Sei sulla pagina 1di 5

SEMIOLOGÍA DEL AFECTO

El afecto es un proceso que permite al contenido un determinado valor, en el sentido de


aceptación o rechazo. Se trata de una función enjuiciadora de atribuciones afectivas. Entre las
alteraciones del afecto se pueden mencionar:

1. Aumento de la excitabilidad afectiva: Es la reacción exagerada ante pequeños estímulos, el


paciente no soporta errores o fallas hay una producción de las emociones
desproporcionados por estímulos que normalmente no son suficientes para despertarlos.
Ej.: Un paciente que recibe la visita de sus compañeros de trabajo y se pone triste, llora y
al día siguiente amanece mal. En una familia están almorzando, a uno de los hijos se le cae
el tenedor, el padre grita de inmediato y se genera una discusión. Se presenta en la
neurosis, en personalidades anormales (emocionalmente inestables e inadecuados)
hipertiroidismo, inicio de psicosis. Es pasajero.
2. Estupor emocional. Es la pérdida momentánea de la capacidad de experimentar afectos, en
personas que normalmente las han experimentado. Se asocia a situaciones de catástrofe,
no puede llorar ni reír. El estupor emocional va paralelo al estupor motor. Ej.: Una persona
que al producirse un terremoto se queda estática no siente miedo ni trata de correr a pesar
de que todos lo hacen. Se presenta en personalidades emocionalmente inestables,
histéricas.
3. Apatía: Es la incapacidad para experimentar afectos en forma más o menos permanente,
es un estado de bloqueo de los afectos, hay un empobrecimiento de la vida psíquica, el
individuo se muestra indiferente a cuanto le rodea, su rostro es inexpresivo. Es un síntoma
que caracteriza a la esquizofrenia, se presenta también en algunos trastornos neuróticos.
4. Estupidez afectiva: Es la incapacidad innata para experimentar afectos superiores: amor,
lealtad, honor, compasión, deber. No tienen emociones sinceras. Se presenta en
personalidades
5. Espontaneidad afectiva anormal: Es la producción de sentimientos inmotivados que surgen
de manera brusca, no necesitan estimulo. Ej.: Cuando se levanta se muestra colérico o de
mal humor. Se presenta en la epilepsia y en la manía.
6. Labilidad emocional o inestabilidad emocional: Son emociones que se desencadenan con
motivos insuficientes e inadecuados, exteriorizándose sin freno de manera casi automática.
Cambian con gran facilidad de un estado emocional a otro. Se presenta sobre todo en
pacientes ancianos con síndrome orgánico cerebral (lloran fácilmente) en pacientes
neuróticos (cuentan sus problemas y en ese momento se ponen a llorar) en el curso de
enfermedades somáticas y adolescentes.
7. Diátesis explosiva: Es la inclinación a violentos estallidos de cólera ante estimules
pequeños, se presentan en forma brusca. Es frecuente en la epilepsia y en trastornos
cerebrales y vasculares.
8. Distimias: Se caracterizan por cambios bruscos e inmotivados del estado afectivo.
Generalmente se refieren a sentimientos desagradables como la tristeza, la cólera.
9. Sentimiento de inafectividad: Es la falta de conciencia de propios estados afectivos, que
son presentes al observador y en cambio el paciente se queja de su insensibilidad. Se
presenta en el inicio de la esquizofrenia síndromes cerebrales, melancolía involutiva
(personas mayores de 40 años)
10. Ambivalencia afectiva: Consiste en experimentar simultáneamente y sobre el mismo objeto
sentimientos opuestos Ej.: El paciente dice: Mis padres me quieren mucho, no vienen a
visitarme” “Yo quiero y odio a mi madre". Se presentan en la esquizofrenia
11. Proyección afectiva morbosa: Se caracteriza porque el estado afectivo del sujeto se desplaza
al exterior o sea que proyecta hacia el ambiente su propio estado afectivo Ej.: "El día está
triste”, “El miedo está en el escritorio”. Se presenta en la esquizofrenia.
12. Inversión de afectos: Es la modificación de los sentimientos que relacionan al sujeto con
otras personas. Así los seres queridos se convierten en objeto de odio y falta de respeto.
Hay una modificación inexplicable de los afectos al estado contrario sin que haya estimulo,
es como si el sujeto se cansara o se agotara de tener este sentimiento. El odio a la madre es
un ejemplo. Se presentan en la esquizofrenia.
13. Reacción de fondo: Se caracteriza por el efecto prolongado de las emociones violentas Ej.:
Una ofensa hace que la persona se resienta mucho tiempo.
14. El miedo: Es el temor que experimenta el sujeto hacia algo, cuya causa se conoce. Por
ejemplo, el miedo a un examen.
15. Angustia: Es un estado de intranquilidad, desconfianza que experimenta el sujeto, pero sin
que exista una razón que la justifique, experimenta la amenaza malintencionada sin que
la pueda precisar. En general se puede considerar la angustia y la ansiedad como
sinónimos; tal vez sean matices del mismo fenómeno. En semiología y clínicas
psiquiátricas se las frecuenta diferenciar asignando a la ansiedad carácter de motilidad, de
sensación de espera, de incomodidad en el plano psicológico, a la angustia sensación de
ahogo y opresión toráxico que corresponden a niveles somáticos.

