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MATRIMONIO

HOMOSEXUAL
Ensayo
Perla Celeste Flores Flores
M2B
Amor es amor

Introducción
¿A favor o en contra? Una decisión muy difícil, mucho más en este tema. En estas
páginas escribiré mi opinión y mis argumentos del porque estoy a favor de la
homosexualidad y su matrimonio. Para empezar, la homosexualidad es una
atracción romántica, sexual o un comportamiento sexual entre miembros del
mismo sexo o género. Ser homosexual no significa sentirse atraído por todos los
miembros del mismo sexo o sentirse más atraído por las personas heterosexuales.
Los términos “gay “o “lesbiana” suelen ser usados para los homosexuales.

La palabra homosexual proviene del latín “homos” que significa “igual,


semejante” y el latín “sexus” que quiere decir “sexo”, en la real academia la
definen como “dicho de una persona, con tendencia a la homosexualidad”, “dicho
de una relación erótica, que tiene lugar entre individuos del mismo sexo”. El
vocablo homosexual es la atracción romántica, la atracción sexual o conducta
sexual que se encuentra entre los miembros del mismo sexo o género ya
sea hombre-hombre, mujer-mujer. (Conceptodefinicion.de, 2014). Estas
preferencias han generado discriminación a través de los años. La
homosexualidad no es ninguna enfermedad, sino una elección natural. La
homosexualidad es diferente en cada país, en algunos países es legal contraer
matrimonio mientras en otros lados los homosexuales son rechazados o incluso
perseguidos por tener esas preferencias. El matrimonio es algo que todos
merecemos porque todos tenemos el derecho del matrimonio, sin importar la
orientación sexual.

El tema del matrimonio homosexual se ha vuelto un tema muy polémico, y cada


persona tiene su propia opinión, aunque existen muchas personas que todavía
rechazan estas relaciones.
Las personas son libres y cada uno puede escoger a la persona que va a amar,
no importa si es del mismo género, simplemente es amor y muchas de estas
parejas quieren contraer matrimonio, pero hay muy pocos lugares donde es legal
el matrimonio homosexual.

La homosexualidad muchas veces ni es una elección. Nadie se levanta y dice


“¡Oh, quiero ser homosexual!
La homosexualidad no es ninguna enfermedad, si lo es, entonces declarémonos
todos gays en el trabajo. “Hola, no puedo ir a trabajar, sigo siendo gay.”
El amor es un misterio, y nunca se sabe de quién va a terminar enamorado.

Datos sobre la homosexualidad


Actualmente, en Estados Unidos aproximadamente 9 millones de personas se
identifican como LGBT (lesbianas, gay, bisexuales o transgéneros), es decir, el
3.4% de los adultos que habitan ese país. En México, de acuerdo con la Encuesta
de Valores de la Juventud que realizo el Instituto de Ciencias Jurídicas de la
UNAM junto con el instituto Mexicano de la Juventud en 2012 encontró que el
3.6% de las y los jóvenes encuestados se reconocen como gays, bisexuales o
lesbianas. Por otra parte, de acuerdo con el Censo de Población y Vivienda del
INEGI del 2010 hay casi 230 mil hogares compuestos por parejas del mismo sexo,
es decir, casi el 1% de hogares en México. (HomoZapping, 2014)
Contando todos estos números, hay por lo menos 2 millones y medio de personas
LGBT en el mundo. Alfred Kinsey afirmaba que el 10% de una población podría
ser gay o bisexual. Sin embargo, estos números pueden cambiar dependiendo de
las experiencias sexuales contra la orientación.
Kinsey (1998) escribió que “El varón no es quien representa estas dos poblaciones
distintas, heterosexual u homosexual. El mundo no puede ser dividido entre
cabras y ovejas. Es un fundamento de la taxonomía en que la naturaleza
raramente se enfrenta con categorías separadas... El mundo vivo es continuo en
cada uno de sus aspectos.”

