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Respeto y procesos civilizatorios.

Imbricación socio-psíquica de las emociones


Artículo de Carina V. Kaplan y Verónica S. Silva
Praxis educativa, Vol. 20, Nº 1; enero-abril 2016 - ISSN 0328-9702 (impreso) y 2313-934X (en línea), pp. 28-36
DOI: http://dx.doi.org/10.19137/praxiseducativa-2016-200103

Respeto y procesos civilizatorios.


Imbricación socio-psíquica de las emociones

Carina V. KAPLAN* y Verónica S. SILVA**

Resumen Respect and civilizing processes.


Socio-psychic overlap of emotions
En este trabajo presentamos una se-
rie de aproximaciones teóricas acerca Abstract
del fenómeno del respeto en su di-
mensión socio-psíquica a los fines de In this paper we present a set of ap-
alcanzar una compresión profunda de proaches on the phenomenon of respect
la estructura afectiva que los jóvenes in its socio-psychic dimension, in or-
construyen en la vida escolar. Partimos der to achieve a deeper understanding
de la consideración de que en nuestras of the emotional structure that adoles-
sociedades capitalistas el respeto es un cents construct in the school life di-
bien simbólico escaso. El miedo a la mension. Our fundamental premise is
pérdida del prestigio o estima social y a that in our capitalist societies respect is
la degradación personal se erige como a scarce symbolic asset. Consideration
un regulador del comportamiento y for others is the result of a complex and
como mecanismo eficaz de control arduous civilizing process. The fear of
y auto-control de las emociones. Las losing reputation or social esteem and
disposiciones sociales y morales impri- personal degradation stands as a regu-
Serie “Yo te anido”,
men modos específicos de vinculación lator of behavior and as an effective
lápiz sobre aguadas. Paula Rivero
a través del respeto mutuo formando mechanism of control and self-control
parte de una estructura emotiva de of emotions. Social arragements deter-
matriz sociocultural e histórica. mine and stipulate specific modes of
linking through mutual respect as part
*
Doctora en Educación por la UBA of an emotional and historical socio-
y Magíster en Ciencias Sociales y cultural configuration matrix.
Educación por la FLACSO. Posdoctorado
en la Universidad Estadual de Rio de
Janeiro. Profesora Titular Ordinaria Palabras clave: respeto; estructura Keywords: respect; emotional struc-
de Sociología de la Educación en la emotiva; jóvenes estudiantes; sociolo- ture; adolescents students; figurational
FFHyCE de la UNLP y Profesora Adjunta
Regular en la FF y L - UBA. Investigadora
gía figuracional sociology
Independiente del CONICET. Directora
del Programa de Investigación sobre
Transformaciones sociales, Subjetividad
y Procesos educativos del IICE- UBA.
IICE Puan 480 4to piso, of. 440 , CABA/
Argentina | kaplancarina@gmail.com

**
Lic. en Psicología por la Universidad
Nacional de Córdoba. Becaria doctoral Introducción
del CONICET, bajo la dirección de Carina

L
V. Kaplan y la co-dirección de Pablo Vain,
con sede en la Facultad de Humanidades as diversas maneras de ser o de sentirse estudiante se vin-
y Ciencias Sociales de la Universidad
Nacional de Misiones. Miembro del culan con las propias condiciones de existencia: el origen
Programa Transformaciones sociales,
Subjetividad y Procesos educativos del social, los vínculos con la familia, los compromisos económi-
IICE- UBA. Adscripta a la cátedra de cos, la relación con la cultura y la función simbólica conferida
Teorías Sociológicas, Departamento de
Ciencias de la Educación, Facultad de a su actividad (Bourdieu, 1978). El ser estudiante coloca a los
Filosofía y Letras de la UBA. Doctoranda
del Doctorado en Educación, FFHyCE jóvenes en una posición específica en la estructura social; pri-
de la UNLP vilegiada en comparación con aquellos que no tienen las opor-
IICE Puan 480 4to piso, of. 440, CABA/
Argentina | verosilva13@yahoo.com.ar tunidades o recursos para estudiar en la escuela secundaria. Es
preciso romper con una idea homogénea y unitaria de la condi-

