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MONOGRÁFICO: EL TRASTORNO DEL LENGUAJE

TRASTORNOS DEL LENGUAJE: PREGUNTAS PENDIENTES


EN INVESTIGACIÓN E INTERVENCIÓN
M. Serra Raventós
Laboratori de Psicolingüística i Patologia del Llenguatge.
Departament de Psicologia Bàsica. Universitat de Barcelona.

RESUMEN ABSTRACT

Este es un trabajo acerca del estado de la cuestión del This article is a review of the state of the question in the
Trastorno (específico) del lenguaje (TL). Se subraya la poca (Specific) Language Impairment (LI). An initial comment is
dedicación de esfuerzos investigadores y de recursos sociales about the few research and social resources devoted to it
dedicados a él en comparación con otros trastornos compared with other impairments and syndromes that are much
y síndromes muchísimo menos frecuentes. Se comentan less frequent. Some data about linguistic development of SLI
algunas investigaciones lingüísticas recientes (generativistas y children are exposed and discussed between generativist and
constructivistas) con especial énfasis en los estudios constructivist theories. A special mention is given to the
croslingüísticos. Posteriormente se revisa la controversia acerca crosslingustic data (spainsh and other languages). A review of
del trastorno Semántico-Pragmático, algunas aportaciones de los the controversy in the Semantic-Pragmatic Impariment, of the
estudios genéticos y el concepto de heredabilidad. Finalmente genetic factors in SLI and the concept of heredability of language
se hace un resumen de los principios de intervención que features is also offered. Finally the most interesting principles
el autor cree más interesantes. for intervention according to the author are summarized.

Palabras clave: Retraso del lenguaje, trastorno específico del Key words: Specific language impairment, semantic
lenguaje, trastorno semántico-pragmático, estudios pragmatic impariment, language delay, language acquisition,
Croslingüísticos, adquisición del lenguaje, factores genéticos genetic factors in language acquisition
en la adquisición del lenguaje.

Rev Logop Fon Audiol 2002; XXII(2): 63-76 63


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PERSPECTIVAS narle otro valor, difícilmente podrá construir todo un


sistema de unidades y reglas como es el lenguaje. En
La existencia del retraso del lenguaje es un hecho bien este tipo de línea se sitúan la mayoría de trabajos que
conocido y reseñado a lo largo de la historia, sin embargo tienen en cuenta la frontera imprecisa entre el TL y los
hasta no hace demasiados años no se le daba mucha impor- trastornos emocionales o de interacción pragmática
tancia, de manera que desde los ámbitos con responsabili- (espectro autístico) (Bishop, 2000; Monfort, 2001).
dad en la salud y la educación de la infancia se respondía – Otra línea la podríamos encuadrar como de tipo senso-
con frecuencia a los problemas de retraso con un “ya ha- rial, en la que se considera que a pesar de que los ni-
blarán”. Respuesta parecida a la que se daba cuando un ños oigan correctamente, la falta de atención, la lenti-
niño con aspecto de buena salud y a los 12 meses todavía tud y pobreza de análisis o la mala memoria auditiva,
no andaba. La despreocupación inicial de entonces estaba les impide llegar a estabilizar la huellas sensoriales ne-
justificada por dos hechos: el primero era que no se sabía cesarias para el aprendizaje del lenguaje. Por tanto,
que remedio aplicar. Y el segundo era que, de acuerdo con tampoco la consecuente organización motriz defectuo-
la experiencia acumulada, se sabía que la mayoría de ni- sa permitirá el correspondiente almacenaje y acceso lé-
ños y niñas “tarde o temprano llegaban a hablar...”. xico y posteriormente la formulación sintáctica (ver co-
Hoy, gracias al esfuerzo de muchos investigadores y clíni- mentario más adelante: Tallal et al, 1996).
cos, ya tenemos información suficiente con relación a ambos – Otra línea de gran penetración ha sido la de los trabajos
factores como para poder pedir e indicar a cualquier profe- lingüísticos de los TL, ya sea en un marco descriptivo
sional que se tengan en cuenta los indicios que muestran la (Flechter, 1991) o de tipo generativo (Rice, Wexler y
existencia de una dificultad cierta para poder intervenir lo Cleave, 1995; Clashen, 1991). Dentro de esta área de
más tempranamente posible: Si el niño tiene problemas de trabajos merece una mención especial (ver más adelan-
comprensión, tiene un lenguaje muy pobre y hace omisio- te) los trabajos translingüísticos (Leonard, 1998) que
nes inesperadas (ver más adelante), entonces es necesario han permitido tener una mejor perspectiva con rela-
una intervención inmediata, si es posible a los tres años, edad ción a lo que ocurre lingüísticamente, según cada len-
que ya no deberíamos considerar precoz sino usual. gua, en los niños con TL.
Junto a este cambio de perspectiva se debe tener en cuen- – Una cuarta línea de trabajos, se centra en los aspectos
ta otro: el progreso en el estudio de la adquisición del len- mentales y de capacidad de procesamiento cognitivo en
guaje (Serra et al, 2000) nos ha hecho ver que disponemos los niños y niñas con TL (Morehead y Ingram, 1973;
de una ventana extraordinariamente útil para acercarnos a Bishop, 1992). Dado que la definición de TL requiere
la comprensión del desarrollo cognitivo de los niños y de que haya un “nivel mental normal” y debido a dificul-
los adultos. Dicho progreso ha seguido distintas líneas, to- tades teóricas y experimentales, durante mucho tiem-
das ellas con aportaciones que ayudan a comprender me- po el estudio de los recursos cognitivos que los niños
jor las dificultades iniciales en la adquisición del lenguaje: normales y con TL deben aplicar durante su desarro-
una línea formal y estructural centrada en los aspectos lin- llo2 han sido escasos y de poca incidencia teórica (Le-
güísticos, otra centrada en el procesamiento o en las trans- onard, 1998). Esta cuarta línea de estudio, denominada
formaciones que el bebé es capaz de realizar operando también de limitación en el procesamiento, o de pro-
mentalmente sobre los estímulos y por último, las que se cesos cognitivos limitados, es harto difícil ya que sus
centran en la base genética, es decir, en la heredabilidad de resultados nunca se podrán aislar del soporte sensorial
las habilidades que dan soporte al lenguaje y en los aspec- y social del lenguaje.
tos evolutivos no madurativos sino emergentistas (Karmi-
loff, 1998). Veámoslo con mayor detalle. Las cuatro líneas mencionadas no pueden obviar dos
De acuerdo con el progreso y las líneas basadas en la adqui- perspectivas necesarias: La genética (de la cual nos hare-
sición del lenguaje que acabamos de comentar, y según la con-
ceptuación que seguimos de Trastornos del Lenguaje (TL) es
2
lógico hablar de cuatro grandes líneas en su investigación: La identificación y análisis de funcionamiento de los recursos
cognitivos como factor diagnóstico en el TL es difícil, pero su pre-
– Una primera línea concierne fundamentalmente al tipo sencia es segura. No nos referimos sola y directamente a la con-
ceptuación, es decir organización mental y accesible a la memoria
de actividad social que se necesita para formar los sím-
para poder identificar referentes y hechos (etiquetaje conceptual)
bolos1. Si el niño no puede aislar un recuerdo para asig- que si estudian los tests y algunas escalas de desarrollo. Nos refe-
rimos a todas las operaciones mentales que permiten al niño hacer
proposiciones atribuyendo y predicando (A es B; A hace B) o ha-
1
En esta perspectiva, los símbolos se pueden definir como aque- cer inferencias (si A entonces B; si A y B entonces C) o hacer
llos acuerdos que permiten a dos personas referirse a objetos o ac- co-referencias sustituyendo léxicalmente (médico → doctor) o
ciones anteriores o posteriores. pronominalizando (doctor → él; da a Maria → le da).

