGENAS

Son en su mayoría poseedores de pequeñas chacras, que con


su trabajo e instrumeritos, logran obtener k«». bienes indispensables
para-’ sobrevivir junto con su fatmiia. Sobre silos recaía, el
sostmimiento de todo el sistema colon iai.

, Para los que. se encontraban al interior del-, país, las


condiciones de trabajo. -sobre, todo en las-- minas- eran

* “Con^ocsa toé» mvedkufsw par» la lista f distribución de sos


negocios y ■granjerias, que 8é»ar#rteiafe h 'ts-sosis su el manejo de. diaeras o
haciendas, o ea los trajines y viajes i?:,b íes eacombadtao. que todo se ejecuta con las
•que fatóaa famas (...). A ¡as «i ¡s$¡¡íw Jas a;.aa en servicios domésticos o.natanis
(...). Hay aguaos .cutas qa* ro p¡arok«*qae m sus ponidos baya, otras pulperías que
las í [ihs ponen tes mujeres sus ¿ i e p cLl<í£t’r.es., rá oteas hornos de amasar pan que tes
suyos ... modo que son «asas pfeíectos comerdarsías.’’ Representad&i de la
«hadad ¡M Cw&», sofero excesos do C om ^áores y Coras. ASo 176S. Tratado
de curas, pa®. Sé. En Coíeccysa- BtraHiusasaí d d :. S«sgffll.€©íteaario de la
laífepíí«áaj.r.feL Toa,» I, V al L AMeraá®te:--.1

11 Alejandro Reyes'ob.' cit. Pp. 2$ y Sigs.

63
extremadamente difíciles, A consecuencia de ello, un gran numero
de familias abaadonada.su lugar de origen y se dirigiría, en algunos
casos, a l a «osla., lugar donde los fe-abajos-eran menos forzados, pero
igual de difíciles, y en otros-casos a. ronas.de mayor-altura y de más
difícil seceso a los españoles. De las-familias que llegaron a la-costa,
un gran inime.ro se-dedicaría al comercio., ambulatorio. de distintos
productos:-pescados, dulces,.comidas, etc.-

m . LAS HACIENDAS EN EL VALLE D E CARAjBAYLLO.

Para una presentación panorámica del ■-valle, ele ■Carabayllo


durante los siglos XVI, XVH y lar primera:-, mitad, del X\TII, es:
necesario un estudio -detallado de la documentación existente en los
diversas archivos limeños. Por lo abundante de la información,
nuestra labor se centrará en el estudio de las haciendas Collique-y.
Comas, que se ertconi.ra.bait ubicados en ios actuales terrenos que
comprende el actual distrito de Comas, tema de nuestro estudio.

Las distintas secciones revisadas (Títulos de Propiedad,


Protocolos Notariales, Juagados ele Aguas, etc.), n o s . dan una
información acerca de la distribución espacia! -de las haciendas, sus
dueños, arrendatarios, instrumentos de labranza, fuerza-de-trabad0 y
en algunos casos de su producción. El Pleito de Labradores de
Lima (1773-1775) es uno de Sos documentos que nos ayudará en la
realización de esta tarea, pata finales de! siglo XVIII, Este
documento ha sido revisado por diversos investigadores y bajo-
diferentes perspectivas, entre ellos: Céspedes de!. Castillo. Pebres
VillaroeL. Ramos Pérez, Vicente Rodríguez, Miguel Maueoreivy
Pérez Cantó y Jacques Poloni. Últimamente (1996} Bestias- Vegas a
inte litado realizar un. estudio de la vida económica' de Lima rural,
tomando como base el mencionado documento.

La información que encierra es variada, pero debe tenerse'-en


cuenta que fue elaborada por los integrantes del -Gremio sfe
Hacendados, parte involucrada en el correspondiente pleito, Elfo

64
deja abierta la posibilidad que los datos presentados no correspondan
a k verdad; es casi seguro que se haya minimizado la información
con el f e de ocultar las ganancias para así justificar- el pago de la
alcabala en un monto varias -reces menos que el debido.3*

1. UNIDADES PRODUCTIVAS

El valle de Carábayllo, durante k época colonial, foe una


zona completamente cubierta por haciendas, Trapiches, Galeras,
Chacras y Chacritas. Aunque no se puede conocer el número exacto
de las haciendas, las más importantes de acuerdo a su extensión y
volumen de producción fijseron: CoHique, Caudiviila, Punchauca,
Comas, Pro, Cerro, El. Naranrjal. Chuquitanta, Tambo Inga e infestas.

Durante el siglo XVIII, el valle de Carabaylló contaba con un


total de 53 unidades productivas; 39 chacras, 7 chacritas, í calera y ó
trapiches.'*9 Las propiedades llevarían la designación de la zona en la
cu-ai se establecieron (como la de Comas y Colüque)', y en algunos
casos el nombre del dueño, corno ocurrió' con k llamada hacienda
Pro y las chacras Aliaga, Boza, etc.

El listado da las propiedades existentes durante la época


colonial en e! valle da Garabayllo, m s confirma k anterior
afirmación:

Dos hacíaos abona» a feyw da esta opinión: 1. El incremento de


la recaudación fiscal de los novenos ««les, que dorante el lapso corrido del trienio
1729-1732 á triimio 17¡?2-3.7<S4 marcó uxt índice & subida de 100 a 738 pimíos. 2.
13 fecubámkrf» del virrey Anotó,•quien a''través da una investigación secreta
averiguó que las venías clel Gremio & Hacendados alcanzaban ia cifra de 405.09$
pesos, bastante distante; de tos 73.875 pasos que ellos declaraban ganar.
Las cifras dadas, líneas arriba son tomadas del estadio Perú. ( d M é :
«Uñare,, precios, producción y HscaiJdad «a nn contexto de economía ffisaraL
17ÓPB-179?, elaborado por Carlos Laso en ecBrión restringida. Lima, 1998.39

39 Ver anexe n° 1.

65
CALERA;
C al San Isidro

TRAPICHES;
Trap. Coliíque
Trap. Boeanegra
Trap. Bocanegra
Trap. El Naranjal
Trap, Pro
Trap. Cerro y. Zambraruó.

CHACEAS;
Ch. Aliaga
Ch. Villa Señor la Baja
Ch. Csudrvilla .
Ch. Concón
Ch. Guacoy
Ch. Puncháis es
Ch, Caballero
Ch. Chocas
Ch. Trapiche
Ch. Sapán
Ch» Macas
Ch. de Santa o Becerra
Ch. Asaña o Lagunas
Ch. de Boza
Ch. Muleda
Ch. de Asnapisqpíio
Ch. La Granja
Ch. de Comas
Ch. Infantas o M antés
Ch. de Chillón.
Ch. Tambo. Inga
Ch. La Molina
Ch. Urive
Ch. San Lorenzo
Ch, G1m 3.de
Ch. San Juan, de Dios
Ch, Pampa del Rey
Ch. Cop acabaña
Ch. Chavaiyía
Ch. Santa Rosa
Ch. La Regla
Ch, La Tabeada
Ch. Conde de Villa Señor Alta
Ch, Oquando y Romeral
Ch. Chu quitante
Ch. Márquez
Ch. Puente de Palo

CHACRITÁS;
Chrita. Hurlado o San Pecho Alcántara
Chrita. Salinas
Ciitite, Pascal
Clinfe, dé Lozada
Chrita-: Platanar del Serró
Chrita., Coronel
Chafe. Alcocer

En esta relación tomada del Pleito de Labradores de Lima»


sorprende no enconím “ninguna hacienda” para la zona, norte de
Lima (vallé: de Carabayilo).- Esta msencia puede explicarse si se
tiene en cuenta la categonzación que usaron los mismos dueños para
calificar a sus propiedades, con eí fin cié minimizarla y así evadir la
presión fiscal.

Este problema no es nuevo, ya Feijoo de Sosa, Corregidor de


Trapito a mediados del siglo LC/IIL. tuvo que esdrentorio ai momento

67
iñVeritaria'vde las propiedades de su jurisdicción.
Aunque 'en- "aquella oportunidad las pretensiones fueron distingas,
pues se buscaba obtener un prestigio social ejerciendo el titularato de
ursa hacienda, aun teniendo una propiedad, relativamente corta de 2, ó
y 9 fanegadas.

En el caso de Lima, más pudo el interés de ios propietarios


por no pagar los impuestos establecidos por el gobierno que el
prestigio social. Aunque esta actitud a la postee k significaría
mantener su estatus económico y social. Es decir, el -dinero no
pagado al gobierno podría ser disfrutado por el hacendado y sus
familiares. En. este sentido el historiador Manuel Burga manifiesta
que "las propiedades podían recibir una nominación de acuerdo a tas
circunstancias del momento, la extensión da la propiedad o al
volumen y tipo de producción".41 El primero y segundo aspecto
tomado en consideración no son muy precisos, pues algunas
haciendas contaban con una extensa área, pero sólo utilizaban, una
paste da ella. Esto último por distintas razones, pero en especial por
ser tierras no aptas para el cultivo, aunque ello no significaba que
fueran introductivas, pues podran y eran, utilizadas ..para- otras
actividades, agropecuarias, como la crianza de ganado y el recojo,de
taña. A. su vez, tener una extensión pequeña de tierra, no significaba
estar en desventaja con una propiedad de grandes proporciones;, no
sóilo por lo dicho anteriormente, sino también porque aplicándole un
régimen intensivo de producción, podría alcanzas- una productividad
superior a las otras.

De esta manera, no es posible que Caudivilla, Punchauca,


Caballero.. Chacas,. Mapas y Chiquitanta, sean .catalogadas... como
simples, "chacras'', pues poseen. ,un- promedió de 90 a .100 fanegadas,
sin contar las-tierras eriazas que también eran, utilizadas y lo elevado
de su volumen de. producción, que .era variada y comercializada tanto
en ai mercado limeño como extranjero. Por lo tatito, parece más

^ - Pabla Macara, Mapas C otaiafe d* Hsdeaiáas Cuaipfitas.


liáis, Pp. X X E -

MsmwalBurp oh. dt. lty.lQó-115.

63
adecuado tener en cuenta, los aspectos referentes a- los volúmenes y
tipo de producción, que facilitará ñn mejor reconocimiento de las
unidades productivas ubicadas, en. el valle, de Carab&yllip. En este
sentido, los trapiches como Collique, Bocanegra, '.Pro, Cerro y El
Naranjal, pueden ser reconocidos fácilmente, De igual manera
■sucede con las chacritas, que es algunos casos eran anexos de otras
haciendas o eran utilizadas como posada por sus dueños.

Las haciendas y trapiches más irriportaai.es se mantuvieron


durante toda la época, colonial,y gran.parte, de.-la, vida, republicana,
para desaparecer paulatinamente durante el siglo XX, producto de las
constantes invasiones llevadas a cabo por los migrantes andino
mestizos del interior del país y la vente; de terrenosdpara,la
construcción de las urbanizaciones populares.::

1, LAS HACIENDAS

Durante la segunda mitad del- siglo XVI, las propiedades


laicas y eclesiásticas fueron desarrollándose y adquiriendo 'una
importancia- inusitada-. Por-un lado, recibirían si estimulo vivificante
de una política de gobierno, que puso en -práctica los repartimieráos
y mitas de trabajo rural y la creación de .reducciones indígenas,
destinada a ampliar la frontera agrícola, favoreciendo de este manera
el desarrollo económico de un poblador dedicado-, a la. producción.
Por otro lado, las utilidades de las nuevas encomie mías ya no
resultaban atractivas a los conquistadores, por estar sujetas a un tope-
de renta tributaria, a.situaciones pensionahles afavor .de terceros y a
una reglamentación rígida sobre d, entero del tributo.

En su crecimiento, las haciendas que apuntaban a ser grandes


.-.'propiedades - tuvieron . que enfrentar el •gran obstáculo .de la
insuficiencia o carencia de indios a consecuencia de una áismimición
demográfica. En estos primeros años la mano de obra esclava no

A! respecto véanse los trabajes de Carlos Laso Gss’t ía t>k « t


Ton» S!; y José de k Fuento-Branke oh d t

69
soto era escasa, sino además costosa. En la medida que la demanda
de mano de obra se incrementó y el tráfico de esclavos no abastecía
esta demanda, Sos precios subieron, dé 300 a 650 pesos. Décadas más
adelante, estos precios bajarían y se estabilizarían entre 350 y 400
pesos.

2.1. FUNCIONES

La hacienda-colonial constituiría algo más que una empresa


económica. Ella, cumpliría un importante y complejo rol social ,y
económico, cuyas diversas funciones iban desde lo demográfico y
fiscal:hasta, el desproporcionar servicios religiosos y alimenticios, a-
sus trabajadores.44 Esta institución era el lugar de repliegue de .las
poblaciones indígenas que huían del servicio de mita colectivizada y,
además, el medio más sostenido para, que Sos propietarios ejercieran
un señorío dominical, y que pusieran en. práctica las virtudes sociales
del catolicismo para de esta manera lograr'. la.'honra-' de sor
reconocidos corno “buenos hombres” por ser hombres de fe, caridad
y liberalidad,

La posesión de una o más haciendas no solamente estuvo en


relación al poder adquisitivo del hacendado, sino también al prestigio
social que este propietario, quería ostentar, pues con la adquisición',de
una propiedad marcaba su. ubicación privilegiada".' dentro -.•.dé--ésta
estratificada sociedad.

Las haciendas por ser bienes raíces de primer orden dada su


estructura rentística sostenida, eran propensas a la imposición de
dinero por parte de terceras'personas-,, bajo la modalidad de censos,
capellanía.?, aniversarios, buenas memorias, etc.. La renta que fluía de
ía propiedad, ía buena reputación de la familia y el contrato firmado
notarialrúente, eran por lo común los únicos garantes de este pacto
económico.'

Los censos eran un' modo de obtener dinero mediante el

Pablo Macara «b. d t Pp. 3OTII-X5SV.


70
precio que el hacendado lograba a! vender una renta censal anual
proveniente de su propiedad, que debía abonar el comprador a i
paites proporcionales cada cuatro mes.44 Con este dinero podía
adquirir más tierrasj'ésckvos, .instrtanentos de labranza, etc. Aunque
algunos hacendados, obtenían estos censos para cumplir con otras
deudas pendientes, ocasionando posteriormente la pérdida de ia
{iropie.dii.ii, al no cumplir cor* Sos pagos establecidos. Los censos
llamados enfiteúticos podían ofrecer oteo tipo de beneficio al
propietario de la tierra, como el cultivo de tiestas hasta entonces
eriazas por ejemplo.

La hacienda podía ser vendida, en cualquier momento. El


único impedimento que pódala presentarse. para la venta, era. qs.se
estuviese comprometida a pagos ó''pensiones:;"ríd satisfechas. D e ser
así, los acreedores esíigían el pago correspondiente de la deuda, antes
ele realizar cualquier gestión de orafnpra-ventá o .requerían, que el
comprador del pfddio asumiera las obligaciones pendientes. En
algunos casos y ante la imposibilidad de que los propietarios
asumieran el pago de los réditos del capital principal acumulados, los
acreedores podían solicitar el remate de la propiedad, teniendo ellos
la prioridad para comprarla. La idea principal era recuperar el dinero
adeudado.

Lo ideal de toda hacienda era realizar’ el menor gasto posible


en. el proceso de producción, si era necesario se producía todo dentro
de ella. En «aso de m ser así, se buscaba ios medios adecuados-'para
obtener los elementos restantes gastando la menor cantidad de dinero
o mejor aún, sin hacer usa ele él. Una'de las modalidades para tal fin,
ara la de absorber o 'anexar !a producción o las tierras productivas
colindantes de propiedad indígena*o española:. Ésta modalidad es
catalogada por Polo y la Borda como una economía de

•y

M Para 'mayor ¿sfajj&járidn víase eí trabajo' dé Carlos Xazo y Ales


OrtBgal, “La banca y eí crédito en el feudalismo peruano colonial Siglos XVjff-XIX
(1600-1821)”. En: S m id a ;é d ATiáh&ó' Cítwrál dt ía Madorn, N° 15, punto IV,
Canso Conságnatsvo. 'Lánda, ÍSS1? .' ■
'
71
"sutoabastediifiierítc/'

Los únicos; desetbboisos. forzosos de dinero eran destinados a


restablecer tamaño de obra esclava, filio se realizaba sólo a i caso de
muerte, pues incluso enfemios trabajaban. En. este sentido . las
reposiciones regularmente se báesaácada 15 ó 20 arlos o en tiempo
merwr por muerte prematura del esclavo,

3. ESTRUCTURA ÍT O R N A
«
3,1. Fi/ESZA B E t r a b a j o -

Una unidad productiva estaba compuesta por trabajadores de


distintas categorías, cada una con junciones múltiples © especificas.
Dentro de esta variedad podemos distinguir a dos grandes grupos de
trabajadores; indirectos y directos.45

A. TRABAJADOBES INDIRECTOS

Este grupo estaba coníbnnado por el enqjresaríb hacendado


residente y el arnrend&tario. El primero con un dominio directo y útil y
el .segundo por intermedio de un contrato, obtenía' el usufructo o
donúnip útil de la propiedad. A este: rubro .también pertenecían los
administradores de las haciendas cuyos propietarios eran absetóstas.
Todos tenían a su caigo la conducción de la gestión empresarial,.2*48

P«lo y la Bo«b„ “P&chadma, una Kácienáa EotM:


Autoabastecánú&l» y Comsícblfeadóa". Esa; Xssisfa HactesiM, C « * c f e ,
ISscaiMaá y Lestes S®áates tPeráC«}festíal)L]üma, 1981, Pp. 12-1.4.

48 Haasa Y®gas, ScoBomía Rwkl y Este-admira Sedal «a las


Hadissiáas de láaa» dasraosta <á sá^-o W B X Xisna, 1996. Pjp. U9-123.
72
a. ELHACE3NDADO

Los hacendados eran en su mayoría, españoles


conquistadores, colonos o hijos de estos, También' los había de
distintas órdenes religiosas. Todos ellos intentaron de forma
pragmática, cautelosa y realista, organizar 'el funcionamiento de sus
haciendas- No todos pudieron hacerlo, razón por la cual los -libros
notariales del siglo XVI, registra una innutnerable cantidad efe.
contratos de compra-venta de las haciendas.

El hacendado contaba con la. ayuda de mi acbúnistrador,


mayordomo, licenciado, médico, capataz;' alguacil, etc., todos ellos
subordinados a su mando. En algunos casos ios hacendados
residentes dejaban la hacienda a cargo de -un- administrador, quien
asumía las funciones, durante su periodo de ausencia en Lima. Los
hacendados de los -valles .aledaños, sino en los solares que poseían en
la ciudad, pero dada la cercanía de sus propiedades rurales las
frecuentaban continuamente, de modo que puede decirse que eran
cuasi residentes. Según las circunstancia, parte o toda el área era
.alquilada a quienes estaban en las condiciones da satisfacer el monto
determinado de alquiler. Esta modalidad le permitía tener un ingreso
asegurado por parte de la hacienda.S
i

Si bien el lucro no era el único fm del hacendado, era si et


más importante. La ganancia del hacendado -provenía de- -la
concurrencia de diversas variables: feracidad de la tierra, bajos castos
de comercialización, rentabilidad 'marginal por acceso & un metv 4o
de alto consumo, etc. De especial importancia en la configuración u
la utilidad era, sin duda, la productividad del trabajo esclavo. Este
hecho resulta fácil de colegir sí tenemos en cuenta que habiendo
costado un esclavo 450 pesos, su -valor era recuperad!? en 3 años y 8
meses, toda vez que su productividad mínima anual se apreciaba
promedia! mente en 121 pesos, descontando’ el costo, de su
manutención ascendente a 14 reai diario o menos. Estas estimaciones
deducibles dei jornal de 4 reales diarios natos que se abonaban a los
dueños de los esclavos de alquiler, son tomadas del mercado laboral
de Lima, No se equivocaba pues: el fiel de la moneda de Lima
Francisco Moreyra cuando en
73
1794 aclaraba que no era conréelo apreciar ,1a esckvfeid.^por el tentó
por ciento del dinero' invertido en la compra del esclavo, (sino)
estimar ai negro como jornalero, por su jornal excedente” .4,

A diferencia de las haciendas jesuítas,' los hacendados


llevaban un registro elemental de. sus ingresos, egresos, inventario
general, etc.48

b. L O S A S iU E N D A T A jR I O S

El 75 % .de las .haciendas en. el valle d* Carábsylb


pertenecían a propietarios laicos y.el 25 % restante, estaba en marips
de los Jesuítas,.Beihelgaitas, Agustinos,y Mercenarios.: .

Las. haciendas pertenecientes al primer grupo tuvieron 'inás


de un dueño. Esto se debe a la necesidad que"' tuvieron algunos
. propietarios de -vender sus tierras, Los motivos fueron distintos entre
uno y o te caso. Al respecto, podríamos mencionar ía incapacidad de
los dueños para explotar las tierras, debido a una. enfermedad u oirás
ocupaciones, Otras causas- aducidas, .por los mismos dueños fueron.:
la. excesiva alza de los impuestos de.alcabala, el etéyádó costó de
producción y las pérdidas que se eiperimenisbaa' en las haciendas.
Debe también considerarse com o. causal de venta, J a . racionalidad
rentera que embargaba, k . política, económica de entencos; rentismo
que. al-vaciar las utilidades económicas, a un fondo' 'doméstica'de
consumo introductivo, . progreshranMante. ; manaba. ía capacidad*&

■' Ver Carlos Lazo Garda, I*. 7a&tíra:,«ol«iMi tte


confección de-moneda, de t n t e l l i ) . dudemos ds Nmuismátics SCÍÜP.' 'Lima,
1993. VoL IV. Por so paite el HstoriacSor Kola (3974) manifiesta que la gaancfrael
hacendado podría Aerarse; «ala medida que SB''considerase c o m ió gastó&l‘trabajo
realizado por el esclavo, pues si ello fuera tomado en--.cuenta, ei balance final
arrojaría una pérdida anual bástame elevada.
"* Esta diferencia posibilita un mejor ©stwíso de Sas hádsiwlas.
jesuítas. Para el caso mexicano véase Serenan W.:Xoóhut ÍS«á lsad«íla jísáBá m
& México Colonlsá. SantaLuda,Í5M-17Í7; Mérito, Í589.' Paraé Caso-peruano-
véase Pablo Macera, fiattacdinuspan el manejo de tes hadaiias ju i d » «a el
Per* (Siglos XVHKHOQ. Lima, 1571.
74
productiva de 1.a empresa* por ausencia de amortizaciones' e
inversiones.

Una alternativa para seguir manteniendo el dominio directo,


ara arrendar la propiedad. El anpndaíario firmaba un contrato de
arrendamiento, el cual podía ser por vidas civiles'o naturales. Tanto
en la primera como en la segunda modalidad, el propietario solía fijar
los arios de arrendamiento, aunque' algunas veces él arrendatario
podía sugerís1 la cantidad de años. Es así como los periodos de
arrendamiento bajo vidas civiles podían ser de 9, 15 hasta 50 años
(algunos de ellos obligatorios y otros voluntarios). Por o to lado, los
arrendamientos por vidas naturales podían ir desde i a 3 '('idas. En
este último caso, significaba que la hacienda estaría, en poder deí
aíren,datarlo, su hijo y el hijo de sú hijo, durante el tiempo que
estuviesen con vida, siempre y cuando cumpliesen con el pago del
airendamiento.

Por el contrario, las haciendas que conformaban, el segundo


guipo permanecieron en poder de las órdenes religiosas hasta
mediados de! siglo XIX,4> fecha en que el Estado la? expropia-. Las
ordenes religiosas casi siempre arrendaban sus propiedades. El
propósito primordial era cobrar eí monto acordado en el-contrato de
aarendamíento, que por lo general eran en tercios, mitades o anuales.
Con ese dinero se sufragaban, los gastos cotidianos de sus templos.
Algunos ejemplos podrán ser encontrados más adelante, cuando
hablemos de la hacienda Comas.

B. TRABAJADORES DIRECTOS

Grupo m ás' numeroso.croé' el primero. Cuenta con una gran


variedad de trabajadores,' 'que ' podemos distinguirlos e n : to s

Las hacwodas' jesuítas foeron las primeras en ser apropiadas,


ello ocurrió en 176?. En ífeakiós geaáraJés multaba determinaste para la
conservación del tiftdarato do te ristras ik> tes árdanos religiosas, a! ser reputadas
pvr el derecho vigente de tierras vinculadas o 4a manos «martas; es decir breaos
¡ñipo si) les cíe vendar.

75
categorías: empleados, jornaleros yesdayo©,,;. .

a. EMPLEADOS

De acuerdo a la función que cumplían, la categoría <fe


empleados a su vez puede., ser dividida en profesionales.,
adrrmiisírativos.y subalternos especializados..

. profssiomáles; ' :'■ :

Los profesionales eran' en su mayoría españoles o criollos


titulados. Su pennanencia .en la hacienda no era estebie. pues
dependían de la frecuencia con la que eran requeridos.". De* igual,
manera su pago dependía de las visites y encargos realizados,'' A.'su
llegada a la hacienda, estos personajes recibían;im trato y atención
preferencia!, además, de redi?Ir junto cea? el pago de. sus servicios,
algunos obsequios de la hacienda. - l

Este grupo estaba conformado por el capellán, médico- y


licenciado en leyes;, .

* EL CAPELLÁN ' '' " ' : "

Entre las numerosas funciones que debía cumplir el capellán


se encontraba la de oficiar misas, administrar sacramentos
..•(casamientos, bautizos, etc.) y la enseñanza de la doctrina católica.
Era pues, un personaje importante a quien el hacendado recurría para
dar al personal auxilio religioso y ejercer e l ' consiguiente''' control
soda! sobre sus esclavos. La actuación del capellán tenía lugar en la
capilla existeníe'en un lugar'-estratégico de Sa hacienda.
dentro de las haciendas. Era él quien lo reemplazaba cuando el
Hacendado no se hacía, cargo personalmente o tenía que ausentarse de
la hacienda,. Sus responsabilidades iban desde la disposición de
tierras para los cultivos, organización de las tareas para los
trabajadores, hasta la venta, de los productos elaborados; dando
•cuenta de todo ello al hacendado. '

- - LOS SUBALTERNOS ESPECIALIZADOS . •

Los trabajadores subalternos contribuían con su trabajo a una


buena gestión del dueño o administrador, ' Entre ellos podemos
distinguir a los mayordomos, caporales, guardianes y diversos
jornaleros; con tareas especificas. .

* MAYORDOMO PRINCIPAL..

Uno de los de ¡mayor rango en esta categoría «rs el


mayordomo principal, quien a veces -fungía de administrador. Su
trabajo conllevaba mucha responsabilidad- e -áidusive, debía
responder por alguna pérdida que se pudiera ciar en la hacienda.

: * MAYORDOMOS ESPECIALIZADOS ,. ;

Existían también imyordomos especializados . que se


dedicaban al cuidado de la paila, pampa, calera, huertos y chacras.
En algunos casos, eran esclavos que recibían la confianza del
hacendado y administrador, con el fm de asegurar obediencia y orden
de los otros negros esclavos existentes en la hacienda.

* EL CAPORAL

Un personaje importante para la buena administración de la


hacienda, era el caporal, Su trabajo equivalente ah capataz, permitía

78
* EL MÉDICO

El médico, era un caso análogo al capellán. En cuanto a su


pago 'dependía de la cantidad de pacientes, el tipo de curaciones y
tratamientos que realizaba, Su íótervencídn profesional estaba
autorizada por la licencia otorgada por el Tribunal dfel'Frotomedscato
y sus medicamentos eran de origen vegete» y mineral, apoyándose de
ser necesario su .diagnóstico y'sus indicaciones pomológicas en textos
de medicina general, como el escrito por Martín Delgar (1800) bajo
el membrete Libro de medicina y dsri&gís p ara siso de ios pobres.
cor¡. sis recetario al fliiftl.50

* EL MCEINOADO EN LEYES

El licenciado era requerido ocasionalmente, sobre iodo en


casos de representación ante cualquier'trámite judicial o notarial por
paite del dueño de la hacienda.

- LpSADMENISrRATXVOS .

Todos ios administrativos gozaban de una mayor jerarquía


socio-económico dentro de las haciendas, manteniendo su distancia
con el resto de trabajadores a su cargo,' Algunos vivían en ¡as
haciendas y todos tenían derecho a comida en masa apaste. El sueldo
ara en dinero y en algunas ocasiones mixta; es decir, una parte en
dinero y la otra en especie.

* EL Á D M M S T R A B O R :: ti

El administrador era el más importante, después del dueño,

‘ Este rara maanmíto colonial ha sido reeditado por é Seminario


di! Historia Rra:al Andina de la Universidad da San Míneos en 1980. Esta misma
ittstütaciéa ha publicado Salad y safemeilad «a «1 campednaib» peraa»® ''iá slgto
XV1L Lima, 1977, H estudio fi» rsialfestdo por Lms Girési Basto.
77
mantener un impórtente aspecto de la hacienda para, su adecuado
manejo: el orden.

Muchos administradores y dueños de haciendas entregaban el


cargo a los esclavos libertos, en la medida que obtenían un mejor
manejo, trato y confianza con el resto de trabajadores de su propia
raza.

* ADMINISTRADORES Y GUARDIANES DE
ACEQUIAS

Con este nombre queremos hacer referencia a los


trabajadores encargados del aprovisionamiento, cuidado y
distribución del agua a las tierras de cultivo. Estas funciones por
tratarse del manejo del agua, indispensables para las tierras de
cultivo, eran encargadas a personas de confianza y con conocimiento
en la materia. Estos adrnmistradores y guardianes tenían a su cargo a
un grupo de trabajadores destinados a realizar tareas específicas.

b. JORNALEROS

El tema de los jornaleros es difícil de tratar por la diversidad


de formas existentes. Los habían dedicados a labores específicas que
requerían de especializacíón ■ y oíros, jornaleros libres, no
especializados. Éstos' trabajadores indios o méstizos,-’'estaban a
disposición de quienes íce pudiesen y quisiesen contratar; de' allí que
también fuesen llamados alquilas o forasteros. Tenían comó';'ünico
medio da subsistencia el vendeir su trabajo á cambio de un jornal.,
aunque algunos de ellos podían déclicaj-se a! comercia ambulatorio.
Su trabajo era estacional, dependiendo de las siembras y cosechas
que se hadan en las haciendas. También existían esclavos jornaleros
que accedían a la labor de la hacienda a través de contratos que el
dueño de la tierra realizaba con sus amos, a quienes les correspondía
la cobranza del jornal. Para el caso de los esclavos no especializados
este jornal era de 4 reales diarios, pero podían ser de 6 ó más reales al

79
;t¿a*iars© de u n :trabajador experto «ai una labor impórtente. Por
ejemplo: un maestro chancaquero.

Se daba también la figura de esclavos jornaleros serni-libres,


quienes directamente acordaban con el propietario de k {®ei«da las
condiciones de su alquiler, Ellos tenían'ésta capacidad contractual,
porque sus amos les permitían vivir líbreme site y por su asenta* con
la única exigencia de entregarles periódicamente cierta cantidad de
pesos.

- JORNALEROS ESPECIALIZADOS

Los jornaleros especializados pueden ser divididos en los


rubroi de industria, riego, ganado, cultivo y reparaciones en general.

- DE INDUSTRIA ’ :

Entre estos jornaleros tenemos al molinero, que podía ser de


'trigo, maíz o caña y al pailero, encargado de hervir el zumo de la
caña,

DE RIEGO

' En el rubro relacionado al riego,‘había varias'especialidades,


entre ellas: regar, limpiar, .encauzar, quebrar, 'templar y reparar, 'Estas
labores por ser .delicadas e ‘importantes, generalmente las hacían los
indios (aunque también la realizaban los esclavos) .quienes"tenían
conocimientos ancestrales en estos"menesteres. /

- DE GANADO

El velador.era quien se encargaba de cuidar á las midas por fe,


noche,, evitando robos, por parte 'de cuatreros"o cimaárónés.' Los

80
gañanes y vaqueros, eran mozos de pastoreo y barbecho de la tierra,

Ün oficio curioso lo ostentaba el' "alcalde de bdrricos'f, quien


era el encargado de buscar a Sos borricos perdidos. El arriero o
amador, era quien tenia recua de irailas para alquilar o traiispostar
cargas diversas, Por último tesemos al yerbatero o yerbero, quien
abastecía de alimentos ai ganado de carga.

: - DE CULTIVO

El segador- de alfalfa y el hortelano, eran eviene!? cultivaban y


cuidaban las huertas de hortalizas.

- DE REPARACIONES

Las haciendas también requerían los servicios de artesanos


como el carpintero, albañil y herrero, para la reparación de muebles,
cercas é instrumentos de labranza en general,- que iban desgastándose
con el uso diario.

. C. ESCLAVOS

Los esclavos confórmaban la mano :de obra más importarás


en las haciendas, no por su número, sino por la 'fondón que
cumplían. Su presencia m las haciendas m dependía de la extensión
de las tierras de cultivo, sino - del- ■tipo- d # -producción y capacidad
adquisitiva del hacendado.-*1 La mayor concentración se daba en los
trapiches y haciendas dedicadas al cultivo y producción de azúcar.

Para m mayor Biaeinílinásnti} no deba ohddársé fe dicho sobra la


rentabilidad del trabajo--'esclavo y fes modalidades ds' esclavos joradem: Var
'tsnbiéá . M. Mooraar, “l a hacienda Mspaníamaritmá. jEaactmsix «fe las
investigaciones y ¿abates recientes". Es: Hádeodas', Latifinid&s y H®atacá>«s m
ítüia^ica Lattna, E á Enrique Horescano. Mflsico, WTiS.

81
Para poseer esclavos existííiss dos modalidades; i a compra y
el alquiler. La primera requería im fuerte desembolso de dinero para
su compra, que no todos los hacendados estaban en la capacidad de
solventar. Sí bien la, segunda implicaba también un desembolso de
dinero, no era tanto como la primera, pues se arrendaba de acuerdo a
ías necesidades de la siembra, y durante fechas detenninadasb2

Una vez hecha la. compra se marcaba al esclavo con un


símbolo o primera letra del apellido del dueño.53 Su vivienda dentro
(te las haciendas eran, los galpones y su alimento más común, el frijol
y el maíz. Algunas veces se les proporcionaba las menudencias y
órganos internos de los anímales sacrificados.

Iva primera obligación del esclavo era obedecer a su amo,


caso contrario podía ser fuertemente castigado,34 El esclavo no sólo
se encargaba de las faenas relativas a la siembra, los había también
dedicados al trabajo doméstico, cocina y crianza de los hijos del amo.
Estas modalidades de trabajo le permitían llevar una vida menos
agitada que la. de sus pares empleados en los trabajos agrícolas,
panaderías y casas de fundición.

Si bien el trabajo variaba de acuerdo a k edad y sexo, todos


estaban en 1.a obligación de realizar alguna tarea. Se trabajaba de

Rolando Mellafe, Breva IrísfoiM á t la eseteraftaá negra m


AsaaMc-a Latina. México, 1973.

Algiaios ejemplos los podemos encontrar en •Fedeikk 3?. Bowsér,


El. esclavo afticano m d P e m Cnfewdut l324-ld5S. México, 1977. Fp. 121.

34 Las peoaEcladss en al período colonial, frieron severas y tuvieron


xana triple connotación: retributiva (de acuerdo al delito), coactiva y ejemplifícadora
(con relación a los demás). Es asi. como ningún esclavo era castigado 'en privado.
Eo caso de fuga, ios esclavos «an perseguidos por ios am arradom o
calpisques, una suerte de alguaciles particulares especializados en esta, tarea. De no
contar con estos buscadores de hombres, el dueño podía solicitar el auxilio del
Alcalde Municipal de la Santa Hermandad o gendarmería rural, quien con el auxilio
de tai número de alguaciles, por lo genera! negros libertos, recorrían el campo en
busca de este esclavos fugitivos que m dedicaban a! bandolerismo y rimarronaje.

82
Ktdfirick3C'.vscrI$?7
lunes a sébacb, y los' domingos eran destinados al descanso. Aunque
muchos de ellos aprovechaban el día para, realizar tareas agrícolas
propias, destinadas a crear algún ingreso complementario de su
escasa economía. En este sentido, los dueños de las haciendas
permitían que los esclavos en sus ratos libres, se dedicasen a la
recolección de leña, con lo cual les permitían \m ingreso económico
adicional. Este dinero era destinado a da adquisición de alcohol,
tabaco, vestuario y diversos artículos, que deberían de ser
proporcionadas por el hacendado,

l a leña recolectada por los esclavos, era vendida en la ciudad


para las casas, monasterios, hospitales y -otra»''-instituciones. Otra
parte era destinada a las pastelerías, panaderías, mazamorrerlas, etc.
Las pulperías y bodegas, la compraban para posteriormente
revenderlas.

4, PRODUCTOS ELABORADOS

La producción en las haciendas del valle de Caraübayílo cía


muy variada. Muchas de ellas producían ñutos, verduras, tubérculos
y legiimiiiosas, como por ejemplo: plátanos, sandías, melones;
tomates, cebollas, zapallos, coks, lechugas, aceitunas; papas,
camotes, yucas; maíz, trigo, cebada; fríjol y garbanzo.

Algunas haciendas criaban burros, muías, bueyes;, cerdos,


vacunos y camero;:: de castilla. Todos ellos eran alimentados con el
pasto, alíaLía,chala, cebada y gramaks*- proporcionados por k misma
hacienda o haciendas aledañas. Los carneros dé" castilla, cerdos y
vacunos eran beneficiados y. vendidas a las chacras^ o llevados al
camal en donde se expendía la carne y la cecina, Adicionalmenfce, se
vendía el cuero, lana, leché, queso y sebo para la elaboración de
jabón y manteca..

Entre los productos más preciados y de mayor volumen


podernos mencionar al trigo,, caña y alfalfa. El trigo representaba el
alimento básico en h dieta de la población limeña, Su producción
83
hasta fines del siglo XVJI, fixe realizada en-- los valles de. Lima y
alrededores. Posteriormente, después de ios fenómenos sísmicos que
empezaron en 168?, la producción disminuiría hasta desaparecer,
siendo necesario importarlo desde Chile.

La crisis de la producción de trigo y el incremento del


comercio interno por.-el-aumento del comercio exportador, .efecto
tanto del contrabando francés como de la de reactivación, económica
auspiciada por Sa Reforma B o rb ó n ica,im p u lsó J a producción de
alfalfa y «ana de azúcar, Los trapiches eran los lugares donde se
elaboraba el azúcar, la .miel y la chancaca. Estas unidades
productivas se verán robustecidas, por. el comercio realizado, con
Chile.

El aceite, considerado como un producto manufacturado,


aunque no se laboraba a gran escala, pues su cultivo proporcionaba
tea sólo una cosecha anual, era consumido mayormente por los
españoles: laicos y religiosos.

En la medida que la población amnentoba, fue necesario


construir más casas. En este sentido, la. Calera adquirió una relativa
importada..- Su producción principal era la caí, que era utilizada en
las construcciones de: "cal y canto" y sus derivados, tales como
ladrillos y-lozas. La Calera varias veces aparecía unida al Trapiche,
porque la cal era uno de los insumes' que se requerían para la
elaboración de), azúcar.

La paja obtenida de las gramíneas -despojadas del grano era,


.•usada, como forraje o combustible. El carrizo, extraído de las tierras
"inútiles" de la hacienda, al borde de los ríos, acequias, montes-: o
Lamedales, era. utilizado para la fabricación de cestas de capacheria,?*

Para mayor sifomíación véaas® los trabajos de Carlos Lazo ob.


di. y B esaste soiontitatio de m «oásfc «(«náuites (171847311). Lima.. 1997.
ileaua Yega ob. át. Pp. 94. Ver también liberto flores Galmdiu
'^iíítoaracfe y F8®fc«, U taa lim a, 1984. Pp. 11741$.
5. FUNCIONAM IENTO

Para realizar esta tarea se han tomado como muestra dos


unidades productivas: ja hacienda Colüque y Comas. Esta elección
responde a la ubicación que tuvieron en el valle de C&rahavilo, área
que hoy es ocupada por el actual distrito de Comas.

IV. LA i m i G Á C l Q W EN EL VALLE DE CARABAYLLO

El estudio de la irrigación es? los valles dé la costa central, en


especial la de Garabayllo, no ha sido tratado de manera exhaustiva,
por los- investigadores. Los pocos trabajos existentes referentes ai
terna, lian privilegiado el estudio de los valles del Rímac y Surco.
De esta manera, si único trabajo que nos presenta'el área rural de
Lima entre los siglos XVI y XVII de forma panorámica, es el estudio
realizado por Reherí ÍCeiib.'i?

Nosotros como parte de nuestra investigación, más que


reconstruir el sistema hidráulico del valle ele Lima, -para lo asa! sería

1 Entro estos estudios tenemos -sí de María Los^-orov/std,


S*d©rfos Indígenas tte Urna y Cgaafca. lim a, 1978;. Nicanor Domm^iez Faura,
'"Aguas y legislación en los valles ás. L isa. ES repartimiento de 1617”. En: Boletas
¡líJJ. Insiitaí.# Riya AgScro, 1<P 15. Lima, 1988. Pp. 119-1S4; y el de Tolifs Munra,
fedeatansas <$&rogadlo de te comunidad. de ■segwcásts áú d isten de Suaxct de la
psaóncte de iñ¡m t lim a, 1909. ,
Otros estudios referentes al tema aunque no del área th estudio señalado
aedmormente son: H. Vílfenueva y Jeaaeífce Sherbondy, Cisecgc Aguas y Boáer.
Cusco; 1930; W M m m Espinosa, “Agua y riego entres aylfos de Huarocbñí. Siglos
XV-X’VT'V Bnc Actas y M«tD»sias del TiXXDC Cangros© Katexnadoaal de
Ánaíáíeaidatas, V ol 3. lim a, 1971. 3?p. 147-ldó; Steikn Eischar, “Estamentos
Xndígercias ¿el Derecho Colonial de Aguas. Las Reparticiones de Xnsj.illo.” Eir Bssú
íridígíaia, Vol. 12, Mc 27. Lima, 1988. Pp. 115-122; y liogger Kaviaes. Tecnología
itaiiífct. Lima, 1978. Cap. IX

Sobert ICeith, C©zup«tr¿ asía Agrarfan Ctiangíc The


Bmergenc® os: The Hadánda Systea ©a Tibe Permdsm. Cossá. Harvard Uraversity
Press, 1976’ .

85
necesario un trabajo Mes-disciplinario entre .historiadores y
arqueólogos -los primeros para presentar fuentes documentales y los
segundos para corroborar los datos presentados por los primeros-
intentare unos describir las distintas., circunstancias y situaciones, que
provocaron el manejo, posesión y uso del agua.

í. ANTECEDENTES PRiEfflSPÁNICOS

Sobre un suelo conformado por barro1 y piedras de canto


rodado, traído desde las vertientes andinas por gravedad, o por Huidas
violentas y consiguientes aluviones o huaycos, el ¡poblador
prehispámco modeló los: cauces de los "ríos" y los convirtió en valles,
es decir, en espacios cultivables. En este sentido*:refiriéndose. a la
costa central, Alberto Flores Galindo afirma que:
"si cqitciB a f c t t más se ató». iv í ./
ataSsdar áe la doáatf dt Lima, tea&sad» cero»
eje ai. vaS* d«J Efeaac, ír«a m r«*¡IM«ul magia a
ser « 3» especie de fceac» áel «jne dsawsban e
nadan mi conjunto slopeqiMafos vrHes: barras
arrebatadas ai. &Ki«rií> .üwáfejüásf. trabajosas,,
obras de io&g&dAa sfesarcaSadas «¡a •tJaarqaes
prs-.-'SaspstrJLsrvs*1, 55

. Se tienen evidencias que las.' primeras, obras..-,de: irrigación


fueron •realizadas durante, el período Intermedio' Temprano, y
ejecutadas por los pobladores de k Cultura Lima. Tara." Santiago
'Ágiirto (1.984) la construcción de ¡estas obras; lúdriulicás, posibilitó
desarrolla!* üria agricultura de carácter intensivo,. que no sólopermitió
la mdependizacipn del cauce de los lías,, sino que también provocó
un acelerado desarrollo urbano en zonas más amplias v llanas.

Los Collic o Coliique. siglos más adelante, harían, nuevas


construcciones y perfeccionarían el manejo y ' distribución 'de las
aguas,.Su avanzado- conocimiento les permitió encontrar y Hacer uso

Horas O-aliadoob. « i Pp. 3S.


S6
-8
0> vO
£¿L? fíW -8
5¿i i-tj O Sí
£ _Pc
í/í u rts
i 1 u
O
S I -33'
CL, új. jyj

J~! o so
* 3 -1 1
e3 ?? « 3 ^
o< -ti 'Ítf -tí
íí -0 3^
5 -?a s

'Q *
»2P <£
’:!v 1 ;1

P~:
2. É P O C A COLONIAL

Los españoles, a su llegada a las costas americanas, tuvieron,


en consideración “entre otras cosas- la existencia de abundante agua,
tanto para el aprovisionamiento da sus tropas, así como.- para. Ja-
fundación de las ■ciudades. Según F<aái Porras, tal es si csso de la
ciudad de Lima:
" .J a jrowiBfe #® agua y m d W b B d éa .par
amates para teáo 4 vali®, fa& »ijm> de ios
motivos tórnsoaam s» para ía d esd én áel
47ü«delada.áad.„” ái

Fundada la ciudad de Lima, el uso del agua no- se redujo sólo


para la parte urbana, sino igual o más importarle fiie su papel en el
uso agrícola que estaría vinculada-con eí sistema de propiedad o
tenencia de la tierra. La política de colonización agraria tenía
necesariamente, por un lado, que afectar a los indígenas, como
poseedores de las; tierras que se repartían a los españoles, y por otro
lado, exigir un control scbre etí sgua uve de/ífon •reg»? •fes tierras-
otorgadas,

Los; españoles, cada ver; en más; íEinvir© y con propiedades


más extensas, necesitaban proveerse de mayor vduráea de agua de
riego, situación que empezaría a convertirse ert.ún fuerte-'motivo de
conflicto entre españoles y españoles e mcKgenas. Está situación ya
era avizorada por el mismísimo emperador Carlos V en 1536,
teniendo en cuenta la experiencia ocurrida en.el territorio de 'Nueva
España México; -
"Onfenames que la a i t n n ' « r tw fs e ; I «
isiditfs tañeron m la dteisióint f rep'satinitetto;
de tes ageas, m guarde y p á c f t p i eofere Jos"'/
esjiraSoles « «¡aten «starteren. repartidas y
s á W i s las tim as, y juera qo» tetOTffljaa 63

63 Sátd Porras BarrBnectusa.*Xa ndz india en Lana”. (22 dejuEo de


1953). Reeditada ea Dominical «si eí Sesqwwtenario (G7-05-19S&X suplemento
especial dcS “HConMrdo®.!^. 8.
los -aoásBfttts 28ataral.es qu« antes fe its ú im a ms
cargo, coa cayo ¡psBraosr ssaa . regadas,' y sé
do a «ato taso. íá agsj.a que Sebe tarar,
su&ísh'mimíJí é» arn m o**,' p m a da que el
l«ne] quiere prejerir y fe tomare y ocupare
por su propia wtesited, fe sea quitada, trastea
que tastos fes inferiores a «l■liega Ras tierras
que ñmesssa señalada*...” 1,3 :i

Tal recomendación, al igual qus muchas oirás, fueron


descomídelas, Muy por el contrario, sirvieron para obligar a los
indígenas a cuidar el buen ' estado da las acequias, mas no para,
repartirse las aguas.

2.1.. UEGISLÁCIÓN COLONIAL

El espíritu de toda la legislación cokmitd estafen orientada a


no perjudicar el bienestar de los naturales. Pero c; mo e s harto
conocido, los españoles; en basa a ingenio y *¡n algunos casos
teniendo el respsldo de los funcionarios ¿e gobierno, violentaron y
¡ajbordííiisron la economía indígena a su propio beneficio, En este
sentido, los conflictos que tempranamente solucionó fi’ Juzga'tfc de
Aguas (1556) tuvieron como origen, el mcremenfcb de tierras por parV.
de los hacendados.

El Juzgado de Aguas, durante sus primeros años de


funcionamiento,;'tuvo que resolver una serie de áíconvenientes
ra c io n a d o s con los nombramientos' de los primeros jueces de aguas,
quienes debían de ser miembros del cabildo limeño. Este requisito
algunas veces no era tomado en consideración, provocando una agria
discusión por parte de los funcionarios ante el Virrey, la Audiencia y
la misma Corona Real. Esta situación se presentó en 1620, 'cuando el
Virrey Príncipe de Esquiladle nombró a Diego ’Núñez Campo Verde,

sí StcoíSbctói 4» layes de Indlu, Ley 11, Título XVE, Libro


IV.

89
Juez de Aguas sin ser funcionario del Cabildo. Los funcionarios
afectados por este arbitrario nombramiento elevaron su queja al Rey
Felipe IV, quien ' inmediatamente prohíbe hacer’ ese tipo de
.uombramientos’;
".•.datase qtu la d U ’s¡$idcs« la o » M n ^ .
aatoMada.-as. ias¡®n.rM 3¡»mferaffiteKto para
jaeces de agass, sin- portársete Mpssálmeirf»
■áSgHao,-"'5'1

Las primeras .ordenanzas orientadas a normar y controlar el


uso del agua fueron promulgadas por el Virrey Toledo el 21 de enero
de 1577. Estas ordenanzas tituladas Para el Gobierno de las aguas
de la ciudad y el campo,, tenían como misión corregir los desordenes
que causaban los hacendados al pretender' obtener mayor cantidad de
aguapara sus sementeras y aliviar la labor del juez de aguas, que al
incrementarse los juicios no-tuvo ni el tiempo ni el personal para
poder resolverlos,

En las ordenanzas toledanas no encontramos ninguna,


explicación con respecto a la medición o repartición efe- agua por
extensión de tierra cultivable. Tan solo s¡3 limita a normalizar
aspectos de orden genera! como:
- Limpieza de las acequias, "madres" y «aabsidiaj'ias; :
- Conducción de bocatomas m las acequias subsidiarías
• Abastecimiento por intermedió de una sola bocatoma
- Los riegos debían de hacerse de día
, - Los indios debían regar sus tierras por la noche.
La limpieza de las acequias era proporcional al agu;a;'cjue.
recibían,84 . . .vi.,..

