Antecedentes históricos de la educación física en chile e inicios:

Son un claro ejemplo de cómo el proceso de aprendizaje y el rol social de la disciplina se

han asociado, casi exclusivamente, al ámbito deportivo, estableciendo una relación
directa entre el deporte y educación.

Al buscar, minuciosamente, los referentes de la práctica educativa-física desde una

espera pedagógica-escolar es posible identificar la disputa de dos grandes corrientes:

La primera representada por la corriente alemana y luego en segundo lugar la corriente

sueca. Las ideas de ambas corrientes gimnasticas se instalaron como foco de análisis de
los intelectuales de la época en relación con la disciplina, estableciéndose una clara
disputa ente los que defendían una de las corrientes mencionadas y rechazando a la
otra.

Valentín Letelier, intelectual chileno destacado en el ámbito educativo y a fin con el

pensamiento positivista de la educación señala que en el sistema integral de educación
positiva la higiene y la gimnastica son enseñanzas que propenden a desarrollar los
órganos físicos”.

Existió también, una educación física para las masas populares cuyos propósitos
principales eran el fortalecimiento de la raza, desarrollo del trabajo industrial y la
consecución de una fuerte disciplina corporal, y una educación física para la clase
dirigente focalizada en la satisfacción de sus impulsos y necesidades físicas para la
competencia, el ocio y los deportes.

El deporte llega a chile a través de los ingleses y otros inmigrantes. Ello fue
consecuencia de una fuerte inversión privada a través de clubes deportivos constituidos
jurídicamente y validados por la sociedad en su conjunto, con el fin de recrear a la clase
más acomodada y para formar obreros, que por esa época sufría las consecuencias de la
migración del campo a la ciudad (hacinamiento, enfermedades, analfabetismo, entre
otras).

La introducción al deporte en la escuela fue progresivamente formando parte del eje

vertebrador de la educación física.

Salud y deporte influenciaron el desarrollo y el progreso de la nación bajo el modelo

educativo nacionalista y desarrollista chileno. Estos lineamientos educativos bajo este
modelo consideraban la relevancia tanto de los “cuerpos” saludables, como de los
“cuerpos” productivos para el país.

Por ello el sentido de la educación física cobro sentido de una transformación morfológica
promotora del bienestar sanitario de la población y del crecimiento de la nación,
permitiendo a su vez integrar como un saber escolar moderno, fundamental para la
educación integral.
 Comienzos de la educación física Chilena:

A mediados del siglo XIX Es indispensable proveer al establecimiento de útiles para la

enseñanza de la gimnasia y nombrar la persona que debe ejercitar a los alumnos en el
aprendizaje de este ramo. En aquella época, la gimnasia se impartía en pocos colegios;
por lo tanto, eran escasos los profesionales en chile con las competencias para hacerse
cargo de esta temática.

Tipos de ejercicios que se recomendaban:

a) Los ejercicios preliminares, que tenían por objetivo el desarrollo de la agilidad

b) Los ejercicios parciales, que servían para dar fuerza a todos los músculos, delimitados por
movimientos de flexión, extensión y circunducción de los miembros del cuerpo

c) Los ejercicios combinados, que dotaban de mayor firmeza y tensión a todos los músculos del
cuerpo para mejorar las acciones mencionadas.

d) Luego recomendaba movimientos de tipo gimnásticos, utilizando anillos de madera, sacos,

palanquetas, barras fijas, barras paralelas, barras suspendidas, etc.

1884: el gobierno busca crear una reforma en las escuelas normales (formadoras de profesores),
dentro de las acciones se incluye el envío de docentes nacionales a Europa y además contrata
profesores europeos para que vinieran a Chile. Esto último, se conoció popularmente como
la Misión Pedagógica Alemana, que tenía como objetivo fortalecer la formación de profesores
chilenos, a través del apoyo aportado por los docentes extranjeros. Entre los profesores que
arriban al país, llega el señor José Francisco Jenschke, profesor de física, geometría y aritmética,
quien además poseía conocimientos de gimnasia, condiciones que lo llevan a ser designado
profesor de la especialidad, con conocimientos en gimnasia alemana (Escuela de Jahn) titulado en
la Universidad de Viena, lo que lleva a nombrarlo profesor de la especialidad.

1885: el gobierno envía profesores a Europa para perfeccionarse en esta disciplina, entre ellos a
Joaquín Cabezas, quien se especializaría en la gimnasia educativa sueca, (se capacitó en el
Instituto Central de Gimnasia en Estocolmo.)