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ción estudiantil, la situación de estudiante no Aires, Argentina) surge el respeto como una
presupone uniformidad de las constricciones dimensión vertebradora de la constitución de
materiales y simbólicas de vida. Al mismo subjetividades y de lazos sociales.
tiempo, las identidades estudiantiles varían en Partimos de la consideración de que en
función de los contextos y épocas. Preferimos nuestras sociedades desiguales y excluyentes
referirnos, entonces, a los y las estudiantes en el respeto es un bien simbólico escaso. Las
plural. desigualdades de género, étnicas y de clase
Asistimos en Argentina a la presencia de constituyen uno de los mayores obstáculos
jóvenes que son primera generación en su ho- en las expresiones de respeto mutuo (Sennett,
gar que transita la escuela secundaria o media. 2003). Estas lógicas tensionan y corroen la
No es un dato menor de contexto que la edu- construcción de lazo social, y favorecen el te-
cación secundaria (que abarca a jóvenes de 12 mor a quedar excluido. La amenaza ante la sola
a 17 años de edad) se ha tornado obligatoria posibilidad de existir excluido opera como un
recientemente, esto es, a partir de la sanción de mecanismo eficaz para la reproducción y pro-
la Ley de Educación Nacional 26.206 del año ducción de los (auto) límites simbólicos (Ka-
2006. Este hecho representa una ruptura res- plan, 2013).
pecto a una matriz selectiva y excluyente que Sostenemos que en la producción de rela-
ha caracterizado desde su génesis al sistema ciones humanas de nuestro tiempo prevalecen
educativo nacional, que sólo vislumbraba el miedos ligados a los sentimientos de humilla-
nivel secundario para la formación de las eli- ción, vergüenza y exclusión, en donde la valía
tes gobernantes y/o para los grupos que con- social se fabrica sobre frágiles cimientos. Se
tinuarían estudios en la universidad. (Filmus torna necesario, por tanto, un análisis sobre la
y Kaplan, 2012). construcción social de las emociones. Siguien-
La extensión y democratización de la edu- do de cerca a Illouz, mencionemos que “sin
cación básica obligatoria trae aparejado nuevos duda la emoción es un elemento psicológico,
desafíos vinculados a la necesitad de concretar pero es en mayor medida un elemento cultural
el cambio de paradigma cultural que requie- y social” (2007: 16).
re la inclusión. Individuos y grupos que han En este artículo nos proponemos elabo-
estado históricamente excluidos de la escuela rar una serie de conceptualizaciones teóricas
secundaria la avizoran ahora como una posi- acerca del fenómeno del respeto en su dimen-
bilidad simbólica. Estos sectores sociales que sión socio-psíquica. Para tal fin, recuperamos
ingresan a la escuela han sido históricamen- principalmente los desarrollos de la sociología
te nominados y figurados como “bárbaros”, figuracional de Norbert Elias (1987) quien
“ineducables”, “incivilizados”. propone una comprensión de largo plazo de
Hemos consolidado una línea de investiga- las transformaciones de la estructura emotiva
ción que analiza las relaciones entre escuela y en el marco de los procesos civilizatorios. Des-
violencias desde la perspectiva de los jóvenes lizamos entonces la mirada hacia los procesos,
estudiantes haciendo foco en la dimensión las prácticas y las imbricaciones mutuas entre
simbólico-subjetiva de lo social. En particular, el comportamiento individual y el comporta-
interpretando los procesos de estigmatización miento social (Kaplan, 2008).
e inferiorización que mediatizan los vínculos
en la cotidianeidad escolar (Kaplan, 2013). Imbricación socio-psíquica
Los principales resultados de nuestro ex- de las emociones
tenso proceso de investigación1, permiten afir-
marnos en la constatación de que la búsqueda La emotividad constituye una dimensión
por el respeto representa un eje central que fundamental de la experiencia social de los
dirime pertenencias y exclusiones en los gru- individuos y grupos. Para una comprensión
pos que conforman los jóvenes en la vida es- integral de los fenómenos sociales resulta im-
colar. Del análisis de los testimonios recogidos prescindible la incorporación de la experiencia
a través de entrevistas individuales y grupales afectiva en el análisis de los intercambios e in-
realizadas por nuestro equipo a estudiantes teracciones que mantienen los actores sociales
secundarios de escuelas públicas de la ciudad (de Gualejac, 2008; Illouz, 2007; Bericat Alas-
de La Plata2 (capital de la Provincia de Buenos tuey, 2000). Tal como afirma Elias:

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Toda investigación que quiera entender la ésta constituye una facultad del Estado, lo cual
conciencia de los hombres su “ratio” o sus transformará indefectiblemente la configura-
“ideas” sin considerar al mismo tiempo la ción afectiva/emocional del individuo.
estructura de los impulsos, la orientación y El comportamiento estará sometido a ca-
configuración de los sentimientos y de las denas de pensamiento (estrategias- cálculos)
pasiones solo conseguirá resultados limi- antes de externalizarse por medio de acciones
tados, puesto que ignorará necesariamente impulsivas. Esta operación es denominada por
gran parte de lo que es imprescindible para el autor como proceso civilizatorio, es decir, el
la comprensión de los seres humanos (Elias, progresivo pasaje hacia un mayor refinamien-
1987: 494). to de las emociones, una mayor racionaliza-
ción del pensamiento y la postergación de la
Lo social y el psiquismo se imbrican de satisfacción inmediata de los impulsos, lo cual
manera permanente e indisociable; de allí que trae aparejado un mayor autocontrol de los in-
los comportamientos de los sujetos tengan dividuos4.
una raigambre socio-psíquica (de Gualejac,
2008).Los rasgos emotivos de los sujetos tie- El respeto en clave socio-psíquica
nen una génesis y una historia que es social,
por tanto, resulta imperioso considerar las En lo concerniente a la génesis de los fe-
transformaciones psíquicas e impulsivas en nómenos psíquicos, y tomando los aportes de
sus relaciones dialécticas con las transforma- Freud, Elias (1987,1999) desarrolla un herra-
ciones sociales. mental conceptual que favorece la compren-
El estudio de los fenómenos colectivos, sión de los fundamentos histórico-sociales
desde esta perspectiva, requiere detener la de la estructuración psíquica de los seres hu-
mirada en la complejidad y multidimensiona- manos. Para el autor, la modelación de la vida
lidad de los hechos sociales y la necesaria com- instintiva, incluso de las figuras coactivas que
binación de los elementos psíquicos y sociales hay en ella, son el emergente de las interrela-
(de Gualejac, 2008). Cada época y contexto ciones e interdependencias sociales que carac-
cultural desarrolla una jerarquización de las terizan a la vida de los seres humanos. Elias,
emociones. Como señala Illouz “las emocio- se nutre de los desarrollos de Freud en lo refe-
nes se organizan de modo jerárquico, y a su rido al control y autocontrol de las pasiones y
vez, este tipo de jerarquía emocional organi- las pulsiones y las fluidas relaciones entre los
za implícitamente las disposiciones morales y procesos individuales y sociales. No obstante,
culturales” (2007:17). la originalidad del sociólogo alemán consiste
Elias (1987) busca identificar los meca- justamente en demostrar la vinculación entre
nismos a través de los cuales se transforma el estos fenómenos psíquicos y los procesos so-
comportamiento y la emotividad de los seres ciales “las relaciones entre la orientación im-
humanos bajo la pregunta acerca de las co- pulsiva, la orientación del yo y el super yo de
nexiones entre las estructuras psicológicas cada individuo concreto se modifican en con-
individuales y las estructuras sociales desde junto a lo largo del proceso civilizatorio” (Za-
una visión de larga duración3. Su tesis central bludosky, 1999:158).
es que, a partir del aumento de las cadenas de El autor formula una crítica explícita a
interdependencia y la paulatina y progresiva la mirada de cierta psicología generalmente
centralización de las formas de organización centrada en una postura que enfoca “ las es-
social, más específicamente, con la constitu- tructuras psíquicas del hombre contemporá-
ción de los Estados modernos al centralizarse neo como si se tratara de algo intercambiable
el monopolio de la violencia física, se produce o que no ha sufrido proceso alguno” (Elias,
la pacificación de las relaciones humanas al in- 1987:492). Para superar esta falencia propone
terior de las sociedades. un método de investigación basado en una
La sociogénesis del Estado será uno de piscología histórica, la cual tendría la res-
los motores de la civilización de los afectos. ponsabilidad de reconstruir los nexos entre
Al monopolizarse la violencia corporal ya no las transformaciones de las sociedades y los
será el sujeto librado a su propio deseo quien cambios psíquicos en los individuos en el lar-
podrá ejercer la violencia hacia otros, sino que go plazo.

