Sei sulla pagina 1di 280

TRABAJO ESPECIAL DE GRADO

MODELO SEDIMENTOLÓGICO PARA LA SECUENCIA EOCENO-OLIGOCENO


EN LAS CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO Y SU CORRELACIÓN
CON EL FLYSCH EOCENO EN LA ISLA DE MARGARITA

Presentado ante la ilustre


Universidad Central de Venezuela
por el Br. Contreras Méndez,
Jorham Alberto para optar por el
título de Ingeniero Geólogo.

Caracas, octubre 2002


TRABAJO ESPECIAL DE GRADO

MODELO SEDIMENTOLÓGICO PARA LA SECUENCIA EOCENO-OLIGOCENO


EN LAS CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO Y SU CORRELACIÓN
CON EL FLYSCH EOCENO EN LA ISLA DE MARGARITA

Tutor Académico: Ing. Olga Rey

Tutor Industrial: Ing. Beatriz Blanco

Caracas, octubre 2002


RESUMEN

Contreras, M. Jorham, A.

MODELO SEDIMENTOLÓGICO PARA LA SECUENCIA EOCENO– OLIGOCENO


EN LAS CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO Y SU CORRELACIÓN
CON EL FLYSCH EOCENO EN LA ISLA DE MARGARITA

Tutor Académico: Ing. Olga Rey. Tutor Industrial: Ing. Beatriz Blanco. Tesis.
Caracas. U.C.V. Facultad de Ingeniería. Escuela de Geología, Minas y
Geofísica. Departamento de Geología. 2002. 261 p.

Palabras Claves: TURBIDITAS, CORRELACIÓN, COSTAFUERA.

Resumen

El presente trabajo tiene como objetivo principal plantear un modelo


sedimentológico para la secuencia Eoceno-Oligoceno depositada en las cuencas
La Blanquilla y Tuy-Cariaco, ubicadas en la región este costafuera de Venezuela, y
establecer la correlación de estos sedimentos con la secuencia flysch de edad
Eoceno, que aflora en la isla de Margarita.

Ambas cuencas abarcan una espesa cobertura sedimentaria que sobrepasa los
6 Km de espesor de rocas con edades Eoceno al Reciente. El intervalo Eoceno-
Oligoceno es de particular interés, ya que presenta características favorables para
la generación y expulsión de hidrocarburos, al mismo tiempo que contiene
intervalos arenosos que representan potenciales reservorios.

La secuencia de la isla de Margarita fue depositada en una cuenca marino


profunda bajo flujos gravitacionales de sedimentos provenientes desde ambientes
someros (plataforma – talud), la cual fue emplazada en su posición actual durante
el Mioceno. Se distinguen dos unidades estratigráficas: 1) Formación Pampatar, de
edad Eoceno(?), constituida hacia la base por conglomerados, cubiertos por
areniscas y grauwacas intercaladas con lutitas y esporádicas calizas, 2) Grupo
Punta Carnero, de edad Eoceno Medio, constituido por un intervalo caótico basal
de “flysch salvaje”, seguido de lutitas hemipelágicas y una secuencia de calizas y
areniscas calcáreas denominadas “calciturbiditas”.

Jorham Contreras
RESUMEN

A través del estudio sedimentológico y estratigráfico de cinco pozos, tres ubicados


en la cuenca La Blanquilla y dos en la cuenca Tuy-Cariaco, se establece que el
intervalo Eoceno - Oligoceno en la cuenca La Blanquilla, está constituido por lutitas
pelágicas con intervalos esporádicos de areniscas de grano fino y calizas lodosas,
depositadas en una cuenca marino profunda influenciada por esporádicos flujos
turbidíticos. Este mismo intervalo en la cuenca Tuy-Cariaco, está constituido por
areniscas conglomeráticas hacia la base, seguidas de areniscas y lutitas estériles,
depositadas bajo corrientes turbidíticas, con un intervalo de lutitas pelágicas
fosilíferas depositada en un régimen estable de baja energía.

La cuenca La Blanquilla representa una cuenca extensional originada durante el


Eoceno Medio en la zona retroarco de las Antillas Menores, la cual estuvo
alimentada por las islas caribeñas y algunos bloques de corteza continental que
para este momento representaban altos estructurales, con un mínima influencia del
arco magmático. El rasgo estructural más importante es la falla dextral de
Margarita, la cual dividió la cuenca en dos segmentos a partir del Eoceno Tardío.

La cuenca Tuy-Cariaco comenzó a originarse durante el Eoceno Medio, cuando se


formaron cuencas extensionales, separadas por altos estructurales en un estilo de
“graben y horst”. La subcuenca Cubagua y parte de la subcuenca Tuy-Cariaco
Norte representan algunas de estas cuencas marino profundas, las cuales fueron
rellenadas con sedimentos provenientes de bloques de corteza continental y
oceánica, el arco de las Antillas Menores y una plataforma carbonática.

Ambas cuencas evolucionaron de manera independiente desde sus orígenes en el


Eoceno Medio, bajo condiciones paleoambientales y estructurales distintas, que
originaron claras diferencias en el relleno sedimentario. La secuencia turbidítica de
la isla de Margarita está asociada a la cuenca Tuy-Cariaco, ambas fueron
alimentadas por las mismas fuentes de sedimentos, bajo constantes flujos
turbidíticos, probablemente asociados a bloques de corteza oceánica y continental
levantados y emplazados al norte de Sudamérica, en la región cercana al arco de
las Antillas Menores.

Jorham Contreras
INDICE

INDICE GENERAL

RESUMEN
INDICE GENERAL .............................................................................................. I
INDICE DE FIGURAS Y TABLAS .…................................................................. VI
LISTA DE APÉNDICES ……………………………………….…………………….. XIV
LISTA DE ANEXOS ...…..................................................................................… XV

1. INTRODUCCIÓN
1.1 Objetivos y Alcances ....................................................................……... 1
1.2 Ubicación del Área de Estudio .................................................…...…..... 2
1.3 Metodología ............................................................................................ 4
1.3.1 Recopilación Bibliográfica .............................................................. 4
1.3.2 Geología de Superficie .................................................................. 4
1.3.3 Análisis de registros de pozos ....................................................... 5
1.3.4 Análisis de Laboratorio .................................................................. 5
a) Análisis Petrográfico .................................................................... 5
b) Difracción de Rayos X .................................................................. 8
c) Análisis Bioestratigráfico............................................................... 8
1.3.5 Integración de la información ........................................................ 9
1.4 Trabajos Previos ..................................................................................... 11
1.5 Agradecimientos ..................................................................................... 15

2. GEOGRAFÍA FÍSICA
2.1 Isla de Margarita
2.1.1 Topografía y Relieve ..................................................................... 16
2.2.2 Clima ……………........….……………………………....................... 17
2.2.3 Hidrografía …………...……………………...………………….......... 17
2.2.4 Vegetación y Fauna ...................................................................... 17
2.2 Cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco …………………………………...... 18

Jorham Contreras I
INDICE

3. GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL


3.1 Geodinámica de la región Caribe
3.1.1 Generalidades ................................................................................ 19
3.1.2 Límite de placas Caribe / Sudamérica ............................................ 20
3.1.3 Evolución geodinámica de la placa del Caribe ............................... 24
3.2 Geología estructural de las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco
3.2.1 Rasgos Estructurales ...................................................................... 32
3.2.2 Evolución Tectónica ........................................................................ 35
3.3 Evolución estructural de la Isla de Margarita
3.3.1 Origen y composición del basamento .........................…................ 42
3.3.2 Rasgos estructurales ...................................................................... 44

4. ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
4.1 Generalidades ..................................................................................... 47
4.2 Isla de Margarita
4.2.1 Basamento y estratigrafía del Cretácico
4.2.1.1 Grupo Juan Griego .......................................................... 49
4.2.1.2 Formación Los Robles ................................................... 52
4.2.1.3 Formación Los Frailes .................................................... 53
4.2.2 Secuencia sedimentaria
4.2.2.1 Formación Pampatar ....................................................... 56
4.2.2.2 Grupo Punta Carnero ...................................................... 59
Formación Las Bermúdez ............................................ 61
Formación El Dátil ........................................................ 63
Formación Punta Mosquito ........................................... 65
4.2.2.3 Formaciones Cubagua y El Manglillo ............................. 67
4.3 Cuenca la Blanquilla
4.3.1 Generalidades ........................................................................... 68
4.3.2 Secuencia sedimentaria ............................................................ 69

Jorham Contreras II
INDICE

4.4 Cuenca Tuy-Cariaco


4.4.1 Generalidades ........................................................................... 76
4.4.2 Secuencia sedimentaria ............................................................ 76

5. GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.1 Estratigrafía de la isla de Margarita ................................................. 88


5.1.1 Formación Pampatar ................................................................... 90
5.1.1.1 Unidades Estratigráficas ……….....………………………….. 90
Unidad informal I de areniscas y conglomerados ................ 92
Unidad informal II de areniscas y lutitas .............................. 94
5.1.1.2 Edad .................................................................……….….... 105
5.1.1.3 Análisis Petrográfico .............................................………… 105
5.1.2 Grupo Punta Carnero ............................................................….. 110
5.1.2.1 Unidades Estratigráficas .…………………...………………... 111
Formación Las Bermúdez ................................................... 111
Formación El Dátil ............................................................... 115
Formación Punta Mosquito .................................................. 117
5.1.2.2 Análisis Petrográfico ............................................................ 119
5.2 Análisis Bioestratigráfico ................................................................. 124
5.3 Diagénesis
5.3.1 Diagénesis de Siliciclásticos ........................................................ 129
5.3.2 Diagénesis de Carbonatos .......................................................... 137
5.4 Evolución de la Porosidad ................................................................ 142
5.5 Ambientes de Sedimentación .......................................................... 143
5.6 Fuente de Sedimentos ...................................................................... 150
5.7 Marco Estructural Local
5.7.1 Geología Estructural .................................................................... 154
5.7.2 Evolución Estructural ................................................................... 158

Jorham Contreras III


INDICE

6. ESTUDIO SEDIMENTOLÓGICO Y ESTRATIGRÁFICO DE LAS CUENCAS


LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6.1 Cuenca La Blanquilla ……….............................................................. 161


6.1.1 Descripción de los pozos
6.1.1.1 Pozo MTC-2X ................................................................ 163
6.1.1.2 Pozo PMO-2X ................................................................ 172
6.1.1.3 Pozo PMN-1X ................................................................ 174
6.1.2 Análisis de procedencia ............................................................... 183
6.2 Cuenca Tuy-Cariaco …….................................................................. 186
6.2.1 Descripción de los pozos
6.2.1.1 Pozo CMA-1X ................................................................ 189
6.2.1.2 Pozo CUBAGUA-1 ......................................................... 199
6.2.1.3 Pozo MTC-1X ................................................................ 204
6.2.2 Análisis de procedencia .............................................................. 206

7. CORRELACIÓN ENTRE LAS CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO


Y EL FLYSCH EOCENO EN LA ISLA DE MARGARITA

7.1 Generalidades .................................................................................... 208


7.2 Cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco
7.2.1 Cuenca La Blanquilla ................................................................... 210
7.2.1.1 La Blanquilla Oeste ........................................................ 210
7.2.1.2 La Blanquilla Este .......................................................... 211
7.2.1.3 Correlación entre los pozos MTC-2X y PMN-1X ........... 212
7.2.2 Cuenca Tuy-Cariaco .................................................................... 214
7.2.2.1 Subcuenca Cubagua ..................................................... 215
7.2.2.2 Subcuenca Tuy-Cariaco Norte ....................................... 216
7.2.2.3 Correlación entre los pozos CMA-1X y CUB-1 .............. 217
7.2.2.4 Redefinición de la secuencia paleógena en
la cuenca Tuy-Cariaco ................................................... 218

Jorham Contreras IV
INDICE

7.3 Correlación entre las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco .......... 222

7.4 Correlación del flysch Eoceno de la isla de Margarita con la


secuencia paleógena las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco
7.4.1 Cuenca La Blanquilla vs. Secuencia turbidítica de
la isla de Margarita ………………………………………………………… 233
7.4.2 Cuenca Tuy-Cariaco vs. Secuencia turbidítica de
la isla de Margarita ………………………………………………………… 235

7.5 Limitaciones para plantear un modelo sedimentológico ............... 244

8. CONCLUSIONES ........................................................................................... 249

9. RECOMENDACIONES .................................................................................. 253

10. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ............................................................ 254

APÉNDICES

ANEXOS

Jorham Contreras V
INDICE

INDICE DE FIGURAS

Figura 1.1 Ubicación del área de estudio ...................................................... 3

Figura 3.1 Límite de placas Caribe / Suramérica .......................................... 23

Modelo “Orógeno en Flotación” para la región este


Figura 3.2
de Venezuela ................................................................................ 24
Paleogeografía de la región Caribe durante el
Figura3.3
Cretácico Tardío ........................................................................... 26
Paleogeografía de la región Caribe durante el
Figura 3.4
Paleoceno ..................................................................................... 27
Paleogeografía de la región Caribe durante el
Figura 3.5
Eoceno Medio ............................................................................... 28
Paleogeografía de la región Caribe durante el
Figura 3.6
Eoceno Tardío .............................................................................. 29
Paleogeografía de la región Caribe durante el
Figura 3.7
Oligoceno Tardío .......................................................................... 30
Paleogeografía de la región Caribe durante el
Figura 3.8
Mioceno Medio ............................................................................. 30

Figura 3.9 Evolución geodinámica de la placa del Caribe ............................. 31

Ubicación de las cuencas sedimentarias en la región


Figura 3.10
costafuera de Venezuela .............................................................. 34
Sistema de fallas Eoceno Temprano en la región
Figura 3.11
costafuera de Venezuela .............................................................. 36
Sistemas de fallas Eoceno Tardío - Oligoceno en la
Figura 3.12
zona costafuera de Venezuela ..................................................... 37

Figura 4.1 Mapa geológico de la isla de Margarita ........................................ 48

Tabla de correlación estratigráfica en la región


Figura 4.2
costafuera de Venezuela .............................................................. 59
Ubicación de las cuencas sedimentarias en la región
Figura 4.3
costafuera de Venezuela .............................................................. 72

Figura 4.4 Sección sísmica SO-NE, Cuenca Blanquilla Oeste ...................... 73

Jorham Contreras VI
INDICE

Figura 4.5 Sección sísmica NO-SE, Cuenca Blanquilla Oeste ...................... 74

Figura 4.6 Sección sísmica E-O, Cuenca Blanquilla Este ............................. 75

Tabla de correlación en base a los datos de pozos en


Figura 4.7
la zona costafuera de Venezuela ................................................. 83
Sección sísmica NE-SO, cuencas Blanquilla Este –
Figura 4.8
Tuy-Cariaco .................................................................................. 84
Sección sísmica E-W, Subcuencas Blanquilla Oeste –
Figura 4.9
Tuy-Cariaco Norte ........................................................................ 85

Figura 4.10 Sección sísmica NO-SE, subcuenca Tuy-Cariaco Norte ............. 86

Figura 4.11 Sección sísmica N-S, subcuenca Cubagua ................................. 87

Ubicación de los afloramientos estudiados en


Figura 5.1
la isla de Margarita ....................................................................... 89

Figura 5.2 Tabla esquemática de correlación en el Flysch de Margarita ...... 89

Ubicación de los afloramientos de la Formación Pampatar


Figura 5.3 91
y El Grupo Punta Carnero en la isla de Margarita ........................

Figura 5.4 Conglomerados basales en la localidad de Punta Gorda ............ 93

Figura 5.5 Estructuras sedimentarias en la localidad de Punta Gorda .......... 96

Afloramientos localidad Punta Moreno, parte media


Figura 5.6
de la sección ................................................................................. 97
Secuencia plegada y fallada de Punta Moreno,
Figura 5.7
tope de la sección ......................................................................... 97
Areniscas con cementación calcítica diferencial,
Figura 5.8
localidad Punta Moreno, tope de la sección ................................. 98
Areniscas con cementación calcítica diferencial,
Figura 5.9
localidad Punta Moreno, parte media de la sección ..................... 98
Intercalaciones de areniscas y limolitas en la
Figura 5.10
localidad de Punta Ballena ........................................................... 99
Areniscas con cementación calcítica diferencial,
Figura 5.11
localidad Punta Ballena ................................................................ 100

Jorham Contreras VII


INDICE

Pliegues “slump” en la zona media de la sección


Figura 5.12
Punta Ballena ............................................................................... 100

Figura 5.13 Estructuras sedimentarias de la localidad Punta Ballena ............. 101

Intercalaciones monótonas de areniscas y limolitas


Figura 5.14 102
en la localidad Morro El Vigía .......................................................

Figura 5.15 Estructuras sedimentarias de la localidad Morro El Vigía ............ 102

Figura 5.16 Estructuras sedimentarias de la localidad Campiare ................... 102

Columnas estratigráficas esquematizadas de las localidades tipo


Figura 5.17
de la Formación Pampatar y del Grupo Punta Carnero ................... 104

Figura 5.18 Corte Esquemático del Grupo Punta Carnero. Sección tipo......... 111

Capas de calizas orbitoidales y areniscas calcáreas hacia


Figura 5.19
la base de la Formación Las Bermúdez ....................................... 113

Figura 5.20 Contacto basal de la Formación El Dátil ...................................... 116

Figura 5.21 Estructuras sedimentarias en la Formación Las Bermúdez ......... 118

Pliegues “slump”. Localidad La Isleta, Formación


Figura 5.22
Punta Mosquito ............................................................................. 118

Arenitas líticas con cementación temprana de calcita.


Figura 5.23
Formación Pampatar .................................................................... 131

Arenitas líticas con alta compactación mecánica,


Figura 5.24
Formación Pampatar .................................................................... 131

Arenitas líticas con cementación temprana de calcita.


Figura 5.25
Grupo Punta Carnero ................................................................... 132

Arenitas líticas con alta compactación mecánica.


Figura 5.26
Grupo Punta Carnero ................................................................... 132

Arenitas líticas con cemento de calcita que genera


Figura 5.27
reemplazo. Formación Pampatar ................................................ 134

Arenita lítica. Obsérvese la cementación por sílice en


Figura 5.28
continuidad óptica con el cuarzo. Formación Pampatar ............... 135

Jorham Contreras VIII


INDICE

Alteración de fragmentos de roca metamórfico a minerales


Figura 5.29
de arcillas. Grupo Punta Carnero ................................................. 135

Deformación y trituramiento de fragmentos líticos por efecto


Figura 5.30
de alta compactación. Dolomitización. Formación Pampatar ....... 135

Envoltorios de arcillas alrededor de los granos por efecto


Figura 5.31
de alta compactación. Formación Pampatar ................................ 135

Figura 5.32 Arenita lítica con óxidos de hierro. Formación Pampatar ............. 136

Envoltorios e minerales de arcillas con alto contenido de


Figura 5.33
óxidos de hierro. Grupo Punta Carnero ........................................ 136

Figura 5.34 Micritización de fragmentos de algas. Grupo Punta Carnero ....... 138

Figura 5.35 Silicificación de foraminíferos. Grupo Punta Carnero ................... 138

Packstone de orbitoides con contactos cóncavo-convexos.


Figura 5.36
Grupo Punta Carnero ................................................................... 140
Packstone de algas con alta compactación y fracturas.
Figura 5.37
Grupo Punta Carnero .................................................................. 140
Recristalización avanzada de calcita y estilolitas.
Figura 5.38
Grupo Punta Carnero ................................................................... 140
Recristalización avanzada en wackestone de foraminíferos.
Figura 5.39
Grupo Punta Carnero ................................................................... 140
Dolomitización de Lepidocyclina sp.
Figura 5.40
Formación Punta Mosquito ........................................................... 140
Fracturas y estilolitas en wackestone de foraminíferos.
Figura 5.41
Grupo Punta Carnero ................................................................... 140
Ubicación de asociaciones de facies de la secuencia
Figura 5.42
turbidítica de la isla de Margarita .................................................. 149

Figura 5.43 Diagramas de procedencia para la Formación Pampatar ............ 152

Figura 5.44 Diagramas de procedencia para el Grupo Punta Carnero ........... 153

Anticlinal volcado en la Formación Punta Mosquito,


Figura 5.45
localidad La Isleta. Grupo punta Carnero ..................................... 156

Jorham Contreras IX
INDICE

Sinclinal en la Formación Punta Mosquito, localidad La Isleta.


Figura 5.46
Grupo punta Carnero .................................................................... 156
Afloramientos de la Formación Punta Mosquito, localidad
Figura 5.47
La Isleta. Grupo punta Carnero .................................................... 156
Fallamiento inverso en la Formación Punta Mosquito, localidad
Figura 5.48
La Isleta. Grupo punta Carnero .................................................... 156
Ubicación de los pozos en las cuencas La Blanquilla
Figura 6.1
y Tuy-Cariaco ............................................................................... 161
Distribución cronoestratigráfica de la secuencia sedimentaria
Figura 6.2
en la región nororiental y costafuera de Venezuela .................... 162
Subarcosa de grano muy fino, muestra 12.220’,
Figura 6.3
pozo MTC-2X ............................................................................... 170

Figura 6.4 Limolita calcárea, muestra 11.830, pozo MTC-2X .......................


170
Wackestone de foraminíferos, muestra 15.420’,
Figura 6.5
pozo MTC-2X ............................................................................... 170
Dolomitización de fragmento de chert en una etapa de
Figura 6.6
diagénesis tardía, muestra 16.020’, pozo MTC-2X ...................... 170

Figura 6.7 Subarcosa calcárea, muestra 8.250’, pozo PMN-1X .................... 181

Arenita cuarzosa calcárea, muestra 8.800’,


Figura 6.8
pozo PMN-1X ............................................................................... 181
Grainstone de foraminíferos, muestra 11.030’,
Figura 6.9
pozo PMN-1X ............................................................................... 181

Figura 6.10 Subarcosa, muestra 11.670’, pozo PMN-1X ................................ 181

Subarcosas, muestras a) 10.240’ y b) 11.450’,


Figura 6.11 pozo PMN-1X ............................................................................... 181

Diagramas de procedencia para los litotipos arenosos


Figura 6.12 de los pozos MTC-2X y PMN-1X .................................................. 184

Tabla de correlación en base a los datos de pozos en la


Figura 6.13 zona costafuera de Venezuela ..................................................... 187

Figura 6.14 Evolución geológica de la subcuenca Cubagua ........................... 188

Jorham Contreras X
INDICE

Figura 6.15 Arenita lítica, muestra 7.940’, pozo CMA-1X ................................ 197

Figura 6.16 Arenita arcósica, muestra 10.560’, pozo CMA-1X ........................ 197

Figura 6.17 Arenita lítica, muestra 10.900’, litotipo 2, pozo CMA-1X .............. 197

Figura 6.18 Sublitarenita, muestra 10.770’, pozo CMA-1X ............................. 197

Figura 6.19 Arenita arcósica, muestra 6.650’, pozo CMA-1X .......................... 197

Figura 6.20 Arenita arcósica, muestra 10.900’, litotipo 1, pozo CMA-1X ........ 197

Arcilita con foraminíferos pláncticos, muestra 3.290’,


Figura 6.21
pozo CUB-1 .................................................................................. 202

Figura 6.22 Grauwaca lítica, muestra 3.620’, pozo CUB-1 ............................ 202

Arenitas líticas de grano muy fino con cemento


Figura 6.23
calcítico, pozo CUB-1 ................................................................... 203
Diagramas de procedencia para los litotipos arenosos
Figura 6.24
de los pozos CMA-1X y CUBAGUA-1 .......................................... 206
Correlación cronoestratigráfica entre los pozos
Figura 7.1
MTC-2X y PMN-1X. Cuenca La Blanquilla ................................... 213
Correlación litoestratigráfica entre los pozos CMA-1X y CUB-1.
Figura 7.2
Cuenca Tuy-Cariaco, Subcuenca Cubagua ................................. 221
Correlación litoestratigráfica entre los pozos MTC-2X y
Figura 7.3
CMA-1X. Cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco .......................... 224

Sección sísmica NE-SO, subcuenca Blanquilla Este y


Figura 7.4
Cuenca Tuy-Cariaco ..................................................................... 225
Diagramas de procedencia para los litotipos arenosos de
Figura 7.5 los pozos PMN-1X, MTC-2X, CMA-1X y CUBAGUA-1.
Cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco .......................................... 226

Paleogeografía para el Eoceno en la región


Figura 7.6
costafuera de Venezuela ……………………………………………. 228
Diagramas de procedencia para los litotipos arenosos de
Figura 7.7 los pozos CMA-1X, CUBAGUA-1 y la secuencia turbidítica
de la isla de Margarita ................................................................. 240

Jorham Contreras XI
INDICE

INDICE DE TABLAS

Descripción petrográfica textural de las areniscas


Tabla 5.1
de la Formación Pampatar ............................................................... 108

Descripción petrográfica composicional de las areniscas


Tabla 5.2 109
de la Formación Pampatar ...............................................................

Descripción petrográfica textural de las areniscas del


Tabla 5.3
Grupo Punta Carnero ....................................................................... 122

Descripción petrográfica composicional de las areniscas


Tabla 5.4
del Grupo Punta Carnero .................................................................. 122

Descripción petrográfica de las calizas del Grupo


Tabla 5.5
Punta Carnero .................................................................................. 123

Tabla 5.6 Análisis bioestratigráfico y edad del Grupo Punta Carnero .............. 126

Tabla 5.7 Zonación bioestratigráfica del Grupo Punta Carnero ....................... 127

Carta faunal de foraminíferos bénticos del Grupo


Tabla 5.8
Punta Carnero .................................................................................. 128

Paragenésis para la secuencia turbidítica eocena


Tabla 5.9
de la isla de Margarita ...................................................................... 141

Asociaciones de facies turbidíticas y ambientes


Tabla 5.10
de sedimentación .............................................................................. 144

Unidades cronoestratigráficas del pozo MTC-2X.


Tabla 6.1
EVANS (1983) ……………………………………………………………. 164

Unidades cronoestratigráficas del pozo MTC-2X.


Tabla 6.2
DURAN et al. (2002) ........................................................................... 164

Descripción petrográfica de muestras de canal


Tabla 6.3
del pozo MTC-2X .............................................................................. 167

Diagrama paragénetico para la secuencia Eoceno - Oligoceno


Tabla 6.4
en el pozo MTC-2X ........................................................................... 169

Zonación bioestratigráfica para el pozo MTC-2X


Tabla 6.5
DURAN et al. (2002) ........................................................................... 171

Jorham Contreras XII


INDICE

Unidades cronoestratigráficas del pozo PMO-2X


Tabla 6.6
EVANS (1983) ……………………………………………………………. 172

Unidades cronoestratigráficas del pozo PMO-2X


Tabla 6.7
DURAN et al. (2002) ........................................................................... 173

Unidades cronoestratigráficas del pozo PMN-1X


Tabla 6.8
EVANS (1983) ……………………………………………………………. 174

Unidades cronoestratigráficas del pozo PMN-1X


Tabla 6.9
DURAN et al. (2002) ........................................................................... 175

Descripción petrográfica de muestras de canal


Tabla 6.10
del pozo PMN-1X .............................................................................. 178

Diagrama paragénetico para la secuencia Oligoceno


Tabla 6.11
en el pozo PMN-1X .......................................................................... 180

Zonación bioestratigráfica para el pozo PMN-1X


Tabla 6.12
DURAN et al. (2002) ........................................................................... 182

Unidades cronoestratigráficas del pozo CMA-1X


Tabla 6.13
EVANS (1983) ……………………………………………………………. 191

Descripción petrográfica de muestras de canal


Tabla 6.14
del pozo CMA-1X .............................................................................. 194

Diagrama paragénetico para la secuencia Eoceno - Oligoceno


Tabla 6.15
en el pozo CMA-1X .......................................................................... 196

Descripción petrográfica de muestras de canal


Tabla 6.16
del pozo CUBAGUA -1 ..................................................................... 201

Diagrama paragénetico para la secuencia Eoceno - Oligoceno


Tabla 6.17
en el pozo CUBAGUA –1 ................................................................. 202

Jorham Contreras XIII


INDICE

LISTA DE ANEXOS

I. Mapa geológico de la región de Pampatar, Isla de Margarita, Venezuela.


Escala 1:10.000
II. Mapa geológico de la región Las Bermúdez - El Manglillo, Isla de
Margarita, Venezuela. Escala 1:20.000
III. Columna Estratigráfica de la Formación Pampatar. Localidad tipo

IV. Columna Estratigráfica de la Formación Pampatar. Localidad Punta


Moreno – Morro El Vigía
V. Columna Estratigráfica del Grupo Punta Carnero. Localidad tipo

VI. Columna Estratigráfica del Grupo Punta Carnero. Localidad La Isleta

VII. Tabla petrográfica de rocas siliciclásticas de la secuencia turbidítica


eocena ubicada en la isla de Margarita
VIII. Tabla petrográfica de rocas carbonáticas de la secuencia turbidítica
eocena ubicada en la isla de Margarita
IX. Tabla petrográfica de muestras de canal de los pozos CMA-1X y
CUBAGUA-1. Cuenca Tuy-Cariaco
X. Tabla petrográfica de muestras de canal del pozo MTC-2X. Cuenca La
Blanquilla.
XI. Tabla petrográfica de muestras de canal del pozo PMN-1X. Cuenca La
Blanquilla.
XII. Tabla de resultados de difracción de rayos X.

XIII. Hoja sedimentológica del pozo MTC-2X. Cuenca La Blanquilla.

XIV. Hoja sedimentológica del pozo PMN-1X. Cuenca La Blanquilla.

XV. Hoja sedimentológica del pozo CMA-1X. Cuenca Tuy-Cariaco.

XVI. Hoja sedimentológica del pozo CUBAGUA-1 Cuenca Tuy-Cariaco.

XVII. Panel de correlación estratigráfica entre la secuencia turbidítica eocena de


la isla de Margarita y la secuencia Eoceno - Oligoceno en las cuencas
La Blanquilla y Tuy-Cariaco.

Jorham Contreras XIV


INDICE

LISTA DE APENDICES

1) Definición y mecanismos de sedimentación de secuencias turbidíticas.

2) Modelo de análisis de facies en secuencias turbidíticas. E. MUTTI & F. RICCI


LUCCHI (1978)

3) Clasificación textural de sedimentos y rocas sedimentarias en base al


tamaño de grano. UDDEN – WENTWORTH (1922)

4) Clasificación textural de sedimentos argiláceos. POTTER et al. (1980)

5) Clasificación textural y mineralógica para rocas siliciclásticas tamaño arena.


PETTIJOHN, POTTER & SIEVER (1972).

6) Clasificación textural y mineralógica para rocas clásticas tamaño


conglomerados. PETTIJOHN (1975) y BOGGS (1992).

7) Clasificación textural y composicional para rocas carbonáticas. DUNHAM


(1962) y EMBRY & KLOVAN (1971).

8) Clasificación textural y composicional para rocas carbonáticas de mezcla.


MOUNT (1985)

9) Modelo diagenético y procesos característicos para rocas siliciclásticas.


SURDAM et al. (1989).

10) Modelo diagenético y procesos característicos para rocas carbonáticas.


GINSBURG (1957) adaptado y modificado por ZAPATA (1983).

Jorham Contreras XV
INTRODUCCIÓN

1. INTRODUCCIÓN

1.1 Objetivos y Alcances

El presente trabajo tiene como objetivo general desarrollar un modelo


sedimentológico para las secuencias depositadas durante el Eoceno-Oligoceno en
las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco y establecer la correspondencia entre
estas secuencias y los depósitos flysch de edad Eoceno que afloran en la isla de
Margarita.

Los objetivos específicos son:


1) Determinar las características sedimentológicas y variaciones estratigráfi-
cas presentes en la secuencia flysch eocena que aflora en la isla de
Margarita (Grupo Punta Carnero y Formación Pampatar).
2) Determinar las características sedimentológicas y variaciones estratigráfi-
cas presentes en los depósitos de edad Eoceno - Oligoceno en las cuencas
Tuy-Cariaco y La Blanquilla y establecer la correspondencia entre ambas
cuencas.
3) Correlación de las secuencias de edad Eoceno - Oligoceno presentes en
las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco con los depósitos eocenos de la
isla de Margarita.

El estudio de la secuencia sedimentaria en la cuenca La Blanquilla,


integrando la interpretación de datos sísmicos con datos de pozos
(litoestratigráficos, sedimentológicos, geoquímicos, etc.), ha permitido establecer
la presencia de trampas y la posible acumulación de grandes volúmenes de
hidrocarburos en esta área. Por estas razones, este trabajo representa el aporte
de aspectos muy importantes, como son la caracterización sedimentológica y
correlación de los sedimentos paleógenos de superficie con los de subsuelo
(cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco), y el estudio en detalle de intervalos

Jorham Contreras 1
INTRODUCCIÓN

arenosos de los pozos con la finalidad de caracterizar los posibles reservorios y


establecer un modelo de sedimentación para estas secuencias.

El Trabajo Especial de Grado representa el requisito final contemplado en el


pensum de estudios de la Escuela de Geología, Minas y Geofísica, para optar por
el título de Ingeniero Geólogo.

1.2 Ubicación del área de estudio

El área de estudio se encuentra ubicada en la región nororiental de


Venezuela (Figura 1.1), abarca parte de las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco
y, por consiguiente, la isla de Margarita. Ambas cuencas se encuentran en la
región costafuera de Venezuela, encontrándose La Blanquilla al norte, limitada con
el alto de ese mismo nombre que se prolonga hacia el noreste, la plataforma
Margarita-Los Testigos al sureste, el alto de La Tortuga al suroeste y al sur con la
cuenca Tuy-Cariaco, a través de la falla dextral de Margarita. La cuenca Tuy-
Cariaco limita al sur con la línea de costa venezolana, al norte con La Blanquilla, al
oeste con la plataforma de la Guaira y al este con la Península Araya-Paria y las
islas de Margarita, Coche y Cubagua.

Los pozos en estudio pertenecen a ambas cuencas y están ubicados en la


región central del mar Caribe, tal como se muestra a continuación:
a) El pozo MTC-2X está ubicado al norte de la isla La Tortuga, mientras que
los pozos PMO-2X y PMN-1X se encuentran al noroeste de la isla de Margarita.
Están comprendidos en el área entre las islas Cubagua y La Tortuga, coordenadas
11º - 11º30’ norte y 64º30’ - 65º30’ oeste.
b) El pozo CMA-1X está ubicado al suroeste de la isla Cubagua,
coordenadas 10º45’ norte - 64º25’ oeste y el pozo CUBAGUA 1 perforado en tierra
firme, se ubica en el sector oeste de la Isla de Cubagua, coordenadas 10º50’ norte
y 64º 20’ oeste aproximadamente (Figura 1.1).

Jorham Contreras 2
INTRODUCCIÓN

La secuencia eocena de superficie se ubica en el mismo marco geológico


del Caribe, específicamente en las regiones este y sureste de la isla de Margarita,
en los sectores de Pampatar, Punta Mosquito y las Bermúdez-El Manglillo
(adyacencias al aeropuerto Santiago Mariño), con una extensión aproximada de
100 Km2, alrededor de las coordenadas 11º norte y 63º30’ - 64º oeste.

VENEZUELA
64º

11º

Depósitos del Eoceno

YSACCIS et al. (2000)

FIGURA 1.1 Mapa de ubicación del área de estudio

Jorham Contreras 3
INTRODUCCIÓN

1.3 Metodología

1.3.1 Recopilación Bibliográfica

Se recopilaron los trabajos previos realizados en la zona de estudio,


específicamente aquellos en el área de sedimentología y estratigrafía. Esta etapa
se desarrolló en la biblioteca de la Escuela de Geología, Minas y Geofísica de la
UCV y a través de CITEP en las instalaciones de PDVSA Exploración y
Producción, Chuao. Así mismo, se buscaron los mapas topográficos y fotografías
aéreas correspondientes al área de la isla de Margarita, en la Dirección de
Cartografía Nacional con la finalidad de programar las actividades de campo y
obtener una visión más específica de los afloramientos.

En cuanto a la información de subsuelo se utilizaron los registros eléctricos


de los pozos seleccionados con la finalidad de determinar los intervalos de interés
para el análisis sedimentológico. Adicionalmente se consultaron todos los trabajos
previos realizados en el área.

1.3.2 Geología de Superficie

Se realizó el levantamiento geológico y muestreo de las secciones eocenas


que afloran en la Isla de Margarita, específicamente en las zonas de Pampatar,
Punta Mosquito y El Manglillo - Las Bermúdez (cercana al aeropuerto Internacional
Santiago Mariño), con la finalidad de actualizar la cartografía geológica de las
áreas de afloramiento y validar tanto los datos topográficos como los estructurales
para la elaboración de los mapas y columnas estratigráficas. Asimismo se realizó
el muestreo de los litotipos aflorantes, recolectando un total de 115 muestras de
areniscas, calizas y conglomerados y 102 muestras de lutitas.

Jorham Contreras 4
INTRODUCCIÓN

Para estas actividades se utilizaron las bases topográficas de Cartografía


Nacional, a escala 1:10.000 para la región de Pampatar y, a escala 1:25.000 para
las zonas de Las Bermúdez-El Manglillo y Punta Mosquito. Para la validación de
los datos geológicos y elaboración de los mapas geológicos se utilizaron como
mapas base los realizados por MUÑOZ (1973) y CASAS & MORENO (1986).

Los núcleos y muestras de canal estudiados se encuentran en la


Nucleoteca de Quiriquire cercana a la ciudad de Maturín y en las instalaciones de
Laboratorio Geológico El Chaure, Puerto la Cruz, ambas pertenecientes a PDVSA.

1.3.3 Análisis de registros de pozos

Se realizó la revisión y análisis de los registros de los pozos seleccionados


para el estudio de las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco, estableciendo las
unidades informales dentro de la secuencia Eoceno-Oligoceno. Una vez concluida
esta etapa se seleccionaron los intervalos de interés, los cuales fueron
muestreados cada 100 pies aproximadamente. Las muestras corresponden a
fragmentos de núcleos en el pozo CUBAGUA-1 y en los pozos restantes se
trabajó en base a muestras de canal.

1.3.4 Análisis de Laboratorio

a) Análisis Petrográfico

Preparación de las muestras

Una vez construidas las columnas estratigráficas de superficie, se


seleccionaron aquellas muestras representativas de los intervalos de interés en
base a las variaciones sedimentológicas observadas, a las cuales se le realizó el
estudio petrográfico convencional.

Jorham Contreras 5
INTRODUCCIÓN

Los pozos fueron estudiados casi en su totalidad a través de muestras de


canal (ripios), ya que los intervalos en los que se dispone de núcleos son bastante
limitados y no permiten una descripción continua a lo largo de toda la columna.

La selección de las muestras de pozos se realizó en base a las unidades


informales definidas en este estudio y características litológicas que ofrecen los
registros eléctricos, considerando los intervalos donde no se dispone de núcleos y
abarcando la secuencia completa, con intervalos de separación entre cada
muestra de 100 pies aproximadamente. Una vez señalados los intervalos de
interés se realizó el inventario de disponibilidad de muestras, las cuales fueron
respectivamente seleccionadas, correspondiendo cada una a un espesor de 10
pies. La preparación se realizó en varias etapas:

Las muestras de canal se encuentran húmedas, por lo tanto es necesario


someterlas a un lavado para retirar todo el material lodoso y fragmentos que no
corresponden a la litología de interés.
Una vez lavadas se separan en cuatro fracciones con la utilización de
tamices # 20, 40, 80 y fracción fina. Posteriormente, utilizando una lupa, se
observa individualmente cada fracción y se realiza la descripción textural y
mineralógica.
Tomando en cuenta los registros, la proporción de arenas y las caracte-
rísticas texturales se escogen los granos (“picking”) más representativos de la
litología de cada intervalo.
Estos granos son concentrados para la elaboración de la sección delgada y
finalmente se realiza el análisis petrográfico.

Para la elaboración y preparación de las muestras se contó con el apoyo


del personal técnico del laboratorio Geológico de PDVSA Exploración y
Producción, ubicado en Caracas.

Jorham Contreras 6
INTRODUCCIÓN

Estudio Sedimentológico

Se seleccionaron un total de 150 muestras, de las cuales 80 corresponden


a muestras de superficie y 70 de subsuelo. En ambos casos el estudio se realizó
en base a secciones delgadas teñidas para estudio de porosidad, utilizando el
micróscopio de luz polarizada y determinando así la textura, composición y tipo de
roca en base a las clasificaciones señaladas a continuación.

En el estudio y clasificación de areniscas se utiliza la clasificación de


PETTIJOHN, POTTER & SIEVER (1972) modificada de DOTT (1964). En los
conglomerados se utilizó la clasificación de PETTIJOHN (1975). Apéndices 5 y 6.

El estudio y clasificación de rocas carbonáticas se realizó en base a la


clasificación textural de DUNHAM (1962), modificada por EMBRY & KLOVAN
(1970). La clasificación de MOUNT (1985) se utilizó para aquellas rocas
carbonáticas con proporción de siliciclastos mayor a 25%, definidas por el autor
como carbonatos de mezcla. Apéndices 7 y 8.

El estudio diagenético en areniscas se realizó en base al modelo de


SURDAM et al. (1989), planteado para rocas clásticas sometidas a un
soterramiento progresivo. Para la rocas calcáreas se utilizó el esquema
diagenético de GINSBURG (1957) adaptado y modificado por ZAPATA (1983).
Apéndices 9 y 10.

Adicionalmente, se realizó el análisis de fuentes de sedimentos a través de


los diagramas ternarios de DICKINSON & SUCZEK (1979), los cuales se utilizaron
tanto en muestras de afloramientos como en las muestras de canal de la
secuencia de subsuelo. La aplicación se restringe a rocas que presenten una
proporción de matriz y cemento inferior al 25%, tal como lo sugieren los
autores.

Jorham Contreras 7
INTRODUCCIÓN

La finalidad del análisis petrográfico fue establecer la composición mineraló-


gica de las rocas y sus características texturales, haciendo énfasis en la determi-
nación de los componentes principales, tamaños de grano, escogimiento,
redondez, tipos de contacto y de porosidad.

Se estableció la relación porcentual de granos, matriz y cemento, con fines


de clasificación y reconocimiento de los efectos diagenéticos presentes, grado y
etapa diagenética alcanzada por las rocas, así como la paragénesis.

b) Difracción de Rayos X

Este análisis se realizó con el objetivo de determinar la fracción de


minerales de arcillas y el porcentaje de roca total en las muestras seleccionadas
que caracterizan, de manera general, la secuencia eocena de la isla de Margarita
y los depósitos eocenos-oligocenos ambas cuencas, lo cual permitió determinar de
manera semicuantitativa las máximas temperaturas alcanzadas durante la
evolución diagenética.

En superficie se seleccionaron un total de 20 muestras distribuidas a lo


largo de toda la columna sedimentaria, de las cuales se extrajo una fracción de 10
gr. En subsuelo se seleccionaron un total de 7 muestras, 5 pertenecientes al pozo
CMA-1X ubicado en la cuenca Tuy-Cariaco y 5 de los pozos MTC-2X y PMN-1X
ubicados en la cuenca La Blanquilla. Los análisis respectivos fueron realizados en
el Laboratorio Geológico de Intevep.

c) Análisis Bioestratigráfico

Se seleccionaron un total de 50 muestras de lutitas distribuidas a lo largo de


toda la columna de la secuencia turbidítica de la isla de Margarita, a las cuales se
estudió el contenido de foraminíferos y algunas de nannoplancton calcáreo. La
información obtenida fue comparada con trabajos bioestratigráficos previos

Jorham Contreras 8
INTRODUCCIÓN

realizados en el área, con el fin de establecer y validar la paleobatimetría y edad


de la secuencia.

En la cuenca La Blanquilla se tomaron los resultados de trabajos


bioestratigráficos desarrollados recientemente (DURAN et al., 2002), en base a los
cuales se realizó la comparación con la secuencia eocena de superficie. En los
pozos ubicados en la cuenca Tuy-Cariaco se tomaron los resultados de estudios
previos y adicionalmente se realizaron estudios palinológicos en un total de 14
muestras, distribuidas a lo largo de la secuencia Eoceno-Oligoceno. Finalmente se
pretende establecer la correspondencia geocronológica y paleoambiental entre la
secuencia de superficie y subsuelo de ambas cuencas.

Para el estudio de foraminíferos se utilizaron las zonaciones de BLOW


(1969) para el Terciario, la de TOUMARKINE & LUTERBACHER (1985) del Paleoceno –
Eoceno y la de BOLLI & SAUNDERS (1985) del Oligoceno al Mioceno. El estudio de
nannoplancton calcáreo se realizó en base a la zonación de MARTINI (1971).

1.3.5 Integración de la información

Con los datos de geología de superficie recolectados en los afloramientos


eocenos de la isla de Margarita, se construyeron las respectivas columnas
estratigráficas y el mapa geológico, a través de los cuales se realizó la
caracterización estratigráfica, estructural y paleoambiental de esta secuencia, en
conjunto con los análisis sedimentológicos y bioestratigráficos.

La secuencia de subsuelo fue estudiada a través de los registros eléctricos


de los cinco pozos seleccionados, los cuales permitieron subdividir la secuencia
Eoceno-Oligoceno en unidades informales en base al arreglo estratigráfico. Se
realizaron hojas sedimentológicas para cada uno de los pozos en estudio, las
cuales comprenden las características sedimentológicas, petrográficas y

Jorham Contreras 9
INTRODUCCIÓN

paleoebatimetría de la secuencia, así como los límites y caracterización de cada


una de las unidades estratigráficas informales.

En base a las unidades informales establecidas, se realizó de manera


independiente para cada cuenca, la comparación y correlación entre los depósitos
eoceno-oligocenos perforados, con la finalidad de establecer la extensión y
distribución de los sedimentos, así como variaciones en las características
texturales, litología, mineralogía, procesos y etapas diagenéticas alcanzadas.
También se tomaron los datos bioestratigráficos suministrados para comparar la
paleobatimetría y paleoambiente entre distintas las unidades.

La extensión y caracterización de los depósitos eoceno-oligocenos en las


cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco permitió realizar una comparación entre
ambas, la cual estuvo limitado por la separación geográfica entre los pozos y las
complejas características estructurales del área.

Finalmente se realizó la comparación de los depósitos de subsuelo en


ambas cuencas con la secuencia eocena que aflora en la isla de Margarita, a
través de las características sedimentológicas, estratigráficas y paleoambientales,
con la finalidad de establecer la correlación entre esta secuencia con alguna de las
cuencas.

Jorham Contreras 10
INTRODUCCIÓN

1.4 Trabajos Previos

Geología de Superficie

Desde 1860 se desarrollaron numerosos estudios geológicos en la región


Caribe que permitieron el planteamiento de las distintas teorías acerca de la
evolución geodinámica que controló las características sedimentológicas,
estratigráficas y estructurales de la corteza y cuencas sedimentarias de esta re-
gión. Los trabajos de geología de superficie se realizaron en las distintas islas cari-
beñas, los cuales permitieron realizar interpretaciones acerca de las condiciones
geológicas y paloambientales en que se generaron los rellenos de las cuencas.

A continuación se reseñan, particularmente, los trabajos realizados en las


islas de Margarita y Cubagua, las cuales presentan una cobertura sedimentaria de
edad Eoceno y Mioceno-Reciente. Estas secuencias son correlacionables con los
depósitos de subsuelo de las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco, ambas
pertenecientes a la región caribeña.

WALL (1860) realiza los primeros estudios en las rocas de edad Eoceno que
afloran en la Isla de Margarita. Reporta en su trabajo “On the Geology of Part of
Venezuela and Trinidad” una secuencia de areniscas y lutitas, sin edad
establecida, en la zona de Pampatar.

RUTTEN (1940), refiere originalmente a WALL (1860) en uno de los primeros


trabajos de geología de superficie en la Isla de Margarita y asigna para estas
rocas una edad Eoceno según el contenido de orbitoides.

GONZÁLEZ DE JUANA (1947), con la participación de estudiantes de la


Escuela de Geología de la U.C.V., estudió la secuencia eocena en la Isla de
Margarita y asigna el nombre de Grupo Carnero, el cual divide en tres unidades,

Jorham Contreras 11
INTRODUCCIÓN

que aunque no fueron publicadas, les asignó los nombres de formaciones El Dátil,
Las Bermúdez y Punta Mosquito.

KUGLER (1957) publica un trabajo sobre la geología de las Islas de


Margarita y Cubagua, donde incluye una sección esquemática que va desde las
Bermúdez hasta el Manglillo y considera toda la secuencia eocena como una sola
formación, constituida por cinco miembros, siendo un flysch el miembro basal.

JAM & MÉNDEZ (1962) realizaron la primera descripción detallada de las


formaciones Las Bermúdez, El Dátil y Punta Mosquito.

BERMÚDEZ & GÁMEZ (1966) definen la zonación bioestratigráfica del Eoceno,


en base a foraminíferos planctónicos, en la sección Las Bermúdez y El Manglillo.

MUÑOZ (1973) publica su trabajo "Geología sedimentaria del Flysch Eoceno


de la Isla de Margarita". A diferencia de GONZÁLEZ DE JUANA (1947) distingue dos
formaciones, correspondientes a Pampatar y Punta Carnero.

BELLIZIA; MUÑOZ; MACSOTAY & KEY (1983) definen las rocas eocenas que
afloran en la Isla de Margarita como una secuencia flysch depositada en una
cuenca geosinclinal marino profunda. Reportan variaciones de facies en esta
secuencia, reconociendo dos zonas: una occidental, correspondiente a la
Formación Las Bermúdez, de calizas bioclásticas con lutitas pelágicas (secciones
El Manglillo, Las Bermúdez y Punta Mosquito) y otra zona oriental,
correspondiente a la Formación Pampatar, de naturaleza grauváquica turbidítica
con lutitas estériles.

CASAS & MORENO (1986 ) identificaron dos unidades litológicas principales


con características bien definidas, correspondientes a la Formación Pampatar
lutítico arenosa y a la Formación Punta Carnero lutítico calcárea, en las cuales a
través de estudios estadísticos definen varios ciclos sedimentarios.

Jorham Contreras 12
INTRODUCCIÓN

CASAS, MORENO & YORIS (1995) realizan el Análisis tectono-sedimentario de


la Formación Pampatar, en donde establecen de manera informal subunidades
estratigráficas para esta formación y plantean de manera resumida la evolución y
ambiente tectónico de sedimentación.

CAMPOS & GUZMÁN (2002) realizaron un análisis de estratigrafía secuencial


en la secuencia flysch de la isla de Margarita, donde interpretaron, en base al
estudio de elementos arquitecturales, una superficie de máxima inundación y
varios sistemas encadenados trangresivos y de alto nivel en la Formación
Pampatar, mientras que en el Grupo Punta Carnero interpretaron dos superficies
de máxima inundación y sistemas encadenados de bajo nivel.

Geología de Subsuelo

A nivel de subsuelo se han realizado varios trabajos a escala regional que


complementan los datos de geología de superficie y dan una idea de las carac-
terísticas sedimentológicas y estratigráficas de la secuencia Eoceno – Oligoceno
en las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco.

FEO CODECIDO (1977) reconoce en el pozo CUBAGUA-1 ubicado en la Isla


Cubagua, una sección de lutitas ricas en foraminíferos, muy deformada, la cual
correlaciona con la Formación El Dátil. Considera la depresión entre Margarita y
Barbados como una zona atractiva para la acumulación de hidrocarburos.

HAAK (1980) realiza uno de los primeros estudios estratigráficos del pozo
MTC-2X y otros adyacentes ubicados en la cuenca La Blanquilla.

EVANS (1982a) realiza un estudio estratigráfico de la cuenca Tuy-Cariaco y


atribuye como equivalente lateral del Grupo Punta Carnero, al miembro basal
eoceno perforado por el pozo CMA-1X.

Jorham Contreras 13
INTRODUCCIÓN

GODDARD (1986) a nivel de subsuelo establece la estratigrafía y caracterís-


ticas sedimentológicas en la cuenca Cariaco y su correlación en superficie con la
Plataforma Continental circundante hacia el noreste de Venezuela.

CHEVALIER & ALVAREZ (1991) realizaron un trabajo en la región nororiental


del país, basado fundamentalmente en los rasgos estructurales del transecto
Cariaco-Maturín. Establecen una buena correspondencia entre los datos de
superficie y subsuelo en la región norte de la cuenca oriental, Serranía del Interior
y parte de la cuenca Tuy-Cariaco.

BLANCO & GIRALDO (1992) realizaron el estudio titulado “Síntesis Tectono-


Estratigráfica de la cuenca Tuy-Cariaco y de la Plataforma Externa” hacia el norte
de Venezuela, estableciendo cuatro áreas separadas por fallas mayores en la
cuenca Tuy-Cariaco, así como cuatro fases tectónicas de evolución desde el
Cretácico hasta el Reciente en la cuenca La Blanquilla.

YSACCIS (1997) en su trabajo de doctorado realiza el estudio geológico de la


zona noreste costafuera de Venezuela durante el Terciario, en el cual plantea la
evolución tectónica y estratigráfica de la región caribeña, asociada a la
geodinámica de la placa Caribe, y la generación y evolución de las cuencas
costafuera de Venezuela. Se basa en datos integrados de superficie y subsuelo,
sustentados por los análisis sedimentológicos, estratigráficos y bioestratigráficos
de pozos en concordancia con la interpretación de transectos sísmicos en la
región.

YSACCIS, CABRERA & CASTILLO (2000) realizan el análisis de sistema


petrolífero y potencialidad de acumulación de hidrocarburos en la cuenca La
Blanquilla, determinando una historia geológica termal, características
estratigráficas, sedimentológicas, estructurales y de sincronización para la
generación de importantes acumulaciones en la secuencia Eoceno – Mioceno.

Jorham Contreras 14
INTRODUCCIÓN

1.5 Agradecimientos

A Dios por haberme dado la vida y haberme puesto en este camino.

A la ilustre Universidad Central de Venezuela por su inmensa enseñanza.

A la Escuela de Geología, Minas y Geofísica por el aprendizaje en el campo de


las geociencias.

A PDVSA por permitir la realización de este proyecto y brindar todos los


recursos necesarios.

A mi tutora académica Ing. Olga Rey por su guía, correcciones oportunas y


comprensión en una de las etapas más importantes de mi carrera.

A mi tutora industrial Ing. Beatriz Blanco por su apoyo incondicional,


colaboración y confianza.

A los profesores Ricardo Alezones, Rafael Falcón, Omar Rojas y Lilian Navarro.

A los Ings. Cecilia González, Marco Odehnal, Angela Rojas, Humberto


Sánchez, Franco Márquez, Bernabé Aguado, Genero Giffunni, Isbelia Durán, Leonel
Vegas, Avelino Moya y Armando Fasola por su desinteresada colaboración.

Al Dr. Max Furrer por la invaluable colaboración en el análisis bioestratigráfico.

Al personal técnico del Laboratorio de Geología en Caracas y de las


Nucleotecas el Chaure y Quiriquire.

A Claudia Chacín y María Alejandra Rojas por su apoyo incondicional. A


Oswaldo Guzmán y Corina Campos por la colaboración en las actividades de
campo. A Milena Quijada y Silvano D’ Alessio por sus oportunas recomendaciones.
A mis compañeros Diana Velásquez, Bárbara Casal, Saileth Cortez, Erica Morales,
Joseph Cedillo, Jose Arcila, Francisco Cheng, William Olaya, Erickson Bermúdez,
Jesús Hernández, Iván Arias, Jean Calderín, Richard Linares y Ebelio Espinola.

Jorham Contreras 15
GEOGRAFÍA FÍSICA

2. GEOGRAFÍA FÍSICA

2.1 ISLA DE MARGARITA

La isla de Margarita presenta una superficie de 934 Km2 y está ubicada a


23 Km de la costa nororiental de Venezuela. La integran las penínsulas de
Macanao hacia el oeste y Paraguachoa hacia el este, conformadas por un núcleo
ígneo-metamórfico y unidas por el istmo La Restinga.

Los depósitos turbidíticos del Eoceno afloran en la Península de Margarita,


específicamente en las zonas de Pampatar, Punta Mosquito y el Yaque (cercana
al aeropuerto Santiago Mariño), cubriendo un área total de aproximadamente 100
Km2. Las zonas de Punta Mosquito y El Yaque son muy llanas, áridas, el relieve
es poco prominente y presentan temperaturas elevadas, mientras que hacia
Pampatar el clima se hace más húmedo, la vegetación es más arbórea y el relieve
es más irregular, caracterizándose las zonas de afloramiento por escarpes
cercanos a la costa y cerros que pueden alcanzar los 90 m de altitud.

2.1.1 Topografía y Relieve

La Península de Macanao se caracteriza por un relieve bastante llano,


cerros aislados con una altura máxima de 760 m y depósitos sedimentarios
recientes de poco espesor. En Paraguachoa el relieve es más prominente y
alcanza los 960 m de altitud, los cerros son más comunes y están conformados
por asociaciones complejas de metaígneas y metamórficas, entre los cuales están
Cerro Grande, Copey, Matasiete, Guayamuri. Se distinguen rocas sedimentarias
del Eoceno, las cuales son de particular interés en este trabajo y depósitos Mio-
Plioceno.

Jorham Contreras 16
GEOGRAFÍA FÍSICA

2.1.2 Clima

La península de Paraguachoa se caracteriza por un clima semiárido, con


temperatura media anual alrededor de 27ºC, un promedio de precipitación anual
de 510 mm, la cual se manifiesta con chubascos intensos que permiten el curso
de la mayoría de las quebradas intermitentes. En Macanao las temperaturas
pueden alcanzar los 30ºC en las épocas más secas de los meses de marzo a junio
(Enciclopedia Encarta, 2002).

2.1.3 Hidrografía

Se caracteriza por quebradas y ríos de poco caudal e intermitentes, la


mayoría observables únicamente en las épocas de mayor lluviosidad, que fluyen
desde las zonas topográficamente más elevadas hacia las zonas costeras. Sin
embargo, a una altitud superior a los 400 m es posible observar pequeñas
quebradas continuas la mayor parte del año.

2.1.4 Vegetación y Fauna

La vegetación es predominantemente xerófila, caracterizada por plantas


espinosas a causa de la sequía. Hacia la zonas costeras se pueden distinguir
manglares y en las zonas elevadas, entre los 450 y 750 m de altitud, se distingue
vegetación subtropical producto de la humedad, en donde se forma una capa
vegetal y árboles que pueden alcanzar los 20 m de altura.

La fauna es diversa, caracterizada por mamíferos de tamaño pequeño,


aves tropicales y abundantes reptiles.

Jorham Contreras 17
GEOGRAFÍA FÍSICA

2.2 CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco están ubicadas en la región


surcentral del mar Caribe, adyacentes al sistema de límite de placas Caribe /
Sudamérica. El origen de ambas cuencas está controlado por la evolución
geodinámica y estructural de la placa Caribe en su movimiento relativo dextral con
respecto a Sudamérica desde el Paleoceno al Reciente (SPEED, 1985; PINDELL et
al., 1988; OSTOS, 1990).

La cuenca La Blanquilla presenta un área aproximada de 35.000 Km2 y


orientación suroeste-noreste, con profundidades de aguas entre 200 y 3.000 m,
incrementándose hacia el norte. Está enmarcada por la plataforma Margarita-Los
Testigos al sureste, el alto La Tortuga al suroeste, el alto La Blanquilla que se
extiende al noreste y al sur limitada por la falla dextral de Margarita con orientación
noroeste, que la divide en dos subcuencas: Blanquilla Oeste y Blanquilla Este.
Corresponde a una cuenca extensional paleógena asociada a la subducción
Atlántica, rellena por una secuencia sedimentaria que supera los 6 Km de espesor,
compuesta por depósitos del Eoceno al Reciente (YSACCIS et al., 2000).

La cuenca Tuy-Cariaco presenta un área de 20.000 Km2 aproximadamente


con orientación suroeste-noreste, comprendida entre la Cordillera de la Costa,
Serranía del Interior y Península de Araya-Paria al sur, y las islas de Margarita y la
Tortuga al norte, estando la mayor parte cubierta por las aguas del mar Caribe. La
profundidad de las aguas se mantiene entre 200 y 1.000 m, a excepción de la
zona de la Fosa de Cariaco donde alcanza más de 1.400 m (YOUNG et al., 1956).
La fase inicial de su formación está asociada a la extensión paleógena (YSACCIS,
2000), pero se define totalmente durante la etapa transtensiva del Mioceno Medio,
producto del fallamiento transcurrente al norte de Sudamérica. La secuencia
sedimentaria al igual que en la cuenca La Blanquilla es bastante espesa y está
compuesta por rocas con edades del Eoceno al Reciente.

