Sei sulla pagina 1di 2

CONTRATO

Contrato es un término con origen en el vocablo latino contractus que nombra al


convenio o pacto, ya sea oral o escrito, entre partes que aceptan ciertas obligaciones y
derechos sobre una materia determinada. El documento que refleja las condiciones de
este acuerdo también recibe el nombre de contrato.
El contrato, en definitiva, es un acuerdo de voluntades que se manifiesta en común entre
dos o más personas (físicas o jurídicas). Sus cláusulas regulan las relaciones entre los
firmantes en una determinada materia.
A la hora de determinar el contenido de cualquier tipo de contrato, tendríamos que dejar
patente que en él tienen que aparecer, de manera obligatoria, tres elementos
fundamentales: los datos relativos a los sujetos que lo suscriben, los pilares de la
prestación y contraprestación que se establece, y la forma en la que se da el visto bueno
a aquel por parte de las dos partes implicadas.
Muchos son los tipos de contratos que existen, no obstante, entre los más significativos
se encuentran los siguientes:
• Privado, que es el realizado directamente por las personas que lo suscriben.
• Público, el que se encuentra autorizado por empleados públicos.
• Formal. En este caso, se trata del contrato que, tal y como establece la legislación
pertinente, cuenta con una manera muy concreta de consentimiento por parte de los
sujetos que intervienen en él.
• Bilateral, que es el que establece que quienes los suscriben asumen desde ese mismo
momento una serie de obligaciones.
INVERSION
La palabra latina inversión es el origen etimológico del actual término inversión que
ahora vamos a analizar. En concreto, podemos determinar que aquella está conformada
por la suma de tres partes: el prefijo in– que puede traducirse como “hacia dentro”, el
vocablo versus que es sinónimo de “dado la vuelta” y finalmente el sufijo –ion que es
equivalente a “acción”.
Una inversión, en el sentido económico, es una colocación de capital para obtener una
ganancia futura. Esta colocación supone una elección que resigna un beneficio
inmediato por uno futuro y, por lo general, improbable.
Las empresas suelen hacer inversiones en todo momento. Algunas son necesarias para
su funcionamiento cotidiano (como la compra de computadoras). Otras son concretadas
con vistas a futuro, como la compra de una costosa maquinaria que le permitirá
incrementar la producción.
Así, una empresa textil que tiene una capacidad productiva de 1.000 pantalones por día,
decide adquirir una máquina para producir 2.000 pantalones diarios. En un principio, la
inversión supondrá un gasto para la empresa, ya que deberá desembolsar dinero para
comprar la máquina. El objetivo será recuperar ese dinero con el aumento de la
producción y, en un tiempo, obtener más ganancias que las que conseguía antes de la
adquisición.
Además dentro del ámbito empresarial nos encontramos con lo que se conoce como
plan de inversiones. Se trata en concreto de un proyecto donde aparece recogido de
manera clara el destino de lo que son los recursos financieros que tiene una compañía
o empresa.
Y todo ello sin embargo tampoco que es muy frecuente hablar de lo que damos en llamar
fondo de inversiones. Un término aquel con el que nos referimos al fondo donde se unen
los capitales que un determinado número de personas van a destinar a llevar a cabo
inversiones de distinto tipo y calado.
Una inversión contempla tres variables: el rendimiento esperado (cuánto se espera
ganar), el riesgo aceptado (qué probabilidad hay de obtener la ganancia esperada) y el
horizonte temporal (cuándo se obtendrá la ganancia).
No obstante, tampoco podemos pasar por alto el hecho de que inversión es una palabra
que, de la misma forma, se utiliza como sinónimo de homosexualidad.
Pero aún hay más. Inversión también es un vocablo que se emplea dentro del sector
musical. En concreto, se hace uso del mismo para definir a un cambio en lo que es la
colocación de las notas de un acorde determinado en una posición que no es la que se
emplea habitualmente. De esta manera, se consigue obtener como resultado un cambio
notable respecto a la posición originaria.
Qué es un contrato de inversión garantizado
También conocido como GIC, un contrato de inversión garantizado es un acuerdo
legalmente vinculante que es más comúnmente empleado en las oportunidades de
inversión que involucran compañías de seguros. El cumplimiento de una función que es
algo así como la de un certificado de depósito emitido por un banco comercial, el
contrato de inversión garantizado compromete al emisor a pagar al inversor tanto en el
monto de capital invertido más los intereses de acuerdo a la estructura de tasas de
interés que se indican en los términos y condiciones.
Este tipo de acuerdo de garantía puede tener una tasa de interés fija o especificar algún
tipo de proceso que se utiliza en el caso de que un tipo de interés variable o flotante sea
utilizado (si usted desea conocer un poco más sobre la renta fija ingrese

Potrebbero piacerti anche