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Tabla 1. Esquema de las habilidades que deben coordinarse


Ejemplo 1: De la comunicación al léxico en la adquisición del lenguaje

Intencionalidad
Comunicación Cognición
Comprensión y producción de intentos comunicativos
50 referencias
Atención
Signo sonoro Léxico inicial
Dirección voluntaria de la atención a estímulos
X contrastes comunicativamente relevantes
Balbuceo Fonología Percepción
Categorización y memoria auditiva en estímulos rápidos
y variables
Ejemplo 2: Del léxico a la sintaxis (“emergencia exaptativa”)
Cognición
Asociación entre sonidos y referentes con intenciones
Nombres
Simbolización (intencionalidad y contextos)
Conceptuación (rasgos; nivel de uso: “type/token”)
Léxico 400 ítems Verbos Sintaxis inicial Proposición (organización del mensaje en Sujeto y Predicado)
Organización jerárquica (organización de las proposiciones
Otros del texto: Discurso)
Modelo de discurso mental (específico)
Inferencia (intenciones, teoría de la mente y comunicación; deixis)
Figura 1. Ejemplos hipotéticos de la función del bootstrapping. Limitaciones de procesamiento (atención, categorización
perceptiva; memoria de trabajo, límites en la ejecución)
Motricidad
mos algunas preguntas más adelante) y la evolutiva que in- Dificultades para establecer patrones práxicos y fonotácticos
cluimos en el planteamiento nosológico central. para las distintas unidades del habla (los enunciados
Precisamente la perspectiva evolutiva, nos facilita un en- conectados a los fonemas)
foque que puede ser decisivo en la explicación de un pro-
blema cuyos efectos son claramente desproporcionados con
relación a sus posibles causas: a pesar del grave problema
lingüístico de los niños con TL, no se ha encontrado ningu- tribución (bootstrapping, fig. 1). Según esta conceptuación
na causa única e inequívoca a la que atribuir los efectos de no seria necesario que una discapacidad o causa importante
este retraso, progreso lento, y permanencia de dificultades explique el inicio tardío del lenguaje sino que la dificultad
difíciles de erradicar. Ante esta circunstancia se ve como ne- en la adquisición y progreso de algún componente del len-
cesaria una nueva línea de explicación: la desarmonía evo- guaje podría desajustar muy seriamente el conjunto de ele-
lutiva. La idea de la desarmonía evolutiva proviene de la mentos al no incorporar alguno de los aspectos imprescindi-
escuela de Ginebra de Piaget y quien la aplicó en clínica in- bles para el funcionamiento del conjunto (tablas 1 y 2).
fantil fue Julián de Ajuriaguerra (1974), psiquiatra entraña-
ble que formó una escuela excelente con colaboradores de
Piaget (Inhelder, 1974). Posteriormente, sus ideas se han ac- ETIOLOGÍA Y CLASIFICACIÓN: DEFINICIONES
tualizado gracias a Annette Karmiloff-Smith, también discí-
pula de Piaget y sus colaboradoras (Karmiloff et al, 2001) Como se ha dicho, el hecho de que una niña o un niño sin
proponiendo que “la reorganización del sistema de repre- una sintomatología clínica identificada y con una adapta-
sentación” produce nuevas operaciones cognitivas gracias a ción social y emocional normal, no inicie ni progrese nor-
habilidades que van mejorando progresivamente y apoyán- malmente en el lenguaje hoy ya si es motivo de preocupa-
dose unas en las otras, o, en versión más radical, consiguen ción general. También lo es que se perciba una gran
que “emerja” un tipo de habilidad nueva (Mac Whinney, desproporción entre unos síntomas ligeros (como andar a
1999). Como puede verse en este tipo de explicaciones, si los 14 meses) y un retraso del lenguaje superior al año (pro-
bien no están todavía suficientemente probadas no por ello ducir sólo unas 10 palabras a los dos años). No sólo los pa-
dejan de tener un creciente interés y sus repercusiones tera- dres y maestros, sino también los profesionales y los in-
péuticas son importantes. La desarmonía evolutiva simple- vestigadores han dedicado, por diversas razones, su interés
mente prevé que en una habilidad compleja, como es el caso en estos niños. Los motivos que han guiado la preocupa-
del lenguaje, la contribución de sus componentes debe ser ción de los investigadores en este tipo de trastorno, al mar-
adecuada tanto por su nivel (hoy denominada masa critica) gen de conocerlo mejor para ayudar a la intervención, son
como por el momento en que actúan o se requiere su con- las posibilidades que ofrece para conocer cuales son las

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Tabla 2. Los componentes del lenguaje, sus interacciones princi- Siguiendo con Lahey ella se pregunta: ¿Qué quiere decir
pales y las hipótesis lingüísticas acerca del TL para unos padres, y como éstos explican a sus familiares,
que su hijo tiene un “Trastorno del Lenguaje”? Si le dicen
Fonológico: Patrones segmentales y suprasegmentales que tiene Dislexia la gente sabe lo que es, pero, ¿Qué es
simplificados un Trastorno del Lenguaje? Esto quiere decir que dado que
(→ Morfológico: fonomorfología. Hipótesis
los investigadores y profesionales no están de acuerdo,
de superficie)
(→ Léxico: inestabilidad forma y acceso) tampoco existe todavía una noción social clara para que se
comprenda de qué se trata, de la importancia que tiene y
Léxico: Semántica: pobreza de rasgos; léxico reducido de la necesidad de recibir los recursos necesarios para su
(→ Pragmática: literalidad, referencia implícita) investigación y tratamiento.
(→ Sintáctico: categoría sintáctica y estructura
Visto desde una perspectiva externa, el problema básico
argumental)
es que sólo con los criterios de inicio tardío y pobreza de
Morfológico: Generalización reglas implícitas difícil funcionamiento y evolución lenta y limitada en el lenguaje
(→ Pragmático: falta o labilidad de indexación) se incluye a una gran cantidad de niños que, además difie-
(→ Fonológico; Hipótesis morfología escasa) ren en gran manera entre ellos, incluso en el perfil del len-
(→ Sintáctico: Hipótesis de la ausencia de rasgos;
guaje que presentan. Este hecho dificulta su diagnóstico y
Hipótesis de la falta de flexión o concordancia)
la decisión de si requieren atención pública, cuando y con
Sintáctico: Procesos categoriales (núcleos y estructura que intensidad. La definición del ASLHA3, por ejemplo,
argumental) con omisiones y elipsis tampoco resuelve estas contradicciones:
no aceptables (pragmáticamente)
Procesos funcionales (construcción de oración
“Un trastorno del lenguaje consiste en la adquisición,
y de sintagmas) entorno a los núcleos:
rudimentaria y lenta
comprensión y expresión anormal del lenguaje hablado o es-
crito. El trastorno puede incluir todos, uno o sólo alguno de
Pragmático: Adaptación de los conocimientos sociales los componentes del sistema lingüístico: el fonológico, mor-
al lenguaje fológico, semántico, sintáctico o pragmático. Las personas
Discurso: Coherencia y cohesión narrativa con trastornos del lenguaje con frecuencia tienen problemas
(→ Sintáctico: uso de elipsis, pronombres, enlaces) en el procesamiento de oraciones o en la abstracción de in-
formación con sentido para su almacenamiento en la memo-
ria a corto o largo plazo” (ASHLA, 1980, 317-318).