Homosexualidad

Cuando encuentras el par correcto de calcetines, se ven lindos. Pero cuando no


encuentras los pares, haces combinaciones y también se ven lindos, no por eso
dejan de cumplir el mismo fin, ni mucho menos odias el hecho de que no sean los
calcetines iguales a todos los demás, mientras los calcetines tengan la finalidad de
cubrir los pies todo está bien. Lo mismo sucede con la homosexualidad, las
parejas heterosexuales buscan amarse y compartir una vida juntos, así como las
homosexuales también. Ambos tipos de parejas tienen el mismo fin; el amor. Así
como puede haber un par de calcetines iguales, es decir, que sean considerados
como lo “correcto” de la misma manera pueden existir parejas que no
necesariamente tengan que cumplir cierto modelo o estereotipo, como el género.
Y no porque haya mayoría de heterosexuales significa que los homosexuales
merecen ser odiados. Mientras haya amor, todo está bien, el amor es lo
importante, no el qué dirán o el que pensarán.

En mi experiencia personal he tenido poco contacto con personas LGB, pero las
he conocido y son personas normales, todas comen, todas duermen, todos ríen
por algo, y les gusta cierto tipo de música. La única diferencia es su orientación
sexual, pero eso no les quita lo buenas personas que son, lo lindos que son,
porque la orientación sexual no afecta su carácter o su forma de ser, simplemente
tienen otras preferencias, por ejemplo, si a mí me gusta el rock y a ti el pop, no te
voy a odiar por eso. Es lo mismo que pasa con los homosexuales, simplemente
tienen otros gustos, pero son iguales que nosotros ante la ley, y son seres
humanos, no son ningún alíen fuera de este mundo, simplemente son personas.
Homosexualidad a través del tiempo
En la antigua China el sexo entre hombres era válido, las uniones duraban un
número limitado de años, al cabo de los cuales el más viejo ayudaría al más joven
a elegir a una esposa y crear una familia. Un antiguo ejemplo de unión civil
masculina se encuentra al principio de la Dinastía Zhou de China en la historia de
Pan Zhang y Wang Zhongxian. El primer matrimonio entre mujeres fue en el año
1901. (Wikipedia, s/f)

La legalidad ante la homosexualidad.


En muchos países se trata de reconocer el matrimonio homosexual, pero aún no
es posible. Actualmente, 22 países reconocen el matrimonio homosexual. Estos
son los países que lo reconocen en toda la extensión de su territorio: Argentina,
Bélgica, Brasil, Canadá, Colombia, Dinamarca, España, Estados Unidos, Francia,
Irlanda, Islandia, Luxemburgo, Noruega, Nueva Zelanda, Países Bajos, Portugal,
Sudáfrica, Suecia y Uruguay. México y Reino Unido lo reconocen en solo algunas
partes del país. (Rtve, s/f).

En 74 países la homosexualidad es un delito penal. En 8 países se condena a


pena de muerte. Desde hace años, ha existido algún tipo de rechazo a este tipo de
relaciones. Un claro ejemplo de esto es la persecución de los homosexuales en la
Alemania Nazi. Este tipo de conductas iban en contra de la ideología nazi porque
los homosexuales no se reproducían y no se procreaba. Las autoridades hacían
todo para evitar que la homosexualidad se hiciera más extensa. En el artículo 175
del código penal alemán se penaba a las relaciones homosexuales, porque estas
iban en contra de la naturaleza. En total, 140,000 hombres fueron víctimas de este
artículo. La homofobia del partido nazi queda inicialmente en segundo plano frente
al antisemitismo, que es su frente de batalla más visible. (s/a, 2003). Como
ejemplo, en 1928, a una pregunta de la revista Der Eigene, el partido Nazi
respondió:
“¡El interés de la comunidad por delante del interés propio! No es necesario que tú
y yo vivamos, pero es necesario que viva el pueblo alemán […] Sólo se puede
mantener púber si mantiene la disciplina, sobre todo frente a la lujuria. El amor
libre es obsceno. Por eso lo rechazamos, tal como rechazamos lo que daña a
nuestro pueblo. ¡El que piensa en amor entre hombres o entre mujeres es nuestro
enemigo!” Herrn, Rainer (1999).

