Sei sulla pagina 1di 12

PREPARATORIA TECNICA GENERAL EMILIANO ZAPATA

ESTRUCTURA SOCIOECONOMICA DE MEXICO

MAESTRO: JESUS CRUZ

TEMA:

“POLITICA MIGRATORIA DE E.U”

ALUMNA: TANIA FABIOLA ALMAGUER CARDONA

GPO:21

1
INTRODUCCION

La inmigración es un problema social, que siempre ha existido a lo largo de la


historia a nivel mundial, en el que miles de personas abandonan sus lugares de
origen huyendo de conflictos bélicos, inseguridad o en la búsqueda de mejores
oportunidades laborales y económicas

Estados Unidos, por poseer una de las mejores economías y ser potencia mundial
es el paraíso ideal para todas las personas que arriesgan todo en búsqueda de
cumplir el sueño americano, y aunque han existido un sinfín de políticas
migratorias en la historia de E.U. ninguna ha tenido tanta resonancia como la
Política Migratoria de Donald Trump.

Misma que busca a toda costa acabar con la migración ilegal y deportar a todos
los indocumentados; pero lo que más ha causado ruido es la manera despectiva
en la que Trump se refirió a los inmigrantes catalogándolos como ladrones,
delincuentes y sobretodo culpables de todos los males e inseguridad que asecha
E.U.

En el presente trabajo se hace un breve recorrido por las diversas políticas de E.U.
Desde la repatriación hasta Donald Trump.

2
LA POLITICA MIGRATORIA DE ESTADOS UNIDOS

Si bien, históricamente el gobierno estadounidense ha desarrollado campañas


antiinmigrantes como “la repatriación de 1929-1930”, la “operación espalda
mojada en 1953-1954”, y la terminación unilateral del Programa de Braceros en
1964, la legislación migratoria estadounidense había permanecido sin
modificaciones sustanciales desde 1952, la Ley de Inmigración y Nacionalidad de
1952 (la Ley McCarran-Walter) hasta las reformas introducidas por la Ley
Simpson-Rodino en 1986. La Ley Simpson-Rodino, oficialmente conocida por su
título formal en inglés The Immigration Reform and Control Act (IRCA, por sus
siglas en inglés) fue promulgada el día 6 de noviembre de 1986.

La Ley Simpson-Rodino pretendía sintetizar y representar el sentir de la mayoría


de los ciudadanos estadounidenses que expresa los efectos nocivos, que para
ellos traen los inmigrantes extranjeros, como es el desplazarlos de los empleos,
así como de que constituyen una carga social para el sistema estadounidense y
para los contribuyentes. Se culpaba a los inmigrantes indocumentados mexicanos
no solamente de ser responsables del aumento en la criminalidad y la
drogadicción en Estados Unidos, sino además, de la desintegración en el respeto
a la ley y la pérdida de control de la frontera, etcétera.

En 1996, el gobierno estadunidense expidió la Ley de Reforma de la Inmigración y


Responsabilidad de los migrantes (Illegal Immigration Reform and Immigrant
Responsibility Act-IIRAIRA) que incrementaba las medidas de control de la
frontera, multiplicaba los agentes de la patrulla fronteriza y autorizaba la
construcción de una valla a lo largo de la frontera con México; también establecía
sanciones más duras contra los migrantes indocumentados incluyendo periodos
de más de un año de cárcel para quienes reincidían, y creaba la figura de
expulsión expedita, sin derecho a audiencia, que evitaba los largos y costosos
juicios de deportación. Finalmente, limitaba los servicios a los que podrían acceder
los migrantes irregulares.

La llamada “Ley Sensenbrenner” ha sido la que mayor controversia ha


ocasionado, porque contiene mayores restricciones a la migración y establece que
la migración en condiciones irregulares no forma parte de un mercado de trabajo
bilateral que requiere ser regulado, sino que es problema de seguridad cuya
solución es la penalización del ingreso indocumentado de migrantes y el
despliegue de acciones policíacas. Las principales disposiciones de la ley son la
criminalización de la migración y el reforzamiento de la seguridad fronteriza.