Es recién en el Itopartímiento «fe 1617 efectuado por Jucn

Ganíán yPoatero o& d t Fol 1S7V

Toares Sáldamaado <>b. dt. T. BI-Doc; 5. Pp.. 51-59.


de Canseco que se percibe una reglataenlación de ?m riego por cada
diez fanegadas; de tierra.163

Los hacendados, a pe sai- de estas disposiciones, seguían


temando problemas en cuanto a. la. dotación exacta de cantidad de
aguas de riego, De nada sirvió creas el cargo de diputado de aguas -
personaje que debía cuidar los intereses de sus representados- pues
muchas veces haciendo gala de su cargo, sacaban provecho personal.
J a l era la situación para 1773. año en que es nombrado Ambrosio
Cardán y Póstero para.:tratar de solucionar los diversos conflictos y
reglamente' de una vez la distribución de agí® para cada una de las
haciendas de. los valles de Lima. Tratando de cumplir este encargo
saca a luz su Tratado sobre las aguas de los valles de Moas, que a
diferencia del Ihapartim im to de Íé l7 abarca todos ios valles de
Lima.Éfi

AGN: Juzgado da Aguas "i. 3. 4 26.

• Es necesario adata?. <$»« para ía época cofensal.el tsmaine "valía’'


as xsülizaáo con an sentido mucho más arapii© d»l gue actuabnesie fe daesos. Segfe*
k geografía, un valle es xra terreno regado per -m rio. Sm encargo, en fe época
colonial el término "valle".se wálka en sentido más ampi» y más restringido a la
vea. Más amplio poríjue cada ¡sena ñutida por.' un corso de agía ihs.twrá! o artificial),
era considerada como "ooT valle; y-más restringida pong» la exteasíén de cada «no
de esos "valles” era menor a fe «jíjc el término geográfico- .actojúmente designa.
Nicanor Domínguez ob. d t Pp. 0 3 , .
I>e acuerdo a lo tapiscad© y segóti las fíjenles consistíadas, durante fe
época colonial existieron un. total de 2?, vste¡;
- "x>aíle" de Hriascata - "valk'1de Pariache
- "valle" de Hoanctúguaiks - "válfe".de Huacliip®
- "valle" ck Cieñe guilla . - "vafes’1de Lmigandio
• **vaü*" .dte.Sfe del Cerro. ■■"valle" de Asaaocaes
- "valle'1 da piedra Tiza . - "xrdte" dd-Sítase ■
"valle" de Huatica - "•vafe” da Late o Ate.
- "valle" de Surco - "valle" ds Bocañegra
■■"valle" de Maranga - "valfe" de Magdalena
- "-valle" del Chillón - "valle" de Carabayü©
• "valle1’ de-Comas. - “valte* de Concon
- "valle" de .Latín - '''Valla” da Fáchacároac (Cardán y Pontfflo
Fol 305-306; y NicanorDomínguez ob. eit. 113-149).
3. EL REEGO COMO M ÉTODO DE CULTIVO

Para desarrollar una economía agrícola era necesario tres:


elementos indispensables & insustituibles: tierra, mano dé obra y
;agua.- De los dos primeros de alguna manera ya nos ocupamos;:en los
capítulos •anteriores, ahora nos dedicaremos a explicar el'manejo- y
uso del agua.

El agua era tomada de! río Chillón y-lransportadá'-' a las


haciendas por intermedio de-canales y acequias.""Los hacendados
ponían especial cuidado en mantener1 én buen estado' estás
•"••constmcciones, porque de ella dependía obtener los riegosnecesarios
: para sus sementeras. ¡ : -

Para la hacienda Colííque, hemos erícoifrado una descripción


detallada, con las medidas y distribución de las lomas y acequias*/
"...en é monte do* tomas «te p tó íd f e de
agros, la rata costeaaáa por *st» hatíeaila por
«atoro y fe otra por la saltad. la 'que va
descansada de esta «nenia por M «d* ptgtd»
Ceno ® tuimdu •y’.:- salidas de agua, '54
iü«mtariJlas debajo ¿tete tajólas.
Ea tes córralos de B o a una atcaáteBIá1é ¿ :i- ':
ojos, tes pretiles déla caña o ; 'd Candín». B.esá :
tn tierras d« • Crardfcud&a.' I n la ateqcS» '•
principal. un brocal de 32-liarás'''da tegO y :
media bar» de alto y grueso de dos tercias. En
dicha acequia otro brocal deíSí raras dsfegw y
3/3 de graem. y foara y m«dia'de,'^io/.[™.];J.á': ■''r':; '
caja de la acequia largó 214 varas y te d a .,a m
rana bara de profundidad, y los 'pretiles da
m ed ia'"b ara de graeso'/ ■ 'teñ'-'^óiariás/y '
álcsntm'ffla.s; y pasado délas psirédas de la
ofidua-po? donde ateste, y «a 1.a casa de f ssyMs,
dos poauddS'grandes de caí y ladrillo -feide
toman el agna para las pilas.."

Cada hacienda disponía de acuerdo á sus posibilidades y


necesidades, una cierta cantidad, de .'.esclavos'.'para .organizar

m AGN: Protocrfo Notarial N* $27 -'«42.' ■


'
92
internamente el cuidado y distribución del agua de riego que fe
correspondiera. Esta oiganización estaba complementada par otra
externa, en k que todos ios hacendados y de acuerdo a k cantidad de
agua que obtenía, aportaban una cierta cantidad de dinero y esclavos
para sufragar los sueldos efe un regador, k s obras de reparación, la
limpieza de las acequias '"madres" y la contratación de un guardián
permanente de aguas. Los diputados de o d a valle m u los
encargados de reunir los montos asignados a cada hacienda. En
algunos casos, ios hacendados se rehusaban a cancelar estos pagos y
por ende los sueldos del quebrador y regador, quienes dejaban de
laborar hasta que no se les cancelase la deuda pendiente.

Esta situación sé presentó en el valle de Carabayllo el año de


1786, siendo diputado Manuel Salazar, dueño de la hacienda
Colliqua. El monto de k deuda ascendía a 238 pesos y 5 reales, con
un adicional de 200 pesos que correspondían al sueldo del regador,
quien se negaba a cumplir sus funciones en tanto no se le cancelase e!
sueldo del año anterior. i

Las cuentas según cada hacienda eran las siguientes:

BOTIJA POH LIMPIA ¥ HIPAROS BE LA ACEQUIA (ITSd)

HACIENDA BEODAS
Ceocon 115 pesos
Caudmlla 57 pesos i real
Samurai» 2S pesos 2 reales
CoBiqua 2S pesos 2 reales
Pampa del Rey 10 pesos
TOTAL 233 pesos 5 reales

1'u.eate: A<ÍK. Juzgad áe Aguas 3.3.10.30.

La participación efe los hacendados no terminaba con hacer


efectivo estos pagos, pues además de ello, tenían que remitir el
número de esclavos necesarios para cumplir con las tareas de

93
reparación. En caso de no hacerlo, el diputado del valle imitaba a los
hacendados, para con ese dinero costear la contratación, de los
esclavos feRantes. ■-

Algunas haciendas como Punchauca, Naranjal y Collíque,


obtenían el agua no solo del río Chillón, sino también de los puquios
existentes a lo laigo del valle. El Juez.de Aguas Cerdan y Pontero da
noticias al respecto: ■:. ..
■■ "En los dfm sós puquio* qa* b r o t a em ditos
los vaÓes, &SMI los ñuiüosH» dichoso amálio
para la^ f«3rffiaísd.fen de sustierras. Por t®: "
general las asguas pnqnlalüs pwtettecas-a los
Bm«íiGS rtelas «a que felpan, sisMo factible su
aprovMfemaiaste, y ¿fe Lo contrario, ílE .
bacaaáaáo más cercano;—” ®

Esta presencia de puquiales era importante y muy apreciada


por los hacendados del valle, en ía medida que cubría la baja qué
experimentaba el caudal de i río Chillón en algunas temporadas ó
cuando se suspendía el paso del agua por las acequias, en caso de
reparación o limpieza.

4 CASTIGOS Y SANCIONES '

El Juzgado de Aguas, desde su fondación en 1556, tuvo que


resolver una serie de reclamos y denuncias sobre la usmpación de las
aguas destinadas a regar las diversas tierras de las haciendas. Eos
distintos jueces de agías, para tratar de; contrarrestar.'esias'
situaciones, dictaban una serie de normas y ordenanzas, orientadas a
establecer un conecto comportamiento de los distintos propietarios
de las haciendas ubicadas ene! valle de Lima.

Las penalidades fueron establecidas de acuerdo a un orden


jerárquico y con un: :
----- y - .....— --------— ;■ ' '" i r
68 Cerdany Fusilero oh. efe. F«t 3ÚjL *
94
” .„q>ntati3tio ^áracomasjft'.’i basad» m la í& a
de la protección de los tetares es públicos por
medio de te fatinddaáóa ejemplar ante la
realización de una w ta tta d contraria al
derecho.-" 69

La ordenanza más temprana es dictada por el Juez de Aguas


Juan Manuel de Canseco en 1617. Las penas establecían una,
recompensa en favor de tas personas que brindasen información
acerca de quien o quienes eran los infractores;
"...mtafpsmi p«Mí5sa tagwsrf destapa las d ic te
tomas, sí no f e t o a las horas y tírnip»
referido, so peras dé craos.eiíiis patos-por cada =
vas ajaleados las dos.tordas pastes para la
camara de Su Magostad, y la o to para el
deaaadadw , y «fies düas i® Carecí, y slí¡msh:¡
Negro, Mulato, o YndSo do den asóte® íjtssü le, '
serán dados por las Cales acostumbradas de
estaCIM ad.-"70

' Los indios y algimos . n e ja o s: y mulatos pescadores y


camaroneros, para obtener una mejor faena desviaban, el eauoe
normal de Jos ríos, ocasionando con ello una distorsión en k correcta
distribución de las aguas de riego. Estos infractores no tenían la
intención de beneficiar a ningún hacendado en particular. En ese
sentido, el Juzgado de Aguas establecía:
,f.„qíie tos liadlos CaBMíreMfos, y ItecstiEcres
süo hagan dafio en dweartír el Kío para pestor„
se les prohíbe, ígiK no ¡o ¿tejen, ai marte», stao
<pe Jó’dexea siempre iterfo, y por su nateraí
y . corriente, y cada nr¡ a » a sus tiempo so

Hermana Trimbom, El Delito «i las Altas Culteras de


A n M a , Lima, 19=58- Cap II, Paite 1 ítp. 2,7 y S%5.

w AGN: Jusgatíc de Aguas 3. 3. A 30.

95
pongan t e ¿Mías lomas a la a w i
referida, y puestas las Pircas sasagEna pessoma
<pú?M.s ningtaia toma, sil le raade la forma, M
ataje é. Si» para iterar más agua, ra! feaga, oír©
fraaáíi pasa de den pesos aplicados por
teclas piw s para la Camara, y la orna parte
para ¿ Bsrandador, y si fisere Negro,
Il&ákito, íí Yaffio de efe. aróles, que le ssjjráa
71
dados por las Calles publicas..,," '

A pesar de la s' penalidades establecidas, los conflictos y


disputas se incrementarían para finales del siglo XVII, en la medida,
que los hacendados s a c ia n obteniendo más y mejores tierras y el
caudal del río se mostraba muy irregular.

Para 1682, Pedro. Bouiero de Caátnaño y Sotomayor y


Alonso de Ueeda, ambos jueces de aguas, intetiaron soluciorjar los
diversos inconvenientes que ocasionaba una incorrecta distribución y
mal estado de las acequias de riego, proponiendo penas más
drásticas:
"._20® pesos de malta para tes t e f e s d« t e
hadendas...para les ffimyardoinos 1 aSos de
(testera a CMla..y » tes j&égras, tetsK®s y
malstos 100 «u»te y m xues-de cárcel...''72

Para finales del siglo XVIII, Cerdán y Poniere,- Juez de


Aguas y quizás uno de los mejores funcionarios que tuvo el Juzgado
da Aguas, percibe que la causa de ios desarreglos en la distribución
de las aguas, no sólo provienen del mal estado de.las acequias, sino
que también, muchos hacendados criadores de ganados, suelen
contaminar las aguas con una serie de impurezas que perjudican la
fertilidad de. las tierras de cultivo:

ÁGN: Juzgado de Aguas 3 .3 . 4. 36.

AGKí: Juzgado de Aguas 3. 3. 3. 12.

95
***** a s f ii « 'U d te 'n f té 'A g ia por «M tó»
alga»,, cls Ac&qma agen®. jnmqna pasa sor m
fijado jaropa» ssgaii coráa.n.1>ra, iBecasiáai!.
ó s « ñ á if f lto íMüfitei»!», al da
estuco « míu® a d » vados Mecesajlo?, ó
íonáoíans&s, ’i i é i t ’ ^ B É a a te prohibido
¡Scjafero da ^MsáqMiísrss de íssio-s camales formar
lavadero de jdeiev f&íes, Ú«'¿ras áav.tstdí-st,,
qae Met, peijudáqae, malee mlsn&tHya, é ríe
qsiál^ft3¡ii«r modo W b t jas agitas m perjci.do
del Bufete propietesito, y s«b«S?ó ir»s whíksÍ de
« r i w , I tó W a ^ ó despiojo de este «simal
ÍBinnndo^ rayas ■asKredMsss jumen-las Ágaas
En sitaadí», de. síís* «slxemámanta íwdvas;
para las sementera*, é inútiles paira al rm>"
humano, á mas de enfozar M s d A m m a te ,
Y M m i i c n • cor ter&Hías:; los más
p a jo d c id a , y cad continuos tes s t a a s .
acequias. J ' 7j

Las diversas disposiciones establecidas, para- una correcta


distribución de las aguas ele riego, no fueron suficientes para
contrarrestar los ímpetus de los ■■hacendados por aprovisionarse de
más agua que la asignada.piques entendían que a mayor cantidad efe
agua, tendrían mejores resultados.

5. RECLAMOS Y DENUNCIAS

y:i p;., Los redam os y denuncias por usurpación, de aguas suman un


centenar de, expedí entes-,que. s e .encuentran ordenados en la serie
documental del Juzgado de Aguas en el Archivo General de la
Nación. Estudiar todos los expedientes sobrepasa, los límites del
presente capítulo, razón por la que nos, limitaremos a revisar los
expedientes referentes a las haciendas Comas y Coilique. En caso de

Cardán y Pon,tero ot>. cti Fol. 3Oí.

97
ser necesario, revisaremos algunos expedientes referentes a haciendas:
colindantes a las dos anteriormente señaladas. .

La escasez de agua es conocida desde tiempos remotos. Los


pobladores: de la época colonial a : diferencia de los primeros
pobladores prahispánícos, que intentaba» aliviar las penurias de
escasez con prácticas rituales y ceremoniales, -realizaba» una serie de
estudios y modificaciones en la- estructuré hidráulica.74 , En este
sentido, se realizaban una. serie de arreglos en las bocatomas de los
canales principales para permitir el paso de mayor cantidad de agua y
por otro lado, se hacían trabajos de desnivelación de las acequias para
que el agua se desplazara'con mayor facilidad.' :

Se suponía, que estos arreglos duraban sólo mientras durase la


escasez. Pero algunos hacendados, como los de la hacienda Collique
en 1682, se aprovechaban de esta situación para seguir obteniendo
ilícitamente .mayor cantidad de agua de riego, perjudicando de esta
manera a Sos hacendados de la paite baja del valle de CVabaylio.
Los hacendados afectados denunciaban estos actos, manifestando
que:
" .jA íg w fc saeteas a,las 4 áe- la m iñan y.
sél® Ifegíí [a sus Horras ii» sssMwo] sí jn ÍS- M
medito m : ái$m - . d&
a U e m a i t e s i a s á a qué W Mss sióitaá»
ira* casisig© raa dañes ys3rispairaldft...,r Jj ■■

Sí la escasez de agua continuaba,' se recurría, a las aguas da


los puquiales. En Sos dominios de la. hacienda Collique existía un
puquial denominado "Talayera."' qué "dotaba de 2 riegos por boquilla a
la hacienda Collique, 8 para la hacienda Castro,, 5 para Sá hacienda

^ - Algunas auíoiióarles e spa ñola s, «s pedí i' ': tes ;qoB" eras»
miembro s de ágtKia ordea ráiposa, también invocaban a cumies sanies existím ea
el santoral católico para invocar las lluvias.
75
AGN: Juzgado ds Aguas 3. 3. 3.12,

98
Cerro y el resto debía dejarse pasar por ías acequias para el beneficio
de las sementeras de las haciendas vecinas.75

Tales disposiciones muy pocas veces eran cumplidas y para,


tratar (te hacerlas efectivas, los hacendados interesados disponían
esclavos; para, cuidar las acequias y no permitir que se'sustrajesen los
riegos asignada. Esta actitud re aprecia en 1764, cuando Antonio
Arfeurrua, dueño de la hacienda Cetro, dispone que un esclavo de su
propiedad llamado Antonio cuidase los riegos, acequias y bocatomas
<!e agua que le correspondía. Tal actitud era considerada-dentro de
las costumbres cotidianas que se practicaban en los valles.

Martín de 'Admira, dueño de la hacienda CoHiqúé, a! parecer


sórprésicKó al esclavo llamado Antonio tratando-- de corregir-: las
alteraciones efectuadas a su favor por los esclavos de su hacienda,
dando muerte al mencionado negro,. Este crimen es denunciado por
Antonio Arbumia ante el Juzgado de Aguas:
"..jai negro guarda de la hueseada 'Oso», «pe
id mayordomo lo puso para tapedñi» a tóojt y
Martín de Achurra la siisíracdtai del aga»
<¡¡nc hada; a quimas sas fsisúliares le dieron
lautos palos, y tan crueles golpes qae de este
■ maltratamiento le vino la muerto.-” ’

En los años subsiguientes (1780) las víctimas aumentarían,


siendo en su mayoría esclavos:
M.~eJ mayordomo de [la hadend»]
CaudmOa, tuvo a matar- a palos a on
negro de la hacienda [CoBfquej qm era sn
dueño don JosáMai*-" 78

AGN: Juzgado de Aguas 3, 3. <5, 10.

AGN: Juzgado de Aguas 3, 3. ó 10,

AGN: Juagado de Aguas 3. 3. 6. 10.

99
E^i otro crim$m •• .
”.„d. a « p f d o iw ,d*.la hftdeñda,CaasSMÜa,,
sleníto ;Eá presante [ítem M am ut Masaír y
Pieíkáj ásefí.» fie la lad ea d a Coffiq-H*, íSlo
tatuaría de gnñaM as «1 caporal, ttasfca pmarfó
«,■ tras d® Hiorir.. ■cohío •áararlltm tos; autor
otiadnaies^” v :

Esta situación no se solucionaría : env ía; .medida; quedos


hacendados siguiesen desatendiendo ios arreglos; y. reparaciones det
sistema hidráulico o por lo contrario, modificándolos a sis propio
beneficio, =Los hacendados más perjudicados eran1epúetoes.proponían
la. pronto solución de--.estos «convenientes.- / Para, :i'p O ,: ios:
interesados en una justa .dotación de aguas desnegó' eran' ios dueños
de las siguientes propiedades:. ;-t. '.

_KAcr o i m a! ' W fflQ S.___ __.


Concon Nicolás» ffclbñ&s.;:'(c4)jídi!sa'íie Toaré':
Blanca, esposa ds! CapiiáJi José Gasisagas'
Caudivilla Conde áo Lsín^nclio
Otro Antonio.de.AiWrua..:. vv. vp;, /.
Sambra» Antonio de Arbimma
Chacra Grande Antonio Pasqis®!
La Meta Antonio .Pasquel
Pampa del Rey Marqués de Corpa
CoUúfae . Manuel Saiasar y Piedra

Fuente: AGÑ; Juagado ¿«¿Aguas 3.3.8._29,„

Si las autoridades del Juzgado de Aguas no podían solucionar


tos inconvenientes que se presentaban en el reparto de aguas de riego,
aran tos mismos hacendados, quienes por intermedio dé contratos
privados intentaban solucionar temporal mente estos incorrvémeótes.
Es así como en 1787, Manuel Salazar y Piedra,, dueño de la hacienda

AGN: Juzgado ds Aguas 3, 3. 8. 29.


i 00
Coliique., intercambia los riegos de dlapor los de noche con Manuel
Carrillo:.de Albornoz, conde de Durigancho, dueño de la hacienda
Caudmila. Pero.algunas veces, Sa solución originaba nuevos y más
'dificultosos., inconvenientes, como lo demuestra la actitud asumida
por el dueño de la hacienda Caudivilla, cupido Manase! S,alazar
intenta dar por terminado el intercambio:
nJ » sgrefio con insulto* o Sobadas
m&wtQ tacaste soss dd asía *fe iftí&i,
'■'■■■■ ííj*} '
^«v.hwrÉio » > ¡i^iin |0 n yd'aijfiu"

Los problemas continuaron, a si como, los intentos de


solución,.

V. .LA HACIENDA COMAS '

I, ORIGEN

Son varios los autores que se han dedicado a !a investigación


de los orígenes de las haciendas, en .la;colonia,, sobre todo Sos
referidos a la costa. Entre ellos tenemos a Pablo Macera. (1971),
Susan Ramírez (1973), Gavies Keith (1974), Robert Kesth (197G),
Manuel Burga, Nicho!as Cushner y Petar Klaren. No es nuestra
. intención hacer-un análisis de cada uno de.ellos, baste señalar <|ue
todos llegan a la conclusión que 'sunchas de las haciendas se formaron
.por:.,-
-Mercedes^
“ Composiciones
. , - Compra-venta
- Sucesiones.herecHtarías
- Habilitaciones de tierras baldías
- Posesiones ilícitas.

AGM: Juzgado da Aguas 3 ,3 .1 0 . 60.

101-
No es posible -menciona el historiador Pablo Macera- decidir
cuál de estos procedimientos fue el de mayor importancia por épocas
y por regiones. Directa o indirectamente todas procedían deí derecho
predial de !a conquista y por consiguiente significaron: : el
desconocimiento de los derechos adquiridos durante milenios por
parte de los indígenas.

Para nuestro caso, la hacienda Comas se originó por merced •


que Francisco Pizarra en la, década da 1540 dio a. su capitón y
teniente general Francisco de Chávez, por la eficiente labor cumplida
en las guerras de conquista. El temible capitán y teniente general,
oriundo'de Tnyfilo de Estremadu»i% fallecida conjuntatóente cor»
Francisco Pizarra en 1541, año én que ios almagristas asaltaron el
palacio virreinal.

La viuda de Chávez, M ana de Escobar, apodada "La


Romana" le sucedió en la posesión de. la hacienda por un corto
período. Pues algunos años más tarde,, en .1567, la viuda donaría la
mencionada propiedad ai convento grande de k Merced' Lak razones
de tal actitud, la encontramos en el mismo documento elaborado para
la concesión de tierras, que menciona:
(acontarais capadWIsi :|!s¡ra : "
sutiutessirarla".31

Casi do inmediato, el Convento ele la Merced :p érim íA k


hacienda Comas por otras tierras1ubicadas feuel "mismo valle rie
Carabayllo al colegio San Pedro Nolasco, que también pertenecía a la
orden de la Merced,.-;.pero que al parecer, tenían sus propiedades
independientemente una efe otra. De esta tháífexh, -^ colegio San
Pedro Nolasco pasaría a constituirse en el propietario directo de la
hacienda Comas, durante gran parte de! periodo colonial.

AGN: Protocolos Notarialss N5,751.

102
2. ■FANEGADAS DE CULTIVO '

Para la conformación da la hacienda Comas, se concedió un


total de SO fanegadas83 orij^naltnente. En la -visita ¡de tierras
mandadas a efectuar por los virreyes marqués de Cañete (1590-96) y
marqués de Mancera (1639-48), se eootabilisó un total de 96
fanegadas de (¿erras'para la- misma hacienda.-'-' Este'•aütti«nto ..dk^-ló
fanegadas, fue el resultado de la perimsía realizada con el convento
.de la Merced, que a su vez k cambia por otras tierras con el colegio
de San Pedro Wolasco, el año de 1567.

La extensión de 96 fanegadas ele tierras se mantendrá a lo


largo de los siglos XVÍ!, XVIU, XIX y principios del XX.

De las 9v fanegadas sólo 40 aran aptas para el cultivo, el


resto eran suelos eriazos y declarados "inútiles". Las 56 fanegadas
declaradas "inútiles" eran utilizadas para ¡ubicar, los cotrales de los
aniiml.es, tratando de sacar el mayor beneficio.*3

3. ARRENDATAfilOS,.

El colegio San Pedro Nolasco haciendo uso de sus fecuílades


de dueño legítimo, procedería a arrendar Ja hacienda bajo la
modalidad de censo enfiteütico, según la cuaEtrátísferfa el usufructo*53

:xüha fanegada era a v a le n te a 28S varas (0.835 m.) castellanas


de largo por 141 varas de riacho. Es decir, 2 9 Ha, aprorimaáameute (2S.977.S7 ra2.).
Ver Miguel Feijóo da Sosa, Xleladén dasclífiiíva. da la ¡dudad y pro visada de
TrajiHa -éé. Puyó. lima, 1964 [1763]. Pp, 76; Tas» Miguel Glave y Mana Isabel
Estay, Tsáractera Agraria y Vida Kara! <m. ana Ec^én Andina: OÜOTiíiytembe
safra <&sigla XVI-XÍX Cusca; 1983; y Mana Rostworo'wski, Etoía y Saciedad,
lim a 1977. Pp. 52.

53 “Tas cóndiciónBS natealas obligaron .al sargimiento de empresas


mistas deseadas a la yaz. a la agricultura y a la ganadería, ya que estas úígmag bien
podían aprovecharlos peores terrenos de la
Comas. Pablo Macera, Trábalos de Histeria. T«no E l Pp. 158.

103
de la hacienda a otra persona, a. cambio de una renta anual. En caso
que la renta no se pagase puntualmente;, el dueño directo podía
reclamar: .-la propiedad para su . administración .,p., arrendarla
nuevamente a terceras personas.

Según k documentación revisada para !a ópoca colonial,


liemos podido;reconstruir un listado con 15 n®robres de arrendatarios,
en un lapso de 1.20 años aproximadamente:

ASSENBATAKíOS »E LA IfACBÍKSM COMAS


(1672-1791.) , ' .i

A tO *• ' íiMEfOMIAElíOS
un .Antonio Oarda Solano-
1S94 Álfém: Francisco Carrasco;
1701 • Fray Barreta- .. - .
rm MteiíiD. DAAydá'':/ ( :
GáspkFénjSwdas (Sujo)
1717 Fray M i t o de Esfesvantá : ■>
1717 Migad ¿te-CaWSo
1737 As» Gómez (viuda)
174» Fraucisc» Calillo y
Mü¡¡,daS«aa ele Sos'itios
1.7SS Capitón Andrés de'Sanias •• -
1753 Fray-Jtm de ürkEa
1763 Rsaasco Gorostízaga.-..- -.-:
1765 J«aaa Antonio Casan.
1782 Mamel Y. Iglesia, & , . ; :
1790 Manuela Tóbüla(Trocía) ; ; ■
1791 Viceate Lamvá

Ifneaté: AQÍST; Protocolos Nótoiawsí’TOS-lsTs-JSS-


^Ó5^0S¿3Sp-3®5-50r?-:517-604-«02-61^1087^92

; No'todos los áítendatanos terírórsaban los contratos firmados,


pues;' aducieñcfo al^ín impedimento podían dar por terminado su
compromiso con, los dueños dé la propiedad. Los motivos podían,;éér
diversos y entre ellos podemos mencionar:

104
- Su condición de mujer
-Enfermedades *
- Faliecm áeníG
- Compromiso ea actividades de mayor 'beneficio-
- Coyuntura económica desfavorable.

Para tener una idea más; clara,- presentaremos testimonios que


den fe de e stas situaciones. Eu l a medida que los ■■aivsudatanios
encornaban nuevas; ocupaciones y mejores perfectivas, dejaban sin
ningún reparo los contratos asumidos.' Por ejemplo: en 1717, Fray
Martín de Echevarría, declaraba que:
"...haMendo entrado a'poseer ¡iba' tesramite
[Comas] no ha pedirte proseguir as. por
los sandios «aa&araiítts cpie concurren ea rui
persona asi por tener a mi -cargo 8a hacinada
da 3aPaira,queheredocía.m ispadres, corno
por t&quebranto da-sataá y m podes asistir «a'
un tiempo a dos partos..." ^ ‘

.... Las enfermedades era cosa muy '.común; 'Es? 1701, Francisco
Carrasco,.. 'arrendatario de la hacienda Comas, •'mámféstába
encontrare®
'eafenao eá la « n a piteado
terotósa"¿é poü« csMvar, benefidaur: 1y ■
tetra] ai m asta dha chacra y tierna por esta
rasos* iiopodlsílitaá® áe p o te pagar ia
pasmó® an u al cois a¡peIl& pm ta& M íH l «jao sa
debe; por cuya Tasen oenrei ai rauy rem ando
padre maestro fray Prm dsce de Pateas,
redor acCial de áfeo colegio a : péi&ié; qóe -■■:
te ia s e por M et y sus religiosos de admitir la
dejados de las tres vidas—" 35 '

■ Al quedar viuda la esposa de algún arrendatario, ósía no se*68

&4 AGN: Protocolo Notarial N° 40¡5.

68 AGN: Protocolo Notarial N®986.


" 105
encontraba preparada para asumir los negocios de su difunto maridó,
ya sea por incapacidad no habérsele permitido conocer el manejo de
ios negocios o simplemente no querer asumir riesgos. En este
sentido, declaraba Manuela de ía Tobilla, -viuda de Manuel Iglesia
Abarca, en 1790:
" . j » sam e «wuwta la represalia bacierulv
por aa poderla administrar pw mi propia
persona j hwfflfl* á«s val/ssr de «raraaos. «pus la
maifcsjffiia., rajo arbitrio es ssmy p e n d id a ] a
mis Intereses; coiné tsnwfotoi aí no& ttad».. :.
coieg»...: lo qu< me a dalla iwKw», a pus
s e M t persona * g f t e t a í j l s w ’'á' derecho ;•
dalas 'filias.*" ^

Desconocemos los casos en que algunas mujeres se hicieron'


cargo de los negocios de su marido, Pero creemos que de existir
debieron de ser pocos los casos.' Esto sin duda, se déte a la
mentalidad de la época, que consideraba' a la mujer de detenninados'
sectores sodales importantes sólo para, cuestiones domésticas,
llegando incluso a considerárselas como un mero objeto decorativo,
pues las labores domésticas eran realizadas por los distintos criados
que tenía bajo su mando. El derecho de familia vigente avalaba esta
situación al disponer que la esposa podía asumir obligaciones
contractuales sólo con expresa licencia del esposo (Leyes» de Toro
[1505] Na 55 y 56); y que la administración de los bienes gananciales
y-dótales correspondían al .esposo.

4. ARRENDAMIENTO

El propietario directo que mayor tiempo tuvo bajo su


dominio la hacienda Comas, fue el Colegio de San Pedro Nolasco
(desde 1567 hasta la 2k1 década de! siglo XIX).. En este,sentido, ía

ACM: Protocole Notada!N0 337.

■... 106
"mayor; documentación revisada cotresponde a este período. •

Una vez arr^ctada, la principal meta del dueño directo de la


hacienda Comas, erá obtener puntualmente el pago cfel arrendamiento
acordado, dejando al arrendatario en libertad de disponer la
organización de la hacienda, siempre y cuando la,s acciones cjue
realizase no afectasen a ios Sisales existentes. Eí colegio,
representado por el rector, intervertía sólo cuando se fraspasaban las
vidas ertíltéí ticas a uña tercera persona. Era él -previa autorización
■del Consejo Directivo- el encargado- efe conceder la aprobación o
desaprobación del mencionado traspaso. S r casos especiales se
formaba una. Comisión para poder visitar la propiedad y asegurarse
de esta ¡manera, los provechos o desatenciones que' ésta estuviera,
experimentando;

■'Los contratos de arrendamiento incluían una serie de


dádivas, tanto espirituales como materiales. Las espirituales para el
arrendatario y las materiales para el dueño directo de la propiedad:
".-por cada pago qae se reaiwaba, tiñería áe
ia d a sm sásais; a i raña aas por i» pasesa ¿«i
raatíáad 32- nv*$, ima ¡ternera j c a ai»
cabritos, para ta MJtírracséa áft Ja Eesta™ Á
ramM®, tí cútalo !ss í»»«di.8 í l ¡salsas
rfflastas por íl. a te a d¿S ñnrendatarí'a y sás
fasaOlEres.'5 57

Con el tiempo estos conceptos variaron en cantidad, pero casi


siempre estuvieron presentes en los contrato^.

5, CAIDA DE LAS PENSIONES

Arrendada la hacienda Comas, esto significaba para el dueño

AGl'f: Frote cofo Natán,a! N* -'15.

107
directo, obtener una pensión anual de 1,900 pasos, Ba 1694, este
monto disminuiría a tan sólo 900 pesos, con una tendencia á seguir
dísmimuyendo hasta mediados dej siglo XIX, época en que se
estabilizaría. en 400 pesos, cantidad que probablemente se prolongaría
basta 189Ó,

. Si bien el monto de arrendamiento dísmiíJüía i'ápidatTitmte, la


esperanza, de recuperar el monto original seguía latente. Al menos es
lo que demuestran las ded.as'ado|"íes efectuadas por los ñii sanos'
dueflos,. como-el. revenando padre maestro fray Gregorio Calvó, rector
.del colegio.San Pedro Nolasco, en 1717:.. ...
w.wcwi « B |# j jieuU n dt áfc a íS » ;1' -'
oofegw SOI pssos áa áodio
d«s te. ejtid « ia y «stefHÁaA ip& estafes ; ■.-y
iq iiib M o iu d » «a las l u c M s fio tas ;: ., .: .
tmninos y «Hitarais ¿te la
d'ffifSaá.-JiWjü'mi&esí! tos .; < la j p « .js í« á B '
... obligado? a pagar'en 'cada m aSé" JL460 'posos'
O*? .
á la parte d o d i t o , 1 .' ■ '

Estas autoridades, de íuerte sentir,-.-.religioso, .declaraban


teniendo en cuenta el panorama agricolateJásteote.-y-el estado mental
de la época, Es así como en Í701, fray Francisco dé Palma, declara:
”..ji ¡itos nuestro stísor .tos» sertido fl® <jii¿
cose «Kdbs. «stssálMaás MaMaute
cosíidia ¿te trigo a i dícfto v«ffie de Carsáwyllo,

la pam ón wlvaísi si $*¡r fe jSa ¡antes..."
89

El siguiente cuadro .nos ilustrará, efe manera detallada las


ateas, y bajas da la. pensión anual de arrendamiento:

AGN: '.Piótecotos Notariales Íí* 4Qó.

AGN: Protocolos Notariales W 9%@.

108
AR3SCENDAMIENTOS BE jLAm CUNBA COMAS»
(1672-178*1}
AÑ O PENSION
m il 1.900 g>esos
té M 900 pesos
1701 900 pesos
171® 500 ¡pesos
1717 500 pesos
1737 —

1749 500 pesos :


1758 ■■ ~---- -
1753 500 ¡pesos
17f53 500 posos :
17<¡5 éOOpssos
1782 600 ¡pasos :
1708 áíiOpsos
17PI -
ím ote' A&S. Fraíacoios íTstBíialos
l-T?15-536.1345-1OÍÍV-405-3SO-3S5-
5O7.5n.£C!4-$OS-61O-406-4.«

¿Cómo podemos 'explicar está caída estrepitosa de las


pensiones? ¿Hobo acaso una depreciación de lahdlnéndá, por parte de
los an-enda&arios? ¿No se restituyeron los elementos productivos,,
gastados en el proceso de producción? ¿Hubo acaso una «rala
administración de la hacienda? ¿Fueron los terremotos y epidemias,
las que ocasionaron una calda de la producción y el consiguiente
temor de arrendarlas? "¿Pueironlas inundaciones? -'¿La'éaréMa'; 'de
mano de obra? o en realidad ¿La baja de; las pensiones no
Corresponde a ninguna de las situaciones anteriormente planteadas?.i

i La baja de Sa productividad en el valle limeño,; ha sido


estudiada por diversos autores, tanto contemporáneos (Antonio de
Ulloa, Bravo de Lagunas y Miguel Feijóo de Sosa), contó modernos
(Manuel Burga, Alberto Flores Gallado e Heana Vegas). Todos ellos
han discernido sobre las ctmsas de d a ; tóismdmición: de í : tó
productividad, en especial del trigo, pero no han llegado a ponerse de
acuerdo sobre cuál fue la causa o causas primordiales de este
disminución,, aunque coinciden entre oteas causas, que ios terremotos
provocaron una "infertilidad* en las tim as destinadas para, el cultivo
de trigo,31:1 Aparentemente esta situación debería de provocar una
"crisis agraria", situación que no sucedió. •

La siembra de trigo fue -sustituida por plantaciones de caña


de azúcar y alfalfares, que permitió'a muchas haciendas obtener un
producto apreciado tagalo en el mercado limeño como esíranjero. B»
este sentido, Antonio de Ulloay Jorge Juan afirmaban que:
"Antes ári t a e a o ío del año de 1687 a i que
paAetíé tente atpirila. dnflad, «¡tan muy
quaa&osas las cosedlas de .triga 7 eefeaáa m
todo «fud país, y t» tenia necesidad ríe «pss 3*
eatrasñan de fesra pariiarianneate d «rige;
paro entonces se indSsjpnaritt-on de 4áS me da las
fiarías, «pe peinara las saidítas dd trigo qo*
se ss-mbrafesi en rilas: 3o mal » atsíteye a te
alnmáandta fe vágwes sialfiwMs qs» se
«xMarira y a las ^ a M t s .nitros»• que
quedaren «¡partida; en toft» • d t e f í s t o
obügé a fes áuísSas tíe litaras coa ri
estn n k ri* de las jierdídas q«e su üd sei «n
tos primeros años, a átales otros desífcss, y
{«rieren en rilas plantíos de M a t e s ,
cañáronles de aakaar. y otras cosas en ana m
se notaba Igual fecMmkwtew1*’'

Tan importante fue e! azúcar que, par& mediados del siglo


XVm , su producción, y posterior varita s-epresentejríá al Estado
español un ingreso fiscal importante. En vista de estos ingresos, no

“- Véase Demstrio Eatíios, Trigo -Chiten:■nariesros.lid C®1m y


Mcemdaaos limeños, antee 1®crisis sgdco!» dd siglo XVII y la «onusrdai da 3a
'p in o » mitad dd siglo XVSL Madrid, 1967.. Pp. 12. y Siga.; y' Oscar Faites
'yíliarireel, “La.aisjs agrieola del Perú en '<á ultimo 'tordo del "sigiló XVnr. Etc
' Itevirta iHMórfca, lima,. 1964.Pp.'102'yí l £

- ..Antonio deUlkiayJorgeJuan,:Relación dril-viaje áSa jlotaáie®


Madrid, 1978. Tomo H, l$>. .1, Cay. 8. Pg. 122,.

110
queda claro si se trató o no de una "crisis agrícola”. En caso que la
respuesta sea afirmativa, creemos que se trató tan sólo de algo
pasajero, Toda esta situación va dar origen, posteriormente, a un
cambio de cultivo en diversas haciendas limeñas.

Sabido as que los terremotos afectan de diferente manera.


Para ef casó específico de la hacienda Comas, los terremotos
causaron Tina serie de destrozos, a tai punto de:
i?._«c®HÉrarse sin aceros,-., gansios ira
ísm'ssjsteotas y c#sa Ja cas® cauta.. [amai i®
una severa esteiSidad-d1'^ .

Este testimonio pertenece a María Magdalena de los Ríos,


viuda de Francisco Carrillo, enunciado después del terremoto de
1746, «no de los más fuertes ocurridos en la ciudad de Lima.

También es posible considerar que el monto del


anudam iento disminuyera, debido al clima de inestabilidad por eí
cual atravesaba la economía agropecuaria.. Esta situación provocaría
una resistencia por parí» de los interesados en arrendar las haciendas.
Fot otro lado, algunos arrendatarios, aprovechando' la coyuntura,
logran imponer en Sos contratos de asrendsrnlentos, ciertas cláusulas
favorables a sus intereses.

Por lo visto, dar una respuesta eraste míente a la rnterrogenfe


planteada, limas arriba, únicamente será, posible en ía medida que se
.realice un. estudio efe Sos volúntense de producción cíe las haciendas
limeñas, tarea nada fácil si consideramos lo disperso y en algunos
casos, la inexistencia dé la documentación. Esta limitación es sobre
todo para bis haciendas que ertuvi&rón administradas por personas
particulares.*il

AGN: Protocolo Notarial lí* SQ7.

ill
6. FUERZAS PRODUCTIVAS

.«,1. MANO DE OBRA ESCLAVA /

La hacienda Comas, en los primeros años; de íuncionamientó,.


contaba con una dotación de indios mitayos pasa- realizas- las distintas
labores agrícolas. Esto se sabe por la existencia de un contrato de
emendamiento. llevado acabo el año de 1672 por el capitán Antonio
García Solano y el colegio San Pedro Nolasco,. en el que se
menciona;
"...se líe «Etregsfeís dem&o' de tos M ies
é q a e i

1* está» assgiistífos para servido de k dicha


é .

ctacra, segfes si ñtate qa* de estos tasemos y


le Imíüíps da b re g a r. ..para tgae los pida rada
mes da-, tos partios donde. s®repartas...."

Aunque no se menciona ia cantidad de indios destinados para


si servicio de la hacienda Comas, creemos que tib fueron muchos por
dos razones; primero, porque ei régimen de predicción no lo requería
y segundo, porque la población indígena efotramyá rápidamente e»
esa zona.

En los contratos posteriores ya no se hace mención a este


repasto de indios, sino por lo contrarío, serán sustituidos por esclavos
traídos del Africa. V

La presencia de esclavos en fe hacienda Comas data -según


los documentos revisados- a partir de 1694, fecha en que se registran
12 esclavos, con un valor de 650 pesos cada uno. La presencia de
estos trabajadores es; significativa, no' sólo por si trabajo. v<júe
'realizaban, sino porque con su presencia incrementaban el valor total
de la hacienda. Ese mismo año por ejemplo; los esclavos
representaban el 65 % del valor total de la hacienda, que según
tasación era de' 13,859 pesos.

AGÍM: Protocolo Notarial ÜSF715.

112
" En otra tasación realizada - 65 años después» sólo : se
registrarais 9 esclavos: 8 hom bresy ima mujer, por ua valor tota! ele
3,400 pesos. Algunos años .después, en 1765, la hacienda Comas
tendrá un total de 16 negros, cada tino a 400 pesos, totalizando 6.400
Désbs." '

El siguiente cuadro resume la presencia de esclavos en. la


hacienda Corsas, en usi lapso de 71 años:

BSANODE QBBA: MACÍEMBA COMAS (MÍM¡-17ffi>}

■ AÑO : CATIGOIÍA CAMX1PAJ?


'l# í Esclavo 12‘
175? Esclavo ■.-.■■.9;....
" -Esdaya:-- - ' 7 19:
.FssenKí: ACW. ProítscaltisHcí^ríaJgsM3 1^45-537-ííOS

Al parecer la hacienda Comas sólo requería un promedio de


10 esclavos para su füitdoüiwmento, aumentando -quizás de acuerdo a
Sa época y exigencias de la siembra o cosecha, sobre todo'éa-el.
período da rastre y limpia de los campos de cultivo.311 Este número
de esclava® no es bajo, pues oirás haciendas dedicadas a. producir los
mismos productos (ganado, alfalfe y algunos productos de panHevar)
.utilizaban igual o menor cantidad de trabajadores,

‘ Otro aspecto,: ausiípe: raeííC)s: prd)able, que- nos puede Hacer


■'entender'' l a poca presencia d e:esclavos en la. hacienda Comas, es: k
'm e d io -/aí;/cualrecurrían algunos esclavos hartos de ios
maltratos, trabajos forados y mala alim cntóóñ por j&ite de-'sus

~ Cuando los hacendados rsecesiteijaa mayor cantidad tí© mano de


©te. no¡ jacrkneitóalíarss el manejo de ©setees, sino más bien alargaban las jomadas
de trabajo:

■ m- : v.
dueños.95 Muchos de ellos, una vez fugados, se convertían en
salteadores'de caminos-.o delincuentes en la ciudad de l¿ma.9á

Sus víctimas eran las haciendas, tambos , y comerciantes


provenientes de la sierra, de donde obtenían alimentos, indumentaria
y dinero. Asimismo se abastecían de caballos y muías, que utilizaban
.•para movilizarse por ios caminos y chao-as, asi como para escapar
con mayor rapidez y facilidad de las persecuciones de que atan objeto
por parte de. las .autoridades. Sus refugios eran generalmente los
montes como Zarate, Boeansgra, Huachipa, Chillón y otros, en donde
además se-dedicábanla cortar leña,97-JUstosmalhechores no actuaban
solos, sino agrupados en bandas, como la de Andrés Mays, que
rondaba los caminos del valle de Carabayllo y las haciendas de k
entrada de Lima¿ .Dicha 'banda estuvo:
".Jmtíendo nmtitos,- áafe}s...a todos-, ls>s,..
faamstate y mn forassífe a las í»j<sr«¡ que" -
por aJMs&s«M,áfitíaa.„/''' ; .

V ;: * •Está-suposición as poco probable, en lapascy» que las tasaciones


y/o úsvaatarios también., registraban a los..esclavos, botóos o fcraslstóades..a otros
Itr-gmu'.

50 Caños Agasrre-'' yr "Cbades:'-'WáSáarí JíatMSót«ro^: A&tgeos.-y.


'Móntotosíos. CrhninaMaiii y ñ o tau ia m eS-Pará-, Siglos -XV33X-XJÍ. lima, 1990.
.'PP. SI.; '
97 .Acerca de las f r o t ó ' (acetas dé' los' mgró&;':fu'gitnn>s'' 'véase
Carlos Lazo, “Bal negro señorial al negro bandolero:' Cinmronajis y pálaaqueis en
.lima. Siglo rx.'VBT’. Íám ¿ 1997:; ^ 'áattem eafe- la-.bistoriadora Victoria. Espinosa-
ha publicado bajo el auspicio W Seminario da ^•ío ria S.oral An4*^,i».caW^eo.,d«
mayas y. áocamesjíos íeiacioaados. a los palenques, cimarronajE y ^ ^ so s'.líÉ ia ó s
entre, haciejidas del vahe oe lima. Para el valle ¿e Cáabayllo da noticias Mercarte
ía destrucción de un'palenque'de' s^óimiwtóaniBnté 60 esclavos fttgstivos; ¿cció» que
t e comisionado por si Virrey M am á Amaí y .Títrneí al Gobernador d á presidio del
Cálao Pablo Saens de Busiamante (Gaceta de Lina M” 14, 4 da diciembre da 17<S4.
Pp. 186 a 187). Lima, 1999. Pp. XXXV-XXXVI

’ñ ÁGHí:JR.sá ^ rd m e ía (Causas Cráninalcs). Leg. 104. . CJuad.


1263, año 1805. Ver también Ls¡> 23, Cuad. 254, M o 1761 y Leg. 43, Óuaá 549,
Afio 1781. .
: 114
Los dueños ai no «denunciar estas fugas oportunamente,
ocasionaban un malestar no solo a los-demás hacendados,. sirio
también a los habitantes de la ciudad de Lima, a donde se dirigían á
cometer diversos actos delictivos (robos,, estupros» etc,).

En resumen, la fuerza de trabajo en la hacienda: Comas ..se


saslmió en la. utilización de mano de obra esclava, aunque no se
descarta la participación de indios yanaconas o indios alquilas,
dedicados a trabajos específicos. Pero su presencia no alterará la
organización anteriormente descrita, en vista .que la participación
indígena fije mínima y se dio durante los primeros años,, da.
funcionamiento.

6,2. INSTRUMENTOS DE LABRANZA

Las actividades agropecuarias en k. época colonial suponían


una snterrekción diaria de una serie de conocimientos que los
hacendados, administradores; y arrendatarios en general, poseían
rudimentariamente sobre el medio ambiente, los fenómenos
climatológicos y la calidad de los suelos. Suponía además el-úso de
determinadas herramientas y de un micros isierra hidráulico.ss

Las herramientas utilizadas en el valle de Carabayllo eran

® “ ...no se molestan como ea otros payses en estercolar, desecar,


demoler el térras.», aporcar tea prolijamente como en Europa, y otras tantas
operaciones en las cuales.no pueden conseguir tan benéficos finios, Aquí son sus
únicos instrumentos e! arado, que aunque no es semejante en su filtra al que usan
los labradores de la Península, obra sin igual; el otro es ei de k lampa, y con estas
dos hacen todo género de beneficio: caresen de-rastro, da la asadá, ¿el sardllo, la
laya, los mazos para machacar terrones y otras varias herramientas, que le son aBi
indispensables, sin que este cultura y doble trabajo llegue a fructificar lo que a estos
moradores el costo o poco fatigoso afrto de emprendes-, de esta veroát&ihnéttte
proviene Sa escasa dedicación, y el que no están impuestos en los principios teóricos
y prácticos de ua arte tan cesado, pues sin esta logran Jas producciones que les son
precisas”. Tosef Ignacio Lequanda, “Descripción Geográfica de la ciudad de
TrujiUo". Ere Mercurio Vemmw. Tomo VIH. (mayo-agosto), lim a, 1783. Pp. 88-
89.

115
simples, manuales y en general de fabricación casera. Cada
instrumento estaba destinado a una actividad en particular. Xa
diferencia más grande que se nota con las herramientas empleadas en
tiempos precolombinos e incaico®»'«!¿ el -üáo. del hierro como material
de construcción. Algunas herramientas de acuerdo al uso y las
necesidades, sufrían ciertas modificaciones/ las cuales eran realizadas
por los mismos trabajadores o encargadas ai herrero de la
hacienda.500 ■ r

Muy por la mañana al toque de la campana, y después de


Haber escuchado la trusa correspondíerte, los trabajadores salían
provistos de las hesramientas necesarias para cumplir con las tareas
asignadas. Los míe se negaban a efectuarla o lo hacían
defectuosamente, eran castigados con la reclusión en los cepos.

