Las éticas helenísticas

El epicureísmo y el estoicismo
La filosofía pasó a tener un carácter eminentemente práctico, el cual se debió a la
conmoción en el nivel sociopolítico que se estaba viviendo entonces.
Ambas procuraban brindar al hombre concreto un modelo de vida que le permitiera la
“salvación” la cual residía en la riqueza y la tranquilidad.

La ética epicúrea
Epicuro fue el creador de una comunidad denominada “los filósofos del jardín”, puesto
que era en el jardín de una casa donde se reunían para cultivar la amistad y la filosofía,
las cuales eran claves para conseguir la felicidad.
¿Qué era la felicidad para Epicuro? Ésta se debía a la conjunción de de dos factores: la
ausencia de preocupaciones y el placer.
¿Cuáles son las preocupaciones que se proponen evitar? Son tres: el temor a los
dioses, el temor a la muerte y el temor al futuro. Los dioses eran, para Epicuro, seres
demasiado alejados de nosotros, los humanos, y no se preocupaban por nuestras
andanzas. En cuanto al temor a la muerte, lo consideraba un sinsentido, puesto que la
muerte no es otra cosa que la pérdida de la sensibilidad. Y por último, temerle al futuro
no tiene sentido porque éste no depende de nosotros ni tampoco es tan ajeno; y ya que
el destino no existe, poseemos cosas por azar y otras por obra nuestra.
El otro factor para lograr la felicidad es la obtención del placer.
Epicuro diferenciaba tres tipos de deseos: los naturales y necesarios (comer saludable
todos los días), los naturales y no necesarios (comer sabroso) y los no naturales ni
necesarios (asistir a una cena formal). Los placeres naturales son buenos y el deseo de
placeres no naturales y no necesarios debe ser evitado. Por eso, se puede afirmar que
la ética hedonista es una ética naturalista porque identifica lo natural con lo bueno.
Gracias a la prudencia se puede desechar un placer si éste ocasiona un mal futuro o no
caer en la aceptación ciega. La distinción de los distintos placeres, nos permite
acercarnos a una vida feliz, lo cual constituye el objeto de la filosofía. Epicuro valoraba
como placer fundamental la tranquilidad del alma y la ausencia de dolor, que con una
vida rodeada de amistades y placeres moderados brindará la felicidad.

La ética estoica
Se la creó en oposición al planteo de Epicuro.
Para los integrantes del estoicismo, la parte central de la filosofía es la ética y el
objetivo de ésta es mostrar al hombre el camino para lograr la felicidad, lo cual para
lograrlo, el hombre debe aceptar su destino con resignación y sólo será feliz cuando no
intente modificarlo.
¿El hombre tiene un destino? El hombre es sólo un momento en la naturaleza. El destino
de cada hombre puede ser muy diferente (esclavo o libre; pobre o adinerado), pero
siempre podrá ser feliz en la medida que acepte el destino impuesto.
Se diferencian dos órdenes de cosas: aquellas que no dependen de nosotros (destino;
son débiles y difíciles) y las que sí dependen, son libres por naturaleza y no hay
obstáculo. Para no sufrir por no obtener aquellas cosas que no dependen de nosotros,
debemos abstenernos de desearlas.

Integrantes: -Gallo, Guadalupe

-Cruz, Maia