3
Aparte de las leyes federales se han creado otras leyes en los estados, entre las
cuales la más significativa es la llamada ley Arizona o SB 1070 promulgada por la
gobernadora de ese estado Jan Brewer en abril de 2010, la cual, entre otras
medidas contempla penas de hasta 6 meses de cárcel y multas por 2 mil 500
dólares a los migrantes indocumentados. La importancia de la ley SB 1070 radica
en el hecho de que ésta sirvió de base para que otros estados promulgaran leyes
antiinmigrantes similares (por ejemplo, la ley de Alabama HB 56, la Ley migratoria
de Georgia HB 87, y la Ley migratoria de Carolina del Norte. El número de estados
que han debatido la necesidad de seguir el ejemplo de ese estado fronterizo
(Arizona) se había elevado a 20 en el año 2010.

El debate entre una política restrictiva y criminalizadora de la migración


indocumentada y una política migratoria integral continúo durante el gobierno del
presidente Barak Obama pero no se llegó a los consensos necesarios para llevarla
a cabo. Los componentes individuales de los diversos paquetes de reforma se han
introducido y perseguido por separado en el Congreso.

La Ley DREAM es un proyecto de ley presentado inicialmente en 2001,


incorporado en las diversas leyes de reforma integral y luego reintroducido por
separado en 2009 y 2010. El proyecto de ley proporcionaría residencia legal y un
camino a la ciudadanía para los inmigrantes indocumentados que se gradúan de
las escuelas secundarias de EUA o unirse al ejército. Asimismo, el 21 de
noviembre de 2014, el presidente Barack Obama firmó dos acciones ejecutivas
que tuvieron el efecto de retrasar la deportación de millones de inmigrantes
ilegales. Las órdenes se aplican a los padres de los ciudadanos de los Estados
Unidos y los jóvenes traídos al país ilegalmente.

LA CRIMINALIZACION DE LOS INMIGRANTES INDOCUMENTADOS.

El fenómeno de la migración internacional crece día con día, principalmente


debido a que las personas en países en situación de crisis (económica, laboral,
política, de seguridad, etcétera), buscan mejores oportunidades y condiciones de
vida.

De esta manera, el estudio de la migración, además de la laboral debe incluir la


migración en la búsqueda de asilo por cuestiones políticas y culturales; los
refugiados por la violencia generada por la guerra, los desplazados por causas de
la inseguridad y la violencia interna; en suma, por la escasez de oportunidades
para tener una vida digna.

Los puntos de destino deseables de los migrantes son los países que pueden
satisfacer sus expectativas de vida digna, y que debido a las condiciones de estos
países en sus niveles de vida y requerimientos de mano de obra son

4
contemplados como tierra de promisión. Estos países por lo general son Estados
Unidos y los países europeos (Alemania, Inglaterra, Francia).

El problema es que a pesar de la “existencia de un número considerable de


convenciones y tratados que especifican las obligaciones por parte de los
migrantes ya sean laborales, refugiados, personas desplazadas u otros, no ha
garantizado la solución de los grandes problemas sociales que éstos enfrentan”,
se sigue promulgando y aplicando leyes y políticas discriminatorias en contra de
los migrantes por parte de gobiernos conservadores y ultraconservadores. Es este
el caso de la política migratoria de los Estados Unidos en donde en las últimas
décadas el debate migratorio tiene lugar, por una parte, ante la coalición pro-
inmigración y, por la otra, la coalición antiinmigración.

En este contexto, el debate de la política migratoria estadunidense ha oscilado en


las últimas décadas entre dos perspectivas: por un lado, una política restrictiva,
que criminaliza la migración documentada, impulsada por los sectores
conservadores (la mayoría del Partido Republicano); por otro lado, una política de
apertura a la regularización de los migrantes (reforma integral) impulsada por los
sectores liberales (la mayoría del Partido Demócrata).

La falta de consenso ha limitado la aprobación de una reforma migratoria en las


administraciones Bush y Obama. Los temas que se han presentado en las últimas
décadas por los sectores conservadores son impulsados por el actual presidente
Donald Trump. Las propuestas del candidato Donald Trump a la presidencia de los
Estados Unidos, y a la fecha Presidente, se han centrado básicamente en:

1. En el reforzamiento de la seguridad de la frontera nacional,

2. La criminalización de los inmigrantes indocumentados,

3. La deportación de los migrantes indocumentados (11 millones


aproximadamente),

4. La construcción de un muro fronterizo,

5. La negociación o cancelación del Tratado de Libre Comercio de América del


Norte (TLCAN),

6. Aplicar un impuesto a las remesas que envían los migrantes a su país de


origen, de manera específica a los mexicanos para financiar el muro,

7. Evitar la aprobación de una reforma migratoria integral que otorgue derecho a


los migrantes indocumentados, negándoles la amnistía para regularizarse y
adquieran la ciudadanía estadunidense.