De acuerdo a la temporada iban a barbechar, desyerbar,


aporcar o cosechar, Para barbechar la tierra llevaban las rejas (orados
de rastra),501 lampas y las yuntas con los bueyes respectivos. La
■utilización de bueyes o energía anima!, junto, con d arado de hierro
foe una incorporación de los españoles a la actividad, agrícola en
América. Bu algunos casos para desyerbar no era necesario llevar
ninguna herramienta, salvo cuando la yerba mala estuviera muy
crecida.

m Para quienes guiaran obtener ¡alternación , respecto a las


“bsírami«nías''\ inventos y maquinas de fes talleres artesanales y manufactureros en
la lim a colonial, ver la teas Maestó-t do 'Francisco Quiroz, Artesanos j
Manufacturares en L ta» CotoaiaL lima, 199S. Cap. H Pp. 12- Véanse
tsübiéfi Slíchcar Vws-Bssth, Histeria Agesta. .do Enropa.pcáaíffliál (59Ó4350).
Barcelona, 1978. ParteUI. ,. ... /y.- V , ;
Para la ép-oca contemporánea véanse .Tafo CoítBr.Xas
San Lom ees de Qninti. Las á d r a te , fflmmMzÉas.dé mMgmtis dé fíteáihtltteli
« 1 9 5 5 . lim a, 19SS; y Juan. Echeandia V,, Temologfa; y:' q w ^ ó'sf«r:‘liás
;¿™naidsá4¡5 de San Pedro ele Casta. Lima,. 1981. Estas oteas; Íescriíjen los
cambios y penaaaeacias ocumdas dentro de Jas <omr¡T¿dack,s indigenas
'■Gndmmentes, pro'd^ yv!.
lu3 En Roma estos arados recibían el nombre de “Carracas”. Éstos
arados fiwron reempíazados en Europa éjíaute el siglo XH por tes llamados "arados
¡!©vattsdenf.

fió
Los encargados dé recoger los sembríos de alfalfa llevaban
consigo hoces para cortsí-, costalillos, tajaderas y muías para juntar,
amarrar y íraoisportar la carga a los almacenes' correspondientes. Los
producios de pan llevar como el frijol, iraasx .y trigo, eran .medidos y
juntados en cajones y eoütaíiilés.

Inimitable eran los martillos, "clavos' y ' ristras' de' 'triario^


necesario::; oara componer' y restanrar algunas deficiencias que
presentasen las berrendenlas utilizadas.

Para tener una mejor idea presentemos un Hitado de las


lieow íicntas registradas en las íasatiónes efectuadas en 1694, 1763'y
1765. B i ellas encontraremos indicadas las cantidades
tf)'} ys los aprecios,*
q»se variaban dé acuerdo at estado deconservaciéa.

7. PRODUCCION

En sus".¡nietos k hacienda Comas producía ríiuíf, ir yoí; trigo


y. diversos productos de pafclkvar,' Al^ur.^s -años después dsrifeHa
segunda mitad del siglo X V I el panorama económico y geográfico
del valle de Carnbayllo sufre ciertos cambios que preparo ierraría las
condiciones, pará la instalación de las primaras gracias. Este cambio
es ocasionado par k violenta reducción demográfica, la ou* %v:i vez
originó el abandono de las tierras do cultive. Esta ¿situación le
peroritió al .hacendado español orientar su economía liada la críaasa
de ganado, que no requería de «Bicha mano dé obra -escasa por aquel
tiempo- y contar con campos abandonados «a donde encontraría los
alimentos necesarios para sus guiados.

No todos los hacendados siguieron esta orientación,' pues


muchos de ellos eligieron las mejores tierras de cultivo y
desarrollaron en e ik una producción agrícola intensiva.

: ; Io r:; ,,Ver.'attiessttN®.2,.' '.'o

117
El desarrollo de k economía colonial permitió que las tierras
utilizadas como campos de pastoreo,, fueran adquiridas, expropiadas
o concedidas a distintas personas o entidades religiosas» para
desarrollar en ellas la actividad para lo cual estaban originalmente
designadas. Ante estos.cambios, él propietario y los arrendatarios cfc
la hacienda Comas, sustituirían los sembríos de panUevar por
alfalfares, producto que complementaria su economía- ganadera y k
permitiría además, obtener un. ingreso adicional por la venta de dicho
alimento a los arrieros. „ .

. La sustitución de los cultivos no significaba-" que Jos


productos-de panJíevar dejasen de ser sembrados. Lo que or. realidad
sucedía era que las tierras de cultivo destinadas para la s£i»g¿ca da
productos de panilevar disminuían.. Ikpynsio a prócSrir tan solo !o
necesario para la alimentación de los trabajadores.

No siempre la producción de alíriff-: fae s-étisfacíoriá, hubo


épocas en que por alguna enfermedad (c.iscati») o -disminución tiri
caudal del agua de! río y por ende de u ra dk^imición del agua de los
puquios, el volumen producido’ de alfáltu rar. y^uficiente. p a ra ' la
cantidad de ganado que se poseía. Estas ctrcunsfcricins 'motivarían
una preocupación cométante, qtse tirm como.cqi3secue%ias.una' serte
de conflictos y. dispuf as, ya ser. por invadir.fes 's o á ^ ^ ñ s '. de los
hacendados colindante? o por apropiarse de mayor caááidád cíe
riegos, afectando a los propietaria de Ja parte baja del vallé.

, 7.1. GANADO . /

Considerando el numero de animales, los'cameros cíe castilla


constituían el principal producto'da la hacienda Comas.' Los' carneros:
se clasificaban de acuerdo a la edad, sexo y condición. Por lo general,
ios animales..eran vendidos.en pie, siendo posteriontíéiite trasladados
a los camales para su 'sacrificio...

Del. camero no sólo se aprovechaba la carne,'sino también la


lana, y el valor de ésta se determinaba por su color, ya fuera blanca o
negra, y por la longitud de la fibra. El precio de la lana y oame
yaiiaba de acuerdo a la época, las exigencias de! mercado y los
impuestos establecidos por la corona española.1'55

Los esclavos aprovechaban los órganos de estos animales,


que eran considerados insalubres por los españoles, para preparar con
ellos sus alimentos.

La hacienda Comas en 1694, será poseedora de 470 cabezas


de ganado. L a tasación no especifica la edad, tipo o sexo que tenían
estos ejemplares, pero por los precios asignados suponemos que se
tratarían de temerás de temprana edad; razón por la cual sé les asigna
un precio de tan sólo 9 reales por unidad, dando un total de 528 pesos
y 6 reales. En la tasación efectuada en 1763, con motivo del traspaso
de vidas a Francisco de Oorosíizága, se registraron 39 terneras: 21
avaluadas a 7 pesos cada una, y las 18 restantes a 3 pesos cada una,
dando un total de 201 pesos.

Dos- años después, en la tasación de 1765, se registran 41


terneras: 16 a ira valor 7 pesos cada una,' y 25 catalogados como
temeros de celo a 3 pesos, dando un total de 187 pesos,

.... Las tasaciones de 1694, 1763 y 1765. nos- permite' tener una
referencia general de la verdadera producción de cameros, cabras,
cerdos, bueyes, muías y caballos. Esta referencia genera! a l a que
hacernos alusión, es debido a que en las 'tasaciones no se. registran las
ventas qóe se pudieron efectuar días antes de la referida tasación, con
So cual aurnentaiia el volumen final.154

La predilección por las cabras y cerdos por parte de los

!Dí ... ... Si ibsea el prado da los productos estaba en relación directa ai
costo de producqtón más el beneficio que se obtenía por ella; era él Cabildo limefio
quien rehilaba fes predios, conteoiaba k calidad de los aiticblos, su Htupeza y la
exactitud de los pesos y medidas: María P. Pérez Canto,XSoa& «& csl siglo XVflI.
Madrid, 1985. ?p. 127-136..
españoles, permitió desarrollar una elevada producción de estos
animales « las haciendas. En este sentido, las cataras y cerdos
constituirían el segundo producto ganadero más importante de la
hacienda. Comas.

Para 1765 se registraron 8.5 cerdos y cabras, que avaluados a


2 pesos cada uno, daban un total de 170 peros, 'Adiferencia de los
cameros, las cateas y cerdos eran animales que no requerían mayores
cuidados y su reproducción era constante,,<b

y,,- Al igual que otras haciendas del, valia de Lima, la hacienda


Comas complementaba su producción non la matiza de bueyes,
caballos, muías y burros. El .objetivo' principal ata cubrir las
necesidades internas de la hacienda..

Los caballos y las rnujss en,o utilizados principalmente 'para


transportar al personal y las cargas' de alfalfa,. . Las mutas eran
preferidas por su fuerza y c&pacitfnd por transportar grandes y
pesadas, cargas por largo? hechos; razón por k .que .sai., cotización era
ei doble al de los caballo-..-; o borricos. Las burras recibí ah un trato
espacial por parte de los pastores, quienes después'del. tercer año las.
consideraba* productivas y las fecundaban con burras sementales. El
tener burros y-muías en las haciendas abarataba.®! costo de transporte
de losproductos al mercado.-. ..: ;

Los pastores en generrd, eren gente espqdajszada en este tipo


de trabajo. Se ' movilizaban casi siempre..a. caballo y, estaban
pendientes del cuidado y bienestar de Ipy animales, '‘Su trabajó se
incrementaba cuando llegaba, e! período de reproducción (castrado de
los machos de más de un año, la marca y el corte de pelambre, etc,).
Ba estos períodos su trabajo era supervisado por un capataz y por lo
genera!, una dotación ele ayudantes complementaba este trabajo. El
número de ayudantes dependía de la cantidad de cabezas dé ganado
existente,..en la hacienda. Los ayudantes se escogían'teriiMBó;' en
cuenta la "experiencia e inteligencia" en estas labores. , f .( ,103

103 Acerta áe 1» cñaoza de gaseado ver les testimonios;, de 'Alonso


B « m n ob. d t Wb. V, Cap.IaJXLVUI

...120
7,2. ALFALFA .

La alfalfa era el cultivo más extendido de los valles de Lima


por varías razones:
- Dismirmdóíi dé la ■producción de trigo
- Adaptabilidad al clima limeño
- Resistencia a las epidemias
» Altareastabilida'd'pormímmo costo da la producción ■
- Gr m demanda en el mercado limeño
Faina de ^capital" para emprender otra empresa
- Una siembra aseguraba cosechas pos' c h ic o o más años.

El cultivo ele alfalfa no te s a mayores exigencias. Los


esclavos se encargaban de barbechar las parcelas, utilizando la lampa
como instrumento principe!. Después del barbecho era necesario
hacer un riego pesado que permita que el agua se empoce, para
posteriormente regar las semillas de alfalfa. Una ver. realizada la
siembra era necesario regarla cada tres días y conforme iba creciendo
la n a ta los riegos se hadan cada vez más espadados. Estas labores
no necesitaban de mayor fuerza- de írdsajo, de manera que las
haciendas dedicadas a este cultivo no requerían más que unos cuantos
trabajadores.

Los esclavos detestaban sembrar, cuidar y cosechar los


alfalfares, pues era un trabajo muy duro. Requería despertarse entre
las 2 y 3 de la madrugada para cortar la espiga aprovechando el rocío
que los cubría. La alía humedad y los efectos del sereno eran muchas
veces los causantes de las enfermedades y muerte de los esclavas.

Cubierta, ¡a necesidad de alfalfa en la hacienda Comas, la


restante era vendida o intercambiada con las haciendas Coilique»
Cerro, Infantes, Punehauca, Caudivilla, Tambo Inga y Pro, dedicadas
a. otro tipo de cultivo. La altura promedió ■para-la venta de los
alfalfares, era de una vara aprordmadameníe.

El traslado de alfalfa, al mercado, limeño producía el aumento

121
de los precios.1*6 Para- mediados del siglo XVin, una carga, de alfalfe
costaba un red, y una fanegada de semilla de 10 a 15 pesos.

La hacienda Comas para. 1780, registro, una. prodooción. de


3.000 pesos, de los cuales se descontaba 12‘ pesos y,medio por
concepto de diezmo, 1.6 pesos de -primicia, .y .6,12. pesos de
armv&naiento; quedando como utilidad final 2.342 pesos. Los datos
presentados deben ser tomados con. mucha cautela,, pues provienen
del Pleito de labradores de Lana. '

8. VINCULACIÓN CON OTRAS HACIENDAS

S.Í. LA HACIENDA PRO - '

■La hacienda Pro se encontraba ubicada en el'.valle, de


Carabaylio y:
■".-Jijaste des&a te «atw te sitó capte» gu*. ’
va a te JiRtrkswS», afeado-, por íi
camino M , S«m s4tj’a Ja á a w iíi las '
■toras áe C m *, y a te saspwaróa las cte ■■
Par»* has te itagpr al.. ite , CMlfe, y .
doblando a te tesgotartte por d i w * ,
hasta llegar a Ja hactoda Cimqpaíteuta, y
a seguida ow la liadcnate da N arniaL Y
dóMautuáo para abajo liúda o», la liadeüila -
de Infantes baste llegar al caJtejóa--" !C^

La producción principal conprendía la- elaboración--de


azúcar, chancaca-, miel, guarapo, etc., destinado a surtir la gran

5úi! El precio también se incrementó por el-aumento .de te demanda


cfel paredttcto «riel mercado Bmefio. Esto es dio por el aumento cid;¡número ele bestias
(caballos, muías, betroa. etc.), que. oran .empleados para el transporte & diversas
mereadoías. Pablo Macera oír cit. Tomo'HIPp. 75-76.

,£rf AGN: Protocolo Notarial N°-9®L-

122
demanda de! mercado limeño y chileno. Para damos una idea de cual
era la importancia y cuantía de ía hacienda Pro en el valle de
Carabtiylüo, describiremos en forma general la tasación efectuada el
12 de enero de 1860.

En :está' tasación el precio dé la hacienda Pro ascendía a


142.946 pesca y 3 1/2 real, sin considerar el rubro correspondiente a
la mano de obra esclava, que para entonces fueron liberados y
re-enripiar dos-;por trabajadores 'libres" - (negros,'indios, -mestizos y
quizás algunos “cUlies”). Un aspecto que resaltar de la tasación
meneiórmda- es' que la fábrica y maquinaria--en 'general, representaba
un 20 á 25 % del precio total de la hacienda. Quizás- no resulte
extraño eu.;¡, la medida que el producto elaborado por ía hacienda Pro,
requería una serié- de procesos paía su obtención;-

E í siguiente cua.dro nos dará tina perspectiva de las


instalaciones de la hacienda Pro.

TASACIÓN D ! LA HACffiLNBA HSO (1868(1

^ í I g o í Ia in ic ió
Cañaverales 14.675 pesos
Alfoliares 900 pssos
Ganados ^- ;• 3.654 pesos y 4 reales
Aperos y herramientas 51.7 pesos y 4 realas
fabricas: ;
Agusaífenísúa
Hornos
Coica .
Galpón y com fe 19.512 pesos .
Cobros 3.252 pasos
Hornos y porrones 1.593 pesos y 1 real
Sauces • 1.212 pesos
Cerco, ásadobonés ■i570 pesos y 2 Vi reales
Ac e<ps¡á nueva y tomas 3„6ó© pesos
Tierras de k hacienda , S3.9G0 pesos. •••
Maquinas del trapiche 5.500 pesos
•Fuente: AGW, í’wtoüola Wotarisi N" 382

123
sa INSUMOS..UTILIZADOS

Entre Sos insumo:? más utilizados p o r . la. hacienda Pro,


tenemos al agua y la leña. El aprovisKmamienío de agua fue
importante e indispensable e» al .eultívo de raña de azúcar, formando
parte de las preocupaciones diarias de los hacendados, Para contar
con una.buena dotación no escatimaban ni esfuerzo ni dinero.. En
este sentido los propietarios de khaciendá Pro realizaríais gastos de
liaste 3,660 pesos para arreglar y'.construir acequias y tomas nuevas. .

La leña, considerada como el mayor y mejor combustible de


la-'época,...servio para el funcionamiento de Jos hornos, en. donde se
hacía, hervir al -zumo.: de la caña de azúcar. . El .sauce, por su
abundancia y cercanía, era. el árbol del cual se extraía generalmente la
leña. Los almacenes destinados para.su conservación, eran espaciosos
y. ventilados, .invirtiéndose hasta más de 1.200 pesos,, en su
construcción. . :...

B&. OSIENTÁCEÓK ECONÓM ICA ’'

Para orientar su economía a. esta cspecializaclión, la hacienda


Pro tuvo que "autoabastecerse* dé ios elementos' necesarios en el
proceso productivo,103 De esta manera, los alfalfares, muías, bueyes,
toros, cameros,' cerdos, cabras y algunos productos.: deypanilevar,
serán proporcionados por la hacienda Comas. La alfalfe, serviría para
aJímerstar a los distintos animales de la hacienda Pro, y los■■animales y
producios de panllevar de k hacienda Comas servirían p-ira;alimentar
a ios esclavos de ambas haciendas. Con este tipo de organización, la
idea fundamental era reducir ios gastos de producción y .aumentar los
beneficios.

Esta otgaaización es puesta en práctica por Vicente Laniva


en. 1791 cuando arrienda la hacienda Comas al, colegio San Pedro
Nolasco por intermedio del rector Juan Antonio da. fe Bandera. La

!«í Ver anexo N” 4.

124
familia Larriva para- asegurarse que la propiedad estuviese en su
poder durante varios años, consigue establecer un contrato de
arrendamiento por tres vidas civiles de 5t> años cada una. Para lograr
este contrato, la familia Larríva se compromete a:
".«ríaejorar !.;i iScfe» hadíncte, resaedonrasdola
a tedas á r p e t e olktass y vístanla, aperos y ■ . ■
ganados
"■ necesarios para su taSfíro, e t1fltj
to que
ihs a gastar un «nsidísrafete canda!..”

Si para 1780 da hacienda Pro obtenía'un ingreso líquido ele


4.265 pesos, con la anexión de la hacienda Comas, la hacienda Pro
elevaría su producción y por consiguiente sus ingresos. Así para
1828, la producción en la hacienda Pro alcanzó un ingreso de 9.702
pesos y 4 1/2 reales, ello s b considerar los trastornos acaecidos por
la guerra de independencia.

El siguiente cuadro resuma cada rubro de los ingresos de la


hacienda Pro:

ELAMLLA DE JffiGBTSüS
HAOESDA PRO (JS2S)

RUBRO PHE€IO
Por las ventas da chancacas 7.363 pesos y 2 %
A reales
Délas vueltas de las ventas do chancaca 850 pesos y 2 reales
De la venta de chancaca, guarapo y mieles $85 pesos y 2 reales
Por mieles vendidas en Lima 504 pesos
TOTAL ' 0.7®2. posos y 4 V»r*si*s
Faente: AGH. Piutocoto Notarial Ff®47

AGN: 'Protocolo Notarial N® 1087.

125:
VI. LA HACIENDA. CO JA IQ U E

1. ORIGEN

Lo disperso de k documentación y la escasa información,,


hacen difícil reconstruir los orígenes de la hacienda Collíque. Por
ejemplo: los títulos de propiedad no menciona ni fecha, ni como Siega
a conformarse la hacienda.

Para un, promedio de 250 años aprommadamente, hemos


elaborado una. lista de los distintos dueños de la hacienda Coilique.

PltOMETASlOS DE-X«á HACIENDA CJOLMQIÜE-


¿?~m$ .
AÑO íritOPIETCARiOS
? luis.iS5finb.nffl-:) '
? Pedro Marino de Beredfo
? Mqp-Mskúk
1595? Atona» Gutiérrez (le Tole-do
.1598 Miguel de Bobadiía
1598 Alonso Pérez Vítkmentdiana
7 Franosta .de A pitar
1675 ■ ■Mjffgíuits da'Viilaníeíliaím :
1.682 íi>sefha Vamrto
17.:? Juan Rui?, de ¿una: •; ?
173S Gerdidnie.de BozaSofe¡
1747 Tfeotaas Chabacsue, yHeífWo ■ :
1758 Jos^fMaia’Árias. .;?
177S. Los hermanes celieríderos Josef Antonio,
Nkoksa y Miguel M asz Arias f j
1788 Manuel Salazar y PiecSra y su esposa
MarSaParatee--
1803 Jasef Marttasz de Kivera y Mariano Siveía

í'ustós: AOH. í'rotocnlijsU'iítaiisieKlí'295-297-11^0.5í:J-6‘42-2W-l'JS56‘L

126
Teniendo en cuenta la limitación anterior, llegamos a
reconoce a Juan Sambrano Becerra como el dueño más antiguo de la
hacienda Collique, Su permanencia en ella es incierta.

Para mediados del siglo XVI, la hacienda Collique formaba


paite de tos bienes pertenecientes a la Santa Inquisición. Esta
institución Ja compró ai capitán Pedro Merino de Heredia.

La Inquisición, en un año no precisado, vende la hacienda


Oblliqpje a Alanzo Gutiérrez de Toledo, quien junto a sus hijos es
confirmado como dueño Segal por una real provisión promulgada por
el Virrey García Hurtado de Mendoza en 1595. Esta confirmación es
consecuencia de la campaña de "composición" o legalización de
títulos de propiedad de tierras de españoles.

Desconocemos por qué razones o causas, los hijos de Alonzo


Gutiérrez de Toledo vendieron la hacienda Collique al bachiller
Miguel de Bobadilla, clérigo presbítero y rector de! colegio
Seminario en 1598. Al parecer sus diversas actividades
imposibilitaron hacerse cargo del manejo de la hacienda, pues ese
mismo año la vende a. Alonso Pérez de Vilhmediana en 13,000
pesos.

A partir de allí perdemos el rastro hasta 1675, En ese año


Margarita de Villamediana, como albacea y tenedora de bienes de
Francisca de Aguí lar, solicita una medición y composición de las
tierras de Collique. El documento no menciona las razones de tal
petición, pero imaginamos que fue para tener un real conocimiento de
la extensión de la propiedad, para así poder venderlo a un precio
justo. E l resultado arrojó una extensión de 78 fanegadas, que
conjuntamente con los aperos de la hacienda son avaluados a 48.000
pesos.

Gracias a un pleito seguido por los labradores del valle de


Carabayílo, para una adecuada distribución y mantenimiento da las
acequias de riego, sabemos que Josefha Varreto es dueña de la
hacienda Collique en 1682.

127
Para inicios del siglo XVIXI, la hacienda Colliqúe formaba
parte de los bienes pertenecientes al Patronato Maíheo Pastor.
Desconocernos bajo que.modalidad asta hacienda llego &formar parte
de esta institución, una de las más importantes del vúfeinaio peruano.
Una vez bajo su donánio, ésta la administraría de acuerdo a su
conveniencia y necesidades. En este sentido, algunas veces la
vendían y. otras la arrendaba, pero s i e r r e tratando de imponer a
censo, una parte del valor, total de la hacienda. De esta manera, la
fundación no se desprendía de la hacienda y,obtenía una renta sin
preocuparse del manejo de la misma. Esta renía servía para satisfacer
Jos propósitos benefactores para la cual. fue creada esta institución.
El siguiente ejemplo nos ilustrará mejor la idea planteada:
"El 17 J e . o c tó w de 1737, la hadante
CoSiipe ®s sacada m Te¿áate'^|íúM d^y'
adfaM da ¡ser den Juan Kofe de lama, f o l e é . U ; - :
resemace 21.000 pesos iaspaestos a cees», r
t o » . -tp»- corresponde •d ?*tor.. fe ; 1»;...... ." ..
h atíestie -..’*513 ,

Al parecer Juan Rniz .de Luna, no. satisface las expadativas


trazadas por el Tribunal del Santo Oficio, institución que' se
encargaba de administrar los bienes pertenecientes al Patronato
Maíheo Pastor, pues el 3 de julio de 1738, la hacienda es nuevamente
rematada. Este remate es adjudicado al coronel Gerónimo de Boza
Soüz, marqués de Casa Boza, al precio de 21.000 pesos de. a 8 reales,
de los cuales 5.000 pesos eran al contado y los i ó.000 pesos restantes
impuestos a censo,

'En 1747, el - marqués de casa Boza decide fundar un


mayorazgo para el beneficio, y amparo de sus hijos herederos. Pero
no resultándole conveniente la hacienda Colliqúe por el censo
cargado, decide venderla al contador Tilomas Chábaque y Herrero, ai
precio d§ 76,800 pesos. Quizás pueda resultar extraño el aumento del
valor de la hacienda, que asciende de 21,000 pesos a 76.800 pesos.
Este aumento se debe a que 13 años antes, el marqués, de Casa Boza,

AGM: X’j'Dtofok: Noíarisl W 29S.

12B
había comprado la hacienda denominada San Ysidro de Buenavista,
propiedad del capitán Ma&so de Castro au n precio de 35,000 pesos
y vendida posteriormente junto a la de €ollique.lu

Esta nuevo propietario al no cumplir puntualmente con el


pago de los réditos, es intervenido por al Real Tribunal y Audiencia
de Dientas en 175$, quien vende ia hacienda Collique a Martín
Eduardo de Achurra, representante del coronel Josef Maíz y Arias. El
mencionado coronel nombra como administrador-'a luán Manuel de
Coirobarutia., quien administra la hacienda hasta la muerte del
coronel. Fallecido eí coronel Josef Maíz Arias, los herederos e hijos
legítimos'Josef Antonio, Nícolasa y Miguel Maíz y Arias, interponen
un recurso para que se les entregue k hacienda, aduciendo que el
administrador Juan Manuel Corrobarutia, no cumplía con los pagos
respectivos a los distintos acreedores, poniendo en riesgo la
permanencia de la hacienda bajo su dominio.

La hacienda es entregada a los herederos para su inanejo y


puntual satisfacción de las deudas en 1775, pero no podiendo
administrarla y no queriendo correr el riesgo de endeudarse, decidáis
vender la hacienda a María Perales y su esposo Manual SaS&zar y
Piedra en 1780, por intermedio de un contrato privado en la cantidad
de 200.000pesos.

A pesar de las buenas intenciones de los nuevos dueños, las


deudas permanecían. En este sentido, muerto ■M anuel. Ssiazar y
Piedra, los acreedores resuelven vender ía referida hacienda a
Antonio Solorzano en 1803, Preparada la documentación para ía
venta, Antonio Sol orzan o decide traspasar ia hacienda á José
Martínez de Rivera (Cura Presbítero de la. Doctrina de C&rábayllo) y
Mariano Rivera (Gura Presbítero de la Doctrina de Santiago del
Cercado), aduciendo no poder reunir ios 195.000 pesos que
correspondían al valor de la hacienda. En vista que su ardua labor

15 La diferencia da 20.800 pasos corresponden a fes réditos de fes


censos y al aumento d®i número de esclavos de las propiedades ahora unidas:
Collique-San Isidro da Bnensvistó.

129
religiosa no ie daba tiempo para administrar esta facáenda de su
propiecfed,deciden en 1820, arrendarla a los ser»ores Manuel Gañido,
Rosendo Gao y José Salguero, por un tiempo de 9 silos (4 forzosos y
5 voluntarlos) con una renta de 5.000 foesos asnales (4.000 por el
primer afío, en -vista de! gasto que implicaría arreglar la acequia
principal).113

iniciada la vida republicana, José Martínez, dé- .Rivera y


Mariano Rivera tendrás que sobreponerse no sólo a los violentos año
que significó -el tránsito de una época a otra, sino que además, en
1828, se verán afectados por k ejijiropiaclón de su propiedad á
manos de l a Dirección General de .Consolidación, institución
encargada de administrar las. propiedades pertenecientes a los
españoles. ¡. -

Una vez bajo el. dominio de. la. referida institución, ésta. !a
arrienda a José Fernández por el término de 9 años (4 .forzosos y 5
voluntarios), con un pago anual de.3.500 pesos los.primeros-dos años
y 4.000 pesos los 7 restantes.

2. FANEGADAS DE CULTIVO ■■ , -v;:.;...- 7 ''

La primera medición realizada en la hacienda.Gopqiie y de.,


¡a cual se tienen noticias, se efectué m 1593, por Jiian;de Grasaies,
medidor de tierras, quien reconoce 50 fanegadas de gstensión.. Una
segunda, medición realizada por Pedro de Hoguera en 1642, da como
resultado 78 fanegadas de extensión. Este aumento, de .tierras no: es
declarado por Juan Sambtano. Becerra, .Pedro Heredia ni. por el
Tribunal del Santo Oficio, dueños .de !a referida .hacienda; durante esta
época.

L a ‘hacienda seguirá aumentando de extensión, . cuando el


marqués de Casa Boza adquiere eti 1725, la hacienda San. Ysidro de

112
AGN: FrottiCííí.o Motaría! N° 34.

130
Buenavísta, que unida a k de ColHque es vendida al contador
Thomás Chabaque y Herrero. Aunque no se precisa cuantas
fanegadas'posesa esta, nueva hacienda, suponemos que fae de regular
cuantía, pues esc 1777, cuando los herederos de! difunto coronel José
Antonio Maíz y Arias, nuevos dueños de la hacienda Collique-San
Ysidro de Buenavista, realizaran una medición por intermedio de los
señores Simón Alonso Zusnabar, Alonso Rivera (maestro) y Joseph
del Campó (oficial de fundición) para, poder mostrar la cuantía de la
hacienda y así podar ser acreedores dé los 10.000 pesos que se
encontraban depositados en las Reales Cajas.133 La tasación
contabilizó un total..de 180 fanegadas, de cultivo.

FANEGADAS MÍE CIO 'üNITÁSÜO IMPORTE TOTAL


ISO éO0 peso? 103.000 pesos
T3 400 pesos. S.200 pasos

Faeaíei AGÍ?. Pm too alo Notarial. U*52?

Estas ISO fanegadas de tierras corrientes y de buena


•naturaleza» son avaluadas en 600 pesos -cada una, .dando un total de
103.000:'pesos. Completan la extensión de la hacienda .1.3 fanegadas
de menor calidad, avaluadas en 400 pesos cada una, íotalizando 5.200
pesos.

Para 1780».con motivo de vender la referida hacienda a María


Perales y su esposo Manuel Sal azar y Piedra, se- llevó a cabo una
tasación en dónele intervienen los señores Nicolás Cabrera, Alomo de
Rivera (maestro.; alarife) y Pedro, José Espino, funcionarios
acreditados en este tipo de-trabajo, quienes reconocen 206 fanegadas
de extensión, a un precio total de -88.530 pesos de a 8 reales.

Este dinero iba a ser destinado para cancelar Jas áeaílas qae teína
la hacienda Collique coa diversos acreedores.

131
La tasación es desaliada, y muestra una a ima k calidad,
precio y ubicación efe las tiestas dentro de la hacienda:

FANEGADA CAUDA» M ECIO TOTAL


• 12 Buanas 5SÜ pesos 3P.Ó00 pasos
18 Buenas 550 pesos 9.&GGpesos
10 . Menores 400 pesos 4.000 pesos
S Fuertes 300 pesos 2.400 pesos
% De! puquio ................ 50 pasos
7 Costado de! camino 500 pases 3.500 pesos
6 Delgadas 200 pesos 1.200 siesos
22 Buenas 600 pesos 13.200 pesos
5 Muy delgadas 100 pesos 500 pesos
21 Buenas 500 pesos 10.500 pesos
3 Delgadas 250 pesos 750 pasos
4 Eogramaáas 200 pesos 800 pesos
114 Infructífero 20 pesos 30pasos
8 Pastos 100 pesos 800 pesos
16 Eajiiujuici 100 pesos 1.600 pe sos
4 Delgadas 150 pesos ÓG0 pasos

izante: AON. Protocolo Hatería! M" ú-42

Para las primeras décadas del siglo XIX, is hacienda


•Coliique va sufrir una sistemática apropiación porspaite de : las
haciendas vecinas. Esto lo declaró José Fernández ante la Dirección
General de Consolidación, al momento de presentar una propuesta, de
mandamiento:
"Q u í M í n i to é id is feadeut® aedái- a : :
reasperar csertíd&íi. áe fierras qp® p o s« a poi1 ...
las Iiadíailas vedsias, y sea de la ffflto e ad a '
de ésta, i» decla'a no quedar kdñidás' e» á"
a n e M lé a te ; pues sel» se 'e m p m S o i
■ a^liiis da fa s está as ádaial pttsed&tt, wm» . . . . .
. 'se «¡cprasa m la e»isdííifc sepirfa._ [to ras, : .
casas, galp®, tambos, j deaás oSdnas]."5

¡14
&GN: froto c:»!o Notarial N° 220.

132
3, LINDEROS

Una de las constantes preocupaciones de los hacendados en


general, era la diaria protección y control de los recursos naturales
(tierras y ¡aguas) de la hacienda. Los más adinerados mandaban a
construir tapiales para cercar sus tierras y contrataban guardianes
para prevenir cualquier intento de usurpación y no tener que recurrir
a las autoridades para legitimar su dominio. A pesar de ello, muchos
hacendados en más de una oportunidad, («vieron que interponer
sendc- juicios para recuperar- algunas tierras usurpadas. Esta
s i - u . s e presentaba cuando un’hacendado español afectaba a otro
de ¡ ••ano linaje o condición.

En caso de apropiarse tierras pertenecientes; a indígenas, los


hac -dados no eran parte demandante sino 'demandada. Bu estos
casr- . hacían, uso de toda su influencia para "asegurarse un éxito en
los proceses judiciales: contrataban a los mejores abogados y
realzaban todas las diligencias requeridas -(mandaban a sacar los
títu. s oiiginsJes.de propiedad, ios contratos de compra-venia, etc.).
El resultado final era casi siempre satisfactorio para el hacendado,
pues la paste demandante abandonaba el juicio por no contar con el
dinero suficiente para proseguir la demanda o simplemente ia
seráísícia tío Se era favorable.

Ante esta constante preocupación. Sos distintos propietarios


de ia hacienda Collique, se encargaron siempre de tener al día las;
mediciones con los linderos exactos. Los linderos casi siempre
tenían como referencia algún punto geográfico: montes, cerros o ríos.
Otros preferían usar los canales de regadío, los caminos, las tierras
vecinas como puntos de referencia. En este sentido, desde 1594,
cuando la hacienda poseía 50 fanegadas des extensión, se consideraba:
. . ” por im íteos iiem s cañaverales de. don
fraacSsee de Cárdenas que faetón de
Frantísce TaÜave» y coa diacwa y tiaras de
Atora» Kate que liase i d cacique «te CoHiqa®, y
con te¡ vara, <M tío de Collique, y con n a
csctU!® qme cae « sea dei casuino ¡te TrufiOo, y

133
cora oteo cerrillo míe esta a la pasta de
11$

Los linderos se modificarían en la medida que la extensión


aumentaba o disminuía,. Así en 1642, la hacienda Collique presenta
28 fanegadas más de extensión, originando una modificación en los
linderos:
,,.„áes¡afl'. la psEta del cssr® áe Alpassote,'tí
rostro Usada Lima, Esvaró» a la mamo d«a?e®h®
t e r a s de áo® 'JEtedrígo CaregMistmo, y a la
Isqtósráa las de Celiiqae harta dar. as los ct«
Frsaidsc® Lorenzo y A lba» 'Afona» Moroso
que quedaFMs a 1a mano dssrediá haMsiiá»
venido Sude de «na acequió 'por' lo oral se
tetero hada a la samo iaqoísi'da, y so .fu® por
: «lia. basta. Segar hasta la punte 4a « a carino
redondo laido á«á cual pasa S®asa^BSa, y fe íte
la p a t o de f l d u « n t t o s e voWI hada m ó o
linde 4* la falda de tes dhlros cantos por el
Cmüao Sea! de Huanaco por fl cual se fu*
hasta dar cois U n » del secretarse Lecas de
C ^ d s s S a epro se Seí-am a la ¡man», y>e fe:* <4
rostro al tentó de choque por sinos paredones
M toga hasta dar a las % nam de CelBqní
que se (tejaron por dentro,' y s* Jtepojr 1:1
parto Se afuera lindes de altes y «US dicha .•:•:.>
secretario Lucas de C q M h s hasta t e m
t o r a s de Juan Smobraao de Becerra, que
quedan a te mano derecha,‘y se fíje hasta dar
en el ceno 'de Asacóte'quedando lt a w ■h
iltíao a la ¡¡mano derecha .tierras del f i é »
Larafeirano y pingido..."Iltl

Este segundo reconocimiento de linderos: de la hacienda


Collique,, nos muestra una mayor presencia de los hacendados
ensañóles en el valle de Caráhaylllo. Este aumentó ocasionará años

AÍSN: Juzgado ds Aguas 3.3. 8. 29.

AGN: Juagado de Aguas 3. 2. S. 29.

134
más tarde una serie de conflictos y disputas por las tierras de cultivo
y el aprovisicriamiento de agua para sus sementeras, sobre todo en
épocas de escasez.

Para los años posteriores no contarnos con k respectiva


información, pero suponemos que los lindaros una ves más se
modificaron, por la unión que se hizo de las haciendas San Isidro de
Buenavista y Coilique en.1725.

4. ■ CUENTASs CENSOS, CAPELLANÍAS, BUENAS


M EM ORIAS

La hacienda Coilique fue varias veces, puesta en remate


público. Estos remates congregaban a un considerable número de
postores, que realizando las mejores propuestas pugnaban por hacer
suya la propiedad. Una vez conseguido su propósito, terminaban por
afinar los; términos del, contrato.

Estos contratos eran de diversa Indole, siendo el más común


(para el caso de la hacienda Coilique) “la. venta a tributo” con
imposición a censo de la totalidad o parte del precio de la
hacienda.117 Esta.imposición de censo, bajo bus dos modalidades, en
al fondo originaba que el propietario original no se desprendiera del
todo de su propiedad, pues ai imponer a censo una parte.del precio de
la propiedad, la venta quedaba definitivamente cerrada solo cuando el
capital impuesto le era devuelto. Es decir, en la medida que no se
cancelaba el capital principal del censo o se incumpliesen con los
réditos pactados, la propiedad podría ser recuperada en su totalidad.
Los constantes remates a la que fue sometida la hacienda Coilique,
serán una prueba de ello.

La imposición a censo de todo el precio se presentará, en3

3 La llamada ‘Venta a tributo” en ¡realidad era raía transferencia de


loe dominios directo y útil a censo reservativo o retentivo.

135
1737, cuando Juan Ruiz de Luna, adquiere la hacienda a un precio de
2.1.000 pesos que son. impuestos a censo total, a favor del Patronato
Maibeo Pastor de Yelasco. La única obligación que tenía Raíz de
Luna con el Patronato, era satisfacer los intereses del monto impuesto
a censo. En caso de incumplimiento la hacienda podía ser
expropiada, sin retribuirle los gastos realizados en las mejoras
•llevadas a cabo en la hacienda. Esta situación se presentó el 3 de
julio de! año siguiente, cuando nuevamente es sacada, a remate
público y comprada por ei marqués de Casa Boza al mismo precio,
En este nuevo contrato, se específica que 5.000 -pesos serían pagados
al contado y los 16.000 pesos restantes, quedarían impuestos a censo
•con un interés del 3 % £*33 mil el raillai”).-'

El Tribunal del Santo Oficio, en representación del Patronato


Matheo Pastor, para una mayor seguridad y no queriendo que se
produzca la situación anterior, obligó al marqués de Casa Boza, a
hipotecar una hacienda de su propiedad denominada San Isidro de
Buenavista, ubicada en el mismo valle y contigua a la de CoHique.. El
contrato fue firmado ante Luis Augusto González, Escribano de.
* , ’* -lío
Cámara del Tribunal y Audiencia Real de Cuentas. e

Cuando si .marquéis de Casa Boza decide unir y vender-las


haciendas de Collique y San Isidro de Buenavista ai contador
Tiaomás Cbabaque y Herrero al precio de 76.800 pesos, el capital del
censo sufriría un aumento'. El contrato de venta se fumaría'en 1747 y
en ella quedaría estipulada. que 40.800 pesos serían pagados al
contado y los 36.000 restantes quedarían impuestos a censo.

El interés de estas imposiciones o préstamos",'feqislválían a


un seguro-de vida material y espiritual a. favor de la. persona que
imponía el dinero. En segunda-instancia favorecía a algunos de sus
familiares, y en última, instancia, cuando,, fallecían o quedaban
incapacitados pana cumplir las obligaciones interpuestas en los
contratos, ere la iglesia la encargada de aprovechar los beneficios que
esta, generase.

ÁGN: Protocolo Noíarial N" 2 9 6 .

136
Las imposiciones implicaban normalmente 'pagar uxx interés
anual de 3 a 5%, Cuando los hacendados no realizaban, una adecuada,
adrmnisímción,, se encentraban imposibilitados de poder pagar las
pensiones pactadas, situación que provocarla la pérdida de la
propiedad. Esto lo sabemos por las constantes ventas a la que lite
sometida la hacienda CdJique. Por ejemplo en 1780, la hacienda es
nuevamente vendida a María-Perales y su esposo.Manuel Sakzar y
Piedra, al valor de 200.000 pesos.*1* El contrato firmado tendría un
carácter privado en la medida que ios poseedores da la hacienda
Collíque eran ios hijos y herederos del difunto coronel José Maíz de
Arias.

En la medida que transcurrían ios artes, las deudas seguían


incrementándose y las ventas se sucedían un»’tras ótra. En 1805, la
hacienda Collique és nuevamente vendida, a un monto de 203.000
pesos,, de los cuales 73.083 pesos y 2 reales, representaba el principal
de los cantales de -los censos derivados del precio acensado y no
pagado, y de otras rentas insolutas provenientes; de fondos de
aniversarios, buenas memorias, capellanías,' etc;' La presencia de
estas cuentas, nos demuestra el mcumpii miento de ios pagos.

Los montos y acreedores principales eran:


- 1.0IKP pesos a la capsllímía <paé teísta tfcfis
María Bastidas, monja de SaatíÉ Clara., al. %
tH por cimfó, del" casal as cspol-ái» Eray
de Vargas.
- 2 J1 4 pesés y 1 real ai. fi&wr áaS convs&io de
Sasi Agustín, aS 3 p r deiíio, restsKasiute 87
pesos y 6 .reales al ¡rifo.1
9

119 No resulta extraño que el precio de k hacienda Collique


amiéntase de 76.800 pesos en 1747 a 200.000 pesos en 1780, si tomamos en cuenta
que de 8 esclavos que eran en 1747, aumentaren a 111. esclavos (avaluados en
29.400 pesos) en 1780. Además M aumento de los réditos impuestos ascenso y de!
mejoramiento hecho a iás instalaciones de fe hacienda Collique (amanadas; en gran
parte por á ‘«remoto de 1746). Es asi como las instalaciones, son avaluadas an
95.57S peses y 4 reales y el mstnismital en general ascendía a un precio de 136.760
pesos. AGN: Protocolo Notarial N* ¡542.

137
- 1J49 pesos y 3 1/2 real a furor del ©Kwrato
fie San, Agustín i® la ciudad á« Haanuca, ?&3
por dente, resálta&da 5S peses y 3 reates al
sao.
- 974 pesos y 5 1/2 real, a fw or d d «DOTsatto
de Smi Agustín d® Tfaríja, ál 3 por catato,
resultando 29 pesos y t 1/2 m á.
- 75® pesos a fw or de la buena jimsmíí» que
t o d o la rdi^ioss amia a. diada; que laoy goza
cí monasterio de Sania O ara, cuyo p ta d p a í
« de X S/2 pos' deato, resultando 1S peses y S.
reales al año. ■-
- 2.6ÍW pesos de te csqsdlasñá que fundó
Asteado de SHreyra, «pie boy la goza «as
propesáad é. presbítero den Árasete® de
Agüero, al 2 1/2 por danto, que representa SI
posos a! afio. ■
- 712 pesos del ansvereari© que fiinfló doga
Josefa Bastidas, monja de la Concepción,
siendo capsfflá» actual el SlcíMctado don José
de Lamas, ai 2 1/2 por dentó, resultando 17
pesos y i reales ®1 ano.
- 2.200 pesos de 1®cap «llama que fundó doña
M am ¿ « o & fe. 'Vega, ¡si 1 1/2 por dersto,
que si afio repm saí*» 53 pesos y
eosrasp c a ira áSmrarqués de CasaBoxa.
- 'MS®0 pesos de'la capdlafflíla fenástda por do»
Alonso' Jiménez, al 2 1/2 poc ciento, a farras de
las t a e f e o s áe dom Aloreso Codoy y que boy
posee ií doctor don Gregorio M ór.
- L2#ft pasos a favor de fes tres cofradías dd
Santísimo Sacramento, Buen Lucero y la
PsufeHoa da la parroquia de San L fflio , al 2
1/2 por ciento al afio.
- 1.08® pasos a la capíálaraa qsw. finad© Jija®
de íspñioza, que Boy goza don Agustín
Gorazátes de Agüero, aI2 ÍJ%por danto al afi®,
•• 7.08© pesos del aniversario que fundó doña
Marcela ¡Oomíagoas Samhrane, que iwy la
goza, el. licenciado don Mdcfeor Martínez de
Narvajas, al 2 712 por dente al afio, que
re p m tó a n S4-pesos y 4 reales al suroeste*;
- Id.flS© pesos al Fstamai» de Maíly» Fastor,
al 3 por ciento, que represeatíaa «SÉ©pesos al
®fes, "
- 28 .@00 pesos g forai de la Caja GfljwaJ da
Censos, al 3 por ciado, íesaíteiido 6@ft pesos
al año. ■"■'■■
- 3,574 pesos y 2 reales áé. aniversario que
te d ió el padre Fray Pedro de A lo ca n ai 2 t ít
por cierto, que boy la goza el padre fray Luís
Ozma, resultarlo 82 pesos y 3 reales al adíe.
- 1O.Q00 pesos de la iglesia Magdalena
jaras likdé® d d C acado, al 3 por d«afe>,
resjdteado S o p eses sd año.
- Por t i t e o , he psiarapal de 4 M pesos por
la cape&ania pairánonigá del docto don José
d e n ta r , al Spor ífcEio, resrittando 208 pesos
al año.
úi

Si sumamos las pensiones anuales que se tenían que


satisfacer anualmente, estas daban un monto aproximado de 2 .2 S 7
pesos, que al no ser canceladas eran las causantes dé la pérdida, de la
propiedad.

Revisadas las cuecas de la hacienda Collique, sólo nos


queda una pregunte por hacer ¿cuáles fueron los motivos para áceptar
e imponer Sos censos?. Los compradores de la hacienda Collique
aceptaban la imposición de censos por varios motivos: no contar con
el dinero suficiente, temor a descspiteíiair rii fondo doméstico
destinado a cubrir las necesidades de su estamentalidad, inseguridad
del éxito, etc. En el caso concreto de Collique, el primer motivo es
poco probable si consideramos el caso de la familia Boza, que no
puede aducir una falta dé diiiero, pues dentro de su cuantiosa fortuna
existían:
' ' V: ; - ü tia h i é n d a lam sáa A m a t a s de
B stto , coais.ua estenstoii de 180 fanegadas.
• Una baámda fiamada Nuestra Señora de
la Piedad, con 65 fanegadas de extensión a
21.080 pesos.

AGN: Protocolo Notarial N® 561.

139
- Usa «feacastía «as úS fanegadas de
ssí®i ^ s®i S (6,5®Op®s»s.
- üaas iteras {gje lamas» d á galwm®,
«ara ffidtaáfo da 34 fanegadas a Ui#®
pasos. ' .", ■>..
- Utos'-- dsacsita
asáfflisián, a2.Ü8Ü-pesos. , . ;V . ...
- Ua® . diacajita con 20 fatigadas, a ■
.■■o»
ptetso de2.®2!? pesos., .
-15# esdaros de. todas las feadendas.
-á^w os. de ad fím iy lajear.: :.
- Una casa va de- ■
ía ,•; iglesia .de . ^Nuestra.: •KeS&ra • da . fes • .
Misroedes, a la de &m Juan de Mes.
- IJna casa coa 5 deudas, siMeaia m fe caSfe

En realidad, las verdaderas r&Eones para aceptar fe


¡aposición de censos eran lanío ía inseguridad 'áelénilo' dé «na buena
administración de la hacienda, como el temor a la descapitólización
del fondo doméstico. . Es decir, si 1.a enipresa.. llegase a fracasar, la
pérdida para el comprador no seda mucha y el nivel de riesgo no
resultaría deses-tabilizador.

. De parte del vendedor los motivos para iír^ídner a censo un


monto determinado del precio, de; 'la hacienda, estaban en relación
directa a sus intereses,, pues buscaba con esta actitud, obtener un
provecho adicional, de la propiedad vendida: sin tener la obligación dta
costear,su.: operatividad ni. preoci^arse/por actninisfraría. En este
sentido, el espíritu r e n t ís t ic o se encontraba muy presente en el
vendedor, toda vez que ser señor significaba tener, la capacidad de
obtener “dinero a redando1Ves decir dinero que reiteradamente cae en
manos del dueño <fel:beneficio que lo genera. ^ .---i -

AGN: Protocolo Notarial??9 1150.

140
5. FUERZAS PRODUCTIVAS

5.1. MANO D E OBRA ESCLAVA

Los esclavos constituían uno de Sos pilares fundamentales


dentro de ia organización económica-social del virreinato peruano..
Las haciendas «distintamente unas de otras, los utilizaban de
acuerdo a sus necesidades.

Para mediados del siglo XVÍII, ia hacienda Collique contaba


con tan sólo 8 esclavos:

MANO DE OBRA ESCLAVA


HACIENDA COLLIQUE (1747).
NOMBRES HOMBRES MÜJEEES
Francisco Cojí Mina 1
Manuela Mina 1
Josepf Congo 1
Dominga Conga ■ 1
Namí Chola i
Gerónimo Luciana 1
Canifetísrk 1
Francisco Zem Tecranova 1 .

Fósate: AON. Protocolo Ncrterial N ^llíO

Éste inventario, realizado en 1747, no especifica la edad ni el


preció de cada uno efe Jos esclavos. Más, bien, nos hace referencia de
las consecuencias del movimiento sísmico ocurrido un afío atrás, que
originó la mina de la casa-hacienda y la calda de diversos árboles
frutales. Esta situación provocó en la hacienda Collique, una
disminución en la producción y por ende del número de esclavos que
en ella se requería.

La hacienda recuperaría su nivel de predicción así como el


número de esclavos necesarios para cubrir las actividades laborales
en 1777. Esto lo sabemos por un inventario en donde no sólo se

' 141
señala la edad, sexo y precio de los esclavos, sino también el oficio,
casta y "defectos" o enfermedades que padecían- Los oficios eran
diversos y estaban en relación directa con la producción de la
hacienda. En este sentido existían caporales, lamperos, regadores,
arrieros, vaqueros y gañanes, todos ellos dedicados a la agricultura y
ía crianza, de ganado.