Jorham Contreras 18
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

3. GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

3.1 GEODINÁMICA DE LA REGIÓN CARIBE

3.1.1 Generalidades

La evolución geodinámica de la región Caribe está controlada por la placa


litosférica con ese mismo nombre y su interrelación con las placas de Sudamérica,
Norteamérica y Atlántica, las cuales han estado en constante interacción desde
comienzos del Terciario. Numerosos autores han propuesto modelos tectónicos
para explicar el origen y evolución de la región caribeña. Entre los modelos más
aceptados para explicar la evolución tectónica de la corteza caribeña y describir el
marco geodinámico de la región, están los de SPEED (1985), PINDELL (1985),
PINDELL & BARRETT (1990), STEPHAN (1990) y OSTOS (1990). Otros trabajos se
basan de manera más específica en la región norte de Venezuela y representan
aportes importantes en la reconstrucción geológica del margen sur del Caribe
(MARESCH, 1974; TALUKDAR et al. 1981; NAVARRO, 1983 y STEPHAN, 1985 cit. en
OSTOS, 1990).

El origen y evolución tectónica de la islas caribeñas y de las cuencas


costafuera de Venezuela están controlados por la evolución de la placa Caribe, la
cual es considerada alóctona (SPEED, 1985; PINDELL, 1985; ERLICH et al., 1989).
Comienza en el Cretácico con la colisión entre el arco volcánico y la zona noroeste
de la placa Sudamérica (PINDELL et al., 1988; OSTOS, 1990; STEPHAN 1990) y
posteriormente a partir del Terciario comienza la etapa de transpresión y migración
hacia el este de la placa Caribe (SPEED, 1985; PINDELL, 1985; PINDELL & BARRETT,
1990; STEPHAN et al., 1990 y OSTOS, 1990).

La placa del Caribe limita al este con el arco volcánico y la zona de


subducción de las Antillas Menores, al oeste con la zona de subducción en
América Central, el cinturón deformado de Panamá y la fosa Caiman, mientras

Jorham Contreras 19
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

que los límites al norte y al sur no están bien establecidos, aunque se han deno-
minado como límites con movimiento transcurrente (BURKE, 1978; PINDELL, 1985).

El límite Caribe / Suramérica presenta particular interés y ha sido motivo de


gran discusión entre diversos autores, donde se puede notar que las principales
diferencias se basan en la zona límite entre ambas placas, la distancia y tiempo de
migración de la placa caribeña y la correspondencia con las tasas de desplaza-
miento de las estructuras fijadas como límites. El límite entre ambas placas ha
sido propuesto a lo largo de: 1) el límite transformante del sistema de fallas
Boconó-San Sebastián-El Pilar y 2) la zona de subducción al norte de las costas
colombo-venezolanas (Figura 3.1).

3.1.2 Límite de placas Caribe / Suramérica

A pesar de las discrepancias y consideraciones de los distintos modelos


propuestos para explicar la evolución geodinámica de la placa del Caribe, se han
desarrollado constantes investigaciones en esta área que han permitido la
evolución y progresivo desarrollo de nuevas teorías, enfocadas en establecer de
manera concreta la evolución tectónica de la región caribeña y su influencia en la
sedimentación y deformación del margen norte de Sudamérica, así como en las
cuencas costafuera de Venezuela.

SPEED (1985) plantea que el límite transformante de placas Boconó-San


Sebastián-El Pilar, (primero postulado para el límite Caribe / Sudamérica) presenta
cierta inconsistencia, particularmente la falla El Pilar no se ha establecido
concretamente como una falla transformante, sino únicamente como una falla que
marca el contacto entre el continente, el arco de las Antillas y las napas
solapadas, que representa un ramal con movimiento hacia el este en el límite
océano-continente. El mismo autor sugiere que el problema del límite sur de la
placa Caribe es que no se ha definido concretamente hacia el este una zona
transcurrente de gran desplazamiento, la cual esté debidamente apoyada en
evidencias sismo-tectónicas y por grandes fallas con desplazamiento mayor a los

Jorham Contreras 20
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

100 Km, tanto en el continente como en el océano. De igual manera, sostiene que
a lo largo de este límite transformante existe aparentemente una zona en la región
centro-oeste de Venezuela que contradice el sentido dextral, tal como lo expresa
RIAL 1978 en SPEED, 1985), indicando evidencias de un movimiento transcurrente
sinestral, a partir de los datos del terremoto de la ciudad de Caracas en 1967. Sin
embargo, AUDEMARD & GIRALDO (1997) plantean que este sistema se encuentran
en perfecta continuidad mecánica y cinemática.

Por otra parte, se han desarrollado investigaciones basadas en el posible


límite de subducción al norte de las costas colombo-venezolanas. TALUKDAR
(1983) y CASE et al. (1984) en OSTOS (1990), plantean un posible contacto de
corteza oceánica y continental en la plataforma venezolana, que comienza entre la
Península de Paraguaná y las islas Neerlandesas y se extiende al sur del
Archipiélago Los Roques hasta el noroeste de la isla de Margarita. De manera
similar, KELLOGG & BONINI (1982) en BLANCO & GIRALDO (1992) plantean un
cabalgamiento al norte del posible contacto entre corteza oceánica-continental, el
cual marca un límite de subducción entre ambas placas (subducción tipo B entre
Caribe y Suramérica), e YSACCIS (1997) sugiere una zona de intensa de deforma-
ción como resultado de la convergencia entre las placas Caribe y Sudamérica
antes del Mioceno.

A pesar de que esta zona se ha interpretado a través de la sísmica, no se


ha establecido una solución definitiva debido a la falta de continuidad entre el
Cinturón deformado Surcaribe, la falla El Pilar y la zona de subducción de las
Antillas Menores, presentándose como tres segmentos aislados, en donde la fallas
dextrales de Margarita al oeste y las fallas El Pilar en su extremo este, Los Bajos,
El Soldado y el sistema de fallas de Trinidad, representan las posibles conexiones
(SPEED, 1985).

LUGO & MANN (1995) plantean que este límite de subducción Caribe-
Suramérica representado por el cinturón deformado Surcaribe se conecta con la

Jorham Contreras 21
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

falla transformante de Margarita y a su vez, con otra zona de subducción seguida


de una falla transformante noroeste que enlaza, al norte de Margarita y Trinidad, el
límite de subducción Caribe-Atlántico con el límite Caribe-Suramérica (Figura 3.9).

ERLICH & BARRETT (1989), OSTOS (1990), entre otros, coinciden que el límite
entre ambas placas debe ser paralelo a subparalelo al margen norte de
Sudamérica y que debe encontrarse entre 10º y 13º de latitud.

Por lo tanto, hasta la actualidad, el límite Caribe / Sudamérica no se ha


establecido de manera concreta, pero tomando en cuenta que la transpresión
comienza en la zona noroeste de Sudamérica y que la placa Caribe se ha despla-
zado hasta el extremo este de Sudamérica, la zona sobre la cual ha ocurrido el
movimiento debe tener un ancho considerable y mayor que la región del borde del
continente, y debe extenderse hacia el norte en la litosfera oceánica. Esto implica
que el límite sur de la placa Caribe no es una zona rígida y claramente limitada,
sino que debe corresponder a una zona de transición de ancho considerable, tal
como sugiere OSTOS (1990), que el límite Caribe / Suramérica puede abarcar una
zona muy extensa de aproximadamente 500 Km de ancho, representado por el
cinturón deformado Surcaribe, conformado por microplacas ensambladas de
corteza oceánica-continental que se han ido ajustando según la placa del Caribe
se mueve hacia el este con respecto a Sudamérica (SPEED, 1985).

Los modelos de PINDELL & BARRETT (1990), STEPHAN et al. (1990) y OSTOS
(1990), no descartan ninguna de las alternativas como posible límite de placas,
manteniéndose hasta la actualidad ciertas interrogantes con respecto a este
punto. El modelo planteado por KELLOGG & BONINI (1982) en BLANCO & GIRALDO
(1992) y posteriormente por otros autores, de un límite de subducción al norte de
las costas colombo-venezolanas, a lo largo del cinturón deformado Surcaribe
adquiere gran importancia.

Jorham Contreras 22
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

Se puede observar que todos los modelos consideran la falla El Pilar como
parte del sistema límite entre ambas placas, así como se considera la placa Caribe
alóctona (SYKES, 1982 y CASE, 1984 en SPEED, 1985), que ha migrado desde el
suroeste de la placa Sudamericana hasta su posición actual, consumiendo
progresivamente la corteza protocaribeña y acrecionando bloques de fondo
oceánico, junto con los originalmente formados en la colisión del arco de islas en
la región noroeste de Sudamérica (OSTOS, 1990).

PLACA CARIBE
CINTURÓN
DEFORMADO SURCARIBE
CUENCA
RIDGE

F.
GRANADA

M
BARBADOS

AR
G
AR
PLACA

IT
FALLA DE

A
O CA
F. SAN SEBASTIÁN ATLÁNTICA
FALLA EL PILAR
NO
CO 10º
BO
DE
A
LL
FA

PLACA SURAMÉRICA

80º 70º 60º

FIGURA 3.1. Límites de placas Caribe / Sudamérica.


Tomado de STEPHAN et al. (1990)

YSACCIS & AUDEMARD (2000) plantean que la zona límite entre las placas
Caribe / Sudamérica al este de Venezuela, está definida por una región
transicional de ancho considerable (350 Km aproximadamente), constituida por
bloques de corteza oceánica y continental, limitados por fallas extensionales y
tranformantes asociadas a un límite inferior o despegue basal, ubicado en la zona
inferior de la corteza o parte superior del manto, donde exista un contraste
reológico importante. Este límite conecta en profundidad las fallas transcurrentes
con los cinturones de corrimiento contemporáneos, en la cual sus movimientos
son balanceados en dos componentes tectónicas oblicuas transpresionales, así
como los vacíos corticales son compensados por desplazamientos de masa desde
la zona de despegue basal hasta niveles estructurales menos profundos
(Figura 3.2).

Jorham Contreras 23
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

Este modelo llamado “Orógeno en Flotación” (“Orogenic Float”) fue definido


originalmente por BALLY et al. (1988) y OLDOW et al. (1990) en YSACCIS &
AUDEMARD (2000), para explicar la deformación por compresión, transpresión,
transtensión y balance litosférico en un marco tectónico regional de subducción
oblicua. En la región este de Venezuela, el sistema de “Orógeno en Flotación”
estaría comprendido entre el cinturón plegado de la Blanquilla al norte (cinturón
deformado Surcaribe) y la Serranía del Interior al sur, donde la isla de Margarita
representa reliquias del arco de islas de las Antillas Menores.

Cuenca Oriental Golfo de Paria Cuenca Carúpano Alto Los Testigos Cuenca La Blanquilla
de Venezuela

FIGURA 3.2. Modelo “Orógeno en Flotación” para la región este de Venezuela.


Tomado de YSACCIS & AUDEMARD (2000)

3.1.3 Evolución Geodinámica de la placa Caribe

A partir de los modelos de SPEED (1985), PINDELL & BARRETT (1990),


STEPHAN et al. (1990) y OSTOS (1990) sobre la evolución geológica de la región
Caribe, se plantea el origen de las cuencas terciarias La Blanquilla y Tuy-Cariaco y
el control tectónico del relleno sedimentario, conformado por rocas de ambientes
de aguas profundas de edades Eoceno al Reciente. De igual manera, el origen de
las islas caribeñas, entre las cuales se destacan Margarita y Cubagua está

Jorham Contreras 24
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

controlado por dicha evolución, y las secuencias sedimentarias aflorantes se rigen


por el marco compresivo y emplazamiento neógeno de los depósitos terciarios,
producto de colisión oblicua entre las placas Caribe y Sudamérica (SPEED, 1985).

La evolución geológica de la región Caribe comienza a partir del Jurásico


con la etapa “rifting”, en la cual se inicia el rompimiento continental entre
Sudamérica y el bloque de Yucatán, generando la subsidencia del margen norte
de Sudamérica y el desarrollo de un margen de extensión pasivo que dió origen al
proto-Caribe (PINDELL et al., 1988; STEPHAN et al., 1990).

Para el Jurásico Tardío - Cretácico Temprano, al oeste de Sudamérica,


PINDELL & BARRETT (1990) sugieren un arco de islas ancestral de las Antillas
Mayores ubicado al este del Pacífico, mientras que OSTOS (1990) lo considera un
microcontinente que fue migrando en dirección sureste siguiendo el límite entre la
placas proto-caribeña y caribeña actual.

Para el Barremiense – Aptiense (125 M.a.) ocurre un cambio en la dirección


de migración del arco volcánico de las Antillas Mayores de sureste a noreste,
desarrollándose un límite convergente al oeste de Sudamérica (OSTOS, 1990).

Posteriormente en el Albiense (100 M.a.) ocurren los mayores cambios en


la evolución caribeña (PINDELL, et al., 1988; PINDELL & BARRETT, 1990; OSTOS,
1990), se invierte el sentido de la subducción entre las Antillas Mayores y América
Central, producto de la colisión entre el proto-Caribe y el arco de islas de las
Antillas. Este cambio de polaridad genera el desarrollo del arco de islas Caribe por
encima del arco protocaribeño, el cual está constituido por las Antillas Mayores, la
isla Desiderade, el “Ridge” de Aves y la islas Neerlandesas y venezolanas, entre
las cuales se encuentra la actual isla de Margarita.

Hasta el Cretácico Tardío (Santoniense), al norte de Sudamérica se


desarrolló una gran cuenca extensional de margen pasivo (OSTOS, 1990), hasta el

Jorham Contreras 25
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

momento que el centro de expansión del proto-caribe comienza a extinguirse y


dicha placa alcanza su máximo tamaño (PINDELL et. al., 1988). De manera
contemporánea, al oeste, el extremo sur del arco de islas caribeño colisiona con el
extremo noroeste de Sudamérica (STEPHAN et al., 1990; OSTOS, 1990), (Figura
3.3), y posteriormente, se desarrollan límites transformantes al norte y sur de la
placa Caribe, mientras esta continua su deriva hacia el noreste.

20 º
MAESTRICHTIENSE (66 M.a)

Antillas
Mayores Protocaribe

10 º

Placa Suramérica
Placa del
Caribe

90º 80º 70 º 60º


FIGURA 3.3. Paleogeografía de la región Caribe durante el Cretácico Tardío


Tomado de STEPHAN et al. (1990)

Durante el Paleoceno (56 - 70 M.a.), la interacción de las placas Caribe y


Sudamérica continua (Figura 3.4), y la migración hacia el noreste es afectada por
el origen de la cuenca Granada en la zona retroarco (OSTOS, 1990). Los altos de
La Blanquilla, Aves, Margarita, Los Testigos y Antillas Holandesas están
emergidos y continúan así durante todo el Paleógeno, representando fuentes de
aporte de sedimentos para la cuencas extensionales adyacentes.

A partir del Eoceno Temprano, como consecuencia de la colisión y


migración de la placa Caribe, el oeste de Venezuela pasa a ser un margen activo y
se producen diversos efectos geológicos, entre los cuales OSTOS (1990) señala
metamorfismo de P/T media en la zona de colisión, extinción del magmatismo
calcoalcalino en sentido oeste-este en el arco de islas caribeño, transpresión en el

Jorham Contreras 26
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

extremo noroccidental de Sudamérica y sobrecorrimiento al sur de los terrenos


que conforman las islas neerlandesas y venezolanas, Cordillera de la Costa -
Margarita y plataforma venezolana. Al mismo tiempo, comienza la etapa “rift”
intraplaca descrita por YSACCIS (1997), en un dominio retroarco (OSTOS, 1990) (ver
3.2.2) y comienzan a generarse las cuencas intracaribe (episuturales) al norte de
Venezuela, entre las cuales están Golfo Triste y Granada.

PALEOCENO TARDÍO (55 M.a)

ANTILLAS 20 º
MAYORES

Placa del
Caribe Protocaribe
CUENCA
GRANADA
RIDGE 10 º
BEATA I. de Margarita

Placa Suramérica

90º 80º 70º 60º

FIGURA 3.4. Paleogeografía de la región Caribe durante el Paleoceno


Tomado de STEPHAN et al. (1990)

En el Eoceno Medio el arco de las Antillas Mayores colisiona con la


plataforma de las Bahamas, evento que no presenta una edad establecida y según
OSTOS (1990) se ha atribuido por diversos autores al Eoceno Temprano, Eoceno
Tardío e incluso al Cretácico – Paleoceno. Producto de la colisión, la placa
caribeña cambia la dirección de movimiento hacia el este, comienza la
transpresión en el occidente de Venezuela y se genera una rotación en sentido
horario de los bloques transpresionales en la zona límite este y sur de la placa
Caribe y norte de Sudamérica, relacionado con el fallamiento en sentido dextral de
Oca - San Sebastián - El Pilar entre ambas placas (PINDELL et al., 1988; OSTOS,

Jorham Contreras 27
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

1990). Para este momento la isla de Margarita se encuentra emergida,


representando parte del arco volcánico, al norte se desarrolla la cuenca La
Blanquilla y al sur comienza originarse la subcuenca Cubagua (Figura 3.5).

EOCENO MEDIO (45 M.a)


1: Cuenca La Blanquilla
RIDGE BEATA CUENCA 2: Subcuencas Margarita Sureste
GRANADA
y Caracolito
3: Subcuenca Cubagua
1
2
3 Ma
10 º
CUENCA DE
MARACAIBO

Placa Suramérica

80 º 70 º 60 º 0º

FIGURA 3.5. Paleogeografía de la región Caribe durante el Eoceno Medio


Tomado de YSACCIS (1997)

En el Eoceno Tardío continua el emplazamiento de los terrenos transpresio-


nales a lo largo del margen norte de Sudamérica (PINDELL et al., 1988; PINDELL &
BARRETT, 1990; OSTOS, 1990; STEPHAN et al., 1990), el margen pasivo formado
durante el Cretácico es transformado en un frente de corrimientos y cuencas
antepaís asociadas (Figura 3.6), causando la migración del “foredeep” y desarrollo
diacrónico en sentido oeste-este de depósitos tipo flysch adyacentes al margen
(formaciones Matatere y Guárico).

Durante el Eoceno Tardío - Oligoceno el frente de transpresión alcanza la


región oriental de Venezuela, generándose un patrón regresivo a lo largo del
margen norte de Sudamérica. La falla Margarita divide la cuenca la Blanquilla y
comienza la paleofosa Cariaco y se acentúan los rasgos estructurales de
extensión paleógena dentro de la placa Caribe (YSACCIS, 1997) .

Jorham Contreras 28
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

EOCENO TARDÍO (37 M.a)


CUENCA
1: Cuenca La Blanquilla
RIDGE BEATA GRANADA 2: Subcuencas Margarita
Sureste y Caracolito
1
2 3: Subcuenca Cubagua
3 Ma 10 º
CUENCA
ORIENTAL

Placa Suramérica

80 º 70 º 60 º 0º

FIGURA 3.6. Paleogeografía de la región Caribe durante el Eoceno Tardío


Tomado de YSACCIS (1997)

Para el Oligoceno Tardío el frente de deformación caribeño alcanza la


Península Araya-Paria (Figura 3.7), posteriormente a Trinidad y el fallamiento
dextral a lo largo del borde norte de Sudamérica (Boconó - San Sebastián - El
Pilar) genera las cuencas “pull-apart” de Falcón, Bonaire y la Baja Guajira al
noroeste de Venezuela (OSTOS, 1990).

En una etapa cercana al comienzo del Mioceno, el interior de la placa


Caribe, está dominado por una fase transpresiva, en la cual ocurre la inversión de
estructuras extensionales preexistentes, tales como fallas normales en las
cuencas La Blanquilla y Caracolito (YSACCIS, 1997). Posteriormente, durante el
Mioceno Temprano – Medio? ocurre en la región sur de la cuenca Tuy-Cariaco, el
emplazamiento de bloques ígneo-metamórficos en la cuenca antepaís, lo cual
puede ser contemporáneo con el inicio del “foredeep” de Maturín (DI CROCE, 1995)
y la deformación de la Serranía del Interior (CHEVALIER et. al., 1995 en YSACCIS,
1997).

Jorham Contreras 29
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

OLIGOCENO TARDÍO (25 M.a)


CUENCA
GRANADA 1: Cuenca La Blanquilla
RIDGE BEATA 2: Subcuencas Margarita Sureste
y Caracolito
1
2 3: Subcuenca Cubagua
Ma
3 10 º
CUENCA
ORIENTAL
Placa Suramérica


80º 70º 60º

FIGURA 3.7. Paleogeografía de la región Caribe durante el Oligoceno Tardío


Tomado de YSACCIS (1997)

Durante el Mioceno Medio - Tardío ocurre el emplazamiento de las


secuencias eocenas en la isla de Margarita, tal como señala SPEED (1976, 1985) y
PINDELL et al., (1990), resultado de la posible colisión entre la isla de Margarita y
la región norte de la placa Sudamericana en el Neógeno tardío, al mismo tiempo
que en la cuenca Tuy-Cariaco se desarrolla un régimen transtensivo. En el interior
de la placa Caribe las cuencas son rellenadas por sedimentos de ambientes
nerítico a batial (YSACCIS, 1997), en un marco tectónico relativamente estable.

MIOCENO MEDIO
(12 M.a)
CUENCA
GRANADA

1 2
4
3
10 º

1: Cuenca La Blanquilla Este y Oeste


2: Subcuencas Margarita Sureste y
Caracolito
3: Subcuenca Cubagua
4: Subcuenca Tuy-Cariaco Norte 0º
5: Fosa de Cariaco
80 º 70 º 60 º

FIGURA 3.8. Pelogeografía de la región Caribe durante el Mioceno Medio


Tomado de YSACCIS (1997)

Jorham Contreras 30
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

Del Mioceno Tardío al Reciente continua el movimiento relativo de la placa


Caribe hacia el este y de los terrenos transpresionales, la configuración de la
región costafuera de Venezuela y del límite entre ambas placas alcanzó la
distribución geológica actual. El cinturón deformado Surcaribe continúa activo
evidenciado por la deformación de los sedimentos neógenos; las fallas de Boconó,
Santa Marta y San Sebastián también continúan activas. De igual manera están
completamente formadas la Serranía del Interior, Sistema de Cordillera de la
Costa, Península Araya-Paria y las cuencas costafuera de Venezuela.

90º 80º 70º 60º

Cuba
20º
Rep. Dominicana

10º

Antefosas

LEYENDA 1: Cretácico Tardío; 2: Paleoceno; 3: Eoceno; 4: Oligoceno; 5: Mioceno Tardío

FIGURA 3.9. Evolución geodinámica de la placa del Caribe


Tomado de LUGO & MANN (1995)

Jorham Contreras 31
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

3.2 GEOLOGÍA ESTRUCTURAL DE LAS CUENCAS LA BLANQUILLA


Y TUY-CARIACO

La evolución de las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco en la región


costafuera de Venezuela, comienza con el origen de la cuenca de Granada
durante el Paleoceno en el dominio retroarco de las Antillas Mayores (OSTOS,
1990), ubicado para este momento al norte del extremo noroeste de Sudamérica.
El emplazamiento y sobrecorrimiento de porciones del arco volcánico y del
microcontinente definido por OSTOS (op cit.), genera la isla de Margarita al
suroeste de la cuenca Granada.

Las cuencas en la región costafuera de Venezuela están controladas por la


evolución del sistema Caribe particularmente en el límite Caribe-Suramérica, en
donde se pueden distinguir varias etapas y regímenes estructurales, los cuales
YSACCIS (1997) divide en cuatro fases de evolución tectónica que rigen el origen
de las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco.

3.2.1 Rasgos Estructurales

La región central costafuera de Venezuela está dominada por tres cuencas


principales: La Blanquilla, Tuy-Cariaco y Carúpano, cada una subdividida en varias
provincias o subcuencas y con límites bien definidos (Figura 3.10).

Cuenca La Blanquilla

Presenta orientación suroeste-noreste, limitada al norte por el alto de la


Blanquilla que se prolonga hacia el noreste, al suroeste por el alto de La Tortuga y
al sureste por la plataforma Margarita - Los Testigos que la separa de la cuenca
Carúpano. Hacia la región noreste continua hacia la cuenca de Granada.

La cuenca La Blanquilla comenzó a generarse a partir del Eoceno


Temprano – Medio en sentido este-oeste, caracterizándose por un semigraben

Jorham Contreras 32
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

conectado desde este momento con la cuenca paleocena de Granada (OSTOS,


1990). En el Eoceno Tardío la falla dextral de Margarita con orientación noroeste
divide la cuenca La Blanquilla en dos segmentos: La Blanquilla Este y La
Blanquilla Oeste (Figura 3.12).

Cuenca Tuy-Cariaco

Presenta una orientación suroeste-noreste, limitada al norte por la falla


dextral de Margarita y el alto La Tortuga que la separa de la cuenca La Blanquilla,
al sur por la cadena montañosa del norte de Venezuela, al oeste por el alto de la
plataforma de La Guaira y al este por la Península Araya-Paria, las islas de
Margarita, Coche, Cubagua y los altos que la separan de la cuenca Carúpano.

Es una cuenca transtensional neógena que ha sido subdividida en cuatro


subcuencas o provincias estructurales (YSACCIS, 1997), limitadas tal como se
describe a continuación:

La subcuenca Tuy-Cariaco Norte limita al sur con el sistema de falla


transtensional neógeno Coche - La Tortuga, y al norte, este y oeste por los
límites de la cuenca principal descritos con anterioridad.
La subcuenca Cubagua está limitada por el fallamiento transcurrente
neógeno sinestral de Charagato, que genera una subcuenca “pull-apart” local
en la parte este de la cuenca Tuy-Cariaco, al oeste de la isla de Coche. Sin
embargo, esta cuenca presenta un relleno sedimentario de edad Eoceno, lo
cual sugiere que está asociada a una etapa de régimen extensional previo al
régimen transtensivo neógeno.
La fosa de Cariaco es una cuenca neógena transtensional vinculada a las
fallas dextrales San Sebastián - El Pilar.
La ensenada de Barcelona es una cuenca transtensional menor,
enmarcada por la línea de costa venezolana al sur y al norte por la fosa
Cariaco.

Jorham Contreras 33
Jorham Contreras

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
34

FIGURA 3.10. Ubicación de las cuencas sedimentarias en la región costafuera de Venezuela


Tomado de YSACCIS et al. (2000)
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

3.2.2 Evolución Tectónica

Al norte de la placa Sudamericana se han originado cuencas bajo dos tipos


de regímenes tectónicos muy diferentes. En primer lugar las cuencas
desarrolladas bajo un margen tectónico pasivo, en las etapas de separación entre
Sudamérica y Norteamérica, denominadas por OSTOS (1990) como cuencas tipo
Atlántico, de tipo extensional. El movimiento relativo de la placa Caribe hacia el
este, fue consumiendo el piso oceánico pre-mesozoico y emplazando parte de
estas secuencias en el borde continental de Sudamérica, generando una etapa de
margen activo, en la cual se generan cuencas antepaís sobreimpuestas a la
secuencia de margen pasivo, de las cuales se conservan en subsuelo claras
evidencias. El otro tipo de cuencas son de tipo transtensionales y se desarrollan
en el interior de la placa Caribe desde el momento en que ésta se encontraba
mucho más al oeste, las cuales han ido migrando progresivamente hasta su
ubicación actual, tal como es el caso de La Blanquilla y subcuenca Cubagua en
Tuy-Cariaco.

El origen, características y evolución estructural, así como el relleno


sedimentario han sido controlados por cambios en los regímenes tectónicos y
geodinámicos de la región Caribe, los cuales han sido divididos por YSACCIS
(1997) en cuatro fases principales a partir del Eoceno.

Régimen “rift” Eoceno - Mioceno Temprano.


Régimen de inversión Oligoceno - Mioceno Medio.
Episodio de relleno en el Mioceno Medio.
Fase transtensional del Mioceno Medio - Tardío al Reciente.

Régimen “rift” Eoceno - Mioceno Temprano

La extensión paleógena genera semigrabenes inclinados hacia el noroeste,


comienza aproximadamente durante el Eoceno Temprano (≈55 M.a.), finaliza en la
región oeste de la placa Caribe durante el Oligoceno y, posteriormente, durante el

Jorham Contreras 35
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

Mioceno Temprano en la región este, cercana al arco de islas de las Antillas


Menores. Para el Paleoceno, la placa Caribe se encuentra en la región noroeste
de Sudamérica y el proceso de colisión está comenzando.

En la cuenca de Carúpano se han registrado depósitos de edad Eoceno


Temprano (FURRER, 1984 en YSACCIS, 1997), que se asocian a una etapa de
extensión pre-eocena. Estas estructuras extensionales presentan una orientación
noreste, paralelas a subparalelas a la plataforma Margarita – Los Testigos, y
representa un “horst” durante esta etapa, tal como se observa en la figura 3.11.

N
MAR CARIBE

s
Cuenca igo
La Blanquilla T est
os
–L
rita
a rga
aM
f orm Subcuenca
ta
Pla Caracolito

Barcelona

FIGURA 3.11. Sistemas de fallas de edad Eoceno Temprano en la zona costafuera de Venezuela
Tomado de YSACCIS (1997).

Las cuencas Blanquilla Oeste y Este estuvieron unidas hasta el Eoceno


Tardío, cuando se origina la falla Margarita de orientación noroeste,
probablemente transformante en sus etapas iniciales, separando el semigraben en
dos segmentos (Figura 3.12). En La Blanquilla Oeste se registra mayor actividad
durante este período, generándose fallas y rampas extensionales buzando al
norte. Para este momento la placa Caribe genera el emplazamiento de terrenos
transpresionales al noroeste de Sudamérica.

Jorham Contreras 36
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

En la zona de la actual cuenca Tuy-Cariaco, GODDARD (1986) sugiere una


compresión local durante el Eoceno Medio, asociada al marco transpresional en la
parte sur de la placa del Caribe. De manera similar, BLANCO & GIRALDO (1992)
sugieren una etapa compresiva Paleoceno – Eoceno Medio, la cual está
evidenciada por la ausencia de sedimentos paleógenos en la mayor parte de la
cuenca Tuy-Cariaco, con la excepción de la subcuenca Cubagua, donde se ha
perforado una secuencia de edad Eoceno de ambiente marino profundo que ha
sido correlacionada con los sedimentos del flysch eoceno de la isla de Margarita, y
que se encuentra por debajo de depósitos continentales asignados por posición
estratigráfica al Oligoceno (EVANS, 1982a).

Posteriormente, durante el Eoceno Tardío - Mioceno Temprano se generan


estructuras con dos orientaciones preferenciales, ONO-ESE y OSO-ENE presen-
tes en la cuenca La Blanquilla y al sur de la isla de Margarita. Ambas orientaciones
representan fallas normales, en donde la primera se caracteriza por buzamiento
hacia el norte, asociadas a la falla de Margarita más antigua y la segunda
orientación paralelas al alto Margarita – Los Testigos. Ambas generan estructuras
predominantemente de semigraben tal como se puede observar en la figura 3.12.

N
MAR CARIBE

s
igo
Fa T est
lla os
de La Blanquilla Este –L
rita
M
ar a rga
ga aM
La Blanquilla rit
a taf orm Subcuenca
Oeste Pla Caracolito

Paleofosa de
Cariaco

Barcelona

FIGURA 3.12. Sistemas de fallas de edad Eoceno Tardío - Oligoceno en


la zona costafuera de Venezuela. Tomado de YSACCIS (1997).

Jorham Contreras 37
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

Inversión Transpresiva Oligoceno – Mioceno Medio

Tuvo lugar principalmente en la región este de la región Caribe, cercana al


arco volcánico de las Antillas Menores, que para este momento se encontraba
interactuando con la región oriental de Venezuela (Figura 3.6). Esta fase está
caracterizada por la inversión de estructuras extensionales previas, tal como las
observadas en la subcuenca Caracolito, ubicada al sureste de la cuenca La
Blanquilla (Figura 3.11).

YSACCIS (1997) sugiere que en la cuenca La Blanquilla esta fase


transpresiva actúo en menor grado y comenzó después, durante el Mioceno
Medio, en donde se generó fallamiento inverso noreste con vergencia al norte. Es
importante mencionar que esta fase es de carácter local predominantemente al
sur, y que al norte de la plataforma Margarita-Los Testigos durante el Oligoceno –
Mioceno Temprano predomina el régimen extensivo, mientras que al sur de dicho
alto domina el régimen transpresivo, controlado por la convergencia oblicua entre
la placa Caribe y Suramérica.

En la cuenca La Blanquilla, específicamente en el área de Blanquilla Oeste,


durante el Mioceno Medio - Tardío se desarrollaron plegamientos con orientación
OSO-ENE, los cuales presentan una superficie de despegue muy cercana a la
base del Eoceno y estuvieron conectados con el movimiento dextral de la falla
Margarita (Figura 4.5). De manera similar, en la Blanquilla Este, al norte de la isla
de Margarita, se observan pliegues anticlinales con marcada erosión en la
secuencia Mioceno Medio – Tardío?. En base a estas y otras evidencias se puede
aseverar que en general, la cuenca La Blanquilla durante el Mioceno Medio estuvo
caracterizada por transpresión ONO, y que la mayor actividad compresional en
esta cuenca estuvo restringida al Mioceno Medio - Tardío.

En la cuenca Tuy-Cariaco esta fase transpresiva actuó en menor grado que


en la cuenca La Blanquilla. Sin embargo, existe un dominio de un régimen
geológico transpresivo con orientación ONO-ESE, el cual afectó con mayor

Jorham Contreras 38
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

intensidad la región sur de la cuenca Tuy-Cariaco (subcuenca Ensenada de


Barcelona). Adicionalmente, durante el Mioceno Medio, al sur de la Ensenada de
Barcelona, ocurre el emplazamiento de un bloque o terreno ígneo-metamórfico en
la cuenca antepaís, que puede ser contemporáneo con el inicio del “foredeep” en
Maturín (DI CROCE, 1995) y con la deformación de la Serranía del Interior
(CHEVALIER et al., 1995 en YSACCIS, 1997).

En la subcuenca Tuy-Cariaco Norte, los pozos MTC-1X y MTC-4X muestran


contactos discordantes entre la secuencia de edad Eoceno y los depósitos
terciarios más jóvenes suprayacentes, lo cual sugiere un período de erosión post-
eoceno, que podría indicar el levantamiento y exposición de esta secuencia por
efecto de la actividad tectónica en el norte de Venezuela (EVANS, 1982a).

Adicionalmente, en la zona sur de la cuenca Tuy-Cariaco, posiblemente


ocurrió una extensión local, contraria al régimen transpresivo regional, asociada a
las etapas iniciales de la paleofosa de Cariaco, en donde los datos sísmicos
indican posibles unidades delgadas de edad Oligoceno - Mioceno Temprano
(Figura 4.8).

Fase de relleno en el Mioceno Medio

Esta etapa está caracterizada por muy poca actividad tectónica en algunas
áreas, mayormente hacia la cuenca Carúpano (al este de la cuenca La Blanquilla).
Los sedimentos que rellenan estas áreas son de ambiente batial y FURRER (1984
en YSACCIS, 1997) sugiere que la máxima profundidad de las aguas se alcanzó en
esta fase. Para YSACCIS (1997), esto puede estar asociado con la evolución del
sistema convergente al sur, generándose una cuenca retroarco, en donde el arco
está representado en Margarita – Los Testigos y el prisma de acreción e
imbricación por la Serranía del Interior. Para este momento el régimen
transpresivo surcaribeño actúa en la región de Araya-Paria, muy próximo a la isla
de Trinidad.

Jorham Contreras 39
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

En la cuenca La Blanquilla se generan depósitos de ambiente batial a


nerítico medio, con espesores poco significativos. En la cuenca Tuy-Cariaco este
régimen de relleno y subsidencia durante el Mioceno Medio se reconoce en la
subcuenca Tuy-Cariaco Norte por los sedimentos de edad Mioceno Medio. No se
presentan otras evidencias claras de esta etapa, lo que lleva a considerar que
estos episodios de relleno son muy locales y restringidos dentro del marco
compresivo general del Mioceno Medio mencionado con anterioridad. La actividad
tectónica no es muy significativa y obedece al paso lento y constante hacia el este,
de la placa Caribe con respecto a Sudamérica.

Fase transtensional del Mioceno Tardío al Reciente

Esta fase se distingue únicamente en la región este del Caribe, y está


prácticamente restringida a la cuenca Tuy-Cariaco. Se caracteriza por la
predominancia de fallas transcurrentes con orientación este-oeste y fallas
normales de orientación ONO. Este patrón estructural sugiere un cambio en las
condiciones dinámicas de transpresión durante el Mioceno Medio, las cuales
estuvieron orientadas ONO-ESE (YSACCIS, 1997).

Las estructuras regionales que controlan esta fase son los sistemas San
Sebastián – El Pilar, Margarita-Coche-La Tortuga, Coche-Costa Norte y El Pilar /
Casanay-Aguas Calientes, los cuales generan la cuenca “pull-apart” de la Fosa
Cariaco y generan rasgos transtensionales que acentúan las subcuencas de
Cubagua y subcuenca Tuy-Cariaco Norte.

En la cuenca Tuy-Cariaco, el sistema de fallas Coche - La Tortuga es


transtensivo (con el flanco norte deprimido), presenta una orientación noroeste-
sureste en la parte oeste y este-oeste hacia la parte este. Este sistema, en
conjunto con la falla de Margarita, genera hacia el norte de la cuenca Tuy-Cariaco
una fase de régimen transtensivo, que para el Plio-Pleistoceno limitan la
subcuenca “pull-apart” Tuy-Cariaco Norte (YSACCIS, 1997).

Jorham Contreras 40
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

La falla de Margarita presenta orientación noroeste con desplazamiento


dextral. En la zona cercana a la Isla de Margarita presenta un cambio de dirección
este-oeste, similar al sistema Tortuga-Coche. Esta falla estuvo activa durante el
Plio-Pleistoceno. Sin embargo, no se descarta actividad durante el Paleógeno
tardío - Mioceno y se considera responsable de la separación de la cuenca La
Blanquilla en la fase final del Eoceno Tardío y comienzos del Oligoceno.

Hacia el norte de la Isla Cubagua, se observa una falla transcurrente


sinestral, la cual está localizada entre y de manera paralela a las fallas dextrales
de Margarita y la Tortuga-Coche. Esta falla sinestral ha sido llamada Falla
Charagato interpretada como resultado de diferentes tasas de desplazamiento
entre los grandes sistemas paralelos dextrales mencionados anteriormente, con
mayor desplazamiento en el sistema de Coche – La Tortuga.

Al norte, Tuy-Cariaco, La Blanquilla y áreas circundantes son sometidas a


un marco transpresivo durante el Mioceno Temprano - Medio, el cual genera el
plegamiento de los depósitos sedimentarios previos y emplazamiento de
secuencias eocenas y cretácicas sobre la isla de Margarita, lo cual según SPEED
(1985) y PINDELL & BARRETT (1990) ocurre a comienzos del Neógeno y finaliza
antes de la sedimentación de la Formación Cubagua de edad Mio-Plioceno.

Del Mioceno Tardío al Reciente la región caribeña está controlada por un


movimiento en dirección y sentido oeste-este, de tectónica transcurrente dextral
caracterizado por distensión-partición (strain-partitioning). Este régimen está
caracterizado por un dominio transtensional al norte de las costas venezolanas,
controlado por los sistemas de fallas transcurrentes dextrales con dirección este-
oeste y fallas normales con dirección ONO. Al sur de las costas venezolanas, en el
interior de la placa Suramericana, existe un dominio transpresional que origina el
cinturón deformado de la Serranía del Interior y estructuras antepaís asociadas.

Jorham Contreras 41
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

3.3 EVOLUCIÓN ESTRUCTURAL DE LA ISLA DE MARGARITA

El origen de la isla de Margarita ha sido planteado por diversos autores


(PINDELL & DEWEY, 1982; PINDELL et al., 1988, CHEVALIER, 1987; PINDELL &
BARRETT, 1990), quienes mantienen que las rocas ígneo-metamórficas que la
componen han evolucionado desde el Jurásico Tardío junto con el límite sur de la
placa Caribe cuando se encontraba en la zona noroeste de la placa Sudamérica.
Como resultado del movimiento relativo de la placa Caribe hacia el este, han
ocurrido variedad de procesos y regímenes que han determinado la configuración
geológica actual, así como la ubicación y características de los altos estructurales.

3.3.1 Origen y composición del basamento

El origen de la isla de Margarita y el núcleo ígneo-metamórfico que


representa actualmente el basamento está ligado al movimiento relativo de la
placa Caribe hacia el este, el cual ha sido discutido por diversos autores (PINDELL
& DEWEY, 1982; CHEVALIER, 1987; PINDELL et al., 1988; PINDELL & BARRETT, 1990)
quienes postulan una evolución tectónica y geodinámica compleja desde el
Jurasico al Reciente.

En el contexto general del origen de las islas caribeñas y los bloques


metamórficos al norte de Sudamérica, PINDELL et al., (1988) plantea que en la
zona costafuera al norte de Sudamérica se encuentran una serie de bloques alóc-
tonos metamorfizados con afinidad de arco oceánico, tal como Siquisique, Santa
Ana, Villa de Cura, Oeste de Araya, Margarita y Tobago (CASE & MACDONALD,
1973; MARTÍN-BELLIZIA & DE AROZENA, 1972; MARESCH, 1974, cit. OSTOS, 1990). El
metamorfismo de esos cuerpos probablemente ocurrió en el Pacífico durante el
Cretácico (Aptiense - Cenomaniense), en la etapa en que la polaridad de
subducción del protoarco de Las Antillas Mayores se revierte de suroeste a
noreste (OSTOS, 1990; PINDELL & BARRETT, 1990). Ellos fueron emplazados
posteriormente hacia el sur, principalmente sobre sedimentos de plataforma
jurásicos – cretácicos.

Jorham Contreras 42
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

OSTOS (1990), distingue seis bloques alóctonos de origen Jurásico-


Cretácico que fueron evolucionando progresivamente con el margen norte de
Sudamérica. Los bloques de Sebastopol, ofiolita de Loma de Hierro, arco de Tiara,
el Cinturón Villa de Cura, Romeral y Siquisique fueron metamorfizados a partir del
Albiense tardío - Cenomaniense (en concordancia con PINDELL & BARRETT, 1990) y
emplazados en dirección oeste-este a partir del Paleoceno en la región noroeste
de Sudamérica, posterior a la sedimentación en el Albiense tardío de las
formaciones las Mercedes y Tacagua, las cuales fueron igualmente
metamorfizadas. El emplazamiento de estos bloques alóctonos metamórficos
dieron origen a la Cordillera de la Costa, el Grupo Villa de Cura y en parte a la
Serranía del Interior.

En la Cordillera de La Costa de Venezuela, los sedimentos del Grupo


Caracas (Mesozoico) fueron subsecuentemente levantados entre las fallas La
Victoria y San Sebastián (SCHUBERT, 1988 en Ostos, 1990), y separan a Villa de
Cura de la corteza Caribe y otros cuerpos oceánicos a lo largo de la costa. Según
ERLICH & BARRETT (1989), PINDELL, et al. (1988), entre otros, el origen de la isla de
Margarita está estrechamente relacionado con la Cordillera de la Costa,
evidenciado por la semejanzas en las rocas metamórficas, metasedimentarias y
metavolcánicas de ambas regiones. SPEED (1985) señala a partir de los estudios
gravimétricos, podría interpretarse la isla de Margarita como una extensión al
suroeste del arco de las Antillas Menores.

Específicamente en la isla de Margarita, MARESCH (1975, en YSACCIS, 1997)


sugiere que el basamento de la isla de Margarita está constituido de base a tope
por: Grupo La Rinconada, compuesto por rocas volcano-sedimentarias de
probable edad Jurásico, por encima el Grupo Juan Griego constituido por
metamórficas cuarzo-feldespáticas del Cretácico Temprano y finalmente, la
Formación Los Robles unidad volcano-sedimentaria de edad Cretáceo Tardío.

Jorham Contreras 43
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

CHEVALIER (1987), sugiere que el Grupo La Rinconada está compuesto por


rocas de corteza oceánica de edad Cretácico Temprano (asociadas al
magmatismo del frente de las Antillas Menores) y el Grupo Juan Griego formado
por rocas de corteza continental metamórfica paleozoica, los cuales aparentemen-
te están en contacto estructural a través de un despegue milonítico generado
durante el Cretácico Tardío. Ambos grupos están constituidos por rocas que
fueron transportadas desde el oeste durante el movimiento relativo de la placa
Caribe, acrecionando bloques alóctonos y ofiolitas de la corteza pre-mesozoica
consumida durante el movimiento. YSACCIS (1997) en concordancia con CHEVALIER
(op cit.) mantiene que la Formación Los Frailes y el Grupo Los Robles están
asociados a eventos de magmatismo y desarrollo del arco volcánico en el
Cretácico Tardío.

En conclusión, el basamento de la isla de Margarita está constituido por


rocas ígneo-metamórficas de edad Jurásico-Cretácico, alóctonas y parautóctonas,
relacionadas con la Cordillera de la Costa, que han sido transportadas en sentido
oeste-este durante el movimiento de la placa del Caribe, las cuales se encuentran
mezcladas con secuencias ofiolíticas pertenecientes al basamento pre-mesozoico
del protocaribe.

3.3.2 Rasgos estructurales

Las rocas sedimentarias de la isla de Margarita están constituidas por


depósitos turbidíticos eocenos, denominados Formación Pampatar y Grupo Punta
Carnero, los cuales representan el objetivo principal del estudio geológico. La
ausencia del Paleoceno se atribuye a un período de aplanamiento y erosión sobre
el basamento ígneo-metamórfico de la isla de Margarita, aunado a que en las
cuencas caribeñas adyacentes (La Blanquilla y Tuy-Cariaco) no se han datados
sedimentos de esta edad. Suprayacente se observan los depósitos mio-pliocenos
de la Formación Cubagua y pleistocenos de las formaciones El Manglillo y Coche.

Jorham Contreras 44
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

El Grupo Punta Carnero está caracterizado en la parte basal por capas con
alto buzamiento hacia el sur (85º-90º), que decrece hacia el tope de la sección
(30-60º), las cuales localmente cambian de orientación y se atribuye a
deformación estructural postdepositacional. MUÑOZ (1973) plantea un posible
sobrecorrimiento de sur a norte en la sección El Dátil, aunque debido a la litología
predominantemente lutítica, estas evidencias no son tan claras en superficie para
aseverar dicho patrón de corrimiento.

En la sección costera de Punta Mosquito (sector la Isleta), se observan las


mayores evidencias de deformación tectónica, entre las cuales se distinguen fallas
inversas por efecto de esfuerzos compresivos, fallas normales por reajuste
gravitacional en las zonas plegadas en conjunto con patrones de diaclasas. Las
evidencias de plegamiento demuestran de manera similar un alto grado de
deformación, destacándose un anticlinal con rumbo aproximado N 35 E volcado
hacia el norte, asociado a otros pliegues anticlinales y sinclinales de menor escala.

La Formación Pampatar aflora en un gran sinclinal de orientación


aproximada N 70 E, asimétrico con mayor buzamiento en el flanco norte. Al norte
se distinguen estructuras compresivas de fallamiento inverso, y otras menos
relevantes ubicadas al sur, las cuales presentan una orientación aproximada ENE-
OSO y reflejan la dirección perpendicular de los esfuerzos compresivos en la
cuenca a partir del Eoceno.

Las evidencias observadas reflejan el marco compresivo o transpresional


Oligoceno - Mioceno Medio de acuerdo con YSACCIS (1997), o posterior a la se-
dimentación de la secuencia eocena según MUÑOZ (1973), el cual causó el plega-
miento, fallamiento y posibles corrimientos con vergencia hacia al norte, producto
un empuje mayor desde el sur (MUÑOZ, 1973), posiblemente durante el Mioceno.

SPEED (1976), PINDELL & BARRETT (1990), entre otros, mantienen que la
actual región de la isla de Margarita estuvo envuelta en un proceso de colisión

Jorham Contreras 45
GEOLOGÍA ESTRUCTURAL REGIONAL

oblicua contra la placa Sudamericana a partir del Neógeno, y como resultado de


este procesos se produjo el emplazamiento tectónico de sucesiones eocenas y
cretácicas en su actual posición.

La fase de emplazamiento y deformación terminó antes del Mioceno Medio


terminal, evidenciado por la sedimentación de las Formación Cubagua de edad
Mioceno-Plioceno, subhorizontal por encima de la secuencia eocena, la cual
presenta muy pocas evidencias de deformación (CASAS & MORENO, 1986).

Jorham Contreras 46
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

4. ESTRATIGRAFIA REGIONAL

4.1 Generalidades

La secuencia estratigráfica de la región norcentral costafuera de Venezuela


está constituida por rocas de edades Eoceno al Reciente, que descansan sobre un
basamento ígneo-metamórfico Jurásico-Cretácico, constituido por rocas alóctonas
y parautóctonas, de piso oceánico, porciones de corteza continental y volcánicas,
altamente deformadas, metamorfizadas y en parte obductadas, que generan los
pilares tectónicos que conforman las islas caribeñas y parte del cinturón
montañoso al norte de Sudamérica.

Particularmente, la secuencia sedimentaria que aflora en la isla de


Margarita está constituida por rocas que van desde el Eoceno al Reciente, las
cuales descansan sobre un basamento ígneo-metamórfico que presenta afinidad
con las rocas que conforman la Cordillera de la Costa. La isla de Cubagua
presenta una cobertura sedimentaria de rocas más jóvenes, de edad Mioceno al
Reciente, que de igual manera descansa sobre el basamento.

La secuencia eocena de la isla de Margarita, ha sido agrupada en dos uni-


dades litoestratigráficas: el Grupo Punta Carnero y la Formación Pampatar, ambas
depositadas en ambiente marino profundo con características turbidíticas, com-
puestas por alternancias de areniscas, limolitas y lutitas con intervalos conglome-
ráticos basales “wild flysch”. La Formación Cubagua depositada en ambiente de
plataforma a batial durante el Mio-Plioceno, descansa discordantemente sobre los
depósitos turbidíticos y está cubierta por las formaciones El Manglillo y Coche de
edad Pleistoceno, de ambientes marino somero y continental, respectivamente.

En el subsuelo, en las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco, la secuencia


sedimentaria está conformada por depósitos del Eoceno al Reciente, de
ambientes batiales que se hacen más someros hacia el tope, donde se observan
mayormente depósitos de plataforma y nerítico interno.

Jorham Contreras 47
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

4.2 ISLA DE MARGARITA

La isla de Margarita se encuentra ubicada a 23 Km de la costa nororiental


de Venezuela, entre las coordenadas 63º30’ y 64º30’ latitud oeste, 10º30’ y 11º30’
latitud norte, con una superficie de 934 km2. Está conformada por las penínsulas
Macanao y Paraguachoa, constituidas por un núcleo ígneo-metamórfico que
representa los mayores altos topográficos y unidas por el istmo La Restinga.
Alrededor de los mismos se observa la cobertura sedimentaria, mayormente del
Cuaternario, que decrece en espesor hasta el nivel del mar. Se distingue hacia la
parte sur y sureste la secuencia terciaria (Eoceno) que alcanza un espesor de
1.500 m y conforma cerros de hasta 80 m de altitud.

Los afloramientos estudiados de la secuencia eocena cubren un área total


alrededor de 100 Km2 y están ubicados, al este, en la región de Pampatar, y al
sureste, en las localidades de Las Bermúdez – El Manglillo y Punta Mosquito
(Figura 4.1). El estudio de estos depósitos representa el objetivo principal de este
trabajo, los cuales fueron correlacionados con los depósitos de subsuelo en las
cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco.

PAMPATAR
LAS BERMÚDEZ –
EL MANGLILLO

PUNTA
MOSQUITO

FIGURA 4.1. Mapa geológico de la isla de Margarita. Tomado de CHEVALIER (1987)

Jorham Contreras 48
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

4.2.1 BASAMENTO Y ESTRATIGRAFÍA DEL CRETÁCICO

La descripción de la secuencia cretácica y los depósitos sedimentarios


eocenos y mio-pliocenos en la isla de Margarita, se realizó a partir del CIEN
(2002), Léxico Estratigráfico Electrónico de Venezuela.

4.2.1.1 Grupo Juan Griego Jurásico – Cretácico (Barremiense-Aptiense)

Consideraciones históricas: HESS & MAXWELL (1949) introdujeron este


nombre para designar a un conjunto de rocas metamórficas de origen ígneo y
sedimentario, expuestas en la región septentrional y occidental de la isla de
Margarita, distinguiendo centro del grupo, una división cuarzosa inferior y una
división de las rocas verdes, superior.

JAM & MÉNDEZ (1962), separaron en forma definitiva las dos divisiones de
HESS & MAXWELL (op cit.); denominaron Grupo de los Esquistos Verdes a la unidad
inferior, y restringieron el término Juan Griego, a la división cuarzosa de los
autores anteriores. GONZÁLEZ DE JUANA (1968) indicó que este cambio está basado
en el distinto origen de las rocas, ígneo para las rocas verdes y sedimentario
clástico para el Grupo Juan Griego.

VIGNALI (1979) propone una subdivisión diferente del Grupo Juan Griego.
Según este autor, está constituido por una unidad feldespática basal y una unidad
no feldespática en la parte superior.

CHEVALIER (1987) divide el grupo en cuatro unidades, e incluye dentro del


mismo, como unidad superior, a los Mármoles de El Piache, considerado por los
autores anteriores como integrante del Grupo Los Robles.

Jorham Contreras 49
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Localidad tipo: En el sector oriental de la isla de Margarita, donde se


encuentra la localidad tipo, los afloramientos forman una faja irregular que se
extiende desde los accesos occidentales de La Asunción, por el este, hasta el
cerro La Guardia y Punta María Libre, al sur de Juan Griego, por el oeste, y
limitando al sur con el macizo de El Copey. El grupo aflora también en los cerros
de Tetas de María Guevara, al sur de La Restinga, y en Macanao, donde abarca la
mayor parte de la zona montañosa de la península.

Descripción Litológica: El Grupo Juan Griego está constituido por rocas de


origen sedimentario metamorfizadas a la facies de los esquistos verdes. Los
principales litotipos que lo integran, son gneises cuarcíticos, gneises y esquistos,
cuarzo-feldespáticos, esquistos cuarzo-micáceos, esquistos grafitosos, esquistos
granatíferos y cuarcitas. JAM & MENDEZ (1962) mencionan además, litotipos de
menor representación, tales como esquistos clorítico-epidóticos y conglomerados,
y CHEVALIER (1987) señala la presencia de anfibolitas. Modernamente se incluye
en el tope del grupo, a los Mármoles Masivos de El Piache.

La secuencia presenta una estructuración compleja; ha sido subdividida en


unidades, proponiéndose diversas secuencias estratigráficas:

TAYLOR (1960) dividió al Grupo Juan Griego en tres unidades: 1) un


intervalo basal o de esquistos cloríticos, que consideró concordante sobre las
Anfibolitas de Paraguachí, constituido esencialmente, por esquistos cloríticos con
alto contenido de clorita (> 20%) y menor cantidad de muscovita, granates, cuarzo
y albita; 2) una unidad feldespática intermedia, constituida por gneises y mica-
esquistos, cuarzo feldespáticos, y algunos lentes de mármol bandeado; y 3) una
unidad superior integrada por esquistos grafitosos, con intercalaciones de
esquistos micáceos y con capas de cuarcitas impuras. VIGNALI (1979) y CHEVALIER
(1987) no reconocen la unidad basal de esquistos cloríticos.

Jorham Contreras 50
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

En la península de Paraguachoa, CHEVALIER (1987) divide al Grupo Juan


Griego en cuatro unidades. La unidad basal, cuarzo feldespática, contiene
anfibolitas asociadas, derivadas posiblemente de lavas básicas y tobas. Sigue
hacia arriba una unidad mica-esquistosa carbonatada, con mármoles en capas
delgadas. Este intervalo está cubierto por esquistos grafitosos con intercalaciones
de esquistos micáceos y de cuarcitas en la base. La unidad superior, es la Forma-
ción El Piache, constituida por mármoles masivos. La estratigrafía del grupo en la
Península de Macanao sería similar, excepto por la ausencia de la unidad superior

Espesor: No se han medido ni estimado espesores del grupo; TAYLOR


(1960) estima un espesor de 1.200 m para su unidad feldespática y de 500 m para
la unidad de esquistos grafitosos. Sin embargo, considerando el carácter
litodémico de esta secuencia, es posible que estas cifras no correspondan a
verdaderos espesores de sedimentación.

Contactos: JAM & MENDEZ (1962), GONZÁLEZ DE JUANA (1968) y MARESCH


(1973), consideran que el grupo yace sobre rocas volcánicas del Grupo La
Rinconada, que TAYLOR (1960) postuló como contacto transicional. Para VIGNALI
(1979), las rocas del Grupo La Rinconada están intercaladas dentro de la sección.

CHEVALIER (1987) señala que la Formación El Piache, unidad del tope del
grupo, está cubierta discordantemente por la Formación Los Robles o sobrecorrida
por el Complejo meta-ofiolítico de Paraguachí.

Edad: La unidad se asigna al Jurásico-Cretáceo Temprano (Barremiense-


Aptiense), por correlación regional. Es equivalente a la Formación Manicuare, de
la Península de Araya, y probablemente al Grupo Caracas.

Paleoambientes: La sección fue depositada en ambiente de plataforma del


paleomargen continental de Sudamérica (CHEVALIER, 1987).

Jorham Contreras 51
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

4.2.1.2 Formación Los Robles Cretácico (Cenomaniense)

Consideraciones históricas: Este nombre es publicado por primera vez en


esta obra, para designar la unidad pelítica superior del antiguo Grupo Los Robles
el cual quedó restringido a esta sola unidad, al excluir del mismo a la Formación El
Piache. Como integrante del grupo, la secuencia había sido denominada
Formación El Cauca (GONZÁLEZ DE JUANA et al., 1980), pero se prefiere el término
Los Robles, por su mayor antigüedad y difusión.

Localidad tipo: La formación está expuesta en el extremo sur y sureste de la


Isla de Margarita, en los cerros y colinas ubicados entre las poblaciones de
Porlamar, Atamo y Los Robles. Los mejores afloramientos se encuentran en la fila
de El Cauca, al este de la carretera Porlamar-Guatamare.

Descripción litológica: GONZÁLEZ DE JUANA et al. (1980) distinguen dos


secuencias dentro de la unidad. La secuencia inferior es pelítica, representada por
filitas cuarzo-sericítico-cloríticas, que se van haciendo más calcáreas hacia el
contacto con la Formación El Piache, infrayacente. La sección forma suelos de
color verde-amarillento y pardo-rojizo, lo que la hace fácilmente distinguible de la
secuencia superior, que meteoriza en color gris blanquecino a gris amarillento.
Esta última está representada por esquistos cuarzo-micáceo-cloríticos, con
plagioclasa, epídoto y sericita, y en menor proporción, por cuarcitas micáceo-
epidóticas y algunos metaconglomerados cuarzo-albíticos.

Espesor: TAYLOR (1960) estimó un espesor mínimo de 2.000 m para el


antiguo Grupo Los Robles. Considerando que el espesor de la Formación El
Piache es reducido, el de la Formación Los Robles debe ser similar.

Extensión geográfica: La unidad aflora también en el flanco occidental del


cerro Matasiete, en el sector meridional de las Tetas de María Guevara y en la
parte septentrional de la península de Macanao.

Jorham Contreras 52
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Contactos: La unidad sobreyace a la Formación El Piache en contacto


transicional. En ausencia de esta unidad, se ha observado un contacto tectónico
con el Grupo Juan Griego. GONZÁLEZ DE JUANA et al. (1980), indican que la parte
superior de la formación, está cubierta por aluvión y sedimentos terciarios.

Fósiles: La fauna encontrada en esta formación, se limita a escasos


ejemplares de Hebergella sp. provenientes de mármoles expuestos cerca de la
Punta La Lavandera, en la Península de Macanao.