bases –genéticas, perceptivas, cognitivas, lingüísticas o so- Para poder llegar a una identificación diagnóstica clara,
ciales– que contribuyen al mismo, y así entender mejor esta definición u otras parecidas (DSM IVR) (tabla 3) de-
como se inicia y evoluciona el lenguaje normal. berían incluir necesariamente los criterios de edad y de ni-
Los profesionales también se han preocupado por este veles comunicativos y lingüísticos, con la mejor informa-
tipo de trastorno, en gran parte por su difícil ubicación ción posible sobre la ausencia (o presencia sí se acepta) de
diagnóstica y su persistencia o resistencia al tratamiento. otros problemas asociados. De hecho, y según nuestros re-
Como es lógico, siempre se tiene presente que una dificul- sultados, sería más ajustado incluir el termino de “aprendi-
tad parecida pone en riesgo la vida escolar y las relaciones zaje” o “desarrollo” para denominarlo: “Trastorno de la Ad-
sociales de estos niños al no poder participar de la cultura quisición/Aprendizaje/Evolución/Desarrollo del Lenguaje”.
verbal que lo impregna todo (ver más adelante Rice). Hoy, todavía más que antes, el problema de la clasifica-
A pesar del interés que despierta el TL, es difícil llegar a ción de los problemas del habla y del lenguaje se está pre-
establecer criterios claros para su diagnóstico, y dicha difi- sentando como decisivo. Tanto para la comprensión como
cultad forma parte de las tareas inmediatas que hay que re- para la orientación e intervención es necesario conocer me-
solver. En otras palabras, y parafraseando a Margaret La- jor los síntomas evolutivos que presentan los niños y exis-
hey (1990) “¿Cuáles son los niños y niñas que debemos ten serias dudas para proceder a una subcategorización en
considerar que tienen un Trastorno del Lenguaje?”. Para distintos trastornos (tipo Rapin y Allen) ya que puede llevar
empezar existe un problema conceptual importante: se usan a engaño. Si se realiza esta subcategorización, se deben
los términos de desorden, inmadurez, retraso, trastorno, mantener categorías muy amplias, buscando más las seme-
incapacidad, o dificultad, por no hablar de disfasia, afasia janzas que las diferencias (p. ej., ¿es útil distinguir entre el
infantil, o sordera central, etc. para referirse a los proble-
mas de lenguaje en estos niños. Junto a esta dificultad ter-
minológica, hay que tener en cuenta la interpretación de la 3
American Speech, Language and Hearing Association”. Aso-
misma que se da no sólo por investigadores y profesiona- ciación profesional y científica que acoge a todos los profesiona-
les, sino también por parte de los padres y otras instancias. les que se dedican a la patología del lenguaje.

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Tabla 3. Evolución de la propuesta de Rapin y Allen renovada en 1996

1. Agnosia verbal auditiva-sordera verbal-sordera central: (rarísimo y mal descrito)


Se oye sonido, se comprenden gestos comunicativos pero no el lenguaje. No hay comprensión y la producción consiste en sonidos
no articulados lingüísticamente
2. Dispraxia verbal: (raro y mal descrito)
Producción y articulación del lenguaje muy pobre, con comprensión preservada (o muy superior)
3. Déficit de programación fonológica:
Comprensión y producción del lenguaje mejor que articulación: Habla prácticamente ininteligible pero compresible
(una vez conocido el sistema fonético, etc.)
4. Déficit léxico-sintáctico:
Articulación mejor preservada que las habilidades de producción y comprensión de texto. Contenido según edad y cognición
pero lengua de nivel muy inferior. El léxico suele estar desproporcionado con relación al nivel gramatical. La comprensión
es buena en respecto a hechos conocidos o presentes pero no para hechos que requieren estructuración interna compleja,
hipotética o abstracta, o si se utiliza lenguaje no literal (metáforas, analogías, ironía, etc.)
Rapin y Allen (y otros) no consiguieron llegar a un acuerdo con su propuesta. La tendencia actual se orienta de la siguiente manera:
1. En relación con los criterios de edades y evolución:
Tendencia a evaluar el retraso en dos años y considerar la evolución paralela
Tendencia a considerar el TL como un extremo de la normalidad y no como algo “específico”. (Apoyado en los resultados
de la intervención precoz)
2. En relación a la cuestión de las diferencias en los TL y el tratarlos como distintos síndromes o uno solo con distinta gravedad
y curso evolutivo:
Tendencia a considerar sólo el “inicio tardío” y “trastorno del lenguaje”
Tendencia a distinguir sólo entre síntomas de base expresiva (y del habla), o bien los que presentan síntomas tanto
de comprensión como de expresión
Tendencia a tratar los casos mixtos de fronteras difusas, siguiendo al DSM-IV, como “Trastornos del desarrollo” sin más precisión
hasta que los síntomas se lleguen a perfilar con el tiempo

retraso [RL] y el TL especifico4? ¿Se puede considerar que pende de múltiples interacciones a pesar de que, al final, el
hay una continuidad entre ellos?) (tabla 4). resultado se concrete en una actividad que denominamos
Otra de las controversias sin resolver es la de si es co- bajo el nombre de una sola habilidad, aunque ésta esté
rrecto y útil mantener el nombre de específico en el Tras- compuesta por diversos componentes cada uno de ellos con
torno del Lenguaje. Como argumenta Bishop (2000) no es un aprendizaje peculiar (v. tabla 1)
posible delimitar lo que es especifico o grave, en especial Los niños y niñas que padecen dificultades en la adquisi-
en trastornos típicamente evolutivos, en los que una predic- ción del lenguaje son bastantes (entre un 7 % y un 12 de la
ción sobre el desarrollo es siempre difícil. Además, no es- población general) pero los que consolidan la dificultad de
tamos ante el desarrollo de un solo factor: el lenguaje de- forma persistente son muchos menos: El Trastorno, siguien-
do criterios estrictos y según nuestros datos puede llegar
hasta un 0,3 %. Otros autores, como Leonard (1998) con un
4
No se puede dejar de añadir aquí y con mayor énfasis a raíz criterio más amplio, llegan a considerar que se trata del 7 %.
de los resultados en la rehabilitación empezada a los 3 años (ver Esta discrepancia numérica, que proviene de la caracteriza-
Serra et al, Child Language Seminar, 2001; pedir directamente a
ción difusa, forma parte de una de las cuestiones pendientes.
los autores) incluso se debería poner en duda esta distinción que
es conceptualmente borrosa aunque tenga interés clínico. Teórica-
Uno de los problemas principales en la clasificación y
mente el Trastorno se caracterizaría, además de la tardanza y la orientación proviene del hecho de que el Trastorno del Len-
pobreza comunes con el Retraso, por el hecho de que el lenguaje guaje se trata de un fenómeno evolutivo. Por esta razón el
se montaría sobre unas estructuras difícilmente modificables a pronóstico se hace muy difícil y se debería disponer de in-
raíz de la influencia del resto de las mismas y de aquí provendrían formación acerca de aquellos aspectos psicolingüísticos y
las omisiones y errores no recuperables. comunicativos que son predictores de un posterior desa-

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Tabla 4. Definiciones nosológicas de mayor consenso de las dificultades iniciales del lenguaje

