Sei sulla pagina 1di 11

CONCEPTUALIZACIÓN, DIMENSIONESY MODELOS DE LA

EVALUACIÓN.

CONCEPTUALIZACIÓN DEL TÉRMINO EVALUACIÓN


El concepto de evaluación ha estado sujeto a tantos puntos de vista filosóficos,
epistemológicos y metodológicos como teorías y estudiosos se han empeñado en
definirlo. Para este trabajo solo se muestran algunas categorías de las definiciones que
se han presentado en el transcurso de la historia (Jiménez, 2000, pp. 31-33) y un
representante, sin ser exhaustivos en el propósito. De este modo, se tienen:

 Definiciones que se concentran en especificar los atributos que deberán mostrar


los alumnos después de la instrucción. La evaluación se enfoca en la evolución de
los estudiantes.

 De acuerdo con Tyler (1980) es un proceso que permite determinar hasta qué
punto se alcanzaron los objetivos educativos.

 Definiciones en donde la evaluación busca determinar el mérito o valor. Implica


establecer criterios y emitir un juicio sobre la medida (valoración).

 Joint Comte (1988) menciona que la evaluación es el enjuiciamiento sistemático


sobre el mérito de un objeto.

 Definiciones que consideran la evaluación como un proceso que apoya en la toma


de decisiones. Incorpora nuevas funciones y momentos evaluativos (evaluación
diagnóstica, evaluación formativa y evaluación sumativa).

 Fernández (1993) define la evaluación como la emisión de un juicio valorativo


sobre una realidad educativa con el propósito de tomar decisiones.

 Definiciones que sintetizan y engloban los aspectos anteriores.

 Pérez Gómez (1983) considera la evaluación como un proceso que recupera


evidencias sobre el funcionamiento y evolución de la realidad educativa, con el
objetivo de tomar decisiones sobre la posibilidad, efectividad y valor del currículo.
De esta síntesis se concluye que la evaluación se conceptualiza como:

1) Proceso sistemático de recogida de información que,


2) Implica un juicio de valor y
3) Está orientada hacia la toma de decisiones.

La evaluación como proceso básico del pensamiento está afirmada en la comparación y