Edad: La edad determinada a esta formación, en base a su escasa fauna,


es Cretáceo medio, probablemente Cenomaniense. CHEVALIER (1987) considera
que la edad de esta secuencia puede extenderse hasta el Turoniense.

Correlación: La unidad se correlaciona con la Formación Laguna Chica de


la península de Araya-Paria. Presenta también semejanzas litológicas con las
formaciones Carúpano y Tunapui, de esa misma región.

Paleoambientes: Las rocas sedimentarias que dieron origen a esta


secuencia, fueron depositadas en ambiente de plataforma en el paleomargen
continental de Sudamérica (CHEVALIER, 1987).

4.2.1.3 Formación Los Frailes Cretácico Tardío (Maestrichtiense)

Consideraciones históricas: El nombre formacional fue publicado


originalmente por RIVERO (1956), quien menciona un informe inédito de GONZÁLEZ
DE JUANA, donde éste describe una formación cretácea de volcánicas intermedias,
ftanitas negras y radiolaritas que afloran en la isla Los Frailes, y que denomina
Formación Los Frailes. JAM & MÉNDEZ (1962) describen el pequeño afloramiento
de Punta Gorda, isla de Margarita, y mencionan como localidad tipo, la isla Puerto
Real del archipiélago Los Frailes, sin indicar el autor de tal designación. GONZÁLEZ

Jorham Contreras 53
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

DE JUANA (1968) cita de nuevo la formación, como fuente sedimentaria del Grupo
Punta Carnero. MOTICSKA (1972) realiza un estudio petrográfico detallado del
archipiélago Los Frailes, y menciona el levantamiento geológico efectuado con
anterioridad por BALDA (1961) y la descripción petrográfica hecha por BELLIZZIA
(1961), ambas contribuciones inéditas. SANTAMARÍA & SCHUBERT (1974) efectúan
una determinación geocronológica en una diabasa del archipiélago.

Localidad tipo: En el centro de la ensenada sureste de la isla Puerto Real, la


mayor del archipiélago Los Frailes, a unos 13 Km al noreste de Puerto Fermín
(JAM & MÉNDEZ, 1962). Basado en un conocimiento más detallado de las islas,
MOTICSKA (1972) propone como una localidad tipo la isla La Peña, en el extremo
suroriental del archipiélago.

Descripción litológica:

a) Archipiélago Los Frailes: el archipiélago está constituido esencialmente


por tobas volcánicas estratificadas, de sedimentación submarina y una secuencia
de coladas basálticas, localmente almohadilladas; este conjunto se halla
profusamente invadido e intrusionado por basaltos y diabasas toleíticas. De base a
tope se reconocen tobas cristalinas afaníticas, estratificadas y hasta de 10 m de
espesor, a las que sigue una delgada capa de tobas líticocristalinas de grano fino.
Las tobas fueron sucesivamente cubiertas por coladas de espesor variable (hasta
10 m) de basaltos. Estas unidades estratiformes fueron inicialmente intrusionadas
por gruesos sills y diques de diabasa toleítica, que son las rocas más frecuentes
en las islas. El evento ígneo final, es el emplazamiento de potentes diques
verticales de diabasas gabroides, que alcanzan espesores de hasta 20 m.

b) Punta Gorda, isla de Margarita: la unidad se compone de una


intercalación de ftanitas con rocas volcánicas efusivas y con tobas, que fueron
invadidas por diques subvolcánicos. De base a tope, se reconocen tres unidades
litológicas: una ftanita de color gris a negro, laminada, en capas de menos de 1 m

Jorham Contreras 54
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

de potencia, con un espesor total de 3 ó 4 m; se le considera la roca no


metamorfizada más antigua de Margarita. Siguen 8 ó 9 tobas interestratificadas
con coladas de traquiandesitas y andesitas porfídicas holocristalinas, de color
verde oscuro, moteado de puntos blancos y con delgadas capas de chert negro. El
tope de la unidad está constituido por una brecha delgada de fragmentos
angulares cementados por material piroclástico. En el archipiélago no se han
descrito estas ftanitas.

Ambiente tectónico y petrogénesis: El archipiélago de Los Frailes, el Grupo


de Los Testigos, la isla La Sola, la porción de la Formación Los Frailes en
Margarita y posiblemente los diques de rocas subvolcánicas en Macanao, forman
una línea de actividad volcánica fisural contemporáneo de tipo básico y, aunque el
arco volcánico de las Antillas Menores de Sotavento, parece formar la continua-
ción natural de esa línea, su actividad volcánica es posterior (MOTICSKA, 1972).

"La intercalación de ftanitas y rocas volcánicas (en Margarita) sugiere la


ocurrencia de erupciones volcánicas submarinas de carácter periódico, asociadas
con el depósito de sedimentos originados por la precipitación coloidal de material
silíceo, probablemente de origen orgánico" (JAM & MÉNDEZ , 1962).

Contactos: En el archipiélago de Los Frailes, la base de la formación yace


por debajo del nivel del mar, y su tope ha sido erosionado. En la Isla de Margarita,
el contacto inferior no está expuesto, pero se supone que yazca discordantemente
sobre el complejo basal metamórfico. La Formación Punta Carnero, cuyo mayor
volumen de guijarros en los conglomerados, proviene de la Formación Los Frailes
(TAYLOR, 1960). Aquí se midió un espesor remanente de 14 m.

Extensión geográfica: Todo el archipiélago Los Frailes y en Punta Gorda


(Albufera de Guacuco) costa oriental de la isla de Margarita. MOTICSKA (1972)
sugiere que los diques de rocas subvolcánicas que afloran en Macanao pudiesen
pertenecer a esta actividad ígnea.

Jorham Contreras 55
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Edad: SANTAMARÍA & SCHUBERT (1974) determinaron una edad K/Ar de 66 (+


5.1) M.a. en la roca total de una diabasa de la isla Los Frailes. Anteriormente, se le
había asignado una edad del Cretáceo Tardío, en vista de que, por una parte, el
evento volcánico es posterior al metamorfismo regional de la isla de Margarita
(Cretáceo medio-Tardío) y, por la otra, es anterior a la sedimentación del Grupo
Punta Carnero (Eoceno Temprano a Medio), en cuya parte inferior, en la
Formación Las Bermúdez, se describen clásticos gruesos provenientes de la
Formación Los Frailes. No se han encontrado fósiles en los sedimentos silíceos de
esta formación.

Correlación: La formación ha sido correlacionada con la Formación Knip de


Curazao, compuesta por jaspes, ftanitas, tobas y diabasas (PALOMBO, 1950 en JAM
& MÉNDEZ, 1962). Estos autores también la correlacionan con las formaciones
Querecual y La Luna, ambas del Cretáceo medio. GONZÁLEZ DE JUANA (1968) la
comparó además con los "chert" de la Formación San Antonio. MOTICSKA (1972)
sugirió una correlación con las volcánicas del archipiélago de Los Testigos.

4.2.2 SECUENCIA SEDIMENTARIA

4.2.2.1 Formación Pampatar

Consideraciones históricas: Este nombre fue introducido por


MUÑOZ (1973), quien señaló que las diferencias en litología y características
sedimentarias justifican el tratamiento de esta secuencia como una unidad
separada del Grupo Punta Carnero.

Localidad tipo: Como sección tipo de la formación se ha establecido la que


aflora en el área de Agua de Vaca - Punta Gorda - Salinas de Pampatar, al norte -
noreste de la ciudad de Pampatar.

Jorham Contreras 56
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Descripción litológica: La sección tipo de la unidad está expuesta en el


flanco norte de un sinclinal, con eje este-oeste. Comienza con un olistolito de
ftanita en capas finamente estratificadas y laminadas, de unos 15 m de espesor,
seguido por conglomerados de guijarros en matriz lutácea y por capas gruesas,
gradadas, de conglomerados a areniscas, grauwacas de grano grueso y fino. Los
conglomerados, incluso los que se encuentran gradados, exhiben mala selección
de tamaño. La composición de los fragmentos es heterogénea, predominando los
de rocas volcánicas extrusivas, cuarzo y ftanita. El resto de la sección está
constituido por alternancias de areniscas grauwacas y lutitas, interrumpidas hacia
la parte inferior por un intervalo de unos 100 m de espesor, de lutitas arenosas
marrones, con bloques exóticos (mayormente olistolitos calcáreos) e intercalacio-
nes finas de limolitas y areniscas grauwáquicas; las lutitas y limolitas de este
intervalo, poseen fractura astillosa característica. En toda la sección, son comunes
las estructuras primarias de deslizamiento.

La formación presenta cambios locales de facies que se expresan en


diferencias litológicas. Es así como en el flanco sur del sinclinal, la base de la
unidad está constituida por conglomerados polimícticos, seguidos por un intervalo
turbidítico de capas gruesas de grauwacas y calcarenitas de grano grueso, con
estructuras de deslizamiento, relleno de canales y estratificación cruzada. La
secuencia sigue con conglomerados rellenando canales y un intervalo finamente
estratificado de grauwacas, limolitas y lutitas, carente de secuencias turbidíticas,
que pasa gradualmente a una secuencia monótona recurrente de grauwacas y
lutitas intercaladas, de carácter turbidítico, ocasionalmente con estructuras
primarias de deslizamiento.

Espesor: MUÑOZ (1973) estima un espesor de 1.000 m en la sección tipo.

Extensión geográfica: La unidad aflora en el extremo oriental de la isla de


Margarita, en los alrededores de la ciudad de Pampatar, desde bahía de Moreno
por el sur, hasta la laguna de Agua de Vaca por el norte.

Jorham Contreras 57
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Contactos: La secuencia yace en contacto discordante sobre la Formación


Los Robles. El tope de la secuencia está truncado por erosión, o cubierto por
aluviones recientes.

Fósiles: La fauna de la Formación Pampatar es escasa. Sin embargo, entre


los microfósiles encontrados, MUÑOZ (1973) menciona Globigerina sp.,
Discocyclina sp, Operculinoides sp, Eoconuloides sp. y Globorotalia sp, además
de micromoluscos, fragmentos de equinoideos y algas (Lithothamnium sp). En los
conglomerados de Punta Moreno se han encontrado macromoluscos como
Turritella sp. y Ostrea sp. y restos de pelecípodos. El contenido faunal de esta
formación se considera mezclado y retrabajado por corrientes de turbidez.

Edad: Eoceno Medio?.

Correlación: La facies de flysch arenoso de la Formación Pampatar es un


equivalente lateral del flysch calcarenítico del Grupo Punta Carnero. Es también
comparable con la sección eocena del subsuelo de la isla de Cubagua y, en su
parte basal, con los conglomerados de grano grueso encontrados en el subsuelo
de la subcuenca de Cubagua, en el margen continental de Venezuela. Ha sido
correlacionada también con las formaciones Caratas de Venezuela oriental, Paují
y Mene Grande del occidente de Venezuela y Navet de Trinidad (Figura 4.2).

Paleoambientes: La sección se depositó en ambiente marino profundo, en


condiciones de pronunciada inestabilidad tectónica.

Jorham Contreras 58
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

FIGURA 4.2. Tabla de correlación estratigráfica en la región costafuera de Venezuela


CASTRO & MEDEROS (1984, en CIEN, 2002)

4.2.2.2 Grupo Punta Carnero

Consideraciones históricas: La sección del Eoceno de la Isla de


Margarita, fue descrita por GONZÁLEZ DE JUANA (1947), con el nombre de Grupo
Punta Carnero, sugiriendo una subdivisión tripartita del mismo, que fue publicada
por RIVERO (1956, Léxico Estratigráfico de Venezuela) bajo los nombres de
Formación Las Bermúdez, Formación El Dátil y Formación Punta Mosquito. No
obstante, HESS & MAXWELL (1949) emplearon el rango de formación, de igual
forma que KUGLER (1957) y TAYLOR (1960), se refirieron al intervalo como

Jorham Contreras 59
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Formación Punta Carnero. JAM & MÉNDEZ (1962) aceptaron la nomenclatura de


RIVERO (1956) y describieron las unidades en detalle.

BERMÚDEZ & GÁMEZ (1966) resumieron la literatura previa y añadieron


importantes datos paleontológicos, y GONZÁLEZ DE JUANA (1968) analizó el grupo y
sus formaciones en detalle. MUÑOZ (1973) realizó un estudio sedimentológico
detallado de esta secuencia, asignándole rango de formación y restringiendo el
término a los afloramientos del área de Punta Carnero - Punta Mosquito.
GONZÁLEZ DE JUANA et al. (1980) aceptaron esta restricción, excluyendo del Grupo
Punta Carnero, los afloramientos del Eoceno de la región de Pampatar.

En la actualidad la secuencia eocena de la isla de Margarita está constituida


por el Grupo Punta Carnero en los afloramientos de Punta Mosquito y Las
Bermúdez - El Manglillo (Punta Carnero) y la Formación Pampatar en la región del
mismo nombre ubicada hacia el este.

Localidad tipo: Se encuentra en el área de Las Bermúdez - El Manglillo, al


oeste del aeropuerto Internacional Santiago Mariño, norte de Punta Carnero,
Municipio Lares, distrito Díaz del estado Nueva Esparta.

Espesor: GONZÁLEZ DE JUANA (1947) atribuyó al grupo un espesor de 1.100


m, en tanto que MUÑOZ (1973) indica un espesor total de 1.250 m para el Grupo
Punta Carnero en la localidad tipo.

Contactos: El grupo suprayace discordantemente a esquistos de la


Formación Los Robles, o ftanitas y andesitas de la Formación Los Frailes. Su
contacto superior es discordante, debajo de la Formación El Manglillo o de
aluviones recientes.

Paleoambientes: Muñoz (op cit.)señala que fue depositado en un ambiente


marino profundo, de mar abierto, bajo un régimen tectónico inestable.

Jorham Contreras 60
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Correlación: La secuencia se correlaciona con la Formación Pampatar, del


extremo oriental de la isla de Margarita, con la Formación Caratas de Venezuela
oriental, con la Formación Tigrillo del subsuelo de la cuenca de Carúpano y con la
sección del Eoceno del subsuelo en las cuencas Tuy-Cariaco y La Blanquilla. Se
considera también equivalente a las formaciones Navet de Trinidad, y Scotland y
Oceanic de Barbados (Figura 4.2).

Formación Las Bermúdez

Representa la zona basal del Grupo Punta Carnero, de acuerdo con MUÑOZ
(1973). Las Bermúdez se caracteriza por un arreglo caótico de fragmentos de
diferentes tamaños (desde bloques a tamaño arena), de variada composición,
embebidos en una matriz lutácea deformada. Las calizas de Los Bagres,
consideradas por GONZÁLEZ DE JUANA (1947, 1968) como un desarrollo arrecifal
local, son interpretadas como olistolitos de arrecifes complejos del Paleoceno y
Eoceno Temprano, deslizados a la cuenca en el Eoceno Medio. En base a esta
descripción, la Formación Las Bermúdez, podría ser clasificada como un
olistostromo. El resto de la formación presenta un carácter rítmico recurrente a lo
largo de toda la sección estratigráfica, caracterizada por una alternancia de calizas
bioclásticas (biocalcarenitas, grauwacas calcáreas, biocalcilimolitas, biocalcilutitas
moteadas), que constituyen la litología distintiva de la unidad, con lutitas pelágicas.

La unidad consiste principalmente de conglomerados de composición y


textura muy heterogénea, con intercalaciones de lutitas y areniscas mayormente
verde oliva y marrón, sobre una secuencia basal finamente estratificada de
areniscas calcáreas, glauconíticas y grauwáquicas. Fragmentos blanco - grisáceos
de calizas arrecifales coralinas y algáceas, conocidos como Caliza de Los Bagres,
son comunes en toda la sección. Los conglomerados, generalmente de color rojizo
y marrón, están constituidos por fragmentos de cuarzo, rocas volcánicas
andesíticas, ftanita, calizas, diorita, otras rocas ígneas y grauwacas. Los

Jorham Contreras 61
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

elementos tienen tamaño desde más de un metro de diámetro hasta tamaño


arena.

La unidad presenta carácter de flysch salvaje (wildflysch); su rasgo distintivo


es el arreglo caótico de diferentes unidades litológicas, como conglomerados
polimícticos, paraconglomerados de guijarros en lodo, brechas de fragmentos de
calizas arrecifales y capas de areniscas - grauwacas, todo en lo que parece ser
una matriz general lutácea. Los fragmentos de la Caliza Los Bagres, cuyo
contenido fosilífero indica una edad Paleoceno o Eoceno Temprano, se
consideran elementos alóctonos deslizados a la cuenca, por procesos de
deslizamiento submarino (MUÑOZ, 1973). La disposición caótica de las distintas
litologías, se refleja en manchas irregulares de diferentes colores en superficie.

Espesor: Se ha estimado en 450 m. En su tope, pasa transicionalmente a la


facies de flysch normal y calcarenítica del primer nivel de orbitoides, del Grupo
Punta Carnero.

Contactos: El contacto basal es discordante sobre los esquistos de la


Formación Los Robles de edad Cretácico.

Contenido paleontológico: Refleja una mezcla tanto ecológica como crono-


lógica, aunque se estima que la sedimentación tuvo lugar en el Eoceno Medio.

Correlación: Es equivalente a la parte basal de la Formación Pampatar, de


Margarita oriental, y presenta similitud con los conglomerados de grano grueso, de
edad Eoceno, encontrados en el subsuelo de la subcuenca de Cubagua, en el
margen continental de Venezuela. Ha sido correlacionado también con la
Formación Caratas, del oriente de Venezuela, y parcialmente con las formaciones
Navet y Lizard Springs, de Trinidad.

Jorham Contreras 62
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Caliza Los Bagres (informal)

En el Cuadro de Correlación del Primer Congreso Venezolano del Petróleo


(Soc. Venez. Ing. Petrol., 1963), Los Bagres aparece como miembro basal de la
Formación Las Bermúdez, criterio que fue seguido por GONZÁLEZ DE JUANA (1968).
La localidad tipo de la unidad está en la sección del Grupo Punta Carnero, que
aflora a gran distancia de la localidad de Los Bagres. HESS & MAXWELL (1949)
describieron una caliza conglomerática, con cantos de rocas ígneas y volcánicas.
TAYLOR (1960) mencionó una arenisca basal, areniscas líticas, ortocuarcitas duras
y calizas de color gris oscuro, finamente cristalinas, con una proporción variable de
fragmentos cristalinos y restos de algas, en gran parte reemplazados por calcita
negra, con un espesor total de 30 metros máximo.

La unidad es discordante sobre el Grupo Los Robles. Según GONZÁLEZ DE

JUANA (1968), su carácter muy lenticular ha confundido a algunos autores, que han
planteado una discordancia entre la caliza y la Formación Las Bermúdez.

BERMÚDEZ & GÁMEZ (1966) mantienen que el contenido faunal encontrado


no permite establecer una edad definitiva, señalando que la edad Cretácico
postulada por DALLMUS (1947) es muy dudosa. La edad Oligoceno asignada por
KUGLER (1957), basada en el contenido de corales estudiados por WELLS (1957)
también es discutible. La consideración más aceptada es que es una bioherma o
caliza arrecifal dentro de la Formación las Bermúdez, con una edad dudosa del
Eoceno Temprano.

Jorham Contreras 63
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Formación El Dátil

La parte basal de la sección está constituida por limolitas gris - verdoso y


areniscas calcáreas gris y lutitas calcáreas, con algunas intercalaciones de calizas
con orbitoides y una capa de aproximadamente 35 m de espesor que marca el
contacto basal (KUGLER, 1957). Hacia la parte superior, predominan las lutitas de
color gris claro que meteorizan a amarillo, con intercalaciones de areniscas de
grano fino, calcáreas. El intervalo contiene también cristales de yeso y
concreciones ferruginosas elipsoidales y discoidales, de color rojizo a purpúreo.

MUÑOZ (1973) indica que la secuencia es un flysch calcarenítico, constituido


por una alternancia monótona de calizas bioclásticas (biocalcarenitas,
biocalcilimolitas, biocalcilutitas) y lutitas pelágicas, con algunas intercalaciones de
grauwacas calcáreas. Hacia la parte inferior de la sección, la estratificación es más
gruesa y con mayor proporción de biocalcarenitas de color gris. Hacia la parte
superior, la estratificación es más fina, con predominio de lutitas, biocalcilimotitas y
biocalcilutitas de color amarillento.

Espesor: En la sección tipo el espesor del intervalo es de 720 m.

Contactos: La base de la unidad es transicional sobre la Formación Las


Bermúdez. Hacia el tope, pasa transicionalmente a la Formación Punta Mosquito.

Edad: La sección ha sido asignada al Eoceno Medio, zonas de


Globigerapsis kugleri y Globorotalia lehneri (BERMÚDEZ & GÁMEZ, 1966). JAM &
MENDEZ (1962) señalan que las especies Guembelina goodwini, Nonion micrus y
Bolivina taylori son características del Eoceno Medio. MUÑOZ (1973) considera que
toda la sección es turbidítica, y que gran parte de la fauna es redepositada, y
asigna la secuencia al Eoceno Medio tardío - Zona de Truncorotaloides rohri en
base a la fauna contenida en lutitas que parecen ser realmente pelágicas, no
redepositadas.

Jorham Contreras 64
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

El conjunto floral de la base y parte media de la formación de edad Eoceno


Medio, limite entre las zonas NP15 y NP16 de MARTINI (1971), zonas de
Chiphragmalithus alatus y Discoaster tani nodifer. PERCH-NIELSEN (1985) ubica la
muestra en la zona de Nannotetrina fulgens, que incluye la zona NP15 y la base
de NP16. En la parte superior el conjunto floral indica una edad comprendida entre
el Eoceno Medio y el Tardío, zonas NP16 y NP20 de MARTINI (1971), zonas de
Discoaster tani nodifer y Sphenolithus pseudoradians (CASTRO, 1997).

Correlación: El intervalo es equivalente a parte de la Formación Pampatar, y


posiblemente a la sección eocena presente en el subsuelo de la isla de Cubagua.
Correlaciona también con parte de la Formación Caratas en oriente.

Formación Punta Mosquito

La base de la unidad está integrada por calizas orbitoidales grises,


arenosas, en capas de hasta un metro de espesor, resistentes a la erosión,
intercaladas con lutitas arenosas, capas delgadas de arenisca laminada calcárea y
lentes conglomeráticos. En la parte superior, predominan lutitas y limolitas oscuras
laminadas, micáceas y ocasionalmente ligníticas, con intercalaciones de areniscas
finas, color gris - verdoso, frecuentemente calcáreas; esporádicamente se
presentan capas delgadas de caliza arenosa orbitoidal. GONZÁLEZ DE JUANA et al.
(1980), indican que la Formación Punta Mosquito representa una facies más
clástica que El Dátil, infrayacente. MUÑOZ (1973) considera que la secuencia
aflorante en Punta Mosquito es una facies de flysch calcarenítico, muy similar a la
del Grupo Punta Carnero, en el área de Las Bermúdez - El Manglillo. De acuerdo
a este autor, en Punta Mosquito, la sección está constituida por capas gruesas de
calizas arrecifales bioclásticas, de grano muy grueso, intercaladas con lutitas
pelágicas y biocalcilutitas laminadas; varios intervalos presentan numerosas
estructuras de deslizamiento intraformacional.

Jorham Contreras 65
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Localidad tipo: La sección tipo se encuentra en Punta Mosquito, en la costa


sur de la isla de Margarita, al sur de la laguna Las Marites, 7 km al suroeste de
Porlamar, Distrito Mariño, estado Nueva Esparta.

Espesor: JAM & MÉNDEZ (1962) y GONZÁLEZ DE JUANA et al. (1980) señalan
un espesor mínimo de 425 m, debido a ya que el tope está truncado por erosión.

Extensión geográfica: La sección aflora en el área de Las Marites y al


noroeste de El Manglillo, en la sección al oeste del aeropuerto Santiago Mariño.
Contactos: La unidad suprayace transicionalmente a la Formación El Dátil.
Su contacto superior es discordante bajo las formaciones Cubagua y El Manglillo,
o bajo aluviones recientes.

Edad: BERMÚDEZ & GÁMEZ (1966) indican que la sección corresponde a la


Zonas de Truncorotaloides rohri, del Eoceno Medio. Hacia la base, el conjunto
floral indica una edad Eoceno Tardío, entre las zonas NP18 y NP20, zonas de
Chiasmolithus oamaruensis y Sphenolithus pseudoradians de MARTINI (1971). En
el tope, el conjunto floral presente es del Eoceno Tardío parte más tardía, zona
NP20, Zona de Sphenolithus pseudoradians de MARTINi, 1971; (CASTRO, 1997).

Correlación: La sección es equivalente a parte de la Formación Pampatar,


del extremo oriental de la isla de Margarita, y posiblemente, a la sección del
Eoceno encontrada en el subsuelo de la isla de Cubagua. Ha sido correlacionada
también con la Formación Caratas del oriente de Venezuela, y con las forma-
ciones Paují y Mene Grande de Venezuela occidental, y con la Formación Navet
de Trinidad.

Jorham Contreras 66
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

4.2.2.3 Formaciones Cubagua y El Manglillo

Las series mio-pliocenas de la Península de Paraguachoa, agrupadas bajo


el término de Formación Cubagua, representan las antiguas Formaciones La
Guica (BERMÚDEZ, 1966) y la Tejita. Por encima de estas, aflora discordantemente
la Formación El Manglillo de edad Pleistoceno temprano (HUNTER, 1978).

Con un espesor de 45 m, la Formación Cubagua yace con una discordancia


angular sobre las series del Eoceno Medio y por encima del basamento
metamórfico mesozoico (CHEVALIER, 1987). Un conglomerado basal de tres metros
de espesor, compuesto principalmente de guijarros de cuarzo y esquistos,
comienza esta serie de capas marinas transgresivas. La columna continúa con
areniscas y lutitas calcáreas y finaliza con margas fosilíferas. Sin embargo, en la
sección tipo ubicada en el Cañon de La Caldera, Isla de Cubagua, alcanza los 70
m de espesor.

HUNTER (1978) reconoce la zona de Neogloboquadrina dutertrei del


Mioceno Tardío en la Formación Cubagua. Esta edad fue confirmada por la
presencia de Globorotalia acostaensis (MACSOTAY, 1987).

La Formación El Manglillo está compuesta principalmente por margas


impuras y conchíferas, localmente coralinas, moderadamente fosilíferas y arenas
arcillosas grisáceas mal consolidadas, localmente conglomeráticas, y en general
abundantes cambios laterales de facies. Presenta un espesor máximo de 4 m
(MACSOTAY & MOORE, 1974). La localidad tipo está definida en las cercanías del
caserío El Manglillo, cercana a la sección de la Formación Punta Carnero al oeste
del aeropuerto Santiago Mariño.

Jorham Contreras 67
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

4.3 CUENCA LA BLANQUILLA

4.3.1 Generalidades

Se encuentra al norte del alto La Tortuga y noroeste de la plataforma


Margarita-Los Testigos, con una orientación noreste-suroeste. Presenta una
extensión de 650 Km aproximadamente y un área alrededor de los 35.000 Km2
(YSACCIS, 2000). La cobertura sedimentaria tiene un espesor mayor a los 6 Km,
con edades que van desde el Paleógeno al Reciente y se interpreta en contacto
discordante sobre el basamento ígneo-metamórfico mesozoico (FEO CODECIDO,
1977). Esta cuenca ha sido dividida en La Blanquilla Oeste (también definida por
algunos autores como Cuenca La Tortuga) y La Blanquilla Este, las cuales están
separadas por la falla de Margarita de orientación noroeste-sureste (Figura 4.3).

La Blanquilla Este se extiende desde la falla transcurrente de Margarita al


oeste de la isla La Tortuga, hacia el noreste de la isla de Margarita y al sur de la
isla La Blanquilla, continuando hacia la cuenca de Granada al noreste, con la cual
estuvo relacionada (YSACCIS, 1997). Presenta una extensión de 450 Km y un área
de aproximadamente 25.000 Km2. La Blanquilla Oeste se extiende desde la falla
de Margarita, al este, hacia el Alto la Tortuga al oeste y continua hasta la cuenca
de Bonaire, con un área aproximada de 10.000 Km2.

En la Cuenca La Blanquilla han sido perforados pozos que revelan


condiciones favorables para la generación de hidrocarburos a partir de las rocas
madres de edad Eoceno-Oligoceno. Además, la interpretación sísmica indica la
existencia de trampas estructurales de gran importancia, reforzadas por la
evolución geodinámica planteada para esta cuenca según diversos autores
(EVANS, 1982a; GODDARD, 1986; BLANCO & GIRALDO, 1992), por lo cual su interés
económico ha aumentado considerablemente a partir de los estudio geológicos
recientes.

Jorham Contreras 68
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

4.3.2 Secuencia sedimentaria

La Cuenca La Blanquilla presenta una cobertura sedimentaria con un


espesor mayor a los 6 km, compuesta por rocas de edades Paleógeno al
Reciente, que descansan sobre un basamento ígneo-metamórfico cretácico. A tra-
vés de la sísmica se han distinguido cinco unidades principales (YSACCIS, 1997):
Eoceno, Oligoceno, Mioceno, Plioceno y Cuaternario. EVANS (1982) identifica en el
pozo MTC-2X de La Blanquilla una columna casi continua desde Eoceno Medio al
Reciente.

Eoceno

Se presenta en la Cuenca La Blanquilla, en la parte norte de la Cuenca Tuy-


Cariaco y en la subcuenca Cubagua. En La Blanquilla Oeste está caracterizado
por lutitas monótonas de aguas profundas (batial inferior), con lentes de areniscas
y calizas (HAAK 1980). El pozo MTC-2X, perforado al norte del Alto La Tortuga,
muestra 2.451’ (747 m) de lutitas hacia la base (13.950’ - 16.401’), en donde los
primeros 1.301’ (397 m) de la zona basal corresponden a sedimentos del Eoceno
Medio y los 1.150’ (350 m) superiores fueron datados del Eoceno Tardío en base a
la fauna planctónica (DURÁN et al., 2002). Están cubiertos de manera concordante
por lutitas del Oligoceno (Figuras 4.4, 4.5 y 4.9).

En la Blanquilla Este los depósitos eocenos no han sido reportados en base


a las perforaciones realizadas hasta la actualidad, sin embargo podrían estar
contenidos en la unidad paleógena interpretada en base a la data sísmica por
encima del basamento (Figuras 4.6 y 4.8).

Oligoceno

En la cuenca La Blanquilla Oeste consiste en una secuencia monótona de


lutitas calcáreas de ambiente batial con lentes ocasionales de calizas (EVANS,
1983), con espesores de 3000’ (915 m) aproximadamente, que se extienden de

Jorham Contreras 69
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

manera concordante sobre la secuencia eocena (Figuras 4.4 y 4.5). DURÁN et al.
(2002) en el pozo MTC-2X subdividen la secuencia en Oligoceno Temprano
(13950’ – 11.500’) y Oligoceno Tardío (11.500’ – 10.850’).

En la cuenca La Blanquilla Este el pozo PMN-1X ha perforado una


secuencia de edad Oligoceno (Figura 4.8), a la cual HAAK (1980) y EVANS (1982a,
1983) asignan un espesor de 2.530’ (771 m), caracterizada por lutitas grises
claras, con foraminíferos pláncticos indicativos de un ambiente marino profundo.
En estudios recientes DURÁN et al. (2002) consideran el Oligoceno con un espesor
de 4.000’ (1.220 m), el cual dividen en: Oligoceno Tardío (8.000’ – 11.150’),
Oligoceno Temprano (11.150’ – 12.000’) y un intervalo de edad indeterminada a
partir de 12.000’ hasta la profundidad final de 12.354’.

Mioceno

El Mioceno presenta amplia distribución dentro de las cuencas La Blanquilla


y Tuy-Cariaco, y ha sido reconocido en todos los pozos perforados hasta la
actualidad. El Mioceno Temprano se ha identificado únicamente en la cuenca La
Blanquilla y está caracterizado por lutitas limosas con intercalaciones de areniscas
de grano fino a grueso en la base, con esporádicas calizas. Dichas areniscas han
sido interpretadas por HAAK (1980) y EVANS (1982a, 1983) como depósitos
turbidíticos de aguas profundas, de facies distal, los cuales están por debajo de
lutitas de ambientes batial superior a nerítico externo, pasando hacia el tope a una
secuencia de areniscas embebidas en lutitas, interpretadas como una secuencia
de plataforma (DURÁN et al., 2002). En la Cuenca La Blanquilla Este (pozo PMO-
2X) se distingue una secuencia de ambiente batial, con un espesor de 4.810’
(1.466 m; 7940’ – 12.768’), constituida por arcilitas con areniscas delgadas y
fragmentos metamórficos hacia la base. Suprayacente se encuentra de manera
discordante la secuencia pliocena.

Jorham Contreras 70
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

El Mioceno Medio se ha datado únicamente en la cuenca La Blanquilla, (en


los tres pozos, MTC-2X, PMO-2X y PMN-1X) y consiste de lutitas con intervalos
limolíticos y escasas areniscas de grano fino. Presenta un carácter regresivo,
pasando de ambiente batial en la base a un dominio nerítico externo hacia el tope
(HAAK, 1980; DURÁN et al., 2002).

El Mioceno Tardío en la Blanquilla Oeste descansa sobre el ciclo anterior, y


consiste de intercalaciones de lutitas con escasas areniscas de grano fino depo-
sitadas en ambiente batial superior a nerítico externo en el tope (HAAK, 1980;
EVANS, 1983; DURÁN et al., 2002). Hacia La Blanquilla Este el Mioceno Tardío está
ausente, y el Mioceno Medio (pozo PMN-1X) o Mioceno Temprano (pozo PMO-
2X) están en contacto discordante con el Plioceno suprayacente.

Plioceno - Cuaternario

Se caracteriza por lutitas calcáreas de ambiente nerítico interno a medio


con abundantes fragmentos de conchas (YSACCIS, 1997). En algunos casos se
observa erosión en la parte basal de la sección, originando que los depósitos del
Plioceno Tardío o Cuaternario estén discordantes sobre la unidad Mioceno. El
Cuaternario se caracteriza por una litología muy homogénea, constituida por lutitas
monótonas con abundantes restos de conchas depositadas en un ambiente
nerítico medio a interno (EVANS, 1983).

Jorham Contreras 71
Jorham Contreras

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
FIGURA 4.3. Ubicación de las cuencas sedimentarias en la región costafuera de Venezuela
72

Tomado de YSACCIS et al. (2000)


CUENCA LA BLANQUILLA OESTE
Jorham Contreras

MTC-2X

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
50 Km

FIGURA 4.4. Sección sísmica SO-NE, Cuenca La Blanquilla Oeste.


Tomado de YSACCIS et al. (2000)
73
CUENCA LA BLANQUILLA OESTE
Jorham Contreras

Alto de La Orchila Alto de La Tortuga


NO SE

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
50 Km

FIGURA 4.5. Sección sísmica NO-SE, Cuenca La Blanquilla Oeste.


Tomado de YSACCIS et al. (2000)
74
CUENCA LA BLANQUILLA ESTE
Jorham Contreras

Alto de Margarita
OESTE ESTE

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
50 Km

FIGURA 4.6. Sección sísmica E-O, Cuenca La Blanquilla Este.


Tomado de YSACCIS et al. (2000)
75
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

4.4 CUENCA TUY-CARIACO

4.4.1 Generalidades

Está ubicada al sur de la Cuenca La Blanquilla y se extiende en dirección


aproximada suroeste-noreste , desde la depresión de Santa Lucía (alto Tuy) al sur,
hasta las islas de Margarita y La Tortuga al norte (Figura 4.3). Está comprendida
entre la Cordillera de la Costa y la Serranía del Interior al sur, las islas de
Margarita y La Tortuga al norte, con una extensión de 120 Km aproximadamente y
un área de 20.000 Km2, de los cuales la mayor parte está cubierta por las aguas
del mar Caribe. Al igual que en La Blanquilla, la columna estratigráfica está
conformada por rocas de edad Paleógeno al Reciente, discordantes sobre el
basamento ígneo-metamórfico de edad Cretácico Tardío.

Los pozos perforados al sureste de la isla La Tortuga y cercanos a la isla de


Cubagua, revelan características favorables para la generación y acumulación de
hidrocarburos. Aún cuando está separada de La Blanquilla, el patrón estructural y
geodinámico es común. Particularmente en el pozo CMA-1X, EVANS (1982a, 1983)
correlaciona parte de la secuencia con el Grupo Punta Carnero en Margarita.

Tal como se señaló con anterioridad, la cuenca Tuy-Cariaco está


conformada por cuatro provincias estructurales: subcuenca Tuy-Cariaco Norte,
subcuenca Cubagua, fosa Cariaco y subcuenca Ensenada de Barcelona, la cuales
presentan diferencias en las edades y características del relleno sedimentario
(Figura 4.7).

4.4.2 Secuencia sedimentaria

Según YOUNG et al. (1956) las rocas más antiguas que bordean la cuenca
están representadas por las rocas ígneas y metamórficas de la Cordillera de la
Costa, del Complejo metamórfico de Araya-Paria y las ígneo-metamórficas de las

Jorham Contreras 76
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

islas Margarita y Coche. En el flanco norte de la Serranía del Interior, en la


ensenada inferior del Tuy, afloran rocas cretáceas alóctonas, de los grupos
Guayuta y Santa Anita y al este de El Guapo; en la misma región, aparecen rocas
parautóctonas y alóctonas cretáceas y paleoceno-eocenas deformadas. La
secuencia sedimentaria autóctona que caracteriza la cuenca está constituida por
depósitos de edad Mioceno al Reciente de ambientes costeros a fluviodeltaicos.

La secuencia sedimentaria de subsuelo en la mayor parte en la cuenca Tuy-


Cariaco, se caracteriza por sedimentos de edad Mioceno al Reciente, a excepción
de la subcuenca Cubagua, donde se ha perforado una secuencia de edad
Eoceno-Oligoceno (?).

YSACCIS (1997) en base a la interpretación sísmica, sugiere por encima del


basamento la existencia de un intervalo de edad Paleógeno, con amplia
distribución en las subcuencas Cubagua y Tuy-Cariaco Norte (Figuras 4.8, 4.9,
4.10 y 4.11), el cual solo fue perforado por el pozo CMA-1X (subcuenca Cubagua);
adicionalmente, en la subcuenca Tuy-Cariaco Norte, los pozos MTC-1X y MTC-4X
atraviesan una secuencia de calizas eocenas, las cuales han sido interpretadas
como bloques retransportados (BLANCO & GIRALDO, 1992). En la subcuenca
Ensenada de Barcelona los depósitos del Eoceno - Oligoceno están ausentes,
encontrándose rocas de edad Mioceno Tardío al Reciente. En la fosa de Cariaco
se ha interpretado en base a la sísmica, posibles secuencias delgadas del
Oligoceno – Mioceno Temprano, seguidas de rocas plio-pleistocenas de gran
espesor (Ysaccis, op cit.).

Eoceno-Oligoceno

En la subcuenca Tuy-Cariaco Norte se ha registrado únicamente en dos


pozos (MTC-1X y MTC-4X), en donde se caracteriza por bloques retransportados
de calizas con abundantes fragmentos de algas, corales y foraminíferos grandes,
con intervalos de lutitas calcáreas, que han permitido identificar dos intervalos:

Jorham Contreras 77
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

una sección inferior de lutitas de aguas profundas intercaladas con calizas


recristalizadas y una sección superior caracterizada por calizas de plataforma de
aguas someras (packstones y wackstones) con abundantes algas, corales y
macroforaminíferos. Ambas secciones, superior e inferior, son de edad Eoceno
Medio y presentan un espesor entre 500 y 900’ (150 - 275 m).

En el pozo MTC-1X, ubicado 30 Km al este del Alto La Tortuga (cuenca


Tuy-Cariaco Norte), se perforó ésta secuencia de calizas y lutitas entre 10.500’ –
11.395’,de donde se extrajo un núcleo entre 10.613’ y 10.721’, correspondiente a
la unidad de calizas de plataforma (sección superior) descrita con anterioridad.
Este cuerpo de calizas ha sido interpretado por BLANCO & GIRALDO (1992) como un
bloque de edad Eoceno Medio, proveniente de un ambiente marino somero,
transportado y redepositado en un ambiente marino profundo. Está en posición
vertical y presenta alta concentración de estilolitas que señalan una compleja
historia de presión-solución producto de intenso tectonismo, que complementaría
los postulados de YSACCIS (1997) sobre una etapa de compresión y tectonismo
local en esta región. Este cuerpo de calizas ha sido correlacionado por HAAK
(1980) con las calizas de Punta Mosquito en Margarita, clasificadas de manera
similar como packstones de algas y orbitoides (Lepidocyclina sp, Discocyclina sp,
Amphistegina sp) del Eoceno Medio.

El cambio abrupto de un ambiente batial en la sección inferior de calizas y


lutitas, a un ambiente de plataforma marina somera en la sección superior de
calizas arrecifales, según YSACCIS (1997) refleja una discordancia, la cual ha sido
atribuida a levantamiento por efecto de un leve marco compresivo local, durante la
etapa “rift” Eoceno – Mioceno Temprano.

Las perforaciones en la subcuenca Cubagua (pozo CMA-1X), muestran que


el relleno sedimentario comienza con depósitos clásticos, de grano grueso,
estériles, muy fracturados y plegados, con un espesor de 2.030’ (619 m; 10.020’-
12.050’) depositados en un ambiente turbidítico (GODDARD, 1986). En base a su

Jorham Contreras 78
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

similitud con el Grupo Punta Carnero en la isla de Margarita (EVANS, 1982a)


asigna una edad Eoceno Medio(?). Por encima de estos sedimentos, se encuentra
una secuencia de 3.600’ de espesor (1.096 m; 6.420’ - 10.020’), constituida por
areniscas de grano grueso a medio, que pasan hacia la base (a partir de 8.780’
hasta 10.020’) a lutitas moteadas, no fosilíferas, sedimentadas en un ambiente
continental a marino somero durante el Oligoceno(?) (EVANS, 1983).

En el pozo CUBAGUA-1 se observa hacia la base una secuencia de lutitas


moteadas de ambiente batial y edad Eoceno Medio, con un espesor de 476’
(145 m, no totalmente perforado) la cual ha sido correlacionada con la Formación
El Dátil del Grupo Punta Carnero, en la isla de Margarita. Suprayacente se
observa una secuencia de 1.066’ (325 m) de espesor, compuesta por lutitas
intercaladas con areniscas, las cuales EVANS (1982) asigna al Oligoceno(?) en
base a su posición estratigráfica, infrayacente a los sedimentos del Mioceno.

Sin embargo, BLANCO & GIRALDO (1992) mantienen que las evidencias
sísmicas en la subcuenca Cubagua señalan una sola unidad por debajo de la
unidad Mioceno, deformada y fallada, interpretada como el relleno de una cuenca
tipo “rift” formada posiblemente durante el Eoceno - Oligoceno, y que acumula
más de 20.000’ (6.098 m) en la parte más profunda del “graben”, al sur del pozo
CMA-1X. EVANS (1982) propone la existencia de dos secuencias, una eocena y
otra oligocena, mientras que la símica muestra una sola secuencia fallada, tal
como lo sugieren BLANCO & GIRALDO (1992).

Finalmente podemos decir que la secuencia Eoceno-Oligoceno está


presente en la subcuenca Cubagua, en la cual se caracteriza por depósitos
turbidíticos. En la subcuenca Tuy-Cariaco Norte es muy limitada e irregular
(bloques de calizas retransportados), en el área de la Ensenada de Barcelona está
ausente y en la fosa de Cariaco sensu stricto se interpretan posibles unidades
delgadas del Oligoceno – Mioceno Temprano, YSACCIS (1997) (Figura 4.8).

Jorham Contreras 79
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

Mioceno

El Mioceno Temprano y Mioceno Medio en el subsuelo de la cuenca Tuy-


Cariaco no ha sido reportado, y únicamente se presenta en afloramientos de las
islas de Margarita, Cubagua, Coche y Península de Araya. La sección sedimen-
taria se compone de lutitas y algunas areniscas poco consolidadas y pobremente
estratificadas, definidos como Formación Cubagua (YOUNG et al., 1956).

En el valle inferior del Tuy, los sedimentos del Mioceno Medio están
representados por la Formación Aramina, constituidos por un conglomerado basal,
calizas impuras con fragmentos de esquitos, lutitas y areniscas limosas,
pobremente consolidadas con abundantes microfósiles marinos que indican una
edad Mioceno Medio. La Formación Cumaca se considera equivalente lateral y
está constituida por lutitas y areniscas verdosas, que contienen ejemplares de
gasterópodos de aguas dulces. Estos depósitos descansan discordantemente
(discordancia angular) sobre las rocas metamórficas del Grupo Caracas, en el
borde noreste de la ensenada inferior del Tuy y sobre el Paleoceno-Eoceno y
Cretáceo en el lado sur y sureste de la Ensenada de Barcelona.

El Mioceno Tardío en la subcuenca Tuy-Cariaco Norte se caracteriza por


depósitos estériles depositados en un ambiente fluviomarino, compuestos por
areniscas y conglomerados, en contacto discordante sobre el Eoceno y el
basamento, pasando hacia el tope a lutitas de ambiente más profundo, nerítico
medio a externo, que podrían considerarse equivalentes a la Formación Cubagua
(EVANS, 1982). Hacia la subcuenca Cubagua, el Mioceno Tardío está compuesto
por lutitas de ambiente batial (TALUKDAR & BOLÍVAR, 1982 en YSACCIS, 1997),
pasando hacia el sur a un ambiente nerítico medio a interno, y en la ensenada de
Barcelona está caracterizado por lutitas limosas y areniscas depositadas en un
complejo deltaíco discordantes sobre un basamento metamórfico (YSACCIS, 1997).

Jorham Contreras 80
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

En la cuenca del Tuy el Mioceno Tardío está representado por la Formación


Tuy, cuya sección más completa se encuentra en la depresión de Santa Lucía. Su
sección basal consiste de un conglomerado compuesto de fragmentos angulares y
sub-angulares de rocas metamórficas, denominado Miembro Pichao; luego sigue
una sección de lutitas, limolitas, arcilitas y areniscas "sal y pimienta". El espesor
máximo de la Formación Tuy es de unos 1.970‘ (600 m). La formación descansa
en forma discordante (discordancia angular) sobre rocas ígneas y metamórficas
del grupo Caracas; en la parte baja de la sub-cuenca del Tuy al sur, parece
descansar discordantemente sobre las formaciones Cumaca y Aramina, aunque
este contacto ha sido cubierto por la Formación Guatire. Los fósiles son escasos y
no diagnósticos, el ambiente depositacional es de aguas dulces a salobres. La
Formación Tuy está restringida a la depresión de Santa Lucía y a la ensenada
inferior del Tuy.

Plioceno

Durante el Plio-Pleistoceno se sedimenta el mayor espesor de la cobertura


en la cuenca Tuy-Cariaco, el cual disminuye hacia el sur, pero en la parte norte
alcanza los 3.500 m de sedimentos acumulados en un ambiente batial a nerítico
interno (GODDARD, 1986), compuestos por intercalaciones de lutitas, areniscas de
grano fino y limolitas. En la fosa de Cariaco se interpreta un espesor de 4.100 m
de sedimentos de edad similar, implicando una tasa de sedimentación
relativamente rápida de 1 mm/año durante los últimos 5 M.a. (YSACCIS, 1997).

Los sedimentos del Plioceno de la Formación Cubagua que afloran en la


península de Araya y en las islas de Coche, Cubagua, Margarita y Tortuga, se
componen de lutitas, arcillas, gravas y areniscas pobremente consolidadas. En los
sondeos de Cubagua (CUBAGUA-1 y 2) se encontró una sección de aproximada-
mente 75’ (23 m) de espesor, formada por arcillas, areniscas de grano fino
arcillosas poco consolidadas y calizas limosas escasas, muy similar a las reporta-

Jorham Contreras 81
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

das en las zonas adyacentes de la Ensenada de Barcelona y subcuenca Tuy-


Cariaco Norte (EVANS, 1983).

En el Valle del Tuy, los sedimentos pliocenos de la Formación Guatire están


bien expuestos en la depresión de Guatire, descansan discordantemente sobre el
basamento metamórfico y están formados por conglomerados y areniscas mal
consolidadas, arcilitas y arcillas limosas, con un espesor de unos 1.310‘ (400 m).
Más al oeste, en la depresión de Santa Lucía, descansan sobre la Formación Tuy
(Mioceno Tardío), y debido a su carácter transgresivo descansan sobre rocas
metamórficas y sobre las formaciones Cumaca y Aramina en la ensenada inferior
del Tuy al sur. El ambiente depositacional es de aguas dulces a salobres; los
fósiles son gasterópodos de agua dulce y foraminíferos redepositados del Mioceno
(YOUNG et al., 1956).

Cuaternario

En la cuenca Tuy-Cariaco los depósitos cuaternarios del subsuelo fueron


reportados en todos los pozos, presentado espesores entre 1000’ y 2.000’
(305 -610 m). Están compuestos por una secuencia monótona de arcillas plásti-
cas depositadas en ambiente nerítico, con abundantes fragmentos de conchas. Se
presentan areniscas intercaladas, de grano fino y bien escogidas (EVANS, 1983).

Los sedimentos pleistócenicos y recientes que afloran, están constituidos


por arenas, arcillas, conglomerados y areniscas muy poco consolidadas, que en el
valle inferior del Tuy forman mesas tabulares, algunas hasta de 328’ (100 m) de
espesor, mientras que en las islas y regiones costaneras generalmente forman
terrazas (YOUNG et al. 1956).

Jorham Contreras 82
ESTRATIGRAFÍA REGIONAL

ERA
PERÍODO

FIGURA 4.7. Tabla de correlación en la zona costafuera de Venezuela.


Tomado y modificado de BLANCO & GIRALDO (1992)

Jorham Contreras 83
SUBCUENCAS LA BLANQUILLA ESTE Y TUY-CARIACO
Jorham Contreras

Fosa de Cariaco Subcuenca Tuy-Cariaco Norte Cuenca La Blanquilla Este


SO MTC-4X PMO-2X PMN-1X NE

FALLA DE MARGARITA

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
50 Km

FIGURA 4.8. Sección sísmica NE-SO, cuencas La Blanquilla Este – Tuy-Cariaco.


Tomado de YSACCIS et al. (2000)
84
SUBCUENCAS LA BLANQUILLA OESTE Y TUY-CARIACO NORTE
Jorham Contreras

Cuenca La Blanquilla Oeste Alto La Tortuga Subcuenca Tuy-Cariaco Norte


MTC-2X

OESTE ESTE

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
50 Km

FIGURA 4.9. Sección sísmica E-O, subcuencas La Blanquilla Oeste – Tuy-Cariaco Norte.
Tomado de YSACCIS (1997)
85
Jorham Contreras

SUBCUENCA TUY-CARIACO NORTE

MTC-1X

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
50 Km
50 Km
FIGURA 4.10. Sección sísmica NO-SE, subcuenca Tuy-Cariaco Norte.
Tomado de YSACCIS (1997)
86
Jorham Contreras

SUBCUENCA CUBAGUA

CMA-1X
SUR NORTE

5 Km

ESTRATIGRAFÍA REGIONAL
50 Km

FIGURA 4.11. Sección sísmica N-S, subcuenca Cubagua.


Tomado de GODDARD (1986)
87
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5. GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

El objetivo del levantamiento geológico realizado en las zonas de Pampatar


y Las Bermúdez - El Manglillo, es establecer la correspondencia de los depósitos
turbidíticos que afloran en ambas áreas, a través del estudio sedimentológico y
estratigráfico, muestreo y validación de los datos geológicos reportados en
trabajos anteriores. Asimismo se pretende establecer las características y facies
presentes en cada una de estas áreas, así como las posibles fuentes de
sedimentos, en base a la utilización de los diagramas de DICKINSON & SUCZEK
(1979), para posteriormente plantear un modelo sedimentológico depositacional de
esta secuencia y su correlación con los depósitos eocenos ubicados en el
subsuelo de las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco.

La secuencia turbidítica que aflora en la isla de Margarita ha sido


reconocida por WALL en 1860, posteriormente RUTTEN (1940) le asigna edad
Eoceno en base al contenido de orbitoides y GONZÁLEZ DE JUANA (1947), con la
participación de estudiantes de la Escuela de Geología de la U.C.V., le asigna a la
sección ubicada al oeste el nombre de Grupo Carnero, el cual divide en tres
unidades, que en orden estratigráfico ascendente son Formación Las Bermúdez,
Formación El Dátil y Formación Punta Mosquito.

Posteriormente MUÑOZ (1973) a diferencia de GONZÁLEZ DE JUANA (op cit.),


distingue dos formaciones, Pampatar que aflora en el extremo sureste de la Isla de
Margarita en la zona con ese mismo nombre y Punta Carnero, que aflora más al
oeste, en el área cercana al aeropuerto Las Bermúdez-El Manglillo y en el sector
La Isleta (Figura 5.1). Cada una presenta características bien definidas, ambas
son de edad Eoceno medio y consideradas equivalentes (Figura 5.2).

Jorham Contreras 88
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

VENEZUELA

64º
ISLA DE MARGARITA

11º

Mioceno - Plioceno
PAMPATAR

Eoceno
LAS BERMÚDEZ
EL MANGLILLO
Cretácico PUNTA MOSQUITO

Ver figura 5.3

FIGURA 5.1 Ubicación de los afloramientos estudiados en la Isla de Margarita

FORMACIÓN MIEMBRO DESCRIPCIÓN FORMACIÓN DESCRIPCIÓN


Calizas orbitoidales en la base, con
Punta lutitas y areniscas calcáreas. Hacia Hacia la base contac-
Mosquito el tope predominan limolitas y lutitas to con un olistolito de
(425 m) calcáreas intercaladas con arenis- ftanitas y areniscas
Punta cas calcáreas y lutitas pelágicas tobáceas cretácicas,
Carnero Capas delgadas de limolitas y seguida de ortocon-
El Dátil areniscas calcáreas, con algunas Pampatar glomerados y por
(1250 m) (720 m) calizas orbitoidales. Luego predomi- encima wacas, are-
nan las lutitas fosilíferas con esca- (1000 - 1600 m) niscas conglomerá-
sas areniscas calcáreas delgadas. ticas y lutitas. En la
Lutitas, algunas arenosas, intercala- parte intermedia y to-
Las ciones de conglomerados lenti- pe se caracteriza por
Bermúdez culares heterogéneos embebidos en intercalaciones monó-
(450 m) matriz lutácea. tonas de areniscas y
Caliza Los Bagres: Caliza arrecifal lutitas con esporádi-
lenticular, rica en corales y cas calizas.
foraminíferos de 40 m de espesor.

FIGURA 5.2. Tabla esquemática de correlación en el Flysch de Margarita.


Unidades definidas por MUÑOZ (1973).

Jorham Contreras 89
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.1 ESTRATIGRAFÍA DE LA ISLA DE MARGARITA

5.1.1 Formación Pampatar

Los afloramientos de esta unidad se ubican al este de la isla,


específicamente en secciones aisladas alrededor de la población de Pampatar.
Presenta un espesor compuesto aproximado de 970 m (sección tipo, localidad
Punta Gorda, flanco norte del sinclinal) y de 1.150 m (flanco sur del sinclinal).
CASAS & MORENO (1986) sugieren en base a secciones y cortes geológicos, un
espesor de 1600 m para esta formación. MUÑOZ (1973) estima en la sección tipo
un espesor de 1000 m, similar a los 970 m estimados en el presente trabajo para
esta localidad.

Las secciones más representativas se muestran en la Figura 5.3a, las


cuales de manera general representan facies más clásticas que las del Grupo
Punta Carnero y consisten de areniscas intercaladas con lutitas y limolitas, con
niveles conglomeráticos locales y esporádicas calizas. En la sección tipo la
secuencia descansa sobre ftanitas y areniscas tobáceas cretácicas de la
Formación Los Frailes.

5.1.1.1 Unidades Estratigráficas

La Formación Pampatar aflora en secuencias aisladas al este de la isla de


Margarita. La sección tipo está ubicada en la localidad de Punta Gorda, al norte de
la población de Pampatar, con un espesor de 780 m, donde se observan cambios
de facies a lo largo de la columna estratigráfica, que permiten subdividir esta
formación en dos unidades estratigráficas informales.

Jorham Contreras 90
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

PUNTA
GORDA

Salinas
11°

CAMPIARE

MORRO PUNTA
PAMPATAR EL VIGÍA BALLENA

PUNTA MORENO
10 Km

FIGURA 5.3 a. Ubicación de los afloramientos de la Formación Pampatar

FM. LAS
BERMÚDEZ

Manglares
LAGUNA
FM. EL DÁTIL LAS
MERITES

AEROPUERTO
FM. PUNTA
MOSQUITO

LA ISLETA

PUNTA
64° 20 Km MOSQUITO

FIGURA 5.3 b. Ubicación de los afloramientos del Grupo Punta Carnero

LEYENDA

Mioceno Eoceno Cretácico Discordancia Vías

Jorham Contreras 91
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Unidad I: Unidad de areniscas y conglomerados


Localidad Punta Gorda
Localidad Punta Moreno

Unidad II: Unidad de areniscas y lutitas


Localidad Punta Gorda – Salinas de Pampatar
Localidad Punta Moreno
Localidad Punta Ballena
Localidad Pampatar
Localidad Morro el Vigía
Localidad Campiare

Unidad I: Unidad de areniscas y conglomerados

Aflora en parte basal de la sección de Punta Gorda con un espesor de 190


m (localidad tipo, ubicada al sur del Complejo Turístico LagunaMar). Consta de
ortoconglomerados polimícticos (clasificación PETTIJOHN, 1975) con matriz arenosa
y sin estratificación (Figura 5.4), intercalados con areniscas, mayormente
lenticulares que no sobrepasan los 50 cm. Los clastos son principalmente
fragmentos metamórficos, identificados por CASAS & MORENO (1986) como
metadacitas, dacitas y metandesitas. Esta unidad descansa discordantemente
sobre la Formación Los Frailes de edad Cretáceo, caracterizada por ftanitas y
areniscas tobáceas, de color gris oscuro a negro, muy deformada y diaclasada.

Esta unidad conglomerática caótica ha sido interpretada como una


secuencia “wild flysch” similar a la Formación Las Bermúdez del Grupo Punta
Carnero, caracterizada por presentar bloques conglomeráticos y capas lenticulares
de areniscas embebidas en una matriz lutitico arenosa.

Jorham Contreras 92
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

FIGURA 5.4

Conglomerados basales
en la localidad de Punta
Gorda.
Rumbo de la foto S 50 W.
Orientación de las capas
N 85 E 45S.

En la localidad de Punta Moreno, de manera similar, la unidad consta de


areniscas y ortoconglomerados polimícticos con matriz arenosa pobremente
escogida. Presenta un espesor de 60 m y, al igual que en Punta Gorda, no
presentan estratificación. El contacto basal no es observable, el mismo se
encuentra bajo la línea de costa. Composicionalmente los conglomerados están
constituidos por fragmentos de roca tipo chert, sedimentarios preexistentes,
volcánicas y metamórficas, identificadas por CASAS & MORENO (1986) como
andesitas, meta-andesitas, tonalitas, granodioritas, metareniscas, etc.

Esta unidad ha sido interpretada como una secuencia “wild flysch” y


representa el relleno de cañones submarinos. En estas áreas los sedimentos son
transportados como flujos gravitacionales de alta energía soportados por granos,
desde las zonas someras hasta zonas más profundas de abanico medio a externo.
Las condiciones de alta energía está favorecidas por la pendiente y la presencia
de material más fino y fluido, que genera corrientes de turbidez representadas por
las intercalaciones arenosas. La similitud en la composición de los clastos
observados en ambas localidades sugiere una fuente de aporte en común, asocia-
da a un prisma de acreción y arco magmático del complejo de subducción de las
Antillas Menores en la zona caribeña, que durante el Cretácico Tardío - Eoceno
estuvo emergido y representa una fuente de aporte de este tipo de fragmentos

Jorham Contreras 93
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

para la cuenca eocena, tal como lo plantea el modelo de SPEED (1985), CHEVALIER
(1987) y PINDELL & BARRETT (1990), para la evolución de la isla de Margarita y la
sedimentación profunda de la secuencia flysch eocena en una posible cuenca
retroarco.