Siguiendo los criterios clínicos de diversos autores (Leonard, 1998; Bishop, 1997) y de los publicados por nosotros mismos en otras
ocasiones (Serra, 1997; Pérez y Serra, 1998; Serra y Conti, XX Congreso AELFA), sólo se considera una dificultad del lenguaje cuando
no se detecta la presencia de otros problemas o síntomas clínicos identificables, sean de tipo emocional, cognitivo, motriz o sensorial, que
puedan haberlo causado. En dicho caso el diagnóstico principal correspondería al problema más grave que se haya identificado. Estos cri-
terios nosológicos no marginan, lógicamente, la existencia de plurideficiencias o de diagnósticos complejos cuando es difícil poder
identificar causas y efectos. En tal caso se prefiere el diagnóstico de “Trastorno del desarrollo”. De especial interés es no confundir, a
pesar de su clara relación, los Retrasos y Trastornos de la Comunicación, los del Habla y los del Lenguaje. Dada la diversidad entre los
niños y las situaciones, el mejor predictor para el desarrollo es la evolución del aprendizaje. Se establecen de forma indicativa tres nive-
les en las dificultades de adquisición del lenguaje.
Retraso inicial o simple (“late talkers”)
Se trata de un aprendizaje tardío, en el cual ni la comunicación ni la comprensión están afectadas de forma importante, y se producen las
primeras palabras entre 18 y 20 meses, continuando con su combinación no más allá de 6 meses después. El léxico inicial, a pesar de ser
tardío y lento presenta un perfil homogéneo, es decir, existe un equilibrio entre nominales (50 %) y otros tipos de palabras. Típicamente,
la evolución del lenguaje de estos niños responde a los cambios que se hagan en el medio: con una mejor y más abundante interacción
se normaliza su progreso a pesar de que continúe la inmadurez en alguno de los componentes, especialmente en el comunicativo (poca
iniciativa y cooperación) o en el habla.
Retraso del lenguaje (“language delay”)
Las primeras palabras y estereotipos no aparecen hasta los 2-2,6 y a los 3 todavía no superan las cien primeras palabras. La combinación
de dos palabras (lexemas autónomos y no estereotipos) es lenta y tarda más de 6 meses en conseguir. También es muy tardío el progreso
en la flexión morfológica productiva. La simplificación expresiva se estabiliza y la incorporación espontánea de nuevas estructuras ex-
presivas es muy lenta. El habla puede estar muy afectada pero no es el problema principal. La comprensión progresa en contextos cono-
cidos pero hay dudas ante novedades o contextos complejos.
Trastorno (específico) del lenguaje (“specific language impairment”)
Se reserva este diagnostico a aquellos casos en que el Retraso del Lenguaje se va consolidando, y a los 4 años todavía no se produce con
facilidad la estructura SVO con léxico conocido. Hay errores y omisiones prácticamente en todas las producciones de 3 o más núcleos
(si es que las hay). Un 10 % de las producciones puede ser incomprensible (no ininteligibles) sea por causas pragmáticas o lingüísticas.
La comprensión presenta problemas con frecuencia cuando sólo se apoya en el lenguaje (no tiene ayuda pragmática). El crecimiento lé-
xico es lento en general, pero lo es especialmente en las palabras relacionales. El progreso sintáctico y el morfológico son mínimos y
son los componentes más afectados por las omisiones y los errores.

rrollo normal, es decir, predictores que permitan identifi- componentes entre ellos (v. tabla 1). Así se clarifica que no
car y discriminar entre aquellos niños que llegan a la nor- todos los errores son parecidos y que diferentes formas
malidad a pesar de un inicio muy tardío y un desarrollo lingüísticas (morfológicas o sintácticas) pueden ser más
inicial lento y aquellos que persisten en su trastorno. vulnerables al déficit que otras, y ello tiene una explicación
Otra de las dificultades pendientes, y que no se podrá en función de una determinada organización del lenguaje
abordar aquí, es la de establecer una mejor relación entre el (ver más adelante estudios translingüísticos). De esta forma
TL y sus consecuencias psicopedagógicas, en especial las también se pueden mejorar las evaluaciones y considerar la
relacionadas con la lectura y la escritura (Stackhouse y posibilidad de que existan subgrupos de problemas (más
Wells, 1997, en prensa). tendientes al léxico o más a la sintaxis).

La adquisición de la sintaxis y su incidencia


ALGUNAS CUESTIONES PENDIENTES en la conceptuación de los trastornos del lenguaje
La cuestión fundamental que preocupa parece simple
Lingüística
(aunque sólo en términos generales...) pero es de gran abas-
Los avances recientes desde la perspectiva lingüística to ya que concierne al núcleo central de la adquisición.
mencionados en el apartado 1 son importantes y útiles. Ve- ¿Cuál es el concepto de aprendizaje que se aplica a los
amos algunos cambios y aportaciones nuevas. En primer componentes que forman el lenguaje?:
lugar se ha pasado de un enfoque en el que sólo se estudia-
ban los errores, a otros enfoques que hacen predicciones 1. Si se considera que lo que hace el niño en su evolución
más precisas en función de hipótesis que relacionan los es activar una serie de recursos innatos, que para algunos

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autores incluso son principios gramaticales, como el orden, el línea denominada funcionalista, constructivista o emergentis-
sujeto nulo –elíptico–, etc.), entonces está claro que el niño ta (ver Tomasello, 1998; 2000; McWhinney, 1999).
no se apoya necesariamente en el aprendizaje realizado en los
intercambios, incorporando y extendiendo nuevos medios, De acuerdo con esta postura ante el aprendizaje (funcio-
sino que va fijando los parámetros del lenguaje adulto según nalista y constructivista), Tomasello y Brooks (1999) su-
va encontrando en su comunicación (evidentemente tiene gieren que los grandes procedimientos sobre los que se sus-
que aprender la lengua de su entorno, con sus peculiarida- tenta la adquisición del lenguaje se pueden resumir en:
des). Si el niño, por ejemplo, no flexiona el verbo (sólo utili-
za el infinitivo) o no lo concuerda (Rice y Wexler, 1996; Rice, – Aprendizaje cultural (imitativo). Los niños pueden repro-
2000), es porque todavía no ha fijado el parámetro morfoló- ducir con acierto contextual piezas lingüísticas (no sólo
gico de los adultos, que le obliga a incorporar persona, nú- palabras) de distintos tipos y de complejidad diversa.
mero, tiempo y modo a los verbos, activando y determinando – Analogía y abstracción. Una vez se ha llegado a apren-
así una regla obligatoria, superando la fase no gramatical der un cierto nivel de piezas y estructuras (masa critica)
que estos autores han denominado como del “Infinitivo op- los niños las utilizan de acuerdo con sus propias habili-
cional extendido” (IOE o en inglés EOI). Otro ejemplo de pa- dades cognitivas, siguiendo el procedimiento de la ana-
rámetro más sencillo, sería el de fijar en que orden se rela- logía, y posteriormente la abstracción (uso fuera de con-
ciona el núcleo nominal con su modificador (“casa grande” o textos conocidos y uso sin necesidad de copiar o buscar
“big house”) (Wexler, 1996)5. Es interesante hacer notar al semejanzas con usos anteriores). Antes de llegar a este
lector que si un niño o niña no fija un parámetro, es inútil su nivel crítico el procedimiento se realiza pieza a pieza y
corrección ya que hasta que su nivel madurativo no llegue se generaliza de forma gradual. La adquisición de cate-
afrontar la decisión inconsciente del tipo de opción que su gorías adultas es pues un procedimiento lento y gradual,
lengua haya fijado no lo hará (ver Llinàs, 2001). aunque las reorganizaciones progresivas (explosión léxi-
2. Si el lenguaje en cambio se va aprendiendo de forma ca y establecimiento inicial de las categorías gramatica-
gradual, incorporando símbolos y regularidades a las funcio- les) manifiestan la capacidad para combinar estructuras.
nes comunicativas innatas, entonces es necesario adoptar una – Combinación de estructuras. Los niños son capaces de
perspectiva que estudie lo que hacen y aprenden los niños, sin ir combinando las estructuras que van incorporando de
centrarnos directamente en las categorías y funciones descri- forma creativa lo que se debe entender como una nueva
tas para los adultos y conocer como por diversos aprendizajes forma de organizarlas (reorganización de las unidades
se construyen los procedimientos necesarios6. Esta seria la según nuevos conocimientos adquiridos) y no como
una simple permutación de unidades.