La religión en la homosexualidad

También existen personas en contra de esto porque supuestamente va en contra


de lo que Dios manda, una mujer y un hombre para procrear. El matrimonio no es
ningún tema religioso, es un tema civil. Si fuera religioso, no veo por qué Dios
estaría en contra de esto, Dios es amor y decir este tipo de cosas es causar algún
tipo de repulsión al matrimonio homosexual, lo contrario que Dios quiere que
hagamos, que es amarnos como somos y amar a los demás sin pretender
cambiarlos. Aparte de que, el Papa Francisco se une a esta causa, el mismo dijo
“Me asocio de buena gana a los Obispos de México para sostener el compromiso
de la Iglesia y de la sociedad civil en favor de la familia y de la vida, que en este
tiempo requieren especial atención pastoral y cultural en todo el mundo”.
(Infovaticana, 2016). Porque de eso se trata, estar a favor de la familia y vida, y a
esa diversidad en todo el mundo.

La aceptación de ser homosexual


Por otra parte, aunque muchas personas rechazan el matrimonio entre personas
del mismo sexo, hay personas que han cambiado su forma de ver y aceptan esta
unión. Muchas personas están aceptando su orientación sexual. Salen del closet e
influyen en sus familiares y amigos porque estos los van aceptando, queriendo y
comprendiendo que la orientación sexual no afecta en la personalidad de una
persona, generando menos odio en la sociedad. Un ejemplo que ilustra esta
tendencia es el testimonio del senador federal Rob Portman por el Estado de Ohio,
quien representa los valores republicanos conservadores y se ha opuesto al
matrimonio gay. Eso fue antes que su hijo, Will, saliera del clóset y se sincerara
con sus padres. Esto significa un gran cambio porque hay más tolerancia y más
probabilidades de que se acepten leyes para el matrimonio homosexual. (Roth,
2016).

En México, el mismo presidente Enrique Peña Nieto se une a esta causa de


matrimonio entre personas del mismo sexo, mandando propuestas al congreso
sobre este tema, Peña Nieto respondió que determinar el matrimonio entre
personas del mismo sexo es facultad de las legislaturas estatales y que su
gobierno no intervendría en lo que éstas decidieran. (Campero, 2016).

Matrimonio homosexual

Mi propio concepto de matrimonio es la unión libre de dos personas mayores de


edad para compartir una vida común, amarse, respetarse, tener sentimientos de
solidaridad e igualdad.

La definición del matrimonio homosexual es la unión entre dos personas del


mismo sexo (biológico y legal), que es concertada mediante ciertos ritos o
formalidades legales, a fin de establecer y mantener una comunidad de vida e
intereses. (Significados, s/f).
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos declaro que el matrimonio entre
personas del mismo sexo no es un derecho, ya que en el artículo 12 del Convenio
Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades
Fundamentales se enuncia que el matrimonio es la unión entre hombres y
mujeres, y gracias a eso no tienen por qué abrir el matrimonio a personas del
mismo sexo. (ForumLibertas, 2010). Muchas organizaciones trabajan para
reconocer este derecho.
Las personas homosexuales tienen los mismos derechos porque al final son seres
humanos, y merecen amar a la persona que quieren, ya sea hombre o mujer, y si
deciden contraer matrimonio, ¡Qué bueno!, pero no por eso tienen que ser
discriminados, y mucho menos tienen que esperar a que se haga legal, ya que su
orientación sexual no debería afectar en contraer matrimonio, y si deciden adoptar,
¡Bien!, se ha demostrado que los hijos adoptados por estas parejas se desarrollan
de manera normal. Así que no veo razones para estar en contra, si te da asco, no
mires y ya, pero no generes ese odio, que no es el propósito. El único propósito de
todo esto, toda esta lucha, todas esas muertes de homosexuales, toda esa
discriminación, toda esa burla, todos esos rechazos, es para que al final, el amor
sea el que gane, y ese día va a llegar, y valdrá muchísimo la pena.