Unidad II: Unidad de areniscas y lutitas

Esta unidad descansa suprayacente a la unidad de areniscas y


conglomerados y se identificó tanto en la Formación Pampatar como en el Grupo
Punta Carnero. Las secciones más representativas de esta unidad en la
Formación Pampatar están ubicadas en las localidades de Punta Gorda, Punta
Moreno, Punta Ballena, Morro el Vigía y Campiare. En el Grupo Punta Carnero,
está unidad se reconoce en el tope de la sección del aeropuerto y en la costa de
Punta Mosquito, localidad La Isleta.

Está constituida por intercalaciones de areniscas y lutitas, localmente


limolíticas con esporádicas calizas y niveles conglomeráticos. En base a sus
características sedimentológicas y estratigráficas puede ser dividida en tres
intervalos: basal, medio y superior.

Intervalo Basal

Se caracteriza por areniscas de grano medio a grueso intercaladas con


lutitas y esporádicos intervalos conglomeráticos. Las areniscas representan un
60 – 80% de la secuencia, son de color gris claro y meteorizan a pardo, presentan
un espesor entre 40 cm y 1 m; frecuentemente se observan capas con base
erosiva y también capas estratificadas que pueden alcanzar los 2,5 m de espesor.

Este intervalo aflora en las localidades de Punta Gorda y Punta Moreno.

Jorham Contreras 94
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Localidad Punta Gorda – Salinas de Pampatar

La unidad presenta un espesor aproximado de 590 m, en parte cubierto por


las Salinas de Pampatar. De base a tope se identifican los siguientes intervalos:

.- Lutitas estériles con capas lenticulares de areniscas. Espesor 300 m.


.- Lutitas intercaladas con areniscas masivas de grano grueso, las cuales se
van incrementando progresivamente hasta conformar un 70% de la secuencia.
Espesor 70 m.
.- Cubierto, salinas de Pampatar. Espesor calculado 80 m.
.- Intercalaciones de areniscas y lutitas en proporciones casi equivalentes,
con espesores individuales entre 1cm y 1 m. Las areniscas pueden formar
paquetes de hasta 8 m de espesor. Espesor 140 m.

Las areniscas son de color gris claro, algunas con tonalidad más oscura y
en general meteorizan a pardo, de granulometría predominante media a gruesa y
se observan cambios laterales de espesor, entre 10 y 80 cm. Las lutitas son de
color gris, bastante friables, con espesores variables entre 1cm y 1 m, que se
incrementan observándose paquetes lutítico-arenosos de hasta 10 m.

Las estructuras sedimentarias se presentan en las capas de areniscas,


siendo las más comunes estratificación gradada, laminación y estratificación
paralela, rizaduras, huellas de carga (Figura 5.5), laminación convoluta y
laminación cruzada festoneada (secuencia Ta-b, Ta-c y Tb-d de BOUMA, 1962). Se
observan horizontes de concreciones en los intervalos lutíticos.

Jorham Contreras 95
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

a b

8 cm
10 cm

FIGURA 5.5. Estructuras sedimentarias en la localidad de Punta Gorda.


a) Huellas de carga y b) Rizaduras de corriente.

Localidad Punta Moreno

Al igual que en Punta Gorda, descansa estratigráficamente por encima de


la unidad de areniscas y conglomerados I; se observa intensamente deformada y
presenta un espesor aproximado de 100 m (Figuras 5.6 y 5.7). Está constituida por
areniscas con espesores individuales entre 5 y 50 cm, en algunos casos se
observan estratificadas y formando paquetes de hasta 3 m de espesor,
intercaladas con limolitas delgadas de 1 a 30 cm, con algunos niveles de
ortoconglomerados que no sobrepasan los 40 cm.

Las areniscas son de color gris claro y meteorizan pardo, de grano medio a
grueso, en ocasiones calcáreas, intercaladas con limolitas de color gris oscuro,
friables y muy deformadas amoldándose a las capas más competentes. Las capas
conglomeráticas se presentan intercaladas con las areniscas, son de color y
apariencia muy similar, pero de granulometría más gruesa, soportados por granos
tamaño gránulos.

Algunas capas de areniscas presentan internamente cuerpos ovalados de


color gris más oscuro, alineados paralelos a la estratificación. A nivel petrográfico
se observó que estos cuerpos representan zonas con cementación calcítica, a
diferencia del resto de la capa en donde el cemento es silíceo (Figuras 5.8 y 5.9).

Jorham Contreras 96
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

En la localidad de Punta Ballena algunas capas presentan estas mismas


características.

FIGURA 5.6

Afloramientos en la localidad
de Punta Moreno, parte
media de la sección.
Areniscas de grano medio
40 cm intercaladas con limolitas
laminadas.
Rumbo de la foto N 40 W.
Orientación de las capas
N70E 38N.

Las estructuras sedimentarias identificadas son huellas de carga en la base


de las areniscas, estratificación masiva, gradada y cruzada, laminación paralela en
algunas limolitas y pequeñas rizaduras (secuencia Ta-b, Ta-c y Tb-c de BOUMA,
1962). Tectónicamente está localidad presenta intensa deformación, evidenciada
por plegamiento en las capas de areniscas (incluso en las de mayor espesor y
más competentes), abundantes diaclasas y fracturas, algunas con desplazamien-
to, interpretadas como fallas inversas de alto ángulo de buzamiento (Figura 5.7).

FIGURA 5.7. Secuencia plegada y fallada de Punta Moreno, tope de la sección.


Rumbo de la foto S 45 E. Orientación de las capas N65W 45N.

Jorham Contreras 97
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

FIGURA 5.8

Areniscas con cementación


calcítica diferencial. Locali-
dad Punta Moreno, tope de
la sección.
Rumbo de la foto N 80 W.

Horizontes Orientación de las capas


calcáreos N70W 85 N.

FIGURA 5.9

Areniscas con cementación


calcítica diferencial. Locali- Horizontes
dad Punta Moreno, parte calcáreos
media de la sección.
Rumbo de la foto N 50 W.
Orientación de las capas
N75E 25N.

Intervalo Medio

Se caracteriza por areniscas de grano fino a grueso, intercaladas con


limolitas y escasos niveles de ortoconglomerados y calizas. Las areniscas
representan un 50-75% de la secuencia, son de color gris claro, meteorizan a
pardo y marrón ocre y presentan espesores entre 5 y 60 cm. Las limolitas
aumentan en proporción con respecto al intervalo basal, mientras que los
intervalos conglomeráticos son menos abundantes. Aflora en la localidad de Punta
Ballena y hacia el tope de la localidad de las Salinas de Pampatar.

Jorham Contreras 98
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Localidad Punta Ballena

Esta ubicada al sur de las salinas de Pampatar, en la costa de Punta


Ballena, cercana a la capitanía de Puerto. La secuencia consta de 103 m de
espesor, caracterizada hacia la base por intercalaciones de areniscas (75%) con
limolitas (20%), algunas arcilitas y niveles conglomeráticos locales (5%). Hacia el
tope las areniscas disminuyen en proporción (50%), mientras que las limolitas
aumentan (45%).

Las areniscas son de grano fino a medio, color gris claro y meteorizan a
pardo. Presentan espesores individuales entre 5 y 60 cm. En algunos casos se
observan paquetes de capas estratificadas de grano grueso que alcanzan los 3 m
de espesor. Las limolitas son de color marrón, más delgadas, bastantes friables y
laminadas, con espesores promedio entre 5 y 40 cm, que hacia el tope aumentan
en espesor y frecuencia de los intervalos (Figura 5.10). Localmente se observan
lentes de arcilitas con espesores máximos de 5 cm no muy fáciles de distinguir.
Los conglomerados presentan la mismas tonalidades que las areniscas, son de
tipo ortoconglomerados polimícticos con espesores entre 60 cm y 2 m,
compuestos por fragmentos de tamaño gránulos a guijarros, algunos con lentes
de areniscas, que presentan cementación calcítica en algunos casos.

a. Tope b. Base

FIGURA 5.10 a y b. Intercalaciones de areniscas y limolitas en la Localidad de Punta Ballena.


Obsérvese la disminución en la proporción de areniscas hacia el tope de la sección.
Rumbo de la foto N 80 W. Orientación de las capas E-W.

Jorham Contreras 99
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

FIGURA 5.11. Areniscas con cementación calcítica diferencial. Localidad Punta Ballena,
parte media de la sección. Rumbo de la foto N 75 W. Orientación de las capas N85E 25N.

Se observan abundantes estructuras sedimentarias deformacionales,


mayormente en las capas de areniscas, tales como huellas de carga y pliegues
“slump” (Figura 5.12). Otras estructuras presentes son estratificación gradada y
masiva, laminación paralela, laminación convoluta (Figura 5.13), estratificación
paralela, laminación cruzada, estratificación cruzada y rizaduras (abarcando la
secuencia Ta-c, Ta-d y Tb-d de BOUMA, 1962).

a b

FIGURA 5.12 a y b. Pliegues slump en la zona media de la sección Punta Ballena.


Rumbo de la foto E-W.

Jorham Contreras 100


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

a b

10 cm

10 cm

FIGURA 5.13 Estructuras sedimentarias en la localidad Punta Ballena


a) Laminación paralela y b) Laminación convoluta.

Intervalo Superior

Se caracteriza por intercalaciones monótonas de areniscas y limolitas, en


proporciones equivalentes, con intervalos muy esporádicos de ortoconglomerados,
paraconglomerados y areniscas calcáreas con espesores máximos de 20 cm. Las
areniscas son de color gris, meteorizan a pardo, de grano muy fino a medio y
presentan espesores entre 10 y 60 cm. Las limolitas son de color gris, laminadas y
presentan lentes de arcilitas. Aflora en las localidades de Morro El Vigía, Campiare
y pequeños cortes de carretera en la ciudad de Pampatar.

Localidad Morro El Vigía

Está ubicada al norte de la localidad de Punta Ballena infrayacente,


separadas por la zona residencial aledaña a la costa, alcanzando una altitud
aproximada de 70 m sobre el nivel del mar.

En general la secuencia se caracteriza por intercalaciones monótonas de


areniscas (60%), algunas calcáreas, y limolitas (40%), (Figura 5.14). La proporción
de limolitas se incrementa hacia el tope hasta alcanzar un 50%, así como se pre-
sentan esporádicos niveles lutíticos y conglomeráticos de espesor máximo 20 cm.

Jorham Contreras 101


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Las areniscas son de color gris a marrón claro que meteorizan a ocre y
localmente se observan colores de oxidación. El tamaño de grano va de fino a
medio, las capas presentan espesores entre 8 y 40 cm, con cambios laterales no
muy marcados. Las limolitas presentan colores similares, son friables y con
espesor entre 1 y 10 cm. La proporción de areniscas disminuye con respecto a
Punta Ballena, al igual que los intervalos conglomeráticos y capas calcáreas.

2m
2m

FIGURA 5.14. Intercalaciones monótonas de areniscas y limolitas de la localidad Morro El Vigía.


Rumbo de la foto N 30 E. Orientación de las capas N70E 10N - 30N.

Las estructuras sedimentarias más comunes en las capas de areniscas son


huellas de carga, laminación paralela y estratificación paralela. Se observan
pliegues “slumps”, flexuras locales y “ball and pillow” en la parte media de la
sección, las cuales están caracterizadas por cantos arcillosos de color gris
embebidos en capas de areniscas color marrón. Los turboglifos son muy comunes
y la secuencia Ta-b, Ta-c y Tb-d de BOUMA (1962).

20 cm

30 cm

FIGURA 5.15. Estratificación lenticular. FIGURA 5.16. Estratificación cruzada.


Localidad Morro El Vígia Localidad Campiare

Jorham Contreras 102


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Localidad Campiare

Está ubicada al oeste de las salinas de Pampatar, dentro del conjunto


residencial Terrazas del Mar, el cual fue construido recientemente y permite
observar nuevos cortes de la sección eocena. La secuencia consta de 140 m de
intercalaciones monótonas de areniscas y limolitas.

El intervalo basal de la sección está conformado por areniscas y limolitas,


de color marrón ocre que meteorizan a rojo ladrillo producto de la oxidación. Las
areniscas son de grano fino, presentan espesores entre 10 y 60 cm, se encuentran
intercaladas con limolitas delgadas de espesor menor a 10 cm que aumentan en
proporción hacia el tope.

Las estructuras sedimentarias observadas en las areniscas son estra-


tificación gradada, laminación paralela, estratificación paralela y huellas de carga.

Localidad Pampatar

Esta localidad está representada por los afloramientos aislados dentro de la


población de Pampatar, producto de cortes por pequeñas edificaciones y nuevas
avenidas, caracterizados por afloramientos con espesores máximos de 45 m. En
general son muy similares a la localidad Morro El Vigía. Se caracterizan por
intercalaciones monótonas de areniscas y limolitas, con intervalos locales de
paraconglomerados, ortoconglomerados y capas de areniscas calcáreas aisladas.

Las areniscas son de color gris claro y meteorizan a ocre, tamaño de grano
muy fino a medio, con espesores entre 5 y 30 cm. Las limolitas presentan
espesores entre 1 y 10 cm, de color gris a marrón, friables y laminadas.

Las estructuras sedimentarias se presentan mayormente en las capas de


areniscas y algunas en limolitas, siendo las más comunes huellas de carga,

Jorham Contreras 103


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

laminación paralela, estratificación paralela, y raramente se observa laminación y


estratificación cruzada festoneada.

Fm. Punta
Mosquito
(80 m)
(190 m)
Unidad de areniscas y lutitas

(745 m)
Loc. Campiare

(1.360 m)
Fm. El Dátil
Grupo Punta Carnero
(970 m)
(780 m)

Formación Pampatar
Loc. Punta Gorda – Salinas de Pampatar

(535 m)
Fm. Las Bermúdez
conglomeráticas
U. de areniscas

Fm. Los Frailes Fm. Los Robles

FIGURA 5.17 Columnas estratigráficas esquematizadas de las localidades tipo


de la Formación Pampatar y del Grupo Punta Carnero.

Jorham Contreras 104


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.1.1.2 Edad

En la Formación Pampatar no se encontró fauna indicativa de edad, por


esta razón, tomando en cuenta las características litológicas y estratigráficas, esta
unidad se considera equivalente lateral del Grupo Punta Carnero de edad Eoceno
Medio, zonas Morozovella lehneri - Orbulinoides beckmmanni, de TOUMARKINE &
LUTERBACHER (1985) (Tabla 5.7).

La muestras de lutitas recolectadas a lo largo de toda la unidad resultaron


estériles, con la excepción de algunos fragmentos de algas Lithothamnium sp. y
foraminíferos bénticos identificados como Operculinoides sp., Discocyclina sp. y
Lepidocyclina sp., retransportados probablemente por corrientes turbidíticas.

5.1.1.3 Análisis Petrográfico de la Formación Pampatar

En la Formación Pampatar se analizaron petrográficamente 48 muestras


(Anexo VII) clasificadas como: 3 limolitas (6%), 36 areniscas (75%), 7 grauwacas
(15%), 1 conglomerado (2%) y 1 ftanita (2%). Las técnicas, clasificaciones y
modelos diagenéticos empleados están detallados en el marco metodológico.

Limolitas

Están compuestas principalmente por cuarzo (13-30%) de tipo


monocristalino ígneo y metamórfico, y fragmentos de roca (10-15%)
principalmente chert y sedimentarios. Los feldespatos no sobrepasan el 9%.

La matriz se presenta en baja proporción (2-4%) y está constituida por


minerales de arcillas. El cemento calcítico es abundante y se presenta entre 20 y
33%, con cantidades menores de sílice (0-3%).

Jorham Contreras 105


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Areniscas y Grauwacas

Están compuestas principalmente por cuarzo y fragmentos de roca con


feldespatos en menor proporción. La cementación predominante es carbonática y
la matriz arcillosa. Según la clasificación de PETTIJOHN et al. (1972) se identificaron
los siguientes litotipos: arenitas líticas y grauwacas líticas (Tablas 5.1 y 5.2).

Arenitas líticas: Compuestas principalmente por fragmentos de roca tipo


chert, sedimentarios y volcánicos, con valor promedio entre 15 y 35%,
predominando el chert (10-15%). El cuarzo mayoritario es de tipo ígneo plutónico
monocristalino (10-25%), con cantidades menores de cuarzo metamórfico
monocristalino (8-15%) y policristalino (6-10%). Los feldespatos identificados son
ortosa (5 - 10%) y plagioclasas (1 - 4%). Es importante resaltar que los procesos
diagenéticos de alteración y reemplazo muchas veces dificultan la identificación de
los feldespatos y fragmentos de roca.

Los tipos de cemento identificados son calcita (5 - 20%), con trazas de


dolomita (~1%) de tipo secundaria y sílice con valores entre 2 - 10%.

El contenido de matriz oscila entre 2 y 14%, constituida principalmente por


minerales de arcilla detríticos, y en menor proporción micrita (1 - 5%). Los
minerales autigénicos alcanzan el 3%, siendo principalmente glauconita y
hematita. Los minerales accesorios oscilan entre 2 y 3%, observándose en orden
decreciente de abundancia muscovita, epidoto y biotita, además de fósiles como
componentes accesorios.

Grauwacas líticas: Mineralógicamente son muy similares a las areniscas líti-


cas, incrementan el contenido de fragmentos de roca a un 20 - 30%, de tipo
predominante chert (5 - 12%), sedimentarios (9 - 15%) y volcánicos (3 - 6%) con
cantidades menores de metamórficos. El cuarzo, también en cantidad dominante,
oscila entre 23 y 35%, de tipo ígneo monocristalino y metamórfico monocristalino

Jorham Contreras 106


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

en proporciones similares (8 - 12%). Los feldespatos, al igual que en las areniscas


líticas,están en menor proporción y se mantienen entre 6 y 12%, siendo la ortosa
el mineral mayoritario.

El contenido de matriz varía entre 15 y 30%, formada por arcillas detríticas


(~20%). Adicionalmente, se observó pseudomatriz (término introducido por
DICKINSON, 1970, para designar los minerales de arcilla producto de la
deformación de fragmentos mecánicamente inestables, por efecto de la
compactación durante la diagénesis), que puede dar una apreciación
sobreestimada del porcentaje de matriz.

Se observa una disminución en la proporción de cemento, predominante-


mente calcita (3 - 13%), con cantidades menores de sílice (1 - 5%) y óxidos de
hierro alrededor del 1%.

Grauwaca feldespática: Se observó solo una muestra de este tipo de roca,


la cual es muy similar a las grauwacas líticas descritas con anterioridad,
diferenciándose únicamente en la disminución de la proporción de fragmentos
líticos y aumento en la proporción de feldespatos, los cuales se presentan en
cantidades casi equivalentes de 18 y 21%, respectivamente.

La proporción de matriz de minerales de arcillas y cemento de calcita


permanece en 16 y 17%, respectivamente.

Conglomerados

Se realizó el análisis petrográfico a una muestra, la cual resultó de tipo


ortoconglomerado polimíctico. Los clastos son ígneos (45%) de origen plutónico
principalmente, sedimentarios (40%) de areniscas y limolitas, y en menor
proporción metamórficos (5%). La matriz (7%) es lutítico-arenosa y mal escogida,
mientras que el cemento (4%) está representado por calcita y óxidos de hierro.

Jorham Contreras 107


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

TABLA 5.1 Descripción petrográfica textural de las areniscas


de la Formación Pampatar

TEXTURA
MUESTRAS Tamaño de ESCOGIMIENTO REDONDEZ COMPOSICIÓN
Grano MbE BE MedE ME A SA SR R Granos Matriz Cemento Porosidad
CAM 09 A. Muy fina X X X 70,0 5,0 25,0 0,0
CAM 06 A. Media X X 73,5 6,0 20,5 0,0
CAM 03 A. Media X X 72,0 8,0 20,0 0,0
CAM 01 A. Media X X X 65,0 5,0 30,0 0,0
CAM 13 A. Gruesa X X 67,0 14,0 19,0 Tz
PBV 15 A. Fina X X X X 71,0 12,0 16,0 1,0
PBV 18 A. Fina X X X X 63,5 2,0 34,0 0,5
PBV 21 A. Muy fina X X X 68,0 8,0 24,0 0,0
PBV 20 A. Muy fina X X 60,5 4,5 35,0 0,0
PBV 22 A. Fina X X 65,0 7,0 28,0 Tz
PBV 25 A. Media X X X X 63,0 5,0 32,0 0,0
PBV 28 A. Fina X X X 84,0 5,0 11,0 0,0
PBV 29 A. Fina X X X 61,0 12,0 27,0 0,0
PBV 31 A. Muy fina X X X 71,0 22,0 7,0 0,0
PB 15 A. Fina X X 65,0 4,0 31,0 0,0
PB 13 A. Fina X X 65,0 2,0 33,0 Tz
PB 12 A. Muy fina X X X X 84,0 5,0 11,0 Tz
PB 11 A. Muy fina X X X X 73,0 5,0 21,0 1,0
PB 7A A. Fina X X 60,0 29,0 11,0 0,0
PB 07 A. Fina X X X X 62,0 4,0 34,0 Tz
PB 05 A. Muy fina X X X 55,0 25,0 20,0 Tz
PB 03 A. Fina X X X 65,0 5,0 30,0 0,0
PB 01 A. Fina X X X 83,0 4,0 13,0 0,0
PPS 01 A. Muy fina X X 67,0 17,0 16,0 0,0
PPS 02 A. Muy fina X X X 76,0 4,0 20,0 Tz
PPS 03 A. Fina X X 70,0 4,0 26,0 0,0
PPS 04 A. Fina X X 65,0 19,0 16,0 0,0
PAM 01 A. Fina X X 70,0 8,0 22,0 0,0
PAM 03 A. Fina X X X X 73,0 7,0 20,0 0,0
PAM 06 A. Muy fina X X X 78,0 7,0 15,0 0,0
PAM 08 A. Muy fina X X X X 77,0 7,0 16,0 Tz
PAM 10 A. Muy fina X X X X 68,0 15,0 17,0 0,0
PAM 14 A. Muy fina X X X 67,0 4,5 28,5 0,0
PAM 13 A. Fina X X X 74,0 4,0 21,0 1,0
PAM 12 A. Media X X X X 78,0 8,0 13,0 1,0
PAM 11 A. Muy fina X X X 74,0 5,0 20,0 1,0
PG 10 A. Fina X X X 77,0 5,0 14,0 4,0
PG 12 A. Fina X X 72,0 12,0 16,0 0,0
PG 13 A. Muy fina X X 62,0 6,0 32,0 Tz
PG 14 A. Fina X X X 80,0 5,0 12,0 3,0
PG 09 A. Fina X X X 82,5 4,0 12,0 1,5
PG 06 A. Muy fina X X X X 67,0 16,0 17,0 0,0
PG 05 A. Muy fina X X X 61,0 1,5 37,5 0,0
PG 04 A- Muy fina X X 67,0 25,0 7,0 1,0

LEYENDA
CAM: Campiare; PBV: Morro El Vigía; PB: Punta Ballena; PPS: Paraíso; PAM: Punta Moreno;
PG: Punta Gorda.
MbE: muy bien escogido; BE: bien escogido; MedE: medianamente escogido;
ME: mal escogido; A: angulosos; SA: subangulosos; SR: subredondeados; R: redondeados

Jorham Contreras 108


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

TABLA 5.2 Descripción petrográfica composicional de las areniscas


de la Formación Pampatar

COMPOSICIÓN CLASIFICACIÓN
MUESTRAS RECALCULO (100%)
CUARZO FELDESPATOS FRAG. ROCA ACCESORIOS Nombre
Qz. Feld FR Matriz
CAM 09 36,0 8,0 24,0 2,0 52,9 11,8 35,3 5,0 Arenita Lítica
CAM 06 37,0 9,5 25,0 2,0 51,7 13,3 35,0 6,0 Arenita Lítica
CAM 03 28,0 7,0 35,0 2,0 40,0 10,0 50,0 8,0 Arenita Lítica
CAM 01 28,0 7,0 29,0 1,0 43,8 10,9 45,3 5,0 Arenita Lítica
CAM 13 30,0 6,0 29,0 2,0 46,2 9,2 44,6 14,0 Arenita Lítica
PBV 15 31,0 12,0 26,0 2,0 44,9 17,4 37,7 12,0 Arenita Lítica
PBV 18 28,0 12,5 20,0 3,0 46,3 20,7 33,1 2,0 Arenita Lítica
PBV 21 31,0 9,0 26,0 2,0 47,0 13,6 39,4 8,0 Arenita Lítica
PBV 20 26,5 9,0 23,5 1,5 44,9 15,3 39,8 4,5 Arenita Lítica
PBV 22 31,0 4,0 28,0 2,0 49,2 6,3 44,4 7,0 Arenita Lítica
PBV 25 32,5 8,0 20,0 2,5 53,7 13,2 33,1 5,0 Arenita Lítica
PBV 28 36,5 9,0 36,0 2,5 44,8 11,0 44,2 5,0 Arenita Lítica
PBV 29 30,0 6,0 23,0 2,0 50,8 10,2 39,0 12,0 Arenita Lítica
PBV 31 26,0 12,0 30,0 3,0 38,2 17,6 44,1 22,0 Grauwaca Lítica
PB 15 19,0 7,0 39,0 Tz 29,2 10,8 60,0 4,0 Arenita Lítica
PB 13 30,0 11,5 21,0 2,5 48,0 18,4 33,6 2,0 Arenica Lítica
PB 12 36,0 8,5 38,0 1,5 43,6 10,3 46,1 5,0 Arenita Lítica
PB 11 26,0 5,0 39,0 3,0 37,1 7,1 55,7 5,0 Arenita Lítica
PB 7A 23,0 6,0 27,5 3,5 40,7 10,6 48,7 29,0 Grauwaca Lítica
PB 07 34,0 6,0 21,0 1,0 55,7 9,8 34,4 4,0 Arenita Lítica
PB 05 24,0 8,0 21,0 2,0 45,3 15,1 39,6 25,0 Grauwaca Lítica
PB 03 30,0 4,0 30,0 1,0 46,9 6,3 46,9 5,0 Arenita Lítica
PB 01 41,0 6,0 34,0 2,0 50,6 7,4 42,0 4,0 Arenita Lítica
PPS 01 27,0 10,0 27,5 2,5 41,9 15,5 42,6 17,0 Grauwaca Lítica
PPS 02 33,0 12,0 30,0 1,0 44,0 16,0 40,0 4,0 Arenita Lítica
PPS 03 30,0 8,0 30,0 2,0 44,1 11,8 44,1 4,0 Arenita Lítica
PPS 04 32,0 10,0 22,0 1,0 50,0 15,6 34,4 19,0 Grauwaca Lítica
PAM 01 28,5 1,0 28,0 2,5 49,6 1,7 48,7 8,0 Arenita Lítica
PAM 03 33,0 9,0 28,0 3,0 47,1 12,9 40,0 7,0 Arenita Lítica
PAM 06 33,5 12,0 29,5 3,0 44,7 16,0 39,3 7,0 Arenita Lítica
PAM 08 34,0 9,0 31,5 2,5 45,6 12,1 42,3 7,0 Arenita Lítica
PAM 10 27,0 10,0 28,0 3,0 41,5 15,4 43,1 15,0 Grauwaca Lítica
PAM 14 31,0 8,0 25,5 2,5 48,1 12,4 39,5 4,5 Arenita Lítica
PAM 13 33,5 8,5 29,0 3,0 47,2 12,0 40,8 4,0 Arenita Lítica
PAM 12 36,0 14,0 26,0 2,0 47,4 18,4 34,2 8,0 Arenita Lítica
PAM 11 35,0 11,0 26,0 2,0 48,6 15,3 36,1 5,0 Arenita Lítica
PG 10 34,5 13,5 28,0 1,0 45,4 17,8 36,8 5,0 Arenita Lítica
PG 12 35,0 12,5 22,0 2,5 50,4 18,0 31,7 12,0 Arenita Lítica
PG 13 31,0 6,0 23,0 2,0 51,7 10,0 38,3 6,0 Arenita Lítica
PG 14 39,5 7,5 32,0 1,0 50,0 9,5 40,5 5,0 Arenita Lítica
PG 09 42,0 13,0 25,5 2,0 52,2 16,1 31,7 4,0 Arenita Lítica
PG 06 26,0 20,0 19,0 2,0 40,0 30,8 29,2 16,0 Grauwaca Feldespática
PG 05 30,0 10,0 20,0 1,0 50,0 16,7 33,3 1,5 Arenita Lítica
PG 04 32,0 12,0 22,0 1,0 48,5 18,2 33,3 25,0 Grauwaca Lítica

LEYENDA
CAM: Campiare; PBV: Morro El Vigía; PB: Punta Ballena; PPS: Paraíso; PAM: Punta Moreno;
PG: Punta Gorda.

Jorham Contreras 109


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.1.2 Grupo Punta Carnero

La sección tipo esta ubicada al noroeste del aeropuerto Internacional


Santiago Mariño, en la localidad de Las Bermúdez - El Manglillo, cercana al
Yaque. Presenta un espesor de 1.360 m aproximadamente, truncado por erosión o
cubierto por formaciones mio-pliocenas subhorizontales y aluviones. La secuencia
se caracteriza por calizas, areniscas y lutitas intercaladas con conglomerados
hacia la base.

Hacia la base, aproximadamente a 1,5 km de la carretera al norte del


aeropuerto, se reconocen topográficamente algunas lomas alineadas, de 5 m de
altitud, paralelas a la orientación de las capas, las cuales representan el miembro
basal calcáreo que lateralmente pasa a intercalaciones de conglomerados y
areniscas. Luego se distinguen aproximadamente 600 m hacia el sur, de relieve
poco accidentado y cubierto con vegetación xerófila, que representa la Formación
Las Bermúdez.

El contacto con la Formación El Dátil suprayacente, está ubicado en el tope


de la secuencia calcárea que genera otras prominencias topográficas con la
misma orientación similares a las observadas en la parte basal, las cuales marcan
el inicio de un extenso valle con quebradas intermitentes, que representa las
lutitas con esporádicas calizas y areniscas de esta formación (Figura 5.19).

Aproximadamente, 900 m al sur se ubica el contacto con la Formación


Punta Mosquito suprayacente, específicamente en las inmediaciones de la
cabecera de pista del aeropuerto, en el área restringida al sur de la carretera hacia
Porlamar, donde se presenta un cerro de poca altitud, constituido por calizas,
areniscas calcáreas y lutitas.

Jorham Contreras 110


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

500 m

FIGURA 5.18. Corte esquemático del Grupo Punta Carnero. Sección tipo
Tomado de CHEVALIER (1987)

5.1.2.1 Unidades Estratigráficas

Formación Las Bermúdez

El contacto basal se observa entre el miembro informal de calizas Los


Bagres y los esquitos verde-grisáceos con marcada foliación de la Formación Los
Robles, interpretado por MUÑOZ (1973) como un contacto discordante. El miembro
calcáreo de Los Bagres presenta color gris claro cremoso, alto contenido de
corales, algas y microfósiles, con un espesor aproximado de 28 m que disminuye
lateralmente. Se observa estratificación semivertical y a pesar de ser un bloque
transportado (olistolito) mantiene una orientación similar a las capas del resto de la
formación.

La edad y origen de la caliza Los Bagres es controversial, ya que en base al


contenido de corales, KUGLER (1957) le asignó una edad Oligoceno y
posteriormente TAYLOR (1960) la consideró discordante con el Grupo Punta
Carnero y le atribuyó una edad Paleoceno - Eoceno Temprano. JAM & MÉNDEZ
(1962) la consideraron, en acuerdo con GONZÁLEZ DE JUANA (1947), como un
miembro concordante de la Formación Las Bermúdez, caracterizado por una masa

Jorham Contreras 111


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

lenticular de caliza arrecifal. BERMÚDEZ & GÁMEZ (1966) consideran que la opinión
de González de Juana es las más acertada y mantienen de manera dudosa la
edad de este miembro como Eoceno Temprano.

El contacto entre el miembro calcáreo Los Bagres y la sección


suprayacente es abrupto. Dicha sección se caracteriza por bloques y capas
lenticulares de conglomerados, areniscas y calizas, embebidos en una matriz
lutítico arenosa, con un espesor de 535 m. Es importante resaltar que la poca
continuidad en los afloramientos y la densa vegetación, dificulta la elaboración de
una columna continua, de aquí las diferencias en los espesores reportados por
BERMÚDEZ & GÁMEZ (1966), 700 m, MUÑOZ (1973), 450 m y CASAS & MORENO
(1986), 690 m .

Los conglomerados son mayormente calcáreos, de colores claros, con


espesores entre 25 y 50 cm, compuestos por fragmentos redondeados y mal
escogidos, de tamaño gránulos a peñas, de composición muy heterogénea,
presentando fragmentos de chert, tobas, lavas, andesitas, brechas volcánicas,
calizas, metadacitas, areniscas líticas, grauwacas calcáreas, etc. (CASAS &
MORENO, 1986), que pueden ser clasificados como paraconglomerados
polimícticos (PETTIJOHN, 1975) embebidos en una matriz lutítico-arenosa. La
proporción de los conglomerados disminuye hacia el tope de la formación.

Las calizas son de color crema amarillento, con espesores promedio de 40


cm, de textura microgranular y altamente meteorizadas, generando una costra
superficial que podría considerarse caliche, la cual dificulta la estimación de los
espesores y es bastante común. También se observan bloques dispuestos de
manera caótica y embebidos en una matriz arenosa, los cuales presentan mayor
espesor (alrededor de 80 cm) y son de color gris claro, muy similar al miembro Los
Bagres. En algunos casos es muy difícil distinguirlas de las areniscas calcáreas
que son también abundantes.

Jorham Contreras 112


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Hacia el tope, cercano al contacto con la formación El Dátil, las calizas


están constituidas principalmente por foraminíferos de aguas someras y
fragmentos de algas, los cuales constituyen material transportado desde la
plataforma hasta ambientes de aguas profundas, actuando como clastos
carbonáticos y originando lo que MUÑOZ (1973) designó calciturbiditas.

Las areniscas son de color gris claro, de grano medio a grueso, de


moderadamente a mal escogidas, granos subangulosos a subredondeados, con
espesores variables entre 10 cm y 1 m aproximadamente.

Las lutitas son de color gris claro, meteorizan a pardo y en algunos casos
alcanzan espesores de hasta 5 m. Se presentan intercaladas con areniscas,
areniscas calcáreas y calizas delgadas, con esporádicos bloques y capas de
lenticulares de conglomerados.

FALLA
DEXTRAL

FIGURA 5.19. Capas de calizas orbitoidales y areniscas calcáreas hacia


la base de la Formación Las Bermúdez. Rumbo de la foto N 30 W.

Estructuras Sedimentarias

Las estructuras sedimentarias observadas son variadas, predominando los


turboglifos en la base de las areniscas y areniscas calcáreas, los cuales son poco
prominentes y tiene una longitud inferior a los 10 cm. Las huellas de carga también

Jorham Contreras 113


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

son comunes en la base de algunas capas de areniscas y muchas veces dificultan


la observación de los anteriores.

Los intervalos Ta-b, Ta-c y Tb-d de la secuencia BOUMA (1962) son muy
comunes en las capas de areniscas e incluso en las conglomeráticas. En estos
ciclos están incluidas la estratificación masiva y gradada, laminación paralela,
cruzada y convoluta (Figura 5.21), aunque también se presentan en capas
aisladas. La estratificación y acuñamiento también son muy comunes. Los
pliegues “slump” se observan a pequeña escala y son menos abundantes que en
la Formación Pampatar.

Las estructuras orgánicas o trazas de organismos son escasas, se


observan en la base de las capas más competentes y se distinguen algunos
ejemplares de Paleodiction sp. y otras no identificadas, así como bioturbaciones
subparalelas a la estratificación.

Edad

Las lutitas presentan escaso contenido paleontológico y sólo se han


reportado ejemplares de Discocyclina grimsdalei y Nummulites sp. (MUÑOZ, 1973)
que indican una edad Paleoceno – Eoceno Temprano, en donde este autor hace
la salvedad de la mezcla de fauna durante el Eoceno Medio. FURRER (1985) en
comunicación personal a CASAS & MORENO (1986) le asigna una edad Eoceno
Medio.

En el presente trabajo se determinó una edad Eoceno Medio, Zona


Globigerinatheka subconglovata, en base a la última aparición de la Hastigerina
bolivariana, además de la presencia de las especies Turborotalia griffinae,
Acarinina broedermanni y Globigerinoides higginsi, del Eoceno Medio - Tardío
(Tabla 5.6).

Jorham Contreras 114


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Formación El Dátil

El contacto basal es abrupto y se establece en el tope de la última capa de


calizas orbitoidales, la cual forma parte de un paquete de intercalaciones de
calizas, lutitas y areniscas calcáreas, de aproximadamente 30 m de espesor,
definido por KUGLER (1957) como “Horizonte inferior de Orbitoides”, ubicado en el
tope de la Formación Las Bermúdez.

La Formación El Dátil presenta un espesor de 745 m aproximadamente, el


cual no difiere del asignado por PALOMBO (1950 en MUÑOZ 1973), pero difiere del
asignado por KUGLER (1957) de 840 m. Está caracterizada por arcilitas pelágicas
con escasas areniscas calcáreas, limolitas y calizas orbitoidales en la base, que
disminuyen hacia el tope de la sección. Se observan escasas areniscas y calizas
delgadas (mayormente lenticulares), que raramente sobrepasan los 60 cm de
espesor.

Las arcilitas son de color gris claro y meteorizan a pardo y verde oliva, ricas
en foraminíferos, con abundantes horizontes de concreciones y costras de yeso.
Topográficamente generan un extenso valle cortado por quebradas intermitentes
(Figura 5.20).

El contacto superior con la Formación Punta Mosquito en la sección


cercana al aeropuerto es abrupto, y se establece en la base de la primera caliza
orbitoidal, con espesor de 60 cm, que forma parte de un paquete similar al
observado en el tope de la Formación Las Bermúdez.

Estructuras Sedimentarias

En las capas competentes aisladas se pueden observar estructuras tales


como huellas de carga, laminación paralela, cruzada y convoluta, incluyendo los
intervalos Tb-c y Ta-c de la secuencia BOUMA (1962). También se observan

Jorham Contreras 115


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

huellas fósiles, entre las cuales se reconocieron Paleodiction sp., Nereites sp.,
Lorenzinia sp., Spirorhaphe sp. y otras no identificadas, pero posiblemente
corresponden con huellas de pastoreo (Pasichnia) y repteo (Repichnia).

Edad

Ha sido establecida en base al contenido de foraminíferos planctónicos y


bénticos, los cuales fueron ampliamente estudiados por BERMÚDEZ & GÁMEZ
(1966), quienes asignaron edad Eoceno Medio en base a las zonas definidas
Globigerapsis kugleri y Globorotalia lehneri. MUÑOZ (1973) considera una edad
Eoceno Medio parte terminal, zona Truncorotaloides rohri, y señala que la fauna
es redepositada dentro de toda la sección turbidítica. En el presente trabajo se
establece para la Formación El Dátil una edad Eoceno Medio, comprendida en las
Zonas Globigerinatheka subconglobata, Morozovella lehneri y Orbulinoides
beckmanni (Tabla 5.6).

VALLE EL DÁTIL

FIGURA 5.20 Contacto basal de la Formación El Dátil, marcado por paquete de calizas orbitoidales
intercaladas con areniscas calcáreas que generan altos topográficos. Rumbo de la foto N 20 W.

Jorham Contreras 116


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Formación Punta Mosquito

Está ubicada en el tope del Grupo Punta Carnero y geográficamente más al


sur, en la sección cercana al aeropuerto. En esta zona presenta un espesor
aproximado de 80 m, cubierto en el tope por aluvión y en algunas zonas por la
Formación Cubagua, mio-pliocena y La Formación El Manglillo del Cuaternario. En
la zona costera de Punta Mosquito (sector La Isleta) no se observa el contacto
basal con la Formación El Dátil y tectónicamente está muy deformada, lo cual
dificulta la estimación del espesor pero se calcula alrededor de 200 m.

En la sección Las Bermúdez - El Manglillo, esta formación se caracteriza


por calizas y areniscas mayormente calcáreas, con espesores entre 20 y 50 cm,
intercaladas con lutitas de espesor promedio 20 cm que disminuyen en proporción
hacia el tope. Las calizas son fosilíferas, ricas en orbitoides, fragmentos de algas y
foraminíferos.

En la localidad La Isleta la secuencia es más clástica, las calizas se


observan más que todo hacia el tope y están en menor proporción. La secuencia
se compone de intercalaciones de areniscas mayormente calcáreas y calizas, con
intervalos conglomeráticos y lutitas esporádicas. El espesor de las capas
competentes está alrededor de 20 y 50 cm, las cuales son predominantes y el de
las lutitas entre 1 cm y 1,5 m.

Estructuras Sedimentarias

En la zona cercana al aeropuerto se observan en la base de las capas de


areniscas abundantes trazas fósiles, Paleodiction sp., Nereites sp., Spiroraphe sp.,
Nereites sp., Lorenzinia sp. y otras no identificadas, que probablemente
correspondan a huellas de pastoreo (Pasichnia) y repteo (Repichnia), similares a
las observadas en la Formación El Dátil. Además se observan abundantes huellas
de carga y algunos turboglifos. La estratificación gradada, laminación paralela,
estratificación cruzada, laminación cruzada y escasas convolutas también están

Jorham Contreras 117


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

presentes, las cuales están incluidas en la secuencia BOUMA Ta-c y Tb-c. Estas
estructuras se observan mayormente en las areniscas, pero también se presentan
en capas de calizas orbitoidales.

En la sección costera de Punta Mosquito las estructuras deformacionales


son las predominantes, principalmente pliegues “slump” (Figura 5.22), huellas de
carga, laminación convoluta y “ball and pillow”. Los intervalos Ta-b, Ta-c, Tb-c y
Tb-d de la secuencia BOUMA (1962) son comunes y ellas engloban estratificación
gradada y masiva con base erosiva, laminación y estratificación paralela,
laminación y estratificación cruzada festoneada y escasas rizaduras.

30 cm
10 cm

FIGURA 5.21. Estructuras sedimentarias en la Formación Las Bermúdez


a) Laminación convoluta b) Laminación y estratificación paralela

FIGURA 5.22. Pliegues “slump”. Localidad La Isleta, Formación Punta Mosquito.

Jorham Contreras 118


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Edad

FURRER (1967 en CASAS & MORENO, 1986) en base al contenido de


foraminíferos planctónicos indica una edad Eoceno Medio y en este trabajo en
base a la presencia de Orbulinoides beckmanni del Eoceno Medio se mantiene
esta edad (Tabla 5.6).

5.1.2.2 Análisis Petrográfico

Se analizaron un total de 33 muestras pertenecientes al Grupo Punta


Carnero (Anexos VII y VIII), resultando: 2 limolitas (6%), 13 areniscas (39%) y 18
calizas (55%). Las técnicas, clasificaciones y modelos diagenéticos empleados
están detallados en el marco metodológico del capítulo I.

Limolitas
Las limolitas están compuestas por cuarzo (26%), principalmente de tipo
monocristalino ígneo y metamórfico, fragmentos de roca entre 12 y 16% (chert y
sedimentarios) y feldespatos (4%). Igual que en las areniscas, el cemento
principalmente es calcita y la matriz de minerales de arcillas alcanza un 25%.

Areniscas
Se identificaron un total de 13 arenitas líticas (100%) según la clasificación
de PETTIJOHN, POTTER & SIEVER (1972). Ver tablas 5.3 y 5.4.

Arenitas Líticas: Están compuestas principalmente por cuarzo ígneo plu-


tónico monocristalino (8 -20%), con cantidades de cuarzo metamórfico entre 15 y
20%, de tipo monocristalino principalmente. Los fragmentos de roca son variados,
pero se distingue el chert como mayoritario (10-20%), se identificaron fragmentos
sedimentarios (3-14%) y fragmentos volcánicos en proporción considerable (2-
10%), mientras que los feldespatos son relativamente escasos (5-10%) y están

Jorham Contreras 119


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

representados por ortosa principalmente, la cual se encuentra muy alterada. Los


accesorios no sobrepasan el 2% siendo principalmente fósiles y micas.

La matriz oscila entre 2 y 8%, está representada por minerales de arcilla y


micrita en menor proporción. El cemento es predominantemente carbonático, de
calcita (4 -27%), dolomita (1 - 2%) y cantidades menores de sílice (2 - 8%) y óxido
de hierro (1 - 2%).

Calizas

Según la clasificación de DUNHAM (1962) modificada por EMBRY & KLOVAN


(1970) se identificaron: 1 mudstone (6%), 8 wackestone (44%), 6 packstone
(34%) y 1 rudstone (6%). Adicionalmente se observaron 2 carbonatos de mezcla
(11%) según la clasificación de MOUNT (1985), identificados como una arenisca
aloquímica y una caliza arenosa aloquímica (Tabla 5.5).

Wackestone: Los componentes aloquímicos (detritos calcáreos) están


representados por foraminíferos (12 - 48%), definiéndolos como wackstone de
foraminíferos. Los componentes siliciclásticos no sobrepasan el 2% y están repre-
sentados por cuarzo y fragmentos de roca. La matriz está compuesta por micrita
(6 - 50%), con cierto contenido de óxido de hierro en algunos casos. El cemento
es predominantemente calcita microcristalina, designada como microespato, en
una proporción entre 6 y 75%.

Packstone: Los detritos calcáreos están representados mayormente por


fósiles, foraminíferos (8 - 50%) y algas (3 - 45%), con cantidades menores de
fragmentos de moluscos y equinodermos. Los granos siliciclásticos no sobrepasan
el 3% y están representados por cuarzo, fragmentos de roca y glauconita.

Jorham Contreras 120


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

La matriz carbonática oscila entre 3 y 25%, en algunos casos mezclada con


óxidos de hierro. El cemento, al igual que las calizas descritas con anterioridad,
está representado por microespato (6 - 33%) y en menor proporción espato
(2 - 12%).

Rudstone: La muestra LB-01 (caliza Los Bagres) difiere en el tipo de


detritos carbonáticos y en la granulometría, está compuesta por organismos que
fueron retransportados de la plataforma carbonática (fragmentos de corales 39%).

Carbonatos de mezcla: Este tipo de rocas designadas por MOUNT (1985)


están compuestas por material siliciclástico (42 - 50%) y carbonático (24 - 35%).

Los componentes siliciclásticos son cuarzo (25% aprox.), fragmentos de


roca (11-18%), feldespatos (5,5% aprox.) y accesorios (0,5 - 2%). Estos últimos
glauconita, micas y minerales pesados. Los componentes carbonáticos oscilan
entre 21 y 24%, representados por foraminíferos bénticos (12 – 19.5%), con
cantidades menores de algas (3 - 6%).

La matriz es de tipo carbonática (1 - 2%), el cemento carbonático oscila


entre 22 y 33%, con cantidades menores de cemento de sílice (1 - 5%).

Jorham Contreras 121


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

TABLA 5.3 Descripción petrográfica textural de las areniscas


del Grupo Punta Carnero

TEXTURA
MUESTRAS Tamaño de ESCOGIMIENTO REDONDEZ COMPOSICIÓN
Grano
MbE BE MedE ME A SA SR R Granos Matriz Cemento Porosidad
PM 05 A. Muy fina X X 69,0 0,0 0,0 0,0
PM 09 A. Muy fina X X 71,0 0,0 0,0 0,0
PM 03 A. Muy fina X X X 71,0 0,0 0,0 2,0
LB 12 A. Media X X X 72,0 0,0 0,0 Tz
LB 10 A. Media X X X X 67,0 0,0 0,0 0,0
LB 09 A. Media X X X 82,0 0,0 0,0 4,0
LB 08 A. Media X X 82,0 0,0 0,0 0,0
LB 07 A. Gruesa X X 74,0 0,0 0,0 4,0
LB 06 A. Media X X X X 60,0 0,0 0,0 0,0
LB 6A A. Gruesa X X X X 76,0 0,0 0,0 6,0
LB 04 A. Fina X X 67,5 0,0 0,0 0,0
LB 03 A. Fina X X 77,0 0,0 0,0 0,0
LB 02 A. Fina X X X X 66,0 13,0 20,0 1,0

TABLA 5.4 Descripción petrográfica composicional de las areniscas


del Grupo Punta Carnero

COMPOSICIÓN CLASIFICACIÓN
MUESTRAS RECALCULO (100%)
CUARZO FELD F. ROCA ACCES. Nombre
Qz Feld FR Matriz
PM 05 38,5 5,5 23,0 2,0 57,5 8,2 34,3 11,0 Arenita lítica
PM 09 43,0 7,0 19,0 2,0 62,3 10,1 27,5 4,0 Arenita lítica
PM 03 37,0 7,0 25,0 2,0 53,6 10,1 36,2 6,0 Arenita lítica
LB 12 21,5 8,0 42,0 0,5 30,1 11,2 58,7 3,0 Arenita lítica
LB 10 29,5 6,0 30,0 1,5 45,0 9,2 45,8 0,0 Arenita lítica
LB 09 33,0 9,0 38,0 2,0 41,3 11,3 47,5 2,0 Arenita lítica
LB 08 34,0 12,0 34,0 2,0 42,5 15,0 42,5 9,0 Arenita lítica
LB 07 31,0 10,0 32,0 1,0 42,5 13,7 43,8 2,0 Arenita lítica
LB 06 21,0 5,0 32,0 2,0 36,2 8,6 55,2 0,0 Arenita lítica
LB 6A 31,0 9,5 34,0 1,5 41,6 12,8 45,6 6,0 Arenita lítica
LB 04 26,0 8,0 32,5 1,0 39,1 12,0 48,9 5,0 Arenita lítica
LB 03 31,0 10,5 34,5 1,0 40,8 13,8 45,4 3,0 Arenita lítica
LB 02 27,0 6,0 30,0 3,0 42,9 9,5 47,6 13,0 Arenita lítica

LEYENDA
LB: Las Bermúdez; PM: Punta Mosquito.
MbE: muy bien escogido; BE: bien escogido; MedE: medianamente escogido; ME: mal escogido
A: angulosos; SA: subangulosos; SR: subredondeados; R: redondeados

Jorham Contreras 122


Jorham Contreras

TABLA 5.5. Descripción petrográfica de las calizas del Grupo Punta Carnero

COMPOSICIÓN
MUESTRAS Composición General Silisiclásticos Ortoquímicos Aloquímicos CLASIFICACIÓN

Silisiclast Ortoquim Aloquim Porosid. Qz Feld F. Roca Acces. TOTAL Micrita Microespat. Espato Dolomita TOTAL Intraclast. Foram. Amphistg. Nummuli. Algas Molusc Equin Corales Pellets TOTAL

PM 18 0,0 52,0 48,0 0,0 0,0 47,0 5,0 52,0 47,0 1,0 48,0 Wackstone
PM 14 0,0 10,0 90,0 0,0 0,0 2,0 6,0 2,0 10,0 30,0 5,0 10,0 45,0 90,0 Packstone
PM 11 1,5 47,5 51,0 0,0 1,0 Tz Tz 0,5 1,5 14,5 33,0 47,5 31,0 20,0 51,0 Packstone
PM 04 50,0 24,0 25,0 1,0 25,5 6,0 18,0 0,5 50,0 2,0 17,0 6,0 25,0 0,5 19,5 3,0 1,0 24,0 Arenisca aloquímica
PM 02 3,0 15,0 80,0 2,0 1,5 1,5 Tz 3,0 6,0 7,0 2,0 15,0 42,0 7,0 3,0 23,0 2,0 3,0 80,0 Rudstone
PM 01 42,0 35,0 21,0 2,0 24,0 5,0 11,0 2,0 42,0 1,0 14,0 20,0 35,0 12,0 6,0 2,0 1,0 21,0 Caliza arenosa aloquímica
PM 29 1,5 40,0 58,0 0,5 1,0 Tz 0,5 1,5 10,0 28,0 2,0 40,0 1,0 37,0 Tz 20,0 58,0 Packstone
PM 27 3,0 27,0 70,0 Tz 2,0 1,0 3,0 3,0 22,5 1,5 25,5 2,0 27,0 2,0 9,0 27,5 0,5 2,0 Tz 70,0 Packstone
PM 25 1,0 85,0 13,0 1,0 0,7 0,3 1,0 35,0 40,0 10,0 85,0 13,0 13,0 Wackstone
ED 23 Tz 54,0 46,0 0,0 Tz Tz 40,0 14,0 54,0 46,0 46,0 Wackstone
ED 21 0,0 56,0 44,0 0,0 0,0 50,0 6,0 56,0 44,0 44,0 Wackstone
ED 20 Tz 52,0 48,0 0,0 Tz Tz 42,0 10,0 52,0 48,0 Tz 48,0 Wackstone
LB 19 1,0 24,0 75,0 Tz Tz Tz Tz 8,0 8,0 7,0 1,0 24,0 3,0 24,0 5,0 6,0 32,0 2,0 3,0 75,0 Packstone
LB 18 1,0 60,0 39,0 0,0 1,0 Tz 1,0 56,0 4,0 60,0 39,0 39,0 Wackstone

GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA


LB 14 2,0 78,0 20,0 0,0 1,5 0,5 2,0 78,0 78,0 20,0 20,0 Wackstone
LB 11 1,0 97,0 2,0 0,0 1,0 Tz 1,0 5,0 84,0 8,0 97,0 2,0 2,0 Mudstone
LB 05 2,0 86,0 12,0 0,0 1,5 Tz 0,5 2,0 6,0 73,0 5,0 2,0 86,0 12,0 12,0 Wackstone
LB 01 0,0 51,0 49,0 0,0 0,0 23,0 15,0 12,0 50,0 8,0 3,0 39,0 50,0 Rudstone

LEYENDA

Qz: cuarzo; Feld: feldespatos; F. Roca: fragmentos de roca; Acces: accesorios; Tz: traza; Intraclast: intraclastos; Foram: foraminíferos;
Amphisteg: Amphistegina sp; Nummuli: Nummulites sp; Equin: equinodermos.
123
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.2 ANÁLISIS BIOESTRATIGRÁFICO

El estudio bioestratigráfico de la secuencia turbidítica de la isla de Margarita


se realizó a través del análisis de foraminíferos y nannoplancton calcáreo. Se
estudiaron los foraminíferos en un total de 50 muestras, correspondientes a 16
calizas, 27 arcilitas del Grupo Punta Carnero y 7 lutitas de la Formación Pampatar.
El estudio de nannoplancton calcáreo se realizó en 15 muestras de lutitas, de las
cuales 10 pertenecen al Grupo Punta Carnero y 5 a la Formación Pampatar.

Estas muestras se encuentran distribuidas a lo largo de toda la columna


sedimentaria y fueron recolectadas tanto en la sección tipo de ambas formaciones,
(El Manglillo- Las Bermúdez y Punta Gorda). como en los afloramientos aislados,
específicamente en la costa de Punta Mosquito (sector La Isleta), Punta Ballena y
Morro El Vigía. Se utilizó la zonación de foraminíferos de TOUMARKINE &
LUTERBACHER (1985) del Paleoceno-Eoceno en la región este del Caribe (Tabla
5.7) y la zonación de nanoflora calcárea MARTINI (1971).

En la Formación Pampatar, tal como se mencionó con anterioridad, no se


encontró fauna indicativa de edad, mientras que en el Grupo Carnero se establece
un edad Eoceno Medio en base al contenido de foraminíferos y nannoplancton
calcáreo.

El estudio de foraminíferos planctónicos permitió definir tres biozonas


establecidas por TOUMARKINE & LUTERBACHER (1985):

Zona Globigerinatheka s. subconglobata: No fue posible determinar la base.


El tope está definido por la última aparición de la Hastigerina bolivariana.
Zona Morozovella lehneri: La base se define por la última aparición de la
Hastigerina bolivariana y el tope por la última aparición de la Clavigerinella
colombiana.

Jorham Contreras 124


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Zona Orbulinoides beckmanni: definida por la primera y última aparición del


Orbulinoides beckmanni.

El estudio de nannoplancton calcáreo fue realizado por la bioestratigrafo


Isbelia Durán, quien informó que gran parte de la muestras presentaban
recristalización de la nanoflora calcárea, lo cual dificulta la identificación de los
géneros y por consiguiente la delimitación de las zonas, mientras que otras
resultaron estériles. Sin embargo, en el Grupo Punta Carnero se determinó la zona
NP16 (Discoaster tani nodifer) del Eoceno Medio, y en otros casos el rango de
edad se extiende hasta la zona NP19 (Isthmolithus recurvus) del Eoceno Tardío.
En la Formación Pampatar únicamente dos muestras indican edad Eoceno Medio
- Tardío, zonas NP16 - NP 17.

Además del los foraminíferos planctónicos que permitieron datar el Grupo


Punta Carnero se observaron abundantes fragmentos de macrofósiles, entre los
cuales se destacan equinodermos, ostracodos y moluscos. Los foraminíferos
bénticos calcáreos también son muy abundantes, siendo los más comunes
Lepidocyclina sp., Discocyclina sp., Asterocyclina sp. y Operculinoides sp.
Adicionalmente se observan foraminíferos arenáceos indicativos de aguas
profundas, entre los cuales, Cyclammina sp., Bathysiphon sp., Haplophragmoides
sp. y Ammodiscus sp. (Tabla 5.8). Esta mezcla de fauna indicativa de ambientes
de plataforma y marino profundo, evidencia el retrabajo y corrientes de turbidez
que caracterizan la secuencia, lo cual será detallado en el punto 5.7.

Jorham Contreras 125


LAS BERMÚDEZ EL DÁTIL PUNTA MOSQUITO FORMACIÓN

MUESTRAS *

LB 5
PM 4
PM 2
PM 1

LB 01
LB 19
LB 11
LLB 1
LLB 2
ED 20
ED 21
ED 23
PM 25
PM 27
PM 29
PM 11
PM 14
PM 18

LPM 1
LPM 2
LPM 3
LPM 4
LPM 5

LLB 15
LED 03
LED 05
LED 10
LED 15
LED 20
LED 25
LED 30
LED 35
LED 40
LED 45
LED 50
LED 55
LED 60
LED 65
LED 70
LED 75
LED 80
LED 85
LED 90
Acarinina broedermanni

Pseudohastigerina micra

Jorham Contreras
Globigerina senni
Globigerina lozanoi

Turborotalia griffinae
Hastigerina bolivariana

Acarinina bullbrooki

Globigerinoides higginsi

Turborotalia cerroazulensis
Clavigerinella eocanica
Morozovella spinulosa

* Cursivas: m uestras de calizas; Normal: muestras de lutitas


Truncorotaloides rohri

ESTÉRIL
Truncorotaloides topilensis
Clavigerinella colombiana

Clavigerinella jarvisi

Chiloguembelina sp.
Hantkenina dumblei
Chiloguembelina martini

Morozovella lehneri
T. cerroazulensis pomeroli

Orbulinoides beckmanni
Globigerina sp.

Globigerinatheka sp.

Globigerinatheka subconglobata Morozovella lehneri Orbulinoides beckmanni


ZONA
TABLA 5.6. DISTRIBUCIÓN DE FORMINÍFEROS PLÁNCTICOS EN EL GRUPO PUNTA CARNERO

126
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

TABLA 5.7. ZONACIÓN BIOESTRATIGRÁFICA DE FORAMINÍFEROS PLÁNCTICOS


GRUPO PUNTA CARNERO. TOUMARKINE & LUTERBACHER (1985)

EOCENO
EDAD
Temprano Medio Tardío

Globigerinatheka s. subconglobata

Turborotalia cerroazulensis s.l.


Globigerinatheka semiinvoluta
Morozovella formosa formosa

Morozovella aragonensis

Acarinina pentacamerata

Orbulinoides beckmanni
Morozovella subbotinae

Truncorotaloides rohri
Morozovella lehneri
Morozovella edgari

Hantkenina nutalli
Foramíniferos Pláncticos

P 16
P 10

P 11

P 12

P 13

P 14

P 15

P 17
P6

P7

P8

P9
Berggren & Van Couvering (1974)

Acarinina broedermanni
Pseudohastigerina micra
Globigerina senni
Globigerina lozanoi
Turborotalia griffinae
Hastigerina bolivariana
Acarinina bullbrooki
Globigerinoides higginsi
Turborotalia cerroazulensis sp.
Clavigerinella eocanica eocaenica
Morozovella spinulosa
Truncorotaloides rohri
Truncorotaloides topilensis
Clavigerinella colombiana
Clavigerinella jarvisi
Chiloguembelina sp.
Hantkenina dumblei
Chiloguembelina martini
Morozovella lehneri
T. cerroazulensis pomeroli
Orbulinoides beckmanni
Globigerina sp.
Globigerinatheka sp.

