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CITAS TEXTUALES:

LA INGENIERIA CIVIL EN LOS PUENTES


1. Cita:
En la ingeniería civil se usa cálculos para realizar un puentes tener conocimiento en
qué lugar se va hacer y cómo realizar este proyecto ya sea en un río, mar o ente
otros. Un ingeniero civil tiene que tener conocimientos, investigación e equilibrio
como lo dice HAMBLY (1990) descubrió los cálculos de dimensionamiento
revisando el conjunto de ecuaciones de equilibrio, en el total de una estructura o en
parte de ella, comprobando la resistencia de cada sección y evaluar la condición de
la vida útil así como también efectos secundarios. No importa cuánto tiempo ni siglos
nos llevara construir este puente porque cada ingeniero sabe que podrá terminar
esta obra para un beneficio a humanidad CARL SAGAN dice que en el transcurso
de diez siglos no se hizo ni un solo descubrimiento que exaltara la dignidad o
promoviera la felicidad de la humanidad pero solo con esfuerzo se podar demostrar
que si se puede. Así que a la obra de terminar esta obra nos sentiremos bien gracias
a los conocimientos que cada ingeniero tiene.

INGENIERÍACIVILYTERRITORIO

2. Cita:
La ingeniería civil tiene hoy mucha presencia, configura el territorio, lo ordena y
crea paisaje. Esto último es fundamental, porque más allá de la funcionalidad, la
ingeniería es presencia rotunda en el paisaje.
INGENIERIA CIVIL EN LA RED
3. Cita:
La ingeniería civil es el resultado de una actitud ambivalente, un ataque al mundo
de un intento de restaurarlo. Nuestra actividad nunca es el resultado estricto de la
contemplación, las inundaciones, las sequias, los grandes oleajes, los corrimientos
de tierra, las grandes avenidas, estos terribles fenómenos nos dan idea del poder
de la naturaleza pero no de la bondad de la providencia. Los ingenieros de caminos
sabemos que a veces la naturaleza no es benéfica sino despiadada.
(…) La ingeniería pues, pretende ayudar a la superación paulatina de estado
caótico, desordenado e inútil en que el mundo se encuentra, mediante un espíritu
ordenador y creador que le preste sentido y le humanice.
CITA TEXTUAL

Así como no podemos atribuirnos la propiedad de los objetos ajenos, tampoco


podemos hacerlo con la autoría de las ideas ajenas. Siempre que tomamos una
idea ya publicada y nos servimos de ella, o que investigamos para dar pie a las
ideas propias, debemos rendir cuentas de dónde sale cada cosa y discernir entre lo
propio y lo ajeno. Para ello existen, justamente, las citas textuales.

Una cita textual es una forma de préstamo de contenido que sirve para aclarar al
lector cuándo acudimos a las palabras de otro investigador, autor o personalidad,
por desconocida que sea. Esta acción se llama referir, y no sólo permite al lector
saber cuándo nos lee a nosotros y cuándo lee los textos que investigamos,
sino además le brinda claves de información para que acuda al libro original en
caso de que le interese.

Esto último lo hará, claro, recuperando la información total del libro consultado en la
bibliografía del texto, también conocida como referencias bibliográficas.

Tanto las citas textuales como la bibliografía final de un texto se elaboran conforme
a modelos metodológicos estandarizados, es decir, que buscan unificar todo en un
mismo criterio universal. Los más conocidos son APA (del inglés: Asociación de
Psicología Americana) y MLA (del inglés: Asociación de Idiomas Modernos), cada
una con sus normas y protocolos particulares.

Citar correctamente es vital, como se verá, para el mundo de la investigación y la


lectura. De simplemente tomar y atribuirnos todo lo dicho por otro, estaremos
incurriendo en un plagio, una forma de deshonestidad intelectual que puede
acarrear sanciones y problemas. Plagiar es una forma de robo.

Ejemplos de Citas Bibliográficas

Tipos de cita textual

Existen normalmente dos formas de cita textual, de acuerdo al número de palabras


que contenga el texto citado. Las particularidades varían de acuerdo al formato
metodológico, pero comúnmente se distingue entre:

 Citas cortas (con menos de 40 palabras). Las citas textuales que sean
inferiores a 40 palabras deberán ir incorporadas al texto, sin interrumpir el
flujo ni la diagramación del mismo. Sin embargo, deberán estar
enmarcadas entre comillas, marcando el inicio y el fin del texto original,
y deberán estar acompañadas por una referencia parentética en la que
figuren los datos bibliográficos de la cita, tales como:
o Año de publicación del libro. Esto es particularmente importante si hay
varios libros citados del mismo autor, ya que podrán distinguirse por
año.
o Número de la página o las páginas citadas. Por lo general antecedidas
de la abreviatura “p.” o “pág.”. En caso de ser varias páginas, se citará
la primera y la última, separadas por un guión corto: págs. 12-16. En
caso de ser páginas separadas pero discontinuas, se usarán comas:
págs. 12, 16.
o Apellido del autor. En algunos casos, si el apellido se ha nombrado
antes dela cita o está claro a quién pertenece, puede omitirse esta
información en el paréntesis.