INTERVENCIÓN DE LA ENFERMERÍA EN LA ATENCIÓN DE PACIENTES CON


ALTERACIONES DEL AFECTO

El paciente apático permanece solo, indiferente a cuanto le rodea y que antes significaba algo
para él como familia, amistades, valores, inclusive la incomodidad Parece no tener capacidad
para ligarse en forma duradera a personas y ambientes, su capacidad para compartir
sentimientos con otras personas está debilitada o anulada, establece una barrera muy difícil
de romper, es frío emocionalmente y se aísla del contacto humano. Es tímido y sensible, carece
de sentido del humor. El paciente apático plantea un grave problema en la relación
interpersonal, por eso la necesidad prioritaria es la comunicación.

La enfermera debe iniciar la relación con él presentándose, diciéndole su nombre, la


institución o escuela a la que pertenece, tiempo, días y hora que acudirá al servicio. Ej.: (Yo
soy la Srta. Soy estudiante de Enfermería de …… voy a venir al servicio durante 5 semanas,
de lunes a viernes de 7:30 a 11:30 a.m.). No debe preocuparse si el paciente no responde. Al
dirigirse a él debe llamarlo por su nombre desde el primer momento, porque esto agrada al
paciente, puesto que le da a entender que la persona que lo atiende lo conoce por su nombre y
esto lo hace sentirse más importante. Puede continuar hablando al paciente de tópicos
generales como por ejemplo del tiempo o de cualquier acontecimiento especial que se esté
realizando en el hospital.

Aunque aparentemente el paciente permanezca indiferente está observando a la enfermera y


captando todo lo que le dice. Al despedirse debe darle a conocer donde la podría encontrar en
caso de necesitarla.

Si todos los días adopta la misma actitud, el paciente va a comprender que la enfermera se
Interesa por él y va a empezar a responder al inicio en forma limitada, pero conforme pasan
los días al ir adquiriendo más confianza, su comportamiento ira mejorando. Para estimularlo
la enfermera debe hablarle de tópicos conocidos por el paciente, para darle seguridad y
facilitar su participación. Conforme vaya progresando, se irá incorporando el paciente a
grupos de pacientes que se encuentren en parecidas condiciones a él, estimulándolo para que
participe en las actividades planeadas, aprobando y felicitándolo por los logros obtenidos;
hasta que logre adaptarse y comportarse positivamente en grupos más grandes.

El paciente deprimido generalmente permanece sólo, sentado en un rincón, su expresión es de


profunda tristeza, se muestra desalentado, pesimista y en algunos casos puede mostrarse
desesperado. Permanece cabizbajo, sumiso a sus pensamientos de contenido muy triste,
cuando habla lo hace en voz baja, lentamente y en tono monótono. Sus frases son cortas y sus
respuestas muy breves y cortantes.