5
Los estudios básicamente formales de la adquisición del len- En el caso de nuestro aprendizaje tardío, pobre de recur-
guaje como los que se acaban de comentar, cuando se aplican al sos y con múltiples omisiones (TL) estos grandes procesos
TL, aportan valoraciones, preguntas y criticas de gran interés. Así, manifestarían una dificultad de procesamiento general pero
por ejemplo, como bien dice Mabel Rice (2000) seria muy útil centrada en el lenguaje (no tienen dificultades de inteli-
conseguir marcadores lingüísticos para poder detectar el TL y se- gencia no verbal). Una propuesta de aprendizaje de este
guir su evolución e incluso establecer sus bases genéticas (Rice, tipo, tiene la ventaja de ser fácilmente trasladable a la “fa-
1996). La idea de Rice de buscar un marcador de desarrollo tiene
cilitación activa de la adquisición de dichos procedimien-
un interés psicolingüístico indudable. El problema, según nuestro
criterio, es el modelo de procesamiento en que se basa. Según tos”, en otras palabras, estamos ante unos principios que
sus trabajos, Rice cree que el marcador más característico es pre- son fácilmente trasladables a la intervención:
cisamente la comentada Extensión de la etapa del infinitivo op-
cional (Extendend Optional Infinitive Period), es decir la exten- – Conseguir un uso reproductivo natural (no-imitación
sión del período en que no se incluye marcadores morfológicos aunque sea fuera de contexto).
al verbo. Pero tal como nos informan los trabajos translingüísticos – Conseguir un nivel crítico antes de avanzar en el uso de
que se comentaran más adelante o según nuestros trabajos, una estructuras más complejas.
mejor propuesta de “marcador” inicial seria, por ejemplo, la pre- – Conseguir una organización estructurante, centrada en los
sencia de omisiones de núcleos no elidibles en los enunciados. núcleos mayores (nominales pero sobretodo verbales) para
6
Estos procedimientos básicamente se reducen a dos: El prime-
que de éstos se deriven las combinaciones de unidades.
ro es el de referirse a objetos –Juan; pelota; vaso– y a acciones
–comer; correr–. El segundo (construido sobre el anterior) consis-
te en predicar acerca de los mismos –Juan se ha caído; Dame la Manifestaciones del TL en distintas lenguas.
pelota; El vaso esta lleno, o a producir lingüísticamente la estruc- Lugar del Español
tura argumental que exige el verbo –Juan come pan– como una
nueva forma de organizarlas (reorganización de las unidades según Para entender mejor el Trastorno del Lenguaje tiene un
nuevos conocimientos adquiridos). gran interés poder responder a la cuestión de si el TL tiene

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Tabla 5. Porcentaje de uso de la flexión de pasado por niños con aquellos que son los fonológicamente más débiles de la
TL ingleses y hispano hablantes (Fuente Bedore y Leonard, lengua estudiada. Sin embargo, hay que añadir que estas di-
1999 y Leonard, 2000) ferencias son cuantitativas y no cualitativas, es decir, se
encuentra un mayor o menor control en los contextos obli-
Inglés Español
gados pero siempre con un mínimo conocimiento o pro-
Pasado 32 –
ductividad correcta (en la edad o LME correspondiente,
1ps – 90 evidentemente no antes de los tres años y medio).
1pp – 91 Según Leonard, los errores de los TL tienden a ser espe-
3ps – 82 cíficos de su propia lengua, y son parecidos a los que reali-
3pp – 65 zan los niños con DN más pequeños sólo que aparecen en
mayor cantidad en los TL (ver en este número Serra, Sanz
y Aguilar). Por ejemplo, y siendo relevante para la hipóte-
sis del EOI de Rice, en Inglés se tiende a utilizar la forma
una manifestación lingüísticamente determinada en las dis- de infinitivo en vez de la flexión o el uso de auxiliar, mien-
tintas lenguas, o si es independiente de las mismas. Recor- tras que en Italiano y en Español se suele utilizar la 3ps
demos que las lenguas optan por soluciones diversas para (o la 1ps) por las otras personas8. La presencia de sobrerre-
vehiculizar significados. De hecho esta pregunta ya tiene su gulaciones (parecidas o no a las de los DN) también mues-
precedente en el estudio de la adquisición normal en la que tran un conocimiento de reglas y una aplicación “creativa”
nos podemos plantear si los niños siguen un orden y unos aunque sea incorrecta.
procedimientos que vienen marcados por la estructura de la Los problemas de los niños con TL con relación a la
lengua o bien lo son por la maduración bio-cognitiva y so- morfología presentan una paradoja muy interesante: Cuan-
cial de los niños. ta mayor es la presencia de marcaje morfológico en una
Desgraciadamente ambas líneas de estudio, y en especial lengua, como es el caso del español o el italiano, mejor la
la del TL no han llegado a progresar con suficiente solidez aprenden y utilizan los TL. Dicho al revés, cuanta menor
por problemas metodológicos. No obstante, tenemos datos morfología tiene una lengua, como el inglés, peor la apren-
de gran interés, especialmente gracias a los trabajos de Dan den y utilizan sus niños con TL9. Por ejemplo, los niños con
Slobin (1992) y Melissa Bowerman (Bowermann y Levin- TL en inglés utilizan la 3ps sólo en un 23 % de sus contex-
son, 2000) en la adquisición normal y a los de Larry Leo- tos obligados, mientras que en italiano lo utilizan un 94 %
nard para el TL (1998; y en español a partir de su colabo- (Leonard, 2000).
ración con Bedore: Bedore y Leonard, 1999). Como se ve en la tabla 5 a pesar de que los TL hispano
La primera dificultad para las investigaciones translin- hablantes tienen que elegir entre distintas personas (y tiem-
güísticas en el caso de los TL reside una vez más en la de- pos) tienen un acierto mucho mayor que los anglo parlan-
finición de la población que se quiere estudiar. En segundo tes. Nuestros datos con niños menores y en tratamiento
lugar existe otra dificultad metodológica mayor: La edad de confirman los datos presentados por Leonard.
los niños, el cálculo del índice de LME (longitud media de Lo dicho acerca de la morfología para una lengua con
enunciados en morfemas –LME– o en palabras LMEp) y el una flexión rica y el nivel de productividad en los TL, cu-
tiempo de rehabilitación que hayan tenido. Según nuestra riosamente no se confirma en relación con las palabras fun-
experiencia7 es muy difícil comparar resultados (definición cionales o gramaticales (en oposición al léxico autónomo).
de categorías y de las características de los sujetos). Leo- En este tipo de palabras, compuesta básicamente por auxi-
nard ha comparado 45 morfemas en distintas lenguas y ha liares, clíticos, artículos y preposiciones, el problema más
encontrado diferencias entre los TL y los niños con desa- importante, y con diferencia, es el de su omisión (no su
rrollo normal y LME parecido en 24 morfemas, pero no ha error de comisión) como se ve en el resto de trabajos de
encontrado ningún morfema cuyas diferencias entre TL y
DN (desarrollo normal) sean consistentes entre las lenguas
8
estudiadas. Para cada tipo de morfemas hay diferencias Por ejemplo, a pesar de que la flexión de 3ps –s en inglés es
entre las lenguas, aunque en todas existe algún morfema en utilizada sólo en un 23 % de contextos obligados, sólo en un 0,8 %
el cual los TL presentan diferencias respecto a los DN. En de ocasiones lo es fuera de lugar, cuando otro tipo de flexión es
requerida.
general los morfemas más difíciles están relacionados con 9
La afirmación de que “cuanto más mejor” hecha para el uso de
la morfología tiene un límite muy claro, pues en lenguas de alta in-
flexión (como el hebreo, por ejemplo, lengua en la que además de
7
Aquí tenemos en cuenta las distintas reuniones y propuestas del tiempo y persona incluyen masculino y femenino en la conjuga-
grupo EUCLDIS (Grupo Europeo para el estudio de los Trastornos ción), encontramos que el nivel de uso correcto de los TL baja a un
del Lenguaje en los niños) que ya lleva diversas reuniones inter- 77 cuya diferencia es significativa hacia los DN cuando en español
nacionales tratando, entre otras, de esta cuestión de los criterios. es de un 82. El inglés sin embargo esta en un nivel de uso del 32 %.