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…suele aparecer como si la orientación de vez y para siempre, sino que sufrieron trans-
los seres humanos por medio de los impulsos formaciones paulatinas.
inconscientes tuviera forma y estructura pro- Nos afirmamos en la idea de que las expre-
pias, con independencia de la situación rela- siones de respeto o consideración hacia el otro
cional del individuo concreto (...). No se dis- tienen una estrecha relación con el proceso de
tingue entre la base instintiva ruda y natural, pacificación social y con la internalización en
que quizás no cambie mucho a lo largo de la el psiquismo de las leyes que regulan la trama
historia de los hombres, y las estructuras y vincular en sociedad.
los canales cada vez más sólidos que orientan
las energías psíquicas de cada individuo en Respeto y proceso civilizatorio
sus relaciones con los demás desde el primer
día de su vida (Elias, 1987:495). Para nuestros propósitos, destacamos un
aporte que consideramos clave del trabajo de
En los desarrollos de Elias se postulan las Elias (1987): los nexos que establece entre el
bases para interpretaciones y análisis que se proceso civilizatorio y las transformaciones en
orienten en considerar que no hay ningún ras- las prácticas sociales que tendrán como carac-
go en el sujeto que pueda considerarse innato terística central la pacificación de los vínculos
e inmutable (ni siquiera el inconsciente). Las interpersonales.
instancias psíquicas poseen una historicidad y Las configuraciones sociales, las cadenas de
un contenido social, “el super-yo es de carácter interdependencia en las que se encuentran los
sociogenético” (Elias, 1987:49). sujetos, van moldeando aquellos sentimientos
Uno de los puntos de contacto más impor- y prácticas deseables o indeseables. Hay emo-
tantes de la teoría figuracional elisiana con la ciones que es legítimo sentir y exteriorizar y
teória freudiana es la conceptualización acerca otras que no gozan de esa legitimidad social.
de cómo la cultura moldea, dulcifica, aquellas La investigación desarrollada por Elias (1987),
tendencias agresivas en los seres humanos, a da cuenta de cómo a medida que los arreba-
través de una ardua imposición de renuncia tos de violencia física se alejan cada vez más
pulsional. Como señala Freud: de las disposiciones individuales, para pasar
a formar parte de un complejo mecanismo de
el término cultura designa la suma de las regulación social centralizado por el Estado,
producciones e instituciones que distancian las luchas por la competencia social adquie-
nuestra vida de la de nuestros antecesores ren otras modalidades de manifestación. Ya no
animales y que sirven a dos fines: proteger al será el golpe ni la amenaza directa hacia el otro
hombre contra la Naturaleza y regular las re- lo que garantizará el mantenimiento del esta-
laciones de los hombres entre sí (1999:83). tus o el prestigio (como lo era el ejercicio de la
violencia física que ejercía la clase alta guerrera
El autor sostiene que la vida en sociedad de la sociedad medieval) sino que la lucha por
sólo se torna posible, cuando logra sustituirse el prestigio se encarnará en ciertas formas ci-
el poder de la comunidad por sobre el poder vilizadas del comportamiento. Así lo grafica el
individual, esto representa el paso decisivo a la sociólogo alemán cuando describe que la clase
cultura, es decir, los miembros de una comu- cortesana, en su necesidad de diferenciación
nidad deben limitar las posibilidades de satis- social, debe luchar por mayores oportunidades
facción de sus deseos e impulsos, mientras que apelando a medios pacíficos como las intrigas
el individuo aislado no necesita de restricción y la diplomacia, las cuales van imponiendo en
alguna. La renuncia a la satisfacción inmediata el comportamiento de los individuos cierta
de las pulsiones es lo que sentará las bases de la contención emocional o “selfcontrol” (Elias,
convivencia social y permitirá el desarrollo de 1987:260).
vínculos sociales duraderos y conductas basa- La nobleza cortesana, al competir de mane-
das en la consideración hacia el otro. ra no violenta por los favores del rey, encuentra
El aporte específico que realiza Elias a la en el cuidado del protocolo e inevitablemente
teoría propuesta por Freud es la de pensar en en las infracciones de éste, aquellas prácticas
clave histórica estos cambios ya que los modos o conductas que le permite salvaguardar y re-
de regulación social no tuvieron lugar de una producir su lugar social.

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En la fase cortesano-aristocrática, se justifi- un nuevo régimen de convivencia que obliga