 Citas largas (iguales o con más de 40 palabras). Las citas textuales que
igualen o superen las cuarenta palabras, en cambio, recibirán un tratamiento
especial, que implica separarlas del margen izquierdo de la página con
dos (2) tabulaciones sin sangría, y por lo general utilizar un punto menos
en el tamaño de la fuente tipográfica. En este caso no se requieren comillas
de ningún tipo. Sin embargo, una vez concluida la cita, deberá
acompañársela por su respectiva referencia parentética con los datos
anteriormente mencionados.

Signos especiales:

En ambos casos de cita textual, no obstante, pueden presentarse algunos de los


siguientes signos, abreviaturas o caracteres:

 Corchetes. La aparición en medio de una cita corta o larga de un texto entre


corchetes suele significar que el texto entre ellos no forma parte de la cita,
sino que pertenece al investigador, quien se ve obligado a aclarar algo o
añadir algo a la misma para que pueda entenderse a cabalidad.
 Ibíd. o ibídem. Expresión en latín que significa “idéntico” y que se emplea en
la referencia parentética para decir al lector que una cita textual pertenece al
mismo libro anteriormente citado.
 cit. Semejante a la anterior, esta alocución latina significa “obra citada” y se
emplea en los casos en que existe una sola obra consultada de un autor,
pudiendo así evitarse repetir sus detalles (ya que son siempre idénticos),
variando apenas el número de página.
 Et. al. Esta abreviatura latina se emplea para los casos de obras con un autor
principal y numerosos colaboradores, demasiados para listarse en su
totalidad. Por ende, se cita el apellido del principal y se acompaña de esta
abreviatura.
 Puntos suspensivos (…). Se emplean para señalar al lector que existe parte
del texto omitido, ya sea antes del inicio de la cita, luego de ésta, o en el
medio de la misma. Suelen usarse entre paréntesis para esto.
Ejemplos de cita textual corta

1. Como podemos constatar en las investigaciones de Foucault (2001), la


noción de locura forma parte integral de la razón, dado que “no existe
civilización sin locura” (p. 45).
2. Además, “el consumo cultural en América Latina alcanza su grado máximo
en relación con el flujo de discursos políticos y mercantiles, y no, como en
Europa, articulado a partir de los Estados-nación” (Jorrinsky, 2015, p. 8).
3. Conviene, en ese sentido, acudir al psicoanálisis: “La doctrina del ser se
manifiesta a raíz de la introyección [castración] del lenguaje en el individuo”
(Tournier, 2000, pág. 13).
4. Así lo afirma en su prólogo a la obra Elena Vinelli, cuando afirma que “Es la
construcción sociocultural de los géneros la que viene a diferencia la
subjetividad femenina de la masculina” (2000, p. 5), dándonos a entender el
semblante feminista que subyace a la novela de Sara Gallardo.
5. No ha de esperarse, entonces, mucho más de estas investigaciones, excepto
“el breve desencanto de dar con la verdad insospechada” como lo afirma
Evers (2005, p.12) en su célebre diario de investigaciones.

Ejemplos de cita textual larga:

1. Así, podemos leer en la novela de Gallardo (2000):

…Pero las mujeres pasan siempre en grupos. Me escondí y esperé. La Mauricia


pasó con su botijo y la arrastré. Cada día se escapó después para encontrarme,
temblando por el miedo al marido, a veces temprano y a veces tarde, a aquel lugar
que yo conozco. En la casa que hice por mi mano, para vivir con mi mujer, en la
misión del gringo noruego vive con su marido. (p. 57)

2. A esto conviene contraponer la visión del autor francés:

En las religiones universales, del tipo del cristianismo y del budismo, el pavor y la
náusea preludian las escapadas de una vida ardiente espiritual. Ahora bien, esta
vida espiritual, que se funda en el refuerzo de las prohibiciones primeras, tiene sin
embargo el sentido de la fiesta… (Bataille, 2001, p. 54)