Jorham Contreras 127


128 Jorham Contreras

LAS BERMÚDEZ EL DÁTIL PUNTA MOSQUITO FORMACIÓN

MUESTRAS *

LB 5
PM 4
PM 2
PM 1

LB 01
LB 19
LB 11
LLB 1
LLB 2
LB 15
ED 20
ED 21
ED 23
PM 25
PM 27
PM 29
PM 11
PM 14
PM 18

LPM 1
LPM 2
LPM 3
LPM 4
LPM 5

LED 03
LED 05
LED 10
LED 15
LED 20
LED 25
LED 30
LED 35
LED 40
LED 45
LED 50
LED 55
LED 60
LED 65
LED 70
LED 75
LED 80
LED 85
LED 90
Ammodiscus sp.
Bathysiphon sp.
Ammobaculites sp.
Bolivinopsis sp.
Bolivinopsis trinitatensis
Haplophargmoides sp.
Cyclammina sp.
Dorothia sp.
Vulvulina colei
Bénticos Arenáceos

Verneuilina
Karreriella
Trochammina
Repmanina

* Cursivas: m uestras de calizas; Normal: muestras de lutitas


Marssovella
Anomalinoides
Bulimina pupoides
Chrysalogonium
Nodosarella subnodosa
Nodosarella spinulosa
Pleurostomella sp.
ESTÉRIL

Cibicidoides sp.
Cibicidoides grimsdalei
Cibicidoides eocaenus
Uvigerina sp.
Hormosina sp.
Lenticulina sp.
Nodosaria sp.
Nodosaria longiscata
Lepidocyclina sp.
Lepidocyclina pustulosa
Bénticos Calcáreos

Discocyclina sp.
Asterocyclina sp.
Operculinoides sp.
Amphistegina sp.
Europertia bermudezi
Fabiania cubensis
Heterosteginna sp.
TABLA 5.8 DISTRIBUCIÓN DE FORAMÍNIFEROS BÉNTICOS EN EL GRUPO PUNTA CARNERO

Gyroidinoides
Siphonodosaria
Lagena sp.
Pyramidulina
Saracenaria

GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.3 PROCESOS Y EVOLUCIÓN DIAGENÉTICA

5.3.1 Diagénesis de Siliciclásticos

Diagénesis Somera (<80°C; 0 – 1.500 m)

Durante esta etapa ocurrió la mayor reducción de porosidad primaria y


permeabilidad, la cual inicialmente estuvo influenciada por la presencia de arcillas
detríticas entre 2 y 10%, distribuidas a lo largo de toda la secuencia. La
compactación mecánica fue el principal factor de esta reducción, y está
evidenciada por la deformación de fragmentos mecánicamente inestables
(fragmentos líticos y micas). Otro factor determinante en la reducción de la
porosidad fue la cementación temprana por calcita.

En ciertas rocas y sobretodo en la zona media de la secuencia, se


observaron evidencias de infiltración de arcillas detríticas dentro de las areniscas,
las cuales generaron envoltorios y una especie de canales alrededor de los granos
detríticos. SURDAM et al. (1989) plantean que las reacciones de hidratación
temprana en sedimentos ricos en partículas líticas, particularmente los que
contienen material volcanogénico como en este caso, son fuente importante de
arcillas detríticas.

Se identifican dos etapas de cementación. La cementación temprana fue


por calcita, la cual ocurrió simultánea con la compactación mecánica inicial en la
interfase agua / sedimento, generando un empaquetamiento flotante por expan-
sión del empaquetamiento original y un endurecimiento relativo de la roca,
inhibiendo el aumento de contactos entre granos (Figuras 5.23 y 5.25). En la fase
final del soterramiento temprano comenzó a generar corrosión y reemplazamiento
de granos detríticos. La segunda etapa de cementación comenzó en la etapa de
diagénesis intermedia y es de tipo sílicea.

Jorham Contreras 129


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

La cementación calcítica se observa en mayor abundancia, los cristales de


calcita alcanzan una textura poikilotópica y en algunos casos se tienen mosaicos
de espato tipo drusa o microgranular (micrita y microespato). Este cemento,
además de disminuir la efectividad de la compactación mecánica, disminuyó los
espacios intersticiales, por lo cual fue determinante en la reducción de la
porosidad primaria.

En algunas muestras el grado de compactación predomina sobre el proceso


de cementación, generando contactos longitudinales, deformación y trituramiento
de las partículas dúctiles (fragmentos de roca y micas), las cuales adoptan formas
irregulares alrededor de granos más resistentes y reducen la porosidad primaria
intergranular, generando lo que DICKINSON (1970, en SANDOVAL, 2000) denominó
pseudomatriz (Figuras 5.24 y 5.26).

Este proceso se encuentra presente en toda la columna litoestratigráfica,


pero se observa con mayor intensidad en las muestras con menor grado de
cementación calcárea, lo cual evidencia que la cementación por calcita ocurrió en
etapas de soterramiento temprano previo a la litificación mecánica de la roca y
contemporánea con la compactación mecánica inicial. BLATT (1982, en SANDOVAL
2000) señala que en arenas con alto contenido de partículas dúctiles, por efecto
de una fuerte compactación, puede ocurrir la reducción de las porosidades
iniciales cercanas al 45% a valores de 0% por efecto de este flujo de granos
dúctiles en los poros, tal como ocurre en la secuencia turbidítica de la isla de
Margarita.

En la fase entre diagénesis temprana y diagénesis intermedia incipiente,


ocurre la alteración de los fragmentos de roca y feldespatos, debilitados
mecánicamente, a minerales de arcillas. Esto obedece a cambios en la estructura
química y cristalina de los granos detríticos, en donde el cambio de alcalinidad por
efecto de la cementación carbonática, en conjunto con el aumento en las

Jorham Contreras 130


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

condiciones de soterramiento (presión y temperatura), debilitan la estructura de los


mismos y favorecen los procesos de alteración y reemplazo.

1 mm. 0,5 mm.

Muestra PPS-02, Obj. 10x Muestra PAM-14, Obj. 20x

FIGURA 5.23. Arenitas líticas con cementación temprana de calcita que inhibe la compactación y
deformación de los fragmentos más inestables, generando expansión en el empaquetamiento y
un arreglo grano flotante de los granos. Formación Pampatar. Nícoles cruzados

0,5 mm. 0,5 mm.

Muestra PAM-11 Muestra PG-09

FIGURA 5.24. Arenitas líticas con alto grado de compactación mecánica temprana que genera
pseudomatriz, producto de la deformación de feldespatos y fragmentos líticos. Obsérvese la
baja proporción de cemento con respecto a las fotos de arriba. Formación Pampatar.
Obj. 20x con nícoles cruzados.

Jorham Contreras 131


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

1 mm. 1 mm.

Muestra LB-03 Muestra PM-03

FIGURA 5.25. Obsérvese la cementación temprana de calcita que genera un empaquetamiento


flotante de los granos, inhibiendo los procesos de compactación y deformación.
Formaciones Las Bermúdez y Punta Mosquito respectivamente. Obj. 10x con nícoles cruzados

1 mm. 1 mm.

Muestra LB-12 Muestra LB-6A

FIGURA 5.26. Obsérvese la deformación y trituramiento de los fragmentos líticos originando


pseudomatriz. Formación Las Bermúdez. Obj. 10x con nícoles cruzados.

Jorham Contreras 132


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Diagénesis Intermedia (80°C – 130°C; 1.500 – 3.500 m)

En esta etapa continuaron los procesos de compactación mecánica por


efecto de la carga litostática, aunque con menor intensidad que en la etapa inicial,
generando contactos longitudinales e intensificándose en las rocas con bajo grado
de cementación la deformación y trituramiento de partículas dúctiles entre los
granos más resistentes, originando cierta cantidad de pseudomatriz (DICKINSON
1970, en SANDOVAL, 2000), la cual se presume se originó mayormente durante la
etapa anterior (Figuras 5.30 y 5.31). Los procesos de presión – solución en las
zonas de contacto entre granos son muy escasos, ya que tanto la cementación
calcárea como la abundancia de pseudomatriz inhiben el proceso.

Ocurre la cementación por sílice en continuidad óptica con el cuarzo (Figura


5.28) y como calcedonia (sílice amorfa), la cual es mucho menos abundante que la
cementación por calcita. Esta etapa de cementación está asociada a los procesos
de alteración de minerales de arcillas y vidrio volcánico (por ejemplo el paso de
esmectita a ilita y alteración de los fragmentos volcánicos y biotita a clorita),
reemplazo de los componentes siliciclásticos por calcita y disolución de
organismos siliceos, los cuales son comunes en esta etapa y pueden representar
una fuente de aporte de sílice, tal como lo señala PITTMAN (1979, en SANDOVAL
2000) para rocas sedimentadas en ambientes tectónicos inestables.

Los procesos químicos adquieren mayor importancia, y se destaca la altera-


ción de fragmentos líticos, micas y feldespatos a minerales de arcilla (Figuras 5.29
y 5.30), generándose principalmente clorita, ilita e ilita / esmectita. La cementación
por carbonato (calcita) genera la “calcitización” o reemplazo de granos detríticos,
arcillas y cemento de sílice preexistente (Figura 5.27). DAPPLES (1971, en
SANDOVAL 2000) plantea que los principales efectos de abundante cementación
carbonática son corrosión y reemplazo de partículas detríticas por calcita y
reordenamiento de la fábrica original expandiendo el empaquetamiento.

Jorham Contreras 133


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Diagénesis Tardía (<130ºC – 200ºC; > 3.500 m)

Durante esta etapa ocurre principalmente la alteración progresiva de


minerales de arcilla de tipo esmectita a ilita y clorita, a través de arcillas de capas
mixtas de tipo esmectita / ilita y esmectita / clorita, las cuales fueron determinadas
a partir de análisis de difracción de rayos X.

El paso de esmectita a ilita puede comenzar durante una etapa de


soterramiento temprano a intermedio, a partir de 70ºC aproximadamente, a través
de arcillas de capas mixtas de tipo esmectita / ilita con arreglo desordenado. A
medida que aumenta la temperatura y la profundidad de soterramiento, la
proporción de ilita también aumenta dentro de estas capas mixtas, hasta llegar a
ser mayoritaria y generar arcillas de capas mixtas tipo ilita / esmectita con arreglo
ordenado (allevardita), la cual es indicativa de profundidades superiores a los
3.700 m y temperaturas mayores a los 130 ºC (Anexo XII).

Adicionalmente, ocurre la cementación por dolomita (1 – 2%), la cual según


PETTIJOHN (1973, en SANDOVAL 2000) puede estar asociada a la liberación de
iones de magnesio a partir de la disolución de silicatos y transformación de los
minerales de arcillas, específicamente el paso de esmectita a ilita (Figura 5.30).

0,5 mm. 0,5 mm.

Muestra PAM-13 Muestra CAM-01


FIGURA 5.27. Arenitas líticas con cemento de calcita que genera el reemplazo de los componentes
detríticos de los cuales se preservan vestigios. Formación Pampatar. Obj. 20x con nícoles cruzados.

Jorham Contreras 134


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

0,5 mm. 0,5 mm.

FIGURA 5.28. Arenita lítica calcárea. Obsérvese FIGURA 5.29. Fragmento de roca metamórfico
la cementación por sílice en continuidad óptica alterándose a minerales de arcilla de tipo
con el cuarzo, la cual es muy escasa. Muestra esmectita. Alrededor se observan fragmentos de
PG-13, Formación Pampatar. Obj. 20x, nícoles roca sedimentarios deformados y generando
cruzados. envoltorios de arcillas. Muestra PM-05 de la
Formación Punta Mosquito. Obj. 20x con nícoles
cruzados.

Dolomita

0.5 mm. 0.5 mm.

FIGURA 5.30. Obsérvese la deformación y


alteración de los fragmentos líticos, los cuales FIGURA 5.31. Arenita lítica con envoltorios
generan pseudomatriz y a su vez están siendo de arcilla alrededor de los granos, por efecto
reemplazados por calcita. En el extremo de la alta compactación
inferior derecho se distingue dolomita de tipo Muestra CAM-13 de la Formación Pampatar.
secundaria. Muestra PB-07, Formación Obj. 10x con nícoles paralelos.
Pampatar. Obj. 10x, nícoles cruzados.

Jorham Contreras 135


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Epidiagénesis

Las rocas de la secuencia turbidítica de la isla de Margarita alcanzaron una


etapa de diagénesis tardía no muy avanzada, ya que el soterramiento progresivo
se vio cortado por un proceso de epidiagénesis, definido como el levantamiento y
exposición de la secuencia previamente diagenetizada.

Los procesos más importantes en esta etapa son la oxidación de los


minerales de arcillas y la meteorización de los fragmentos y minerales con mayor
grado de alteración, es decir, los fragmentos líticos (Figuras 5.32 y 5.33).

Fracturas
0,5 mm.

FIGURA 5.32. Arenita lítica con oxido de hierro asociado a pequeñas fracturas de granos y a los
minerales de arcillas producto de la deformación de fragmentos líticos. Muestra PAM-10 de la
Formación Pampatar. Obj. 20x con nícoles cruzados.

0,5 mm.

FIGURA 5.33. Obsérvese los envoltorios de minerales de arcillas con alto contenido de óxido
de hierro. Muestra PM-09 de la Formación Punta Mosquito. Obj. 10x con nícoles paralelos.

Jorham Contreras 136


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.3.2 Diagénesis de Carbonatos

Las rocas carbonáticas que componen gran parte de la secuencia


estratigráfica del Grupo Punta Carnero y pequeños intervalos de la Formación
Pampatar, muestran al igual que las areniscas, una etapa diagénetica tardía
alcanzada durante el soterramiento progresivo de la secuencia, la cual fue
interrumpida por el levantamiento tectónico. Se sugiere que las rocas de
composición carbonática, en este caso calizas, están sujetas a variaciones físico-
químicas con respecto a sus componentes y características depositacionales en
mayor grado que las rocas siliciclásticas sometidas a las mismas condiciones de
soterramiento, por lo cual pueden presentar evidencias y procesos más avanzados
dentro de la etapa diagenética tardía con respecto a las areniscas. Para el análisis
de la secuencia paragénetica se utilizó el esquema elaborado por GINSBURG
(1957), adaptado y modificado por ZAPATA (1983).

Diagénesis Temprana

Los procesos más significativos durante esta etapa son los procesos
orgánicos de micritización de fragmentos de algas y foraminíferos en conjunto con
la formación de envoltorios micríticos alrededor de fragmentos de moluscos y
macroforaminíferos bénticos (Figura 5.34). Estos procesos están asociados a un
ambiente somero, donde predomina la actividad de organismos que generan
bioturbación en los componentes de la roca, debilitando la estructura de los granos
y favoreciendo la precipitación de micrita.

La acción de los procesos físico-químicos comienza con la compactación,


cementación por calcita y neomorfismo por inversión homoaxial de aragonito a
calcita. Se observan contactos entre granos y cemento de calcita con textura
isópaca. Adicionalmente ocurre la silicificación selectiva de los componentes
aloquímicos (foraminíferos bénticos), en la cual la calcita es reemplazada por
calcedonia (Figura 5.35).

Jorham Contreras 137


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

La glauconitización es otro proceso de reemplazo que ocurre en los


foraminíferos y fragmentos fósiles, el cual está asociado a la presencia de materia
orgánica, que acumula iones de hierro y sílice, los cuales posteriormente son
precipitados por reacciones de oxido-reducción.

1 mm. 1 mm.

FIGURA 5.34. Packstone de orbitoides y FIGURA 5.35. Packstone de orbitoides.


algas. Obsérvese la micritización de los Obsérvese la silicificación en una
fragmentos de algas y envoltorios alrededor Lepidocyclina sp. y la micritización en
de los foraminíferos bénticos. Muestra PM-14 algunos fragmentos de algas. Muestra PM-
de la Formación Punta Mosquito. Obj. 2.5x 04 de la Formación Punta Mosquito. Obj.
con nícoles cruzados. 2.5x con nícoles cruzados.

Diagénesis Intermedia

Los procesos físicos predominantes son la compactación, la cual actúa con


mayor intensidad, generando aumento en el empaquetamiento y contactos longitu-
dinales entre granos (presión-solución). Se observan algunas fracturas rellenas
por cemento de calcita espática y deformación de fragmentos de algas (Figuras
5.36 y 5.37).

Comienzan los procesos de neomorfismo por inversión heteroaxial, recris-


talización de la calcita en los fragmentos fósiles (Figura 5.38 y 5.39) y de los
componentes ortoquímicos, tal como la micrita a microespato. Ocurre cementación
con textura equigranular generándose una expansión en el empaquetamiento y
litificación de la roca, por efecto del relleno del espacio poroso en conjunto con la
compactación mecánica. Se observa el reemplazamiento de componentes

Jorham Contreras 138


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

siliciclásticos (cuarzo y fragmentos de roca) y fósiles no calcáreos (radiolarios) por


calcita.

1 mm. 1 mm.

FIGURA 5.36. Packstone de orbitoides FIGURA 5.37. Packstone de algas y


(Discocyclina sp. y Lepidocyclina sp.). foraminíferos, altamente compactados. Se
Obsérvese los contactos entre granos de observa una fractura rellena por cemento
tipo cóncavo-convexo. Muestra PM-27 de de calcita. Muestra LB-19 de la Formación
la Formación Punta Mosquito. Obj. 2.5x Las Bermúdez. Obj. 2.5x con nícoles
con nícoles cruzados. paralelos.

2 mm.
1 mm.

FIGURA 5.38. Rudstone. Obsérvese la FIGURA 5.39. Wackestone de


recristalización de la calcita en los foraminíferos pláncticos. Obsérvese la
fragmentos de corales y una estilolita que recristalización avanzada de algunos
atraviesa dichos fragmentos. Muestra LB- organismos que inclusive presentan
01 de la Formación Las Bermúdez. (Caliza cristales de dolomita. Muestra ED-23 de
Los Bagres). Obj. 2.5x con nícoles la Formación El Dátil. Obj. 2.5x con
paralelos. nícoles cruzados.

Jorham Contreras 139


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Diagénesis Tardía

Durante esta etapa ocurre la recristalización avanzada de micrita a


microespato y espato. Adicionalmente, se observa cementación por dolomita
(Figura 5.40), la cual se presenta en baja proporción (<2%), generalmente
rellenando fracturas y en menor grado dentro de organismos de composición
calcárea altamente recristalizados. Las estilolitas y fracturas con desplazamiento
evidencian procesos de presión-solución en una etapa de soterramiento avanzado
(Figura 5.41).

Estilolita
CRISTALES
DE DOLOMITA

Fractura

0.5 mm. 1 mm.

FIGURA 5.40. Dolomitización de FIGURA 5.41. Wackstone de foraminíferos.


Lepidocyclina sp. Muestra PM-02 de la Obsérvese la fractura y estilolita rellenas con
Formación Punta Mosquito Obj. 10 x, con calcita y calcita ferrosa respectivamente.
nícoles cruzados. Muestra LB-18 de la Formación Las
Bermúdez. Obj. 2.5x, con nícoles cruzados.

Epidiagénesis

El progresivo soterramiento es interrumpido por procesos de tectonismo


que generan el levantamiento y exposición de la secuencia, durante la cual se
genera la precipitación de óxido de hierro (hematita y limonita) y oxidación .

Jorham Contreras 140


Jorham Contreras

TABLA 5.9. Diagrama paragenético para la secuencia turbidítica eocena de la isla de Margarita

Interfase agua/sedimento 80ºC 130ºC


Etapas Diagéneticas
Soterramiento Somero Soterramiento Intermedio Soterramiento Profundo Epidiagénesis
Procesos Diagéneticos
Compactación
Deformación de granos dúctiles
Cementación por calcita
Sobrecrecimientos de cuarzo
Alteración de feldespatos

GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA


Alteración de fragmentos líticos y micas
Alteración de minerales de arcillas
Reemplazamiento (calcitización)
Cementación por dolomita
Transformación de esmectita a ilita
Disolución incipiente de arcillas
Precipitación de óxido de hierro

Procesos que destruyen porosidad


Procesos que generan porosidad
Procesos que generan microporosidad
141
GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.4 EVOLUCIÓN DE LA POROSIDAD

La porosidad de las rocas que conforman la secuencia turbidítica eocena de


la isla de Margarita está controlada por dos procesos principales: la compactación
mecánica y la cementación. Ambos son determinantes en las etapas iniciales de
soterramiento y generan una desaparición casi total de la porosidad primaria
intergranular, por lo cual estas rocas se caracterizan por porosidades de 0 a 1%.

El grado de compactación está controlado por la proporción de partículas


dúctiles, representadas por fragmentos líticos y micas, los cuales alcanzan valores
entre 20 y 30%. Durante la etapa de soterramiento inicial estas partículas son
deformadas, trituradas y fluyen en estado sólido entre los granos más resistentes,
adoptando formas irregulares al ocupar los espacios vacíos o intersticios,
destruyendo la porosidad intergranular y originando una matriz diagenética o
pseudomatriz (DICKINSON 1970, en SANDOVAL, 2000).

La cementación ocurre en una etapa de soterramiento temprano,


probablemente contemporáneo con la compactación inicial y está representada
por calcita principalmente, con cantidades menores de sílice originado en una
etapa de cementación posterior. El cemento de calcita se mantiene en un rango
predominante entre 10 y 30% y se caracteriza por cristales bien formados con
textura poikilotópica. La alta proporción de cemento origina un empaquetamiento
flotante de los granos y un endurecimiento de la roca, lo cual inhibe el proceso de
compactación, pero de igual manera ocluye la porosidad intergranular.

De esta manera, las rocas que presentan alta proporción de cemento


exhiben una preservación de la textura original los fragmentos líticos y micas
(partículas dúctiles), mientras que las rocas con baja cantidad de cemento
presentan abundante pseudomatriz. Ambos procesos originan una pérdida total
de la porosidad primaria intergranular.

Jorham Contreras 142


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

En una etapa de soterramiento posterior (diagénesis intermedia) ocurre la


disolución incipiente de los minerales de arcillas. Sin embargo, el máximo de
porosidad secundaria por disolución alcanza valores de 4 a 6%. Este proceso se
reconoce únicamente en aproximadamente el 5% de las rocas estudiadas, y está
controlado por la precipitación de óxidos de hierro durante la epidiagénesis que
rellena gran parte de esta porosidad secundaria.

En las rocas carbonáticas el grado de porosidad también es muy bajo, no


supera el 2% y es de tipo secundaria por disolución. La desaparición de la
porosidad primaria, al igual que en las areniscas, está controlada por los procesos
de compactación mecánica y cementación de calcita durante el soterramiento
progresivo. Sin embargo, los procesos de presión-solución generan estilolitas
asociadas a disolución de matriz y cemento, generando escasa porosidad
secundaria.

5.5 AMBIENTES DE SEDIMENTACIÓN

La secuencia flysch de la isla de Margarita está caracterizada por depósitos


turbidíticos sedimentados en una cuenca marino profunda durante el Eoceno
Medio. Esta cuenca estuvo controlada por la evolución geodinámica de la placa
del Caribe que para este momento se encontraba mucho más al oeste de su
posición actual. Esta placa estaba sometida a un régimen tectónico muy complejo,
caracterizado por una fase extensional en la zona retroarco (cuencas de Bonaire,
Granada y La Blanquilla), en donde probablemente se sedimentaron los abanicos
turbidíticos de Margarita, y un régimen transpresivo en el límite sur, contra la placa
Suramericana, donde ocurría el emplazamiento de bloques alóctonos y erosión de
los mismos.

El estudio de las características sedimentológicas y estratigráficas se


realizó a través de los modelos depositacionales de BOUMA (1962) y MUTTI & RICCI
LUCCHI (1978) (Apéndices 1 y 2). Sin embargo, se debe considerar que estos

Jorham Contreras 143


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

modelos están planteados en función de secuencias turbidíticas, no


necesariamente con características flysch, por lo cual su aplicación no es
totalmente rigurosa y presenta ciertas variaciones. Estos modelos permiten
determinar de manera general las facies y condiciones depositacionales tomando
en cuenta los patrones de apilamiento, cambios litológicos, características
texturales y estructuras sedimentarias.

TABLA 5.10. Asociaciones de facies turbidíticas y ambientes de sedimentación *


MUTTI & RICCI LUCCHI (1978)

Facies Características Generales Ambiente


G Lutitas con estratificación paralela o masivas, con
A superficies discontinuas cortadas por “slumps” o
truncamientos; pueden presentar canales con cuerpos de
E TALUD
areniscas A, horizontes caóticos F, areniscas y limolitas
F
delgadas D y E y muy raramente turbiditas gradadas C.
(B, C, D)
A,B Areniscas y conglomerados A y B limitados por el relleno
G de largos valles incisos submarinos en lutitas G, con Interno
delgados canales y acumulaciones turbidíticas E, D.
E, D
(C, F)
A, B Conglomerados rellenando largos valles submarinos A y B ABANICO
D cortando facies turbidíticas D. Megasecuencia positivas O CUENCA Medio
(C, E, F)
granodecreciente y/o adelgazamiento hacia el tope for- PROXIMAL
mando ciclos.
Areniscas y lutitas C en cuerpos lenticulares, algunas con
C contactos erosivos encerrando sedimentos arenosos-
lutíticos de las facies D. Megasecuencia negativa Externo
(D, E, F)
granodecreciente y/o engrosamiento hacia el tope
formando ciclos.
D Alternancia de lutitas y areniscas de las facies D con
PLANO
G turbiditas hemipelágicas G, intercalaciones esporádicas de
areniscas y lutitas de gran espesor de la facies C. En
SUBMARINO O
(C) CUENCA DISTAL
algunos casos se presentan únicamente sedimentos
(F)
hemipelágicos de la facies G.

* Ver apéndice 2.

Jorham Contreras 144


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Formación Pampatar

Está constituida por intervalos conglomeráticos basales presentes en las


localidades de Punta Gorda y Punta Moreno (unidad estratigráfica informal I) e
intercalaciones de areniscas y lutitas con esporádicas calizas hacia el tope (unidad
estratigráfica informal II).

Unidad estratigráfica informal I: Los intervalos conglomeráticos de Punta


Gorda y Punta Moreno, son considerados equivalentes depositacionales basales,
los cuales representan el relleno de cañones submarinos bajo flujos de granos, en
zonas cuenca proximal, de talud a abanico interno.

En la localidad de Punta Gorda se observa por encima de estos


conglomerados, una secuencia de bloques calcáreos, conglomeráticos y capas
lenticulares deformadas de areniscas, dispuestos de manera caótica y embebidos
una matriz lutítico arenosa, con un espesor aproximado de 120 m, los cuales
fueron sedimentados bajo corrientes turbidíticas y flujos de derrubios. Estos
depósitos son originados en la zona de plataforma externa a talud interno, bajo
condiciones de inestabilidad tectónica, en donde gran parte del material terrígeno
somero es retransportado hacia ambientes más profundos. Las facies turbidíticas
predominantes son la facies caótica F y lutítica G, de MUTTI & RICCI LUCCHI (1978),
donde los sedimentos más finos predominan y envuelven intervalos caóticos y
canales locales de la facies A, que podrían indicar un ambiente de talud.

Suprayacente a este intervalo caótico se observa abruptamente una


secuencia de lutitas y limolitas, con algunas capas lenticulares de areniscas y
grauwacas, que representan las facies G con intervalos D y E de MUTTI & RICCI
LUCCHI (1978) típicas de abanico externo a planicie distal, las cuales estuvieron
influenciadas por flujos gravitacionales de sedimentos, probablemente corrientes
turbidíticas y flujos fluidizados.

Jorham Contreras 145


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Unidad estratigráfica informal II: Las intercalaciones de areniscas y


lutitas, con intervalos limolíticos y esporádicas calizas (intervalos basal y medio de
la unidad), representan las asociaciones de facies turbidíticas características de
abanicos submarinos, principalmente en las facies de abanico medio de cuenca
proximal.

Suprayacente al intervalo lutítico de Punta Gorda y conglomerático basal de


Punta Moreno, se distinguen las primeras intercalaciones y capas de areniscas
conglomeráticas masivas, algunas con base erosiva, en donde se observa
frecuentemente los intervalos Ta-b, Ta-c de la secuencia BOUMA, con predominio
de las facies lutítico arenosa C, algunos intervalos de areniscas conglomeráticas
de la facies A y lutitas de la facies G, que representan la asociación de facies
característica de abanico interno a medio (MUTTI & RICCI LUCCHI, 1978).

Más hacia el tope de la sección (localidad Punta Ballena) se observa una


disminución en las facies de areniscas conglomeráticas A y areniscas B,
observándose un predominio de las facies C con lutitas y limolitas intercaladas con
areniscas de la facies D, que se interpretan como la depositación de corrientes
turbidíticas de baja densidad en facies de abanico medio a externo.

Finalmente, en las localidades de Campiare y Morro El Vigía (intervalo


superior de la unidad informal II), se observa un predominio de los intervalos Tb-c
y Tb-d de la secuencia BOUMA, las capas disminuyen de espesor y la proporción
de areniscas con limolitas y lutitas es casi equivalente, lo cual se interpreta como
facies de lutitas intercaladas con areniscas D y E, con intervalos locales de
areniscas y lutitas de la facies C de MUTTI & RICCI LUCCHI (1978), típicas de
abanico externo.

Jorham Contreras 146


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Grupo Punta Carnero

Formación Las Bermúdez: presenta características similares a la


secuencia caótica de Punta Gorda, por lo cual puede es considerada equivalente a
la unidad estratigráfica informal I de areniscas y conglomerados. Esta formación
ha sido denominada como un intervalo de flysch salvaje (“wild flysch”), constituido
por material terrígeno y bioclástico retransportado desde la zona de plataforma
hasta zonas más profundas dentro de la cuenca, pudiendo corresponder hasta
facies de talud externo.

Hacia la base, se observa el olitostromo calcáreo designado como “Caliza


Los Bagres”, el cual se considera un elemento alóctono deslizado, en conjunto o
previo a los flujos gravitacionales que transportaron el material caótico del flysch
salvaje. Los mecanismos de sedimentación podrían corresponder a flujos de masa
“rockfall” (olitostromos y olitolitos) y flujo de derrubios, donde los clastos son
soportados por una matriz lutítico-arenosa retrabajada; podrían señalarse flujos de
granos como mecanismo secundario, donde la corriente está soportada por la
interacción entre ellos, originándose capas delgadas de areniscas. Las facies pre-
dominantes son las facies caótica F, con intervalos arenosos y conglomeráticos lo-
cales de la facies A de MUTTI & RICCI LUCCHI (1978), típicas de talud.

Formaciones El Dátil y Punta Mosquito: Por encima de esta secuencia


de flysch salvaje, se observa un gran espesor de lutitas pelágicas, con intervalos
locales de lutitas y carbonatos pelágicos retrabajados e intercalaciones de calizas
orbitoidales de plataforma (Formación El Dátil). Estas características evidencian
material bioclástico de plataforma, con cierto contenido de material terrígeno que
fue retransportado hasta profundidades batiales. En estas áreas existe un
predominio de sedimentos pelágicos, que por efecto de estos flujos gravitacionales
desde zonas más someras, en conjunto con posibles corrientes de fondo, causan
retrabajo de los sedimentos pelágicos.

Jorham Contreras 147


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Suprayacente, hacia el tope del Grupo Punta Carnero (Formación Punta


Mosquito) se distinguen capas de calizas orbitoidales, intercaladas con areniscas
calcáreas y lutitas (Formación Punta Mosquito), en donde se puede observar
claramente la mezcla faunal, similar al intervalo superior de la Formación Las
Bermúdez que marca el contacto con la Formación El Dátil.

A través del análisis bioestratigráfico se pudo determinar que las calizas y


areniscas calcáreas están constituidas básicamente por foraminíferos bénticos de
plataforma (orbitoides), mientras que las lutitas presentan abundancia de foraminí-
feros planctónicos, radiolarios y algunos bénticos arenáceos. Sin embargo,
también se observan algunas calizas constituidas por foraminíferos planctónicos
de aguas profundas, las cuales presentan características que evidencian
transporte, tal como estructuras sedimentarias de laminación cruzada o paralela.

Estas evidencias señalan que efectivamente la secuencia está constituida


por material bioclástico de plataforma retransportado por flujos gravitacionales de
sedimentos (calciturbiditas), asociado con lutitas y sedimentos pelágicos
representados por las rocas con abundancia de foraminíferos planctónicos de
aguas profundas. Las calizas con foraminíferos planctónicos retrabajados, podrían
indicar lo que MUÑOZ (1973) sugiere como la acción de corrientes de fondo que
causan retrabajo en los sedimentos y organismos de aguas profundas, similares a
los observados en océanos modernos. CASAS & MORENO (1986) realizaron un
estudio de microscopía electrónica a través del cual determinaron que la mayoría
de las lutitas del Grupo Punta Carnero son de origen pelágico, mientras que las de
la Formación Pampatar corresponden a lutitas transportadas desde ambientes
someros por corrientes de turbidez, lo cual podría explicar el carácter estéril.

La sedimentación en la unidad informal II del Grupo Punta Carnero, estaría


restringida a una cuenca marino profunda, bajo condiciones de inestabilidad
tectónica que generaron flujos gravitacionales de sedimentos hacia el fondo de la
cuenca, arrastrando gran cantidad de material bioclástico y terrígeno desde

Jorham Contreras 148


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

ambientes de plataforma hasta profundidades batiales y abisales, donde


posiblemente existían corrientes de fondo y que actualmente se evidencian por la
mezcla de distintas especies de organismos y litologías de ambientes somero y
marino profundo. El arreglo estratigráfico y características sedimentológicas
señalan que el intervalo de flysch salvaje basal se depositó en facies de talud a
abanico interno, seguido de un intervalo de lutitas pelágicas ricas en foraminíferos
de aguas profundas que señala la sedimentación en la planicie abisal,
caracterizada por la facies de lutitas pelágicas y hemipelágicas G, con esporádicas
intercalaciones de areniscas de la facies D de MUTTI & RICCI LUCCHI (1978), típicas
de la planicie abisal. Hacia el tope, se distinguen facies de abanico medio a
externo, caracterizadas por lutitas intercaladas con areniscas de la facies D y E,
donde se observan niveles con aumento en la proporción de areniscas, con
tamaño de grano más grueso y presencia de los intervalos Ta-c y Tb-d de BOUMA,
que señala la facies C de MUTTI & RICCI LUCCHI (1978).

PLATAFORMA EXT. Facies G y F,


con intervalos A

TALUD
Facies A y B con UNIDAD
intervalos G y ESTRATIGRÁFICA
Abanico Interno canales C, D y E INFORMAL I

Facies D y E,
con intervalos A,
B y F ó C.

Facies C con UNIDAD


Abanico Medio intervalos D y E ESTRATIGRÁFICA
INFORMAL II

Abanico Externo

Facies D y G con
PLANICIE ABISAL intervalos C

FIGURA 5.42. Ubicación de asociaciones de facies en la secuencia


turbidítica de la isla de Margarita

Jorham Contreras 149


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Además del arreglo estratigráfico de la secuencia, las huellas fósiles


brindan información muy concreta y valiosa acerca de los ambientes de
depositación. En el Grupo Punta Carnero son relativamente abundantes, en donde
se identificaron ejemplares de Paleodiction sp., Spirorhaphe sp., Nereites sp. y
Lorenzinia sp., los cuales pertenecen a la icnofacies Nereites, típica de ambiente
marino profundo, en la zona de planicie abisal con profundidad superior a los
2.000 m.

Finalmente podemos decir que el análisis bioestratigráfico de foraminíferos


evidencia una vez más la sedimentación en una cuenca marino profunda, marcada
por la presencia de especies arenáceas de aguas profundas, entre los cuales se
identificaron Cyclammina sp., Bathysiphon sp., Haplophragmoides sp. y
Ammodiscus sp. La presencia de organismos calcáreos tales como Discocyclina
sp., Lepidocyclina sp., Asterocyclina sp., Amphistegina sp., Operculinoides sp.
entre otros, señalan la mezcla faunal con especies de ambiente somero.

5.6 FUENTE DE SEDIMENTOS

Los abanicos submarinos que conforman la secuencia turbidítica eocena de


la isla de Margarita se generan debido a la tectónica activa en la zona retroarco de
la placa Caribe, donde se sugiere que las posibles fuentes de aporte eran los
bloques que conformaban las Antillas Menores, el prisma de acreción producto de
la subducción Atlántica y una posible plataforma carbonática ubicada en la
periferia de las napas de Villa de Cura (PINDELL et al., 1990). Esta plataforma
aparentemente sirvió de aporte para las secuencias de edad Eoceno Medio que
actualmente se encuentran en parte de la cuenca oriental y las islas que
conforman las Antillas Menores (PINDELL, op cit.).

En la isla de Margarita se encuentran parte de estos abanicos turbidíticos,


los cuales se caracterizan por facies de talud a planicie abisal, sedimentados en
una cuenca marino profunda y alimentados por fragmentos de rocas ígneo-

Jorham Contreras 150


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

metamórficas, sedimentarias preexistentes y una plataforma que originó


calciturbiditas, las cuales son similares a las observadas en otras islas de las
Antillas Menores y de edad Eoceno Medio terminal (SPEED, 1993) .

Las características sedimentológicas de las rocas eocenas de la isla de


Margarita y en general de la región caribeña, están controladas por la fuente de
aporte en conjunto con los procesos sedimentarios en el interior de la cuenca y la
evolución tectónica regional. El análisis mineralógico de la secuencia turbidítica
sedimentada en dicha cuenca puede dar indicios de la fuente de sedimentos y de
la existencia de fuentes mixtas o contemporáneas (Figuras 5.43 y 5.44). Para
determinar las fuentes de sedimentos se utilizaron los diagramas de DICKINSON &
SUCZEK (1979), basados en tres campos principales: bloques continentales, arcos
magmáticos y orógenos reciclados, los cuales están en función de la proporción
de cuarzo, feldespatos y fragmentos líticos que permiten ubicar el tipo de provincia
tectónica como roca fuente en base a las diferencias composicionales.

Se utilizaron los diagramas Q-F-L y Qm-F-Lt, en los cuales se graficaron un


total de 57 muestras, 44 corresponden a la Formación Pampatar y 13 del Grupo
Punta Carnero. Es importante resaltar que para la utilización de estos diagramas
es necesario realizar el conteo modal de las muestras a estudiar, lo cual garantiza
una estimación precisa en la proporción de los componentes. Sin embargo, en el
presente trabajo estos diagramas fueron aplicados en base a los resultados de
estimación visual de los análisis petrográficos, en donde se obtuvieron resultados
similares a los reportados por CASAS & MORENO (1986), quienes si aplicaron el
conteo modal.

Los diagramas constan de tres vértices descritos a continuación:


Diagrama Q-F-L: Q: todos los tipos de cuarzo incluyendo el chert;
F: feldespatos; L: fragmentos líticos.
Diagrama Qm-F-Lt: Qm: cuarzo monocristalino únicamente; F: feldespatos;
Lt: fragmentos líticos incluyendo el chert y cuarzo policristalino.

Jorham Contreras 151


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Q Formación Pampatar
CRATON Qm
INTERIOR 3 CRATON
INTERIOR 11

18
20 RECICLADO
CONTINENTAL CUARZOSO
CONTINENTAL TRANSICIONAL
TRANSICIONAL
OROGENO
RECICLADO 42
43
45 RECICLADO
MEZCLA TRANSICIONAL

37
ARCO ARCO
BASAMENTO BASAMENTO 32
DISECTADO DISECTADO
LEVANTADO
25
18
ARCO ARCO RECICLADO
TRANSICIONAL 13
TRANSICIONAL LÍTICO
ARCO NO
DISECTADO ARCO NO
DISECTADO
23 47 13
F 15 50
L F Lt

FIGURA 5.43. Triángulos Q-F-L y Qm-F-Lt para las areniscas de la Formación Pampatar.
DICKINSON & SUCZEK (1979)

El diagrama Q-F-L de la Formación Pampatar evidencia una fuente de


aporte principal de reciclados orogénicos, representadas por secuencias de
estratos levantados, plegados y fallados, donde los detritos reciclados de rocas
sedimentarias y metasedimentarias son importantes (DICKINSON & SUCZEK, 1979).
Estos orógenos pueden estar asociados a complejos de subducción con
deformación de sedimentos oceánicos y levantamiento del cinturón de
deformación en cuencas antepaís. Adicionalmente se observa una dispersión
hacia el campo de arco magmático disectado y transicional, lo cual representa el
aporte principal de fragmentos volcánicos y cantidades menores de fragmentos
plutónicos. En el diagrama Qm-F-Lt se destaca los reciclados transicionales, con
dispersión hacia la zona de mezcla, arco trasicional y arco disectado.

En base a estos resultados se puede sugerir que la fuente de aporte está


asociada a un complejo de subducción con desarrollo de una cuenca retroarco y
prisma de acreción, constituido por mezcla de rocas sedimentarias, metasedimen-
tarias y materiales oceánicos. El arco magmático (en este caso Antillas Menores)
representa una fuente intermitente y menos importante, la cual provee fragmentos
de origen volcánico y en menor proporción plutónicos.

Jorham Contreras 152


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Grupo Punta Carnero

Q
CRATON
INTERIOR 3
Qm
CRATON
INTERIOR 11
18
20 RECICLADO
CONTINENTAL CUARZOSO
CONTINENTAL
TRANSICIONAL
TRANSICIONAL
OROGENO
RECICLADO
43 42
45
RECICLADO
MEZCLA TRANSICIONAL

37
ARCO ARCO
BASAMENTO DISECTADO BASAMENTO 32
LEVANTADO DISECTADO
25

ARCO 18
TRANSICIONAL ARCO RECICLADO
13
TRANSICIONAL LÍTICO
ARCO NO
DISECTADO ARCO NO
DISECTADO

F 15 50
L F
23 47 13
Lt
FIGURA 5.44. Triángulos Q-F-L y Qm-F-Lt para las areniscas del Grupo Punta Carnero
DICKINSON & SUCZEK (1979)

El diagrama Q-F-L del Grupo Punta Carnero, al igual que en la Formación


Pampatar, muestra una fuente principal de reciclados orogénicos, con leve
dispersión hacia arco disectado y transicional, mientras que el diagrama Qm-F-Lt
indica una fuente de reciclado transicional.

Ambos diagramas sugieren una fuente de aporte asociada a un complejo


de subducción (Caribe / Atlántico), levantado tectónicamente y que representa el
aporte de fragmentos sedimentarios con episodios de aporte de detritos volcánicos
y plutónicos provenientes de un arco magmático (Antillas Menores).

Finalmente podemos decir que tanto en la Formación Pampatar como en el


Grupo Punta Carnero, los reciclados orogénicos están representados por
secuencias pre-eocenas tectonizadas durante la evolución de la placa del Caribe,
constituidas por rocas sedimentarias, deformadas y mezcladas con secuencias
oceánicas, alóctonas y parautóctonas, que fueron expuestas, para así representar
una fuente de aporte para las cuencas retroarco en la placa Caribe, con influencia
del arco magmático de las Antillas Menores.

Jorham Contreras 153


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

5.7 MARCO ESTRUCTURAL LOCAL

5.7.1 Geología Estructural

La geología estructural en la isla de Margarita es bastante compleja. Está


determinada por el marco tectónico de la placa del Caribe, el cual controló la
sedimentación durante el Eoceno en la región costafuera de Venezuela.

La evolución de las cuencas costafuera, que incluyen los sedimentos


paleógenos de la actual isla de Margarita, se puede dividir en tres etapas
principales: 1) un régimen extensional durante Eoceno, en el cual ocurre la
sedimentación en cuencas marino profundas; 2) un régimen transpresivo a partir
del Oligoceno, en el cual se invirtieron parte de las estructuras extensionales
previas y que se acentuó durante el Mioceno Temprano a Medio, donde
posiblemente ocurre el emplazamiento de las secuencias expuestas actualmente
en la isla de Margarita (SPEED, 1985; PINDELL et al., 1988); 3) un régimen
transtensional a partir del Mioceno Tardío, producto del movimiento transcurrente
dextral de la placa del Caribe con respecto a Sudamérica.

Los regímenes que controlaron cada una estas etapas determinaron la


ubicación actual de los sedimentos eocenos en la isla de Margarita, los cuales tal
como hemos mencionado con anterioridad están ubicados en tres zonas:

El Grupo Punta Carnero aflora en 1) La región sureste de la isla,


denominada Las Bermúdez – El Manglillo, la cual se encuentra adyacente al
aeropuerto Santiago Mariño, caracterizada por una secuencia isoclinal con
buzamiento hacia el sur y 2) la costa de Punta Mosquito, sector la Isleta, donde
aflora la Formación Punta Mosquito, la cual se encuentra altamente tectonizada.

La Formación Pampatar aflora en la región este de la isla, en afloramientos


aislados, cercanos a la población de Pampatar. Aflora en un sinclinal, con
orientación aproximada este-oeste.

Jorham Contreras 154


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Área Las Bermúdez – El Manglillo

En esta área el Grupo Punta Carnero, aflora en una estructura isoclinal, con
una orientación N60E - N70E y buzamiento semivertical (80 N ó S – 90). Hacia el
tope, en la Formación Punta Mosquito, las capas presentan una orientación N45E
– N55E con buzamiento 25 - 30S.

El contacto basal con la Formación Los Robles es discordante, no se


observaron evidencias de deformación tectónica que sugieran un contacto
estructural. Sin embargo, CASAS & MORENO (1986), indican que este contacto es
de tipo estructural, interpretado como un corrimiento.

Al sur se distinguen fallas, con orientación N20W aproximadamente, con


leve desplazamiento horizontal dextral, claramente observables en los cerros que
marcan el contacto entre las formaciones Las Bermúdez – El Dátil.

En la zona del valle el Dátil, MUÑOZ (1973) sugiere un corrimiento en sentido


norte – sur, el cual no fue observado en el presente trabajo. Adicionalmente, se
distinguen algunas capas delgadas de areniscas, con cambios bruscos en la
orientación, producto de fallas con orientaciones NNO-SSO y desplazamiento
transcurrente, que según MUÑOZ (op cit.) tienen una componente normal.

En la zona costera de Punta Mosquito, localidad la Isleta, las capas


presentan una orientación aproximada N40E – N50E con buzamiento 20 – 40S. La
secuencia está bastante deformada, se observan abundantes pliegues,
destacándose un anticlinal volcado de orientación axial N35E 40N, (Figura 5.45)
asociado a otros pliegues locales de menor escala. Al oeste, en la ensenada
cercana a Punta Tortuguita se distingue el flanco este de un sinclinal (Figura 5.46),
con orientación aproximada del plano axial N20E, el cual se prolonga por debajo
de la línea de costa hacia el sur.

Jorham Contreras 155


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Las fallas son comunes y de poca extensión. Predominan fallas inversas


(Figuras 5.47 y 5.48) , pero también se observan fallas normales por efecto de
reajuste gravitacional (comunes en la zona axial de los pliegues), con planos de
orientación aproximada N45E y menos frecuente N40W. Adicionalmente, MUÑOZ
(1973) reconoce un sistema de fallas inversas con orientación aproximada E-W y
buzamiento 60S.

FIGURA 5.45. Afloramientos en la costa de FIGURA 5.46. Afloramientos en la costa de


Punta Mosquito, localidad la Isleta. Punta Mosquito, localidad La Isleta. Pliegue
Obsérvese el pliegue anticlinal volcado. sinclinal en el sector Punta Tortuguita.
Plano axial del pliegue N35E 40N. Rumbo de la foto N 60 W.
Rumbo de la foto S 45 W.

FALLA

FIGURA 5.47. Falla inversa de alto ángulo FIGURA 5.48. Afloramientos en la costa
en los afloramientos en la costa de Punta de Punta Mosquito, localidad La Isleta,
Mosquito, localidad La Isleta. Punta Corral. Falla inversa, plano con
Rumbo de las capas N40E 36N. orientación N 20 E. Rumbo de la foto N 75
Rumbo de la foto N30W. W.

Jorham Contreras 156


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Área Pampatar

Hacia la región este de Margarita, la estructura principal es un sinclinal


asimétrico, con eje axial orientado N80E y ubicado en la parte media de las
Salinas de Pampatar, el cual presenta mayor buzamiento en el flanco norte 40 -
50S (localidad Punta Gorda y Campiare de la Formación Pampatar) mientras que
en el flanco sur las capas buzan 25 - 35N (localidades Punta Moreno, Punta
Ballena y Morro el Vigía). En ambos flancos del pliegue se distinguen fallas
inversas con orientación aproximada ENE-OSO, las cuales podrían reflejar una
dirección de los esfuerzos compresivos entre N10W – N45 W aproximadamente.
Las capas presentan un rumbo ONO-ENE y buzamiento 20º – 45º en sentido norte
o sur dependiendo del flanco del sinclinal en que se encuentren.

En la localidad de Punta Gorda, las capas presentan una orientación


aproximada N50W 45S. En esta área las evidencias de actividad tectónica están
enmascaradas por el gran espesor de lutitas (parte superior de la unidad I de la
Formación Pampatar) que absorbe la deformación, y únicamente permite apreciar
algunas capas desplazadas y deformadas en estado plástico. Sin embargo, se ob-
servan algunas fracturas y pliegues locales en las capas de areniscas competen-
tes y de espesor considerable, ubicadas hacia el tope y en la parte media de las
salinas.

En la localidad Campiare, se observan fallas inversas, fracturas y diaclasas,


así como vetas de cuarzo, que cortan las capas perpendicularmente a la
estratificación en la mayor parte de la sección. La orientación de las capas cambia
con respecto a la orientación general de la zona, observándose un rumbo N-S con
buzamiento hacia el este. Estas características están determinadas por la
proximidad con la zona apical del sinclinal de Pampatar.

En Punta Moreno, al suroeste de Pampatar (flanco sur del sinclinal), las


capas conglomeráticas basales de la Formación Pampatar, presentan una

Jorham Contreras 157


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

orientación aproximada N70W 45N, observándose algunas fracturas y pequeñas


fallas inversas. Hacia el tope de esta localidad, en la secuencia arenosa, el grado
de deformación tectónica es mayor, y está caracterizada por abundantes fracturas,
fallas inversas y pliegues (Figura 5.7, pagina 97).

En Punta Ballena, las capas presentan un orientación aproximada E-W con


buzamiento 20-30N. Las estructuras de deformación tectónica a escala de
afloramiento, tales como fallas o pliegues, no son muy comunes (Figuras 5.10 y
5.11). Sin embargo, hacia el este, cercano a la cueva El Bufón se observan frac-
turas y fallas normales que cortan toda la secuencia pero no tienen mucho des-
plazamiento, así como patrones de diaclasas y plegamientos de baja intensidad
producto en su mayoría por deformación sindepositacional (“slump”), o por rea-
juste gravitacional. Al norte de Punta Ballena, CASAS & MORENO (1986) distinguen
un plano de corrimiento buzando al sur, indicando un sobrecorrimiento hacia el
norte, reportado por MUÑOZ (1973) como cabalgamiento en sentido sur - norte.

En las localidades Morro el Vigía y Pampatar, ubicadas hacia el tope en el


flanco sur del sinclinal, las capas presentan orientación similar a Punta Ballena.
Estructuralmente la secuencia presenta bajo grado de deformación, observándose
algunos pliegues por flexura depositacional y otros que afectan levemente las
capas y generan cambios de orientación muy locales. Las fallas y fracturas son
escasas y se aprecian patrones de diaclasas en algunas capas.

5.7.2 Evolución Estructural

La secuencia eocena que aflora en la isla de Margarita fue depositada en


un ambiente de aguas profundas, en una cuenca con inestabilidad tectónica en la
cual se generaron flujos gravitacionales de sedimentos, que transportaron material
terrígeno y bioclástico de ambientes más someros, generando cañones y abanicos
submarinos.

Jorham Contreras 158


GEOLOGÍA LOCAL DE LA ISLA DE MARGARITA

Aparentemente, estos depósitos se acumularon en la cuenca retroarco de


las Antillas Menores (PINDELL et al., 1988; PINDELL & BARRETT, 1990, entre otros),
la cual durante el Eoceno Medio a Tardío se hizo más profunda. YSACCIS (1997)
indica que en la región costafuera, en la zona de las actuales cuencas La
Blanquilla y parte de Tuy-Cariaco, prevaleció un régimen “rift” durante el Eoceno.
En este período prevalecieron condiciones de inestabilidad tectónica en la cuenca,
probablemente asociadas al régimen convergente de la placa Caribe contra
Suramérica.

Posteriormente, durante el Oligoceno – Mioceno Medio dicha cuenca estuvo


influenciada por un proceso de deformación originado a partir de la transpresión al
sur de la placa Caribe. Está fase es designada por YSACCIS (1997) como fase
transpresiva, la cual generó plegamiento, fallas inversas y corrimientos, tal como
se puede observar en la secuencia eocena que aflora en la isla de Margarita y en
la de subsuelo (Figuras 4.6, 4.8 y 4.9), sedimentada en ambiente batial.

PINDELL & DEWEY (1982) y PINDELL & BARRETT (1990) sugieren que la isla de
Margarita durante el Mioceno Medio – Tardío? se encontraba parcialmente
expuesta y fue envuelta en una intensa fase de deformación, producto de un
régimen de transpresión oblicua contra la placa de Sudamérica. En esta etapa
ocurrió el emplazamiento de las secuencias eocenas sedimentadas en aguas
profundas en la actual isla de Margarita.

Durante el Mioceno Tardío – Plioceno el marco tectónico es más estable,


debido a que la placa del Caribe mantiene un movimiento transcurrente dextral
con respecto a Sudamérica, permitiendo la sedimentación de los estratos
subhorizontales de la Formación Cubagua en una plataforma abierta, en ambiente
nerítico interno – medio hasta batial.

Jorham Contreras 159


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6. ESTUDIO SEDIMENTOLÓGICO Y ESTRATIGRÁFICO


DE LAS CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

La cobertura sedimentaria que descansa sobre el basamento ígneo-


metamórfico mesozoico en las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco, de edad
Paleógeno al Reciente, comprende un espesor mayor a los 6 km y da registro de
la historia tectónica compleja a la que ha sido sometida la región costafuera de
Venezuela, la cual determinó la distribución estratigráfica y de ambientes
sedimentarios a lo largo del tiempo geológico.

El análisis estratigráfico, distribución de los ambientes sedimentarios, sus


características sedimentológicas y asociaciones de facies, permiten conocer las
condiciones de depositación, cambios paleobatimétricos e interpretar la historia
geológica de las cuencas en el área norte costafuera de Venezuela.

El intervalo Eoceno-Oligoceno en las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco


(Figura 6.1), es de particular interés, ya que presenta características favorables
para la generación y expulsión de hidrocarburos, al mismo tiempo que contiene
intervalos arenosos que representan potenciales reservorios.

Se realizó el análisis sedimentológico y estratigráfico en los pozos MTC-2X,


PMN-1X, PMO-2X, CMA-1X y CUBAGUA-1. En algunos casos se tomaron análisis
bioestratigráficos previos y en otros se realizaron nuevos estudios, con el fin de
delimitar las unidades estratigráficas de interés y validar los límites planteados por
otros autores. De igual forma se aplicaron los diagramas de DICKINSON & SUCZEK
(1979) con la finalidad de establecer las posibles fuentes de sedimentos.

Es necesario destacar que los tipos litológicos identificados a través del


análisis petrográfico de muestras de canal (ripios), no representan la totalidad de
la sección estudiada, ya que las litologías menos competentes no se preservan,
además que no permiten estimar de manera exacta los valores de porosidad.

Jorham Contreras 160


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6.1 CUENCA LA BLANQUILLA

Se define como una depresión de orientación noreste-suroeste, que alcanza


más de 20.000’ (6.000 m) de espesor de sedimentos y se extiende al norte de los
altos La Tortuga y Margarita-Los Testigos y al sur de las islas La Blanquilla y La
Orchila, con un área aproximada de 35.000 km2.

FIGURA 6.1 Ubicación de los pozos en las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco


Tomado y modificado de YSACCIS et al. (2000)

En la cuenca La Blanquilla se han perforado 3 pozos exploratorios los


cuales encontraron petróleo y gas. Estos han sido seleccionados para el presente
trabajo, ya que atraviesan parte de la secuencia de interés y permiten evaluar la
distribución de los sedimentos de aguas marino profundas de edad Eoceno-
Oligoceno y establecer la posible correlación con la cuenca Tuy-Cariaco (Figura
6.2).

Jorham Contreras 161


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

FIGURA 6.2. Distribución cronoestratigráfica de la secuencia sedimentaria en la región nororiental


y costafuera de Venezuela. Tomado y modificado de EVANS (1983).

Jorham Contreras 162


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6.1.1 DESCRIPCIÓN DE LOS POZOS EN ESTUDIO

Los primeros estudios sedimentológicos y bioestratigráficos en los pozos


perforados en la región costafuera de Venezuela fueron realizados por HAAK
(1980) y EVANS (1982a, 1982b, 1983). Recientemente, DURÁN et al. (2002) realizan
estudios bioestratigráficos de alta resolución, con la finalidad de corroborar
algunos límites geocronólogicos y definir de manera más exacta las variaciones
paleoambientales y paleobatimetricas dentro de la secuencia perforada por estos
pozos.

6.1.1.1 POZO MTC-2X

Ubicado en la subcuenca La Blanquilla Oeste, al norte de la isla La Tortuga,


el pozo MTC-2X alcanza una profundidad de 16.401’ (5.000 m), perforando una
secuencia de edad Eoceno – Reciente, sin llegar a basamento. Estudios
sedimentológicos y bioestratigráficos recientes han permitido establecer los
ambientes de sedimentación y la paleobatimetría de la secuencia perforada, tanto
en este pozo como en el PMO-2X y PMN-1X, ubicados en la Blanquilla Este.

a) Descripción estratigráfica y litológica

HAAK (1980) y EVANS (1982a, 1983) dividen la secuencia perforada por el


pozo MTC-2X como se puede observar en la tabla 6.1.

Los estudios bioestratigráficos de alta resolución recientes, desarrollados


por DURAN et al. (2002), han permitido redefinir algunos límites geocronológicos y
ajustar la paleobatimetría, tal como se muestra en la tabla 6.2.

Jorham Contreras 163


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

TABLA 6 .1 Unidades cronoestratigráficas del pozo MTC-2X. EVANS (1983)

LITOLOGÍA Y
PROF. ESPESOR EDAD
AMBIENTE DEPOSITACIONAL

1.670' Pleistoceno Arcillas con fragmentos de conchas


1.690'

Arcilitas con pequeñas intercalaciones de


1.740' 530 m Mioceno Superior areniscas calcáreas, depositadas en
ambiente nerítico a batial superior
3.380'

Arcilitas con intervalos limolíticos.


Mioceno Corresponde a una secuencia regresiva
3.390' 1.033 m Mioceno Medio
que varía de ambiente batial en la base
hasta nerítico medio en el tope
6.770'

Areniscas y lutitas intercaladas con


4.100' 1.250 m Mioceno Inferior esporádicas calizas. Corresponde a un
intervalo turbidítico de facies distal
10.870'

2.560' 780 m Oligoceno


13.430'
Lutitas de ambiente batial
2.971' 905 m Eoceno
16.401'

TABLA 6.2 Unidades cronoestratigráficas del pozo MTC-2X. DURAN et al. (2002)

LITOLOGÍA Y
PROF. ESPESOR EDAD
AMBIENTE DEPOSITACIONAL
Arcillas con fragmentos de conchas de
1670' 509 m Plioceno - Pleistoceno
1670' ambiente nerítico medio a externo
Lutitas de ambiente batial superior que
hacia el tope pasan a ambiente nerítico
1.830' 558 m Mioceno Medio - Superior
externo y presentan intercalaciones de
3500' areniscas delgadas

Mioceno Depósitos de talud superior,


6.290' 1918 m Mioceno Medio constituidos por lutitas, areniscas
delgadas y esporádicas calizas.
9.790'

Depósitos de talud intermedio a


1.010' 308 m Mioceno Inferior
10.800' plataforma externa en el tope

700' 213 m Oligoceno Superior


11.500'
Lutitas de ambiente batial intermedio a
Oligoceno
inferior
2.450' 747 m Oligoceno Inferior
13.950'

1000' 305 m Eoceno Superior


14.950
Eoceno Lutitas de ambiente batial intermedio
1451' 442 m Eoceno Medio
16.401'

Jorham Contreras 164


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Finalmente se puede indicar que a pesar de que existen diferencias en


profundidad y espesor entre las unidades cronoestratigráficas propuestas por los
diferentes estudios bioestratigráficos realizados en el pozo MTC-2X, todos
plantean una sedimentación prácticamente continua desde el Eoceno Medio hasta
el Reciente. DURAN et al. (2002) ubican un hiatus por encima del Mioceno
Temprano y otro entre el Mioceno Tardío y el Plioceno.

b) Descripción petrográfica

El análisis petrográfico se realizó en base a 16 muestras de canal,


distribuidas a lo largo de la secuencia paleógena (10.800’ – 16.401’), de las cuales
10 pertenecen a la unidad oligocena y 6 a la unidad eocena.

