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INDICE

Contenido
1.- INTRODUCCION _______________________________________________________________ 2
2.- ANTECEDENTES ____________________________________________________________ 3
2.2. DELINCUENCIA JUVENIL EN ABANCAY. __________________________________________ 4
2.3. TIPOLOGÍA Y PERFILES DE LOS JÓVENES EN SITUACIÓN DE RIESGO _________________ 4
2.4. Reacción social agresiva ________________________________________________ 5
2.5. Reacción de huida ______________________________________________________ 5
2.6. Reacción antisocial, trastorno disocial o psicopatía/sociopatía ________________ 5
2.7. Reacción de delincuencia de grupo _______________________________________ 5
3.5. Trastornos mentales ____________________________________________________ 6
4.- formas de delincuencia juvenil_____________________________________________ 6
4.1. PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO ____________________________________________ 9
4.2. Desarrollo de nuevas habilidades. ________________________________________ 9
4.3. Desarrollo del pensamiento. _____________________________________________ 9
4.4. Regulación emocional y control de la ira. _________________________________ 10
4.5. Prevención de recaídas. ________________________________________________ 10
CONCLUSIONES _________________________________________________________ 11

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1.- INTRODUCCION
El presente trabajo tiene como finalidad dar a conocer las causas y los factores de La
delincuencia juvenil ya que es un fenómeno muy representativo que crece cada día más,
en nuestra ciudad de Abancay, Es un fenómeno social que pone en riesgo la seguridad
pública de la sociedad, así mismo va contra las buenas costumbres ya establecidas por la
sociedad. La delincuencia juvenil es un fenómeno de ámbito mundial, pues se extiende
desde los rincones más alejados de la ciudad industrializada hasta los suburbios de las
grandes ciudades, desde las familias ricas o acomodadas hasta las más pobres, es un
problema que se da en todas las capas sociales y en cualquier rincón de nuestra
civilización.

El perfil de estos jóvenes señala problemas de adicción a las toxicomanías, con fracaso
escolar, con grupos de amigos conflictivos y con un elevado nivel de permisividad en su
educación, en muchos de los casos, con familias desestructuradas.

La investigación del presente trabajo Delincuencia Juvenil, es para dar a conocer la


problemática de sociedad actual como se encuentra la juventud actualmente, donde se ve
que niños entrando en la adolescencia se unen a bandas de delincuentes, esto se debe
muchas veces porque en el hogar de una familia no existe el diálogo que tiene que haber,
y tratar este tema es muy importante para que así los padres de familia, tomen conciencia
para que más adelante sus hijos tengan un buen futuro en la sociedad.

Se investiga con el propósito de comprender el interés por el análisis y la búsqueda de


soluciones para la delincuencia juvenil, es necesario ubicar también dentro de la
problemática de la sociedad actual la estructura social en que les ha tocado vivir a los
niños y adolescentes de hoy, dentro de niveles de miseria o pobreza, agresiones sexuales
y desintegración familiar ya sea por separación de los padres, o abandono por parte de
uno de ellos.

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2.- ANTECEDENTES
Este fenómeno se da principalmente en zonas marginales de nuestra ciudad, lo cual
refleja en gran medida los factores socioeconómicos que lo motivan: la pobreza, la
marginalidad y la desintegración familiar. No sólo el bajo nivel de ingresos es importante
para explicar este fenómeno. Además de ello, la población en riesgo tiene la percepción
de que no es posible alcanzar lo que otros tienen, que hay una brecha insalvable. Esto
genera un sentimiento de exclusión. Adicionalmente, estos niños y jóvenes no tienen el
refugio de la familia. La sensación de pertenencia, identidad y autoestima que un hogar
naturalmente proporciona no se da en estos casos. Ellos vienen de hogares donde la
ausencia de los padres es frecuente y donde la violencia familiar no es inusual.