CAPORALES

g
i
MOMBKE MÍXJER m & D PKECIO
1 50 450 pesos
1 ... 25 500 pesos ....
1 Sn 400 posos
1 ■ ... . 50 300 pesos ...
X 60 • 200 pesos Anciana

Fuente: ACJN. Protocolo Notarial N° 527

ESCLAVOS ESPECIALIZADOS
HACIENDA COLLIQUE (1777)

JESPECIAMDA» CAM017M) F1ECLÓ ' ■ 'EDAD


. PK.ÜM M Q. pEcmagDio
Lamperos 3 400 a 500 pesos 2S.a 35 años
lamperas 34 400 a 500 pesos 25 a 35 años
Rñgaáor 5 - 450 a 500 pesos 22 a 32 años
Arriero 5 400 a 450 pesos 2%a 32 años
Vaquero 4 350 a 400 pssos 2<5a 30 años
Ganan .... 5 400 a 500 pesos 34 a3S años

Fuente; AON. Protocolo Notarial H* 527

Un grupo muy cotizado por su tarea y especialidad, estaba


encabe2.acío por los maestros chancuqueros, honieros, canteros,
alfeñiqueros, caleros y pajeros, dedicados a la producción de azúcar,
chancaca, miel, guarapo, tapiales, ladrilllos y diversos productos de
cestería. El precio de este grupo de esclavos tío dependía de la edad,

142
pues a pesar de tener u ta avanzada edad» superaban a otros más
jóvenes por el hedió de tener conocimientos necesarios para
actividades específicas.

MAESTRO CHÁNCÁQUERQ Y HORNERO

CANTERA!) PBEOÉO EDAD


PROMEDIO PROMEDIO
ChaBsaquerd 4 500 a 000 casos 38 a42 arios
Ü 9 S 3 Í€ á í« 4 370 a450 pesos 3S a 42 años
FB®r<íe: AGN. Frotoeolo Notarial U* 527

CANTEROS, ALFAÑIQIJEROS, CALEROS Y PAJEROS

ap~~SSo ~ im cié
' h> pctIctosT
3S Oficiad dscantera 500 pesos
35 Cantero 500 pesos
2S Alfeñiqueros 500 pesos
36 Calero 500 pesos
34 Calero 400 pesos
55 Pasajero 350 pesos
53 Pasajero 350 pesos ...
00 Mestro 400 pesos Anciano

Fuente: AGN. Protocolo NotarialNJ 527

De iodos los esclavos existentes en la liad enda, los más


queridos eran los cocineros y las niñeras. Los cocineros haciendo
gala de una. sazón miguaíafoSe y con los escasos productos que le eran
proporcionados por los hacendados, lograban satisfacer el hambre de
sus congéneres. El frijol y la cecina eran sus principales alimentos,
l a s niñeras eran también muy queridas, no sólo por los hijos de los
esclavos, sino también por los hijos de sus propios amos, a quienes
cuidaban y protegían durante los primeros años de su infancia.

143
PAILEROS Y COCINERAS

EDA» OFICIO PRECIO


33 Palero- 600 pesos
«5 Cocinera 200 pesos
30 Cocinera <450 pesos

StoeKte; AON. Protocolo Notarial tf5527

Los trabajos' en la Hacienda .eran mtensós y eh muchos casos


jos causantes de penosas y graves enfermedades.' Contribuía en este
deterioro lab malas condiciones de trabajo, la deficiente
alimentación533, los castigos como el azote y ia reclusión,

Todos los esclavos, adultos e infantes, estaban obligados a


■trabajar. Los menores de edad, que por estar en período de lactancia,
eran considerados como una carga, para él hacendado, {Segando
incluso a ser declarados con rídefecto" por su, condición. En algunos
casos, los encargados de hacer las tasaciones no Ies asignaban ningún
precio.

La población esclava dentro de la hacienda Collique sumaba


un total de 117 esclavos pana. 1777. Los hombres representaban el
50% de la población, a comparación de las mujeres que sólo llegaban
■a u n 30%. Habían de igual manera 25 menores dé edad, con un
promedio de 5 a 10 años de edad. '

Este crecido número de infantes no era producto de una


política de reproducción llevada a cabo por el hacendado y orientada,
a alimentar la población esclava dentro de la hacienda. Pues realizar
semejante tarea implicaría un fuerte desembolso de dinero para cubrir
los gastos efe alimentación, vestimenta y curaciones, que en muchos
■ casos no garantizaban una efectiva retribución de lo gastado, ya-que
ia muerte rondaba constantemente.

Heana Vegas registra:.que ua hacendare- destíaaba de 15 ® 16


peses al año para, la aüaientacién de un esclavo, ob. cit Pp. 143-144,

144
Los esclavos considerados "sin oficio", eran los menores de
edad, quienes debían de realizar. una serie de labores
complementaria acordes a su edad, pues todos trabajaban. Los
negros congos, bozales, (llegados de M ica) y criollos (nacidos en el
país), eran las castas con mayor número de esclavos!'

SIN OFICIO



KÜMKRE EBAX> PRECIÓ DEFECTO
1. .. w,. 29 400 pesos
1 32 200 pasos Manco
1 .... 14 3SC pesos.
1 ... 15 400 pesos
1 ... 13 350 jwsóe'
1 ... 13 350. pSSOS
1 13. 150 pesos
1 .12 130 pfiSÓS.
1 .... 1% 100 Láeíencia
1 n 125 pesos Lactancia
18 480 pesos
1 3© 550 pesos
i 15 400 pesos
t 13 350 pesos
... 1 5 250 pesos
i 9 300 pesos
I tí ti 0 250 pesos
... 1 10 100 pesos
.... 1 9 100 pesos
1 5 150 pesos
... 1 4 ISO pesos
... 1 3 i3b pesos
I 2. H 125 pesos
I 6 200 pesos
... 1 - 5Q0+/~ pasos

Fuente; AOH’, frotocote Hotafi.il H° 327

Tres años después en 1730, la hacienda Coilique registraría


111 negros esclavos, de los cuales 43 eran hombres, 40 mujeres y 28
infantes.

145
ESCLAVOS DE LA HACIENDA C O L O Q U E (1780)

CANUDA» EDA» CON


PROMEDIO DEFECTOS
Negros adultos ■ 43 37 a 38 asios 18
Negras adultas 40 32 a 33 años 6
Infantes 28 04 a 05 amos 3

Puente: AíífT. Protocolo Notarial N°64;;

Esta disminución de ó esclavos no llama la. atención si


considerarnos que dos de ellos, uno llamado Juan Manuel, se
encontraba tugado y te otra denominada María . Antonia, se
encontraba fuera de la hacienda al momento de .realizar la tasación.
De los 4 restantes no se tienen noticias, aunque probablemente hallan
fallecido producto ele las enfermedades a la que estaban expuestos.
Esta suposición es posible en la medida que registramos para ese
misino año un promedio da 26 esclavos con diferentes enfermedades
que muchas veces los españole* llamaban "defectos":

DEFECTOS™ ' ~''CAfíT.ÚhW


Bufos o tumores . 5
Quebrados 2
Patulecos 3
Manco de «na mana 2
Con adicción
Con mal de arma ’ 2
Coa aíwgos
Coja
Ciega
Contrahedip
Buboso
Casta saigola
Loca
Gotosa
Con rcamas
Tullida
Lactancia
í'aealií: AON. Protecoto Notarial l-T*642

146
La hacienda CoHique tendrá para inicios del siglo XIX, un
total de 132 esclavos, de los cuales 71 eran hombres y 61 mujeres.
De acuerdo a la tasación 'efectuada en 1805, ios esclavos estaban
avaluados en 48.440 pesos unos con oíros. Lo curioso de esta
tasación, es que registran a Antonio Cbavaque, anciano;de 91 años, a
un costo de "O.OO" pesos.

De ios 132 esclavos, 3 se daban por muertos, 6 huidos y 2 en


casa de la totigy a dueiSa;

. .ESTADO ................ NOMBRE.......


Muertos Antonio diavaqUtí
Manuel Jdina (azucarero)
Rosa CaravaH
Huidos Maausl Pristo
Paritaleóíi
Manuel Msrticorcna
Coacspíiárs Csrábs!;
Teresa Lucume
.Tuana Franco
En tasa de D.Marí a Perales Antonio Grande
Tomasa Chilena

Puente: AON. Trotocole Notarial N’ 301

Para 1820, fe población esclava era de tan solamente 80


esclavos.12* Esta cantidad es comprensible en fe medida que
tomemos en cuenta la inestabilidad que provocó el inicio de las
guerras de independencia, que tuvo como consecuencia inmediata la
crisis de la economía nacional (especulaciones, retiro de capitales,
etc.).

AGN: Protocolo Notarial N6 34;

147
5.2. INSTRUMENTOS DE LABRANZA

Él instrumental utilizado por la hacienda Collique puede


distinguirse unos de otros, de acuerdo al uso y volumen- Un -primer
grupo -estaba compuesto por "cadaceros" redondos, fonditos
chancaqueros, perol para batir chancacas, perol alfeñiquero, moldes,
etc., destinados a la elaboración de azúcar, chancaca y miel. El
guarapo, a pesar de estar prohibido su consumo, era unabebida muy
consumida por los indios y negros de la ciudad de Lima.

Las barrete, machetes, ha,chas, hoces, yuntas, arados, rejas y


demás instrumentos, eran utilizados p a ra la extracción de la caña de
azúcar. lina vez extraída y con ayuda de las;: muías, borricos y
carretes, estas eran transportadas a los trapiches' para obtener los
productos deseados (azúcar, miel, chancaca, guarapo, etc.).

Las yuntas, píeos, lampas y escardillos, eran instrumentos


.destinados a la siembra y cosecha -de frijol, maíz y diversas
variedades de árboles frutales como los -naranjos, peras, membrillos,
melocotones, chirimoyos, limones, limas, guayabas, pacaes, higueras,
ciruelos, tunales y plátanos. 'Estos productos servían para la
alimentación de la población existente dentro de la hacienda
Collique.

Un grupo aparte lo conformarían los utensilios destinados a


la elaboración de alimentos y el cuidado espiritual de los esclavos.
Por lo elevado (fe la población esclava, los instrumentos de cocina
eran numerosos y entre ellos encontramos los peroles, zangyeros,
bateas, tinas, cuchillos, etc.

La capilla era un lugar de visita obligatoria. La


ornamentación indispensable estaría compuesta por unacampana,,,
cruz, cuadros con escenas religiosas, mesas, manteles, copas,
candelabros, velas, etc. Los precios de los instrumentos variaban, efe
acuerdo a la calidad y estado de conservación,

148
. ■ Para un mejor entendimiento presentaremos los inventarios
realizados en 1747,1777 y 1780.13í

El instrumental.-sirvió para trabajar una extensión de 110


fanegadas de tierras de cultivo,, la mayor parte destinada al cultivo de
caña de azúcar,125 Iz r interesante de estos inventarios .es que
presentan algunas de las Herramientas utilizadas en la cantera, y los
productos elaborados en la calera.

En términos de calidad, el inventario mejor-elaborado y más


completo es e! de 1780. En ella encontraremos descripciones para
algunas herramientas y el precio eon'esp (metiente de cada, una, Las
herramientas en su mayoría f^aii utilizadas pdrá & riembra y cosecha
de caña de azúcar'.

5.3. LAS INSTALACIONES

Los edificios como la casa-hacienda,'fabrica, trapiches; y

w Ver anexo N® 5.

u* Un documento que no pudimos-ubicar, en el Ar!chiy«.<5«Mra! de


la. Nación, nos tan proporcionado por el historiador Alejandro Hoyes, en donde
existen datos que sos hacen suponer que es ¡a hacienda Collique se producían hilos
d® algodón Para esta achYídatl se contaha con tierras (tablas) destinadas a la
semina de algodón, máquinas pata despepitar las mismas y diversos instrumentos
como telares. No sabemos desde que fecha se dio unció a esta actividad. Pero
creemos que la misma no fue más importante que la producción da azúcar.
De igual manera se producía trigo y vid. E! primero transformado en
harina gracias al molino existente en ia hacienda y posteriormente utilizarlas para la
elaboración da pan en Jos hornos de la misma hacienda. Aunque no tenemos dates
acerca de la elaboración de vino, créanos que ea diclia hacienda al igual que a i otras
haciendas aledañas también se elaboraban vinos pero en cantidades mínimas. AGN;
Protocolo: NotarialN134.

126 ■ Muchas de estas casas-batí endas han desaparecido y las pocas


que se resisten al paso de los años están a pimío de desaparear. Tal es el caso de
Punchauca, Torre Blanca, Márquez, Cabaílero, Chocas, infantes, Naranjal, San
Agustín, etc.

149
galpones, eran las instalaciones en donde se llevaban a cabo la
planificación, producción y resguardo . de los elementos
indispensables en la producción. No nos debe extrañar lo extenso de
las instalaciones en vista-de lo variado de su producción.

Los materiales de construcción para elaborar estos edificios


■ eran por lo general ladrillos, tapiales'de adobe, cal y canto, madera,
caña brava y torta de barro,

Entre los edificios que componían la hacienda; se ene ontraba;


’Ta vMíai¡¡!a¿ d la casa de p ay ó la.
casa .de:; purga,: la pfera. ;(ie: pones-. las : ; :-.:-
raspadme, mía p is a , solada, la éíldna, «i
oratorfo, fcs coriTíAés á®boMcriSj la catea coa
dos tensos, p«s?.s> de la «olea, pies;a. pasrá ■
giiardar t e ííeraiaiisatas, mía cstríera fruunte.
a. Caadsvffia, «á galjiflm, tí bgfíos, 3 cuartetes,
sai corral de du®t»ros, un .osirat 4® bestias,
un puente, ;am call**jé% iia» «oiás», ¡un-.,
potrero,,'r ^

Para tener una. idea más ciará- de J a distribución y


composición de estos edificios, pasaremos-a describir «no a uno los
distintos ambientas; : ' i, ■ rs

f Á. LA VIVIENDA ,v i

J V :J'jV J S te ' el lugar desde donde i-e 'eotitoolaba toda' -la.-actividad


productiva de la hacienda. En; el fro n tissil'encontraba' übíc&lójun

Gracias al *nactual elaborado -por'Afea Ortega! Y Caños Carcefen de la


Sección Ceataneloso del Tribunal d* la Jnqwiridóxt, temos podido ubicar un mapa
• de las casas-haciendas de Chacra Ceno, Zatabraio y CoKique. El raspa (1719-1759)
es una verdadera olbra de'arte;'mas' paree* ana pintura «¡laborada coa acuarelas de
. colores rojo verde aatoídesa y inaiión claró. Ver anexo ó.

127 AGM: Protocolo Notarial t-E M l.

150
mis-ador, de donde ss vigilaba y controlaba el cumplimiento de todas
las tareas de la hacienda.

El edificio estaba, conformado por los cuartos de reposo, que


por lo general, no eran, muchos; un cepo, que era una especie de
prisión destarado a recluir a Sos esclavos qué incumplieseis las tareas
asignadas; una cocina con-su fogón, chimenea, .honro y alacena,
encargada de proporcionar los alimentos al personal; y en la parte
trasera, se encontraban los corrales que albergaban' a una gran
variedad de. ..animales. Completan la edificación una ' sala de
carpitiería destinada a los arreglos de madera, una bodega grande en
donde se guardar» los recados, Una mención aparte merece !a capilla
y eí adoraiorío, en donde se celebraban las misas todas las-maríanas.
De lunes a sábado el esclavo es-a libre de escucharla, mas no así los
domingos y días feriados. Los esclavos eran obligados a confesarse y
recibir la primera comunión una vez al abo.

El capellán a cargo de la capilla, enseñaba a los niños la


catcquesis, las oraciones y vigilaba la. conducta moral de ios esclavos,
siéndole permitido ordenar cas-figos en casos de mala conducta. Bn
caso .de no poder hacerlo, «normaban a los duchos o administradores
de la hacienda para, su respectiva ejecución.

. La presente descripción y las subsiguientes sos» tomadas del


inventario realizado los arlos 1777 y 1780. La primera realizada por
los maestros Alonso Zu asmaban Alonso Rivera y Josef del Campos y
la segunda por Nicolás Cabrera, Alonso de Rivera, José Espino, don
Francisco Gil Solazar, Marco Lucio y Pedro José Espinosa:
".« tos corredor en la cabecera; una. pieza dd
cepo, sos. paredes de bara y 5 semas de grueso,
su ted io Ú& quartonos sefere lina madre
resabida sobre dos pies derechos y dos torna
puntas y sobre Jos qrsartohes barbacoa de
caña brava y m cepo y de estrado un tapiaL
Sus puertas, dos pértigos dobles .«tablados
por destíso y fuera, d uno «es sm Marojo y
copada, y «si é camiiinr sus escoteras mitad
de Stane y mitad úa casa y sobre esta pie® d®t
cepo una pieza alta de tejares sai d io s eos
ana división de tablas de chile m medio de

151
canto a cauto que .haca •c&xm dos jwaeaj con 4
írertaníllas sin bfdaíjste®s spss siman do
mirador, sn tedio dto qnartones, cañas y
esteras solada con. su pértigo «ai fcrdda y
Manqueadas. Al corrodo; siga® Sa sala con dos
jjiestíis «na eos. una cabecera y otra c®. otra,
ssgyso el coirtdor al patito y «ti sn cabecera una
pteza « v caá» M ó : por la'm ano ieqpíorda
sigse la codn'tá y el callejón de salir sstasr®. La
cocina coa su fogón chiawne,i, -mu» alsuma, su ..
horno y « s * d ; Por la miau,, dsredn ógatn
dos■jiiesas la ima con m w n L Todas estas
ploras «iblertas de cpiartoate, cmras y esteras :
coa tote puertos 'd¿: dos Itejas, y los tem ái
porfigos ets dos pisras, sas «Triara» teafinas, y
<w¡ los, teretes sas yesíaaas aparrados; L o s.
mraKwes. con sus m aslrtey piterotes teldO:.
« i a d » cois sos poyos y pilares y'íolados, d d t
a h « f : sólo solado. A teta viviaulá "pora H
galpón ticuna ilos cuartos uno de dos píelas y
otra de dos p tesas y «m'?á con sns partí gos j
toctos toSío tos aatcsiisvíd..." ^

B. .LOS GALPONES

: Los -galpones, «ran. viviendas de construcciones sencillas»


destinadas a los esclavos durante' su permanencia en la hacienda.
Estas edificaciones 'muchas veces eran construidas y;'.'refaccionadas
por los mismos esclavos» quienes vivían de 3 a 4 personas en un sólo
cuarto . en condiciones infrahumanas. Las. edificaciones se’
encontraban divididas'■por", cal les angostas; y al centro existía un
cuadrado o patío para danzar o realizar algún otro entretenimiento.
Los esclavos estaban obligados a pasarla noche en el galpón, paira así
evitar cualquier depredación o desmán en las haciendas vecinas o en
el centro de la ciudad: : p

AON: 'Protocolos Notariales N° 32.7 - 642.

152
".-tras galpones gandes Jtedios da suevo; los
dos so mandan por «na puerta, y A otro
separado, y femé» d*: alto tres bssras y tess
cuartas» tochiyésdose t M s m ' i l sfantotó da :
obra de adobe y oieáio, y de ídli para a rab a ¿S
resto dé la pared. Asimismo hay techas m el
¡untos trem ía y seis cuartos m tres dasfis « u í
separad.0M.es <pe se compone» « i cada Janea
sks 11 coa 36 postigos de tabla de. Chile y s»
«sataaM©. y en rada «waito se fisalia ¡otó
gusartte quo sirve de mafee al fecho que han
puesto y lia d » los criados de dicha bacím da
So qsift no va tasado. Asimismo tros jwwügos
grandes con sus umbrales dobles y el terraja
con,«sp<mdi®Rte...*,‘ 123

■ve. LA,COLCA :

Lugar destinado para si almacén de los granos y semillas, por


lo general de trigo, frijol, maíz y alfalfe. Su construcción rev erta
una paciente planificación, pues de ella dependía la..conservación efe
Sos alimentos. Poseía grandes y anchas paredes..de adobe, y contaba
con mi.gran portón por donde entraban fósilmente las.darreías. jaladas
por las mülas: ■
: • ” ..Ja «olea toda m «debería «id en te y Jas
p aertu grandes d* dos bajas eo» su cerrojo y
copada, y sumnlíralsfia Li<i

D. LOSCQMA4.LE-S

Los corrales eran edificaciones destinadas para, la crianza de


ganado. Existían: de: distmtos tarnaños: ios . más pequeños para la

AGN; Protocolos Notariales KP 527 - .642..

AGN: Protocolos Notariales .N®527 - ét¿.

153
crianza de gallinas y Jos de mayor tamaño para ios cameros, muías,
burros, caballos y bueyes, que, eran utilizados en las distintas
actividades agropecuarias de la hacienda. Los anímales eran criados
{jara la venta y alimentación de los trabajadores;
"...dos cotrales granctes del {jasado de Castalia
con toda la adobería corrí«site j se «J ksso, ms
cuarto para eS,spe mards «3 ganaste, con se
portigoy terín»,-." ]'s

JL CASA D E PAILAS

Era el lugar donde se preparaba Ja comida para ios esclavos,


así como también el lugas- donde se procesaba el zumo de la caña,
materia prima'para la elaboración de! azúcar; chancaca y miel. A
diferencia de otros' ambientes, contaba 'con. 5. ventanas cjue le
proporcionaban una gran ventilación, necesaria debido al gran calor
que producían las ó cocinas e igual número de pailas. La ceniza
producida por la. quema da Ja lefia, era extraída por intermedio de
palas, ai no contar con im.deafogadero o chimenea, A un costado de
la casa- existían dos- cuartos para-, guardar harinas, y menestras,
utilizados.en la preparación de los alimentos. El encargado dé esté
ambiente ei-a el maestro pailero, quien ^ vez contaba, con 3 6 4
ayudantes:
''...la casa tí® pailas «a kM¡ tp.ft . se IndJm . ,:
sentados seis fondos ©aMentes; asá per la
parí* áte, tasaso por te que toca & las camas
y n fas bodegas de adobe, por donde sacan
te -cenira y el li«m» da pared bies doble, m
doné* están dichas bacas y. dichos' fondos; .
íurfesados. Toda su adobería de sos paredes
nueras. En la entrada de dicha pieza raía
portada de ol. y WrÉfl eos sus puertas «te
dos hojas y -sus wmtoraSes, cerrojo y espada y -
en dichos 5 vssiíanas debesjas sin puertas

ÁGN; IVíifaeolos Notariales ÍT" 527 —642.

154
cora sus umbrales, das teraaiies s.ra»dte¡ de
i?1?~
g»wéar sííms y «autras»." "*

F, EL TRAPICHE

El azúcar, la miel y la chancaca, representaban la mayor


producción de la hacienda.Colliqüe. E naste sentido, era de esperar
que el trapiche, se. encontrase. e» buen estado. Para su construcción,
los dueños no ponían reparos en desembolsar tuertes cantidades de
.dinero, la s paredes estaban elaboradas con utas, fuerte base de piedra
de cantera, oai, ladrillo y ai grosor-era el doble de lo acostumbrado.

Para mover los molinos, insbuménto principal del trapiche,


era necesario la .fuerza de los bueyes, muías y en algunos casos- de los
caballos. Estos animales sujetos a sendas amarras, giraban el molino
sesionando la caña párá sacar el zumo, que era trasportado por
unos canales a reservorios-destinados para, su beneficio.

Los esclavos que' 'trabajaban en el trapiche, eran gente de


adad avanzada, y con destreza en el manejo de ios molinos'.
w.Jia. ite j»3iíawM á* ■3íf barras «n
cuadro coa su ismípta. m .calones'-'"de
Molí-isla, rc.ness.os , de ,.|á®fcas. cubiertos da
madres .j qiisírtoaaes retíbufas sobra pies
derechos y sapatas y los fias derechos sobre
psferes dé MdiiMos y cal rectfiáos sobre bases
da piedra do caatma, tacJ-i«ds> de cafws y
©sterasieo» 4 paradas, las ñas cmti&tes y los
otros dos desarmadas;' s¡a.s dos puertas d®
rwijas. S o s dos portadas da cal y íatMüo toda
dditeyinwwu,".13: ;..

AGN: Protocolos NotarialesN° 527 ~ &Í2.

AGN-. ProíocoIosNotafialesN5 527 - d d .'

155
En este grcrpo estarían comprendidos b s hornos, el almacén
y la cantera de donde se saca la cal para, beneficiaría. De igual
manera existía «n horno para cocer caí y ladrillo. Junto a ellas:
encontramos un cuarto doudé vivía m arriero, que no solo era el
g*
jT>-

iss-

fL
9r

£S
"%
no

ps
Í3


rv

P
íí

>a
o

r
S;í1 I I
> u s8 <
>=* *?
«• g,
W
•$sepíjf?j et&im»!» £ uoistwjx» %nnqstH<
5

1:
j-J
6. PRODUCCIÓN

5.1, CAÑA T) E AZÚCAR

La siembra, cosecha y elaboración de aricar era fe actividad


que mayor beneficio rendía a los dueños de la hacienda Caldque. En
este .sentido» la naayosr paite de los esclavos estaban destinados a
realizar esta, actividad
La caña de azúcar era usualmente plantada en la estación de
verano para aprovechar la abundancia de agua. 1.a tierra era
preparada con anticipación en repetidas operaciones de arado jalados
por bueyes y guiados por gañanes. Las cañas eran plantadas en filas
bien formadas;, para 'cuando el agua entrase.» los surcos», esta se
.‘desplazase-sin ninguna dificultad» pero antes de esta operación de
riego» tenía lugar' el abono de las tierras. En los meses de verano el
riego se repetía de 3 a 4 veces al día, tratando que la tierra siempre se
.encuentre húmeda. Una vez plantada la caña» esta rendía un
promedio de 2 a 3 cosechas. El precio de las fanegadas dependía de
la calidad y tiempo de crecimiento. Asi para 1777» fe. hacienda
Collique valoriza sus cañaverales en los siguientes precios:

CftffÁV£RAl£S BE PEECHí ISÍFOlílE


lOTERENTES IFMXABIO’ TOTAL.
CAMPALES____________ ;_____ _________
8 400 pesos... 3.200 peses
<5 700 pasos 4 200 pesos
8 500 pasos >1.000 pesos
1 200 pasos 800 pesos

Fuente: AON. Píotoeoío Notarial ti® 527

Los cañaverales efe soca o último retoño que dada cania y que
sirve generalmente para transplantarla, también tenía la misma,
calificación y cotización.
CAÑAVERALES . ÍPRECIO JfrmMTE
DE SOCA HfOTAMO TOTAL
S 600 pesos 4E0Opese$
9 500 pasos 4.500 pesos
4 150 pesos 600 pesos
2 250 pesos 500 peses

Frente; ACUT. lírotecvJo Motesisl >f* 52?

Después de transcurrido un tiempo prudencial y estando la


caña ya feaduray se cortaba ai ras del suelo y las hojas eran
desgajadas y am ojonadas con los desfe ribos, bastó'qué todos, los
plantones estuvieran cortados. Luego se procedía a quemar los
desperdicios e inmediatamente después se regaban las raíces
esperando pronto un nuevo retoño. Cortada la caña, la mayor parte
dé ios esclavos utilizando- cairelas, molas y caballos, se dedicaban a
transportar la carga a los trapiches.

La pieza más importante del trapiche era el molino, lugar


donde se trituraba la caña tratando de obtener el jugo o zumo. El.
molino era. puesto en movimiento por intermedio de dos pares de
bueyes amarrados a dos; puntos opuestos de una gran rueda de
madera. El zumo de caña era recibido y transportado por unas
hendiduras que iban hacia un gran perol de bronce colocados en los
fogones (ubicados en la casa de pailas), en donde tenían que hervir
para así obtener los productos deseados. El tiempo de hervido era
conocido solo por los maestros azucareros, quienes por experiencia
conocían perfectamente los trabajos en el trapiche y en la casa de
pailas.

Finalizado el beneficio de la caña, los esclavos no quedaban


libres de tareas, pues bajo la atenta vigilancia deS administrador y eí
caporal, desarrollaban diversas tajeas como reparar cercos, barbechar
terrenos érf descanso, limpieza de las hesramientas, cuidado de las
huertas, etc. En algunos casos, los esclavos podían ser alquilados a
'otras haciendas que necesitaban mayor foerza dé trabajó efe las que

158
originalmente poseían o alquilados a alguna panadería de la ciudad
de Lima. La intensión principal del dueño del esclavo era sacar el
mayor provecho posible del trabajo esclavo. Pero los esclavos no
sólo estaban destusados a trabajar en las tierras de cultivo, pues
existían quienes se desempeñaban como mayordomos, sirvientes,
cocineros, cuidadores de puertas de salida y entrada, ayudantes en
¡general, etc.

6.2.. GANADO

La crianza de ganado era una actividad complementaría a la


producción principal de la hacienda Colfique. En Sa medida que ios
animales eran utilizados en diversas tareas agrícolas y como alimento
para los esclavos, significaba un ahorro en los gastos de producción.
Los volúmenes de producción de ganados eran constante?. En ese
sentido, cubiertas las necesidades de la hacienda, los animales podían
ser vendidos directamente a algunas haciendas vecinas o al mercado
limeño, generando de esta manera un ingreso adicional a ía economía
del hacendado.

"La información que- manejamos abarca desde mediados del


siglo XVIII hasta inicios d d siglo XIX. Durante este lapso'hemos
llegado a ubicar 3 tasaciones, cada una de ellas más completa que la
otra. La cantidad de animales existentes en la hacienda está en
correspondencia a las necesidades y exigencias de la producción.

Los siguientes cuadros han sido elaborados según los datos


obtenidos de las tasaciones de 1747, 1777 y 17S0, Estas tasaciones
fueron hechas ai venderse la hacienda,13'

Los gjnpos .que mayor cabezas de animales reunían eran los


de carneros, borregos, chivatos, cabías, muías, borricos y bueyes.
Ello es razonable en la medida que la hacienda hacia uso de ellos

Ver amaso N®7.

139
constantemente, ya sea para arar el campo, transportar las cosechas y
productos elaborados al mercado limeño; así como también para
alimentar a los esclavos.

6.3. ALFALFA

■ Al igual.que la crianza de ganado, e! cultivo d e alfalfares


representaba una actividad de segundo orden dentro de la hacienda,
Collique. La producción estaba destinada a la alimentación del
crecido número de animales.
Las semillas de alfalfa depositadas en los almacenes, recién
. sembradas-o enraíces, eran igualmente, cotizadas. :

PRODUCCIÓN B E ALFALFARES
HACIENDA COLLIQUE (1777)

" 1 '^ g G Í S r ..... ........................ S S w n f


.m S3K M K X & ;LTOXAMO TOTAL
_

4 en bretes 2 0 j» sí>s .S o p e s e s
8 en bretes i 8 pesos 144 p esos
1 8 e n r a ite s lijo s o s IS O p eses

íu rót»: iC&JT. í rota cote NotwiáJ N° •527

6.4. ÁRBOLES FRUTALES -

Al igual que la crianza de ganado y el cultivo de alfalfa, los


árboles frutales complementaban la producción de la hacienda
Collique. Los productos que mayor demanda tenían eran los
xhirimoyos^Jimones. dulces, ¡naranjos de Portugal, melocotones,
guindones, pacaes, ciruelos dulces y agidos, perales, .membrillos,
.guayabas, granadillas, etc.
ÁRBOLES FRUTALES
HACIENDA COLLIQUE (1777)

CANXDfliA» CAXECOBÍA. PKE'CIO TOTAL


ÍJNÍIAK10
40 Pies ¿e chirimoyos 3 pesos 120 pesos
4 Pies da liiaos.ES dulces 4 pesos 16 pesos
i Narenjto Portugal 8 pesos
■G¡
Pies de melocotones 4 pases 20 pesos
4 Píes ■áa gi.ssi.tlss 4 pases 16 pesos
ó Pies da pacaes 12 pases 9 pesos
16 Pies da enríelos 1 pase 16 pases
1 Píes de ciruelo agrio 2 pesos
2 Pies da paros 1 pese 2 peses
4 Pies deflaenubsillos 4 pases 2 pesos
S Pies da guayabas' I peso 8 pesos
$ Pies da granados 4 reales 2 pesos
3 Pies de aromas 2- pases tfpeses
2 Pies da futrías 4 real.® i ¡tese

Tu ente; ifcjffjpNrtow>3o Notarial *P 527

161
C A PITtlXO IV
ÉPOCA REPUBLICANA

La proclamación de la independencia y la posterior instauración


de la república pean ana, no traerían cambios substanciales en la vida da
ios pobladores del valle de Carabaylloy alrededores.1 En este seiiido,
hasta k década, del '50 del siglo XX, la agricultura será la actividad en
tomo a la cual desarrollarían sus vidas.

El desarrollo de la. economía peruana y su vinculación con el


mercado mundial, provocarían diversos cambios en la estructura interna
del pasa, que conllevarían al ^rugimiento de nuevas y exigentes
obligaciones üel Estado para- con. la población y viceversa. Pero ni el
Estado ni h población se encontraban preparados para satisfacerlos.
Esto originó una serie de trastornos que se agravaron merced a un
acelerado crecbáenío pobíacidml. Bsta situación generó un cambio en
el panorama geográfico y social. De esta manera, las zonas rajadles
disminuyeron no sólo territorial sino también poblact oralmente; en
contraparte las zonas urbanas sufrieron un proceso de crecimiento y
concentración pobladona’l, siendo la migración la forma más cotidiana
de realizarla. Estos migrantes (provenientes de distintos puntos del país
y cuentes de recursos económicos) fueron ocupando raudamente
diversos territorios, incluyendo los destinados para el trabajo agrícola.
Es así como en pocos años el valle de Carabaylb, va a ser ocupada
hasta convertirse en uno de los ejes más importantes del crecimiento
uibano de Lima.

Las refeioaes de Alberto flores Galindo en su Haro Aiirtocrada


y FUt>« liana, 174tkt830. lima, 1984.. son ek>cuentes ál respecto. En dicha obra el
autor 4a euenta <Mpasnásmo de autores como José delaEiva Agüero, Bkardo Palma
(*...10 más novedoso &a la desapaiiciéa del Virrey."), Luis Alberto Sánchez y losó1
Carlos Mariatogtá, de k nueva Repúb&a surada a raíz 4e tas bichar úwlependettíisfas!.

164
1 SITUACIÓN B E LAS 'HACIENDAS COMAS Y COLLIQUE

1. ANTECEDENTES SOCIO-ECONÓMICOS--:-

, Lqs gobiernos argentino y chile?» en sft irítarto por ctóasolidar


la independencia americana, envía al PenViwa-expfetóón libertadora al
mando del General San Martín; En este sentido y con toda ■razónala
historiadora norteamericana Timoti Arma, manifiesta que la expedición
libertadora "nos liberó & la &erz»%--jpues-. ningún G&bildo m- vecino
limeño tab la solicitado-su venida.-

A los pocos días de haber desembarcado en Fisco,, el General


San: Martín,recibió una carta dei Virrey Joaquín de la Pezuela, en donde
éste le sugería entablar conversaciones para, solucionar pacíficamente
la «intrincada situación. Previo a-esta conversación'.-se declaró un
armisticio entre ambos ejércitos. La primera conversación a la que
asistieron los representantes de arabos jefes-militares, se realizó en
Miraflores en mayo de 1821. En dicha reunión, los representantes del
Virrey Pezuela exigían que San Martín, acepte la vigencia; de la
Constitución de Cádiz (1814). Ante esta propuesta,das representantes
del General argentino manifestaron acatar dicha propuesta, siempre1y
cuando acepten la imposición de una Monarquía Constitucional para el
Perú, la cual es denegada rotundamente. En estas circunstancias, los
representantes de Pezuela lanzan una segunda propuesta; "España
estaría en condiciones de reconocer la independería a de Chile a cambio
de que el ejército libertador abandone el virreinato del Perú”. Ante
esto, los representantes de S a n . Martín lanzan una segunda
contrapropuesta: "no sólo se reconozca la independencia de Chile, áno
también la del Río de la Plata, amen de declarar líbre el comercio
chileno y entregarles los territorios dei Alto Perú, propuesta.-que también
es denegada por los representantes de Pezuela.

XJno de los delegados «fe San Martín agudizó la tensa


conversación al pedir que el -virreinato - peruano corra con los gastos
realizados por la expedición libertadora. Otro representante de San
Martín propuso buscar. coajtaitamesite un monarca para el Perú. En vista...

165
que los representantes de Pezueia no estaban autorizados para, tomar
semejante decisión, dieron por concluidas las negociaciones.

Pocos meses después, en 1821, el Virrey Joaquín de la Pegúela


es destituido por un gupo de generales realistas de tendencias liberales.
Su lugar fue ocupado por el General José de La Sema. Este general,
a b s pocos días; de hacerse cargo del mando militar, ordenó hacer una
visita a las haciendas limeñas con el propósito dé conocer con quiénes
y cotí qué recursos contaba en la lucha contra el ejército libertador. Uno
de sus más fervorosos adherentes era AntonioJimarno,,dueño .de la
hacienda Pundbanca, quien ofrece las instalaciones de su hacienda ante
cualquier situación. Otro adherente era el. dueño de -lahacienda;Torre
Blanca, lugar en donde también se dieron conversaciones; previas entre
los representantes de San Martín y Pegúela. .

Algunas meses después en junio da 1821, e! General La Sema


propone al General San Martin (quien recién había;- instalado .su
campamento en el valle de Huaura) retomar las reuniones iniciadas.por
el de ¿puesto Virrey Pegúela. Eh dicha reunión, llevada, acabo en la
hacienda Punchauca, San Martín propone a La Serna tres puntos
específicos:
- Formación de un Gobierno P:rovisioml confamada po' arribas
paite pero presidida por La, Sema.
- «.Designaciónpor ambos de im principe panrehPerú.
v Jura de la, independencia peruana por ambas tropas.

En realidad no se •sabe porque . La, Sema no aceptó las


■propuestas de Sun Martín, aunque se presume que SanMartínsolicitaba
previamente la aceptación de Sa independencia peruana.2.

En rista &4 focas* de tas conversaciones y la retada del General


La Sema al interior dal país, el Geast íi! San Martin declara la radapenácma peruana
y se autoprcKfan» 'Protector General del Petó. Bajo este cargo San Martin pone en
marcha un proyecto monarquista pura d Perú, b que originé a i debate ideok^gícG antes
mMianjuistas y rainMcmos. Los pnmeros iimdamartóaban su posición ea: que'la
di&áin dd p o fe poitiieo debía astar en relación directa coa la dustraritey cádli¿arión
ífel pueblo {Mcníesquied); la población ara inadecuada a ignorante; la diversidad de asta
podría conllevar a un onfreatarráento; ios habitantes .esteta11 acostombradcq a ser
gobernados per un monarca; si Peióyfts Estados Unidos temían, realidades dífaréntes.
Tos segundos ar^nB'éertabah'qiie; al Bsridtií'dfflaío'critico timtó del india como del

166
Una-vez concluidas .te guerras de independencia, ia estructura
política, social y económica de la nadante república peraana no caminó
drásticamente como lo esperaban los sectores mayorifcarios de la
población. Las haciendas seguíais enmarare de sus mismos dueños y en
algunos casos, el Estado creó diversas instituciones que pudiesen
administrar racionalmente los bienes pertenecientes a la nueva república
independieiíte/' En este sentido, ia burocracia colonial fije reemplazada

a&tcaao podían Ejercer diguameíita la Ebertaá; la helero gimdda era cuestión (te colores .
y no de deseo.-; y. sentinaientes. de fibsrtad; la. pobkeíóa estaba prep.vadaprahklberta.cl,
sólo erau necesarios atoaos hombres ilustrados; la falta de ¿listradóti de la población
seria superada rápidamente enviste que la Sania Imjüifición., Cuaco obstáculo que la
tesaba, había desapareado.
Este debate h& sido estudiado acadfeiic amante por diferentes lústoriadotEs
contemporáneos. Entre los más rcpraserrtsrtivos Seamos a Jorge Basadre y José
.Águs'fe de la Písente Candaras, quienes defienden ls tesis republicana y monarquista,
riispeeteamanto. Para Jorge Basadla. la monarquía, la monarquía liberal y
coasátedonál no eran modelos posibles para agítelos m el Perú. Al respecto se
preguntaba ¿ habría surgido la monarquía «ñire nos oíros?. Quizás si. pero ¿cuanto
tiempo hubiera durado?. La emancipación sólo hubiera subido un retardo. Asimismo
recalca que América reinvindtcaria la origiaafidad de su rabión histérica al rechaz» la
moitarquia, a pesar de los peligros y tropiezos que por süa sobrevinieran. Es más,
aseguraba que d que se hwbk-sB aterido a impiantasfe, solo foáúva traído mayores
vicios y al pueblo no hubiese salido ganando mucho. Por sis paite, José Agustín de la
Puente Candan» afirma que la política ouonárqwica dgmíisó al ítmco medio para que
perduren los estados recién constituí otas'y que al Petó (fe ItU no estaba preparado para
un modelo repuíficaao, tomo lo prueba la gran anarquía qtw siguió a la independencia.
Si bien defiende la propuesta de Sai Martín, Fosé Agustín da la'Puesto Cándano
encuentra dos errares Mt sus plantrasnietóos- el hecho dermssár munasoSapersonauna
muy variada y compleja, gama da actividades, y la prematura convocatoria a ras
Congreso Constituyente, insútectón extraña y alejada da nuestra realidad. Esta última
medida, señala De la Puente Cándano, fije fe hosca medida para salvar sis desprestigiada
figura. Veíame Jorge Basad», La Mdadóo éela.Beprtilira. Contrihacids al estudio
áe Ra evohotádn poM ca j soda! Aú Feam Tomo I. lima, 1929. Pp. 1S y Ss; Hlsfotía
áe 9a RepSíílíra sfe). Frará Ts. Lina, 1972; José Agustín de la Puente Caadamo, San
Marisa y el Paré 33antennriettto J>odain®sio. liana, 19-18.. Pj>. 235; Bañes
Mwáfijiáces de San Martin Tesis do Br. ais Derecho, PUC. lima, 1941. Pp. 59,
Véanse también las obras del historiador Bartolomé Mitre, quien a dedica especial
atención al ettodio de la vida y obra de? General San Martin; y Ascensión Martínez
Biaza, La Prensa. Doctrinal «ai la indtepCBéeiKRsi dtí P®ú 1811-1834, Lima, 19SS.
Do los periódicos estudiadobpor Mariuez Biaza se distinguen 3 posiciones ideológicas-,
hbe'rales constitu«áonafistas (11), fidsHsías (4) y patriotas (26)...3

3 Los bienes pertenecientes a! Estado peruano estaban constituidos


por fes hienespre'íteíoife las co ate asmases-a áriinte inststuákmasy.-peiíonas.. -Entre

167
por -"nuevos1’ foircionarios, muchos de los cuales con relativa
experiencia, pues ya Srabían. ejercido cargos públicos durante k época
colonial. Por su parte lo® ''inexpertos'1 funcionarios se vderon en k
necesidad de aprender todos los-"secretos" de tan complicada Sabor,

Una de las principales preocupaciones del fism-aMé'Estado


republicano file buscar y obtener financianúento para las campañas
militares. Tal era la necesidad, que se premió a las personas que
tuvieran un buen desempeño en sus cargos; así .como se dictaron los
más ejemplares castigos a quienes cometieran algún fraude. El castigo
encaso de fraude fue publicado por la Gaceta dfeí 'Gobierno en 1821,
en ella se amenazaba con pasar por las anrns a los .funcionarios; de
Hacienda que cometieran fraude o "la más leve infracción de sus
deberes",15

En vista que !a situación era apremiante y las necesidades; cada


vez mayores, el nuevo Estado republicano no tuvo reparo’en- declarar
vigentes las-leyes y ordenanzas españolas que tenían rekciómcon las
finanzas estatales "siempre que no se opusiesen a la independencia '.'del
Perú". Al respecto Javier Tentalean opina q u e : . v,
“í>e atU «pus MOTdtsííí! el Estado KegrufoHfano
ufiSanáo tos "«mM'' .mecatásnios cd«Éatis,.ií,:v,'--
W W adÉi «te f3$caBffifed6n y moneMos toaate-i»"-
bueniií3fíjkto.,,! ,
En-medio de estas dificultades el Estado pemanb ítífenté
-mantener so capacidad de operación, dándole especial préfereticiá a los

las inslibucrónes «Mangadas «te ademústrar estos bienes, .twiteáos'akDire^irGeááál:


de. Consolidación. ■.v

4 Gaceta de CoMtmé/29 de dá3Hflbié'«te-1821-,-;N® SO.-”

•5 Timar Tartalean ^rlrudo,'';l^eMéa':«cendndcé/0iiáira»'ii


tom ad.** ást Estado; Siglo XDC lima, -19551, pp.-'40. Entre 'otros aspectos-"dé la
B««a»Bda peraantupe. perdurarían áisraate todá la década áá?,0 y *30. -teísmos: & t á

carestía «te ¡Míenlos de subsistencia; 1). La ■mcomuiricaci.óá conc ¡¿gimas zonas «leí
ten-jtwci-, c. La cnasi paisfeación de la agricultura, la rnSaetis y el comercio; A La
ausencia de reatas fiscales, etc. Véase también-Enaüio Dtómart y J. M. Rodríguez,
AMtes íSé laHíMiásA m/Hx» í d P « j ( . « l -J88$). Lima, 1902-26. Pp. 2L5; -■-;

168
gasfcos en aspectos de defensa. Para obtener recursos se recurrió a
todos Jos mecanismos disponibles {presione.?, negociaciones;.,
expropiaciones» etc.). Las tres principales fuerttes de ingresos, era la
iglesia, los créditos otorgados por los comerciantes, mercaderes y
hacendados y Sos empréstitos e^iemc*;/ De las tres fuentes señaladas,
las dos últimas provocaron posteriormente un tuerte endeudamiento
interno y externo.

Esta, situación continuó y se agravó debido a- las prolongadas


.luchas entre caudillos militaras (criollos y aristócratas),-quienes tratando
de obtener el masado político-militar del país, provocaron una secuela de
anarquía y desorganización, que término por derrumbar a. la
desfalleciente economía nacional,

Una de las primeras tareas de ios gobernantes de. tumo- fíje


impulsar y desarrollar la base económica del país, que estaba sustentada
por la agricuftura y minería. Los cambios en d mundo así lo erigían, Es
así como en el sector agrícola se impulsan» dos sectores productivos
claramente diferenciados y subordinados: externo e interno, siendo el
segundo sector subordinado de! primero.

Para tener una idea, más clara de cuál fue fe política económica
impulsada por el Estado a i el área de agricultura, reproduciremos paute
del cuadro tercero, elaborado por Javier Tentalean en base a las
memorias de ios Ministros de Hacienda/

Algunas décadas más adelante, esta tendencia de orientar la


economía al mercado mundial fue perdiendo importancia, en la medida
que la economía internacional fue cambiando. Además de isa-ementarse

á El 11. ¿la tucüijíB da 1822 se reífa. el primer empré síHo en Londres


por 1*200.000 de fibras estufillas a! 6 % da interés y coa cargo &amortizado en 30
araos;. En las negociaciones hechas por Garda dá Rio y Proyciens, se cometieron serios
"actos irreguíaras" no sólo de los anteriormente mencionados, riño tmbiénpor paite dá
conjt'aristas Kinder y del agenta Parishllotiertsoii. Véanse Emilio Dancuart y J, M.
Rodríguez ok cit. Tome I Pp. 223 y Mariano F. .Paz Soldán, Histeria del Perú
IridtependiUsite. Tomo tí (Segimdlo periodo 1822-182^. Lima, 1874. Pp. 156-157.

^ Ver anasolP-S.

169
ía población peruana y desarrollarse los diversos centros urbanos,
originando con ello una cierta, reversión de la actitud originalmente
art imida per los propietarios o arrendatarios (fe las haciendas. La fecha
de estos dos sectores (externo e interno) «carao muy bien Jo señalan
Manuel Bunga y Nelson Manrique- marcarían deciavamente el den-otero
de la economía peruana.

Las haciendas limeñas dedicadas a la producción de caña de


azúcar y diversos productos de panllevar, a pesar de Jas grandes
í dificultades (inestabilidad debido a las guerras civiles, destroccióh' y
.desmantelauaento, producto de las "visitas” tanto de tropas realistas
como patriotas:, felfa de brazos p a ra d cultivo, debido al reclutaniiento
compulsivo de los ejércitos, etc.) se vieron favorecidas durante las
primeras décadas de vida republicana, debido al-alza de. los'precios de-
algunos productos.8 Este incremento de Jos precios elevó el costo de
vida y originó un descontento urbano. -. Los niveles de precios se
estabilizaron en el período posterior a la independencia, aunque con
algunas interrupciones debido a- las guerras de los caudillos, pero-
continuó con esta tendencia basta-mediados de la década dé 1840. A
pesar de esta aparente estabilidad en el precio.de los productos de
primera necesidad. I®- economía peruana -se encontraba en medio'de útía
fuerte recesión y crisis'generalizada. Las haciendas limeñas’á pesar de
ello se reconstitoyeraí rápidamente. Sin embargó, su .dróuítócbraérdaí
era'corto y escasa su capacidad de demanda.. Por alió, la mayoría de
los propietarios y arrendatarios dé las haciendas limeñas tovieribn que
adecuar el giro de su producción, temendo en cuenta las coyunturas
económicas: de exportación (azúcar;* algodón, "etc.) y consumo local
(trigo, arroz, etc.). ' '\

Bl artículo de Peni Gooteaberg, “Nfeelos de prados.en lima del


s*gfe XDT Algunos datos a :htwj>reteciori£s'1, revela esta tendencia y ¡presenta datos
cuánticos al "respecto. • El reístno autor' presenta "luía. original pera discutible
pMiodjficaeiión del siglo XIX:
- 1SOO'-1814.... Deflación tacñetaáa.
'-181S-1824.... Fuerte Marión .de lá guerra..
-.-1825-1846 Eclabifizadón y deflación. • '
- 1B4Ó-Í8S4 Reflación moderada en ía apoca' del guano.' .
"-1855-'1873 Severa inflación. durante Ía éjjoía del guano.
-1874-1885 .... Caosinñadosario... hacia el controlLibsraSí.

