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Buenas tardes, maestra y compañeros, me complace poder saludarles nuevamente,

esperando que se encuentren bien, les dejo mi aportación, expondré los puntos
importantes de la teoría de la libido y el narcisismo de Freud con ayuda de otra
lectura complementaria del mismo, las cuales voy a aterrizar con la ejemplificación
de un fenómeno actual.

Freud también definió el narcisismo primario como investimiento libidinal primario


del Yo, donde el individuo imagina y fantasea un Yo que necesita de otros objetos
sino bastará con sí mismo (se encuentra ensimismado), está era considerada como
etapa anobjebtal del desarrollo, sin embargo, en el narcisismo secundario las
pulsiones se integran y se unifican en una pulsión libidinal única a través del
investimiento del Yo, se manifestaba a través de una conducta por la cual un
individuo da a un trato a su propio cuerpo, parecido al que daría al cuerpo de un
objeto sexual; al cual, mira con complacencia, lo acaricia, lo mima, hasta que gracias
a estos manejos alcanza la satisfacción plena.

Estas afirmaciones teóricas, traen a mi mente los numerosos rasgos narcisistas,


que observo en aquellas personas que invierten varias horas en el gimnasio, donde
el único objetivo es “alcanzar la perfección”, cuidan su alimentación, e incluso lejos
de parecer una disciplina el hacer ejercicio, se convierte en una obsesión, hoy que
esta tan de moda las “selfies” suben y suben fotos de perfil a Face Book, para a
través de los likes, obtener el reconocimiento y la admiración de los demás. Sin
dejar de lado la fijación o el peso que se le ha dado al físico en la actualidad lo cual
es sinónimo no solo de belleza sino de un cuerpo perfecto.

Estas actitudes sin duda me remiten a la fábula de Narciso, el cual estaba


ensimismado con la autoimagen, tanto que perdía la noción del tiempo en mirar su
reflejo, situación para nada alejada con las personas que anteriormente mencioné,
se esmeran al estar en el gimnasio pierden la noción del tiempo, pasan horas
mirando sus fotos mirándose en el espejo enamorados de sí mismos, se observan
como dignos de admiración. Centrando su energía en sí mismos, y esto les genera
placer, además se eligen como objeto propio, por lo tanto, encaja muy bien lo que
hacía referencia Freud acerca del narcisismo, que no es más que el complemento
libidinoso del egoísmo inherente de la pulsión de autoconservación, es un estadio
entre autoerotismo y el amor de objeto. sin embargo, esta es una situación primitiva
que puede volverse defensiva y regresiva ante las ansiedades que acompañan al
proceso. Mi duda es ¿Qué tan normal se considera el amor propio a si mismo?, es
bueno amarnos, pero sin caer en los excesos, cerraré con esta frase, que hace
alusión al narcisismo

“Tú crees que me matas, yo creo que te suicidas” (Antonio Porchia)

¡saludos a todos!

BIBLIOGRAFÍA

Freud, Sigmund (1914). Obras completas de Freud. “introducción al narcisismo

En Obras Completas. Vol. XIV Buenos Aires: Amorrortu. Pg. 65-81.

Freud, S. (1925). La teoría de la libido y el narcisismo, en Obras Completas. Vol.


XVI, Buenos Aires: Amorrortu. Pg. 375-391.

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