caba la represión que se imponía a las incli- a los sujetos a restringir y auto-dominar sus
naciones y a las emociones con la conside- impulsos. Posteriormente, con el asenso social
ración y el respeto que se debe a los demás, de la burguesía industrial, las demostraciones
especialmente a los que son de rango supe- de respeto estarán menos vinculadas a los lu-
rior (Elias, 1987:192)5. gares jerárquicos o personas específicas como
el rey, así lo que obligará a reprimir y regular
De esta forma, la batalla por el estatus y el las emociones serán “las coacciones (mucho
prestigio se desplaza a un campo de juego en menos visibles y más impersonales) del entra-
donde las formas sociales del comportamiento, mado social, de la división del trabajo del mer-
los modales, se constituyen en instrumentos cado y de la competencia” (Elias, 1987:192).
eficaces para la preservación del lugar social. De los desarrollos propuestos por Elias
“El miedo a la pérdida o, incluso, a la disminu- (1987), se desprende que las manifestaciones
ción del prestigio social es uno de los motores de respeto se han ido transformando a través
más poderosos del cambio de las coacciones de un complejo proceso socio-histórico. Así,
externas en autocoacciones” (Elias, 1987:480). paulatinamente de la valentía, el coraje y el uso
El miedo es un modelador fuerte de la con- de la violencia física como atributos dignos de
ducta del individuo. Pero cabe aquí una acla- respeto se fue transitando un camino lento y
ración, no se trata cualquier miedo, sino del progresivo hacia la pacificación de las relacio-
miedo vinculado a la pérdida de prestigio y de nes interpersonales.
estima social, éste se yergue como un regula-
dor del comportamiento y como mecanismo Cultura afectiva moderna
eficaz de control y auto-control de las emocio- y demandas de respeto
nes. Como señala, Goudsblom (2008) el respe-
to y el amor son los premios más preciados de Cabe detenernos ahora en los procesos so-
la vida en sociedad. ciales contemporáneos que nos permitan es-
Consideramos que el extremo cuidado por bozar las características principales de nuestra
los buenos modales, la etiqueta y protocolo configuración emotiva actual. Con el adveni-
adoptado por la clase cortesana para conservar miento de la modernidad se produce una rup-
su posición social, posibilitan la emergencia de tura fundamental: la progresiva sensación sub-

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jetiva de separación del yo con respecto a los debe a que escuchar al otro permite generar
demás. Esta experiencia subjetiva de mismidad lo que el filósofo Axel Honneth llama reco-
constituye una fase del proceso civilizatorio y nocimiento o la comprensión positiva [que la
tiene relación con esta paulatina escisión entre gente tiene de sí] dado que la autoimagen
emociones y razón. El yo es percibido como (...) depende de la posibilidad de tener un
núcleo auténtico de la individualidad ya que constante respaldo de los otros, el recono-
el mundo afectivo se encuentra domesticado cimiento implica así la confirmación y el
y racionalizado. refuerzo de las afirmaciones y las posiciones
del otro, tanto en el plano cognitivo como
Lo aislante, que aparece como un muro in- en el emocional (Illiouz, 2007:53).
visible, que separa el «mundo interior» del
individuo del «mundo exterior» (...) es la Desde la perspectiva de la sociología de
contención más firme, más universal y más la individuación, Martuccelli considera que
regular de los afectos (Elias, 1987:41-42). la demanda de reconocimiento, se encuen-
tra vinculada a la disolución de “cierto orden
Desde una perspectiva de la sociología de social vinculado a la jerarquía y al honor así
la cultura, Illouz (2007) plantea que durante el como una nueva identidad mas individualiza-
siglo XX el yo interior privado se pone en pri- da y diferenciada” (2007:247).
mer plano adquiriendo representación públi- El autor retoma los desarrollos de Hegel
ca; este yo se encuentra ligado a los discursos acerca de la dialéctica del Amo y el Esclavo en
y valores de la esfera económica y política. La lo referido a que la autoconciencia del hombre
autora denomina a este fenómeno como capi- depende pura y exclusivamente de la experien-
talismo emocional: cia de reconocimiento social. Dicha experien-
cia es de carácter intersubjetivo e implica una
Una cultura en la que las prácticas y los dis- lucha por la reivindicación de la identidad de
cursos emocionales y económicos se configu- los individuos que sólo se actualiza gracias a la
ran mutuamente y producen (...) un amplio mirada del otro (Martuccelli, 2007).
movimiento en el que el afecto se convierte Esta necesidad de reconocimiento conti-
en un aspecto esencial del comportamiento nuo se vincula con el carácter performativo
económico y en el que la vida emocional (...) que adquiere la valoración social en la moder-
sigue la lógica del intercambio y de las rela- nidad (Illouz, 2014). De allí la alta significación
ciones económicas (Illouz, 2007:20) que poseen las auto- imágenes que elaboramos
a lo largo de nuestra existencia social a partir
Illiouz (2007) refiere de este modo, a un de la mirada de los otros. “La fabricación cul-
proceso de racionalización y de mercantiliza- tural de emociones y sentimientos ligados a la
ción de las emociones, este proceso reconfigu- valía social nos constituye en nuestro proceso
rará la vida emocional de los sujetos a partir de subjetivación” (Kaplan, 2013:47).
del siglo XX, en lo que ella denominará como:
estilo emocional terapéutico, cuya característica La cuestión del respeto
principal será la racionalización constante de entre los jóvenes estudiantes
las emociones.
Este proceso de racionalización de las emo- Como señala Sennett (1982) mediante las
ciones tiene como consecuencia colocar el plano emociones las personas expresan el significa-
afectivo en un lugar protagónico donde las ha- do moral y humano de las instituciones que
bilidades de comunicación, como por ejemplo habitan. Hasta aquí hemos intentado rastrear
saber escuchar o poder comunicar claramente los bordes, los contornos, las modalidades de
las intenciones y deseos, serán aspectos medu- expresión de respeto a la luz del proceso civili-
lares y formas específicas de capital social. zatorio. Ahora intentaremos dar cuenta de al-
gunas particularidades que asumen las mani-
Escuchar o la capacidad de reflejar las pro- festaciones de respeto o faltas de respeto entre
pias intenciones y significados se considera los jóvenes estudiantes, en tanto expresan un
crucial para la capacidad de prevenir conflic- determinado “vínculo emocional” (Sennett,
tos y crear cadenas de cooperación. Ello se 1982:11).