Ambas unidades son predominantemente lutíticas, con escasos intervalos


de areniscas y calizas, por lo cual se consideran una sola unidad paleógena.

Están compuestas por lutitas (88%) intercaladas con areniscas de grano


muy fino (7%) y calizas (5%). Las lutitas son de color gris oscuro, calcáreas y con
alto contenido de foraminíferos. Las areniscas son de color gris claro a crema,
predominantemente calcáreas y de granos angulosos a subangulosos. Las calizas
son de color crema y fosilíferas.

Mineralógicamente, las lutitas están constituidas por arcillas entre 90 y


96%, por lo cual fueron clasificadas como arcilitas en la mayoría de los litotipos
observados.

Las areniscas son de grano muy fino y se encuentran intercaladas con


limolitas. En ambos litotipos los granos están representados por cuarzo y ortosa, la
matriz es arcillosa y el cemento es de calcita principalmente, con cantidades
menores de sílice y óxido de hierro.

Jorham Contreras 165


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Se identificó únicamente un litotipo arenoso clasificado como una


subarcosa.

Las calizas fueron clasificadas como: 9 mudstone (75%), 2 wackestone


(17%) y 1 packstone (8%).

Areniscas y limolitas

Están compuestas por cuarzo (4 - 45%) principalmente de tipo ígneo


monocristalino, ortosa (0-10%) y escasos fragmentos de roca (0-4%) de tipo
sedimentarios y chert.

La matriz en las areniscas es arcillosa y no sobrepasa el 8%, mientras que


en las limolitas alcanza el 45% y está compuesta por minerales de arcillas
(25 -30%) y cantidades menores de micrita (10 -15%).

El cemento es principalmente calcítico (20 – 28%) y se observó en la mayor


parte de las muestras, al igual que el óxido de hierro, el cual oscila entre 3 y 15%.
El cemento de sílice se observó únicamente en una muestra con un valor de 19%.

Calizas

Los mudstone están constituidos principalmente por micrita (16 – 96%) y


foraminíferos pláncticos (0 – 8%). Los wackestone y packstone se componen de
microespato (65-90%) y foraminíferos pláncticos (10 –35%).

Se observó en tres muestras cementación por dolomita tardía con valores


entre 2 y 5%, ubicadas en la secuencia eocena.

Jorham Contreras 166


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Finalmente, podemos decir que la secuencia paleógena del pozo MTC-2X


es predominante lutítica, con escasos niveles de areniscas calcáreas, limolitas y
calizas lodosas.

La composición mineralógica detallada se puede observar en las tablas


6.3a y 6.3b.

TABLAS 6.3 a y b Descripción petrográfica de muestras de canal, pozo MTC-2X.

a) ROCAS SILICICLÁSTICAS

TEXTURA COMPOSICIÓN CLASIFICACIÓN


EDAD Muestra Tam. de grano Composición General Cuarzo RECALCULO (100%)
Escog. Red. FELD. F.R. ACC. FÓSILES MTZ. CMT. Nombre
Tam. prom. Nombre Granos Matriz Cemento Porosd. IGNEO METM. TOTAL Qz. Feld FR Matriz
10.850' - 10.860' 0,03 Limo MB SA 25,0 75,0 0,0 0,0 9,0 9,0 8,0 1,0 2,0 5,0 75,0 0,0 75,0 Arcilita
11.100' - 11.110' 0,05 Limo B SA 27,0 65,0 8,0 0,0 5,0 5,0 0,0 5,0 2,0 15,0 70,0 8,0 70,0 Arcilita
OLIGOCENO

11.330' - 11.340' 0,02 Limo MB A-SA 12,0 60,0 28,0 0,0 8,0 8,0 4,0 0,0 0,0 60,0 28,0 60,0 Arcilita
0,04 Limo MB SA 9,0 81,0 10,0 0,0 5,0 5,0 0,0 0,0 1,0 3,0 81,0 10,0 81,0 Arcilita
11.410' - 11.420'
0,05 Limo Med SA 10,0 45,0 42,0 3,0 4,0 4,0 0,0 0,0 1,0 5,0 45,0 42,0 45,0 Limolita
11.830' - 11.840' 0,05 Limo MB SA 10,0 90,0 0,0 0,0 3,0 3,0 0,5 0,5 0,0 6,0 90,0 0,0 90,0 Arcilita
0,04 Limo MB SA 8,0 92,0 0,0 0,0 4,0 4,0 0,5 0,0 0,0 3,5 92,0 0,0 92,0 Arcilita
12.220' - 12.230'
0,09 A. Muy fina B SA 45,0 8,0 47,0 0,0 27,0 3,0 30,0 7,0 4,0 4,0 8,0 15,0 73,2 17,1 9,8 8,0 Subarcosa
14.810' - 14.820' 0,05 Limo B SA-SR 55,0 40,0 5,0 0,0 44,0 1,0 45,0 10,0 0,0 0,0 40,0 5,0 40,0 Limolita
EOCENO

15.340' - 15.350' 0,03 Limo MB SA 13,0 72,0 15,0 0,0 6,0 1,0 7,0 3,0 0,0 0,5 2,5 72,0 15,0 72,0 Arcilita
15.670' - 15.680' 2,0 98,0 0,0 0,0 1,0 1,0 0,0 0,0 0,0 1,0 98,0 0,0 98,0 Arcilita
16.020' - 16.030' 1,0 99,0 0,0 0,0 1,0 1,0 0,0 0,0 0,0 99,0 0,0 99,0 Arcilita

b) ROCAS CARBONÁTICAS

TEXTURA COMPOSICIÓN
EDAD Muestra Composición General Siliciclást. Ortoquímicos Aloquímicos CLASIFICACIÓN
Silisiclast Ortoquim Aloquim Porosid. TOTAL Micrita Microesp. Espato Dolomita Sílice TOTAL Foraminiferos

12.720' - 12.730' 0,0 95,0 5,0 0,0 0,0 95,0 95,0 5,0 Mudstone
OLIGOC.
13.370' - 13.380' 0,0 96,0 4,0 0,0 0,0 16,0 80,0 96,0 4,0 Mudstone
13.620' - 13.630' 0,0 100,0 0,0 0,0 0,0 95,0 5,0 100,0 0,0 Mudstone
13.930' - 13.940' 0,0 95,0 5,0 0,0 0,0 95,0 95,0 5,0 Mudstone
14.330' - 14.340' 0,0 91,0 8,0 1,0 0,0 91,0 91,0 8,0 Mudstone
14.810' - 14.820' 0,0 96,0 4,0 0,0 0,0 96,0 96,0 4,0 Mudstone
EOCENO

15.340' - 15.350' 0,0 95,0 5,0 0,0 0,0 92,0 3,0 95,0 5,0 Mudstone
0,0 90,0 10,0 0,0 0,0 90,0 90,0 10,0 Wackestone
15.420' - 15.430'
0,0 65,0 35,0 0,0 0,0 65,0 65,0 35,0 Packstone
0,0 97,0 3,0 0,0 0,0 17,0 80,0 97,0 3,0 Mudstone
15.670' - 15.680'
0,0 75,0 25,0 0,0 0,0 75,0 75,0 25,0 Wackestone
16.020' - 16.030' 0,0 94,0 6,0 0,0 0,0 92,0 2,0 94,0 6,0 Mudstone

LEYENDA
Escog: escogimiento; Red: redondez; M: malo; Med: medio; B: bueno; MB: muy bueno; A: angulares;
SA: subangulares; SR: subredondeados; IGN: ígneo; METM: metamórfico; FELD: feldespatos;
F.R: fragmentos de roca; ACC: accesorios; MTZ: matriz; CEMT: cemento; Microesp: microespato.

Jorham Contreras 167


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

c) Evolución diagenética

La secuencia paleógena perforada por el pozo MTC-2X alcanzó una etapa


de diagénesis tardía. Los procesos diagenéticos identificados se mencionan a
continuación:

Moderado a alto grado de compactación mecánica que origina contactos


longitudinales y cóncavo-convexos. Este proceso se observó sólo en los
litotipos donde el grado de cementación es bajo, y permitió la compactación de
la roca (Figura 6.3). En algunos casos se observa deformación de partículas
dúctiles, tales como fragmentos de roca y micas, y pequeñas fracturas.

Cementación principalmente por calcita, presente en un 95% de los litotipos


observados (Figura 6.4), la cual ocurre en una etapa de diagénesis temprana,
generando expansión del empaquetamiento original, y por consiguiente,
inhibiendo la compactación mecánica. En una etapa de diagénesis posterior,
intermedia a tardía, generó corrosión y reemplazo de los componentes
siliciclásticos.

En las calizas el cemento es principalmente calcítico con textura


microgranular (microespato), asociado a procesos de recristalización de la
micrita (Figuras 6.4 y 6.5). Se observa con textura isópaco y rellenando
espacio poroso.

Adicionalmente, se observó en algunas muestras cementación por sílice y


óxido de hierro. Ambos tipos de cemento precipitan en una etapa posterior a la
cementación por calcita, probablemente durante la diagénesis intermedia. El
sílice se presenta rellenando fracturas y el óxido de hierro (principalmente
hematita), aparentemente precipita en zonas de previa disolución de minerales
de arcillas y podría estar asociado a la alteración de fragmentos de rocas
sedimentarios y arcillas que contienen hierro dentro de su estructura.

Jorham Contreras 168


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Alteración de los feldespatos, micas y fragmentos líticos a minerales de


arcillas. Los análisis de difracción de rayos X muestran que minerales de
arcillas de tipo esmectita presentan alteración a minerales de tipo ilita, a través
de arcillas de capas mixtas de tipo ilita / esmectita. Esta transformación ocurrió
durante el soterramiento progresivo, a condiciones de alta presión y
temperatura, bajo las cuales se generan arcillas de capas mixtas tipo
ilita / esmectita con arreglo ordenado, lo cual indica una profundidad de
soterramiento alrededor de los 3.500 m (SANDOVAL, 2000).

Precipitación de dolomita tardía (Figura 6.6), posiblemente asociada a la


liberación de hierro y magnesio a partir de la transformación de esmectita a ilita
(PETTIJOHN et al. 1973, en SANDOVAL 2000).

TABLA 6.4
Diagrama paragenético para la secuencia Eoceno - Oligoceno en el pozo MTC-2X

Interfase agua / sedimento 80°C 130ºC


Etapas Diagéneticas
Soterramiento Somero Soterramiento Intermedio Soterramiento Profundo
Procesos Diagéneticos
Compactación
Deformación de granos dúctiles
Cementación por calcita
Cementación por sílice
Alteración de feldespatos
Alteración de fragmentos líticos y micas
Alteración de minerales de arcillas
Reemplazamiento (calcitización)
Cemento de óxido de hierro
Transformación de esmectita a ilita
Precipitación de dolomita

Procesos que destruyen porosidad


Procesos que generan porosidad
Procesos que generan microporosidad

Jorham Contreras 169


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

1 mm. 1 mm.

FIGURA 6.3. Subarcosa de grano FIGURA 6.4. Limolita calcárea, con


muy fino, muestra 12.220’, pozo granos de cuarzo y feldespatos
MTC-2X. Obj. 2.5x, nícoles cruzados cementados por calcita, muestra
11.830’, pozo MTC-2X. Obj. 2.5x,
nícoles cruzados.

1 mm.
1 mm.

FIGURA 6.5. Wackestone de FIGURA 6.6. Dolomitización de


foraminíferos, muestra 15.420’, pozo fragmento de chert en una etapa de
MTC-2X. Obj. 10x, nícoles cruzados. diagénesis tardía. Muestra 16.020’, pozo
MTC-2X. Obj. 10x, nícoles cruzados

Jorham Contreras 170


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

d) Análisis bioestratigráfico

Las unidades definidas a partir de los análisis bioestratigráficos de alta


resolución, desarrollados recientemente por DURAN et al. (2002), presentan ciertas
diferencias con las unidades planteadas por HAKK (1980) y EVANS (1983). En la
tabla 6.5 se muestran los límites y zonas bioestratigráficas utilizadas por DURAN et
al. (2002), que fueron tomadas como base para el presente trabajo:

TABLA 6.5 Zonación bioestratigráfica para el pozo MTC-2X


DURAN et al. (2002)

ZONAS

PROF. FORAMINÍFEROS NANNOPLANC.


EDAD CALCÁREO
BOLLI & SAUNDERS (1985)
BLOW (1969)
(pies) TOUMARKINE & LUTERBACHER (1985) MARTINI (1971)
10.800' Globorotalia kugleri
Oligoceno
Tardío

P21 - P22 NP-24 - NN1

Globigerina ciperoensis ciperoensis


OLIGOCENO

11.500'
Globorotalia opima opima
P19 - 20
Oligoceno
Temprano

NP24- NP25
P18 Pseuhastigerina micra
Turborotalia cerroazulensis s.l.
13.950'
P15 - P17
Eoceno
Tardío

Indeterminado
EOCENO

Globigerinatheka semiinvoluta
14.950'
Temprano
Eoceno

NP17 - NP19
P11-P15
16.401' Globigerinatheka subconglovata NP16 - NP17

Jorham Contreras 171


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6.1.1.2 POZO PMO-2X

Está ubicado en la subcuenca La Blanquilla Este, aproximadamente a 30


Km al noroeste de la isla de Margarita, en la zona de la falla transcurrente de
Margarita. Alcanza una profundidad de 12.768’ (3.893 m) atravesando una
secuencia sedimentaria de edad Oligoceno a Reciente, según EVANS (1982a,
1983), o Mioceno Temprano al Reciente, según DURAN et al. (2002).

a) Descripción estratigráfica y litológica

Debido a que este pozo se encuentra en la zona de fallas transcurrente de


Margarita, el estudio de la secuencia sedimentaria revela una complejidad
estructural, interpretada por EVANS (1983) en base a estudios de nannoplancton
calcáreo, como una cuña de edad oligoceno en contacto de falla con los depósitos
del Mioceno Temprano, tal como se muestra en la tabla 6.6.

TABLA 6.6 Unidades cronoestratigráficas del pozo PMO-2X, según EVANS (1983)

LITOLOGÍA Y
PROF. ESPESOR EDAD
AMBIENTE DEPOSITACIONAL
Arcillas con abundantes
1.350' 412 m Reciente
1350' fragmentos de conchas
Arcillas de ambiente nerítico medio a
3.650' 1.113 m Pleistoceno interno con abundantes fragmentos
5.000' de conchas

Lutitas y areniscas delgadas con


2.640' 805 m Plioceno
abundantes fragmentos de conchas
7.640'

360' 110 m Oligoceno Lutitas de ambiente batial


8.000'
CONTACTO DE FALLA
Lutitas
10.750'
Lutitas con intercalaciones de
4.678' 1.426 m Mioceno Inferior
areniscas de grano de grano medio,
interpretadas como depósitos de
12.768' frente deltaíco.

Jorham Contreras 172


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Debido a esta complejidad estructural, además del interés en los depósitos


terciarios de la región costafuera de Venezuela, se han desarrollado estudios
bioestratigráficos integrados más recientes que han permitido realizar nuevas
interpretaciones de la secuencia perforada en La Blanquilla, tal como se muestra a
continuación:

TABLA 6.7 Unidades cronoestratigráficas del pozo PMO-2X, según DURAN et al. (2002)

LITOLOGÍA Y
PROF. ESPESOR EDAD
AMBIENTE DEPOSITACIONAL

4.900' 1.494 m Pleistoceno Arcillas y lutitas de ambiente


4.900' nerítico medio a interno en el tope

5.430' 530' 162 m Plio-Pleistoceno

Lutitas con intercalaciones de


2.060' 328 m Plioceno Superior areniscas de ambiente batial
intermedio a nerítico externo
7.490' CONTACTO DE FALLA O DISCORDANTE ?

7.550' 60' 18 m Mioceno Inferior


CONTACTO DE FALLA
1.680' 512 m Mioceno Medio
Lutitas de ambiente batial inferior a
9.230' Mioceno medio, con intercalaciones de
areniscas delgadas
3.538' 1.079 m Mioceno Inferior

12.768'

Tal como se puede observar DURAN et al. (2002), a diferencia de EVANS


(1983), descartan la existencia de un intervalo o cuña oligocena intercalada con
los depósitos del Mioceno. Estos autores sugieren un intervalo de 60’ de espesor
con claras evidencias de retrabajo, en contacto de falla con el Mioceno Medio en
la base y en el tope en contacto de falla o discordante con el Plioceno Tardío.

Los análisis bioestratigráficos y sedimentológicos recientes permitieron


determinar en este intervalo, una mezcla de fauna oligocena con fauna más joven
de edad Mioceno, en donde se consideró la fauna terciaria más joven in situ y la

Jorham Contreras 173


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

oligocena producto de retrabajo. Por esta razón, este pozo fue descartado del
presente estudio ya que no aporta información de la secuencia paleógena de
interés para este trabajo.

6.1.1.3 POZO PMN-1X

Se localiza al noreste del pozo PMO-2X, en la subcuenca La Blanquilla


Este, aproximadamente a 28 Km al noroeste de la isla de Margarita. Alcanza una
profundidad máxima de 12.354’ (3.766 m), perforando rocas de edad Oligoceno al
Reciente.

a) Descripción estratigráfica y litológica

Al igual que en los pozos estudiados con anterioridad, los primeros análisis
sedimentológicos y bioestratigráficos fueron realizados por HAKK (1980) y EVANS
(1982a, 1983). Posteriormente, DURAN et al. (2002) realizan una revisión y
validación de la información, a través de análisis más exhaustivos, en los cuales
se obtienen notables diferencias en los espesores y profundidad de los límites de
las unidades cronoestratigráficas. En las tablas 6.8 y 6.9 se muestran ambas
interpretaciones.

TABLA 6.8 Unidades cronoestratigráficas del pozo PMN-1X, según EVANS (1983)
LITOLOGÍA Y
PROF. ESPESOR EDAD
AMBIENTE DEPOSITACIONAL
Arcillas con abundantes fragmentos
2.200 670 m Plio-Pleistoceno de conchas, depositadas en un
2.200' ambiente nerítico medio a interno.

2.331' 711 m Mioceno Medio Arcilitas con areniscas delgadas de


grano fino y abundantes fragmentos
4.531' metamórficos, depositadas en un
Mioceno ambiente marino profundo, bajo
condiciones turbidíticas en facies de
5.969' 1.820 m Mioceno Inferior abanico distal en la base, pasando a
un dominio nerítico en el tope
10500'

1.854' 565 m Oligoceno Lutitas de ambiente batial


12.354'

Jorham Contreras 174


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

TABLA 6.9 Unidades cronoestratigráficas del pozo PMN-1X, según DURAN et al. (2002)

LITOLOGÍA Y
PROF. ESPESOR EDAD
AMBIENTE DEPOSITACIONAL

1.000' 328 m Reciente


1.000'
Arcillas con intercalaciones de
1.350' 412 m Pleistoceno areniscas de ambiente batial superior
2.350' a nerítico interno en el tope

2.360' 720 m Mioceno Medio


Lutitas con intecalaciones de
4.710'
Mioceno areniscas delgadas, depositadas en
un ambiente batial medio a superior
3.290' 1003 m Mioceno Inferior
8.000'

3.150' 960 m Oligoceno Superior Lutitas de ambiente batial


Oligoceno
11.150' intermedio a inferior

12.000' 850' 270 m Oligoceno Inferior

354' 108 m Indeterminado Lutitas de ambiente batial


12.354'

Ambas interpretaciones sugieren una columna estratigráfica continua desde


el Oligoceno al Mioceno Medio, interrumpida por un hiatus que dura hasta la parte
inferior del Pleistoceno, para luego continuar con una secuencia Pleistoceno -
Reciente.

Sin embargo, los estudios recientes asignan a la secuencia oligocena un


espesor superior al asignado por EVANS (1983), al mismo tiempo que el Mioceno
Inferior disminuye considerablemente.

Es importante destacar que los análisis realizados por DURAN et al. (2002)
son resultado de la integración de varias disciplinas bioestratigráficas en conjunto
con las evidencias sísmicas. Además, dado que son análisis bioestratigráficos de
alta resolución permitieron definir unidades cronoestratigráficas de menor
extensión y con características paleobatimétricas y sedimentológicas mejor
conocidas que las planteadas en estudios previos.

Jorham Contreras 175


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

b) Descripción petrográfica

El análisis petrográfico se realizó en base a 22 muestras de canal, distribui-


das a lo largo de toda la unidad oligocena, comprendidas entre 8.100’ y 12.200’.

La secuencia está constituida por lutitas (60%) intercaladas con areniscas


de grano muy fino a fino (35%) y calizas (5%). Las lutitas son de color gris,
calcáreas y con alto contenido de foraminíferos. Las areniscas son de color crema
y gris claro, predominantemente calcáreas y de granos angulosos a subangulosos.
Las calizas son de color crema y fosilíferas.

Mineralógicamente las lutitas están constituidas por arcillas entre 65 y 100%


(arcilitas), en la mayoría de las muestras observadas, aunque en algunos casos
las arcillas disminuyen en proporción (5-20%) y se presentan granos de cuarzo y
fragmentos de roca tamaño limo entre 80 y 95% (limolitas).

Los litotipos arenosos identificados fueron clasificados como: 16 subarcosas


(42%), 6 arenitas arcósicas (18%), 2 sublitarenitas (6%), 2 arenitas líticas (6%),
1 arenita cuarzosa (3%) y 1 grauwaca lítica (3%). El cemento de calcita se observa
en un 95% de los litotipos mencionados.

Adicionalmente, se identificaron algunas calizas que fueron clasificadas


como: 3 mudstone (9%), 1 wackestone (3%), 1 packstone (3%) y 3 grainstone (9%).

Areniscas

Las areniscas presentan alto contenido de feldespatos, principalmente


ortosa (2-22%), con cantidades menores de plagioclasa (0-7%). El cuarzo es
principalmente de tipo ígneo plutónico monocristalino (3-55%), con cantidades
menores de metamórfico monocristalino (2-32%). Los fragmentos de roca son
escasos, en la mayoría de los casos no exceden el 12% y se distingue el chert
como mineral predominante.

Jorham Contreras 176


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

La proporción de cemento es muy variable, oscila entre 2 y 55%, siendo la


calcita el mineral predominante (8-55%), con cantidades menores de sílice (2-
10%) y óxido de hierro (2-8%). La matriz se presenta entre 1 y 14%, estando
representada por minerales de arcillas (1-10%) y micrita (0-5%).

Además de los litotipos arenosos, en 4 muestras ubicadas en la parte media


de la unidad, se observaron de manera individual fragmentos de roca,
principalmente tipo chert, en granos de tamaño arenas gruesas a gránulos, los
cuales originalmente formaban parte de las areniscas.

Calizas

Están constituidas por calcita (45 - 74%), mayormente con textura


microgranular (microespato) y únicamente en una muestra se observó textura
poikilotópica. La micrita oscila entre 2 y 98%, siendo determinante en la
clasificación de los litotipos, observándose con valores de 94 a 98% en los
mudstone y de 2 a 17% en los packstone y wackestone, respectivamente.

Los componentes aloquímicos están representados por foraminíferos


pláncticos de aguas profundas, los cuales oscilan entre 2 y 52%. Los
componentes siliciclásticos no sobrepasan el 3% y la porosidad está
prácticamente ausente ( ≤ 2%).

Finalmente se puede decir que los litotipos arenosos observados en la


secuencia oligocena del pozo PMN-1X presentan alto contenido de feldespatos
(ortosa) y cuarzo (ígneo monocristalino), cementados por calcita y con baja
proporción de matriz (minerales de arcillas). Las calizas son fosilíferas
(foraminíferos pláncticos de aguas profundas) y con variaciones en la proporción
de matriz y cemento carbónatico.

La composición mineralógica detallada se puede observar en la tabla 6.10.

Jorham Contreras 177


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

TABLAS 6.10 a y b Descripción petrográfica de muestras de canal, pozo PMN-1X.


a) ROCAS SILICICLÁSTICAS
TEXTURA COMPOSICIÓN CLASIFICACIÓN
Muestra Tam. de Composición General CUARZO RECALCULO (100%)
grano
Escog. Red. FELD. F.R. ACC. MTZ. CEMT. Nombre
Granos Matriz Cement. Porosd. IGN. METM. TOTAL Qz. Feld FR Matriz
Muy Fina B SA-A 49,0 5,0 46,0 0,0 25,0 10,0 35,0 6,0 3,0 5,0 5,0 46,0 79,5 13,6 6,8 5,0 Subarcosa
8.100' Muy Fina B SA-A 82,0 1,0 17,0 0,0 27,0 16,0 43,0 25,0 11,0 3,0 4,0 17,0 54,4 31,6 13,9 4,0 Arenita arcósica
Limo B 45,0 55,0 0,0 0,0 15,0 5,0 20,0 15,0 5,0 5,0 55,0 0,0 55,0 Arcilita
Muy Fina B SA 41,0 5,0 54,0 0,0 25,0 3,0 28,0 4,0 6,0 3,0 5,0 54,0 73,7 10,5 15,8 5,0 Sublitarenita
8.250' Media Med SA 45,0 0,0 55,0 0,0 17,0 12,0 29,0 7,0 5,0 4,0 0,0 55,0 70,7 17,1 12,2 0,0 Subarcosa
Muy Fina B SA 95,0 0,0 5,0 0,0 55,0 28,0 83,0 10,0 0,0 2,0 0,0 5,0 89,2 10,8 0,0 0,0 Subarcosa
Muy Fina B SA-A 41,0 4,0 55,0 0,0 21,0 9,0 30,0 5,0 2,0 4,0 4,0 55,0 81,1 13,5 5,4 4,0 Subarcosa
8.500' Muy Fina B SA 75,0 3,0 22,0 0,0 23,0 15,0 38,0 23,0 11,0 3,0 3,0 22,0 52,8 31,9 15,3 3,0 Arenita arcósica
Limo B 41,0 59,0 0,0 0,0 13,0 6,0 19,0 16,0 2,0 4,0 59,0 0,0 59,0 Arcilita
Muy Fina B SA-A 51,0 2,0 47,0 0,0 25,0 12,0 37,0 10,0 2,0 2,0 2,0 47,0 75,5 20,4 4,1 2,0 Subarcosa
8.600' Muy Fina B SA-A 82,0 1,0 17,0 0,0 25,0 15,0 40,0 27,0 12,0 3,0 4,0 17,0 50,6 34,2 15,2 4,0 Arenita arcósica
Limo B 45,0 55,0 0,0 0,0 15,0 5,0 20,0 15,0 5,0 5,0 55,0 0,0 55,0 Arcilita
Limo B SA-SR 18,0 80,0 2,0 0,0 8,0 2,0 10,0 0,0 0,0 8,0 80,0 2,0 80,0 Arcilita
8.800' Fina Med SA 74,0 14,0 12,0 0,0 59,0 59,0 10,0 5,0 15,0 12,0 79,7 13,5 6,8 15,0 Subarcosa
Fina Med SA 47,0 5,0 48,0 0,0 38,0 4,0 42,0 2,0 0,0 3,0 5,0 48,0 95,5 4,5 0,0 5,0 Arenita cuarzosa
9.030' Muy Fina B SR 65,0 25,0 10,0 0,0 15,0 15,0 0,0 50,0 25,0 10,0 23,1 0,0 76,9 25,0 Grauwaca lítica
9.300' Media Med SA 47,0 0,0 53,0 0,0 27,0 8,0 35,0 7,0 2,0 3,0 0,0 53,0 79,5 15,9 4,5 0,0 Subarcosa
Muy Fina Med SA 27,0 5,0 68,0 0,0 12,0 3,0 15,0 8,0 1,0 3,0 5,0 68,0 62,5 33,3 4,2 5,0 Arenita arcósica
9.410'
Muy Fina B SA-SR 92,0 0,0 8,0 0,0 66,0 17,0 83,0 7,0 0,0 2,0 0,0 8,0 92,2 7,8 0,0 0,0 Subarcosa
9.770' - 780' Muy Fina B SA-A 44,0 4,0 52,0 0,0 25,0 25,0 10,0 4,0 5,0 4,0 52,0 64,1 25,6 10,3 4,0 Arenita arcósica
Muy Fina B SA 67,0 3,0 30,0 0,0 35,0 5,0 40,0 20,0 3,0 4,0 3,0 25,0 63,5 31,7 4,8 3,0 Arenita arcósica
9.900'
Limo B SA 83,0 4,0 13,0 0,0 39,0 16,0 55,0 23,0 3,0 2,0 4,0 13,0 4,0 Limolita
10.150' Arcillas B 5,0 95,0 0,0 0,0 3,0 3,0 1,0 0,0 1,0 95,0 0,0 95,0 Arcilita
10.240' Fina Med-B SA 76,0 0,0 22,0 2,0 30,0 18,0 48,0 14,0 8,0 6,0 0,0 20,0 68,6 20,0 11,4 0,0 Subarcosa
Muy Fina B SA 80,0 0,0 20,0 0,0 24,0 16,0 40,0 9,0 28,0 3,0 0,0 20,0 51,9 11,7 36,4 0,0 Arenita lítica
10.400'
Arcillas B 5,0 95,0 0,0 0,0 3,0 3,0 1,0 0,0 1,0 95,0 0,0 95,0 Arcilita
10.640' Fina Med SA 77,0 1,0 21,0 1,0 37,0 11,0 48,0 16,0 9,0 4,0 1,0 21,0 65,8 21,9 12,3 1,0 Subarcosa
10.800' Muy Fina B-Med SA-SR 51,0 4,0 45,0 0,0 31,0 4,0 35,0 11,0 0,0 5,0 3,0 45,0 76,1 23,9 0,0 3,0 Subarcosa
11.030' Muy Fina B SA-A 44,0 0,0 56,0 0,0 18,0 10,0 28,0 10,0 4,0 2,0 0,0 56,0 66,7 23,8 9,5 0,0 Subarcosa
11.200' Muy Fina Med SA-SR 63,0 0,0 37,0 0,0 27,0 5,0 32,0 10,0 15,0 6,0 0,0 37,0 56,1 17,5 26,3 0,0 Arenita lítica
Fina Med-B SA 74,0 0,0 26,0 0,0 32,0 18,0 50,0 16,0 4,0 4,0 0,0 26,0 71,4 22,9 5,7 0,0 Subarcosa
11.450'
Muy Fina B SA 54,0 0,0 46,0 0,0 20,0 16,0 36,0 10,0 5,0 3,0 0,0 46,0 70,6 19,6 9,8 0,0 Subarcosa
11.670' Muy Fina B SA 61,0 0,0 38,0 1,0 40,0 40,0 11,0 5,0 5,0 0,0 38,0 71,4 19,6 8,9 0,0 Subarcosa
Fina Med SA-SR 72,0 3,0 25,0 0,0 38,0 12,0 50,0 15,0 2,0 5,0 3,0 25,0 74,6 22,4 3,0 3,0 Subarcosa
11.800' Limo B SA 84,0 6,0 10,0 0,0 35,0 21,0 56,0 22,0 5,0 1,0 6,0 10,0 6,0 Limolita
Limo B SA 35,0 55,0 10,0 0,0 7,0 12,0 19,0 10,0 0,0 6,0 55,0 10,0 55,0 Arcilita
12.000 Muy Fina B-Med SA-SR 68,0 14,0 18,0 0,0 50,0 50,0 8,0 10,0 14,0 18,0 73,5 11,8 14,7 14,0 Sublitarenita

b) ROCAS CARBONÁTICAS
TEXTURA COMPOSICIÓN
CLASIFICACIÓN
Muestras Composición General Siliciclásticos Ortoquímicos Aloquímicos
Silisiclast Ortoquim Aloquim Porosid. Tipo TOTAL Micrita Microesp. Espato Sílice TOTAL Foraminiferos DUNHAM (1962)

10.240' 1,0 74,0 25,0 0,0 Cuarzo 1,0 74,0 74,0 25,0 Grainstone
11.030' 1,0 70,0 29,0 0,0 Glauconita 1,0 70,0 70,0 29,0 Grainstone
11.450' 0,0 70,0 30,0 0,0 0,0 70,0 70,0 30,0 Grainstone
0,0 94,0 6,0 0,0 0,0 94,0 94,0 6,0 Mudstone
11.800'
3,0 45,0 51,0 1,0 Chert 3,0 2,0 17,0 26,0 45,0 52,0 Packstone
12.000' 0,0 98,0 2,0 0,0 0,0 98,0 98,0 2,0 Mudstone
0,0 95,0 5,0 0,0 0,0 95,0 95,0 5,0 Mudstone
12.200'
0,0 52,0 47,0 1,0 0,0 17,0 27,0 8,0 52,0 47,0 W ackstone

LEYENDA
Escog: escogimiento; Red: redondez; M: malo; Med: medio; B: bueno; MB: muy bueno; A: angulares;
SA: subangulares; SR: subredondeados; IGN: ígneo; METM: metamórfico; FELD: feldespatos;
F.R: fragmentos de roca; ACC: accesorios; MTZ: matriz; CEMT: cemento; Microesp: microespato.

Jorham Contreras 178


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

c) Evolución diagenética

En la secuencia oligocena perforada por el pozo PMN-1X, se reconocieron


evidencias de procesos diagenéticos que indican una etapa de diagénesis
intermedia a tardía incipiente, las cuales se mencionan a continuación:

Bajo a moderado grado de compactación mecánica que origina


principalmente contactos longitudinales. En algunos casos se observa
deformación de partículas dúctiles, tales como fragmentos de roca y micas.

Cementación principalmente por calcita, presente en un 95% de los litotipos


observados, la cual ocurre en una etapa de diagénesis temprana, generando
expansión del empaquetamiento original y por consiguiente, inhibe la
compactación mecánica. En una etapa de diagénesis intermedia genera
corrosión y reemplazo de los componentes siliciclásticos (Figuras 6.7 y 6.8).

Adicionalmente, se observó en algunas muestras cementación por sílice y


óxido de hierro, generalmente en baja proporción (< 10%). La cementación por
sílice ocurre en una etapa de soterramiento temprano a intermedio y se
observa mayormente como silicificación de granos carbonáticos o cemento de
calcita. El óxido de hierro (principalmente hematita) ocurre en una etapa de
diagénesis intermedia, aparentemente precipita en zonas de previa disolución
de minerales de arcillas y podría estar asociado a la alteración de fragmentos
de rocas sedimentarios y arcillas que contienen hierro dentro de su estructura.

Alteración de los feldespatos, micas y fragmentos líticos a minerales de


arcillas (Figuras 6.10 y 6.11). Los feldespatos se alteran mayormente a
minerales de arcillas tipo ilita, mientras que las micas y fragmentos de roca a
arcillas tipo esmectita y clorita. Los análisis de difracción de rayos X muestran
la presencia de arcillas de capas mixtas tipo ilita / esmectita en dos muestras: a
9.150’, con arreglo ordenado y a 11.670’, con arreglo desordenado.

Jorham Contreras 179


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Estos resultados no permiten definir de manera concreta la paleotempera-


tura o grado de soterramiento alcanzado, pero en base a la presencia de
evidencias indicativas de una etapa intermedia y ausencia de otras que
indiquen una etapa posterior, se asume que la secuencia alcanzó condiciones
de diagénesis intermedia.

Disolución de minerales de arcillas, que genera porosidad secundaria en


baja proporción (<2%). No se observan evidencias claras que permitan
identificar las causas de este proceso.

Las calizas presentan cementación calcítica con textura microgranular


(microespato), asociada a la recristalización avanzada de la micrita (Figura
6.9). En algunos casos se observan cristales con textura poikilotópica
rellenando espacio poroso y fracturas.

TABLA 6.11
Diagrama paragénetico para la secuencia Oligoceno en el pozo PMN-1X

Interfase agua / sedimento 80°C 130ºC


Etapas Diagéneticas
Soterramiento Somero Soterramiento Intermedio
Procesos Diagéneticos
Compactación
Deformación de granos dúctiles
Cementación por calcita
Cementación por sílice
Alteración de feldespatos
Alteración de fragmentos líticos y micas
Reemplazamiento (calcitización)
Disolución de matriz
Cemento de óxido de hierro

Procesos que destruyen porosidad


Procesos que generan porosidad
Procesos que generan microporosidad

Jorham Contreras 180


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO
0,5 mm. 1 mm.

FIGURA 6.7. Subarcosa de grano medio. FIGURA 6.8. Arenita cuarzosa calcárea.
Obsérvese la corrosión y reemplazo por Obsérvese la abundante cementación
parte de la calcita, muestra 8.250’, pozo temprana de calcita, que genera expansión
PMN-1X. Obj. 20x, nícoles cruzados. del empaquetamiento, muestra 8.800’,
pozo PMN-1X. Obj. 10x, nícoles cruzados.
1 mm. 1 mm.

FIGURA 6.9. Grainstone de FIGURA 6.10. Subarcosa de grano muy


foraminíferos, muestra 11.030’, pozo fino. Obsérvese la alteración de los
PMN-1X. Obj. 10x, nícoles paralelos. feldespatos a minerales de arcillas y la
corrosión por parte de la calcita, muestra
11.670’, Obj. 2.5x, nícoles cruzados.
1 mm. 1 mm.

a b

FIGURA 6.11. a) 11.450’ y b) 10.240’, pozo PMN-1X. Subarcosas de grano fino. Obsérvese
la alteración de los feldespatos a minerales de arcillas y el reemplazo por parte de la calcita.
Obj. 10x, nícoles cruzados.

Jorham Contreras 181


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

d) Análisis bioestratigráfico

Evans (1982b, 1983) en base a estudios bioestratigráficos de foraminíferos,


sugiere la existencia de un intervalo de edad Oligoceno de 2.354’ de espesor,
comprendido entre 10.500’ y 12.354’ (P.F.), constituido por lutitas de ambiente
batial.

DURAN et al. (2002) asignan al intervalo Oligoceno un espesor de 4.000’,


comprendido entre 8.000 y 12.000’. Infrayacente reportan un intervalo de edad
indeterminada, comprendido entre 12.000 y 12.354’ (P.F). Ambas secuencias
están constituidas por lutitas de ambiente batial con intercalaciones de areniscas
de grano fino (Tabla 6.12).

TABLA 6.12 Zonación bioestratigráfica para el pozo PMN-1X


DURAN et al. (2002)

ZONAS
PROF. FORAMINÍFEROS NANNOPLANC.
EDAD CALCÁREO
BLOW (1969) BOLLI & SAUNDERS (1985)
(pies) MARTINI (1971)
8.000' N4 Globigerinoides primordius
Globorotalia kugleri
Oligoceno Tardío

NP-25

P21 - P22 NP-24


OLIGOCENO

Indet. P20 - P22 Globigerina ampliapertura


11.150'
Globorotalia opima opima
Indeterminado
Temprano
Oligoceno

P19 - P21

12.000' Pseuhastigerina micra

Indeterm. Indeterminado
12.354'

Jorham Contreras 182


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6.1.2 ANÁLISIS DE PROCEDENCIA

El estudio de procedencia y determinación de fuentes de sedimentos, se


realizó a través de los diagramas ternarios de DICKINSON & SUCZEK (1979), los
cuales permiten conocer de manera general el tipo de provincia tectónica que
actúo como fuente de aporte para determinada secuencia sedimentaria. Para esto,
es necesario establecer la composición y proporción mineralógica a través del
análisis petrográfico y conteo modal.

Al igual que en la secuencia turbidítica que aflora en la isla de Margarita, el


análisis de procedencia para las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco, se realizó
únicamente en base a la estimación visual de los componentes en el análisis
petrográfico en muestras provenientes de los depósitos eocenos – oligocenos. La
aplicación de estos diagramas en la secuencia de subsuelo puede reflejar, al igual
que en la secuencia de superficie, la composición relativa de las rocas y permite
determinar de manera general el tipo de provincia tectónica que actúo como fuente
de sedimentos.

El análisis petrográfico en muestras de canal no refleja exactamente la


composición de la roca total, debido a que únicamente se observa cierta fracción
de los componentes. Por lo tanto, la aplicación de estos diagramas sólo contribuye
de manera parcial al establecimiento de la proporción de los tipos mineralógicos
observados.

Jorham Contreras 183


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Q
CRATON
INTERIOR 3
Qm
CRATON
INTERIOR 11
18
20 RECICLADO
CONTINENTAL CONTINENTAL CUARZOSO
TRANSICIONAL TRANSICIONAL

OROGENO 42
45 43
RECICLADO RECICLADO
MEZCLA TRANSICIONAL

37
ARCO ARCO
BASAMENTO DISECTADO BASAMENTO 32
LEVANTADO DISECTADO
25

ARCO 18
TRANSICIONAL ARCO RECICLADO
13
TRANSICIONAL LÍTICO
ARCO NO
DISECTADO ARCO NO
DISECTADO
15 50
L F
23 47 13
Lt
PMN-1X MTC-2X

FIGURA 6.12 Diagramas de procedencia para los litotipos arenosos de los pozos PMN-1X y MTC-2X.
Cuenca La Blanquilla. DICKINSON & SUCZEK (1979).

El diagrama Q-F-L para los pozos PMN-1X y MTC-2X (Figura 6.12),


ubicados en la cuenca La Blanquilla, evidencia como fuente de aporte principal un
orógeno reciclado, con aportes menores de bloques continentales transicionales y
cratón interior. El orógeno reciclado puede estar representado por secuencias de
estratos levantados, plegados y fallados, que suministran detritos reciclados de
origen sedimentario y metasedimentario (DICKINSON & SUCZEK, 1979).

Estos orógenos pueden estar asociados a complejos de subducción, a


orógenos en colisión y a levantamientos del cinturón de deformación en cuencas
antepaís. Adicionalmente, se observa una dispersión hacia el campo de
basamento continental transicional, que puede estar representado por islas
volcánicas maduras y bloques de corteza continental limitados por fallas, producto
de la colisión oblicua entre el arco de islas de las Antillas Menores y el margen
norte de Sudamérica. Durante este evento, parte de las islas que conforman el
arco estuvieron expuestas y se produjo el levantamiento y emplazamiento de

Jorham Contreras 184


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

bloques continentales e ígneo-metamórficos, los cuales representan un aporte


importante de rocas cuarzo-feldespáticas.

En el diagrama Qm-F-Lt se destaca como fuente principal orógenos en


colisión (reciclados cuarzosos), con dispersión hacia la zona de mezcla y
basamento continental transicional.

Tal como se dijo con anterioridad, los reciclados cuarzosos y el basamento


continental transicional pueden estar asociados al levantamiento de bloques
continentales durante la colisión oblicua Caribe / Sudamérica, donde terrenos de
origen ígneo pueden representar una fuente de aporte secundaria.

Jorham Contreras 185


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6.2 CUENCA TUY-CARIACO

La cuenca Tuy-Cariaco es una depresión con orientación aproximada


suroeste-noreste, se extiende desde Santa Lucía al sur hasta la isla de Margarita
al norte, con un área de 20.000 km2 y prácticamente cubierta por las aguas del
Mar Caribe. Se divide en cuatro subcuencas, denominadas de norte a sur como:

Subcuenca Tuy-Cariaco norte


Subcuenca Cubagua
Fosa de Cariaco
Ensenada de Barcelona

Presenta una cobertura sedimentaria que alcanza más de 4,5 km de rocas


con edades que van desde el Paleógeno al Reciente. En la subcuenca Tuy-
Cariaco Norte se han registrado 3,5 km de rocas plio-pleistocenas, las cuales
poseen el mayor espesor de toda la secuencia (Ver 4.4.2).

Se han perforado 10 pozos distribuidos mayormente hacia la zona este y


sur de la cuenca, de los cuales 3 han descubierto hidrocarburos. Para el presente
trabajo fueron seleccionados 2 de estos pozos, los cuales se encuentran en la
subcuenca Cubagua (Figura 6.1). Ambos perforan la unidad paleógena y
corresponden al pozo CMA-1X con una profundidad final de 12.535’ y el pozo
CUBAGUA -1 con 4.670’.

Los depósitos más antiguos presentes en la cuenca Tuy-Cariaco


corresponden al Eoceno Medio, los cuales han sido datados en la subcuenca Tuy-
Cariaco Norte e interpretados en la subcuenca Cubagua. En ésta subcuenca, a
diferencia del resto de las subcuencas, la sección paleógena está asociada a una
fase extensional durante el Eoceno (Figura 6.14).

Se tomaron algunos datos del pozo MTC-1X, ubicado en la subcuenca Tuy


- Cariaco Norte, el cual perforó una secuencia de calizas de edad Eoceno Medio.

Jorham Contreras 186


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Esta secuencia ha sido interpretada por EVANS (1982a, 1983) e YSACCIS (1997)
como parte de columna sedimentaria del área, mientras que BLANCO & GIRALDO
(1992) la interpretan como un bloque transportado desde ambientes someros.

En la figura 6.13 se puede observar la distribución cronoestratigráfica y


diferencias en el relleno sedimentario entre las subcuencas de la cuenca Tuy-
Cariaco y la cuenca La Blanquilla.

FIGURA 6.13. Tabla de correlación en base a los datos de pozos en la zona costafuera de
Venezuela. Tomado y modificado de BLANCO & GIRALDO (1992)

Jorham Contreras 187


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

O E

FIGURA 6.14. Evolución geológica de la subcuenca Cubagua.


Tomado y modificado de GODDARD (1986)

Jorham Contreras 188


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6.2.1 DESCRIPCIÓN DE LOS POZOS EN ESTUDIO

6.2.1.1 POZO CMA-1X

Está ubicado al noroeste de Punta Arenas en la Península Araya-Paria y


aproximadamente a 16 km al suroeste de la isla Cubagua. Alcanza una
profundidad máxima de 12.535’ (3.820 m) llegando al basamento metamórfico
Cretácico Superior, del cual perfora + 485’ de rocas muy similares a las expuestas
en el Sistema Montañoso del Caribe, tal como lo expone EVANS (1983).

Suprayacente se encuentra la secuencia sedimentaria de rocas Eoceno-


Reciente con un espesor de 12.050’, donde se presenta una discordancia angular
a 6.420’ que limita los depósitos de edad Eoceno-Oligoceno? con los del Mioceno
Tardío - Reciente. Este pozo fue perforado como sondeo inicial en esta cuenca y
su objetivo fue probar la sección eocena, la cual no dio resultados positivos de
acumulación de hidrocarburos.

a) Descripción estratigráfica y litológica

HAKK (1980) y EVANS (1982a, 1983) realizaron los primeros estudios


sedimentológicos y bioestratigráficos de la secuencia perforada por este pozo,
quienes sugieren una secuencia continua del Eoceno al Reciente, interrumpida por
una discordancia entre el Oligoceno(?) y el Mioceno Tardío (Tabla 6.13).

A partir de 6.420‘ hacia la base, ubican una secuencia paleógena de 5.615’


(1.711 m) de espesor, prácticamente estéril, la cual dividen en un intervalo de
edad Eoceno (12.050’ – 10.020’) y otro de edad Oligoceno (?) (10.020’ – 6.420’).
Sin embargo, la interpretación de transectos sísmicos en esta subcuenca, no ha
permitido definir una superficie de discontinuidad o límite entre los depósitos
eocenos y oligocenos(?), por lo cual se considera como una sola unidad
sismoestratigráfica, suprayacente al basamento y cubierta de manera discordante
por los sedimentos del Mioceno Tardío.

Jorham Contreras 189


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Para el análisis sedimentológico de la secuencia paleógena se realizó


previamente el estudio de los registros eléctricos, donde se observaron diferencias
litológicas que sirvieron para dividir la secuencia en tres unidades estratigráficas
informales, tal como de describe a continuación:

Unidad estratigráfica informal III (10.020’ - 12.050’): Esta unidad está


conformada por areniscas de grano grueso a medio, localmente conglomeráticas,
con intercalaciones delgadas de lutitas estériles, interpretadas por HAAK (1980)
como una secuencia de “wild flysch”, de 2.030’ (619 m) de espesor. Litológica-
mente es muy similar al Grupo Punta Carnero, de edad Eoceno Medio que aflora
en la isla de Margarita, en base al cual, por correlación litoestratigráfica, se asigna
a esta unidad en el pozo CMA-1X una edad Eoceno.

Suprayacente, se observa un intervalo asignado por EVANS (1982b, 1983) al


Oligoceno(?), en base a estudios de palinología. Este autor reporta la presencia de
la especie Janduforia seamrogiformis, indicativa de una edad Oligoceno a
Mioceno?. Este intervalo presenta características sedimentológicas diferentes a la
unidad infrayacente y representa la sedimentación en un ambiente continental a
costero. Pueden reconocerse dos unidades estratigráficas informales:

Unidad estratigráfica informal II (8.480’ – 10.020’): Está caracterizada por


lutitas, moteadas, con un espesor de 1.540‘ (470 m).

Unidad estratigráfica informal I (6.420’ – 8.480’): Está caracterizada por


2.060’ (628 m) de intercalaciones de lutitas y areniscas mal a moderadamente es-
cogidas, de grano fino a grueso, que aumentan en proporción hacia el tope.

El Mioceno Tardío se caracteriza por arcilitas de ambiente nerítico externo a


batial superior, discordantes sobre la unidad paleógena, con 1.570’ (478 m) de
espesor, comprendidos entre 6.420‘ y 4.850’. Por encima se observan los
depósitos del Plioceno (4.850’ - 2.000’), con 2.850‘ (869 m) de espesor y de

Jorham Contreras 190


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

ambiente nerítico interno. Finalmente, la secuencia del Pleistoceno al Reciente,


con un espesor de 2.000’ (610 m), se caracteriza por arcillas con abundantes
fragmentos de conchas, similar a la del resto de los pozos en estudio.

TABLA 6.13 Unidades cronoestratigráficas del pozo CMA-1X.


Tomado y modificado de EVANS (1983)

LITOLOGÍA Y
PROF. ESPESOR EDAD
AMBIENTE DEPOSITACIONAL

465' 465' 142 m Reciente


Arcillas con abundantes fragmentos de
conchas
1.535' 468 m Pleistoceno
2.000'

Lutitas con intervalos delgados de


2.850' 869 m Plioceno areniscas depositadas en un ambiente
4.850' nerítico interno
Lutitas de ambiente nerítico externo
1.570' 479 m Mioceno Superior
6.420' a batial superior
Unidad informal I: areniscas
2.060' 628 m intercaladas con lutitas, depositadas en
un ambiente continental a trasicional
8.480' Oligoceno (?)
Unidad informal II: Lutitas de ambiente
1.540' 470 m
continental a trasicional
10.020'
Unidad informal III: Areniscas con
intercalciones delgadas de lutitas,
2.030' 619 m Eoceno Medio (?)
depositadas en un ambiente marno
12.050' profundo por corrientes turbidíticas

b) Descripción petrográfica

La descripción petrográfica se realizó a partir de las unidades estratigráficas


informales definidas:

Unidad I: Areniscas intercaladas con lutitas (6.420’ – 8.480’ )


Unidad II: Lutitas (8.480’ – 10.020’)
Unidad III: Areniscas con intervalos conglomeráticos (10.020’ – 12.050’)

Jorham Contreras 191


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

El análisis petrográfico se realizó en base a 28 muestras de canal,


distribuidas a lo largo de toda la secuencia, correspondiendo 10 a la unidad I, 1 a
la unidad II y 17 a la unidad III.

Unidad de areniscas intercaladas con lutitas: Se caracteriza por la


alternancia de areniscas (60%) y lutitas (40%), donde estas últimas se hacen más
abundantes hacia la parte basal de la unidad. Las areniscas son grano fino a
grueso, color gris claro, con granos subangulosos a subredondeados y
moderadamente escogidas. Están intercaladas con lutitas estériles de color gris,
medianamente compactadas.

En base a la clasificación de PETTIJOHN, POTTER & SIEVER (1972) se


identificaron tres litotipos arenosos: arenitas líticas (45%) y arenitas arcósicas
(20%). Adicionalmente, se observan de manera individual abundantes fragmentos
líticos (35%), principalmente metamórficos, los cuales originalmente formaban
parte de las arenitas líticas.

Unidad de lutitas: Se caracteriza por lutitas estériles de color gris,


medianamente compactadas con escaso intervalos arenosos. Únicamente se
realizó el análisis petrográfico de una muestra, en la cual se identificaron
fragmentos de lutitas principalmente compuestas por arcillas (90-100%) y cristales
de cuarzo y chert de tamaño muy fino (0-10%).

Unidad de areniscas con intervalos conglomeráticos: Se caracteriza por


areniscas (80-85%) de color gris claro, de grano fino a grueso, subangulosos a
subredondeados con moderado a buen escogimiento. Se observa cierta
proporción de lutitas (<5%) de color gris, altamente compactadas. Los intervalos
conglomeráticos representan aproximadamente un 10% y composicionalmente,
son similares a las areniscas, diferenciándose únicamente en el tamaño de grano.

Jorham Contreras 192


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Se identificaron 3 litotipos arenosos: arenitas líticas (40%), areniscas


calcáreas (20%) y arenitas arcósicas (10%). Adicionalmente, se observan de
manera individual abundantes fragmentos líticos (30%), principalmente
metamórficos, los cuales originalmente formaron parte de las areniscas líticas.

A lo largo de toda la secuencia considerada paleógena, no se observaron


cambios en la composición de los litotipos arenosos, sino únicamente variación en
la proporción de los mismos. No existen diferencias significativas en la
composición mineralógica entre las areniscas de las unidades I y III, ya que en
ambas las arenitas líticas son predominantes (40-50%), se observan
individualmente fragmentos líticos que originalmente pertenecen a las areniscas
(25-35%), mientras que las arenitas arcósicas y areniscas calcáreas varían en
proporción.

La composición mineralógica detallada se puede observar en la tabla 6.14.

Jorham Contreras 193


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

TABLA 6.14 Descripción petrográfica de muestras de canal del pozo CMA-1X.

COMPOSICIÓN CLASIFICACIÓN

Muestra

LITOT.
Unidad Tam. de Composición General CUARZO RECALCULO (100%)
Escog. Red. FELD. F.R. ACC. MTZ. CMT. Nombre
grano Granos Matriz Cemento Porosd. IGNEO METF. TOTAL Qz. Feld FR Matriz
1 Gruesa Med SA-SR 95,0 0,0 5,0 0,0 23,0 22,0 45,0 50,0 5,0 47,4 52,6 0,0 0,0 Arenita arcósica
6.650'
2 Fina B SA 51,0 40,0 4,0 5,0 4,0 6,0 10,0 6,0 35,0 40,0 4,0 19,6 11,8 68,6 40,0 Grauwaca lítica
UNIDAD I: ARENISCAS INTERCALADAS

6.810' 2 Muy fina B SA 66,0 0,0 34,0 0,0 56,0 56,0 5,0 4,0 1,0 35,0 86,2 7,7 6,2 0,0 Subarcosa

6.970' 2 Media M SR 97,0 0,0 3,0 0,0 5,0 62,0 67,0 23,0 7,0 3,0 69,1 23,7 7,2 0,0 Arenita arcósica

7.130' 2 Media Med SA-SR 79,0 1,0 20,0 0,0 8,0 35,0 43,0 11,0 18,0 7,0 1,0 20,0 59,7 15,3 25,0 1,0 Arenita lítica
CON LUTITAS

OLIGOCENO (?)