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este número. Sólo a título de ejemplo se puede mencionar también pueden producir frases que son incluso complejas
que el artículo es omitido en un 51,2 % por parte de los TL pero no son apropiadas al contexto o bien se duda que las
(a los tres años y medio) mientras que sólo lo es en un entiendan y utilicen apropiadamente. No está resuelto el
14.1 % por parte de los controles LMEp10. Este fenómeno, poder distinguir si estamos frente a un efecto secundario
además, de tener el factor morfológico y sintáctico presen- del TL o ante una dificultad independiente. No es nada raro
te, tiene otro muy importante, el fonotáctico-prosódico: La encontrar niños en los que es difícil evaluar cual es el pro-
mayoría de dichas palabras funcionales son átonas, mo- blema principal, si la comunicación o el lenguaje. Hay que
nosílabas y generalmente se sitúan precediendo a lexe- poder establecer si las dificultades comunicativas de los TL
mas gramaticales. De aquí que las omisiones de artículos inciden en un déficit primario del conocimiento social o es
en inglés e italiano se igualen (Leonard et al, 1993 y Rice una consecuencia secundaria de la pobreza de sus habilida-
y Wexler, 1996). Esta explicación, de tipo prosódico, ha des lingüísticas.
sido propuesta por Leonard (2000; Bock y Levelt, 1994). El TL lógicamente tiene unas consecuencias comunica-
En resumen, los niños con TL no muestran un perfil pa- tivas y es sabido que los niños que son diagnosticados
recido en las diversas lenguas, aunque sí muestran en to- como tales, o incluso con un simple inicio tardío del len-
das alguna área morfológica que les es especialmente difí- guaje puntúan bajo en las escalas de sociabilidad infanti-
cil. En cada lengua hay unas dificultades especiales les (Rice et al, 1991; Hadley y Rice, 1991) encontraron
(“predilectas”) que guían los errores. dificultades parecidas en los niños con TL y los inmigran-
Todo lo que hemos revisado hasta aquí tiene implicacio- tes sin un nivel de inglés suficiente. Ya a los 3 años los
nes de cara a la intervención: los datos croslingüísticos, niños buscan que sus parejas de juego o de clase tengan
tanto para comprender la etiología como para ayudar la in- un nivel comunicativo y lingüístico parecido al suyo
tervención, apuntan a decirnos que las palabras cambian- (Gertner, Rice y Hadley, 1994). De forma parecida los
tes (flexión), las que son poco salientes prosódicamente y maestros también tratan de forma distinta a los niños con
lleven significado de relación (y no tanto el léxico autóno- TL iniciando menos intercambios y siendo más simples
mo, candidato a ser núcleo o argumento), plantean dificul- (Redmon y Rice, 1998).
tades a nuestros niños que pueden ser reducidas poniendo Estos trabajos claramente apuntan a que el propio TL tie-
en un primer plano perceptivo (saliencia) las sílabas átonas ne consecuencias en la interacción social, sin embargo para
correspondientes a palabras gramaticales y en primera línea algunos autores, como Bishop, existen otros datos que hay
funcional (precisando contrastes poco informativos todavía que incorporar y que no apuntan a que todas las dificultades
para el niño) las palabras relacionales (clíticos posverbales, comunicativas se deriven ni del TL ni correspondan a un
auxiliares, etc.). niño dentro del espectro autístico. Esta autora, reclama que,
sin olvidar las grandes diferencias que existen entre los pro-
pios TL, en general, se encuentran dificultades secundarias
Pragmática y comunicación: ¿Las dificultades
al TL que se deben ser explicadas como la mayor dificultad
pragmáticas forman un tipo de TL o son una dificultad
en responder adecuadamente a las expectativas de los adul-
independiente relacionada con el espectro autista?
tos (como mayor número de respuestas pragmáticamente
Algunos niños además de presentar los síntomas de ini- inapropiadas).
ciar tarde el lenguaje y ser pobres en su uso, manifiestan Otra forma de aproximarse a estas dificultades es estu-
unas dificultades adicionales que pueden ser independien- diar la comunicación no verbal de los TL. Pero en nuestros
tes de las propiamente lingüísticas. Se trata de niños que resultados (ver Serra, Sanz, Aguilar en este número) no he-
tienen dificultades en el uso del lenguaje en ciertos contex- mos encontrado un mayor uso del gesto sustituyendo la pa-
tos, manifestando que sus problemas comunicativos pue- labra en los TL que en los Controles de Edad ni en los Con-
den ser mayores (e independientes) de los problemas de troles de nivel Lingüístico (LMEp, en inglés MLU-W), en
lenguaje. Gracias a los recientes avances en la realización todo caso la tendencia era contraria, como también encuen-
de perfiles y pruebas hoy día se analiza ya con cierta preci- tra Bishop et al (2000).
sión el habla, el léxico y la competencia morfosintáctica La relación entre niños del espectro autista y el TL ha sido
de los niños. Pero en estas evaluaciones, con demasiada puesta de relieve en diversas ocasiones (p. ej., Bartak et al,
frecuencia se da por descontado que el niño tiene intereses 1975; Boucher, 1998; Bishop, 2000). Según el DSM-IV, el au-
comunicativos y es hábil transmitiéndolos. tismo es un trastorno permanente y generalizado del desarro-
Los casos denominados como semántico-pragmáticos llo, es decir que influye a un conjunto de áreas o habilidades y
que interesan aquí (Bishop 1997; 2000; Monfort, 2001) no se puede considerar como un trastorno simplemente evo-
pueden utilizar un lenguaje muy pobre y estereotipado pero lutivo (como se considera el TL). A partir de la clínica es fácil
aceptar que existen muchos niños que están en la frontera pre-
sentando sintomatología autística en la comunicación y en su
10
Datos no incluidos en este estudio. retraso del lenguaje, especialmente los que tienen síntomas

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de inadecuación11 e inadaptación comunicativa en mayor gra- estudio realmente genético del lenguaje no había sido dema-
do que sus habilidades sociales. En este sentido Bishop se in- siado extenso hasta muy recientemente, tanto en lo tocante a
clinaría por un esquema diagnostico en que situaría tres pola- la genética molar (habilidades como el lenguaje, la inteli-
ridades: 1. estructura (área del TL); 2. uso social del lenguaje gencia, la música, etc.) como en la la genética molecular (es-
(área del TSP – Trastorno Semántica Pragmático), y 3. intere- tudio directo de los genes en un sistema complejo de inter-
ses subjetivos (área de los Asperger). Bishop emplaza al au- acción, responsable del comportamiento, en este caso, del
tismo equidistante de las tres polaridades. lenguaje). El progreso en los estudios genéticos en los últi-
mos años ha sido enorme. No sólo por la determinación del
genoma humano, sino también por otras técnicas que ayudan
Otras explicaciones del TL en la obtención de información, sin dejar de lado la mejoría
en la evaluación psicolingüística que permite estudiar cuales
Déficit genéticamente determinado
son los componentes del lenguaje afectados, y no solamente
Muchos estudios han demostrado con claridad la influen- dar una valoración global del mismo. Los estudios actuales
cia del lenguaje del medio en la adquisición por parte de los además de conocer si los TL son heredables, pueden indi-
niños y niñas: existe una correlación clara entre la canti- carnos hasta que punto estamos ante una variación normal o
dad y el tipo de lenguaje paterno y la velocidad del desa- bien se trata de alguna dificultad especifica, que conjunta-
rrollo en los niños y las niñas (Hampson y Nelson, 1993; mente con otras llega a producir la sintomatología que cono-
Serra et al, 2000). Pero al mismo tiempo es un hecho que cemos. Los mejores datos de tipo genético en el estudio del
nunca ha pasado desapercibido, ya que se observa con faci- TL provienen de las comprobaciones realizadas en mellizos.
lidad, el que existe alguna base genética en la habilidad Los monozigóticos tienen una probabilidad de concordancia
para el lenguaje y en los TL: La excelencia y las dificulta- en el TL de un 80 % y los dizigóticos de un 38 % (Tomblin y
des del lenguaje con frecuencia se enraciman en familias. Buckwalter, 1994). En otros estudios (Bishop, 1992) las ci-
Lo que no está tan claro es cuáles son las causas inmediatas fras se mueven en niveles semejantes: 86 % y 48 (Lewis y
de esta presencia familiar. Por una parte algunos autores Thompson, 1992) y 67 % versus 32 % (Bishop, 1992). El es-
sostienen que la simple presencia ambiental del lenguaje y tudio más interesante en este ámbito es el de Plomin y Dale
la imitación son suficientes para poder explicar este enra- (2000; Plomin y DeFries, 1998; Dale, en prensa). Las pre-
cimado familiar. Otras personas aluden a factores no in- guntas que se formulan en este estudio pretenden acercarse a
mediatos al lenguaje sino a habilidades de soporte, como la la etiología y no basarse simplemente como hasta ahora en
atención inicial y la capacidad de memoria auditiva, por la sintomatología observable: ¿Es que el TL es una variación
no hablar de otras más sociales, como la facilidad de empa- normal, aunque en el extremo de dificultad, pero sin mostrar
tía con los demás. Junto a la observación de este hecho, en ninguna diversidad en el genoma, o bien se hallan particula-
los últimos decenios se ha ido reforzando la teoría de que ridades que lo sitúan en un marco genético distinto? El estu-
el lenguaje debe ser forzosamente innato dada la facili- dio que comentamos se está llevando a cabo con 1.500 melli-
dad, universalidad, etc. de su aprendizaje, hasta llegar a zos idénticos (MZ) y 1.500 sólo hermanos (DZ) criados en su
darle el atributo de “instinto” (Pinker, 1994; véase Rice, familia o en dos familias. Los autores concluyen que el 60 %
1996 para el estudio concerniente al TL; véase Serra et al, de la variancia en los resultados es explicable genéticamen-
2000 para una presentación in extenso del tema). te, pues hallan una correlación de .89 para los mellizos idén-
A pesar de que estos marcos teóricos otorgan a la gené- ticos y una del .49 para los distintos. Dentro de las medidas
tica, y por tanto a la heredabilidad, una importancia clave estudiadas (vocabulario, etc.) el componente que mayor ex-
en sus presupuestos, de hecho, muy poco se sabe hoy por plicación genética obtenía era el gramatical al mismo nivel
hoy de bases genéticas identificables12. que la “maduración mental” (fig. 2). También informan de
Es curioso que, conociéndose la alta probabilidad de la que la influencia es distinta para los niños que para las niñas,
heredabilidad de las dificultades del habla y del lenguaje, el siendo algo mayor para los primeros. Es decir que la expe-

