15 cosas a las que debes renunciar para ser inmensamente más feliz.

1. Renuncia a tu necesidad de tener siempre la razón. Muchos no soportan la idea de estar

equivocados, pero la verdad es que todos erramos. Y mucho. Por eso, relájate, no pasa nada si el
novio nos gana una discusión para variar.

2. Renuncia a tu necesidad de control. Las situaciones, eventos, personas, y a veces hasta la

órbita de los planetas. Permite que todo y todos sean tal y como son y verás cuanto mejor te
sentirás.

3. Renuncia a la culpa. Ya lo pasado, pasado. Deja de atormentarte por cosas de las que NADIE
se acuerda.

4. Renuncia a tu diálogo interno de auto-derrota. No creas que no puedes hacer las cosas, todos
podemos hacer todo lo que nos propongamos. Sí, todo.

5. Renuncia a las creencias que te limitan. Abre la mente y experimenta de todo un poco. Esa es la
mejor manera de disfrutar la vida.

6. Renuncia a quejarte. De tantas, tantas, tantas cosas. Personas, situaciones o acontecimientos

que te hacen enojar o entristecer. Nada puede hacerte sentir mal por si misma, solo lo que tú
permitas.

7. Abandona el lujo de criticar. Todos somos diferentes, como dice el viejo dicho: Vive y deja vivir.

8. Renuncia a la necesidad de impresionar a los demás.Deja de intentar ser algo que no eres sólo
para hacer que otros te acepten. No funciona de esta manera. En el momento en que dejas de
intentar ser algo que no eres, encontrarás personas que se sentirán atraídas por ti, sin esfuerzo.

9. Renuncia a tu resistencia al cambio. El cambio es bueno, te ayuda a moverte del punto A al B.

No te opongas, hay alzas y bajas, pero siempre avanzamos.

10. Renuncia a las etiquetas. El nivel más alto de ignorancia es cuando rechazas algo de lo cual no
sabes nada. No juzgues ni estereotipes a las demás personas ni situaciones.

11. Renuncia a tus miedos. De lo único que debemos temer, es del propio miedo. Corrige el interior
y todo en el exterior se pondrá en su lugar.

12. Abandona las excusas. Muchas veces nos limitamos debido al inmenso repertorio de excusas
que tenemos. Hasta las sabemos emplear con estrategia de ajedrecista. Ya no las uses,
potenciarás tu potencial.

13. Abandona el pasado. Sabemos que es difícil, pero es necesario. El pasado que anhelas, ya
pasó y el futuro del que huyes, va a venir quieras o no. Mejor acepta estos hechos y disfruta, antes
de que tu presente sea pasado y no puedas volver a él.

14. Abandona el apego. No lo confundas con el aprecio. El apego es eso que nos hace estar con
alguien a quien no queremos, sólo por costumbre o porque “si no, ¿qué voy a hacer?”. Deshazte
de lo inútil, sobre todo por dentro.

15. Renuncia a vivir tu vida en base a las expectativas de otras personas. No intentes hacerlo solo
por agradarles o por obedecer, al final, ¿Es tu vida o de ellos?