conlleva la emisión de juicios de valor. Esta comparación, intrínseca o ex profeso, se
realiza entre un modelo ideal y una situación observada o entre dos objetos o situaciones
comparados mediante criterios externos, sean estos las expectativas de personas
interesadas u objetivos especiales de la evaluación y ambos derivan en la expresión de
juicios de valor para la toma de decisiones. Para Margarita Amestoy (1991, pp. 425, 474)
estas son respectivamente, la evaluación interna y la evaluación externa.Sin perder de
vista este acercamiento generalizado de las definiciones del concepto de evaluación, se
considera al agente que toma la iniciativa de la evaluación para categorizar
la evaluación en interna y externa. Así, desde el agente, la evaluación interna es aquella
que surge del deseo del profesor por comprender y transformar sus actividades con un
propósito de mejora, mientras que la evaluación externa sale de la preocupación de los
responsables públicos de la educación o de los destinatarios del servicio que la escuela
presta (Santos, 1995, p. 88).
De esta síntesis se concluye que la evaluación se conceptualiza como: 1) Proceso
sistemático de recogida de información que, 2) Implica un juicio de valor y 3) Está
orientada hacia la toma de decisiones.La evaluación como proceso básico del
pensamiento está afirmada en la comparación y conlleva la emisión de juicios de valor.
Esta comparación, intrínseca o ex profeso, se realiza entre un modelo ideal y una situación
observada o entre dos objetos o situaciones comparados mediante criterios externos,
sean estos las expectativas de personas interesadas u objetivos especiales de la
evaluación y ambos derivan en la expresión de juicios de valor para la toma de decisiones.
Para Margarita Amestoy (1991, pp. 425, 474) estas son respectivamente, la evaluación
interna y la evaluación externa.Sin perder de vista este acercamiento generalizado de las
definiciones del concepto de evaluación, se considera al agente que toma la iniciativa de
la evaluación para categorizar la evaluación en interna y externa. Así, desde el agente,
la evaluación interna es aquella que surge del deseo del profesor por comprender y
transformar sus actividades con un propósito de mejora, mientras que la evaluación
externa sale de la preocupación de los responsables públicos de la educación o de los
destinatarios del servicio que la escuela presta (Santos, 1995, p. 88).
DIMENSIONES DE LA EVALUACIÓN
El objeto de la evaluación (¿qué?). Los objetos más socorridos para la evaluación son los
alumnos, personal docente y no docente, el currículo, losrecursos, planes y programas,
proyectos, estrategias metodológicas, instituciones y contextos.
La finalidad (¿para qué?). La evaluación se puede aglutinar en tres finalidades:
 La evaluación diagnóstica (de entrada), que permite conocer la realidad relativa tanto
al contexto como a los destinatarios. Esta evaluación posibilita hacer ajustes,
prever recursos para tener un programa exitoso y en lo relativo a los destinatarios,
permite conocer las necesidades de formación, sus posibilidades respecto al programa,
lo mismo que las decisiones sobre admisión, orientación, niveles de aprendizaje, etc.
 La evaluación formativa (de proceso), está referida al desarrollo del programa en un
contexto determinado cuyo propósito es la mejora y optimización del mismo. Por lo
tanto, permite ajustes, implementación de nuevos medios y recursos, cambios de
actividades y el papel del formador.
 La evaluación sumativa (de productos), muestra los resultados obtenidos que pueden
ser utilizados para valorar globalmente el programa implementado y tomar decisiones
de certificación, promoción con respecto a los destinatarios implicados o de rechazo o
aceptación respecto al mismo programa.
El momento (¿cuándo?). Tradicionalmente de tienen tres momentos para la
evaluación: inicial, continua y final, pero habría que añadir la
evaluación diferida o evaluación de impacto para conocer las repercusiones que se tienen
a lo largo del tiempo.
Se pueden establecer paralelismos entre estas dos dimensiones, pero no siempre resulta
obvio ya que en ocasiones se puede dar una evaluación continua con
fines sumativos, como es el caso en el que se recaba información para asegurar una
evaluación final del alumno más que para la mejorar de proceso.
El modelo (¿cómo?). El modelo paradigmático que se escoja irá en función de las variables
implicadas en el proceso evaluativo y afecta al diseño de la evaluación. En el siguiente
apartado se puntualizan las características de los modelos a considerar.
El instrumento (¿con qué?). Esto nos remite considerar las herramientas que servirán para
la recogida de la información, instrumentos y técnicas estructurados, semiestructurados o
sin estructurar, susceptibles de ser tratados cualitativamente o cuantitativamente, pero en
todo caso, válidos, fiables, pertinentes, tomando en cuenta la complementariedad y
triangulación de instrumentos.
El evaluador (¿quién?). El agente que evalúa es eje importante en el hecho educativo.
Además de los implicados tradicionalmente, se debe considerar la figura de
los expertos quienes hacen la diferencia entre una evaluación interna y una
evaluación externa, entre una autoevaluación y una heteroevaluación. Un factor que se
manifiesta fuertemente, con respecto al agente evaluador, es la necesidad de capacitación
técnica para poder evaluar, el conocimiento de técnicas, instrumentos, metodologías, etc.,
con el fin de procurarse mayor ‘objetividad’ en el proceso evaluativo.
El referente se convierte en la dimensión diferenciadora de la evaluación ya que es la
fuente de criterios e indicadores de evaluación. El referente hace coherente la política
formativa, la contextualización, los principios pedagógicos y los participantes.

MODELOS DE EVALUACIÓN

A continuación se presentan los diferentes modelos, citados por Jiménez ( 2000, pp. 38-
56) que muestran la gran diversidad de modelos de evaluación que existen, conviene
analizarlos y reflexionar sobre qué aspectos de cada uno pueden fortalecer nuestra labor
docente:
Las distintas categorías en las que se han dividido las definiciones, vistas anteriormente,
han sido generadas como consecuencia de los diferentes modelos evaluativos que han
surgido. En este espacio, se detallarán los que se consideran como más representativos.
Se iniciará con los modelos cualitativo y cuantitativo por la trascendencia y relevancia que
tienen con estos modelos.