Los colegios son un elemento importante en este escenario. La calidad de la educación


pública a la que los niños y jóvenes de estas zonas pueden acceder es de muy bajo nivel.
No sólo la educación es mala, sino que el contexto en la que se brinda tampoco favorece
su desarrollo como individuos. Los profesores, usualmente mal pagados, obligados a
tener más de un trabajo, llegan a estas escuelas frustradas e indiferentes frente a sus
estudiantes. Esto se ve reflejado en el trato que estos últimos reciben

Frente a los sentimientos de frustración de estos niños y jóvenes aparecen las pandillas
como una alternativa. Éstas proporcionan esa sensación de pertenencia e identidad que
no encontrarían de otra manera. Usualmente los niños se inician en las pandillas entre los
12 y 13 años y normalmente se mantienen en ellas hasta los 22 años o más. Las edades
predominantes son entre 14 y 17 años de edad.

Un factor adicional a tomar en cuenta es la naturalización de la violencia en la sociedad, a


la que se le contribuye principalmente el fenómeno del terrorismo. Sin embargo, es
posible que los medios de comunicación estén contribuyendo a este fenómeno
actualmente. Si bien se puede argumentar que, por ejemplo, los programas de televisión
no hacen más que reflejar la realidad, lo cierto es que muestran a los televidentes una
realidad en la que la violencia es algo casi natural.

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2.2. DELINCUENCIA JUVENIL EN ABANCAY.
Fenómeno ligado directamente a la Adolescencia, no sólo por la edad, sino porque
expresan los conflictos típicos en este período. Los problemas psicológicos que atraviesa
el adolescente pueden hacerlo más vulnerable a las conductas delictivas.

En la génesis de la delincuencia juvenil, inciden factores psicológicos y sociales, pudiendo


variar porque no actúan en forma idéntica; en algunos casos sobresalen los factores
subjetivos y de estructuración de la personalidad, en otros los acontecimientos sociales
son decisivos.

La Delincuencia se conoce como el fenómeno de cometer actos fuera de las normas


impuestas por la sociedad, es la trasgresión de las normas vigentes en una sociedad
determinada. Las causas para que un joven delinca son diversas, entre ellas se
contemplan las orgánicas, fisiológicas, patológicas. Influencias externas como el medio en
el que se desarrollan los primeros años de la vida, las carencias afectivas y de atención
por parte de los padres, entre las más estudiadas.

La actividad ilegal que desarrollan los jóvenes, se denomina Delincuencia Juvenil, cuyas
conductas no discurren por causes sociales aceptables, y que forman parte de de un
proceso de gradual de socialización desviada, que tiende a agravarse. Proceso que se
manifiesta más agudamente en la adolescencia, cuando el joven está más capacitado
para realizar acciones por cuenta propia. La estadística señala, respecto al género, que
este problema sico-social, se da más entre varones que entre mujeres.

2.3. TIPOLOGÍA Y PERFILES DE LOS JÓVENES EN SITUACIÓN DE RIESGO


La criminalidad es fruto de una combinación de causas, si bien hay unos indicadores que
podrían considerarse como “factores de riesgo” en el período de la adolescencia. Por
ejemplo:

 Factores individuales: desórdenes internos, hiperactividad, problemas de


concentración, impaciencia, agresividad, comportamientos antisociales o
violentos, etc.
 Factores familiares: padres delincuentes, maltrato infantil, desentendimiento
paterno, conflictos familiares, separación de padres e hijos, etc.
 Factores escolares: fracaso escolar, baja vinculación, absentismo escolar,
cambios frecuentes de colegios, etc.
 Factores sociales y comunitarios: amigos delincuentes, pertenencia a una
banda, pobreza, acceso a drogas o armas de fuego, etc.

Víctimas de la discriminación social y excluidos de las decisiones importantes, muchos


jóvenes carecen de planes o proyectos de vida, y son considerados incapaces de
adaptarse al medio social, por lo cual toman la delincuencia como alternativa de
supervivencia. El fácil acceso a las drogas, la falta de oportunidades de empleo, salud
educación y espacios para la cultura y el deporte, la desintegración familiar, la impunidad

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entre otros factores, componen el contexto en el que nace y crece la delincuencia juvenil.
Hay algunas señales que pueden advertir del “peligro”. Por ejemplo, las fugas del hogar el
absentismo escolar, la baja autoestima, las mentiras, el consumo de alcohol y drogas
falta de expectativas, familias desestructuradas o problemas de comunicación, entre otros
muchos. Las características personales que suelen presentar los adolescentes que
delinquen se pueden agrupar de la siguiente manera, atendiendo a los principales rasgos
de la personalidad y a la reacción del individuo con el medio socio-familiar en el que se
desenvuelve:

2.4. Reacción social agresiva


Los niños y jóvenes con este tipo de reacción han sufrido en su primera infancia un
marcado rechazo paterno o, incluso, maltrato, de forma que se les ha privado del afecto
necesario para un desarrollo normal. También un excesivo intento de control respecto a
los hijos puede derivar en una actitud extremadamente autoritaria que favorezca este tipo
de reacción. Esos hijos viven, pues, en permanente conflicto familiar y presentan
hostilidad y agresividad respecto a todo y a todos. Son niños desobedientes, hostiles y
agresivos. Responden a la frustración con agresión. En el fondo, hay un núcleo interior de
odio hacia sí mismos.

2.5. Reacción de huida


También tiene sus antecedentes en el rechazo paterno pero, contrariamente a lo que
sucedía en el anterior supuesto (la agresividad), en este caso, la reacción es de huida.
Suelen tener una apariencia más frágil que los agresivos y presentan sentimientos de
debilidad, maltrato y desamparo. Son solitarios. Cuando se unen a una banda de
delincuentes suelen jugar el rol de perdedores y marginados, ya que no les suelen aceptar
plenamente.

2.6. Reacción antisocial, trastorno disocial o psicopatía/sociopatía


Este grupo engloba los individuos no socializados, que viven continuamente episodios de
conflicto con la sociedad. Son incapaces de ser leales a nada ni a nadie ni tienen
sentimientos de culpa. Suelen ser insensibles e irritables a pesar de que suelen tener el
don de la locuacidad y un encanto superficial. Su tolerancia a la frustración es muy baja y
su autoestima muy alta. Sienten que todo les está permitido. Algunos autores citan como
factores que predisponen al desarrollo de este trastorno el rechazo y abandono de los
padres, un temperamento infantil difícil, una disciplina educativa dura, abusos físicos o
sexuales, carencia de supervisión, asociación a un grupo de delincuentes o a
antecedentes de trastornos psicopatológicos en la familia. Esta actitud puede haberse
visto reflejada en pequeños delitos como hurtos e incendios, así como maltrato a
animales, peleas o uso de armas. Si se da en familias con alto nivel económico y social,
los padres suelen actuar como encubridores de sus hijos.

2.7. Reacción de delincuencia de grupo


Los menores que delinquen en grupo encuentran en él apoyo, comprensión y protección.
Las bandas juveniles son una subcultura, con sus normas, su organización y su liderazgo.
Reproducen el patrón familiar que, en muchas ocasiones, no han vivido. Es decir, el grupo

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desempeña una función adaptativa: le ofrecen compañerismo, incitación y actividad y el
menor se identifica con los demás miembros del grupo. La conducta delictiva más habitual
es la comisión de hurtos, realizar acciones destructivas y vandálicas, agresiones,
conducción de coches robados y consumo de drogas y alcohol.

3.5. Trastornos mentales


En el caso de estos menores, adolescentes o jóvenes, el comportamiento antisocial
procede de una psicosis: la delincuencia es el síntoma de una enfermedad. Estos
trastornos pueden manifestarse en la infancia o la adolescencia a través de actitudes
solitarias, escasa relación con los demás, bajo rendimiento escolar, hipersensibilidad o
ansiedad social. Pueden parecer excéntricos y ser víctimas de otros.

4.- formas de delincuencia juvenil


 la acción individual
 la acción grupal

Las pandillas son algo muy típico de la adolescencia: son los grupos de semejantes que le
brindan identidad y autoafirmación a los seres humanos en un momento en que se están
definiendo las identidades. Siempre han existido. Es un mecanismo necesario en la
construcción psicológica del ser adulto. Quizá el término haya adquirido con el tiempo
mala fama y casi automáticamente se asocia a banda delictiva. Pero de grupo juvenil a
pandilla delincuencial hay una gran diferencia.

 la acción grupal circunstancial

En esta clasificación podríamos incluir los menores, adolescentes y jóvenes que se


agrupan sin un objetivo claro de acción delincuencial. Es decir, primero se agrupan y,
luego, por diversas circunstancias, buscan una víctima u objetivo, ya sea lucrativo o de
cualquier otra motivación

CASO N0.1

CAPTURAR A MENOR ROBA AUTOPARTES EN ABANCAY

Un menor que se dedicaba a extraer accesorios de vehículos estacionados en el Jr.