3. La escritura constituye un punto de encuentro y desencuentro de las miradas


más positivas y más románticas en torno al hecho literario, pudiendo servir
para distinciones como las que hace Sontag (2000):

He aquí la gran diferencia entre la lectura y la escritura. Leer es una vocación, un


oficio en el cual, con la práctica, uno está destinado a ser cada vez más experto.
Como escritor, lo que uno acumula son ante todo incertidumbres y ansiedades.
(pág. 7)
4. Este concepto de “devenir” puede encontrarse disperso a lo largo y ancho de
la obra del filósofo. Sin embargo, su esclarecimiento parece ser materia
complicada:

Devenir nunca es imitar, ni hacer como, ni adaptarse a un modelo, ya sea el de la


justicia o el de la verdad. Nunca hay un término del que se parta, ni al que se llegue
o deba llegarse. Ni tampoco dos términos que se intercambien. La pregunta ¿qué
es de tu vida? Es particularmente estúpida, puesto que a medida que alguien
deviene, aquello en lo que deviene cambia tanto como él (…) Se acabaron las
máquinas binarias: pregunta-respuesta, masculino-femenino, hombre-animal, etc.
(Deleuze, 1980, pág. 6)

5. Así, en la correspondencia entre Freud y Albert Einstein, es posible leer lo


siguiente:

…Es usted mucho más joven que yo, y puedo esperar que para cuando llegue a mi
edad se cuente entre mis ‘partidarios’. Como yo no estaré en este mundo para
comprobarlo, sólo puedo anticipar ahora esa satisfacción. Ya sabe lo que pienso
ahora: “Anticipando orgullosamente tan alto honor, disfruto ahora…” [Esto es una
cita del Fausto de Goethe] (1932, pág. 5).

Diferencias entre paráfrasis y cita textual:

Se entiende por paráfrasis la reinterpretación de un texto ajeno, expresada con


palabras del nuevo autor. Es decir, un investigador lee las ideas de un autor
consagrado y luego las explica con sus propias palabras, sin dejar de atribuirle la
autoría a quien corresponde, ni querer hacerlas suyas en el proceso. Simplemente
“traduce” a su estilo y lenguaje lo dicho por el otro.

De hecho, en ciertos estilos metodológicos suele añadirse el nombre del autor


parafraseado entre paréntesis para aclarar que las ideas no son propias.

En cambio, una cita textual se trata de un préstamo del texto original, en el que no
se interviene ni se modifica en absoluto el texto referido, pues se respeta la fuente
lo más posible. Esto suele implicar la diferenciación entre el texto de la investigación
y el texto del libro citado, lo cual puede hacerse mediante el uso de comillas
(tipográficas: “ ” o angulares: «», dependiendo del modelo metodológico empleado)
o en algunos casos de espaciado y cambio del tamaño de la fuente.

Además, una vez terminada la cita, habrá una aclaratoria entre paréntesis que
explica al lector de dónde se extrajo el texto citado. Esta última se conoce
como referencia parentética.

Nótese que en ambos casos se respeta la autoría del texto original. El plagio nunca
es una opción válida.
Ejemplos de paráfrasis:

1. Como bastante se ha dicho en numerosos libros de física cuántica, las leyes


absolutas del universo con que el hombre moderno pretendió explorarlo y
comprenderlo, resultan ser mucho más flexibles y relativas (Einstein, 1960)
de lo que se suponía.
2. No se trata sin embargo de que los nuevos ideales nacionales provengan del
ala más conservadora de la sociedad, sino de que ésta desempeña en la
América Latina de hoy un paradójico rol alternativo frente a los populismos
de izquierda (Vargas Llosa, 2006) que la asediaron durante la llamada
“década larga”.
3. Conviene acotar que, no obstante, a veces una cosa es una cosa y nada más
(Freud, cit.), por lo que conviene saber abortar a tiempo la interpretación
psicoanalítica del arte, antes de caer en el determinismo biográfico.
4. Las tendencias antropológicas del sudeste asiático, como han señalado
numerosos antropólogos ya, contiene los elementos de tránsito cultural
minoritario que la hacen atractiva para los visitantes provenientes de una
cultura hegemónica (Coites et. al., 1980), pero no así para sus vecinos
locales.
5. Además, Bataille ha sido claro al respecto, distanciando su postura de la
fascinación mortuoria típica de los posrománticos, oponiéndole a la
fascinación por la violencia el trabajo como ordenamiento y represión
(Bataille, 2001).

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