La enfermera debe respetar el silencio del paciente, no debe hacer preguntas ni exigir
respuestas si el paciente no desea hablar. Debe evitar en todo momento decir chistes bromas,
entablar conversaciones alegres o poner música alegre porque el paciente puede interpretarlo
como una indiferencia a su pena. Asimismo no debe insistir que el paciente realice alguna
actividad, porque debido a su tristeza no tiene el ánimo dispuesto para el trabajo, si por
complacer una solicitud realiza algo y le sale mal se siente insatisfecho y aumenta su pena y
sentimiento de inutilidad.

El paciente angustiado se muestra inquietó, aprehensivo, presiente que algo perjudicial le va


a suceder y esto lo mantiene en estado de tensión emocional.

La característica fundamental es que el paciente; no encuentra una causa externa que


justifique este estado. Frecuentemente se acompaña de síntomas somáticos; especialmente del
lado cardiorresplratorio lo que aumenta el desasosiego del paciente.

La angustia se presenta dentro de una amplia gama de sensaciones desde el temor vago e
incomprensible hasta la ofuscación de la conciencia. Puede surgir como fenómeno aislado o
sirviendo de fondo a otras entidades como: fobias, conversiones, depresiones, estados
disociativos, obsesiones y compulsiones. La actitud frente al paciente será la de escuchar con
atención lo que el paciente refiere sin hacer ningún comentario en pro o en contra de lo que
dice: se le debe dar libertad para que exprese su ansiedad por los mecanismos que faciliten la
descarga emocional considerando que el individuo puede utilizar muchas formas de
comportamiento en sus intentos de eliminar, menoscabar escapar de la incomodidad que
causa la angustia, el miedo, la aprehensión o la tensión manifiestos".

Como el paciente no presenta síntomas orgánicos manifiestos es considerado como un


“mañoso” y no se le da ninguna importancia, como sus quejas son constantes la familia lo
aísla, motivo por el cual cuando llega al hospital lo que más desea es que alguien le escuche;
con él no valen palabras tranquilizadoras ni de apoyo, lo único que interesa es el acercamiento
emocional.

En caso que el paciente presente síntomas cardiorrespiratorios se debe realizar el control del
P y PA para demostrarle, que se tiene interés por su bienestar. Si refiere dolor localizado en el
pecho, lo cual intensifica su temor de padecer un mal cardíaco se le dará aviso a su médico
tratante. No es conveniente investigar otros síntomas relacionados con el dolor como:
Irradiación, relación con los movimientos y otros porque, posteriormente puede incorporarlos
a su sintomatología.

Al saludar al paciente se debe procurar resaltar cualquier avance por pequeño e insignificante
que parezca con el fin de estimularlo, por Ej.: (lo felicito se levantó temprano, hoy día], (lo veo
más animado, esta Ud. mejor que ayer]. No conviene decirle ¿Cómo estás? Porque es una
invitación para que el paciente inicie el relato de sus síntomas.
Tanto el paciente deprimido como el angustiado descuidan la satisfacción de sus necesidades
básicas de nutrición, higiene, eliminaciones y sueño.

La enfermera debe:

a) Asegurarse que el paciente ingiera todos sus alimentos para evitar la desnutrición.
b) Favorecer la buena higiene y presentación para darle seguridad y facilitar el
acercamiento de las personas que le rodean. Como el paciente angustiado permanece
hablando constantemente presenta sequedad en la boca que le causa incomodidad,
además los labios pueden presentar erosiones, por lo tanto, es necesario que el paciente
realice enjuagatorios frecuentes para aliviar la sequedad y lubricar los labios con
vaselina para evitar lesiones.
c) Llevar el control de las eliminaciones del paciente, el deprimido tiende al estreñimiento
y el angustiado a las diarreas, en ambos casos se tomarán las medidas conocidas para
aliviarlos.
d) Estimular el sueño del paciente poniendo en práctica las medidas necesarias, para
lograr el descanso y el sueño, si no dan buenos resultados, será necesario como última
medida administrar los hipnóticos indicados por el médico.

Potrebbero piacerti anche