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Para tal fin, nos centraremos en la mirada, E: ¿Y por qué te miran medio de costado? ¿Qué
este ha sido un aspecto que surgió de mane- tenés?
ra recurrente en los trabajos de investigación Brenda Capaz que nada…o sí… estás vesti-
que desarrolla el equipo (Kaplan, Krotsch, y dita re-linda…o re-guarra…te miran, no im-
Orce, 2012). La mirada se establece en muchas porta. Es una mirada para pelear (Entrevista
situaciones como un canal de comunicación grupal Brenda y Alejandra)
privilegiado en las interacciones cotidianas de
los estudiantes. Como señala claramente un E: ¿El tema de rebajarse con la mirada o pe-
alumno: learse porque te miró pasa?
Vanina: Si esas cosas pasan todos los días pa-
He tenido así, choques así con, con personas san...
porque yo soy de mirar siempre. Estoy miran- E:¿Como es rebajar con la mirada?
do todo el tiempo, así. Estoy observando a mí Yamila. O sea, te miran punta a punta
alrededor siempre. Y “qué es lo que me mirás”, E:¿Haber por ejemplo? Vos estas ahí parada y yo
“qué es lo que me mirás”, así me dicen.... (En- te miro mal... como seria
trevista individual Danilo) Yamila: Me miras de los pies a la cabeza
[La estudiante se para y empieza a caminar por
Elias menciona que el sentido de la vista el aula con gesticulaciones de desfile de pasa-
adquiere preponderancia en la sociedad civi- rela]
lizada: E: ¿O sea que rebajar es hacer esto? [La en-
trevistadora realiza la gesticulación de alguien
El ojo se convierte en un trasmisor de placer que mira de reojo desde los pies a la cabeza de
similar o, incluso, superior al oído, precisa- la estudiante]
mente porque las satisfacciones inmediatas Vanina: Si, si
de la necesidad del placer en la sociedad civi- (...)
lizada están restringidas por una gran canti- Yamila: y de ahí nos agarramos a la salida, que
dad de prohibiciones y de limitaciones. Pero vos me rebajas a mí, no yo n te rebajé, vos me
también dentro de esa transferencia de las rebajaste primero y ahí se empiezan a empujar,
manifestaciones impulsivas de la acción in- se chocan...y así (Entrevista grupal, Vanina y
mediata a la contemplación, se da una curva Yamila)
clara de moderación y de transformación hu-
manizadora de los afectos (Elias, 1987:241). Cuando leemos estos fragmentos de en-
trevista, no podemos menos que imaginar
En el caso de los jóvenes estudiantes, las un caleidoscopio de situaciones variadas que
miradas suelen ser interpretadas como juicios enfrenta a los estudiantes a tener que “pro-
de valor hacia la propia persona (hacia sus gus- barse” ante los demás para salvaguardar la es-
tos estéticos, sus estilos de vestimenta, etc.); tima propia. La posibilidad de decodificar las
como ofensas y ultrajes de aquello que consi- miradas de los demás, hacerles frente o dejar
deran que les pertenece e inclusive como invi- pasarlas, son situaciones que los coloca en es-
taciones explícitas a peleas o enfrentamientos cenarios complejos. Esta sensibilidad ante la
físicos. mirada del otro da cuenta de la fragilidad con
la que construyen su estima.
E: ¿Y por qué se pelean entre chicas? Consideramos que la mirada inferiorizan-
Alejandra: Y… puede ser por muchas cosas. te, y las reacciones que despierta en quiénes
Porque la miró…porque le miró el novio… son sus destinatarios, es un ejemplo paradig-
Brenda: O le miró la ropa… o estaba vestida mático de las variadas ocasiones en que el otro
muy careta la otra… es percibido como una amenaza del frágil lu-
E: Hasta ahí, la única que me queda clara es la gar que ocupamos en la sociedad. Donde el
explicación del novio. ¿Qué significa “la miró”? temor a quedar excluido (Kaplan, 2013) opera
¿Qué es que te miren? como mecanismo eficaz de gestión de las emo-
Alejandra: Pasan y te miran… como medio de ciones.
costado. Y vos tenés que reaccionar. A la salida Como señala Le Breton (2010) la mirada
te agarrás. social tiene la capacidad de formular juicios de