7.310' 2 Fina B SA 86,0 6,0 8,0 0,0 15,0 26,0 41,0 18,0 24,0 3,0 6,0 8,0 49,4 21,7 28,9 6,0 Arenita lítica

7.630' 3 Media M SR 94,0 0,0 6,0 0,0 8,0 37,0 45,0 36,0 9,0 4,0 6,0 50,0 40,0 10,0 0,0 Arenita arcósica

3 Media Med SA 96,0 0,0 4,0 0,0 9,0 39,0 48,0 38,0 8,0 2,0 4,0 51,1 40,4 8,5 0,0 Arenita arcósica
7.790'
4 Fina B SA 92,0 3,0 5,0 0,0 19,0 25,0 42,0 20,0 27,0 3,0 3,0 5,0 47,2 22,5 30,3 3,0 Arenita lítica

1 Media Med SA-SR 89,0 3,0 8,0 0,0 8,0 39,0 47,0 15,0 27,0 3,0 8,0 52,8 16,9 30,3 3,0 Arenita lítica
7.940'
2 Muy Fina B SA 84,0 3,0 12,0 1,0 22,0 20,0 42,0 28,0 12,0 2,0 3,0 8,0 51,2 34,1 14,6 3,0 Arenita arcósica

8.050' 1 Media Med SA-SR 72,0 0,0 28,0 0,0 10,0 30,0 40,0 4,0 24,0 4,0 28,0 58,8 5,9 35,3 0,0 Arenita lítica

8.430' 1 Fino B SA 83,0 2,0 15,0 0,0 10,0 27,0 37,0 13,0 33,0 2,0 15,0 44,6 15,7 39,8 2,0 Arenita lítica

UNIDAD II: 1 Muy fina B SA 71,0 0,0 29,0 0,0 20,0 37,0 57,0 13,0 1,0 29,0 81,4 0,0 18,6 0,0 Sublitarenita
8.720'
LUTITAS
6 Media B SR 50,0 0,0 50,0 0,0 6,0 19,0 25,0 24,0 1,0 50,0 50,0 48,0 2,0 0,0 Arenita arcósica

1 Muy Fina B SA 79,0 4,0 13,0 4,0 7,0 27,0 34,0 21,0 22,0 2,0 4,0 13,0 44,2 27,3 28,6 4,0 Arenita lítica

10.020' 2 Media B SA-SR 35,0 0,0 65,0 0,0 11,0 8,0 19,0 7,0 6,0 3,0 65,0 59,4 21,9 18,8 0,0 Subarcosa

3 Gruesa M SR 83,0 2,0 15,0 0,0 12,0 12,0 64,0 5,0 2,0 15,0 14,8 79,0 6,2 0,0 Arenita arcósica

1 Muy Fina B SA 56,0 30,0 5,0 9,0 10,0 10,0 20,0 10,0 25,0 1,0 30,0 5,0 36,4 18,2 45,5 30,0 Grauwaca Lítica
10.100'
2 Fina B SA-SR 13,0 0,0 87,0 0,0 3,0 3,0 1,0 9,0 87,0 23,1 7,7 69,2 0,0 Arenita lítica

1 Muy Fina B SA 60,0 35,0 5,0 0,0 10,0 11,0 21,0 7,0 31,0 1,0 35,0 5,0 35,6 11,9 52,5 35,0 Grauwaca Lítica

10.240' 2 Gruesa B SR 90,0 0,0 10,0 0,0 6,0 32,0 38,0 22,0 29,0 1,0 8,0 42,7 24,7 32,6 0,0 Arenita lítica

3 Gruesa Med SA-SR 88,0 0,0 12,0 0,0 6,0 2,0 8,0 80,0 12,0 9,1 90,9 0,0 0,0 Arenita arcósica

1 Fina B SA 84,0 3,0 13,0 0,0 9,0 14,0 23,0 30,0 31,0 Tz 3,0 4,0 27,4 35,7 36,9 3,0 Arenita lítica

10.340' 2 Media Med SA 93,0 0,0 6,0 1,0 29,0 1,0 30,0 55,0 5,0 2,0 6,0 33,3 61,1 5,6 0,0 Arenita arcósica

3 Media B SR 92,0 2,0 6,0 0,0 12,0 25,0 37,0 39,0 14,0 2,0 2,0 2,0 41,1 43,3 15,6 2,0 Arenita arcósica
UNIDAD III: ARENISCAS CON INTERVALOS CONGLOMERÁTICOS

1 Muy Gruesa Med SR-R 95,0 0,0 5,0 0,0 31,0 5,0 36,0 51,0 7,0 1,0 5,0 38,3 54,3 7,4 0,0 Arenita arcósica
10.450'
6 Gruesa B SA 99,0 0,0 1,0 0,0 46,0 46,0 53,0 Tz 1,0 46,5 0,0 53,5 0,0 Arenita lítica

10.560' 1 Fina Med SA 87,0 0,0 12,0 1,0 20,0 15,0 35,0 38,0 12,0 2,0 12,0 41,2 44,7 14,1 0,0 Arenita arcósica

1 Media Med SA 86,0 2,0 10,0 2,0 14,0 39,0 53,0 23,0 8,0 2,0 2,0 10,0 63,1 27,4 9,5 2,0 Arenita arcósica
10.680'
2 Muy Fina B SR 81,0 1,0 18,0 0,0 3,0 36,0 39,0 10,0 28,0 4,0 1,0 18,0 50,6 13,0 36,4 1,0 Arenita lítica

1 Fina B SA-SR 53,0 0,0 47,0 0,0 2,0 36,0 38,0 3,0 12,0 47,0 71,7 5,7 22,6 0,0 Sublitarenita
EOCENO (?)

10.770'
2 Muy Fina B SA 84,0 1,0 15,0 0,0 14,0 21,0 35,0 18,0 28,0 3,0 1,0 15,0 43,2 22,2 34,6 1,0 Arenita lítica

1 Fina B SR 40,0 0,0 60,0 0,0 9,0 18,0 27,0 6,0 4,0 3,0 60,0 73,0 16,2 10,8 0,0 Arenita arcósica

10.900' 2 Media B SA 89,0 0,0 11,0 0,0 7,0 38,0 45,0 20,0 23,0 1,0 11,0 51,1 22,7 26,1 0,0 Arenita lítica

3 Gruesa M SA 84,0 0,0 15,0 1,0 16,0 13,0 29,0 52,0 3,0 15,0 34,5 61,9 3,6 0,0 Arenita arcósica

1 Fina B SA-SR 54,0 4,0 42,0 0,0 8,0 5,0 13,0 22,0 19,0 4,0 42,0 24,1 40,7 35,2 4,0 Arenita arcósica

11.120' 2 Media Med SA 77,0 3,0 20,0 0,0 9,0 20,0 29,0 19,0 28,0 1,0 3,0 20,0 38,2 25,0 36,8 3,0 Arenita lítica

3 Fina B SA 83,0 2,0 15,0 0,0 14,0 26,0 40,0 16,0 25,0 2,0 2,0 15,0 49,4 19,8 30,9 2,0 Arenita lítica

1 Gruesa B SA-SR 60,0 0,0 40,0 0,0 4,0 25,0 29,0 2,0 27,0 2,0 40,0 50,0 3,4 46,6 0,0 Arenita lítica
11.220'
2 Fina B SA 89,0 3,0 8,0 0,0 9,0 26,0 35,0 20,0 32,0 2,0 3,0 8,0 40,2 23,0 36,8 3,0 Arenita lítica

1 Fina B SA 63,0 2,0 35,0 0,0 9,0 21,0 30,0 7,0 26,0 Tz 2,0 35,0 47,6 11,1 41,3 2,0 Arenita lítica
11.330'
2 Fina Med SA 91,0 3,0 6,0 0,0 12,0 25,0 37,0 20,0 32,0 2,0 3,0 6,0 41,6 22,5 36,0 3,0 Arenita lítica

1 Media B SA 92,0 0,0 8,0 0 15,0 21,0 36,0 15,0 39,0 2,0 8,0 40,0 16,7 43,3 0,0 Arenita lítica
11.550'
2 Media Med SR 95,0 0,0 5,0 0,0 7,0 7,0 79,0 9,0 5,0 7,4 83,2 9,5 0,0 Arenita arcósica

1 Gruesa B SA-SR 90,0 2,0 8,0 0,0 13,0 26,0 39,0 31,0 14,0 6,0 2,0 8,0 46,4 36,9 16,7 2,0 Arenita arcósica
11.650'
2 Media B SA 65,0 0,0 35,0 0,0 15,0 30,0 45,0 2,0 17,0 1,0 35,0 70,3 3,1 26,6 0,0 Arenita lítica

11.700' 2 Gruesa Med SR 25,0 0,0 75,0 0,0 5,0 5,0 3,0 17,0 75,0 20,0 12,0 68,0 0,0 Arenita lítica

1 Gruesa Med SR 95,0 0,0 5,0 0,0 20,0 20,0 75,0 5,0 21,1 78,9 0,0 0,0 Arenita arcósica
11.800'
2 Muy Fina B SA 90,0 1,0 9,0 0,0 24,0 23,0 47,0 6,0 35,0 2,0 1,0 9,0 53,4 6,8 39,8 1,0 Arenita lítica
1 Fina B SA-SR 69,0 6,0 20,0 5,0 4,0 20,0 24,0 21,0 24,0 6,0 20,0 34,8 30,4 34,8 6,0 Arenita lítica
12.000'
2 Fina B SA 82,0 17,0 1,0 0,0 13,0 21,0 34,0 31,0 15,0 2,0 17,0 1,0 42,5 38,8 18,8 17,0 Grauwaca feldespática

LEYENDA
Escog: escogimiento; Red: redondez; MM: muy malo; M: malo; Med: medio; B: bueno; A: angulares;
SA: subangulares; SR: subredondeados; METAF: metamórfico; FELD: feldespatos; F.R: fragmentos de
roca; ACC: accesorios; MTZ: matriz; CMT: cemento

Jorham Contreras 194


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

c) Evolución diagenética

Las evidencias diagenéticas observadas en los depósitos paleógenos del


pozo CMA-1X, permiten interpretar que esta secuencia alcanzó condiciones de
diagénesis tardía incipiente. Se observaron las evidencias de los siguientes
procesos diagenéticos:

Compactación mecánica que origina principalmente contactos longitudina-


les, así como deformación y trituramiento de los fragmentos líticos alrededor de
los granos más resistentes, los cuales fluyen en estado sólido y originan matriz
diagenética o pseudomatriz (DICKINSON 1970, EN SANDOVAL, 2000). Este
proceso es más frecuente en la unidad III de areniscas conglomeráticas. En
algunos casos se observaron granos fracturados (Figuras 6.15 y 6.16).

Cementación principalmente por sílice (65%), la cual ocurre desde una


etapa de diagénesis temprana hasta intermedia y se observa de dos maneras:
como cuarzo microcristalino (chert) (Figura 6.17) y como sobrecrecimientos en
continuidad óptica con el cuarzo. La cementación por calcita (25%) ocurre
durante la etapa de soterramiento temprano, genera expansión del empaqueta-
miento original, y en una etapa posterior, corrosión y reemplazo de componen-
tes siliciclásticos. Se observa mayormente en la unidad III (Figura 6.18 y 6.20).

Adicionalmente, se observó en algunas muestras cementación por caolinita


y óxido de hierro, generalmente en baja proporción (< 5%). La cementación
por caolinita ocurre durante la diagénesis temprana a intermedia; BUCKE &
MANKIN (1971, en SANDOVAL 2000) platean que este proceso está asociado a la
alteración de los feldespatos. La cementación por óxido de hierro
(principalmente hematita) ocurre en una etapa de diagénesis intermedia y está
asociada a la alteración de los fragmentos de rocas sedimentarios y arcillas
que contienen hierro dentro de su estructura, así como minerales accesorios
ferromagnesianos (clorita y piroxenos).

Jorham Contreras 195


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Alteración de los fragmentos líticos, feldespatos y micas a minerales de


arcillas, principalmente de tipo clorita y caolinita, con cantidades menores de
ilita y esmectita (Figura 6.19). Este proceso ocurre a partir de la diagénesis
temprana hasta diagénesis tardía.

En una etapa intermedia a tardía ocurre la alteración progresiva de los


minerales de arcillas de tipo esmectita a ilita, a través del arreglo en arcillas de
capas mixtas, las cuales presentan un contenido de ilita alrededor del 70-80%
en capas de tipo semi-ordenada, lo cual podría indicar una profundidad de
soterramiento cercana a los 3.500 metros (SANDOVAL, 2000) y condiciones de
diagénesis tardía.

Disolución de minerales de arcillas, que genera porosidad secundaria en


baja proporción (<6%) y se observa únicamente en la unidad III. No se
observan evidencias claras que permitan identificar las causas de este
proceso, aunque se puede indicar que se restringe a minerales de arcillas de
tipo detríticos o alogénicos y no diagenéticos.

TABLA 6.15
Diagrama paragénetico para la secuencia Eoceno en el pozo CMA-1X

Interfase agua / sedimento 80°C 130ºC


Etapas Diagéneticas Soterramiento
Soterramiento Somero Soterramiento Intermedio
Procesos Diagéneticos Profundo
Compactación
Deformación de granos dúctiles
Cementación por calcita
Cementación por sílice
Alteración de feldespatos
Alteración de fragmentos líticos y micas
Alteración de minerales de arcillas
Precipitación de caolinita
Reemplazamiento (calcitización)
Disolución de matriz
Cemento de óxido de hierro

Procesos que destruyen porosidad


Procesos que generan porosidad
Procesos que generan microporosidad

Jorham Contreras 196


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

0,5 mm. 1 mm.

FIGURA 6.15. Arenita lítica. Obsérvese FIGURA 6.16. Arenita arcósica.


la alteración de los fragmentos de roca a Obsérvese la alteración de los
minerales de arcillas y la generación de feldespatos a minerales de arcillas y la
pseudomatriz, muestra 7.940’, pozo generación de pseudomatriz, muestra
CMA-1X. Obj. 20x, nícoles cruzados. 10.560’, pozo CMA-1X, Obj. 10x , nícoles
cruzados.
1 mm. 0,5 mm.

FIGURA 6.18. Sublitarenita con cemento


FIGURA 6.17. Arenita lítica con de calcita temprana, que genera expansión
cemento de chert, muestra 10.900’, del empaquetamiento y corrosión de los
litotipo 2, pozo CMA-1X. Obj. 10x, granos, muestra 10.770’, pozo CMA-1X,
nícoles cruzados. Obj. 20x , nícoles cruzados.

1 mm. 1 mm.

FIGURA 6.19. Arenita arcósica. FIGURA 6.20. Arenita arcósica.


Obsérvese la alteración de la ortosa a Obsérvese el fracturamiento y relleno por
minerales de arcillas de tipo ilita, muestra calcita, la cual genera reemplazo parcial
6.650’, pozo CMA-1X. Obj. 2.5x, nícoles de los granos, muestra 10.900’, litotipo 1,
cruzados. pozo CMA-1X. Obj. 10x, níc. cruzados.

Jorham Contreras 197


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

d) Análisis bioestratigráfico

EVANS (1982b) realizó el estudio bioestratigráfico de la secuencia Eoceno-


Pleistoceno perforada por el pozo CMA-1X. Este autor reporta entre 6.420’ y
10.020’ un intervalo de lutitas moteadas y areniscas totalmente estéril en
foraminíferos. Sin embargo, a través de estudios palinológicos, propone que este
intervalo fue depositado en un ambiente continental a costero durante el
Oligoceno(?), en base a la presencia de Janduforia seamrogiformis (Oligoceno –
Mioceno) a una profundidad de 9.310’.

Entre 10.020’ – 12.050’ reporta un intervalo totalmente estéril, constituido


por conglomerados y areniscas de grano grueso depositadas en ambiente marino
bajo condiciones de alta energía, el cual correlaciona, en base a las características
sedimentológicas, con la secuencia turbidítica del Grupo Punta Carnero, ubicado
en la isla de Margarita y edad Eoceno Medio.

Con la finalidad de establecer de manera concreta la edad y ambiente


depositacional de la secuencia asignada por EVANS (1982b) al Oligoceno(?), se
realizaron análisis palinológicos complementarios en un total de 9 muestras,
ubicadas entre 6.650’ y 10.000’. Estos estudios no permitieron establecer la edad
de la secuencia, ya que los palinomorfos encontrados indican un rango de edad
muy amplio, desde el Eoceno Medio al Mioceno Medio. Las especies encontradas
presentan muy mala preservación, por lo cual no puede aseverarse que se
encuentren in situ y realmente corresponda a una ambiente continental a costero,
tal como lo señala el autor.

Jorham Contreras 198


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

6.2.1.2 POZO CUBAGUA 1

Está ubicado en la zona oeste de la isla de Cubagua con una profundidad


máxima de 4.670’ (1.424 m) sin llegar al basamento y atraviesa la secuencia
sedimentaria Eoceno - Pleistoceno.

a) Descripción estratigráfica y litológica

La secuencia eocena está constituida por lutitas moteadas de ambiente


batial y edad Eoceno Medio, con un espesor de 476’ (137 m) comprendido entre
4.220’ y 4.670’. Estos depósitos han sido correlacionados con la Formación El
Dátil del Grupo Punta Carnero por BERMÚDEZ (1975). Suprayacente se observa
una secuencia de 1.098’ (335 m) de espesor, compuesta por lutitas estériles
intercaladas con areniscas, las cuales EVANS (1982a) asigna al Oligoceno(?) en
base a su posición estratigráfica, infrayacente a la secuencia miocena.

Los depósitos del Mioceno Tardío se distinguen desde 3.122’ hasta 194’ de
profundidad, con un espesor de 2.928’ (892 m), considerados por EVANS (1982a)
como equivalentes a la Formación Cubagua. Están constituidos por lutitas, ricas
en macro y microfósiles, con intervalos de areniscas de grano fino, sedimentadas
en ambiente batial, correspondiente a las facies más distales de la formación. Por
encima se ubican los depósitos arcillosos pleistocénicos.

b) Descripción Petrográfica

Debido a la litología predominante lutítica de la secuencia eocena-oligocena


en el pozo CUBAGUA-1, el análisis petrográfico se realizó en base a ocho
muestras de canal, 5 correspondientes a la unidad oligocena(?) y 3 a la unidad
eocena. Los litotipos observados están constituidos por lutitas (60%) y areniscas
(40%), todos con valores de porosidad entre 0 y 1%.

Jorham Contreras 199


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

La unidad eocena está constituida por lutitas (90%), predominantemente


calcáreas, y areniscas calcáreas de grano fino (10%). Las lutitas están
compuestas por minerales de arcillas entre 80 y 90%, por lo cual fueron
clasificadas como arcilitas. Adicionalmente presentan granos de cuarzo (5-10%)
principalmente de tipo metamórfico y en algunos casos fragmentos de roca (0-5%)
de tipo chert y sedimentarios.

Las areniscas son de tipo líticas, compuestas por fragmentos de roca entre
20 y 30%, principalmente chert y metamórficos, cuarzo (25-30%) de tipo
metamórfico predominante, cemento de sílice (5-10%) y de calcita (1-10%). La
matriz está constituida principalmente por minerales de arcillas (15-20%) y en baja
proporción micrita (0-5%), por lo que algunos litotipos se clasificaron como
grauwacas líticas.

La unidad oligocena (?) presenta características similares a la unidad


anterior. Se distinguen principalmente arcilitas (60%) y areniscas (40%). Las
arcilitas están compuestas por minerales de arcillas (60-65%), con granos de
cuarzo metamórfico (20%), chert (10%), fragmentos metamórficos (7%) y escasos
feldespatos (2-3%).

Las areniscas son de variada composición, aunque la mayoría presentan


alto contenido de fragmentos de roca y fueron clasificadas como arenitas líticas.
Están compuestas por fragmentos líticos (25-40%) de tipos diversos
(sedimentarios, chert y volcánicos?), cuarzo (30-40%) de tipo metamórfico e ígneo
plutónico, feldespatos (0-5%), cemento de calcita (0-35%), cemento de sílice
(0-9%) y matriz arcillosa (0-20%).

La composición mineralógica detallada de los litotipos identificados se


puede observar en la tabla 6.16:

Jorham Contreras 200


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

TABLA 6.16 Descripción petrográfica de muestras de canal del pozo CUB-1.

TEXTURA COMPOSICIÓN CLASIFICACIÓN

Muestra
Unidad Composición General CUARZO RECALCULO (100%)
Tam. de grano Escog. Red. FELD. F.R. ACC. MTZ. CMT. Nombre
Granos Matriz Cemento Porosd. IGNEO METM. TOTAL Qz. Feld FR Matriz

3.170' - 3.180' Lutita Med A-SA 12,0 87,0 1,0 0,0 6,5 3,0 9,5 0,0 2,0 0,5 90,0 1,0 Arcilita

Lutita Med SA-SR 11,0 86,0 3,0 0,0 6,0 2,0 8,0 0,0 2,0 1,0 86,0 3,0 Arcilita
OLIGOCENO (?)

3.290' - 3.300'
A. Fina B SA-SR 36,0 0,0 60,0 4,0 13,0 23,0 36,0 1,0 0,0 0,0 0,0 60,0 97,3 2,7 0,0 0,0 Arenita cuarzosa

3.438' - 3.448' A. Fina MM SR 55,0 42,0 3,0 0,0 3,0 27,0 30,0 0,0 25,0 0,0 42,0 3,0 54,5 0,0 45,5 42,0 Grauwaca lítica

3.620' A. Fina Med SA 77,0 20,0 3,0 0,0 7,0 33,0 40,0 4,0 33,0 0,0 20,0 3,0 51,9 5,2 42,9 20,0 Grauwaca lítica

A. Muy Fina B SA 79,0 12,0 9,0 0,0 12,0 23,0 35,0 5,0 38,0 1,0 12,0 9,0 44,9 6,4 48,7 12,0 Arenita lítica
4.165'
Lutita Med SA 9,0 91,0 0,0 0,0 1,0 3,0 4,0 0,0 4,0 1,0 91,0 0,0 Arcilita

4.260' A. Muy Fina B SA-SR 36,0 12,0 52,0 0,0 15,0 6,0 21,0 3,0 5,0 7,0 12,0 52,0 72,4 10,3 17,2 12,0 Sublitarenita
EOCENO

4.360' A. Muy Fina B SA-SR 36,0 10,0 54,0 0,0 17,0 6,0 23,0 3,0 4,0 6,0 10,0 54,0 76,7 10,0 13,3 10,0 Sublitarenita

4.580' Lutita Med SA 30,0 68,0 2,0 0,0 18,0 3,0 21,0 2,0 7,0 0,0 68,0 2,0 Arcilita

LEYENDA
Escog: escogimiento; Red: redondez; MM: muy malo; M: malo; Med: medio; B: bueno; A: angulares;
SA: subangulares; SR: subredondeados; METAF: metamórfico; FELD: feldespatos; F.R: fragmentos de
roca; ACC: accesorios; MTZ: matriz; CMT: cemento

c) Evolución diagenética

Las evidencias de los procesos diagenéticos ocurridos en la secuencia


paleógena del pozo CUBAGUA-1 corresponden a una etapa de diagénesis
temprana a intermedia, entre los cuales se destacan:

Moderado grado de compactación mecánica inicial, donde predominan los


contactos longitudinales y grano-matriz debido a la alta proporción de minera-
les de arcillas que inhibe los contactos entre granos y los procesos de presión-
solución (Figuras 6.21 y 6.22).

Abundante cementación por calcita, alcanza valores de hasta 54% y ocurre


en una etapa de soterramiento temprano (Figura 6.23). También se identificó
cemento de sílice en baja proporción (<10%), el cual precipita en una etapa
entre diagénesis temprana a intermedia. Adicionalmente, se observa cemento
de óxido de hierro, principalmente hematita, lo cual puede estar asociado a la
alteración de los fragmentos sedimentarios.

Jorham Contreras 201


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Corrosión y remplazamiento de los componentes siliciclásticos (cuarzo y


fragmentos de roca) por calcita, lo cual ocurre durante la diagénesis temprana a
intermedia.

Alteración de los fragmentos de roca a minerales de arcillas (Figuras 6.22 y


6.23a).

TABLA 6.17
Diagrama paragenético para la secuencia Eoceno – Oligoceno en el pozo CUB-1

Interfase agua / sedimento 80°C 130ºC


Etapas Diagéneticas Soterramiento
Soterramiento Somero
Procesos Diagéneticos Intermedio
Compactación
Deformación de granos dúctiles
Cementación por calcita
Cementación por sílice
Alteración de fragmentos líticos y micas
Corrosión y reemplazamiento (calcitización)
Cemento de óxido de hierro

Procesos que destruyen porosidad


Procesos que generan porosidad
Procesos que generan microporosidad

1 mm. 1 mm.

FIGURA 6.21. Arcilita con foraminíferos FIGURA 6.22. Grauwaca lítica, muestra
pláncticos, muestra 3.290’. 3.620’. Obj. 10x, nícoles cruzados.
Obj. 10x, nícoles cruzados.

Jorham Contreras 202


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

1 mm. 0.5 mm.

Muestra 4.260’. Obj. 2.5x Muestra 4.360’. Obj. 10x

FIGURA 6.23. Arenitas líticas de grano muy fino con cemento calcítico. Obsérvese la
alteración de los fragmentos de roca a minerales de arcillas y la corrosión de los granos
siliciclásticos por parte de la calcita. Nícoles cruzados.

d) Análisis bioestratigráfico

TIPWORD (1940) realiza el primer estudio bioestratigráfico de foraminíferos


en la secuencia perforada por el pozo CUBAGUA-1. Este autor propone en la
parte basal, un intervalo lutítico con alto contenido de foraminíferos de ambiente
marino profundo (globigerinas) que señalan una edad Eoceno, comprendido entre
4.220’ y 4.670’ (profundidad final).

Suprayacente y en base a su posición estratigráfica, este autor, ubica un


intervalo de edad Oligoceno (?), comprendido entre 3.122’ y 4.220’, constituido por
lutitas estériles no marinas, seguido de depósitos lutíticos con alto contenido de
foraminíferos de edad Mioceno.

KUGLER (1957) propone que el intervalo basal comprendido entre 4.220’ y


4.670’ corresponde al Eoceno Medio, constituido por lutitas de ambiente marino
profundo ligeramente calcáreas y muy fracturadas, con alto contenido de
foraminíferos planctónicos de aguas profundas (Globorotalia spinulosa,
Globorotalia eocaenica, Globigerina sp., entre otros). Así mismo, observa
foraminíferos bénticos de ambiente marino somero, tal como Lepidocyclina
hubbardi, Cibicides tuxmepansis, Cibicides grimsdalei, Cibicides cushmani y

Jorham Contreras 203


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

Nodosarella subnodosa, que señalan una mezcla de fauna posiblemente asociada


a corrientes turbidíticas, y señala que el intervalo suprayacente, asignado por
TIPWORD (1940) al Oligoceno(?), no presenta fauna indicativa de edad y por
posición estratigráfica mantiene esta edad.

Posteriormente, BERMÚDEZ (1975) corrobora para el intervalo basal (4.220’ –


4.670’) una edad Eoceno Medio y establece que corresponde a una parte de la
Formación El Dátil del Grupo Punta Carnero en la isla de Margarita.

Con la finalidad de establecer de manera concreta la edad del intervalo


asignado al Oligoceno(?) por TIPWORD (1940), se realizaron análisis bioestratigrá-
ficos de foraminíferos y palinomorfos en un total de 5 muestras, comprendidas
entre 3.170’ y 3.592’. Estos análisis no arrojaron resultados satisfactorios, ya que
tres muestras fueron totalmente estériles y en las otras dos se encontraron
especies muy mal preservadas de rango estratigráfico muy amplio.

6.2.1.3 POZO MTC-1X

Está ubicado en la subcuenca Tuy - Cariaco Norte, 30 Km al este de la isla


La Tortuga. Alcanza una profundidad de 12.092’, perforando la secuencia Eoceno
al Reciente. Fue seleccionado como un pozo complementario debido a que
perforó un intervalo de edad Eoceno, por debajo de la secuencia Mioceno Tardío –
Reciente.

Como se mencionó anteriormente BLANCO & GIRALDO (1992) consideran


que esta secuencia corresponde a un bloque transportado desde ambientes
someros de plataforma hasta profundidades batiales, mientras que otros autores
tales como EVANS (1982a, 1983) e YSACCIS (1997) la consideran parte de la
columna sedimentaría in situ, de la subcuenca Tuy-Cariaco Norte.

Jorham Contreras 204


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

La secuencia eocena se ubica entre 10.500’ y 11.395’ de profundidad, está


caracterizada por calizas de ambiente arrecifal y lutitas de aguas profundas. Las
calizas presentan alto contenido de fragmentos de algas y foraminíferos bénticos
(Lepidocyclina sp.), que señalan un ambiente de plataforma, mientras que las
lutitas presentan alto contenido de organismos de aguas profundas (EVANS, 1983).

El ambiente de esta secuencia no ha sido del todo establecido, aunque


EVANS (op cit.) sugiere que podría representar una interfase entre un régimen de
carbonatos de plataforma y un ambiente clástico de aguas profundas, así como
indica que mientras no se conozca de manera precisa si las calizas son
autóctonas, la interpretación ambiental es especulativa.

Este intervalo fue debidamente estudiado en base a fragmentos de núcleo


en el intervalo 10.613’ - 10.721’ por MARQUEZ & PICARD (1980). Los análisis
permiten interpretar una historia diagenética avanzada, en condiciones de
soterramiento profundo, evidenciada por la presencia de varios patrones de
estilolitas rellenas con arcilla, fracturas, neomorfismo heteroaxial y dolomitización.
Estos procesos sugieren que este cuerpo de calizas ha sufrido procesos de
presión-solución intensos, originados a partir de una historia tectónica compleja
que controló su ubicación actual y posición vertical, determinada a partir de
estructuras geopetales observadas en el análisis petrográfico y del registro
“dipmeter”, el cual realizó tres mediciones en el intervalo 10.640’ - 10.708’
comprendidas entre 67.6º y 83.8º de buzamiento.

En base al estudio de este núcleo se pudo determinar una complejidad


tectónica que causó rotación y probablemente el transporte de estas calizas arre-
cifales en la región costafuera de Venezuela, pero no es posible establecer de ma-
nera concreta la historia o dirección de esfuerzos que controlaron estos procesos.

Suprayacente a este intervalo y de manera discordante se encuentran los


depósitos del Mioceno Tardío, con un espesor de 2.000’ (610 m), comprendidos

Jorham Contreras 205


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

entre 10.500’ y 8.500’, los cuales están constituidos por areniscas conglomeráticas
de ambiente fluvial (EVANS, 1983).

Finalmente, los depósitos del Plioceno y Pleistoceno se ubican entre 8.500’


y 1.500’ (7.000’; 2.134 m) y están constituidos por arcillas con abundantes
fragmentos de conchas, depositadas en un ambiente nerítico.

6.2.2 ANÁLISIS DE PROCEDENCIA

Al igual que en la cuenca La Blanquilla, el análisis de procedencia para la


secuencia Eoceno - Oligoceno en la cuenca Tuy Cariaco (subcuenca Cubagua),
se realizó a través de los diagramas ternarios de DICKINSON & SUCZEK (1979).

Estos diagramas fueron empleados en base a la proporción de


componentes mineralógicos determinados por estimación visual en el análisis
petrográfico, por lo cual no representan de manera exacta la fracción total de roca
y su aplicación es con fines comparativos.

Q
CRATON
INTERIOR 3
Qm
CRATON
INTERIOR 11
18
20 RECICLADO
CONTINENTAL CONTINENTAL CUARZOSO
OROGENO TRANSICIONAL
TRANSICIONAL RECICLADO

43 42
45
RECICLADO
MEZCLA TRANSICIONAL

37
ARCO ARCO
BASAMENTO DISECTADO BASAMENTO 32
LEVANTADO DISECTADO
25

ARCO 18
TRANSICIONAL ARCO RECICLADO
13
TRANSICIONAL LÍTICO
ARCO NO
DISECTADO ARCO NO
DISECTADO

F 15 50
L F 23 47 13
Lt
CUBAGUA-1 CMA-1X

FIGURA 6.24 Diagramas de procedencia para los litotipos arenosos de los pozos CMA-1X y CUB-1.
Cuenca Tuy-Cariaco. DICKINSON & SUCZEK (1979).

Jorham Contreras 206


CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

El diagrama Q-F-L para los pozos CMA-1X y CUB-1 ubicados en la


subcuenca Cubagua (Figura 6.24), evidencia como principal fuente de aporte un
orógeno reciclado, donde secuencias de estratos levantados, plegados y fallados,
estarían aportando detritos reciclados a partir de rocas sedimentarias y
metasedimentarias (DICKINSON & SUCZEK, 1979). Estos orógenos pueden estar
asociados a complejos de subducción con deformación de sedimentos oceánicos
y a levantamientos del cinturón de deformación en cuencas antepaís (ubicado en
el margen norte de Sudamérica).

Adicionalmente, se observa una dispersión hacia el campo de basamento


levantado, el cual puede estar representado por bloques expuestos de corteza
continental, limitados por fallas, producto del marco transpresivo y colisión oblicua
entre las placas Caribe / Sudamérica, y que representan un aporte importante de
rocas cuarzo-feldespáticas y arenitas arcósicas.

En el diagrama Qm-F-Lt se observa una mayor dispersión, destacándose


como fuente principal los reciclados transicionales y cuarzosos, con dispersión
hacia la zona de mezcla y arco disectado. Adicionalmente, al igual que en el
diagrama anterior, el basamento levantado representa una provincia significativa
como fuente de aporte.

Los reciclados transicionales y cuarzosos están asociados a terrenos


levantados producto de la colisión oblicua entre la placa del Caribe y Sudamérica,
asociados al complejo de subducción entre las placas del Caribe y Atlántica,
donde una variedad de rocas de composición oceánica y granítica, sedimentarias
y metasedimentarias asociadas al prisma de acreción, representan una fuente de
detritos muy variada, entre los cuales DICKINSON & SUCZEK (1979) destacan la
abundancia del chert, el cual puede exceder la proporción de cuarzo y feldespatos
juntos, tal como se observa en las muestras estudiadas.

Jorham Contreras 207


CORRELACIÓN

7. CORRELACIÓN ENTRE LAS CUENCAS LA BLANQUILLA Y


TUY-CARIACO CON EL FLYSCH EOCENO EN LA ISLA DE MARGARITA

7.1 GENERALIDADES

El estudio de los pozos MTC-2X y PMN-1X señala que la secuencia


eocena – oligocena en la cuenca La Blanquilla está caracterizada por depósitos de
aguas profundas, predominantemente lutíticos con intervalos localizados de
areniscas y calizas. Sin embargo, tal como se mencionó en el capítulo anterior, la
distancia geográfica entre estos pozos, la compleja historia geológica y su
ubicación en subcuencas distintas, no permite establecer una correlación directa
entre ambos, del mismo modo que no es posible aseverar de manera concreta
que toda la secuencia paleógena dentro de la cuenca presente características
similares.

El relleno sedimentario de la cuenca Tuy-Cariaco está constituido


principalmente por depósitos de edad Mioceno al Reciente, registrándose
depósitos de edad Eoceno únicamente en la subcuenca Cubagua, además de
bloques transportados en la subcuenca Tuy-Cariaco Norte (BLANCO & GIRALDO,
1992). La secuencia eocena en los pozos CMA-1X y CUBAGUA-1 (subcuenca
Cubagua) y el MTC-1X (subcuenca Tuy-Cariaco Norte), está caracterizada por
sedimentos de aguas profundas en conjunto con sedimentos transportados de
ambientes someros, depositados en depresiones locales y restringidas, que fueron
producto del régimen extensional que controlaba la región norte costafuera de
Venezuela durante el Eoceno.

La secuencia flysch de la isla de Margarita obedece a la sedimentación en


una cuenca marino profunda durante el Eoceno Medio, la cual estuvo controlada
por flujos gravitacionales de sedimentos desde ambientes someros de plataforma,
depositados bajo corrientes de turbidez junto con sedimentos principalmente
lutíticos de talud y fondo de cuenca.

Jorham Contreras 208


CORRELACIÓN

Los análisis sedimentológicos y bioestratigráficos realizados en los


depósitos paleógenos de las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco, sugieren que
ambas cuencas obedecen a historias geológicas distintas, controladas por
procesos sedimentarios y condiciones paleoambientales diferentes.

Adicionalmente, podemos señalar que la secuencia flysch de la isla de


Margarita y los depósitos de la cuenca Tuy-Cariaco presentan características
sedimentológicas similares, y los análisis bioestratigráficos indican un intervalo de
sedimentación contemporánea durante el Eoceno Medio. Estas evidencias
permiten sugerir que la secuencia que aflora en la isla de Margarita, originalmente
estuvo relacionada con lo depósitos que actualmente se preservan en el subsuelo
de la cuenca Tuy-Cariaco.

7.2 CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

La región costafuera de Venezuela está dominada por las cuencas La


Blanquilla, Tuy-Cariaco y Carúpano. Todas se encuentran bajo el dominio de las
placas Caribe y Sudamérica, las cuales desde el Cretácico han estado en
constante interacción controlando el origen y características del basamento asi
como el relleno sedimentario.

Con los estudios sedimentológicos y bioestratigráficos realizados en los


pozos seleccionados, en conjunto con la revisión general de transectos sísmicos
interpretados (EVANS, 1983; GODDARD, 1986; YSACCIS, 1997) y de la geología
estructural (modelos de SPEDD, 1985; PINDELL et al., 1988; OSTOS, 1990; PINDELL &
BARRETT, 1990), se pretende establecer la correlación entre los depósitos
paleógenos presentes en las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco, lo cual
representa uno de los objetivos principales del presente trabajo.

Jorham Contreras 209


CORRELACIÓN

7.2.1 CUENCA LA BLANQUILLA

El origen de la cuenca La Blanquilla comienza a partir del Eoceno


Temprano – Medio, con la fase extensional que originó una gran estructura
semigraben con orientación noreste – suroeste, asociada a la cuenca de Granada,
en el dominio retroarco de las Antillas Menores (YSACCIS, 1997). Posteriormente,
durante el Eoceno Tardío, se origina la falla dextral de Margarita, con orientación
noroeste, la cual divide esta cuenca en dos subcuencas: La Blanquilla Este y
La Blanquilla Oeste.

7.2.1.1 La Blanquilla Oeste

En base a los estudios realizados en el pozo MTC-2X (Anexo XIII),


podemos decir que la sedimentación en la cuenca La Blanquilla Oeste durante el
Eoceno y Oligoceno, está caracterizada por depósitos de ambiente batial,
predominantemente lutíticos con intervalos delgados de areniscas y calizas. El
espesor perforado en este pozo es 5.600’ (1.707 m).

La presencia de calizas de ambientes someros (con foraminíferos bénticos


de plataforma) y areniscas con cemento calcáreo, en conjunto con lutitas ricas en
foraminíferos de aguas profundas, pueden indicar la influencia de ocasionales
flujos gravitacionales que transportaron sedimentos de ambientes someros hasta
ambientes de talud, los cuales debieron provenir desde altos estructurales, tales
como las islas La Orchila, Los Roques, Las Aves, Margarita-Los Testigos y parte
de la faja de Villa de Cura, que para este momento se encontraban emergidos
(SPEED, 1985; PINDELL et al. 1990) y que permitieron el desarrollo de una estrecha
plataforma carbonática.

Jorham Contreras 210


CORRELACIÓN

Las características texturales, tales como granos predominantemente


angulosos y subangulosos, pueden señalar poco transporte y rápida
sedimentación a causa de la cercanía de la fuente.

Hacia la parte media y tope de la unidad oligocena (Oligoceno Tardío), se


observa una disminución en los intervalos arenosos y aumento en la proporción de
lutitas con respecto a la unidad eocena, lo cual puede indicar una profundización
de la cuenca, tal como lo señala la curva paleobatimétrica establecida por
DURAN et al. (2002).

7.2.1.2 La Blanquilla Este

Los sedimentos perforados en el pozo PMN-1X (Anexo XIV) indican una


sedimentación en una cuenca marino profunda durante el Oligoceno, en
ambientes de talud, dominada por sedimentos lutíticos batiales con intervalos de
areniscas y calizas muy localizados. El pozo alcanzó una profundidad final de
4.354’ (1.327 m) dentro de sedimentos oligocenos, pero en base a los transectos
sísmicos se interpretan depósitos eocenos infrayacentes.

De manera similar a la subcuenca La Blanquilla Oeste, la sedimentación


ocurre en una cuenca marino profunda en ambientes de talud, caracterizada por
sedimentos lutíticos de profundidades batiales en conjunto con sedimentos
terrígenos provenientes de islas cercanas, que para el Oligoceno representaban
altos estructurales. Durante el Oligoceno Tardío los espesores de areniscas
calcáreas disminuyen y las lutitas aumentan en proporción, lo cual al igual que en
el pozo MTC-2X, podría indicar una profundización de la cuenca, tal como lo
señalan DURAN et al. (2002).

Jorham Contreras 211


CORRELACIÓN

7.2.1.3 Correlación entre las subcuencas La Blanquilla Oeste


y La Blanquilla Este

La secuencia oligocena presenta un espesor de 3.150’ (960 m) en el pozo


MTC-2X y de 4.000’ (1.220 m) en el PMN-1X. Para el Oligoceno Temprano se
observa un espesor de sedimentos mayor en el pozo MTC-2X (2.450’) con
respecto al PMN-1X (850’), mientras que para el Oligoceno Tardío el espesor de
sedimentos en el MTC-2X disminuye (700’) con respecto al PMN-1X (3.150’). Ver
figura 7.1.

La secuencia eocena fue perforada únicamente por el pozo MTC-2X, con


un espesor de 2.451’ (747 m). Hacia la base del PMN-1X se encuentra un
intervalo de 354’ (108 m) de edad indeterminada. Sin embargo, en base a la
interpretación de transectos sísmicos (YSACCIS, 1997), se sugiere la presencia de
sedimentos eocenos por debajo de la unidad oligocena (Figura 7.4).

Los estudios sedimentológicos indican que la secuencia paleógena está


constituida por arcilitas calcáreas y fosilíferas de ambiente batial, con intervalos
delgados de areniscas calcáreas, limolitas y esporádicas calizas. Estos resultados
en conjunto con análisis bioestratigráficos permiten correlacionar a nivel de
edades y litología ambos pozos, considerando que geográficamente están muy
separados y pertenecen a subcuencas distintas con historias geológicas
complejas.

Jorham Contreras 212


CORRELACIÓN

En la siguiente figura se puede observar la correlación cronoestratigráfica


entre las subcuencas Blanquilla Oeste y Blanquilla Este.

PMN-1X

TEMPRANO
MIOCENO
8.000’

MTC-2X
TEMPRANO
MIOCENO

TARDÍO
OLIGOCENO
10.800’
TARDÍO

11.500’
OLIGOCENO

11.150’
TEMPRANO
TEMPRANO

12.000’
IND.
12.354’
13.950’
?
TARDÍO
EOCENO

14.950’
MEDIO

FIGURA 7.1 Correlación cronoestratigráfica entre los


16.401’
pozos MTC-2X y PMN-1X. Cuenca La Blanquilla

Jorham Contreras 213


CORRELACIÓN

7.2.2 CUENCA TUY-CARIACO

La cuenca Tuy-Cariaco comienza a originarse a partir del Eoceno Medio,


bajo la influencia del régimen extensional mencionado con anterioridad y definido
por YSACCIS (1997), el cual afectó mayormente la región al norte de la isla de
Margarita, que para este momento formaba parte del arco de isla de las Antillas
Menores.

Sin embargo, al sur de la isla de Margarita, en la zona límite entre la placa


Caribe y Sudamérica, se generaron estructuras de fallamiento normal (EVANS,
1983), que originaron bloques levantados y deprimidos en el basamento Cretácico
(“graben y horst”), los cuales limitaron subcuencas extensionales muy localizadas,
tal como la subcuenca Cubagua y parte de la subcuenca Tuy-Cariaco Norte.

A diferencia de los pozos estudiados en la cuenca La Blanquilla, los pozos


CMA-1X y CUBAGUA-1 están ubicados dentro de la subcuenca Cubagua a una
distancia de 16 Km aproximadamente, por lo cual es posible establecer una
correlación entre los sedimentos paleógenos perforados por ambos.

El resto de los pozos perforados en la cuenca Tuy - Cariaco atraviesan


rocas con edades Mioceno al Reciente, a excepción de los pozos MTC-1X y MTC-
4X, ubicados en la subcuenca Tuy - Cariaco Norte; estos pozos atraviesan
bloques de calizas de edad Eoceno Medio, interpretados por BLANCO & GIRALDO
(1992), como bloques transportados desde ambientes de plataforma hasta
profundidades batiales, ya que presentan extensión limitada y buzamiento vertical.

Por lo tanto, el estudio de la secuencia paleógena en la cuenca Tuy-Cariaco


se restringe al análisis y comparación entre los pozos CMA-1X y CUBAGUA-1 de
la subcuenca Cubagua con el pozo MTC-1X de la subcuenca Tuy-Cariaco Norte,
que se encuentra a una distancia aproximada de 80 Km al oeste.

Jorham Contreras 214


CORRELACIÓN

7.2.2.1 Subcuenca Cubagua

La secuencia interpretada como paleógena en el pozo CMA-1X se


caracteriza por un alto contenido de areniscas, mientras que en el pozo
CUBAGUA-1 es predominantemente lutítica (Figura 7.2).

Sin embargo, en base a los estudios sedimentológicos, se pudo determinar


que los escasos intervalos de areniscas perforados en el pozo CUBAGUA-1
presentan características similares a las areniscas del pozo CMA-1X. Estos se
caracterizan por un alto contenido de fragmentos líticos (arenitas líticas),
principalmente metamórficos y chert, con sedimentarios y volcánicos en menor
proporción, cuarzo predominantemente de tipo metamórfico y cemento
principalmente calcítico.

Pozo CMA-1X

La secuencia paleógena perforada por el pozo CMA-1X ha sido dividida por


EVANS (1982a, 1983) en:

1) un intervalo (12.354’ – 10.020’) asignado al Eoceno(?), por correlación


litológica con el Grupo Punta Carnero que aflora en la isla de Margarita (Unidad
informal III).

2) un intervalo (10.020’ – 6.420’) asignado al Oligoceno(?), en base a


estudios de palinología realizados por EVANS (1982b), quien reporta la presencia
de Janduforia seamrogiformis, indicativa de una edad Oligoceno a Mioceno(?)
(Unidades informales I y II). Sin embargo, el mismo autor señala que no hay otras
especies que corroboren este rango de edad y que fue depositada en un ambiente
continental a costero.

Jorham Contreras 215


CORRELACIÓN

Pozo CUBAGUA-1

La unidad paleógena ha sido dividida por TIPWORD (1940) en:

1) Un intervalo basal comprendido entre 4.220’ y 4.670’ (450’ ; 145 m),


caracterizado por lutitas con alto contenido de foraminíferos planctónicos de aguas
profundas. BERMÚDEZ (1975) establece la correlación de este intervalo con la
Formación El Dátil de 720 m de espesor, ubicada en la parte media del Grupo
Punta Carnero, la cual está constituida por lutitas pelágicas ricas en foraminíferos
planctónicos de aguas profundas y edad Eoceno Medio.

2) Un intervalo de lutitas con areniscas delgadas intercaladas, comprendido


entre 4.220’ y 3.122’, totalmente estéril. En base a su posición estratigráfica han
sido considerados oligocenos(?), por encima de la secuencia eocena y por debajo
de sedimentos de edad Mioceno Tardío.

7.2.2.2 Subcuenca Tuy-Cariaco Norte

Al oeste de la subcuenca Cubagua, en el área de la subcuenca Tuy-Cariaco


Norte, el pozo MTC-1X perforó una secuencia de edad Eoceno Medio
caracterizada por lutitas calcáreas y calizas, constituidas por material bioclástico
transportado de ambientes de plataforma. Han sido interpretadas por BLANCO &
GIRALDO (1992) como bloques transportados desde ambientes someros, en base a
mediciones del registro “dipmeter”, las cuales indican un buzamiento
prácticamente vertical además que presentan extensión limitada, ya que un pozo
muy cercano no las atravesó.

Esto sugiere la existencia de altos y desarrollo de una plataforma


carbonática adyacente a esta zona, que sirvió como fuente de aporte, la cual
probablemente también alimentó de manera secundaria parte de la cuenca La
Blanquilla, también marino profunda. EVANS (1983) indica que la paleogeografía

Jorham Contreras 216


CORRELACIÓN

del Eoceno Medio – Tardío en la cuenca Tuy-Cariaco, fue esencialmente una


plataforma carbonática alineada en dirección este-oeste.

Existen claras diferencias litológicas, bioestratigráficas y paleobatimétricas


entre la subcuenca Cubagua y la subcuenca Tuy-Cariaco Norte, lo cual permite
sugerir que se trata de subcuencas aisladas, separadas probablemente por altos
estructurales, que sirvieron como fuentes de aporte de manera independiente.

7.2.2.3 Correlación entre los pozos CMA-1X y CUBAGUA-1

En base a los estudios estratigráficos y sedimentológicos, se realizó la


división de la secuencia eocena-oligocena(?) en el pozo CMA-1X en tres unidades
litoestratigráficas informales (Figura 7.2):

Unidad I: Areniscas intercaladas con lutitas (6.420’ – 8.480’ )


Unidad II: Lutitas (8.480’ – 10.020’)
Unidad III: Areniscas con intervalos conglomeráticas (10.020’ – 12.050’)

La unidad estratigráfica informal I del pozo CMA-1X, compuesta por


intercalaciones de areniscas y lutitas, con esporádicas areniscas calcáreas y
calizas, no presenta ninguna semejanza con la secuencia perforada en el pozo
CUBAGUA-1.

La unidad II del pozo CMA-1X, con un espesor de 1.540’ (470 m), está
constituida por lutitas estériles con escasos intervalos de areniscas.
Litológicamente es correlacionada con las lutitas moteadas del pozo CUBAGUA-1,
también estériles, con un espesor de 334 m (3122’ – 4.220’). Este intervalo en
ambos pozos ha sido datado como Oligoceno(?) por TIPWORD (1940) y EVANS
(1983), en base a su posición estratigráfica y a la presencia de una especie de
palinomorfos en el CMA-1X.

Jorham Contreras 217


CORRELACIÓN

La Unidad III del pozo CMA-1X, ubicada en la base (con espesor de 620 m)
difiere totalmente de los sedimentos perforados por el pozo CUBAGUA-1,
probablemente debido a que este pozo no atravesó completamente la secuencia
eocena. Esto permite sugerir por debajo de las lutitas eocenas perforadas en el
pozo CUBAGUA-1, la existencia de la unidad de areniscas conglomeráticas III
definidas en el pozo CMA-1X.

7.2.2.4 Redefinición de la secuencia paleógena en la cuenca


Tuy-Cariaco

En el presente trabajo se propone que las unidades asignadas al


Oligoceno(?) por TIPWORD (1940) en el pozo CUBAGUA-1 y por EVANS (1982b) en
el CMA-1X pueden corresponder intervalos de edad Eoceno, los cuales presentan
características texturales diferentes a las unidades eocenas infrayacentes debido
a cambios en las condiciones de depositación, pero no necesariamente por
haberse depositado en períodos geológicos distintos, es decir, que pudieron
depositarse en el Eoceno. Los criterios empleados para este planteamiento se
mencionan a continuación:

Los análisis sedimentológicos, específicamente los estudios petrográficos,


diagenéticos y de procedencia, no indican ningún tipo de diferencia entre la
unidad eocena y la oligocena(?), tanto en el pozo CMA-1X como en el
CUBAGUA-1.

Los análisis bioestratigráficos (foraminíferos y palinología) realizados no


permiten definir la edad de los intervalos asignados al Oligoceno(?), ya que en
el pozo CMA-1X se encontraron especies de palinomorfos mal preservadas y
de rango muy amplio (Eoceno Medio – Mioceno Medio), y en el pozo
CUBAGUA-1 estos intervalos resultaron totalmente estériles. Por esta razón, la
edad asignada por EVANS (1982b) en base a la preservación de una única
especie no es considerada totalmente válida.

Jorham Contreras 218


CORRELACIÓN

El ambiente depositacional de estos intervalos oligocenos (?) tanto en el


pozo CMA-1X como en el CUBAGUA-1 han sido considerados por EVANS
(1982b) como depósitos continentales a marino somero, debido a la presencia
de palinomorfos y ausencia de foraminíferos u otros organismos que indiquen
un ambiente más profundo. Sin embargo, los estudios realizados
recientemente, indican que las especies de palinomorfos se encuentran muy
mal preservadas y el número de organismos es escaso, por lo cual podrían
corresponder a depósitos turbidíticos de ambientes someros transportados
hasta profundidades batiales.

La revisión de los transectos sísmicos interpretados en trabajos anteriores


(EVANS, 1983; GODDARD, 1986; YSACCIS, 1997), no evidencian ningún tipo de
superficie límite entre ambas unidades. BLANCO & GIRALDO (1992) sugieren que
los depósitos más antiguos en la subcuenca Cubagua, pueden representar el
relleno de una depresión tipo “rift” formada durante el Paleógeno.

Las diferencias en el contenido faunal entre las unidades eocena y


oligocena(?) en el pozo CUBAGUA-1, puede considerarse como resultado de
depositación por corrientes de turbidez en la unidad superior, donde la fauna
no fue preservada o probablemente sean sedimentos de ambientes someros
totalmente estériles, a diferencia de la unidad eocena, que presenta un alto
contenido de foraminíferos planctónicos, depositados en aguas profundas en
un régimen estable de baja energía.

Esto se puede sugerir por analogía con la secuencia flysch de la isla de


Margarita, donde las lutitas de la Formación Pampatar son totalmente estériles
mientras que las del Grupo Punta Carnero presentan abundante fauna de
aguas profundas, a pesar de ser unidades depositadas de manera contem-
poránea.

Jorham Contreras 219


CORRELACIÓN

En base a estos planteamientos podemos decir que la secuencia paleógena


en la subcuenca Cubagua presenta al menos 2.000’ de espesor, constituida por
depósitos de aguas profundas. En el pozo CMA-1X se caracteriza por areniscas
conglomeráticas hacia la base con lutitas estériles hacia la parte media y tope,
mientras que en el CUBAGUA-1 la secuencia consta de lutitas con escasos
intervalos de areniscas. La edad de la secuencia ha sido establecida Eoceno
Medio (?), pero en el tope puede extenderse hasta el Eoceno Tardío (?).

El cambio en las características sedimentológicas de la secuencia perforada


por los pozos CMA-1X y CUBAGUA-1, puede estar asociado a variaciones late-
rales de facies dentro del abanico turbidítico. Los sedimentos del pozo CMA-1X
indicarían una mayor cercanía a la fuente de sedimentos y se interpretan como
sedimentos de facies de talud a abanico interno, mientras que el pozo
CUBAGUA-1 atravesó sedimentos de facies más distales, probablemente de am-
bientes de abanico externo a planicie distal. Sin embargo, también es posible que
se hayan perforado abanicos o lóbulos distintos, cada uno en facies diferentes.

En conclusión:

La unidad informal I del pozo CMA-1X (6.420’ – 8.480’) no fue atravesada


por el pozo CUBAGUA-1, posiblemente debido a cambios laterales de facies o
acuñamiento de la misma.

La unidad informal II del pozo CMA-1X (8.480’ – 10.020’) es correlacionada


litológicamente con la unidad de lutitas moteadas y estériles del pozo
CUBAGUA-1 (3.122’ – 4.220’).

La unidad informal III del pozo CMA-1X no fue perforada por el pozo
CUBAGUA-1, probablemente debido a que el pozo no alcanzó el basamento y
por lo tanto no atravesó la columna completa. Esto permite sugerir la existencia
de esta unidad por debajo de las lutitas fosilíferas ubicadas en la base.

Jorham Contreras 220


CORRELACIÓN

En base a los estudios sedimentológicos y bioestratigráficos realizados por


HAKK (1980), EVANS (1982b, 1983) y los análisis desarrollados en el presente
trabajo, se establece la correlación litoestratigráfica entre los pozos CMA-1X y
CUBAGUA-1 ubicados en la subcuenca Cubagua.

CMA-1X
CUBAGUA-1
MIOCENO
TARDÍO

MIOCENO
TARDÍO
6.420’
3.122’

EOCENO MEDIO – TARDÍO (?)


UNIDAD INFORMAL I
EOCENO MEDIO - MIOCENO MEDIO (?)

4.220’
8.480’
EOCENO
MEDIO
UNIDAD INFORMAL II

4.670’

10.020’
?
UNIDAD INFORMAL III
EOCENO MEDIO (?)

12.050’

FIGURA 7.2 Correlación litológica entre los pozos CMA-1X y CUBAGUA-1.


Cuenca Tuy-Cariaco, Subcuenca Cubagua

Jorham Contreras 221


CORRELACIÓN

7.3 CORRELACIÓN ENTRE LAS CUENCAS LA BLANQUILLA Y


TUY-CARIACO

La secuencia paleógena en la cuenca La Blanquilla está constituida por


sedimentos de edad Eoceno – Oligoceno (zonas P11 – P22), los cuales en base a
la interpretación de transectos sísmicos presentan amplia distribución por encima
del basamento en toda la cuenca (Figuras 4.4, 4.5 y 7.4).

En la cuenca Tuy-Cariaco únicamente se han datado sedimentos de edad


Eoceno Medio (zonas P11 – P12) en la subcuenca Cubagua, y se han registrado
bloques transportados de esta misma edad en la subcuenca Tuy-Cariaco Norte.
Sin embargo, según la interpretación de YSACCIS (1997) de transectos sísmicos,
los depósitos paleógenos se extienden en gran parte de la subcuenca Tuy-Cariaco
Norte e incluso en la fosa de Cariaco (Capítulo 4, figuras 4.8, 4.9 y 4.11).

Características sedimentológicas y estratigráficas

La secuencia paleógena depositada en la cuenca La Blanquilla está


caracterizada por depósitos lutíticos, de ambiente batial, con esporádicos niveles
de areniscas y calizas, mientras que en la cuenca Tuy-Cariaco se caracteriza por
areniscas, calizas y lutitas depositadas bajo corrientes de turbidez, intercaladas
con lutitas de ambiente batial.

La distancia geográfica entre los pozos en estudio y la compleja historia


geológica de la región costafuera de Venezuela a partir del Paleoceno, hacen muy
difícil establecer una correlación entre los sedimentos paleógenos de las cuencas
La Blanquilla y Tuy-Cariaco.

A pesar de que el registro sedimentario de ambas cuencas indica una


sedimentación contemporánea durante el Eoceno Medio – Tardío y, probablemen-
te, durante el Oligoceno, en la cuenca Tuy-Cariaco esta sedimentación estuvo

Jorham Contreras 222


CORRELACIÓN

restringida a cuencas extensionales locales, ya que gran parte de ella se


encontraba expuesta producto del régimen transpresional entre las placas del
Caribe y Sudamérica, mientras que en La Blanquilla los sedimentos presentan
amplia distribución dentro de una cuenca extensional marino profunda en un
régimen de retroarco (Figura 7.4).

Adicionalmente, se debe considerar que los modelos geodinámicos


planteados hasta la actualidad, sugieren que ambas cuencas están separadas
desde el Eoceno Medio - Tardío por el alto La Tortuga, la falla dextral de Margarita
y la plataforma Margarita-Los Testigos, indicando que han evolucionado como
cuencas independientes. Por esta razón resulta más conveniente realizar una
comparación e interpretar en la medida de lo posible, la distribución, cambios de
facies y correspondencia entre los sedimentos de subsuelo preservados en
ambas.

En la figura 7.3 se pueden observar la diferencias sedimentológicas y


estratigráficas de la secuencia paleógena entre la subcuenca Blanquilla Oeste
(pozo MTC-2X) y la subcuenca Cubagua (pozo CMA-1X).

Jorham Contreras 223


CORRELACIÓN

En la siguiente figura se puede observar la comparación entre los depósitos


paleógenos de las subcuencas Blanquilla Oeste y Cubagua. Es necesario destacar
que la distancia geográfica entre los pozos y las características estructurales del
área no permiten establecer una correlación estratigráfica.

CMA-1X

MIOCENO
TARDÍO
6.420’

MTC-2X

EOCENO MEDIO - MIOCENO MEDIO (?)


UNIDAD INFORMAL I
TEMPRANO
MIOCENO

8.480’

UNID. INFORMAL II
10.800’
TARDÍO

11.500’
?
10.020’
OLIGOCENO

UNIDAD INFORMAL III


EOCENO MEDIO (?)
TEMPRANO

13.950’
? 12.050’
TARDÍO
EOCENO

14.950’
MEDIO

FIGURA 7.3 Correlación cronoestratigráfica


entre los pozos MTC-2X y CMA-1X.
16.401’ Cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco

Jorham Contreras 224


CORRELACIÓN

SUBCUENCA BLANQUILLA ESTE – CUENCA TUY-CARIACO

SO NE
ENSENADA DE BARCELONA SUBCUENCA TUY-CARIACO NORTE SUBCUENCA LA BLANQUILLA ESTE

PMO-2X PMN-1X

FOSA DE
CARIACO

25 Km

FIGURA 7.4 Sección sísmica NE-SO, subcuenca La Blanquilla Este – Cuenca Tuy-Cariaco
Tomado y modificado de YSACCIS et al. (2000)
MAPA DE UBICACIÓN
UNIDADES CRONOESTRATIGRÁFICAS LITOLOGÍA EN LOS POZOS

PMN-1X
PMO-2X
MTC-2X

CUB-1
CMA-1X

50 Km

Jorham Contreras 225


CORRELACIÓN

Fuente de sedimentos

El estudio de procedencia de estas secuencias, se realizó a través de los


diagramas ternarios de DICKINSON & SUCZEK (1979), los cuales se pueden observar
a continuación:
Q
CRATON
INTERIOR 3
Qm
CRATON
INTERIOR
11
18
20 RECICLADO
CONTINENTAL CUARZOSO
CONTINENTAL OROGENO TRANSICIONAL
TRANSICIONAL RECICLADO

43 42
45
RECICLADO
MEZCLA TRANSICIONAL

37
ARCO BASAMENTO
BASAMENTO LEVANTADO ARCO
DISECTADO 32
LEVANTADO DISECTADO
25

ARCO 18
TRANSICIONAL ARCO RECICLADO
13
TRANSICIONAL LÍTICO
ARCO NO
DISECTADO ARCO NO
DISECTADO

F 15 50
L F
23 47 13
Lt
La Blanquilla Tuy-Cariaco

FIGURA 7.5 Diagramas de procedencia para los litotipos arenosos de los pozos PMN-1X,
MTC-2X, CMA-1X y CUBAGUA-1. Cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco.

En base a estos diagramas se puede sugerir que las fuentes de sedimentos


estuvieron representadas por varias provincias tectónicas cercanas a estas
cuencas, siendo principalmente orógenos reciclados, basamento continental
transicional y basamento levantado. El diagrama Qm-F-Lt indica que estos
orógenos son de tipo transicional a cuarzoso y que para la cuenca Tuy-Cariaco
presentan cierta influencia del arco magmático de las Antillas Menores.

DICKINSON & SUCZEK (1979) indican que la provincia de orógenos reciclados


está representada por secuencias de estratos levantados, plegados y fallados,
donde los detritos reciclados de rocas sedimentarias y metasedimentarias son
importantes. Pueden estar asociados a complejos de subducción con deformación
de sedimentos oceánicos, orógenos en colisión y a levantamientos del cinturón de
deformación en cuencas antepaís.

Jorham Contreras 226


CORRELACIÓN

La provincia de basamento continental transicional está asociada a áreas


comprendidas entre el cratón interior y el basamento, donde estructuras de
fallamiento intracontinental o márgenes continentales transformantes originan el
rompimiento y exposición de bloques, que representan fuente de sedimentos con
alta proporción de cuarzo y feldespatos para zonas de margen continental.

La provincia de basamento levantado está representada por altos o bloques


de corteza continental limitados por fallas, que representan una fuente importante
de rocas feldespáticas, compuestas principalmente por plagioclasas y cuarzo.
Puede existir un aporte secundario de areniscas líticas, provenientes de la
cobertura sedimentaria o metasedimentaria que envuelve el basamento. Está aso-
ciada a límites continentales transformantes o “rift” incipientes intracontinentales.