EVALUACIÓN CUANTITATIVA Y EVALUACIÓN CUALITATIVA

Según se trate de la metodología que se desea utilizar cuantitativa o cualitativa, se estará


frente a las evaluaciones correspondientes, evaluación cuantitativa o evaluación
cualitativa. Si bien son paradigmas irreconciliables, para el complejo tema de la educación
es necesario, a veces, recurrir a la triangulación y / o a la combinación de las mismas. El
cuadro siguiente (Tejada, 1989b, pp. 136-137, citado por Jiménez, 2000, p.43) es un
comparativo entre ambas evaluaciones:
EVALUACIÓN ORIENTADA HACIA LOS OBJETIVOS

Esta modalidad de evaluación se caracteriza por determinar la congruencia entre los


objetivos y los logros. Parte de dar cumplimiento a un programa, dentro de una
concepción tecnológica de la enseñanza, y considera a la evaluación como una etapa
esencial en el desarrollo de este programa. Considera, además, que el proceso real de
evaluación está determinado por esta serie de pasos:

1. Establecer las metas u objetivos.


2. Ordenar los objetivos en amplias clasificaciones.
3. Definir los objetivos en términos de comportamiento.
4. Establecer situaciones y condiciones según las cuales
puede ser demostrada la consecución de los objetivos.
5. Explicar los propósitos de la estrategia al personal más
importante en las situaciones más adecuadas.
6. Escoger o desarrollar las apropiadas medidas técnicas.
7. Recopilar los datos de trabajo.
8. Comparar los datos con los objetivos de
comportamiento.
En este modelo evaluativo, el alumno muestra criterios específicos de ejecución por
medio de exámenes estandarizados, con lo que se obtienen los resultados educativos;
además, la elaboración de baterías de exámenes para evaluar al alumno es considerada
como una parte importante del proceso de evaluación. El modelo ofrece entre
otras ventajas una sistematización práctica por lo que ha sido muy popular y utilizado en
la pedagogía por objetivos. Entre sus limitaciones se pueden enumerar:
 Se le considera como un proceso terminal que ofrece información solo al final del
*programa, por lo que se vela el proceso formativo.

 Pone énfasis en los objetivos preestablecidos y con ello provoca el olvido e ignorancia
intencional de los efectos secundarios de la escuela y de los acontecimientos
accidentales no previstos.

 No tiene presente que los logros de los alumnos solo se comprenden en contextos
concretos y en relación con los significados particulares que el mismo alumno le da a
su experiencia.

 Se centra en comportamientos observables, como si fueran indicadores simbólicos de


procesos internos y aprendizajes complejos que no se pueden deducir de meras
conductas externas.
 Es un modelo burocrático en el que la audiencia de la evaluación es la productora del
programa, no sus usuarios.

MODELO CIENTIFICO DE EVALUACIÓN

En este modelo se considera que el evaluador debe ser un investigador ya que la evaluació
debe basarse en la lógica del método científico.
Los propósitos de este modelo son:

Describir si los objetivos han sido alcanzados y de qué manera.


Determinar las razones de cada uno de los éxitos y fracasos.
Descubrir los principios subyacentes en el programa que ha tenido éxito.
Dirigir el curso de los experimentos mediante técnicas que aumenten su efectividad.
Sentar las bases de una futura investigación sobre las razones del relativo éxito alcanzado.
Los criterios de éxito o fracaso para evaluar un programa, pueden ser:

 Esfuerzo. La valoración implica el esfuerzo y no el producto.

 Trabajo. Se valoran más los resultados del trabajo que el esfuerzo en sí mismo.

 Suficiencia del trabajo. Es el grado en que el trabajo realizado coincide, por comparac
necesidades de acuerdo con los objetivos.

 Eficiencia. Relación entre el esfuerzo realizado y los resultados.

 Proceso. Investiga sobre las razones que conducen a los resultados.


o Dimensiones para el análisis del proceso: los atributos del programa, gente a la qu
programa, contexto en el que se desarrolla y tipos de efectos producidos.
Ventajas y limitaciones del modelo científico de evaluación:

 Las ventajas se centran en que es un proceso continuo y abierto con una actitud
crítica y no dogmática o preestablecida.
 Las limitaciones se circunscriben a que la utilidad de los resultados en ocasiones está
motivada por ‘intereses creados’ por los administradores o gestores de programas
educativos; el destinatario se le sigue considerando desde un planteamiento
conductual; el evaluador puede mediar en el análisis de los resultados; la
instrumentalización y el proceso evaluativo quedan configurados desde un
planteamiento puramente cuantitativo.

