JUEZ DEL TRIBUNAL DE PROTECCIÓN DE NIÑOS, NIÑAS Y

ADOLESCENTES DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO

ARAGUA.

SU DESPACHO.-

Nosotros, RICHARD ATTILA FIGUEREDO CUARTERO Y IRENE KATIUSCA

PEROZO CHACON, venezolanos, mayores de edad, titulares de las cedulas
de identidad Nº V- 11.747.338 Y 11.985.854, respectivamente, ambos de
Profesión Militar Activo y la segunda Comerciante, asistidos en este acto por la
Abogada en ejercicio Millely Vivas de Arambulo con el Inpreabogado número
175.349 con domicilio procesal en Centro Comercial Paseo Las Delicia 1
Nivel Terraza Oficina T-42, Maracay Estado Aragua. Ante usted y con la venia
de estilo, ocurrimos a exponer y solicitar lo siguiente:

CAPITULO I

DE LOS HECHOS

Contrajimos matrimonio civil por ante la prefectura del Municipio Cedeño del
Estado Bolívar, en fecha 09 de junio de 2000, tal como consta en copia
certificada del acta de matrimonio que se anexa Marcada con la letra (A),
Segundo: de nuestra unión procreamos 2 hijos menores de edad, de nombres
AURELIO DE DIOS FIGUEREDO PEROZO, de 09 años de edad de quien
anexamos copia de la partida de nacimiento marcada con la letra (B), Y
AUGUSTO DE DIOS FIGUEREDO PEROZO, de 06 años de edad de quien
anexamos copia de la partida de nacimiento marcada con la letra (C),
TERCERO: fijamos nuestro último domicilio conyugal en La Urbanización
Montaña Fresca, Sector los Jabillos Calle Carrao, Casa numero J-67, en
Maracay Estado Aragua. QUINTO: en cuanto al Régimen de Manutención
ofrezco una cuota mensual de Ochocientos diez mil exacto (810.000.00 mil )
Bolívares mensuales, que corresponde al treinta por ciento de mi sueldo, a
ser depositado en la cuenta corriente número 01080124930100323162 del
banco provincial a nombre IRENE KATIUSCA PEROZO CHACON titular de la
cedula número 11.985.854, dicho monto se incrementara en la misma medida
que se produzca algún aumento de sueldo SEXTO: La Patria Potestad de
nuestros menores hijos la ejerceremos ambos padres de manera conjunta para
bienestar de los mismos. SEPTIMO: La Guarda y Custodia de nuestros
menores hijos será ejercida por la madre. OCTAVO: Acordamos un régimen de
visitas amplio, el padre podrá visitar a sus hijos donde la madre fije su
residencia, preferiblemente de día y los podrá llevar de paseo. Los niños
pasarán de forma siguiente las festividades de navidad, año nuevo, carnavales
y semana santa: Un año pasarán Navidad, Carnaval con el padre y Semana
Santa, Año Nuevo y Reyes con la madre y el año entrante será lo contrario o
sea: Navidad y Carnaval con la madre Semana Santa, Año Nuevo y Reyes con
el padre, el día del padre lo pasaran con el padre y el día de la madre la
pasarán con la madre. El día del cumpleaños del padre podrá pasarlo con el
padre, el día del cumpleaños de la madre deben pasarlo con la madre. El día
de sus propios cumpleaños, lo pasarán en su hogar con su madre y su padre
podrá asistir a las reuniones que se celebre ese día especial dentro de la casa
donde fije la madre su domicilio. NOVENO: Compartiremos todos los gastos de
nuestros hijos siempre que los mismos tiendan a lograr su desarrollo integral y
emocional en especial los de ropa, calzados, médicos, medicinas,
odontológicos, y todo lo relativo a la educación (uniformes y útiles escolares),
además de todo lo relacionado a los gastos de regalo de navidad, viajes y
aquellos que se requieran para el desarrollo intelectual de los niños. DECIMO:
El padre se compromete a dotar a sus hijos de ropa y calzado dos veces al
año adicional de la ropa del diciembre y de los gastos relacionados a uniformes
cuando fuera el caso y que le correspondiera a sus hijos. DECIMO PRIMERO:
Es el caso que nos encontramos Separados desde el 20 de Septiembre del
año 2013, año en que se suscitaron desavenencias, en nuestra relación,