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valor porque “(…) se dirige a las raíces simbó- territorios simbólicos de “las emociones en
licas de un sentimiento de identidad que debe las que se refleja la vulnerabilidad del yo bajo
contar con el acuerdo de los otros” (Le Breton: las condiciones de la modernidad, vulnerabili-
2010: 135). dad que es institucional y emocional” (Illiouz,
Estas miradas son decodificadas como fal- 2014:27).
tas de respeto, que ponen en peligro la existen- El presente artículo ofrece un marco ex-
cia individual y social. “Con la falta de respeto plicativo novedoso al recuperar el fenómeno
no se insulta a otra persona, pero tampoco se del respeto en su dimensión socio-psíquica, lo
le concede reconocimiento; simplemente no se cual invita a agudizar la mirada en torno a las
la ve como un ser humano integral cuya pre- demandas de estima y reconocimiento que los
sencia importa” (Sennett 2003: 19). estudiantes elaboran en la escuela secundaria.
Esperamos también, pueda ser una herra-
A modo de cierre mienta útil a la hora de pensar intervenciones
pedagógicas y socioeducativas que promuevan
Los desarrollos de Norbert Elias (1987) otros modos de mirarse y de valorarse, frente a
permiten construir una caja de herramientas discursos hegemónicos estigmatizantes sobre
conceptual que colabora para caracterizar las las juventudes que excluyen o colocan a unos
transformaciones sociales y el impacto de la pocos como dignos de respeto.
dimensión emocional en los vínculos que se
establecen en la escuela; sin perder de vista la
red de interdependencias múltiples que cons-
tituyen el entramado en el que los individuos
crecen y viven. Notas
Uno de los aspectos medulares en relación
al respeto se encuentra vinculado a las matri- 1 Programa de Investigación sobre “Transformaciones
ces culturales, sociales e históricas por medio Sociales, Subjetividad y Procesos Educativos”, dirigi-
de las cuales la sociedad va configurando en los do por la Dra. Carina V. Kaplan con sede en el Insti-
tuto de Investigaciones en Ciencias de la Educación,
sujetos representaciones vinculadas al cuidado Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos
y consideración hacia el semejante. Las prác- Aires (Resolución Nro. CS 4193/12). Actualmente es-
ticas de respeto mutuo representan las moda- tán en curso el Proyecto de Investigación Plurianual
lidades por medio de las cuales las sociedades (PIP – CONICET-2014 - 2016): “La construcción so-
cial de las emociones y la producción de las violencias
forjan vínculos de confianza y reconocimiento en la vida escolar. Un estudio sobre las experiencias de
hacia el otro. estudiantes de educación secundaria de zonas urba-
Siguiendo las reflexiones de Sennett (2003) nas periféricas.” Res. 5013/14 y; el proyecto UBACyT
cuando la sociedad coloca sólo a unos pocos 20020130100596BA “Violencias, Subjetividades y Ju-
ventudes. Contribuciones teórico-empíricas desde la
como dignos de respeto, la consecuencia es Sociología de la Educación a la comprensión de las
que este se constituya en bien simbólico de experiencias emocionales de los estudiantes de escue-
muy endeble construcción para las mayorías. las secundarias” Res. CS 921/2014.
El sentirse respetado o, su contracara, sen- 2 Véase “Con ojos de joven” (Kaplan, Orce & Krotsch,
tirse tratado con falta de respeto, da cuenta de 2012). Este libro presenta gran parte de los resultados
una dinámica social contradictoria de atribu- de un estudio de matriz cualitativa en el que se reali-
zaron 13 grupos de discusión (entrevistas grupales) a
ción de valor-disvalor a partir de la cual los jóvenes de entre 13 y 19 años de edad que concurrían
sujetos producen imágenes y autoimágenes y a dos escuelas secundarias públicas estatales de la ciu-
generan, de modo inconsciente, un “cálculo dad de La Plata, Provincia de Buenos Aires. Para la
simbólico” acerca de sus potencialidades y li- realización de los focus, se los dividió en grupos se-
gún edad, año de cursada (segundo y último curso de
mitaciones (Kaplan,2009). la escuela secundaria) y género. Los aspectos que se
Volviendo al inicio de nuestro trabajo, es consideraron en la elaboración de las guías de entre-
indudable que en las relaciones humanas de vista fueron: relaciones entre desigualdad y violencia,
nuestro tiempo predominan temores y mie- violencia y género, violencia y sociabilidad, vergüenza
y miedos, autoridad, violencia y medios de comunica-
dos ligados a los sentimientos de humillación, ción, entre otros.
vergüenza y exclusión, en donde la valía social
3 Su investigación analiza las transformaciones del
se fabrica sobre frágiles cimientos. Se torna comportamiento de las clases altas de Europa
necesaria una comprensión profunda de los occidental:los guerreros nobles y la nobleza cortesa-