11
Entendida aquí como corrección formal estructural del len- producción de actina, responsable de la rigidez de muchas células,
guaje aunque sea simple y pobre, pero inapropiada pragmática- las más importantes de entre ellas las células ciliadas del oído
mente, poniendo en duda si estamos ante una dificultad de com- pues en otras partes no se observa deficiencia alguna aunque exis-
prensión de la situación y/o del lenguaje. te. El efecto sobre las células ciliadas es la sordera. Este ejemplo
12
Es ilustrativo el ejemplo de sordera hereditaria que explica es ilustrativo de que la transmisión hereditaria puede ser muy di-
Annette Karmilof (Tomassello y Bates, 2001, p 335) para que se versa y en general es indirecta, especialmente en comportamien-
entienda mejor la heredabilidad: Ellas informan que se ha des- tos complejos como el lenguaje, cuya base heredada ha de ser
cubierto una forma de sordera hereditaria situada en la mutación muy elemental. (El rol de la actina en la sordera hereditaria ya fue
de un gen que tenia los primeros 1.213 amino ácidos correctos puesto de relieve anteriormente por Estivill, Perelló y cols. en el
pero faltaban los últimos 52. Estos amino ácidos controlan la Human Genetics 1998;62:25-35.)

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riencia es afectada por las propias características de los niños,


y ello de forma creciente en el desarrollo. Con relación al Vocabulario
subgrupo estudiado de niños con un desarrollo anormal del
lenguaje Bishop (et al, 1995) y Plomin y Dale confirman un
mayor grado de heredabilidad en la población afectada de TL
.61 .65
que en la población normal (.25 para el vocabulario, .39 para .30
la gramática, .22 para la referencia fuera de contexto, .25 para
el nivel de competencia comunicativa no verbal y .20 para un Competencia
índice de nivel cognitivo general). no verbal
Otra información de interés es que la correlación genéti-
ca entre componentes del lenguaje (vocabulario, gramática,
referencia descontextualizada) supera claramente el .50 y
en cambio estas correlaciones realizadas con habilidades .29 .40
cognitivas no verbales no superan el .30, manifestando que
los efectos genéticos en estas habilidades se superponen Referencia
Gramática
.53 Fuera contexto
de forma más clara que en las habilidades cognitivas más
generales. Dichas habilidades tienen más posibilidades de
ser causadas por los mismos genes (comparaciones verbal Figura 2. Correlaciones obtenidas en un estudio genético multiva-
– no verbal y por grupos de gravedad en el trastorno) y de riado a partir de 3.000 parejas de mellizos (1.500 MZ y 1.500 DZ)
ser más independientes de la influencia ambiental (compa- adaptado de Dale et al, en prensa (Citado por Plomin en Bishop y
raciones MZ y DZ). Leonard, 2000, p. 46). Las correlaciones varían según en qué eda-
des hayan sido calculadas. Éstas han sido realizadas a los 2 años.
La información más discutida recientemente en torno a
las cuestiones genéticas y el trastorno del lenguaje lo han
sido en relación con la familia K (Fisher et al, 1998). En
esta familia quince miembros tienen dificultades claras de
Dificultades en la percepción auditiva
lenguaje y de habla, y se ha encontrado un modo simple y
dominante de heredabilidad: una región del brazo largo Tallal a partir de sus conocidos experimentos de percep-
del cromosoma 7 (7q31) está relacionada con el trastorno ción auditiva de estímulos rápidos y cambiantes (1996-1970)
de esta familia. Sin embargo, esta misma zona y con este aportó datos interesantes en relación con las dificultades de
tipo de heredabilidad es la hallada también para el autis- percepción auditiva de estos niños. Estos autores atribuyen
mo... Por tanto tenemos que tener claro que no se trata de la los déficit de estos niños a la velocidad (20 msg para la ex-
influencia de un sólo gen (o un número reducido) y que for- plosivas, etc.) y la variabilidad de los estímulos, ya que estas
zosamente nos hallamos ante una interacción de genes en características dificultarían la percepción y por tanto la cate-
un sistema complejo que debe ir realizando una serie de ac- gorización. Lógicamente estas dificultades deberían incidir
tividades en el tiempo. en una representación acústica del léxico difusa y difícil de
Un último comentario acerca de los estudios genéticos es reconocer a la velocidad natural. Asimismo, debería incidir
el de que hay que prestar atención a aspectos poco cuida- en una mayor dificultad para percibir, y por tanto producir,
dos en estos estudios como, por ejemplo, el hecho de que las sílabas o segmentos cambiantes que llevan la información
cuando se selecciona a la propia pareja, cada miembro tie- morfológica. Todos estos hallazgos son interesantes pero no
nen en cuenta, inconscientemente, su nivel mental, (que co- se han replicado, y recientemente, Bishop (comunicación
rrelaciona un .45 entre ellos, no teniendo evidentemente una personal) comparando niños con deficiencias auditivas lige-
causa genética y correlaciona mucho más su nivel verbal; ras y medias (DAL/DAM) ha encontrado que, las dificulta-
la altura, en cambio sólo correlaciona un .23) (Plomin et al, des perceptivas ciertamente pueden ser un factor incidente,
en prensa). Si esto es así, los resultados del nivel verbal de sin embargo, comparando los errores morfológicos y sintác-
los hijos puede depender más de la tendencia de las parejas ticos entre DAL/DAM y los TL no se justifica que el factor
a unirse con los de un nivel parecido durante muchas gene- auditivo sea decisivo, entre otras razones, porque los déficit
raciones. Esta, y no otras razones biogenéticas pueden ser la sintácticos están más vinculados a problemas de procesa-
causa de que el lenguaje sea una habilidad más heredable miento. El déficit auditivo puede ser un factor importante
que la inteligencia general o que incluso las enfermedades siempre que otros factores de riesgo también estén presentes
mentales como la esquizofrenia o la depresión. y sea su interacción la causa del TL.
De los estudios genéticos lo más interesante esta por ve- Los resultados de la intervención mediante el programa
nir. Pronto se conseguirá romper la barrera de nuestro usual que Tallal ha preparado (“Fast ForWord”) tiene una buena
diagnóstico sintomatológico para pasar a otro más etiológi- base para que pueda ayudar a los niños (enlentecer la señal
co: la interacción entre factores genéticos y ambientales. acústica del habla sin que sea perceptible y practicar larga-