170
Para finales la década, del '30 dd siglo XIX, el Gobierno del
Genera! Sarita Cmz mandé elaborar a. los ftaaciaiarios .Gaspar '(fe Osma,
José del Valle y Francisco Naranjo, una Estadística: Agrícola Limeña,
con la finalidad especifica de saber cuánto trigo habría de resollar de las
cogedlas de 1837.9 Este documento, .enumera las tierras ''que los
hacesudados limeños destinaban para el cultivo de trigo, dejando de laclo
Sos espacios "isnproducthms’V amáa. «fe las distintas áreas destinadas a
otras actividades agropecuarias. A pesar que la «(formación fije
proporcionada por los mismos hacendados-y por ende en algunos casos
podría resultar inexacta, ello no imposibilita deducir que el valle de
CarabayHo (con 37.3 % del total de trigo producido) era k zona que
más trigo producía en el valle de lim a. 3

3 E! dítamscato regjs&ausa tola! de 105 Siaciendas distabuadas en 10


valles: Carabayí.0, Piedia Liza, L«rigatidia, Ate, Surco Luna, Ifiiatica, Magdalma,
Mar«raga y Legua, Véase Eco sM ^rtactoiasl®, irania e cosí que se ctnwcsa a ES
Peruano en 1837. Bebo agradecer a Alejandro Salía® y Beka Som por fa «droga del
ffimesonado documento.
CULTIVO BE TRIGO JEN -LIMA. (1837)

VALLES ÍUCIEMÍAS ;?r 1>


FAHEG.
Comas--Infartas 20
Col&gue JcjI.-
CauteiSa-Cencott' y Hniacoy 30
Prachane» í!2 ’
Cábaflero ■'6.
Choca '.-■ 8
Zapan 10-
Macas Ms
Trapichas ■ 8
Molina. 12 ■
C&acra-Granáe 12
Pampa libre 8
Carabayllo Ihwbio Viejo S'
San Lorenzo 8
San Jtiao je Dios 6
Tambo ¿s Soga 6
CoparCabaiia 8
Cbeco 16
Pro 6
Cbaipiteata 8
Oijpjft!Ü(ÍO 6
4
Naranjal 8
Gr<ari$& Ó
.Aliaga 2
Palas 4
l^ieto. liza Garagay 4
Villa-Señor 4
Cliavarria 4
Alcatraz 4
ChacariBa 4
Flores U
Santa daca Palomares'! 6
Zkm 6

172
v SxE es HACEEMJAS w m
PAÍÍECAIW
Lurigaac-ho Campoy Pedreros 8
Haachípa ■M
Nievaria . é
Carapongo . 4
fesna 6
Huampaui 4
,,feáats 2
Vicantal» . .4
Quitos 4
Encalada ■2
Salinas 2
Santa Rasa . 2
Zsvala, 3
Ate Huanetóhuaüas 4
Santa Ciara 4
Pasiachi 6
Trapiche 4
Mayorazgo 6
Zírgasna 2
ItKjisisidor <t
Maina 8
Mo&t&fkíi 8
Vasqutea: <í
Paente 4
Manzanilla 2
Matute 2
S%o y Meados» ■ 10
Salamanca
Caaadio 7
Surco Móntente =5
Chatarilla 2
VsdverdB. 2 ,
SanBwja ?
Pólvora 8
limataníbo 6
SiíiqusMci 6
CienegniKa 12
Mandiay 10
VAEUS H/kCIEM^ASi K«B.E
........2A K EG A D Á S .
Lüiisi Casabian&a 2
'Btíífíis. V ista , $
Sai* Pedro 12
Saa Marif.fi 1
CaWss*3 2

Saiíta. Beaírts. 12
Limes .... 4
B Ltíbaton ’ <5
O rm itiír
Saa Isidro tí
Satíta, Ows- tí
Mata XJedxuTas tí
C a ía Afea 4
Sw-í CayeíatKi 4
Macaras*® 6
P ta d o 4
Cueva 4
Ríos 4
A-^rabarú: 3
Cíwdsís 4

Mwá'd&cz, "Villegas 4
Msiatig» y J a ra te tí
Jue^cia Cotiiic* las Torres tí
R osas 4
Coíoraáa 4
A scom 4
Orbe a 4
Oyagtue 4
Buífm Muerte 2
BUunsuusüi m

Fueíítet !Oiarú> d d Brote «¿orado, M<s Yi<T<

174
Además de la recesión y crisis generalizada, los propietarios y
aireudatmos de las haciendas limeñas tuvieron que afrontar la. escasez
de mano de obra, provocada primero por la declaración de 'Vientres
libres" y la definitiva abolición de la esclavitud decretada, por el
General San Martín y el Mariscal Ramón Castilla, respectivamente,10y,
segundo, por las constantes fugas y el reclutamiento por parte del
ejército realista y patriota de los trabajadores de las haciendas limeñas.
Es en estas condiciones que la política- estatal tendrá un papel cetáral en
la reproducción de la neo-esclavitud de la fuerza de trabajo; factor
indispensable en el engranaje del modelo económico asumido por el
gobierno peruano: exportador de materias primas.

10 La abolición de la esclavitud en id Perú ábe cía proceso de large.


afrento, que se dio inicio días desjmás de h prturfsmnám de la kdep endeuda. El
General San Martin dispuso la fiberteá de los lirios de esclavos nacidos en el Peña a
partir tíel 25? de julio de. i 82.1. A esta declaración, se suele llamar la "libertad de vientres
Hbi'es't Asimismo se proclamó que todo esclavo que pegase a nuestro territorio fuera
libre. Sin embargo, estes detiaradones «¿erales tropezaron con dificultades en la
práctica y, finalmente, quedaron libres sólo aquellos que se habían. enrolado en d
ejército patriota y que per mane ciáis en él m ano después déla batalla de Ayaeucho.
riüspiuri de la independencia, b esdavltot! se mantuvo por 21 años y se
permitió el tráfico 4e esdavos desamigados de as lugar de nacbúento. Finalmente m
1.854 el Preri&áte Ramón Castilla firmóte! decrete de abolición: las eiratastaúdas
habían permitido la evolución hacia un contexto favorable. Xódnso, en medio ds Ea
perra crw! que culminó en la. 'batalla, dé l a Palma, tiende Castalia venció a José Rufino
¿I último había intentado organizar imafib eradla de esclavos, bajo b
cem dkión;der^grarse'a'rirpro^ó'éjéríáto:A •>

175'
INMIGRACIÓN CHINA AL PERÚ

____
im 75
1850 m
1851 800

1853 i.m
1854 526
.1855 1.000"
1856 1.000■
1857 405
1858 ' 270
1,85» ; 289
1860 1.4.0
1861 1..44ÍÍ
1862. L439
1863 3.904
1864 6.522
1865 6.243
1866 3 >79
1867 2.184
1868 4-2.60
186» 3 .017
1870 7.544
.1871 15.463
ma 14.634
1871 ó. 571
1874 3.825
TOTAL .«USO
Tuente JswerTsDafón, PoHjKaEtoaitáctfrtaimriera
y Toma*»» dt.i lisiado: Si£a XX Lfem, 1983.
AfUEEO ClKtá 13

La I|egaáá.deIos'dbám>S'áí 'Perú sé imció en; 1849. Ei primer


importador fue Domingo Elias* quien trajo alrededor de <50 culíes p ^ a
cpe teabaiasért en varias haciendas costeñas de su propiedad, ubicadas
en el vallé de l<:a. Losculíés también fueron utilizados en la extracción
eí;.gu.imo de las islas/1’ ffestá 1874 unos'90,000 culi.es llegaron af Perú

, “ i. La. presencia de Sos dilles galas islas guánsras & sido estudiada
por C&tife M íe te . "Lr <4*a hwUma dej g ra » 1. P'ííb , 1840 - 1S79'’. & : l i d s t a

176 '
y 10.000 murieron a bordo de las atestadas naves que los traían como
esclavos. Durante esta época, muchas haciendas consolidan y
fortalece'-su-posición, sobre todo p o rta favorable coyuntura mundial
y la combinación de factores de producción ^adicionales" (mano de
obra neo-esclava) y "no tradicionales'' (uso de maquinarias).'12 Esta

And®»», año 5, N®9. Gizee, 1987. Este trabajo intenta esclarecer un aspecto vital en
al 'proceso As la producción guanera: el trabajo humane directo. Analiza el problema
'de su'cs^taábn, características, racionalidad M sistema de esputación y finalmente
evalúa su costo social. En al mismo número de la revista existen tos sugerentes
comentarios de Gados Agtárra, Fred Bromar, Carlos Contreras, 'Wíljna Derpich, José
EtowsUia, Pool Go-otanberg, Cristas H&nefBldt, «atoe oíros.
Respecto a la'preferencia por tos trabajadores culis frente al empleo de
trabajadores locales e incluso colonos europeos, opinan al respecto varios autores.
Pablo Macera considera que: "no fueron decisivos si la procedencia- (en cnanto a
"dátanda’ como gasto del transporte o resistencia cidíaal) ni el costo del tr abajo pos-
si sólo, sino más bien la naturaleza y disponibilidad de la oferta, asi como !a relación
social implicada* Pablo Macara, "Las Plantaciones Azucareras andinas (1821-1875)“.
Én: Trabajos de Historia, Tomo I?, lin a , 1977. Pp. 52. Pedro Paz Soldán
consideraba que la contrata de 8 años era lo que diferenciaba al bracero círiao des
jornalero fibra: "Tas contratas eran da g anos,, y tos hacendados tenían calculado que
deducidos los 500 soles de la compra, ios 4 soles «d nws, h ración diaria de carne y
iteres, y la ¡opa y 'enfermería, cada chino venía a salir a (5 reato:;, que era el jornal
ordinario ds! peón libre (...) Los hacendados buscaba*. la seglaridadinalterable riel peón
por ® años." Pedro Paz Soldán, La horágradíe» «a <1 Paril lima, 1972, Pp. 93.
Yeánse también Jorge Basato Historia de la jveji&rilca AdiPatá Tomo XV. lima,
Zoila 'Caravedo, Los tiabsfljulwes dimos «a la bacheada Palto: wn.
f.-r#yecto de mves%ad«L Lima. 1981; Denys Codee, Podar tobase® y raistend»
« g ira :m d ;Pwíi''3ü¡aaá, 1975; Ernesto Feraánfe y Goman Grande; A padtsiodii-
etaritajeós dtoiámiaipníiím dtbea m eSPesrá. 1849-1874. Memoria. Lana, 19®;
Alejandró ( t o ^ ' I a ;iB te lrii'áan ra rarí m el P a ú (155&-1805). Lima, 1895;
Jonaíban Levm,''lias « rin o n É s ie ©gaertadm. México, 1964; Dora Mayar, La
tite a sBeadosn y elocuente. lima, 192.4; Cecilia Méndez, Los trabajadores
p u r o i i a «1 Perá(1S4&-1879). Memorias. lima, 1986; Humberto Rodríguez
Pastor, L a xebelKSi de ios re sto s pintados. Paridles 1870. Urna, 1979; Félix M.
:Suéá Lá», La ñisñgradida china ©t ti Ihsrts 1849-1874. Rríndp&te earscíedsricss
d é la m t o ’i » 'A » '. é i » « t e t o e M u dala cosía mente t ó Paró Linón, 1987;
WattStetwtt. L a s®vktanbre citara m oí F«r& tata Ida toda de tos cufies ciónos eso.
dP*£ú(184gi-187<l). lima, 1976. "

•u • ■'SdbuStT., mencionaba que la forma de lograr mayores beneficios


del capital en la agriailtaa era introduciendo un juego de factores de proAiceión "no
tradírionalés". Véase tanlsén Afollo Figuma "La ececmrrfanwal de k sierra del Perú*.
En; Revisto Económica, Vol. t, 351“ Lima, 1977. Fp. 42. Parabién deben
considerarse factores de producción "no tradicionales los instrumentos y a»ados de

177
tendencia originó que muchos acaudalados comerciantes y líderes
políticos, orienten sus actividades a la consecución de ajgúo beneficio
económico en dicha área. Los primeros mediante,una inversión directa
y los segundos; a través de la aplicación de una política, fiscal.13 Toda
esta situación elevó conriderablemente el ps^ecio de las tierras de cultivo
y con dio um- especulación rentista.4

No sólo la suspensión cid tráfico de. cuites ocasionó una nueva


crisis de la económica peruana, sísrj también los cambios en k
economía mundial (saturación de mercados, conquistado nuevos centros
productores de materias primas, ttc.}, el fracaso d d modelo económico
dependiente, la bancarrota fiscal (1872) y la posterior gj.ia'r.a cc>ri Chile
(1879). Siendo esta última, la que término’por destmir el pequeño pero
alentador-proceso alcanzado por las haciendas y, diversos yacimientos
mineros, •

En 1379 estalla la guerra con Chile o guerra delBacfticó, Tras


las batallas navales doIqt.drp.se y Ángamósy e l heroico sacrificio de
Miguel Orau, comandante riel Huáscar, los chilenos'-. invadieron
Tarapacá, Tacna y Arica. Tras el holocausto del Morro de Arica y la
lección patriótica de Bolognusi y, su s.tropas;’el gpu¿5p.:dei ejército
chileno avanzó mconkmblfmenfce hada la capital peruana,V- Con ei
ejército peruano desbrido, el Presidente Nicolás, de Piérola emitió un

origen inglés y iwrteam&ticano itároduridos m algunos fimdos, feiejjdo variar «I patrón,


tecnológico de (a producción. Al respecto .véanse Alfredo I-eubiíl, ÉS IPetáéi» ÍSw o sa
Arawarío Hadiviaal lima, 1S61. Pp. ISS-lóO, y Horadio Bonilla, "La Expmsíóü
Comercial Británica «a ol Perú-”, Separata da la revista XSssaBrelk Econ^nico, Vol.
15, N° 57. Buenos ¿liras,1975.

i3 Una aproam ación %la mentalidad e ideas económicas de los


principales líderes :diversos sectores de ksocs^dperusioa.^i^d^íi,iiiits'íriales
y artesanos) bajo m& economía de orden liberah.es estudiada por Pool pwtettbéfg m'
Imaginar d desarrollo. Las Meas econótidcas m áPemimricoloráal. *99$.
El estudio ¿atenía responderse una pregunta bastante simple: ¿qué -pensaban en realidad
los dirigentes peíanos sntentfas llevaban a! país por el malhadado camino del
liberalismo exportador? ¿que tipo de desarrollo económico imágíssaban?,

w J. H. 3.'. Míartiiient.[1875], Carestía de víveres m Lima! lima,


1977.pp, n .

m
decreto supremo convocando a ios vecinos-,de la ciudad de Lima y
alrededoresf a constituir el "ejército de reserva". Con estas bisoñ&s
tropas se afrontó tas batidlas de San Juan, Miraflores y Chorrillos en
enero de 1881.

La población urbana y rural de Lima fue organizada según su


ocupación en diversas divisiones al mando de los pocos m ilitáis que
sobrevinieron,' de las batallas pre vias. Debido a la escasa preparación
e inadecuada inpletneifación militar; poco fue lo que pudieron liacer los
cbíeiisores límenos. Por su parte el Presidente Nieotibi de Piérda
comunicó al Coronel Belisario Suárez, Jefe militar de la Plaza, que se
retire de lim a sin ofrecer ninguna resistencia, para que la ciudad sea
respetada por tos invasores, El e-ornumeacb lo hace desdi? la hacienda
Punchauca en el valle de Carabayiío, lugar en donde- se detuvo
brevemente durante su retirada al interior del país.

La zm a de Carafoayllo. más que división de reserva militar, fríe


considerada como zona de aprovitionamietilo de alimentos para bis
tropas peruanas y postenoamente para las trepas chilenas ti’ En un
principio las haciendas fueron resguardadas por las tropas peruanas;
pero envista de las constantes derrotas y a i posterior retirada al interior

,J Pasa 1876, h provincia tfe Lis» contaba, coa más de 166 hatiasílas
distribuidas «a 12 valles: Aneó», Ate {(dividido «a Alte (coa 20 ideadas) y B<$o (co©
14 haciendas)]. Barranca Carabao [(¿¡¡viádo m Alto (ton 17 hacinadas y 1 caserío)
y Bajo (cosí 10 haciendas y X estaciones de ¡ferroardí)], Chorrillos, lima, larigancho,
Loria, Magdalena, Miradores, Pachacarme y Surco. H total é&la población rural en
las haciendas era da 10.477 habitantes-, de los cuales 3.521 correspondían a Caiabsyílo.
En este valle también estaban considerados las' 16 hachadas y 1 caserío que
cos'rescondían al valle de Bóeantígi'u, Es probable que mucha de li población rural de
las hatiendaa limeñas huyeráu, áí igusS ipie la población tabana de Lima, d interior áú
país; sn especial los forasteros, ¡.o í ateles «o tenían caucho que llevar. Véase Pablo
Macana, PoMadéi Karal m las Hadmáasí ÍSTíj. Lima, 1976. Pp. 4S y frt. Para ese
mismo año, George Knblsr señala un total de 120.994 habitantes sn la provincia <ls
Lima, de los cuales 26AIA son jtxdigenas. Estas ciñas no invaHdañ las anteriormente
señaladas, pues Kubler no hace rsinstema ásftnción entre fes viven en la zom uibana
f rural. Véase Goerga ILnblet, Use 3jadñí¡n C&ste P&jú, 1793 -HMá). Washkteng,
1952, Pp. 35. Para algunos comentarios y caúcas respecto a & danaografia peruana del
sígío XIX, véase Francisco- Píre Eodolfi, "La poblador» del Peni a lo largo de un rigió:
Í7ÍS5-18íMr Eñ: M«É¿¿' 'ctaso&flgráRice íM Peni lima, 1972.

179
del país, las haciendas queda»™ al amparo de sus mismos propietarios,
al menos hasta, la llegada de las tropas chilenas,

La zona norte de tim a fue transitada constantemente por las


tropas chilenas, quienes a su paso satjueaban Sas haciendas, asesinaban
a los trabajadores; entre oteas ateoddades, Su paso por dicha zona, era
obligatorio, ya <jue el. Camino Rea] conduda a Chanc&y y de alH a
. Chidayo, Tmjülo, Lambayeqae y diversas zonas' agtícolas, en donde se
ubicábanlas enormes haciendas.azucararas. Uno de los.objetivos.de las
tropas chilenas; era destruir y paralizar la producción de. éstas.unidades
productivas, para'de esta manera cortar los ingresos41 Esta-Jo peruano
y no dejar ninguna porábil icfed de recuperación á la economía peruana.

Una de las consecuencias- inmediatas'de la ocupación, chsie.ua,


file el desabastecimiento y encarecimiento de los productos ^.prim era
necesida, situación, que se empeoró debido a la. escasez de circulante,

Para las primeras décadas, del siglo XX, las haciendas de la


zona norte de Lima, estarán orientadas a la producción de algodón, cafía
de azúcar, pero en especial ai cultivo- de-alimentos .de.panllewr (trigo,,
papa, zanahoria, lecbiga, betarraga, etc.). -

2, HACIENDA COMAS jd :

Concluidas las. guerras de mdependencia,’ la- fa m ilifi Lairiva


seguirá manteniendo el dominio útil sobre, lá hacienda. Ctimasr' Este,
permanencia este, respalda, por el .contento de arremlmiientó que filmó
Vicente Larriva con el propietario de la ha,ciencia Cotilas:, el Colegio San
Pedro No lasco. ' ' , 'v.-vv:

El contrato de ariendaiménto :foe firmado eft 1791 y;'en'"él se


estipulaba que dicha hacienda estarla bajo el dominio útil de la familia
Larriva, por un lapso de 3 vidas civiles de 50 años cada una. Es. decir,
hasta 1941 aprojdtn alian ¡ente. Pero por diversos motivos, en-especial
Económicos, la famijiá Lacnriva va. tener el dominio útil de la Hacienda
.Comas sólo hasta 1857, fecha en k que es traspasada a iManuéí Álfaro

1 80
y heimaflos, quienes posteriormente la ceden a Antonio $. Almodovar.
Este último, tras sólo un año de acceder al dominio útil, la. transfiere a
■Nicolás Rodrigo.

Eteante esta época, el Colegio San Pedro Nolaseo había dejado


de funcionar.. Las rentas que suministraban, a dicho colegio, fueron
transferí das-por el Estado al Comietorio de San Carlos como parto de
sus rentas de subvención. Esta ü-ansferencia es decretada el 26 de
octubre: de 1826, por el Mariscal Andrés de Santa Cruz, Presidente del
Consejo de Gobierno;
Axt W 1A F m ateca las raarte deü Convictorio
serfelas^gmerate:
i . 3.000 g»«$os an ales pagaderos por 'd Tesoro
PdbHro jpttirft t t i t ü r l » 24 b tc u p t n t t ú ; ;
1, ES prtuáitó® de Eneas aro m as p w fe n e d a ite al
CsM i.etsiie, ^■at^caísil© «a 3.40® pesos a! afe;
. 3. L a asiguaása fie 4.S&8 pesos aninatas s o t e fe
Caja G«asraí sk C a is « , rcftmrMos m la ste
ían<Httfes.tíéi;
4. Las restas qoe perteuerienm si eatíngoSá®
. Colegio á© Sara. Pedro Nolaseo, gratantes m 3.2WD
pesos al alto;
5. Las rentes t a m M eactíaguid* Colegio de
$an Zdc^Hose, eakTdade «a 4,70® p « o s ®J. a£©;
S. Las pm doaes ipie Sos es colases que se
admitan como átennos tetemos y estemos.5’16

’ Medio siglo después, por las; leyes de Instrucción del 18 de


marzo dé 1876, las rentas del Convictorio de San Garios pasarían a
formar parte del presupuesto de la Uraversidad Na.cioíial Mayor efe Sari
Marcos. ■ Esta imtiteción gozará- de dicha renta hasta 1945
aprosámdámente, fecha en que desaparece de los registros de bienes
inmuebles de la Universidad. Todavía no hemos podido precisar cuáles
foeron iqs motivos para.que San Marcos pierda el dominio directo sobre

■ Juan de Oviedo, C®1e«ióB¡ Aa leyes, decretos y ordenas


jmlrilcKte «a el F aft Besd® d Ríes IK tl testa el 31 A» dícteoste: de 1069. Turno
9 (MiraífflriO' de Beneficencia, Ihs&wccié» Pública, y Justicia). lima, 1S®. Capítulo
cleckaotei'cero,, Pp. 541.

181
dicha propiedad. Poro miemos que.se debió a consecuencia dlel
incumplimiento del pago de arresidamüento, lo que orii|;f.tió un
desectendimieimío por paite de las autoridades: universitarias,1

Par&famles del siglo XLX, especíñcaroente m 189i5, l a hacienda.


Comas era ^rendada por Nicolás Rodrigo, quien por herencia se la
traspasó a su hijo Aurelio Rodrigo,1*

1' Este stteciósi de morosidad se dio- jacio entre 1842 y 1845, aiendo
propietario ¿foleto d Cojwfetoiio <to San Caítos. Bu esa «poca, «I’R.octor de San Carlos,
Bartolomé Titeera, acuerda co« JcsefaLaráv» refeajStftóse la deiuciapendiente -coa dicha
iastkscií'.ti, bajo bis {tom os sigieímtos: "1. Qi® ííoíia lósela'Lairiva como ¡poseedora
í!e 1.a"chacra" de Comas «n enfíteusis reconoce y confiesa que debe al Colegio ¿le
San Carlos, que ha suce-ilido a!, de San Pedro Notoseo eri ú dooámo directo de amrol
hiacSo, la cantidad de 3.390 pesos por á canon que fea dejado de sarisfam, 2. Que al
(Echorector de San Carlos condona a ¿birla Josefa la c'aatí.dad de 1.390 pesos con. tal
tpií don. Juan. Pacho Losto3.au pague el ráster.’1A pesar da rebajársele h decida, Josefa
Licrnva m aimplR con lo establecido. AON: Protocolo Notarial N° 185.
l a morosidad existente desde tiempo atarás condiciona el feeafeátoíMaxto
por paste de las autoridades sáomar(pinas, qpje por lo efemás ven en, los altos cestos que
ocasionaba segflk.sma deTOWsda en contra de tos deudores, noi detembiaatee incentivar
para m m M a m á a » Por otro tocto, la docwiuentackm revisada nos sugmre que muchas
de las propiedades & San Marcos, tanto mfeanas como inhales, fUeron vendidas •
soAasatando "'sacar el mayor provecho*.per «fe. Pero no todas iat«! proptodacks fueron
tasadas correctam^ite, muchas fueron remólas por debajo dé su valor original e
incluso compradas por las mismas autoridades da b uíúv«rsidad o parientes cercanos.
Para. 1934., h Lháversidari de San Marcos sólo te n te bajo su dominio 3 propiedades
rústicas: San Loimto ele Ayancfeacra , (ChotalCajamarca), Ototo
(Cajahanol>aíCajira«a,oa) y fem cla Boza VchancayíLáaa). A E S M . Inventario
Gnusi) «l»Bienes. MargosS dio los 3Bím«s iMmnchfa,, Mon«5. ranchitas y enseros,
«cnsos, rfiteosís, satam, ote. Carlos J, íbspiglioá YígiL lima, 1.934. Ppf 59-75-77.

Los Márgssis de los bienes y rentas ds to’Unfóeisidad Mayor de


San Más eos m precisan el afeo ni «i monto un que Nicolás Rodrigo arrienda la .hacienda.
Comas. La ausencia do estos datos es debido a epas muchos ele tos doainientos del
archivo do San Marcos desaparecieron cuando «l ejército chileno invadió olió cal ttei
Pilque Uxwt'ersiiíátio «¡o 1881. Quizás esta también pueda ser una de las razones porque
muchas: focas y predios urbanos y rurafes, dejaron de pesiaseeer a la Universidad.. El
■£koj.ci> vínculo de San Máteos coa sus propiedades eran los contratos de cnftteusis y
atvendardeiftes, qi«s sino omtjir, las propiedades podrían metepenífearsa: ds acuerdo a
k vofeta.il de quien m ese momento era poseedor del bien-inmueble, Ver AG.15Í:
Archivo Taran, Tomó 122j afeo 1896. Fot X4v, 15 y 15v. y-.. ••.y-
Durattie las «primeras décadas del siglo XX, la hacienda. Congas
(al igual que en la época colonial) -va estar m ida a la hacienda Pro.1* El
administrador de dichas haciendas era la familia Femandmi. A partir de
esta fecha, los datos acerca de la hacienda Comas se pierden en el
^irtíiKorable” e !,m e^)u^ablef!‘ Archivo del Registra Público de Bienes
Inmuebles de Lima»

Durante toda esta época, la hacienda Comas producía diversos


productos de panllevar y alfalfa, Los ciclos de producción eran
irregulares y estaban m íntima: relación con los diversos
acontecimientos económicos nacionales e ititmincíonales. A» su vez, la
mano de obra esclava, fue reemplazada por campesinos libres (ttidfgenas
de Lima y alrededores). Es probable que durante algunas décadas
(entone 1865 y 1880) los campesinos indígenas compartieron labores
agrícolas con trabajadores de origen asiático,

Los trabajadores ele la hacienda Comas tenían la posibilidad de


obtener algunas parcelas en donde podía»' cultivar ciertos productos y
construir sus viviendas.21 Con el tiempo, los descendientes é& estos

iy Esta iaformadLMi es obíesúda de un documento qve suscriben los


representantes, dueños y arrendatarios de las haciendas átosdas en el vafie de
Catabaco (hacienda Chaora C*nro, Seriedad Agdcdla "Pueníí? Piedra”, Sociedad
A^dcolaJnfmtas y Caucfivillsu Sociedad Agúcela' ‘‘ETHaracjar', Haciendas Pró.y
Comas) al Ministerio de Hacienda, soüritando se he autorice las operaciones''de
Braiharque y descargue de guano y materiales libres por é púsito <h Ancón. Esta petición
se fundamentaba en que el puerto efej Callao se encontraba congestionado y eSo
perjudicaba sus intereses. Debo agradeces; a ía tastoj.iadora 'Victoria Espinosa por la
cuatregade este documento. AGN. Hsebíiila Publica, Oi.805-<$21.

M Este depositario áocranental guarda una valiosa infomtación para


qíáenes quisieron sstadiarla evolución y conformación, d e -las propiedades inmuebles de
lima. Es curioso, pero a la fechar» se ha hecho íiiagtsu estudio a! respecto. No sólo
porque resulta costosa la revisión «fe cada uno cíe los tornos y asientos documentales del
mencionado aidrivo* smo tentón porque o! tema es delicado. Muchos saben y otros
suponen, que, muchas de las actuafes propiedades, han conformado y ampliado su
tkttüíñtóo desconociendo y/o violeulando los derechos legítimos de otros propietarios.
¿Quiénes son los beneficiados?, ¿quiénes los perjudicados?. Estas son preguntes que
quisas algunas personas no qmwmi que se respondan, oirás por el contraria hs esperan
coa gran ansiedad. .

31 .. m Este, ¿puyo de ^abajadores deaonibssulos “pagos” o “estancias”.. son

183
^abajadores y los pobladores migrantes del interior del pak , invadirán
los terrenos efe está hacienda y ot¡*as haciendas aledañas.

3 . .HACIENDA C O L O Q U E

En 1803, los acreedores de la hacienda Collique (Conventos de


Santa. Clara y {Jan Agustín, diversas iglesias, cofradías y personas
particulares) deciden vender k hacienda a José Martínez-: de Rivera'y
Mariano Rivera, quien será, poseedor hasta 1828, fecha en que la
Dirección General de Consolidación desconoce su vinculo cu», la
.hacienday la. arrienda a José Fernández por el.término:de 9 años;. los-4
’ primeros forzosos y los 5 restantes a voluntad, Fd arrendíin-siento es
fijado en 3.300 pesos anuales fiara los primeros 2 asios y 4.000 pesos
los 7 restantes.

La ircertidumbre, imegurídad y el caos en general que provocó


la época anterior y posterior®. la declaración- de k-. independencia
peruana, originó una disminución de los ■esclavos de las haciendas
limeñas. Una de- las razones que «aplicaría esta situación, .es el
abandono en que se.encontraban-ks haciendas producto de las guerras
y levantamientos que se daban-al interior de las haciendas -y-las fugas
constante délos esclavos, que producirántina dkmimicsón de la fuerza
de trabajo, Esta situación se dio. en la.hacienda Collique.: En Í8G3,
.dicha hacienda contaba con un total de 132-.esclavos, « tie n te que para.
1826 con -tan ¡sólo 55 - esclavos --(34 hombres, 21 ¡mujeres-y" 10
mútímchás).^ Esta situación va dar;origen á J a intíochccióñ de cíeítas
cláusulas en los contratos de arrendamientos, dezmadas a cuidar y

los aOTí»rráéRtüi? -jKibladíi)s.:fl0s de menor jerarquía (pie pnentasnte dan kitío a la


'coafooftáci'éndélas aldeas,pueblos,-'vflbsi datiladas, nfistxitos, etc., quelahkoíiografia
ha desenfade-m-sii-anáfisis acerca de la c«nf«ottactóáy evolución de la demarcación
geográfica y poMca tfel Pesó. Mas por al contrario han («irilegáde al estudio de otras
categorías; anam,'pueblos, distritos, etc. — : ¡ .

2,1 Ver anexo Esta disminución, de ía población esclava e® h.


bacjenda Coflapje es gra<&al. En 1820, la población esctava era da 80 esclavos; AGN:
Protocolo Notarial N° 34.

184
fomentar 'el aumento del número de esclavos. De igual manera se
prohibirá vender, cambiar o enajenar a los esclavos; en caso de ser así,
el dueño de los esclavos tendría que retener el valor de su costo para
reponerlos posteriormente.

Al parecer en 1850?, los acreedores de la hacienda Collique


deciden dividirse la propiedad, en vísta que ninguna persona, o entidad
podía comprarla o arrendarla; razón por la que ninguno de ellos podía
recuperar e! monto de su capital .y ios respectivos intereses acumulados.

Dividida la hacienda e independientemente uno de otro, los


propietarios deciden asrendar o vender el sect.or que le correspondía.
Desconocemos en cuantos sectores exactamente fue dividida la
hacienda Collique, pero tenemos conocimiento que una efe ellas (quizás
la más grande de todas: 265 fanegadas 7 décimas i cestedmo de
milésima.y 2 10 milésimas da fanegadas) -fue comprada, en 1860? por
Juan Miguel de Amela, a un precio de 70.000 pesos,23

Al fallecer,este propietario, el I I efe octubre de 1873, la


propiedad es repartida en mitades equitativas entre su esposa María
Carmen Ondarza y sus hijos Pedro, Juan, tam izo .y Mmsuek Ameta y
Ondarza. A los pocos: años, la viuda de Juan Miguel de Arríela fallece
(6 de noviembre de 1885) y sus bienes, c i t e ellos la mitad de la
hacienda Collique, es repartida entre sus 4 hijos; pero no en forma
equitativa, pues la madre de Manuela Arríela, y Ondarza la beneficia con
un quinto de su herencia.24

El valor de la mitad de 3a hacienda, propiedad de la viuda de


Juan Miguel de Arrieta, es tasado por el perito Femando Rodríguez
Saiazar en 103.853 soles y 71 centavos. Está propiedad cenia como*34

23 Es preciso marsfestaf qas h babeada CoSqué había aumentado su


estmswn, pitas de 2Üü i anegadas qas CebSa sa 1780, ésta se incrementé a 265
fanegadas para 1850?. lía usía medición ao se consideraba la extensión ¡le ios otros
sectores en las cuales había sido dividida. A diferencia de la época colonial, an sata
ventano se consideraba la majo da obra perteneciente a esta hacienda.

34 Esrta heredera se encontraba casada con José Manuel Moaga.

185
“imites:
"...ai norte con la hadada Chacra Carro; «ü sor (...)
| o pampas M i É n á n 1¡dp.e Ci é » y Cofflijuí'jf tó.s • ’■ :
carros; al noreste con ta tatímdií' C sajíilüí y .al ■■ • ;
ost* mn tos. had<máta tía CoKias, Tiiímíai* ,y ©l : , ;¡
Camino Km I (...) para Chancay..." ^ . .

En 1890. Pedro Anieta fallece y canio,- no había tenido rasposa


ni hijos, -deja ta parle que le .correspondía .de.¡su.:hemrick m ateim y
p a ta ta a su heimsma Manuela Ameta y Ondasza, quien para 1898 habla
enviudado-de su esposo José Manuel Zuloaga, Es así: como Manuela
Arrióte. ll^ a a sor poseedora de 171 fanegadas y.:5.72710 milésimas de
fanegada» las cuales -arrienda a. Garlos Alvares Calderón,:, quien
posteriormente las compra en 30.000 soles, de plata,* El valor de ésta
parte de k hacienda debía ser pagado de la simiente "manera:-
*.2.000 soles para Manuela Arríete viuda. de Zuloaga.
- 500 soles a su- aSbacea Felipe Benicio Salinas,. -:
-17.500 soles al tiempo de fumar la escritura de comprá-verta.
-10.000 soles m 2 annadas:
5.000 el 1 de abril ele 1900, .
5.000 el 1 da abril de 1901, .-

Una vez cancelada la última letra de pago, Carlos, Ah®-ez


Calderón hipotéca la hacienda por un pago de 45.000. soles a favor de
Chiristi.a~n ■Sehereitmuller, en mérito de .una -deudavpend¡ente?.:detj;la
transferencia, de arrendamiento del ferrocarril de Pisco „al lea,
Cancelada la .hipoteca a finales de 1901, Carlos Alvares Calderón

'.XX-
55 El contrato de compra-venta mkyB el papel moneda o cuálcpaier
otra moneda de valor "‘fiduciario”, para elpago del monto acordado. La propiedad se
encontraba libre.de, todo censo, capellanía, hipoteca y cualquier otro gravamen.

* ; La transferencia ¿be hecha a favor de'MjajJBd-.Mcapor y-.G*ríos


Alvares Calderón, siendo este último representado por.su hemarto Marwtí itlvare?.
Calderón. El monto de la tntsn&reááa era de 175.000 soles, de los árales sólo se
habían pagado 130.000 soles.

186
arrienda, la hacienda CoUique a Pablo Peres y Juan Herrera por un plazo
de 10 años forzosos. El arrmdamiento fue fijado en 500 soles de plata
mensuales, pagaderos., trimeshalmejate. Diez años después, Cádós
Ahrarez Calderón nuevamente hipoteca la hacienda Cpllique afevor.de
la Compañía Penjvian Corporation Limited, representado por Williams
Leucius Morteil, por la suma de 2.500 libras -esteriimsi La hipoteca
sobre la referida hacienda servía para asegurar e! ciMapfkoirinto de las
obligaciones adquiridas por Carlos Alvares Calderón y . san hermano
Manuel.Alvarez-Calderón, por el arrendamiento del ferrocarril de Pise»
alca.

En 1932, después ría haber cancelado las obligaciones: a. la


Compañía. Peroviaa Cosporation Limited, y muerto Carlos Alvarez
Calderón, la hacienda Colfique se encontraba bajo los dominios de
la. viuda de Garlos. Alvarez Calderón y sus: 10 herederos/*' A partir de
esa fecha se desconoce quien es el nueve propietario o arrendatario de
Sa hacienda Collique, pero se tiene ccaaocimáentc» de mía serie de
transferencias (vestías; y aiTendamientos por peste de los hermanos
Alvarez* Flores) y expropiaciones por parte das Estado. Se desconoce
también, cuantas personas inter/snlerors en astas fransaceicnes y en
cuantas partes foe dividida ia hacienda Colfique. Pero *1 parecer,
la familia Alvárez Calderón, unida a. la familia Flores, todavía
conservaban una parte de la hacienda; razón por la cual, en 1969,
interponen una demanda al Consejo Distrital de C otos, sobre el mejor
derecho de posesión de las tierras eriazas aledañas a la hacienda de a i
propiedad.

IL CRECIMIENtÓ KEMOGEÁFICO

Para entender las causas del aumento poblaeional del distrito de


Comas, debemos analizar en primer lugar, las causas generales que
provocaron la explosión demográfica nacional y en segundo lugar, las
consecuencias que tuvo en el departamento de lim a.

ARPBIL: Tomo 190, íol. 412,

187
• Las haciendas Conitó.y Collíque, a. mediados del siglo XX, van
a sufrir Una rápida y sistemática invasión, que 'van a originar xsn cambio
éa al aspecto rural del valle dé Carabaylltk Las tierras de cultivó» los
potreros y los huertos» van a ser sustituidas por chozas db' esteras»
cartones, plásticos y maderas. B1 aumento vertiginoso de h población,
aceleró este proceso de conversión.

El crecimiento d e la población nacional sufrió un inesperado


incremento a mediados del siglo XX. En X9S0, la población nacional
totalizaba un promedio de¡ 7.633.000 habitantes», que eumenos de 30
años aumentó a 17324.000 habitantes y que en ía actualidad llega, a 25
mirones1-de habitantes,, apróxif«adámente. r

POBLACIÓ N NACIONAL (l« 3 6 -í# 8 8 )'

..... CENSOS......... HABITANTES


nr>z¡ 1 ,373.7t$<?
1830 2.001.203
1862 2.437.916
1876 2,699.100
1900 3:260.000
.1910 '4.210.000
1920 4.350,000
1930 5.900.000
1940 7.030.000
1950 7.633.000 . z--i
1960 9.931.000-
1.970 ' 13.193.000
1980 17 J 24.000
1990 2L569.Ü 00
1997 24,371.000
1993 24.301.000
_-___ __ ___________ __v-—
____ _________* .-'
Fueaító: IKEI. Elaborado por CUANTO S.A,

Esta 'explosiva demográfica que experimentó el Perú a


mediados del siglo .XX» es común en casi todos los países del tercer
mundo. Este fenómeno se originó por un desnivel etiire IAta¿a de
natalidad y la tasa de mortandad. El prinbró' debido a un acelerado'.
crecimiento y el segundo por un proceso de disminución. Este
crecimiento acelerado m hubiera provocado un. serio trastorno al país,
si este crecimiento estuviera respaldado por un desarrollo interno de la
economía peruana, Al no ser así, esta situación va dar origen a que la
población inicie una desesperada búsqueda de medios económicos con
que adquirir bienes de necesidad básica (personal y familiar).39 En vista
que el reducido mercado laboral del país no satisfacía sus
requerimientos y expectativas, la. población del interior del país va dar
inicio a grandes oleadas migratorias hacia las principales ciudades del
país.

Si el Perú cuenta con una extensión territorial de 1,2.85.215 Kmr


y una población actual de aproximadamente 25 millones,-a cada
poblador Se correspondería un área no menor de 350 n f en donde podía
construí}" su vivienda. Pero este razonamiento solo es posible si- h
población estuviera distribuida equitativamente en todo .d territorio
peruano, Pero como sabemos, ello no ocurre así.

El Peni, geográfícamerie se encuentra dividido entres regiones:,


costa» sierra y selva. La sierra y selva cuentan con más del 80 % del
teiritorio, dejando con tan solo 20 % a la costa, Esta desproporción
territorial es inversa a la distribución población*.! actual. La
población que radica en estas regiones a ido variando con los anos.

BI siguiente cuadro nos permite distinguir los ciclos y


porcentajes de variación de la distribución poblad onal por regiones.

j :' Ver Fmiancb 'Villarán, 13 eanpie© «a <1 P a i Criáis y


iswsj}¿íd:w?»?>. Lima, 1991.

189
PORCENTAJE DE POBLACIÓN P O R REGIONES
(19404993)

BEGltíN 1040 1SMSI m i 198® í$m


Costa 25.15 39.41 45.90 49.90 53.70
Siena 61M 53,44 44.20 39.50 .14.80
Selva n.%9 07.15 09.90 10.60 11.S0'

límite: INSX-CÜNAKj, Elaborado pw CUANTO S.A-

Bn 1940, la sierra y selva juntas albergaban cerca del 75 % ¿le


la. población. La costa, en menos de 40 años, equiparó esta diferencia
alcanzando el 49,9 % ele la población. En la. actualidad, la población
radicada en la costa supera ampliamente a la de I r sim a y selva juntas.
Este grave problema de concentración. pobkciortal, sobre todo en--los
departamentos de Arequipa, Tacna... Tmjillo y principalmente Lima,
tienden cada día a empeorar. Es asi como,' -la •población del
departamento de Lima a ida mrrement4iktase de manera acelerada.
Hasta 1940, la población limeña era de tan sólo 849-.Ó00 habitantes, que
en menos de '50 años a llegado s cerca de 8 millones de habítaníes.y
con tendencias a seguir aumentando.

POBLACION D EL DEPARTAMENTO DE LIMA


(190S-1<>9S)
CENSOS HABHA.N'IÜS
1903 154.624
1910 155.138
1920 198.975
1930 317.825
1940 849.000
1961 2.093.000
1972 3.595.000.
1931 4.993.000
1993 6.479.000
1997 7.067.000
1998 7.891.635

-Ffiíjiite: JHEX, Eíaboraíto poj'CVANSO S.A,

190
El distrito ele Comas no es ajeno a este fenómeno. Es más,
junto al distrito de San Juan-de Lurigancho son los distritos de mayor
concentración poblacional de ia provincia de Lima.

Comas antes de su fundación como distrito estaba,, compuesto


de tan sólo 60 familias. Para 1961. el distrito contaba con una
población aproximada de 100 mil pobladores,, quienes a.base de
esfuerzo e iniciativa -impulsaron la fundación del distrito. En la
actualidad, el distrito de Comas posee cerca de 450 mi! pobladores.

, POBLACIÓN D EL DISTRITO'DE COMASt


1961-1997 :
. ' C E N SO S™ ItS n A Ñ T E S .
19(51 100.000
1972 173.000
1981 283.000
1993 404.000
1997 439.000

íuente! IWBI Elaborado por ÜTfAffftQ S.A.

1. CAUSAS; CIFRAS

El crecimiento poblacionai de! distrito de Comas, no es sólo


producto de ía explosión demográfica ocurrida en la década del '50 de!
siglo XX, A ello es necesario agregarle la grave situación económica
por k que .atravesaba d,. interior país, lo que originó finalmente que la
población radicada en esas xanas de! país (la. más afectada por esta
situación) se viera obligada a dejar sis lugar de origen para trasladarse
a z o n a sm á s'‘rk sw o llad as"36 .

Entre las zonas de desarrollo-agromtfcstrial, tenemos a


la zona norte y cateo- de Ja costa peruana, lugar donde se encontraban ubicadas las
printípaSes infcídas exportadoras da azúcar, algodón, cobre, petróleo y harina de
poscado.,
191
Estes oleadas migratorias tienen causas imumerabies, Los
diversos estudios de este fenómeno pueden -de acuerdo a su análisis-
sea'reunidos en dos grandes grupos ¡el primero que defiende el factor
económico como el determinante de las migraciones y el segundo,,
antepone la movilidad soda! como causante del mismo fenómeno. Iros
.primeros argumenten "que (amala estmcturación social y económica del
país, origina la pobreza de las- provincias por lo que sus habitantes se
ven obligados a desplázame hacia las grandes ciudades". El segundo
grupo, sin dejar de lado los factores económicos, considera también
poderosos los factores que llaman de movilidad social. Consideran
"que en casos de emergencia, corno sequías, imndadones, terremotos: y
violencia social, los pobladores de esas zonas afectadas tienden a,
trasladarse a diversas ciudades".

En realidad no podernos: limitar las causas o motivos que


originaron el despoblamiento de los pueblos del interior del país a uno
u oteo grupo. La gran cantidad de pobladores que se movilizaron y
movilizan, hace posible k existencia de muchísimas razones para
emigrar. Cada persona tiene una causa o motivo diferente a la otra,
aunque la «rayoda considera que el factor econácnioo es el determinante
en su decisión. Este, apreciación es valida si tomamos m cuenta la
ausencia, de medios adecuados de vida su Lis zonas serranas y
selváticas (defectuosa distribución de la tierra), el escaso desarrollo de
la economía interna, el poco apoyo por parte del Estado, entre oteas'. De
esta manera, podemos explicar cómo el alarmante crecimiento
demográfico del país, no marcha en forma paralela con la disponibilidad
de tierras agrícolas para los campesinos radicados en el interior del
país. Más aun, las grandes' haciendas de las serranías sueleo ser
expresiones delatífundismo en las qué utos pocas manos cmceilran la.
propiedad de mochas miles de hectáreas. Hay, en cambio, muchos
miles ele campesinos, centenares de miles de campesinos* que no poseen
ni una sola hectárea de cultivo. En el peor de los casos, si el campesino
cuenta con algunas parcelas, no cuente ni con los recursos'ni con el
apoyo económico para poder trabajaría. Así la masa campesina al no
contar con los elementos necesarios de producción, decide emigrar hada
ciudades más desarrolladas, en especial los de la. costa.

192
Los cajonpesinos que poseen tierras de cultivo se dedican a la
producción de bienes agrícolas de poco valor agregado,, debido a su
escasa economía, que no recompensa el enorme sacrificio y esfuerzo
invertido en alia, lo d o lo contrario sucede con ios grandes hacendados„
quienes invierten $ran cantidad de dinero en cultivar productos
destinados al mercado eterno e tatemo, estos úUíibos de mayor calidad
y menor valor que ¡os producidos por los campesinos.

El Estado y algunos inversionistas dedican tiempo y dinero, a


fomentar la elaboración de productos generadores de divisas, El Estado
brinda- usía, legislación favorable y los kmrsiomstas el capital- necesario
para la instalación y desarrollo de las empresas económicas. Para poder
obtener estos capitales es recesarlo contar una serie de requisitos, los
cuales sólo pueden ser reunidos por los grandes propietarios. De esta
manera, los pequeños propietarios no logran hacer uso del capital
destinado a. fomentar el desarrollo de la actividad agrícola.

Las leyes de desarrollo industrial, si bien facilitan y ÍGmekAan


¡a introducción de nuevas industrias en el país, no han sido reguladas
debidamente para su desceofcrdizacióti en diversas zonas del país. Es
por ello, que las pocas ¿ru tad as instaladas en el Perú se cncuentnuí
ubicadas en las principales ciudades. Por otro lado, estas industrias de
régimen extractivo no rein vierten en nuestro país los beneficios
obtenidos. Toda- esta situación origina un deterioro en la vida de los;
pobladores del interior del país, quienes se ven obligados a. migrar a
zonas con mejores posibilidades de desarrollo,

Para, tener una idea de cuáles son los departamentos que mayor
número de pobladores ha .proporcionado al crecimiento demográfico del
departamento de-Lima,-presentamos el siguiente cuadro estadístico:

193
MORANTES; LIMA-CALLAO (1988-1993)
CENSOS___ ÍIAEm.:NT£S
Amazonas 2Í5T
Aa.cas!i 22.870
AjniTimac 7 .7 5 9 ''
Arequipa 5.7.934
Ayasueto 12.513
Caj amarca 7.W3
Oaxco I0.<S57
HuHKutavBfica 3.840
Hhánwco - 11:472
Ies 16.331.
Juma 25.945.
lia Libertad 31.051
'Lamfoayfflqsis! 14.63 o
toreio 8.412-.:•••
Madre d® Dios - ■ L4QÍÍ :
Motju.B0ja 'i .097
Paseo 5..005
PhHra 17.3(51
Puno '5,277
San Martin 52.246
Tacna 7021
Turntos 4.:¡Ü(í
Ucaj-srfi 9.8ÍO

Paente MÉt Brtw*io,íi¡w ClfAÑXO S.A.

Los primeros migrantes fueron ubicándose en el Cercado de


Lima* que en muios de 30 años ya no contaba con espacio y servicios
adecuados para, la población,31 -En vista que las. oleadas migratorias
registraban tendencias d e un aumento acelerado, las autoridades de
turno elaboraron programas de viviendas para satisfacer esta-demanda,
pero estos programas fueron desbordados rápida y ampliamente. Los
migrantes -que ya. no 'venían solos- comenzaron a invadir tenemos del

31■ Véase al respecto los informes de 5a Dirección Técnica (fe


Demografia y Estudios Socales, Mgractaaes internas en é lP e rt lima, 199$.

194
Estado y de propiedad privada, formándose las primeras barriadas
ubicadas en los alrededores de1.a ciudad,32 : •

Es asi como los pobladores del distrito efe Comas provienen de


distintas p a ite del país, quienes trayendo sus costumbres* tradiciones,
lenguas;, e irtáiosíncracias* dan. boy al distrito de Comas un carácter
heterogéneo,

A pesar de haber progresado más que otros distritos populares,


Comas: tiene todavía muchos problemas por resolver, la pobreza,
adecuados servidos básicos, la delincuencia, etc,, lo cual será posible
en la. medida que estemos unidos, pues nuestras necesidades son. las
mismas necesidades de todos. v

IIL FUNDACIÓN D EL DISTRITO D E COMAS

I, ANTECEDENTES

El actual distrito de Comas formaba parte del "distrito" de


Carahaylb.3233 Durante las primeras décadas del siglo XX,'todavía se

32 ■ Lasinvaáones mis recordadas somAírmtatirte (ÜMtrlos, 193,4),


Tuerto Nuevo (Caifeo, 1.928), Huascatan (Cercado «la lima, Í930)¿-Leticia (Rímac,
1930), Sim eones y Cáídadala' Chalaca (Callao (1940), Monate (Cercado As lima,
1946), San Cosme y San. Pedro (Cercad* de lima, 1946), El Agustino (El Agustino,
1946), Fray Martín de Forres, Pedregal, Zarumffla, Cantsgalío, Mirones, Ejbbioso y
Carmen de la Legua (Margenes del río Rímac), entre oirás.