5
Sin establecer una distinción entre migración legal e inmigración indocumentada,
Trump ha criminalizado a la inmigración ilegal (indocumentada) a la que considera
como “mala” (indeseable); por deducción, aun cuando no lo ha expresado
explícitamente, la migración documentada la considera como “buena” (deseable).
La criminalización de la migración “ilegal” se fundamenta en la caracterización de
ésta como una amenaza para la ley y el orden, al bienestar económico de los
trabajadores de Estados Unidos, y a los sistemas de seguridad social (salud y
educación, principalmente). La amenaza primordial de la migración “ilegal” radica
para Trump en el crecimiento de ésta en Estados Unidos (11 millones
aproximadamente). Trump ha señalado que el número de familias que han
cruzado la frontera en lo que va del año supera el número total de 2015, y que
algunos de estos inmigrantes ilegales han asesinado o matado en accidentes o
cometió otros delitos contra ‘miles’ de ciudadanos estadunidenses”.

Las consecuencias de esta criminalización de Trump de todos los migrantes


indocumentados son el fundamento de sus propuestas de deportación de los
migrantes “ilegales” y la construcción de un muro en la frontera entre México y
Estados Unidos.

En el contexto anterior, las fronteras en tiempos de globalización se están


fortificando para evitar la “contaminación” y el “peligro”: En los últimos años hemos
asistido a un proceso de restricción de los flujos migratorios, particularmente en
los países del norte y algunos del sur. Estados Unidos y los países del sur han
venido endureciendo la política migratoria para desestimular la entrada de la
población indocumentada, la xenofobia y el racismo se han extendido rápidamente
por todos los países de destino hasta convertirse en una práctica social, por parte
de la sociedad nativa.

POLITICA MIGRATORIA DE TRUMP

El presidente Donald Trump presentó un nuevo plan de reforma migratoria que se


centra en la reducción de la entrada legal de extranjeros y en la introducción de un
sistema de puntos, como el de Canadá, Australia y Nueva Zelanda, que promueva
la inmigración de profesionales calificados.

El proyecto de ley migratoria lleva por nombre “Reforming American Immigration


for a Strong Economy” o “the RAISE Act, (Ley de Reforma de la Inmigración
Estadounidense para un Empleo Fuerte), y según palabras del presidente busca
“poner primero a los trabajadores estadunidenses”.

Bajo ese principio el nuevo plan migratorio de Trump se propone dos objetivos
muy concretos: reducir la inmigración legal hasta un 50% en el próximo decenio y
promover la entrada de inmigrantes más educados y mejor preparados para
obtener empleos bien remunerados en Estados Unidos.
6
Para ello, se dará prioridad a las habilidades y el conocimiento del inglés frente al
parentesco (reagrupación familiar) como criterio de acogida de nuevos extranjeros.

El plan migratorio de Trump en cinco puntos

El presidente Donald Trump estima que la “RAISE Act” será “la reforma más
significativa en el sistema de inmigración de Estados Unidos en medio siglo”.

Para entender su alcance, explicamos los puntos más importantes de la reforma


migratoria de Trump en cinco puntos claves:

1. Promoción de la entrada de inmigrantes calificados

El nuevo sistema recompensará la educación, la experiencia laboral, el dominio


del idioma inglés, la iniciativa empresarial y las ofertas de trabajo bien remunerado
con las que cuente el candidato. La idea es reducir drásticamente la entrada al
país de extranjeros con poca educación para promover la inmigración de
profesionales calificados que puedan sumarse a la economía productiva de
Estados Unidos.

2. Introducción de un sistema de puntos

Tal como lo anunció el presidente Trump en su primer mensaje al Congreso, a


principios de 2017, Estados Unidos busca emular los sistemas de inmigración de
naciones como Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Más en: Trump quiere un
sistema migratorio como el de Canadá.