MODELO DE TOMA DE DECISIONES

En este modelo la evaluación se estructura en relación con las decisiones que se han de
tomar a lo largo del desarrollo del programa y se articula en tres pasos:

Delimitar: Los evaluadores junto con los responsables de la toma de decisiones


identifican la información necesaria.
Obtener: recoger y procesar la información
Aplicar: suministrar la información recogida y procesada a los responsables de las
decisiones.

Stufflebeam plantea cuatro tipos de decisiones relacionados con los tipos de evaluación:
contexto, entrada, proceso y producto, que se resumen en el cuadro siguiente:
Las ventajas del modelo: resuelve el problema del evaluador porque toma como
destinatario al responsable de las decisiones y adopta como criterios significativos los
propios de este último.
La limitación será que el carácter jerárquico de los sistemas educativos y la tendencia a
hacer imposiciones desde arriba y desde fuera se transforman en puntos críticos.

MODELO DE EVALUACIÓN RESPONDENTE

Este modelo pone énfasis en la acomodación a las necesidades del ‘cliente’, por lo que
requiere de una comunicación constante entre el evaluador y quienes solicitan la
evaluación. Las características principales son:

 Las evaluaciones deben ayudar a quienes solicitan la evaluación a observar y mejorar


lo que están haciendo.
 Los efectos secundarios y los logros accidentales deben ser tan estudiados como los
resultados buscados.
 Toman en cuenta las interpretaciones que ofrecen las personas implicadas en el
examen.
 Los evaluadores deben evitar la presentación de conclusiones finales resumidas, pero
deben recopilar, analizar y reflejar los juicios de aquellas personas interesadas en el
objeto de la evaluación.
Los experimentos y los tests estandarizados con frecuencia son inadecuados o
insuficientes para los propósitos de la evaluación, por lo que deben ser sustituidos o
completados con una variedad de métodos.

La estructura funcional para la evaluación respondente no es lineal y se puede presentar


en estos puntos:

 Hablar con los ‘clientes’.


 Descubrir los propósitos e intereses.
 Conceptualizar y problematizar las cuestiones.
 Identificar datos para investigar los problemas.
 Seleccionar observadores, jueces e instrumentos.
 Observar antecedentes.
 Desarrollar temas, preparar descripciones y estudiar casos concretos.
 Validación.
 Reunir informes.

Las ventajas del modelo se notan a partir de que crea un ‘modelo sui generis’ con un
método plural, flexible, holístico, subjetivo, orientado hacia el ‘cliente’ donde el evaluador
es un ‘buscador de la verdad’. Se cree que esta evaluación es más útil de manera interna
que externa. Las limitaciones giran en torno a la escasa consideración en la precisión de
los datos, la dificultad para distinguir entre descripción y análisis, la confianza puesta en
los participantes para analizar las interacciones complejas y la tendencia a infravalorar la
naturaleza y función política de la evaluación.
MODELO DE EVALUACIÓN SIN REFERENCIA A LOS OBJETIVOS

Este modelo de evaluación no toma en cuenta los objetivos del programa partiendo del
principio de que si el evaluador los ignora, será más objetivo al evaluar. Para sustentar
este modelo, el concepto de evaluación consiste en recopilar y combinar datos que
generen escalas comparativas o numéricas. El evaluador debe juzgar las metas pero no
limitarse tan solo a ellas a la hora de buscar resultados. De hecho, se puede empezar una
evaluación sin metas con el propósito de investigar todos los efectos para luego realizar
un cambio de método o realizar una evaluación paralela a fin de confirmar, por distintos
evaluadores, que las metas han sido alcanzadas.

 La formativa, Ayuda al desarrollo del programa.


 La sumativa. Calcula el valor del objeto una vez que ha sido desarrollado.

Potrebbero piacerti anche