Yo apoyo el matrimonio homosexual porque creo que el amor es amor sin importar
las condiciones del otro individuo, y si dos personas se pueden juntar y decidir
compartir el resto de sus vidas juntos, es algo maravilloso. Se me hace algo
injusto eso de leyes que acepten matar a los homosexuales solo por ser lo que
son. Todos somos diferentes, pero tenemos los mismos derechos. Derecho a
escoger a tu compañero de vida, respetarlo y amarlo, porque todos merecemos un
poco de amor, y es importante compartir este amor con otras personas. Todas las
personas merecen ser felices, libres e iguales ante la ley. La sociedad está
progresando, y se espera que se superen las barreras discriminatorias. Aunque
hay muchas parejas del mismo sexo, hay muchos que prefieren no casarse. El
matrimonio homosexual no es malo. Lo importante es el amor, y siempre lo será.

El rechazo de parte de las parejas heterosexuales


Por otra parte, el matrimonio entre personas del mismo sexo no
afecta en nada a los heterosexuales, ¿Por qué deberían estar en una posición
negativa en algo que ni siquiera les afecta? Este es un tema totalmente de
igualdad. Aparte se encuentran otros beneficios, como el de que reducirá la tasa
de divorcios o reducir la cantidad de niños en orfanatos. Si esto se acepta,
seremos una sociedad más unida.

Esto representa un grave problema, ¿Por qué el amor tiene que generar pena de
muerte? Yo estoy a favor del matrimonio homosexual porque cada uno elige a
quien amar, sin importar el sexo. Si el matrimonio heterosexual es legal, el
homosexual también debería serlo porque todos somos iguales ante la ley.
Muchas personas están en contra y sus argumentos son generalmente que el
matrimonio homosexual significa dar libertad de adopción, y que esto sería un
gran problema para los niños y la sociedad. El mayor miedo de crear estas
familias homoparentales es el hecho de que pueda cambiar la orientación sexual
de los niños. Pero muchas veces esto ni siquiera sucede, por ejemplo, las hijas de
mamas lesbianas siguen presentando rasgos de feminidad, y los hijos de gays
siguen presentando signos de hombría, entonces ¿Cuál es el problema? Si los
heterosexuales dejaran de tener hijos y no hacerse cargo de ellos, no tendrían que
preocuparse de que una pareja homosexual los adopte, ni de que afecte a su
“integridad”.
Los divorcios
El matrimonio homosexual no debilita al matrimonio tradicional, muchas veces lo
hace más fuerte ya que levanta la dignidad del matrimonio. Uno de cada dos
matrimonios heterosexuales termina en divorcio. Por el otro lado, en la Ciudad de
México, según estadísticas del registro civil en solo 6 años se han formalizado 34
divorcios de las 4 mil 35 uniones. Esto representa el 1% de matrimonios
fracasados. Las personas homosexuales que contraen matrimonio lo hacen por
amor y porque se conocen lo suficiente. En pocas palabras, la mayoría ya sabe lo
que quiere y a lo que aspira. (Milenio, 2014)

“El tema del matrimonio homosexual es uno de tantos ejemplos de la táctica


victimista, soy una víctima, por tanto, si no me das todo lo que te pido y me
permites pisarte como un tapete, se demuestra que eres una persona malvada y
llena de odio." Los homosexuales no se aprovechan de su situación, porque,
aunque pueda exagerarse un poco, aun así, existen personas que en realidad
odian la homosexualidad, y la repudian, y todo mundo es sensible, si le dijeran
algo en contra a aquella actividad que adoras, te enojaría. Pasa lo mismo, lo que
pasa es que todo mundo solo ve por el mismo y no practica la empatía, ¿Qué
pasaría si fuera al revés? Si fueras criticado por que te gusten las mujeres siendo
un hombre, ¿No te molestaría? ¿No te sentirías? Eso no significa que te
conviertas en una víctima ni mucho menos aprovecharte de eso. Simplemente
sienten, algo que todas las personas hacen, tener sentimientos.