En tal sentido, aunque no se han ofrecido detalles del funcionamiento del nuevo
sistema de inmigración de Estados Unidos, se sabe que se impulsará la puesta en
marcha de un sistema de puntos, eje central de la política de inmigración selectiva
o calificada. Bajo esta modalidad, los aspirantes a inmigrar a Estados Unidos
deberán demostrar habilidades específicas (hablar inglés, tener un título
universitario, poseer experiencia de trabajo en un área económica de interés) que
les serán recompensadas con puntos, que harán que su perfil sea más atractivo, y
en consecuencia tendrán más posibilidades de ser aceptados como residentes
permanentes.

3. Eliminación de la Lotería de Visas

7
De aprobarse el nuevo plan migratorio de Donald Trump quedaría eliminado el
programa oficial denominado “Visa de Inmigración Diversa”, mejor conocido como
la Lotería de Visas de Estados Unidos, por considerarlo “anticuado y al servicio de
cuestionables intereses económicos y humanitarios”. A través de la Lotería de
Visas se rifan anualmente 50 mil Green Cards a ciudadanos de países que
presentan bajas cuotas de inmigración en Estados Unidos. Los ciudadanos de
varios países latinoamericanos pueden participar, entre ellos, Argentina, Ecuador,
Honduras, Nicaragua y Venezuela, entre otros. Más sobre la Lotería de Visas.

4. Modificación del programa de reagrupación familiar

En el nuevo sistema se reducirá el número de Green Cards (residencia


permanente) que se concede a extranjeros bajo el programa de reagrupación
familiar. La petición de familiares se limitaría a cónyuges e hijos menores de edad,
pero dejaría afuera a padres y hermanos. Sin embargo, se señala que los padres
ancianos de ciudadanos estadounidenses que necesitan ser cuidados podrán
recibir visas temporales renovables.

5. Reducción de las cuotas de refugiados y revisión de la política de asilo

Se reducirá el número de personas con estatus de refugiado a 50 mil.


Actualmente, el límite máximo de recepción de refugiados es de 100 mil.
Asimismo, se pide la revisión del plan de asilo, para fijar las cuotas de acuerdo con
los intereses del nuevo plan.

Tan pronto como se juramentó como presidente de Estados Unidos -el 20 de


enero de 2017- Donald Trump se puso manos a la obra para luchar contra la
inmigración ilegal, la cual había sido centro de sus promesas electorales.

Sin embargo, ahora la cuestión migratoria aborda un aspecto más profundo del
tema. Se plantea como una reforma integral que busca promover la entrada
selectiva de extranjeros, tal como lo hacen otras naciones como Australia y
Canadá.

La ley da prioridad a los solicitantes que hablen inglés, puedan mantenerse


financieramente a ellos mismos y a sus familias, y contribuyan con sus habilidades
a nuestra economía”, aseguró el presidente Trump.

El proyecto de ley, introducido por el propio presidente el 2 de agosto de 2017


durante un acto en la Casa Blanca, fue elaborado por los senadores republicanos

8
David Perdue, de Georgia, y Tom Cotton, de Arkansas, quienes acompañaron a
Trump en la presentación.

Las órdenes ejecutivas de Donald Trump

La política de “mano dura” contra la inmigración ilegal, pilar fundamental de las


promesas electorales de Trump, se ha concretado por medio de órdenes
ejecutivas que, en efecto, declaran la guerra a los extranjeros sin papeles.

Las principales órdenes ejecutivas firmadas por el presidente Donald Trump en


materia de inmigración se describen a continuación:

25 de enero de 2017

– Se ordena la construcción del muro en la frontera con México y el reforzamiento


de la seguridad fronteriza.

– Se decreta el retiro de fondos federales a las “ciudades santuarios”, si estas


persisten en su negativa de recaudar información sobre el estatus migratorio de
cualquier persona y proporcionar los datos a las autoridades federales.

Los alcaldes de las “ciudades santuario” reaccionaron asegurando que no


cambiarán sus políticas y que no piensan ceder ante las presiones del gobierno
federal.

27 de enero de 2017

– Se dictamina un veto migratorio que impide por noventa días la entrada en el


país de ciudadanos de siete países de mayoría musulmana: Libia, Sudán,
Somalia, Siria, Irak, Irán y Yemen.

– Se ordenó la paralización de la entrada de refugiados de cualquier nacionalidad.