33 'Carafetjlo' como distrito n o te » ley dte «eáátóyoltica. La fecha


más antigua que ¿a indicios''¡dé su' "creación" dala del 29 dé-junio de 1821.
Fostraosnerte, mediante ílflcnstb t ó 4 de agosto de 1821, el'General San Martín, creó
la provincia da lim a compuesta de los siguientes distritos o parroquias: Lima,'Ancón,
Ata, Carabayllo, Chadacayo, Chorrillos, 1.a Victoria, lince, Lurígancho, Lurte,
Magdalena dái Mar y Magdalena Vieja, -Mnafion», Pachaca»!*, Fuente Piedra, Kte&c,
fittfi ladro, San José de Surco, San ¿ÜgireS, Santiago de Surco.-Justino M TarazonaS.,
Ii'eih.arcádás M ítica del Pflui KíscopiadAi de leves y áisaréÉos (18?.1-1946). lima,
:T 9 4 6 ;P p ,lD 4 -im .
'■ •'i'vSé^deaermóoe^áiiteí.&wrmdós-.aitsriespara-lacooSamaáiadélosdetritos,

195
practicaba la agricultura, a lo largo del valle de Carabayllo;.siendo
Comas, GolUcfiie> C oto, Naranjal, Pro.. Caudivilla e Infantas, las
haciendas de mayor producción.

Para tener una imagen aproximada de la zona baja del valle de


Carabayílo durante las primeras décadas del siglo XX. recubriremos a
los testimonios dejados por el médico Ulises Reátegni, quien, apesar.de
no contar con la visión de un viajero del siglo XIX,, noy deja u*i
iínpoitante testimonio de la zona. En,dicho reíalo., .Ulises Keátegui da
cuenta de las diversas zona que serían invadidas durante la década del
'30 y f60.
va¡a« d d r ó .CHBtji ¡« w c o a itrs cosí.
«na fegítedíia de oolor va'áa de venios híaHkfe '«¡sSa,
uva, úiífiñm y ssak; más &Uá, ©atoe lasgranjas ck ios
Japoneses y la cartelera Pasmarte-ana. IVorfee, ss
divisa p eq u w s avioitéü que parewai de lu y e te qm '
vutíai* soto** «3 Areopnerto Ü r il de C o i t o s . Por «5
suroeste tí valle átírio CMSB&s., s® eonSattdeis coa* las
plagúete* coiíávadas y «ai proásMítíía del v&Mt dtí rito
Rtaatc, y til «tro lado cte testa; « r M o n « aaSSSvtadas,
como ümráíatáas por «a jeteaste proyecto*: solstr ak
las 10 de la o a t e , so j¡«gf0bje. d*)»»* barcos m tí
puerto jM Cafe o.” 2'T

provincias y departamentos, aunque la demarcación fcemtoiiá' siempre- favo-ra cuenta


la división eclesiástica, tratando d? aprovechar sus Snútes y el ñmeíonamíento de su
admaústedóa. En. este sentido; es n efa rio un estadio .de la demarcación eclesiástica
para de esta manera «¡¡¡tablar en que medida las parroquias.;.vkepamiqmas, curatos yk
obispados, fijaron tomados en cuenta m i# c.mforiaactán-dé los pueblos, distritos,
provincias y depsátamentoa. Esta aprecia,do,ti es compartida, por Pablo Macera, quien
desdenes, atrás-viecepublicando ¿veteas fuentes documéntalas para, elestudio de la
detxaarca«ón'g?o@:áfica y eclesiástica del Perú del siglo, XIX. Véase/Pabló- Macera,
Purlasaeít-tíf y Sod&d&d- m tí Pearú. Bases docttaMátitei (Siglo XJB¿). IV tomos.
Jiraa, 1.9ÍJS: Asimismo diversas publicaciones del Seminario de Historia Rural .Andina
de laUdversfidad de San Marcos. Véase Karata til-a Clmtías Sociales 31 Lima.. 1996,
Esta revista cónúene una relación de las ptiblicaciones del Seminario de Historia Rural
Aéáma (196SM9&5).

UfisesReátegm R,, .. (invasoreslim a» 198J. Pp 20-21. Ulises


Rsá'%ji R.:.. as un médico sanmarquíno que se unió a Ja lucha de ios pobladores del
K::m 13 de Pampa de Comas por un terreno en. donde edificar su vivienda y a los que
sirvió por más de 15 ritos, Durante ese tiempo, al igual que el resto di los invasores,
tuvo qus afíotitaruBoa sene do dificultaos,.que. le sirvieron para poder'redactar ai novela

196
UBICACIÓN GEOGRÁFICA DEL DISTRITO DE COMAS

GOMAS

FUNDACIÓN: 5 de mayo de 1958.


CREACIÓN POLÍTICA: VI di diciembre de- !9¿1.
UBICACIÓN: Cono Norte de Lima.
EXTENSION: 7.138 hectáreas.
POBLACIÓN: Aprc»:. 406.015 habitantes.
HOSPITAL: Sergio Bemales
CEMENTERIOS: CoUique, Béiauntlc y La Libertad.
RADIO: Comas AM. FM.
PARQUE ZONAL; SincW Roca.
AEROPUERTO: Base FAP. De Collique- Aero Club.
Durante el siglo XX, algunas haciendas fueron fragmentadas
producto de algunas compra-ventas y también de expropiaciones por
parte del Estado. Hsíta última situación al parecer sucedió con una parte
de la hacienda Oollique (ia zona destinada a U expkteción de cal), que
para 1940, es expropiada, por el Estado y entregada en concesión a una
persona do apellido Casanave, quien en 1954 es sucedido en el cargo
por María viuda de Xkxrtout. Si objetivo principal de estas
expropiaciones por par?» del Estado era obtener mayores ingresos
económicos.

Estes concesionarios dedicaban especial atención a la


explotación de las minas de cal y salitre; aunque una pequeña parte de
. ‘su tiempo lo destinaban ai cuidado de algunas tierras ele cultivo de
panllevar, Según Arturo Raíz, um de los primeros fundadores del
.distrito de Comas y trabajador en faz tierras de Casanáve:
’fe.Casm sve Isabía ofefoaskí® as. á« Us
fierras para «sgdoiíar « s nraus áte cal. El. sesfor
ssesajare oW««fe fes tser/íss qmh> tttrYeúa. B. Estado
fe dalia las concesfesms, ferreo p#ra stiWiáadw
raimraá corno «giácvl»?-; ínm^ar-. S ramea. ím
agiriailíiojr, Bfeu, fes epí* rrabajwtattf j w
Caswiiw ai estos «tisw.os U peáSíamís i#nI«éedÉo~,’‘>*

Los coneesiemaríos en genera].-estaban obligados s trabajar las


tierras, ofreces- puestos de trabajo % invertir capitales. . Asimismo,
estaban prohibidos de vender, alquilar o enajenar las tierras adquiridas
en concesión por parte de! Estado. Como consecuencia de lio primero,
los concesionarios necesitaban mano de obra para, trabajar las tierras.
Una vez hecha la convocatoria y seleccionado el personal y la cantidad
de trabajadores, éstos eran ubicados en zonas improductivas en donde
construían, sus viviendas. Estas viviendas hechas de estera, cartón y

social, política y literaria (como á nústna Is denomina): "Los hadaos ds esta novela son
reales, pero ios nombres fíe los personajes hm sitio cambiados". Debo agradecer muy
coonlialmeute a Walter Huamattí por la ayuda brindada para ubicar es-fe novela.

Este testimonio os recogido por al diario Malte*. ( 02-08-196?) y


publicado poi' Amelio Medina Cruces en Cít-mas. tía pkíMg un «tusardísu. lima, 1989.
Fp. 93.

197
madera, eran asignadas: sólo a ios trabajadores de la hacienda y durante
el tiempo que permaneciesen en ella.
Algunos años más adelante- y debido-a ia grave situación
económica por la que .atravesaba el país, estos mismos -trabajadores
conjuntamente coa'' sus familias, darían inicio a'.traá-'selectiva-y
'sistemática invasión de los terrenos enanos aledaños a las haciendas
Comas y Coilique, que según ios concesíotarios ylo dueños" de- las
haciendas, les pertenecían. Posteriormente, estos mismos invasores y en
la medida que iban attmenfcondo, invadirán parte de les. terrenos de uso
agrícola de las haciendas anteriormente mencionadas.

Esta situación se tomaría cada vez más tirante en-lamedida que


se jnwementaba el número de invasores y sus exigencias temaban
mayor fuerza, a-la par de las gestiones hedías por los supuestos
propietarios con el fin de desalojarlos. Los 'encantamientos' no se
hicieron esperar y las ludias fueron- arduas,-'én rista :que ninguna de las
partes accedía a aceptar las e s e n c ia s planteadas.-

Esta sítuadón coufíietsva obligó al Estado a buscar soluciones


rápidas. Una de ellas fue la expropiación y concesii&i- de los terrenos
eriazos'aledaños a las ímdendss Comas y Cdlltque {conocidas como
pampas), a los miles d-'¿ invasores. .El argumento de esta actitud se
ftmdamentaba en el concepto de necesidad y utilidad pública; es decir,
la preferencia del bienestar comunal por el bienestar particular. Esta
actitud asumida por el Estado responde principalmente a dos razones;
decidida defensa efe los invasores de los terrenos bcijpádoS y porque el
régimen de entonces (T gobierno de Manuel A. Odría 195G-I$J5í¡) tenía
■un interés en crear uriclientelaje político.36

E ste panorama- obligó a los propietarios de lásd iv ersas


haciendas a lotizar, y vender parte de los terrenos agrícolas de sus
haciendas a . diversas asociaciones y cooperativas, de . viviendas,

36 Á1 respetó», el'antropátog* José Matos Mar áfona que cada' una «té las
grandes aspatiaiéaes tls láé'baraadas faan tetado un conelato <>váicubnetón poMca,
económica y, sociaL Ds no-ser así, a®-se podrís explicar edme fes zonas agrícolas ¿fe
las haciente Comas, Naranjal, Pro y Cueva dd valle del CtiÜé-n, '&«•<>» taímate-dm.
fines tóbanos. Véase Las barriadas de Lima. Lima, 1957. Pp. 16.

198
conformadas por los excedentes efe ios mismos grupos invasores. Esta
actitud asumida por los prüpidxrioz de fes haciendas, responde al
peligro «manante en ia que se mccfifehsa los téstenos de su propiedad.
Los concesiomrios a su vez, intentado <sacar algún beneficio de. ésta
i situación, venden también los'terrenos concedidos por ©1 Estado.3'

Ihidalmente los iim s o m e^&bia comp-uestos por los


.-trabajadores de las haciendas aiedsñíis, a .quienes se jumaron ías
personas expulsadas del m e o uabsno deí centro de lim a y los miles de
migrantes del. interior del país, quienes sute la grave crisis económica
no encontraron mejor manara de resolver su carencia de vivienda, que
invadiendo los e?stensos terrenos eriazos aledaños a las haciendas.
Posteripmtente, invadirán los terrenos destinados al uso agrícola da las
Hadaidas.

L l. LAS INVASIONES

Las primeras invasiones populares fosaron organizadas por


pobladores carentes de recueros económicos con que edificar, sus
"viviendas. Los invasores ganeer&kneate eme. liderados por.- los
pobladores de mayes’ edad o los de mayor audacia, quienes junto a las
-mujeres y niños, participaban- activamente en la'toma de ios terrenos,
Una ves invadidos los terrenos, los pobladores se oigarázaban en varios
grupos, en especial -el encargado de distribuir equitativamente los
'•.terrenos invadidos, y el de organizar la defensa en caso ele desalojo por
parte de las fuerzas policiales. Este último grupo era qulms el más
importante, al menos durante los primeros años de invasión.*

- • '**. Se'áesconoce-áfos eaacesámáios tensas o m las fecuita&s para


vender las tierras otorgadas se concesión. Quizás algunos á , pero no todos. Es caso
de no contar coa ilícita autorizado», los coacessorsatíos deblaa-transar con. el Estado
par» podar vender los terrenos y obtener ijatseficios era comías. Daño ser asi, el Estado
podía andar,las vestes que irdíatreáraeife pudiesen realizarlos ceneesíonaños. No se
descasta el mal proceder ¡te algunos ftmdonarios de Estado, gañanes «a'CompfiddadcMi
los referidos concBáonajios, lograban obtener la aatorizaciófi para vendar los tarreaos.

199
Estas organizaciones populares fueron llamadas de distintas
maneras. Algunos las denominaron "barriadas", "bairios marginales",
"asentamientos humanos" o "pueblos jóvenes”. Otros por el contrajo,
intentaron usar dichas categorías para establecer un proceso de
desano lio de estas oigamzaciones. En fin, lo que nos interesa sabe-, es
í|ua estos grupos humanos se caracterizaran por estar en plena etapa de
■ "acomodación" y de "organizacián", La. imagen que'proyectaban era. la
de un conjunto, de viviendas simples, agrupantes desordenadamente y
carentes de servicios públicos: agua, desagüe, luz y otros servicios
..básicos.38

Con el tiempo el área primitiva, invadida aumentaba, Este


crecimiento es originado no sólo por el aumento progresivo de la
población residente en la zona, sino también por las constantes
migraciones posteriores a las que originalmente dieron inicio su
fornsación.

Una vez establecidos, los invasores traen-y dan morada a sus


hermanos, primos y sobrinos; quienes parieriomitente serán protagonistas
de nuevas, invasiones en ios alrededores. Posteriormente,- trasladan a
sus padres y con ello completan d éspoáo de su lugar de origen, a M que
-regresarán sólo en caso de fiestas y por algunos días. -' "

Como observamos, estas oiganizacidoes 'fueron en sus inicios


simples agolpamientos humanos, que gracias a sú afán, de progreso y
superación constante, han venido adquiriendo nn desarrollo considerable
-■-hasta-Ccostituirse en la actualidad, en importantes núcleos dé población
• distrital y desarrollo urbano.39 Hasta Si década de. los ailbs '50, la

Acerca la evolución dte te javaácnes popularas, veánse Gustavo


Kioftfo, De invasores suimnAtesL Lima, 1.97o; José Matos Mar, l i e t a r i e t o de
Lima..Lana, 1.9S7; Roberto I Reyes Tarazoua-y Ernesto 3EL Maguáis Salinas, El
proceso da n M a d á i y sus expresiones « . ¡áp am centres urbanos áel país.
Tesis de Br.'VKMSM'. lima, 1973.

39 Véase María del R. Torres y Gabriela .OEééfi, Esíúátos t« fo -


economtoos dalos jóra¡¡.es d ala cajúta! mriffojpoJífcaia: 'JProjiecto á* hm
pío» de reaRzadeau» fenueM ».' Tesas'Rr. UNMSM. Loria,-1973.'-

200
Consolidación de éstos grupos hiraraaws en «gaiiizaciones íormaimeiite
constituidas, tomaban aproKÍnradamante un lapso de 20 &30 años. De
allí erí adelante hasta la actualidad sólo tardan de 3 a 5 años. El
floreciente pueblo de Comas es un ejemplo típico de este desarrollo;,
.quien ai igual que San Juan de -Lurígancho, constituyen los distritos
populares más progresistas y de mayor concentración poblados®! del
departamento de Lima.

: 2, INVASIÓN C E LAS HACIENDAS COMAS Y COLLIQUE

Los invasores, inicialmente fuercen ocupando las zonas


improductivas de las faldas de los 'oaros.de la margen izquierda def río
Chillón,, tratando de evitar el errfrentamieal» con el.Estado e intereses
de particulares. Pero en vista, que se incrementaba el rain-ero de
invasores y se reducía las iteras improductivas, amen de que los dueños
y los concesionarios efe fes haciendas Comas y Colliqae, proclamando
su derecho sobre las tierras eriazas aledañas a las haciendas, ios
desalojaban con ayuda de las fuerzas policiales a quienes ya se
t encontraban posesionados deI terreno; los' invasores- van a dar inicio á
3a torda de terrenos de uso agrícola de las diversas haciendas.

Las pandas de Comas (1958) y Collique (1960-65-68) fueron


invadidas no una sino varias veces. El inicio de estás-invasióntes es
considerado por el antropólogo José Matos Mar, como una de las más
:: representativas realizadas a mediados del presente siglo.45

Las ludías por la obtención de un terreno en donde poder


edificar su vivienda, se probijgaría desde setiembre de 1958 hasta enero
de 1968, Los cientos de trabajadores pertenecientes a las diversas
haciendas de la zona norte de Lám . comerán fe voz por fe ciudad de

Véase.«ámbito Magos M arJJístw ás y t p d » y crisis dd


Kst'aáo. SEÍ3!U«?»-ir«!Í» d*l Perú*» I.®década ielP W , lima, 1988. Cap. MI y IV.
Lime, paja estimular una invasión masiva de las Pampas conocidas con
el nombre de Comas y Colliqua. Desde tempranas horas y en la fecha
indicada, miles de pobladores con sus esteras, palos, cartones y
banderas.rojiblancas, se ubicaron en las cercanías de las faldas de los:
cerros:
,p...3mkxst tantas faiiiSks sp$i>ai& ú&tm lade a -otra.,
im íprarpa «&&5S fjosálas dadffl&srtMA caáxísnar'¡por 2»s
í.®rir*s>s «i M efe <3®í9SSr con ia «¿püraiBjEa á®
i^ontoar darada insfeíhirs¡s si ser Mol-sstetfes por lo s
,'dia««s'"' o la pv&d®. Y asi cantínsndo y csuañíimfe
&a eras m onteas «iagas llegar®». ■a ios* pe^*ít&
c&mt» dunde m m csEBsados, sedientos y tostados juay
el sal primaveral db^dksro». descansar im rato.
Algasias rsiafem saAos-osas, ¿afosca áá vsmx^-&ms -
Mfos seritaítíss ó arrimaste a las pieásas; jfes jíviáses
y los adultos escátósMfíni las rocas y jkm&cos, las
hoiidaiañáms y las quefearaáas; smesEtras les más
^ em n ea ta á o s dafogua ubi®v¿s5áo psá^^ínca a i-ss- •'■■■
«shawos tañemos caMfstos ú&p # o y-piedras. Iv&
hay h d k h s ele la ■vi-dt®■■...■smWííti. ser. .
m&isrg© p'&smta á&s-n&á&á & Afe^áayex arabas dk
- todo tipo, alls«xa}aes,]feg5arti|^ y harta v&mám” "

El dueño de la hacienda Go IIique que en todo momento


buscaba recuperar los terrenos eriazos aledaños a; la hacienda y los:
concesionarios de las áreas expropiadas de las haciendas Comas y
Collaquéque también intentaban sacar algún beneficio económico de la
situación, se vieron imposibilitados ’ante la cantidad de pobladores
ubicados en las faldas de los cerros. Ante esta situación, el dueño de
la hacienda. Collique, «decide vender los terrenos de uso agrícola a
diverjas asolaciones y cooperativas, de viviendas. Por otro lado, los
concesionarios de las áreas expropiadas de las haciendas Comas y
Cotüque, decidas transar con el gobierno para poder vender los terrenos-
entregados en concesión.

TJU sg s Iteítí egm 'K eM e gus ob. crt. Pp. 20.

202
PRIMERAS INVASIONES EN LA HACIENDA COMAS
5. CREACIÓN PO LÍTIC A

Durarte el 2C' Gobierno de Manuel Prado Ugarteehe {1956-


196¡2), los cerca de 100 mil pobladores ubicados m la? pampas dta
.Comas y Collique, fóraiarón una comisión para.gestionar la füad&d.ÓK'¡¡
del 'distrito. Si bien los terrenos invadidos estaban ubicados, derairo de.
la jurisdicción del "distrito" de Cárabayllo, la comisión argumentaba,
que dicho "distrito" se encontraba ímporihi litado para poder alendar las
necesidades más urgentes de-la innumerable población: agua,. 1*12, sab d 5
transporte y educación.

En Asamblea General del Id de abril, de 1961 y coetaado con


la presencia de los pobladores da las banriscbs cte "La Merced1', ''Santa
Rosa11, "Cíorinda Málaga de Piado", "La Libertad", fíUifemayo", "Señor
ríe los Milagros", "El Carínen", así corno de distintas instituciones
sociales, culturales y deportivas, eligieron y -proclamaron *a Abe;
Sai daña del Pino como presidente de ia comisión encaigacb do
redactar el memorial y el proyecto de ley de creación distritel. Dicho
memorial debía s-er enviado tanto al .Poder Ejecutivo corno al Congreso
Nacional.

Una vez remitido ai Poder Ejecutivo, este .organismo por


intermedio de Ricardo Elias Aparicio, .Ministro de Gobierno y Policía,
remite el 5 dé junio de 1961, el proyecto de ley a l a Comisión de
Demarcación Territorial de la Cámara de Sexíadores para su aprobación,
previo consentimiento de la Cámara de Diputados. Por su parte, el
referido Ministro de Gobierno consideraba, que era necesaria su
aprobación:
'TE1 p ’ir?c.íí>ií íkí eytíac&jre fnrogreadsta q i» diajiana«nife
•piase íilcaiwando tí pratíil» de- Coísssis, m w tí
« d M o íitó ofosgárstí* mayor categoría dtesstT® M
««msSícatod*;..,1' *f'

AGC: Senado Exp. W' 12,024.

203
La Comisión de Demarcación Temtorial de la Cámara de
Senador*?, integrada por juvenil Peso Bensvente, José A., Caro Cosío
y Max Espinosa Gakrza, y la Comisión de Municipalidades integrada
por Esteban Hidalgo Sanüilán, Julián Arce L&npete, Entesto A.. Gusmán
Ramis -y David T, ízaguáre.. también opinaban a favor de su
promulgación. Estas dos instancias argumentaban que la creciente
proEferacíón de les laníos marginales y la coyuntura política creada
•por este, situación. daban el. respaldo para, aprobar la referida ley de
creación distrital:
”..X a actos! BanriiA d« Comas, está s t e d a al
Norte de lifeiut, «atlas terread s «atistentes ®a ■
las át ios tarros qua tftargj&Ati «I balo
dtiredso do ru. importante canastera de l*m* a Canta,
«dr» los fc&óaaetro* 12 ai. 15»Sa Jtoa ¡pofetedo con las
ia¿£gíri:vitíU!-i5i pro v éan te» «te diversas prováidas de la
R&nMst#. Su a-^diíémtü towgriB» feo ráptóto y
OTdrafc*d8««R©, ddldá© a la mcesa&te a fix e tá t do-
jwro^iaásmos ípi«\ taraate-s d* hogar «a lim a y de
medio* ^*rs&c^asagwsrtos» lomadaroa m
dliMf- tngpy sm Wos^d/fes y pri»á<S*a$ dvimáRs, Ea
e iia fzvm n., tá ^ stizé -ai gKsona *« ü*, to a d f t a «pae
SacSs» m. 1M 20Í lisMAsite:. Sa«pe, hace fie Comas,
la B*?d<üáa..iU5S grande da jpohlstíín de
Comas, no «sfófemafi* por tm solo coo^otsuradó,
síífiO por :«msvaí jfrsra&s ípsie tiens» soto-diia de
coidssmMad, sote per peínenos acdfientes
geogi'áBícos,. listos hamos, sosa los que vas. a «sagrar •
<dRetare dishite de ■Co'mas. IPeSódo, alesfuers» de
sm JiaMíaJtd.es y cto ú aporte de los «tejientes,
necesarios, per parto tM Estado, Comas ha wná<«aé>
rcoteMeitimie, a,o obstante' que, m;i carece do los :
servidos paMicos amás indispensables Para dar
salificado» poíííia?- a^íifaidsn-asiíára, a isa importante
u to tar&PKrio, (....], mertra C e»si4n de
P e m » c a d ® s IVr&tewafc!, opin a p a r 1» a p ro b a d ó » del
proyecto de ley,..*1 43

AGC: Senado £xp. N* 12.024.

204
CREACIÓN Y DEMARCACIÓN POLÍTICA DEL DISTRITO DE COMAS
El proyecto de ley original proponía que .el nuevo .distrito tanga
el nombra de T a Libertad":
” ...ipse do toíto paato áe vista es. airéate o
iu ^ sp m sM t la a ta d lo de m wij^sdKááti ¿Sstottal*
« «i nombre de "La LibertotSF, mii «3 fes. de «¡pie
«Minando esfusrxos y -coordfotando la » ta d & ás-
maestros Hutlípks problemas » través d® Sa naova.
«ítid&rí polílíco-adsiEW.ítraíófC', podamos síes
3isfeg¡:*te colaborar con los gratules y comjdicade* ■,
afanes del Soprssno Cobi«jmo.[...] por ski- 1.a pSwlia.
«ngÉff de l a soMdík de maestros otros
problemas."**

.-Pero e! Congreso tomando ett cuenta la ley del 11 de 'getiembre


dte 1930, promulgada durante el 1° gobierno de Luis Mv S&stcbtcí Cerro
(1930-1.931) y vigente según la ley N0 12662 de! 25 de ootdbre de 1956,
-acuerda que el nuevo distrito tenga el nombre de Caroas.** De este
manera, el nuevo.distrito llevará el nombre de la antigua hacienda
Comas .'m Oira de las razones para que- el dt:.trHo Heve sí isfí-rido45

44 AGC: Senado E xjj. .bf3.2.024.

45 La referida ley proíftia poner nomhtiw ás personas que esturiesen


•en. vida a ninguna población, calle, ni eéffcw público. 4sóssst»o se prohibía erigir
monumentos en sa honor a los hombres que estuviese» m vida: "1°. Prohíbese en
absentó-.denominar con noratos áe personas que astaateiente •viven,•a regiones,
.-«todades. pueblos, retas, plazas, edificios público?, monumentos, etc., asi con» la
■figuración de bastos o dibujos 'de personas que ente actasSdaii existan, en estampillas,
timbres fiscales, etc... debiendo cambiarse apartar dota fecha tes ámormnaciones ya
expresadas^ con nombres geográficos natteos, o de héroes o ds personajes de notoria
figuración en. nuestra vid?, nació»®!, bien sea durante el imperio, el coloniaje.', o la
i^pófefea.-, ó coa nonabtes de virtades cívicas o radiares, así cosí» reemplazar, después
q«íi;.se;..á8Óte te, existencia. acbsíd, a las estañadlas «apresadas como citas en que-ée
presento bustos- ó dibajiB da gobernantes o héroes «acíonales £p«¡ liayaá nw rto y que
sean,, yerdaíferamrate consagrados a '■nuestra, historia,.' AGC: Senado Esp. N" 12.024.

“/ ■ Respecto ;« su 3jgts.üc?do nada sabemos) •"--'•Pero' tenemos


eoB'xixáoaííi {»ae el término Cotoas no proviene de ningón apellide español. Segó» el
.ütodoitario Histórico -Biográfico da tos Cen^iidai«as M P a d elaborado por José
Antonio del Busto, d único español apellidado Comas que arribó a América foe na
soltado que. estuvo bajo fe ordenes del Capitán 3'uaa Vandrel-, residente este títktuo «a.
te dudad de La Pa¿ y que probabfeaente nunca visto la ritoteA de lima.
nombre, es que te tmyor parte de 3a población se encontraba ubicada en
la zona conocida, con el nombre de "barriada de Comas", que gracias al
esfuerzo de sus moradores y al aporte económico de! Estado, tenían
posta médica, puesto de Guardia Civil, escuelas para niños de ambos
seseos y varios mercados y medios de transporte,.

Con esta modiric.-tciéi, el primitivo proyecto de ley enviado pol­


los pobladores de las barriadas del «cao norte' de lima, es aprobado
tanto por la Comisión de Demarcación Territorial de .la Cámara de
Diputados como la de Senadores, 'quienes -a su ;vez modificaron los
límites del lado este. Es asi como el Congreso redacta ei 11 de
diciembre de 1963, la ley N" 13757 que crea el distrito de Comas. Al
día siguiente del mismo mas y año,, te mencionada íay es promulgada
por el Poder Ejecutivo,-siendo Presidente Manuel Prado y Ugarteche.

Esta k y de.creación conste- de tres artículos, siendo eS tercero


el que establece, saus Ikniíes: ' '
*MP. I*. Grifes* e?, ia pívvíncí* á* ilota, d d
.fe! íenis» rumtbre, >ú Ú l » de
Cm w , ytr? terááira par capital sí bordo íte "Xá
Liteiirfesr,

Los létMKdom M«ut SU>BOT«<re?stó, Waldemar Espinosa y P a i Chsniay,


nos confirman la «astea cía ¿el tsmáno Comas antes <fe la llegada de los españoles al
vais de Carabayllo, aunque no queda del todo dato si al referirse a ios indígenas' <h
Cora*? lo,hacen también a los d» Ornas o por el contrarío se trata de una misma
pardaüdad.-
Por su parte .Raúl Adanaqué, apoyándose en que los ñicas trasladaban
poblaciones, enteras en condición de mitinia.es a distintos logaras, considera laporibilíted
de que el fémnno Comas provenga del norte panano. Sólo asi. se podría explicar como
ri sufijo Ctaáfcz, ¿«respondiente a los jefes locales ílsLambayeqtie, existima en el
valle ás Carabayll». Véase Raúl Adanaqué, "Caciques coloniales de San Pedro cíe
CaraWyllo. La reducción, sus pueblos y el origen del nombre do Comas." En: Revista
Noffiva S M i , N* 4, aílo IV. lima, 199?. Pp. 70 y 71.
Es,necesario aclarar que el sufijo O n a l i no es esxíasivo-de Comas,
Caraíraylío y Macas, sino también de Huactópa, Tantee asa y otros pueblos ubicados ea
el ralle de Lurigancho. Ver AGM: Real Audiencia Causas Civiles, Leg 58, Cuasi 226,
Afio 1623.-. .,
: Además dd actual distrito de Comas a i k provincia de tima, existen su Jau ja
un distrito y «» rio con ese mismo nombre. Génnan Ssigtk, lHcdniatio &M>gráScd
díSPem lima, 1922. T?p. 2.73. , ^ ^ b

206
Aíf" IIa, H distóte qaft se crea por este Ley, tetera
come añeros los Iraníes de la Merced, bardada del
Km. i®, Sisaría Rosa, XJdmmayo, Sesfcr á » los
Miagres, El Cannert, Hsiaipifflny y Repartídffis.
Art" BGKLos imites de este muero distrito, sarán los
sSgnjeaates:
' -■ F ot <á Noste*. con la hacienda.;
CsKsárwlla, gigoted* parte <M rio Üfeffiña te ste tí
pasaste iM bmsmm aomlwe;
- Por «3 Oeste, del p a te e -QdBóa,
dgutaiado 1» C a rre te a PaB.ü®ü*dcma antigua, t e f e
KaparSdóa;
- Por el Saar, la intersección «te la
ms&donada Carretera Pauasncsdcana antigua y 1.a de
Caatajy,
- Por «3 Este, ama línea imagiaaarsia ¡pr*
amelas crestas de tes cerros "Caruü'í,ñl?i,\ "Tambe:
C&udwffi»", "EL Carao®®” , ’*Sa»te¡ Croa" ”Saaá«
S osa'’, MPortachtaelo" y "Ifcpaxiiátóa” , m dmscj&s
« s i paralela a la Carretera- Lis*»-'Cauta atufei* ios
taNnuáres lí> ai S.

Cwmwtsqtsese al P o te Sjecatívo para <«i


jpE6iaaíga«4u.
Casa riel Cmispn¡m, « H ite , «les «acórifes M mes
de diciembre de mil noveci.wtes seso®» y tuno.’-'

4¿# NUEVAS INVASIONES

Comas, al igual que oíros distritos de la capital, surge y se


reproduce en la dinámica- de .las invasiones. Obtiene sus -sem ejos
básicos por medio deja techa e iniciativa propia, tratando de generarías
condiciones necesarias de vida.45

AGC: Secad» Fjqp.'N* 12.024.

j 18 Ver al respecte LyneteBíondet/Dsgregori, CowpiSsataáeres dril


W tóré'M tedo. lima, 1287.

207
4X JOTASIÓN m LA PAMPA DE CGLLIQUB

Ei recien creado distrito de Comas a sólo dos años de su


fundación, había aumentado de 7 a 11 barrios. Ante este explosivo
crecimiento pobladora!. el Consejo Distrital de Comas, encabezado por
sii alcalde Arcesio Guillen Zavaleta, intentará en forma ordenada y
pacífica lotizar paite de la zona conocida como el nombre pampas de
CoUique. Las mscripciones para quiches querían adquirir un lote de
vivienda se inicio sin ningún contratiempo,

A los pocos días de concluidas las .inscripciones, la familia


Alvares Calderón ~Florez, interpuso un juicio al Consejo Distrital sobre
el mejor derecho de posesión de los terrenos eriazos aledaños a la
hacienda. Collique. Esta situación creó insertidmnbre en las familias ya
inscritas, quienes ante el peligro de perder k oportunidad de conseguir
un lote en donde construir su vivienda, organizan un movimiento para
poder tomar posesión clandestina de los terrenos destinados a la
Ionización. Es así corno, unas 900 familias invadieron al filo de la
medianoche del 3 i de diciembre de Z9Ó7; los terrenos ireicialmente
destinados para su lotizacióa A la mañana siguiente, muchas £amili&s
que habían perdido sus casas; y enseres m d terremoto de octubre de
ese mismo año, se sumaron a esta invasión.43 La llegada de estas
familias produjo ro.zami.eni.os con los organizadores de la invasión ya
que se disputaban las mejores ubicaciones.

Por su paite la familia Alvares-Calderón - Flores, hacia

wr'’ A pesar ¡ri la poca dífasión petiiSdistica, la población estaba ai


corriente de cualquier noticia referente a las invasiones. Esta situación es'posible
etsindeila en la medida que ios organizadores de las invasiones trataban en lo posible de
no divulgar su accionar para asi no ser descubiertos ni él ta sus planes, Pero fisiono
explica porque del gran, número de periódicos y diarios esástenbea en la capital limeña,
sólo tres dieron noticias de ta invasión de las pampas de Colücpia. Esta actitud sólo sé
comprende, sí se tiene en ementa que hasta l^SG, los pueblos jóvenes femados en base
ha invasiones legaban a sumar 300 api«rima,(lamente* situación que redujó,
conriderabSessents, el interés o sensacíoíiahsanó por las noticias de invasiones. Fia
notorio que con tantas invasiones ocurridas, éstas perdieron actualidad.
Entre los periódicos y diarios que divulgaron la invasión de las pampas <fe
Colliqme. tenemos: "La Prensa" (1 íle enero de 1951?), "El Comercio" (7 de eaoro de
195S) y "Última Hora” (S de «suero de 195S).
denodados esfuerzos por tratar de desalojar a los cerca de 2.000
¡invasores reunidos en las cercanías de la hacienda Collique. Pero ante
la imposibilidad de desalojarlos y temieiKÍo que los terrenos destinados
al uso agrícola de la hacienda Collique fueran también invadidos, la
familia Alvares Calderón entra en tratos con los invasores para
venderles los; terrenos ocupados. Muchos de los invasores no aceptaron
las tratativas, pues argumentaban que los terrenos ocupados eran de
propiedad fiscal. Otros por el contrarío, sabiendo que su situación
como invasor era inestable, prefirieron comprar los terrenos; ubicados
dentro de la hacienda Collique. De esta manara, surgieron las primeras
cooperativas de viviendas:
- El Carmen de Collique
- Collique I o zona
- Pablo VI
~ San Pedro de Cajas
- San Hilarión
- Año Nuevo
- El Progreso.

209
ALTITUD DE LOS PRINCIPALES DISTRITOS DEL CONO NORTE
CONCLUSIONES
ÉPOCA PREHJ.SPÁNICA
I

- El valle bajo de Carabayiío por las condiciones


geoclimatícas y los abundantes recursos naturales» fue lugar propicio
para, el desarrollo de diversas ocupaciones humanas. La cronología
precolonia! la divide en horizontes de integración cultural y en
períodos de autonomía.

* La sucesión de diversas culturas (en especial Chavín, Wari


e Incas), trajeron consigo cambios m e! orden político,, económico,,
social y cultural; pero que sin embargo no modificaron algunos
aspectos de la vida de los pobladores del valle de Carabayllo. En
algunos casos los mantu vieron y en otros los intensificaron, como por
ejemplo: el desarrollo de la naciente actividad agrícola.

- Los Incas a m llegada al valle de Lima, encontrarían un alto


grado de desarrollo socio-político y económico en la organización de
los curacazgps y señoríos (en especial ,Ydhma y Coüique). Este
desarrollo es reflejado por dos hechos Importantes: primero por la
tenaz resistencia a ser invadidos y segundo por la conservación de las
principales formas de organización establecidas al interior de estos
grupos culturales.

- Los restos materiales de uso doméstico son escasos, en la


medida que sus habitantes vivieron' en pequeñas y rústicas aldeas
dispersas en d campo. Todo lo contrarío debería suceder con los
restos monumentales destinados al uso ritual; pero por descuido del
Estado y necesidad de los pobladores, han sido objeto de una
destrucción que ha provocado la desaparición de un rico patrimonio
cultural que constituía un elemento esencial de la memoria- histórica
prebispátiica de la zona norte de Lima.

- Los habitantes del valle de Carabayllo fueron formando una


profunda convicción religiosa., gracias al aporte impuesto por
diversas culturas (Chavín, Wari e Jucas), incluyendo las costumbres
religiosas europeas.

212
É P O C A C O L O N IA L
II

- Las tasaciones cíe compra-venta, representan urna- fuente


documental imprescindible p arad, estudio de la organizacióninterna
de las fuerzas productivas de las haciendas.limeñas coloniales, .r. A
diferencia de otro tipo de documenta.d.ón colonial, estas presentan de
manera exacta, y sin sobrevaloraciones la cantidad, calidad, tipo y
estado de conservación de ios diversos instrumentos de labranza,
tierras de cultivo y fuerza de trabajo,

- La característica, más común del creehmenfco de, las


haciendas limeñas coloniales d im ite el siglo XVI y parte del XVE,
fue la apropiación de tierras pertenecientes a los indígenas y/o
comunidades campesinas. Para los siglos posteriores (XVH y XYIII)
esta característica cambia, pues las haciendas inician la. absorción o
anexión de tierras pertenecientes a otras haciendas de menor o igual
extensión. Así como una sistemática apropiación de tierras ejidales
del Cabildo limeño. Esta, situación se dio en la medida que
“desaparecieron"1 las tierras comunales, se. .agotaron las tierras
realengas libres y se suspendió la política estatal orientada a la
habilitación de tierras baldías destinadas para la actividad
^agropecuaria. El ejemplo estudiado por nosotros es la a n fió n de la
hacienda Comas a la de Pro. La anexión de tierras, más allá de
querer pretender demostrar una elevada posición dentro de la
estratificada sociedad colonial, respondía a una exigencia económica.
Es así como esta medida apuntaba a la reducción de los costos
opeiacionales de la unidad productiva y con d io al incremento de su
rentabilidad, que estaba relacionada con la necesidad de
"autoabastecimiento" de lo necesario para el proceso productivo de
Vas haciendas. En pocas palabras se buscaba reducir los gastos y
aumentar los beneficios,

- Es erróneo considerar ciudad al espacio ubicado dentro de


las murallas limeñas y campo a las zonas aledañas a ésta, pues estos
dos espacios (solares y campos aledaños en un radio de 5 leguas a la
redonda) representan una misma, unidad con dos funciones diferentes

m
pero complementarias: residencia y empresa. La ciudad era morada
de los dueños de las haciendas que producían una gran variedad de
alimentos destinados a la dieta Je los limeños coloniales. Esta
diferenciación se debe a que en la ciudad, el dueño de k hacienda
encontraba los elementos para lograr un mayor rendimiento de k.
unidad productiva (servidos profesionales: escribanos* -'médicbs,
sacerdotes, variación de tos precios: baja o subida y diversas
circunstancias favorables).'

- Muchas de las haciendas limeñas coloniales eontnróu con


una dotación de indios encargados del servicio agriedla* sólo hasta.,
inicios del siglo XV3I .Entre las-principales razones' para h supresión
de tai servicio, tenemos: la disminución demogréfícá dfe-k población
indígena, e! aumento del tráfico negrero,- la dísnáncicicn d d "precio de
los esclavos y el régimen de producción utilizado- (plantaciones- y/o
haciendas). . / :•

- La edad y el seso, eran -aspectos ila tiv o s al momento de


establecer el precio de los esclavos,. Por d contraído, e l’tidrajo
calificado, e l conocimiento de algún- oficio o una relabra e ^ crieh e k
en alguna labor, fueron demenlos de mayor importancia al momento
de adquirirlos, fin este'• sentido, un esclavo caporal, maestro
chancuquero, hornero *0 pailero'de 40 ó ÓO años, costaba más que un
esclavo de 25 ó 30 años sin ningún oficio.

- Es erróneo considera}- la productividad de las haciendas


limeñas coloniales*-teniendo en cuenta sólo la extensión del área que
abarcaban. El ejemplo estudiado por nosotros es la hacienda Comas,
que a pesar de contar con 96 fanegadas de tierras, sólo- 40 eran
Mótiles*' para el cultivo. Por esta razón, es necesario hacer im estudio
cuantitativo del -régimen y volumen de producción, así como de los
alcances de la rentabilidad marginal (fertilidad de la tierra, cercanía, al
mercado, caminos, manantiales naturales, etc.), Por otro lado, es
doblemente erróneo suponer-qué iás tierras denominadas "inútiles* no
proporcionabaa ningún beneficio; pues en Sa niedida que el
propietario o arrendatario las- administraba fadcm im ente (ubicación
de corrales, etc ) estas-generaban utilidades nada despreciables.. :J-

•'-214
- Eí método de cultivo de las haciendas limeñas, basado en el
sistema de riego, significó una constaráe preocupación para el Estado
español que se explícito en la designación periódica de jueces de
aguas y en ia dación de los correspondientes reglamentos. A los
hacendados se les dejó la responsabilidad del mantenimiento y
cuidado de las acequias y/o canales de regadío. Pero los propietarios
sólo se preocuparon del cumplimiento de 1a ley cuando srus derechos
eran violentados por otros hacendados o sus tierras eran afectadas
por fenómenos naturales (disminución del caudal de ios rios.
inundaciones,etc.). ;

ÉPO CA REPUBLICANA
m
- Desde los años cincuenta del presente siglo las invasiones,
concesiones y/o venta de terrenos agrícolas o eriazos cta orden
público o privado, marcaron la dinámica de la. formación y
crecimiento clel distrito de Comas.

- La carencia de una conciencia distrital, la presión de la


pobreza y el desconocimiento de la historia en la que los mismos
invasores son actores, imposibilitan la correcta formación de un plan
o política de desarrollo distrital, en la que ios pobladores representen
el elemento activo para iniciar, continuar, concluir y preservar los
logros alcanzados.

y..; ..-La existencia de un cierto conformismo ocasionado por la


apremiante situación económica, la escasa formación educacional y
la homogeneidad étnica de los pobladores residentes en el distrito de
;Comas, originan una actitud de indiferencia o conformismo a las
nuevas necesidades creadas por la acelerada modernización de la
sociedad

'215
CONCLUSIÓN GENERAL

IV

- Los patrones ele asentamiento poblacional han: cambiado en


el decurso histórico a través de una tipología que podría ser definida
del modo, siguiente:

ÉPOCA "•JIPO m . OCUPACIÓN ES’riLi'raClÁS'PE BOBEE


P 1°. Asentamientos y Talleres Uticos .Ia. Comuna! vecinal autónoma.
a muy tempranos (CJávateros).
i 2°, Centros ceremomdys y •?.*. Domeño étnico regional.
H administralives.
I 3®. Asentamientos complejos ¡asociados 3®. Dominio étnico local (CoUi),
S al régimen. ríe señoríos (Ceffi).
P 4”, Cedros ádnmisírativós complejos
Á (político, social y milita?). 4®. Supeditado a una hegemonía
N píilitLcoHiylturflí. paaandina
1 (Cbayjja, Waú e Inca),
C
A
C 5®, Ksmcberías y casas Señoriales' í?ájo' 5a. Gobierno .urbano municipal
O el régimen de hade«¿a. (Señorío provincial y señorío
L íknrákal).
O
H :

A'

R tí". Modemigación.relativa del modele. 6a. Gobierno urb ano municipal


E anterior. (Aristocracia Estatal). ;
P 7°. “Invasiones" populares a mediados 7*. Predominio de las
v del sígío XX. organizaciones vecinales
B-; - ¿tfomiales con tendencia a ta
L fonnafeacióa (Municipal-
I Estatal). .
€ . 8®. Asodadonos y. cooperabas :de 8®.. Pobíamieato planificado y
A ; vívLeadas cóá proyección a. convertirse formal (Iví-imcipá'Estatal).
hü vuIjanüadones ijopulares.

2A6
■ARCHIVO
SEMINARIO m HISTORIA
RURAL ANDINA'- UNMSM-.

ANEXOS
ANEXO N° 1

HACIENDAS DEL VALLE DE CARABÁYLLO (1773-1775)

~ "—""------
NOMBRE FANG. PRGBUC. ESCL, ARREND. ESPECIAL
. 5©A!>
Ch, Puente **— 789 pesos 520
de Palo
Ch. Aliaga 40 32ó pesos 4 800 Alfalfa
Trap. 165 4.563 pesos Guarapo,
Collíque y raspadura,
Caí. San cal y
isidro ladrillos
Ch, 100 2.000 pesos Trigo, fríjol
Caudivüla y maíz
Ch. 110 5.231 pesos 10 2.200 sementeras y
Concón pastos
Ch. 98 1.242 pesos Alfalfa en
Guacoy pasto, leña y
caña
Ch. 270 338 pesos Alfalfa y
Punchauca leña
Ch. 100 2.434 pesos 20 1300 Leña,
Caballero alfalfa, maíz,
trigo, .
cebada; frijol
y caña
Ch. 90 1.345 pesos 3 1.200 Alfalfa
Chocas
Ch. El 371 pesos 1.800 ■ Frijol,
Trapiche alfalfa,
garbanzo,
leña,
borregos y
cameros
Ch, Sapán -- — —

218
Ch. Macas 99 2.177.2 pes. Sandia,
zapallo,
leña, trigo,
maíz y frijol
Ch, De 62 3.140 pesos
Santa o
Becerra
Ch. Asaña 35 1.618 pesos Alfalfa,
o Lagunas sementeras y
fruta
Ch.de Í2 746 pesos 500 Fruta
Boza
Ch.de la - 11 722 pesos Leña y
Mulería pastos
Ch. De 25 600 pesos 800 Frutos
Asnapuqui
o
Ch. La 66 1.738 pesos
Granja
Ch. De 96 2.859 pesos 48 612" Alfalfa,
Comas sementeras
no siembra
Ch. 53 940 pesos , 3 1.100 Tiene
Infantas o ganado que
Infantes consume
Ch, de Pro 110 3.953 pesos 20 1.200 Maíz, trigo,
frijol, leña,
leche y paja .
Ch. El 180 7.390 pesos Míet,
Cerro y raspado y
Sambrano guarapos
Ch. De 75 4.290 pesos Frijol, leña,
Chillón caña
quemada y
larga, paja,
cebada, y
maíz
Ch. Tambo 77 5.187.4 pes 47 100 Frutos y
Inga alfalfa .
Ch. La 98 5.075 pesos 18 3.040 Frutos,

219
Molina pastos y
cameros
Chrita. 12 400 pesos Camote,
Pascal yuca, maíz y
alfalfa
Chrita. De 2
Lozada
Ch. Urive 12 —■
Chrita. 12 -
Salinas
Ch. San 170 5.200 pesos 20 1.050 Sementeras
Lorenzo y pastos
Ch. 150 5.275 pesos 30 2.600 Pastos y .
Grande sementeras
Ch. San 10 2,497 pesos Maíz,
Juan de puercos y
Dios leña
Ch. Pampa 270 6.054.2 pes
del Rey y Leña y.
Chrita. De , maíz ■
hurtado o
San .Pedro
Alcántara
Ch. ... 196 3.738 pesos Maíz, pastos:
Copacaban y leña
a
Chrita. 7 1.190 pesos 6 700
Corone!
Chrita. De *“*'
Aicoser
Ch. ■■ 50 1.775.5.4 20 526 Alfalfa y
Chavarría pesos sementeras
Ch. Villa 70 i.416 pesos 16 816 Trigó, maíz
Señoría y yuca
Baja
Trap.
Bocanegra
Trap.
Bocanegra

220
Ch. Santa SO 2.557 p. Trigo, leña,
Rosa maíz y fríjol
OH. Ls 14
Regla
Ch. La 40
Taboada
Ch. Conde 93 3.036 p. 28 1.800 Alfalfa
de Vida
Señor Alta
Chata. 2 570.3 p. Plátanos
Platanar
del Cerro
Ch. ■■■■■:>:42) , Í.628 p. ,; 2 ■ 800
Óquendó y
Romeral
Trap. El 180 11.600 p. 1.200 Caña
Naranjal
Ch. 52 4.38 Ip. 1 Leña, frijol,
Chuquitant J maíz, trigo,
a I papa y leche
Ch. 84 2.833 p. 1 Alfalfa,
Marqués maíz, yuca y
| frijol
Puente: lleana Vegas Economía, Rural y Estructura Social de fas haciendas de Lima
durante el siglo XVIII. Lima, 1998. Ver Anexos N* 3; Pp."¿08'. ‘

221
ANEXO N° 2

INSTRUMENTOS BE LABRANZA
HACIENDA COMAS (1694)

CANTIDAD CATEGORÍA PRECIO 1


TOTAL 1
■— Rejas y lampas 200 pesos j¡
10 Yuntas de bueyes 600 pesos i
...... 1 Campana 50 pesos 1
Varios Ornamentos de misa 140 pesos |
12 Angarillas 30pesos |
1 Cepo - 25pesos j|
— Trastes de labranza 564 pesos 1
Fuente AGN: Protocolo Notarial W 1845.

INSTRUMENTOS DE LABRANZA
HACIENDA COMAS (1763) .