Lima de nuestra ciudad, fue capturado luego que este había roto la luna de un vehículo
para sustraer un autorradio, espejos retrovisores y otros.

El hecho se suscitó a las 07.30 horas aproximadamente de este lunes en la primera


cuadra del Jr. Lima, donde los vecinos al notar el hecho dieron la alarma y el propietario
del vehículo persiguió al sujeto logrando alcanzar al autor del hurto en la puerta de la
Municipalidad de Abancay donde se produjo un forcejeo con el delincuente.

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Caso N0.2

CAPTURAN A SUJETO QUE DESFIGURÓ ROSTRO A JOVEN

Un presunto delincuente que en complicidad con otro desfiguro el rostro de una persona
con el pico de una botella rota al que también asaltaron y robaron, fue capturado ayer por
efectivos policiales de la Comisaría de Bellavista, informó la Policía.

A mérito de una denuncia presentada en la Comisaría de Bellavista, por desfiguración de


rostro y robo, efectivos policiales de dicha dependencia policial, capturaron al responsable
del hecho delictivo identificando al intervenido como Royer Deividson Camargo Taype (19)
alias “Mudo”, quien el pasado 13 del presente mes aproximadamente a las 03.00 de la
madrugada en la Av. Perú, en complicidad con otro sujeto, habían asaltado y robado a
Jhon Patrick Rodríguez Luna (18) a quien además lo agredieron con un pico de botella rota
causándole cortes en varias partes del rostro.

Caso N0.3

DOS ADOLESCENTES INTERNADOS EN MARCAVALLE POR ROBAR CELULAR A MENOR

Dos adolescentes permanecerán internados provisionalmente por cuatro meses en el


Centro de Diagnóstico y Rehabilitación Juvenil de Marcavalle (Cusco) por golpear y robar el
teléfono celular a una menor de 14 años, amenazándola con una navaja para cometer su
fechoría.

El hecho se registró el último viernes en horas de la tarde por inmediaciones de la loza


deportiva del IPD Abancay.

Los menores identificados con iniciales J.T.C.M (17) y R.S.S. (16) son acusados de robo en
agravio de la menor a quien cogieron por el cuello y despojaron de todas sus pertenencias,
utilizando para ello un arma blanca.

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Caso N0.4

CAPTURAN A MENOR QUE ABUSÓ SEXUALMENTE DE UNA NIÑA DE 12 AÑOS

Un menor que este fin de semana a las 18.00 horas aproximadamente, había abusado de
una menor de 12 años por inmediaciones del Rio Mariño, fue capturado por la Policía.

Según se informó, este sábado a las 22.20 horas aproximadamente el menor de iniciales
J.M.R.C. (15), fue intervenido por efectivos policiales de la jurisdicción de la Comisaría de
Bellavista, quienes lo pusieron luego a disposición de la Comisaría de La Familia, por
Infracción a la Ley Penal, Contra la Libertad en la modalidad de Violación Sexual, en
agravio de la menor de iniciales H.J.H.S. (12).

Caso N0.5

ROBA AUTOPARTES FUE CAPTURADO POR LA PNP

Un delincuente que se dedicaba a robar partes de vehículos estacionados en arterias del


Distrito de Tamburco, fue capturado por efectivos policiales de la Comisaría de dicho
sector.

Este sábado en horas de la noche el agraviado Nilton Serrano Huaylla (29) había dejado
estacionado en la puerta de su domicilio el vehículo de su propiedad de Placa BGL-831, el
mismo que había sido objeto de robo, para el que los delincuentes habían roto el vidrio
lateral y proceder a robar el autoradio y otros objetos de valor que se encontraban en el
vehículo.