PRAXIS
educativa
ISSN 0328-9702 / ISSN 2313-934X
(enero 2016 - abril 2016)
Facultad de Ciencias Humanas
UNLPam
DOI: http://dx.doi.org/10.19137/praxiseducativa-2016-200103
Vol.20, N°
1 | pp. 28-36
35
Carina V. KAPLAN y Verónica S. SILVA

na, estableciendo un recorte temporal desde la baja Kaplan, C. V. (2008). Comportamiento individual y es-
Edad Media y Renacimiento hasta la Edad Moderna. tructura social: cambios y relaciones. Una lectura
Elias(1987) señala que a partir de la baja Edad Media desde Norbert Elias. En Carina V. Kaplan (coord.)
se desarrolla un aumento paulatino del autocontrol La civilización en cuestión. Escritos inspirados en la
individual. obra de Norbert Elias. Buenos Aires: Miño y Dávila
editores
4 Para Elias (1987) uno de los rasgos más predominan-
tes del proceso civilizatorio está vinculado a la posi- Kaplan, C.V. (2009). La humillación como emoción en la
bilidad o imposibilidad del sujeto de reprimir sus im- experiencia escolar. Una lectura desde la perspectiva
pulsos destructivos frente a los otros. La civilización de Norbert Elías. En Kaplan y Orce (Coords), Poder
hace referencia a la pacificación de la conducta, vale prácticas sociales y procesos civilizador. Los usos de
decir, se reprimen los arrebatos de violencia física so- Norbert Elías (pp. 99-136) Buenos Aires: Noveduc.
bre otros, la impulsividad se reemplaza por un intenso
y arduo mecanismo de postergación de la satisfacción Kaplan, C.V., Krotsch, L., y Orce, V. (2012). Con ojos
de los impulsos. El planteo central del autor es que de joven. Relaciones entre desigualdad, violencia y
esta pacificación de la conducta tiene o puede tener condición estudiantil. Buenos Aires: Editorial de la
lugar gracias a la interrelación del entramado social Facultad de Filosofía y Letras (UBA).
que se encuentra organizado en base al monopolio de Kaplan, C.V. (2013). El miedo a morir joven. Meditacio-
la violencia física por parte del Estado. nes de los estudiantes sobre la condición humana. En
5 Al respecto de los usos y costumbres de la época el Kaplan C.V, (dir.) Culturas estudiantiles. Sociología
siguiente texto resulta ilustrativo: de los vínculos en la escuela (pp.45-65). Buenos Ai-
“Y si viene a pasar durante la noche o en otro res: Miño y Dávila editores.
momento, has de acostarte con alguna perso- Martuccelli, D. (2007). Gramáticas del individuo. Buenos
na de rango superior, pregúntale qué lado de la Aires: Losada.
cama le gusta más. Y acuéstate tú en el otro lado;
que darás prueba de educación. No vayas a acos- Sennett, R. (2003). El respeto. Sobre la dignidad del hom-
tarte antes de que te lo diga tu superior. Pues tal bre en un mundo de desigualdad. Barcelona: Anagra-
cosa no es cortesía, dice el doctor Paler” (Siglo ma.
xv Selección de “Stans puer ad mensam” en Elias,
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36 http://www.fchst.unlpam.edu.ar/ojs/index.php/praxis/
Vol.20, N°
1 | pp. 28-36
Facultad de Ciencias Humanas
UNLPam
ISSN 0328-9702 / ISSN 2313-934X
(enero 2016 - abril 2016)
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