En el diagrama Qm-F-Lt se puede observar el origen o tipo de orógeno


reciclado que representa la principal fuente de aporte observada en el diagrama
Q-F-L. Los reciclados cuarzosos y transicionales están asociados respectivamente
a orógenos en colisión y levantamiento del cinturón de deformación en la cuenca
antepaís, donde las fuentes de sedimentos están representadas por rocas
sedimentarias y metasedimentarias, con secuencias ofiolíticas asociadas y
bloques de basamento ígneo y plutónico, por lo cual representan una fuente
importante de fragmentos de roca tipo sedimentarios, chert, metamórficos y en
menor grado volcánicos y plutónicos.

Las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco evolucionaron bajo dos regímenes


estructurales: uno de colisión oblicua entre las placas del Caribe y Suramérica y
otro de subducción entre las placas del Caribe y Atlántica. Esto indica que deben
esperarse fuentes de sedimentos variadas y complejas, asociadas a las provincias
tectónicas observadas en los diagramas, las cuales son producto de los
regímenes que controlaron la distribución paleogeográfica en la región costafuera
de Venezuela, tal como se puede observar en la figura 7.6.

Jorham Contreras 227


CORRELACIÓN

a
ARCO DE LAS EOCENO MEDIO
ANTILLAS MENORES
2
PLACA
DEL CARIBE PLACA
CUENCA LA BLANQUILLA ATLÁNTICA

CUENCA TUY-CARIACO

ISLA DE MARGARITA 10º

1
PLACA SURAMÉRICA

70º 60º

b ARCO DE LAS EOCENO


ANTILLAS MENORES
TARDÍO
PLACA
DEL CARIBE
2
PLACA
CUENCA LA BLANQUILLA ATLÁNTICA
CUENCA TUY-CARIACO
ISLA DE
MARGARITA

10º

70º PLACA SURAMÉRICA 60º

1 Cinturón de deformación de la cuenca antepaís


2 Complejo de subducción

FIGURA 7.6 Paleogeografía para el Eoceno en la región costafuera de Venezuela


Tomado y modificado de YSACCIS (1997)

Jorham Contreras 228


CORRELACIÓN

El origen de las provincias tectónicas que sirvieron de aporte para las


cuencas en la región costafuera de Venezuela están asociadas a la evolución
geodinámica de la placa del Caribe con respecto a las placas de Suramérica y
Atlántica, tal como se describe a continuación:

1) Como consecuencia del régimen de colisión oblicua Caribe /


Sudamérica ocurre el levantamiento del cinturón de deformación asociado a la
cuenca antepaís al norte de Sudamérica, además del emplazamiento y
levantamiento de bloques y napas de corteza continental y oceánica, las cuales
estuvieron limitadas por fallas, producto del acoplamiento entre ambas placas
durante el movimiento transcurrente.

Al mismo tiempo, secuencias sedimentarias de margen pasivo en el margen


norte de Sudamérica junto con secuencias ofiolíticas, fueron levantadas, plegadas
y falladas, debido a este régimen de colisión.

En ambos casos estaría representada una fuente de orógeno reciclado, la


cual representa una fuente importante de fragmentos líticos sedimentarios y
metasedimentarios, compuestos principalmente por chert y cuarzo, con baja
proporción de feldespatos, tal como se observan de manera abundante en la
cuenca Tuy-Cariaco, debido a su ubicación geográfica cercana al borde
continental donde ocurre el emplazamiento de estas secuencias.

2) La provincia de basamento continental transicional está representada


por rocas ígneo-metamórficas cretácicas de composición félsica a intermedia, de
origen alóctono, que fueron expuestas y representan una fuente importante de
rocas cuarzo-feldespáticas, arenitas arcósicas y subarcosas, las cuales son más
abundantes en la cuenca La Blanquilla. Esto se debe a que en esta región, las
rocas que componen parte de los bloques Villa de Cura y de la Cordillera de la
Costa, junto con rocas que forman parte del núcleo de las islas de Margarita
(Grupo Juan Griego), La Orchila y Los Testigos, representaron una fuente de

Jorham Contreras 229


CORRELACIÓN

sedimentos importante para las cuencas marino profundas en la zona retroarco de


las Antillas Menores, al norte de los altos de Margarita y La Tortuga.

La cuenca Tuy-Cariaco recibió un aporte de este tipo de sedimentos


considerablemente menor debido a que probablemente se encontraba geográfica-
mente lejana de estos altos, separada por la plataforma Margarita - Los Testigos y
los altos mencionados con anterioridad.

3) El arco de las Antillas Menores representó una fuente secundaria para


ambas cuencas, aunque para la cuenca La Blanquilla el aporte parece ser
considerablemente menor, ya que los fragmentos volcánicos están prácticamente
ausentes. Esto puede estar asociado a que los pozos perforaron facies distales,
donde los fragmentos provenientes del arco magmático y otros altos adyacentes
no fueron transportados, pero posiblemente en facies proximales se encuentren en
mayor proporción.

En la cuenca Tuy-Cariaco los fragmentos de roca volcánicos son más


frecuentes tal como muestra el diagrama Qm-F-Lt, aunque se mantienen en baja
proporción, donde se observa una dispersión hacia el campo del arco disectado y
zona de mezcla, lo cual sugiere que estuvo influenciada por el complejo de
subducción Caribe / Atlántica, específicamente por el arco magmático y
probablemente por el prisma de acreción. Los fragmentos volcánicos fueron
identificados como volcanoclásticos y piroclásticos, constituidos principalmente por
fenocristales de plagioclasas en una matriz microcristalina.

4) La cuenca Tuy-Cariaco presenta un aporte secundario de basamento


levantado, el cual no se estableció en la cuenca La Blanquilla. Esto permite
sugerir que esta cuenca estuvo influenciada por bloques de corteza continental,
probablemente levantados por efecto de un régimen de distensión que genera un
estilo de “horst y graben” durante el Eoceno en la cuenca Tuy-Cariaco, donde los
grabens están representados por las cuencas restringidas marino profundas, tal

Jorham Contreras 230


CORRELACIÓN

como la subcuenca Cubagua. Los altos tectónicos representan una fuente impor-
tante de rocas feldespáticas, compuestas principalmente por plagioclasas y
cuarzo.

5) Ambas cuencas estuvieron influenciadas por el desarrollo de ambientes


de plataforma carbonática. En la cuenca La Blanquilla y subcuenca Cubagua de
la cuenca Tuy-Cariaco, los intervalos de areniscas con cemento calcáreo son
frecuentes y se presentan muy esporádicos intervalos de calizas, mientras que en
la subcuenca Tuy-Cariaco Norte se han registrado bloques calcáreos transporta-
dos desde ambientes someros de plataforma.

Estas evidencias permiten sugerir que dentro de la cuenca Tuy-Cariaco se


desarrolló al menos un complejo arrecifal de plataforma que pudo haber limitado o
representado un alto dentro del estilo “graben y horst” en la fase distensiva del
Eoceno, representando una fuente importante de material bioclástico y carbonatos
disueltos para la cuenca Tuy-Cariaco, principalmente en la subcuenca Tuy-
Cariaco Norte y de forma secundaria para La Blanquilla, además que
probablemente formaba parte del alto que separaba ambas cuencas a partir del
Eoceno Medio - Tardío. EvANS (1983), de manera concordante, indica que la
paleogeografía del Eoceno Medio – Tardío en la cuenca Tuy-Cariaco, fue
esencialmente una plataforma alineada en dirección este-oeste.

En conclusión:

Las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco evolucionaron como cuencas


independientes desde su formación en el Eoceno Medio y estuvieron alimentadas
por provincias tectónicas asociadas a la evolución de las placas Caribe y
Sudamérica.

La secuencia paleógena de la cuenca La Blanquilla, se caracteriza por


una sedimentación en ambientes de talud, predominantemente lutítica e

Jorham Contreras 231


CORRELACIÓN

influenciada por esporádicos episodios turbidíticos que transportaron material


proveniente de islas asociadas al arco magmático del complejo de subducción
entre las placas Caribe / Atlántica. Parte de estas islas se encontraban emergidas
durante el Eoceno y en su totalidad a partir del Oligoceno, las cuales permitieron el
desarrollo de una plataforma carbonática adyacente.

La secuencia paleógena de la cuenca Tuy-Cariaco estuvo influenciada


por constantes episodios de inestabilidad tectónica que generaron corrientes de
turbidez, las cuales transportaron material terrígeno y bioclástico desde ambientes
someros hasta ambientes de talud. Las fuentes de sedimentos para esta cuenca
son más complejas, están asociadas al complejo de subducción Caribe / Atlántica
y de colisión oblicua Caribe / Sudamérica.

El régimen de colisión oblicua genera el fallamiento, levantamiento y


emplazamiento de bloques de corteza continental y oceánica en el margen norte
de Sudamérica, mientras que el complejo de subducción origina un prisma de
acreción que estuvo emergido y también representó una fuente de sedimentos,
aunque menos importante que los terrenos emplazados.

Adicionalmente, se estableció que existe una fuente de sedimentos


bioclásticos y terrígenos a partir de una plataforma carbonática, la cual pudo
desarrollarse en el interior de la cuenca Tuy-Cariaco, adyacente a los altos
estructurales que representaban las islas y, probablemente, parte del terreno Villa
de Cura durante el Eoceno.

Jorham Contreras 232


CORRELACIÓN

7.4 CORRELACIÓN ENTRE LA SECUENCIA FLYSCH DE LA ISLA DE


MARGARITA Y LAS CUENCAS LA BLANQUILLA Y TUY-CARIACO

La secuencia flysch de la isla de Margarita está caracterizada una


secuencia turbidítica depositada en una cuenca marino profunda durante el
Eoceno Medio. Está constituida por areniscas, conglomerados, calizas y lutitas
transportadas desde ambientes someros hasta ambientes de talud, en conjunto
con intervalos de lutitas pelágicas depositadas en un régimen de baja energía a
profundidades batiales.

Las dos unidades estratigráficas formales, Formación Pampatar y Grupo


Punta Carnero, presentan características sedimentológicas y estratigráficas
distintivas, pero ambas corresponden a una sedimentación bajo condiciones de
alta energía, en una cuenca marino profunda, alimentadas por fuentes de
sedimentos similares. Estas secuencias probablemente fueron tectonizadas a
partir del Eoceno Tardío, y según MUÑOZ (1973) y CASAS & MORENO (1986)
emplazadas en la isla de Margarita durante el Mioceno Medio – Tardío(?).

En cuanto a la correlación con los depósitos de subsuelo preservados en la


región costafuera de Venezuela, esta secuencia turbidítica aparentemente estuvo
relacionada con los sedimentos paleógenos perforados en la Cuenca Tuy-
Cariaco, a diferencia de los depósitos de la Cuenca La Blanquilla, con los cuales
aparentemente no presenta ninguna relación.

7.4.1 Cuenca La Blanquilla vs. secuencia turbidítica de la isla de


Margarita

Tal como se ha mencionado con anterioridad, la secuencia paleógena de la


cuenca La Blanquilla está constituida por sedimentos lutíticos de ambiente batial
con esporádicos intervalos de areniscas y calizas, que se asocian a flujos gravi-
tacionales de sedimentos originados por ocasionales períodos de inestabilidad.

Jorham Contreras 233


CORRELACIÓN

Los análisis bioestratigráficos y sedimentológicos indican que durante el


Eoceno Medio – Oligoceno Tardío (zonas P11 – P22), en la cuenca La Blanquilla
predominaba una sedimentación pelágica, en ambientes de talud superior a medio
que evidencian sedimentación en un régimen de baja energía, influenciada por
ocasionales corrientes de turbidez, mientras que la secuencia turbidítica de la isla
de Margarita fue depositada durante el Eoceno Medio (zonas P11 – P13), bajo
condiciones de alta energía, asociados a permanentes flujos gravitacionales de
sedimentos desde ambientes someros de plataforma hasta ambientes de talud
superior e inferior.

Adicionalmente, los análisis de procedencia indican que la secuencia


turbidítica de la isla de Margarita estuvo alimentada por dos provincias tectónicas
como fuentes principales: orógenos reciclados y arco disectado, las cuales se
asocian al prisma de acreción entre las placas Caribe y Atlántica, al arco
magmático de las Antillas Menores y al complejo de subducción entre las placas
Caribe / Atlántica, respectivamente.

Ambos regímenes originan el fallamiento y emplazamiento de bloques de


corteza continental y oceánica en el margen norte de Sudamérica, los cuales
representan una fuente importante de fragmentos líticos (principalmente chert y
sedimentarios), junto con el prisma de acreción, arco magmático de las Antillas
Menores y una plataforma carbonática que aportó sedimentos bioclásticos y
terrígenos, a diferencia de la secuencia depositada en la cuenca La Blanquilla, que
estuvo alimentada principalmente por los altos que representaban las islas
caribeñas, y de forma secundaria por el arco magmático de las Antillas Menores.

Jorham Contreras 234


CORRELACIÓN

7.4.2 Cuenca Tuy-Cariaco vs. secuencia turbidítica de la isla de


Margarita

Los depósitos de edad Paleógeno de la cuenca Tuy-Cariaco han sido


datados en las subcuencas Cubagua y Tuy-Cariaco Norte, estableciéndose una
edad Eoceno Medio, zonas P11 – P12, similar a la establecida para la secuencia
turbidítica que aflora en la isla de Margarita, la cual fue sedimentada durante el
Eoceno Medio, zonas P11 – P13. Esto indica que pertenecen a una sedimentación
contemporánea en cuencas marino profundas, posiblemente asociadas.

a) Características sedimentológicas y estratigráficas

La secuencia paleógena de la cuenca Tuy-Cariaco está caracterizada por


depósitos turbidíticos de areniscas y conglomerados hacia la base, seguida de
areniscas y lutitas estériles, intercaladas con un intervalo de lutitas pelágicas y
fosilíferas registrado únicamente en la base del pozo CUBAGUA-1.

Se observan diferencias en las características texturales y relación


areniscas / lutitas, lo cual permite interpretar variaciones laterales de facies,
debidas a cambios en los regímenes de energía y paleobatimetría a lo largo de la
columna. Tanto en superficie como en subsuelo, estas variaciones pueden
observarse principalmente en el contenido paleontológico y en la proporción de
areniscas y calizas.

En base a la definición de unidades estratigráficas informales en los pozos


CMA-1X y CUBAGUA-1 ubicados en la subcuenca Cubagua (Figura 7.2), se
establece la correspondencia litoestratigráfica con las unidades formales definidas
en superficie, tal como se muestra a continuación:

La unidad estratigráfica informal I del pozo CMA-1X, compuesta por


intercalaciones de areniscas y lutitas, con esporádicas areniscas calcáreas y
calizas, no presenta ninguna semejanza con la secuencia perforada en el pozo

Jorham Contreras 235


CORRELACIÓN

CUBAGUA-1. Litológicamente es similar a la unidad de areniscas y lutitas del


intervalo medio y superior de la Formación Pampatar, pero no es posible
establecer una correlación directa debido a la escasez de fauna, horizontes guía o
alguna otra evidencia.

La unidad estratigráfica informal II del pozo CMA-1X (1.540’; 470 m),


compuesta por lutitas estériles intercaladas con areniscas delgadas, se
correlaciona con el intervalo de lutitas moteadas estériles del pozo CUBAGUA-1
(1.098’; 335 m). Esta unidad es similar al intervalo de lutitas estériles ubicado en la
localidad de Punta Gorda, Formación Pampatar (984’; 300 m), el cual se
caracteriza por lutitas estériles con capas lenticulares de areniscas.

Tanto en superficie como en subsuelo esta unidad es interpretada como


depósitos de facies de talud inferior a planicie distal, bajo corrientes de turbidez
que no permitieron la preservación de la fauna.

La unidad estratigráfica informal III del pozo CMA-1X no se presenta en el


pozo CUBAGUA-1, posiblemente debido a que éste último no atravesó
completamente la secuencia eocena y dicha unidad se encuentre por debajo de la
profundidad final alcanzada. Esta unidad III de areniscas con intervalos
conglomeráticos se puede correlacionar con los depósitos flysch eocenos que
afloran en la isla de Margarita, específicamente, con la unidad conglomerática
establecida en la base de la Formación Pampatar, localidades Punta Gorda y Pun-
ta Moreno, así como con la Formación Las Bermúdez del Grupo Punta Carnero.

En el subsuelo presenta un espesor de 620 m, mientras que en superficie


oscila entre 60 y 190 m para la Formación Pampatar y 535 m para la Formación
Las Bermúdez. Las características sedimentológicas y composicionales son
similares en superficie y subsuelo, donde la secuencia consta principalmente de
arenitas líticas de grano medio a grueso, con alta proporción de fragmentos líticos
de tipo chert y sedimentarios, cuarzo ígneo y metamórfico en proporciones

Jorham Contreras 236


CORRELACIÓN

similares, baja proporción de feldespatos y cemento de calcita, con frecuentes


intervalos conglomeráticos y lutíticos muy escasos.

Esta unidad es interpretada como depósitos caóticos “wild flysch”,


constituidos por una mezcla de bloques y material terrígeno tamaño arenas
gruesas y conglomerados, embebidos en una matriz lutítico-arenosa,
sedimentados en facies de talud y abanico interno.

La unidad lutítica basal del pozo CUBAGUA-1 (450’; 137 m) es


correlacionada por BERMÚDEZ (1975) con la Formación El Dátil (227’; 745 m).
Ambas están constituidas por lutitas pelágicas depositas en ambiente batial,
fosilíferas y edad Eoceno Medio. La diferencia en espesor puede corresponder a
que el pozo no perforó completamente la secuencia eocena, pudiendo presentar
un espesor mayor en subsuelo.

Las calizas y lutitas de los pozos MTC-1X y MTC-4X, ubicados en la


subcuenca Tuy-Cariaco Norte, han sido interpretadas en base a la data sísmica y
los datos de los pozos por BLANCO & GIRALDO (1992), como un bloque alóctono de
ambiente marino somero, transportado y redepositado en un ambiente marino
profundo, por lo cual su extensión es muy restringida e incluso, no fue perforado
por otro pozo que se encuentra muy cercano.

Presentan características similares a un cuerpo de calizas ubicado en la base


del Grupo Punta Carnero, caracterizado por un olitostromo de calizas coralinas
con fragmentos de algas y foraminíferos bénticos de plataforma (caliza Los
Bagres). De igual manera, es común encontrar en la parte media (contacto entre
las formaciones Las Bermúdez y El Dátil) y en el tope del Grupo Punta Carnero
(Formación Punta Mosquito), capas de calizas compuestas por fragmentos de
algas y foraminíferos bénticos de plataforma, también similares a los bloques
transportados en la cuenca Tuy-Cariaco Norte.

Jorham Contreras 237


CORRELACIÓN

b) Procesos diagenéticos

A partir de los análisis petrográficos y sedimentológicos, se establece que la


secuencia paleógena de la cuenca Tuy-Cariaco y los depósitos eocenos de la isla
de Margarita alcanzaron una etapa de diagénesis tardía.

Tanto en superficie como en subsuelo, se observó que los intervalos de


areniscas presentan alta proporción de fragmentos líticos (chert y sedimentarios),
se mantiene la proporción de cuarzo, el cemento es principalmente calcítico
(disminuye un poco en la secuencia de subsuelo), la matriz es de tipo arcillosa y
se presenta en baja proporción.

Los diagramas paragéneticos indican que ambas secuencias fueron


afectadas por los mismos procesos en etapas similares, distinguiéndose
principalmente:

Compactación mecánica inicial, la cual genera contactos mayormente


longitudinales, así como la deformación y trituramiento de los fragmentos más
inestables (fragmentos de roca y micas), generando pseudomatriz. Este
proceso está controlado por la cementación calcítica temprana, la cual genera
endurecimiento de la roca e inhibe el proceso.

Cementación calcítica durante una etapa de diagénesis temprana y


cementación por sílice en continuidad óptica con el cuarzo, durante una etapa
de diagénesis intermedia. Adicionalmente, en la secuencia de subsuelo, se
identificó cemento de cuarzo microcristalino (chert), por lo cual la proporción de
cemento calcítico y silíceo son similares, a diferencia de superficie donde
predomina la calcita.

Durante la diagénesis intermedia incipiente comienza la alteración de los


feldespatos y fragmentos de roca a minerales de arcillas de tipo clorita,

Jorham Contreras 238


CORRELACIÓN

caolinita y esmectita principalmente. Estos minerales por efecto del aumento


en las condiciones de presión y temperatura, comienzan un proceso de
alteración progresiva, a través de arcillas de capas mixtas de tipo ilita /
esmectita y clorita / esmectita.

En una etapa de diagénesis intermedia comienza la corrosión y


progresivamente el reemplazamiento de los componentes siliciclásticos por
efecto de la cementación calcítica.

Los análisis de difracción de rayos X permitieron identificar arcillas de


capas mixtas de tipo ilita / esmectita, las cuales en la secuencia de superficie
presentan un arreglo ordenado con 80-85% de ilita y en subsuelo un arreglo
semi-ordenado con 75% de ilita aproximadamente. El arreglo ordenado en este
tipo de arcillas comienza a partir de los 130ºC, lo cual señala una etapa
diagenética tardía, mientras que el arreglo semi-ordenado no indica
directamente la temperatura alcanzada pero se asume que muy cercana a los
130ºC a condiciones de diagénesis tardía incipiente.

Las diferencias en las condiciones de soterramiento pueden estar


influenciadas por el régimen tectónico a que fue sometida la secuencia de la
isla de Margarita, ya que durante la etapa de emplazamiento se genera un
patrón de esfuerzos dirigidos, que aumenta considerablemente la presión y por
consiguiente genera un aumento en la temperatura. Estos parámetros actúan
de manera diferente en una secuencia no tectonizada, ya que la presión está
controlada únicamente por la carga litostática, y la temperatura, por el
gradiente geotérmico.

Jorham Contreras 239


CORRELACIÓN

c) Fuente de sedimentos

Ambas secuencias están caracterizadas por sedimentos turbidíticos


provenientes de ambientes someros, los cuales bajo condiciones de inestabilidad
tectónica dentro de la cuenca, fueron transportados hasta ambientes de talud y
planicie distal, rellenando las cuencas extensionales marino profundas durante el
Eoceno Medio.

Los diagramas ternarios de DICKINSON & SUCZEK (1979) (Figura 7.7),


muestran que la principal fuente de aporte para ambas secuencias está
representada orógenos reciclados y arcos magmáticos disectado y transicional,
observándose además, una dispersión hacia el campo de basamento levantado en
la cuenca Tuy-Cariaco. El diagrama Qm-F-Lt muestra que los orógenos reciclados
están representados por reciclados transicionales y cuarzosos.

Q
CRATON Qm
INTERIOR 3 CRATON
INTERIOR 11

18
20 RECICLADO
CONTINENTAL CUARZOSO
CONTINENTAL OROGENO TRANSICIONAL
TRANSICIONAL RECICLADO

43 42
45 RECICLADO
MEZCLA TRANSICIONAL

37
BASAMENTO ARCO
ARCO 32
BASAMENTO LEVANTADO DISECTADO
DISECTADO
LEVANTADO
25
18
ARCO ARCO RECICLADO
TRANSICIONAL 13
TRANSICIONAL LÍTICO
ARCO NO
DISECTADO ARCO NO
DISECTADO
23 47 13
F
15 50
L F Lt
Flysch de Margarita Tuy-Cariaco

FIGURA 7.7 Diagramas de procedencia para los litotipos arenosos de los pozos CMA-1X,
CUBAGUA-1 y la secuencia turbidítica de la isla de Margarita.

Tal como se mencionó con anterioridad en la figura 7.5, DICKINSON &


SUCZEK (1979) indican que la provincia de orógenos reciclados está representada

Jorham Contreras 240


CORRELACIÓN

por secuencias de estratos levantados, plegados y fallados, donde los detritos


reciclados de rocas sedimentarias y metasedimentarias son importantes. Pueden
estar asociados a complejos de subducción con deformación de sedimentos
oceánicos, orógenos en colisión y a levantamientos del cinturón de deformación
en cuencas antepaís.

La provincia de basamento levantado está representada por altos o bloques


de corteza continental limitados por fallas, que representan una fuente importante
de rocas feldespáticas, compuestas principalmente por plagioclasas y cuarzo.
Puede existir un aporte secundario de areniscas líticas, provenientes de la
cobertura sedimentaria o metasedimentaria que envuelve el basamento. Está aso-
ciada a límites continentales transformantes o “rift” incipientes intracontinentales.

Los reciclados transicionales y cuarzosos observados en el diagrama


Qm-F-Lt, están asociados respectivamente a orógenos en colisión y levantamiento
del cinturón de deformación en la cuenca antepaís, donde las fuentes de
sedimentos están representadas por rocas sedimentarias y metasedimentarias,
con secuencias ofiolíticas asociadas y bloques de basamento ígneo y plutónico,
por lo cual representan una fuente importante de fragmentos de roca tipo
sedimentarios, chert, metamórficos y en menor grado volcánicos y plutónicos.

Los análisis petrográfico y diagenético, el estudio de procedencia y el


registro bioestratigráfico indican que la secuencia turbidítica de la isla de Margarita
y los depósitos perforados en la subcuenca Cubagua representan sedimentos
depositados en cuencas con características similares y posiblemente relacionadas
entre sí, alimentadas de fuentes de sedimentos asociadas a los regímenes de
colisión oblicua Caribe / Sudamérica y subducción Caribe / Atlántica, los cuales
originan el levantamiento y emplazamiento de bloques de corteza continental y
oceánica, un arco magmático y un prisma de acreción que pudo estar emergido y
representar una fuente de sedimentos para las cuencas retroarco.

Jorham Contreras 241


CORRELACIÓN

Los modelos geológicos planteados para el Eoceno – Oligoceno en la


región costafuera de Venezuela indican que durante la evolución de la placa del
Caribe, ocurrió el emplazamiento de bloques ígneo-metamórficos que originaron el
cinturón de deformación en la cuenca antepaís, así como se desarrolló un sistema
de fallas transcurrentes que actuaron como sistema de acople en la zona límite de
las placas del Caribe y Sudamérica, las cuales originan el levantamiento de
bloques de corteza continental y oceánica (Figura 7.6). Al mismo tiempo, ocurría la
subducción Caribe / Atlántica donde parte del prisma de acreción pudo estar
emergido.

1) En ambos casos secuencias sedimentarias preexistentes, junto con


bloques de corteza continental y oceánica fueron levantados, plegados, fallados e
incluso emplazados en la región norte de Sudamérica, como resultado del régimen
de colisión oblicua Caribe / Sudamérica, además de que el prisma de acreción
producto de la subducción Caribe / Atlántica pudo estar emergido, quedando
representada la provincia de orógenos reciclados observada en los diagramas.

Las secuencias tectonizadas y el prisma de acreción representan


principalmente un aporte de fragmentos sedimentarios y metasedimentarios de
composiciones variadas, así como de rocas de composición oceánica, donde
mineralógicamente predominan el chert y el cuarzo, seguidos de fragmentos de
roca sedimentarios, ígneos y baja proporción de feldespatos.

DICKINSON & SUCZEK (1979) plantean que una provincia de complejo de


subducción con prisma de acreción emergido, representa una fuente de chert
como mineral predominante, incluso que puede exceder la proporción de cuarzo y
feldespatos juntos, representando también una fuente de fragmentos volcánicos,
similar a lo observado en la secuencia de superficie.

Se observa una mayor proporción de fragmentos líticos y disminución del


cuarzo en la secuencia de superficie, lo cual puede estar asociado a que ésta se

Jorham Contreras 242


CORRELACIÓN

encontraba geográficamente más cercana al complejo de subducción, donde el


prisma de acreción representó una fuente importante de chert y disminución en la
proporción de cuarzo.

2) Este planteamiento también podría explicar la dispersión hacia el campo


de arco disectado y transicional observada en el diagrama Qm-F-Lt para la se-
cuencia de la isla de Margarita, ya que la mayor cercanía al prisma de acreción su-
giere también la mayor influencia del arco de las Antillas Menores, el cual
representa el aporte de los fragmentos volcánicos y los escasos fragmentos
plutónicos observados.

3) Caso diferente ocurre en la secuencia de subsuelo, donde se observa


una dispersión hacia el campo de basamento levantado, lo cual puede estar
asociado a que la subcuenca Cubagua se generó geográficamente muy cercana a
la zona de emplazamiento y deformación entre las placas Caribe y Suramérica, es
decir, adyacente al margen continental de Sudamérica, mientras que la secuencia
de la isla de Margarita se sedimentó en una cuenca ubicada más al norte,
probablemente cercana al dominio de un régimen retroarco.

En la región del borde continental se asume que ocurre el emplazamiento


de bloques de corteza continental y terrenos ígneo-metamórficos alóctonos de
composición intermedia, producto del régimen de colisión oblicua entre ambas
placas. DICKINSON & SUCZEK (1979) sugieren que estos terrenos y bloques,
probablemente de composición granítica mezclados con secuencias ofiolíticas,
representan una fuente importante de fragmentos sedimentarios de tipo arcosas y
subarcosas, con pequeña proporción de fragmentos volcánicos, tal como se
observa en la secuencia paleógena de la subcuenca Cubagua.

4) Adicionalmente, se establece que existió una plataforma carbonática


que aportó material bioclástico y terrígeno para ambas secuencias. Sin embargo,
en los depósitos ubicados en superficie este aporte es considerablemente mayor,

Jorham Contreras 243


CORRELACIÓN

observándose paquetes de calizas y areniscas calcáreas con espesor de hasta


60 m, compuestas por material bioclástico de plataforma (calciturbiditas del Grupo
Punta Carnero). En la secuencia de subsuelo se observan areniscas con cemento
calcáreo, algunas con fragmentos fósiles (conchas) y otras con escasos
foraminíferos bénticos (<1%) también presentes en algunas calizas.

Tal como se menciona con anterioridad, la secuencia flysch de la isla de


Margarita estuvo influenciada por el arco de las Antillas Menores, en donde
aparentemente existió el desarrolló de una plataforma carbonática adyacente a las
islas volcánicas, que podría representar la fuente para estos sedimentos de origen
bioclástico. PINDELL et al. (1988) y PINDELL & BARRETT (1990) sugieren la existencia
de una plataforma carbonática adyacente a al terreno de Villa de Cura durante el
Eoceno Medio, la cual también pudo representar una fuente de sedimentos para
ambas secuencias, pero de mayor importancia para la subcuenca Tuy-Cariaco
Norte, donde se encuentran bloques de calizas de edad Eoceno Medio,
transportados desde ambientes someros.

7.5 LIMITACIONES PARA PLANTEAR UN MODELO SEDIMENTOLÓGICO

Aunque inicialmente se había considerado como objetivo general proponer


un modelo sedimentológico para los depósitos eoceno-oligoceno en las cuencas
La Blanquilla y Tuy-Cariaco, esta actividad no pudo completarse debido a las
siguientes limitaciones en la data analizada:

1.- Los pozos perforados en la cuenca La Blanquilla reportan una columna


de edad paleógena incompleta, de manera similar a los ubicados en la cuenca
Tuy-Cariaco, que reportan una sección incompleta y depósitos con un rango de
edad tan amplio, Eoceno Medio – Mioceno Medio(?), que no permiten estimar con
exactitud si realmente son de edad paleógena.

Jorham Contreras 244


CORRELACIÓN

Ninguno de los tres pozos perforados en la cuenca La Blanquilla


atravesaron la columna estratigráfica paleógena completa, es decir, no alcanzaron
basamento. Solo el pozo MTC-2X, ubicado en la subcuenca La Blanquilla Oeste,
atravesó la secuencia eocena – oligocena, mientras que el pozo PMN-1X, ubicado
en la subcuenca La Blanquilla Este, perforó parcialmente la sección oligocena.

En la subcuenca Cubagua (cuenca Tuy-Cariaco), donde se perforaron 2


pozos, solo el CMA-1X llegó a basamento, atravesando una secuencia
prácticamente estéril de probable edad paleógena (Eoceno Medio?), mientras que
el pozo CUBAGUA-1, reporta una sección incompleta de edad Eoceno Medio.

2.- Dada la gran extensión de las cuencas la Blanquilla (35.000 Km2 aprox.)
y Tuy-Cariaco (25.000 Km2 aprox.), el control de las variaciones laterales de facies
es extremadamente escaso.

3.- La compleja evolución tectónica de estas cuencas, donde han actuado


desde el Neógeno regímenes transtensivos y transpresivos, con una componente
transcurrente y posiblemente rotacional en sentido horario en la placa del Caribe
(SPEED, 1993; PINDELL et al. 1990), ha originado la deformación de los sedimentos
paleógenos, lo cual sugiere que actualmente no se encuentren en la posición que
fueron depositados. Debido a esto, resulta muy arriesgado plantear una posible
orientación o ubicación, tanto de los abanicos turbidíticos que conforman parte de
la secuencia paleógena, como de las posibles fuentes de aporte.

4.- Los tipos litológicos identificados en el análisis petrográfico de muestras


de canal no representan la totalidad de la sección estudiada, ya que las litologías
menos competentes no se preservan. Adicionalmente, no permiten observar
estructuras sedimentarias o algunas otras características que permita realizar
correlaciones a escala regional. Por esta razón, no fue posible plantear de manera
esquemática o gráfica, la distribución de facies sedimentológicas entre ambas
cuencas o con respecto a la secuencia flysch que aflora en la isla de Margarita.

Jorham Contreras 245


CORRELACIÓN

Sin embargo, a partir de los estudios sedimentológicos y estratigráficos


realizados en este trabajo, junto con los realizados por HAAK (1980), EVANS (1982
y 1983), BLANCO & GIRALDO (1992), DURAN et al. (2002), integrados con estudios
tectono-estratigráficos regionales de transectos sísmicos en las cuencas
costafuera (YSACCIS, 1997; GODDARD, 1986) y con los modelos geológicos
planteados por SPEED (1985), PINDELL et al. (1988), PINDELL & BARRETT (1990),
STEPHAN (1990) y OSTOS (1990) para la evolución de las placas del Caribe y
Sudamérica, se plantea una evolución geológica que contempla las características
sedimentológicas y distribución estratigráfica de la secuencia paleógena,
asociadas a los distintos regímenes estructurales que han afectado ambas
cuencas:

La región costafuera de Venezuela representa una extensa área controlada


por la compleja historia geológica de interacción entre las placas del Caribe y
Sudamérica a partir del Eoceno, la cual determinó los estilos estructurales que
controlaron la evolución de las cuencas sedimentarias, la distribución de
paleoambientes, cambios de facies y rasgos estructurales.

Esta región está dominada por tres cuencas sedimentarias principales:


cuencas La Blanquilla, Tuy-Cariaco y Carúpano, las cuales comienzan a originarse
a partir del Eoceno Temprano – Medio, en un régimen extensional como cuencas
graben y semigraben.

La cuenca La Blanquilla representa una cuenca semigraben de gran


extensión con orientación NE-SO (YSACCIS, 1997) que se continúa con la cuenca
de Granada, las cuales se originaron durante el Eoceno Temprano – Medio en la
zona retroarco de las Antillas Menores. El estudio de la secuencia paleógena
perforada por los pozos MTC-2X y PMN-1X indica que durante el Eoceno –
Oligoceno, fue una cuenca marino profunda, donde predominan los sedimentos
lutíticos de ambientes de talud y planicie distal, con abundante fauna de aguas
profundas, que fueron depositados bajo un régimen relativamente estable de baja

Jorham Contreras 246


CORRELACIÓN

energía, influenciados por ocasionales corrientes de turbidez provenientes desde


ambientes más someros.

Los registros eléctricos de los pozos y las características sedimentológicas


de algunos intervalos arenosos, indican que esta cuenca estuvo influenciada por
esporádicos episodios de turbidez que transportaron sedimentos desde ambientes
someros de plataforma y talud hasta zonas de abanico externo y planicie distal.
Estos flujos debieron provenir de los altos estructurales adyacentes, que
representaban las principales fuentes de sedimentos para la cuenca, tal como las
islas caribeñas de Margarita, La Orchila, Los Testigos, entre otras, las cuales
actualmente se encuentran en una posición distinta con respecto a la que tenían
en el Eoceno - Oligoceno.

Al sur de la cuenca La Blanquilla, prevalecía un régimen transpresional


producto del movimiento en sentido sureste de la placa del Caribe con respecto a
Sudamérica, el cual determinó aparentemente, la ausencia de sedimentos
paleógenos en la mayor parte de esta región. Hasta la actualidad no se conocen
los sedimentos de plataforma equivalentes en edad a las rocas paleógenas de las
cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco, lo que pudiera indicar que, para esta época
la plataforma estaba expuesta y estos sedimentos se depositaron directamente en
ambientes de talud.

Sin embargo, en la región sur del arco de las Antillas Menores, adyacente al
borde continental de Sudamérica, se desarrollaron cuencas restringidas de poca
extensión, limitadas por altos estructurales, en un estilo de “graben y horst”, tal
como plantea EVANS (1983).

La subcuenca Cubagua representa una de estas depresiones, en la cual se


han registrado depósitos turbidíticos compuestos por areniscas conglomeráticas y
areniscas de grano fino intercaladas con lutitas estériles, en conjunto con
sedimentos lutíticos de profundidades batiales, con abundante fauna planctónica.

Jorham Contreras 247


CORRELACIÓN

Esto permite sugerir que en el interior de esta subcuenca se desarrollaron


ambientes de aguas profundas, donde se depositaron areniscas conglomeráticas
turbidíticas provenientes de los altos cercanos y lutitas de facies de talud y planicie
distal.

Las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco presentan historias geológicas


independientes, originadas bajo regímenes estructurales distintos, que controlaron
las características del relleno sedimentario, distribución estratigráfica y de
paleoambientes durante el Paleógeno, observándose notables diferencias entre
ambas.

La secuencia turbidítica de la isla de Margarita se depositó en una cuenca


de características similares a la subcuenca Cubagua. En ambos casos, las fuentes
de sedimentos para estos depósitos turbidíticos están representadas por bloques
de corteza oceánica y continental limitados por fallas o emplazados, que pudieron
formar parte de los limites de estas cuencas, en conjunto con el arco magmático
de las Antillas Menores y una plataforma carbonática adyacente, que sirvió de
aporte para los sedimentos bioclásticos presentes mayormente en la secuencia de
superficie.

Jorham Contreras 248


CONCLUSIONES

CONCLUSIONES

La secuencia flysch de la isla de Margarita está constituida por dos unidades


estratigráficas formales: La Formación Pampatar y el Grupo Punta Carnero.
Ambas representan depósitos turbidíticos, sedimentados en aguas profundas
durante el Eoceno Medio.

La Formación Pampatar está constituida hacia la base principalmente por


paraconglomerados polimícticos, seguidos de intercalaciones de areniscas y
lutitas estériles. Las areniscas son predominantemente de tipo arenitas líticas, con
alta proporción de fragmentos sedimentarios y volcánicos cementados por calcita.

El Grupo Punta Carnero está constituido por tres formaciones: 1) Formación


Las Bermúdez, interpretada como un intervalo “wild flysch” compuesta por
bloques de paraconglomerados polimícticos, calizas y areniscas, embebidos en
una matriz lutítico-arenosa; 2) Formación El Dátil, constituida por arcilitas
pelágicas y 3) Formación Punta Mosquito, constituida por lutitas, areniscas
calcáreas y calizas, compuestas por material bioclástico transportado de ambien-
tes de plataforma hasta profundidades batiales, las cuales originan “calciturbiditas”

Las características sedimentológicas indican que la Formación Pampatar y el


Grupo Punta Carnero estuvieron influenciados por fuentes de sedimentos
similares, asociadas al complejo de subducción entre las placas del Caribe y
Atlántica y al régimen de colisión oblicua Caribe / Suramérica. Sin embargo, la
región en que depositó el Grupo Punta Carnero permitió desarrollo de facies de
planicie distal en régimen de baja energía y extensos abanicos submarinos, los
cuales recibieron un mayor aporte de una plataforma carbonática con respecto a la
Formación Pampatar, la cual está constituida por depósitos proximales (facies de
abanico medio a talud) y con menor aporte de sedimentos bioclásticos de
plataforma.

Jorham Contreras 249


CONCLUSIONES

Las variaciones estratigráficas, sedimentológicas y las características


estructurales, sugieren que la secuencia turbidítica de la isla de Margarita estuvo
influenciada al menos por dos fases de deformación tectónica, una durante la
depositación determinada a partir de condiciones de inestabilidad tectónica en la
cuenca y otra durante el emplazamiento en su posición actual. Por esta razón,
resulta muy difícil determinar la orientación del patrón de esfuerzos que originó las
estructuras principales y establecer una correlación estratigráfica entre ambas
unidades.

La secuencia paleógena de la cuenca La Blanquilla está constituida por


depósitos de edad Eoceno – Oligoceno, de ambiente batial, caracterizados por
lutitas pelágicas, areniscas calcáreas delgadas y esporádicas calizas,
influenciadas por ocasionales flujos turbidíticos.

En la subcuenca Cubagua (Cuenca Tuy-Cariaco) la unidad interpretada como


paleógena está compuesta por areniscas calcáreas intercaladas con lutitas,
depositadas bajo corrientes de turbidez durante el Eoceno Medio – Tardío(?). En
la base del pozo CUBAGUA-1 se ha datado un intervalo de edad Eoceno Medio,
constituido por arcilitas pelágicas.

En la subcuenca Tuy-Cariaco Norte la secuencia paleógena está constituida


por bloques de calizas arrecifales intercaladas con lutitas, transportados desde
ambientes someros de plataforma hasta profundidades batiales, posiblemente
asociados al régimen compresivo que controlaba la región.

Las cuencas La Blanquilla y Tuy-Cariaco presentan historias geológicas


complejas e independientes. La cuenca La Blanquilla está asociada a un régimen
extensional en la zona retroarco de las Antillas Menores, mientras que la cuenca
Tuy-Cariaco comienza a originarse en un estilo de “graben y horst”. En cada una
se desarrollaron ambientes sedimentarios diferentes, controlados por distintos

Jorham Contreras 250


CONCLUSIONES

niveles de energía que generaron notables diferencias en las características


texturales de la secuencia sedimentaria paleógena.

La cuenca La Blanquilla estuvo alimentada principalmente por las islas


caribeñas y bloques de corteza continental que para el Eoceno representaban
altos estructurales, los cuales permitieron el desarrollo de una plataforma
carbonática adyacente, que también sirvió como fuente de aporte a las cuencas en
la zona retroarco. Sin embargo, debido a las características sedimentológicas de
la secuencia perforada que señalan facies distales, no se descarta la influencia del
arco magmático y bloques de corteza continental y oceánica que hayan servido
como fuente de sedimentos para los depósitos proximales dentro de la cuenca.

Las fuentes de aporte para la cuenca Tuy-Cariaco fueron más complejas.


Están representadas por bloques de corteza continental y oceánica emplazados
en al margen norte de Sudamérica, junto con el arco magmático de las Antillas
Menores y por una plataforma carbonática, probablemente adyacente a las islas
que conformaban al arco o a los altos estructurales dentro del estilo “graben y
horst” en que se originó la subcuenca Cubagua.

La secuencia turbidítica de la isla de Margarita estuvo alimentada por fuentes


de sedimentos similares a la cuenca Tuy-Cariaco, en la cual se distinguen alta
proporción de fragmentos de roca sedimentarios y en menor grado metamórficos,
provenientes de bloques de corteza emplazados al norte de Sudamérica y del
prisma de acreción asociado al complejo de subducción Caribe / Atlántico, junto
fragmentos volcánicos provenientes del arco magmático de las Antillas Menores y
sedimentos bioclásticos retransportados desde ambientes de plataforma
carbonática.

La secuencia paleógena en la región costafuera de Venezuela, incluyendo la


secuencia que aflora en la isla de Margarita, ha alcanzado condiciones de
diagénesis tardía. En la cuenca La Blanquilla y la isla de Margarita, las evidencias

Jorham Contreras 251


CONCLUSIONES

indican procesos diagenéticos más intensos con respecto a la cuenca Tuy-


Cariaco, lo cual está asociado en La Blanquilla, al mayor espesor de columna
sedimentaria suprayacente a la secuencia paleógena, mientras que en la isla de
Margarita, se asocia al patrón de esfuerzos dirigido durante el emplazamiento de
la secuencia en el Mioceno, el cual origina aumento en las condiciones de presión
y por consiguiente en la temperatura.

Los análisis sedimentológicos de la secuencia paleógena en la cuenca La


Blanquilla, indican que estas rocas presentan importantes espesores de lutitas
pelágicas que pudieran actuar como sellos para los intervalos arenosos, además
que aparentemente presentan características favorables para la generación de
hidrocarburos. Las areniscas presentan matriz en proporción considerable, baja
madurez textural y espesores poco representativos, por lo cual los intervalos
perforados por los pozos no lucen atractivos para la acumulación de
hidrocarburos.

En la cuenca Tuy-Cariaco los intervalos lutíticos son de poco espesor y


aparentemente corresponden a una sedimentación turbidítica con abundante
retrabajo, los cuales pueden actuar como sellos para las areniscas adyacentes.
Los intervalos arenosos presentan espesores importantes, pero la inmadurez
textural y el alto porcentaje de cemento determinan que la porosidad sea
prácticamente nula, lo cual ocurre de manera similar en la secuencia turbidítica
que aflora en la isla de Margarita.

Jorham Contreras 252


RECOMENDACIONES

RECOMENDACIONES

Realizar estudios bioestratigráficos de alta resolución en los afloramientos


de la Formación Punta Mosquito, en el sector La Isleta, con la finalidad
establecer el orden estratigráfico y estimar el espesor total de la sección.

Realizar un muestreo y análisis petrográfico más detallado en la secuencia


paleógena perforada por el pozo MTC-2X, con la finalidad de determinar con
mayor exactitud la composición mineralógica de las areniscas y las posibles
fuentes de sedimentos.

Realizar estudios de estratigrafía secuencial en las cuencas Tuy-Cariaco y


La Blanquilla que ayuden a establecer modelos de sedimentación para ambas
y para los depósitos turbidíticos de la isla de Margarita.

Jorham Contreras 253


BIBLIOGRAFÍA

BIBLIOGRAFÍA

BELLIZIA, A.; MUÑOZ, N.; MACSOTAY, O. & KEY, C. (1983). Geología del Flysch
Eoceno de la isla de Margarita. Sociedad Venezolana de Geólogos (Eds.).
Guía de la excursión geológica a la Isla de Margarita. p. 33-37.

BERMÚDEZ, P. & GÁMEZ, H. (1966). Estudio paleontológico de una sección del


Eoceno. Grupo Punta Carnero de la isla de Margarita, Venezuela. Separata
de la Memoria de la Sociedad de Ciencias Naturales La Salle. Caracas, Tomo
XXVI, Nº 75. p. 205-259.

BLANCO, B. & GIRALDO, C. (1992). Síntesis Tectono-Estratigráfica de la cuenca


Tuy-Cariaco y Plataforma Externa. VI Congreso Venezolano de Geofísica.
Caracas. p. 47 -54

BOGGS, S. (1992). Petroogy of Sedimentary Rocks. University of Oregon. New


York. 707 p.

BOLLI, H.; BECKMANN J. & SAUNDERS, J. (1994). Benthic foraminiferal


bioestratigraphy of the south Caribbean region. Cambridge University
Press. Grain Britain. 408 p.

BOUMA, A. (1962). Sedimentology of some flysch deposits. Elseiver.


Amsterdam. 168 p.

CASAS, J.; MORENO, J. (1986). Estudio petrográfico y estadístico del flysch


Eoceno de la isla de Margarita. Trabajo especial de grado (inédito),
Departamento de Geología, Universidad Central de Venezuela. Caracas.

Jorham Contreras 254


BIBLIOGRAFÍA

CASAS, J.; MORENO, J.; YORIS, F. (1995). Análisis tectono-sedimentario de la


Formación Pampatar (Eoceno Medio), isla de Margarita, Venezuela.
Asociación Paleontológica Argentina, Paleógeno en América del Sur.
Pub. Espec. Nº 3. p. 27-33.

CHEVALIER, Y. (1987). Les zones internes de la Chaine Sud-Caraibe sur le


transect de Margarita – Peninsule Araya, Venezuela. Universidad de
Bretagne Occidentale. p. 348 – 441.

CHEVALIER, Y. & ALVAREZ, E. (1991). Consideraciones estructurales del


transecto Cariaco – Maturín (geología de superficie y subsuelo). Lagoven.
Informe inédito.

CIEN (2002). Comité Interfilial de Estratigrafía y Nomenclatura. Léxico


Estratigráfico Electrónico de Venezuela. PDVSA – INTEVEP.
http://www.pdv.com/lexico/.

DAPPLES, E. (1971). Physical classification of carbonate cement in quartzose


sandstone. Jour. Sed. Petrol. Nº 1, p. 196-204

DI CROCE, J. (1995) Eastern Venezuela Basin: Sequense Stratigraphy and


Structural Evolution. PH. D. Tesis, Inédito, Tectonics, Nº. 9, p. 161-184.

DICKINSON, W. & SUCZEK, C. (1979). Plate tectonics and sandstone compositions.


AAPG Bulletin. Nº 63, v. 1, p. 2164-2182.

DUNHAM, R. (1962). Clasification of carbonate rocks according to depositational


texture. En Ham W. E. (Ed.) Clasification of carbonate rocks, AAPG
Memory N° 1. p. 108 – 121.

Jorham Contreras 255


BIBLIOGRAFÍA

DURÁN, I.; GIFFUNI, G.; FASOLA, A. & FURRER M. (2002). Reporte bioestratigráfico
de la cuenca La Blanquilla, costafuera, Venezuela. Informe inédito. 36 p.

ERLICH, R. N. & BARRETT, S. F. (1989). Cenozoic plate-tectonic history of the


northern Venezuela-Trinidad area. Amoco Production Company, Houston.
PDVSA, Informe Interno.

EVANS, A. (1982a). The stratigraphy of Cuenca Tuy-Cariaco offshore


Venezuela an initial review. Maraven, Informe Interno.

EVANS, A. (1982b). Palinological Studies (Eocene – Pleistocene). Cuenca Tuy-


Cariaco, Costafuera- Venezuela. Maraven, Informe Interno.

EVANS, A. (1983). The stratigraphy of Cuenca Tuy-Cariaco and adyacent


basins east central Venezuela offshore. Maraven, Informe Interno.

FEO CODECIDO, G. (1977). Esbozo geológico de la Plataforma Continental


Margarita-Tobago. Memorias II Congreso Latinoamericano de Geología
1973. Ministerio de Minas e Hidrocarburos. Boletín de Geología. Pub. Espec.
Nº 7, v. 3, p. 1923-1945.

GODDARD, D. (1986). Seismic strtigraphy and sedimentation of Cariaco Basin


and surrounding continental shelf, northeastern Venezuela. Caribean
Geological Conference, 11th, Barbados, p. 34:1-34:21.

GONZÁLEZ DE JUANA, C. (1947). Elements of diastrophics history of northeastern


Venezuela. Geol. Soc. Amer. Bull., v. 60, p. 1.857 - 1.868.

GONZÁLEZ DE JUANA, C.; ITURALDE DE AROZENA & PICARD, X. (1980). Geología de


Venezuela y sus Cuencas Petrolíferas. Caracas, Ed. Foninves, 2 tomos.
1031p.

Jorham Contreras 256


BIBLIOGRAFÍA

HAAK, R. (1980). Stratigraphy of wells MTC-1X and MTC-2X (Tuy-Cariaco).


Maraven, Informe Interno.

JAM, R. & MENDEZ, A. (1962). Geología de la isla de Margarita, Coche y Cubagua.


Memorias de la Sociedad de Ciencias Naturales La Salle. Tomo XXII, Nº 61,
p. 50-93.

JAMES, H. (1997). Distribution and Tectonic significance of Cretaceus-Eocene


Flysch - Wildflysch deposits of Venezuelan and Trinidad. Soc. Venezolana de
Geólogos (Eds.) Memorias VIII Congreso Geológico Venezolano. T. 1, p.
415-421.

KUGLER, H. (1957). Contribution to the Geology of the Islands of Margarita and


Cubagua, Venezuela. Bull. Geol. Soc. Amer. Nº 68, p. 555-566.

LEEDER, M. (1999). Sedimentology and sedimentary basin. From turbulence to


tectonics. Blackwell Science. Anglia. 592 p.

LORENZ, W. (1949). Contribución a la geología de las formaciones


sedimentarias en la Isla de Margarita, Inédito. Universidad Central de
Venezuela, Caracas; 160 p.

LUGO, J. & MANN, P. (1995). Jurassic-Eocene tectonics evolution of Maracaibo


basin, Venezuela, in Tankard A., Suárez S., Welsink H. (Eds.) Petroleum
basins of South Amarica. AAPG Memoir 62. p. 699-725.

MARQUEZ, X. & PICARD, X. (1980). Estudio geológico de núcleo en el pozo


MTC-1X. INTEVEP, Informe Interno.

Jorham Contreras 257


BIBLIOGRAFÍA

MARTINI, E. (1971). Standard Terciary and Quaternary calcareos


nannoplancton. Proccedins of the planntonic Conference Roma, 1970.
Farinaccied, Edizioni Tecnoscienza, Roma. 1380 p.

MIALL, A. (1996) The Geology of Fluvial Deposits. Sedimentary Facies, Basin


Analisis, and Petroleum Geology. Springer. 582 p.

MIDDLETON, G. & HAMPTON, M. (1973). Sediment gravity flows: mechanics of


flow and deposition in turbidites and deep water sedimentation. Middleton
y Bouma (Eds.) Pacific Section, Society of Economic Paleontologist and
Mineralogist Short Course Notes. p. 1 - 38.

MOUNT, J. (1985) Mixed siliciclastic and carbonate sediment: a propose first


ordeder textural and compositional classification. Sedimentology. v. 32, 3, p.
435-442.

MUÑOZ, N. (1973). Geología sedimentaria del Flysch Eoceno de la isla de


Margarita. GEOS 20. Universidad Central de Venezuela. p. 5-64.

MUTTI, E. & RICCI LUCCHI, F. (1975). Turbidites facies and associations, in


examples of turbidite facies and facies associations from selected formations of
the northern Apennines, field trip guidebook. IX Internacional Congress
Sedimentologist. France. v. 11, p. 21-36.

MUTTI, E. & RICCI LUCCHI, F. (1978). Turbidites of the northern Apennines: intro-
duction to facies analysis. International Geology Review, v. 20, 2, p. 125-166.

OSTOS, M. (1990). Evolución tectónica del margen sur-central del Caribe basado en
datos geoquímicos. GEOS. UCV, Caracas. Nº 30, p. 1-294.

Jorham Contreras 258


BIBLIOGRAFÍA

PAIVA, A. (1969). Contribución al estudio de las rocas del eoceno de la isla de


Margarita, estado Nueva Esparta. Trabajo especial de grado (inédito),
Departamento de Geología, Universidad Central de Venezuela. Caracas.

PASSALACQUA, H.; FERNÁNDEZ, P.; GOU, Y. & ROURE, F. (1995). Crustal Architecture
and strain partitioning in the eastern Venezuela Ranges, in Tankard A., Suárez
S., Welsink H. (Eds.) Petroleum basins of South Amarica. AAPG Memoir 62.
p. 667-679.

PETTIJHON, F.; POTTER, P. & SIEVER, R. (1972). Sand and Sandstones. Springer-
Verlag, U.S.A. 553 p.

PETTIJHON, F. (1975). Sedimentary Rocks. 3ra ed. Harper & Row. New York. 628 p.

PINDELL, J. L. & DEWEY, J. F. (1982) Permo-Triasic reconstruction of western


Pangea and the evolution of the Goulf of Mexico / Caribbean region.
Tectonics. v. 1, p. 179-212.

PINDELL, J.; CANDE, S.; PITMAN III ; ROWLEY, D.; DEWEY, J.; LABREQUE, J. & HAXBY,
W. (1988). A plate-kinematic framework for models of Caribbean evolution.
Tectonophysics, Nº 155, p. 121-138.

PINDELL, J.; ERICKSON, J. & ALGAR, S. (1990). Geological Development of the


Northern South America. Departament of Earth Sciences, Hanover. Maraven,
Informe Interno.

PINDELL, J. & BARRETT S. (1990). Geological evolution of the Caribbean Region: a


plate-tectonic perpective, in Dengo, G. & Case, J., eds. The Geology of North
America v. H, Geological Society of America, Colorado, p. 405-432.

Jorham Contreras 259


BIBLIOGRAFÍA

PEREIRA, J. G., (1985). Evolución tectónica de la cuenca Carúpano durante el


Terciario. Memorias VI Congreso Geológico Venezolano, Caracas. Tomo II,
p. 2618-2648.

REINECK, H. & SINGH, I. (1980) Depositional Sedimentary Enviroments. Springer


- Verlag. New York. 549 p.

RUTTEN, L. (1940). On the Geology of Margarita, Cubagua y Coche


(Venezuela). Konink. Amsterdam. v. 43, p. 828 - 841.

SANDOVAL, M. E. (2000). Diagénesis de Areniscas. Universidad Central de


Venezuela, Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico. Caracas, 414 p.

SPEED, R. (1985). Cenozoic collision of the Lesser Antilles arc and continental
South America and the origin of the Pilar fault. Tectonics. v. 4, Nº 1, p. 41- 69.

STEPHAN, J.; LEPINAY, B.; CALAIS, E.; TARDY, M.; BECK, C.; CARFANTAN, J.; OLIVET,
J.; VILA, J.; BOUYSSE, P.; MAUFRET, A.; BOURGOIS, J.; THERY, J; TOURNON, J.;
BLANCHET, R. & DERCOURT, J. (1990). Paleogeodinamic maps of the Caribbean:
14 steps from Lias to Present. Bulletin de la Société Géologique de France.
Université de Nice-Sophia Antipolis. Nº 6, p. 915-919.

SURDAM, R.; DUNN, T.; HEASTER, H. & MACGOWAN, D. (1989). Porosity Evolution in
Sandstone/Shale Systems. Mineralogical Association of Canada,
Diagenesis Short Course Notes. Universidad Of Wyoming. p. 61-126.

TAYLOR, G. (1960). Geología de la isla de Margarita, Venezuela. Memoria III


Congreso Geológico Venezolano. Tomo II. Ministerio de Minas e
Hidrocarburos. p. 838-893.

Jorham Contreras 260


BIBLIOGRAFÍA

TIPSWORD, H. (1940). Preliminary Paleontological Report, CUBAGUA-1.


Maraven, Informe Interno.

TOUMARKINE M. & LUTERBACHER H. (1985). Paleocene and Eocene planktic


foraminifera en BOLLI, H.; SAUNDERS, J. & PERCH-NIELSEN (Eds.) Planckton
Stratigraphy. Cambridge University Press. Grain Britain. p. 87-154.

WALKER, R. (1978). Deep-water sandstone facies and ancient turbidite fans:


models for exploration for stratigraphic traps. AAPG Bulletin. Nº 62, p. 932-966

WALL, G. (1860). On the Geology of a part of Venezuela and Trinidad. Geol. Soc.
London Quaterly Jour. v.16, p. 460-470.

YOUNG, G. A.; BELLIZIA, A.; RENZ, H.; JONSON, F. W.; ROBIE, R. H. & MAS VALL, J.
(1956). Geología de las cuencas sedimentarias de Venezuela y sus
campos petrolíferos. Ministerio de Minas e Hidrocarburos. Dirección de
Geología. Boletín de Geología. Pub. Nº 2. 139 p.

YSACCIS, R. (1997). Tertiary Evolution of the Northeastern Venezuela Offshore.


University Rice, Texas. 285 p.

YSACCIS, R.; CABRERA, E. & CASTILLO H. (2000). El sistema petrolífero de la cuenca


La Blanquilla, costa fuera Venezuela. VII Simposio Bolivariano de
exploración petrolera en las cuencas subandinas. p. 411 – 425.

YSACCIS, R. & AUDEMARD, F. (2000). A Neogene orogenic float in northern South


America: Eastern Venezuela Basin vs. Caribbean Plate. AAPG Annual
Convention. Louisiana. p. A164.

ZAPATA, E. (1983) Manual de Petrografía y Diagénesis de Rocas Carbonáticas.


GEOS. UCV, Caracas. Nº 28, p. 3-139.

Jorham Contreras 261

Potrebbero piacerti anche