Este decreto fue suspendido el 3 de febrero de 2017 por orden de un juez federal,
que lo declaró inconstitucional. La suspensión fue ratificada, el 9 de febrero, por un
tribunal federal de apelaciones, ante el cual había acudido el presidente Trump
con un recurso legal para hacer validar su decisión ejecutiva.

6 de marzo de 2017

– Se ordena un nuevo veto migratorio que anula el del 27 de enero. Se impide por
noventa días la entrada a Estados Unidos de ciudadanos de seis países de
mayoría musulmana: Libia, Sudán, Somalia, Siria, Irán y Yemen. Irak queda fuera
de la prohibición y se aclara que puede entrar al país todo portador de una visa
válida o de una Green Card.
9
– Además, se suspende el programa de refugiados por ciento veinte días.

Organizaciones civiles pro derechos de los inmigrantes reaccionaron diciendo que


se trata de una modificación banal del veto del 27 de enero, pero que en el fondo
se preserva el verdadero espíritu discriminatorio de la medida.

Trump dice que la inmigración es la causa de un sinfín de problemas y tomó el


cargo con una agenda de metas simbólicas que no tenían ninguna planificación;
no se trataba del fruto de un riguroso debate de políticas, sino de interacciones
personales cargadas emocionalmente y de un instinto para aprovechar las ideas
nativistas de los estadounidenses blancos de la clase trabajadora.

Como muchas de sus iniciativas, su esfuerzo para cambiar la política migratoria


estadounidense se ha ejecutado a través de un proceso desordenado que desde
el inicio buscó desafiar a la burocracia encargada de aplicarlo, según entrevistas
con tres decenas de funcionarios previos y actuales de la administración,
legisladores y otras personas cercanas al proceso, muchas de las cuales hablaron
con la condición de mantener su anonimato para poder detallar interacciones
privadas.

Sin embargo, mientras Trump se ha frustrado en repetidas ocasiones por los


límites de su poder, sus iniciativas para rehacer décadas de política migratoria han
obtenido cada vez más ímpetu mientras la Casa Blanca se hace más disciplinada
a la hora de ignorar o socavar la arraigada oposición de muchos sectores del
gobierno.

10
CONCLUSION

La inmigración ilegal sin un correcto control y manejo de la misma si puede llegar


a crear conflictos sociales fuertes en los países, ya que por ejemplo se puede dar
el caso que se beneficien de programas sociales y económicos que brinden esos
países, y en ocasiones suelen ser más los beneficiados inmigrantes que la propia
gente local, y esto puede ocasionar cierta molestia o enojo de la gente y por eso
se genera ese rechazo de las masas a los inmigrantes más a los indocumentados
que dicen que solo van a su país a beneficiarse de sus programas sociales o de
los pocos empleos que hay.

Aunque también estos países se benefician con mano de obra barata, ya que no
les pagan el mismo sueldo que aun local, y generalmente los inmigrantes son los
que suelen terminando haciendo los trabajos que ningún local quiere realizar.

Ahora bien analizando la política migratoria de Trump, realmente no es nada


novedosa, ya que a través de la historia de E.U han existido políticas que
criminalizan a los inmigrantes e incluso ya se planteaba la construcción de una
barda de 14 millas o la ley del muro seguro del 2006, lo único novedoso es el
carácter excesivamente extremo de sus propuestas con su discurso supremacista
y xenofóbico, centrado en la criminalización de los inmigrantes indocumentados
específicamente los mexicanos. Por lo que no se ve un buen panorama para los
migrantes y una reforma migratoria justa o menos discriminatoria y apegada a los
estándares humanitarios internacionales esta pero muy lejana.

11
Bibliografía:

Carrasco, G. (2017, enero-abril). La Política Migratoria de Donald Trump.


Alegatos, 95, pp. 171-174.

http://alegatos.azc.uam.mx/index.php/ra/article/viewFile/71/68

Michael D. Shear, Julie Hirschfeld D.. (2017). Cómo Trump transformó las
políticas migratorias de Estados Unidos. Mayo 01, 2018, de The New York Times
Sitio web: https://www.nytimes.com/es/2017/12/27/como-trump-transformo-
las-politicas-migratorias-de-estados-unidos/

https://www.mequieroir.com/paises/eeuu/emigrar/politica-migratoria-trump/

12

Potrebbero piacerti anche