C A N T ID A D C A T E G O R ÍA P R E C IO T O T A L j
5 Yuntas de bueyes 220 pesos |
3 Yuntas viejas inservibles 42 pesos i
37 Sillones 9 pesos 2 reales |
15' Rejas 120 pesos |
9 Lampas gastadas 18 pesos j
2 Barretas 9 pesos j
2 Peroles y el oratorio 100 pesos j
4 Bragas con sus anillos 10 pesos I

222
9 Hoces 3 pesos 3 reales
2 Azuelas 4pesos
2 Sierras de mano 4 pesos
1 Media de medir semilla 6 pesos
2 Cascos viejos de aparejos 2 pesos
9 Costales de lona 4 pesos
4 Costales de jerga 4 pesos
1 Cajón pequeño de lona 4 reales :
i Angarilla de cargar maíz 8 pesos
1 Angarilla de cargar cebada, 4 pesos
trigo o frijol, y un sillón
ó Arados 12 pesos
7 Vagos maltratados 7 pesos
9 Puertas de pellejo 18 pesos
10 Sillas aprensadas 40 pesos
i Escaño 3 pesos
1 Escalera 3 pesos
Varios Pellejos de cameros - 2 pesos 5 reales
1 Mesa 4 pesos
1 Escaparate 7 pesos
1 Caja 6 pesos
1 - Tinajera 5 pesos
2 Formones, cinceles, 5 pesos
barretas, y un cepillo,
martillo y escoplo pequeño
Fuente. AGN: Protocolo Notarial N"6Q4.

223
INSTRUMENTOS DE LABRANZA
HACIENDA COMAS (1765)

CANTIDAD CATEGORIA ' . PRECIO TOTAL


9 Yuntas de bueyes 360 pesos
1 Campana 90 pesos
2 PaySas grandes y nuevas, y el ; 100 pesos .
oratorio
9 Velas nuevas ; 90 pesos .
11 Velas viejas . 44 pesos
10 Lampas 20 pesos
2 Barretas, una más grande 9 pesos
11 Hoces y 2 cierras de mano 8 pesos i real
3 Hierros de herrar ganado 6 pesos
2 Azuelas y una barrera 4 pesos 2 rea!
1 Cepillo, martillo, hacha y machete 4 pesos
4 Bragas, un escoplo y dos cinceles 11 pesos 4 real
1 Chapa grande con su llave y 5 :: 4 pesos 4 rea!.;
patas de madera
1 Media de medir semillas y una 10 pesos
escalera grande
2 Angarillas y un sillón grande de 16 pesos
angarilla ■’
27 Sillones de borrico 6 pesos 6 real í
1 Cajónderoble 2 reales
1 Husillo con su prensa, tres 13 pesos 6 real
aparejos, lazos, mamaconas,
cinchas y una lazadera
J Escaparate embutido y una 18 pesos
tinajera
2 Mesas con dos cajones 14 pesos
1 Cepo, cinco candados de 12 pesos
serrogillo, una cadena de corral
5 Cosíales y un escaño 5 pesos

224
10 Sillas aprensadas nuevas 40 pesos
16 Arados y yugos 28 pesos
I Casita para el frijol, una barbacoa 6 pesos
dedesgranarmaíz
7 Puertas de pellejo 5 pesos
Fuente. AGÑ: Protocolo Notarial N° 608.

HACIENDA COMAS (1694)

CAa TIDá B CATEGORÍA PRECIO POR PRECIO TOTAL


: u n íb a o :'
¡ 25 Muías .......26 pesos . 650 pesos
:::/ 48:.... Borricos 14 pesos 672 pesos
Bacas 10 pesos 20 pesos
¡ i Torillo lOpésós 10 pesos
[ 470 Ganado de Castilla 9 reales 528 pesos 6 reales
Fuente: AGN Protocola Notarial N* 1845.

225
CUADRO DE PRODUCCIÓN GANADERA
HACIENDA C O M Á S ;{l?e) '

CANTIDAD CATEGORÍA PRECIO PRECIO


POR TOTAL
UNIDAD
11 Novillos 14 pesos 154 pesos
10 Toros padres 12 pesos 120 pesos
. 21 Bacas madres 12 pesos 252 pesos
21 Terneras ' 7 pesos 147 pesos
18 Terneros de velo ;: 3 pesos 54 pesos ’
40 Borricos 8 pesos 320 pesos
14 Yeguas 8 pesos 104 pesos
I Caballo de Vaquería 8 pesos : 8 pesos
; 1 , . Potranca ; 3 pesos 3 pesos
,v . 6;,..; Muías viejas 8 pesos 48 pesos
... Borrico, 12 pesos
Fuente: AGN Protocolo Notarial N° 604.

226
CUADRO DE PRODUCCIÓN GANADERA
HACIENDA COMAS (1765)

CANTIDAD CATEGORÍA UNIDAD PRECIO


TOTAL
37 Borricos Bpesos 296 pesos
i Pollino maltón 4 pesos
35 . Bacas madres 12 pesos : 420 pesos
l5 .. . Novillos; ‘ 14 pesos 210 pesos
19 ■ Toros padres .. . ■ 12 pesos 228 pesos
16 Terneras 7pesos 112 pesos
25 Terneros de celo ! 3 pesos 75 pesos
19 Yeguas 12 pesos 178 pesos
1 Caballo de Boza 12 pesos 12 pesos
......... 4 Potrillos (+ un año) 4 pesos i 6 pesos
4 : Mulitas criollas {+dos 10 pesos ; 40 pesos
años)
■■ 3 . Potrillos chiquitos 2 pesos 6 pesos
" 7 Muías de carga ■; 12 pesos 84 pesos
1 Caballo padre blanco 20 pesos
85 Cochinos y cabrinos 2 pesos 170 pesos
Fuentes: AGÑ Protocolo Notarial Ñ° 608.

227
ANEXO N° 4

INVENTARIO DE CAPITALES
HACIENDA PKO; 186©

p a m p a ;..,....
===

j: CANTIDAD ■■::;’:CÁ'CEGpSÍÁ -:
|; ó Fuerte de caña, consta de 124 cuarteles
1-4 Potrero de alfalfa y uno de gramalote.

: 24 Bueyes ;: ^ r':
: $ Muías
u Borricos
, ; 2 Caballos
....... io ..... Lampas ...
\ 30 Hoces
: 12 Machetes Vv"
r ' t ;v Apiñeios.TSen reparación)
: 22 Sillones
10 Arados ;■■■:
1 10 Yugos..
i 2 Aradas ron, su cajón ■
1 Aradode fierro■F.Y',
1 Desíerronador de fierro. :
■ 1■■■- Desterronado? de madera , ....
2 Carretas
1 Homo para Quemar cal y. ladrillo.
1 Homo quemar harinas y porrones
1 Homo pequeño para quemar ladrillo
1 Homo pequeño para quemar cal
2 Homo pequeño para fundir bronce
1 1 Molino para granos en mal estado
Fuente: AGN Protocolo Notarial N° 982.

228
IH á PICHE

j CANTIDAD CATEGORIA - :
1 1 1
Acequia de cal y canto
Maquina para moler caña comente con todos sus .
útiles
i 1 Fragua
1 1 Molinete con su aparejo para alzar grandes pesos
Fuente: AGN Protocolo Notarial N“ 982.

CASA BE.PA¥LAS
— — — ----- -----------
.... ...

1 CANTIDAD CATEGORÍA j

i 5 Paylas (3 de fierro y 2 de bronce) j


Payla compuesta de falca, fondo y
1
cacliacera de bronce
i 4 Cachañeras de fierro ... : S
| .. 3 | Depósitos grandes de bronce ;
j 3 ........ Ollas de fierro 1
| ..........2 Canales de madera :
¡ 1 Mesa de madera grande |
¡’ 17 Cajones para conducir chancacas ■|
| 8 Capachos para conducir chancacas j
I ■.......5 Cubos . s
1 1 Cajón grande de madera j
I •; 1 Banco de carpintería ' 1
[ 12 Tablas de moldes y otros de medio uso j
j 3 Pipas ' i

I Mesa de purga j
Fuente: AGM Protocolo Notarial Ns 982.

^ 229
CASA » 1 PURGA

[CANTIDAD CATEGORÍA v : |
¡ 900 Hormas
[ ■1,100. Porrones
| 1 Mesadepurga
1 I Olla de fierro j
| 1 Cajón de madera ;j
6 Herramientas pequeñas para el beneficio del
azúcar
| 3 Cubos
1 2 Parihuelas j
Algunas cantidades de cal viva, cebo, 1
1 pintura, etc.
Fuente: AGN Protocolo Notarial N° 982. r

;D1STILA CÍÓN

CANTIDAD ■44444. A C A ltC O R ÍA ■r ■ 4 |


I Alambique corriente con fondo de repuesto j
I Alambique descompuesto - 4; j
1 Bomba corriente
2 Bombas compuestas (en casa del I
maquinista).' :j
í :i Depósito de mostos.. I
19 Toneies para la fermentación j
3 / ;Canales de madera ■ ■j
’S Pipas1■ . .. ,jj. |
40 Botijas
1 Cañería de fieirq Compuesta de 58 tubosj j
2 Tubos de fierro dé 10 pulgadas de
diámetro . .
230
4 Tubos de fierro de 4 pulgadas de diámetro
2 Barriütos
20 Barriltíos regulares para conducir ron
2 Medias aifajias y varías tablas y cuartones
3 Embudos
Fuente: AON Protocolo Notarial N“ 982.

CASA HABITACIÓN

CANTIDAD CATEGORIA
I Armario
1 Mesa
1 Escaño
12 Sillas V'
1 Caballete
2 Ventanas nuevas
2 Escaleras
2 :,■■■ Barretas ,
1 Tinajera con piedra y tinaja
Capilla con todos sus útiles y
dos mantas nuevas
Fuente: AON Protocolo Notaría! Ñ®982.

231
ANEXO N°S

INSTRUMENTOS BE LABRANZA,
HACIENDA COLLIQUE (1747)

CANTIDAD c a t é g ó r Ia
4 Rejas
15 Lampas
1 Azuela
1 Martillo
j 1 Escoplo
| 4 Cierras
1 4 . Azadones
j 1 Barreta
í ! Hacha
¡ 20 Hoces
1 2 Fondos o ollas
J + de 1 Tobas
j + de 3 - Estribos
1 16 Yugos
¡ n • Arados
J 4 Tapiales
! 9 Angarillas de frijol
¡ 9 - Sillones
¡ 3 Angarillas de maíz :
| 25 Sillones de borricos
Fuente: ÁGÑ Protocolo Notaría! N®t ¡50,

232
INSTRUMENTOS BE LABRANZA
HACIENDA COI&IQUE (1777)

CANT. CATEGORIA UNID, PRECIO


27 Lampas 2 pesos 54 pesos
9 Rejas de 1/2 vida 12 reales 13 1/2 pesos
. 22, Hoces corrientes 3 reales , 8 pesos y 6 reales
2 Hachas corrientes 21/2 p. 5 pesos
5 Machetillos 6 reales 3 pesos y ó reales
2 Cierras brazeras 20 pesos
1 Serrucho de dos manos 4 pesos
4 Barretas pie de cabra 5 pesos 20 pesos
2 Cadenas con 102 eslabones 25 pesos
2 Cadenas pequeñas con 32 3 pesos
eslabones
1 Romana comente 25 presos
2 Pares de grillos y 1 par .de 7 pesos 4 reales
brazas
1 Perno de mesa con dos 2 pesos
eslabones, 1 azuela, 2
cinceles y una barreta
(viejas)
i Barretón, 1 atacador, 2 cuñas 10 pesos
y 1 comba
5 Mesas con sus eslabones de 10 pesos
.sujetar presos
1 • Balanza de cruz y 1 comba 12 pesos
pequeña
- 2 Arrobas de fierro para hacer 3 pesos
herramientas
8 Arados corrientes 2 pesos 16 reales
9 Yugos comentes I peso 9 pesos
25 Sillones aviados con !0 pesos
capachos para el acarreo de
materiales

233
2 Marcos de angarrillas, 2 . , 3 pesos
sillones grandes, 1 pico de
Fierro de picar las páyías
669 Ladrillos pasteleros grandes 3 reales 250 pesos y 7 reales
4.500 Ladrillos a 3 pesos el millar 13 pesos 4 reales
es crudo
21 Yuntas de bueyes y toros de 840 pesos
trapiches y arado de toda
cíase
Fuente: AGÑ Protocolo Notarial H° 642.

INSTRUMENTOS DE LABRANZA
HACIENDA COLLIQUK (1780)

CANTIDAD C A T E G O R IA ' P R E C IO -. :; To t a l j

11 Yuntas para moler caña del 5 0 peso s 550 pesos 1


trapiche
5 14 Yuntas de bueyes para 50 pesos. 275 pesos I
labranza
1 Pico por ser de novillo 20 pesos ; I
16 Rejas corrientes - 3 pesos 42 pesos 1
39 Lampas bien hechas 2 pesos . ■ 78 pesos j
2! Lampas de 1/2 vida ■ 4 reales V . 10.5 pesos : |
42 . Hoces 4 reales : 21 pesos ; 1
18 Escardillos 18 pesos |
2 . Cierras brazeras buenas 10 reales ' 20 pesos : j
16. Machetes entre pequeños y 16 pesos I
grandes _
. 4 " Barretas 3 pesos . 12 pesos j
4 Hachas 2 pesos 8 pesos |

234
2 Cadenas grandes de 68 ... 30 pesos
eslabones
5 Pares de grillos y brazas — 15 pesos
Herramientas de la cantera — 25 pesos
. 1 Romana corriente ... 25 pesos
8 Aparejos de reata abajo 3 pesos : 24 pesos 1
30 Costales de lona 4 reales 15 pesos
10 Atados corrientes 3 pesos ■ 30 pesos
10 Yugos . 1 peso 10 pesos
2 AngarnUas con sus tiros de ;; 4 pesos
cuero
4 Sillones 4 reales 2 pesos
1 14 Anega de medir ; ... . ■■■; 3 pesos ■:
: 4 Moledores de pluma con 8 2.750 p.
primas que componen 4
paradas corrientes.
12 Gorrones y 12 dados que 47.2 pesos
reciben los moledores, con
peso de 7 libras.
Bateas : — . /---
Barras de camales > V- — ,
Falcas con dos varas de boca ■V —
Fondos usados ... ;•—
Cachaceros redondos , ~ '
Cajón ...

Fonditos chancaquéeos — .,
Perol grande de batir ’ —-
chancacas
Perolíto alfañiquero ...

Fondos medianos sangeros


Campana ;
Camal sobra de fundición
Barras de estaño -
Fuente: ÁGN Protocolo Notarial N° 527.

235
ANEXO N* 6

236
ANEXON” 7

PRODUCCIÓN S E GANADO
HACIENDA C O LO Q U E (1747)

CANTIDAD CATEGORÍA 1
34 Bueyes |
42 Bornees |
2 Pollinos i
12 Muías 1
3 Caballos de vaquería |
1 Yegua I
214 Borregas !{
Fuente: AGN Protocolo "Notarial Ñ&1150.

PRODUCCIÓN DE GANADO: HACIENDA C0X11QUE (1777)

CANT. ' CATEGORIAS PRECIO TOTAL 1


26 Vacas madres 15 pesos 390 pesos |
13 Terneras 12 pesos 156 pesos |
2 ■Temerás de 1 año 6 pesos 12 pesos ¡
H Toros de más de 2 años 12 pesos 132 pesos |
2 Toros capados de más de 2 años í 4 pesos 38 peses |
6 Torillo de más de 1 año 6 pesos 36 pesos i
8 Temeros y temerás 3 pesos 24 pesos |
76 Burros y burras de trajín deis 8 pesos 608 pesos
hacienda, los 40 operados y íes
restantes a pelo.

237
Muías y mulos de carga y silla 14 pesos 784 pesos
1 s6 ■
Caballos de silla corrientes, que 20 pesos 100 pesos
1 5 sirven a! administrador.
Muía de silla 30 pesos
j 5
I l] Cabal! os de caballería 12 pesos 132 pesos
1 _ __ ,
r i Yegua de caballería 12 pesos 12 pesos
i
h 60 Borregas y borregos ! 0 real 75 pesos
| 42 Cabras y chivatos v'':— 42 pesos
Puente: AON Protocoló Notarial N6527.

PRODUCCIÓN DE GANADO
HACIENDA C O LO Q U E (1780)

S
j CANTIDAD CATEGORÍA . UNIDAD TOTAL
1 6 Terneros 8 pesos ■48 pesos
1 7
¡ 19
Novillos
'Poros •
16 pesos
15 pesos.
1! 2 posos
C !: 285 pesos
| 5 . Torillos Spesos ,40 pesos.,..
¡ 14 Terneras (os) a 4 pesos . 56 pesos
| 36 Muías de carga ‘
14 pesos ; 504 pesos r
| 26 Muías de silla .• 10 pesos 260 pesos -
j 2 Muías chucaras 8 pesos p v 16 pesos
j 4 Pollinos ; 3 pesos : 12 pesos : ; :
j 5 Caballos 7 pesos 35 pesos
2 ' Yeguas de 7 pesos ~ " : 14 pesos ■■■■■;
vaquería
| 78 Borricos 16 pesos ,1.248 pesos
Fuante: AGN Protocolo Notarial N° 642.

238
A N EX O N° 8

POLÍTICA ECONÓM ICA BEL ESTADO

;AÑOS MARGO GENERAD AGRICULTURA


1822 Diagnóstico Sector “desolado” por
(Memoria) efectos de la-guerra
Políticas e Objetivo Básico: financiar la
instrumentos campaña militar
de desarrollo
1825 Diagnóstico Sector “cuasi |
(Memoria) desaparecido” ||
Politiea e Objetivo básico: activar la
i
instrumentos economía “desolada" j
de desarrolllo
1827 Diagnóstico -Oran desorden y falta de ......... 1
(Memoria) contabilidad en la Hacienda
Pública.
-Desactivación de los sectores
productivos.. ■

Políticas e Cargas fuertes sobre!


instrumentos ios predios rústicos.
de desarrollo Exceptuar del; pago
de ciertos impuestos a
Sá ágricuittítá;"
1828 Diagnóstico -Situación desastrosa del
(Memoria) ■ erario por las guerras de
independencia
Políticas e
instrumentos ■ ■
de desarrollo
1829 Diagnóstico -Grave miseria de todos los
(Memoria) pueblos, excesivas :,guerras
que afectas ia integridad de
la nación, convulsiones
políticas.

239
Políticas
instrumentos
de desarrollo
e
I
[1831 Diagnóstico
I(Memoria)
I
Políticas e Objetivos básicos:
instrumentos -Buscar el equilibrio de
de desarrollo gastps e ingresos.
-Conducir y ejecutar una
política tributaria de acuerdo
al desarrollo económico.
1832 • Diagnóstico
(Memoria)
Políticas-- e - Economizar la inversión -Facilitar la
instrumentos importación de trigo
de desarrollo de Chile.
-Liberación de los
derechos de
explotación; en la
actividad pesquera.
í 847 Diagnóstico -Afectación de los ingresos
(Memoria) del Estado por las continuas
revoluciones. .
-Aparato . burocrático
ineficiente.
Políticas e -Reorganizar : -el.... sistema
instrumentos administrativo. •
de desarrollo -Combatir el fraude fiscal.
1849 Diagnóstico -Las revoluciones
(Memoria) “desarman” a! erario de.
recursos.
Políticas e Objetivos básicos: -Buscar la migración
instrumentos -Mantener la “vida social”;en de agricultores o
de desarrollo la República. trabajadores europeos
Objetivo específico: para •‘poblar" y
-“Priorizar” el destino y usó trabajar el campó.
de las rentas nacionales.
1851 Diagnóstico.
(Memoria)
Políticas e Objetivos básicos:
instrumentos -Máximizar el ahorro interno
de desarrollo

240
1S53 Diagnóstico
(Memoria)
Políticas e Objetivos específicos:
instrumentos -Hacer respetar la libertad de
de desarrollo comercio.
-Hacer cumplir los
dispositivos fiscales.
-Cumplir con las obligaciones
del fisco frente a sus
.' acreedores.
-Apoyar la política de
comunicación.
1855 Diagnóstico -Ausencia y carencia
(Memoria) de brazos.
Políticas e Objetivo general: -Implementar una
instrumentos -Sentar las bases de una política de
de desarrollo política de “prosperidad y irrigaciones y
bonanza”. colonización.
-Crear un banco para
fomentar la
producción.
1858 Diagnóstico -Ausencia de
(Memoria) capitales debido a los
altos intereses.
-Escasez de brazos
debido a las guerras
civiles, epidemias en
los campesinos,
ociosidad de los
. . indígenas (desde la
abolición de la
contribución),
libertad de los
esclavos.
Políticas e Objetivos generales: - Ejecutar obras de
Instrumentos - Tratar de atemperar los irrigación
de desarrollo efectos de las “revueltas
militares” en el sistema de
Hacienda Pública.
- Fomentar las exportaciones
del sector . agropecuario
(vinos, licores, azúcar,
algodón, cochinilla, café,
arroz, tabaco).
-Adoptar un sistema
comercial liberal y de
“acertadas franquicias”.
-El guano es . y, deber ser ¡a
fuente del crédito público.
1860 Diagnóstico
(Memoria)
Política e Objetivos generales; -Evitar la protección
instrumento -Movilizar recursos a la industria para que
de desarrollo para atender la guerra con se vea limitado . el
Ecuador. contrabando.
-Aumentar el. nivel de -Crear “fabricas” que
consumo. utilicen las materias
-Continuar con el sistema de primas nacionales. ;
crédito público en Europa y -Otorgar privilegios
América. .exclusivos a ios
inventores
iníródúétoíes dej
industrias nueva;-,. |
1862 Diagnóstico | -La falta de brazos os j
(Memoria) j Ja principar lirralactón j
¡ dei desarrollo del ¡
í sector.''
Objetivos generales: -Fomentar la
-Poner la riqueza económica asociación de los
al servicio de finalidades agricultores.
políticas y sociales. -Fomentar el cultivo
-Fomentar el desarrollo de la de vid.
agriultura y la minería. -incrementar la
-Crear rentas públicas producción de
“perennes” exentas de las algodón.'
vicisitudes de) guano.
1864 Diagnóstico -El Perú es un país -La agricultura
(Memoria) eminentemente agrícola y andina esta “más
productor de materias primas, inmóvil” , que la
de. escaso número de costeña.
pobladores, de- capitales, y
conocimientos fabriles.
Políticas e Objetivo general;
instrumentos -Buscar que el instrumento
de desarrollo financiero ; público se
desarrolle dentro del principio
del equilibrio de ingresos y
gastos.

242
---------------¡
1867 | Diagnóstico -Crisis general en la Hacienda
(Memoria) Pública
Políticas e Objetivo: -Gravar a ios
instrumentos -Reformar integralmente a la productores de
de desarrollo administración financiera del exportación (lanas,
Estado. algodón, azúcar,
arroz, tabaco).
¡870 Diagnóstico
(Memoria)
Políticas e Objetivo general: -Fomentar la
instrumentos -Hacer del Ministerio de migración de mano
de desarrollo Hacienda tma “gran y de obra europea.
poderosa casa de comercio”. -Promover el
Propuesta: desarrollo de la
-Crear «n Ministerio de ganadería.
Fomento para .las' obras -Establecer la
públicas, la agricultura, la formación de
minería y d comercio. asentamientos
agrícolas en los
grandes ríos
naveeables. i
i 870 Diagnóstico 1
(Memoria) ¡}
Políticas c Objetivos:
instrumentos - Maximízar e! superávit
de desarrollo riscal.
- Dejar que la empresa
privada opere sin que e!
Estado “pese demasiado
sobre ella”.
- Hacer que la empresa
privada participe en la
explotación del yodo,
salitre, petróleo y carbón do
piedra.
1874 Diagnóstico -“Amenaza” de una grave -El aumento del
(Memoria) crisis económica. crédito interno ha
llevado a
considerables niveles
de endeudamiento de
la agricultura.
Políticas c Objetivos:
instrumentos -Aumentar la Producción
de desarrollo Nacional (PNB).
-Buscar rentas para el Estado.
-Estimular' el trabajo del
habitante andino.
-Introducir 4.000 migrantes
europeos.
¡876 Diagnóstico
(Memoria)

Políticas e Objetivos: '.7: i ■ ■ :


instrumentos Retomar a una “normalidad" :
de desarrollo .financiera del Estado.,
-¡Modificar el servicio de la
deuda externa. .

-Utilizar el salitre, corno


garantía , remplazando ai
guano en el pago de la deuda
externa. i
-Disminuir je! consumo de ios . t
i productos importados. i............... ,____ i
Fuente: Javier Tamalean, Política EconójnJco/Financtera y Forámciiin del Ep &úoí Siglo
XX. Lima, 1983. Ver anexos Cuati. 3,

244
MANO BE OBRA: HACIENDA COLLIQUE (1826)

HOMBRES

NOMBRE DEFECTO PRECIO


Mariano Con un ojo enfermo 250 pesos
Vicente Saavedra 300 pesos
José Ceiendonio 300 pesos
Juan Manad Manco de urs dedo í 00 pesos
Martín Rivera 300 pesos
Nicolais Rivera 300 pesos
Pabio Martillo Ahogos 100 pesos
Cayetano Saavedra Quebrado 80 pesos
Mariano Rosario 350 pesos
Julián Rivera 350 pesos
Patricio ídem ■350 pesos
Juan Capitán Quebrado i 00 pesos
Francisco Mararabique 350 pesos
Jorge Mats 200 pesos
Pablo Rivera 300 pesos
José Manuel ídem 350 pesos
Sebastián ídem Quebrado 150 pesos
Juan ídem 300 pesos
Ventura ídem Quebrado 100 pesos
Joaquín Lemos Quebrado 100 pesos
Miguel Rivera 350 pesos
Esteban Ídem Quebrado 100 pesos
Juan Rivera Chacha 200 pesos
Fuente; AGN Protocolo Notarial N° 220.
MUJERES

| NOMBRES DEFECTOS PEECIO


Mercedes 200 pesos :
Liberata Muy vieja 50 pesos :
Josefa Perales 200 pesos
Cecilia Mais Con coto 100 pesos
Pascuala Perales 150 pesos
Manuela ídem 2(30 pesos.
Miaría Margarita Mais ■200-pesos ■
:
Manuela Rivera Con caracha 300 pesos
Catalina Saavedra C o n lobanillo on lá 150 pesos
oreja
Victoria Rivera Masamhique 150 pesos |
Catalina ídem idexri 200 per
María Guadalupe Prieta 250 pesos ■
Mariana Mina . .'Con purgación 50 pesos.
Rosa Mangúela 200 pesos
Rosa Rivera Enferma del pecho 50 pesos .
María Catalina Saavedra Muy vieja y con un ' 50 pesos
ojo enfermo
Narcisa Saavedra 300 pesos i
Mana del Carmen ídem ■300 pesos, i
Melchora Perales Cor. angurria 2: 50 pesos
María Natividad Rivera Enferma del pecho 100 pesos i
Manuela Reyes 200 pesos ;
Faenter AGN Protocolo Notarial N“ 220.

246
MUCHACHAS

NOMBRES DEFECTOS PRECIO :


María de los Santos Rivera 200 pesos
María de los Angeles idern 200 pesos
Manuela ídem , 200 pesos
Juanita ídem 150 pesos
Andrea ídem i 50 pesos
Liberata ídem 150 pesos
Petronila Rivera Con caracha 50 pesos
Patricia idem 100 pesos
Angel Custodio Con caracha ■ j00 pesos
Mariana Rivera 10ü pesos |
Fuente: AGN Protocolo Notarial N" 220,

247
ANEXO N * 10

DESCRIPCION MILITAS. DEL TERRENO


QUE SE HA LEVANTADO. DE LAS
INMEDIACIONES DE LA CIUDAD DE LIM A
EN LA QUE SE EXPRESAN LOS CAMINOS Y
SENDEROS QUE DESDE LAS PLAYAS,
MARITIMAS CONDUCEN Á ELLA Y SUS
COMUNICACIONES CON LOS DEMÁS Y
MÁS DISTANTES Y QUE SE DIRIGEN HE LO
INTERIOR DEL PAÍS;,- MANIFESTANDO LOS
FUNDOS, QUE ELLOS SE ENCUENTRAN'
PROPORCIONADOS PARA IM PEDIR, Ó
DETENER LA MARCHA DE LOS ENEMIGOS
EN CASO DE UNA INVASIÓN.

Lima, abril 22 de 1807. Dirigida al Exorno, señor


doctor don Nicolás de Piérda. Por losé E, Castefion.

La parte de costa comprendida, desde el


puerto de la china situada aí sur del pueblo del
Chorrillos en el moró solar, y el puerto de Ancón
situado en la del norte del Callao, suponiendo que
sea suceptible de un desembarco en tiempos
bonancibles, ofrece algunos parajes por donde con
más o menos' dificultad pueden internarse los
enemigos, a la capital: por lo mismo se irá tratando
de cada uno en particular para la más clara
inteligencia de ellos.

248
Camino «tésete eHpuerto «te Ascón ¡i Lima.

. Supuesto verificado un desembarco as». el


puerro de Ancón diñante 5 leguas de fe- capital,
podran Sos enemigos emprender su marcha- hacia ella
por el camino principal de valles que pasa a media
legua de dicho puerto. Aunque d "plano .no
coarrendé por este lado hasta el referido puerto sino
hasta una media legua rm% adelante del río Chillón,
esto es hasta 3 leguas y media. más acá del Ancón, se
sabe por ntforrae de prácticos que este trozo de
.camino comprende desde el Ancón hasta cerca* del
portillo de Tambo Ynga, punto a que alcanza, el
plario, es transitable en todos los tiempos:' que su
piso es de arena muerta excepto algunos trozos en la
distancia de 3 y 1/2 legua hasta pasar por
Gopacabana, antes de llegar a este punto hay el
poctachueia de la subida de piedras gordas, lugar que
•por su local pueden dos o tres mil hombres de
ynfanteria y caballería con artillería de a caballo
detener por mucho tiendo un cuerpo de odio a diez
mil hombres. Antes del' portillo de Tambo Ynca,
marcado en el plano con la, letra "A", viniendo- hacia
Lima hay otros dos y delante de estos la revuelta de
Sos cerras de Copacabana, y d terreno pantanoso
intransitable,.y solo hay k calzada de sus seis varas
de ancho que forman el camino cuyo local puede
detener con 5DO hombres cualquier fuetea
cuadriplicada, y ruás acá se encuentra el portillo de
Chillan: todos Sres son de una' misma naturales, y
consisten en unos tejos abiertos cerca de las
extremidades de los loraages y bajan de la. cordillera
de Chillón hasta el llano: el ancho de éstas aberturas
es de unas ó a $ varas, y la altura ele 3 a 4, once de
Chillón é inmediatos a Copacabana teniendo el
enasto más de 40, En tiempos de aguas en que no se
•puede sin riesgo, vadearse el río Otilio», es
indispensable el paso del portillo del Chillón
249
jtiarcsido en el plano con. la letra ,rB,f porque los
reqiiial.es ó manantiales y carrizales espesos que hay
desde ia punta d é . cerro en que se halla situado dicho
boquete halda la orilla cfel rio impiden- el que pueda
rodearse este portillo, y transitar por hiera de él,
como sucede & los otros dos, los cuales tienen la
facilidad de rodearse, aunque también- tienen puntos
que 'vencer por esto solo d portillo de Chillón es que
puede fortificarse ü quiere impedirse ú paso a los
enemigos, en cuyo caso presta comodidad- el terreno
pora establecer m u batería, estable a la. derecha dd
portillo, y guarmcen con infimterla, en bastante
nú-mero a derecha e izquierda 3a cumbre angosta, que
forma, el cerro. La retirada de estes tropas que
guardan d paso es fácil, en caso que lo supe-rásen lo?,
enemi gos siguiendo e! Carm.no Real que en tiempos
de aguar sirve el señalad» con al Ñero (14), y puede
protegerse con un gruaso tetacamento de caballería
6 lengones, que podría, situarse a este lado del
portillo, en el pota ero que esta mmedsato, deiriba-ndo
los tapiales que le impiden maniobrar de frente, y
abriendo por la espalda los paso® necesarios para que
pueda reíii'aise e<x« celeridad, cuando convenga por
el mismo comino (14) hasta otro paso forzoso, que se
presenta después de la hacienda, de Chillón marcado
con la letra ”0". Este paso es una garganta por donde
se dirige dicho camino para temar <1 puente del Yuca
(Í5): esta rodeado en. forma de arco'por alturas de
bastante elevación en lo que se puede establecer
baterías, y úna línea algo numerosa de yníantería que
puesta a cubierta podrá tener a ...fuerzas muy
superiores: a el lado opuesto de este paso sigue, con
inmédiación un gran cerro que forman los cerros de
Chillón, y constituye un terreno llano, aunque con
pendiente suave hacia sur, en ei cual pueden
colocarse eaa batalla 5 6 t> hombres, y - 'parece., a
propósito para tomar en él una 'excelente posición en
ÍPDD" para esperar, de firme, al enemigo cor» la
250
precaución de asegurarse bien de Jas alturas de h
izquierda, y retaguardia a fin de cubrir el costado
izquierdo de dominación, y asegurar el paso del
puente en ca,so de retirada, para lo cual se debería
establecer, algunas, baterías en las alturas dichas, ó
sino pueden guarnecerse con, infantería y algunas
balerías según se ha dicho en estas alturas, y se
lograr* con menos defensores posición más que la
anterior, para impedir que el enemigo líense al
puente. Sigue inmediato a este punto el puente del
Yuca (15) de catorce varas de largo y cuatro de
ancho., formado sobre tres aifáji&s ó vigas que se
apoyan en las ríbazas escarpadas de los dos cerros,
que estrechan el río en su albco (sic) ál corto espado
que coge el largo del puente. Este puente es fácil de
cortarlo y destruirlo como se ve; pero no es factible
el establecer defensa alguna, para impedir ;d que lo
restablezcan los enemigos una vez que se apoderen
de la orilla, y elevaciones de la derecha del río, por el
carrito de este lado del puente esta muy dominado
;por las alturas de la orilla opuesta desde es puente del
Yuca sigue el referido camino a tomar d callejón de
ChuquI lanía, después pasa por el Nararyal- y luego
por elídante de la granja y de Asnapuquio, dejando
estas dos haciendas á la derecha, basta salir a. unirse
con el dicho camino (12) en el punto Clareado can la
letra "Frt: punto que debe tenerse muy presente, pues
siendo la reunión de ¡os caminos que conducen por
este lado a la capital, y paso preciso y estrecho,
ceñido por el lado por la. cordillera de los amancaes,
y por eí puquial y pantano que nace junto al mismo
Comino Real, es muy propio para, tener la marcha de
ios enemigos., y causarles mucho dorio fortificándolo
como se debe. Para esto se'podrá formar una batería
de cuatro cañones en la cumbre del cerro, apostando
alguna yníuntería ventajosamente para que los
enemigos no intenten subir por ella, otra de igual
número en e! lado opuesto detrás del pantano, y
desde allá ni cerro se puede formar un
atrincheramiento para colocar a cubierto la
infantería que se juzgue conveniente: la distancia ó
.frente que podrá tener esta cortadura, será de unas 50
ó 60 varas, comprendiéndose la falda del. cerro basta
tocar en la batería colocada en su cumbre y por esto
no se necesita mucha gente para (componerla)
guarnecerla: se podrá, Henar de agua el piso que se
disponga por delante por medio de la acequia que
corre al pie de dicho cerro.

........En la distancia:. comprendida: desde


ChuquRaráa hasta el Naranjal el, callejón que sirve de
Camino Real en tiempo de aguas, como. se ha dicho
es bastante ancho, tiene algunas, pequeñas' acequias
que lo atraviesan para rogar los -campos inmediatos, y
por medio de ellas se puede .inundar en muchas
paites de mamara, que sea bastante incomoda el
transito: tiene también pisto ai Naranjal «n c a ro de
alguna elevación, y u r n a ÓOO varas de largo .que lo
domina, y as propio para establecer alguna defensa
que .impida el paso. Ea frente de 1.a granja pasa este
camino en una distancia ó trozo de 200 varas, por un
gramadai pantanoso, que a poca diligencia se-:puede.
anegar, y hacerlo intransitable; pero todas;,estes
dificultades que se pueden oponer al enemigo en este
espacio de camino las puede evitar tomando so m ía'
desde el puente: del Yuca por los sembrados, cíe la
hacienda cíe.,.Pro, ó pea- las de Ynfanta, para salir ai
oteo Camino Real (12).

El otro ramo de este Camino Real de valles


que sirve en la mayor parte del ano cuando el río
■Chillón esta vadeadle, se.separa, del anterior que
queda descrito, en frente de Sa hacienda Chillón, y se
dirige rectamente al río, pasando en este espacio por
entre monte que lo acompaña por uno y otro Hado
hasta salir del río: el paso ó vado del rio, es
252
pedregoso aunque la piedra es menuda, el piso esta
llano, el agua que corre es muy poca, y las orillas son
bajas aunque tienen algún monte, en que pueden
encubrirse alguna, tropa si se quiere defender del
pasaje.

Desde el 'vado continua, el Camino Real casi


en línea recta por espacio de 6000 varas hasta cerca­
da la unión que hace con el de Pasco (13) en un
tsaabito: este trozo de camino conserva por lo regular
la anchura de 14 a 20 varas, y. esta, cercano de los
tapiales de las haciendas inmediatas y no ofrece el
terreno más ventaja particular que las dominaciones
"CK>" dentro de las distancias del alcance horizontal
del cañón para incomodas' su:-transito y las otras dos
"HH", bien próximas al camino. Desde el tambito
dicho sigue el Camino Real haciendo una pequeña
inflexión, para encontrarse con el punto "Fn .ya
mencionado en donde se reúnen los dos muios del
Camino Real de valles. Desde él referido punto de
.unión "F" continua el-Camino Real- como a distancia
de 100 varas, del pie de jos cetros que lo acompañan
hasta Lima más ó\ ráenos distante, y hace algunas
pequeñas recovas en.la distancia de 975 varas. A el
laclo opuesto de ios cerros acompaña este trozo de
.camino un grarnadal y monte capaz de encubrir
alguna tropa emboscada, la-que podrá reforzar en
caso necesario a.la que defienda el paso TrF": luego
sigue el camino, cercano siempre-ele tapiales, casi en
línea recta hasta puente de palo, en cuyo paraje sale
el camino a un terreno despejado, y pedregoso que
- forma ..una ’gran plazuela comprendidas entre las
cercas de las huertas inmediatas a la portada de Guía
y el tapial da la hacienda de Coronel inmediata al río.

En este trozo de camino hay otro punto (de


camino) marcado con la letra Tf", propio para
formar otra cortadura que impida el pasaje de los
253
enemigos, haciendo urna batería ó reducto en Sa
cumbre del cénit» "Y”. Corriendo un
atrincheramiento desde él ha-sta los ceños de los
amaneas» par®, cenar ía abertura M Y ”. "J" corno de
300 varas; y lo mismo al otro lado sobre el mismo
Camino Rea! hasta, unirlo con las cercas de 1%huerta
de Vasquez que enfilan el camino y -forman un
ángulo entrante que mira hacia [é]l fc]" cuyos lados
son de 12 varas'-el uno y de 70 el otro: se podrá
disponer por delante un buen paso de aguas mediante
las acequias que corren por este punto, y con las
mismas que- coatiréan hasta e l punto "F”' se puede
anegar por trozó todo el camino .desde' dicho punto
"I5"' hasta cérea del puente de palo:'más acá del punto
"Y" hay otra •quaquerm ele 7 ó m ás varas de
elevación y 100 de largo que domina irniry de cerca el
camino' y cría señalado con- la letra "KY y es
situados?, acomodada para establecer una batería en­
caso necesario, cié las dos cortaduras propuestas en
"F" i "Y” solo la primera esta situada en un paso
preciso para todos los que vienen por los caminos
(12...13...14);' porque la -segunda situada'"en""Y”
podrán evitarla los enemigos, sino les conviene
atacarla, rodeando por la derecha' desde antes de
llegar a Aliaga para ir a-tomar el Camino (16) "que
viene desde Santa Rosa, por Chavarría, ;y las
inmediaciones de Fabo hasta la portada de .Guía;
bien que este transitó -hasta--entrar en ''dicho camino
seria bastante incomodo por la s sembradas y tapiales
que tendrían que atravesar.'

SIEN: 1807 --D6Ü0Q.

254
AN EX O N" 11

RELACIÓN-DE ALCALDES DEL D ISTRITO DE COMAS'

1. OmUermo Solis Benito (AFRA) [1961-1962]


2. Wenceslao Tuque Enriques (AFRA-UNO) [1963- ]
3. Áreesio L. Ouillén Zavaleta (AFRA)
4. Císmente Fernández Saldaría (PPC)
5. Edmundo Aramburú (PPC)
6. Emilio Pérez Zegaira (AFRA)
7. Hugo Matos Torre X.ara (AFRA)
8. Ricardo Peso Marcos; (AERA)
9. Clasver Rosas Silva
1Ó. Abiiio Boyar Coronado (PPC)
TI. Nicolás’Sar&via Sandoval ( APRA)
12. Francisco Melgarejo Carrasco
13. Alfonso Vargas Builrcm (APRA)
14. Oscar Nagamine TSfakayatna (APRA.)
15. Amulfo Medina Cruces (ÍU) [1981-1983,1984-1986,
1987-1989}
16. Humberto Paredes (TU) [1990-I992J
17. Roberto Martes (Lima ai 2000) [1993-1995]
18. Julio Saldaña Grandes (Cambió 90-Nuevs. Mayoría)
{1096-1998]
19. Arnuífó Medina Cruces (Somos Perú) [1999-2002]

255
A N E X O N ° 12

HIMNO D EL DISTRITO DE COMAS

CORO
Avanza Comas, avanza Comas
hacia, el progreso y bienestar popular.
Avanza Comas, avanza Comas,
con las banderas de justicia y libertad.
Avanza, Comas, avanza Comas,
juntar las fum as* todos vamos a luchar,
tu pueblo combativo siempre lia sido
por el progreso y bienestar popular.

. ESTROFAS
Comas es coraje y valentía,,.
..alma rebelde de los. col lis heredó,
ejemplo de trabajo y gallardía,
es tu gran pueblo que.combate con ardor.
Naciste éntre valles y montañas.,
H oyes Comas un gran pueblo singular.,
eqmeüos np.se olviden que ja, patria
también espora rmestro triunfo con honor.

Hermanos íreute en alto a luchar


. nimbo a la gloria con valor sin.igual
frío falte el pan, el agua y la paz
y hacer de Comas un remanso de hermandad
comefios brazo en alto a combatir
como tus mártires recuerdas furor,
¡Abrid ancho camino a este pueblo
y-por la. patria ir. a vencer o morir!

Concursos Municipalidad de Comas (1990),


Letra y música: Cristian Cobeñas Benites.
Arreglos musicales: Roberto Tembraico Calixto.

256
ANEXO N* 13 -

LISTA DE CENTROS POBLADOS D EL DISTRITO DE


■ - ; COMAS ■

ASENTAM IENTOS HUMANOS r

1. AH. 1 de Julio
2. AH. 10 de Diciembre
3. AH. 11 de Julio
4. A..H. 13 de Enero
5. A H . 19 de Noviembre
6. AH. 2 de Agosto ••'■■■
7. A H . 27 de Noviembre
8'. A H . 28 de Julio
9. A.H. 26 de Julio
10, A H . 6 de Marzo
í 1, A.B. 9 de Octubre
1.2, A H , Carmen Bajo (Marginal)
13. A.H. Carmen Bajo Mz. A-l
14. A.H. Cerro el Calvario
15. A.H. Comité 29 parte alta
16. A H . El Aytlu
17. A H . El Mirador
18. A H . El Mirador
19. A.H. Hijos de Manco Inca
20. ATI. Horacio Zevallos
21. A.H. Juan Pablo II
22. A.H. La Libertad A lta.
23. A H. Las Casuarinas de Colüque
24. A H . Los Altos de Cíorinda Málaga.
25. A H . L o s Angeles
26. AH. Los Geranios
'27. A H . Nueva Florida "
28. A H , Nueva Florida .
29. A.K, Nuevo Amanecer '

257
30. A H. Nuevo San José
31. A H. San Juan Bautista Iíí etapa
32. A H . Santa Rosa IV zona Colliqne
33. A .ti Sta Rosa VI zona CoiHque
34. AH. S. Cruz <k M. del CSn. Salvad,
35. A H, S. cíe losMilag. de Collique
36. AH, Sol Naciente
37. A H. Upis ciudad de Lima
38. AH. Villa de Collique
39. A H . Villa Florinda
40. A H . Villa Hermos a
41. A H . Villa Jesús de Collique
42. AH. Villa Metropolitana
43. AH. Virgen de las Nieves ... tV-u-,
44. A H , Virgen del C. o C. Alto C. 45
45. AH. Virgen del Rosario

PUEBLOS JÓVENES

L P J. 9 de Setiembre.
2. P J. Alto Perú.
3. P J. Amistad Unida
4. P.J. Año Nuevo.
5. P J. Bello Horizonte.
6. P J. Carmen Alto,
7. P J. Cetro Peruano
S. P J, Cerro Sen Francisco.
9. P J. Clorinda Málaga de Prado
30. P J, Colliqne 1 zona.
11, P J . Colliqne U zo n a;
12- P A Colliqne DI zona.
13. P .J. Colliqne TV zo na
14. P J , Collique V zona.
15. PJ'. Dios Amor
16. P J. El Carinen!
17. P J . El Carril Alto o Si de losMilag. H

258
18. P J . El Madrigal.
19. P J . Federico Villareal
20. P J , Incahuasi.
21 - P J . La Libertad (5 sectores)
22. P J . La Merced.
23. P J . La Soledad
24. P J . Manco Inca.
25. P J , Manco Inca-IIuaral
26. P J . M. Sr. Milagros II etapa.
27. P J . Mariano Melgar
28. P J . Milagro de Jesús.
29. P J . Nueva Esperanza
30. P J , Nuevo Carmen Alto.
31. P J . Pasamayo-Señor de los Milagros
32. P J . Primavera.
33. P J . Pasaje Nueva Esperanza
34. P J . Rosa de América.
35. P J, San Gabriel
36. P J . San José.
37. P J . San Ramón
38. P J . Sania Cruz.
39. P J . Sania Rosa o Pedro Beltrán
40. P J . Señor de los Milagros,
41. P J . Soledad Alta
42. P J . Tupac Aínaru II
43. P J . Uchumayo ,
44. P J . Villa Violeta.
45. P J . Vísta Alegre
46. P J. Vista Alegre.

URBANIZACIONES

1. Urb. Carabaylto
2. Urb. Chacra Cerro
3. Urb. El Parral
4. Urb. El Álamo
259
5, Urb. El Pinar
r>. Urb. El Retablo
7. Urb.-Retablo 2o etapa
8. Urb, Retablo 3o etapa
9. Urb. Pro Zona Industrial 6o sector
1.0. Urb. Pro 3o etapa 9“ sector
1 i . Urb, Las ítastas
12. Urb. Los Chasquis
13. Urb. Huaquillay
14. Urb. Viñedos de Caratbayllo
15. Urb. Repartición
16. Urb. Villa Mi Perú
17. Urb. San Eulogio
Í8. Urb. San Felipe
19. Urb, Santa Isabel
20. Urb. Tungasuca.
'21. Urb. San Agustín
22. Urb, Sarita Luanda

URBANIZÁC IONES POPULARES

1. iMs, Alameda de Carabayíío


2. Urb. Infamias
3. Urb, La Paseana
4. Urb. Las Vegas
5. Urb, Los Viñedos
ó. Urb, Pro Industrial
7. Urb, San Carlos
8. Urb. San Juan Bautista.
9. Urb. Santa feoÜna
10. Urb. Santa Luisa
11. Urb. Santa Rosa de! Norte
12. Urb. Sol tfel Pinar
13. Urb. Villa CoIIique
14. Urb. Villa Hiper
15. Urb. Casanave ::
260
ASOCIACIONES D E VIVIENDAS

1. Asoc. Francisco Bolognesi


2. Asoc. José C. Mariátegui
3. Asoc. José efe San Martín
4. Asoc, Mi Perú
5. Asoc. San Miguel
tí. Asoc. Virgen del Rosario
7. Asoc. Alborada,
8. Asoc. Venecia
9. Asoc. San Carlos
10. Asee. San Juan bautista
1.1. Asoe. Pro Viv. Trab- Unidos de Vitarte
12. Asoc. Mi Casa.

COOPERATIVAS D E VIVIENDAS

1. Coop. Año Nuevo


2. Coop, El Parral
3. Coop. Juan Vdasco
4. Coop, La Calichera
5. Coojo. Nuestra Señora de! Carmen
¡5. Coop. Pablo Sexto
7. Coop. Primavera
8. Coop. San Pedio
9. Coop. San Pedro de Cajas
10. Coop, Sangarara
11. Coop, 'Vtpol
12. Coop. Zancudo

261
ARCHIVO
SEM,NA m o oe h isto r ia
w m m "■..umtftM-

f u e n t e s d o c im e n i a l e s
ARCHIVO G ENER AL D E L A NACIÓN (AGN)

Serie: Protocolos Notariales

Escribano Año Námes


Ayllen Salazar, Ignacio 1807 9
Áyllon Salazar, Ignacio 1820 34
Ayllon, Ygnacio 1828 47
Cárdenas, José de 178S 175
Cabillas, Juan de 1842-45 185
Cueto, Alejandro de 1787 204
Espino Al varado. Pedro de 1737 295
Espino Alvarado, Pedro de 1738 '296
Estado Melendez, Miguel 1717 406
Estado Melendez. Miguel 1714-1.6 405
Estado Melendez, Francisco .1749 380
Estacio Melendez, Francisco 1750 ■ ■ 385
García, Nicolás 1.672 715
González de Mendoza, Greg. 1753 507
Gutiérrez, Domingo 1759-62 517
Hermosa, Femando J. de la 1777 527
Lama, Lucas de 1847 328
Lama, Lucas de 1862 343
Luque, Francisco 1763 604
Dique, Francisco 1765 608
Luque, Francisco 1780 642
Dique, Francisco 1766 610
Luque, Francisco 1778 638
Nuñez deí Prado, Baltasar 1840 459
iNfuñez del Prado, Baltasar 1851 467
Orellana, Felipe de 1860 492
Orellana, Felipe de 1859 491
Pacheco, Julián 1805 561
Tabacuda, Francisco de 1693-95 845
T abaoda, Francisco de. 17004)1 986

264
Torrea Presado,, Valentín, de 1789 1081
Odias, Manuel de 1776-99 IOS?
Oriza, Manuel de 1864 , 986
Unza, Manuel de 1862 982
Uzeda, Marcos de 1747 1150

Serie; Real Audiencia (Causas Criminales)

Cegajo Cuaderno Ano


104 ■1263:’ 1805
.23 . 264 1761
48 549 1781

Serie: Juagado De Aguas

Cuaderno M o -..
3. 3. 5.18 1748
3. 3, 3.12 1682
3. 3. 6. 8 1764
3 ,3 .6 ,1 0 1764-82
3 .3 .8 .1 1 1779
3.3. 8. 12 1779
3. 3. 8. 29 1780 (incompleto)
3 .3 .9 ,4 6 1784
3. 3.10. 30 1786
3. 3.10. 48 1786
3. 3. 10. 60 1787
3. 3 .1 0 . 61 1787
3. 3. 10. 72 1787
3 ,3 .1 3 .4 1 1793
3 .3 .1 4 .1 6 1795
3 ,3 .1 5 .2 1 1797

265
Serie: Títulos de Propiedad

Leg. Cuaderno Arto


8 190 (facomp.) 1675
15 321 1663
16 333 1598
17 346 1546
18 368 1689
33 634 1598

Serie: Tribuna! de La Inquisición (Confeiicioso)

Legajo Cuaderno Ano


11 2 1717-1716

Serie: Hacienda Pública (OL)

805-621

166
ARCHIVO DE REGISTRO PÚB LICO D E BIENES
INMUEBLES DE LIM A (AK PBIL)

TOMOS
21 190
356 502
541 1176
1207 1208

ARCHIVO G E N ER A L DEL CONGRESO (AGC)

Sección : A rchivo d el Sonado

E xp. N" PoL


12.024 ' 26

267
263;,
SSMlNABíO ;OE HISTORIA
RURAL ANOiNA A ÚNMSM.