Efectivos policiales, iniciaron así un seguimiento de inteligencia, logrando identificar, ubicar


y capturar en Tamburco al sujeto identificado como Gary Chipana Jara (16) natural de
Huanipaca, encontrando en su poder parte del botin; un autoradio, medidor de aire, (04)
USB y documentos del vehículo.

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4.1. PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO
La prevención de la delincuencia admite variadas posibilidades, en función tanto de los
sucesivos momentos temporales en el desarrollo de las carreras delictivas (prevención
primaria, secundaria y terciaria) como también de los distintos actores y contextos que
intervienen en el delito (prevención en relación con agresores, víctimas, comunidad social
y ambiente físico) (Garrido et al., 2006). En todas estas modalidades de prevención se
requiere la colaboración de diversas disciplinas tales como, por sólo mencionar algunas
que resultan más evidentes, la criminología, la psicología, la victimología, el derecho, la
sociología, la educación, el trabajo social y el diseño urbanístico. No se hará aquí
referencia a todas las posibilidades y variantes de la prevención sino que se dirigirá la
atención a aquéllas en que la psicología ha mostrado hasta ahora una mayor utilidad, que
se concretan principalmente en el tratamiento psicológico de los delincuentes juveniles.

4.2. Desarrollo de nuevas habilidades.


Muchos delincuentes requieren aprender nuevas habilidades y hábitos de comunicación
no violenta, de responsabilidad familiar y laboral, de motivación de logro personal, etc. En
psicología se dispone de una amplia tecnología, en buena medida derivada del
condicionamiento operante, para la enseñanza de nuevos comportamientos y para el
mantenimiento de las competencias sociales que ya puedan existir en el repertorio
conductual de un individuo. Entre las técnicas que sirven para el desarrollo de nuevas
conductas destacan el reforzamiento positivo y el moldeamiento, a partir de dividir un
comportamiento social complejo en pequeños pasos y reforzar al individuo por sus
aproximaciones sucesivas a la conducta final. Las mejores técnicas para reducir
comportamientos inapropiados han mostrado ser la extinción de conducta y la enseñanza
a los sujetos de nuevos comportamientos alternativos que les permitan obtener las
gratificaciones que antes lograban mediante su conducta antisocial. El mantenimiento de
la conducta prosocial a largo plazo se ha promovido mediante contratos conductuales, en
que se pactan con el individuo los objetivos terapéuticos y las consecuencias que recibirá
por sus esfuerzos y logros. En instituciones, como prisiones y centros para delincuentes
juveniles, se han aplicado los denominados programas ambientales de contingencias, que
organizan el conjunto de una institución cerrada a partir de principios de reforzamiento de
conducta. Otra de las grandes estrategias de desarrollo de comportamientos prosociales
en los delincuentes es el modelado de dichos comportamientos por parte de otros sujetos,
lo que facilita la imitación y adquisición de la conducta en los ‘aprendices’. El modelado es
también la base de la técnica de entrenamiento en habilidades sociales, otra de las
técnicas más empleadas con los delincuentes (Redondo, 2007)

4.3. Desarrollo del pensamiento.


Muchos delincuentes son muy poco competentes en la solución de sus problemas
interpersonales, por lo que una estrategia de tratamiento especialmente aplicada ha sido
la de “solución cognitiva de problemas interpersonales”. Incluye entrenamiento en
reconocimiento y definición de un problema, identificación de los propios sentimientos
asociados al mismo, separación de hechos y opiniones, recogida de información sobre el
problema y análisis de todas sus posibles soluciones, toma en consideración de las
consecuencias de las distintas soluciones y, finalmente, adopción de la mejor solución y

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puesta en práctica de la misma. Otro de los grandes avances en el tratamiento cognitivo
de los delincuentes lo constituyen las técnicas destinadas a su desarrollo moral. El origen
de estas técnicas son los trabajos sobre desarrollo moral de Piaget y, especialmente, de
Kohlberg, quien diferenció una serie de niveles y ‘estadios’ de desarrollo moral, desde los
más inmaduros (en que las decisiones de conducta se basan en evitación del castigo y en
recompensas inmediatas) a los más avanzados (imbuidos de consideraciones morales
altruistas y autoinducidas). Las técnicas de desarrollo moral enseñan a los sujetos,
mediante actividades de discusión grupal, a considerar los sentimientos y puntos de vista
de otras personas (Palmer, 2003).