Hogares homoparentales

Es cierto que un niño merece a un padre y una madre para su buen desarrollo,
pero en muchos casos no tienen ninguno. A los niños les va bien en hogares
homoparentales porque tienen un ambiente de amor y estabilidad,
independientemente de la orientación de los padres. Al estar casados, los padres
les ofrecen mayor estabilidad familiar. Los y las adolescentes que pertenecen a
una familia homoparental tienen inclusive menos problemas de interacción social
que los adolescentes que viven en familias heterosexuales. (Romero, 2017). Los
roles sexuales generalmente están formados por la genética. Al ser hijo de una
familia homoparental se enfrentan problemas como el bullying, pero para eso
están los padres (o madres), para enseñarles a ser seguros y no dejarse llevar por
esos comentarios, un niño seguro afrontará mejor el bullying. Se han realizado
estudios que la orientación sexual de sus padres no afecta en su integridad. Un
ejemplo es el estudio hecho por The US National Longitudinal Lesbian Family
Study, a 54 madres lesbianas y sus hijos, los resultados fueron que los hijos se
adaptaban mejor a su entorno social, tenían menos tendencia de romper las
reglas, y mejor rendimiento académico. Tienen menos problemas de conducta y
agresividad, solo se resienten ante los comentarios homofóbicos. (AAP, 2013).
A ellos no les afecta que sus madres sean lesbianas, ni el conocer o no conocer la
identidad de su padre, ni el que su madre viva sola o en pareja o se haya
separado recientemente. ¿Por qué a otras personas de fuera les molesta? ¿En
qué les afecta? ¿Por qué se insiste en considerar la familia formada por hombre y
mujer como la única manera de crianza, si vemos que día a día más familias
diversas se conforman en nuestro país y necesitan nuestro apoyo? ¿Por qué debe
discutirse este tema desde la mirada biomédica cuando se trata del derecho de las
personas a criar a sus niños de manera digna, con la protección social y de salud
física y mental que merecen?
Un estudio demuestra que el 12% de las hijas de madres lesbianas se declararon
lesbianas, pero no se puede demostrar el hecho de que sus madres las influyeron
o simplemente son ellas. (Patterson, s/f)

¿Y las parejas heterosexuales?

En la actualidad, aproximadamente hay 7,587 millones de personas en el mundo,


de las cuales el 50.4% lo representan hombres y el 49.6% lo representan mujeres.
En el mundo, aproximadamente entre el 1% y el 3% de la población es
homosexual. La población homosexual es muy poca, sigue siendo mayoría las
personas heterosexuales. Es muy poco probable que la gente heterosexual
desaparezca, puesto que siempre ha existido, al igual que los homosexuales. No
podemos predecir si esta población homosexual puede hacer desaparecer a todos
los heterosexuales, sin embargo, algo de lo que si estamos seguros es de que
siendo mayoría o no, merecen los mismos derechos que todos los demás. (Sosa
JR, 2016).

Conclusiones
Apoyar el matrimonio homosexual no es “Promover la homosexualidad”, sino, es
evitar que se genere más discriminación. Se critica el orgullo homosexual y la
diferencia, pero tampoco se acepta una solución integradora aun cuando el
matrimonio entre personas del mismo sexo es una victoria conservadora. Hay que
aprender a ser tolerantes, y uno no es tolerante cuando acepta a los que son
iguales que él, sino, a los que son diferentes. Aceptar el matrimonio homosexual
es un acto de amor porque se acepta a los demás como son sin pretender
cambiarlos.

Hay que tratar de ser tolerantes, no estoy tratando de convencer a que estén a
favor, solamente que se respete el matrimonio homosexual, porque todos somos
libres, libres para escoger nuestra forma de vestir, pensar, o simplemente nuestros
pasatiempos. Si una persona puede escoger eso, ¿Por qué no puede escoger a
una pareja del mismo sexo y querer casarse con ella? Son decisiones personales,
y aunque todavía hay muchas personas que no toleran estas conductas, también
hay muchas que se unen a la causa. Si todos fuéramos más comprensivos ¿Este
mundo no sería un lugar mejor?
Referencias

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or Lesbian. Recuperado de
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