BIBUÓGRAJStA-
ACOSTA, Antonio
19S2 "Los Clérigos Doctrineros y la Nueva
Economía Colonial (Lima 1600-1630)".
En: AUparar-Ms, Vol. XVI, N5 19. Cusco,

AD A N A Q U É V ELA SQ U ÉZ, Raúl


1997 "Caciques coloniales de San Pedro de
Carabayllo, La reducción, sus púdolos y
el origen del nombre Comas". Eira:
¡Revista Nueva Síntesis, año IV, N° 4.
Lima.

A G U U tR E , C arlos y C harles W A L K E R
1990 Bandoleros, Abigeos y Montoneros.
Criminalidad y -violencia en el Per$¡.,
siglos XVIEI-XX, instituto de Apoyo
Agrario, Pasado y Presente, Lima. -

AG ÜRTO CALVO , Santiago , , ..


1984' Lima Prehispánica. Municipalidad de
Lima Metropolitana. Lima.

ALBORNOZ, Cristóbal
1967 La Instrucción para Descubrir las Guacas
del Piró y sus Camayos y Haciendas
(finéis- del siglo XV3), ver Duviols,
Jounis! de la Societé des Americanista.

ANT1ÍNEZ DE MAYOLO, Santiago


1981 La Nutrición en e! Antiguo Perú. Banco
Central de Reserva del Perú, Lima.

ARMAS MEDINA, Remando-


1953 Cristianización del Perú (1532-1600).
'.Escuela de Estudios ISspanoamericanoSi
Sevilla,

270
AKRIÁGAj Fray Pablo José
1968 [1621] Extirpación de¡ ia Idolatría del Perú
Biblioteca de Autores Españoles,
Ediciones Atlas, Madrid.

ARROYO, Eduardo
. 1994 Ei Centro de Lima, uso social del
espacio. Ed, Frebert Lima.

ÁSSADOtIRÍAN, Carlos Sempat


1982 El Sistema de la Economía Colonial.
Mercado Interno, Regiones y Espacio
Económico. IBP., Lima.

¿WÍLA, Francisco de
1966 [1598] Dioses y Hombres de Huarochirí
(Traducción de José María. Alamedas).
IEP,, Lima.

BAZÁN; Carlos
. 1972 Factores Determinantes del Crecimiento
de la Población. Publicado en Informe
Demográfico del Perú. Centros de
Estudios de Población Urbana. Lima.

BELAUMÜE GUINASSÍ, Manuel


1943 1 ^ Encomienda en elPerú.'Ed. Mercurio
Peruano. Lima.

BENNETT, WeadeU C.
1953 Costa y Sierra en el Antiguo Perú.
IMMBM, Fsm de Letras, Lima,

BERTONJO,: Ltedovino
195Ó[1Ó12J Vocabulario de k Lengua Ayunara. Ed.
faesimilar. La Paz.

27ibv
3SLOCH, Mase
1973$ Historia. Rural Francesa, Ed. Crítica
Historia, Ed. Grijalbo. Barcelona.

BONA VIA, Boceto


1966 ‘"'Sitios Arqueológicos del Pero", En;
Arqueológicas N° 9, Lima.

1972 Factores Ecológicos que han intervenido


en la íransfontiación urbana a través de
los últimos siglos de la época
procoíombsna, Actas y Memorias Vol.
2, XXXIX Congreso Internacional de
./Americanistas, Lima.

1979 "Consideraciones sobre eí Complejo


Chiveteros". En: Arqueología Peruana.
Centro de Proyección Cristiana,. Lima.

1991 Peni, Hombre e Historia. Fundación del


Banco Continental para el Fomento de
la Educación y la Cultura, Ed.
Edubanco. VoU., Lima.

BONILLA, Heraclío
1975 "La Expansión Comercial Británica en d
Perú.” En: Separata de Desarrollo
Económico, N 5 57, VoL 15. Buenos
Aires.

BONILLA, Heraciio y K aren SPALGING


1971- La Independencia en el Perú, las palabras
y los hechos en la independencia en el
Perú. Pera Problema 7, IBP., Lima.
V'V-'v-"- r-:..y.v-i v, V '

272
BORGES, Pedro
1969 Métodos Misionales de la Cristiaiámnón
de América, siglo XVL Consejo
Superior de investigaciones Científicas.
Madrid. ;

BOW3E.R Federick P.
1977 El Esclavo Africano en el Perú Colonial,
1524-1650, Siglo XXI, México.

íBÍRADING, David A*.


1973 Haciendas, Latifundios y Plantaciones
en América Latina. Eti Siglo .XXI,
México.

BRAVO DE LAGUNAS, Pedro Josepíta


m i Voto Consultivo. Lima,

BROMLEY, Jm m
1935 fundación de Ja Ciudad de los Beyes-:.
Lima: s.jp.di. ■ :

BROMLEY, Ju an y José ÍU K B A 6ELA TA


1945 Evolución Urbana dft la Ciudad de lima,
Consejo- Provincial de-1Ama, Urna.

f l l BUENO, Cosme
m § í iv 1764 - "Descripción de las provincias
pertenecientes ai Arzobispado de Lima".
En: ODPIÜZQLA, Manuel de, ed,
Documentos Literarios del Perú, Imp,
del Estado. T wto EL; pp. 11-3 ói' Lima.

1951 Geografía, d d Perú Vttrdnal, siglo XV3XL


Public, por Carlos Daniel Valcárcei,
lim a.

275 .
BURGA, Matufói
1976 De la. Encomienda a la Hacienda,
Capitalista. IEP., Lima.

1978 MU Hacienda en el Peni, 1850-1930".


En: Tierra y Sociedad, Año I, N T ,
'Lima.

CARIÑENAS AYAIPOMA, Mario


1989 l a Población Aborigen deLvélle dé
lim a en ei siglo XVI. CÜNCYTEC.
Lima.

CAKDICH, Augusto, y Lufa HURTADO D E MENDOZA


1978-80 ""Notas sobre uná visita al Cerro
Chivateros". En: Revista del Museo
N adona!, Tomo XLTV, pp. 13-22.
lin.-:

GARBOSO, Ciro y H éctor PÉ R E Z BRIG NO LI


1979 Historia Económica de Antéricá Latina..
Ed. Crítica. Barcelona,~2 Ts. v

CARRIÓN CACHOT, Rebeca


1948-55 "La Cultura. Chavifo, Dos nuevas
colonias: Kuntur Wasi y Ancón". Eo;
Revisto del M a s » Narikaial d©
. ^jrqneologiayAjííropologís, Vol. H,
TSP 1, pp. 99-172.

CASTRO POZO, HUdébrando


1983 - Historia Antigua del distrito de
. Carabayllo. f AEEA-MumeipaHdad
■: - ' de Carabayllo. Lima.

276
CEPDÁJNY PONTERO,. -Ambrosio
1965 [1793] "Tratado Sobre Jas Aguas de los Valles
de lima".. En: M ercurio Peruano
(edXacsm.). Biblioteca 'Nacional del
Peni. Tomo VH, pp.175-307. Lima.

CÉSPEDES DEL CASTILLO, Guilleraio


1958 'TteorgdnÍ2nd.ón de la Hacietuk Virreinal
Peruana en el s igl o XVÍÍF. En: Atinarlo
de Historia del Derecho Español.
Tomo XXM. Madrid.

CIEZA DE LEÓN, P ed ro
1941 [1553] La. Crónica del Perú. Espasa, Oalpe,,
Madrid.

1943 [1550] Del Señorío de los Incas. E d Argentinas


Solar, Buenos Airea..

CXSNERÜS, Carlos
s/f . Atías; del Pera. Ed. Librería e Impmáa
Gil, sX Lima.

COBO, Bernabé
1964 [1639] Historia de la Fundación de Lima. Atlas
Ediciones, Io Ed. Colección Biblioteca
de Autores Españoles, Tomos 91 y 92,
Madrid.

COHEN, Maris W¿
1981 "La Agricultura y la Presión
Demográfica: Un Paradigma
Arqueológico en la Costa, del P an". En:
L e c to a s de Emilio Chuy, W 2.
SHRA-UNMSM. Trac!. Jaime Miaste.

277
CONTRERAS, Juan de
1688 "Relación del terremoto de Lima de
1687”. En: Diario de las ñ utidas de
Lima. Lima.

COOK, David N., cd.


1975 Tasa de la Visita General de Francisco
de Toledo. 'ÜMMSM, Lima,

,,1 9 ¿ 8 ;I,.,.,0 Padrón de los Indios de Lima: 1613,


Seminario de Historia Rural Andina,
UNMSM, Lima.

CORDOBAy URRUTIA, José M aría


1992 [1839] Estadística Histórica,' Geográfica
Industrial y Comercial de los Pueblos
que Componen las Provincias del
Departamento de Lima.. Irnp. de
Instrucción Primaria. lim a. Ed.
facsimílar en conmemoración, del 80
aniversario de ía Fundación de la,
Sociedad "Entre Nons".

CGTLER, Julio
1958 Las Comunidades de San lorenzo de
Quinti. Las actuales comunidades de
indígenas de Huarochirí en 1955.
Instituto de Etnología, Facultad de
Letras, UMMSM, Lima.

CUSHNER, Metiólas P.
; H98Q . Lords of The Lend: sugarwine and Jesuít
state of costal Perú, 1600-1777. State
Univemty, New York Press, Albany.

278:,'
CHAHN.EY, Paul
.19?,6 ■'Te:7taBietitc« de indios nobles en el
valle de Lin» 3. CarabayUi» (siglo .XV1)H.
En; Enviste del Archivo General de la
Nación, NP 9, 2o época, pp. 93-11? y
Í55-.16S.

CHEVALIER* Franco ■te


1950 Jasfcrocción a ios Hermanos Je.suit.as del
Perú. Méjico.

CH0Y,'EíníUo
1955-56 "Problemática de los Orígenes del
Hombre y Ja Cultura en América”. En;
Revista dei Museo Nacional de
'•k'qaeologs.a y Antropología, V ol H,
pp, 50-! 40. lim a.

1979 ;rLa Rsvoliuítód Neolítica y Jos


O n s o r u b CíviiizüCí.ón Peruana.
Ivas sociedades pre-ciasistas. La
división de dase?: y te. aparición del
Estador . En; Antropología e Historia.
UNMSM, Lima

DANCUÁRT, Em ilio;f RODRÍGUEZ, J,M .


1902-26 Anales de la 'Hacienda"Pública del Peni
(1321 -1839). XXIV Ts, imprenta de La
Resvista. Lima.

iDELGAR, M artín
1930 [1.300} Libro de Medicina y Cirugía para uso
de pobres. Con su resétario al final,
SHRA-'ÜNMSM. Lima. Transe, por
.R.osa Boccolíni.
D EL HÍO RARBQZA, Alejandro
1987 Mrmbamba (Una Hacienda. Jesuíta del
siglo XYTff - Huamanga). Seminario de
Historia Rural Andina, UNMSM, Liraa.

DELR&N, Guido
• 1978 Historia Rural del Perú. Centro
Bartolomé cíe las Casas, Cusco.

D1LLEHAY. Tora D.
1976 Competítion and oopsraúon in a
Práhtspanic Multi-Ethnic System in
tiie Central Andes. Ph.D. Dissertation,
Department of Aitórapolaay, Utuvetsiliy,
Vol. 37, N''4Ppp. 467-77,'’

1987 "Estrategias políticas y económicas de


las simas locales del valle del Chilló»
durante el período prehispánico1'. En:
'Revista Aurtins, año 5 ,3M° 2. diciembre,
p-p. 407, Cusco.

DHL TÉCNICA de DSMOGRAB ÍA y ESTUD. SOCIALES del


IN EI
1995 Migraciones internas en el Perú. Lima.

DOLLFUS, O liw x
’i 991a El espacio geográfico, Barcelona,

1991b Territorios Andinos. Reto y Memoria. Ed.


BPEA, IBP. Lima.

DOM ÍNGUEZ EADRA, Nicanor


1988 "Aguas-- y Legislación en los valles de
.Lima..-El ^partim iento de 16I7\JBn:
Boletín del Instituto Kiva Agüero, U4,
15, pp. 119-L54. lim a.
D'URÁW M., Ma. Antonia
: 1978 Fundación cíe ciudades en el Peni
durante el siglo XW. Estudio
urbanístico. .Escuda de Estudios
'Hispa no ame rrcano r.f S evil 1a.

DUR.4ND, José
1958 La. -Traasiomiación Social del
Conquistador. Lima.

DTJVERGER» Christian
1993,11987] La C orrosión de los Indios de -.Nueva
España, con el texto de los coloquios de
ios doce ele Bemardmo de Sahagún
(1564). Fondo de Cultura .Económica,
lim a.

ECHEAMDÍAV.» Atan
1981 Tecnología y cambios en la comunidad
de San Pedro * ( Esta.. SHRAO&tM&Ir
Lima.

EN G EL, .Kederic
,1 9 6 1 '"El Piacerámico sin algodón en la costa
del P«ú". En: XXXV Congreso
Internacional de Americanistas, Actas
Y M emorias, N° 3, pp» 341-152,

7; :: : 1965 7 "La gran antigüedad de las culturas


peruanas", En: Cultura y Pueblo, Pufo,
de la Casa de la Cultura de! Perú, N*
VE y V3E (julio-diciembre). Lima.;

: 1966 ’Le Cbmplexe Pieceramique d‘ El Paraíso


(Perou)". En: Journal de la Sodete des
Americanistas, LV: pp.43-96.

, 281
ESCOBAR, Rómuto
s.£ Enciclopedia Apícola y de conocimientos
afines. .Escuela Particular de Agricultura,
3 Ts. México,

ESCOBEDQ, Jorge de
17S5 Nuevo Reglamento de Policía. Agregado
a la instrucción de Alcaldes de Barrios.

ESPINOZA SORIANO, W aldemar


1963 "La Guaranga y la reducción de
Huancayo”. En: Revista del Museo
Nacional, Tomo XXXII, Lima.

1971 "Agua y riego en tres’-, ayllus de


Huarochirí. Siglos XV y XVF. En:
Revisita de! Museo N&donal, Tomo
XXXVS, pp. 147466. Lima.

19S0 !rLa Visita de Lima en 1557. Las


fcfcltticcioaes'* En: Cuadernos deí
Seminarlo de Historia, festituto
.Agüero, N° 12. pp.53-68. Lima,

1997 Virreinato Peruano. Vida Cotidiana,
...............
instituciones y Cultura. Ed. Biblioteca
Nacional del Perú, Biblioteca Básica
Peruana, T .13. Lima.
.

FEB3RES VILLAROEL, O scar .


1964 ’L a criáis agrícola del Perú en el último
tercio dei siglo XVX1T.. En: Revista
Histórica, Tomo XXVM. Lima.
.
FE IJÓ O de SOSA, M igad
■1984- [1763] Relación Descriptiva de la Ciudad y
Provincia ds Trujilfo del Perú. Ed.
íacrdtnilar, Banco Industrial del Perú,
Líma.

FIGUERQA, Adolfo
1977 "La- Ecíjnomía Rural de b Sierra
Peruana/'En: E’eouímm, Vol. L, N 3 1.
Lima.

FLORES GALINDO, Alberto


198-4 Alistocracia y Plebe: Lima, 1760-1830.
Ed. Mosca Azul, Lima.

FRÍAS, Carlos# Roeffim HAAKt Miguel RAMOS; Srasana


VILLAKÁN
1982 Elementos para comprender la
formación y la realidad actual de los
Pueblos Jóvenes de Urna. C1DAP.
(enero) Lima.

FUENTES, M anuel Atona sio


1859 Relación del Gobierno del Virrey José
Á. Manso de Velasco Conde De
Superando. Del 9 de Julio de 1745
Lata im del mes de julio de 1750.
Lima.

FONG PINEDA, Rosa, Carlos CENZAINO, .Amaro ZAVALETA


1972 "El Taller Utico de Cliávateros, val fe del
ChillótC. Pin: Revista del Museo
Nocional, Tomo XXXVIII, pp. 61-72,
Lima.

283 •
GÁI/VEZj Pedro
1871 Proyecto de inmigraciáx al Perú. Imprenta
del Estado, calle de La Rife N5 24.
Lima,

GLAYE, Miguel y REMY, M aría Isabel


1983 Estructura agraria y vida rural" en una
región andina: OilantaytMnbo entre el
siglo XVI-3QX, E d Bartolomé de las
Casas. Cusco.

GOLDWERT, M ard n
1955-56 "La hsclm por fe perpetuidad , de las
encomiendas en el Perú virreinal (1560-
1600), Primera Parte”. En:. Revisto
Histórica. Litm, •/

195 7-58 "La lucha, por fe perpetuidad:de fes


ejscomieiwfes en el Perú virreinal (1560-,
1600). Conclusiones". En: I&visto
H istórica. Lima, T;"'-

GÜLTE, JfhrgG
1980 La 'Racionalidad de fe organización
Andina, IEP,, Lima.

GONZÁLEZ CARJSAJ.á,L,'Gabstldsi!:L.
1994 Estudio Etnográfico sobre , Libia
Prehispánica. Tesis para optar él grado
de Licenciada, en Antropología.
ÜblMSM,Líma.

•GONZÁLEZ H O U X JI?^; D i e g o : /
; 1952 [ióbS] Vocabulario de la lengua general de
todo el Perú... Instituto de Historia,
ÍJNMSM, Lima.

284
GOOTBNB1KG, Paul
1989 "Niveles de precios en Lima, del siglo
.XIX: Algunos datos e interpretaciones".
En: Economía, Vdi, ¿ 3 , N° 24
(diciembre). Iima.Yolkerungs Perú
(1741 -18.21) . Berlín. Tirad por .Elvira de
Bees,

GXJPfTEÉ, Vollmer1
1967 BeyoSierungs Politik Und. Bevolkemngs
■Perú (1741-1821). Berlín. Trad. por
Elvira de Beas.

G-UNT H ER D O ER M G , Juan
1983- Pianos de Lima» 1613-1983.
Municipalidad de Lima y Petróleo del
Perú. Lima.

1968 "Algunas consideraciones acerca de la


producción y disto* bueión de la coca en
el Estado Inca1'. Actas del Congreso
Internacional de Americanistas,, 2 Ts,
Stuttgart.

í f f l i P E M., Teodoro
■1980 'Relación, de los encomenderos y
repartimientos del Perú en 1561". En:
Historia y Cultura, N° 12, pp.75-117,
Lima.

HERRERA,' .Alonso de
1777 Agricultura general que trata de la
labranza del campo y sus
particularidades, crianza de animales,
propiedades de plantos y virtudes
provechozas a la salud humana... y

285:::
demás autores que hasta ahora han
escrito de esta materia..,. Ed. por la
impremía de Don Antonio de Sandio.
Madrid.

HORKHEIMER, Hans -
1955 Identificación y bibliografía de
■injertantes sitios prehispánicos del
Perú, Apípeotógáeas N" 8, 'Museo
Nacional de Antropología y
Arqueología. Lima.

INOMÜMCIPAL1DAD BE LIMA METROPOLITANA


1985 Aventario de Monumento® Arcpéológicos
del Perú. Compilado y elaborado por
Rogger Ravines. Dirección de
Investigación del Museo do la Nación»
Lima.

KAPSOLI, W 8fred© y W s o n REÁTEGUI


1970 El campesinado peruano (1919-1930).
Seminario de Historia Rural Andina,
UNívíSM, Lima.

1975 Sublevaciones de, esclavos en -el Perú,


siglo XVIH. 'Universidad Ricardo Palma,
Lima, '

KEÍTH, Robevth G.
1976 Conquest and Agradan Chaage: The
Emergence or the‘ Hacienda System oji
íhe Pemvian Coast. Cambridge (M&ss,):
ptarvafd University Press.

:: 1976 "Origen del Sistema de. Hacienda. El


' valle de.Chaiicay". En: Perú Probirana,
N 8 3, IBP... s.f. Lima,

2S6
KEITH, Robes-1, F. FUflSNZALIDA, J. MATOS, J. COTLER G.
ALBERTI
1970 El campesinado en el Petó. IEP.„ Lima.

KBNDALL, Aiut
1976 ”Descripcióm e inventario ele las formas
arquitectónicas Inca. Patrones ele
distribución e afluencias cronológicas11.
En: Revista del Museo Nacional, tomo
XLIÍ, Lima.

KXAREN, F eter F.
1976 La fbimación de las haciendas azucareras
y los ordenes del AFRA, 3EP,, Lima.

KOSOK, Paul
; 1965 Life, Land and Water in Aneient Perú.
New York: Long Jsiand Uhiversity
Press.

KQNR4D-, H erm a» W.
1989 Ursa Hacienda de tos Jesuitas en el
México colonia!, Santa. Lucía, 1576-
1767, Fondo de Cultura Económica,
México.

KUBL E R "Géór ge ■
1952 The Lidian Caste of Perú, 1795-1940.
''Washington:

KOLA, TOtoW '


1974 Teoría Económica de! Sistema Feudal.
E d siglo XXI, Argentina.

LANNÍNG, Edw ard P,


1967 ' V - " ■ Perú before fiie Incas. Prendías Hall, Pie.,
Englewood Cliff;:, New Jersey,
287
LASO GARCIA, Carlos
1992 Economía Colonial y Régimen Monetaria
Peni siglos; XVI-XDí. Banco Central de
Reserva da i Perú. 3 vols., lim a.

1993 La Fielatura: fábrica colonial de


confección de monedas de cordoncillo.
Bd. BCRP. Serie P feu ites(ia i} Vol IV.
Lima..

1998 Peni Colonial: Dinero, precios,,


producción y fiscaüdad en un contexto
de economía liberal (1760-1799), Éd.
restringida en Word Perfeet Lima,

LAZO, Carlos y. ORTEGAL, Ales ,. :


1997 ,fLa Banca y eí Crédito en al Feudalismo
Fmumo Colonial, siglo XVII-XIX
•(160O-1821}". En: Fénix Revista del
.Archivo General de la Nación, N° 16.
Lima,

LEÓN P IN S I jO j Antoiiio de
..,,.1630, Tratado de Confirmaciones Reales de
Encomiendas, Oficios1: Casos en que se
requieren para las Lidias Occidentales,
fap~enta.de Juan de Gonzaíes. Madrid

LEÓN PORTOCARKEROj P edro de


1958 [1605/15} ’ Descripción ck¡l Virreinato del Perú.
Crónica de comienzos,;dd.-rigió.
- Universidad Nacional del Litoral, 1° EÜ.,
Rosario.

LEONARD, Irribog
1953>: . Los libros del conquistador. México;

2S8
LEQUANDA, Josef Ignacio
1965 ¡1793] "Descripción Geográfica de'' la Ciucbd
de TrujiUo", lia: M ercurio Peruano.
T.VIIÍ (mayo-agosto). Ed. faesimilar,
biblioteca Na Aomt cSet Perú.

LEUBEL, Alfredo
1361 ES Perú en 1860 o su Anuaria Nacíaos!.
Imprenta. de "El Comercio". Lima.

LEVILLXER, Robert, ed.


1925 Gobematítes del Perú, cartas y papeles,
siglo XVL Madrid.

IJE A /Jo rg e
1944'- Diccionario Khewcbuwa-Español. Ed.
línivarsidad. Nacíomi de Tucumán.
Árgenrim,

LISSÓN Y CHÁVKZ» Endito


1944 La iglesia de España en el Peni.
Colección de documentos para la
Historia de la Iglesia en el Perú,
Sevilla.

U Z k K R A G A , V r. fteginaldo'de
1968 ¡1590] Descripción Breve de toda ía Tierra del
Ferd, Tucumm Rió cié la Plata. Atlas
ediciones. Colección Biblioteca de
Autores Españoles, Tomo 256,
España.

■Lm arl/B LO PTO ET/D EG K EG G RI


1987' Conquistadores del Nuevo Mundo.
IEP. Lima,

289
LOCKHART, James
1985 El Mundo Hígjanopemano, 1532-156(1
Fondo de Cultura Económica, México.

1986 Los de Cajatnarca. Un estudio social


y biográfico de Sos primeros
conquistadores. Lima.

1X3HMANNYILLENA,G u10w b »
1957 El Conregidor de Indios en é Perú bajo
ios Austrias. Madrid.

1966 "La restitución por los conquistadores


1 y encomenderos: TJn aspecto de la
.incidencia lascasiana en el Perú". En:
.Amano de Estadios .Americanos, T.
XXUL Sevilla.

1985 Estudio preliminar a: 'Noticia General


dd Perú, por Francisco López de
Calvantes". Madrid: Eds, Atlas,
(separata).

LOPEZ D I VELÁSCO, Juan


1 8 9 4 |I571 ] Geografía y Descripción Universal de
las Indias. Madrid.

LOREDOj Rafael
1958 Los Repartos- Lima,

LUD1ÑA RESTAURE, Hugo


1970 "San Humberto un sitio Formativo en
el valle de Chillón". En:-Arqueología
: y . Sociedad, ÑUS, Museo ¡fe
Arqueología y Etnología, UNMSM.
Lima.
1973 Srrestigaciones Arqueológicas en el sitio
de Hn&coy: Valle de Chillón, tesis para
optar el grado de bachiller, Universidad
Nacional Mayor de San Marcos, Lima,

1975 Secuencia cromlógiea y cul&iral dei valle


del Chillón. Tesis para optar el grado de
Doctor en 3a . especialidad de
Arqueología, UNMSM. Lima.

MIMBRERAS, Luis
1974 Orígenes de la civilización en el Peni.
Editorial Milla Batres, 2o Ed., Lima,

1980 E! imperio Wari. Historia del Peni. Ed,


Juan Mejía Baca, Tomo H. Lima.

1990 Visión arqueológica del Pecó Milenario.


Editorial Milla Baíres S.A., ITEd,, Lima,

LYNCH, Alberto M artín


1952 "Breves notas sobre el cultivo de la
coca1'. En: Revista .ágroncanía, Año
XVJí, octubre-diciembre, Escuela
Nacional de Agricultura. Lina.

MACERA D ALI,’ORSO, PaMfo


1966 - "Feudalismo C otón! Americano: El caso
de las haciendas peruanas". En: Acta
Histórica, jSP 35 (Szeged Hungría) pp. 3-
43.

1968 Mapas coloniales de haciendas


cuzqueñas. Seminario de Historia Rural
Andina, UNMSM. Lima.

291
1971 Instrucciones para e! manejo de las
haciendas jesuítas del Peni (siglos XVI-
XVIII}. Lima.

1976 Población Rural en. Haciendas 1876.


SHRA-HNMSM. Urna.

1977 Trabajos de Historia. I.N.C., Talleres de


Industria Gráfica S.A. 4 vols. Lima.

1978 Visión histórica del Perú. Ed. Milla


Bafres, Lima.

1993 Los Precios de!. Perú, siglos XVI-XtX.


Puentes. DI Ts. Banco Central de
Reserva del Perú, Lima,

1998 Paiiamento y Sociedad en el Perú, Bases


documentales (siglo ,XK). III Ts. Ed.
Congreso de la República. Lu na.

MACERA, Pablo y Rosario JIM ÉN EZ


1975 Precios en Lima, 1667-1730. Centro
Peruano de la. Historia Económica,
Seminario de Historia Rural Andina,
TINMSM,Lima.

MÁLAGA MEBSN.A, Átejandró


1974: "Las reducciones en el Perú (1532-
1600)". En: Historia y Cuitara, N° 8,
pp. 141-172. Liaría.

1974.- La evatigeiización del Perú, siglo XVI.


Ed. y P’rod. por Gráfica. Nuevo Mundo..
Lima.

292
MANRIQUE, Nelsoa
1987 Mercado intemo y región. La Sierra
Central: 1820-1930. DESCO, Lima.

M ARILUZ S,, C : T. ARTEAGA F.f C. MONTENEGRO A,; G„


U M B E Y.
1974 La Asociación de Pobladores Chacra JRíos
Sur: El problema de la vivienda y el
Estado. Tesis para, obtener el grado de
Bachiller, UNMSM. Urna.

MARILUZ U RQ U IJO , José M aría


1952 Ensayos sobre los Juicios de Residencia
Indianos. Escuela ele Estweiios Hispano-
Americanos de Sevilla.

MARQUEZ. ABANTO, Felipe, comp. y « i.


1955-58 "Cédulas y Provisiones sobre
Repartimientos de Tierras1'. Bn: Revisto
del Archiva' N adonal del Perú, Tomo
XJX-XXÜ, entrega 1-3. Lima,

MART1NET, J.B.H.
1977 [1875J Carestía de Víveres en Lima. Centro
Peruano de Historia Económica.
UNMSM. Lima.

[18781 1977 La agricultura en ei Peni. Centro Peruano


de Historia Económica, Lima.

'MARTINEZ, Héctor
1963-64 'Evolución de la. propiedad territorial en
el Perú". Hn: Revista de Economía y
Ágjicwtoora, N° 2. pp. 98-108.

293
M ARTÍNEZ COMPAÑÓN, Baltasar
1936 Trojillo del Perú, a fines del siglo XVII.
Ed. Cultura Hispánica del Centro
Iberoamericano de Cooperación,. Ts,,
Madrid,

MATOS MAR, José


1977 Las Samadas de Lana (1957). JER.I/ima.

MATOS MAR, José; FAYRE, B erra y COLL1N, Glande


1967 La Hacienda en el Perú, IBP., lim a.

MEDINA, Felipe
1920 Relación del Lie, Felipe Medina,
Visitador Genera! de las Idolatrías- del
Arzobispado de lima, enviada, a!.
Bustrísiino y Reverendísimo Sr.
Arzobispo ifeila en que el da cuenta de
las que se lian descubierto en el Pueblo
de Huacho-1650.. A.Ci.I, N" 303, Lima-.
Audiencia,

MEDINA CRUCES, Araulfo


1989 COMAS:' un pueblo en lucha.... Rumi
Maqiú Editores S.1CL., Lism,

MELÉNDEZ, Fray Joan de :


1681 -1682 ■Tesoro Verdadero de indias. 4 te, Rama.

294
M RLLAFE, Rolando
! 965 Agricultura e Historia ' Coloakl
Hispanoatmriírsíia. Universidad de
Chile., Santiago de Chile.

I !y¡59 "Frontera A laria: el caso de'i virreinato


peruano en el siglo XVF. En: Tierras
Nuevas. El coiegío de Mésrieo. p p .il-
42. lim a. : ■

197 Breve historia- de la esclavitud negra en


América Latina. México,

MBNMRURU» M anuel de
1873-85 Diccionario Histérico-Biográfico del
Pero. Itnp. de 3. Francisco Solís. Ts.
Lima-.

M1SNZEL, Dorotfay
1968 L.fa Cultura Huari, Las grandes
civilizaciones del Antiguo Perú,
Compañía de Seguros y Reaseguros
Peruano-Su-izo S.A., Lima.

M lD D BM íO RF, E.W.
1973 PERU. Observaciones y estudios del país
y sus habitantes durante una
permanencia de 25 años. UNMSM,
Lima.

MIRANDA, José
.1965 La fundón económica del encomendero'
■en los orígenes del régimen colonial
. .(Nueva España, 1525-1531). 2° Ed,
México,

2-95
MQMÍL4LYE, Miguel
159® R edum dn Universal de todo el Perú y
demás M a s , con otros muchos autos
para, el bien de los naturales dellas, y en
aumento de las' Reales Rentas.
Microfilmed by The Libraiy oí: Congreso
Washington.

MQNSELEY, M feteel E.
1975 The Mari time Fcuadaísons of Ándean
Civiiization. Cummings Publisfaing
Company, Metilo Park, California.

MORALES D E AKAMBURU, José •


1770 ' : Cuaderno Duplicado en que se «fe'Noticia
del Verdadero Ventajoso Estado Político
del Perú bajo la Gobernación del
Escfíleritiairno Sr. D. Manuel de Amat.
Madrid,

MORALES, Dante]
•1984 Contendió Histórico del Perú. Ed. Milla
Batres S,A. 4 Ts. Lima,

MORENO CEBRIÁN, -Alfredo


1977 El Corregidor de indios y la economía
•■•. peruana del siglo X V H L Madrid.

MDKNER, Magma
1975 "la Hacienda Hispanoamericana. Bcarnen
. ^ de las investigaciones y debates
recientes". En: Enrique Florescano:
Haciendas, latifundios y plantaciones en
América Latina, Siglo XXI. Mástico.

' 2%
MORRIS, Grate
1973 "Establecánieirtos estatales en el
Tawanfcisuyo. Una estrategia, de
urttamsroo obligado". En: ih v is h del
M ase» Nssdossl, Tomo XXXDC.
Lima.

MORRA, John V.
1972 Ei "Control Vertical" de un máKimó de
pisos ecológicos en k economía' de la
sociedades andinas. ÍEP-, Lima.

1978 La Organización Económica de! Estado


Inca. Ed. Siglo XXI. México.

' 1975 Formaciones Económicas y Políticas del


Mundo Andino. 3EP., Lima.

NIETO VELEZ, Armando ¡S.J.


1992 La Primera Evangslización ©n e! Perú.
Hechos y personajes, Ed. Asociación
Vida y Espiritualidad. lama,

OVIEDO, JBaim de
1862 Colección de leyes, decretos y ordenas
publicadas: en el Perú. Desde el año de
1821 hasta. 31 de diciembre de 1S59,
Editor Felipe Bailly, Librería Central
Porta! de Botoneros, ND196, Lima,

O IS GAPDEQUI, José Miaría


1946 Eí Estado Español en Indias. Fondo de
oCultura Económica. México.

1952 ^ España"en América: Las instituciones


coloniales, Bogotá.

297
'PAZ. SOLDÁN, Mariano Felipe
18? 7 Diccionario G e ográfico Estadísti c o deS
Perú. Lima,

1968 [1888] Historia deS Perú Independiente. IV Ts.


Lima.

P1ÑÁHEHMBRA DEL ÁGUILA, Carlos


1969 Geografía General de Perú. Síntesis. Ed.
Ansoma. Lima.

PÉREZ CANTÓ, M aría P ito


1985 Lima en el siglo XVJJj. Ed. Universidad
Autónoma de Madri.il e Sustituto de-
Cooperación Iberoamericana. Madrid.

FIN I RODOLE!, F rím eto»


■ 1972 "La población del Perú a lo largo de m
siglo: , . 1785*1884". En: Informe
Demográfico del Perú. Lima.

POLO y la BORDA, Jorge . -


1989. "iPacha.chaca, una hacienda- .feudal:
: Áutoabastedmiento y comercialización".
En: Hacienda, Comercio, flwalfdád.
... y.- Luchas Sodates (Pera Colonial).
:. ; w, Biblioteca Peruana de Historia»
Economía y Sociedad. lazo/Tord. lim a.

POLOWI, Jfacqne*
1987.-:., San Juan.deLurigancbo. Suhistoria y sú
gente. Centro de Estudios y
-. Publicaciones (CEP), Lima. -

298
FORRAS BAKJRENECHEA, Raúl
1933 "La rete irscíia as Lima", (2 ¿ (7 ¡$ $ )
en: Dominica! en. el Sesquícertéiiand ;
(7/5/S9). Suplemento especial'del &ano.
"El Comeríáo". Lima-

1965 [1935] Pequeña antología de Lima, instituto Raúl;


Porras Bsn-enechea, 2a Ed. Lima.

ERICE, Barbara J. .
1971 "Prehispanic irrigation argiculture in
nuclear America", Bti: Latín American
Research Review. N° 6, pp.3-60. Lima.

PUENTE BKUNK3E, José de Sa


1992 . Economía y Encomenderos en el Perú.
Estudio Social y Político de una
Institución Colonial. Sevilla.

PULGAR-VIDAL, Javier
1967 Análisis geográfico sobre las ocho
regiones naturales del Perú. DI Asamblea
■Regional de Geografía. Callao.

CWILTE'% JeSVey y STOCKER, Teray


1986 . . "Las Economías de Subsistencia y los
, . Orígenes de las Sociedades Andinas
Complejas.” Em Bolétín de Lima, >1°
46, afío 8, julio. Lima.

QUIROZ CHUECA, Francisco F. .


1990 Imágenes efe! Callao, CQNCYIEC. Lima.

1998 Artesanos y manufactureros en Lima


colonial. Tesis para oblar el grado de
* Magister eii historia; mención en historia
económica. UMMSM. Lima.

299
RAMtREZ,.BaIflja*ar
1901 [1597] Descripción del Reyno del Perú: del Sitio,
Temple, Provincias y Ciudades!:, de los
Naturales, de sus Lenguas y Trajes..
Barcelona.

■RAMÍREZ, Susan
19Stí Patriarcas provinciales. La tenencia de la
tierra, y la economía del poder en el Perú
colonial Alianza Editorial. Lima.

■RÁ&KJS PEREZ, Demetrio-


1967 Trigo chileno: Navieros del Callao y
hacendados- - limeños entre- la-'' crisis
. agrícola del siglo XVH y la comercial de
!a primera mitad del siglo XVTH, E d
Instituto Gonzalo» Fernández de Oviedo,
Madrid..

-RAV3NES,Rogger
1970 - 100' años de arqueología en el Perú. IBP,.,
Lima.

1978-80 : "Cotnplejos de Pirámides con Planta en


U, Patrón Arquitectónico de k Cosía
■ Centrar. En: Revista del Museo
Nacional, Tomo XUV, -pp. 95-110.
Lima.

RAVINÉS, Rogger y F. SOLAR-LA CRUZ


1980 "Hidráulica Agrícola Prehispánica'’, En:
. ■Allparirids-(Chaco). Vol. XÍV, No 13.
;- k y: LimaN-
RAVBM1S, Ktogger y W Ebam XSBELL
1975 "Garagay: Sitio Ceremonial Temprano en
el -valle de Lima". En: Revista del
Aftiseo Nacional, Tomo XLVI, pp.135-
200. Lima.

REÁ'FJEGUI REÁTEGUI, UJises ... ■


'■1983 ...Invasores?. T ed. Etl. Kemoy. Lima,

-REYES'FLORES* -Alejandro..
'■■■•■■ 19© Contradicciones en el 3?eró Colonial
. (Región Central 16504810). tTNMSM,
lin a

REYES TARAZONA» .-Roberto y Ernesto MAGU1ÑA


1973 El proceso de oibanisación y ais
' ' ejqsresiones en algunos centros urbanos
■ del país. Tesis para optar el .grado de
■ . Bachiller, UNMSM. Urna.

RIOERIQ, Gustavo
197d De invasores a invadidos. DESCO, Luna.

RODRÍGUEZ PASTOR» Humberto


1987 Agricultura costeña y trabajadores chinos,
1850-1900. Tesis presentada para optar
■■■4 - v e ■ el grado de Doctor, UNMSM. Lima.

RODRÍGUEZ!VÍCINT.E» M aría E. .
1968: "T as haciendas y hacendados de Lima
■; ■' ■ liada 1781”. En: Racista de Indias, N°
.: , 131-138, año XXHH-XXXS\^ (enero-
diciembre) 1973-1974, Madrid.

301
ROSPIGUOSIVJGI3U, Carlos J.
.1934 Inventario General de ' Bienes de la
Universidad Nacional Mayor de San
. Marcos, UNMSM, Lima,

ROSTW QROW SKI de DIEZ CANSECO, M aría .


1961 \ .... Curacas y sucesiones, Coste Norte.
Imprenta Minerva. Lima.

1967-68 ,rEteohistx>rfa de un valle corteño durante


el Tahuaitisuyo". En: Revista del
Museo N acional Tomo XXXV, pp, 7-
61, Lima,

1970 "Mercaderes del vallo de Chincha en la


época prehispánica: Un documento y
unos . comentarios". Et¡¡: Reviste
Blsjpróota de ÁJrtffojXílogiia AMericasua,
Vol, 5 pp. 135-178, Madrid.

1972 "Breve ensayo sobre e! Señorío, ele


,, Ychma o Ydwim". Eri: Boletín del
Seminario de Arqueología, W \ 13
(enero-diciembre) 1972, Pontificia
Universidad Católica, Lima..-, ■

1972 !Las/étnías del valle de Chillón". En:


Reviste del M useo Nacional, Tomo
XXXVffl, Urna,

1972 ‘El; sitió mpeológico de Con en el:valle


■ del Chillón: derrotero rtnohirtórico1'. En:
R eviste del Museo Nackmal, Tomo
XXXVUI, Lima.
.1973 "Plantaciones; de coca prehispámca en la
vertiente dei O céanoPacifico". En:
Jfevists del M useo Nacional, tomo
XXDC, lima.

1975 "Pescadores. artesanos y mercaderes


costeños en el Perú prehispáwco". En:
■Revista del .Mase» Nacional,. Tomo
XU, Lima,

1977 Etnia y Sociedad. Costa peruana, pre-


hispáníca, IEP. lima.

1978 Señoríos indígenas de Lima y Canta. IEP,


Lima.

1981 Recursos naturales reno'','ahí es y pesca.,


siglos XVI y XVH 3HP. Lima.

1989 Costa poníate prah&pjiriea, 3EP., 2° EdL


Lima.

SALINAS Y CÓRDOBA» Fray Buenaventura


1957 fl63'ij Memorial de las historias del Nuevo
. Mirado-Pirú. Universidad Nacional
- Mayor de San marcos, Lima.

SALOMÓN ZUGBI, Alejandro F.


1972 La invasión de las Pampas de ColHque y
la formación del Pueblo Joven "Arto
Nuevo" .después de la Ley 13517. Tesis
para oblar e! grado de Bachiller en
Antropología, UNMSM. Lima.

SÁNCHEZ ALBORNOZ, Nicolás


.1988 . "La m fe de Lima. Magnitud y
procedencia”. En; Histórica. VoOJL
No2, Pp.l 93-210. Lima.

34)3
SANTO TOMÁS, Domingo áe
1951a [1560] Gramática, o Alte de la Lengua General
de los Indios de los Rayaos del Perú.
Ed. Instituto de' Historia, TlNláSM.
Lima.

1951b [1560] ' Lexicón o Vocabulario de ía Lengua


General... Ed. Instituto de Historia,
UNMSM. Lima.

SHESBONDY, Jeamette
1969 "El regadío en el área andina central". Bu
Humarddades-PUC. N o3.pp.lS7-223.
■ Lima.^ ■'

SILVA SIFÜENTES, Jorge


1996 Prehi glorie Settiemenfc Pattems' in The
Chillón JRiver 'Valle}1, Penó. Tesis
Doctora i Dissertatioa Deparfesent of
Anthropology University of Michigan, 2
Vos.

SILVERBLATT, Irene
1982 'Dioses y Diablos: Idolatrías’ y
Evangelizarán", En: AlpancM s, Vol.
XVLÑ°’19. Cusco. •

SOLDI LE BIHAN, Luis '


1968' - ' La irrigación, en el Peni. MMsterio da
Fomentó y Obras Públicas, Dirección de
V'Irrigación, Lima!

SOLÓRZ.4NO Y PEREIE.A, Jússrt de


1948 - Política Indiana. Corregida y.aumentada
con notas por el lie . Francisco Rainiró
Váledsu'éla. Ed. Compañía
Iberoamericana de Publicaciones.;
Madrid,'
S Q ü IK t, G«orge E,
e1377, Peiú.focidísntesof Irav d ¡2iKÍÉ|5ÍoraS3¿¿|
■■'■ ín th eL an d o í íhe Incas,

STIGLÍCH» Germán
1S2..2 Diccionario Geográfico;- del;- Peróf
... JniprentaTorres Agiúte, Lima, i

f F Ü M E I V M is M . .
1954 ....... "líie Chillón Va!l«y ofPem: excavador!
and-reconnaissance--1952-l953-Patt l w.
En: Arehseology, Vol, 7. 1^.3, Aufcm,
Brattleboro Vermont

i 1958: :: "Contactos foráneos en la arquitectura de


. la- Costa Central". En: Revista del
Museo Nacional, Tomo XXVII, Lima.

T ^ T á LEAN ÁERIJHJ, Javier.


.I9SÍ3* Política econámco^tinsaacieia y formad ón
del Estado: siglo XIX. Ed. Centro de.
Estudios para el desarrollo y la
Participación. Lima. ,

TAftAZONÁS.-f Justina M.
1946 Demarcación Política, del Perú.
Recopilación de leyes y decretos (1821-
: 1946). Ed. Ministerio de Hacienda y
. Comercio-Dirección Nacional de
Estadística. Lima.

TORD M C O L lN Ií.,I@vIe¡r y
1977 "Algunos aspectos de la trata de negros
en el Peni. Afines del siglo XVHT, En:
. Revista Estadios,, 'N* %, U3NMSM,
; Lima.-:

305
TORD, Javier y LAZO G.,, Carlos;
^ 1980 Econoínía y Sociedad « i el Perú colonial.
Historia del Pexü, Tomo IV, Peni
colonial Ed. Mejia Baca, lia»..

TORRES m O C A , M. Rosado y G, OLH5EN ARRIETÁ-


1973 ; Estadios socio-económicos do los
pueblos jóvenes de la capital
metropolitana: Proyectó de M Plíta de
féaiizacíones inmediatas. Tesis para,
optar d grado de - Asistenta Social,,
• UlNEMBM, Lima.

TORRES SALDAMANDO, Eraiqiw


1888-,- Libró Primero ele Cabildos -'dé Lima.
Jrnpratiérie Paul Dupont 3 ts. París.

TRELLES ARESTEGÜI, Efraín


1991 Lucas Martines Vegazoí Fmicinñataiérí-o
de una encomienda peruana m«eiai. Ed.
PÜC. lim a.

TRIMBORN, H e m tta n
1968 El Delito en las Altas Culturas de.
América. OPlMSMtLima; :

■ ■ 1970 ""Las ruinas de Macas en el valle del


Chillón". En: Rsvisfca del Museo
Nacional, Tomo XXXVI. Lima.

ULLOA, Antonio d e y JO R G E ,Ju an


[1748] Relación < M v i a j e a la America
Meridional. Tomo BL, Madrid. ;

:AA-.C;i&33 P 82ój Nóticias Secrdas de América, Argentina..

7-306
URT EAGA» Horacio.
1927 "Las Ordeaanzas de Aguas dél Virrey
Toledo". En: Revista del Archivo
Nacional del Perá, Tomo 'V, entrega. H,
pp. 179484. Lima.

VAIXiiÁiRCELj'ííUÍs E.
1964 ffiMaia del P a í Antiguo. Ed. Juan Mejía
Baca,' Torno I. Lima.

VALLiADÓLID, 'Ivan Francisco ¡ÉfroriMarcador no definido.


1633 ""''-'El Sol del Nuevo Mundo., ideado y
compuesto en las esclarecidas
■■operaciones del biemvenUjiado'Toribso.
Arzobispo de Lima. Imprenta de Angel
Bernabé, Rotas.

VAN BATI!, SUttar B. H.


197S Historia Agraria de Europa Occidental
(5004 S50). Impreso en Poutuca. Ed.
Peninsular, 2° e d Barcelona.

VM<SáS;üíGARTE, «aben, S¿& y


1966 Historia. General delPení. Editor Carlos
MüIaBairas. Tomos 1 (Virreinato, 1551-
1596) y m (Virreinato, 1596-1689),
lima,

VáZQpEZ DE%^P3ÉOZÁ,' Airtónfc


1942 [Í629] : Cotripéridium and Description of The
West Iridies. Washington.

VEGAS de CÁCERES, Ileana


' 3996 - :.-'Bcmómía Bural y Estructura. Social mías
haciendas de Lima durante el siglo
XVM. Fondo Ed. de la Universidad
Católica3del Petó, Lima.
■307'
■•VKJIES» M. mena y J m ify KOYLE-C0X
1984 Diagnostico de la situación
socSGacotróraka de los-pueblos jóvenes
de Lima Metropolitana, Lima'

VILLAR COKDOBA,>etíro E.
1931 "La ahapiítectwa. prehistórica del
departammto de Lima". Éti:.Revísta
Histérica, pp, 256-276. Lima

1935a. La$; Calituretó Prelúspánicas del


■.departamento' <le Lima, Lima..

: 1935b Arqueología del departamento de lima:


caracteres ..fimdameütales de la
arquitectura costeña, Lima.

VILLARÁN» Fernando
. . .1991 ES empleo en el Perú. Crisis y .
.• , .perspectivas, A3DEC-ATC.' tima.-

VILLABÁN, Mamid Vfeenté


1964 Apuntes sobre la reaUdadfsocial-'de- los-- .
indígenas del Peni ante las Leyes de
Indias. Lima. ■ •

VILLACQRTÁ SÁNTÁMATO, Luis.


1988 'Iglesias rurales en Lima". En:
..ILÚA^CA*;-:'..CPSstaRá,-;:;- .UAscoisn»^
: ;Arquitectar¡%C^
i;...ópp,5^64'. Liina.

WILLIAMS m Ú N > garlos ;


:19SQ "Arquitectura.y urbanismo errdAnti&uo .
¿ í m l ;';®: H i s t o r i a d e i -■■■■
'M|;ipp, 399-395. Ed. Joan Méjia Baca.

z’ V ;N ;l308'
A R C H IV O
SEMINARIO DE HISTORIA
RURAL ANDINA - UNMSM.
j ^rvytC s fi n^dKd'J

Potrebbero piacerti anche