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mente con ésta), sin embargo, no se descarta que sea la pro- – La vigilancia o monitorización para el ajuste pragmá-
pia práctica masiva la que ayude a los niños. En resumen, la tico, referencial y lingüístico que evita frases incom-
línea de las investigaciones perceptivas se sostiene pero no prensibles y omisiones de núcleos obligados.
ha aportado novedades y continúan las dificultades para re- – El mantenimiento de la perspectiva, y de los diversos
producir los resultados presentados hasta hoy. índices para significar y precisar la información dada
como nueva – conocida.
– La jerarquización vista en la concordancia y en la co-
RESUMEN DE LAS LÍNEAS EXPLICATIVAS herencia.
Y PRINCIPIOS PARA LA INTERVENCIÓN
Finalmente es necesario hacer un comentario acerca de la
Después de hacer una presentación de donde se sitúan las evolución de los trabajos sobre la intervención (ver en este
investigaciones del TL, de revisar los problemas graves de número Pérez y Giró).
criterios diagnósticos y de hacernos algunas preguntas rele- La mayoría de trabajos sobre intervención, (consúltese
vantes para también incorporar algunos conocimientos para una amplia revisión Leonard, 1998; ver también Agua-
nuevos en este ámbito, será útil que realicemos una síntesis. do, 1999; Fey y Proctor-Williams, 2000; Olswang et al,
A pesar de que la causa o las causas de los TL sean desco- 1998) han avanzado en ver la necesidad de analizar mejor lo
nocidas en detalle, las explicaciones surgirán de entre las que consiguen los niños, como lo realizan y aquello que se
siguientes propuestas generales: pretende que lleguen a utilizar de forma generalizada. Para
facilitar la revisión de los trabajos citados ésta es una sínte-
1. Que alguna de las habilidades subyacentes y necesa- sis de los puntos que sobresalen en posturas actuales:
rias no se esté desarrollando adecuadamente, ya sea por
razones genéticas (Gopnik, 1994), ya sea por razones neu- – Conocer lo mejor posible el curso del desarrollo nor-
rológicas (como la emigración neural atópica, los micro- mal para seguirlo en la intervención.
traumatismos, una epilepsia suave pero en lugares estraté- – Partir de una buena anamnesis y un perfil para conocer
gicamente importantes, por diferentes focos, etc., Deonna lo que el niño comprende y sabe hacer, puede producir
et al, 1996). Sin embargo, por más importante que sea co- en contextos simples (atender a la omisión de núcleos)
nocer esta base neurológica, las correlaciones entre bases o no puede realizar ni con ayuda. No olvidar los as-
neurológica y competencia psicolingüística no son nada pectos pragmáticos (comunicación adecuada).
simples y todavía menos en casos de patología inicial. – Mantener la funcionalidad comunicativa y la motiva-
2. Que se esté dando un mal aprendizaje en alguno de ción de los niños en la intervención (complejo en ree-
los componentes necesarios (fonético, morfológico, etc.) ducaciones de larga duración). En otras palabras que
y no se consiga el nivel crítico necesario para que llegue a el niño sitúe con claridad la funcionalidad de la tarea,
ser funcionalmente utilizable. La repercusión clara en- sea con el uso de la comunicación no verbal o de la pro-
tonces es la de que exista una interacción mal organizada sodia para clarificar, o de ejercicios metacomunicativos
entre los componentes, produciéndose una desarmonía (hablar de la pronunciación, la claridad, etc.).
evolutiva. Según este planteamiento, difícilmente se en- – Al modelar las estructuras o funciones deseadas, no
contrará nunca “la causa” sino una interacción mal resuel- sólo atender al contenido sino también a la manera
ta que impide las reorganizaciones progresivas que el como se realiza el proceso: Pausas, tiempos de espera,
aprendizaje natural exige. ampliación de los tiempos producción y comprensión,
velocidad, prosodia, repeticiones, reformulaciones,
Por el tipo de dificultades y errores que conocemos, tan- comentarios, presentación de alternativas, etc.
to del aprendizaje natural como del retrasado, las explica- – Clarificar al máximo cual es el nivel o la estructura afec-
ciones deberán atender y proponer explicaciones acerca de tada para no tratar de alcanzar objetivos que implican va-
los aspectos siguientes: rias estructuras simultáneamente. En otras palabras sim-
plificar al máximo los objetivos y partir de lo que ya esta
– La interacción entre práctica comunicativa y el inicio disponible en el repertorio del niño, ya sean escripts (es-
lexical tardío. cenarios conocidos), funciones (pedir, preguntar, locali-
– La interacción entre el inicio léxico tardío y el paso a zar, etc.) o estructuras (imperativas, interrogativas, etc.).
expresión de proposiciones realizado mediante dos nú- – Analizar con precisión las demandas cognitivas de las
cleos productivos. tareas que se proponen para reducir la carga que pueda
– La interacción entre el uso de núcleos productivos y: suponer para el niño, eliminando toda posible inciden-
la incorporación de las marcas morfológicas, la incor- cia que provenga del resto de componentes. Por ejem-
poración de pre y post modificaciones de los núcleos plo al trabajar estructuras sintácticas, utilizar un léxico
(artículos y adjetivos). que sea bien conocido por parte del niño.

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Serra Raventós, M.—TRASTORNOS DEL LENGUAJE: PREGUNTAS PENDIENTES EN INVESTIGACIÓN E INTERVENCIÓN

– Ajustar constantemente los objetivos de acuerdo con Bishop D, North T, Donlan C. Genetic basis of Specific Language
el progreso para evitar repeticiones inútiles o ejerci- Impairment: Evidence from a twin study. Develop Med Child
cios no dirigidos a aprendizajes de interés. Neurol 1995;37:56-71.
– Contextualizar estructuralmente de forma adecuada. Bock K, Levelt W. Grammatical encoding. En: Grernsbacher M,
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Por ejemplo, en fonética, al trabajar fonemas no olvidar
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su inserción en la sílaba y la palabra, o incluso trabajar- Boucher J. SPD as distinct diagnostic entity: Logical considera-
los directamente en las estructuras superiores. tions and directions for future research. Int J Lang Commu-
– Contextualizar de forma transparente para el niño el ob- nicat Dis 1998;33:71-81.
jetivo que se pretende y extenderlo a otros contextos Bowermann M, Levinson S. Language acquisition and conceptual
cuando se haya llegado a un mínimo de automatización development. Cambridge: Cambridge University Press, 2000.
en el mismo. Por ejemplo, al trabajar la estructura narra- Conti-Ramsden G. Introduction: Methodological concerns. En:
tiva, utilizar una historia bien conocida, con un esquema Levy Y, Schaeffer J, eds. Language competence across popu-
fácil y una vez bien asimilado, ampliarlo y posterior- lations: Towards a definition of Specific Language Impair-
mente inventar otras historias de una estructura parecida. ment. New Jersey: Erlbaum, 2000.
– Trabajar explícitamente la automatización que sólo se Dale PD, Dionne G, Eley T, Plomin R. Lexical and Grammatical
development: A behavioural genetic perspective. J Child Lan-
consigue mediante una práctica repetida (que no tiene
guage. En prensa.
por que ser aburrida) y bien contextualizada. Deonna T. Troubles du langage et epilepsie chez l’enfant. En:
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