4.4. Regulación emocional y control de la ira.


Según ya se ha comentado, la ira puede jugar un papel destacado en la génesis del
comportamiento violento y delictivo. Las técnicas de regulación emocional parten del
supuesto de que muchos delincuentes tienen dificultades para el manejo de situaciones
conflictivas de la vida diaria, lo que puede llevarles al descontrol emocional, y a la
agresión tanto verbal como física a otras personas. En ello suele implicarse una
secuencia que incluye generalmente tres elementos: carencia de habilidades de manejo
de la situación, interpretación inadecuada de las interacciones sociales (por ej.,
atribuyendo mala intención) y exasperación emotiva. En consecuencia, el tratamiento se
orienta a entrenar a los sujetos en todas las anteriores parcelas, lo que incluye
autorregistro de ira y construcción de una jerarquía de situaciones en que la ira se
precipita, reestructuración cognitiva, relajación, entrenamiento en afrontamiento y
comunicación en la terapia, y práctica en la vida diaria (Novaco, Ramm y Black, 2001).

4.5. Prevención de recaídas.


La experiencia indica que muchos de los cambios producidos por el tratamiento no
siempre son definitivos sino que a menudo se producen retornos ‘imprevistos’ a la
actividad delictiva, o recaídas en el delito. Así, uno de los grandes objetivos actuales del
tratamiento de los delincuentes es promover la generalización de los logros terapéuticos a
los contextos habituales del sujeto, y facilitar el mantenimiento de dichas mejoras a lo
largo del tiempo. Con los anteriores propósitos se han concebido y aplicado dos grandes
tipos de técnicas psicológicas

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CONCLUSIONES

La delincuencia siempre ha existido. También la juvenil. A tenor de su evolución, no


podemos afirmar que el número de actos delictivos haya crecido enormemente. Lo que sí
podemos afirmar es que se ha dado un cambio cualitativo y cuantitativo de las conductas
violentas. El patrón tradicional de la delincuencia juvenil se centraba en delitos y faltas
contra la propiedad. Pero, de unos años a esta parte, sí se ha notado un sensible
incremento de episodios delictivos entre los más jóvenes (se ha rebajado la franja de
edad) y su agresividad (los daños infligidos son cada vez más graves), de forma

Voluntaria, a bienes materiales y a personas. Por el hecho de que un joven cometa un


acto delictivo no debemos deducir que sea el inicio de una futura carrera delictiva. Puede
tratarse de un hecho aislado que puede no volver a repetirse.

La familia, que imprime las normas de disciplina y condiciona el comportamiento social del
miembro más joven; la escuela, cuyo papel en la detección de actitudes violentas; las
amistades, ya que el contacto con malas influencias aumenta el riesgo… Todos estos
aspectos son vitales para evitar o reconducir una actitud violenta o agresiva en un menor.
La tecnología, una gran alidada en la vida diaria si se hace un uso positivo, también
puede ser una traba para la futura formación del menor. El efecto de los medios de
comunicación sobre los jóvenes tiene una doble influencia. Por un lado, la violencia que a
través de las pantallas y las páginas llega a los jóvenes. Algunos cálculos estiman que un
menor puede presenciar hasta 650 homicidios en televisión, en sólo una semana. Esa
familiaridad con la violencia puede insensibilizar al menor: adopta la conducta agresiva
como una pauta admitida socialmente. Por otra parte, el tratamiento que estos medios
realizan sobre los actos delictivos cometidos por niños y jóvenes. Por tanto, es un
problema multidisciplinar y debe explicarse desde muchos puntos de vista: el
criminológico, el sociológico, el psicológico, el educativo y el penal, entre otros muchos.

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Bibliografía

http://www.acaip.info/docu/menores/delincuencia_juvenil.pdf

http://www.delincuencia.com/trabajos103/investigacion-delincuencia-
juvenil/investigacion-delincuencia-juvenil.shtml

http://www.sename.cl/wsename/otros/observador4/el_observador_4.pdf

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