empezando una vida continúa de graves diferencias e incomprensión a nivel
conyugal, hasta el punto que decidimos que yo RICHARD ATTILA
FIGUEREDO CUARTERO, abandonara el hogar hasta los actuales
momentos, con lo cual se acentuó la ruptura de nuestro entendimiento,
generando una incompatibilidad de caracteres que hizo insalvable e
irreconciliable nuestra relación, por lo que se evidencia que nos encontramos
separados de hecho por más de (1) año, no hemos mantenido relación
conyugal y en consecuencia, hemos decididos divorciarnos de mutuo acuerdo y
consentimiento. Y fundamentándonos en la Sentencia vinculante Nº 693, de
fecha 02 de Julio de 2015, “de la sala constitucional que realiza una
interpretación del artículo 185 del código civil y establece, con carácter
vinculante, que las causales de divorcio contenidas en el artículo 185 del
código civil no son taxativas, por lo que cualquiera de los cónyuges podrá
demandar el divorcio por las causales previstas en dicho artículo o por
cualquiera otra situación que estime impida la continuación de la vida en
común, en este fallo; incluyéndose el mutuo consentimiento (cursivas y
subrayado riut si os). A criterio de la sala, la previsión del Artículo 185 del
código civil, que prevé una limitación al número de las causales para
demandar el divorcio, es contraria al ejercicio de los derechos contenidos en la
constitución, ya que resulta insostenible el mantenimiento de un números
Clausus de las causales válidas para accionar el divorcio frente a la garantía de
los derechos fundamentales del ciudadano al libre desenvolvimiento de la
personalidad y a la tutela judicial efectiva, “ fin de la cita. Sentencia que fue
ratificada por la misma sala constitucional, en sentencia Nº 1710 de fecha 18
de Diciembre del 2015, en el expediente 15-185, que atribuyo la competencia
para conocer de estos divorcios a los tribunales de Municipios: “De tal modo
que el legislador le ha conferido con esta ley a los jueces de paz la
competencia para divorciar a aquellos cónyuges que de mutuo acuerdo lo
pretendan, sin necesidad de que previamente se decrete una separación de
cuerpos y la espera de un año para obtener el divorcio, o que se les exija como
requisito previo la separación de hecho por más de cinco (5) años, tal como lo
establece el Artículo 185-A del código civil, ante por el contrario, ha
establecido la posibilidad de que los mismos sean divorciados sin más trámites
que cohacer ante el juez y así solicitarlo siempre que no hayan menores o
discapacitados. No obstante, se observa que a los fines de la aplicación de la
norma especial, en aquellas comunidades donde no se hayan constituidos los
jueces de paz mundial, serán los jueces y juezas de municipios competentes
en los territorios que sé que se correspondan con el domicilio conyugal, los que
ejecuten esa competencia, a tenor de la atribución de competencia que realiza
el artículo 3 de la ya citada resolución de la sala plena Nº 3-006, visto el
carácter no contencioso de estas solicitudes de divorcio por mutuo
consentimiento. Así se establece” fin de cita. Por las razones de hecho y
derecho antes expuestas, es por lo que de mutuo consentimiento, ocurrimos
ante su competente autoridad, para solicitar, como en efecto lo hacemos en
este acto, que declare el Divorcio y, en consecuencia, disuelva el vínculo
matrimonial que nos une de acuerdo a lo preceptuado en el código civil en su
Artículo 185-A. A los fines legales consiguientes, solicitamos a usted,
ciudadano juez, se sirva ordenar lo pertinente para dar curso legal a la presente
solicitud de conformidad con la sentencia vinculante mencionada ut supra y que
sea declarada con lugar el divorcio en la definitiva con todos los
pronunciamientos.

Es justicia, que esperamos en Maracay a la fecha de su presentación.